No me ves - Gestor PNL
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No me ves - Gestor PNL
Mapas… artículos de PNL Gestor PNL “No me ves” Jessica Riveri Sicóloga, Trainer en PNL, Especialista en Hipnosis y Sistemas Familiares. Directora GESTOR PNL, Chile. El trabajo con personas, en su mundo interior, te regala la posibilidad de transitar por diferentes vidas, de muchas y variadas personas y al mismo tiempo, en esa diversidad, percibir hilos comunes en nuestra existencia. La necesidad de ser vistos es con certeza uno de esos hilos comunes, que se repiten una y otra vez: “mis padres no me vieron” “no me siento vista por mi pareja” “mi jefe no se da cuenta de mi trabajo”. Si fuésemos literales no existe la posibilidad que un padre no vea a su hijo (a menos que sea no vidente). De igual modo, una pareja o un jefe. Todos hemos sido vistos, la cuestión es que no hemos sido vistos de la manera que hubiésemos deseado. Nos ven con lentes que se alejan de nuestra vivencia y necesidades. Nos sentimos vistos cuando lo que percibe el otro corresponde a nuestra vivencia; hay correspondencia entre lo que es mi experiencia y lo que percibe el otro. Y en esto creo importante considerar el fenómeno de la percepción. La realidad no es posible aprehenderla de manera única por todos, cada uno de nosotros crea una representación de la realidad mediada por muchos filtros, de diversa índole. La realidad es un hecho perceptual, todos creamos la realidad en la cual vivimos. Cada uno de nosotros tiene su propio mapa, siendo ninguno de ellos más verdadero o real que otro- son legítimas percepciones; son representaciones de mundo y cada persona responde en función de su percepción. En esta creación de mundo inciden distintos tipos de filtros, algunos sensoriales, otros mediados por el lenguaje y la conversación, tanto del mundo interno como con los otros, por la presencia u omisión de las presuposiciones, por los valores y sentidos de identidad presentes, las habilidades disponibles y patrones de comportamiento asociados a una realidad en particular. Mapas… artículos de PNL Gestor PNL Las personas siempre hacemos la mejor representación y opción de comportamiento en función de lo que tenemos disponible en el modelo de mundo. Toda conducta, sea que nos fortalezca o nos limite, es la mejor opción disponible en un determinado momento, en función del acceso a los recursos y las distinciones perceptuales en un momento dado. En PNL se han formulado varios modelos, que describen los filtros de percepción. Aquí te presento uno de ellos, el básico: Todos captamos información del medio externo y de nuestro mundo interior, mediante nuestros sentidos, ello constituye el primer sistema de filtro perceptual. Para algunos será el canal visual el predominante, otros serán las sensaciones kinestesicas, en tanto, el foco de atención para otros estará en las conversaciones, diálogos, sonidos del medio, tanto interno como externo. El modelo VAKOG nos permite diferenciar este primer sistema de filtro, estableciendo distinciones según el sistema sensorial predominante: Visual, Auditivo, Kinestésico, Olfativo, Gustativo. Sistem as Representativos Vista Visual Sonido Auditivo Sentimiento Olor Kinestésico Olfativo Gusto Gustativo V A K O G En PNL, se dice que una persona tiene un “sistema representativo primario” cuando esa persona valora o usa preferentemente uno de sus sentidos para procesar y organizar su experiencia del mundo. El fenómeno de la primacía de los sistemas representativos fue apuntado por primera vez por William James. En su clásico trabajo The Principles of Psichology (1890) James escribió: “En algunos individuos el habitual “pensamiento – cosa”, si uno puede llamarlo así, es visual; en otros es auditivo, articulatorio o motor: en la mayoría, quizás está igualmente mezclado” Mapas… artículos de PNL Gestor PNL Cada sistema representativo es designado para percibir ciertas cualidades básicas de la experiencia sensorial. Estos incluyen características tales como el color, brillo, tono, armonía, temperatura, presión, etc. Estas cualidades son llamadas "submodalidades", ya que ellos son sub - componentes de cada uno de los sistemas representacionales. Las personas también diferimos en nuestras habilidades para detectar y procesar estas características sensoriales, siendo esta diferenciación un factor determinante la creación de mundos. Hay tres formas básicas para orientar el uso de nuestros sentidos: (1) incorporando información del mundo exterior, (2) recordando información que ya ha sido incorporada por el cerebro y (3) construir, imaginar o poner las piezas en una nueva combinación, en base a lo ya vivido previamente. Claramente, guiamos nuestras vidas basándonos en cómo juntamos los recuerdos y creaciones de futuro, para responder ante lo que somos capaces de percibir en el ambiente aquí y ahora. El énfasis en el pasado, en el futuro o el aquí y ahora, el orden en que son balanceados y combinados, y cuánta información es traída a través de cada uno de los sentidos, etc., influenciará la percepción del aquí y ahora. Así, cuando nos relacionamos con otra persona, todos estos procesos se activan. Sus canales sensoriales, la orientación del procesamiento de la información, hacia el pasado, el futuro o el presente, creando cada uno su mundo representacional, en base al cual, vive, interactúa y se comunica. Entonces, volvamos al punto de partida de este artículo: “mis padres no me vieron” “no me siento vista por mi pareja” “mi jefe no se da cuenta de mi trabajo”. Tu vivencia es certera: no te vieron en correspondencia a tu vivencia y percepción, y desde la perspectiva del otro, también verdadera: te percibieron de otro modo, basados en las posibilidades que su sistema de creación de mundo. La comunicación entre las personas puede darse así. Aquí lo central es la conversación en un contexto de integración. Si entras a “colonizar”, sintiendo que la propia percepción es la única verdadera, no habrá entendimiento. Una buena comunicación se fundamenta en la capacidad empática y de escucha, y así como en la posibilidad de entrar en el mundo (representación) del interlocutor y abrir un espacio fecundo hacia el entendimiento. No me ves, entonces lo acepto. No me ves, entonces deseo que me veas. No me ves, entonces me situó en nuestro presente. No me ves, entonces te converso. No me ves, entonces, me acerco. No me ves, entonces yo te veo. No me ves, entonces yo me manifiesto.