Encargos y organización familiar - Unidad Educativa Monte Tabor
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Encargos y organización familiar - Unidad Educativa Monte Tabor
Encargos y organización familiar Una oportunidad para crecer y compartir. Por Fabiana Alvarez Consejería Estudiantil Plantear a nuestros hijos tareas en casa o encargos, es un eficaz medio de educar para la convivencia. Es importante mostrar a nuestros hijos que todo lo que hacemos o dejamos de hacer afecta a los demás y especialmente al entorno familiar. Es pertinente involucrar a los chicos a participar en actividades desde temprana edad. Éstas deben apuntar a fortalecer su autonomía, ya que ellos comienzan a valerse por sí mismos. Estas actividades pueden ser: cepillarse los dientes, vestirse solos, cuidar su ropa, colocar sus juguetes en el estante después de jugar, dejar su uniforme listo el día anterior, etc. Los diferentes trabajos y responsabilidades que cumplen los padres en la actualidad, influyen en el tiempo disponible para la supervisión e involucramiento en las tareas de los hijos. Por lo que resulta indispensable, establecer un orden y prioridad en todas nuestras obligaciones y aprender a vivir con ellas. En cada hogar, según su estilo y prioridades, las tareas se pueden organizar de diferentes maneras. Lo que se debe tener presente, es que es indispensable el trabajo de equipo. La cabeza de este equipo llamado familia (papá y mamá) tiene la obligación de organizarlo, ya que son los que cuentan con las habilidades y capacidades necesarias para determinar sus metas familiares, lo que desean lograr y hacia dónde quieren ir. El adecuado funcionamiento del equipo, dependerá de cuánto conozcan a cada uno de sus miembros, ya que las actividades asignadas deben apuntar a desarrollar sus fortalezas o talentos y potencializar sus dificultades y flaquezas. La realización de estas actividades o encargos, deben significar para los niños una situación de éxito y una oportunidad de sentir que aún siendo pequeños son un elemento importante para su familia. De la misma forma, debemos recordar que nuestros aprendizajes son más significativos cuando otra persona lo modela, más aún si hay de por medio un vínculo afectivo. Antes de elegir las actividades es importante considerar varios aspectos: - Es el momento de proponer, opinar, discutir y elegir tareas en las que cada miembro puede comprometerse a hacer. Deben elegirse según sus posibilidades: que no sean costosas, cosas concretas. Proponer y realizar los encargos en un ambiente de alegría. No exigir demasiado en la perfección de los encargos, pero sí en la constancia. Considerar las virtudes, flaquezas, aficiones, sensibilidades de cada miembro de la familia. Conocer sus posibles aportaciones e iniciativas, inquietudes y necesidades. Vamos a plantear encargos para realizarlos con los más pequeños de la casa (niños de 6 a 8 años): - Ayudar a poner o recoger la mesa. Poner la ropa sucia en el lugar correspondiente. Ayudar con la limpieza de la mascota familiar. Regar el jardín. Ayudar a realizar la lista y las compras del supermercado. Tareas para hijos más grandes (9-11 años) - Pequeñas tareas en la cocina como preparar y aliñar las ensaladas, batir huevos, rayar zanahorias, etc. - Ayudar a confeccionar el menú de comidas y cenas, semanal. - Administrar el antivirus y las actualizaciones de la computadora familiar. - Ordenar el armario de juguetes. - Regar las plantas y/o el jardín. - Explicar matemáticas o inglés a un hermano pequeño. - Ordenar las estanterías de los libros. - Poner la lavadora. - Preparar lista de la compra. Las tareas cotidianas bien hechas y efectuadas con alegría, ayudan a que nos valoremos y también a reconocer los servicios que recibimos. Recomiendo aprovechar esta etapa con sus hijos y es importante que les transmitan que en una familia TODOS nos necesitamos y somos parte fundamental de un gran equipo. ¡Buena suerte y sean creativos en la elección de tareas para sus hijos!