1 “La confesión de un ladrón”, en Brunel, Ghislain y Élisabeth Lalou
Transcripción
1 “La confesión de un ladrón”, en Brunel, Ghislain y Élisabeth Lalou
“La confesión de un ladrón”, en Brunel, Ghislain y Élisabeth Lalou (dirs.), Sources d’histoire médiévale, París, Larousse, 1992, pp. 746-747. 27 de abril de 1319 Año de gracia 1319, el viernes después de San Marcos, en presencia de mi señor Jean Robert, Gaucher de Châtillon, B. de Roquenegate, Jean Morel, caballero, maestro Guy de Montaigu y maestro Etienne de Giem, clérigos del rey nuestro señor, y de muchos otros, Perrot de Tournai, sirviente de Guillaume de Clermont, confesó voluntariamente que Guillaume de Clermont, él mismo, Pasquin y Jean Vulpes fueron a Saint-Germain-des-Prés y llevaron alrededor de 30 marcos de plata, así como siete copas de ágata, una copa de plata y las patas de plata de las copas. Confesó que Guillot de Clermont llevaba la vajilla a Troyes, sin saber a quién, y las copas y las patas de plata a Tournai a la casa de mi señor, Guillaume de Chambord, sacerdote, vicario de la gran iglesia. Confesó que él mismo, Guillaume de Clermont, Pasquin y Jean Vulpes entraron en el hotel de mi señor Milon de Noyers y Guillaume entró en la bouteillerie y tomó 16 copas de plata., 3 ollas grandes de plata, un aguamanil1, un recipiente para limosnas, un plato grande de plata y un vaso de plata. Tomaron todo y lo llevaron a casa de Pasquin, y Guillaume lo llevó enseguida a Tournai, pero el no sabía a casa de quién; excepto por las dos ollas que el dejó en casa de aquel que aquí habla, donde fueron encontradas. Y dijo que habían tomado una escalera en Tuileries, con la cual habían entrado en la casa de Miles de Noyers y que la habían dejado en Saint-Germain-des Prés. Confesó que él mismo, Guillaume de Clermont, Pasquin y Jean Vulpes fueron al hotel de mi señor el canciller2, rompieron una ventana y Guillaume entró en la bouteillerie y tomó 20 copas de plata; el que aquí habla y Pasquin fueron a enterrarlas a las afueras de Saint-Victor y tres días después, fueron a desenterrarlas y Guillot las llevó a Tournai, como Perrot ha dicho anteriormente. Dijo que el mismo, Guillaume de Clermont, Perrot de Montferrand, orfebres, y Guillemot de Singongnes, escudero de Engournes, fueron a Lyon, hacia la Toussaint. Entraron en la casa de los jacobinos, rompieron un ventana que daba a una pieza fortificada, y 1 2 Pila para lavarse las manos. El canciller era entonces Pierre de Chappes. 1 Guillaume la rompió con una barra gruesa de fierro que había mandado a hacer. Tomó 4 copas, 6 copas de plata y piezas de plata, todo valía alrededor de 200 libras, y Guillot entregó a aquel que habla y a cada uno de los otros 21 florines de Florencia por su parte y guardó el resto. Confesó que fue con Guillot de Clermont, Pasquin y Jean Vulpes a Saint-Matelin de París, rompieron las ventanas pero no encontraron nada interesante. Fueron con Guillaume de Clermont, Perrot de Montferrant y Guillemet de Singoingnes en el mes de septiembre a Grenoble, en la tierra de Dauphin de Viena, entraron en la noche a la casa de un especiero de quien ignora el nombre y tomó alrededor de 35 libras torneadas en plata. Confesó que fue con Guillaume de Clermont y Guillemet de Singsoingnes a Valencia, entraron en la casa de los jacobinos, hace alrededor de 3 años, y robaron el valor de 600 libras en vajillas de plata, a saber en copas y otros utensilios de plata. De este robo, ganó 15 florines de Florencia. 2