GEORGE BEST - miguel vidal

Entrevistas Inolvidables
Por Miguel Vidal
GEORGE BEST, EN
MANCHESTER Y
MARBELLA
Algo mas de treinta años de reportero en el Diario AS (de 1967 a 1998) dan
para escribir un libro, y es lo que hice. En 1998 apareció en el mercado
"Memorias de un Reportero", que era el compendio de las entrevistas de las
que yo me sentía mas orgulloso, aunque por razones de oportunidad en el
libro faltaran algunas de las mas importantes, y, sobre todo, la trastienda o la
anécdota. Por ejemplo, falta en el libro George Best, al que entrevisté en dos
ocasiones, una en Manchester y la otra en Marbella, y que quiero recordar en
estas lineas como algo inolvidable. La instantánea de Best y mía en el centro
del terreno de juego del mítico Old Trafford, pertenecen a la primera de
estas entrevistas, y la de Best en el momento de entrar en mi "Mini Cooper"
está tomada en Marbella.
De ambas entrevistas, muy comentadas en su día, guardo muy buenos
recuerdos. La de Manchester fue con ocasión de una eliminatoria de Copa de
Europa, cuartos de final, con el Real Madrid. Nada mas se supo el resultado
del sorteo, el periódico me mandó a Manchester a "descubrir" al equipo
conocido como "Los Diablos Rojos". Entonces no había internet, ni apenas
televisión, y para conocer algo tenías que desplazarte al sitio. Así fue como
aterrizé en Old Trafford a primeros de abril de 1968 para ofrecer a los
lectores de "AS" entrevistas con Matt Busby, Bobby Charlton, Dennis
Law...y George Best. El parecido físico entre ambos era bastante notorio,
misma estatura, mismo corte de pelo, patillas largas, hasta el punto de que
cuando llegó el partido volví a viajar a Manchester como uno mas de la
expedición del Real Madrid y en la escala en Londres un grupo de niños
vinieron a pedirme autógrafos porque Santiago Bernabéu les hizo creer que
yo era...Best.
George Best estaba en su apogeo, personal y profesional. Conducía un Rolls
Royce blanco y al igual que por el humo se sabe donde está el fuego, las
niñas de un colegio cercano a Old Trafford sabían donde estaba George por
el dichoso coche. Habíamos quedado en un pub para charlar tranquilamente
y tuvo que acabar viniendo la policia para rescatarle -y de paso a mi, que
estaba con él- de sus fans quinceañeras. Luego llegó el momento de la
verdad y en Old Trafford el Manchester United ganó al Real Madrid 1-0 (gol
de Best) y empató a tres en el Bernabéu, con el tercer y valiosísimo gol de
los suyos también marcado por Best. Este 1968 el Manchester United,
conducido por George Best y Bobby Charlton, se proclamó por primera vez
Campeón de Europa al derrotar en la final de Wembley al Benfica.
La segunda entrevista con George Best tuvo lugar en Marbella tres años mas
tarde. Estaba alojado en el Meliá "Don Pepe" con una de sus inumerables
novias. De día no salía de su apartamento y por la noche recorría todas las
discotecas. Una noche el hall del hotel era un hervidero de cámaras de
televisión y periodistas ingleses que le esperaban. El fotógrafo Agustín Vega
y yo nos apostamos delante de la puerta de servicio, que es por donde entró
de madrugada tambaleándose y sujetado por su novia y un amigo. Me
acerqué, me reconoció, y me citó a las 11. "Golpea cinco veces la puerta con
los nudillos", acertó a decirme.
Y así lo hice. Cuando llegué había varias docenas de colegas haciendo
guardia en la escalera que conducía al apartamento, que por cierto se rieron
de Agustín, cámara en ristre, y de mí, cuando les dije que me dejaran pasar.
"¿Pero, qué se han creido estos?", debían pensar. Se quedaron de una pieza
cuando, tras los cinco toques de rigor a la puerta con los nudillos, ésta se
franqueó para nosotros. Hicimos la entrevista. "Tengo tantas novias como
granos de arena hay en esta playa, por eso dejo el fútbol", dijo George a
modo de excusa por haber dejado plantado al Manchester United y a los
periodistas británicos para anunciar su retirada del fútbol en exclusiva para
"AS". A la salida del apartamento los periodistas ingleses nos ofrecían
mucho dinero por el carrete y por saber lo que había dicho. Ya nos miraban
con mas respeto.
Pero para respeto profesional el que yo sentía por George Best, al que
consideraba uno de los extremos mas geniales que han existido en el mundo
del fútbol. Y del que me enorgullezco de haber conocido y de haber visto
jugar. En noviembre de 2005 lloré al enterarme de su muerte.