“Mis caminos no son tus caminos”.

Transcripción

“Mis caminos no son tus caminos”.
Bereshit (Génesis) 28:10-32:2
Haftara: Hoshea (Oseas) 12:13-14:10
Resumen de la parasha: Jacob huye de Beersheva rumbo a Harán pero acampa en Luz, ahí tiene
un sueño donde ve ángeles subir y bajar por una escalera y al Eterno sobre ella. El Eterno le
promete seguridad en su travesía por la casa de Laban. Jacob se levanta y hace un voto con el
Eterno y llama al lugar “Bet-El”, que significa “Casa de Dios”. Jacob llega donde Laban y pide por
mujer a Rajel su hija menor; este último acepta el trato a cambio de siete años de trabajo de
Jacob. Los siete años pasan, pero Laban engaña a Jacob dando encubiertamente a Lea en lugar de
Rajel. Jacob debe trabajar otros siete años por Rajel. Hay lucha entre Rajel y Lea por el amor y
cariño de Ya’akov Avinu (Jacob nuestro padre) y su lucha se ve reflejada en los nombres de los
patriarcas. Jacob trabaja por su propia ganancia imponiéndose un salario, mismo que Laban
cambia diez veces. Jacob huye de Laban y este lo alcanza en Galaad y ahí hacen un pacto de Paz.
Jacob regresa a Canaán y observa ángeles de Elohim en el lugar y lo llama “Mahanaim”
(Campamentos).
“Mis caminos no son tus caminos”.
“Y concibió Lea, y dio a luz un hijo, y llamó su nombre Rubén, porque dijo: Ha mirado El Eterno mi
necesidad de un hijo y como yo lo amo más que a mi vida.”, “Y concibió otra vez, y dio a luz un
hijo, y dijo: mi alma está unida a El Eterno, él ha sido tan bueno conmigo que no puedo vivir sin él;
por tanto, llamó su nombre Levi.” , “Y dijo Raquel: He luchado la buena batalla de la fe, he
contendido, y he vencido. Y llamó su nombre Neftalí.”, “Y dijo Lea: Dios me ha dado mi
recompensa, por cuanto mi esperanza en El nunca decayó; por eso llamó su nombre Isacar.”
No te preocupes, no tienes una versión de biblia incorrecta, tampoco yo pretendo haber
encontrado un manuscrito más fidedigno de Génesis, esos versos que has leído en el primer
párrafo no son los que en realidad están en la escritura. Quizás las razones para los nombres de los
patriarcas suenan más “espirituales” o “elevadas” en la versión “retocada” de los versos; quizás
hasta pienses que así hubiera sido mejor. Quizás hubiese sido lo ideal que los nombres de los
patriarcas, hayan tenido origen en grandes conceptos espirituales, filosóficos y teológicos y no ¡en
una lucha ardiente y continua por un Marido casado con dos hermanas para ver quién era su
favorita!
Piénsalo detenidamente: Los nombres de los 12 padres del pueblo elegido de Elohim (Dios)
originados en una disputa por una poligamia desafortunada producto del engaño, ¡Algo
seguramente menos que ideal! Veamos los versos en la escritura:
“Y concibió Lea, y dio a luz un hijo, y llamó su nombre Reuben, porque dijo: Ha mirado (Heb.
ra’ah) El Eterno mi aflicción; ahora, por tanto, me amará mi marido” (Bereshit [Génesis] 29:32).
“Concibió otra vez y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez se unirá (Heb. Yilaveh) mi marido
conmigo, porque le he dado a luz tres hijos; por tanto, llamó su nombre Levi” (Bereshit [Génesis]
29:34).
“Y dijo Raquel: Con luchas (Heb. Naftuli) de Elohim he contendido con mi hermana, y he
vencido. Y llamó su nombre Neftalí” (Bereshit *Génesis+ 30:8).
“Y dijo Lea: Elohim me ha dado mi recompensa (Heb. Sejari), por cuanto di mi sierva a mi
marido; por eso llama su nombre Isacar” (Bereshit *Génesis+ 30:18).
Todo producto de una lucha entre dos hermanas que se disputaban a un marido que huía de su
hermano por haberlo suplantado, ¡Que locura! ¿En realidad estamos leyendo a la historia del
pueblo elegido por el Creador del universo? La increíble respuesta: Si, así es.
La historia de la lucha por Ya’akov que sostuvieron las matriarcas, nos enseña muchas verdades
espirituales aunque suene extraño. En primer lugar nos habla de la increíble sinceridad de los
escritores bíblicos, los escritores de la biblia no estaban interesados en fabricar una historia para
hacer lucir bien su relato. La biblia tiene ese toque de sinceridad único que es señal de
confiabilidad y de veracidad. Ahí lo tienen: los patriarcas mintiendo, suplantando, tomando dos
hermanas como mujeres, las matriarcas disputándose a Jacob, Juda y Tamar, David y su pecado de
Asesinato y adulterio, Salomón y su idolatría, Lot y su incesto, El Rey Acaz ,el episodio del becerro
de oro, etc… Una cosa es segura: Si los judíos hicieron un complot para conquistar al mundo,
tratando de lucir como el mejor de los pueblos para ser aceptados como el pueblo elegido,
fracasaron miserablemente.
La biblia dice las cosas tal como son, sin favoritismos, sin preferencias, tiene el sello de lo veraz
que tanto hace falta en las leyendas de los otros pueblos sobre sus héroes. Esta es una de las
muchas cosas que hace a la biblia digna de confianza.
En segundo lugar, la parasha nos enseña sobre la inmensa fidelidad de Hashem, su increíble
soberanía y su pre-conocimiento absoluto. No importa lo que pase: Hashem puede actuar incluso
a pesar de nuestras falencias, su fidelidad hace que el desee siempre cumplir sus promesas, su
soberanía y conocimiento anticipado hacen que pueda siempre cumplir sus promesas.
No hay nada que escape del conocimiento y previsión del Eterno, el sabe lo que acontecerá dentro
de 10 años hoy mismo, el no está dentro del tiempo y por lo tanto no está limitado por él. A
menudo surge la pregunta: “¿Por qué entonces no actúa impidiendo que hagamos la mala
decisión? Por una simple razón: Su soberanía y pre-conocimiento no anulan nuestro libre albedrío.
El ha decidido soberanamente crear creaturas morales libres y por tanto, nos deja tomar nuestras
decisiones y cosechar nuestras consecuencias.
Esta es nuestra confianza: Tenemos un Elohim fiel y soberano a un punto que nada escapa de sus
manos ¡Bendito sea su nombre por siempre! El puede hacer que el pueblo elegido, la nación
sacerdotal, la simiente de Abraham salga de una pelea marital; El puede hacer que el templo
venga de Salomón quien proviene de la relación entre David y Betsabe; El puede hacer que de Lot
y su incesto venga Moab, de este Rut y de esta ni más ni menos que… ¡¡¡EL REY MESIAS!!!
Esto en ninguna manera quiere decir que no somos responsables de nuestros actos porque EL en
su sabiduría lo condujo para bien. Pablo dice:
“¿Por qué no decir (como se nos calumnia, y como algunos, cuya condenación es justa, afirman
que nosotros decimos): Hagamos males para que vengan bienes?” (Romanos 3:8).
Es maravilloso ver como Elohim puede transformar mi desastre en orden y para que sirva para sus
propósitos. Nada de lo que hacemos toma por sorpresa al Eterno, el Rey David dice:
“Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Señor, tú ya sabes toda” (Tehilim
[Salmos] 139:4).
¿Has sentido que muchas veces tu vida es “Menos que ideal”? ¿Has sentido que tu familia es un
desastre? ¿Suspiras en ocasiones por ser mejor? ¿Te preguntas si el propósito del Eterno se
cumplirá en tu vida? ¿Crees que finalmente su reino se establecerá a pesar de todas las
limitaciones de sus hijos? ¿Consideras que tu vida no refleja lo que debería de ser? Si tus
respuestas son si, hay muy buenas noticias para ti.
La primera noticia es que tienes un profundo deseo de mejorar cada día y ser un mejor hijo de
Elohim. El ha puesto ese deseo en ti, y es bueno saber que consideras que debes de perfeccionarte
hasta el día de la redención final (Filipenses 1:4-5).
La segunda es que Hashem suele cumplir su propósito por medio de humanos con deseos
ardientes de servirle pero con tropiezos y fallas. Lo ha hecho antes, lo hace ahora y lo hará
siempre. Su amor es tan profundo que a pesar que el desastre esté a nuestro alrededor, El está
aquí para arreglarlo. Su amor es tan grande que podemos descansar en su fidelidad puesto que “Si
fuésemos infieles; El permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo” (2 Timoteo 2:13).
El profeta Isaías nos dice: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros
caminos mis caminos dijo El Eterno. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis
caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”
(Isaías 55:8-9).
Si el éxito final de esta creación y su restauración dependieran de nosotros, tendríamos deseos
para estar ansiosos y preocupados. Si seres falibles son la base de la rectificación del mundo, la
tierra está perdida. Gracias al Eterno podemos estar seguros que al final, su propósito se cumplirá
a pesar de todas nuestras fallas, EL CUMPLIRA SUS PROMESAS.
Es por ello que podemos esperar confiadamente en su salvación y reposar en El, es por ello que
estamos seguros que mandara al Mesías prontamente; sus profecías cumplidas anunciadas ayer,
nos aseguran que las que aún faltan sucederán tal como está decretado.
Así que si tu vida luce como la contienda de Rajel y Lea, recuerda que no estás solo: Muchos
hombres de Elohim tuvieron la misma situación y al mismo Doctor que curaba sus vidas.
¡Shabbat Shalom!
Yitzjak

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