Programa (801 kbytes) - Cultura de Castilla y León

Transcripción

Programa (801 kbytes) - Cultura de Castilla y León
La Orquesta Sinfónica y Coro JMJ nace con motivo de la Jornada Mundial de la
Juventud Madrid 2011, encuentro que reunió a más de un millón de jóvenes
procedentes de todo el mundo con el papa Benedicto XVI.
Desde sus orígenes, esta formación ha combinado la búsqueda de la excelencia
musical con una vivencia de la música de calidad -sacra y profana- naturalmente
abierta a su sentido trascendente, promoviendo especialmente la composición
de nueva música sacra.
Formada por músicos provenientes de toda España, desde 2011 y bajo la batuta
de su director artístico Borja Quintas y su directora de coro Marina Makhmoutova,
la OSC-JMJ ha actuado en el Auditorio Nacional, Auditorio de Zaragoza, Teatro de
la Zarzuela, Teatro Monumental, Auditorio de León, Aula Pablo VI de Roma, así
como en la Catedral de la Almudena de Madrid.
Ha grabado y editado cuatro discos y ha realizado los estrenos absolutos de la
Misa JMJ, Oratorio de Navidad, Misa de los Mártires del Siglo XX en España, Credo
por el Año de la Fe y Fanfarria de Resurrección, contando para ello con algunos
de jóvenes compositores con mayor proyección nacional e internacional.
Se trata de uno de los mayores milagros culturales de los últimos años en
España, propiciado gracias al compromiso estable de cada uno de sus miembros
y responsables, y apoyado desde sus inicios por el Arzobispado de Madrid y
recientemente por la Fundación Madrid Vivo.
Programa
R.Wagner (1813-1883)
Obertura “Tannhäuser”
Kuzma Bodrov (1980) - Carlos Criado (1977)
Las 7 Moradas de Santa Teresa de Jesús*
I. II. III. IV. V. VI. VII. Castillo de Diamante.
La guerra que da el demonio.
Conviene andar con temor.
Dilataste cor meum.
Aquél alma fija en Dios.
¡Oh, válgame Dios! Cómo apretáis a vuestros amadores.
Como si un arroyico pequeño entra en la mar.
Elena Temprado, soprano
Carmen Feito, declamadora y miembro del Coro JMJ
Marina Makhmoutova, directora del coro
Borja Quintas, director
*Encargo OSC-JMJ. Estreno en Ávila.
Con motivo del cierre del V centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús,
la Universidad Católica de Ávila (UCAV), que lleva también el nombre de esta
santa universal, ha querido poner un “broche de oro” a esta celebración trayendo
a Ávila al Orquesta Sinfónica y Coro JMJ para que interpreten, por primera vez
en esta ciudad, su obra “Las 7 Moradas”, especialmente compuesta para el Año
Teresiano.
V CENTENARIO DEL NACIMIENTO DE SANTA TERESA DE JESÚS
“ VUESTRA SOY PARA VOS NACI ” Así se proclama el V Centenario de Teresa de
Cepeda y Ahumada.
Santa Teresa de Jesús nació el 28 de marzo de 1515.
Mujer, espiritual, valiente y sobre todo enamorada con un amor fuera del
tiempo, porque ella lo iba a vivir en un mundo diferente al que conocemos.
El alma humana, imagina Teresa ,es como un precioso castillo con muchas
estancias. Y para entrar en él, el ser humano debe abandonar la ambición el
éxito , las apariencias y recorrer esas estancias con la oración .
Las Moradas del Castillo Interior es el último libro que escribió Santa Teresa.
Según muchos, su mejor obra y una de las cumbres de la mística cristiana y de
la prosa española del Siglo de Oro.
La partitura para orquesta sinfónica y coro que hoy estrenamos supone la
cuarta colaboración de Carlos Criado y Kuzma Bodrov, después de la “Misa JMJ”,
el “Oratorio de Navidad” y la “Misa de los Mártires del Siglo XX en España”, todas
ellas estrenadas y grabadas por la Orquesta Sinfónica y Coro JMJ.
En esta nueva obra, han asumido el enorme reto y la profunda fuente de
inspiración que supone cada una de las siete moradas. Para la composición
de las mismas han tomado textos extraídos por el P. Teodoro Polo de cada
morada, que a su vez son introducidos por una declamación, que nos sitúa en
el contexto de cada meditación. Se trata de una obra esencialmente al servicio
del texto y por tanto de una nueva oportunidad para contemplar y entender el
valor universal y actual de la espiritualidad carmelitana que nos legó la Santa
de Ávila.
LAS 7 MORADAS DE SANTA TERESA DE JESÚS
1ª. MORADAS: Castillo de Diamante.
Coro: No es otra cosa el alma del justo sino un paraíso adonde dice Él tiene sus
deleites
Estando hoy suplicando a nuestro Señor hablase por mí, porque yo no atinaba
a cosa que decir ni cómo comenzar a cumplir esta obediencia, se me ofreció
lo que ahora diré para comenzar con algún fundamento, que es: considerar
nuestra alma como un castillo todo de un diamante o muy claro cristal adonde
hay muchos aposentos, así como en el cielo hay muchas moradas; que, si bien
lo consideramos, hermanas, no es otra cosa el alma del justo sino un paraíso
adonde dice él tiene sus deleites (1M 1,1).
2ª. MORADAS: La guerra que da el demonio.
Coro: Por vuestra misericordia no consintáis que esta alma sea engañada para dejar
lo comenzado. Abrazaos con la Cruz que vuestro Esposo llevó sobre sí.
Porque aquí es el representar los demonios estas culebras de las cosas del
mundo, y el hacer los contentos de él casi eternos… ¡Oh Jesús!, qué es la
barahúnda que aquí ponen los demonios y las aflicciones de la pobre alma,
que no sabe si pasar adelante o tornar a la primera pieza, porque la razón, por
otra parte, le representa el engaño que es pensar que todo esto vale nada en
comparación de lo que pretende (2M 1,3-4).
3ª. MORADAS: Conviene andar con temor.
Coro: ¿que les diremos, sino bienaventurado el varón que teme al Señor?
Miremos nuestras faltas y dejemos las ajenas, que es mucho de personas
tan concertadas espantarse de todo, y por ventura de quien nos espantamos
podríamos bien deprender en lo principal…, ni hay para qué querer luego que
todos vayan por nuestro camino, ni ponerse a enseñar el del espíritu quien por
ventura no sabe qué cosa es (3M 2,13).
4ª. MORADAS: Dilataste cor meum.
Coro: Dilataste cor meum – Traducción: Se ensanchó mi corazón
Estaba yo ahora mirando, escribiendo esto, que en el verso que dije: Dilataste
cor meum, dice que se ensanchó el corazón, y no me parece que es cosa, como
digo, que su nacimiento es del corazón, sino de otra parte aún más interior,
como una cosa profunda. Pienso que debe ser el centro del alma, como después
he entendido y diré a la postre; que, cierto, veo secretos en nosotros mismos
que me traen espantada muchas veces; y, ¡cuántos más debe haber! ¡Oh Señor
mío y Dios mío, qué grandes son vuestras grandezas! y andamos acá como
unos pastorcillos bobos que nos parece alcanzamos algo de vos, y debe ser
tanto como nonada, pues en nosotros mismos están grandes secretos que no
entendemos (4M 2,5).
5ª. MORADAS: Aquél alma fija en Dios.
Coro: Fija Dios a sí mismo en lo interior de aquel alma de manera que cuando torna
en si en ninguna manera pueda dudar que estuvo en Dios y Dios en ella
Para imprimir mejor en ella [el alma] la verdadera sabiduría…, [se] fija Dios a sí
mismo en lo interior de aquel alma de manera que en ninguna manera puede
dudar que estuvo ‘en’ Dios y Dios ‘en’ ella. Con tanta firmeza le queda esta verdad
que, aunque pase[n] años…, ni se le olvida ni puede dudar que estuvo (5M 1, 9).
6ª. MORADAS: ¡Oh, válgame Dios! Cómo apretáis a vuestros amadores.
Coro: ¡Oh, válgame Dios, Señor, cómo apretáis a vuestros amadores!
Siente una soledad extraña, porque criatura de toda la tierra no la hace
compañía, ni creo se la harían los del cielo, como no fuese el que ama, antes todo
la atormenta más; vese como una persona colgada, que no asienta en cosa de la
tierra, ni al cielo puede subir; abrasada con esta sed, y no puede llegar al agua; y
no sed que puede sufrir, sino ya en tal término que con ninguna se le quitaría ni
quiere que se le quite, si no es con la que dijo nuestro Señor a la Samaritana; y
eso no se lo dan. ¡Oh, válgame Dios, Señor, cómo apretáis a vuestros amadores!
Mas todo es poco para lo que les dais después (6M 11,5-6).
7ª. MORADAS: Como si un arroyico pequeño entra en la mar.
Coro: Porque siempre queda el alma con su Dios en aquel centro....como si un
arroyico pequeño entra en la mar
Digamos que sea la unión, como si dos velas de cera se juntasen tan en extremo
que toda la luz fuese una, o que el pábilo y la luz y la cera es todo uno; mas
después bien se puede apartar la una vela de la otra, y quedan en dos velas, o
el pábilo de la cera. Acá es como si cayendo agua del cielo en un río o fuente,
adonde queda hecho todo agua, que no podrán ya dividir ni apartar cuál es el
agua del río o lo que cayó del cielo; o como si un arroyico pequeño entra en
la mar, no habrá remedio de apartarse; o como si en una pieza estuviesen dos
ventanas por donde entrase gran luz; aunque entra dividida se hace todo una
luz (7M 2,4).
Selección de textos realizada por el Padre Teodoro Polo
Elena Temprado
Soprano
Marina Makhmoutova
Directora del Coro
Borja Quintas
Director Artístico y Titular
ARZOBISPADO
DE MADRID

Documentos relacionados