El gobierno de Humala tiene su cuota de
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El gobierno de Humala tiene su cuota de
EL COMERCIO lunes 5 de setiembre del 2011 “Si tuviera 18 años de nuevo haría mi vida muy diferente, para empezar no me hubiera metido en política. Solo habría estudiado Historia”. rrente durante el cautiverio? Es muy extraño, lo que yo pensé es que todo esto me sucedía como una especial de herencia de destino. Yo estaba dentro de una lucha cósmica atemporal y había caído en manos de la gente que había matado a mi familia rumana y rusa. Era un karma y verlo así me dio mucha fuerza porque saqué energía de la conciencia del sufrimiento de mis familiares. Pero cuando le dicen que van a matarlo, ¿en qué piensa uno? Ni siquiera piensa en la muerte, viene el ahora qué pasará. Lo primero que ocurre es que súbitamente uno se aísla en sí mismo, es como si el mundo exterior dejara de importar. Queda uno mismo, quedas enfrentado a ti mismo y a una interrogación sin respuesta. Fujimori no le hizo caso con el Caso Ivcher, usted dijo que renunciaba a ser canciller si le retiraba la nacionalidad... No me hizo caso y fue un grave error, no quiero entrar en juicios emocionales. La historia ya hizo un juicio sobre lo sucedido. Yo me fui por principios. ¿Y por qué regresó a lo mismo? Primero acepta la embajada en la OEA y luego la vicepresidencia. Sentí que era una manera de servir a mi país. Veía de lejos el Perú, yo no estaba aquí y veía una oposición destructiva, sentí que se exageraba y temí que todo el esfuerzo de la década se perdiese. En esa época las denuncias de corrupción desbordaban... Sí, pero yo no vivía en el Perú y sentí que estaba en riesgo todo lo construido. ¿La re-reelección no le causó escozor? No hubiera aceptado la vicepre- “Pensé que Fujimori no estaba en el lado oscuro, pero hoy pienso que hubo entendimiento entre él y Montesinos. ¿En qué grado? Nunca lo sabremos”. arcHivo sidencia si hubiera sido ilegal, lo que usted menciona es una apreciación política, pero constitucionalmente era legal. Al llegar al Perú para la campaña, en enero del 2000, tropecé con la realidad del control que Montesinos ejercía sobre el gobierno de Fujimori. Hay que ser sinceros, lo que se vio en los videos no es algo que supiéramos antes. Yo recuerdo cuando Olivera pasó el primer video, a mí me dio asco. ¿Y por qué no se fue inmediatamente si tanto asco tuvo? Porque es muy fácil tirar todo por la borda y dejar que todo se desintegre, quise ser una fuerza positiva, pero no se pudo y renuncié porque la podredumbre era muy grande. Se ha dicho que Fujimori me dijo que estaba enfermo y yo quería ser presidente, falso. ¿Hoy diría que Fujimori y Montesinos fueron socios? No lo puedo saber, no tengo evidencias, pero sí creo que había algo de entendimiento. Montesinos se opuso a mi candidatura, lo dice muy claro en un video. Después de los videos, la oposición estuvo enardecida, pero también me pedían que no renunciara. Yo decidí que el camino era la transición inmediata y por eso me fui. ¿Se arrepiente de su paso por el fujimorismo? Si todos los peruanos hubiéramos sabido lo que vimos después, naturalmente no hubiera aceptado. En mi caso hubo una estimación incorrecta. Difícil de creer porque ingenuo no es. Sí, pero a veces uno hace juicios de valor errados. En ese entonces yo pensé que Fujimori no estaba en el lado oscuro, puede ser ingenuidad, pero hoy pienso que hubo entendimiento entre él y Monte- EL RITMO DEL ‘CHINO’. “Muchas críticas recibí, pero yo creía que hacía lo correcto”. El gobierno de Humala tiene su cuota de embajadores políticos como todos los gobiernos, dejémonos de hipocresías, siempre ha sido así sinos. ¿En qué grado? Nunca lo sabremos. ¿Qué piensa hoy de Fujimori? No soy un hombre que toma ofensas con facilidad; en primer lugar, siento pena. Siento que pudo haber enrumbado las cosas de otra manera y haber evitado todo esto. Fue muy injusto que pasáramos por todo esto, personalmente fue un trance muy difícil. a9 ¿Y qué de Montesinos? Sobre él tengo un juicio categórico: probablemente sea la persona que más daño le ha hecho al Perú en toda su historia. La exhibición de la corrupción por medio de los videos solo resulta comprensible en el dominio de la psiquiatría. Hizo un daño como si hubiéramos perdido una guerra. El daño moral es inconmensurable. ¿Usted votó por Keiko? No, voté nulo. Encontré una elección sorprendente y ninguno me pareció. ¿Y cómo ve el gobierno de Gana Perú? Seguimos viviendo en la incertidumbre porque las líneas de la política económica no se definen. A mí me preocupa la gran crisis de pago internacional y eso no remonta; si se instala una recesión mundial, en seis meses nos alcan- zaría y entonces se decidiría qué medidas son pertinentes y cuáles no. Tengo la impresión de que hay una crisis en ciernes y debemos estar preparados porque todo lo que se haya dicho en la campaña o en la presentación del Gabinete queda anulado por la realidad. ¿Cuál es su opinión de Ollanta Humala? Representa una continuación de un fenómeno que comenzó en el noventa. Hasta ese año los jefes de Estado salían de las clases medias adscritas a los políticos tradicionales, a partir de Fujimori los presidentes surgieron de sectores que no pertenecían a la política tradicional. Salvo Alan García, se ha seguido repitiendo el fenómeno. Queda claro que usted no es ‘caviar’, ¿cuál es su etiqueta? Soy un conservador republicano. ¿Puede contarnos cómo está su padre? Está bien, cumplió ayer 96 años y lo que sucedió con él fue emocionalmente devastador. Tenía 92 años cuando lo sacaron de su casa sin que pudiera regresar, no fue justo. Después de que me agredieron de manera insultante por el tema político vino el asunto familiar y recibí otra camionada de insultos. Toda la gente que nos conoce sabe de la unión de mi padre conmigo y con mis hermanos, fue él quien nos educó, con él crecimos después de que mis padres se separaran. Todo fue muy injusto. Lo que pasó en ese tiempo con mi padre fue tan devastador como mi experiencia en la embajada. Fue atroz escuchar juicios políticos sobre mi vida familiar afectiva, no tenían ni idea de mis relaciones familiares. Fue terrible, una experiencia emocional devastadora, como los 126 días que pasé de rehén. De todas estas cosas salen cosas buenas y yo aprendí a ser un hombre realista pero, si quiere que le diga la verdad, son cosas que hubiera preferido no conocer. ¿De qué se arrepiente? Podría decir como Edith Piaf que no me arrepiento de nada, pero si tuviera 18 años de nuevo haría mi vida muy diferente; para empezar creo que no me hubiera metido en política. Le hubiera hecho caso a mi abuela. Quizá solo debí estudiar Historia, como fue en un principio mi deseo. ¿Y qué les dice a las personas que lo desprecian por todo su pasado fujimorista? Que están en su derecho, que cada uno tiene sus ideas, yo siento que hice en cada momento lo que consideré responsable y correcto. El ser humano es falible, tuve aciertos y errores y los asumo. Nadie es perfecto. π