OCURRENCIAS - Diario La Mañana de Bolívar

Transcripción

OCURRENCIAS - Diario La Mañana de Bolívar
OCURRENCIAS
Oscar. C. Cabreros.
I
lustraciones de la Sra. MATILDE TELLO
OCURRENCIAS
(Cosas dichas casi sin pensar,
pero para pensar.)
N
ada de meditaciones o Reflexiones.
Menos aún hablemos de Sentencias.
He aquí, simplemente, un manojo de ocurrencias.
Ideas que surgen espontáneamente y que sin ningún orden, así como el caudal
imaginativo las produce, se llevan al papel.
Reflejan un sentir personal. Un enfoque muy particular de los sucesos cotidianos.
Fruto son – estas ocurrencias – de una experiencia de vida.
Están dichas con sentido orientador, algunas tienen un “pellizco” de humor, otras un
pretendido contenido ético-moral, y las más transitarán sin pena ni glotia, rápidamente,
hacia el olvido.
El autor
La Elenita, Verano de 1981
A
MI PADRE
Señor: júntame las sonrisas de tus ángeles que quiero repartirlas por el mundo.
E
speras, y en la soledad de esa espera la ilusión es tu compañía.
*
Cuando pones alas a tú corazón, sueñas.
*
Tienes miedo de amar. Es que te quieres mucho a ti mismo.
*
La nube tiene mansedumbre de cielo.
Pero a veces descarga su llanto cómo un niño ofendido.
*
Nos hemos quedado sin palabras para éste amor.
Es que nos hemos quedado sin amor.
*
Yo descanso en ti. Tú descansas en mí.
¿Y el amor de los dos, sobre quién descansa?.
F
ue casual nuestro encuentro. Tu estabas allí y yo también.
¿Pero fue casualidad que nos amáramos?.
*
Si no tienes nada que decir, lo mejor es el silencio.
Si tienes poco para decir, lo mejor es el silencio.
Si tienes mucho por decir, lo mejor es el silencio.
*
Has abierto un largo camino de dolor.
Ya empiezas a enamorarte.
*
Si navegas déjate llevar por los vientos.
Ellos siempre llegan a puerto.
*
La verdad tiene un precio.
La mentira tiene otro precio.
La verdad es cara. Por eso es que hay tanta mentira.
*
Los estadistas se enfrentan en una mesa fría,
y se arman para la guerra.
Si escucharan el ruego de las madres
Lucharían, pero para lograr la paz.
T
us ojos son una ventana al cielo.
*
Si puedes olvidar tan fácilmente es que nunca has querido.
*
El tiempo no existe. Es una creación del hombre.
¿Y entonces porqué el hombre no puede detener el tiempo?
*
¿Cómo es estar enamorado?
No tiene explicación. Es estar enamorado.
Nada más.
*
En tu mirar cabe todo el oro de otoño.
*
De la infancia guardo la inocencia.
De la juventud, la alegría.
Y de ti conservo la tristeza.
¿No te parece bastante?
*
Hay quien se muere de sed por no saber
Acercarse al agua.
*
La esperanza es el pan del espíritu.
No nos deja morir.
E
l cantar de los pájaros anuncia la mañana.
¡No tener alas de pájaro para llegar hasta
tu ventana y despertarte al amor, que tiembla
en mi corazón, cómo un pájaro que canta
en la mañana!.
*
Si partir es morir, volver, ¿es resucitar?.
*
Supe que te habías ido, cuando te quedaste en mí.
*
¡Me amarás?.
Siempre.
El sol estaba por testigo.
Pero el día, luego se nubló.
*
He visto el amanecer. Después te he encontrado a ti,
con tu liviano vestido verde.
¡Qué rojo está de envidia, desde
entonces, cada nuevo amanecer!.
*
Hablaste de amor y te amé.
Hablaste de trabajo y sonreí.
Hablaste de dinero y te olvidé.
*
A preguntas largas, respuestas cortas.
M
adre: nueve lunas estuve en ti.
Toda la vida estás en mí.
*
La estrella es una luz.
La luz es un guía.
Luego la estrella es un guía.
Pero cuantos han perdido la estrella que los guía.
*
El horizonte es una línea.
La conducta del hombre también tiene su línea.
Sólo la primera nunca se desvía.
*
Si no estás preparado para sufrir no
juegues al amor.
Si no estás preparado para dar no juegues al amor.
Sufrir y dar. He aquí la esencia del amor.
*
Si ya me robaste el corazón, puedes
irte contenta.
He muerto por ti, que es una manera de seguir viviendo para ti.
L
a ausencia se llenó de tu nombre.
Y fue como tenerte presente a cada
Instante en las cosas, que no me recordaban,
Precisamente, tu nombre.
*
Planté árboles. Escribí un libro.
Tres hijos me continúan.
Pero aún no he pagado mi deuda con la vida.
*
No me pregunte para quién escribo versos.
Podría llegarse a la más triste verdad
para un poeta.
Descubrir que la mujer de su inspiración,
no existe.
*
La amistada abre muchas puertas. Sé digno
de la confianza que en nombre de esa amistad
te brindan.
*
¿Qué debo hacer con mi vida?
Pregúntaselo. Y espero la respuesta.
Si la tienes.
*
Te has acordado de Dios.
¿Qué necesitas?
D
ebes tener memoria. La ingratitud
es mala moneda.
*
¿Si te han ayudado por qué no ayudas?
¿Si no te han ayudado, por qué no ayudas?
*
No esperes a que te pidan.
Es más lindo anticiparse a la necesidad
del que pide.
*
Cumple con tu deber, Sé fiel a tu doctrina
y credo.
Vive en la honradez y será dueño de
la mayor fortuna.
*
Si vas tan de prisa llegarás temprano.
Y una vez que llegues pretenderás ir
más lejos.
Y entonces, aunque quieras, no podrás
volver a las cosas simples de la vida.
Estarás atrapado en la red que con tu
propia impaciencia construiste.
*
Estoy enfermo de soledad.
¡Es que vivo entre tanta gente!.
E
nnoblécete honrando a tus padres.
*
Soy el enemigo de mí mismo. Pero no me
Combato.
Hemos establecido entre el “yo” y el
“mí” un táctico acuerdo de no beligerancia.
*
Amor podría escribirse con “h”.
Está bien que no se pronuncia, pero no
sería más “hamor”?.
*
Te vi llegar y me pareció mentira.
Te vi partir y me pareció mentira.
Y ahora que te veo pasar y apenas miras,
también me parece mentira.
*
Si das todo lo que puedes dar, eses un
Valiente.
Si das menos de lo que puedes dar
un cobarde.
Si das más de lo que puedes dar, ten
Cuidado, eso es grave, pueden llegar a
confundirte con un marciano.
*
Tus lágrimas fueron de sal.
Por eso las secó el viento.
E
scuché el trinar de los pájaros esta
Mañana.
¿ O serían los ángeles con sus trompetas
que anunciaban la fiesta del sol en el verano?.
*
Guardé tu adiós en un pañuelo y se lo
llevó en el pico una paloma.
Ahora estoy sin ti, sin pañuelo y sin paloma.
*
Eres libre como una mariposa.
Acepta, entonces, que todos tus hermanos
sean tan libres como las mariposas.
*
Buscas a Dios y no lo encuentras.
Llénate de luz como un claro día de
enero.
Enciende los grillos cantores de tu alma
para perdonar y ser perdonado.
Y Dios estará en ti, sin que lo busques, sin que lo llames.
*
La felicidad es femenina.
¿Será por ello tan difícil de lograrla?
V
ive consciente de tu finitud terrena.
Te enseñará a valorar tu tiempo, y sabrás
Que lo material, aunque te halague, es sólo pasajero.
*
Ya venimos a este mundo con el boleto
pago para el regreso.
Pero nadie se apresura para emprender
el viaje.
*
Si preguntan por mí en primavera, diles
que he salido.
Sí. Que he salido, a florecer…
*
No cargues tu espíritu con odio.
No procures la revancha,
Te irás encorvando lentamente como un
Viejo maletero y sentirás sobre tus espaldas
un peso que no te dejará marchar.
*
Un cielo sin nubes es como una cabeza
sin ideas.
Pura belleza de formas, pero sin contenido.
*
Si las flores no se marchitaran serían el
mejor regalo.
M
e miras y sufro.
No me miras y sufro.
¿De que estás hecha mujer para que
seas la dueña de mis sufrimientos?.
*
Aprendamos a dialogar. En el intercambio
de ideas y en el respeto recíproco hallaremos
el acceso más claro para el entendimiento.
Una forma de alcanzar la paz interior.
*
No hagas cárcel para guardar tus sueños.
Es inútil apresarlos. Déjalos ir que solos
vuelven.
Quieres vivir en paz. Es justo que así sea.
¿Pero qué haces tú, para llegar a esa paz?
*
Sigue siendo niño. No te avergüences
De confesarlo. Y si ves una calesita súbete
pronto al pegaso de madera y procura
obtener la sortija.
El calesitero y yo te comprenderemos.
S
i las mujeres no envejecieran serían la
obra de arte de la creación.
La mujer, aunque envejezca, sigue siendo
la más bella obra de arte de la creación.
*
El hombre pretende ser el primer amor
de la mujer que ama. A esta le conformas
ser el último amor del hombre.
*
Cuida el cristal de tu virtud.
Luego, con lágrimas no lograrás repararlo.
*
Madre tú me acompañas.
¿Verdad que tú me acompañas desde
el cielo?
*
La felicidad cabe en el puño de tu mano.
Y a veces se escapa aunque no lo abras,
como la arena, como el agua.
Si la tienes, aférrate a ella como la hiedra a su muro.
Si la pierdes, no sabes si retornará.
T
onta pretensión la del poeta: ¡morir
en primavera!.
Sí la primavera está hecha para vivir, para cantar, para soñar…
¿O es que quieres en tu lecho, todas
las flores de la primavera?
¿ O es que quieres irte por todos los senderos florecidos del amor?.
Oh, poeta. ¿Quién pudiera quitarte esa
pena que te lleva a morir en primavera!.
*
¿Sabes qué es la tristeza?.
Es pensar en ella, sabedor que ella ya
no piensa en ti.
*
Si te ofenden, ¿eres capaz de perdonar y ofrecer la otra mejilla?.
*
Vanidad, nada importante se ha escrito
en tu nombre.
*
Si todo lo tienes. ¿Qué buscar ahora?
*
Todos los que tocan el bandoneón
cierran los ojos.
¿Será para no ver las notas dolientes que
se escapan del instrumento?.
S
i las mesas del bar hablaran terminarían
como Juana de Arco, en la hoguera.
*
Dile a tu padre que iré a raptarte la
noche de Santiago.
Y para que me reconozca llevaré una rosa
en cada mano y en el corazón las espinas.
*
Todas las mesas del café parecen iguales.
Pero cada una tiene su propia historia.
*
Yo no cambio, decía un viejo político
adherido a los conceptos de una filosofía
que hizo crisis hace 50 años.
Pobre, no sabe que el cambio ya se
hizo, sin que éste se interesara por él.
*
Imposible: palabra que formó
la cobardía.
*
Una flor guardada en un libro es un recuerdo
que yace dormido, pronto a renovar
en el tiempo su perfume de nostalgias.
*
Voy a construir un jardín, para cultivar
mis sueños!.
L
a juventud tendrá en sus manos el
destino del mañana.
Ella usará las armas que es nuestra
obligación darle hoy.
¿Pero lo estamos haciendo bien?.
*
Tu hijo será como lo eduques.
Más que de tus palabras, aprenderá de tu
ejemplo.
*
Ten la humildad de las flores silvestres
del campo.
*
¿Cómo se dirá “yo te amo” en japonés,
para darle una sorpresa a mi joven vecina ,
tintorera?
*
Se hizo la música y el hombre calló.
Por fin se dio cuenta que aquí tiene
reino el silencio.
*
Yo creo en los milagros desde que pude
dejar en tus labios un beso.
*
Niño, deja que ate mis sueños a la cola
de tu barrilete.
A
cércate a los que sufren, sin ostentación,
sin vanidad, Y si puedes pasar desapercibido
mejor. No será por ello menor tu sacrificio.
*
El manso correr de la lluvia sobre los
techo me produce sueño.
Es un sueño con ritmo de tamboril
moreno. Por eso, cuando llueve, los duendes
bailan dentro de mí.
*
Ayer me miraste, y al mirarme sonreíste.
Entonces creí ver el sol estallando en tu
rostro como una granada madura recién
abierta.
*
Aférrate a la tradición. Vive venerando a
quienes fundaron la familia. Pero renovando
la antigua escuela con sentido de futuro.
*
La tierra es madre generosa que espera.
Regresa siempre a ella. Allí, en sus
entrañas, está la verdad del existir.
*
Toma el ejemplo del trigo, que hincha sus
granos para dar y que aún molido, se vuelve
harina para amasar el pan.
M
e gusta el misterio de la mujer. Esa
Impenetrable actitud soberana.
Su porte. su gracia.
Pero sobre todo me gusta, mujer.
*
¿Has pensado en que todo tu poderío, tu
inviolable fortaleza de oro, cae como un
castillo de naipes, al primer soplo de la desgracia?.
*
Muerte, alguien de mucho saber me dijo
que eras buena.
Yo no lo creo desde que te llevaste a
mi madre junto a las pálidas hojas
de un otoño.
*
Poesía, me llamas y a ti voy.
No me llamas y a ti voy.
Soy tan tuyo, poesía, que por ti soy.
*
¿Puede haber algo que nos contagie más
emoción que un nido balanceándose al batir
del viento, en la verde cabellera de un sauce
llorón?.
*
Los senderos del parque están hechos
para que los novios caminen juntos, sin
avergonzarse del amor.
D
ejamos al querido amigo, caído en
plena juventud, en su última morada.
Allí quedaron muchas reflexiones sobre
la vida y la muerte en discursos de
grave acento.
Se había producido una pausa. La lucha
continuaría después, como si nada
hubiese sucedido.
*
La mujer peca, pero siempre
con un hombre.
¿Con qué fundamento, entonces,
el hombre la denigra?
*
Si vas a construir no te importe más la
fachada que los cimientos.
*
¿Cuál es tu triunfo en la vida?.
¿Haber hecho una gran fortuna o tener
amigos fieles?.
*
¿Sabes dónde nace la raíz del viento?
*
La vida es una gran escenario donde todos
tenemos parte.
Pero trata de ser fiel a tu papel protagónico.
La improvisación, aquí, suele ser imperdonable.
N
o dejes que la ira te domine.
Te arrepentirás muy pronto de lo que
hiciste, sin querer hacerlo.
*
Tu silencio tiene sonoridad de cascada.
*
Ingratitud: ¿por qué te encuentras tan
presente en el obrar del hombre?.
*
Las palomas mensajeras,
¿tendrán su sindicato?
*
Me gusta sentirme pasajero de la lluvia.
*
Amor de Madre. Inmensidad de Dios
en su regazo.
*
No morirá mi amor por ti aunque
yo muera.
Porque la eternidad de éste amor ha
quedado establecida en la humildad de
mis versos.
*
Icaro no encuentro tu nombre por
ninguna parte, y eso que fuiste el primer
héroe que se puso alas para intentar volar
como los pájaros.
N
o dejes tus cuentas con Dios para
mañana.
Puedes llegar tarde.
*
Entre el ayer y el hoy, hay levantado un
alto muro de silencio.
Préstame bombero tus escaleras y tú poeta,
las palabras. Intentaré llegar hasta mi amada,
cuando la noche la sorprenda, desvelada.
*
La calle, siempre la calle y la noche.
¿Pero no sabes acaso que la calle y la
noche son las novias eternas de los poetas?.
*
Tu ausencia ha servido para revelarme
la necesidad de tu presencia.
*
Solo las madres tienen estatuas.
Muchos padres también se la merecen
*
Cuando veo a mi primera maestra tan
enferma y gastada, con su mirada perdida
en extrañas lejanías, mi corazón se detiene
y llora.
T
us enojos me recuerdan a una tormenta
de verano. Mucho ruido, poco agua y luego
un cielo transparente.
*
Nunca he visto un cementerio
para pájaros.
Pienso que no mueren. Que cuando sus
alas se quiebran o se gastan, se van cabalgando
en los hilos del sol a la presencia de Dios.
*
¿Cuándo los sueños de amor mueren,
adónde van?.
¿No se irán detrás de los pájaros?
*
La luna crecía redonda, a tus espaldas,
sobre el río.
Procuré alcanzar tu amor y fue imposible.
Quise alcanzar la luna y fue imposible.
Desde entonces he querido olvidar y es imposible.
Mi vida está hecha de imposibles.
¿Será posible?.
*
Aquel que se va se anima a la esperanza
de volver.
C
uando el camino se desanda parece
más largo.
*
Para olvidar el olvido mejor es olvidar.
Alguien una vez encontró la fórmula
para el olvido, pero muy pronto la olvidó.
*
No hay mejor financista que una mujer
cuando sale con su bolso para el mercado.
Si los ministros consultaran a sus esposas,
podrían tener la posibilidad de algún acierto
al tomar medidas económicas.
*
Si te pierdo a ti, ¿qué mas puedo perder?.
*
Eres un prisionero en libertad.
Vives esclavo de tu dinero. Pero nada
es eterno. Ya llegarán otros después de ti y lo
usarán discrecionalmente.
*
Un gran dolor puede llegar a olvidarse.
Por otro gran dolor.
*
En las esquinas se encuentran los vientos.
También los enamorados. Nadie ha podido
saber qué cosas se dicen.
S
i no te sonrío cuando pasas, es que
te estoy llorando.
*
¿Quién está detrás de los espejos?
*
Garrick el gran actor inglés reía y hacía
reír, pero en su interior lloraba una gran pena.
Cuantos hay como Garrick que llevan
su dolor a cuestas, sonriendo.
*
No pretendas ser importante en la vida.
No tiene importancia. Procura ser útil y
que los demás encuentren en ti una mano
generosa y dispuesta a dar.
*
El sol apareció muy tarde esta mañana.
Es que se demoró jugando a las cartas
con la madrugada.
*
El sacerdote renuncia a muchas cosas de la
vida por ti,
Tú que las tienes y las gozas no renuncies
a él. Lo necesitas.
*
El arriero no tiene caminos. Tiene distancias.
T
engo una sola obra de arte. Es el
retrato a lápiz de mi hija menor.
El artista captó la dulzura de la adolescencia
y la transmitió con maestría.
Y ahora, cuando me detengo frente al
retrato, tengo la sensación de estar viendo,
juntas, en un mismo rostro de singular belleza,
a mis dos hijas y a la madre.
*
Si la amistad de un hombre es invalorable,
mayor lo es, aún, cuando esa amistad, con todo su simbolismo de lealtad y pureza
se establece entre un hombre y una mujer.
*
Hiciste un favor. Basta. Prepárate para
hacer otro ya mismo.
*
Tengo dos grandes amigos. Mi padre y mi
hijo. Puedo sentirme dichoso.
*
Si quieres llegar comienza a marchar.
Que los caminos, cualquiera sea tu destino,
se hacen con algo más que buena intenciones.
*
Si tienes en quien pensar no te encuentres
L
a hermandad espiritual, aunque difícil de
lograr, existe. Dios puso en mi camino a una
religiosa de quien me considero su hermano.
Un raro privilegio que enriquece a mi corazón, haciéndolo inmensamente felíz.
*
Deja que la lluvia bañe tu rostro y
el mío.
Así te recuerdo con cierto sabor a lágrimas.
*
Pasas una sola vez por la vida. No te
Hagas de mucho equipaje, que en la estación
Terminal donde te esperan, no hay oficinas
de encomiendas.
*
Quiero que te vayas para sentir la
Necesidad de ir a buscarte.
*
Me gusta caminar por las vías del
Ferrocarril y recorrer sus distancias con
el pensamiento.
Es un viaje de ida y vuelta tan rápido
como barato.
*
Mi reloj es una máquina perfecta. Pero
no puede medir mi impaciencia cada vez que
te espero.
*
E
ra un gran ejecutivo. Debieron hacerle
una cura de sueño.
Le dio tan buenos resultados que ahora,
cuando le alcanzan los cheques a la firma,
se duerme.
*
Niña, Avísame si vas a salir a la calle
con tu nuevo vestido verde, así ponemos
todos los semáforos en rojo.
*
Si eres como eres, no quieres ser como
no eres.
*
El mar y tú. El mismo carácter. Las mismas
fuerzas. Idéntica y vital independencia.
Pero tú le ganas.
Cuando pones tus delicados pies sobre
la playa, las olas te obedecen y te besan.
Es que el mar por temido teme.
Y él que es dueño de tempestades, no
Quiere provocar las tuyas.
*
Señor: Dame fuerza para trabajar y
Tiempo para soñar. Con eso tengo bastante.
*
No bebes para olvidar. Bebes para destruirte.
L
as paralelas de las vías férreas se
encuentran en la lejanía.
Allí mismo donde las dejamos de ver.
*
Ah! Si pudiera estarme de pie sobre las
olas del mar y beber su espuma blanca y
fresca, dejándome llevar, sin prisa, como una
gaviota de ligero vuelo.
*
Oh! Qué sombra de pena tienen los
ojos pintados de los payasos.
*
Tres cosas provocan mi indignación:
Que los hombres se preparen para la
guerra.
La pobreza del mundo.
Y que el hombre sea lobo del hombre.
*
Tres cosas provocan mi alegría:
El canto de los pájaros en el amanecer
de un cálido día de verano.
La sonrisa de un niño jugando con su
madre en la playa.
Un acordeón llevado por los aires de
la noche, en dulce y romántica serenata por
los campos.
B
rahms tus danzas, danzan en mi corazón.
Por tres cosas debes luchar valientemente.
Y si es preciso dar la vida por ellas.
La Patria.
La Libertad.
El Honor.
*
Cuando veo caer una estrella pido tres
cosas.
Que me quieras.
Que no me olvides.
Que no me dejes de querer.
*
Tres cosas deseo.
La paz como triunfo de la humanidad.
No dejar de temer a Dios.
Ser perdonado por todas las equivocaciones de
mi vida que pudieran haber dañado
a alguien.
*
Tres personajes que están en mi vida
inolvidablemente.
Juan XXIII, el Papa Bueno.
Don José de San Martín. El Santo de la
Espada.
María Luisa Freyre de Maineri. Mi primera
maestra.
H
ubo un tiempo en que cabalgaba en
dos animales a la vez.
Bolilla, mi vieja yegüita campesina y
Platero, el dulce borrico de Juan Ramón.
Los dos siguen viviendo en mí, y muchas
veces, con mi imaginación a cuestas voy
gritando – Vamos Platero… Arre Bolilla… y
siento una cálida paz interior que me vuelve,
calladamente, a los felices días de la infancia.
*
La manzana cambió la historia del mundo.
Desde el pecado original, hasta el
descubrimiento de una ley física, pasando
por la producción de sidra que cada Navidad
hace sus víctimas.
Pero la humanidad no escarmienta y
Sigue comiendo manzanas.
*
Si lees historia en tu cómodo sillón de
Biblioteca procura ubicarte en el tiempo de
los acontecimientos que juzgas, en el
pensamiento de los hombres de esa época
y en las costumbres que el medio imponía.
*
Cuando dices a otro tu secreto, comprometes
tu virtud.
S
oy orgulloso de mi raíz castellana.
Amo a la España civilizadora de su valor e
hidalguía.
*
Te nombro tres poetas.
Juan Ramón Jiménez, de Andalucía.
Enrique Banchs, de Buenos Aires.
Amancio Varela, de Torrecita.
*
Tres cosas me estremecen
La música coral interpretada en una
Iglesia.
El llanto de un niño cuando tiene
hambre.
Y tu voz…
*
Cuánto se enriquece un pueblo si a sus
próceres mayores, puede agregar los nombres
de quienes por su trayectoria en la vida, se
ganaron un lugar en la pequeña historia
lugareña.
Quise guardar tu adiós en el hueco de
mis manos y fue inútil.
Tu adiós, una golondrina extraviada en
la noche, se fue alejando contigo por una
senda perfumada de azahares.
A
ngélica te llamas. Y ríes. Es que tienes
el ángel en el nombre y el diablo en el
cuerpo.
*
¿Por qué los Reyes Magos no se acuerdan
de los niños pobres?.
*
La casa antigua cayó demolida por la
piqueta.
Allí quedaron sepultados para siempre
los recuerdos de una vida familiar que mucho
tuvo que ver con el progreso del pueblo.
¿Quién recordará ahora a sus habitantes?
Será una historia más que quedará sin
historia.
*
Si no tienes vida interior, estas,
lamentablemente, muerto.
*
Si juegas acepta las layes del juego.
Pero es mejor que no juegues.
No arriesgues tu tranquilidad convocando
al azar.
*
¿Qué es un diario?. Lo definió un sacerdote
amigo: “Un tirano que muere todas las noches,
para nacer cada mañana.”
L
a belleza dura un día.
El saber, toda la vida.
*
No te consideres imprescindible. Menos,
providencial.
De hombres imprescindibles se han llenado
las necrológicas de los diarios, y el mundo
no ha detenido su andar por ello.
*
Eres irreemplazable. Te llamas: amor de
madre.
*
-¿Cómo soy? Preguntaste.
- Eres como el dulce canto de un ave que se
Pierde en el azul de un lejano paisaje,
Contesté. ¿Te gusta?.
-No.-¿Por qué?
- Porque llegará el momento en que las
sombras de la noche no te dejarán
ver el paisaje.
Y tuvo razón.
*
Ordena tu hogar. Pon orden en tu trabajo
y en tus ideas, y serás, insensiblemente, una
persona ordenada.
L
a debilidad de la mujer atrapa al
hombre más que su belleza.
*
El reloj de arena, ¿es una creación
de los bedunos del desierto?.
*
Puedo escribir los versos más tristes
esta noche. Es cierto.
Pero no lo hago. Ya los escribió Pablo
Neruda. No quiero correr el riesgo de que
me llamen copista.
*
Existe la soledad pura.
Es la pura soledad de quien está solo y
no espera nada.
*
A las muñecas le han enseñado a llorar.
¿No hubiera sido más hermoso que
hubieran aprendido a sonreir?
*
Para el mendigo todas las monedas son
iguales.
Ninguna alcanza para mitigar su dolor de
mendigo.
P
ensar en ti es una forma de tenerte,
aunque no lo comprendas.
*
En el niño nace el hombre.
Que en el hombre no muera el niño.
*
Ala orilla de tu nombre me estoy las
horas, velando.
*
Después del primer grito debieran acallarse
todos los gritos.
*
Tengo miedo. Sí:
Del rayo en plena tormenta desatada.
Del fuego que todo lo devora.
Del huracán que derriba las casas y los árboles.
De tu ausencia y de tu olvido.
*
En la lluvia, que trae tu mirada,
se ahogan mis penas.
*
No te conviertas en una fría
libreta de cheques.
C
uida tu cuerpo. Pero no olvides
atender a las enfermedades del alma. ¡Es tan
difícil recuperarse de ellas!.
*
Morir de pie, como los árboles!.
Yo diría: Vivir de pie, como los árboles,
sin inclinarse jamás.
*
El carnaval nos regala su alegre mascarada. Y allí,
en plena fiesta, el hombre canta y ríe.
¿Lo hace para no llorar?. O es que llora
Su dolor de siempre y por eso canta y ríe
sin parar?.
*
Si no puedes llenar tus horas de amor,
Haz al menos que estén vacías de odios y
malos pensamientos.
Tiemblo. Es que tengo en mis manos,
Apresada, toda la ternura de un pétalo de
rosa mojado en el rocío.
*
Mujer, si desnudas tu alma, llámame.
H
uyes de ti mismo. Es en vano.
Tomas caminos circulares que siempre
vuelven a ti.
Búscate a ti mismo. Esa es la consigna.
*
Un sol en llamas quema la tarde.
Una cigarra canta su alegría estival.
Es siesta.
El campo espera el agua bienhechora.
Que tarda en llegar, como las buenas noticias.
A lo lejos un hornero trabaja.
Su ambición de hogar, no descansa a la
hora en que todos duermen.
*
¿Qué vale más de ti, lo visible o lo
Invisible?. Trata de tener equilibrio, pero si
debes decidir recuerda que siempre interesa
más el contenido que el continente.
*
Las cosas queridas que fueron ya no son.
No lo serán jamás.
Pero cómo alimentan el corazón
con sus recuerdos!.
S
eñor, regrésame a la infancia.
No para jugar, sino para volver a ver los ojos de mi madre,
tan llenos de ternura.
*
De todas las derrotas puedes rehacerte.
También de la derrota final de tu carne,
si has sabido dar vida perdurable a tu espíritu.
*
Me gusta de ti ese esplendor, que tienes,
de fruta salvaje.
*
La eternidad es la suma de todos los
tiempos. Aún más allá de los tiempos.
*
¿No estuve yo, aquí, antes?
La callejuela larga y angosta. El rumor
de las acequias. La casona vieja con su techo
de tejas y la escina verde con tan altas ramas?.
No, Por aquí pasó tu padre y envejeció
tu abuelo.
¡Ah! Claro está que yo, aquí, estuve antes.
D
éjame ser bueno, le pedí a la vida.
Y a veces le reclamo pues me parece
que he dejado de ser bueno.
*
Hasta la hoja que cae deja su
eco en el aire.
*
Por el hueco de la guitarra se van las
quejas calladas del cantor.
*
Para decir no te amo, que mueran
todas las palabras.
Que sangren las rosas en llanto.
Que se haga la noche donde brilló el
día, para decir: no te amo…
Que queden en la estrella las lágrimas
Confundidas, apretadas.
Que sólo alumbre la luz de un relámpago
para decir: no te amo…
*
He aprendido a conocer el vuelo
de los pájaros.
Pero no he aprendido a volar como
los pájaros.
*
El silbato de la locomotora del tren es
un grito de angustia taladrando la noche.
*
C
on cada niño que nace,
nace el niño Dios.
*
No hagas del amor cenizas. No te servirán
para rehacer con ellas, tu perdido amor.
*
Amas y sufres. ¿Qué más te puede pasar
que tenga realmente importancia?.
*
Muero en cada atardecer en el oro
sangrante del sol en fuga por los campos.
Renazco en cada amanecer,
con el primer rayo de luz
que asoma tímidamente a la mañana.
Y en éste nacer y morir, nada más que
un juego de luces y de sombras que jalonan
mi camino, se me va gastando la
vida inútilmente.
*
Gitana no pretendas adivinar mi suerte.
Mi suerte fue encontrarte y perderte
al mismo tiempo.
*
Que no se extinga la llama de tu fe.
L
a vergüenza no la pierdas.
La mía era tan verde como el pasto y
se la comió un burro.
*
Acércate a quién amas con una sonrisa.
*
La verdad más pura es la del verdadero
Amor.
*
Yo no te encontré. Te descubrí. Sino
tuve más que destapar mi corazón para hallarte.
*
Salí a beber la noche en las copas de
los árboles y me dormí, borracho de luna.
*
Respeta a la mujer del amigo con el
mismo respeto que te merece tu madre.
*
Cuídate de la confusión que provoca
el oropel mundano.
*
Si mucho te preocupas por la marcha
de tu reloj, te irás convirtiendo en esclavo
de sus agujas.
O
culta en algún rincón de mi vida,
quién pudiera volver a ti, mi vieja pelota de
trapo!.
*
Cuando muera, que mi último suspiro
sea para ti, para que lo guardes donde posas
tu cabeza cuando sueñas, en tu almohada…
*
Para la eternidad del amor basta
con un beso.
*
Todo el dinero que juntes siempre será
poco.
No te alcanzará para comprar la vida.
*
La noche va huyendo perseguida por un
rayo de luna, para entregar sus sombras a
las caricias del alba.
*
Defiende tu verdad. Contra todos. Aunque
en ello juegues la tranquilidad de
tu existencia.
*
Por primera vez tuve miedo: Fue cuando
te dije: ¡te quiero!.
F
lores, flores, muchas flores. Flores
blancas.
Nada más que blancas para que me
acompañen en el último viaje, y el liviano
poncho de vicuña envolviéndome como un
sudario.
*
En el fuego de la fragua quema el
herrero sus lágrimas.
*
Por la escalera del agua vino bajando
la noche.
*
Herido de amor estaba, lo curaron
con un beso.
*
El día que los gitanos tengan su propia
ciudad, habrán dejado de ser gitanos.
*
Nunca tuviste la tentación de deshojar
entre tus manos una margarita? Y no intentaste
tampoco encontrar entre los pastos un
trébol de cuatro hojas?.
*
Hay mentiras necesarias. Quién se animaría
a decirle a una mujer fea, que lo es?.
Estás en una vidriera. Procura que el vidrio
no se empañe.
*
E
stás en una vidriera. Procura que el
vidrio no se empañe.
*
Dime de quien eres, si no eres de nadie.
*
Será verdad que cuando el viento se
enfurece es porque anda el diablo suelto?.
*
No solamente el pez se engaña
a la vista del anzuelo.
*
Ofrecidos la miel y el trigo, no importa
ser ayer si te han querido.
*
Tengo el color del mundo. Por eso estoy
tan pálido.
*
Las sombras del vino son eso. Nada más
que sombras dolorosamente inciertas.
*
El miedo y el amor, mejor se llevan
entre dos.
L
a alta torre de la iglesia nos obliga
a mirar el cielo como si quisiera recordarnos
a cada momento, nuestra breve
condición humana.
*
Noble misión la del poeta: dar perennidad a
la belleza de la mujer y a la palabra
del hombre.
*
Tenía el corazón tan grande que el
mundo le parecía pequeño.
*
Una ciprés lleno de pájaros es un canto
a la vida.
*
Destino de madera. Ser cuna y ataúd.
Un destino de vida y muerte.
*
Piensa que cada día que nace es un día
nuevo.
Apréstate a vivirlo como tal.
*
Tienes temor. Quién no tiene temor?
Pero no dejes que él se apodere de ti.
Avanza, con todos tus miedos,
pero avanza.
E
l jardinero plantó claveles y
cosechó claveles.
Un buen día se sembró ilusiones y
obtuvo sinsabores.
*
¿Quieres obrar bien?. Orienta tus pensamientos
con nobleza, con sinceridad y el
obrar bien surgirá naturalmente.
*
Lamentablemente, el plomero no podrá
componer tus sueños rotos.
*
Para mis enemigos, el perdón.
De mis enemigos, el perdón.
*
Cuida la alegría del niño para que sea
un hombre optimista y con fe.
*
El corazón se fatiga en el sufrir. Nunca
por la emoción de dar.
*
El buzón esquinero, que “está solo y
espera”, es un boquiabierto.
O
lvidarás. ¡Qué importa!. Si yo me
niego tu olvido.
*
No conviertas en necesario lo superfluo.
*
Que buenos son los hombres al morir.
*
Todo lo tenía pensado. Hasta que llegó
lo impensado y tuvo que pensar de nuevo.
*
Si tu amigo sueña, déjalo soñar.
Si tu amigo ríe, déjalo reír.
Si tu amigo ama, vete a descansar.
*
Felicidad empieza con “fe”.
*
La hoguera quema las cartas. El humo
se lleva las palabras escritas. Pero no hay
fuego que pueda borrar los sentimientos que
dictaron esas cartas.
*
Vivir amando para morir amando.
*
Las acequias llevan el agua.
Ay! Si pudieran llevarse las penas.
E
l futuro comienza para ti hoy. Por eso
tu presente no es más que un laboratorio
donde ya está gestando el mañana.
*
Corazón engañado es corazón destrozado.
*
Si el hombre pudiera desandar el tiempo
vivido, como quien desovilla un carretel de
hilo, para encontrarse con el niño que fue,
¿se reconocería?.
*
Yo que he visto los más hermosos paisajes
Puedo decir que ninguno iguala el que
muestran tus grandes ojos negros cuando
miran con la suavidad de una caricia.
*
Detrás de ti que sufres y te quejas,
vienen muchos más que envidian tu suerte.
*
Aprovecha tus años jóvenes para
aprender. No malgastes esa enorme posibilidad
que se te ofrece de enriquecer la vida.
*
Pusiste en beso en mi copa. Y ahora,
cuando bebo, también bebo tu beso.
L
a nostalgia es un vino amargo que
nos hace sentir vivos e inmensamente tristes.
*
Un minuto para la vida y después
la eternidad.
*
Tengo un rebaño de estrellas cuando
duermo, y un colmenar de ilusiones cuando
despierto.
*
¿Sabe el cartero que es portador de
todas las inquietudes del hombre?
*
No trepes. Sube. Si es posible escalón
por escalón. El esfuerzo te valdrá el éxito
seguro y evitará que caigas ruidosamente.
Dijo el incrédulo: -“Soy ateo, gracias a Dios”.*
No llores. Sobre la tierra en silencio
reinará la paz y nadie advertirá que falto.
*
¡Cómo tardan en volver las oscuras
golondrinas!.
S
omos espuma, niebla, agua mansa
que corre entre las piedras, apenas una
brisa…nada.
*
Aunque no te nombre, vivirá tu nombre,
en mi nombre.
*
Hubo que secarlo. Se había empapado
de amor.
Me levanté a descubrir el ángel de la aurora, y alcancé a ver sus alas en la última estrella
que moría.
*
Llegar y partir. Como el circo.
*
Si lo diste todo, tu nada está llena de
todo lo que diste.
*
Si no existieran los libros sería un hombre
sin vicios.
*
La vida es un acto de fe. Debemos creer
en ella.
*
La dicha es como el pan de cada día.
Hay que ganarla trabajando.
E
n la idea de lo pequeño está la
grandeza.
*
Duele más el silencio de aquel que
partió sin decir adiós.
*
Cómo cambian los tiempos!. La función
del diplomático con categoría de Embajador
se ha convertido en un “trabajo insalubre”.
*
¿Seguro estás de que no quieres a nadie?.
Ni a ti mismo?.
*
La paciencia te hará encontrar el camino
verdadero.
*
Cuando más necesitan del follaje los
Árboles se quedan sin hojas. Es en el invierno.
Así pasa con muchos ancianos, que en
sus años altos, agotados sus frutos, se quedan
desnudos de afectos.
*
Si te dispones a creer en los demás,
Porqué no procuras de creer,
Fundamentalmente en ti mismo?.
E
l sauce besa la tierra, al arrullo del
viento, como santiguándose.
*
Tu recuerdo está detrás de una ancha
puerta.
He prohibido que se abra.
*
Para darle el nombre a una golondrina,
qué mejor que llamarla: Cesarina.
*
El cántaro canta la alegría del agua
cantarina y fresca, que contiene.
*
Dureza de roca para decir: no.
Fragilidad de lirio para decir: sí.
*
Déjame escribir. No me cortes las alas
para este pequeño vuelo de todos los días.
*
Hasta el yunque cede, si lo golpean
con furia.
F
ue nada más que el resplandor del
arco iris sobre un cielo de tormenta.
Después, otra vez, la lluvia borrándolo
todo, despaciosamente
*
Tus deseos y los míos, qué hermosos
son, cuando se encuentran.
*
En este momento algo está pasando en
alguna parte y yo lo ignoraré por toda la vida.
*
La tentación vive en mí. Sólo que lucho
para que no me venza. Lo reconozco.
*
A veces me pregunto: ¿Qué hubiese sido
de mi vida sin ti?
*
Sé que puede ser mejor. Que no agoté
mi capacidad de dar, de trabajo y de lucha.
Eso no me lo perdono.
¿Pero es que estaba preparado
Convenientemente para saber que
estaba pasando a mi alrededor?.
*
No sea que tu afán de vida te pierda,
no dejándote vivir.
N
o digas nunca: “Nunca más”.
*
La noche te niega la vista del sol, pero
te regala el resplandor de sus estrellas.
*
Dios está a mi lado, cuando tu
estás a mi lado.
*
Leer poesía es la manera más inocente
de embriagarse.
*
Amé. Me amaron. Mi tiempo en la vida
no ha sido tiempo perdido.
*
Educar sin treguas. Educar siempre, para
que nadie sea víctima de la ignorancia, y de
los que se aprovechan de ella.
*
Los “bichitos de luces” son las estrellas
de la tierra.
*
Suele encontrarse mucha grandeza
de alma en los pequeños gestos.
*
Hablan de ti. Alégrate, vives aún.
T
odo lo que amas es, para ti, bello.
*
¡Qué grandes se hicieron mis niñas!.
¡Qué solos se quedaron el mono bailarín
y el oso de felpa!.
*
Sé fiel a ti mismo. No te engañes.
Tampoco tienes derecho a engañar a los demás.
*
Cada hormiga que pasaba ponía su
granito de arena en el mismo lugar.
Qué inmensa montaña se hizo con el
Tiempo!.
Si cada uno de nosotros, al pasar por la
vida, dejara un pequeño granito de arena…
*
En tu corazón madura un sueño,
y el mío quiere apresarlo.
*
Tú eres el mismo, siempre. ¿Por qué
te empeñas en ser otro?.
*
La vejez está muy cerca de las lágrimas.
T
us manos, unidas, son palomas de
sueños que se escapan volando, hacia el cielo.
*
Que tus ojos se enturbien de tristeza,
callando un dolor inmensamente tuyo, pero
nunca de envidia.
*
Qué fácil resulta decir: “Es el destino”,
descargando en él culpas que son nuestras.
*
El que manda tiene que ser el mejor.
*
Pobre, trabaja por amor al dinero.
*
Tienes el sol brillando en las alturas. La
claridad del día extendiéndose en limpios
horizontes. La luz asomando tiernamente en
los ojos de aquellos que amas de verdad. Y
entonces, ¿por qué te empeñas en buscar las
sombras, en ver solamente el lado opaco
de las cosas?.
*
No te acostumbres a vivir en la mediocridad
de los que nada hacen y todo lo
critican. Pronto te convertirás en
uno de ellos.
P
uedes llegar a naufragar. Pensarás, en
medio de la borrasca, que no te ha quedado
nada. No es así, si pese a todas las dificultades,
aún conservas una familia unida.
*
Las edades de la vida tienen, como las
estaciones del año, sus propios encantos.
Saber adaptarse a ellas sin perder el optimismo
de vivir, sin intentar alterar el orden de
sus etapas, es lo más aconsejable.
*
El corazón nunca envejece para el amor.
*
Donde hay hambre no hay alegría.
*
Somos barro. Pero en nosotros puede
nacer una rosa y anidar la ilusión. Es cuestión
de proponérselo.
*
No busques la llave del misterio. El Más
Allá es una ventana abierta al mar y desde
allí nos mira, y nos espera.
*
Cuando se enciende el fuego de la
pasión, no hay bombero que lo apague.
A
un gran amor imposible debiera
corresponderle un gran olvido, posible.
*
Puedes adivinar el color del tiempo?
*
Si ti yo vivo, muerto.
*
Nos dice un amigo: “Es preferible ser
rico y sano, que no pobre y enfermo”. Su
aguda reflexión está en lo cierto.
*
Ríe, tu alegría irá borrando mis tristezas.
*
Palabras, palabras, una enorme y permanente
profusión de palabras. Pero cuántas
son las verdaderas y expresan algo positivo?.
¿Nuestra civilización no estará enferma
de palabras?
*
No podemos decir que hemos marchado
por la vida con la seguridad del deber cumplido
si no hemos puesto nada al servicio
del prójimo.
*
El silencio también es una respuesta.
U
n ebrio me dio la clave de su
fingida felicidad: No pensar.
*
Vendrá la muerte a buscarnos un día.
Yo le diré que me lleve suavemente, por un
blando camino de nubes. Y tú?.
*
Para entender las cosas de la vida, al
hombre le tienen que pasar cosas.
*
Vivo esclavo de mi tierra natal. A ella
me entrego y le doy lo poco que soy.
*
Es mucha la soledad de la tierra, para
vivir en soledad.
*
Callabas, y yo te miraba.
Sonreías, y yo te miraba.
Hablabas, y yo te miraba.
Partías, y yo te miraba.
*
Encontré un dulce nombre de mujer
escrito en un libro olvidado.
Desde sus páginas amarillas – deshechas
de tiempo – me sonrió una lágrima.
N
o creas que tienes una sola vida.
Dentro de ti habitan otras vidas. Descúbrelas.
*
Los males del alma son como los vinos,
se curan con el pasar de los años.
*
Era un solar cubierto de pájaros. Tenía
la infantil sonrisa de cien niños.
Los pájaros volaron. Los niños crecieron
y se fueron.
Sólo el solar se quedó conmigo.
*
Enciende todas las lámparas que encuentres
en tu camino. Ya otros procurarán enceguecerlas.
Pero eso no te importe. La luz
siempre vuelve detrás de las sombras.
*
Y para todo el amor que se pierde,
¿no hay alguien que lo pudiera guardar?
*
La nube quiso besar al rosal y por eso
se hizo lluvia.
*
Echaste a rodar una mentira. Ahora ni
cien verdades te valdrán para detenerla.
L
a noche me trae tu recuerdo.
Yo le devuelvo mis súplicas.
*
El enemigo de ti, vive en ti.
*
Vístete de humildad que es lo
que perdura.
*
Encuentro tu voz en el cantar
de los pájaros.
En el reír sonoro del agua cristalina del
Arroyo.
En el rumoroso eco del follaje cuando
el viento lo acaricia allá en lo alto. Pero
verdaderamente te encuentro cuando todo
calla, en el silencio.
*
Toda la vanidad del hombre, su orgullosa
manera de vivir, caben al fin, en una modesta
caja de madera. ¡Cuando lo comprenderemos!.
*
Quieres atravesar el fuego sin quemarte.
No lo intentes. Siempre te alcanzará el fragor
de alguna chispa que terminará por
herirte fatalmente.
*
D
ejé de verte y al instante me dije:
¡Cuánto tiempo sin verte!
*
Gritas y te sublevas. Claro, si eres joven.
¿Qué otra cosa pudieras hacer?.
*
El silencio es un vacío por donde se
escapó el ruido.
*
Mientras tus ojos nieguen lo que expresan
tus palabras, seguiré creyendo en tu mirada.
*
Si no puedo alcanzar a ser tu luz, déjame,
al menos ser tu sombra.
*
Oí cantar a un niño. Y sentí como si
un pájaro de sueños, encendido de trinos,
anidaba en mi corazón.
*
Ah ¡sí pudiéramos transparentar la verdad
de los sentimientos como si reflejaran
detrás de una gran cristal!. ¡Cuántas desilusiones
nos evitaríamos!.
*
Homenaje: Al profesor Adolfo J. Cancio.
Muerta su carne. Vivo su espíritu.
Eterno su mensaje.
G
racias
Por la caricia del sol sobre los pastos.
Por el llanto de la noche hecho rocío
en la flor.
Por la canción que acuna al niño recién
nacido.
Por la alegría de vivir.
Por los sueños que nutren de ilusión
el alma.
Por el sufrimiento, que ennoblece.
Por la fatiga, tras el hondo bregar
cotidiano.
Por la esperanza. Por el dolor de amar.
Por la dureza del que hiere.
Por la bondad del que da.
G
racias
Por tenerte a ti Dios mío. Por comprendernos,
por amarnos, por perdonarnos.
Por mostrarte, cada vez que te buscamos.
P
ODER LLAMARTE AMIGO
Y SABER QUE LO ERES
ES MI MAYOR FELICIDAD.

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