Fernando Guerrero, Ex Alcalde de Riobamba

Transcripción

Fernando Guerrero, Ex Alcalde de Riobamba
Fernando Guerrero, Ex Alcalde de Riobamba
“SALÍ A BUSCAR TRABAJO”
Con una mezcla de frustraciones y satisfacciones, se
despidió Fernando Guerrero de su gestión como Alcalde de
Riobamba, se reservó anticipar un futuro político, sabía que
su familia lo necesitaba y dijo, sin vergüenza alguna, que
luego de que cumplió su mandato como burgomaestre de la
ciudad, salió a buscar trabajo pues se reconoció como un
ciudadano sin bienes, inversiones o negocios. Esperaba
empezar a escribir sus memorias.
Se sintió orgulloso de que en su administración se logró la delimitación del centro histórico
de la ciudad, la implementación de dos mercados como el San Pedro de Riobamba y La
Condamine, el rescatar el patrimonio histórico con obras como la Casa Museo y aquella
donde funciona las oficinas de Planificación del cabildo y el mejoramiento del Cementerio
local.
Reconoce que se equivocó en la elección de sus colaboradores en algunas áreas del
municipio, en especial en Obras Públicas, lo que terminó dificultando su gestión y
demorando el desarrollo del cronograma de obras.
Cumplió los últimos meses un encargo como titular de la Asociación de Municipalidades
del Ecuador, gestión que la recuerda como valiosa en la acumulación de experiencia.
¿Qué frustración queda luego de cuatro años de gestión?
“El no poder satisfacer plenamente la falta del agua potable en la ciudad, apenas inicié un
proceso de mejoramiento del sistema con relación a la reposición de la conducción del
agua que consumimos los riobambeños que llega de San Pablo y Llío, es un logro pero la
propuesta de mejoramiento total y a futuro no se pudo hacer”
¿Por qué no se pudo hacer?
“Cuando llegué a la alcaldía nadie quería prestar al cabildo para un programa de
mejoramiento del sistema de agua potable, el Banco del Estado así lo certificó, luego se
presentó un problema local de ubicación del proyecto que llevó tiempo, un poco más de
un año y ocasionó gasto de recursos, sin embargo la Secretaría Nacional de Planificación
calificó de viable el proyecto de Alao, autorizando al cabildo buscar un préstamo para la
ejecución y aquello es bueno”
¿Cómo inició su tarea administrativa dentro del cabildo?
En un ambiente extraño, fui alcalde hace treinta años y las cosas eran diferentes, se salía
de una crisis económica nacional, al principio fue difícil organizar la parte administrativa
del cabildo, entre otras cosas porque los sueldos de los empleados son bajos y es difícil
lograr que buenos profesionales colaboren, percibiendo esas remuneraciones que no son
justas”
¿La relación obrero patronal cómo se desarrolló?
“Bastante buena, se tuvo apenas un problema que se manejó en derecho y negociando,
no tuve que afrontar ninguna huelga, reconozco la comprensión de los trabajadores, que
entendieron que el cabildo es una entidad pública con problemas económicos, ellos
reconocen que ningún alcalde les apoyó con una obra significativa como la sede social
con la que hoy cuentan”
¿Cómo se cumplió el trabajo dentro del concejo municipal?
“La mayor parte del tiempo se trabajó en equipo, en un espacio corto, funcionó una
resistencia, nunca hablé de mayoría ni minoría, en un momento tuve problemas con
coidearios lo que me pareció especial, el daño no era para mí sino para la ciudad y
respondía a intereses personales”
¿Hubo forma de transparentar la contratación pública dentro del municipio?
“Cada contrato es un dolor de cabeza, siempre se dice que hay direccionamiento, no
privilegié a nadie en particular, di contrato sin conocer a personas según el registro de los
profesionales habilitados, en lo que a mí me compete, puedo asegurar que desconocía en
muchas ocasionas a quien entregaba la obra, no falta la presión del concejal que sugiere
un profesional tal, así como del amigo que pide trabajo, mi administración, las que
vinieron, y las que vendrán actuarán igual, nunca tuve un equipo de contratistas
privilegiados”
¿Por qué se cuestiona lo actuado por el municipio luego de la explosión del 20 de
noviembre?
“En base de decretos de emergencia, donde no se puede esperar, se estableció en Quito
en la Presidencia de la República, con el ministro de estado, se pidió armar una instancia
que debía tener un nombre que le llamaron Unidad Técnica de Emergencia eso es lo que
se resolvió en Quito con la participación de Fuerzas Armadas, Ministerio de Vivienda y el
Municipio de Riobamba”
“Los militares entregaban un número de oficiales que fueron destinados a la fiscalización
de la obra, que se contrataba a través de la Unidad Técnica de Emergencia, según el
decreto, no puedo emitir criterios sobre cuál fue el comportamiento de los fiscalizadores,
contratistas y funcionarios, de lo que sé es que Contraloría no encontró malos manejos
económicos sino falencias administrativas”
¿Es tan difícil hacerlo?
“Mandamos hacer un proyecto para reubicar a esos comerciantes, previa conversación
con ellos, se buscó el financiamiento para que compren su espacio, era un traslado que
costaba 400 mil dólares a la vía inutilizada en el costado derecho de la Avda. Unidad
Nacional entre la calle Carabobo y Avda. Miguel Ángel León”.
¿Qué hizo después de terminar su periodo en la alcaldía?
“Busqué trabajo en la ciudad en mi profesión, abrí un estudio profesional, mantengo una
familia de algunos miembros jóvenes también tuve ofertas para dar una horas de clases,
soy político.”
TAMBIEN DIJO...
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“La palabrita emergencia es la solución para la mañana, pero es una mentira, ese
término ahorra un corto plazo pero por lo demás todos los procedimientos
siguen igual”
“He sido sobre estante, apuntando los problemas de la ciudad para trasladar los
problemas el día lunes”
“Tuve problemas en el entorno político que me desenvolví, tampoco hice lo debido
a tiempo y deje pasar, estuvieron personas que no rindieron lo que esperaba...”
“La gente veía más trabajadores municipales pero era personal tercerizado como
el caso de la limpieza y la seguridad”
“Yo no dejé ningún contrato y peor nombramientos de última hora”
“Hubo un 30% de obras que no se inauguraron, no estuve en plan demagógico ni
político, nunca pretendí la reelección”
“En el país somos ligeros para decir las cosas, tuve que verme obligado a seguir
acciones penales contra algunas personas que me calumniaron”

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