Noviembre 2010 - IES Miraya del Mar

Transcripción

Noviembre 2010 - IES Miraya del Mar
AURORA BOREAL
REVISTA DE PENSAMIENTO DEL IES MIRAYA DEL MAR DE TORRE DEL MAR
TOD@S CONTRA EL MALTRATO
NÚMERO 37, NOVIEMBRE 2010
Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Contenido
A modo de editorial… ............................................................................................................................... 2
Una caja de colores ................................................................................................................................... 3
Profundos terrores ................................................................................................................................... 4
Diario de viaje ........................................................................................................................................... 5
Dame un beso ........................................................................................................................................... 8
Nueva Ortografía para el 2010 ................................................................................................................. 9
Por ellos ..................................................................................................................................................11
Es sólo cuestión de paciencia .................................................................................................................12
Recomendación Musical: Locura de amor .............................................................................................13
La vi ......................................................................................................................................................... 17
Sakineh ...................................................................................................................................................18
A MI MUSA .............................................................................................................................................19
… :) ..........................................................................................................................................................21
Algo incontrolable… ................................................................................................................................22
Pastillas contra el dolor ajeno ................................................................................................................23
Recomendación Cinematográfica: Una vida de amor ............................................................................25
En un día ................................................................................................................................................. 27
DÍA INTERNACIONAL DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO ................................. ¡Error! Marcador no definido.
Consejo de Redacción:
Antonio Caparrós, Juan Carlos Gámez, José Romero Guerrero
Portada: Antonio Gallero
Contraportada: Lidia
Editora: IES “Miraya del Mar”, de Torre del Mar.
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
A modo de editorial…
Saludos cordiales. Ya estamos de nuevo en vuestras manos. En el momento de
redactar este “A modo de editorial” acaba de entrar el frío polar que nos anunciaron los
meteorólogos, llueve a cántaros y estamos con la estufita. Bueno, ya toca.
El huerto está, como siempre, esplendoroso: cebolletas, lechugas de varios tipos,
coles. Días pasados tuvimos ocasión de saborear buenas batatas o boniatos (creemos
que son sinónimos). Estamos convencidos de que si nos hiciéramos vegetarianos todos
los que convivimos en el instituto. y con ganas de trabajar la tierra, tendríamos en el
huerto una buena fuente de alimentación de calidad, ¿no os parece?
Con el frío, se aproximan tiempos de roscos, mantecados, cabalgatas, y lo peor:
exámenes. A ver qué tal sale la cosa. Nosotros os deseamos suerte, como siempre.
Seguro que lo conseguís… sólo trabajando un poquito todos los días…
Por último, nuestras más sinceras felicitaciones a todas las personas implicadas en
los actos relacionados con el “Día Internacional Contra la Violencia de Género”. Nos
parece que nunca está de más trabajar para crear conciencia de que el respeto entre los
miembros de la especie humana es cosa de los miembros de este conjunto: hombres y
mujeres.
Salud, alegría y libertad.
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Una caja de colores
Parece ayer cuando creíamos ser normales, cuando soñar era algo raro ya que todo se
hacía realidad. Cuanto daría por volver, me llevaría una goma y borraría tantas cosas en
el camino, casi todo se quedaría blanco dispuesto a que aparezca alguien y lo dibuje de
nuevo, con cosas que nos guste recordar, con colores vivos. No sé cómo llegué hasta aquí
pero sé que nadie me trajo, fue el camino que yo quise hacer, los pasos que yo quise dar,
aunque muchos fuesen equivocados, di muchas zancadas dejando tanto sin dibujar,
simplemente para encontrar la más mínima tontería. Pocas veces tenemos ganas de
recordar los colores oscuros, las personas que estuvieron a nuestra vera en esos túneles
oscuros donde ver la luz era imposible, ¿qué son de ellas?, de todas las que dejamos
marchar, y tantas que quedaron en el olvido.
Cristina Milia
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Profundos terrores
Cuan lejano es el día,
en el que decida,
confesarte mis más
profundos terrores.
Este sentir hiela mi corazón,
sometiéndolo a la oscuridad eterna,
desgarrando mis entrañas,
como si puñales de veneno fueran.
Desvanezco al pensar, que jamás sabrás
lo que puedo llegar a dar por ti,
¡te quiero! Sí, pero en silencio...
Dime, cuéntame
qué magia tienes en mí,
princesa de las princesas,
que con sólo mirarme
ya entiendo el poder del amor
Aunque yo la sé, ¡dímelo!:
La magia del amor
Dulzura sin límites
Luna intangible,
rosa deseable mas inalcanzable.
Estrella imposible,
clavel brillante mas impensable.
Dulzura sin límites,
belleza incontrolable,
pasión visible;
pero intocable...
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Poeta Desconocido
Diario de viaje
Llegué a Estambul con el ánimo al mismo nivel que lo que la ciudad podía
ofrecerme. Había oído hablar de ella, el estandarte turco y emblema de la unión y la
tolerancia entre Asia y Europa; de la Antigua Constantinopla, el legado de los romanos
más allá de la Edad Antigua; de aquel peculiar país que formaba parte de dos
continentes...
Pero nada de eso me atraía. Arrastrado allí por una cuestión de trabajo de la que
no veía llegar el día en que fuera liquidada, deambulé por calles repletas de
muchedumbre, mezquitas de largos minaretes plateados y bazares infectados de
hombres sudorosos y malolientes. Al ritmo de mi I-Pod, esquivé expertos regateadores
ambulantes y temerarios conductores de todo tipo de vehículos... ¿Dónde coño se
sacaban el carnet allí?
Me animé a entrar en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad, la
Mezquita de Santa Sofía; pero la experiencia no hizo más que aumentar mi
aborrecimiento hacia aquel país, ante la plaga de turistas y vomitivo olor a pies contra
los que tuve que luchar. Además, no soportaba aquella muestra de sexismo... ¿Por qué
yo sí podía enseñar las piernas y aquella mujer no, teniendo yo más pelo y siendo más
feo para la vista y la higiene?
Llegué a divisar a un autóctono a lo lejos, haciendo juegos de manos con la
cartera de un hombre acompañado por dos niñas pequeñas... Antes de que pudiera dar
aviso alguno, ya había desaparecido.
Ah... no. Definitivamente, aquello era demasiado para mí.
Hastiado ya de calores y apretujamientos, con la batería de mi I-Pod en las últimas
y la chaqueta prácticamente empapada, me senté en una especie de parquecillo alejado
del centro turístico: una plazoleta ajardinada en la que las palomas se daban besos de
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
presentación al tiempo que volaban y volvían a aterrizar para conocerse otra vez... unas
veces al ritmo de las migas que una escuálida niña les tiraba, otras no...
Me aflojé la corbata y suspiré... Aquello era lo malo de mi trabajo: estaba
enormemente bien pagado, pero cuando me tocaba viajar a un incivilizado lugar como
aquel... Aunque bueno, luego la frescura de mi apartamento siempre me sacaba de mis
cavilaciones laborales...
Pero aquello no era mi apartamento. Yo era un reptil al mediodía y en pleno
desierto, aletargado por la temperatura, rendido, vencido...
[…]
Cuando volví a abrir los ojos, mi primera sensación fue de sorpresa. Una figura
ante mí me protegía parcialmente del sol; y en fracciones de segundo me pregunté qué
desearía de mí... ¿Algún otro cuatrero con ganas de sacar tajada? Ah, no. Eso a mí, no...
Pero en las mismas fracciones de segundo en las que pensé aquello, me di cuenta
de que la figura que me contemplaba era femenina... Estaba vestida con una especie de
largo manto y llevaba un pañuelo sobre la cabeza; no, no era un burka, era un pañuelo
puesto de tal manera... que sólo dejaba ver sus ojos.
Al percatarse la figura de que el espécimen al que observaba se estaba
despertando, huyó corriendo y se perdió por un callejón cercano...
Yo todavía tenía grabados en la mente aquellos ojos, enmarcados por telas azules,
que me miraban con curiosidad... con luz...
...con extrañeza...
...con cariño...
...con amor.
El tiempo, que se había parado para mí, volvía a su curso normal... La imagen de
aquellos ojos se fue diluyendo... hasta convertirse en la cara de la chiquilla escuálida que
alimentaba palomas, que miraba ahora a aquel hombre de occidente de, supuse,
apariencia sospechosa, desagradable y conmovedora a la vez. La pequeña,
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Número 37, Noviembre 2010
sorprendentemente, se acercó hacia mí, me tendió la mano y me ofreció sus migas de
pan, como si yo fuese entonces el más desdichado de sus pájaros...
[…]
Y aún hoy me ataca por las noches el recuerdo de aquellos ojos que me
enamoraron... Y me vigilan por el día esos dos portales de infinita belleza...
Muchas son las veces que he visitado Estambul... Bueno, llevo ya quince años
viviendo en esta ciudad...
La he recorrido mil veces, pasé días, noches, navidades y cumpleaños en la plaza
de las palomas, pregunté, interrogué y removí cielo y tierra de dos continentes
distintos... de todo Estambul...
Pero no volví a verlos.
Y aún hoy, sesenta años después, me visitan los mismos ojos que un día me
hechizaron, enmarcados por el mismo velo...
Velo que espero poder, pronto, retirar...
Para que me muestre aquello que siempre he amado...
Pero nunca he visto.
Un pollo más
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Dame un beso
¿Qué es lo que ocurrió contigo amigo, qué es lo que pasa por tu mente? ¿Qué fue de
esos cálidos abrazos que a diario tú le dabas, esos piropos que uno tras otro le soltabas, esos
besos que con amor y con ternura siempre le dabas, qué fue? Nunca te gustaron las peleas mas
ahora juegas a ser boxeador, y ella interpreta el papel de saco de arena. Te has convertido en un
verdugo que realiza su trabajo a medias, porque tus golpes merman en su vida, pero jamás
llegan a mostrarle qué es la muerte, sinónimo de libertad para una vida que creyó conocer el
amor por un instante, alivio para alguien que conoció el infierno en vida aunque quizás tuviese
el cielo ya ganado.
¿Qué has hecho amigo? ¿Por qué su cuerpo inerte no responde ya a tus “caricias”? ¿Por
qué esos ojos se han cerrado para siempre? ¿Para así jamás volverte a suplicar? ¿Dime amigo,
cuál es la razón de que sientas que te oprimen tan fuertemente el pecho? ¿Acaso sientes
tristeza? ¿La amabas de verdad? Ahora que por fin te das cuenta, ya es demasiado tarde para
recapacitar.
Con el tiempo uno se da cuenta, sólo con el tiempo, pero entenderás que pedir perdón o
decir te amo, de nada sirve a los pies de una tumba.
Dame un beso, haz que el dolor se esfume.
Que la vida me sonría, que la luz me ilumine.
Dame un beso, inventando de esta forma la perfección de un fugaz instante,
Demostrando al azar que de él no dependes.
Dame un beso, y que el roce de tus labios con los míos se convierta en la más tierna caricia, y
que la miel de tu boca endulce así mi vida.
Dame un beso, y que nos envuelvan los suspiros en este momento de silencio, que desaparezca
el mundo unos segundos… que se pare el tiempo.
Dame un beso, haz que la felicidad llame a mi puerta, y la esperanza surja en mi interior…
Dame un beso, haz que este corazón vuelva a latir, dame un beso, tú que puedes, haz que la
muerte se aleje de mí, dame un beso, ya la veo, ya está aquí, por favor, dame un beso, que me
voy princesa… a dormir.
Ever Algarin
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Nueva Ortografía para el 2010
Las Reales Academias de la Lengua Española en conjunción (relativas a
Sudamérica y la Península) han acordado presentar, para finales del presente año, la
Nueva Ortografía, edición que no se modificaba desde 1999. Ésta se ha hecho, en las
propias palabras de la RAE, en base a un “consenso de las Academias sobre la necesidad
de simplificar su texto, de incluir mayor número de ejemplos y de darle una orientación
más pedagógica.”
Para la nombrada Nueva Ortografía, que será presentada el 28 de noviembre en la
Feria del Libro de Guadalajara, se han propuesto los siguientes cambios (que seguro
alegrarán a jóvenes olvidadizos y disgustarán a mayores cultivados):
1. La 'ch' y la 'll' se eliminarían del alfabeto castellano, habiendo sido consideradas
hasta ahora como signos ortográficos de dos letras.
2. La 'y' dejaría de llamarse 'i griega', lo correcto sería decir 'ye'. Debido a éste
cambio, la 'i' sería nombrada como tal y no como 'i latina'.
3. Los monosílabos que tengan diptongo perderían la tilde, de tal manera que
palabras como 'guión, truhán, lió, fié' se escribirían como 'guion, truhan, lio, fie'.
4. La “o diacrítica” se eliminaría, debido a la improbabilidad de que la confusión con
la 'o' entre cifras se produzca en la nueva era informática. Ahora se escribiría 4 o 5
en vez de 4 ó 5.
5. El prefijo ex- se escribiría junto a la palabra con la que va, excepto si son más de
una. Se escribiría exmujer y ex policía local.
6. Palabras como Iraq o Qatar deberían ser escritas con K o con C según convenga. Si
se desean escribir en la forma original, se harían como extranjerismos, es decir, en
cursiva. Irak, Catar. Iraq, Qatar.
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
7. Las tildes de éste, ése, aquél serían suprimidas definitivamente, puesto que la
Academia las ve como innecesarias y sólo se dejarían de ver como error en casos
de muy extraña ambigüedad.
8. La tilde diacrítica de 'sólo, solo' sería eliminada y el adverbio y el adjetivo se
escribirán de igual manera, aun con la existencia de posibles confusiones.
Existen algunos cambios más, pero siendo sólo influyentes para el idioma latino
no están aquí presentes.
¿Qué te parece? ¿Lo ves positivo o negativo respecto a la ortografía vigente? ¿Una
dificultad o una comodidad? ¿Crees que se está errando en alguna de las propuestas?
¿Es correcto eliminar la 'o diacrítica' por el hecho de la “tecnologización” de la Lengua,
aun a pesar de posibles problemas con fuentes (tipos de letra en los ordenadores) o con
la misma lengua escrita a mano? ¿Se consigue algo con la desaparición de la tilde en el
adverbio sólo?
Yo solo te lo presento. El resto es opinión tuya.
Un pollo más
( Fuentes consultadas:
−
www.rae.es
−
www.elcastellano.org
− www.eltiempo.com )
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Por ellos
Ellos son las únicas personas de este frío y oscuro mundo con las que me gusta
estar, las únicas personas con las que comparto alegrías, emociones, tristezas, llantos,
un millón de sentimientos a la vez, con las únicas personas con las que no me puedo
enfadar, los únicos que mejor me animan y que cuando más los necesito siempre
están, como en uno de esos días en los que no creí volver a ver la luz del sol… un nuevo
amanecer uno de esos días en los que no te quieres volver a despertar, uno de esos
días en los que quieres esconderte y que nadie venga a por ti, ellas siempre sé que
estarán , ellos en los que más puedo confiar, que mis secretos ya no se llamen secretos
y ellos lo sepan, ellos que con su calor te vuelven a hacer sentir cuando te creías
desensibilizada a volver a ver la luz del sol, que cuando creías que ya no quedaba
nada, ellos te lo traen todo, ellos que siempre te apoyan te pase lo que te pase, ellos son
así, ellos siempre están a mi lado, siempre me sacan una sonrisa cuando mis lágrimas
me nublan la mirada, ellos los que siempre me entienden, ellos como una brisa de aire
que pasó de nuevo por mi alma para que yo volviera a sentir.
Por ellos, que siempre me hacen reír, por ellos que siempre creyeron en mí, por
ellos y porque gracias a ellos sigo aquí.
Gracias por una amistad que no traiciona… (L)
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Rida Eskeif
Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Es sólo cuestión de paciencia
Las peores cárceles son aquellas cuyos barrotes los forman los recuerdos,
donde el pasado cierra la puerta con llave y la esconde en algún momento del
futuro. Y allí me encontraba yo, con la simple compañía de una pluma, tinta y
papel en el que plasmar y así arrancar de mí esos recuerdos que me atrapaban.
Por más que escribo los sucesos se acumulan y el dolor no desaparece, el
futuro vacío de alegrías se convierte en oscuro pasado, mi tinta se acabó y las
historias, que ocultan mis memorias acabaron escritas con sangre, y mi alma
hecha despojos, desarmándose, va soltando pedazos en cada una de ellas.
Un diminuto color de esperanza en una esquina de estas cuatro paredes
me recuerda que esa llave sigue ahí en algún momento de mi vida, que alguien
la tiene y solo he de esperar a que un día me encuentre, me conozca a partir de
cada trozo de alma en mis relatos, a que vea mi interior y sepa calmar mi
sufrimiento dándome la libertad....
Solo tengo que esperar a que la luz ilumine la estancia en la que
permanece este corazón, apartando de él la oscuridad.
Ever Algarin
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Recomendación Musical: Locura de amor
Gaetano Donizetti
Lucia de Lammermoor
Acto II, Escena segunda (Escena de la locura)
Aria "Il dolce suono" (Aria de la locura)
Música Clásica, Ópera
(The Fifth Element's Soundtrack [Track 14 – Inva Mula Tchako])
¡La mente humana! Esa entidad tan maravillosa como incomprensible que configura
nuestra forma de ser, de pensar y de relacionarnos con el mundo. Algo tan perfecto e intrincado
que, cuando falla en ella la más mínima pieza, cae detrás todo el mecanismo y comienzan a
aparecer las enfermedades mentales y psicológicas. La rotura de éste frágil y delicado equilibrio
del intelecto es lo que conocemos como la locura, una transformación permanente o temporal
de la realidad, o al menos, de la realidad común que todos los seres humanos experimentamos.
Uno de los ejemplos más bellos que se han hecho sobre la locura en el arte de la música
lo concibió Gaetano Donizetti, un compositor romántico italiano del siglo XIX, en una de sus
óperas más famosas: Lucia di Lammermoor. La obra está basada en la novela contemporánea
The Bride of Lammermoor, de Walter Scott; cuyo argumento, similar al de la ópera, es el
siguiente:
Alrededor del año 1650, se ha producido en Escocia la lucha entre dos familias nobles.
Lucia pertenece a una de ellas y es la hermana de Enrico, el señor del castillo y jefe de su linaje.
Ella está enamorada de Edgardo, último superviviente de la segunda familia, completamente
derrotada. El amor que hay entre los dos es inconmensurable; tanto, que él piensa hacer las
paces con el hermano de Lucia, a pesar de todas las muertes acaecidas anteriormente por su
culpa, para poder casarse con ella. Como símbolo de sus intenciones y su pasión, se
intercambian los anillos antes de partir Edgardo hacia Francia por unas terminantes razones
políticas. Enrico, que se enterará del romance, hará de todo su odio lo posible por terminar la
relación entre Lucia y su prometido; no sólo por razones afectivas, sino porque está interesado
en casar a su hermana con Arturo, un influyente personaje de la nobleza con el que podrá
asegurar la precaria situación familiar tras la guerra. Para conseguirlo, escribe una carta
(suplantando a Edgardo) que prueba que éste la ha olvidado y que tiene un nuevo amor. Ella,
apesadumbrada, lo cree: al fin y al cabo, es su hermano.
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Es aquí donde comenzará su ineluctable caída hacia la locura. En la organización final de la boda,
Edgardo, completamente ajeno a lo ocurrido, se presenta en el castillo justo después de la firma
del contrato nupcial, realizada por una Lucia desesperada, apática e intensamente presionada
por su hermano. El amante, tras ver la rúbrica, se encoleriza totalmente y, indignado, le arrebata
los anillos a Lucia y los arroja, maldiciéndola; antes de ser obligado a salir por los presentes,
todos aliados de la familia de Enrico. La joven, en pleno choque emocional, se desespera viendo
cómo su amor, que la seguía queriendo realmente, se le escapa de forma inevitable. Un
implacable paso más hacia su demencia.
Poco después, Enrico, seguro de su poder y de la debilidad de Edgardo, lo visita para retarlo a un
duelo, a la vez que lo informa, cruelmente, de que Lucia yace disfrutando de su noche de bodas.
El despechado, ya sin nada que perder, acepta el duelo. Al mismo tiempo, algo está ocurriendo
en el castillo de Enrico. Un favorito de éste interrumpe alterado las celebraciones de la boda,
anunciando la calamidad: Lucia, completamente
perturbada, ha matado a su recién esposo en el
mismísimo lecho. Es aquí cuando se produce la
escena acompañada por tan bella música, justo
cuando, después de esto, Lucia entra en la
habitación.
Comprenderá el lector la situación de la
protagonista, con tal intenso amor como el que
sentía completamente roto, con un perverso
hermano al que poco le importa, condenada a vivir
con un hombre al que no quiere... Debido al
desequilibrio que todo ésto le produce, Lucia pierde
la cordura definitivamente y hace acto de
presencia, con las propias palabras de Donizetti en
la acotación, de la siguiente manera:
"Entra Lucía vestida con una bata blanca. Lleva suelta la cabellera. Su rostro, cubierto de una
mortal palidez, más le asemeja a un espectro que a un ser viviente. Su mirada, petrificada, sus
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gestos convulsivos y una sutil sonrisa de mal agüero ponen de manifiesto, no sólo su espantosa
demencia, sino también los signos de una vida que se dirige a su fin."
Aparece pues la joven, con su vestido blanco manchado de sangre y cuchillo en mano, en
su mundo de locas ensoñaciones, caminando etérea y frágilmente, sisando el aire con el puñal
para peligro de los invitados, a merced de sus apasionados balanceos; y al grito de “¡Oh, justo
cielo! ¡Parece recién salida de la tumba!” de los invitados, comienza a cantar, creyendo haber
oído en el agudo de una flauta (bellisimamente frágil en el comienzo de la obra) la voz de su
amado. La letra que entona entonces, reflejo de la razón de su locura y de los verdaderos
anhelos de su quebrada alma, es, junto a la música, una perfecta representación del frágil
estado de la chica, de su amor, del fondo de demencia que impregna sus palabras... Es muy
hermoso imaginarla (y verla) sentada en el suelo, con la daga enhiesta, hablando y amando al
aire en el lugar donde debiera estar su amado y acompañada por la delicada orquesta. Sus
palabras, en el comentado fragmento inicial de su lamento, dicen así:
Il dolce suono
mi colpì di sua voce!... Ah, quella voce
m’è qui nel cor discesa!...
Edgardo! Io ti son resa;
Edgardo! Ah! Edgardo mio!
Sì, ti son resa!
Fuggita io son da' tuoi nemici.
Un gelo mi serpeggia nel sen!
Trema ogni fibra... Vacilla il piè!...
Presso la fonte, meco t’assidi alquanto...
Sì, presso la fonte. meco t’assidi...
¡El dulce sonido
me llena de su voz!... ¡Ah, esa voz
que desciende a mi corazón!...
¡Edgardo! Soy tuya;
¡Edgardo! ¡Ah! ¡Edgardo mío!
¡Sí, soy tuya!
He escapado de tus enemigos.
¡Un frío temblor recorre mi pecho!
Tiemblan todas mis fibras. ¡Mi pie se tambalea!
Junto a la fuente, siéntate conmigo un poco...
Sí, junto a la fuente, siéntate conmigo…
Al final de la escena, Lucia sufre un colapso: un desmayo que la lleva a la muerte. Enrico,
que ha presenciado ésta junto a la demencia de su hermana, acude al duelo acordado.
Edgardo quería dejarse matar por él, puesto que su vida había perdido el sentido tras la
falsa infidelidad sentimental de Lucia; pero al enterarse del fallecimiento de ésta al
comienzo del duelo, se clava su propio puñal en el corazón: “¡Ah! Si la ira de los mortales
nos hace tan cruel guerra, si separados vivimos en la tierra, que Dios nos una en el
cielo... Yo te sigo. A ti acudo, ¡oh, alma hermosa! Mira al que te ha sido fiel. ¡Oh, alma
hermosa enamorada! ¡Que Dios nos una en el cielo!” son sus últimas palabras antes de
morir.
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Esta breve y desoladora aria es muy conocida entre los amantes de la música
clásica. Ha sido usada en algunas películas, destacando la versión presente en El Quinto
Elemento (una cinta muy divertida
de acción y romance futuristas que también
recomiendo, con una banda sonora preciosa), en una escena en la que una diva del
futuro interpreta la pieza y la termina con una sorprendente versión eléctrica, de
impracticable (pero sorprendentemente conseguida) realización para la cantante.
La canción fue interpretada en la película por Inva Mula Tchako, una soprano albanesa
que la dota de una increíble fragilidad e, incluso, de una suerte de magia. Por eso te
recomiendo justamente esta versión. Acércate pues a tu ordenador, escribe “Inva Mula
Tchako - Il Dolce Suono” en Youtube, ponte unos buenos cascos (pues con auriculares, la
música se siente muchísimo más) y cierra los ojos, imaginándote la escena y dejándote
llevar por ella y por su sentimiento de amor. Y, si quieres cambiar de chip, maravíllate
después con la continuación futurista y la asombrosa ejecución de la soprano. Toda una
delicia.
Un pollo más
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
La vi
La vi cómo te miraba al pasar
La vi cómo suspiraba por un beso tuyo
La vi enamorarse de ti poco a poco
La vi quererte con locura
La vi entusiasmada preparando su boda
La vi volver de su luna de miel con su “flamante esposo”
La vi feliz esperando su primer bebé
Pero un día…
La vi baja de ánimos,
La vi con un hematoma en el costado, debido a una caída en la ducha
La vi más delgada porque se siente gorda con una “38”
La vi más arrugada porque su sano y lindo bebé de 8 meses le da muchas
“preocupaciones”
La vi con unos harapos puestos y unas bolsas de Lacoste para ti
La vi con toda la cara golpeada porque le habían asaltado unos “rateros”
La vi yendo a urgencias con un corte profundo en el brazo por estar distraída mientras
“cocinaba”
La vi…
La vi morir en mis brazos y vi su alma elevarse hacia el cielo
Sí, TODO gracias a ti.
P. Sayona
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Sakineh
La casta político-sacerdotal que determina quién merece vivir y quién no en Irán
ha puesto fecha, según las agencias de noticias internacionales, a una de sus víctimas:
Sakineh Ashtiani. La acusación: adulterio y participación en la muerte de su marido.
Ideología religiosa de la que extraen tal decisión definitiva: la versión chiíta del Corán.
Probablemente quienes creen ver el sentido de la existencia en el citado libro
argumentarán que en la vanguardia de la “avanzada” civilización occidental, EEUU,
también se mata y no se provoca tanto ruido. Y llevarán razón quienes así piensen y
argumenten. Incluso cabe la posibilidad de que alguien afirme que no son comparables,
en cuanto a crueldad se refiere, una y otra forma de muerte, según se produzca en un
lugar u otro. Y, en consecuencia, nuestra forma de matar, la occidental, sea “mejor” e
incluso “preferible” a formas tan brutales como la lapidación. Es posible.
Como es sabido, la postmodernidad provocó una crisis muy seria en los cimientos
de la mentalidad progresista nacida del Renacimiento y desarrollada en la época de la
Ilustración, ¿avanzamos realmente después de haber existido Auschwitz? En la
postmodernidad continuamos un tanto neutralizados (sobre todo en el ámbito de los
valores) por la desorientación propia de un tiempo marcado (¿definitivamente?) por la
estela de Nietzsche.
¿Qué hacer con el caso Sakineh Ashtiani?, ¿qué hacer con las ideologías religiosas
o no religiosas que matan? De momento, gritar para que no nos quiten lo único que
temporal y misteriosamente poseemos: la vida. Luego, si acaso, implorar, exigir que no
se la quiten a esa mujer, sea inocente o culpable. Hay o debe de haber otras formas
menos definitivas de castigo. Matar es algo demasiado serio para no tomarlo en
consideración. Y particularmente cuando se hace en nombre de una ley divina o
terrenal.
Antonio Caparrós Vida
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
A mi musa
Los besos y caricias que me has dado
los guardo en los cajones
de este corazón cálido.
Para, al llegar la pena, el desconsuelo...
de uno en uno sacarlos
y abrigarme con ellos.
Labios dulces, suaves y pillas manos
hacen de su pasión
mi anhelado alimento.
Del latente rubí que se estremece
al recordarte a ti,
ya dejé de ser dueño.
Pues de su palpitar, son las razones:
tu risa, tu mirar,
tu amor, tus pensamientos.
Pasó éste por la forja de Vulcano...
y allí, por ti, quedó
para siempre encarnado.
Se sumergió en la copa del dios Baco
en busca del reflejo
de tu pelo ondulado.
Llegó hasta el mismo infierno, ¡a Finisterra!,
y allí, en el fin del mundo,
aún te siguió buscando.
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Soy sólo su muñeco y recipiente
movido por los hilos
de su eterno entusiasmo.
Soy mero polvo en aire, llama en fuego...
de él, la mínima esencia;
siervo de sus encantos.
Lo soy; mas incluso lo que me queda
libre de su influencia
comparte sus reclamos.
<-------------Pues todo en mí te quiere; sólo vive
por el verte mañana
tocando mi piano.
Por ser tu risa, por volver a oír
a tu inocente voz
afinando mis cantos.
Por dormirte, por lamerte los labios...
por rendirse de nuevo
a tu olor y a tu tacto.
Y aunque queden escasas las palabras,
quiero que ésto te llegue
cuando yazcas llorando
en la triste soledad de tu cuarto;
y sepas, al leerme,
una vez más, que te amo.
Otro pollo enamorado
20
Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
… :)
Que hay que comprender que el corazón bombea con felicidad, que si estás triste es
como estar muerta. No dejes que llueva, ni chispee... ni siquiera que caiga rocío en tu
interior, el sol es la mejor de las energías renovables pues, lo mejor de todo ni
contamina. Que la vida es demasiado corta para tener problemas, que si existe alguno
los borro con mi goma “Milán”... y a otra cosa mariposa. Canta, salta, ríe, juega...
DIVIÉRTETE, sé feliz con quien quieras y deporta a quien odies... borra de tu vocabulario
la palabra preocupación (L).
P . Sayona
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Algo incontrolable…
Te sientes vivo, feliz y con solo rozarle puedes sentir millones de sensaciones a la vez, cuando lo
ves tu estómago se contrae, un escalofrío recorre tu cuerpo cuando se acerca, tu corazón se
acelera, te sonrojas, te quedas sin palabras…
Sigues sintiendo todo esto aunque sabes que te hizo daño y lo volverá a hacer sin lugar a dudas.
Tu mundo se reduce a ello y solo piensas, sueñas y vives con eso, ahora ese sentimiento que fue
tan bonito solo es tristeza, te alimentas de ese dolor que recorre tu cuerpo cada vez que
recuerdas y sus besos para ti se convierten en una gran mentira…
Después de todo te das cuenta que tu eres más fuerte, tomas valor y borras lo que te ha hecho
daño.
Hay algo que nadie sabe, dos grandes secretos ocultos; el primero es que SIEMPRE hay una
persona en tu vida que te quiere como nadie en el mundo y el segundo es que SIEMPRE esta
más cerca de lo que creen.
Esto va dedicado a todas esas personas que sufren por amor, para que se den cuenta que no
todo gira en torno a esa persona porque tu eres único y si no te quiere no temas por que seguro
que hay o habrá alguien más especial...
María CM
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
Pastillas contra el dolor ajeno
“Pastillas contra el dolor ajeno”. Éste es el nombre de la nueva campaña de la ONG
Médicos Sin Fronteras que, como sabréis, se encarga de llevar ayuda médica a todo lugar en el
que, por desastres naturales, guerras, o por la mismísima pobreza, ésta no está garantizada. Hoy
por hoy, su actuación es indispensable en lugares como Haití, donde luchan incansablemente
contra la sonada epidemia de cólera o Paraguay, ayudando a poblaciones en situación de
extrema pobreza o en continuo contacto con conflictos armados y catástrofes naturales..
Y una vez más, la organización nos pide
ayuda proponiendo una campaña para
que
nosotros,
desde
nuestra
acomodada rutina, podamos aportar
indirectamente nuestro granito de
arena
a
su
inconmensurable
y
necesitada ayuda a nivel internacional.
La principal idea promotora es la
siguiente: “Cuando te duele algo, te tomas una pastilla y el dolor desaparece. ¿Pero qué pasa
cuándo lo que sufres no es tu dolor, sino el de los demás?¿Cuando lo que te duele es el dolor
ajeno?”. Tras este encantador razonamiento, nos presentan las pastillas contra el dolor ajeno:
unas cajas de seis caramelos de menta sin azúcar blancos, que representan cada una de las seis
enfermedades que más muertes producen en el mundo por causas de falta de medicamentos, y
que pueden encontrarse en cualquier farmacia de España por, únicamente, un euro.
Muchas son las voces públicas del panorama mediático español que han apoyado esta
propuesta y han consumido las pastillas contra el dolor ajeno: futbolistas como Andrés Iniesta o
Xabi Alonso, humoristas como Andreu Buenafuente o Fernando Tejero, músicos como Estopa o
Pau Donés, intelectuales de la talla de Eduard Punset... Y quiero destacar la imagen principal de
promoción de esta campaña: el recientemente fallecido José Luis García Berlanga, a la edad de
89 años.
El director de cine, en un gran gesto de generosidad (pues durante toda su vida había
ofrecido mínimas entrevistas y presencias en homenajes hacia su persona) se ofreció a la
organización MSF para el fomento de la campaña. En su propia casa y en un gran ambiente de
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Aurora Boreal
Número 37, Noviembre 2010
intimidad, con escenas reales junto a su nieto y su cuidadora (y en silla de ruedas, debido a su
avanzado estado de vejez) cuenta, con voz grave de actor de doblaje, sus experiencias
personales con relación a las píldoras, en un bello testimonio que, como en eterno
agradecimiento, se ha vuelto hacia él como homenaje poco después de su muerte. En una corta
reflexión sobre la vejez, el final de la vida y lo que realmente es importante en ésta, nos habla
con estas palabras en el vídeo de patrocinio:
“Cada día, a la misma hora, comienza el ritual que pretende hacerme inmortal.
Algunos lo llaman la esperanza de vida, otros prefieren hablar de milagros. Yo creo que todo eso
son cuentos, y que es solo cuestión de suerte.
Para mí, la vida se resume en un montón de colores: la verde para el azúcar; la azul para la
tensión (que la tengo por las nubes), la amarilla... ¿La amarilla para qué era? -Pregunta a su
asistente en un soplo de Alzheimer, la enfermedad que padecía- ¡La del hierro! -Responden los
dos al unísono- Pues sabe a azufre.
Y la blanca: ésta es la más importante, la que tomo para ayudar a los que no tienen pastillas
para curarse. Y le digo a mi nieto que lo que me está curando es esta pastillita, y él me mira
como si estuviera loco y me dice: “imposible”.
Pero eso es lo bueno de tener años, -Dice mientras se guarda todas las pastillas en el bolsillo y se
lleva únicamente la blanca a la boca- que uno puede creer ya en lo que le dé la gana.”
Sirva este artículo como reconocimiento a la bella y altruista participación de esa personalidad,
hasta ahora para mí desconocida; y para animar a todos los lectores a la compra y consumo de
estas pastillas, como comprobado y efectivo tratamiento al horror y la tristeza que nos rodean y
contra los que, teniendo la suerte de no padecerlos, debemos hacer lo que esté en nuestra
mano.
PS: la página web de Médicos Sin Fronteras, donde podéis ver el vídeo mencionado e
informaros más sobre esta campaña, es: www.msf.es/pastillascontraeldolorajeno/
Un pollo más
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Aurora Boreal
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Recomendación Cinematográfica: Una vida de amor
El Diario de Noa (The Notebook)
Nick Cassavetes
Drama (Romántica)
124 minutos
2004 (Estados Unidos)
Es innegable que el amor (o al menos, el sentimiento que conocemos como tal) ha sido
discurrido por el ser humano a lo largo de toda la historia y una fuente de inspiración de
escritores, músicos, pintores y todo tipo de artistas. Algo que ha influido en multitud de
personajes célebres, que ha sido capaz de cambiar el rumbo de la historia... Algo tan
intenso que lleva consigo el sufrimiento más desolador o la felicidad más placentera
debería ser respetado, o por lo menos, tomado en interesante consideración.
Y no deja de ser así, pues es tan intrínseco al ser humano que convive con nosotros día a
día; y sea concebido como una profunda realidad o como una simple excusa consumista,
su existencia a nuestro alrededor es incuestionable. Estamos completamente indefensos
contra él, puede asaltarnos en cualquier momento; y entonces, abandonarnos al día
siguiente o estar a nuestra lado para siempre... queramos o no.
Como “romanticón” que soy, no puedo evitar que las películas de amor me encanten.
Hoy, porque estoy enamorado; ayer, porque veía en ellas el reflejo de lo que anhelaba
conseguir... Pero siempre porque el amor que representan es sinónimo del bien, de la
felicidad, de la vida... Él es, en todas sus manifestaciones, lo único que necesitaría el ser
humano para convertirse en algo más perfecto, para evitarse tantos daños: sólo y
únicamente una fuente inagotable y universal de amor al prójimo. Esta idea de infinitud
se acerca mucho a la de un dios monoteísta, sí; precisamente por eso, al ser imposible la
existencia eterna del amor, sus (en comparación) pequeñas y reales manifestaciones son
las que me endulzan la vida, las que, desde su relativa insignificancia, son capaces de
alegrar un poquito al mundo, como efímeros sucedáneos de su utopía.
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Aurora Boreal
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El diario de Noa es una historia romántica ambientada en los años 40, una de esas
películas de amor absoluto; de ese amor pasional e irracional que escribe las grandes
historias; de ese amor esperanzador que promete las mayores alegrías y que, cuando se
ve encerrado o perdido, provoca los mayores padecimientos; de ese amor que, de una u
otra manera, todos hemos anhelado tener algún día... Es una reflexión sobre el paso del
tiempo y de la vida, sobre la vejez y su relación con el amor.... Sobre el afecto y la
inestimable compenetración que ofrecen los años y la hermosa necesidad hacia la otra
persona que éstos van provocando.
Tal vez algunos la cataloguen de una reunión de tópicos más, otro ejemplo del mismo
esquema común de película romántica... Pero tiene algo que la hace especial. Un toque,
un final, una pincelada definitiva que la convierten en algo tan memorable como otras
pocas historias del cine: Titanic, Romeo y Julieta, Lo que el viento se llevó... Ah, y una
preciosísima banda sonora que te alcanza hasta lo más hondo.
No quiero ponerle con esto el cartelito de “Clásico”, pero es una película que consigue
penetrar el muro de escepticismo y golpearnos el corazón. Vela sin suspicacia, o hazlo
con ella, para que compruebes de la misma manera que yo que de verdad lo consigue.
Ya sea porque tú también estás enamorado, porque te gustan las historias de amor o
porque, de una manera u otra, te verás reflejado en ella; siéntate en el sofá y sumérgete
en su preciosa historia. Y si tienes la inmensa suerte de poder hacerlo junto a la persona
a la que amas, baja las persianas y abrázala, para decirle que vuestro amor es tan grande
como el que estáis viendo y para llorar juntas por poder manifestároslo. Y, justo después,
amaos y navegad juntos en el lago al atardecer.
Un pollo más
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En un día
En un día, cuando las lágrimas te nublan el corazón y la mirada, unos de esos días en los
que no te quieres volver a despertar unos de esos días que no querrás abrir la ventana y
que pase la luz del sol por tu cuarto, que quieres que todo este oscuro, uno de esos días
en los que no les quieres ver la cara a nadie, unos de esos días en los que te quieres
esconder y que nadie venga a por ti, que cualquier cosa que te digan por muy
insignificante que sea, sabrás que una lágrima caerá de tus ojos y pasará por tus mejillas
y caerán en la nada, uno de esos días en los que ya no queda nada por perder, en los que
todos tus sueños e ilusiones se han muerto, unos de esos días en los que la cosa que más
gracia te hacía ya no volverá a hacerte feliz. Uno de esos en los que por una tonta
equivocación de una persona tu estés así, estancada, triste, desmotivada, desganada,
unos de esos días que no puedes parar de fingir sonrisas a la gente para que no te
pregunten el porqué estas así, días en que lo único que piensas es en como puedes hacer
sufrir tú a quien te lo ha hecho a ti, días en los que no eres tú y que piensas que no vas a
volver a ser tú, en los que ni la persona más querida te puede hacer sonreír, días en los
que dices que ni el tiempo te puede curar a ti, porque el tiempo cura las heridas pero no
las cicatriza… y en esta herida tan profunda sale odio y maldad y nunca quedará en el
olvido….
Esto es difícil, no se puede solucionar así como así, antes una de las personas que mas
querías y ahora provoca esto en ti…
Tiempo es lo que tendré que dejar pasar pero por ahora soy demasiada complicada e
imposible de entender…
Rida Eskeif
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