Estudio de los murciélagos de la cueva de Mendukilo

Transcripción

Estudio de los murciélagos de la cueva de Mendukilo
Estudio de los murciélagos de
la cueva de Mendukilo
Diciembre de 2009
Juan Tomás Alcalde
Doctor en Ciencias Biológicas
1
Introducción
Durante décadas, la cueva de Mendukilo estuvo parcialmente cerrada por un muro de
piedra con pequeños huecos verticales, de forma que el acceso a la misma por los
murciélagos era muy complicado. En el año 2002 se realizó un seguimiento de la boca
de la cueva, para averiguar qué especies la visitaban. Entonces se identificaron
únicamente 4 especies de quirópteros: Rhinolophus ferrumequinum, R. hipposideros,
Myotis datubentonii y Plecotus sp.
En el año 2005, con motivo de su adecuación para visitas turísticas, se sustituyó el muro
antiguo por un verjado de barrotes de sección circular y huecos horzontales que permite
el tránsito de los quirópteros.
En ese año se realizó un primer seguimiento de la cueva para conocer si los murciélagos
eran capaces de utilizar el refugio, comprobándose la entrada y salida de al menos 6
especies, una de ellas hibernante en el lugar (el murciélago de herradura grande, R.
ferrumequinum).
El cierre actual lleva ya 4 años instalado, y es previsible que los quirópteros de la zona
se hayan habituado a dicho verjado, e incluso a las visitas de personas en parte del
recorrido de la cavidad.
El trabajo que aquí se presenta tiene como objetivo conocer el uso actual de la cavidad
por los quirópteros y el grado de eficacia que ha tenido la instalación del verjado, tras 4
años de presencia. El conocimiento de estos aspectos será de interés no sólo para
Mendukilo, sino también para futuros proyectos en los que se plantee el cierre de otras
cavidades con características similares.
Fig. 1. Detector D240x y grabadora
MP3 en la entrada de la cavidad.
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Metodología
La cueva fue revisada en su totalidad por dos personas, el 15 febrero de 2009,
inspeccionando tanto la zona turística como las salas del interior, de acceso restringido.
También se ha revisado la boca de la cueva y el interior acondicionado en tres noches de
junio, julio y agosto, para observar e identificar los quirópteros que entran o salen
durante su actividad nocturna. Durante estas noches, se ha escuchado el paso de
quirópteros utilizando un detector de ultrasonidos, y en dos de esas noches se han
colocado trampas de arpa, tanto en el interior de la cavidad (escaleras del pasillo que
desciende, Jentileio) como en la boca de la misma. Así mismo se ha empleado un visor
nocturno y focos de luz infrarroja, que no es visible por la fauna, para observar la
entrada y salida de ejemplares durante la noche, sin que éstos perciban ninguna
molestia.
Además se han colocado detectores de ultrasonidos conectados a grabadoras
automáticas con el fin de registrar los ultrasonidos de los murciélagos que pasan por
diferentes lugares. Estos detectores se han colocado junto a la boca de la cavidad, en la
sala de entrada a la cueva (Artzainzulo), en el pasillo que desciende a las primeras salas
(Jentileio) y en el interior de la cavidad, al final del pasillo anterior (distribuidor). En
julio se pudo disponer de un detector-grabador con autonomía para 4 noches
consecutivas (D500x, Pettersson Elektronik AB), lo que posibilitó el muestreo
continuado en períodos de varias noches en julio, agosto-septiembre, octubre y
noviembre. En la tabla 1 se indican los métodos empleados en los días de muestreo.
Todos los sonidos registrados en las grabadoras han sido analizados, determinándose la
especie a la que pertenecen; cuando esto no ha sido posible debido a la similitud de los
ultrasonidos de diferentes especies, se ha determinado al menos el género al que
corresponden.
Fig. 2. Grabador D500x en Artzainzulo
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Fig. 3. Trampa de arpa colocada en las escaleras del comienzo de la cueva (Jentileio)
Tabla 1. Métodos utilizados, lugares inspeccionados y fechas de estudio.
Método
Lugar
Revisión del interior
Cueva
Detector + visor nocturno
Exterior
Boca
Trampa de arpa
Jentileio
Boca
Artzainzulo
Detector + Grabadora
Jentileio
Distribuidor
Fechas
15 – febrero (toda la cavidad)
2 – junio
31 – agosto
29 – noviembre
2 – junio
12 – julio
31 – agosto
12 – julio
2 – junio
12 – julio
31 – agosto
2 – junio
12 al 16 julio
31 agosto al 5 septiembre
3 al 7 – octubre
2 – junio
12 – julio
31 – agosto
29 – octubre al 20 – noviembre
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Resultados
En febrero de 2009 se encontraron 7 murciélagos hibernando: 5 murciélagos de
herradura grandes (Rhinolophus ferrumequinum)
y dos pequeños (Rhonolophus
hipposideros).
En noviembre se observaron también 7 individuos hibernando: 3 m. de herradura
grandes y 4 pequeños. La situación de los quirópteros en ambas fechas se indica en la
figura 5.
Con los detectores se han realizado 7.200 grabaciones, de las que 388 corresponden a
murciélagos (ver tabla 3). El resto de las grabaciones se ha debido a sonidos de las gotas
que caen del techo, o a sonidos de otros animales nocturnos (lirones, aves, etc.) La
mayor parte de estos vuelos (338) se registraron en la noche del 1 al 2 de junio.
Mediante las trampas de arpa se han capturado 4 murciélagos: dos de herradura grandes
y otros dos pequeños. Todos son machos.
A través del visor nocturno (combinado con el detector de ultrasonidos) se ha podido
observar la salida de dos murciélagos por la boca de la cueva: un murciélago grande de
herradura (Rhinolophus ferrumequinum) y un ratonero grande (Myotis myotis). El
primero salió de la cavidad volando entre los barrotes de la verja de entrada, mientras
que el segundo salió por un hueco que queda entre la verja y el techo.
En total se han identificado 7 especies, gracias tanto a las grabaciones realizadas, como
a los animales capturados y las observaciones con el visor nocturno. Además se ha
registrado la presencia de al menos otras dos especies que no han podido determinarse
con precisión: orejudos (Plecotus sp.) y murciélagos ratoneros de tamaño pequeño
(Myotis sp.). Ver tabla 2.
Fig. 4. Murciélago de herradura grande,
Rhinolophus ferrumequinum
5
Fig. 5. Situación de los murciélagos en febrero (color rojo) y en noviembre (azul).
(Círculo: R. ferrumequinum; triángulo: R. hipposideros)
Fig. 6. Murciélago de herradura pequeño,
Rhinolophus hipposideros, hibernando
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Tabla 2. Quirópteros identificados en Mendukilo. Se indica también su situación en
Navarra (V: vulnerable; IE: de interés especial; NA: no amenazada)
Nombre científico
R. ferrumequinum
R. hipposideros
Myotis myotis
Myotis sp.
Pipistrellus pipistrellus
Pipistrellus kuhlii
Hypsugo savii
Eptesicus serotinus
Barbastella barbastellus
Plecotus sp.
Nombre castellano
M. grande de herradura
M. pequeño de herradura
M. ratonero grande
M. ratonero
M. enano
M. de borde claro
M. montañero
M. hortelano
Barbastela
Orejudo
Situación
2006
2009
V
V
IE
-NA
NA
NA
NA
IE
IE/NA
Sí
Sí
No
Sí
No
No
Sí
Sí
No
Sí
Sí
Sí
Sí
Sí
Sí
Sí
No
Sí
Sí
Sí
Tabla 3. Datos obtenidos mediante los detectores de ultrasonidos. En amarillo se
indican los registros procedentes de tandas de 4 noches consecutivas.
*: Detector activo 4 noches, del 12 al 16 de julio
**: Dectector activo 4 noches, entre el 31 de agosto y el 4 de septiembre.
Especie
R. ferrumequinum
R. hipposideros
Myotis sp
Myotis myotis
P. pipstrellus
P. kuhlii
E. serotinus
B. barbastellus
Plecotus sp.
Nyctalus leisleri
N especies
N vuelos
N grabaciones
1 junio
Entrada Escalera
7
1
1
12
12 julio
Entrada* Escalera
Fuera
1
2
31 agosto
Entrada** Escalera
1
1
7
7
2
3-7 oct
Entrada
1
6
10
1
29
252
24
>100
>100
1
4
3
4
2
2
1
12
>10
5
301
644
3
37
108
1
1
1650
0
0
25
6
>200
6
6
17
3998
2
8
255
6
24
514
7
Discusión
Durante 2009 se ha podido comprobar la entrada de al menos 9 especies de quirópteros
al interior de Mendukilo, de las que 7 se han podido identificar. En dos ocasiones se ha
observado el paso de murciélagos por los huecos de la verja instalada; ambos datos
indican que el cierre elegido es adecuado para un buen número de especies.
Se ha comprobado la hibernación de al menos dos especies de quirópteros (el
murciélago de herradura grande y el pequeño) en la cavidad, aunque en número escaso.
Curiosamente, estos individuos parecen elegir las mismas zonas para hibernar en
diferentes inviernos: la galería de los lagos, la osera y la sala del dragón (ver figura 4).
Por el contrario, no se han encontrado ejemplares en las salas inferiores como la galería
del caballo o la sala del Guerrero, a pesar de que tienen menos visitas.
La frecuencia con la que los murciélagos visitan el lugar es diferente en función de las
fechas de muestreo: en la noche del 1 al 2 de junio se han realizado más de 300
grabaciones, mientras que en el resto no se han superado las 10 grabaciones, y en otras
no se ha grabado ningún vuelo.
Estas diferencias no se pueden achacar a la climatología, ya que se han buscado noches
similares en los meses cálidos, con temperaturas templadas, sin precipitaciones ni
vientos fuertes: si tomamos como referencia la estación meteorológica del Gobierno de
Navarra en Alli, las temperaturas mínimas el 2 de junio, 12 de julio y 1 de septiembre
fueron: 8, 13 y 14ºC respectivamente. Precisamente el mayor número de vuelos se
registró la noche más fría de las tres.
En la tabla 3 se aprecia que la mayor parte de las escuchas realizadas en la noche del 1
al 2 de junio se debe a dos especies muy comunes en Navarra: el murciélago enano o
común (Pipisrellus pipistrellus) y el de borde claro (Pipistrellus kuhlii). Entre ambos
aglutinan 281 escuchas, es decir, el 83% del total de esa noche. Es preciso indicar que
en la zona cazan unos pocos individuos de esas especies, que al realizar numerosas
pasadas junto a los detectores, provocan la grabación de muchos vuelos. Por ello, estos
números indican únicamente que la zona presenta gran actividad en algunas noches,
pero ello no implica la presencia de muchos individuos. Además, es muy probable que
estas especies no utilicen la cueva más que para descansar o comer presas en la entrada,
ya que se trata de quirópteros no cavernícolas, que nunca han sido observados en
cavidades de Navarra.
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Si dejamos al margen estas dos especies, podemos observar que la mayor actividad se
registra en primavera y en otoño.
Entre las especies más relevantes, cabe destacar la presencia frecuente de algunos
murciélagos de bosque (Barbastella barbastellus) y murciélagos ratoneros grandes
(Myotis myotis), que habían sido identificados anteriormente en Aralar pero no en esta
cavidad. Ambas especies se encuentran protegidas y consideradas de interés especial en
Navarra (DF 563/1995 de 27 de noviembre).
Las especies más frecuentes son los murciélagos de herradura grandes (R.
ferrumequinum) y pequeños (R. hipposideros), que se han hallado en todas las visitas
salvo en julio. Ambos se consideran vulnerables en el Catálogo de Especies
Amenazadas de Navarra.
También se ha identificado la presencia de algunos orejudos, si bien ante la falta de
capturas y la similitud de sus ultrasonidos, no ha podido determinarse la especie
concreta (orejudos dorados o pardos). Ambas podrían visitar la cueva, aunque teniendo
en cuenta la altitud del lugar y el bosque que rodea Mendukilo, parece más probable que
se trate del orejudo dorado (Plecotus auritus), típico de bosques húmedos y fríos.
Los individuos del género Myotis que se ha escuchado, podrían pertenecer tanto a la
especie mencionada anteriormente (Myotis myotis) como al murciélago ratonero de
ribera (Myotis daubentonii), que ya había sido capturado anteriormente en este refugio.
El murciélago hortelano (Eptesicus serotinus) ya había sido identificado en la cavidad.
Por último, junto a la boca de la cueva se han escuchado varios vuelos de nóctulos
pequeños, siempre fuera de la cavidad. Esta especie es arborícola, y caza con
regularidad por los bosques de Aralar, pero nunca se ha encontrado en el interior de
Mendukilo.
En definitiva, la cueva de Mendukilo es actualmente visitada por al menos 8 especies,
dos de las cuales se encuentran durante todo el año. La verja de la entrada parece
adecuada para estas especies, que en ningún caso son numerosas. La escasez de
ejemplares encontrados puede deberse tanto a las visitas regulares de turistas como a la
elevada altitud a la que se sitúa la cueva y su orientación Norte, lo que ocasiona noches
frescas y por tanto con escasez de presas. Prueba de ello es que en Aralar se conocen
tres colonias reproductoras de quirópteros, todas ellas situadas a menor altitud que
Mendukilo.
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