El medicamento en el escaparate

EL MEDICAMENTO
LA PUBLICIDAD FARMACÉUTICA
EN ESPANA . UNA APROXIMACION
EL MEDICAMENT O
EN EL ESCAPARAT E
COLECCIÓN HISTÓRICA DE CIENCIAS DE LA SALUD
EL 14EDICAVIE \TO
E\ EL ESCAPARAT E
LA PUBLICIDAD FARMACÉUTIC A
EN ESPASA. UNA APROXIMACIÓ\
HISTÓRICO-LITERARI A
Javier Puerto
Segunda parte
Ú
FUNDACIÓN URIACH 183 8
COLECCIÓN HISTÓRICA DE CIENCIAS DE LA SALUD
Javier Puerto
Catedrático . Historia de la farmacia y Legislación Farmacéutica .
Facultad de Farmacia . Universidad Complutense . Madrid
EL MEDICAMENT O
El\ EL ESCAPARATE
Segunda parte
PUBLICIDAD Y JUEGO S
Muchos fueron los entretenimien tos conseguidos por la famili a
Corriente Cualquiera en la boti ca a costa de los preparadores d e
específicos . De entre todos, doñ a
Antonia recuerda y conserva varios con especial cariño .
En primer lugar, permanece en s u
retina el de una serie de niños y
niñas pequeños, cargados algunos
con sus carteras colegiales, jugan do al corro en torno a una gra n
caja de Neocid, el antiparasitario
que en tantas ocasiones hubo d e
emplear en los niños para evita r
las epidemias de piojos, producidas de forma esporádica, primer o
entre los chavales pobres y co n
costumbres higiénicas laxas, y lue go entre todos los muchachos, fuese cual fuese su origen social y su s
hábitos de limpieza .
También conserva un obsequio d e
Instantina, el preparado contr a
los resfriados, la gripe y el reumatismo . Se trata de un payas o
metálico dotado de unos mecanis mos con los que se efectuaba u n
juego perdido ya en las bruma s
de la memoria .
También estaban los juegos d e
IRaycr : entre ellos los de Panfla -
Tarjeta anunciadora de Neocid
vina, en donde dos muchacho s
y una chica, el de en medio sano y
sonriente y los de los lados co n
anginas él y con dolor de muela s
ella, levantan o la mano o un tro zo de la bufanda o del pañuel o
con que se tapan para introduci r
en ellos unos aros donde pone
pastillas de Panflavina. Cada uno
de los muchachos lleva un núme ro que son los tantos anotado s
por cada jugador.
Doña Antoñita y los niños pasa ron muy buenos ratos con eso s
entretenimientos, y no puede en tender las diatribas contra est a
forma de hacer propaganda qu e
oyó a un destacado catedrático d e
universidad ni, mucho menos, l a
prohibición de realizarla . Al fin y
al cabo, piensa, propaganda se h a
hecho con todo y mucho hemo s
aprendido de ella y, además, bie n
que ha reflejado nuestra vida. No
Obsequio d e
Instantina
n
v.
El preparado moderno y efica z
Resfriados firipe y Reumatism o
Juego metálico regalado para anunciar l a
ln .slanlin a
entiende por qué las gentes s e
escandalizan tanto por estupideces . ¡Con la de buenos ratos qu e
han pasado todos jugando en familia al laberinto japonés, gracia s
al I.Í11Í111('l)l0 de SIofl/)!
I,a joya de la corona . en este ámbito, son los anuncios de Carudol,
una serio s de marionetas cuya s
extremidades se mueven par a
atraer la atención sobre las pro piedades antirreumáticas de l a
especialidad .
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>ÀANÉG'
Ii,.lNIM EIVTO
DE
Laberinto lapones ofrecido pur el Linimento de ,~lua n
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LABERINT?
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LINIMENTO DE LOAN
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LINIMENTO DE SLOAN
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LABERINT O
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fig . 2
Interior del juego del laberinto japonés . efectuado con el nombre del Linimento de Sloa n
Laberinto del Linimento (le Sloan
En ests juego, lo mismo que
en la vida real, procure qu e
el CUERPO no llegue nunca
a la ZONA DE PELIGRO ; para
ello sírvase del LINIMENTO D E
SLOAN, qua, , lesalojando to dos los DOLORES, mejora la si tuación del CUERPO HUMANO
basté llevarlo a la ZONA D E
CUIàACION .
IMPORTANT E
El . ayor interés de este jueg o
con iste en saber quien emple a
men s tiempo para hacerlo.
A ver si logra usted mejora r
este promedio :
Un niño de 8 oSo . empleó
„
Un niño de 14 '•
'
Un delco de 16 "
Uno persono mayor , .
205 minuto s
,•
63
42
36
••
••
Interior del juego del Linimento de Sloan . donde se hacía propaganda (le las diversas afecciones curada s
por él
9
Marionetas anunciadoras del Carudo l
Sea Qd . valiente en la subasta y
precavido contra el dolor tomand o
2letoketao
*l
,
A
Para lograr una parcia pre, s
otro dos . Una tabl eta de
-
En ei juego de la v4a se verc e
cc, e! -as . dc
ASPIEMINA
Baraja francesa de Bayer
10
Caflaspirin a
1;asta
para su dolor
Para que no faltase de nada, tenemos también una baraja francesa, ofertada por Bayer, en don de se hacía propaganda de su s
especialidades, con la cual la fa milia mataba sus ratos de ocio ju gando al póquer, sin dinero, con
garbanzos canjeables por favore s
o besos .
¡Luego dirán que los medicamentos sólo son reflejo de des gracias! O, corno decían alguno s
boticarios que solían vivir enci-
ll
ma de sus oficinas, obligado s
por las Ordenanzas de Farmacia de 1860 : de lo de abajo .
¡nada! La gran mayoría de la s
gentes del común somos así .
Olvidamos con presteza los bue nos ratos .
FACILITA LA R E S PI RACI
ON
LA PUBLICIDA D
Y LOS DEPORTE S
Doña Antoñita no hizo deporte
alguno, en su época se consideraba un descoco la vestiment a
deportiva y se aseguraba que s u
ejercicio incrementaba el aspecto varonil de las hembras . Por e l
contrario, en los hombres, l a
práctica deportiva se consideraba un ridículo síntoma de afemi -
namiento, de manera que a na die se le ocurría realizar prácticas consideradas extranjeri zantes y absurdas .
Don Francisco practicó algo e l
soga-tira, correctamente vestido ,
no como los anunciantes de l
Fosfo-Glico-Ko/a Doménech, por-
FOSFO•GLICO•KOL~ DOMENECII1 1
'tarjeta para anunciar la Corifin a
Premie
nuncio
a la Materia
IO1EIfE1, frtt
S.
DOIEIE[I far®attifirt
• luda i hile, 11
• IIIEELIII Teláfo0o 3415 1
que es un deporte rural, suficien temente burro, en donde no s e
pone en juego nada que no sea l a
fuerza bruta y la capacidad d e
desollarte las manos por un quítame allá esas pajas .
También practicó algo el fútbol .
que eso sí es un deporte fetén ,
Ponli . ncin
13
aunque nunca tuvo unas botas d e
cuero tan buenas como el anunciante de Bombones Ba ,ver de
Coriflna, ni mucho menos se l e
ocurrió vestir camiseta azul y
roja, que los de Bayer tienen su
sede en Barcelona y se les ve e l
plumero . El eslogan del anuncio ,
«el sport es un placer», expon e
lo foráneo que se consideraba s u
práctica, para la que ni siquier a
había una palabra española, aun que fuera un galicismo . En tiempos de don Curro, la gente bie n
no iba a hacer deporte, sino sport,
y no eran deportistas, sino sportislas, con lo cual quedaban much o
más finos y elitistas, y se sentía n
alejados de esa masa inform e
cuyas habilidades fundamentale s
las demostraban en el andami o
o en la siega . Quienes ni era n
sportistas ni segadores, las clases medias, odiaban el ejercici o
físico, acaso porque la mayorí a
era desertora del campo y prefería morir descansada que vivi r
con toda la pobreza, la miseria y
la tristeza con la que lo hacía n
los trabajadores . Mucho más tarde, un ministro de tranco, Solís .
hombre jovial y aparentement e
espontáneo, vislumbró las virtudes del fútbol y de los deporte s
corno entretenimiento de masas ,
alejadas así de otros asuntos de
mayor fuste incómodos para lo s
poderes constituidos, y proclamó
que menos latín y más deporte .
Su mensaje fue auténticament e
premonitorio . Cuando llegó l a
democracia, se lanzó por ese sen dero visionario, hizo desaparece r
las humanidades y los estudio s
humanísticos o los dejó reducidos a la mínima expresión, pes e
a las manifestaciones reiterada s
de apoyo a éstos, y se lanzó po r
la vía de los éxitos deportivos, d e
elite y populares, con programaciones diarias de fútbol en las
televisiones, ahora ya privadas ,
tan bien recibidas por el puebl o
soberano y votante . Con lo cua l
doña Antoñita creyó, hasta el dí a
de- su muerte, que esto era com o
aquello, aunque diferente . Si hubiese leído El Galopando, que n o
se lo dieron en la botica porqu e
no lo utilizaron para hacer propaganda, que sepa . habría dich o
eso tan manido de «que todo cam bie para que todo siga igual», pero
como sí había leído a Jiméne z
Lozano, un escritor castellano ,
católico y aparentemente conser vador, aunque con demasiada re tranca para resultar cómodo si quiera a los conservadores, l e
pareció que eran distintos perro s
con idénticos collares, aunqu e
ella, ya anciana, había visto demasiadas cosas y sólo sabía qu e
«la política, para el que viva d e
ella»,y cosas por el estilo, tacha das de retrógradas y fascistas por
14
sus hijos que . sin embargo, las so brellevaban con una sonrisa d e
superioridad y comprensión .
Lo que sí hacían, en vacaciones ,
cuando iban al pueblo, era bañarse toda la familia, al menos ella y
los niños, pues don Curro o estaba en la cama o, cuando mejoraba ,
se quedaba en la capital dedica do a sus asuntos . Se bañaban e n
el lago . Esos días veraniegos resultaban maravillosos, inolvidables . igualitos que aparecen en u n
abanico propagandístico de l a
Cafiaspirina . con el lago tranquilo, los pinos, el pueblo al fond o
y los bañistas provistos ellos d e
grandes calzones de baño y
ellas de enormes bañadores, a l
principio con su faldita y lueg o
despojados de ella . aunque a ve ces seguían manteniendo u n
cinturón como adorno . Los baños, a don Gayo, el señor cur a
párroco, no le parecían nad a
bien, casi menos que los bailes .
De toda la vida han sido las fuer zas vivas reticentes con el agu a
bebida, como vimos . o en form a
de baños .
Durante el Renacimiento, en e l
libro de Las cuatrocientas res puestas a otras tantas pre,unla s
que el Ilmo . Sr. D. Fadrique Enrique . :llmirante de Castilla . v
otras personas que en diversa s
Abanicos para anunciar la Cafia.spirina, con ternas (le baño
veces enviaron a preguntar a l
autor, que no quiso ser nombra do (Valladolid, 1545), se lee :
«Dice la pregunta :
solían usar en Castilla
los señores tener baños
que mil dolencias y daño s
curaban a maravilla ;
y pues hay tan pocos de ello s
y pocos vemos tenellos :
quería de vos sabe r
si por salud o placer
es pecado entrar en ellos .
15
La respuesta:
Solían siempre hacello s
en ciudades principales
y por bienes comunales
guardallos y sostenellos
los sanos se recreaban
los dolientes sanaban .
otros bienes muchos más
que dice Santo Tomás
que en los baños se encontraba n
mas lambiera hayPandes males
que del mucho uso resulta n
que en los que en ellos se junta n
hacen pecados mortales ( . . . )
por quitar estos daño s
lúe provechoso S honesto
que el red% don 1llónso el Sext o
hizo destruir los baños
que los baños pueden se r
al enfermo beneficio .
mas quien los toma por %ici o
tórnase medio mujer
,v el que ¿Ni- vive al rea'es .
sin paran mientes quien es .
es como hombre de manteca ,
que mejor lo está la rueca
que la lanza ni el arnes . »
S
I,as mujeres honestas no podía n
frecuentar los baños por el posi ble peligro para su virtud, a n o
ser que estuviesen enfermas . I,o s
hombres, en cambio, por la posi ble pérdida de virilidad,y así continuaron las cosas . Durante rnuehos años, no se permitieron y ,
cuando se hizo, se aconsejaba e l
baño separado por sexos . Por es o
don Gayo refunfuñaba todos lo s
veranos, desde el púlpito, sobr e
los peligros de los bañista s
foráneos para la moral del pueblo aunque, en vista de la importancia de la familia Corriente
>o
. O~a~o,a~°'a
d
siol'ieldldd e irrita
s obne
•
PSCdnte
~
a
BAYER
Ca1ma~
\iscra con un anuncio di . Corinti a
Cualquiera y de las otras familias Cualquiera Corriente que ve nían a veranear y dejaban en los
cepillos de la parroquia cantidades de limosnas suficientes par a
pasar el invierno, moderó much o
sus críticas y consideró que l a
moral familiar de estos honrado s
ciudadanos estaba por encima d e
toda (luda y que su ejemplo n o
habría de ser pernicioso para l a
juventud y las familias campesinas y montaraces, que veían esa s
costumbres como una auténtica
16
idiotez propia de ciudadanos si n
seso, capaces de ponerse al so l
en las horas de más calor y luego meterse en el lago . arrostaran do, simultáneamente, el peligr o
de insolación . de envenenamien to por la picadura de alguna serpiente, de las molestias proporcionadas por los tábanos y lo s
mosquitos y el posible ahoga miento en las aguas procelosa s
y siempre traidoras del lago .
Como señalaba el anuncio, doncs
Antonia, cuando los niños se pa -
En Iodas les edades de la vide <el HEMOSTYL del Doclor ROUSSEI .
du
fuerzas .
'rarj(•Ia de la stTir dcl Ilrmu,~1,~ 1
saban de tomar el sol, les dab a
una Caliiaspirina, que «despeja l a
pesadez del cerebro ¡causada ]
por exceso de calor y, sol . Reani ma el organismo y acaba con e l
dolor» . Luego prefirió dotarle s
con las viseras que regalaba el
mismo producto, pero aunqu e
mejoraban la visión, dejaban e l
cráneo al aire y no disminuía n
los efectos de los rayos de sol .
En este ámbito . la propaganda
no fue suficientemente eficaz .
Les dotó de abanicos y de vise -
ras, faltaron los gorritos de carn eo y playa .
Con los chicos fue otra cosa . Algunos varones se hicieron boy=
scout y se dedicaron al campism o
en plena naturaleza . Todos los fines de semana salían con su tro pa, agrupados en patrullas d e
nombres de animales: los halco nes, los toros, los tigres, con su s
respectivos gritos de guerra . N o
necesitaban el Hemostvl del Doc tor Roussel, pero la madre lo te -
17
nía en casa por si las moscas. En
España, las tropas eran de un
solo sexo, los boy-scout por u n
lado, las girl-scout por otro y los
niños menores, agrupados aparte, los denominados lobatos . Sólo
en algunos fuegos de campamen to se juntaban chicos y chicas ,
aunque bien vigilados por los je fes de tropa . mayoritariament e
religiosos, pues los scout eran
católicos . Pese a ello, estaban
muy mal vistos por los muchachos de la OJE, los pequeños mi litantes falangistas que se pasa ban la vida cantando de cara a l
sol, con lo peligroso que es es o
para la vista, y desfilando al so n
de tambores, corno si estuviera n
ansiosos de hacer la mili, mientras los scout hacían tremenda s
marchas, jugaban a cosas entretenidísimas que les servía n
para orientarse en el campo y
leían la Biblia y poemas de Anto nio Machado, sobre todo el refe rente a la Laguna Negra . Cuand o
se iban haciendo mayores, deja ban la organización juvenil y pa saban al alpinismo . Ya no basta ba la emoción de la montaña, se
buscaban nuevas sensaciones ,
algo más peligrosas, escaland o
alguna de las paredes que había n
visitado en su temprana juventu d
sin atreverse a atacarlas . Después de un buen día de campo ,
en los bares de los refugios, s e
atizaban unos excelentes grogs
calentitos, preparados con e l
Gran licor estomacal Alpino, a
base de quina callisaya que, com o
todo el mundo sabe, no es golosina, sino medicina para recobra r
las calorías, engordar la sangre ,
refrescar los ánimos y ver la vid a
en rosa, sea cual sea su colo r
real, de acuerdo con la doctrin a
de Edith Piaff. Algo tan enérgic o
en el restablecimiento de l a
fuerza y el ánimo no podía se r
sino medicamento, como debe rían serlo todas las composiciones de Mozart, tan útiles par a
el espíritu y tan cercanas a l o
perseguido por la musicote rapia, merced a la cual se llega ron a instalar numerosos órganos en los hospitales españole s
del siglo XVIII .
Con el tiempo, los varones empe zaron a practicar el baloncesto, u n
deporte importado de los Estado s
Unidos, no demasiado acorde co n
la idiosincrasia española y meno s
aún con su estatura, aunque u n
destacado entrenador del equip o
nacional, cuando le hicieron ve r
la diferencia de tamaño entre su s
jugadores y sus contrincantes ,
afirmó convencido :
- No importa . Les jugaremos po r
bajo y les dominaremos sin com pasión .
Miqueta del licor estomacal Alpin o
18
X doña Antonia no le pareció de masiado bien ese pasatiempo .
1 labía transigido con el campo, l a
montaña y, a regañadientes, co n
el alpinismo, pero sólo porque l e
parecían cosas honestas, propia s
de seres de bien, amantes de l a
naturaleza y a su través de la obr a
creadora del Señor . que era lo qu e
se enseñaba entonces, tan acorde . por otra parte, con los princi pios hipocráticos . Pero lo de l
baloncesto le parecía un extranjerismo absurdo que se jugaba e n
locales cerrados o en patios d e
cemento marcados . Corrían de u n
lado para otro como auténtico s
lerdos y luego daban saltos estúpidos. Para tonterías, suficiente s
teníamos con el fútbol, inventa do para sosegar los ardores de lo s
obreros ingleses y en el que nos
íbamos despabilando gracias a
las hazañas de Kubala y Di Stefano .
Sin embargo vio un anuncio de l
Patiaminyse tranquilizó . La propaganda farmacéutica no podía
utilizar cosas fuera de los cánones del buen gusto y de la ortodo xia social más estricta .
Lo de las niñas fue peor . La mayor se puso en relaciones con u n
muchacho de la buena sociedad ,
en realidad un Cualquiera de un a
rama lejanísima, pero perteneciente a la misma tribu, como cas i
lodos los españoles, excepto los
PATIAM I IV
Tarjetón para anunciar el Patiamin
19
que pertenecen al grupo de los Na die, los Borbones que son franceses, los Habsburgo que so n
austriacos y los Megalómano s
que son internacionales . Pues
bien, ese novio Cualquiera perte necía a la llamada buena sociedad gracias a que su padre s e
había enriquecido con los sobornos ministeriales durante la monarquía y la República, y con e l
estraperlo antes y después de l a
guerra «incivil» . Como niño bie n
(pronúnciese en francés, es decir, «vian»), su sport preferido er a
el tenis. Debía practicarse rigurosamente vestido de blanco, co n
unas raquetas de madera, simi lares a las empleadas para e l
frontón, pero más amplias y co n
unas cuerdecitas en medio bie n
tensadas, en unas pistas de tierra, de hierba o de cemento, marcadas con líneas blancas y sepa radas por una red . A todo e l
mundo normal aquello le parecía ,
ahora sí, una auténtica mariconería, si bien una mariconerí a
cara, porque las pistas precisa ban de mucho terreno, duchas ,
sirvientes, sillas y muchos «¡Off!
¡Uf! ¡Saco! ¡Perdone! ¡Disculpe !
¡Just!» y cosas por el estilo . Ver a
dos tipos corriendo tras una pelo tita, sin despeinarse, empeñado s
en hacerla pasar al otro lado y pi diéndose disculpas cada dos po r
tres, sublevaba a las masas .
Cartel, de tamaño mediano, anunciador de hola granularla 1!crrk
20
Para la boca BUCALIN A
■Nlur,u Ragi.trada )
Excelente Elixi r
Dentífrico antiséptico agradabl e
Destilado y precis o
rara dala,, de macla ., en . o
re)dande,;,ni, nt„
da ,•nda,. ea
BUCALIN A
y de 3 pe .etuy nay
Frascos le
quitas de prueba
-
A segar los ponía yo a ésos .
Murmuraban los ciudadano s
cuando vislumbraban sus ejerci dos a través de los enrejados cu biertos de boj de sus instalacio nes deportivas, siempre privadas .
Doña Antonia pensaba lo mismo ,
pero el tenista era un partid o
maravilloso para la niña y, ade más, ella se limitaba a sonreírle ,
vestida de rojo, con una gran cin ta del mismo color sujetándole e l
pelo, mientras le sostenía el fras co de Kola granulada Merck, el
30 ct . . c
el
fra.-
laborat..rir+
tónico que tomaba para intenta r
ganar alguna vez a su amigo y
contrincante Francisco Borj a
de Corriente y de Cualquiera ,
perteneciente, según denota e l
«de», a una familia casi aristocrática afincada en Mallorca y
dedicada a negocios de banca, a
quien era imposible vencer en l a
cancha aunque se hubiera rot o
un brazo y el novio de la niña s e
atiborrase de la Kola granulada
fabricada en Alemania, como lo s
coches, los televisores y el fas cismo .
21
Anuncio de Captagon vitaminado
A la más pequeña de todos le dio ,
ni más ni menos, por la hípica .
Durante mucho tiempo vio su s
anhelos terriblemente frustrados ,
durante todo el tiempo en que do n
Curro permaneció tumbado y l a
familia hubo de vivir con lo pues to y lo obtenido de las rentas fa miliares . Cuando don Francisc o
mejoró y se dedicó a los negocios, gracias a su buen comportamiento con su madre, a que l a
acompañaba siempre que le dab a
un ataque de histeria mientras l a
criada le traía una taza de hierbas antinerviosas Ramis, le compraron una magnífica yegua y s e
convirtió en afamada amazona.
Antes de montar, nunca olvidab a
su higiene bucal y se lavaba l a
boca con el Elixir Bucalina, amnciado con unos cromitos con imágenes hípicas .
DA O
STIMULA
-9E LAS
f
+
ACUITADES ,
FISICA S
E
INTELECTUA
A los pequeños les dio por montar en globo . Por ahí no pasó n i
doña Antonia, ni don Curro, metido de lleno en su manía psicopática de comerse el mundo .
- Ni montáis en globo, ni lo otro .
Cuando seáis mayores vosotro s
veréis . . . De momento, mientra s
sea yo el que lo tenga que pagar ,
ni harto de vino. ¡No hay más qu e
hablar !
Ante el disgusto de los vástagos, doña Antonia les consiguió, en la oficina de Farmacia .
unos anuncios del Capta t on vitaminado, un psicotónico y
energizante que venía con un a
historia de las ascensiones en glo bo . Los más pequeños se quedaron tan conformes, pese al terri ble lamento de los reclamos :
EN LA PRACTICA (JE LOS UtPUF£rt 5
▪
•
•
«Globos. aviones . cohetes espaciales . . . ,v. por otra parte, las
+Ut
ALCA.
1_.~
^~ ■p R
ili1A tt tNIRENAMItNI í(TtdlUURUCA N 11+tRG1A M'1 ;C_UTA R
AIGURAA UNA C+RANREStS£ENüA A LA /A11t; A
AUMENIA LA
."~ .
SOSirtNE El
- . .
x..IINRMC El•
Secante donde se anuncia la /yola t,stier. un preparado destinado a aumentar las energías . sobre fotografías (le diversas actividades deportivas
22
neuronas humanas siguen sien do como en la Edad de Piedra . . . ».
Inconsciencia de los jóvenes qu e
de todo protestan y a todo se acomodan, pues quien de joven no e s
revolucionario no tiene corazón ,
y quien de viejo no es conservador no tiene cabeza . . . o al revés ,
no me acuerdo bien .
Placa metálica para ;enunciar la Quino-hola. un exquisito licor higiénico preparado en falenci a
por lïrente lila ' . según consta en el anuncio, analizado químicamente por el Dr . Pese t
23
LOS ABANICOS Y LA PUBLICIDA D
Puestos los publicitarios a dota r
de elementos superfluos . pero d e
un cierno uso cotidiano, a la familia de los Corriente Cualquiera . no podían olvidarse de lo s
abanicos y de los «pay-pay» . ta n
necesarios para proveerse d e
airecillo fresco en las calurosa s
tardes veraniegas de nuestr o
país.
El abanico es un ornamento fe menino de uso inmemorial . Las
damas españolas lo han emplea do para aliviar el bochorno vera niego en las reuniones sociales .
en la iglesia, en el teatro, en lo s
bailes .
En los templos, en el momento d e
la consagración . tras el campanilleo de los monaguillos, queda ba un sepulcral silencio, sólo rot o
por el sonido del viento ocasionado mediante el vaivén del abaniqueo de las señoras, el ruido de l
roce de las varillas entre sí y e l
tintineo de las pulseras de la s
más pudientes, que chocaban e n
sus muñecas al hacer mover e l
utensilio para su refrigerio personal . El abanico no sólo es un a
pieza útil : también lo es de lujo .
ahora que los aires acondiciona dos lo han destinado al olvido .
Los hay de marfil, de carey, d e
materiales nobles, con telas decoradas magníficamente a man o
y conservados en estuches delicadísimos .
Los «pay-pay » son otra cosa . D e
procedencia seguramente asiática, tienen una misión purament e
utilitaria . Sirven sólo para dars e
aire, no para adornarse como lo s
abanicos, para que las dama s
los empleasen a manera de singular telégrafo de señales, or a
velando los ojos, ora enseñándolos; en ocasiones corno bastón d e
mando : en otras, a manera d e
temporal refugio ante las mira das inoportunas o impertinentes .
El «pay-pay» es una simple lámi na, en ocasiones adornada . e n
otras no, adherida a un palito ,
mediante el cual se agita y hac e
moverse el aire para refrescar le vemente a quien lo emplea .
Como era de suponer, los que lo s
boticarios y fabricantes de específicos entregaban a doña Antoñitay a todas las Cualquiera y
Corriente, incluso a alguna Nadie que los solicitara, no eran d e
materiales caros, una simple lámina de papel iluminado pegad o
a unas varillas de madera, en el
25
caso de los abanicos, y un pedazo de cartón adherido a un palo
en el de los «pay-pay», pero resultan difíciles de conseguir en l a
actualidad y son extremadamente curiosos .
La razón por la que se utilizaro n
en la propaganda farmacéutica e s
un misterio de difícil solución, s i
no se quieren hacer hipótesi s
arriesgadas o poéticas .
Lo más probable es que se debie ra a que, para la publicidad, s e
empleó de todo, lo mismo que e n
la de otros productos de consumo, y entre los objetos ofrecidos
estaban los abanicos y los «paypay» .
Si esta primera hipótesis es correcta desde el punto de vista his tórico . y así lo cree el historiado r
que esto escribe, resulta curios o
observar las constantes peticiones de trato singular a la Farmacia ,y a los medicamentos por parte de los profesionales, desde su s
órganos de representación, l a
Unión Farmacéutica Nacional, lo s
diversos colegios y sindicatos far macéuticos, mientras muchos d e
ellos empleaban, para los produc tos medicinales que fabricaban ,
las mismas técnicas de propaganda que cualquier otro comerciante . sin ninguna diferencia n i
en los contenidos ni en los continentes .
El literato, que también escrib e
esto, prefiere una hipótesis me nos histórica, más cercana a l a
literatura y, por ello, acaso má s
realista .
El maravilloso escritor gallego
Alvaro Cunqueiro escribió tin a
historia de la Farmacia . Tertuli a
de boticas prodigiosas, en la qu e
ni una palabra de lo que escrib e
se ciñe a la verdad histórica, tod o
son ficciones, fantasías y ejercicio exuberante de creatividad . Si n
embargo . acaso por eso, ni un a
de las palabras escritas es mentira, y si la historia de la farmacia se desarrollara en la universidad en varios cursos y n o
apenas en unos meses, el del gallego tabulador y fantasioso habría de ser libro de obligada con sulta en tre todos los alumnos, po r
lo bien que refleja el ambiente .
el fondo de las cosas, aunqu e
para nada se atenga a la realidad . Con la literatura pasa eso .
El narrador, mentiroso y Tabulador, imita a la naturaleza au n
sin quererlo y más la sigue cuan to más alejadas de ella establezca las coordenadas de su ficción
porque . no sé si se habrán dad o
cuenta. la naturaleza hace permanentemente lo que le viene e n
gana y luego van detrás de su s
actos los científicos para inten tar explicarlos .
No me pregunten ustedes que a
qué naturaleza me refiero, a la de l
Génesis, a la de Ilipócrates o a
la de Darwin, porque no está e l
horno para bollos, ni la tarde par a
crucigramas, aunque, ya que l o
han mencionado, me parece a m í
que el concepto de naturaleza
26
más usual es el romántico, qu e
deriva, desde luego, del hipocrá tico. Es decir, de aquellas premisas que explicaban que lo na tural es bello, justo . ordenado y
produce orden bello : además ,
por su propia esencia, participa de la divinidad . El concepto ,
científicamente, está muy anticuado . pero desde los poetas
hasta los ecologistas sigue n
participando de él . aunque s e
creara en el mismo momento e n
que se inició el pensamiento oc cidental .
Pues bien . Cunqueiro asegurab a
que el poderoso Rey de Siam envió al no menos poderoso Obisp o
de Roma tinos quitasoles mágicos . Tenían la virtud, los mencionados artilugios, de dispersar l a
niebla y dejar el cielo azul y res plandeciente . si bien veían limitados sus prodigiosos efectos a
los días de sol esplendoroso. En lo s
de lluvia o de bruma . convenía de jarlos bien ordenados en el guardarropa . El Obispo de Roma lo s
aceptó y. prudente como siempre
en el Vaticano, no los utilizó ja más en días nublados, con lo cua l
sus mágicos efectos fueron l a
admiración de cuantos pudiero n
observarlos .
En el mismo orden de cosas, cre e
una parte de mí . y con ella doñ a
\ntoñita Corriente de Cualquiera . que los abanicos tienen el po der no sólo de refrescar, no sól o
de servir para el peculiar diálog o
sin palabras del cortejo, sino tam bién para alejar los malo s
efluvios, los malos olores, la «ma l
ari a» que decían los antiguos y a
la que atribuían todas las enfermedades . Por eso, en cuanto s e
declaraba una «peste», una enfermedad contagiosa antes del sigl o
\l\ (el momento en que se descubrieron las causas micro biológicas de ese tipo de enfermedades), primero se prohibía el
\banico de propaganda (Bálsamo
7,om,v<i )
tránsito desde las ciudades enfermas a otras ; se establecía un sis tema de cordones militares y d e
lazaretos para intentar impedir e l
contagio, aunque se transmití a
por debajo de las bayonetas : mediante las ratas si se trataba d e
peste bubónica ; por medio de la s
aguas si era el cólera ; a travé s
de los piojos, si hablamos del ti fus . El mal se transmitía y seguí a
su marcha imparable hasta qu e
los cambios meteorológicos aca baban con la actividad de las bacterias causantes de la enferme dad y remitía en su virulent o
ataque a los humanos, que, cuan -
27
do se encuentran desesperados ,
siempre recurren a la violenci a
desatada o más o menos regla mentada y sosegada en los ejércitos .
Pues bien, en esas ciudades s e
prendían grandes hogueras y e n
ellas se quemaban sustancia s
aromáticas que impidieran l a
«mal aria» o «malaria», el hedo r
responsable, según los médico s
del momento, de la transmisió n
de las enfermedades . En estos ca sos, los médicos aplicaban su s
consejos preventivos y huían d e
los lugares infectados . No lo ha -
cían sólo por miedo o falta de éti ca, sino por coherencia científica .
Desde los tiempos hipocrático s
el único remedio aconsejado contra las pestes era la huida : largo,
rápido y lejos . No iban a ser los
médicos quienes incumpliese n
sus propios preceptos . Los boticarios lo tenían peor, porque si
querían trasladarse, o bien se llevaban consigo las boticas, o acep taban la quiebra y la ruina . Po r
eso solían quedarse en los lugares infectados e inventaban numerosos sahumerios con los qu e
intentar aliviar la situación de lo s
enfermos y la suya propia . El mis mo botafumeiro, el famoso incen sario de la catedral de Santiag o
de Compostela . tenía una dobl e
misión, litúrgica y sanitaria . Des de el punto de vista sacro, el olo r
del incienso sería agradable a
Dios, de la misma manera que s e
han ofrecido y se ofrecen a los d e
todas las religiones y creencias .
además, en la catedral se producían constantes aglomeraciones
de romeros y con el incienso s e
trataba de mitigar la posible «ma l
aria» y la transmisión de pestilencias . Los peregrinos llegaba n
a la ciudad compostelana sucios .
cansados y malolientes . en bus ca de una paz espiritual que muchas veces finalizaba en la de l a
sepultura, a causa de las privaciones . del ataque de los bando -
\bani('n de prupa ;vuula de la Varmaci ;i'fnrnn~
28
Abanico de propaganda de la Farmacia Torrens
leros o de las fieras del camino .
Cuando alcanzaban su meta, an tes de entrar en la catedral le s
obligaban a bañarse en los pilo nes de la entrada, quemaba n
sus harapos y les dotaban de u n
sayal limpio . Luego entraban e n
el templo, henchidos de gozo ,
para dar gracias a Dios . El botafumeiro cumplía la doble misión de acompañarlos en su s
oraciones, hacerlas más grata s
al Señor, y evitar cualquier tufo
residual, cualquier hedor, l a
«mal aria», considerada el ori -
gen de todas las enfermedade s
contagiosas .
Anverso y reverso de «pap-pa} • I ~u'~~~~aC,uul~ i
29
Todos los boticarios sabían y sa ben esto . Tal vez por ello, e l
Ceregumil, en su incansable cam paña publicitaria, fabricó también sahumerios para mantene r
las casas perfumadas, tan apreciados por los Corriente com o
antecedente de los moderno s
aromatizadores o ambientadore s
hogareños . Tal vez por eso, tam bién, se emplearon los abanico s
y los «pay-pay» en publicidad . Lo s
abanicos, ciertos abanicos, tienen o al menos deberían tener l a
virtud de alejar de nosotros lo s
malos aires de la enfermedad y
de ponernos a tono para disfrutar de los lugares yde las activi dades que nos son cotidianas : las
tertulias, el teatro, los paseos ,
las devociones religiosas, o lo s
tejemanejes amorosos . En ese orden de cosas, el Bálsamo Zora,l a .
empleado contra las enfermedades de la piel, se anunciaba e n
un abanico en cuyo reverso se
podía ver una escena de la zar zuela La canción del oh ido, y l a
-I'ay-pay» de pmpaganda
30
farmacia y laboratorio del Doctor Torrens, que permanecía
abierta las veinticuatro horas de l
día, con todo tipo de curas, antiguas y modernas, mediante otro ,
en una de cuyas caras aparecía ,
ni más ni menos, que Charles
Chaplin, evidentemente converti do en Charlot, uno de los héroe s
de todas las familias Corriente y
Cualquiera, cuando empezó e l
cine mudo y veían sus película s
acompañadas del sonido alegre
del pianista de la sala .
En los «pay-pay» tenemos de todo ,
desde las damas toscamente
modernistas ofrecidas por el boticario de Carabanchel, Luis Be «I'ay-pay» (le propaganda . La de la Farmacia serra . el primero por la izquierda, y el de la Farmaci a
Cepeda, el segundo pur la derecha
«Pay-pay» que anunciaba la Digestona chorro
«Pay-pay» de propagand a
31
Anuncios del
.
Die S Elixir Pujol .
nito, para anunciar su establecimiento, hasta el plegable d e
Rinolina Uri%e para los catarros ,
en que aparecen dos niños lomándose un batido . Algunos ,
como el del Tónico talenter, el d e
la Gleíina o el del Jarabe Bebé ,
reflejan los productos que anuncian . Los más no tienen nada qu e
ver . El magnífico de los Liltnoi(leti
Serra presenta a un loro con un a
caja de tilines entre las garras :
el Biolacl(ígeno, comercializad o
por los hijos de Carlos lilzurrun ,
se nos presenta ahora mediante
unas flores ('ampaniforines . La
Farmacia Cepeda se anuncia co n
tina novia que se contempla e n
un espejo que, a su vez . es el espejo . La farmacia Serra, con un a
escena (pobre) galante del sigl o
\VIII la I)i estona chorro. fabricada en Elche, mediante u n
cantante en quien me parece re conocer a Luis Mariano . Para qu e
no falle de nada, la Caliaspirina
ofrece una copa que, al abrirse N
desplegarse, nos hace ver a un a
señora joven, probablemente l a
mismísima Antoñita Cualquiera ,
tocada con un pañuelo verde N
arropada en un albornoz, a la ori lla del lago del pueblo en dond e
solían bañarse pese a los refunfuños de don ( yayo . el párroc o
chapado a la antigua N enemig o
de los peligros del baño para la s
almas . Los lithinés del docto r
con distintos dibujos del .<pay--pa■”
32
Gustin, por el contrario, nos ofre cen algunas estampas de la familia del novio de la hija d e
Antoñita, el Cualquiera venido a
más, tomadas al pie mismo de l a
pista de tenis o al borde de la pis cina, con personas repeinadas ,
bien vestidas y sonrientes, gracia s
al uso inmoderado de la mencionada bebida litínica que, según s e
nos hace ver, era de lo más snob.
1,1 este campo, como en todos los
demás, la realidad es múltiple . S i
se observa desde un solo punto
\nun c iu del Elixir rnrntnlina rlentíirira dcl Dr.
. Indrru
33
de vista, resulta intolerable y has ta éticamente repudiable ; si des de otro, divertida, curiosa, entre tenida y fantástica .
Los legisladores, que tienen mu y
poca imaginación y menos senti do del humor, han prohibido l a
mayoría de estas maneras de hacer publicidad para los fármacos .
Sin embargo, para el coleccionista y para las familias Corriente s
de todo el país, resultan de lo má s
sugerente, divertido y, en ocasiones, hasta útil .
Dermatitis
seborreica
Pitiriasis
versicolor
INDICACIONE S
d.
boronca y d . la
,
arnlo
va■ . ipna
POSOLOGIA
D.mr acodo al po9paredo wbnv
L. 'oda ale■nade dran. uno. 20
nona:
o :nodo do lu9udo . R. -
puti,u
Pa,
da la p■tiEiui. ••h.ldol m
no, nllvn. dolo ,
:oda la .h
.
duchandow la moho. alguna.n
y .paiundo dada 3-P dlu .
PRESENTACIONES
Y COMPOSICION
Rio.lad1d.
Tnaac . da 1 . y 35 uc .
aullu■
aolun . al E,5 ', vn kiuulo
dolargun■a . P.V.P . 13v.. y 91.ll.od.dml
nuca. da . y]5 cc . co n uifu
ro da cadmio al 1
an vnIon.l o
dntn :u .do. P .V P
y ag ..
1NTOXICACIO N
Y TILATAMIENTO
En ua,o d. .loxiodu .In
vId°*o
y 1.vhdo Eon
ondan
vó-
.
purgado, .ano
P..
UECTOS SECUNDARIOS Y
CONTRAINDICACIONE S
No .u cono. . En ndnftc■o n .
19
puedan mahu
IuRIACH
ar.ch av
1
C.
A
LA PINACOTECA PUBLICITARI A
llna de las cosas que más contribuya a educar el gusto artístico
de los Corriente Cualquiera fu e
la publicidad farmacéutica .
Si la mayoría de los laboratorio s
de específicos y especialidade s
ha utilizado de todo en sus quehaceres publicitarios, la pintur a
ha sido empleada por casi todos .
La publicidad, decíamos, es com o
las pinacotecas de los Nadie. A
partir de ella se puede fantasea r
una historia sin aristas, como l a
que estoy escribiendo, en dond e
la memoria mezcla unos elementos con otros y surge una fábul a
muy similar a la que pudiera con tar alguna familia mientras repasa los álbumes de fotos, en don de se mezclan las de los abuelo s
con las de los padres, los hijos y
los nietos . Las pinacotecas, además de exposiciones del geni o
humano, son la memoria de lo s
poder osos . de los reyes, de los gran des de la Iglesia, de los nobles, d e
los ricos . A partir de ellas se puede fantasear y se escriben historias que no tiene mucho que ver ,
por lo general, con la realida d
ramplona de los hechos . Las pinacolecas son la memoria de lo s
héroes, de los grandes . Las co-
lecciones de publicidad de los vi llanos, de los pequeños, de los supervivientes . Muy pocos elemen tos publicitarios están en los
museos . 0 no se consideran dignos de tal honor o, si se toman
por arte efímero, se guardan e n
algún centro especializado o d e
arte moderno .
Es natural . Los Corriente, lo s
Cualquiera, no quieren verse reflejados a sí mismos, con sus mi -
Tarjeta de Los ¡lotivi ho,•:, de 1)1
35
serias, con sus inquietudes y limitaciones, prefieren ir a ver a
los héroes y soñar con que algú n
día pueden convertirse en uno d e
ellos, para así poder trascende r
su mediocridad diaria . La publicidad la crean normalmente arte sanos, en ocasiones sin demasiadas luces . La pintura la realiza n
artistas, siempre iluminados, se a
cual sea el grado de su genialidad . La pintura, además, es u n
arte aparentemente neutro, bie n
Ael ;wquez . Anuncia el Jarabe (le Ilipofosfitos de J . Climen t
GOY A
Tarjeta que representa los desastres del 2 de mayo, de Francisco de Goya . Anuncia Jarabe de Hipotbsiito s
de J . Climen t
Tarjeta de Charles I. mi (F ing/vierte de Antoo n
van Dyck : anuncia las lguas de Cara bab a
aceptado por todos y que proporciona conversación en una mes a
de gentes bien educadas, en don de no se debe discutir de negocios, de política, de religión, ni d e
sexo, sólo del tiempo, de los rumores inocentes o de pintura . Es o
sí, sin demasiado apasionamiento .
A doña Antonia, desde luego, l a
iniciativa de la industria farmacéutica la dejó absolutament e
bien impresionada .
rancla (le Las tres edades del hombre, de Lorenzo Luto, para anunciar los Hipofostitos Salud para la
Neurastenia
36
PULMO -GREY
Tarjeta con la Lección de anatomía del profesor Talp, de Rembrandt, para anunciar el Ceregumil
En casa de Antoñita ya había láminas de pintores clásicos es pañoles o extranjeros con propa ganda farmacéutica . Las más
antiguas, en blanco y negro, co n
detalles de cuadros de Velázquez ,
Goya y Murillo, para anunciar e l
Jarabe de flipofosfitos de J. Climenl . o de Van Dyck, emplead o
en los anuncios del agua de Ca rabaña . Más adelante, aparecieron las copias en color, de pe queño formato . El Ceregumil, en
la colección de ilustraciones mé dicas, dio a conocer la lección
de anatomía del profesor Tulp, de
Tarjeta con el Retrato ecuestre del Infante don
Baltasar Carlos, de Diego Velázque z
Rembrandt ; Pulmo-grey, Neurogrey y Prevalón continuaron co n
los grandes, Velázquez y Goya ;
Somatose utilizó una maravillosa reproducción de La últim a
cena de Leonardo da Vinci para
su publicidad, y Metaclox empleó
a El Bosco, con el lema «lo ópti mo se puede mejorar», que no s e
hubieran atrevido a poner, po r
ejemplo, a Velázquez . Roche publicó una serie de obras de heridos, de autores clásicos, que a
doña Antoñita no le gustaro n
nada porque, a su parecer, la pin tura no está para enseñar cosas
Tarjeta con La partida de caza, de Francisco Goya ,
para anunciar el Prevaló n
37
LEONARDO DA VINCI
Tarjeta con La última cena, de I,eonardo da vinci . para anunciar el Suma!
sucias y desagradables. sino para
alegrarnos la vida . 'Tampoco le
gustaron demasiado las obras de
artistas modernos, de no excesiva fama, ofrecida por los labora-
t,, e
tonos Promesa : se le antojaban
tristes. inacabadosy desagradables de mirar . Alucho mejor le
pareció la costumbre de ampliar
el tamaño de las ilustraciones
38
regaladas . Calcio 20 coenzima s
lo hizo con el Kelralo de Juan de
Pareja . de Diego \elázrlnez . y l a
1,arn'aciclina se anunció con una
serie pictórica que llegaba desd e
Detalle del Jardín de las delicias . (le El Bosco
los clásicos hasta los más modernos, lo que le sirvió para ampliar,
definitivamente, su cultura pictórica . Le gustó mucho La reunión
en la botica, de Gutiérrez Sola-
Tarjetón anunciador del Birobin, de Promes a
na, porque los tipos eran exactamente como ella los había conociclo en su juventud . Parecía, mismamente, una fotografía . Los
boticarios con el gorrito de me-
39
dio judío, que ya nadie utilizaba .
Los hombres más importantes a
su lado ; el alcalde o el médico ,
leyendo el periódico ytocado po r
un sombrero de ala plana, mien -
lr'ntrio .2o lr' ornriurn a
Cartel de gran lamafio . Retrato de Juan (le Par%a. de Diego \elazquez . para anunciar Calcio 20
Tarjetón anunciador del Rirvrbin . de ('romer a
tras los terratenientes se cubría n
con sombreros hongos y el arte sano más ilustrado con boina y
sostenía una cachimba en l a
mano . Desde un punto de vist a
muy diferente, le encantaron la s
obras del museo tleu de Palian '
que se incluyeron en la colección .
El circo, de Seurat, y La dama de
los abanicos . de I ;douard 1lanet ,
le parecieron obras maestras .
muy distintas a las de nuestro s
grandes pintores, pero tambié n
Lamina de La reunión en la bolis . de Gutiérrez Solana . dedicada a anun c iar la Lauraeieilina
40
maravillosas . Velázquez, creía
ella, era como un fotógrafo capa z
de observar más allá de las propias fotografías . El aire que circu la por todas sus telas es imposi ble captarlo mediante un aparato
fotográfico . Tampoco es fácil lo grar que los personajes pose n
como lo hacen en los cuadros de l
maestro . Los borrachos, con es a
cara a medio camino entre la idio cia y la beatitud : el herrero de la
fragua . asombrado y alelado ante
la llegada del dios . . . Velázquez .
le parecía a ella, que apenas había visto pintura, el no va más .
En un periódico había leído qu e
su obra era la de alguien que cie rra una época, y le parecía mu y
bien . Estaba absolutamente con forme . No sabía exactamente l o
que cerraba, ni lo que abría, pero
le parecía excelente una afirmación tan rotunda y la atribució n
del puesto de cancerbero artístico al maestro . Goya le gustab a
algo menos, pero también mucho .
No estaba segura de si el uno er a
anterior al otro o viceversa . per o
los dos eran de su agrado . Desd e
luego Goya estuvo presente e n
eso (le la francesada y Velázque z
no. así que . . . después de hace r
memoria y de recordar las clase s
de las monjas se dio cuenta (l e
que Goya era posterior y le gust ó
algo menos . Impulsada por la s
tarjetas de propaganda . un día s e
Lámina de I;I cirro. (le GeurgeS Seurat . para la Lauricina
41
MEDULOSTE O
s:
Sales cálcicas óseas . Medula roja y Periostio
lndicadistmo en el raquitismo, tuberculosis, pretuberculosis, anemia ,
osteomalacia, embarazadas, niños en crecimiento, etc .
PROTEAL MÁRQUE Z
Tarjeta de San lnlonio tbarl tiSila a San Pablo . (le Diego Aclbzquer, para anunciar ~A~ruro- rr~ t
(Antes PPOTEOI )
ProteInas no especificadas obtenidas de diferentes tejidos animales, d e
derivados micmbianos y lipoides . Para el tratamiento de todas la s
In fecciones agudas o crónicas, procesos locales, septicemias, grippe,
bronquitis, pulinonias, reumatismo de origen séptico, etc .
Tarjeta de La rendición de Birria, de Diego Aelárqucr . empleada como soporte publicitario
42
Impresión de un dibujo de Uurcru en tablilla . Anunciaba cl
la/luir(
Cartel grande con un dibujo de caballo que anuncia Norbitrvrl
43
hizo acompañar por una de su s
hijas hasta el Museo del Prado y
cambió de opinión .
- Todos, hija mía, me gustan to dos . Velázquez tan majestuoso .
tan sobrenatural en su realismo ,
tan elegante, tan solemne, ta n
perfecto . Goya, tan alegre en su s
colores : tan triste en sus dibujo s
y en sus pinturas negras : tan di vertido en la manera de retrata r
a unos y otros ; tan sagaz en l a
forma de adivinar las virtudes y
los vicios ; tan irónico ; tan mordaz . . . Y El Bosco, tan extraño y
al tiempo tan bello . Todos, hij a
mía . me gustan todos .
Sorolla . lámina (le gran tamaño, montada en tela
La colección de Lauraciclina le
abrió los ojos hacia una pintur a
desconocida para ella, la d e
Gutiérrez Solana, que también l e
agradó, y la de los impresionista s
que le entusiasmó .
- ¡Qué belleza, niña! ¡Qué mane ra de expresar la alegría . el color
y el movimiento. con apenas uno s
trazos! ¡Qué extraordinaria diferencia con los grandes clásicos y
cuánta belleza en su originalidad !
Así ha de ser la pinturay el arte ,
un constante avance en un camino personal de creación .
Cuando sus amigas criticaban l a
pintura moderna, siempre a ex -
Lámina . de gran tamaño . de La estación de Saint-Lazare . de ('laude Nonet . para anunciar Abrogan
44
l)EY,X ®
KIlVE
Psicotropo
anticonvulsivante
nOI E
cIÍBO
OrexfReno anabólico
FIIAGI
VIX
Flcbotónico Mayor
Protector Capila r
TEM
PLAX
Ansiol(ticospasmol(lic o
Mrwnwg"
~!Ms~
Lamina . de gran tamaño, con el Ensayo de ballet en el escenario. de Edgar Dégas, para anunciar productos del laboratorio I,aba z
Estampa oriental de gran tamaño ofertada po r
t Xumin
pensas de las opiniones de su s
maridos, quienes, a su vez, de pendían de las de algún crítico ga rrulo habitual de la prensa conservadora, no lo toleraba .
- ¡Qué sabréis vosotras! Si vierais
el museo Jeu de Paume.
- ¿Lo conoces? -Le preguntab a
María Amalia, que había empezado a estudiar Filosofía y Letra s
antes de casarse con un intermediario de frutas y dedicarse a
criar niños .
Lamina (le La encantadora de serpientes . de Ilenri Rousseau, para anunciar Quimiopen
45
-
No -confesaba ruborizada- ,
pero he visto las láminas .
En neuromade y neuromade fuerte, la hormona parotirlea 1 sjalotio ' . I mantiene y regenero los tejidos meaenquimatasos .
aumentando de modo selectivo la vascularización de las zonas osteoarticulares .
En neuromode INYECTABLE y en neuromode CAPSULAS, la vitamina 8,, desarrolla una acción cortisónica que refuerza l a
propia de la deaametaona, por lo gua con dosis mínimas de ésta se consiguen efectos óptimos y notable reducción d e
fenómenos secundarios.
En 0eUr01110de CAPSULAS, el TATO (original derivado Uaminico eficaz por Wat mall
ejerce plenamente la acción aotireuri .
tica de la vitamina 8, y el tiocolchicósido actúa corno decontracturante y antiinflamatorio efectivo .
En cualquiera de las famas de RlufOmade, la vitamina 8,, contribuye a reforzar la acción amtielgica del resto de lo s
componentes .
- Debes saber, amiga mía . que e n
el Jctu de Paume, o Juego de Pelota, se confirmó la Revolución
Francesa v la admisión constitucional de los tres estados . (Jueg o
en un lugar de esa calaña, nad a
bueno puede estar expuesto .
- Qué tendrá que ver una cos a
con la otra . . . No dais vuestro brazo a torcer aunque os maten .
Nunca llegó a visitar París pero ,
poco a poco . pudo adornar s u
casa con las magníficas lámina s
entregadas por los laboratorios.
HidruvicoMeminel . .
Viia,nina 8, IPiridoainal .
Via
,a B,,
;Acido wrgimiool . .
siolotin
l Hormona parol(d.a) . .
Lidooaina OH
Disolvente :
Deaanelaona be
.
tal alado de Imtatol . .
AWa destilada . c .s.p. . . .
I .00o ring.
00 erg.
2,25
20
1,5
2
5 .000
50
n,cg.
60
mg.
mg.
mg.
mg.
mg.
c.c .
Ciarlocobalmina T.A .T .D . lOisulfuro de tiamina
netib113-acetibdihidrotioctatol
Vitamina 8,
Vitamina 8, Vitamina 8,r
Daaarnatawna bese
lal estado de fosfato
Tiocolchicósido 1,5
3
mg.
c.c .
1 .000 min.
.8 .
50
5
50
50
0,5
mg.
4
mg.
nlp.
mg.
rrlg.
)
Baio eawieu 6 PUJISAWA PHARM .. Co. LtA.
Outa . JAPON
Roche regaló unos dibujos de Du rero impresos en tablillas de madera para anunciar el 1 Mitin' . La
idea era estupenda y los graba dos bastante cuidados y nítidos ,
pero utilizaron unas maderitas ,
así como de caja de frutas, endebles y baratas que acabaron doblándose al poco tiempo . Doñ a
Antonia, muy enfadada, fue a pro testar a la botica .
- Parece mentira . hombre d e
Dios, que unas personas instruidas e ilustradas ofrezcan alg o
tan valioso como la cultura e n
unos materiales tan desastrosos .
Además, para anunciar un iran -
Látnina (le H olfato, de Jan Brueghel de Velours . para los Laboratorios h1ade
46
quilizante . ¿Me ve usted a mí ?
¿Estoy tranquila? Les dice a esos
señores que se metan sus tablillas por donde les quepan y que
no insulten de esa manera a l a
pintura .
El boticario quedó anonadado y
la madera grabada, como la mayoría de las de esa colección, sir vió para atizar el brasero, pero e l
boticario se quedó con la copla y,
con tal de no perder tan buen a
cliente, le dio la copia del Retrat o
de Juan de Pareja . ofrecida po r
Calcio 20 coenzimas, casi a tamaño natural, el retrato de un des nudo de mujer, sobre tela, d e
Sorolla . regalado por los laboratorios Morgens, la colección de l
!Museo Metropolitan de Nuev a
1órk, ofrecida por los laboratorio s
Labaz, la de impresionistas rega lada por Neuromade y alguna s
estampas orientales, muy exótica s
y finas, gentileza del Aicamín. Gracias a tanta amabilidad, doñ a
Antonia pudo poner su casa com o
un auténtico museo para envidi a
de familiares y amigos . Poco a
poco, gracias también a la propa ganda farmacéutica, la familia Corriente Cualquiera empezó a disfrutar de un barniz de cultura n o
sólo literaria, sino también pictó rica, y su casa empezó a resplandecer con joyas de arte copiadas .
La :Huna Lisa . de Lconardu (la kinci, anuncia cl 1ï, o'ón
47
LA PUBLICIDAD Y LOS OBJETO S
DE MEDIDA
Cuando doña Antonia enmarcó la s
maravillosas láminas, se encontr ó
con un terrible problema : debí a
colgarlas . Por aquella época tenía
Na servicio, pero no se fiaba u n
ápice (le su sentido estético . Decidió hacerlo ella misma . Se pus o
a buscar en la caja (le costura . y
se encontró con que no tenía cinta métrica . Evidentemente . bajó a
buscarla a la oficina de farmacia .
- Don ,lbilio . ¿podría usted rega larme un metro '
- Espera, hija mía .
\ falta de metro, el boticario l e
entregó dos reglas, una de Clefin a
y otra de 1,'stomaeidul, de apena s
Veinte centímetros cada una .
Doña :Antonia las recibió con cierto escepticismo N se puso a l a
tarea . Por muchas marcas qu e
hizo en la pared, le resultó imposible medir los espacios adecuadamente para instalar los lienzo s
de manera correcta .
- Oiga, don ;Abino . es imposible
medir con esas reglas. Se las h e
dejado en el despacho a mi mari -
do por si le vienen bien para su s
libros de cuentas . Mire usted a ve r
si tiene alguna otra cosa por ahí .
Después de mucho trastear por
la rebotica, el farmacéutico le dio
49
una cinta métrica . obsequio d e
Ceregumil. Nuestra protagonist a
subió a su piso v, al ver que e l
metro era metálico, aprovech ó
para intentar medir la fachad a
externa de la ventana (le la coci -
~IIIIII~III I IIII~III I II~IIIIi l llll)llil lllf¡IIII IIII~III I tIII(III I IIII~III I IIIIj111 1 IIII~III I ItII~III I IIII~IIl l l1(I~IIII~1111~III I IIII~IIIIIIIII~III I IIIIjIIII~1lilllll l lllllllll
II
21
31
LABORATORIO :
41
61
EXITO
61
71
61
91
110
SEGURO EN LOS ENFERMOS DE
111
112
11 3
~
~ cct,n r?a
o .
Rauricó, 1 4
e~eC FI CIM A
11 5
ESTOMAGO c INTESTINOS
Víctor SEGALÁ erog a
L .A .V I. S .A.
114
Íli
després de les comidos
116
11 7
I16
119
2 1O 0
Desaparición de todas
las molestias gástrica s
dolor
acide z
pirosis
etc. etc.
Reglas de cartón con publicidad farmacéutic a
na, en donde quería hacer insta lar unas jardineras y llenarlas d e
geranios . Algo temerosa de la s
alturas, ordenó a una de las cria das la toma de medidas . La chi ca, recién llegada del pueblo, co n
las manos llenas de callos a cau sa del trabajo en el campo y d e
sabañones por el frío pasado, e n
uno de los movimientos, con me dio cuerpo al aire por fuera de l a
ventana, se azoró, estuvo a punto de caer y soltó el metro, que
se perdió en la oscuridad de l a
galeria vecinal, donde no se podía acceder más que cuando l a
portera volvía de hacer la compra para su familia, a eso de la s
dos y media de la tarde .
Rabiosa, a punto de tener uno d e
sus afamados ataques de histeria, doña Antonia volvió a bajar a
la Farmacia . Don Abilio, sin dejarla hablar, le dio otra cinta mé trica plegable, ésta propaganda
50
de Magnesia San Pellegrino y co n
la cinta de tela, no metálica . Gra cias a ella pudo colgar los cuadros en perfecto orden de revista
y por la tarde, tras la comida y l a
siesta, volvió a bajar a la botic a
para dar las gracias al farmacéutico .
- Señora -le dijo al verla apa recer-, ya no tengo ningún me tro más . Pruebe usted en la mercería .
-
colocarse en oficina de farmacia ,
antes había de ponerse ojo avizor hasta encontrar un local adecuado . Después de la guerra ,
cuando se estableció la limitació n
de distancias, además se debía
dedicar a medir, con lo cual tampoco quitaba la vista del suelo .
Algunos autores, como Vila Matas, aseguran que esta invetera da costumbre boticaria de mira r
hacia el pavimento, aparte de algunos accidentes imprevisible s
por choques con viandantes u
objetos, les proporciona una especial perspicacia para entende r
lo subterráneo, lo oscuro, lo aparentemente incomprensible par a
el común de los mortales . No estoy seguro de ello, lo que si sé e s
la soledad en que suele desarrollarse la vida de estos profesionales, tanto por su afición a l
estudio, como por las peculiaridades de la atención profesiona l
farmacéutica que prestan .
Don Abilio aceptó agradecido l a
invitación . La profesión de boti cario requiere unos estudios durísimos en los que apenas qued a
tiempo para levantar la cabeza
del libro o de la mesa de labora torio . Luego . cuando uno quiere
Don Abilio vivió la invitació n
como una fiesta . Allí estaban ,
primorosamente enmarcados e n
cuadros de genuina formica, la s
láminas que había ido proporcionando a la familia Cualquiera .
Cuidadosamente colocadas en
orden de revista, los Velázque z
con los Velázquez, los Goya co n
los Goya, los impresionistas co n
ellos mismos y una zona de va-
Anemia
Colores pálidos
Neurasteni a
Debilidad senil
t
E .nuecror menta l
Raquitism o
e ntanein
Termómet ro ambiental con publicidad farmacéutic a
No, hombre . Si Na he conseguido colocarlo todo . Venía a darl e
las gracias y a invitarle a meren dar para que vea lo bien que h a
quedado .
51
ríos, armonizados no por colore s
o temas, sino por el tamaño d e
las láminas, imposible de iguala r
a pesar del derroche efectuado e n
formica .
A don Abilio, que era un lince par a
el análisis químico, la toxicologí a
y la farmacología, pero un autén tico negado en estética, le pare ció todo de primera . Más aú n
cuando le sacaron su cafecito co n
leche, acompañado de suizos y
merengues . Enardecido por l a
merienda, (lijo a doña Antonia .
- En esta casa no he visto un termómetro . Una familia moderna no
puede vivir sin saber la temperatura exacta para abrigarse o quitarse la ropa . Se acabó eso d e
ponerse un chaleco cuando se tie ne frío y quitárselo cuando s e
siente calor. Ahora, los avance s
de los tiempos nos obligan a observar la temperatura . Que tenemos menos de 18 grados centígrados : nos abrigamos un poco .
Que sigue descendiendo : aumentamos el abrigo . Que sube po r
encima de los 20 : nos desarropa mos . De esa científica maner a
disminuyen los catarros, las bron quitis, el asma y con ellos la tuberculosis . Un hogar moderno n o
puede estar sin un termómetro .
Espere un momento, que ahor a
mismo subo .
El boticario, de un salto, bajó y
subió de su establecimiento .
- Mire usted . señora, en atenció n
a la amistad mutua que nos profesamos . me he permitido subirle, también, estos dos platos para
el comedor y este fraile, conectado a un mecanismo higrométrico ,
capaz de predecir el tiempo.
- Doña Antonia palmeó, sin poder contener la emoción ni e l
agradecimiento .
- Muchísimas gracias, don Abillo ,
es usted un auténtico caballero .
Aquí podrá verlos cuando gust e
usted, su señora y sus vástagos .
Quedan invitados a comer el próxi mo domingo .
El termómetro, anuncio de la Instantina, magnífica para cortar lo s
resfriados de raíz, lo colocaron ,
ellos mismos, en un ángulo perdi do del pasillo ; una zona de la cas a
alejada tanto de la cocina com o
de los dormitorios, perfecta po r
tanto para saber la temperatura
general . Los platos, ante el arrobo de la dueña de la casa, los situaron simétricamente a los do s
lados de la última cena de lató n
que presidía el comedor, cuyo s
laterales estaban absolutamente
cubiertos por los cuadros de formica, en perfecta formación, que
0
Corte lo s
insIdidinú
t'crmómelm ambiental con publicidad farmacéutic a
rrailecillo con mecanismo barométrico que anunciaba la bina San Clement e
contenían lo más selecto de la his toria de la pintura mundial .
más diverso para la decoració n
domiciliaria de sus clientes . Los
platos presentaban, el primero .
una escena renacentista, aunqu e
vista con una óptica romántica :
el segundo . una escena galant e
de la Ilustración o de principio s
del siglo y IX, bastante repetida .
En el primer plato, primorosa mente decorado y profusamente
coloreado, se ve a un caballer o
besando a una dama que asom a
por una balaustrada . El tema no
puede responder sino a tina in -
Los platos realmente resultaba n
vistosos . No eran de cerámica, n i
de porcelana, ni de cristal, sino de
pura hoja lata litografiada, lo má s
moderno del mercado . Procedía n
de los anuncios de marca efectuados por el catalán Docto r
Andreu, el rey de la hojalata ,
quien empleó profusamente est e
material en los envases de su s
medicamentos y en carteles de lo
52
terpretación o de Romeo,% Julieta
o de Calivto % llelibea . como l a
imaginaban los románticos . E l
obro es, simplemente . un caballe ro con peluca que . destocado ,
saluda con una leve inclinación a
tina pareja de paseantes que acaba de encontrar . Lo singular d e
los anuncios es la presencia, e n
ambos, de un busto en piedra a l
doctor Andreu . un hombre co n
barba y bigote . aupado en un monolito de piedra y vestido de levi ta: es decir. un motivo purament e
de finales del siglo XIX o princi pios del XX, en temas pictórico s
que corresponden a los siglos XV I
o XVIII : ¡una maravilla !
Doña Antoñita quedó entusiasma da con el regalo . Si las buena s
costumbres lo permitiesen, habría besado a don Abilio . En s u
comedor, la pieza maestra del ho gar,, quedaba maravilloso . En l a
pared principal, sobre un aparador de nogal, curvilíneo y barroco, el cuadro religioso de latón .
con los dos platos a los lados .
Encima del aparador la figurita
del fraile mendicante . obsequio
de teína San Clemente, digestivo .
tónico . reeonstitu%en!e . con u n
libro en una mano y una varita e n
la obra . mediante la cual señal a
carteles en donde indica desde
Iluvia, hasta seco . pasando po r
viento . bueno o inseguro . A me-
Cajas metálicas de algunos de los productos del D r \ndre u
dida que la varita sube a seco, l a
capucha del monje se baja y dej a
ver una calva gloriosa y senatorial . Cuando baja, la capuch a
sube . El ingenio resultaba curio soy útil, aunque por la ventan a
se observaba un tiempo revuelto, mientras el muñequito señalaba seco sin inmutarse . No puede
pedirse todo, curiosidad científi ca, belleza y exactitud .
En el centro de la habitación ha bía una mesa cuadrada, de la
53
mejor formica verde, de enorm e
tamaño, ampliable mediante do s
tableros grandes del mismo material . La mesa había sustituid o
a otra de caoba heredada de lo s
Corriente, que había sido vendida a una almoneda por cuatro
perras . Lo mismo que la lámpara de bronce que estaba sobre
ella, ahora reemplazada por otr a
de vidrio, plagada de lagrimitas y
varitas de colores diversos . En la s
paredes de los lados, sobre lo s
sillones forrados en terciopel o
-
Muy bien . Antoñita . muy bien .
Preciosa la mesa, la lámpara . lo s
cuadros y . sobre todo, los platos .
Ahora sí que podemos recibir e n
casa a quien nos dé la gana . Esto
parece un palacio . Ahora . lo qu e
de verdad es definitivo en los pla tos es el busto que llevan dentro .
¡Cuánta elegancia! ¡Qué sensación de seriedad . pese a lo bana l
del motivo decorativo !
El nuevo aspecto de la casa de
los Corriente Cualquiera, conseguido. en buena parte . gracias a
la publicidad farmacéutica, fu e
muy celebrada por todos los Cual quiera Corriente que vinieron a
visitarla .
- Antoñita . qué bien teas conseguido mezclar lo moderno con l o
clásico . ¡Qué bonito queda todo !
Cómo sorprenden los cuadros d e
formica, la mesa, tan reluciente ,
el muñeco de la lluvia y esos pla tos que ni los mismísimos d e
Sévres pueden hacerles sombra . . .
Malo d(' hojalata litografiada obsequio del 1)1' . lndre u
rojo . los escuadrones de copia s
pictóricas enmarcados en masa s
de formica color madera . en lo qu e
los decoradores modernistas de nominaban un sincretismo de es tilos, muy jaleado por las revista s
ilustradas del momento corno l o
más hermoso e higiénico.
Los dos, doña Antonia y el boti cario, permanecieron unos minu los contemplando el comedor ,
resplandeciente como un ascua .
Cuando llegó don Curro, se sin tió verdaderamente sorprendid o
ante el cambio .
54
Doña Antonia, don Curro y lo s
niños se sintieron halagados y
satisfechos . Sólo les eylrañó l a
reacción de Jesús Exquisito . alia s
guilarín, un escritor callado, co n
fama de bohemio y anarquist a
durante su juventud y muy conservador en los años finales (l e
su vida . El hombre apenas habla ba y escribía de manera concisa ,
casi telegráfica, como si quisier a
ahorrarse hasta las palabras ;
Don Curro le conocía bien . Invi tado a merendar, llegó, entró e n
el salón, se sentó en el sillón ,
miró a su alrededor, se puso a llo rar desconsolada, mansa e interminablemente, se levantó de l
asiento y, sin decir una palabr a
ni merendar, se fue por donde ha bía venido .
- ¿Qué le habrá pasado? -preguntó doña Antonia a su marido .
- ¡Yo que sé! Los escritores, qu e
son todos unos raros extravagantes .
I'lato de hojalata litografiada obsequio del Dr . 4ndreu
55
Disgre n
r.flusd i
Bloquea
el proceso
trombótico
CIENCIA Y PUBLICIDA D
Al calor de la amistad, día a (lí a
más estrecha . entre doña Antoni a
y don Abilio, una mañana, apenas había abierto la oficina, durante esos minutos en que n o
entra nadie . la señora bajó de s u
casa para hacerle una consulta .
- Mire usted, don ;lbilio . Yo n o
estudié . porque cuando era jove n
las señoritas no iban al colegi o
más que para aprender a leer y
escribir : el resto . las buenas costumbres . el piano, la (lanza y la or ganización de la casa . se cursaba en el hogar paterno.
- Como debe ser -asentía do n
lbilio .
- ¿En su facultad no había mujeres ?
- Sí: muchas y desde siempre .
- ¿Entonces ?
- Yo inc entiendo, señora mía . No
quiera participar de todosy cad a
uno de mis pensamientos . Los
hombres somos muy nuestros .
- No . si ya lo sé .
- Siga usted . si es su gracia.
- Como le decía, pese a mi ausencia de estudios reglados, m e
he ido haciendo una cultura, literaria, deportiva, pictórica, e n
buena medida gracias a los elementos que usted, tan sabiamente, me ha proporcionado . Le estoy muy agradecida . Mis ansia s
de saber, día a (lía, aumentan . I l e
visto en los periódicos que . en l a
actualidad, quien no conoce l a
ciencia, lo desconoce todo . Com o
usted es un científico, le querrí a
preguntar si me puede auxilia r
también en este ámbito .
- ¡Evidentemente, señora! Ala id o
usted a parar al lugar adecuado
- le contestó el boticario henchido de satisfacción- . Tienen razó n
los periódicos . Hoyen día, sin des merecer a la metafísica, a la teo logía, a la filosofía, a las demás
artes del espíritu, ni a las literarias . tan admiradas por nuestro s
ciudadanos, el futuro está en l a
ciencia . En el conocimiento de l
universo, del macrocosmos, e s
decir, mi buena señora, de lo s
espacios siderales y del micro cosmos . En palabras sencillas, d e
todo lo que nos rodea y de nosotros mismos . Entre los científicos ,
sin falsa modestia, no hay ningu no tan completo como el botica -
57
rio . Así que ha venido usted al lu gar adecuado .
Doña Antonia, que no había seguido bien su discurso, le preguntó:
- Y los astrónomos, don Abilio .
¿No son científicos ?
Horóscopo Para Pele o
nas Nacidas Bajo E l
Signo de Aovarlo, del
91 de Enero al 19 de
Febrero .
El hombre nacido balo
este signo tendrá grande s
dotes Intelectuales y corporales ; será inquieto, ser á
soberbio y pendenciero ; em prenderá cualquier cosa po r
dificil que sea para salirs e
con la suya . Su inclinació n
le llevará á tierras extrallas ;
sedala que si vuelve, volverá rico y próspero, en amor
será muy apasionado, pel o
voluble é iaconstanle.
La mujer nacida bajo est e
signo será muy reportada,
Inclinada á la labor, al estudio y á la vida srdenlaiia ;
de carácter tranquilo; constante en el amor; será madre tierna y bondadosa y
reposa muy amable .
Este signo seflala peligr o
de agua .
SI desearen casarse hallarán felicidad completa
uniéndose á personas nacidas bajo el signo de Aries .
Tarjeta de tamaño de las de visita con el horóscopo de 9cuario . para anunciar los Pcllcls del 1)r.
1Í ickenzt
- Lo son, aunque descendiente s
de los astrólogos, esos seres supersticiosos que creían el ciel o
formado por una bóveda de estrellas fijas, cuya posición marcaba para siempre nuestro destino . Vea usted, si quiere, esta bonit a
estampa en donde se anuncian lo s
Pellels del Dr. l1hekenn : de cuan do los resfriados se curaban co n
pediluvios, mostazas, sahumerio s
y sudoríficos, y podrá observar muy
bien lo que le digo .
- Así que la astronomía no e s
científica .
- Sí, señora mía . Claro que lo es .
Ahora bien, ¿a usted le interesa n
más los anillos de Saturno, o l a
manera de solucionar el exces o
de sudoración o los gases producidos por el cocido ?
- Don Abilio, ¡que le pueden oír !
- No se preocupe, era sólo u n
ejemplo general . Los sanitario s
tenemos nuestros labios sellado s
por el secreto hipocrático co n
respecto a los padecimientos d e
nuestros pacientes .
- Si es así, evidentemente lo s
gases intestinales .
- ¡ :Ahí quería yo ir a parar! D e
todas las ciencias no hay ningu -
\numc io . toman() tarjeta . de la Geeitinn
58
Colesterina de 11 íNsernlan
.
n
na tan útil como la sanidad, que ,
si quiere usted que sea preciso ,
no es del todo tina ciencia, sin o
un arte, pues comprende una serie de disciplinas científicas dirigidas, en su totalidad . a la comprensión del ser vivo y a mantene r
o restaurar su salud .
- ¡Clan)! Lo que hacen los médicos .
- Bah . bah . . . . señora mía, los
médicos . . . Bah . . . Lo que hace mos los sanitarios, médicos y boticarios . ¿Qué harían los médico s
sin un buen fármaco? ¿Se lo h a
preguntado usted? Ellos diagnos tican y pronostican las enferme dades . Nosotros, o nuestros hermanos industriales en su s
laboratorios . escudriñarnos lodo s
los secretos de la naturaleza has ta dar con el remedio adecuado a
cala dolencia . Mire usted est e
anuncio de Lecitina 1colesterin a
(le IIassermann : el individuo d e
bata blanca que anda trasteando
huevos para conseguir un medicamento, ,qué licenciatura cre e
usted que posee?
- ¿Biológicas, tal vez ?
- Biológicas . . . ¡Señora mía! Biológicas . Medicina . . . ¡Gaitas! . bolicario o farmacéutico si lo prefiere su gracia . Las gafas . e l
peinado . la bata . la manera de
coger la pipeta, lo delatan . Desgraciadamente . el vulgo -y disimule usted si la ofendo, que no
es ésa mi intención- piensa com o
usted. Da importancia a los médicos por encima de todos los demás, y los laboratorios, aunqu e
regidos por licenciados en Farmacia, mayoritariamente también . Los médicos son quiene s
recetan y. por tanto, sus auténticos clientes, por encima de lo s
pacientes, porque, como dijo e l
filósofo, primero vivir, luego filosofar . . . Así nos va a los pensadores, siempre, como Diógenes ,
buscando un hombre con un can dil en la mano . . .
N .' t i
- No le entiendo del todo bien ,
don Abilio .
- La culpa es mía . Es que cuando hablo de estos temas, me caliento y desbarro .
Tarjeta (le anuncio de los Laboratorios Iberoamericano s
»A lo que íbamos . Quería usted conocer la ciencia . Aquí tiene este anuncio de los Laboratorios Iberoamericanos, en dond e
sale un dibujo del micrococ o
tetrágeno en un corte de riñón d e
rata .
ciencia, debe usted estar preparada para hacer algunos sacrificios . como Pasteur . uno de lo s
padres de la microbiología, a
quien puede ver mientras investigaba sobre la rabia en est e
anuncio de la Pepto-Kola Robin.
La literatura, la pintura, eleva n
el alma a lugares empíreos o l a
bajan hasta los propios infierno s
de la existencia humana, pero
siempre transcurren por lugare s
- ¡Qué vulgaridad y qué guarrería !
- Doña Antonia, si quier e
adentrarse en los caminos de la
59
Q#tt
n
Iiatcírta
(tusjec*abte )
Extracto hepático hiperconcentrado . Vitamina B I . Vitamina N . Nicotinato de Cobre.
Anemias perniciosas y pernicioides . Lesiones neuroanémicas .Astenia . Anorexia . Intolerancia sulfamídica .
ti
Cojo de 5
Cojo de 5
amp .
omp .
de 2
de 1
1
RECALCIFICANT E
2
RECONSTITUYENT E
Complejo vitamínico en el que predominan lo s
(actores qua regulan al wdabollueo y la fijación del calcio, asociado al loslalo Irlcálclco .
En esta variedad predominan los (acto.. qu e
acedan sobre el metabolismo celular y la nutrición da lo. tejida. .
c.c .
c.c . Ilnlontill .
ANTIHEMORRAGIC A
3
Acida, aspeclalmenle, sobre el proceso d . la
coagulación de la sango .
Caps de 4 tubos da 12 comprimidos.
2ebto n
ram ;sritntaa zj t;rattulab a
Hígado . Hierro asimilable . Aneurina . Riboflavina . Cobre .
Tratamiento (de fondos o complementario de la anemia pernicios a
y de las pernicioides . Anemia s
secundarias, iso e hipocrómicas ,
procesos alérgicos, dermatosis ,
desnutrición, inapetencia .
Tubo de 20 comp. de 0,50 gra.
Fresco de 70 grs. de granulado.
gteter
(1887-1007)
El sigla XIX, sobo todo en su u da mitad ce «nectarina por uno verdadero nabra .aparimantal y descubridor. en todo. lo . órd•n•r de conociml•n .
w.. Muy porticulann.nta an Medicina lo. progre.. son de proporcionas
tala. qua lorcowment bdllará como uno de los siglo, nada Facundo .. en le
campo de la Cirugio y pradwmwt• parco natural ..• md, mat.riol, los ovan .
•. son nade firme. y, por tanto, más ericemos lo . aduanm rwllcado,. listar
(junta a Simpaon y tsmorch con w» descubrimiento. del cloroformo y el
•andoje i .quamko, r..pectivamwi( aprovechando loa deaubdmi.nto . d •
Panela .obre la acción causal de loa gydrmene . del aire, Imanta la *Mi .
.pela, connibuyndo lo. nea .o un decidvo od.lonto d• la Grugla, cond.
guldndose arranco, o b mutan. un Inrlbla per •niel• da berido, y opero .
lea Hoy qua ' acordar al astado en que
fond
Irla) la Grupa •n ogwlia
capado
los
ton foro a. p ro
linos de horror por dsoban condenado. a unhocmued.
benaRcb, qua asta, apodó
ocmprendyvalus
o la Humanidsad.Ña.
ciclo en Ene ; nene que abandonar sus ectudlo. 7 dedicanm ol comercio d •
vino., no obstanl, consigue complotar su educooón y adquiere •ctroordbsa Hoa canocimianro, •n Piaba y Matemáticas . asimismo domina la óptica y
dota al mkro.copia de las lente . acromático. . De !acacia regra.Y e Lea.
do., ya en el pináculo d• la gloria y reformo su doctrina por el suelo da
lo asepda, manteniendo dampro, no obstante, sus principio . hmsbmantelee .
GLUCONATO CÁLCICO PURÍSIM O
..I
8%
Recalcllicanla . Antllloyictlco . Antllwmerráglco. Antlddrgico. Sedante.
Ampollo, do 2, 5 y 10 c . c.
GLUCONATO CÁLCICO PURÍSIMO
.1 20 % Glclotarapla Intensiva (sólo por vía ando Ampollas de S c. c
.wAtictiwwa
I,i~lcr en un anuncio . de fM lrl i ru Mi l!1-1 1 . de la Sociedad Española Mi lnduslrjaa (hlínlicas y Farmacéutica s
transitados por el común de lo s
mortales . por salones iluminados ,
por parques frondosos, por cuartos desesperantes o por tugurio s
de mala muerte . La literatura . por
mucho que profundice, la pintura, por muy terrible que sea s u
mensaje . la música, por muy trá -
gicas que sean sus notas, circulan siempre por lugares transita dos por los humanos, felices o
sufrientes . La ciencia lo hac e
constantemente por las cloacas .
Por las del espíritu y por las de l
cuerpo . Los científicos, los sanitarios, nos dedicamos a poner a
60
punto la infraestructura human a
para que los vivientes puedan disfrutar de la función de la vida .
Somos los tramoyistas, los poceros . los barrenderos de las le trinas . Sin nosotros la vida huma na sería mucho más complicad a
o no se podría llevar a cabo . \ho-
cia . A los hombres nos gusta dialogar sobre nuestras grande s
obras, no acerca de lo que sabe mos que es indispensable par a
nuestra vida y que nos hace pequeños, frágiles, intrascendentes.
a no ser que, como la gula o e l
fornicio-perdóneme, señora, pero
entre científicos hemos de habla r
con cierta crudeza-, lo hayamo s
convertido en vicio, en arte o e n
ambas cosas a la vez o sucesiva mente, según pinten los tiempo s
y las costumbres dominantes .
'rarjcla que reproduce un retrato del Dr . Ferri n
de Julio Moisés . Ofrecida por cl Instituto Ferri n
ra bien . nadie habla de lo magní ficamente preparados que está n
los tramoyistas de una función d e
teatro. Hablan de la función e n
sí, del trabajo de los actores, d e
la creatividad del autor, de la ha bilidad del director para maneja r
las escenas y, sobre todo . de l
mensaje de la obra, de la belleza, de la dulzura o de la denun -
- No insista, don Abilio, le entien do perfectamente -contestó doñ a
Antonia, que recordaba con absoluta nitidez sus primeros problemas con la higiene femenina ,
los interminables años de su es poso tumbado y sus raptos de his terismo, tan sencillamente solucionados a base de hierbas- .
Estoy dispuesta a hacer el sacrificio necesario .
- Lamentablemente, no tengo ex cesivo material . Estos asuntos n o
son de dominio público, ni de fá cil comprensión . La de boticari o
es una carrera larga, difícily d e
ejercicio esforzado y, como h e
puesto de manifiesto, son lo s
médicos quienes se llevan el ma yor timbre de gloria . Ahora bien .
aquí tiene una efigie de Lister, e l
cirujano inglés que propició la an -
61
('laca metálica con el busto del Dr . Ferrán . rega lada por cl Dr . :Andreu a sus cliente s
tisepsia, primero lavándose la s
manos antes de operar y lueg o
desinfectándolas, junto a todo s
los aparatos empleados en la ope ración . En este anuncio de Retilon
puede verle tan ricamente . Ambroise Paré, en el Renacimiento ,
y él, en el siglo XIX . fueron los
dos cirujanos que han salvad o
más vidas humanas . El primero
porque abolió la costumbre d e
cauterizar las heridas, sobre todo
las de bala que se creían infecta das, con el hierro ardiendo o e l
aceite hirviente . Al no cauterizarlas, los que antes morían del cho-
RC2MO N' PON KANTI .e4O 11AMO 4 1' e:AJAL
I'.nJNnINU J. III .N .i.yis c IINl.wulu.l. nun~.lcti
J. In Ywu11eJ Je MUNO. Ja M.JnJ.
SANTIAUU RAMON y CAJA L
1852 - (93
e
4
Placa metálica con un retrato (le I',dison . regala da por el I)r. Amireu a sus clientes
1.
n..,II ..., au .
momeo ,
q en lo
dlflrlle
. groc„ ur teea esoruo
sto .? -Hac d loprpio ens lo que .
"Blmeod el cooerJo del Medico .1 notar 1o menor molesti..
Andrdfnxo
Fotograba de don Santiago Ramón y Caja] en e l
álbum '1'cnganur, confianza en loti medico, . ofrecido pur los laboratorios -\ndrúmaeo
que traumático del cauterio dejaron de hacerlo y la naturaleza .
en muchas ocasiones, les devolvió la vida . El segundo, al propi ciar la limpieza y la desinfecció n
antes de operar, evitó los contagio s
producidos por los micn)rganismo s
que llevaban a la tumba a la mayo ría de los intervenidos . Uno en e l
siglo XVI, otro a finales del XIX ,
propiciaron los tremendos avance s
quirúrgicos de los que tan orgullo sos nos sentimos .
- Cuánto sabe usted, don Abilio .
El hombre, esponjado por la lisonja, continuó imparable .
- Le voy a dar a usted, para qu e
las coloque en el pasillo, junto a l
termómetro, unas chapas metálicas que regaló el doctor Andreu
a sus clientes . La primera de l
doctor Ferrán . el médico valenciano que inventó la primera va cuna contra el cólera en el añ o
1885, cuando esa enfermedad
62
Retrato de I ;ajal joven . utilizado para la propaganda de la llrmoglobine Deschiens, hierro
~ italizado, jarabe ,v vino que reenrplaza carne rruda t lirruginotin s
asolaba nuestra patria . La primera epidemia fue en 1835, la segunda en 1855 . la tercera en 186 5
y la cuarta la que detuvo su in vento . Se abordaron como un a
peste más, con cordones sanitarios, lazaretos . fumigaciones, imposibilidad del tráfico de objetos ,
animales y personas, a través d e
grandes operativos militares . No
se sabía . sin embargo, que lo producía un vibrión, el colérico . qu e
vivía en las aguas, a donde llega -
ç-RESINA
CATIOSULFONICA C .D.G .
KATIONU M
IOSE DE I .ETAAIE.NDI DE EIANJARMES
1E=H 1897
HI dl.ynd .tleo e. 1 . ete.e dc I. `tedl<Ine
ICu .
.ulrlmlemo. no . evlterlemoe .I tuvle .emoe I• prudent e
eo.tumbre de eepllcer .l Médico nunlr. . pequ<A .. Juleuvl. . l
Andrdntaco
Retrato de don José de l etamendi, en el álbu m
Tengamos confianza en los médicos . ofrecido po r
los laboratorios Andrómac o
ba a través de las defecacione s
de los infectados . De esa manera . las medidas militares resultaban inútiles y los tratamiento s
ineficaces . cuando no contraproducentes . Entre los segundos, es taban las sangrías, terribles y no civas, aunque se venían realizando
desde tiempos inmemoriales . E l
calentamiento de los enfermos y
obras prácticas torturantes qu e
los hacían morir aburridos de la
vida . También se recomendaba n
AM/donó fílmico Vértaacerdico
T. OoménQch (5arri a
RIERA DE S
'tarjeta propagandístic a
63
MIGUEL . 31
-
BARCELON A
La operación . tarjeta anunciadora del Ceir,,'umi l
los alcoholes anticoléricos, d e
gran eficacia . pues si el pacient e
no probaba el agua, ni entraba e n
contacto de otra manera con he ces infectadas, a través de fruta s
o verduras crudas, se salvaba ,
aunque si seguía el régimen alcohólico con absoluta precisió n
y exactitud, podía acabar co n
cirrosis, luego de haberse cogid o
unas pílimas nada bien vistas e n
tiempos de tanta aflicción . Cuan do se descubrió el vibrión, Ferrá n
preparó una vacuna sobre cuy a
eficacia se discutió mucho, en
este país en donde todos los éxitos vienen teñidos por la envidi a
de los inactivos, pero ahí qued ó
su hazaña para la historia y par a
la discusión de los historiadores ,
que tampoco paran . l dison, m i
buena señora, es el gran inventor estadounidense que fue expul sado de la escuela a los siete año s
por retrasado . I,o educó su madre, se interesó en la física y l a
química y, después de trabajar e n
muy diversos oficios, montó un la boratorio en donde se dedicó a
preparar utensilios de uso coti -
64
diano . De esa manera inventó e l
telégrafo, mejoró el teléfono d e
Graban] Rell, preparó una máquina de dictar, dio a conocer un antecedente del cinematógrafo y u n
método capaz de hacer útil la lu z
eléctrica a grandes poblaciones .
No hizo descubrimiento científico alguno, salvo el llamado efecto I;dison o termoeléctrico . que
dio pie a la explosión electrónic a
del siglo XX, a la radio y a la tele -
I,ul e I~ ildes : El médico. colección de ilustraciones médicas de Ceregunri l
Tarjeta publicitaria del 1anarsán de laboratorio s
lime n
visión. De esa manera . un niño
retrasado se convirtió en el mayor inventor práctico del siglo ,
igual que el más grande descubridor teórico, l instein, otro cas o
que también tuvo problemas e n
sus estudios primarios .
- No sabe usted lo que me con suela la historia . A lo mejor, algu no de mis hijos no es un auténtic o
vago, sino un sabio incompren -
MÉDIC O
I ;ronl de la colección Las carreras. ofertado por Ceregumil
65
CÁTEDRA DE TERAPÉUTIC.'
. generalmente, debemos rehuir el recetar específicos, á excepción hecha de los que, como el T ó N10 0
NERVIOSO OERA, sean de composición conocida y cuya fórmula sea difícil que la podamos obtener Impunement e
de la farmacia sin recurrir al mismo Tarjeta anuncio del
Tónico Vernloso Cera .
Dibujo de l al4a s
tildo . Acaso tengo un Edison en
casa .
- 'lhl vez, señora mía, tal vez, pero
como dice un conocido mío, en
España no hemos tenido ningún
Newton -que fue también un sabio, en este caso inglés, no me
mire con esa cara de extrañeza y sí muchos Nadie. Así que, si sus
hijos no dan un palo al agua, ya
sabe, agüita del Carmen para los
66
nervios o si la prefiere destilad a
de rosas, paciencia y barajar .
- Le agradezco muchísimo s u
obsequio . Nuestro hogar va a pa recer un templo de las artes y la s
Serie 1 -
Serie 1-
NUESTROS OFTALMOLOGO S
NUESTROS OFT ALMOLOGO S
Dr. M . Márquez, de l■ Facultad de Medicina .
Dr. B . Cast resana , Jefe Facultativo del Instituto Oftálmico.
Moret, 7.-MADRI D
Nicolás Maria Rivero, 14 . MADRID
'I :urjela dedicada al Dr . B . Castresana . jefe facultativo del Instituto Oftálmico
Tarjeta dedicada al Dr. A1 . Márquez . de la Facultad de Medicina de NIadri d
ciencias . 'Pudo gracias a su generosidad v benevolencia .
pecíficos, que tan bien saben hacer su misión divulgadora .
- A la mía no . señora, a la de los
laboratorios preparadores de es-
Aquí tiene este librito en donde se nos aconseja una total
67
confianza en los médicos, edi hado por los laboratorio s
_lndrómaco : en él podrá ver la s
efigies de algunos de los má s
destacados galenos de nuestr o
suelo patrio . ¡Lástima que n o
hicieran lo propio con los farmacéuticos !
Éste es Ramón y Cajal, nuestr o
premio Nobel, el científico má s
citado en todo el mundo, todaví a
en la actualidad, por los de s u
especialidad ; también José d e
Letamendi, con su aspecto excén trico y su labor de charlatán «tonti loco», tan bien acogida en lo s
medios académicos de su época ,
y otros cuyas gracias no recuerdo . Si quiere ver cómo funcion a
el intestino y el riñón, puede admi rar el anuncio del Kationum. N o
estoy seguro de si entenderá un a
sola palabra, yo mismo deberí a
repasar mis apuntes, pero qued a
la mar de decorativo y propio d e
alguien con una cultura sanitari a
más que razonable . Si esas cosas tan profundas le aburren o n o
llega a comprenderlas en toda s u
complejidad, puede asistir a un a
laparotomía por gentileza de l
Ceregurnil Fernández . Verá a lo s
médicos, a cara descubierta, afanados sobre la camilla de opera ciones, a las enfermeras, guardando la distancia correcta ,
atentas a cualquier indicación d e
los doctores, y a los alumnos, e n
perfecto orden de formación, si n
perder un detalle de las manipu laciones del maestro, aunque u n
médico, probablemente aneste -
N 1' F,ti'I'I■( )S M :1 F.S'1'Ut► S
I'Itt~t' . '1't►m .I s
I'ule,lr,ilic•u (le
Medicina legal de la Facultad (le Medi cha] <Ir Madrid .
-I11(11 .1», Revista IIitlnuw- .luwric+ . na do Ciencia« Médicas . MADRI D
Tarjeta con una caricatura del Prof . Tomás Maestre, catedrático (le Medicina Legal de l a
Facultad de Medicina (le Madri d
68
sista . anda despistado a la derech a
de la foto y mirando al fotógrafo ,
que ya se sabe que los anestesista s
son muy suyos.
La misma marca le permite asistir, en primer plano, a una operación . en donde tres cirujano s
trastean sin delicadeza alguna e l
hueco abierto en el cuerpo de u n
paciente dormido .
También nos proporcionan u n
cuadro muy dramático, en dond e
se ve a un médico dubitativo a l a
cabecera de un niño enfermo ,
mientras el padre observa preocupado y la madre se desplom a
sobre la mesa de la humilde morada . Los publicitarios de la mis ma casa repartían, algo antes ,
estos cromitos en donde se ve a un
médico, primero estudiando ant e
un cartel anatómico y luego
auscultando a un paciente sin auxi lio del estetoscopio, a puro oído .
Más amable es el anuncio de l
lanar ¿ín . en donde dos galeno s
se lo inyectan a tina mujer, probablemente alegre . a pesar d e
que debía parecer triste en con traste con su aparente vida alegre . Siempre se dice que las da mas más tristes son las de vid a
alegre . pero nunca se sabe . IX I
fondo aparece una anciana, acaso su madre, que mejor haría si
Tarjeta postal con una fotografía del busto del Dr . Tapia que anuncia l a
Dnicilin a
vigilara bien a la niña o la pusiera en camino de una boda feliz o
de un puesto en una mercería o
en unos ultramarinos, pues, aunque no le permitirían los lujos
69
exhibidos en trajes y sombreros ,
la mantendría -seguramente, es o
tampoco se sabe nunca- aparta da de las inyecciones de Vanarsán ,
que podían producir hábito y s e
AL EMINENTE GIMEC'OLOG O
D/ . GÁLVEZ GINACNER O
EN CONMEMORA CIO N
SUS /ODAS DE ORO CON
IOSPITAL PROVINCIA L
DN0%WIBRE DEIf p
Tarjeta postal con una fulogralía dvl busto del Dr . Gálvez Ginachero qu e
anuncia la Clmvlrnicina imvv7able
inyectaban sin interrumpir l a
medicación arsenical .
'Penemos también los reclamo s
inspirados en la cátedra . Los profesores universitarios son . por lo
general . unos bichos raros . Dedicados toda su vida a la obtención de la sabiduría, unos la consigueny otros se convierten e n
admiradores de la nada . o sea, d e
sí mismos . La mayoría . como no -
70
sotros . procede de familias Cual quiera . Corriente, Nadie o por e l
estilo . Lo malo es cuando vienen
de la estirpe Vulgar . o intenta n
sublimar su procedencia introduciéndose en la tribu de los Resen tidos . Saben que la única inanera de salir del anonimato es l a
cátedra y ponen en ello la vida .
Suelen convertirse en auténtico s
pelmazos . la consigan o no . Cuan do ya son alguien en lo suyo . l a
mayoría se adentra en otros campos y entonces puede surgir l a
hecatombe, pues su consideración de Alguien en su ámbito d e
conocimientos les hace creérselo también en todos los demás .
Llegados a su límite de incompetencia . suelen hacerse famosos y
pasan a la industria o . más habitualmente . a la política . Pese a
ello, en esta tierra de Nadie . en
la universidad suelen alojarse la s
mejores cabezas del Estado, lo
que tampoco es decir demasiado ,
su prestigio irradia a la sociedad . que oye a unos señores hablar de cosas incomprensibles
para el común de los humanos y
hacerlo con toda propiedad . com o
si entendieran de lo que es pí n
hablando tuviera muchísim a
sustancia . Por eso . y por la in fluencia que tienen sobre sus discípulos . la industria ha hech o
grandes series dedicadas a recor dar a los maestros médicos .
Observe usted esta dedicada a
la cátedra de terapéutica . donde se ve sólo al profesor . vestido de romano . quiero decir co n
un traje talar raro . no usado e n
la universidad española, en don de los alumnos son sólo sombras, mientras al pie de la pos tal se lee : « . . .generalment e
debemos rehuir el recetar específicos, a excepción hecha de lo s
que como el tónico nervioso Cera ,
sean de composición conocida y
cuya fórmula sea difícil que l a
podamos obtener impunemente
de la farmacia, sin recurrir a l
mismo . . .».
ca mina de informaciones, tant o
humanísticas como científicas .
Más modernos son los de nuestros oftalmólogos, ofrecidos po r
las pomadas Oftalmer Nicolich, o
los de nuestros maestros, ofertados por la pomada antiherpética Cereo .
- Con cuánta probidad habla usted, don Abilio, con cuánta sabi duría y mesurada crítica . Si no e s
abusar de su paciencia, otro dí a
volveré a solicitar su consejo .
Así, casi sin quererlo, se est á
convirtiendo en mi maestro .
Como ve . mi buena señora, a par tir no sólo de nuestros conocimientos, sino también de la publicidad de nuestros productos ,
podemos conseguir una auténti -
ll
- Favor que me hace, señora . No
es mío el mérito, sino de los pu blicitarios de específicos y espe cialidades .
Biodramina
infantil
supositorios
Y...
FELIZ VIAJE, PAPAS
LOS VIAJAS PE LOS CORRIENT E
CUALQUIERA
El lector habrá adivinado ya qu e
los Corriente Cualquiera es un a
familia española más . algo mejo r
situada que los de la estirpe d e
Nadie y con muchos puntos de en cuentro con los kulgar .
que el anuncio aparece en El Conco Español-El Pueblo Vasco el
31 de octubre de 1939, es decir,
Si quieren conocer su aspecto ,
pueden verlos en el anuncio d e
(,'aslrn nonlr «tila», de venta e n
botellas o garrafones precintado s
y capsulados, muy útil para normalizar los prOCesos de nutrició n
dado sus efectos reguladores sobre las funciones del riñón, el hígado . la vejiga y el estómago . All í
vemos a \ntoñita Cualquiera ,
perfectamente peinada gracias a
tina permanente suavizada co n
Col/ Crcnl, sin habérselo dicho a
icloria Kent . mientras Celi a
Gámez cantaba en la radio aque llo de «ya hemos pasao» . A s u
lado, sus hijos repeinados, son rientes, gorditos y dispuestos a
beberse un buen vaso de Cas Iromonle para hacer la digestió n
y. de perfil . Gorrito Corriente ,
sano y feliz . con su cigarrillo e n
la boca . repuesto ya de sus achaques de tumbado y perfectamente repeinado con gomina . 'Pod o
perfecto, todo ideal . (le no ser por -
) ESPANOL-EL PUEBLO
unos meses después de fi nalizada la Guerra Civil españo la . El hambre, que antes se ceba sólo
VASCO
Aseguro la salud de su hogar, po r
UNOS CENTIMOS DIARIOS,
haciendo quo no falto nunc a
en su mesa
1poMOn„ r
Normaliz a
los procesos de l e
nutrición y regula las funciones de l
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II
. ,
„
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2117a 4
r
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~t.
I
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Negros para lutos permanent e
Limpieza en seco perfeccionad a
Içasa de primer orde n
Anuncio aparecido en El Corran Español-El Pueblo basen .
73
I•I 31
de octubre de 193 9
BURGOS. Fachada principal y vista general de la Catedra l
hrjela de la cat e dral de Burgos que anuncia llipofosl'itos Salud para el
Linlalismo
Tarjeta de la puerta de la mezquita ric la AIhambra de Granada . Anuncio d e
Ilipnfnsfitus Salu d
74
Catedral de Santiag o
Tarjeta postal del coro de la catedral de Tortosa . Anuncia Hipolosl'ilos Salud para la tuberculosis : elixir
di, ;estiro. salud para el estómago
E. ..m..J. !
Tarjeta de la colección I'autauberge de catedra les de Espacia
ha sólo en la zona republicana ,
empieza a avanzar por toda España . sumida en una trágica pos guerra, con racionamiento de alimentos para casi la totalidad d e
sus habitantes . con miles de es pañoles exiliados . otros sumido s
en el luto por sus parientes muertos . algunos todavía en armas e n
los « maquis » y cientos encarcelados, fusilados o sometidos a tra bajos forzosos . Mientras, en Europa . los ejércitos de la Alemani a
nazi invaden Polonia como un re -
lámpago y los hornos de los crematorios empiezan a humear, e n
la que los fascistas considera ban la solución final para el problema de los judíos . los comunis tas, los republicanos españoles ,
los homosexuales o los tarado s
con alguna lacra física o psíquica . Pese a ello, no cabe la meno r
(luda de que «un hogar sano e s
un hogar feliz», y a esa salud y
felicidad contribuiría con acierto
el Castmmonte «Uta», aunqu e
siempre nos queda la duda de
75
que, si era para hacer la digestión . de qué serviría .
A los Corriente Cualquiera, com o
a la mayoría (le los mortales, les
gustaba viajar. El viaje es un placer, una búsqueda y un encuentro, aunque de nada sirve si e l
viajero no está dispuesto a transformarse durante el periplo, si ,
como plises, sólo se transport a
para volver a encontrarse co n
Penélope harta de tejer su manto . Algunos dicen que los nacio -
entre caballeros británicos, qu e
dar la vuelta al día en ochent a
mundos de la mano de un argentino afrancesado . mientras escuchas música de jazz y te plantea s
locuras propias de cronopios .
Tarjeta postal (le la colección de catedrales de España . Tudela (Navarra )
nalismos se curan viajando . Qu e
se lo (ligan a los soldados alema nes, viajeros por toda Europa y
Africa para imponer el Terce r
Reich . Que se lo cuenten a lo s
soldados napoleónicos, empeña dos en imponer la Revolución a
sangre y fuego, o a los conquis tadores españoles obsesionado s
por cristianizar a los indígena s
mediante la espada, si no basta ba la cruz, o antes a los roma nos, a los árabes o a tantos im -
perios que han sido y son en e l
mundo . Hay muchas formas d e
viajar. Sólo es útil para uno mis mo, y para el resto de los huma nos, la que se hace con mirad a
cándida, corazón tolerante y ligereza en el equipaje, dispuesto
al convencimiento y al asombro .
Por eso los viajes más producti vos son los interiores . Suele se r
mucho menos interesante dar l a
vuelta al mundo en ochenta días ,
a consecuencia de una apuesta
76
No estaría muy conforme con est a
afirmación Antoñita Cualquiera .
harta de ver a don Curro tumba do en su cama, sin el sirviente de l
que nos habla ,lardiel Poncela ,
que avisaba del paso de estaciones a los pies del lecho de su patrón, también tumbado . A ella l e
hubiese gustado viajar, conoce r
el mundo, hacer el gran tour,
como los aristócratas inglese s
que eran capaces de pasars e
media vida, de baile en baile, d e
amorío en amorío, por Europa ,
Asia o Africa, mientras completaban su formación aristocrática .
En España, las cosas no era n
parecidas . llasta los más sesudo s
pensadores recelaban de lo extra ño y aconsejaban que se quedasen ellos con sus inventos y no s
dejaran a nosotros con nuestr a
peculiar idiosincrasia de país diferente . Además . desde antes d e
Jovellanos, las peculiaridade s
geográficas peninsulares . la falta de ciencia, de tecnología y e l
desinterés de los poderosos po r
el avance económico y la mejor a
de vida de la mayoría . de los Corrientes . de los Cualquiera, de lo s
Tarjeta de la colección El Castillo, ofrecida pur la Solución Paulauhcrge . Castillo de Lassay
77
Nadie, hacían de nuestros pueblos reductos casi incomunicado s
que sirvieron para convertir nues tro Estado en esa bobada de nación de naciones, como si todo s
los Estados no lo fueran, ya que ,
nación, al fin y al cabo, es dond e
nace uno y poco más . Doña Antoni a
recordaba con terror su viaje des de Madrid a Burgos, para ver l a
catedral, con todos los viajero s
empujando el autobús a fin de
vencer la terrible resistencia de l
fabuloso puerto de Somosierra ,
en donde la caballería polaca, a l
servicio de Napoleón, hizo un a
carga cuesta arriba y fue diezma da por los ejércitos españoles .
Qué decir de Despeñaperros, de l
Escudo, de los montes del Bierz o
o de cualquier otro absolutamente intransitable, como si de lo s
Andes o del Ilimalaya se tratara .
Viajar, en España, era una misió n
arriesgada y casi imposible par a
el común de los mortales . Por
eso, los Corriente Cualquiera recordaban la catedral de Burgos o
la Alhambra de Granada, gracia s
a los Hiposfosfitos Salud; la de
Santiago, merced a la colecció n
Pautauberge, y la de Tudela o d e
Tarragona mediante las postale s
editadas por los laboratorio s
Cheminova Española, S.G. Si la
tarde daba para asombros, podían acercarse hasta el San Marcos veneciano con la postal de l
Tarjeta (le la colección El Castillo . ofrecida por l a
Solución Pantauhcrge. Castillo de htontmor t
aceite de ricino N;rba, «sin colo r
ni sabor», no como el maravillo so monumento lacustre, o pasear se por los increíbles castillos
franceses de Montmort, I,assay o
Mesnières, por cortesía de la So lución Pautauberge, que incluí a
una interesante ficha del monumento en el reverso de las pos tales .
Si deseaban saber el horario d e
cualquier parte del mundo, cosa
importantísima para los viajero s
varados en un sillón del salón d e
su casa, no tenían más que acudir a un anuncio de pastillas par a
la tos del doctor Andreu ; si cono cer la ruta de los vikingos, de
quienes la sola evocación de s u
nombre sigue despertando temor
en los pueblos mediterráneos, n o
tenían más que acudir a una pos tal de Antibióticos S .A ., acaso
porque los viajes, en determina das mentalidades pacatas, siempre evocan la necesidad de l a
penicilina, vaya usted a saber po r
qué . Si necesitaban conocer las
78
Anuncio adquirido a Reclamos 'l'hichuann de Ya len( i d
Estilo
rnr *dInálte•e
. nlll. . con 1. 4.rlv . l.at ..d . de Fwtld.
•Ilm.nt .d • vu«tro
p. . conW.e l . m .lor I.oL. eoW.
Flauae[aeo .
44,444 e.
4.3
uta ya.
y•-
Impurezas de la piel ,
Pústulas, Erisipela y afecciones análoga s
desaparecen con la
De
venta en las buenasfarm9cias encajas de 100 Oidores.
1 1
:130EHRINGER 1
Cromos de la colección de estilos arquitectónicos . ofrecida por Cerolina
~ ' • '7 ,
~~,•:,
La Cate d'Azur : Monaco
Tarjeta con una cabaña suiza para anunciar lo s
productos 1esll é
banderas, la capital o los habitantes de la mayoría de las repúblicas mundiales, no tenían má s
que acudir al anuncio de la embrocación Hércules, el linimento
español que ya advertía de form a
subliminal de la peligrosidad d e
embarcarse en aventuras viaje ras . Si deseaban conocer los es tilos arquitectónicos más interesantes en la historia del Arte ,
podían acudir a la serie publica da por la Cerolina, que hacía de 'Tarjeta con un dibujo (le [Mónaco . -lnuucia el Putgga n/e 8esoy
79
Paisaje de plau en un papel secante de Cemguniil
'hiélela postal con un paisaje holandés . Anuncio
del I'urhnntc Bes,"
farjela poslal con un paisaje hulandes . \nunci o
del Purgante Rtwn
saparecer las impurezas de l a
piel, las pústulas . la erisipela y
las afecciones análogas, y se ven día en cajas de cien píldoras e n
las huellas farmacias . l,a Cost a
1zul, los paisajes holandeses o
Locarno . podían visitarse gracia s
a las postales publicadas por e l
Purgante B(w% : «Suave . eficaz .
inofensivo y de resultados . El Re y
de los purgantes y el purgante d e
los Reyes» . Si la cosa era má s
simple . mils de andar por casa ,
Tarjeta con un dibujo de Locarno . Anuncio cl Purgante lic,Çin
80
c yAFECCIONE S
INTESTINALE S
MEDICACIÓ N
FOSFORAD A
INTENSIV A
ELECTROLACTI L
(Fermenlos lácticos seleccionados )
LIQUIDO Y COMPRIMIDO S
FITIKOL A
(Fósforo vegetal asimilable )
Vigoroso tánico reconstituyente
SELLOS Y ELIXIR
FITIKALI'N A
Recalciflcante, hemostático y
hemopoyátic o
DELICIOSO SABO R
t
GUAYAPECTOL 1
JARABE E INYECTABLE
Q
~~
LABORATORIOS-ASENSI, XERRI Y C.A
VALENCIA
««Ti T
r«NUl TINO«
era posible pasearse por el mer cado central de Valencia gracia s
a los laboratorios Asensi, Xerri y
Cía., de esa capital . Proporciona ban unos secantes con vistas urbanas de utilidad práctica a l a
hora de escribir, y de gran pode r
evocador. Los viajes imaginario s
por Europa podían preparars e
tranquilamente gracias a la colección de mapas proporcionado s
por las pastillas pectorales de
G.F. Merino e Hijo, preparados e n
su sociedad leonesa de productos químicos .
\((as de Europa del tamaño (le media cuartilla
81
82
Para la boca BUTALIN A
(Marca Registrada)
Excelente Elixir
Dentífrico antiséptico agradabl e
Destilado y precis o
Para dolor de muelas, Ilusione s
reblandecimiento de encías, etc .
BUCALIN A
Frascos de r,5o . y de 3 pesetas . Hay fras e
quitos de prueba á 30 cts . en el Laboratorio .
CARMEN, 1 4
Colección de pequeños cirimus con paisajes .
liu
83
á
Biodramin
feliz viaje!
Prevención y
tratamiento
del mareo
. . .y
Y si tiene que viajar de dí a
BIODRAMINA CAFEINA
Gracias a don ;Abitio . el voluntarioso farmacéutico del barrio, a
los específicos y a la publicida d
de éstos . los Corriente Cualquiera podían organizarse una culturilla también en este campo .
Para que luego algunos digan qu e
el pescado es caro o que la farmacología no tiene nada que ve r
con las humanidades .
Con tanto viaje, cualquiera se ma rea . Para evitarlo, teníamos las
mencionadas pastillas í'hr, contra
el mareo que se anunciaban en u n
magnífico abanico desplegable . muy
útil cuando empezaba a ponérsel e
a uno mal cuerpo, tan sólo de pen sar en el trote necesario para visitar tantos lugares . Las tardes en qu e
doña Antonia empezaba a revisa r
las postales, a don Francisco se l e
ponía la cara verde .
- Pem, mujer, ¿para qué quieres
ver tantas cosas raras? Con lo ricamente que estamos en casita ,
calentitos en la mesa camilla ,
abrigados por los faldones qu e
impiden la pérdida de las caloría s
producidas por el brasero de carbón, bien aireado para evitar e l
tufo, a la espera del parte de cada
noche y de la llegada de los vecinos envidiosos de nuestra suerte
de poseer un aparato de radio .
primorosamente recubierto co n
esa funda de ganchillo tan hernio -
Cartel anunciador. Colección Uriach
84
sa que le has hecho . En todo caso ,
si quieres, nos acercamos hast a
la esquina y comprarnos una s
castañitas recién asadas, nos la s
comemos a mordisquitos y ahí no s
las den todas . El resto del mundo ,
desengáñate Antoñita, «pa» ellos .
Si la mujer insistía, don Curro s e
metía en la cama, provisto de s u
abanico, luego de haberse toma do dos pastillas Five, y se entregaba a sus aristocráticos viaje s
de tumbado, sin necesidad de
salir del calor del hogar .
85
Las cosas cambiaron mucho co n
la Biodramina, útil para el tratamiento y la prevención del mareo ,
capaz de proporcionar bienesta r
al viajero, despierto o dormido ,
adulto o niño, pero ésa ya es otr a
historia .
CRONOS Y LA PUBLICIDA D
FARMACÉUTIC A
Antes de volver de nuevo a la Histo ria . queda la difícil tarea de enmarcar a la familia de nuestros protagonistas en el tiempo .
El tiempo, sabemos al menos desde Einstein, es un valor relativo .
No son idénticas las horas de lo s
adolescentes a las de los viejos ,
ni las de los enamorados a las d e
los condenados a muerte . El tiem po tiene extremo valor para lo s
historiadores, empeñados en l a
imposible tarea de reconstruir e l
pasado, para lo cual se ayuda n
sistemáticamente de la cronología . pero su importancia es mucho menor en la literatura . Algu nas obras de teatro y las novela s
realistas lo toman en consideración . La poesía jamás . Los senti mientos . el pensamiento, la fantasía son atemporales . Por eso e s
muy difícil situar a la familia d e
los Corriente Cualquiera en su lu gar cronológico adecuado . El ori gen de las familias, aunque histórico . para ellas es sobre todo
literario . y más en el caso que no s
ocupa . Las familias son sentimientos, tradición, recuerdos ,
años de compañía, y eso se com pagina mal con la historia . Si
Calendario para 1905 de la Antikamnia
87
Tlnxuxxpx'
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+o~ e
. í. .n~..:.~~o•
PU. J.
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S.n
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PUERT O
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GRAN FARM ACI q
OELAGUILA
J.RIvAS MODAR ;
Fuencarral 11 4
• MADRI D
KRESIAWSKY&C4 BERLIN 10.
190 9
Calendarios modernistas de la Farmacia Laboratorio Puerto (191(ï)
~
cualquiera comparte una tarde d e
invierno con una familiar de cierta edad . encontrará sus recuerdas enmadejados en los años yl e
Santoral de 11)119 (le I'arnsu'ia del \ ;huila
88
FARMACIA
Roy o
OOOOOOODDOOODO~OOOOOOOOOOCOM
LABORATORI O
DE
JOSE DE LA VEGA
Apartado d. Correo . .
6061 . T.1lfono 31114
MADRID
Fabricación de Producto. Qulmlcoa) Farmacéuticos
Cultivo d I Plantas
y
Grd
les
Comprimidos, Entrados blando* y flúidos
flúidos,, Granulados, Inyectabits, Ovulo, Pastillaje, etc. Pedid listas mensuales de cotización
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p .redorrea., .delotprodu~,~NORDYAa~-V6.66,aeN ..aarw:
6IfAT .1T, OIA NEPIT5, lo aFNE►.T..T, OBOUA . .T, CtXR, T r a.LUf4
Espedalidades del LABORATORIO VEG A
BIOLACTOGENO
ACETAROL :: SILVERIN
1931
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19 20 21 22 23 24 2 5
26 27 28 29 30 31
u.w. tw. s L.
Calendario de la Farmacia Rll■o . de formato alarIzado ■ grande (1923)
será muN difícil distinguir . en la
conversación, los acontecimientos históricos vividos . Interesan
las manías, las enfermedades, los
éxitos, la salud de los familiares ,
y mucho menos lo que pasó durante aquellos años que, indefec tiblemente, se olvida, aunque se a
extraordinariamente dramático .
Algunos personajes históricos ,
como Carlos I de España y V d e
Alemania, estuvieron obsesiona dos con el tiempo . El Emperado r
contrató a un relojero, Juanel o
Turriano, excelente ingeniero o
«maquinista», para que le tuvie ra a punto su extraordinaria colección de relojes . No es de extrañar. Los poderosos siempre
han temido al tiempo o lo han ma nejado para conseguir sus fines .
Su hijo, Felipe Il, inventó los en tramados burocráticos capace s
de manipular el paso del tiemp o
para solucionar algunos proble mas . . . dejándolos sin solución .
Así nació el «vuelva usted maña -
89
11w..a
na» que l,arra criticaría cuatro si glos más tarde . Tan excelent e
había sido el descubrimiento regio, que sigue en toda su vigencia en la administración burocrá tica de España y de medio mundo .
El tiempo ha sido medido siempre con fines utilitarios o religio sos . Así, tenemos desde el calen dario maya hasta el gregoriano .
Para los señores de la tierra y d e
la religión es muy importante e l
control y la utilización del tiempo : para los Nadie resulta absolutamente indiferente . llay un a
hora para nacery otra para morir. El resto de los minutos suel e
estar hipotecado por voluntades
ajenas. Los Corrientes y los Cual quiera se miran en el espejo d e
los poderosos y emplean sentencias absurdas como la de que e l
tiempo es oro . Si fuera verdad, lo s
pobres, los marginados, los parados serían millonarios, pues s i
les sobra algo es tiempo . Los Vulgar, muy a menudo, suelen quejarse de su falta de tiempo, de l o
terrible que es ir' de un lugar a otro
sin parar, extremadamente atareacios porque «en este país o
estás parado o agobiado» y otra s
lindezas estúpidas por el estilo ;
más aún en estos tiempos en los
que el mostrarse agitado parece
90
indispensable si se quiere esta r
a la moda .
En las farmacias se ha intentado
colmar esa afición de los Corrien te, a veces de forma muy bella .
Es curioso el calendario par a
1905 proporcionado por las Tabletas de'1ntikwnina . en dond e
se reproduce el retrato de un a
joven firmado por Francisc o
Grifée . Para 1909, tenemos u n
pequeño pero bellísimo santora l
modernista proporcionado por e l
Elixir balsámico de Rivas Hodar.
fabricado en la Farmacia de l
Aguila de la calle Fuencarral .
Modernistas . y también muy be llos, son los almanaques d e
1916 ofrecidos por la farmaci a
y laboratorio químico de la plaza de San Ildefonso, propieda d
de A . Puerto . Para 1923, tenemos otro calendario modernist a
de la valenciana farmacia Royo .
El tiempo de la República pode mos verlo plasmado en un se cante del laboratorio de José d e
la Vega de Madrid, productor de l
Biolactógeno . el Acetarol o e l
Silverin . y en un anuncio de l a
Aspirina de Bayer, de 1933 . e n
donde se ve cómo «España entera -vestida con trajes regionales para la ocasión- confía e n
la Aspirina» . En fin, si ellos l o
decían, sería verdad, y la gente
caminaría de esa guisa por lo s
campos . venga a consumir Aspirina debido al dolor de cabeza que les producirían los encontronazos con otros tipo s
disfrazados de idéntica manera .
No sé .
I,~Ir~nu iioa (•n U'aj e regional . anunciando lli kina-Redu.von Roehr
91
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1935
.\Imnaques (le 193 :1N 143 . 1 . ofrecidos por las Pastillas del Pr
Iniliru
92
AGUA OXIGENADA
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1936
LUNES
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MARTES
NIERCOLES
JUEVES
VIERNES
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SÁBADO
DOMINGO
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Página del calendario de --trua oxigenada Foreto para 193 8
Nota en el reverso del calendario de Fore t
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Nota en el reverso dcl calendario de Foren
El tiempo de la guerra puede ver se en esa hoja de un calendari o
ofertado por el Agua oxigenada
Foret, cuyos propietarios, si no
se hicieron ricos durante la Gue rra Civil, no lo consiguieron ja más, porque desde luego fue necesaria mucha agua oxigenada y
más de un millón de tumbas -qu e
ya son tumbas-, y vergüenza que
produce el recordarlo porque s i
de las guerras se obtiene poca
93
gloria, de las civiles sólo miseria ,
dolor y desesperanza . En est e
papelito, escritas a lápiz, aparecen dos notas en el reverso d e
autora desconocida . En la prime ra dice : «A las cuatro y media lo s
trimotores tiraron pan y chocola te» . En la siguiente hace referen cia a que bailaron y que dos personas, cuyos nombres no alcanz o
a leer, «me sacaron mucho» . Está
claro que se trata de una mucha -
1944
PERRERO
29
dia .
LABORATORIO SANAVID A
APARTADO, 227 SEVILL A
N e r vid 1 n (Debilidad nervio.. - Hiporrn.or arterial)
27
26
25
24
23
22
vivir .
arrere . .
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r Y. M
21
d
\Inuuwque de 1 ) I I
cha que, en la tragedia de la gue rra y del asedio a Madrid, dej a
constancia de sus deseos de vivir, de sus buenos momentos .
Todos matándose . en esa época .
en 1938 prácticamente sin nad a
que comer en Madrid, pero ella
\In anaque bolis iano para 1111 1
94
acaso nuestra querida Antoñita ,
parece que pasó la guerra baj o
bombardeos de pan y chocolat e
en la Tierra de Nunca Jamás, e n
el país diseñado por la publicidad, por cualquiera de las publicidades, farmacéuticas o no : pero
no conviene engañarse . mucho s
aseguran que la realidad fue diferente, aunque vaya usted a saber dónde encontramos la realidad, sobre todo si no queremo s
mirarla .
La posguerra se puede contemplar en el almanaque del labora torio Sanavida, plagado de vistas ,
en blanco y negro y desenfocadas ,
de diversos lugares emblemático s
españoles . La posguerra y la dic tadura se vivieron así, en blanco y
negro, y sin un enfoque adecuado .
Almanaque boliviano para 191 3
recuerda y escribe que los bom bardearon con pan y chocolate .
lo que no quiere decir que la con tienda se disputara en el país d e
Nunca Jamás, ni de Antoñita Cual quiera, sino en la misma tierr a
que ahora pisamos, aunque esa s
operaciones propagandísticas te nían gran impacto en los jóvene s
hambrientos que, además, bailaban . y las muchachas se emocio naban si las sacaban mucho . A
esta mujer, que seguro no fue his toriadora . si le preguntaron lue go sus hijos sobre la guerra, pro -
bablemente callaría, como calla ron casi todos, doloridos, entris tecidos y, algunos, avergonzados ,
pero, si habló, lo haría de algun o
de los heridos por la metralla y .
si no vio ninguno, se enzarzarí a
en el recuerdo de bombardeos d e
pan y chocolate, de bailes anima dísimos en los que los jóvenes l a
sacaban a bailar constantemente, porque una cosa es lo que dic e
la historia oficial y otra la perso nal, la sentimental, la individua l
y la familiar. La dueña del alma naque del Agua oxigenada Foret,
95
Las farmacias y los laboratorio s
emplearon tan frecuentemente
los calendarios, los santorale s
y los almanaques como objeto pu blicitario que no nos es posible
obtener datos concluyentes sobre
los Corriente Cualquiera . Baste
con decir, para acabar, que so n
una familia atemporal, tan fuer a
del tiempo como la misma publi cidad empleada por los laborato rios y las farmacias para dar a
conocer sus productos, de la cua l
he expuesto una pequeñísim a
muestra .
Vista aérea
du
la llanta Farmacéutica del Grupo lriach en Palau-sulilà i I'Iep,amans (13arévlun,i)
ALGO MÁS DE HISTORIA .
,
UN POCO MAS SOBR E
INDUSTRIALIZACIÓN Y FARMACI A
El cambio más radical producid o
en Farmacia, durante el siglo XIX ,
es la producción industrial de me dicamentos .
Como hemos visto, desde tiempos
remotos, personajes de muy distinto pelaje prepararon medicamentos en serie : eran los reme dios secretos . En la terapéutic a
oficial, un médico recetaba u n
fármaco a un enfermo y se lo pre paraba un boticario en su oficin a
de farmacia . Los remedios secretos los autorizaban de cuando e n
cuando . Estaban constituidos, generalmente, de drogas exóticas .
En la mayoría de las ocasiones n o
conseguían el permiso para fabricarlosy comercializarlos, com o
consecuencia de las dificultade s
para conocer su auténtica composición, debido a la falta de desarrollo de la Química analítica .
Durante el siglo XIX, comienza a
conocerse la etiología de mucha s
enfermedades, sobre todo de las
contagiosas . Se descubre, también ,
la composición de los principio s
activos de las plantas (alcaloides y
glucósidos), empleadas hasta e l
momento como arsenal preferent e
de la terapéutica farmacológica . Se
encuentran nuevos principios químicos con acción específica sobre
agentes nosógenos . La Farmacología permite saber, de maner a
exacta, la actividad de los medica mentos sobre las distintas funciones fisiológicas . La Farmacognosia
facilita el acceso al estudio de la s
drogas medicinales por método s
científicos : todo está preparado ,
en el escenario secular del ocho cientos, para la aparición de la s
especialidades farmacéuticas d e
preparación industrial y, junto a
ellas, de las fábricas de materia s
primas, imprescindibles para s u
funcionamiento .
Para entender mejor el asunto ,
volvamos al ejemplo de la quina .
La droga, obtenida de diversa s
cortezas de árboles del género
97
Cinchona, había sido introducid a
por . los españoles en la terapéutica durante el final del siglo XV I
y principios del XVII . En un mun do asolado por las fiebres, consideradas no un síntoma, sino un a
enfermedad en sí misma (tercia nas, cuartanas . . .), la quina er a
el único febrífugo eficaz . Ante las
discusiones surgidas en la medicina oficial respecto a su uso, un a
buena parte de los remedios secretos se prepararon con ella .
Durante el siglo XVIII, la quina s e
llamó el palo indomable, porqu e
su acción frente a la fiebre depen día de la variedad utilizada . Lo s
avances en la sistemática y en l a
determinación botánica, efectua dos durante la Ilustración po r
franceses (Jussieu) y sobre tod o
españoles (Ruiz, Pavón, Mutis) ,
supusieron una gran mejora, a l
poderse determinar con exactitu d
la variedad vegetal deseada . Durante el siglo XIX, los descubrimientos de Pelletier y Cavento u
sobre la quinina determinaron
que ese alcaloide es el principi o
activo de la quina, el único responsable de su actividad febrífuga y antipalúdica . A partir d e
este momento, los médicos n o
tenían que prescribir una canti dad de polvos de corteza de qui na, siempre de acción terapéutic a
errática, sino el peso que decidieran de quinina . El alcaloide s e
obtenía en los laboratorios, primero a partir de las plantas, luego mediante procedimientos d e
síntesis . A partir de esa materi a
prima, en las farmacias o en lo s
laboratorios industriales, se le s
podía dar mediante técnica s
industrializadas, una forma farmacéutica,que era empleada po r
médicos y pacientes con much a
mayor exactitud, eficacia y economía . De un tratamiento empírico, el de la corteza de quina ,
empleado por los indígenas ame ricanos para evitar las tiritona s
que el cambio de temperatura de l
interior al exterior de las mina s
les producía, se pasó a la determinación científica de la especi e
botánica . De aquí a la extracció n
química de los principios activo s
y a su síntesis, en lo que llamaríamos fábricas de materias primas y, a partir de ella, a proporcionarle una forma farmacéutic a
mediante procesos industriales .
El manejo del fármaco se hizo má s
exacto, eficaz y seguro . Se pud o
Anuncio, de gran tamaño, de Alomar y Uriach (1886) (Colección tlriach)
98
sanal . Si antes todos los medica mentos se preparaban en las oficinas de farmacia, ahora sólo s e
hace con unos pocos, mientras l a
mayoría se elabora en laboratorios industriales . Si antes la investigación científico-sanitari a
discurría por los senderos de l a
anatomía y la fisiología, ahora l a
investigación terapéutica em prende un camino de desarroll o
acelerado, pues los resultado s
económicos de las empresas de penden del éxito de ésta . La pre-
paración de los medicamentos e n
serie abarata los costes, los populariza y hace posibles las medidas de protección sanitario-social . Esto, unido a los avances d e
la higiene o medicina preventiv a
-cuyo desarrollo no puedo analizar aquí- mediante desinfecciones ,
aumento de la higiene, mejoras e n
las condiciones de habitabilida d
y en la dieta, vacunación y suero terapia, supone un evidente incremento en las expectativas de vid a
de las poblaciones .
Frasco de I'ulmoscrin Baillr : preparado por l a
Casa triac h
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aumentar la cobertura sanitari a
de las poblaciones y el precio d e
los remedios resultó mucho má s
asequible .
La industrialización farmacéutica surge . fundamentalmente, d e
los avances científicos, con l o
cual la Farmacia pasa a depender directamente de sus componentes científico-técnicos y dej a
de lado los aspectos de tipo arte -
Cajitas de Brandreths pills. En una faja de papel pegada se puede leer : «Esta especialidad está garantiza da por Francisco llriach farmacéutico »
99
Las condiciones científicas para
la preparación de especialidade s
farmacéuticas estaban ya establecidas . Había que contar co n
los condicionamientos técnicos .
Poco a poco, van apareciendo las
formas farmacéuticas susceptibles de su utilización industrial .
El francés Stanislas Limousi n
presentó, en 1873, una cápsul a
amilácea de cierre húmedo, qu e
sufrió diversas modificacione s
hasta conseguir su llenado y cerrado industrial . Mediante este
procedimiento, podía conseguirse
una dosificación exacta de polvo s
terapéuticos, en grandes cantida des y en poco tiempo . El métod o
perdió interés ante el avance d e
los comprimidos . Previamente, e n
1833, A. Mothes había introduci do el uso de las cápsulas gelatinosas, preparadas por la inmersión de moldes en disoluciones d e
gelatina glicerinada, que fueron
perfeccionadas a lo largo del siglo .
El relojero e inventor inglé s
William Brockedon, en 1843 .
patentó un procedimiento par a
preparar píldoras comprimida s
entre dos punzones, basado e n
los moldes para comprimir arcilla . A los medicamentos resultantes se les llamó tabloides. En
1846, Jacob Dunton, mayorista
de medicamentos en Filadelfia .
Vitaminas globales . .
sry Agua . bidestilada esterilizada por
U.
cm .3
18
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DE. LA DIRECCIÓ N
GENERAL DE SANIDAD, CON El. N ." 1745
PRESENTADA AL REGISTRO
SoluciÓti esteril ' ada para inyecciones ,
contiene global ate les vitaminas B 1. B ; . '
Ba, PP (pruno B C,x, C, . (grupo C) extraldasy
de diversos - ' getalet s por el método de l
Dr . Prof . G . L i RENZINI .
- Cada aIlltpblla contiene 5 unidades' internacioraehs' del, grupo B, 10 unidades in ferrracionalesr de vitamina C .
É. MICO
RECONSTI i G
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-REGULARIZADOR DE LA
. ''f IO N
psstro-enteriti s
tndleaciones : Trastornos en el desarrollo infantil, atrofia y atrep
infantil, deficiencia secretoria y motriz del tubo digestivo, eesarregl apdoorlnos, diabetes,
convalecencia de las enfermedades infecciosas, debilidad orygplba,'d/allidad risrviosa, po lineuritis, escorbuto, enfermedad de'Barlow, pelagra, altèracrfones de le crna¡á ~aline a
CONSTANTE CONTROL F/5/OLOG/Ca 5O. E AN/MAhes '
PATENTES DE PROPiEDAti '' DEC ., : . : : :0 FhB11 AniTZ
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1¡(amina Luienzinl .
divo concesionario en España era liriach y Cía .
100
incorporó algunas mejoras al pro cedimiento. En 1872, el mecánico llenry I3ower construyó la pri mera máquina rotatoria de
comprimir . Inmediatamente aparecieron diversos dispositivos ingeniosos : prensas manuales accionadas por palancas, prensas de
tornillo . . .
También, durante el siglo XIX, a
los comprimidos y píldoras se le s
aplican técnicas de confitería ,
para recubrirlos con diverso s
materiales y convertirlos e n
grageas. El primero en recomen dar el recubrimiento con cubeba
y copaiba «al modo de las gragea s
ordinarias», fue el francés Labénonye en 1837 . Su compatriota ,
Adolphe p ortin, lo patentó el mis mo año . De esta manera, no sól o
se mejoraba la presentación de
los medicamentos y se facilitab a
la ingestión de aquellos que tu vieran mal sabor, también se
abría el camino para consegui r
su liberación en un determinad o
punto del organismo .
En 1816, jean Antoine Brutu s
Menier inventó un sistema d e
muelas mediante las cuales s e
podían obtener polvos impalpables . Los utilizó inicialmente e n
su fábrica de chocolate en Noisie .
En 1823, Petit construye un tambor de pulverización y, durante el
siglo, se perfeccionan los apara tos dedicados a ese menester .
En 1866, se introducen las máquinas centrifugadoras y divers o
material automático, como l a
pipeta de Limousin (1881) .
Durante el Romanticismo, no s
encontramos con una serie d e
medicamentos imposibles de obtener en las oficinas de farmaci a
(sueros y vacunas) ; al mism o
tiempo se presenta la posibilidad
101
técnica de fabricar masivament e
algunas formas farmacéutica s
tradicionales, como las pomadas ,
los destilados o los elixires, y, so bre todo, vemos cómo se podía n
conseguir medicamentos seguro s
y eficaces, en grandes cantidades, gracias a los descubrimientos científicos y a los avances téc nicos someramente descritos .
Si la industrialización había crea do una serie de problemas sanita rios como consecuencia de la s
aglomeraciones producidas en torno a los centros fabriles, la pro pia industrialización podía colabo rar a solucionarlos con creces .
La protección de los derechos d e
los fabricantes mediante la pa tente de los medicamentos y d e
los procesos de obtención, proporcionó un aliciente económic o
a esta actividad que se desarrolló con extraordinaria fuerza .
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UN LIVIANO Y APRESURAD O
PASEO POR EUROPA
Los ejemplos más paradigmáticos
de la industria farmacéutica, nacida a partir de fábricas químicas preexistentes o de oficinas d e
farmacia, los encontramos e n
Alemania o Suiza . Por esas naciones realizaré un escueto reco rrido informativo . Al resto de l
mundo le dedicaré una atenció n
muy somera, porque sería reiterativo o derivaría a un largo viaje
por el ámbito de la economía y
de las finanzas . Evidentemente ,
no dejaré de exponer el caso d e
España .
Alemani a
Alemania ocupó un lugar de gra n
preeminencia en la industrializa ción farmacéutica, debido al potencial de investigación genera do en sus universidades y en la s
propias industrias .
Sufrió una recesión tras la guerra de 1914,y otra tras la derrota de 1945 .
Las fábricas alemanas procede n
de la industria química de coloran -
Anuncio, de gran tamaño, de Alomar y Uriach (Colección Uriach )
103
tes (Bayer, Hoesch) o de farmacia s
familiares : la Grüne Apotheke d e
Schering ; la Schwanen-Ring-Apo theke, de la familia Trommsdorf ,
o la Engel Apotheke de la famili a
Merck .
Después del descubrimiento d e
los colorantes de la anilina e n
Inglaterra, el comerciante Friedrich Bayer y el maestro tintorer o
Johann Friedrich Weskott funda ron la Friedrich Bayer & Co ., dedicada a los productos tintóreos .
Después de un tiempo ocupado s
en esa rama industrial, Car l
Dusberg y Oscar Iliusberg aislaron la fenacetina, un febrífugo,
a partir de un producto del desecho de los colorantes . E n
1888, se creó un departament o
farmacéutico y en 1896 un labo ratorio farmacológico . En 1899 ,
Félix Hoffman descubrió el ácido acetilsalicílico, la Aspirina .
Durante el primer tercio del siglo XX, comercializan más d e
seiscientos productos farmacéuticos .
En 1925, la industria química y
farmacéutica alemana se fusion a
con las siglas I .G . Farbenindustriey todos los preparados farmacéuticos teutones se unen e n
la marca de Bayer . En 1945, sus
bienes fueron confiscados por lo s
aliados y en 1950 se devolvieron
Anuncio . de gran tamaño . de Alomar t riach (Coleccián 1 i'iach )
104
a cuatro grandes empresas : el lla mado grupo de Main, la Rayen l a
13 .1S E y la Farbwerke Iloesch .
La Iloesch nació en 1863, dedicada también a los colorantes . E n
1884 sintetizaron el analgésic o
antipirina y ampliaron sus activi dades a la investigación y, prepa ración de medicamentos . En
1893, obtuvieron la amidopirin a
(Piramid(ín) . perfeccionada en
1922 por dipirona (\ algina) .
ciones . Ileinrich Emanuel Merck ,
a principios del siglo XIX, construyó un modesto laboratorio d e
fabricación anejo a su botica .
Trabajó con el opio y facilitó l a
introducción terapéutica de l a
santonina (antiemético) . Su in -
dustria se dio a conocer con l a
fabricación de barbitúrico s
(Luminal . leronal) y por los trabajos en el campo de las vitaminas . Sintetizaron el ácido ascórhico (vitamina C) . la vitamina A
y otras .
Liberació n
psíquica del niño inadaptado
Desde 1884 mantuvieron íntim o
contacto con médicos como hoch
o Ehrlich . Merced a ello, consiguieron preparar la tuberculina ,
usada en principio como agente
terapéutico luego como ele mento de predicción : un suero
contra la difteria . en 1894 . y e l
Saha►sán (1910), el primer re medio contra la sífilis . En 1923 ,
obtuvo licencia para prepara r
insulina conforme al sistem a
descubierto en Toronto po r
llanling y Rest y . posteriormente . perfeccionaron el sistema para
inyectarla con efecto retardado
y disminuir la frecuencia (le la s
dosis necesarias para los diabéticos .
La familia Merck inició sus actividades en la Elige/ _tpolhek e
(farmacia del ángel) en el siglo
XXII . Después de cinco genera -
105
Guasl~ I
pediritric o
En 1933, inauguraron un nuevo
laboratorio de investigación co n
sus oficinas en Rahway (New
Jersey, EE .UU .) que se fusionó ,
en 1953, con la americana Sharp
& Dome .
La compañía Ciba no comenzó su
aclividad farmacéutica hasta
principios del siglo XX, con l a
preparación del desinfectante,
VÍoTormo o la Coramina (1918)
indicada para las afecciones car-
Suiza
La industria farmacéutica suiza se agrupa en Basilea . En es a
ciudad, a orillas del Rin, duran te el siglo XVIII se establecieron gran cantidad de fábrica s
dedicadas a la seda y el algodón . Para poder embellecer lo s
tejidos, se desarrolló una importante industria tintórea y, com o
sucedió en Alemania, de los colorantes se pasó a los medicamentos .
En 1758, se instaló en Basilea
Johann Rudolf Geigy. Su comercio lo dedicaba a los tintes y ven tas mayoristas y minoristas d e
drogas. En 1780, se asoció co n
Nicholas Johannes Bernouilli ,
que había estudiado Farmacia e n
Basilea y Estrasburgo . Desde en tonces, combinan sus intereses e n
los colorantes sintéticos, en lo s
medicamentos y en los insectici das . En 1939, sintetizaron el DD T
y su descubridor, Miiller, ganó e l
Premio Nobel de Medicina .
106
diovasculares . En 1970, se fusio naron con Geigy.
En 1868, Fritz 1loffman adquirí a
una empresa en cuyo departa mento farmacéutico trabajaba .
\sociado con el farmacéutico ale mán Max Carl 'fraub, forma l a
compañía l loffman, 'fraub y Cía .
Más tarde, se une a la famili a
Roche en la empresa 1loffrnan14a Roche y Cía . . que se dedicó a
investigar en el campo de las vitaminas, en competencia co n
\lerck . registró numerosos principios activos y, a partir de la década de los sesenta del siglo pasado . se hizo famosa con la s
benzodiacepinas .
Edouard Sandoz se adueñó de s u
empresa en 1893 . Dedicada e n
principio también a los tintes ,
puso al frente del departament o
farmacéutico a ;Arlhur Stoll . especialista en el aislamiento d e
los principios activos de los ve-
getales . Aisló la ergotamina e n
el cornezuelo de centeno, y si guió su investigación por eso s
derroteros .
Otros países
El caso alemán y suizo se repiti ó
en otros muchos países . En Francia, Nalivelle, después de haber
purificado y cristalizado la digitalina en la rebotica de su oficina de farmacia, fundó una fábrica dedicada a su extracción y
a la preparación de productos
cardiotónicos . Sin su importanci a
pionera en la investigación, el farmacéutico Dausse, en 1834, aban donó su botica y creó una fábrica
107
de productos vegetales de uso terapéutico . Genevoix emprendió ,
en Romainville, la producción d e
medicamentos a escala industrial, después de dejar su farmacia en 1840 . En 1858, Poulen c
abría una fábrica de medicamentos en París . Más tarde, Delagrange Fournier siguieron e l
mismo camino.
En los Estados Unidos, en 1830
John K. Smith y su cuñado Joh n
Gilbert abrieron un drugstare e n
Filadelfia sin conocimiento alguno de farmacia . En 1875, se in auguró Smith-Mine, llamada des de 1891 Smith-Kline-French y
fusionada en la actualidad co n
importantes multinacionales inglesas .
EXPO .SICION INITItNACIONAI .
PALACIO
I .AS INDUSTRIA .S
STAND
N"
1
DE
ISARCELON A
QUIMICA S
ESPAÑA 5' L:4 LEGISLACIÓN SOBR E
ESPECIALIDADES FARMACÉUTICA S
En España . la industria farmacéutica se manifiesta, durant e
muchos años, como subsidiari a
de la investigación extranjera
debido al poco valor (lado e n
nuestro país a la investigación
científica, al carácter comercial y
especulador de nuestro capita l
y a las trabas legales establecidas para el desarrollo de la industria farmacéutica española
desde la Ley de Sanidad de 1855 .
Cuando el liberalismo progresista se dio cuenta de la equivocación cometida y de la gran depen dencia generada respecto a lo s
laboratorios europeos y america -
nos, trataron de enmendar e l
error. De la tolerancia se pasó a
la aceptación . Por Real Orden d e
19 de julio de 1901, se permitía
la elaboración de medicamento s
en las oficinas de farmacia, par a
expenderlos al público y a otro s
farmacéuticos al por mayor . Eran
los laboratorios anejos a las oficinas de farmacia . Mediante su re conocimiento legal, se intentaba
armonizar la industrialización farmacéutica y el imperativo de la s
Ordenanzas de Farmacia de 1860 .
Según éstas, la elaboración de lo s
medicamentos correspondía exclusivamente a los farmacéutico s
en sus oficinas de farmacia .
109
El Reglamento para la elaboración
yventa de especialidades farmacéu ticas de 1919, admitía ya la existencia de los laboratorios indepen dientes de las oficinas de farmaci a
y la Ley de Bases de Sanidad d e
1944 no incluía los laboratorio s
anejos a las oficinas . Con ello, s e
cierra un ciclo y se da la vuelta a
los principios sobre la preparació n
de medicamentos. De no consentirla más que en las oficinas de farmacia, se pasa a tolerarla, a admi tir los laboratorios anejos para, a l
final, pmhibir la preparación de es pecialidades en cualquier lugar qu e
no sea un laboratorio dotado (l e
una serie de condiciones técnicas .
Vista parcial de la llanta Farmacéutica del Grupo 1 riach cn I'alau-sulilL
i
I'Iegamans (I„ir
LA INDUSTRIALIZAC IÓN FARMAC ÉUTIC A
FN NUESTRO PAÍ S
Si la Ilistoria de la Farmacia de l
antiguo Reino de Aragón y. con
ella . la del Principado de Cataluña tiene rasgos claramente diferenciadores con respecto a l a
del resto del Estado, no es de extrañar que la industrializació n
farmacéutica se produjese funda mentalmente en Cataluña . La farmacia aragonesa, y con ella l a
catalana, se muestra inmersa e n
el mundo Mediterráneo . Al igual
que en el Reino de las Dos Sicilias ,
o en Francia, se produce un a
pronta y rígida separación entr e
Medicina y Farmacia por influj o
de la cultura islámica . Lo mism o
que en el resto del Mediterráneo ,
el modelo gremial cobra una fuerza incomparablemente mayor qu e
la del resto de la nación española . Además, (lado el cariz mercan til de la cultura catalana, los gremios de farmacéuticos tienen un a
relevancia superior a la de lo s
otros territorios de la coron a
aragonesa . Esa larga tradició n
farmacéutica aragonesa y particularmente catalana, durante e l
siglo \I\ . entronca con el aug e
industrial que se produce en Cataluña y en el País Vasco . El de -
clive económico español empieza
a solucionarse por la periferia. Están bien estudiados los casos de l a
industria textil en Cataluña o la si derurgia en el País Vasco. Mucho
menos el (le la industria químic a
en la propia Cataluña y casi nada
el (le la industria farmacéutica .
Mencionaré aquí sólo cuatro d e
los casos más antiguos de la industria farmacéutica en España ,
tres catalanes y uno madrileño :
me refiero a los laboratorios de
Andreu, Esteve, Uriach y Gayoso .
En 1866, el doctor Salvador Andreu abrió una modesta farmaci a
en el antiguo barrio de la catedral de Barcelona . En ella instaló un pequeño laboratorio . Com o
su padre era asmático preparó u n
medicamento para esa dolenci a
y unas pastillas pectorales . Ambos tuvieron una gran acogida po r
parte del público y empezaron a
exportarse a Latinoamérica .
En 1882, gracias a la prosperi dad alcanzada, abrió una farmacia en el Llano de la Boquería, l a
«farmacia de la Rambla», y co -
111
menzó la construcción de un laboratorio en la calle Aragón .
El doctor Andreu fue un mago de l a
publicidad y. en ocasiones, del bue n
gusto, como la mayoría de los bo ticarios catalanes . Sus cajas metálicas se hicieron conocidísimas ,
así como los abundantes obsequio s
metálicos hechos a sus clientes .
Aunque no los estudiemos aquí ,
no pueden dejar de mencionars e
los envases de Serra Ferrer, o (l e
Grau, tan exquisitos en el diseñ o
casi siempre modernista . La farmacia industrial catalana se caracteriza no por una innovació n
grande, debido a que la dedicación a la investigación en nues tro país no fue relevante, pero s í
por un gusto estético excelente e n
la presentación de sus productos .
En 1929, del pequeño laboratori o
anejo situado junto a la oficina d e
farmacia de Tomás Esteve e n
Manresa sale el Esterosol, una so lución oleosa de vitamina D . Estudia la síntesis del Neo-Spirol ,
el primer arsenobenceno nacional ,
obtenido en 1932 a partir de ma -
ferias primas españolas . Como n o
pudiera realizar allí los trabajos d e
la síntesis semindustrial del producto, abrió un laboratorio en l a
calle Urgell de Manresa, en dond e
continuó hasta 1942, año en qu e
se trasladó a Barcelona . Continuó
sus trabajos sobre sulfanilamid a
(-l mulo-Sul oI) .
En 1854, Vicente Moreno Migue l
estableció su farmacia en la calle del ;Arenal, 2, en Madrid . E n
ella preparaban y vendían numerosas especialidades farmacéuticas, como los piñones vermífugos ,
el purgante salino . . . Se asoció con
su sobrino, Francisco Cayoso ,
quien quedó como único dueño en
112
1890 . l la sido uno de los má s
antiguos laboratorios madrileños, aunque no se caracterizó, e n
sus comienzos, por la investigación realizada . sino por la capacidad de comercializar productos .
En la actualidad, ha desaparecid o
en una de tantas ptantas anexiones Nfusiones de la industria .
URIAC H
Juan Uriach Prats . el molinero d e
San Andrés del Palomar, tuvo varios hijos . En la molienda le ayudaba el primogénito y heredero .
1 consecuencia de ello, en el añ o
1838 . animó a su otro hijo . Jua n
llriach Feliu, para que buscara
trabajo fuera de la casa paterna ,
en Barcelona .
Se colocó como dependiente e n
una droguería del paseo del Borne n ." 6, propiedad de Rafae l
Vilaclara l;uras, en donde trabajaba . comía y dormía . Sólo los
domingos volvía a la casa paterna . En 1860 . tras muchos año s
de trabajo ímprobo, logró hacer se cargo del negocio . Consigui ó
una vivienda en el segundo pis o
del edificio en que tenía la droguería . y se casó con su prim a
Josefina Uriach Vallés . El matrimonio tuvo once hijos, de los qu e
sólo cuatro llegaron a adultos . I;I
negocio prosperabay - hubo d e
trasladarse a la zona más importante del Barrio Gótico, un almacén enorme en el número 20 d e
la calle p unteada, en donde s e
situó la empresa Alomar y Uriach .
El cambio de denominación s e
debió a que el fundador de la dinastía se asoció con el farmacéu -
tico Joaquín Alomar Font, el 22
de junio de 1872 .
F,1 heredero, Joaquín Uriach Uriach ,
fue educado como su padre, e n
una entrega esforzadísima al trabajo y sin estudios superiores .
El 26 de enero de 1891 muri ó
Alomar y ya la empresa no dej ó
nunca de ser de la familia . Como
le faltaba un farmacéutico y ha -
bía decidido no dar estudios a s u
heredero, al segundo (Francisco )
le aconsejó hacer Farmacia, a l
igual que al tercero, Trinidad .
Juan Uriach Feliu falleció en julio de 1907 . Su continuador, Joaquín Uriach . decidió abrir un laboratorio en 1898 . Se instaló en
la calle Baluarte 28, en la Barceloneta . Sus hermanos Francisc o
y Trinidad se dedicaron el prime -
\nuncio. de gran tamaño . de Alomar y l Tiach (Colección ll•iach )
113
ro a la dirección científica y e l
segundo a las relaciones exteriores . A principios del siglo XX, ad quirieron una gran finca, de unos
cinco mil metros cuadrados, e n
el pueblo de San Martín de Provensals, cercano a San Andrés de l
Palomar, el lugar originario de l a
familia . A ese nuevo emplaza miento trasladaron el laboratorio .
Se vio sometido a numerosa s
ampliaciones como consecuenci a
de las muchas licencias de distribucióny fabricación de especialidades de industrias extranjeras .
La Primera Guerra Mundial sirvió para enriquecer a las industrias de los países neutrales . En
España, la industria textil aumentó sus beneficios de manera explosiva, y lo mismo pasó con l a
química y la farmacéutica . En
1919, la sede social de Uriac h
pasó de la calle Montcada 20 a l
número 49 de la del Bruch, co n
lo cual abandonaban la Barcelona vieja y se situaban en el Ensanche de la burguesía y de lo s
negocios florecientes . El 26 d e
diciembre de 1925 . se transformó en sociedad anónima . J .
llriach & Cía ., S .A .
Durante los años veinte y treinta . llriach fabricó la Fosfatina
Falièl s. harina francesa infantil .
\nrncio . (le gran lunario . (le l 'iach (Colección E riaeln
114
preparada en el laboratorio de Sa n
Martín de I'rovensals, con la supervisión de técnicos extranjeros .
Las licencias aumentaron, procedentes de lodo el mundo : Francia ,
Inglaterra . Italia . Estados Unido s
e incluso Noruega o Chequia .
I,a historia del laboratorio sigu e
hasta la actualidad, siempre e n
manos de la misma familia, constanlemente ligada a las vicisitudes de la historia de España y de
Cataluña . En un mundo invadid o
por las multinacionales, los labo ratorios Uriach siguen existien do en la actualidad dirigidos po r
Juan Uriach iarsal, en una apuesta a la vez tradicional y moderna ,
en la cual la investigación desem peña un papel importante, y n o
tan sólo la científica, sino también la humanística gracias a l a
larga dedicación de la Fundació n
Uriach al estudio de la Histori a
de la Ciencia de la Salud.
115
La propaganda de este laboratorio vino marcada acaso por lo s
gustos pictóricos y culturales d e
los primeros miembros de la familia, aficionados a la música y a
la pintura, y amigos de algun o
de los más destacados pintores d e
Cataluña .
La colección de publicidad d e
Uriach, una de las pocas que s e
conserva en España, es de un a
gran variedad y belleza .
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publicitario. España. 1879-1960Is .p .d .i . j .
ÍNDICE
Segunda part e
PUBLICIDAD Y JUEGOS
7
LA PUBLICIDAD Y LOS DEPORTES
13
LOS ABANICOS Y LA PUBLICIDAD
25
LA PINACOTECA PUBLICITARIA
35
LA PUBLICIDAD Y LOS OBJETOS DE MEDIDA
49
CIENCIA Y PUBLICIDAD
57
LOS VIAJES DE LOS CORRIENTE CUALQUIERA
73
CRONOS Y LA PUBLICIDAD FARMACÉUTICA
87
ALGO MÁS DE HISTORIA .
UN POCO MÁS SOBRE INDUSTRIALIZACIÓN Y FARMACIA
97
UN LIVIANO Y APRESURADO PASEO POR EUROPA
10 3
ESPAÑA Y LA LEGISLACIÓ N
SOBRE ESPECIALIDADES FARMACÉUTICAS
10 9
LA INDUSTRIALIZACIÓN FARMACÉUTICA EN NUESTRO PAÍS
11 1
URIACII
11 3
BIBLIOGRAFÍA
117
11 9
Colección Ilislórica de Ciencias de la Salud n" 9
Fil)ACION 1 RIACI1 183 8
Fotografía : Óscar Gómez de \altej o
© 2005 I~UND\CIÚN t Rl\Cl1 183 8
Fundación Privad a
Polígono Ind . Riera de Calde s
Avinguda Camí Reial 51-5 7
08184 Palau-solità i Plegaman s
(Barcelona )
2005 Ediciones \lavo, S .A .
Aribau . 185-187 / 08021 Barcelon a
Segre, 29 / 28002 Madri d
© 2005 Textos e imágenes F. Javier Puerto Sarmient o
©Imágenes de las páginas 6, 12, 24 . 34, 48 . 56, 72, 84, 86, 96 . 102, 103 . 104, 105 . 106, 108 . 110, 113, 114 :
FUNDACION URI 1CI1 183 8
obra completa : 84-96122-30- 1
volumen 1 : 84-96122-31- N
ISBN volumen II : 84-96122-32- 8
Depósito legal: B-15 .718-0 4
Impresión : Novoprin t
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ISBN
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