PRESENCIA DE ANTICUERPOS CONTRA Ehrlichia canis EN

Transcripción

PRESENCIA DE ANTICUERPOS CONTRA Ehrlichia canis EN
PRESENCIA DE ANTICUERPOS CONTRA
Ehrlichia canis EN PERROS SOSPECHOSOS,
EN EL MUNICIPIO DE CAJEME, POR MEDIO DE
LA TÉCNICA DE INMUNOFLUORESCENCIA
INDIRECTA
TESIS
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE
MÉDICO VETERINARIO ZOOTECNISTA
PRESENTA:
MARÍA JESÚS LEAL ACOSTA
MC. RAMÓN MIGUEL MOLINA BARRIOS
MD. ISABEL ANGELES DE LA LLAVE
CD. OBREGÓN, SONORA; FEBRERO DE 2004
ii
DEDICATORIAS
A DIOS principalmente porque me diste la Fé suficiente en cada momento de mi
vida, ya que gracias a tu existencia y a tu amor hiciste posible uno más de mis
sueños, gracias Señor por darme la vida, el coraje y la fuerza para vencer
cualquier obstáculo.
A los maravillosos seres que me dieron la dicha de ser su hija, MIS PADRES: Ing.
Rafael Leal Maldonado y Sra. María Acosta de Leal; por ayudarme y
acompañarme en cada paso que di, por enseñarme que lo más importante no es
tropezar y caer, sino levantarme y apuntar hacia la cima, por estar conmigo en
cada segundo de mi vida a pesar de la distancia, por enseñarme siempre a mirar
hacia la luna y por darme las alas y enseñarme a volar. ¡Los adoro papitos!!
A mis HERMANOS Carmina y Fausto por estar conmigo en cada momento de mi
vida, por brindarme su cariño y ternura, por tenerme siempre en su corazón y en
sus oraciones, gracias por ser mis hermanos.
A mi NOVIO Carlos Rafael Fonseca López, ya que con tu ayuda he culminado con
una etapa tan importante y especial en mi vida, gracias por estar a mi lado en
Leal A. Ma. Jesús
iii
cualquier situación, por darme la fuerza, valentía y el amor para enfrentar la vida,
por ser mi mejor amigo y por ser como eres . ¡Te amo Bebé!!
A mi primo Luisito , a ti pequeño angelito por compartir con nosotros todas tus
alegrías y sonrisas, ya que gracias a tu llegada has traído una gran felicidad en
nuestros corazones y con tu presencia iluminas nuestras vidas, haciéndonos
conocer fragmentos del cielo. ¡Te quiero chiquillo!!
Al Ing. Rodrigo Gonzáles y Sra. Irma Vega, Carolina y Rodrigo, por abrirme las
puertas de su casa y de su corazón, por ser como unos padres para mí, por darme
la confianza de ganarme su cariño y entrar a su familia, por todos sus consejos,
por darme su consuelo cuando lo necesité, por esto y más siempre los tendré
presentes.
A Jordan por ser mi mejor amigo, mi guía y mi compañero día, noche y en cada
momento; estés donde estés siempre te llevaré conmigo por el simple hecho de
plasmar tus huellitas en mi vida.
A mis dos amigas de toda la vida Erika Von Borstel y Cristina Serrano por todos
esos momentos que hemos compartido juntas, por sus consejos y disponibilidad.
A mis demás amigochos de la carrera: José, Clemente, Gil, Edgar, Mario Zazueta,
Mario Rochin, Carlos Ávila, Manuel Nieblas, Marcos Espinoza, Eleazar, Paul,
Alfonso Peraza, Fabián Barreras y muchos más, ya que me dieron su amistad y en
ustedes aprendí a ver la vida en diferentes dimensiones.
Leal A. Ma. Jesús
iv
AGRADECIMIENTOS
A Dios por guiar mis pasos en todo momento y tomarme de su mano para
llevarme al lugar correcto y sobre todo por darme la vida y salud para estar donde
ahora estoy.
A mi Familia, por obsequiarme las herramientas indispensables para salir
adelante, por tenerme la confianza y darme la seguridad para elegir mi destino.
A mis ASESORES: M.C. Ramón Miguel Molina Barrios y M.D. Isabel Angeles De
la Llave, por apoyarme en mi trabajo, por compartir conmigo su sabiduría, por
abrirme las puertas en cada instante, y por permitirme aprender de ustedes.
A mis Revisores: M.V.Z. Juan Manuel Martínez Montes, M.V.Z. Javier Rolando
Reyna Granados y M.V.Z. Pablo Luna Nevárez; por ayudarme a culminar esta
etapa y poder contar con sus comentarios en cada momento.
A los Médicos, Dra. Victoria García Sánchez, Dr. Marco Antonio Valdez Zúñiga,
Dr. Leopoldo Zavala Leal, Dra. Gabriela Cervantes, por proporcionarme su ayuda
incondicional y estar en la mejor disposición de ayudar.
Leal A. Ma. Jesús
v
A todos mis maestros de la carrera, en especial al M.V.Z José Ma. Aceves, M.V.Z.
Alberto Torres, M.V.Z. Javier Munguía, M.V.Z. Guadalupe Méndez, M.V.Z. Carlos
Aguilar, M.V.Z. Ramón Molina, M.V.Z. Isabel Angeles, M.V.Z. Ana Laura Miranda,
Q. Jorge Robles, M.V Z. Fernando Calderón por compartirme sus conocimientos
del divino tesoro del saber.
Leal A. Ma. Jesús
vi
CONTENIDO
ÍNDICE DE CUADROS...........................................................................................viii
RESUMEN...............................................................................................................ix
I. INTRODUCCIÓN .................................................................................................1
II. REVISIÓN DE LITERATURA...............................................................................4
2.1 Historia y distribución de la enfermedad ...........................................................4
2.2 Sinónimos ..........................................................................................................5
2.3 Etiología..............................................................................................................6
2.4 Epizootiología ....................................................................................................7
2.5 Patogénesis .......................................................................................................8
2.6 Signos clínicos ................................................................................................11
2.7 Diagnóstico ......................................................................................................15
2.8 Diagnóstico diferencial.....................................................................................17
2.9 Tratamiento.......................................................................................................18
2.10 Prevención .....................................................................................................21
2.11 Pronóstico.......................................................................................................21
2.12 Importancia en la salud pública......................................................................22
Leal A. Ma. Jesús
vii
III. MÉTODOS Y MATERIAL................................................................................24
3.1 Localización del sitio experimental ..................................................................24
3.2 Metodología .....................................................................................................24
3.2.1 Determinación del tamaño de la muestra .....................................................24
3.2.2 Técnica de Inmunofluorescencia Indirecta ...................................................25
3.3 Variables a analizar..........................................................................................26
3.4 Análisis Estadístico de la Información .............................................................26
IV. RESULTADOS Y DISCUSIÓN ........................................................................27
V. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES.....................................................33
VI. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.................................................................35
Leal A. Ma. Jesús
viii
INDICE DE CUADROS
Gráfica No. 1.Distribución porcentual de los resultados de la técnica de
inmunofluorescencia indirecta por Ehrlichia spp.....................................................30
Gráfica No. 2 Principales signos encontrados en los perros seleccionados
como sospechosos a Ehrlichiosis..........................................................................31
Gráfica No.3 Principales signos asociados a Ehrlichiosis presentados en los
perros confirmados como positivos .......................................................................32
Leal A. Ma. Jesús
ix
RESUMEN
María Jesús Leal Acosta. Presencia de anticuerpos contra Ehrlichia canis en
perros sospechosos, en el municipio de Cajeme, mediante la técnica de
Inmunofluorescencia indirecta. Asesores: M.C. Ramón Miguel Molina Barrios y
M.D. Isabel Ángeles De la Llave.
El objetivo de esta investigación fué determinar la presencia de anticuerpos en
perros
sospechosos
a
Ehrlichia
canis
por
medio
de
la
técnica
de
Inmunofluorescencia indirecta, para finalmente obtener un porcentaje de perros
reactores positivos a la prueba. El muestreo fue
realizado en los meses de
octubre y noviembre del año 2003. Para ello se utilizaron 60 animales, de los
cuales se obtuvieron 49 animales positivos y 11 negativos a E. canis,
representando 81.66 y 18.30%, respectivamente. De acuerdo a los resultados
obtenidos se llega a la conclusión que es posible realizar un diagnóstico
presuntivo de ehrlichiosis basándose
únicamente en la historia clínica e
inspección física del paciente. El hacer uso de otros métodos de diagnóstico como
la biometría hemática nos da un resultado más seguro y se puede dar un
diagnóstico definitivo y así dar el tratamiento correcto y la atención merecida al
paciente y de una forma concientizar al propietario sobre la importancia de
combatir al vector causal de la enfermedad.
Leal A. Ma. Jesús
I. INTRODUCCIÓN
La erliquiosis canina monocítica es una enfermedad infectocontagiosa de curso
agudo, subclínico o crónico. Esta rickettsia afecta a perros y es transmitida por la
garrapata Rhipicephalus sanguineus, siendo considerada además como una
zoonosis (Romano, 1998).
Es una enfermedad que se ha distribuido por todo el mundo y adquirió gran
importancia durante la guerra de Vietnam, cuando una gran proporción de perros
militares contrajeron esta enfermedad (Birchard y Sherding, 1996).
En Alemania se realizó un estudio en los que se detectaron 211 perros infectados
con E.canis durante 1997, de los 53 epidemiológicamente analizados, 19 de ellos
habían viajado con sus dueños a áreas endémicas; las garrapatas encontradas
en 4 de estos perros determinaron ser Rhipicephalus sanguineus (Gothe, 1998).
Este artículo concuerda que en otras partes del mundo existe la enfermedad y su
modo de propagarse a otros países es factible.
En la ciudad de Mexicali B.C. Méx. se realizó un estudio en los meses
comprendidos de septiembre a diciembre de 1997, donde se evaluaron 30 perros,
de los cuales el 93.3% respondieron positivamente a E.canis ( Romano, 1998).
En el estudio que se realizó durante el verano pasado en la región del mayo para
determinar la presencia y frecuencia de anticuerpos contra E.canis se tomó una
muestra de 30 animales sospechosos, de los cuales 21 fueron positivos, lo que
Leal A. Ma. Jesús
2
indica que el 70% de la población posee anticuerpos contra la enfermedad (Silva,
2003).
Los caninos, como todas las especies domésticas, pueden afectarse por
problemas sanitarios, a nivel urbano es frecuente la presencia de garrapatas, las
cuales pueden ser portadoras de diferentes agentes patógenos.
La convivencia perro, garrapata, hombre, es estrecha en algunas áreas de la
ciudad, lo que favorece a que los agentes que porta la garrapata también afecten
a los humanos.
Es necesario obtener información sobre los vectores y su efecto en los huéspedes,
por lo cual es importante identificar los géneros de garrapatas presentes en los
perros del municipio y de igual manera determinar la presencia y la frecuencia de
anticuerpos contra Ehrlichia canis.
La infestación de garrapatas en los cánidos es un tema de gran importancia, ya
que son transmisoras de algunas enfermedades causadas por rickettsias que
pueden perjudicar tanto al hombre como a los mismos animales.
La ehrlichiosis es considerada una zoonosis, ya que es una enfermedad que se
puede transmitir en una forma natural entre los animales vertebrados y el hombre,
afectando así a personas de cualquier edad y sexo (García 1990, Vela 1997 y
Bennenson 1997).
También es importante resaltar que las enfermedades zoonóticas son diferentes al
resto de enfermedades infecciosas por su idiosincrasia, por ello su prevención y
Leal A. Ma. Jesús
3
control
requieren
estrategias
muy
particulares
basadas
en
profundas
investigaciones considerando sus diferencias sociales, climáticas y económicas
(Gil y Samartino, 2000).
Debido a esto, es conveniente realizar estudios en Cd. Obregón para encontrar
anticuerpos complementándose el diagnóstico con serología, mediante la prueba
de inmunofluorescencia indirecta (IFA).
El objetivo de presente trabajo fue determinar la presencia de anticuerpos contra
Ehrlichia canis en perros sospechosos, en el municipio de Cajeme, mediante la
técnica de Inmunofluorescencia indirecta, esperando encontrar al menos un 10%
del total de la población muestreada con anticuerpos contra Ehrlichia canis.
Leal A. Ma. Jesús
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II.
REVISIÓN DE LITERATURA
2.1 Historia y distribución de la enfermedad
Las enfermedades por rickettsias son muy comunes en los perros y raras en los
gatos. La mayoría de las rickettsiosis son transmitidas por las garrapatas. Debido
a que estas enfermedades son agudas en las áreas endémicas, hay una gran
prevalencia durante o después de la temporada de calor, cuando hay mas
garrapatas (Birchard, 1996).
Las rickettsias fueron descubiertas por Ricketts en 1907 en la Fiebre de las
Montañas Rocosas. Las denominaciones “rickettsias” fue inducida por Da Rocha
Lima, quien en memoria de los investigadores Ricketts y Prowazek, muertos a
causa del tifus exantemático en 1910 y 1915 respectivamente, puso el nombre de
rickettsia proawzeki al agente productor, descubierto por el en 1916, de una
enfermedad febril transmitida al hombre por piojos. Los primeros informes de esta
enfermedad procedieron de Argelia, África del Sur, Kenya y Rhodesia (19351938). En el año de 1962 se diagnosticó también por primera vez en otras zonas
de África, en la India, Antillas Holandesas y USA. En 1962 la E. canis fue
reconocida por primera vez en los Estados Unidos. Hacia fines de la década de los
Leal A. Ma. Jesús
5
60’s se definió el papel patogénico significativo de esta ricketsia cuando se pudo
establecer su participación etiológica en la pancitopenia canina tropical (Beer
1987, Ettinger 1992).
La enfermedad se presenta en los países tropicales y subtropicales del mundo
donde hay existencia de la garrapata marrón del perro, excepto para Australia
donde la infección no fue documentada (Ettinger, 1992).
La ehrlichiosis canina se ha distribuido por todo el mundo y adquirió gran
importancia durante la guerra de Vietnam, cuando una gran proporción de perros
militares contrajeron esta enfermedad. Debido a su naturaleza crónica e insidiosa,
la ehrlichiosis aparece durante todo el año y no solo durante los meses calurosos
(Birchard y Sherding, 1996).
2.2 Sinónimos
Los sinónimos que se le han utilizado en la literatura para esta alteración incluyen
Enfermedad del perro rastreador, Pancitopenia tropical canina, Fiebre hemorrágica
canina y Tifus canino. Enfermedad sangrante del Nairobi, Fiebre Canina Lahore,
Rickettsiosis canina (Birchard y Sherding, 1996; Tilley et al.,1997).
Leal A. Ma. Jesús
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2.3 Etiología
Esta especie es causada por la especie Ehrlichia canis, organismo de orden
Rickettsiales, familia Rickettsiaceae, tribu Ehrlichiae y género Ehrlichia (Scanlan,
1988).
Las rickettsias forman un grupo de bacilos, pequeños, cocoides y gram negativos,
parásitos obligados de la células eucarióticas, los cuales son transmitidos
fundamentalmente por artrópodos hematófagos (garrapatas, pulgas, ácaros)
(Nicolet, 1985).
El agente causal afecta a los monocitos, pero también a otros leucocitos de la
sangre, los que son descubiertos con las tinciones de Giemsa (color rojo),
Leishman y Romanowsky. La E. canis tiene forma cocoide; su tamaño varía
mucho en el transcurso del ciclo de desarrollo (oscila entre 0.5 y 10 um). Este
agente no se multiplica en embrión de pollo, ni en animales de laboratorio (Beer,
1987; Ettinger, 1992).
La enfermedad es causada por Ehrlichia canis, este organismo es un miembro de
la familia rickettsiacea. Se localiza intracitoplasmáticamente y se reproduce por
fisión binaria (Scanlan, 1988).
Leal A. Ma. Jesús
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Existen otras variedades de Ehrlichia que afectan a los perros, E. platys que
produce la trombocitopenia cíclica infecciosa del perro, E. equi, E. ewingii y E.
chaffeensis que también puede infectar al perro con manifestaciones subclínicas o
clínicas más benignas. La E .canis es un microorganismo que se observa en forma
individual (cuerpo elemental) o en racimos (mórulas), en citoplasma de leucocitos
infestados principalmente monocitos y linfocitos. Morfológicamente las otras
variedades son similares a Ehrlichia canis; sin embargo, E. platys infecta
específicamente a las plaquetas y E. equi a neutrófilos y eosinófilos. La E. canis es
considerada agente causal de Ehrlichiosis humana (García, 1996; Birchard y
Sherding, 1996).
Los leucocitos albergan la E. canis como inclusiones citoplásmicas y en la primera
fase de la enfermedad como corpúsculos iniciales; luego en la forma llamada
mórula, a partir de la cual se forman las colonias, la constituyen la tercera forma
(Beer, 1987).
2.4 Epizootiología
Las garrapatas se infectan con la E.canis cuando se alimentan en perros que son
rickettsémicos durante las 2 primeras semanas de comenzada la enfermedad. Los
organismos se multiplican en los hemocitos, células del intestino delgado y de las
glándulas salivales de las garrapatas infectadas. El agente puede persistir en las
garrapatas durante más de 5 meses. Las garrapatas no transmiten la E. canis por
Leal A. Ma. Jesús
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vía transovárica. Esta transmisión toma lugar cuando la garrapata infectada ingiere
sangre y sus secreciones salivales que contienen al organismo contaminan el sitio
de alimentación. La E. canis puede ser transmitida por transfusión de sangre de un
perro infectado a otro susceptible. Este mecanismo se ha documentado también
en perros infectados crónicamente durante más de 5 años. Sin embargo, estos
animales enfermos no actúan como reservorio para la transmisión natural a otros
perros (Ettinger, 1992).
El vector y reservorio es la garrapata café común en el perro (Rhipicephalus
sanguineus), que transmite microorganismos por lo menos durante cinco meses
después de haberse alimentado. La ehrlichiosis, así como otras enfermedades
producidas por rickettsias, pueden ser transmitidas en forma iatrógena. El
microorganismo se transmite a través de la mordida de las garrapatas, las cuales
ingieren el microorganismo de un huésped infectado; el período de incubación de
la Ehrlichia es de 7 a 21 días (Birchard y Sherding, 2002).
Debido a que R. sanguineus acarrea otros microorganismos, los perros con
ehrlichiosis pueden estar infectados de forma concomitante con Babesia y
Haemobartonella (Tilley et al., 1997).
2.5 Patogénesis
La infección de los hospederos vertebrados se presenta cuando la garrapata
ingiere sangre como alimento y las secreciones salivales contaminan el sitio de
Leal A. Ma. Jesús
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alimentación. La Ehrlichiosis canina puede categorizarse por tres estadíos
sucesivos: la fase aguda, subclínica y crónica (Heredia, 1998, Richard, 1992).
Fase Aguda: Es variable en duración (2 a 4 semanas) y en intensidad (leve a
grave).
El
microorganismo
se
duplica
en
las
células
mononucleares,
principalmente en el Sistema Fagocítico mononuclear (SFM) de nódulos linfáticos,
bazo, hígado y médula ósea, dando como resultado hiperplasia de esta línea
celular. La trombocitopenia por destrucción periférica de plaquetas, con anemia o
sin ella, y leucopenia (Birchard y Sherding, 1996).
La trombocitopenia es un hallazgo relativamente constante en todo el curso de la
ehrlichiosis, pero la ausencia de trombocitopenia en perros con infección por
E.canis se está reconociendo con creciente frecuencia. Parece ser que varios
mecanismos, entre ellos menor sobrevida plaquetaria, secuestro y destrucción de
plaquetas en el bazo, daño plaquetario por complejos inmunes y consumo de
plaquetas por vasculitis, contribuirían a la trombocitopenia (Richard, 1992).
El número de linfocitos varía durante la fase aguda, sin embargo la utilización de
los leucocitos circulantes o el secuestro por mecanismos inmunológicos puede
disminuir su contabilidad. El decremento en la línea roja puede llegar a ser
aparentemente como resultado de la respuesta inflamatoria (Heredia, 1998).
Leal A. Ma. Jesús
10
La mayoría de los perros se recuperan de 1 a 2 semanas sin tratamiento, aunque
presentan infección persistente y algunos desarrollan el cuadro crónico 1 a 6
meses más tarde (Ettinger, 1992 ).
Fase Subclínica: Asociada a la persistencia del antígeno en las células infectadas
obra como estímulo para el sistema inmune. Los títulos de anticuerpos continúan
elevándose y el animal inmunocompetente por lo regular elimina al organismo
durante esta fase de la enfermedad. Los perros que no eliminan la infección
progresan hasta la fase crónica. La fase subclínica usualmente ocurre 6 a 9
semanas después de la infección inicial y dura entre 1 y 4 meses. Los perros
pueden eliminar el microorganismo durante esta fase, o la infección progresa,
como se indica en el párrafo anterior (Ettinger 1992; Birchard y Sherding, 1996).
En un apartado se habla sobre la fase subclínica en perros Beagle infectados con
E. canis para experimentación y observa la ausencia de signos clínicos durante
este período; sin embargo, los hallazgos hematológicos mostraron una ligera
trombocitopenia con incremento en el tamaño de las plaquetas, ninguno de los
perros fueron leucopénicos ni neutropénicos, mostrando títulos altos en contra de
E.canis. Los cambios hematológicos son similares a los que se presentan en la
fase aguda (Heredia, 1998, Waner et al.,1997).
Fase Crónica: La ehrlichiosis crónica ocurre en los perros que no logran montar
una respuesta inmune eficiente contra el organismo. La hipergammaglobulinemia
Leal A. Ma. Jesús
11
proviene de la estimulación antigénica persistente y es sugestiva de una respuesta
inmune inadecuada, puesto que para la inmunidad son esenciales los anticuerpos
y las células inmunes. Ocurre cuando el sistema inmunitario es ineficaz y el
microorganismo no puede ser eliminado. En las áreas endémicas, esta
enfermedad por lo general es crónica (Birchard y Sherding, 1996; Ettinger, 1992).
En la fase crónica la supresión de la médula ósea; junto con la mayor destrucción
de plaquetas, ocasionan trombocitopenia. Las comunicaciones clínicas sugieren
que los anticuerpos antiplaquetarios contribuyen a la menor cantidad de plaquetas
en la fase crónica de la enfermedad. La anemia, neutropenia, trombocitopenia,
hiperglobulinemia o proteinuria deben poner sobreaviso al clínico ante la
posibilidad de ehrlichiosis (Richard, 1992).
La principal característica de esta fase, es el deterioro en la producción de
elementos sanguíneos por la médula ósea (Heredia, 1998).
2.6 Signos clínicos
Aunque algunos científicos consideren a la ehrlichiosis más común en los meses
de verano, la enfermedad se presenta durante todo el año y en una gran variedad
de condiciones climáticas. Pueden afectarse perros de cualquier edad, aunque el
promedio de edad es de 2 a 5 años (Heredia, 1998).
Leal A. Ma. Jesús
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Las manifestaciones durante la fase aguda en general son leves y comprenden
pirexia inespecífica, anorexia, linfadenopatía, secreción oculonasal y disnea. De la
misma manera se puede encontrar esplenomegalia, hepatomegalia, disnea o
intolerancia al ejercicio debida a neumonitis, signos neurológicos causados por
meningoencefalitis, petequias y equimosis por trombocitopenia. Los títulos de
anticuerpos pueden ser negativos durante esta fase (Ettinger, 1992).
Los cambios hematológicos son variables durante la fase aguda de la enfermedad.
Una leucopenia ligera es común durante el período sintomático y muchas veces es
seguido por leucocitosis. La anemia se desarrolla durante esta fase (Ettinger,
1992).
Aproximadamente 40% de los perros afectados con la fase aguda de la
enfermedad se encuentran garrapatas, considerando que es el principal vector y
reservorio de la enfermedad, la cual transmite el microorganismo a través de la
picadura (Heredia, 1998; Birchard y Sherding, 2002).
Los signos clínicos de la fase aguda generalmente se resuelven sin tratamiento,
sin embargo, los perros pueden permanecer infectados y llegar a la fase subclínica
la cual dura de 6 a 9 semanas y termina con el desarrollo de la fase crónica. No
obstante, la fase subclínica puede persistir por periodo de meses o años (Heredia,
1998).
Leal A. Ma. Jesús
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En la fase subclínica los pacientes están asintomáticos, pueden identificarse
cambios hematológicos y bioquímicos leves. Los cambios que se pueden
encontrar son trombocitopenia, anemia arregenerativa y respuestas celulares
variables de leucopenia a linfocitosis y monocitosis (Ettinger,1992; Birchard y
Sherding, 1996).
La pérdida de peso crónica, un apetito reducido o la anorexia, la palidez de las
mucosas por la anemia, la debilidad y la depresión son las manifestaciones más
ordinarias de la Ehrlichiosis crónica canina (Ettinger, 1992; Birchard y Sherding,
2002; Pusterla et al., 1997).
Algunos perros se pueden afectar levemente durante la fase crónica, mientras que
otros manifiestan severas complicaciones como las ya mencionadas y episodios
hemorrágicos caracterizados por petequias en el abdomen y en las membranas
mucosas, presencia de infecciones secundarias, edema escrotal y en las
extremidades. En la fase crónica no son evidentes la linfadenopatía ni la
esplegnomegalia, ni el hallazgo de garrapatas durante el examen físico (Heredia,
1998; Harrus et al., 1997).
La tendencia hemorrágica reflejada a nivel de mucosas, retina, piel abdominal o en
cualquier otro órgano es secuela común de la infección crónica pronunciada
debida a la trombocitopenia persistente y trombocitólisis marcada. La epistaxis en
los animales que tienen signos generales de infección crónica es considerada
Leal A. Ma. Jesús
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como característica distintiva de la enfermedad, aunque la rinorragia sólo se
observa en una escasa proporción de los casos (Ettinger, 1992 ).
La ausencia de hemorragias no se debe descartar la presencia de la enfermedad,
debido a que únicamente el 50% de los perros infectados presentan este signo
(Heredia, 1998).
Las anormalidades oculares se caracterizan por la presencia de engrosamiento de
los vasos retinianos, a veces se presentan manchas gris oscuro en el tapetum que
pueden estar rodeadas de zonas de hiperactividad, así como uveitis anterior
(Heredia, 1998).
Los perros en la fase crónica de la infección pueden tener signos de neumonía
intersticial, falla renal, desórdenes reproductivos, artritis y meningoencefalitis
(Ettinger, 1992).
Los signos neurológicos de meningitis son el resultado de hemorragias e
inflamación de las meninges. Puede haber ataxia, disfunción vestibular central o
periférica, hiperestesia generalizada o localizada además de anisocoria, disfunción
cerebelar y tremores. También existen informes de la presencia de convulsiones
como manifestación primaria en los perros afectados. Puede haber poliartritis o
monoartritis, la cual puede ser evidente en los estudios radiológicos. También
Leal A. Ma. Jesús
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puede haber lesiones cutáneas asociadas a la enfermedad de Ehrlichiosis en
perros (Frank, 1997; Heredia, 1998).
En un estudio realizado se reportan 3 perros de Carolina del Norte y 3 de Virginia
los cuales mostraban anemia crónica, moderada y severa y poliartritis como
signos mas significativos de ehrlichiosis. Uno de los perros al realizarle el examen
físico no presentó ningún tipo de anormalidad. Los signos clínicos no específicos
se incluyen fiebre, letargia, anorexia, vómito y diarrea. En el examen de laboratorio
las anormalidades que muestran son anemia normocítica normocrómica no
regenerativa, trombocitopenia, linfopenia y eosinopenia (Goldman et al.,1998).
2.7 Diagnóstico
El diagnóstico presuntivo de la ehrlichiosis se realiza con base a la historia clínica
y en los hallazgos en el examen físico Así como otras pruebas de diagnóstico de
laboratorio como la hematología, bioquímica y la serología son útiles para
establecer el diagnóstico definitivo antemortem (Heredia, 1998).
Mediante la aspiración con aguja delgada se puede identificar el microorganismo
en el bazo, nódulos linfáticos y pulmones, aunque es extremadamente poco
probable. A menudo hay plasmocitosis en estas muestras citológicas (Birchard y
Sherding, 1996).
Leal A. Ma. Jesús
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La biopsia de médula ósea en perros con ehrlichia puede mostrar una marcada
hipercelularidad de megacariocitos y series mieloides en la fase aguda y
subclínica; mientras que en la fase crónica es frecuente encontrar una hipoplasia
eritroide de plasmocitosis (Heredia, 1998).
La reacción en cadena de la polimerasa y la inmunotransferencia Western pueden
utilizarse para el diagnóstico en perros con serología negativa para distinguir E.
canis de E. ewingrii y de otras especies de ehrlichia; sin embargo estas técnicas
todavía no están disponibles para su uso sistemático en la clínica (Birchard y
Sherding, 2002).
La prueba de fluorescencia indirecta para detectar anticuerpos (IFA) contra
Ehrlichia canis es áltamente sensible. Aunque tal vez haya ligera reactividad
cruzada con otras rickettsias, los títulos mayores de 1:10 se consideran
diagnósticos, aunque quizá no se descubran sino hasta 2 o 3 semanas después
de la inoculación. Igual que en otras enfermedades los títulos elevados no
confieren protección contra la reinfección. Los títulos pueden persistir durante 9 o
12 meses después del tratamiento o de la recuperación (Birchard y Sherding,
1996).
La confirmación de laboratorio en los casos sospechosos se establece mejor
mediante los estudios serológicos para los anticuerpos anti-E.canis. Los
Leal A. Ma. Jesús
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anticuerpos se detectan a la segunda y tercera
semana de comenzada la
infección (Ettinger, 1992 ).
Citológicamente se ven las inclusiones intranucleares de apariencia morular se
observa una mayor frecuencia en el citoplasma de los leucocitos durante la fase
aguda, pero son transitorias y en bajo número. Las inclusiones de apariencia
morular consisten en paquetes densos de organismos que se tiñen de rojo púrpura
con la tinción de Wright o de color azul con la tinción de Giemsa. Estos se
observan mas frecuentemente en la sangre procedente de la vasculatura
periférica, como la que se obtiene de los bordes de las orejas (Heredia, 1998).
Las inclusiones intracitoplasmáticas se pueden observar a partir de la evaluación
citológica de la médula ósea, de los pulmones, nódulos linfoides y aspirado
esplénico (Heredia, 1998).
2.8 Diagnóstico Diferencial
Se tendrán en cuenta las Babesiosis y Leishmaniasis, también se excluirán las
parasitaciones por vermes y las enfermedades carenciales. La forma en que se
presentan las hemorragias cutáneas en los perros se parece a la forma
exantemática del moquillo del perro (Heredia, 1998).
Leal A. Ma. Jesús
18
Los signos clínicos, los hallazgos físicos y las anormalidades de laboratorio en los
perros con erliquiosis crónica pueden semejarse a los del mieloma múltiple o la
leucemia linfocítica crónica (Birchard y Sherding, 2002).
La ehrlichiosis puede estar asociada con otras enfermedades o simplemente
confundirse con otras similares. En un artículo se reporta un caso de
Hepatozoonosis (Hepatozoon canis) de un perro importado de Italia a Alemania
con una infección adicional de E.canis y Babesia canis (Deinert et al., 1997).
2.9 Tratamiento
Se recomienda tetraciclina a una dosis de 22 mg/kg, PO, cada 8 horas por 14 a
21 días, y debe administrarse con el estómago vacío. Como contraindicación no
utilizar tetraciclinas (o sus derivados) en perros menores de 6 meses porque
puede producirse una coloración amarilla permanente en los dientes; y no
emplearlas en perros con insuficiencia renal (Birchard y Sherding, 1996; Tilley et
al., 1997).
Doxiciclinas: es el fármaco de elección para tratar la Erliquiosis a una dosis de 2.5
a 5 mg/kg VO cada 12 a 24 horas durante 10 a 14 días y si puede ser utilizada en
perros con insuficiencia renal ya que se excreta por vía gastrointestinal La
Doxiciclina es menos nefrótica que la tetraciclina y es la de elección en las
infecciones crónicas (Birchard y Sherding, 2002; Tilley et al., 1997; Ettinger 1992).
Leal A. Ma. Jesús
19
En un estudio se evaluó el efecto terapéutico de la Doxiciclina en un caso
experimental de Ehrlichiosis canina monocítica subclínica haciéndose la
evaluación en 6 semanas en curso la enfermedad. Se tuvo una eficacia usándose
una dosis de 10 mg/kg de peso corporal cada 24 horas por 42 días (Harrus et al.,
1998).
Cloranfenicol: También es eficaz, pero no se recomienda en perros con citopenia
Puede ser usado en dosis de 15 a 20 mg/kg vía oral, intravenosa o subcutánea
cada 8 horas por 14 días (Birchard y Sherding, 1996; Heredia, 1998).
En los cachorros menores de 6 meses de vida, se recomienda cloranfenicol en
dosis de 20 mg/kg, cada 8 horas. Vía oral, durante 14 días para evitar la
coloración amarilla de los dientes en erupción causada por las tetraciclinas, sin
embargo el propietario debe ser advertido sobre el riesgo del cloranfenicol debido
a su interferencia directa con la síntesis de la hemoglobina y en médula ósea, de
igual manera, el empleo debería ser evitado en perros con trombocitopenia o
anemia (Tilley et al., 1997).
Dipropionato de imidocarb: (Imizol) y la anticolinesterasa parasimpaticomimética,
administrados a una dosis de 5 mg/kg por vía intramuscular o subcutánea, que se
repite a los 14 días, han sido eficaces en perros con ehrlichiosis resistente y en
perros con infecciones mixtas por E .canis y Babesia canis. El Dipropionato de
imidocarb elimina la infección en casi el 80% de los perros con una sola inyección
de 5 mg/kg (Birchard y Sherding, 2002; Ettinger, 1992).
Leal A. Ma. Jesús
20
Glucocorticoides (prednisolona/ prednisona) 1-2 mg/kg, cada 12 horas, vía oral,
durante 5 días pueden estar indicados en los casos agudos en los cuales la
trombocitopenia inmunomediada es el principal diagnóstico diferencial, la
administración de corticoesteroides puede estar indicada hasta que se conozcan
los resultados de los estudios serológicos. El empleo prolongado de los
glucocorticoides en niveles inmunosupresores puede interferir con la depuración y
eliminación de la E.canis después de la terapia con tetraciclina (Tilley et al.,1997).
Fluidoterapia de sostén y la transfusión de sangre son requeridas en los perros
con infecciones crónicas. Los corticoesteroides
(prednisolona 2-5 mg/kg/día
durante 3 a 5 días) o acetato de metilprednisolona (2 mg/kg una sola vez vía
intramuscular) son utilizados para combatir los efectos de la trombocitopenia y
desórdenes de hemorragias. Soluciones electrolíticas balanceadas se indica en
los animales deshidratados. La transfusión de sangre se utiliza en los animales
anémicos. La transfusión de sangre o de plasma rico en plaquetas está indicada
en animales con hemorragias provenientes de la trombocitopenia. El tratamiento
de sostén (transfusión sanguínea, electrolitos, vitaminas) se deberán administrar
de acuerdo a la necesidad (Tilley et al., 1997).
Esteroides androgénicos pueden ser empleados para estimular la producción de la
médula ósea en los perros con afección crónica e hipoplasia medular. La
oximetolona a 2 mg/ kg cada 24 horas, vía oral hasta obtener resultados, y el
Leal A. Ma. Jesús
21
decanoato de nandrolona a 1.5 mg/kg por semana vía intramuscular (Tilley et
al.,1997).
2.10 Prevención
El control de la garrapata constituye el punto principal para la prevención de la
Ehrlichiosis. Pueden usarse dosis bajas de Tetraciclina o Doxiciclina en áreas
endémicas durante la temporada de garrapatas (Tetraciclinas a 3 mg/kg vía oral
cada 24 horas, ó Doxiciclina de 1-2 mg/kg vía oral cada 24 horas) (Birchard y
Sherding, 1996).
Debe existir un buen control tanto en el perro como en el ambiente que lo rodea.
La aplicación de acaricidas en ambientes infestados puede hacerse mediante
fumigaciones con carbaril, permetrina, resmetrina, piretrinas y clorpirifós (Cordero,
1999).
2.11 Pronóstico
El pronóstico es de bueno a malo, dependiendo de la etapa de la enfermedad y de
la gravedad de los signos clínicos. Es excelente con el tratamiento apropiado, a
menos que la médula ósea se encuentre muy hipoplásica. La respuesta clínica en
las formas crónicas puede tardar 3 a 4 semanas. La forma crónica de la
enfermedad parece ser más grave en perros Pastor alemán y Doberman pinscher
Leal A. Ma. Jesús
22
y Pastores alsacianos (Fenner, 1997; Tilley et al., 1997; Birchard y Sherding,
2002).
2.12 Importancia en la salud pública
Se ha hablado de la posibilidad de transmisión al ser humano, sin embargo,
aunque pueden infectarse con la E .canis, su transmisión no está directamente
relacionada con los perros. Además el Riphicephalus sanguineus probablemente
no es el vector para la ehrlichiosis humana. Los signos clínicos en el hombre
muchas veces pasan desapercibidos aunque se ha reportado fiebre, dolor de
cabeza, mialgia, dolor ocular y síntomas gastrointestinales (Heredia, 1998).
La Universidad de Florida reporta que existen dos clases principales de erliquiosis
humana en los Estados Unidos: Ehrlichiosis Monocítica Humana (EMH), causada
por E. chaffensis; y Ehrlichiosis Granulocítica Humana (EGH), causada por E.
phagocytophila. Los síntomas para las dos incluyen fiebre, dolores de cabeza,
malestar y dolores musculares; salpullido ocurre con mas frecuencia en EMH que
con EGH. El tratamiento para ambas es con antibióticos de la familia tetraciclina,
usualmente Doxiciclina; su mortalidad es infrecuente (2-3% de los casos), pero
puede ocurrir como resultado de complicaciones con la infección (Bakken y
Dumler, 2001).
Leal A. Ma. Jesús
23
Generalmente hay de uno a cinco casos de Erliquiosis humana en Florida
anualmente. Probablemente ocurren mas casos, pero no son lo suficientemente
severos para que no se busque tratamiento médico, o no son confirmados con
pruebas de laboratorio. No todos los casos son reportados, pero la Erliquiosis
canina y equina ocurre en Florida. En agosto del 2001 un grupo no típico de cuatro
casos de Erliquiosis ocurrió en el condado de Jefferson, debido a lo cual se
declaró una alerta médica. Las condiciones que fomentaron este grupo de casos
son desconocidas, pero es probable que tenga relación con las poblaciones de
garrapatas y el contacto humano con las mismas (Bakken y Dumler, 2001).
Leal A. Ma. Jesús
24
III. MÉTODOS Y MATERIAL
3.1 Localización del sitio experimental
El presente estudio se realizó en el Municipio de Cajeme Sonora. El cual está
ubicado geográficamente a una latitud norte de 27°34’00”, longitud oeste de
109°53’30”, con una altitud de 50 metros sobre el nivel del mar. Cuenta con una
temperatura de 16.8°C a 30.9°C en verano, con un promedio de 25.5°C anual, y
humedad relativa de 47.2%, se clasifica como cálido seco (Félix, 1991),
3.2 Metodología
3.2.2 Determinación del tamaño de la muestra
Se realizó un muestreo de 60 animales sospechosos a ehrlichiosis, tomándose en
cuenta los signos mas característicos de la enfermedad como lo son: la presencia
de garrapatas, epistasis, anemia, palidez y otros más que sirvieron como
referencia al realizar el muestreo (Wayne y Meek,1987).
Leal A. Ma. Jesús
25
3.2.2 Técnica de inmunofluorescencia indirecta
Se tomó una muestra sanguínea por punción de la vena cefálica del animal, con la
técnica conocida; la cantidad de sangre extraída fué de 2 mililitros, depositándose
en tubos de ensayo sin anticoagulante e identificándolas por el número de caso,
acompañada cada una con una reseña clínica de todos los perros susceptibles de
la enfermedad; ya obtenido el suero de estas muestras, se procedió a congelarse
a –20°C hasta su uso, el proceso de prueba fué recomendado por el reactivo de
los Laboratorios VMRD Inc:
1. Proporcionar al portaobjetos una temperatura ambiente de 37°C, antes de
remover del empaque la lámina.
2. Colocar 10 ul de suero diluido en los pozos designados.
3. Incubar el portaobjeto en cámara húmeda a 37°C por 30 minutos.
4. Enjuagar la laminilla brevemente en solución FA buffer (líquido de montaje
para fluorescencia con un ph de 9.0).
5. Drenar la laminilla y eliminar el exceso de líquido. Colocar 10 ul de anti-IgG
en los pozos.
6. Incubar como en el paso 3.
7. Enjuagar como en el paso 5.
8. Drenar la laminilla y secar con el filo de una toalla de papel. No dejar
manchas en la superficie a secar. No enjuagar con agua.
9. Montar con una solución glicerol / FA, y examinar con microscopio de
fluorescencia a 100x-250x. La confirmación puede ser hecha a 400x.
(Recommended Staining Procedure for IFA; http:// www.vmrd.com).
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26
3.3 Variables a analizar
Animales positivos y negativos a anticuerpos contra Ehrlichia canis.
3.4 Análisis Estadístico de la Información
Los resultados son presentados en forma de porcentajes.
Leal A. Ma. Jesús
27
IV RESULTADOS Y DISCUSIÓN
De los 60 sueros estudiados 49 resultaron positivos a la prueba de anticuerpos
fluorescentes y 11 fueron negativos; teniendo entonces un porcentaje de 81.66%
de positivos y un 18.34% (gráfica 1) de animales negativos a la misma.
En un estudio epidemiológico realizado en Israel, cuyo objetivo era el determinar la
prevalencia de anticuerpos reactivos a Ehrlichia canis en perros callejeros y en
perros de casa, se utilizaron 410 perros y el estudio se hizo por medio de la
técnica de Inmunofluorescencia indirecta obteniéndose una prevalencia del 30%.
De los perros de casa se tuvo un resultado positivo de 23.9% y 37.5% para perros
callejeros. Este estudio fue realizado con perros sanos y enfermos y el resultado
no fue significativo, únicamente se observó que los perros menores de un año de
edad tuvieron menor prevalencia (Baneth et al., 1996). En la investigación que se
realizó en Cajeme se tuvo alta prevelencia en perros caseros que presentaban
signos compatibles con la enfermedad, sin tomar en cuenta la raza, el sexo ni la
edad, más sin embargo se obtuvieron más animales positivos en adultos que en
jóvenes.
En un estudio realizado en Suiza, se tomó una muestra de 996 perros y se mostró
mediante la técnica de anticuerpos fluorescentes
el siguiente resultado; se
Leal A. Ma. Jesús
28
obtuvieron 22 perros positivos (2.2%), 20 de éstos procedían de perros
sospechosos (Pusterla, 1998). Como se observa en los resultados de esta
investigación no fue muy significativo el resultado obtenido del total de la muestra
analizada en comparación con la realizada en el municipio de Cajeme por la
misma técnica.
Otra investigación realizada contó con 211 perros para el diagnóstico de
anticuerpos por la misma técnica antes mencionada. Los resultados mostraron
una seropositividad alta y se llegó a la conclusión que la técnica de IFA es la
apropiada para hacer estudios serológicos y se confirmó que tiene buena
correlación con los signos clínicos del paciente (Egenvall et al.,1997). La técnica
de Inmunofluorescencia es un método áltamente confiable al realizar este tipo de
diagnóstico, ya que en este trabajo se analizaron perros que eran considerados
sospechosos por los signos que presentaban, aún así no se podía contar con un
diagnóstico definitivo, y al realizar la técnica se pudo confirmar que la mayoría de
estos animales eran realmente positivos.
Las condiciones medioambientales con las que se cuenta en el municipio de
Cajeme favorecen el micro hábitat del vector transmisor y de la misma forma la
incidencia de la enfermedad, ya que los resultados obtenidos así lo demuestran.
Los principales signos obtenidos de los animales positivos son los siguientes:
epistasis (44/49), garrapatas (43/49), pérdida de peso (28/49), depresión (27/49),
Leal A. Ma. Jesús
29
debilidad (27/49), secreción oculonasal (19/49), anemia o palidez (18/49),
pioderma (15/49), petequias (6/49), disnea (5/49) estornudos (4/49), vómito y/o
diarrea (4/49), claudicación (3/49), uveitis (2/49) (gráfica 3). Como lo muestra la
gráfica, los signos mas significativos que presentaron la mayoría de los pacientes
fue la epistasis que es característico de la enfermedad debido a la trombocitopenia
persistente; de igual manera la presencia de garrapatas fue significativo para
realizar el muestreo.
En la gráfica 2 se muestran los principales signos de el total de la población, más
no todos los animales reaccionaron positivos a la prueba. La epistasis en los
animales que presentan signos generales de la enfermedad es considerada como
característica distintiva. Aunque esté ausente la hemorragia no se debe descartar
la presencia de la enfermedad, ya que únicamente el 50% de los perros infectados
presentan este signo (Heredia, 1998). Muchos de los signos encontrados en los
pacientes están correlacionados con la enfermedad, pero no es indicativo de que
exista, hasta no haber realizado algún diagnóstico que así lo señale.
Leal A. Ma. Jesús
30
18%
82%
Negativos (-)
Positivos (+)
Gráfica No.1 Distribución porcentual de los resultados de la técnica de
Inmunofluorescencia indirecta por Ehrlichia spp.
Leal A. Ma. Jesús
31
60
Epistasis
Garrapatas
Pérdida de peso
Debilidad
Depresión
Secreción oculonasal
Anemia o palidez
Pioderma
Petequias
Disnea
Fatiga
Estornudos
Vómito y/o diarrea
Claudicación
Uveitis
50
40
30
20
10
0
1
Gráfica No. 2 Principales signos encontrados en los perros seleccionados como
sospechosos a Ehrlichiosis.
Leal A. Ma. Jesús
32
Epistasis
Garrapatas
Pérdida de peso
Debilidad
Depresión
Secreción oculonasal
Anemia o palidez
Pioderma
Petequias
Disnea
Fatiga
Estornudos
Vómito y/o diarrea
Claudicación
Uveitis
45
40
35
30
25
20
15
10
5
0
1
Gráfica No. 3 Principales signos asociados a Ehrlichiosis presentes en perros
confirmados como positivos.
Leal A. Ma. Jesús
33
V.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Se obtuvo 81.66% de animales reactores positivos y 18.34% de animales
negativos a la técnica de Inmunofluorescencia indirecta; se esperaba encontrar al
menos un 10% del total de la población muestreada con anticuerpos contra
Ehrlichia canis en perros sospechosos y por medio de este estudio se pudo
establecer la presencia de la enfermedad; de esta manera se cumple con el
objetivo del trabajo y superándose al mismo tiempo con más del 70% de animales
positivos.
Es importante tener en cuenta que esta enfermedad es considerada como una
zoonosis y que el Médico Veterinario informe al propietario sobre este tipo de
problema, así como que de pequeñas asesorías, recomendaciones y que
concientice al dueño sobre la importancia de mantener a sus mascotas libres de
ectoparásitos.
A los clínicos se recomienda el hacer uso de algunos métodos existentes como la
biometría hemática, en la que se observará trombocitopenia persistente, anemia
arregenerativa y otras respuestas celulares variables; además de que es un
método seguro para establecer un diagnóstico y es recomendado para cualquier
Leal A. Ma. Jesús
34
clínico hacerlo antes de realizar la prueba de anticuerpos, ya que su costo es
mucho menor y se puede tener un buen resultado apoyado con la historia clínica
del paciente.
El hacer uso de la técnica de Inmunofluorescencia indirecta es una forma más
para establecer un diagnóstico ya que se obtienen buenos resultados por su alta
sensibilidad, ya que títulos mayores 1:10 se consideran diagnósticos.
Es importante realizar estudios parasitológicos para identificar y clasificar todo tipo
de garrapatas presentes en la región cajemense. También es indispensable
establecer algún programa de control
y realizar baños y fumigaciones con
cualquier sustancia tóxica para las garrapatas.
Un muestreo dirigido siempre es bueno hacerse para determinar los casos nuevos
que se estén presentando en los diferentes criaderos; así como también combatir
la garrapata, que en esta enfermedad actúa como vector principal. En las perreras
es importante que los tratamientos vayan acompañados
de un adecuado
mantenimiento de las instalaciones, con el propósito de evitar que las garrapatas
tengan acceso a lugares escondidos donde realizar sus mudas y estén al abrigo
de los acaricidas.
;
Leal A. Ma. Jesús
35
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