Riego tecnificado

Transcripción

Riego tecnificado
Mejorar los sistemas de
riego es, sin duda, un objetivo de primerísima importancia para modernizar el
agro nacional. Las tareas
son múltiples: obras civiles
para renovar los sistemas
de irrigación, reducir el
grave déficit de tierras irrigadas en el agro serrano, y
a nivel de campo innovar
las técnicas de riego para
un uso más eficiente del
agua. Para esto último el
Instituto Nacional de
Investigación Agraria INIA- ha diseñado un sistema de riego llamado no
convencional por ser una
alternativa sencilla, de bajo
costo y fácilmente adaptable a los distintos tipos de
agricultura de las tres
regiones del país.
El gran reto es llevarlo al
campo.
Sencillo y barato
Riego tecnificado
S
egún las cifras del III Censo
Agropecuario de 1994, el riego tecnificado por goteo y aspersión sólo
es usado por el 1.9% del total del área
agrícola bajo riego, por lo general en
predios medianos y grandes ubicados en
la costa. El 97.4% de las unidades agrícolas bajo riego lo hacen por gravedad o
inundación, lo cual conlleva perder
grandes volúmenes de agua por filtración o evaporación y la creciente
depreciación de los suelos por erosión o
salinización.
El riego tecnificado tiene la ventaja
de ahorrar entre un 40% a 60 % de agua,
un recurso escaso en la mayor parte de
la sierra y la costa al permitir que el
agua llegue a la planta en la cantidad
necesaria y la oportunidad adecuada.
Para las zonas altoandinas supone la
posibilidad de aprovechar la estacionalidad de las lluvias para utilizarlas en
épocas de estiaje. El impacto en el
DISEÑO TÉCNICO
•No utiliza ningún tipo de energía convencional (eléctrica o combustible) pues utiliza
la fuerza de la gravedad para dar la presión necesaria al agua que recorre el campo
a través de una red de tubería.
•La clave la da el reservorio hecho de tierra en un lugar elevado del predio cuyo interior se reviste con mantas de plástico u otro material impermeable. La altura, tamaño
y forma del reservorio dependerá del área a ser irrigada, de la topografía del terreno,
y de acuerdo a la dotación de agua y las plantas a cultivar.
•La red hidraúlica esta compuesta de un conjunto de tuberías de policloruro de vinilo
(PVC) distribuidas en tubería de conducción y de distribución lateral de riego. En éstas
últimas se utilizan tuberías de PVC perforadas con orificios de 1mm de diámetro o
cintas de riego.
•El sistema de filtrado utiliza materiales caseros que pueden ser esponjas plásticas,
malla de nylon o acero.
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LA
REVISTA
AGRARIA
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rendimiento de los cultivos es considerable.
Sin embargo, para una agricultura
mayoritariamente parcelaria y descapitalizada resulta, si no imposible, muy
difícil poder acceder a equipos de riego
que requieren alta inversión, con el
inconveniente adicional de que no existen en el mercado módulos de riego tecnificado para áreas pequeñas. El sistema de riego INIA ha sido pensado en
esta realidad, pudiendo usarse en huertos familiares de mil metros cuadrados,
andenerías y terrazas, pequeñas parcelas y también en medianas y grandes
propiedades.
El Ing. José Gonzáles, director general de transferencia de tecnología del
INIA, señala que el sistema se puede
adaptar a cualquier zona y, con excepción del arroz, a cualquier tipo de cultivo, lográndose aumentar los rendimiento entre 30% y 100%. A la fecha es utilizado por el mismo instituto estatal en
las Estaciones Experimentales que aún
posee en las distintas regiones del país,
por el PRONAMACHS y FAO para sus
proyectos en sierra, y por algunos medianos agricultores de Ica. El interés por
adoptarlo es, sin embargo, grande,
como se pudo evidenciar en el
Congreso realizado por el INIA y la
Junta Nacional de Usuarios de Distrito
de Riego a mediados de julio.
¿Cómo financiar los costos?
Frente a los sistemos de riego tecnificado convencional, cuyos costos por
hectárea no bajan de 2 mil dólares, sin
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no convencional
LAS CIFRAS DEL RIEGO
considerar los costos de mantenimiento
que también son elevados, el sistema de
riego INIA representa una alternativa
barata.
El gasto en materiales (tuberías PVC,
codos y filtros) en los módulos para
áreas de mil metros cuadrados está entre
los 550 a 950 soles, para regar una hectárea de cultivos transitorios S/2,500
soles y para frutales aproximadamente
S/1,500. Adicionalmente, se requiere
invertir en la construcción de un reservorio de tierra y la cobertura plástica
que lo impermeabiliza (S/2.50 el metro
cuadrado). La instalación y capacitación de los agricultores corre por
cuenta del INIA, debiendo asegurarse
alojamiento para sus técnicos.
Pero, no obstante sus bajos costos, no
habría forma de acceder a esta novedosa
tecnología sin alguna forma de financiamiento. Si no hay crédito para producir, ¿cómo hacer que este sistema de
riego sencillo y barato sea accesible a
los pequeños agricultores?
La cuestión se la plantean, incluso,
muchos medianos y grandes empresarios que conociendo las ventajas del
riego tecnificado todavía no lo usan. Un
estudio de Martha Huamán de ITDG, en
el valle de Ica donde la mayor parte de
los agricultores utilizan las costosas
• La superficie agrícola del Perú es de
5´891 mil hás, de ese total el 70% es
cultivada en secano.
• El 50% de la superficie agrícola bajo
riego (877 mil Hás) es regada exclusivamente con agua que proviene de
ríos, y sólo el 7.7% (134,793 Hás) utiliza agua de reservorios. Casi la cuarta parte de las unidades agropecuarias
con tierras bajo riego se abastecen
exclusivamente de manantiales o
puquiales.
• 82% de las unidades agropecuarias,
que incluye el 79.1% de la superficie
agrícola bajo riego, posee canales sin
ningún revestimiento. Apenas 5,682
unidades agropecuarias del país tienen
la totalidad de canales o acequias
revestidas.
• 97.4% de las unidades agropecuarias
con tierras irrigadas lo hacen exclusivamente por gravedad.
aguas de subsuelo, revela que la razón
del poco extendido riego por goteo en
esta zona se debe a la falta financiamiento. Los exiguos recursos que
recibe el INIA del Tesoro tampoco permite instalar el sistema a crédito, todo
tiene que ser mediante pago al contado,
aunque sólo se trate de cubrir el costo
de los materiales.
Frente a ello, el Instituto ha propuesto
crear un fondo especial destinado a
financiar la instalación del sistema en
100 mil hectáreas por año. La meta es
tecnificar el riego de un millón de hectáreas en 10 años. Para el financiamiento del programa durante los tres
primeros años se requieren 750 millones de soles a razón de 250 millones
por año, unos 75 millones de dólares.
La idea es que este fondo opere bajo el
sistema rotatorio a través de créditos
pagaderos en tres años.
La propuesta ha sido canalizada al
gobierno a través del Ministro Belisario
De las Casas, quien ha anunciado que,
para poder cristalizarla, se deberán
tocar las puertas de la cooperación
internacional. De cualquier modo, la
iniciativa debe tomarla el Estado a
través de un fondo semilla y de mecanismos que incentiven la asociación entre
grupos de agricultores para aprovechar
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JULIO
de
1999
Fuente: III CENAGRO, 1994.
economías de escala, en la construcción
de reservorios, por ejemplo, como lo
estarían pensando los campesinos de
Huayopampa en las alturas de Huaral,
según informa el Ing. Luis Chumbiauca
de la Estación Donoso, y para la realización de programas de capacitación.
Con el diseño del sistema de riego INIA
se ha dado el primer paso. Aún falta
mucho por hacer. z
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