Factor Verde, pioneros de la biomasa
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Factor Verde, pioneros de la biomasa
Factor Verde, pioneros de la biomasa Roberto de Antonio, ingeniero agrónomo emprendedor, se declara amante de su profesión aunque a veces sufra con su trabajo. "Me gusta lo que hago, y me gustaría hacerlo mejor todavía" comenta el Socio Fundador de Factor Verde, una empresa que creó en el año 2000 con el objetivo de aprovechar las oportunidades de negocio que ofrece la biomasa como alternativa a los combustibles fósiles. A Roberto le gustaría que la gente confiara más en la biomasa, pero cree que es una cuestión de tiempo y conocimiento. EnergyNews ¿Cómo definiría el estado actual de la gestión de la biomasa en España? Roberto de Antonio: Estoy totalmente de acuerdo con el símil que compara nuestros bosques con pozos de petróleo, ya que en ese caso estamos derramando el petróleo. La gestión de los bosques, que es clave en la biomasa, es desastrosa. Podríamos compararnos con cualquier país del tercer mundo en cuanto a la puesta en valor de nuestros recursos forestales. Los montes no se cuidan porque no sabemos ponerlos en valor. De esta forma se abandonan, arden y desaparecen miles de hectáreas de bosques que de otra forma y a pesar de los pirómanos o las imprudencias, serían pérdidas insignificantes. La gestión de los montes están inventada desde hace muchas generaciones, su limpieza, poda, cuidado… EN ¿Quién debería llevar la gestión de los montes, los propios agricultores, las cooperativas, los ayuntamientos…? RdA: La gestión eficiente de los montes debe hacerse mediante iniciativas privadas, bien supervisadas por las corporaciones locales. Pero para que esas iniciativas tengan éxito, deben obtener una rentabilidad razonable, y para eso hay que poner en valor la biomasa, es decir, crear una demanda suficiente que haga que el entorno rural pueda organizarse y crear un tejido social que permita a las empresas su gestión. EN ¿Qué falta para que la biomasa entre en las casas? RdA: Principalmente falta demanda, tanto para la biomasa eléctrica como para la biomasa térmica. Ambas deben desarrollarse al mismo tiempo para que las infraestructuras que se crean puedan abastecerlas. Sin embargo, el desarrollo de la biomasa para uso eléctrico depende en gran medida de la voluntad política, ya que actualmente el carbón es más "rentable" aparentemente. Hoy en día la moratoria a las renovables ha afectado a la biomasa eléctrica dejando paralizados la mayoría de los proyectos cuando aún esta fuente de energía no había empezado ni siquiera a desarrollarse. Si tuviéramos políticos con más conocimiento y alcance, se darían cuenta de los recursos que están desaprovechando, y de la mano de obra que se recuperaría en el campo. En cuanto a la biomasa para uso térmico, creo que tiene todo el camino por delante porque no depende de subvenciones. Hoy en día es claramente más barata y eficiente que el gasoil, e incluso comparándola con el gas natural para ciertas dimensiones. La creación de la demanda es una labor de todos, ya que la inversión necesaria para crear esas estructuras logísticas que movilicen la biomasa para uso doméstico, es muy alta. Factor Verde, en la medida de sus posibilidades, quiere llegar a convertirse en la "petrolera" que explote esos bosques llenos de biomasa, pero para llegar a eso, además de inversión, se requiere de una gran demanda. No cabe duda de que cuando el mercado madure, las grandes comercializadoras de combustible estarán ahí porque ya han estudiado el terreno. Y por supuesto la educación, que es una de las claves para el consumo futuro. Si explicas a los chavales qué es la biomasa y su uso alternativo a los combustibles fósiles, tendrás un potencial cliente ya que podrá conocer cuáles son sus opciones. EN ¿Qué opinión le merece la certificación de las instalaciones y del combustible? RdA: La certificación de las instalaciones es algo muy necesario, porque una mala instalación ocasiona un impacto terrible en el crédito de una industria que está floreciendo. Del mismo modo, la certificación del pellet es necesaria para todos porque un mal combustible en una instalación de biomasa afecta a su imagen y buen nombre, y crea descrédito a su alrededor. No obstante, la normalización del pellet debe poder hacerse más fácilmente y mediante varios organismos de certificación. Los fabricantes se quejan del alto coste que supone la certificación de sus productos y de los requerimientos en los que se solicitan nombres de clientes e información muy sensible desde un punto de vista comercial. En cuanto al pellet industrial, creo que debería darse un impulso mediante la co-combustión. Actualmente estamos exportando este producto mientras que en España seguimos importando carbón de Sudáfrica. La política debería apoyar la biomasa industrial con subvenciones para ir sustituyendo poco a poco al carbón en las centrales térmicas. Técnicamente hablando, ya tuvimos una experiencia en la central de Guardo (Palencia), que funcionaba perfectamente, pero la falta de apoyos hizo que finalmente se desechara por ser más caro, e insisto, más caro entre comillas, porque computando las ventajas laborales y de gestión de los montes obtienes creación de empleo y evitas incendios, que suponen un alto coste para el Estado. otros socios, un proyecto de district heating en la localidad madrileña de Móstoles para cerca de 6.000 viviendas. EN. Factor Verde tiene varias líneas de negocio dentro del mismo sector ¿Por qué? RdA: En sus inicios, Factor Verde se dedicó a la logística y el almacenamiento de dos centrales de biomasa eléctrica, que nos ha permitido tener una base industrial, una infraestructura, y una experiencia que hemos extendido posteriormente a la distribución de pellet para el sector residencial. Factor Verde creó en 2007 una red de distribución mediante la empresa Factorpélet, que distribuye en saco o a granel productos de distintas marcas. La experiencia acumulada en estos años nos ha permitido la próxima puesta en funcionamiento de una fábrica de pellet en la Comunidad de Madrid con capacidad para 150.000 Tn. anuales. Los más de 1.500 clientes que manejamos en nuestra base de datos, podrán comprar un pellet de alta calidad fabricado a partir de rollo de corteza de pino. Esta planta se hará en sociedad con TecBio, S.L. e IGM, S.L. Pero al mismo tiempo nos hemos convertido en una ESE habilitada por el Ministerio de Industria dentro del programa BIOMCASA, con la que ya tenemos tres salas de calderas funcionando en dos comunidades de vecinos y una granja de cerdos. Próximamente pondremos en funcionamiento, junto con EN. ¿Cuál es la problemática de las ESEs bajo su punto de vista? RdA: Principalmente la financiación de los bancos y la confianza de los clientes. En primer lugar están los bancos, que pasan por una situación difícil, pero que poco a poco van siendo más receptivos porque se trata de proyectos en los que el cliente necesita de climatización y además es solvente. Hablamos de comunidades de vecinos, ayuntamientos, residencias de la tercera edad… Son clientes con un consumo anual de más de 100.000 euros/año de gasoil. En cuanto a la confianza de los clientes, muchos nos preguntan que dónde está el truco. Nosotros hacemos la inversión, la instalación, la reposición del combustible, el mantenimiento y además le generamos un ahorro al cliente que es mayor cuanto mayor es el consumo. EN. Y ahora ¿También estufas y calderas? RdA: Hemos creado la marca GreenBox desde Factorpélet para la distribución de estufas de pellets y calderas. Creemos que la distribución de estos productos debe ser de calidad ya que ofrecemos la instalación, el mantenimiento, y la garantía de funcionamiento durante dos años. Se lo queremos poner muy fácil al cliente. Por el momento estamos haciendo una gran campaña de promoción de estos sistemas de calefacción mediante demostraciones en Centros Comerciales. Afortunadamente el público es cada vez más receptivo a la biomasa, sobre todo si tenemos en cuenta que la inversión se amortiza muy rápidamente. Para las viviendas de una planta y unos 80m2 recomendamos la instalación de una estufa de pellet, que tan sólo requiere una salida de humos y se puede encontrar a partir de 1.500 euros (6kW). En cuanto a las viviendas unifamiliares de unos 150m2, la instalación de una caldera es lo más recomendable. La sustitución de su vieja caldera de gasoil o de gas se puede hacer desde 4.300 euros (25kW). En estos momentos estamos creando una plataforma de comercio electrónico en la que mostraremos todos nuestros productos.