TEXTO COMPLETO - Universidad Central de Venezuela

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TEXTO COMPLETO - Universidad Central de Venezuela
UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA
FACULTAD DE INGENIERÍA
ESCUELA DE GEOLOGÍA, MINAS Y GEOFÍSICA
DEPARTAMENTO DE GEOLOGÍA
“ESTUDIO HIDROGEOLÓGICO DEL ACUÍFERO DEL VALLE DE
CARACAS EN EL TRAMO LAS ADJUNTAS -EL PARAÍSO DEL RÍO GUAIRE”.
Trabajo especial de Grado
Presentado ante la Ilustre
Universidad Central de Venezuela por los Brs.
Núñez Sánchez Karla
Velásquez Villa Andrés
Para optar al Titulo de Ingeniero Geólogo
Caracas, Mayo 2006
UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA
FACULTAD DE INGENIERÍA
ESCUELA DE GEOLOGÍA, MINAS Y GEOFÍSICA
DEPARTAMENTO DE GEOLOGÍA
“ESTUDIO HIDROGEOLÓGICO DEL ACUÍFERO DEL VALLE DE
CARACAS EN EL TRAMO LAS ADJUNTAS -EL PARAÍSO DEL RÍO GUAIRE”.
Tutor Académico: Díaz Quintero A.
Tutor Industrial: Decarli Fernando
Trabajo especial de Grado
Presentado ante la Ilustre
Universidad Central de Venezuela por los Brs.
Núñez Sánchez Karla
Velásquez Villa Andrés
Para optar al Titulo de Ingeniero Geólogo
Caracas, Mayo 2006
Caracas, Mayo 2006
CONSTANCIA DE APROBACIÓN
Los abajo firmantes, miembros del Jurado designado por el Consejo de Escuela de
Ingeniería Geológica, para evaluar el Trabajo Especial de Grado presentado por los
bachilleres Núñez Sánchez Karla y Velásquez Villa Andrés, titulado:
“ESTUDIO HIDROGEOLÓGICO DEL ACUÍFERO DEL VALLE DE
CARACAS EN EL TRAMO LAS ADJUNTAS -EL PARAÍSO DEL RÍO GUAIRE”.
Consideran que el mismo cumple con los requisitos exigidos por el plan de estudios
conducente al Titulo de Ingeniero Geólogo, y sin que ello signifique que se hacen solidarios
con las ideas expuestas por los autores, lo declaran APROBADO.
Prof. Jurado
Tutor Académico
Díaz Quintero A
Prof. Jurado
Tutor Industrial
Decarli Fernando
RESUMEN
Núñez S. Karla G.; Velásquez V. Andrés F.
ESTUDIO HIDROGEOLÓGICO DEL ACUÍFERO DEL VALLE DE
CARACAS EN EL TRAMO LAS ADJUNTAS -EL PARAÍSO DEL RÍO
GUAIRE
Tutor Académico: Díaz Quintero A.
Tutor Industrial: Decarli Fernando
Caracas, U.C.V. Facultad de Ingeniería. Escuela de Geología, Minas y Geofísica.
Departamento de Geología. 2006, n° pag.186
Palabras Claves: Hidrogeología, Oeste del Valle de Caracas, Acuífero del Valle de
Caracas.
RESUMEN
El objetivo general es realizar una evaluación hidrogeológica del acuífero del Valle
de Caracas en el tramo Las Adjuntas – El Paraíso, dentro de un área de estudio que abarca
una superficie de 85 Km2 aproximadamente.
Para realizar este estudio se realizó la revisión de la documentación pertinente a la
zona y se utilizaron datos de pozos y perforaciones suministrados por El Metro de Caracas,
Ministerio del Ambiente e INAVI, donde la mayoría contaba con información de niveles y
tipo de material, esto permitió la realización de mapas piezométricos y mapa de facies.
La evaluación del acuífero se realizó mediante la elaboración de un modelo
hidrogeológico conceptual, que sirvió para el estudio y mapeo de las propiedades de cada
una de las facies que conforman el acuífero, además de una evaluación de los parámetros
hidráulicos como porosidad, conductividad hidráulica, transmisividad y coeficiente de
almacenamiento, que son necesarios para conocer el entorno del reservorio.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
vi
RESUMEN
Las reservas probables calculadas para el reservorio en base a los niveles
piezométricos del año 1979 se ubican aproximadamente en 78 millones de m3 de agua,
cantidad que se obtuvo a partir del volumen de sedimento permeable saturado y a una
porosidad efectiva de 20%, estimada en base a las características de los materiales
permeables del acuífero.
La calidad del agua del acuífero muestra un conjunto de valores de TSD y Fe por
encima de los rangos establecidos para ciertas industrias y comercios, además de presentar
un riesgo latente por la tendencia de comunicación río – acuífero, ya que como es sabido el
drenaje principal (Río Guaire) es considerado como una cuenca con graves problemas de
contaminación.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
vii
ÍNDICE
INDICE GENERAL
PAG.
DEDICATORIA
iii
AGRADECIMIENTOS
v
RESUMEN
vi
INDICE GENERAL
viii
INDICE DE FIGURAS
xiii
INDICE DE TABLAS
xvii
CAPITULO I.- INTRODUCCIÓN
1
I.- Introducción
2
I.1.- Objetivos
3
I.1.1.- Objetivo General
3
I.1.2.- Objetivos específicos
3
I.2.- Localización y Extensión del Área de estudio
3
I.3.- Metodología del Trabajo
5
I.3.1.- Revisión Bibliográfica
5
I.3.2.- Recolección de Datos
5
I.3.3.- Interpretación de Fotografías aéreas y Mapas Topográficos
5
I.3.4.- Trabajo de Campo
5
I.3.5.- Trabajo de Oficina
6
I.4.- Trabajos Previos
7
CAPITULO II.- GEOLOGÍA REGIONAL
8
II.- Geología Regional
9
II.1.- Generalidades
9
viii
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
II.2.- Estratigrafía Regional
11
II.2.1.- Complejo Basal de Sebastopol
12
II.2.2.- Grupo Caracas
14
II.2.2.1.- Formación Las Brisas
14
II.2.2.2.- Formación Peña de Mora
18
II.2.2.3.- Formación Antímano
23
II.2.2.4.- Formación Las Mercedes
26
II.2.2.5.- Formación Tacagua
31
II.2.2.6.- Formación Chuspita
34
II.3.- Metamorfismo
36
II.4.- Geología Estructural Regional
38
II.4.1.- Estructuras
38
II.4.1.1.- Pliegues
38
II.4.1.2.- Fallas
39
II.5.- Geomorfología Regional
41
CAPITULO III.- GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
50
III.- Geografía Física Local
51
III.1.- Fisiografía
51
III.2.- Clima
55
III.3.- Balance Hídrico
56
III.4.- Vegetación
61
III.5.- Meteorización y Erosión
64
III.6.- Hidrología Superficial
65
III.6.1.- Generalidades
65
III.6.2.- Características de la Red Hidrográfica Principal
65
III.6.3.- Aportes de Agua al Río Guaire
66
III.6.4.- Focos y Procesos de Contaminación que afectan al Guaire
68
ix
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
CAPITULO IV.- GEOLOGÍA LOCAL
69
IV.- Geología Local
70
IV.1.- Generalidades
70
IV.2.- División del Área de Estudio
70
IV.3.- Facies Sedimentarias
73
IV.3.1- Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
75
IV.3.2.-Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
78
IV.3.3- Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
81
IV.3.4.-Sub-Zona Antímano – El Paraíso
84
IV.4.- Roca
87
IV.5.- Estructuras Locales
92
IV.6.- Geomorfología Local
93
CAPITULO V.- MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
94
V.- Modelo Hidrogeológico Conceptual
95
V.1.- Definición del Modelo Hidrogeológico Conceptual
95
V.2.- Elaboración del Modelo Hidrogeológico Conceptual
95
V.3.- Mapas Isópacos y Superficies en 3D
96
V.3.1- Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
96
V.3.2.-Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
101
V.3.3- Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
106
V.3.4.-Sub-Zona Antímano – El Paraíso
111
V.4.- Niveles Piezométricos
117
V.4.1- Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
117
V.4.2.-Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
121
V.4.3.- Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
125
V.4.4.-Sub-Zona Antímano – El Paraíso
129
x
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
CAPITULO VI.- PARÁMETROS HIDRÁULICOS
133
VI.- Parámetros Hidráulicos
134
VI.1.- Porosidad
134
VI.2.- Permeabilidad
137
VI.3.- Transmisividad
138
VI.4.- Coeficiente de Almacenamiento
139
VI.5.- Espesor
140
VI.6.- Superficies
140
VI.7.- Red de Pozos del Oeste del Valle de Caracas
140
VI.8.- Pruebas de Bombeo
143
VI.9.- Cálculo de Reservas Probables
158
VI.9.1.- Cálculo de Volúmenes de Sedimento Permeable Saturado
158
VI.9.2.- Cálculo de Volumen de Agua
159
VI.10.- Características del Agua Subterránea
160
CAPITULO VII.- CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
163
VII.- Conclusiones y Recomendaciones
164
VII.1.- Conclusiones
164
VII.2.- Recomendaciones
167
BIBLIOGRAFÍA
169
GLOSARIO
172
xi
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
ANEXOS
178
Anexo N° 1.- Mapa Topográfico y ubicación de Pozos y Perforaciones
179
Anexo N° 2.- Mapa Geológico de La Zona de Estudio
180
Anexo N° 3.- Perfiles del Oeste del Valle de Caracas
181
A.3.1.- Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
181
A.3.2.- Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
181
A.3.3- Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
181
A.3.4.- Sub-Zona Antímano – El Paraíso
181
Anexo N° 4.- Mapa Piezométrico de la Sub-Zona Las Adjuntas –
182
Ruiz Pineda.
Anexo N° 5.- Mapa Piezométrico de la Sub- Zoológico – Ruiz Pineda.
183
Anexo N° 6.- Mapa Piezométrico de la Sub-Zona Ruiz Pineda –
184
Antímano.
Anexo N° 7.- Mapa Piezométrico de la Sub-Zona Antímano – El
185
Paraíso.
Anexo N° 8.- Mapa Hidrogeológico de la Zona de Estudio
xii
186
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
INDICE DE FIGURAS
PAG.
Figura 1: Mapa de Ubicación Relativa de la Zona de Estudio
4
Figura 2: Vista aérea de Montaña La Gata y Fila El Zamural
51
Figura 3: Vista aérea de la Quebrada Caricuao
53
Figura 4: Vista aérea del Algodonal y de La Vega
54
Figura 5: Vista aérea del Oeste del Valle de Caracas
55
Figura 6: Variación promedio de la Precipitación en el período 1960-1980
58
Figura 7: Representación Esquemática de las Reservas de un Acuífero
60
Figura 8: Mapa de Vegetación del Oeste del Valle de Caracas
62
Figura 9: Gráfico con los Datos Climáticos: Temperatura y Pluviometría
64
Figura 10: Sistema de Descarga al Río Guaire
67
Figura 11: Mapa de División de Sub-Zonas
71
Figura 12: Mapa de Ubicación de los Diagramas de Panel
74
Figura 13: Diagramas de Panel. Sub-Zona Las Adjuntas - Ruiz Pineda
76
Figura 14: Diagramas de Panel. Sub-Zona Las Adjuntas - Ruiz Pineda
77
Figura 15: Diagramas de Panel. Sub-Zona Zoológico - Ruiz Pineda
79
Figura 16: Diagramas de Panel. Sub-Zona Zoológico - Ruiz Pineda
80
Figura 17: Diagramas de Panel. Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
82
Figura 18: Diagramas de Panel. Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
83
Figura 19: Diagramas De Panel. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
85
Figura 20: Diagramas De Panel. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
86
Figura 21: Vista aérea del Algodonal, su afloramiento y muestra del esquisto
87
Figura 22: Vista aérea de la zona industrial de la Yaguara, su afloramiento y
88
muestra de roca tomada en sitio.
Figura 23: Vista aérea de la zona industrial de la Yaguara, su afloramiento y
89
muestra de roca tomada en sitio.
Figura 24: Vista aérea del oeste del valle de Caracas, su afloramiento de
90
esquisto calcáreo muy diaclasado y muestra tomada en sitio.
xiii
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
Figura 25: Mapa Isópaco del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Las Adjuntas-
97
Ruiz Pineda
Figura 26: Superficie 3D del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz
97
Pineda. Vista en Dirección N40°E
Figura 27: Mapa Isópaco de Arena Limosa. Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz
98
Pineda
Figura 28: Superficie 3D de Arena Limosa. Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz
98
Pineda. Vista en Dirección N40°E
Figura 29: Modelo Hidrogeológico en 3D. Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz
99
Pineda. Vista en Dirección S60°E.
Figura 30: Mapa Isópaco del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Zoológico-Ruiz
102
Pineda
Figura 31: Superficie 3D del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Zoológico-Ruiz
102
Pineda. Vista en Dirección E-W.
Figura 32: Mapa Isópaco de Arena Limosa. Sub-Zona Zoológico-Ruiz
103
Pineda.
Figura 33: Superficie 3D de Arena Limosa. Sub-Zona Zoológico-Ruiz
103
Pineda. Vista en Dirección E-W.
Figura 34: Modelo Hidrogeológico en 3D. Sub-Zona Zoológico-Ruiz Pineda
104
Vista en Dirección E-W.
Figura 35: Mapa Isópaco del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Ruiz Pineda-
107
Antímano.
Figura 36: Superficie 3D del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Ruiz Pineda-
107
Antímano. Vista en Dirección S45ºW.
Figura 37: Mapa Isópaco de Arena Limosa Con Grava. Sub-Zona Ruiz
108
Pineda-Antímano.
Figura 38: Superficie 3D de Arena Limosa Con Grava .Sub-Zona Ruiz
108
Pineda-Antímano. Vista en Dirección S45ºW.
Figura 39: Modelo Hidrogeológico En 3D Sub-Zona Ruiz Pineda-
109
Antímano. Vista en Dirección S45ºW.
xiv
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
Figura 40: Mapa Isópaco del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Antímano-El
112
Paraíso
Figura 41: Superficie 3D del Sustrato Rocoso. Sub-Zona Antímano-El
112
Paraíso. Vista en Dirección S40ºE
Figura 42: Mapa Isópaco de Arena Gravosa. Sub-Zona Antímano-El
113
Paraíso.
Figura 43: Superficie 3D de Arena Gravosa. Sub-Zona Antímano-El
113
Paraíso. Vista en Dirección S40ºE.
Figura 44: Mapa Isópaco de Arena Limosa con Grava. Sub-Zona
114
Antímano-El Paraíso.
Figura 45: Superficie 3D de Arena Limosa con Grava. Sub-Zona
114
Antímano-El Paraíso. Vista en Dirección S40ºE.
Figura 46: Modelo Hidrogeológico en 3D. Sub-Zona Antímano-El Paraíso
115
Vista en Dirección S40ºE.
Figura 47: Mapa Piezométrico. Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
118
Figura 48: Curva de Depresión. Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
119
Figura 49: Mapa Piezométrico Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda.
122
Figura 50: Curva de Depresión. Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda.
123
Figura 51: Mapa Piezométrico Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano.
126
Figura 52: Curva de Depresión. Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
128
Figura 53: Mapa Piezométrico Sub-Zona Antímano – El Paraíso
130
Figura 54: Curva de Depresión. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
131
Figura 55: Grafico Tiempo-Abatimiento de prueba de bombeo en Canchas
146
de Tenis de la Paz.
Figura 56: Grafico Tiempo-Abatimiento de la prueba de bombeo del Uslar.
148
Figura 57: Grafico Tiempo-Abatimiento de prueba de bombeo de Pozo en
150
en Distribuidor La Araña
Figura 58: Grafico Tiempo-Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en
152
Los Leones.
xv
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
Figura 59: Grafico Tiempo-Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en
153
el Brígido Iriarte.
Figura 60: Grafico Tiempo-Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en
154
el Brígido Iriarte II.
xvi
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
INDICE DE TABLAS
PAG.
Tabla 1: Balance Hídrico
57
Tabla 2: Índices y Clasificaciones Climáticas
57
Tabla 3: Evaluación del grado de meteorización del macizo rocoso
91
Tabla 4: Interacción de controles Morfo-Genéticos
93
Tabla 5: Datos de Perforaciones del Metro de Caracas e INAVI. Sub-Zona
96
Las Adjuntas – Ruiz Pineda
Tabla 6: Datos de Perforaciones del Metro de Caracas e INAVI. Sub-Zona
101
Zoológico – Ruiz Pineda.
Tabla 7: Datos de Perforaciones del Metro de Caracas. Sub-Zona Ruiz
106
Pineda – Antímano
Tabla 8: Datos de Perforaciones del Metro de Caracas y Pozos de
111
Hidrocapital, MARN. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
Tabla 9: Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones del
117
Metro de Caracas en Noviembre de 1979. Sub – Zona Las
Adjuntas – Ruiz Pineda.
Tabla 10: Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones
121
del Metro de Caracas en Abril de 1978. Sub-Zona Zoológico –
Ruiz Pineda.
Tabla 11: Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones
125
del Metro de Caracas en Noviembre de 1979. Sub-Zona Ruiz
Pineda – Antímano.
Tabla 12: Datos de Niveles Piezométricos tomados de Pozos De
129
Hidrocapital en Octubre de 2001. Sub-Zona Antímano – El
Paraíso.
Tabla 13: Porosidades Totales y Efectivas de diversos materiales según
136
Johnson (1967), Davis (1969), Schoeller (1962) y Ward (1967).
Fuente: Mejías y Guerrero (2000).
xvii
NÚÑEZ, VELASQUEZ
ÍNDICE
Tabla 14: Clasificación de Terrenos por la Conductividad Hidráulica.
137
Fuente: Mejías y Guerrero (2000).
Tabla 15: Pozos de Bombeo del Área en Estudio
142
Tabla 16: Ubicación de pruebas de bombeo
144
Tabla 17: Datos de prueba de bombeo en las canchas de Tenis de la Paz
145
Tabla 18: Caudal y Transmisividad obtenido de la Grafica Tiempo –
146
Abatimiento de prueba de bombeo en cancha de Tenis de la Paz.
Tabla 19: Datos de prueba de bombeo en el Uslar.
147
Tabla 20: Caudal y Transmisividad obtenido de la grafica Tiempo –
148
Abatimiento de la prueba de bombeo en el Uslar.
Tabla 21: Datos de prueba de bombeo de pozo en Distribuidor La Araña
149
Tabla 22: Datos de prueba de bombeo de pozo en Los Leones
151
Tabla 23: Caudal y Transmisividad obtenido de la grafica Tiempo –
152
Abatimiento de prueba de bombeo de Pozo en Los Leones.
Tabla 24: Datos de prueba de bombeo de pozo en el Brígido Iriarte
153
Tabla 25: Caudal y Transmisividad obtenido de la grafica Tiempo –
153
Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en el Brígido Iriarte.
Tabla 26: Datos de prueba de bombeo de pozo en el Brígido Iriarte II
154
Tabla 27: Caudal y Transmisividad obtenido de la grafica Tiempo –
154
Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en Brígido Iriarte II.
Tabla 28: Cálculo del Volumen de Sedimento Permeable saturado por Sub -
158
Zonas
Tabla 29: Cálculo de Volumen de Reservas Probables de Agua por Sub -
159
Zonas
Tabla 30: Análisis Físico-Químico del Agua. Hidrocapital 1994.
160
Tabla 31: Tolerancia para el uso del agua a nivel industrial y comercial.
161
Límites permisibles en partes por millón. Tomado de Porras y
Thalvin “Aguas Subterráneas Problemas de Contaminación”.
xviii
NÚÑEZ, VELASQUEZ
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
I.- INTRODUCCIÓN
El acuífero del Valle de Caracas ha cubierto de manera satisfactoria la
demanda de agua que fundamentalmente el
sector industrial y comercial ha
requerido, lo que demuestra la utilidad que el agua subterránea tiene para la ciudad
capital y la importancia de estudiar este recurso
para conocer su calidad y
durabilidad.
La calidad del agua subterránea en la ciudad de Caracas se está viendo
afectada progresivamente por asentamientos urbanos, drenajes superficiales
contaminados, desechos industriales, entre otros; en cuanto a la durabilidad, la
explotación indiscriminada puede provocar una importante disminución de los
niveles, causando el agotamiento del reservorio. Por tales motivos surge la necesidad
de indagar y analizar las condiciones del acuífero que posteriormente favorecerá la
ejecución de un mejor plan de gestión en donde se obtenga el mayor provecho al
acuífero.
Este estudio corresponde al sector oeste del Valle de Caracas pertenecientes al
tramo inicial de la cuenca alta del Río Guaire, se seleccionó esta zona en particular
por los escasos estudios que se le han realizado y además por ser el nacimiento del
Río Guaire (drenaje principal), ya que la posible interacción río-acuífero presente a lo
largo del valle, puede resultar un riesgo potencial para el reservorio de agua.
2
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
I.1.- OBJETIVOS
I.1.1.- OBJETIVO GENERAL
Elaborar una evaluación hidrogeológica del acuífero del Valle de Caracas en
el tramo Las Adjuntas-El Paraíso.
I.1.2.- OBJETIVOS ESPECÍFICOS
•
Determinar las características físicas del acuífero, tales como: tipo de
sedimento y sus variaciones, sus espesores y geometría general
•
Elaborar el balance hídrico del área.
•
Establecer los parámetros hidráulicos del acuífero.
•
Elaborar un modelo hidrogeológico conceptual.
•
Establecer la calidad del agua y los posibles agentes contaminantes
•
Calcular las reservas probables de agua del acuífero.
•
Elaborar la cartografía hidrogeológica adecuada a escala 1:25.000
I.2.- LOCALIZACIÓN Y EXTENSIÓN
DEL ÁREA DE ESTUDIO
El área de estudio está ubicada en el Valle de Caracas en el municipio
Libertador, desde Las Adjuntas (nacimiento del Río Guaire) hasta El Paraíso, entre
las coordenadas 717.000m- E a 728.000m- E y 1.152.000m– N a 1.164.000m-N;
presentando una superficie aproximada de 85 Km². La figura 1 muestra la ubicación
relativa del área de estudio.
3
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
72
73
13
70
71
68
69
65
66
67
63
64
62
61
60
59
13
MAR
12
CARIBE
12
NUEVA ESPARTA
11
TRINIDAD
Y TOBAGO
11
OCEANO
ATLANTICO
10
FALCON
ZULIA
D.F
YARACUY
MIRANDA
CARABOBO
LARA
10
SUCRE
ARAGUA
TRUJILLO
MONAGAS
COJEDES
PORTUGUESA
9
GUARICO
9
DELTA
AMACURO
ANZOATEGUI
MERIDA
BARINAS
8
8
TACHIRA
APURE
7
ZONA
7
EN
BOLIVAR
6
RECLAMACION
6
5
5
COLOMBIA
4
4
AMAZONAS
3
3
BRASIL
2
2
1
1
73
M
Catia La Mar
A
R
C
A
R
Macuto
Maiquetia
I
B
72
70
68
69
66
67
64
65
63
61
62
60
59
E
Los Caracas
Chirimena
La Sabana
LA GUAIRA
71
PARQUE NACIONAL EL AVILA
D.FEDERAL
Chichiriviche
AL
ER
ED
A
D.F
GU
RA
O.A
ED
EDO.MIRANDA
Higuerote
Guatire
CARACAS
Curiepe
GUARENAS
Tarigua de
Mamporal
Colonia Tovar
LOS TEQUES
Santa Lucía
Las Tejerias
Santa Teresa
LA VICTORIA
Cagua
Villa de Cura
Caucagua
Charallave
TURMERO
Cúa
ED
O.M
IR
AN
ED
DA
O.A
RA
GU
A
PARQUE NACIONAL GUATOPO
Ocumare del Tuy
EDO.MIRANDA
EDO.GUARICO
San Casimiro
725.000
726.000
1.164.000
ALUVION
PEREZ BONALDE
LOS FLORES
(QAL)
23 DE ENERO
PROPATRIA
727.000
1.163.000
1.163.000
SAN JUAN
723.000
URB. FRANCISCO DE MIRANDA
EL GUARATARO
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
1.162.000
1.162.000
722.000
ARTIGAS
1.161.000
URB.
INDUSTRIAL
ARVELO
721.000
AN
TIF
OR
ME
DE
EL
UIT
JUNQ
1.161.000
PARAISO
O
VISTA ALEGRE
WASHINSTON
LOS LAURELES
BELLA VISTA
LAS FUENTES
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
720.000
COLINAS DE VISTA ALEGRE
LA YAGUARA
717.000
OL
MA RM
DE
IMANO
ANT (CA )
716.000
Urb.
Luis Hurtado
718.000
Urb. Monte Alto
1.159.000
OR
TIF
ME
DE
EL
JUNQ
UIT
1.160.000
MARMOL DE ANTIMANO
(CA)
EL ALGODONAL
719.000
ALUVION
LA PAZ
(QAL)
MONTALBAN
O
1.159.000
CARAPA
AN
Comunidad
Haticos
de Barandilla
RIO
GU
AIR
LA VEGUITA
E
715.000
EL CARMEN
1.158.000
Qd
a.
AN
DE A)
MOL (C
MAR
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
Hil
BARRIO LA COLMENA
arita
O
AN
TIM
LA LUZ
SINF
Los
E DE
EL
ER
IO
1.158.000
BARRIO LA LUZ
BARRIO LARANGELA
BARRIO MAMERA
Qda
ORM
NT
ME
ANTIMANO
(CAa)
BARRIO EL MILAGRO
BARRIO CARLOS
BELLO
bues
Bam
SINF
Hda. La Pena
MOMTANA LA
GATA
LA VEGA
BARRIO SANTA
ELENA
CE
OR
ME
DE
EL
MEN
CE
TE
RIO
BARRIO LOS CANGILONES
1.157.000
BARRIO LOS MANGOS
714.000
Hda. Mamera
Urb. Araguaney
ESQUISTOS DE LAS
MERCEDES
(CAM)
715.000
FILA EL Z
AMURA
ESQUISTOS DE LAS
MERCEDES
(CAM)
1.156.000
L
TERRAZA CARICUAO
ZONA "B"
ZONA "A"
1.155.000
1.155.000
BARRIO SAN
PABLITO
Serpentinita
(SP)
CARICUAO
RUIZ (SP)
PINEDA
SECTOR UD-1
(sp)
SECTOR UD-3
SECTOR UD-6B
SECTOR UD-2
SECTOR UD-6A
SECTOR UD-2
SECTOR UP-3
Rio Guaire
SECTOR UD-5
SECTOR UD-4
SECTOR UD-9
1.154.000
El Cipres
SECTOR UP-4
LA GRAN
PARADA
718.000
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
1.153.000
719.000
METACONGLOMERADO
DE BARUTA
(CaBb)
720.000
722.000
724.000
723.000
Figura 1.- Mapa de ubicación relativa de la Zona de Estudio
4
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
I.3.- METODOLOGÍA DEL TRABAJO
I.3.1.- Revisión Bibliográfica: El objetivo de esta etapa es delimitar el marco
geológico regional, a través de la revisión, clasificación y esquematización de la
documentación disponible sobre los estudios previos realizados en el área, así como
también la búsqueda de literatura técnica que ayudaría a un mejor análisis de los
resultados.
I.3.2.- Recolección de Datos: En esta etapa se recolectó toda la información necesaria
referente a los estudios realizados en la zona oeste del Valle de Caracas, entre las
instituciones visitadas estuvieron: Hidrocapital, INAVI, Ministerio del Ambiente,
Metro de Caracas, FUNVISIS, entre otros.
I.3.3.- Interpretación de Fotografías Aéreas y Mapas Topográficos: Consistió en
realizar un análisis detallado de fotografías aéreas correspondientes a la misión
0304108 a escala 1:25.000 del año 1973, y los mapas topográficos:
•
6847-III-NO
•
6847-IV-SO
•
6747-II-NE
para una descripción geomorfológica, estructural y de la identificación de la red de
drenaje del área de estudio.
I.3.4.- Trabajo de Campo: En esta fase se determinó el carácter litológico de las
formaciones adyacentes al sedimento no consolidado estudiado, evaluándose su grado
de meteorización, fracturamiento y composición mineralógica aproximada, esto
permitió comparar o confrontar con la información obtenida en estudios realizados
anteriormente en la zona.
5
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
I.3.5.- Trabajo de Oficina: Esta etapa se dividió en varias fases:
a. Revisión de la información de pozos y perforaciones: Se realizó la revisión
detallada de los pozos y las perforaciones ubicadas en el área de estudio,
obteniendo datos como: localización, perfiles de suelo y niveles estáticos; para
conocer las condiciones del acuífero.
b. Elaboración del Mapa Geológico-Estructural a escala 1:25.000.
c. Elaboración del Mapa Base donde se representó la ubicación de los pozos, las
curvas de nivel, red de drenajes y áreas urbanas a escala 1:25.000.
d. Elaboración del Balance Hídrico: Con datos climáticos, anteriormente
recolectados, se realizó el balance hídrico y la clasificación climática en base a
Thornthwaite (1955).
e. Elaboración del Mapa Piezométrico: Este permitió obtener el comportamiento del
nivel de agua del acuífero, determinar las líneas de flujo y las zonas de recarga y
descarga.
f. Interpretación de los Perfiles de Suelo: Permitió obtener el tipo y posible espesor
del acuífero, así como la clasificación de las facies predominantes.
g. Elaboración de Diagramas de Paneles: Permitieron correlacionar perfiles
dispuestos en el área para la generación de superficies continuas, y el posterior
modelo hidrogeológico conceptual.
h. Elaboración del Modelo Hidrogeológico Conceptual: Consistió en mapas de
contornos y superficies 3D de los topes y bases tanto de las facies como del
sustrato rocoso.
i. Parámetros Hidráulicos: Se obtuvieron los parámetros hidráulicos tales como:
porosidad,
conductividad
hidráulica,
transmisividad
y
coeficiente
de
almacenamiento.
j.
Cálculo de Reservas Probables del Acuífero: Se calculó en base al volumen de la
roca permeable saturada, la porosidad efectiva estimada y el mapa de niveles
piezométricos.
6
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
INTRODUCCIÓN
k. Evaluación del potencial de contaminación y los agentes que afectan la calidad
del agua del acuífero.
l. Elaboración del Mapa Hidrogeológico Final, en donde se representó: Isopiezas,
líneas de flujo, curvas de nivel, geología, estructuras, facies, pozos, perforaciones
y red de drenajes.
m. Realización de las conclusiones finales y las recomendaciones.
I.4.- TRABAJOS PREVIOS
González Alcides, (1967). Estudia los aspectos y características generales del
acuífero del Valle de Caracas, tomando en cuenta las características y
comportamiento del Río Guaire en el transcurrir del tiempo, además de destacar su
alto nivel de contaminación.
Seismograph Service Corporation of Delaware, (1950). Prepara un informe
sobre investigaciones de aguas subterráneas del Valle de Caracas para el Instituto
Nacional de Obras Sanitarias, con el fin de indicar de una manera efectiva la
utilización del agua del subsuelo de Caracas, estudiando los registros de pozos, su
situación exacta y su respectivo análisis hidrológico, y así determinar la capacidad del
reservorio.
Peter Kantak, (2001). Realizó un modelo del espesor del aluvión del Valle de
Caracas basado en una data geológica y geofísica y su respectiva integración, donde
obtuvo como resultado un mapa del Valle de Caracas, señalando los espesores y
heterogeneidad del sedimento, además de hacer gran énfasis en la zona de los Palos
Grandes por ser la de mayor espesor; señalando el comportamiento y propagación de
las ondas sísmicas en esta zona.
7
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOLOGÍA REGIONAL
CAPÍTULO II
GEOLOGÍA REGIONAL
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOLOGÍA REGIONAL
II.- GEOLOGIA REGIONAL
II.1.- GENERALIDADES
Las numerosas contribuciones realizadas para la cordillera de La Costa varían
ampliamente desde notas y reseñas históricas (Humboldt (1804) Karsten (1850) Wall
(1860) Sievers (1887)), hasta las publicaciones científicas actuales, entre las cuales
merece destacar la obra de los geólogos S. E. Aguerrevere y G. Zuloaga, quienes
produjeron los primeros aportes formales, así como G. Dengo y V. M. Seiders,
quienes señalaron las bases para el ordenamiento litológico y estratigráfico del
Macizo Central de la Cordillera. Para hacer justicia a su brillante labor, y sin
menoscabar la labor productiva de quienes posteriormente contribuyeron al detalle
cartográfico que afectaron y que aún actúan sobre la estructura y morfología de la
Cordillera de la Costa, hay que reconocer que el cuadro estratigráfico que nos
presentaran en sus obras, permanece hoy día sin modificaciones sustanciales, al
menos en su aspecto regional.
La Cordillera de la Costa consta, según el concepto de Menéndez (1966) de
cuatro fajas tectónicas, que de Norte a Sur, poseen las siguientes características:
1) La Faja de la Cordillera de la Costa, compuesta por rocas metasedimentarias de
bajo grado metamórfico (hasta el grado del almandino) en el núcleo de la cordillera,
de edad Jurásico-Cretáceo inferior, limitado al sur por el sistema de falla de La
Victoria (anticlinorios), en cuyos núcleos aflora localmente el basamento de la
cordillera.
2) La Faja Caucagua-El Tinaco que consta de una secuencia volcánico-sedimentario
de edad Cretácea, ligeramente metamorfizada, que suprayacen a bloques dispersos de
basamento. Se caracteriza por los pliegues abiertos y los buzamientos suaves, pero
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
9
GEOLOGÍA REGIONAL
afectados por un intenso tectonismo y aloctonía de bloques. Está limitada al sur por la
falla de Santa Rosa.
3) La Faja de Paracotos, limitada por las fallas de Santa Rosa y Agua-Fría, que
constan en un homoclinal de buzamiento sur, compuesto por capas de la Formación
Paracotos.
4) El Bloque de Villa de Cura, compuesto por rocas volcánicas y (ocasionalmente)
sedimentarias metamorfizadas, cuyo origen se ubica al norte de la Cordillera y que
parece haberse deslizado hacia el sur durante el Maestrichtiense. Hacia el sur, está
limitado por la falla de Cantagallo, en contacto con una serie de sedimentos de edad
Cretáceo-Terciario inferior, que a su vez se hallan sobrecorridos por encima de
sedimentos terciarios jóvenes, a consecuencia de un sistema de corrimientos
frontales.
El plegamiento de la Cordillera de la Costa parece tener su origen durante la
Orogénesis Andina, (Terciario inferior), pero el período principal de plegamiento
obedece a las pulsaciones de la Orogénesis Antillana, ocurrida durante el Terciario
superior, y cuya máxima actividad tiene lugar durante el Eoceno medio y superior. A
la luz de los nuevos conceptos relativos a tectónica de placas, Stainforth (1969) hace
una interesante relación de la historia tectónica de Venezuela, en la que implica la
existencia de una célula convectiva subsidiaria, ubicada en el Mar Caribe, justamente
al norte de Venezuela.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
10
GEOLOGÍA REGIONAL
II.2.- ESTRATIGRAGIA REGIONAL
A continuación se resume la litología y las características principales de las
Formaciones del Grupo Caracas y de su basamento, que reúnen litologías de aquellas
unidades que circundan el Valle de Caracas.
El referido Grupo Caracas, es una secuencia de rocas metasedimentarias
depositadas durante el Jurásico superior y Cretácico inferior, en discordancia sobre un
complejo ígneo/metamórfico, de edad Paleozoico inferior. La sedimentación de las
rocas del Grupo Caracas, es típicamente de plataforma, excepto en su fase final,
cuando se depositan sedimentos gradados que indican un ambiente de surco,
fenómeno atribuido a desajustes locales en los bordes de la cuenca (Seiders, 1965).
A fines del Cretáceo inferior, se producen eventos volcánicos que señalan el
comienzo de las facies eugeosinclinal del Grupo post-Caracas. En contraste con el
grupo anterior, las rocas de éste se depositan en un ambiente de surco, de aguas
profundas y sedimentación rápida, caracterizadas por el abundante suministro de
material volcánico.
Frecuentes son las fajas angostas de anfibolitas y eclogitas, las cuales se
consideran que representan flujos de composición basáltica, que luego fueron
metamorfizadas conjuntamente con los sedimentos, bajo condiciones un tanto
particulares, ya que la composición mineralógica de las mismas sugiere la ausencia de
vapor de agua y de óxido de carbono.
El núcleo de la Cordillera se vió afectada en toda su extensión por apófisis
granítica, la mayor de ellas ubicada entre Valencia y Puerto Cabello, las cuales
constituyeron un agente importante en el proceso de metamorfismo de los sedimentos
del Grupo Caracas, (González Silva, 1972).
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
11
GEOLOGÍA REGIONAL
Una de las rocas intrusivas abundantes en la Cordillera, la constituyen las
ultrabásicas,
en
sus
formas
más
generalizadas:
serpentinitas,
peridotitas
serpentinizadas, dunitas y piroxenitas, a las cuales se asocian yacimientos minerales
de importancia económica (Bellizzia, 1967).
II.2.1.- COMPLEJO BASAL DE SEBASTOPOL
Consideraciones históricas: Aguerrevere y Zuloaga (1937) nombran al
"granito de Sebastopol" sin describirlo texturalmente, posteriormente los mismos
autores (1938) lo denominan formalmente como "Complejo Basal de Sebastopol" y
señalan que forma parte del núcleo de la Cordillera de la Costa. Dengo (1951) y
Smith (1952) lo denominan como "Complejo de Sebastopol", el primero dice que es
un gneis en parte granítico y lo cartografía en la zona de Los Lechosos - La Mariposa,
mientras que el segundo autor lo estudia en su localidad tipo y lo califica como un
ortogneis granítico, igualmente ambos autores reafirman su posición como basamento
de la secuencia de las rocas metamórficas del Grupo Caracas. Wehrmann (1972)
utiliza el nombre de "Complejo Basal de Sebastopol" pero distingue diferencias
petrográficas significativas entre los cuerpos de la localidad tipo y el de Los Lechosos
- La Mariposa, interpretando al primero como un ortogneis y al segundo
esencialmente un paragneis. Pimentel et al. (1985) estudian el cuerpo de Los
Lechosos - La Mariposa, llamándolo informalmente "Gneis de La Mariposa" como
una unidad diferente al gneis de la localidad de Sebastopol, adicionalmente presentan
datos geocronológicos. Más recientemente, Ostos (1990, p. 20) utiliza el nombre de
"Complejo de Sebastopol", mientras que Beck (1985) lo denomina "Gneis de
Sebastopol", que es un nombre más adecuado para esta unidad que posee una
litología bastante homogénea.
Localidad tipo: Sitio de Sebastopol en la antigua carretera Caracas - Los
Teques, a media distancia entre Las Adjuntas y Los Teques, estado Miranda. Los
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
12
GEOLOGÍA REGIONAL
mejores afloramientos se encontraban en las márgenes del río San Pedro. Hoy el día
este sitio corresponde a los barrios El Carite y Tierras Blancas (este último nombre es
un topónimo que hace referencia al color blanquecino de esta unidad al estar muy
meteorizada).
Descripción litológica: Dengo (1951) lo describe como un gneis de grano fino
fuertemente foliado, compuesto de cuarzo, ortosa, microclino, plagioclasa, muscovita
y biotita, localmente es de grano más grueso con una estructura de gneis granítico. El
carácter de ortogneis de las rocas de esta unidad (al menos de aquellas de la localidad
tipo) ha sido aceptado por todos los autores que lo han estudiado.
Wehrmann (1972) lo describe como muy meteorizado, de color blanquecino
característico producido por la transformación de los feldespatos y cuarzo, reconoce
el desarrollo de grandes porfidoblástos de microclino con tendencia a formar "augen",
que a diferencia de la plagioclasa, no están deformados. Hacia los bordes del cuerpo
se desarrolla foliación hasta formar un gneis de color verdoso por la presencia de
clorita, finamente bandeado, que puede llegar a determinar intercalaciones con
esquistos cloríticos y filitas cloríticas. En esta zona se observan venas cloríticas
paralelas, o ligeramente discordantes con la foliación regional. En la zona de Los
Lechosos, este autor primeramente describe un paragneis (véase el Para-gneis de La
Mariposa), pero hacia el sur vuelve a aparecer un gneis parecido al de la localidad
tipo, por lo cual deduce que en esta zona el paragneis fue intrusionado por un granito.
Extensión geográfica: Únicamente también cartografían con este nombre al
cuerpo de Los Lechosos - La Mariposa, que actualmente se conoce el cuerpo de la
localidad tipo, de unos 5 por 1,5 Km. (Smith, 1952). Dengo (1951) y Wehrmann
(1972)ente se ha separado y se conoce como "Para-gneis de La Mariposa" (Pimentel
et al., 1985; Urbani, 1989).
Contactos: Desde las descripciones iniciales se ha considerado discordante
por debajo de los metaconglomerados de la Formación Las Brisas del Grupo Caracas.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
13
GEOLOGÍA REGIONAL
Edad: El estudio de Hess (1972) presenta los datos de una sola muestra de
roca total con muy alta relación Rb/Sr (28,0), de manera que utilizando cualquier
relación inicial 87Sr/86Sr razonable, se puede estimar una edad modelo en el orden
de los 425 m.a. (Paleozoico, Ordovícico). Posteriormente Gaudette y Olsewsky
(1979, datos reproducidos en Teggin, 1981; Urbani, 1982 y Pimentel et al., 1985)
presentan datos de otra muestra, analizada tanto en forma total, como en una
submuestra de la misma; con las tres muestras se obtiene una edad de 454 m.a.
Urbani (1989) prefiere utilizar solamente las dos muestras de roca total, lo cual aporta
una edad de 424 m.a. (prácticamente igual a los 425 m.a. indicados por Hess, 1972),
considerándola preferencial como edad de esta unidad hasta que haya estudios
geocronológicos más detallados. Existe una edad K-Ar en muscovita con una edad de
41 ± 2 m.a. (Olmeta, 1968)
Correlación: Wehrmann (1972) y Ostos (1990, p. 20) lo correlacionan con el
Complejo de El Tinaco.
II.2.2.- GRUPO CARACAS
II.2.2.1.- FORMACIÓN LAS BRISAS
Consideraciones históricas: La primera referencia a esta unidad se debe a
Aguerrevere y Zuloaga (1937), quienes la denominan Conglomerado Basal de Las
Brisas y agregan una breve descripción.
Dengo (1951) amplía la descripción y propone incluir en la formación, los
esquistos comprendidos entre la Caliza de Zenda y la Caliza de Antímano. También
destacando unidades dentro de la formación: la Caliza de Zenda (que define como
miembro) y el gneis microclínico, sin rango.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
14
GEOLOGÍA REGIONAL
Smith (1952) divide la formación en dos miembros. Sucesivamente, la
formación es descrita sin mayores cambios en diversas localidades por Mc Lachlan
et. al. (1960), Feo-Codecido (1962), Oxburgh (1965), Seiders (1965), Morgan (1969),
Wehrmann (1972), González Silva (1972) y Rodríguez (1972), Talukdar y Loureiro
(1982), introducen nuevos conceptos en la estratigrafía general de la Cordillera de la
Costa.
Localidad tipo: Sitio de Las Brisas, en el km 10 de la antigua carretera
Caracas-Ocumare del Tuy, cerca de la represa de la Mariposa. (Hoja 6847, esc.
1:100.000, Cartografía Nacional).
Descripción litológica: La descripción original de Aguerrevere y Zuloaga (op.
cit.), menciona un conglomerado basal arcósico, con cantos rodados derivados de la
roca basal de Sebastopol, redondeados a subangulares, hasta de 30 cm. de diámetro,
cantos de cuarzo y cemento, principalmente silícico. Esta litología dista de ser la
principal, ni mucho menos la única componente de la formación.
Dengo (op. cit.) observa que la mayor parte de la formación está constituida
por esquisto cuarzo-micáceo, en el que se incluye gneis microclínico, esquistos
granatíferos, cuarcitas y calizas (ver además: Zenda, Miembro).
Smith (op. cit.), divide la formación en dos miembros: miembro inferior,
constituido por gneises y esquistos microclínicos conglomeráticos y miembro
superior, formado casi enteramente por esquistos sericíticos. Este autor opina que los
grupos litológicos de los miembros inferior y superior, se originan de conglomerados
y lutitas respectivamente, y que las calizas son de origen biohermal.
Seiders (op. cit.) encuentra en el tope de la formación, conglomerados
gnéisicos y areniscas esquistosas, con cantidad menor de caliza negra en capas
delgadas, y grandes guijarros de granito, y resalta la ausencia de los esquistos
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
15
GEOLOGÍA REGIONAL
sericíticos de Smith. Morgan (op. cit.) añade anfibolitas estratificadas concordantes,
que interpreta como tobas, sills o flujos metamorfizados.
Wehrmann (op. cit.) afirma que la Formación Las Brisas está constituida en
un 90% de esquistos cuarzo-feldespático-moscovíticos; el 10% restante lo constituye,
en orden de abundancia, esquistos cuarzo-feldespáticos, epidóticos o cloríticos,
calizas, cuarcitas y metaconglomerados. Menciona igualmente mineralizaciones
pobres de cobre en algunas calizas, en forma de sulfuros y sulfatos. Este autor no
menciona el gneis microclínico de Dengo, pero hace referencia a conglomerados y
areniscas intraformacionales, ricas en microclino (15%), sin hacer referencia a su
relación con los gneises del mismo género.
Taludkar y Loureiro (op. cit.) analizan exhaustivamente los tipos litológicos,
en un área reducida de la Cordillera de la Costa, sin relacionarla con las formaciones
tradicionales, estableciendo la dificultad e inconveniencia en el uso de unidades
litoestratigráficas, en estudios detallados de rocas metamórficas. El grado de
metamorfismo es bajo, aunque existen diferencias entra las opiniones de Dengo,
Smith y Seiders, quienes opinan que predomina la facies de la anfibolita y el
glaucófano, mientras que Wehrmann le asigna grados más bajos de presión (facies del
esquisto verde).
Ambiente tectónico y petrogénesis: Prácticamente todos los autores que se
han referido a esta formación, han coincidido en afirmar que en su origen, las rocas
que la componen, fueron sedimentos pelíticos y psammíticos, depositados en la
plataforma y el talud continental. En cuanto a las calizas, existen diferencias de
criterio, que varían entre el origen biohermal y el pelágico. Talukdar y Loureiro (op.
cit.) opinan que la fuente de sedimentos pudo haber sido el protocontinente,
suramericano, de suave pendiente y situado a gran distancia, combinado con una
fuente cercana de origen volcánico de tipo basáltico y andesítico. Estos sedimentos
fueron depositados en una plataforma continental, de ambiente parcialmente euxínico,
contiguo a un arco volcánico.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
16
GEOLOGÍA REGIONAL
Contactos: La Formación Las Brisas descansa sobre el Complejo Basal de
Sebastopol. El contacto, ya sea por la foliación discordante, sea por el hiatus de
tiempo que separa ambas formaciones, es discordante, según la opinión generalizada,
aunque algunos autores (véase: Sebastopol, Complejo Basal de), afirman haber
observado localmente una aparente concordancia entre una y otra. La relación con las
formaciones suprayacentes Antímano y Las Mercedes, es generalmente transicional,
aunque a veces, el contacto es estructural. La Formación Las Brisas forma en la
región capital, el núcleo de los anticlinorios que corren a lo largo de la faja de la
Cordillera de la Costa. Los trabajos presentados hasta 1972, ofrecen un cuadro
estructural clásico de plegamientos longitudinales, con sus respectivas fallas,
segmentados por fallas transversales, haciendo mención de microestructuras, tales
como lineaciones, pliegues de flujo, etc., tomando como base para la composición
estructural, el principio de que la foliación es paralela a la estratificación, y de que los
esfuerzos de deformación provienen del norte, con una componente menor en sentido
E-W.
Talukdar y Loureiro (op. cit.), hacen un análisis muy detallado, y desarrollan
un modelo de evolución tectónica de la cordillera en cinco etapas, identificando
cuatro fases consecutivas de plegamiento, originados por subducción, colisión de
placas y emplazamiento del basamento granítico, corteza oceánica y manto, así como
de intrusiones graníticas.
Los afloramientos de la Formación Las Brisas, alcanzan dimensiones
decakilométricas en sentido N-S, y hectokilométricas en su extensión longitudinal, EW.
Extensión geográfica: A todo lo largo del macizo central de la Cordillera de
la Costa, entre el Cabo Codera y el graben del río Yaracuy.
Edad: La única referencia de fósiles plenamente identificados de la
Formación Las Brisas, que permiten el establecimiento de una edad específica, la
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
17
GEOLOGÍA REGIONAL
proporciona Urbani (1969), con el descubrimiento de varios ejemplares de Exogira
sp.
aff.,
E.
virgula
(Defrance),
molusco
pelecípodo
característico
del
Kimmeridgiense, Jurásico Tardío, tal como lo describe Kauffan (en Gamero, 1969).
Anteriormente Wolcott (1943) había descrito moldes y secciones de fósiles
provenientes de la quebrada Cara (o Care), cerca de Guatire, entre los cuales
menciona las especies Pecten (Camponectes) sp. cf., C. indiduraensis, y C. bubonis ?,
de edad Jurásico tardío, además de otras especies no identificadas de Pecten sp.,
Pholadamya sp., Cardium sp., Meretrix sp., Plicatula sp. y Lucina sp.
Los fósiles descritos por Urbani (1973), provienen de dolomías puras (95%),
grises, de grano fino, altamente recristalizadas, pertenecientes al Miembro Zenda, en
la localidad de la Cueva del Indio en la Guairita, al sur de Caracas. Los fósiles
descritos por Wolcott (1943), provienen de calizas asignadas originalmente a la
Formación Las Mercedes, pero posteriormente fue rectificada la asignación, e
incluidos en el Miembro Zenda.
Correlación: La primera correlación de esta unidad fue establecida
tentativamente por Aguerrevere y Zuloaga (op. cit.), quienes sugieren una
equivalencia de la Formación Las Brisas con la Formación Río Negro. Sin embargo,
la diferencia de edades invalida dicha correlación, repetida sucesivamente por autores
posteriores. No se ha establecido una correlación precisa con unidades del macizo
oriental de la Cordillera de la Costa.
II.2.2.2.- FORMACIÓN PEÑA DE MORA
Consideraciones históricas: El nombre de "Augen - gneis de Peña de Mora"
fue introducido por Aguerrevere y Zuloaga (1937) describiéndolo como formado por
inyecciones "lit - par - lit" de un magma granítico en una roca laminar.
Posteriormente Dengo (1951, 1953) eleva la unidad a rango formacional.
Aguerrevere (1955) presentan una cartografía geológica más detallada del área de la
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
18
GEOLOGÍA REGIONAL
localidad tipo. Wehrmann (1972) y Urbani y Quesada (1972) amplían su significado
para incluir esquistos, cuarcita, mármol y anfibolita. Urbani y Ostos (1989) basándose
en un soporte de cartografía geológica más detallada de extensos tramos de la
Cordillera de la Costa, a escala 1:10.000 y 1:25.000, restringen este nombre sólo a los
cuerpos de augengneis y gneises graníticos y aquellas zonas que si bien tienen otros
tipos de rocas intercaladas con los augengneises, éstos sean los predominantes.
Localidad tipo: Sitio de Peña de Mora, en la antigua carretera de Caracas a La
Guaira, Distrito Federal (Aguerrevere y Zuloaga, 1937). Urbani y Ostos (1989)
proponen una sección de referencia en el curso bajo del río Chichiriviche, Distrito
Federal.
Descripción litológica:
Aguerrevere
y
Zuloaga
(1937)
describieron
augengneis que interpretan como formados por inyección "lit - par - lit" de un magma
granítico en una roca laminar. Posteriormente Dengo (1951, 1953) añadió a esta
descripción niveles sin estructura augen, capas de cuarcita y diques de aplita, que
generalmente no sobrepasan 30 cm de espesor, igualmente incluye en su unidad a
lentes de mármoles en la parte superior del augengneis. Wehrmann (1972) a su vez
amplió la acepción de la Formación Peña de Mora definiéndola como un complejo
ígneo - metamórfico equivalente lateral, por lo menos en parte, de la Formación Las
Brisas que prácticamente forma el núcleo de la Cordillera de la Costa, incluyendo
augengneises gruesos y bandeados, gneises de grano fino a medio, algunas cuarcitas
delgadas, esquistos cuarzo - muscovíticos y ocasionalmente anfibolitas, mármoles
delgados, así mismo dentro de esa secuencia identifica cuerpos dispersos de rocas
ultramáficas, máficas y félsicas. Encuentra que los augengneises son de colores claros
ligeramente
verdosos
y
meteorización
marrón
claro;
los
"augen"
son
mayoritariamente de feldespato potásico, llegando a alcanzar hasta 3 cm de largo y
están rodeados por minerales micáceos y cuarzo.
A partir del detallado trabajo de Ostos (1981) en el macizo de El Ávila, éste
autor pudo cartografiar a los augengneises como una unidad separada a los demás
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
19
GEOLOGÍA REGIONAL
tipos de rocas, que autores anteriores habían adicionalmente incluido dentro de la
Formación Peña de Mora. Igualmente en los trabajos geológicos de la zona de La
Sabana - Cabo Codera, Mamo - Puerto Cruz, Puerto Cabello - Valencia (recopilados
en Urbani et al., 1989a, 1989b) se pudo igualmente cartografiar separadamente las
zonas de augengneis de los demás tipos de rocas, por consiguiente Urbani y Ostos
(1989), proponen volver al nombre original propuesto por Aguerrevere y Zuloaga
(1937) de Augengneis de Peña de Mora para referirse únicamente a los cuerpos
dispersos de augengneises y gneises de grano grueso.
Según Wehrmann (1972), estos gneises poseen en promedio la siguiente
mineralogía: cuarzo (35%), plagioclasa (albita - oligoclasa) (25%), microclino (20%),
muscovita (8%), epidoto (5%) y cantidades menores de biotita, clorita, granate, zircón
opaco y apatito.
Estudios estructurales de Ostos (1987a, 1987b) en las localidades de Peña de
Mora y Chichiriviche, revelan el carácter milonítico de gran parte de la unidad debido
a deformación en el régimen plástico. Estas texturas miloníticas se encuentran
típicamente desarrolladas hacia las zonas de cizalla, ocurriendo un cambio textural de
gneises gruesos con poco desarrollo de bandeamiento en las zonas alejadas a las
zonas de cizalla, a augengneises y gneises finos (milonitas) al acercarse y entrar en
dichas zonas. Los planos de cizalla son indicativos de un transporte tectónico desde el
noroeste hacia el sureste, el cual coincide con la dirección de las lineaciones
mineralógicas. Ostos (1990) indica que hay zonas esquistosas formadas por
cizallamiento del augengneis, siendo los augen reliquias de textura ígnea.
Estas rocas son cuerpos graníticos metamorfizados que han sufrido diferentes
grados de deformación. Aún cuando se carece de información concluyente al
respecto, se estima que algunos de estos cuerpos gnéisicos, pueden ser intrusivos
dentro de las rocas esquistosas adyacentes, pero debido al gran contraste mecánico
ante la deformación de ambos tipos de rocas (granito vs. metasedimentos pelíticos),
quizás en la mayoría de los casos, las rocas graníticas han sido emplazadas
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
tectónicamente dentro del esquisto adyacente. En algunos lugares (quebrada San
Julián, río Caruao, etc.) se observan estructuras migmatíticas sugiriendo que estas
rocas pueden haber alcanzado condiciones anatécticas y las relaciones iniciales
fueron borradas.
Urbani et al. (1989a) en la zona de El Cambur, estado Carabobo, señalan la
presencia de dos cuerpos separados, uno al oeste de El Cambur, y otro en el sector el
castaño y quebrada Los Bigotes, caracterizado por augengneises con núcleo de
feldespato potásico con ojos de 2,5 a 3 cm orientados paralelamente a la foliación,
con una matriz de granulometría que oscila entre 0,4 y 2 mm. Presenta la asociación
mineralógica de biotita y granate, sugerente de haber sido sometidos a un
metamorfismo de facies de la anfibolita epidótica, zona de la actinolita, con una
relación P/T baja. Por otra parte en la zona de La Sabana - Chirimena (Distrito
Federal y Miranda), Urbani et al. (1989b) señalan cuerpos en los ríos Caruao, La
Sabana, Aguas Calientes, Aricagua y Puerto de Chirimena, siendo augengneises con
buena foliación de color blanco grisáceo, de grano grueso, pero con tamaños
máximos de los ojos, variable según las localidades: río Caruao (3 cm), río La Sabana
(2,5 cm), río Aricagua (9 mm) y río Aguas Calientes (7 mm).
Espesor: No se ha medido ni estimado.
Extensión geográfica: Desde la localidad tipo el noroeste de Caracas, se ha
extendido hacia el oeste hasta la zona de El Cambur en el estado Carabobo, y hacia el
este hasta cerca de Chirimena en el estado Miranda.
Expresión topográfica: Por formar parte del Complejo Ávila que constituye
el núcleo de la Cordillera de la Costa, siempre aflora en zonas de topografía muy
abrupta y con grandes pendientes.
Contactos: En muchos casos los contactos son de fallas de ángulo alto con
unidades adyacentes. El contacto con el Esquisto de San Julián, cuando es visible se
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
muestra abrupto y en concordancia estructural, en otras ocasiones son gradacionales
con intercalaciones de ambos tipos de litologías. Los contactos con las rocas del
Complejo la Costa al norte (fases Nirgua, Antímano y Tacagua) son
predominantemente de fallas de corrimiento (Urbani y Ostos, 1989). En particular en
la localidad tipo, Ostos (1990) reconoce que esta unidad está sobrecorrida por un
klippe de la Fase Antímano.
Edad: Ostos et al. (1989) presentan una isocrona Rb - Sr de roca total que
corresponde a una edad de 1.560 ± 83 m.a., incluyendo muestras de la localidad tipo
y del río Chichiriviche. Kovach et al. (1979) presenta otra isocrona obtenida con tres
cantos rodados de gneises de la quebrada San Julián dando una edad de 220± 20 m.a.
Estos escasos y divergentes datos geocronológicos, impide mayor precisión en la
asignación de una edad a esta unidad, por tal motivo se ha sugerido una edad genérica
de Paleozoico - Precámbrico al Complejo Ávila, pero así mismo tiene implicaciones
que permiten sugerir una historia geológica bastante más compleja, probablemente el
protolito Precámbrico haya sufrido al menos un período de removilización en la
orogénesis de fines del Paleozoico, relacionada con la formación de Pangea (Urbani y
Ostos, 1989).
Correlación: Previamente Aguerrevere y Zuloaga (1937), Dengo (1951,
1953) y Wehrmann (1972) correlacionaron la Formación Peña de Mora al menos
parcialmente con la Formación Las Brisas, por el hecho de que los esquistos
circundantes a los augengneises se habían cartografiado como de esta última
formación. El reconocimiento a lo largo de toda la Cordillera de la Costa (Carabobo Miranda) de que dichos esquistos forman parte de otra unidad diferente (Esquistos de
San Julián), hace que esta correlación ya no sea válida. Por el contrario, la correlación
del Augengneis de Peña de Mora hay que hacerla con otros cuerpos de la misma
litología en la Cordillera, por ello la correlación propuesta por Bellizzia y Rodríguez
(1968) entre las rocas augengnéisicas de Peña de Mora con aquellas del Complejo de
Yaritagua parece adecuada, esta misma opinión es compartida por González de Juana
et al. (1980, p. 326).
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
II.2.2.3.- FORMACIÓN ANTIMANO
Consideraciones históricas: cronológicamente Aguerrevere y Zuloaga (1937)
las consideraron como parte de la Formación Las Mercedes, por su parte Dengo
(1947) la había identificado como las calizas de la fase Zenda de la Formación Las
Brisas y posteriormente en 1949 menciona por primera vez a la Formación Antímano,
designa la localidad tipo y la describe brevemente para elevarla a un rango
formacional en 1951.
Smith (1952) las consideraron como parte de la Formación Las Mercedes al
igual como Aguerrevere y Zuloaga lo hicieran en 1937. Mac Lachlan (1960), FeoCodecido (1962), Wehrmann (1972), González (1972) extienden esta unidad hacia
los estados Miranda, Aragua y Carabobo. González de Juana et al. (1980, p. 314) son
los primeros en interpretar que esta unidad probablemente "representa un horizonte
tectónico y no una unidad litoestratigráfica". Ostos et al. (1987), Navarro et al. (1988)
redefinen esta unidad como Fase Antímano, formando parte de su unidad litodémica
de corrimiento que denominan como Complejo la Costa, que reúne adicionalmente a
las fases Tacagua y Nirgua. Urbani y Ostos (1989) y Urbani et al. (1989) utilizan este
nombre en los mapas geológicos de la zona de Puerto Cruz a Macuto, Distrito
Federal, y El Palito-Morón-Valencia, estado Carabobo.
Localidad tipo: Dengo (1951) establece la localidad tipo a 0,5 km al norte de
Antímano, Distrito Federal (Hoja 6847, escala 1:100.000, Cartografía Nacional),
cuyos afloramientos hoy en día están totalmente cubiertos por el urbanismo de la
ciudad de Caracas. Muy buenos afloramientos aún están visibles en las canteras de la
quebrada Mamera, sin embargo las construcciones informales dificultan su acceso.
Descripción litológica: Dengo (1951) describe esta formación como un
mármol masivo de grano medio, color gris claro, con cristales de pirita, alternando
con capas de esquistos cuarzo micáceos, y asociadas con cuerpos concordantes de
rocas anfibólicas, algunas con estructuras de "boudinage". El mármol está formado de
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
un 85-95% de calcita, con cantidades menores de cuarzo detrítico, muscovita (2,5%),
grafito (2,5%) y pirita (2%).
Dengo (1950) describe con detalle las anfibolitas glaucofánicas de esta
formación, incluyendo análisis químicos, indica que los mármoles son rocas
estructuralmente competentes en relación a los esquistos que las rodean, pero
incompetentes en relación con las rocas anfibólicas, mostrando pliegues de flujo
alrededor de ellas y resultando así la estructura de "boudinage".
Schurmann (1950) igualmente estudia estas rocas glaucofánicas, presentando
un mapa detallado de los diversos tipos litológicos en el sector de Antímano y
Mamera.
En la región del Camino de los Españoles, Parque Nacional El Ávila, Ostos
(1981) describe su Unidad de esquisto cuarzo-muscovítico y mármol cuarcífero
equivalente a esta Fase, encontrando los siguientes tipos litológicos: esquisto cuarzomuscovítico, mármol y esquistos calcáreos, esquisto cuarzo-feldespático y
feldespático, cuarcita muscovítica-feldespática, epidocita y glaucofanita granatífera.
En la cartografía geológica de la zona de Puerto Cruz-Mamo, Talukdar y
Loureiro (1982) reconocen su Unidad de anfibolitas y mármoles, que posteriormente
Urbani y Ostos (1989) la denominan como Fase Antímano, allí ocurre la asociación
de anfibolita, mármol, esquisto calcáreo-muscovítico ± grafitoso, esquisto cuarzomuscovítico ± granatífero, esquisto cuarzo-muscovítico-graucofánico-granatífero.
En la zona de El Palito, estado Carabobo, Urbani et al. (1989) mencionan la
asociación de anfibolita granatífera-clinopiroxénixa, anfibolita granatífera, eclogita,
anfibolita epidótica-plagioclásica, mármol, cuarcita y esquisto cuarzo-plagioclásicomuscovítico.
Ostos (1990) describe algunas de las rocas máficas de esta fase aflorantes en
la sección Chichiriviche-Colonia Tovar, siendo anfibolita granatífera y esquisto
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
albítico-clorítico. La anfibolita tiene porfidoblastos de granate, mientras que el
esquisto los tiene de albita con sombras de presiones simétricas y bien desarrolladas.
Las asociaciones mineralógicas metamórficas indican un primer evento de alta
relación P/T en la facies de la eclogita, siendo impreso por un segundo evento
metámórfico de P/T intermedia en la facies de los esquistos verdes.
Urbani et al. (1997) estudian la mineralogía carbonática de los mármoles de
los afloramientos de la punta oeste de la bahía de Chichiriviche, Distrito Federal,
encontrando que carecen de dolomita, mientras que aquellos de Mamera lo presentan
en muy pocas muestras y en muy baja concentración. En los trabajos ya mencionados
de Ostos, Urbani y otros, el criterio para cartografiar esta Fase es la presencia de la
asociación de rocas anfibólicas con mármoles.
Espesor: Considerando a la foliación como plano de referencia, el espesor
aparente de esta unidad es de 40 m en la localidad tipo, según Dengo (1951),
disminuyendo hacia el este y oeste. Al sur de San Pedro, Smith (1952) indicó un
espesor aparente máximo de 300 m.
Extensión geográfica: Se han descrito afloramientos aislados desde la zona
de Antímano, hacia el oeste en San Pedro y hacia el este hasta La Florida
(afloramientos hoy cubiertos por el urbanismo de la ciudad de Caracas), continúa la
zona de afloramientos en una franja en el valle de la quebrada Tacagua, y de ahí hacia
el oeste como una franja entre Mamo, Carayaca y Tarma, Distrito Federal. Los
últimos afloramientos se han reconocido en la zona de El Palito, estado Carabobo.
Expresión topográfica: En las zonas donde afloran mármoles masivos y
gruesos se nota una topografía abrupta, con estructuras kársticas superficiales.
Contactos: Esta formación presenta contactos estructuralmente concordantes
con las formaciones adyacentes: Las Brisas y Las Mercedes. En la zona de Antímano
y Mamera, los lentes de mármoles y rocas anfibólicas, que alcanzan a veces grandes
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
dimensiones longitudinales, se hallan embutidos en esquistos de diversos tipos,
especialmente los correspondientes a la Formación Las Brisas (Cantisano, 1989).
Fósiles: Smith (1952, p. 357) señala que C. J. Maxwel y G. Dengo localizaron
fragmentos de conchas intensamente trituradas en las canteras de Antímano.
Edad: Ante la ausencia de fósiles y por su posición estratigráfica ha sido
propuesta de edad Mesozoico medio a superior. Según los modelos de evolución de la
Cordillera de la Costa de Ostos et al. (1987) y Navarro et al. (1989) se sugiere sea del
Cretácico.
Correlación: Bellizzia y Rodríguez (1968, 1976), González (1972) y
Wehrmann (1972) correlacionan esta unidad con la Fase Nirgua, mientras que Ostos
et al. (1987), Navarro et al. (1988) y Ostos (1990) la correlacionan con las fases
Tacagua y Nirgua, por conformar las tres fases la unidad litodémica que denominan
Complejo la Costa.
Paleoambientes: Maresch (1974), Talukdar y Loureiro (1982) y Beck (1985,
1986) postulan que las rocas anfibólicas de esta unidad se derivaron de basaltos
relacionados con un evento de "rifting" Mesozoico entre norte y sur América. Ostos
(1990) por sus estudios geoquímicos interpreta que las anfibolitas corresponden a
basaltos metamorfizados, que fueron formados en un ambiente de cordillera centro
oceánica.
II.2.2.4.- FORMACIÓN LAS MERCEDES
Consideraciones históricas: Originalmente fue referida por Aguerrevere y
Zuloaga (1937-a, b), quienes la denominan esquistos de Las Mercedes.
Posteriormente (1938-a, b), formalizan el nombre de la unidad con el nombre actual.
Ha sido descrita en diversas localidades de la Cordillera de la Costa sin mayores
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
cambios, dada su litología consecuentemente uniforme, por Dengo (1949), Smith
(1952), MacLachlan et al. (1960), Feo-Codecido (1962), Oxburgh (1965), Menéndez
(1965), Seiders (1965), Bellizzia y Rodríguez (1968), Morgan (1969), Urbani y
Quesada (1972), Asuaje (1972), Beck (1986), Cantisano (1989), Urbani et al. (1989a, b), Wehrmann (1972), González Silva (1972) y Rodríguez (1972).
Localidad tipo: Antigua hacienda las Mercedes al este de Caracas (Hoja esc.
1:100.000, Cartografía Nacional) hoy Urb. Las Mercedes. Debido al crecimiento del
urbanismo con la consecuente desaparición de los afloramientos de la localidad tipo,
Wehrmann (1972) propone trasladar la sección de referencia a la carretera PetareSanta Lucía, donde se expone la sección completa de la formación hasta su transición
con la Formación Chuspita. Igualmente hay una sección bien expuesta en la autopista
Caracas - Valencia, en el tramo Hoyo de la Puerta - Charallave.
Descripción litológica: Aguerrevere y Zuloaga (op. cit.), la definen como
esquistos principalmente calcáreos, con zonas grafitosas y localmente zonas
micáceas, de un tinte rosado, gris, con zonas blancas cuando frescas. Según
Wehrmann (1972) y la revisión de González de Juana et al. (1980, p. 317) la litología
predominante consiste en esquisto cuarzo - muscovítico - calcítico - grafitoso con
intercalaciones de mármol grafitoso en forma de lentes, que cuando alcanza gruesos
espesores se ha denominado "Caliza de Los Colorados". Las rocas presentan buena
foliación y grano de fino a medio, el color característico es el gris pardusco. La
mineralogía promedio consiste en cuarzo (40%) en cristales dispuestos en bandas con
la mica, muscovita (20%) en bandas lepidoblásticas a veces con clivaje crenulado,
calcita (23%) en cristales con maclas polisintéticas, grafito (5%), y cantidades
menores de clorita, óxidos de hierro, epidoto y ocasionalmente plagioclasa sódica. El
mármol intercalado con esquisto se presenta en capas delgadas usualmente
centimétricas a decimétricas, son de color gris azuloso, cuya mineralogía es casi en su
totalidad calcita, escasa dolomita y cantidades accesorias de cuarzo, muscovita,
grafito, pirita y óxidos de hierro. Oxburgh (op. cit.), incluye el conglomerado de
Charallave en la parte superior de Las Mercedes, y discrimina una facies oriental, de
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GEOLOGÍA REGIONAL
esquistos grafíticos, en su mayoría no calcáreos, granatíferos, con capas cuarcíticas de
20-70 cm. de espesor y esquistos micáceos granatíferos, donde las capas cuarzosas
están ausentes; y una facies occidental más arenosa, menos grafítica y carente de
capas calcáreas, con abundante granate, y filitas grafíticas de color variable,
predominantemente negro en la parte superior de la sección.
Wehrmann (op. cit.), menciona metaconglomerados en su base, esquistos cloríticos y
una sección en el tope, de filitas negras, poco metamorfizadas, con nódulos de
mármol negro, de grano muy fino, similares a los de las formaciones La Luna y
Querecual, sin hallar fósiles en ellos. Este mismo autor indica que el tope de la
formación se hace más cuarzosa y menos calcárea en su transición hacia la Formación
Chuspita. Seiders (op. cit.), menciona además, meta-areniscas puras, feldespáticas y
cuarzosas, de estratificación de grano variable, a veces gradada.
Aguerrevere y Zuloaga (op. cit.), incluyen dentro de la formación una zona
constituída por calizas oscuras y densas, en capas delgadas, interestratificadas con
capas de esquistos micáceos y arcillosos, todo intensamente plegado, que denominan
Fase Los Colorados, y que constituyen excelentes estratos guía. Dengo (op. cit.),
Seiders (op. cit.), y Wehrmann (op. cit.), no coinciden con esta formación, ya que
según ellos, tales calizas se encuentran en diferentes niveles en la sección.
Urbani et al. (1989-a) cartografían dos subunidades en la zona de Valencia - Mariara,
estado Carabobo. La mayoritaria de esquisto calcítico - grafitoso y mármol, con una
asociación mineralógica de cuarzo, calcita, muscovita, albita, grafito, clorita y
epidoto. Una segunda subunidad minoritaria de cuerpos de mármol masivo,
contentivo de calcita, cuarzo, muscovita, grafito y albita. En la zona de La Sabana Chirimena - Capaya, Distrito Federal y Miranda, Urbani et al. (1989-b) reconocen
cuatro unidades cartografiables, la primera y mayoritaria de esquisto grafitoso y
mármol, así como de mármol, de metaconglomerado cuarzo - feldespático - calcáreo,
de metaconglomerado y metaarenisca y de esquisto albítico - grafitoso. Todas estas
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GEOLOGÍA REGIONAL
rocas corresponden a un metamorfismo de bajo grado en la facies de los esquistos
verdes, zona de la clorita.
Característico de la formación, es la presencia de pirita, que al meteorizar, infunde
una coloración rosada a rojo ladrillo a la roca. Smith (op. cit.), opina que la
coloración rosada proviene de la meteorización de la sericita. Otra característica es la
extraordinaria proporción de vetas de calcita recristalizada, en colores blanco, pardo y
marrón, que ha sido identificada erróneamente como ankerita o siderita. En muestras
de sondeos profundos con muestras no meteorizadas, esta coloración marrón de la
calcita está ausente.
Muy poco se ha escrito sobre el ambiente en el cual se depositó la Formación las
Mercedes. Oxburgh (op. cit.), sugiere dos fuentes principales de sedimento: una
meridional, suplidora de cuarzo puro, y una occidental (Complejo de El Tinaco), para
el material cuarzo-feldespático más joven. Presenta un esquema transgresivo hacia el
sur, sobre una plataforma somera, en la cual se depositaron lutitas negras, con un
facies oriental más arenosa.
Talukdar y Loureiro (1982), sugieren un ambiente euxínico en una cuenca externa a
un arco volcánico. La estructura finamente laminada de la calizas, indica la
sedimentación en un ambiente pelágico, mientras que los escasos restos de fósiles
hallados, indican lo contrario.
Urbani et al. (1997) estudian mineralógicamente los mármoles de esta Formación en
la zona de Birongo, estado Miranda, encontrando que la dolomita se encuentra en
baja concentración predominando los mármoles calcíticos.
Extensión geográfica: En toda la extensión y en los flancos del macizo
central de la Cordillera de la Costa, entre Carenero, estado Miranda, hasta el estado
Cojedes.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Contactos: La mayoría de los autores hasta los años 70 han considerado el
contacto entre las formaciones Las Mercedes y Las Brisas, como concordantes y de
tipo sedimentario. Mientras que autores más recientes consideranque es de tipo
tectónico conservando paralelismo en la foliación en ambas unidades (e.g. González
de Juana et al., 1980, p. 318). En la zona de la Colonia Tovar, Ostos (1990, p. 55)
señala que el contacto entre el Augengneis de Peña de Mora y el Gneis de Colonia
Tovar, con la Formación Las Mercedes puede ser interpretado tanto como una falla
normal de bajo ángulo, como un contacto sedimentario original. El contacto con la
Formación Las Brisas lo interpreta como de corrimiento. En el estado Cojedes el
mismo autor, señala que la Peridotita de Tinaquillo está en contacto con la Formación
Las Mercedes a través del corrimiento de Manrique. Cantisano (1989) en su estudio
de la zona de Mamera, Distrito Federal, indica que el contacto entre las formaciones
Las Mercedes y Antímano corresponde a una falla de corrimiento. El contacto con la
Formación Chuspita parece ser transicional (Seiders, 1965).
Fósiles: Diversos hallazgos de fósiles han sido reportados en esta Formación:
Mackenzie (1966) encuentra un gasterópodo (Nerinea sp.); Oxburgh (1965)
encuentra un fragmento de amonite; Morgan (1969) halla fragmentos de pelecípodos,
gasterópodos y foraminíferos no identificables; Urbani (1972) reporta fragmentos de
equinoides; Furrer y Urbani (1973) indican foraminíferos de la familia Ophtalminidae
y otros fragmentos no identificables; Spena et al. (1977) reporta fragmentos de
pelecípodos, gasterópodos, equinoides y algas posiblemente de los géneros
Acicularia, Cyanophyta, Cayeuxia (véase revisión en Urbani, 1982, p. 78). La
mayoría de ellos sugerentes de un ambiente de aguas marinas poco profundas, con
fragmentos que parecen haber sido retrabajados por las olas.
Edad: Estas asociaciones de fósiles poco diagnósticas sólo permiten sugerir
una edad Mesozoica, sin diferenciar.
Correlación: Por su similitud óptica, se la presume equivalente a la
Formación Aroa, en el macizo occidental de la Cordillera de la Costa, y a la
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Formación Carúpano, en Oriente. Aguerrevere y Zuloaga (op. cit.), la correlacionan
tentativamente con la Formación La Luna y Querecual, inclusive Navarro et al.
(1988) afirman que la única diferencia entre las unidades litoestrátigráficas
"Formación Las Mercedes" y "Grupo Guayuta" lo constituye el metamorfismo, ya
que representan facies semejantes en tiempo y ambiente. También ha sido
correlacionada con la Unidad No-Feldespática del Grupo Juan Griego en la isla de
Margarita (Vignali, 1979). Wehrmann (op. cit.), se pronuncia por una similitud con
las formaciones La Luna y Querecual.
Paleoambientes: Talukdar y Loureiro (1982) sugieren un ambiente euxínico
en una cuenca externa a un arco volcánico, donde la estructura finamente laminada de
la caliza, indica la sedimentación en un ambiente pelágico. Navarro et al. (1988)
interpretan que esta formación se formó en un ambiente de facies pelágicas de
sedimentación oceánica en las cuencas del Caribe y de Altamira. Los escasos restos
de fósiles hallados indican ambientes más someros, pero es probable que sean
retrabajados y hayan sido acarreados a los ambientes pelágicos por corrientes de
turbidez.
II.2.2.5.- FORMACIÓN TACAGUA
Consideraciones históricas: Dengo (1951) designa con este nombre a una
secuencia alternante de esquisto calcáreo - grafitoso y esquisto epidótico, expuestos
en el valle de la quebrada de Tacagua, Distrito Federal, considerándola como parte de
su Grupo Caracas. Smith (1952) indica que algunas rocas de su Formación Paracotos
son similares a los de la Formación Tacagua. Aguerrevere (1960) la describe
brevemente. Feo-Codecido (1962) y Wehrmann (1972) la incluye en sus mapas de la
región central de la Cordillera de la Costa. Méndez y Navarro (1987) estudian
geoquímicamente sus rocas metavolcánicas.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Navarro et al. (1988) redefinen esta unidad como Fase Tacagua de su
Complejo La Costa, separándolo por consiguiente del Grupo Caracas. Siguiendo los
criterios de estos autores, Urbani y Ostos (1989) resumen la cartografía geológica de
la Cordillera de la Costa desde Puerto Cruz, Distrito Federal, hasta Cabo Codera,
estado Miranda, mostrando la franja de afloramientos de esta Fase. Giunta et al.
(1996) presentan interpretaciones sobre el origen de las rocas volcánicas basadas en
información geoquímica.
Localidad tipo: En la quebrada Tacagua, al norte de su intersección con la
quebrada Topo, Distrito Federal. Hoja 6847, escala 1:100.000, Cartografía Nacional.
Descripción litológica: En la localidad tipo y en los afloramientos en la zona
costera del litoral central, se encuentra una asociación de esquisto albítico - calcítico cuarzo - micáceo - grafitoso, de color gris oscuro, semejantes a aquellos descritos
como típicos de la Formación Las Mercedes, intercalados concordantemente con
esquisto de color verde claro, constituido por cuarzo, albita, minerales del grupo del
epidoto, así como clorita y muscovita, también se ha descrito que contienen
cantidades menores o trazas de hematita, calcita, pirita, anfíbol y granate;
adicionalmente se han reportado cuerpos de anfibolita epidótica (resumen en
González de Juana et al., 1980, p. 318). El carácter distintivo de esta fase es la
alternancia de rocas esquistosas grises oscuras y verdes claro.
Espesor: Dengo (1951) menciona un espesor -que debe considerarse como
aparente- de 150 a 200 m en la localidad tipo.
Extensión geográfica: La franja de afloramientos costeros de esta Fase se
extienden desde Oricao hasta Naiguatá, Distrito Federal, con un ancho medio de unos
2 km. En la zona de la localidad tipo, los afloramientos se extienden casi
paralelamente al valle de la quebrada Tacagua, desde Mamo hasta cerca del Viaducto
1 de la Autopista Caracas - La Guaira.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Contactos: Dengo (1951) menciona que en la localidad tipo se encuentra en
contacto transicional con la infrayacente Formación Las Mercedes, mientras que
Urbani y Ostos (1989) y Ostos (1990, p. 101) indican contactos tectónicos con
unidades tales como: Esquisto de San Julián y Augengneis de Peña de Mora del
Complejo Ávila, y con las fases Antímano y Nirgua del mismo Complejo La Costa.
Fósiles: Urbani et al. (1989) señalan una localidad fosilífera en la cuenca de la
quebrada Tacagua (69°59'25"W, 10°32'10"N), donde en una metaarenisca calcítica
aparecen fragmentos de moluscos (gasterópodos y bivalvos) y equinoides. El
gasterópodo mejor preservado tiene semejanza con el género Actaeonella, pero
debido a la imposibilidad de una identificación más segura, conservadoramente el
conjunto faunal puede considerarse como post-Paleozoico y más probablemente
Jurásico - Cretácico.
Edad: En base a los modelos tectónicos de Talukdar y Loureiro (1982) y
Navarro et al. (1988), y la escasa información paleontológica (Urbani et al., 1989)
disponible, es probable que esta Fase sea del Cretácico Tardío, pero a falta de más
información preferimos considerarla como Jurásico - Cretácico, sin diferenciar.
Correlación: Smith (1952) la consideró correlacionable con parte de su
Formación Paracotos. Igualmente las rocas verdes de Tacagua se han comparado
litológicamente con las metavolcánicas de la Formación Copey, en la península de
Araya - Paria.
Paleoambiente y geoquímica: En base a los modelos evolutivos de Talukdar
y Loureiro (1982) y Navarro et al. (1988), las características petrográficas y faunales
de la muestra estudiada por Urbani et al. (1989) sugieren una depositación en un
surco, formado dentro del prisma de acreción en un tiempo contemporáneo a la
colisión. Méndez y Navarro (1987) analizan los componentes mayoritarios y algunas
trazas de diversas muestras de las rocas verdes (metavolcánicas) de esta unidad, que
interpretados utilizando diversos diagramas de variación, sugieren un origen debido a
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
un magmatismo de afinidad subalcalina de tendencia toleítica, probablemente
formadas en un ambiente tectónico de dorsales y fondos oceánicos. Giunta et al.
(1996) deducen una afinidad MORB para el protolito basáltico de las rocas verdes de
Tacagua, en coincidencia con los autores anteriores.
II.2.2.6.- FORMACIÓN CHUSPITA
Consideraciones históricas: Seiders (1965) introduce este nombre para
designar una secuencia de meta-areniscas conglomeráticas y meta-grauvacas, con
filitas y mármoles oscuros, que afloran en la parte central del Estado Miranda,
considerándola como la unidad superior del Grupo Caracas. Asuaje (1972) cartografía
la unidad hacia el este y encuentra una localidad con amonites, que son estudiados
posteriormente por Macsotay (1972).
Localidad tipo: Río Chuspita, a unos 10 Km. al noroeste de Caucagua,
distrito Zamora del estado Miranda. (Hoja 6947, esc. 1:100.000, Cartografía
Nacional).
Descripción litológica: La Formación Chuspita consiste en meta-areniscas
puras, las cuales constituyen el 45% de la unidad, con filitas oscuras (50%) y
mármoles (5%). Las meta-areniscas son de color gris claro a gris oscuro, localmente
grafitosas y micáceas, pero cuyo constituyente principal es el cuarzo, con cantidad
mucho menor de feldespato. En algunas muestras se encuentra abundante muscovita
y clorita. Presentan estratificación gradada, principalmente en las capas de menos de
1 m de espesor, mientras que en las capas más gruesas, se hacen conglomeráticas con
fragmentos líticos como guijarros y peñas de hasta 25 cm. de diámetro, constituidos
por filitas, mármoles y meta-arenisca calcárea. Las filitas de color gris oscuro son
calcáreas y grafitosas. Los mármoles (calcíticos) se presentan en dos tipos: uno de
tipo litográfico formando capas delgadas de color gris oscuro a negro, con vetas de
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
calcita, mientras que el otro tipo es argiláceo. La foliación de los mármoles oscurece
la estratificación original. Además de los mármoles calcíticos (sus calizas), Seiders
(1965) menciona escasos mármoles dolomíticos, negros, grafitosos y finamente
cristalinos, formando capas delgadas y cortados por vetas de cuarzo y calcita.
Espesor: No es mencionado por los autores que la han estudiado.
Extensión geográfica: Los afloramientos de esta Formación ocupan una faja
de orientación este-oeste de unos 37 Km. de largo por 3 a 8 Km. de ancho, en la parte
centro-oriental del estado Miranda.
Contactos: El contacto con La Formación Las Mercedes infrayacente, es de
falla. En el tope, está también en contacto de falla con la Formación Urape, aunque
Seiders (1965) sugiere la posibilidad de "una gran discordancia no angular" entre
ambas formaciones.
Fósiles: En 1969 el geólogo L. Asuaje localiza en el cauce medio de la
quebrada Fofa, un afloramiento con fauna de amonites desenrollados, los cuales
fueron identificados por Macsotay (1972), como Hamites sp., Hemiptychoceras
gaultinum, Idiohamites sp. y Pseudohelicoceras sp.
Edad: La fauna de amonites indica una edad Cretácico Temprano (Albiense
superior) (Macsotay, 1972).
Correlación: En base al contenido faunal, Macsotay (1972) la correlaciona
con la Formación Carorita, del estado Lara y con la Formación Güinimita, de la
península de Paria.
Paleoambientes:
La
Formación
Chuspita
representa
condiciones
sedimentarias de plataforma continental poco profunda (González de Juana et al.,
1980: 338). Las filitas con su contenido de amonites, corresponden a una
sedimentación lenta en aguas relativamente tranquilas, mientras que las meta-
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
areniscas y meta-areniscas conglomeráticas, indicarían episodios de corrientes de
turbidez y deslizamientos submarinos, como lo sugiere la presencia de fragmentos
líticos relativamente grandes.
II.3.- METAMORFISMO
A continuación se exponen los diversos criterios establecidos por los
diferentes autores acerca del grado de metamorfismo que afectó al Complejo Basal de
Sebastopol y al Grupo Caracas, ya que la mayoría lo consideran correspondiente a la
facies de los esquistos verdes.
Dengo (1951) en su trabajo sobre la región de Caracas considera que las rocas
de la Formación Tacagua, las calizas de Antímano, los esquistos de Las Mercedes, la
parte superior de la Fase Zenda y parte del Complejo Basal de Sebastopol pertenecen
a la facies de los esquistos verdes ya que presentan asociaciones mineralogicas típicas
de la zona de la biotita y la clorita. Dengo señala además que posiblemente una
porción de la Formación Las Brisas pertenecen a las Facies de la anfibolitas
epidóticas; por otra parte señala que la formación Las Brisas en la parte norte de la
región de Caracas sufrió metamorfismo de la facie de la anfibolita; además considera
que los mármoles que se encuentran en la parte superior del Gneis de Peña de Mora
pertenece también a la facies de la anfibolita epidótica.
Dengo señala por otra parte que si, en términos generales, se considera al
esquisto de la Formación Las Brisas como una roca esencialmente isoquímica, los
cambios de facies que se han descrito indican que existe un aumento del grado de
metamorfismo del sur hacia el norte.
Seiders (1965) señala que el Grupo Caracas en Miranda Central ha sufrido
metamorfismo a una facies no más alta que la subfacies cuarzo-albita-muscovitaclorita de la facies de los esquistos verdes del metamorfismo regional.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Morgan (1969) considera que las facies mineralógicas reconocidas en la
Cordillera de la Costa y, más específicamente en la región de Valencia, son las
correspondientes a las facies de los esquistos verdes y de la anfibolita-epidóticas.
Werhmann (1972) incluye a las Formaciones Las Brisas, Antímano, Las Mercedes,
Tacagua y parcialmente el Complejo Basal Sebastopol dentro de las facies de los
esquistos verdes; comprendido entre la subfacies de la muscovita-clorita y del
epidoto-almandino.
Urbani y Quesada (1972) en la región de la Sabana D.F. concluyeron que las
rocas de Las Brisas, Peña de Mora y Las Mercedes sufrieron un metamorfismo
regional, de bajo grado correspondiente a la facies de los esquistos verdes, subfacies
cuarzo-albita-epidoto-biotita, teniendo localmente a la subfacies cuarzo-albitaepídoto-almandino.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
37
GEOLOGÍA REGIONAL
II.4.- GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL
En la mayor parte de los trabajos a escala regional realizados en la Cordillera
de la Costa se ha postulado que la foliación regional es esencialmente paralela a la
estratificación regional.
Dengo (1951) sostiene que en la región de Caracas, la foliación de las rocas
metamórficas es paralela, o esencialmente paralela a los planos de estratificación
original. Werhmann (1972) señala que si bien en muchos casos la opinión de Dengo
(1951) es correcta, se ha llegado a la conclusión de que no siempre es así y señala que
ha encontrado ejemplos claros donde la foliación es oblicua a la estratificación con un
ángulo de 25°. Por otra parte señala que, donde hay capas competentes tales como
calizas, cuarcitas y conglomerados, la foliación de los esquistos siempre es paralela a
ella.
II.4.1.- ESTRUCTURAS
II.4.1.1.- PLIEGUES
Dengo (1951) describe regionalmente tres grandes pliegues, el anticlinal de El
Junquito, el sinclinal de El Cementerio y el anticlinal de Baruta, señalando que son
estructuras simétricas amplias, cuyos ejes tienen una dirección general N60° a 70° E.
Vignali (1972) en su trabajo sobre rocas metamórficas de la Península de
Macanao (Edo. Nueva Esparta) señala que éstas fueron afectadas por tres períodos de
plegamientos. El primer período está caracterizado por pliegues con flancos
yuxtapuestos y la parte apical en forma punteaguada. El segundo período está
caracterizado por un intenso plegamiento isoclinal, la característica fundamental de
estos pliegues es que los planos de foliación son axiales o aproximadamente axiales al
plegamiento. El tercer período representa el plegamiento regional de la foliación.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
Werhmann (1972) en su trabajo sobre la región de Guatire – Colonia Tovar
menciona el anticlinal del Ávila, estructura dominante, el cual se extiende con rumbo
este-oeste a lo largo del macizo del mismo. En orden de importancia siguen los
anticlinales de Baruta y El Junquito y el sinclinal de El Cementerio dispuestos entre
ambos, y con rumbo aproximado N70°E. Esta discordancia estructural indica un
origen evidentemente distinto del macizo del Ávila, y refleja su comportamiento en
forma de una cuña empotrada. El movimiento de esta cuña limitada por fallas
longitudinales normales, es esencialmente epirogenético, posiblemente como
resultado del empuje de un magma profundo cuya apófisis asoman en el núcleo del
macizo. En cuanto a pliegues menores Werhmann señala pliegues tipo flexural
originados a gran profundidad bajo presiones confinantes y temperaturas altas. Por
otro lado señala que en las rocas esquistosas es común el pliegue producido por
escurrimiento entre capas y por flujo pasivo en las más dúctiles. También son
comunes los pliegues ptigmáticos, cuyo origen aún es incierto.
II.4.1.2.- FALLAS
Según M. Wehrmann (1972) y a escala regional, la Serranía del Litoral de la
Cordillera de la Costa es parte integrante del sistema de fallas longitudinales que se
extienden en sentido este-oeste desde la depresión de San Felipe hasta la isla de
Trinidad. Por su parte la falla de Tacagua-El Ávila, que cruza y se extiende al Sur del
macizo de El Ávila, y el Sistema de fallas de San Sebastián al norte, definen una
importante unidad fisiográfica, estructural y estratigráfica conocida como el
anticlinorio del Ávila.
Se reconocen tres tipos de fallas, dos longitudinales y la última transversal:
1.- Fallas oblicuas con rumbos N50°-80°E (fallas de gravedad y corrimiento) que se
originaron por esfuerzos de compresión dirigidos en sentido NNW-SSE que plegaron
los sedimentos del Grupo Caracas durante la Orogénesis Andina.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
39
GEOLOGÍA REGIONAL
2.- Fallas longitudinales con rumbo este-oeste (fallas de gravedad y de buzamiento
con movimiento posterior a lo largo del rumbo) representadas por el sistema de fallas
del Ávila, que se extienden en ambos flancos del macizo del Ávila con una
configuración escalonada en el flanco norte y buzamientos, por lo general entre 40° y
60°, en el mismo sentido. En la zona de fallas se puede observar un intenso
fracturamiento de las rocas. El origen de estas fallas se debe al empuje vertical
producido por el magma granítico que intrusionó la Cordillera de la Costa a fines del
Cretáceo Superior y durante el paroxismo de la Orogénesis Andina en el Eoceno. Los
últimos movimientos de este sistema señalan la existencia de una componente
horizontal dextral en dirección del rumbo. Estos últimos movimientos pueden estar
asociados con los esfuerzos que originaron el tercer tipo de fallas.
3.- El más joven de los tres sistemas es definido por las fallas transversales con
rumbo N60°W (fallas de rasgadura con movimientos verticales) y con persistente
paralelismo entre sí. En origen fueron fracturas de tensión como consecuencia de
esfuerzos cortantes con posterior desplazamiento lateral. Por tratarse de fracturas
abiertas los cursos de agua han erosionado con cierta facilidad el sustrato rocoso en
correspondencia de los planos de fallas borrando a la vez todo vestigio de los
mismos.
La interpretación de los patrones geo-estructurales dominantes en el área, es de gran
importancia ya que no solamente definen la red hidrográfica sino que también
permiten entender los mecanismos de ruptura que pueden haber actuado a lo largo y
ancho del litoral metropolitano.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
40
GEOLOGÍA REGIONAL
II.5.- GEOMORFOLOGÍA REGIONAL
El paisaje correspondiente de alvéolos (Valle de Sartenejas), valles-alvéolos
(Lagunita Country Club, La Pereza, etc.) y de cerros convexos parientes de las "meias
laranjas" brasileras (Topo Tiama en la Meseta de El Hatillo), tal como las espesas
formaciones superficiales de origen residual que acompañan tal modelado podrían
constituir una herencia morfo-climática atríbuída generalmente a climas tropicales
húmedos del Plioceno (TRICART, 1962; DOLLFUS O., 1973; KHOBZI y
USSELMAN, 1973; WEINGARTEN, 1977). Más al norte, AGUERREVERE y
ZULOAGA admiten que las cumbres achatadas de la cadena litoral, en los
alrededores de 2.000 m., tal como las formaciones correlativas (latosuelos, rodados de
cuarzo) identificados por ellos en el Ávila (Boca de Tigre, 1.900 m.) y por
HUMBOLDT debajo de la Silla de Caracas (2.200 m. ? , citado por M.A. VILA,
1947) constituye elementos tectónicamente desnivelados de la Meseta de Los Teques.
De esta manera, estos autores y el mismo HUMBOLDT plantean claramente el
problema, clave de la correlación de estos diversos aplanamientos y de la
diferenciación neotectónica del volumen montañoso actual de la Cordillera de la
Costa como consecuencia de movimientos de bloques verticales controlados por el
sistema de fallas del Ávila.
Un esfuerzo de correlación es tanto más indispensable ya que existen por lo
menos cuatro sistemas de aplanamientos escalonados en la cadena de la Colonia
Tovar, encima de la Meseta de Los Teques, y tres niveles de erosión de carácter
cíclico entre esta misma meseta y el lecho de la garganta del Guaire, entre el Valle de
Caracas y la cuenca del Tuy medio (SINGER,1975). De acuerdo a este esquema
nuevo, basado en el análisis geomorfológico de los diversos litotopos de
meteorización distribuídos en la cordillera, al sur de Caracas, los cuatro
aplanamientos superiores pertenecerían tentativamente al Neógeno y se desglosarían
en tres elementos de superficies de erosión S1, S2 y S3 (esta última desdoblada en
dos niveles San Antonio I y San Antonio II, ubicados entre 1.500 y 1.250 m.). Una
topografía de valles-alvéolos retoca la mayoría de estos niveles de erosión y ofrece, al
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
41
GEOLOGÍA REGIONAL
igual que en la meseta de Los Teques sitios naturales privilegiados aprovechados para
la instalación de embalses (La Pereza, Urb. Colinas de Carrizal, Agua Fría,
Petaquire).
De la superficie S1 quedan solamente testigos amesetados aislados y
elementos pequeños arraigados a más de 2.000 m. en la vecindad de la divisoria
constituida por la fila de la Colonia Tovar-El Junquito. Una topografía de cerros
testigos parecidos caracteriza ciertos tramos de la cadena litoral de Caracas, al este de
la Silla. En la primera fila, los remanentes de S1 y las superficies S2 se inclinan
fuertemente en dirección del litoral caribe y del lago de Valencia, lo que atestigua un
abombamiento pronunciado de la Cordillera a grosso modo transversal a esta NNWSSE. Hacia el mar, el hundimiento de las cumbres se acelera y pasa recurrentemente a
juegos de bloques fallados con disposiciones antitéticas que acompañan el
movimiento de torsión de la flexura litoral. Un abombamiento análogo, aunque de
menor amplitud y disimétrico afecta también la superficie tentada por la meseta de
Los Teques y sus diversos remanentes. Ella se inclina hacia el semi-graben de
Caracas donde la interrumpe la falla del Ávila, y bascula con mas fuerza hacia el
graben del Tuy, más deprimido.
No deja de sorprender el hecho de encontrar en la misma cordillera total de
Caracas restos de aplanamiento aislados pero característicos y aproximadamente
concordantes con los rangos de altura establecidos más al sur para las superficies S1,
S2, y S3. En el Ávila y al este de Naiguatá, estos se ubican con frecuencia alrededor
de 1.250 m., 1.500 y jamás de 2.000 m. Igualmente característicos son los alvéolos de
meteorización anfiteatro, que se observan, fuertemente suspendidos, en las cabeceras
de las quebradas y más abajo cerca de 1.650/1.850 m., 1.400/1.450 m. y 1.250/1.350
m., en ambos flancos de la cordillera. En razón de la estrechez de la cordillera litoral,
es difícil establecer una continuidad general entre estos diversos niveles de
paleoformas. Por otra parte, una correlación puramente geométrica entre éstas no es
recomendable, debido a la intensidad de las dislocaciones sufridas por la cadena
litoral hasta en el Cuaternario superior, como consecuencia de juegos de bloques
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
transcurrentes y verticales, ocurridos a raíz de la interferencia reciente y hasta actual
(RIAL, 1977) de fracturas NNW-SSE con el sistema de falla E-W del Ávila y de
Macuto, más antiguo (SINGER, 1977). Ejemplos de violentas deformaciones se
observan así en el alvéolo tectonizado de Galipán y en las gradas del flanco sur del
Ávila, debido a la rotación de bloques hundidos. Por tal razón, el establecimiento de
un esquema de correlación coherente de estos diversos aplanamientos con las
superficies de erosión de la región de Los Teques es todavía prematuro.
La heterogeneidad de estos materiales, tanto litológica como granulométrica,
la proporción notoria de arcillas en la matriz (10 %), la litocromía rojiza/morada
frecuente de los sedimentos, la presencia de vetas de yeso y de horizontes de
carbonatos parecen indicar condiciones morfogenéticas de tipo semiárido con
escurrimientos en manto favorables para la realización de aplanamientos a partir de
mecanismos de pediplanación (TRICART, 1970).
Posibilidades adicionales de reconstitución morfo-cronológica de estos
aplanamientos se encuentran en los depósitos aluviales acumulados a lo largo de las
redes de drenaje antiguas constituidas por los sistemas de valles-alvéolos excavados
en las superficies de erosión S1 y S3, posteriormente a la elaboración de éstas. Por
ejemplo, restos de terrazas antiguas han sido señaladas por los geólogos de la
"Technical Misssion of the New Caracas Aqueduct" (Cuarto Acueducto de Caracas)
en el vaso del embalse de Agua Fría (LOPEZ y GONZALEZ DE JUANA, 1946).
Mantos de arcillas blancas arenosas, de interés comercial alternan con rodados de
cuarzo en los alvéologos de la Boyera, de El Hatillo (SCHWARCK, 1949), y de Los
Teques. Con respecto a la edad de los niveles de erosión cíclicos inferiores
escalonados entre 1.100 y 550 m., se pueden buscar elementos de correlación en las
cuevas cavadas por el Guaire en las calizas de la garganta de El Encantado, donde se
encontrarían aluviones antiguos de este río con restos de fauna cuaternaria (URBANI,
F., comunicación personal, 1976). En el primer de estos tres niveles (Los Teques II)
siguen manifestándose los rasgos poligénicos característicos del modelado de las
superficies más altas, como consecuencia de oscilaciones paleoclimáticas
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
sucesivamente secas y húmedas. En los niveles posteriores, la morfología "madura"
de alvéolos tropicales húmedos está reemplazada por rampas y planadas de erosión
con importantes revestimientos de caliche. La elaboración del último nivel cíclico
está seguida de un profundo encajamiento de la red de drenaje vinculado con el
último paroxismo de surrección de la Cordillera de la Costa.
De una manera general es el movimiento de surrección de la Cordillera de la
Costa desde el Neógeno, que explica el escalonamiento del conjunto de los
aplanamientos analizados y de los litotopos de meteorización correspondientes
(SINGER, 1975). Tal dispositivo traduce el ritmo de la evolución geomorfológica
regional conforme al juego combinado de las pulsaciones tectónicas y de las
oscilaciones húmedas y secas del clima.
La elaboración de la extensa superficie de Los Teques y la génesis de las
profundas alteraciones ferralíticas que la caracterizan parecen aprovechar un período
de detenimiento relativo de la surrección de la cordillera, intercalado entre dos
períodos de deformaciones más intensas. El primer período, de edad pre-Pliocena
(Mio-Pliocena?) conduce al encajamiento de los niveles de erosión más altos de la
Cordillera, S1, y S2, y al abombamiento de éstos hacia las áreas en curso de
subsidencia (graben del Tuy, Barlovento, Lago de Valencia, litoral caribe); el
segundo paroxismo, hacia finales del Plioceno y principios del Cuaternario (PlioVillafranquiense?) acentúa la deformación en bóveda de la Cordillera de la Costa y se
acompaña de movimientos de bloques diferenciales que parecen iniciar la subsidencia
de los graben de Guatire-Guarenas y de Caracas. Una aridificación del clima
interfiere con las deformaciones tectónicas de este período y se traduce por una crisis
morfogenética de gran proporción responsable de la desorganización de la red de
drenaje pliocena en la superficie S3 a partir de mecanismos de antecedencia y de
fenómenos de captura, a veces cársticos. Ellos explican las gargantas epigénicas de la
quebrada Tacagua en el horst de Boquerón (DENGO, 1950), y del río Guaire y varios
de sus tributarios a través del anticlinal de Baruta, en Sebastopol, en Turmerito y La
Mariposa, en Las Minas de la Trinidad y en El Encantado. Estas gargantas parecen
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
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GEOLOGÍA REGIONAL
abrir brechas en una antigua divisoria pliocena, de génesis apalachiana, cuyos
remanentes se observan alineados en el eje del mismo anticlinal, por encima de la
meseta poligénica de Los Teques (Fila de San Pedro, Altos de Pipe, El Volcán, Cerro
Guanasmita en la Fila de Mariches). En la Meseta, volúmenes considerables de
detrítos de origen residual, ricos en arcillas caoliníticas y en guijarros de cuarzo,
vienen a acumularse en las cubetas palustres de los Valles-Alvéolos pliocenos
(depósitos de La Boyera, de El Hatillo, de Los Teques) y son arrastrados en dirección
de las fosas subsidentes vecinas (depósitos de las Formaciones Tuy y Guatire,
depósitos de Catia, San Bernardino, Boleíta en el valle-álvéolo tectonizado de
Caracas) y hasta el litoral caribe (depósitos del Grupo Cabo Blanco). Todos estos
depósitos se encuentran deformados como consecuencia de la persistencia de juegos
de bloques tectónicos durante el Cuaternario. Los efectos de esta crisis morfogenética
Plio-Cuaternaria se aprecian también en Los Andes Venezolanos (TRICART, 1962;
GIEGENGACK, 1977; MURPHY, 1977) y colombianos (TRICART y al., 1969;
KHOBZI y USSELMAN, 1973). En la Cordillera de la Costa como en Los Andes, las
facies frecuentemente finas, arcillo- arenosas, de los depósitos correlativos de este
período, se deben a la concentración del trabajo de la erosión en el espesor de los
mantos de descomposición neógenos. De esta manera, tales sedimentos contrastan
fuertemente con las formaciones posteriores del Cuaternario, mucho más
heterogéneas, y con facies, a veces, sismoclástica (TRICART, et al., 1969) y
sismolacustre (MUÑOZ y SINGER, 1977), como es el caso todavía en el Holoceno
reciente del Valle de Caracas, y antes (SINGER, 1977).
Profundas huellas de esta morfogénesis Plio-Cuatenaria y Pleistocena se
observan en modelado de la región de Caracas, debajo de 1.000 y 1.200 m., como
consecuencia de la vigorosa disección de la meseta de Los Teques, en particular hacia
el sur en razón del carácter más temprano de la erosión regresiva procedente del
graben más deprimido del Tuy. Desde el lindero Norte de la "Zona Protectora " de
Caracas por ejemplo, ubicado en la orilla de la meseta, es espectacular el contraste
que se presenta entre el modelado de disección áspero excavado en la vertiente del
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
45
GEOLOGÍA REGIONAL
Tuy y el paisaje de laderas suaves de los mantos de descomposición de la superficie
poligénica pliocena. Este mismo contraste, de origen litológico, se observa en la
vertiente de Caracas, aunque de manera más discreta debido al menor desarrollo de
los esquistos de la Formación Las Mercedes, relativamente impermeables en el estado
alterado, a la diferencia de los materiales acuíferos originados por la descomposición
de las meta-areniscas y esquistos cuarzo-micáceos de la Formación Las Brisas. Tal
diferencia de potencial morfogénetico constituye una explicación general de la
ubicación de los relieves residuales más importantes de la región en los volúmenes
globales resistentes constituidos por los afloramientos de la Formación Las Brisas, y
de la excavación más enérgica de los volúmenes blandos constituidos por los de la
Formación Las Mercedes.
Se explica en particular de esta manera, la existencia de remanentes de
divisorias antiguas (pre-Pliocenas y Pliocenas) de apariencia apalachiana, en los topes
truncados de los anticlinales de El Junquito y de Baruta nivelados por las superficies
S1, S2 y S3. El papel de las filas residuales de la Formación Las Brisas como línea de
divorcio hidrográfica, desde el Neógeno está realizado por el retroceso reciente, PlioCuaternario y Cuaternario, de las cabeceras del Guaire y de los afluentes del Tuy
medio en dirección de la divisoria pliocena confundida, en ciertos tramos, con la
divisoria actual (alvéolos del Valle de Sartaneja y del Hatillo). Tal retroceso conduce
a la degradación del modelado de alvéolos, reducido por una inversión de relieve
progresiva, a un sistema de rampas disecadas convergentes alvéolos de Prados del
Este, Cumbres de Curumo, La Boyera) y luego, de hombreras horizontales que orillan
el flanco de los cerros (Los Ocumitos, Las Mayas en Tazón).
La profundización Plio-Cuaternaria de las quebradas en los niveles de
aplanamiento más recientes (Los Teques I, Los Teques II) se acompaña también de
una erosión diferencial, de tipo apalachiana, que aprovecha los contrastes de dureza
litofaciales de las rocas, en las estructuras geológicas. Esto explica por ejemplo la
calidad excepcional de la expresión morfo-estructural de los pliegues de la cordillera
bastante abiertos, de generación f2, en el paisaje del área metropolitana: sinclinal
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
46
GEOLOGÍA REGIONAL
colgado de El Valle, cresta interna del flanco norte del anticlinal vaciado de Baruta en
El Peñón, etc. Este mismo proceso de disección diferencial explica la génesis de
formas cársticas tales como las torrecillas de los Morros de la Guairita (SINGER,
1972) y del Peñón de Lira en El Encantado.
La estabilidad a escala geológica, de los relieves residuales desarrollados en
los materiales alterados de la Formación Las Brisas contrasta singularmente con el
potencial de inestabilidad actual muy elevado de las laderas inscritas en los suelos
residuales muy espesos elaborados desde el Neógeno en estos a partir de un proceso
de meteorización acumulativo. Encima de 1.000-1.200 m. estas formaciones
superficiales opacan los contrastes litológicos intra e interformacionales, de tal
manera que el conocimiento de ellas reviste un papel de primera importancia para la
evaluación de las condiciones geotécnicas de los terrenos, en comparación con las
influencias esencialmente indirectas ejercidas por los sustratos rocosos no
meteorizados definidos por los mapas geológicos convencionales.
En términos globales, los terrenos correspondientes a los litotipos de
meteorización superiores a 1.000/1.200 m. constituyen por orden de importancia, la
segunda zona de riesgo geológico del Área Metropolitana de Caracas, después de los
faldeos de la Cordillera litoral; en efecto, estos faldeos se encuentran sometidos a la
acción recurrente de flujos de escombros torrenciales de incidencia catastrófica y
susceptibles, a veces, de tener un origen sísmico (SINGER, 1974, 1977).
Deslizamientos como los de Corrales de Piedra en Las Adjuntas o de la Urb. El Cují
en La Mariposa justifican el rango de importancia atribuido a los primeros terrenos
debido precisamente a la importancia de los riesgos de inestabilidad derivados de los
movimientos del suelo y subsuelo. Tal potencial de inestabilidad puede sorprender en
unos materiales que pueden soportar en condiciones naturales bajo bosque, laderas
con pendientes de equilibrio del orden de 40 a 50 grados, debido a la porosidad de los
productos de descomposición, arcillo-arenosos. La explicación de esta contradicción
puede radicar en dos causas: 1) el incremento regional continuo del valor de las
pendientes como consecuencia de la erosión regresiva muy violenta de las quebradas,
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
47
GEOLOGÍA REGIONAL
a raíz de la surrección reciente de la Cordillera de la Costa. Se puede pensar de esta
manera que la mayoría de estas laderas se encuentran en condiciones de desequilibrio
potencial; se observa efectivamente una concentración de los movimientos de masa
en las zonas de cabecera, donde la saturación es mayor; 2) un desmejoramiento del
comportamiento mecánico de la parte superficial más arcillosa de los perfiles de
meteorización ligado a la erradicación de la cobertura boscosa en equilibrio con ellos,
y bajo el efecto de ciclos de desecación mucho más frecuentes y profundos que antes.
Estos ciclos afectarían sobre todo las arcillas illíticas caracterizadas por coeficientes
de retracción más elevados y concentradas en las laderas (TRICART, 1974). Se
iniciaría de esta manera un proceso de degradación geomorfológica de los terrenos
acompañado de la aparición de grietas de "suffosión" (PAVLOV, 1898, in
LETOURNEUR y MICHEL, 1971) favoreciendo la saturación local de los
materiales. El incremento de los movimientos de masa solifluídales parece
combinarse con una concentración de la escorrentía superficial a partir de la
conversión de las grietas de suffosion en zanjas de erosión e incluso en cárcavas
(Altos de Pipe, El Placer).
En los litotipos de meteorización inferiores a 1.000-1.200 m. los perfiles de
suelos residuales, descabezados por la escorrentía difusa, muestran espesores menores
de material descompuesto. En la Formación Las Mercedes, estas se distribuyen de
acuerdo a toposecuencias irregulares, que parecen controladas por las condiciones
estructurales y el patrón de disección. Se observa efectivamente, que los perfiles
transversales se tornan más espesos en dirección del fondo de las quebradas y más
delgados hacia los estribos como consecuencia de una eficacia más grande la
escorrentía encima de estos últimos. Los suelos ferruginosos impermeables de la
parte superficial de los perfiles explican la torrencialidad elevada que se observa en
las colinas disecadas de la Formación Las Mercedes. En las facies calcáreas y en las
exposiciones secas (E, SE) éstas se encuentran todavía incrementadas por suelos de
caliche subsuperficiales producidas por encontramientos laminares en la base de la
zona 1 B y que epigenizan de manera difusa el horizonte de saprolito infrayacente
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
48
GEOLOGÍA REGIONAL
cuando éste está conservado. Tal torrencialidad se aprecia también en la presencia
general de complejos coluvio-torrenciales edafizados cuaternarios formando mantos
espesos al pie de las colinas. (El Pinar, Las Mercedes). Se confirma por lo tanto la
existencia de un potencial morfogenético más elevado en la Formación Las
Mercedes, asociado de manera correlativa con la existencia de condiciones geotécnias
globalmente más favorables que en los litotipos de meteorización superiores a
1.200m.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
49
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
CAPÍTULO III
GEOGRAFÍA FÍSICA
LOCAL
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
III.- GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
III.1.- FISIOGRAFÍA
Desde el punto de vista fisiográfico, la zona a estudiar se identifica por dos
rasgos topográficos resaltantes como lo son: Colinas y Valles. La depresión principal
con un rumbo aproximado de N50°E divide la zona en dos partes aproximadamente
iguales, ocupando el 15% de la zona.
COLINAS
Hacia la zona centro occidental se registran las topoformas con mayores cotas,
llegando a alcanzar hasta los 1700 m.s.n.m. en donde se destaca la Montaña La Gata
(ver figura 2).
Figura 2.- Vista aérea de
Montaña La Gata y Fila El
Zamural. Tomado de
Google earth, 2006.
Montaña La Gata
Fila El Zamural
En el sector centro-occidental se observa una colina alargada con tope
amesetado, laderas simétricas y semiconvexas correspondiente a la fila El Zamural
(ver figura 2), presentando una red de drenaje pseudo-paralelos, el cual genera valles
51
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
estrechos y su escorrentía finaliza hacia el norte en la quebrada Los Bambúes y hacia
el sur en el Río Guaire.
Al sur de la fila El Zamural, desde las adjuntas hasta Montaña La Gata, nace
una fila principal alargada con rumbo aproximado de N45°W que corresponde
topográficamente con una colina alargada con topes amesetados poco escotada, con
laderas semi-convexas muy disectadas por una red de drenaje dendrítico tanto al sur
(Macarao) como al norte siendo este último sentido donde el drenaje escurre a la
quebrada Los Bambúes la cual a su vez descargará sus aguas al Río Guaire. Desde
Montaña La Gata hasta la urbanización Luis Hurtado, esta fila cambia de rumbo a
N60°E aproximadamente presentando también una red de drenaje dendrítico al sur,
descargando sus aguas a la quebrada Los Bambúes y ésta posteriormente al Río
Guaire.
Hacia el sur, específicamente en el sector Caricuao, se identifican dos filas
alargadas con un rumbo aproximado de N60°W, entre ellas se localiza una depresión
correspondiente al valle por el cual fluyen las aguas de la quebrada Caricuao. Para la
primera fila, al sur de la quebrada Caricuao (Ver figura 3 A), se observan laderas
semi-cóncavas muy disectadas por una red de drenajes dendríticos, tanto al norte
como al sur. Por otra parte, la segunda fila al norte de la quebrada Caricuao (Ver
figura 3 B), se presenta una colina alargada de tope amesetado con alturas máximas
de hasta 1.400 m.s.n.m.; presenta laderas de baja pendiente semi-cóncavas con un
drenaje pseudo-paralelo hacia el sur, y hacia el norte laderas convexas con presencia
de drenaje dendrítico que descarga sus aguas al Río Guaire a través de la quebrada La
Luz.
52
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
A
B
Quebrada Caricuao
Quebrada Caricuao
Figura 3 Vista Aérea de La Quebrada Caricuao. Tomado de Google earth, 2006.
Hacia el centro del área en estudio, al norte y al sur del Río Guaire, se
observan filas pseudo-paralelas con rumbos aproximados de N60°E y con líneas de
cresta que poseen un declive hacia el este; la fila norte presenta un drenaje dendrítico
de muy poca frecuencia hacia la ladera sur, cuya pendiente es aproximadamente de
8°; un poco más al este su ladera sur aumenta de pendiente a 18°, por las cuales
circulan pequeños cursos de aguas que son recibidos por un tributario del Río Guaire
, el cual forma una pequeña depresión en la localidad de El Algodonal (ver Figura 4
A); más al este, hasta llegar a San Juan la fila cambia a una orientación de N80°E con
una pendiente de 22°.
En cuanto a la zona sur, se observa una serie de filas dispuestas
paralelamente, la primera ubicada al oeste de La Vega presenta un drenaje de tipo
pseudo-paralelo poco abundante en su ladera norte la cual tiene una ladera
aproximada de 20°; la segunda fila ubicada al sur de La Vega presenta un drenaje de
tipo dendrítico de poca intensidad en su ladera norte, el cual descarga sus aguas a un
tributario del Río Guaire formando una pequeña depresión en la localidad de La Vega
(ver Figura 4 B).
53
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
A
B
Figura 4.- Vista Aérea de El Algodonal (A) y de La Vega (B). Tomado de Google Earth, 2006.
VALLE
La depresión principal presenta un rumbo promedio de N45°E con una altura
máxima de 965 m.s.n.m al suroeste y una altura mínima de 838 m.s.n.m. al noreste
del valle.
En cuanto a la extensión, el oeste del Valle de Caracas se presenta
relativamente estrecho hacia lo que corresponde el suroeste de la zona en estudio, con
una amplitud promedio de 200 m. y más al centro con una amplitud promedio de
100m., la cual a medida que se sigue la trayectoria del curso de agua principal
comienza a extenderse lateralmente, pasando de los 100 m anteriormente descritos
hasta valores cercanos a los 1500 m al sector de El Paraíso (Ver Figura 5).
54
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
A
B
Figura 5.- Vista Aérea del Oeste Valle de Caracas. Tomado de Google earth, 2006.
III.2.- CLIMA
El clima de Caracas es de tipo intertropical de montaña con precipitaciones
que varían entre los 800 y 1.000 mm anuales, en la propia ciudad; la temperatura
media anual es de aproximadamente de 20,8ºC, siendo la media del mes más frío
(enero) de 19,3° C y la media del mes más cálido (mayo) de 21,8° C, lo que da una
amplitud térmica anual escasa, de casi 3ºC. Las amplitudes térmicas diarias en
cambio son mucho mayores (más de 10ºC), con máximas diurnas casi siempre
superiores a 30ºC y que raras veces descienden a menos de 25ºC. En los meses de
diciembre y enero aparecen abundantes nieblas, además de un repentino descenso de
temperaturas nocturnas que llegan a bajar hasta los 15ºC. Además, las temperaturas
nocturnas en cualquier época del año no suelen superar los 20ºC. En Caracas pueden
presentarse, aunque en raras ocasiones, tormentas de granizo mientras que las
tormentas eléctricas son mucho más frecuentes, especialmente entre junio y octubre,
por su condición de valle cerrado.
55
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
III.3.- BALANCE HÍDRICO
El Balance Hídrico se refiere al cálculo de la disponibilidad existente del agua
recibida por el suelo y la pérdida de ésta debida a la evapotranspiración o
evaporación. El fin primordial del cálculo es el de alcanzar por medio de
estimaciones el valor de la disposición de agua en el suelo. Existen diversos tipos de
balances, según el período de tiempo para el cual se efectúan los cálculos y el uso que
se dará al mismo. El Balance Hídrico permite conocer la relación existente entre la
evapotranspiración real, la precipitación, la escorrentía y el almacenamiento
superficial subterráneo o infiltración.
Para el cálculo del Balance Hídrico de la zona de estudio se utilizaron los
valores de precipitación y temperatura suministrados por el Observatorio Cajigal
correspondientes al período 1960-1980; de los cuales se obtuvieron los valores
mensuales promedios para este intervalo de tiempo.
Utilizando el sistema de clasificación climática de Thornthwaite (1955), se
obtuvieron los siguientes parámetros:
Latitud = 10° 30´ N
Longitud = 66° 55´ W
Altitud = 1.035 m.
Capacidad máxima de almacenamiento = 350 mm.
56
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Meses/
Ener
Param.
.
Febr
Mar.
Abr.
May
Jun.
Julio
Agos
Sep.
Oct.
Nov.
Dic.
Temp.(°C)
Im (mm)
Total
19.3
19.6
20.3
21.2
21.8
21.6
21.3
21.4
21.7
21.4
20.6
19.8
20.8
7.7
7.9
8.4
8.9
9.3
9.2
8.9
9.1
9.2
9.0
8.5
8.0
104.2
Etp (mm)
2.1
2.3
2.5
2.7
2.9
2.8
2.7
2.8
2.8
2.7
2.5
2.3
FF (mm)
30
27.3
30.9
30.9
32.4
31.8
32.4
32.1
30.6
30.6
29.4
29.7
ETP (mm)
65
62
76
84
94
90
88
89
87
84
75
69
963
PP (mm)
15
11
9
44
81
102
103
110
100
114
75
38
800
PP-ETP
-50
-51
-67
-40
-13
12
15
21
13
30
0
31
-161
ALM. (mm)
10
0
0
0
0
12
27
48
61
91
91
60
D.ALM.
-50
-10
0
0
0
12
15
21
13
30
0
-31
0
ETA (mm)
65
21
9
44
81
90
88
89
87
84
75
69
802
DEF. (mm)
0
41
67
40
13
0
0
0
0
0
0
0
161
EXC. (mm)
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
(mm)
(mm)
Tabla 1.- Balance Hídrico
Im
-16.72
Ih
0
Is
27.74
C1 d B´3 a´
Sub-húmedo a seco con poco o ningún exceso de agua.
Mesotérmico Templado Calido
Tabla 2.- Índices y clasificación climática
Donde:
ALM. = Almacenamiento
Im. = Índice Hídrico
ETA = Exceso de agua
etp = Evapotranspiración potencial no
DEF. = Deficiencia
ajustada
EXC. = Exceso
FF = Factor de ajuste de la etp diaria
Im = Índice Hídrico
ETP = Evapotranspiración potencial
Ih = Índice de Humedad
PP = Precipitación mensual
Is = Tipo Climático
Temp. = Temperatura
57
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Los valores de precipitación en el Valle de Caracas varían de 800 mm. en el
centro del valle, a 1000 mm. en la parte baja de la cuenca y 1400 mm. en las
cabeceras. El promedio de la cuenca es de 990 mm. (Wiese, 1959).
Como ya se conoce, el Valle de Caracas presenta dos períodos, uno lluvioso y
otro seco. El período seco va desde diciembre hasta abril, y el lluvioso desde mayo
hasta noviembre (ver figura 6). Durante el período lluvioso la zona está expuesta a
tormentas de tipo convectivas que cubren un área relativamente pequeña del valle.
Sin embargo, en los últimos años se han presentado lluvias de alta intensidad en el
período seco.
Variación promedio de la precipitación en el período
1980
1960-
Precipitación (mm)
120
100
80
60
40
20
0
Enero
Marzo
Mayo
Julio
Sep.
Novie.
Meses
Figura 6.- Variación promedio de la Precipitación en el
Período 1960-1980. Según datos suministrados por el
Observatorio Cajigal
58
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
En el último mes de la temporada lluviosa es en el que se acumula la mayor
cantidad de agua en el suelo (almacenamiento), en este caso, como se observa en la
tabla 5.1, es de 91 mm. correspondiente al mes de octubre, debido a que la
precipitación para ese mes fue de 114 mm., mayor al consumo exigido por
evapotranspiración potencial para ese mes, por lo tanto, a finales de noviembre
cuando comienza el período de sequía el almacenamiento satisfacerá
los
requerimientos de agua de los primeros meses de sequía.
En lo que respecta a la recarga del acuífero, según el Balance Hídrico, los
meses propicios para que esto ocurra son justamente los meses en los cuales se supera
el déficit producido por la evapotranspiración, es decir, el acuífero comienza a
almacenar agua a partir de junio, un mes después del comienzo del período lluvioso,
indicando una acumulación de agua en el reservorio suficiente para satisfacer
descargas tantos naturales como artificiales en los posteriores meses de sequías.
Se deben tomar en cuenta dos variables fundamentales que pueden cambiar la
situación descrita en el párrafo anterior: la primera se refiere a la disminución de las
precipitaciones promedios que extenderán los meses de sequía a causa de un posible
fenómeno metereológico extraordinario, y la segunda el aumento de escorrentía
superficial a causa de la eliminación de la vegetación por deforestación y la
consecuente disminución de la infiltración. Ambos acontecimientos producirían una
situación no deseada, en la cual sumada con la descarga artificial por explotación
intensiva no controlada, anularía la descarga natural provocando la extracción de las
reservas muertas del reservorio (Ver Figura 7).
59
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
RECARGA NATURAL
RECARGA NATURAL
NIVEL FREÁTICO MÁXIMO
BOMBEO
NIVEL FREÁTICO MÁXIMO
RECARGA NATURAL
BOMBEO
NIVEL FREÁTICO MÁXIMO
RESERVAS UTILIZABLES
UNA SOLA VEZ
NIVEL FREÁTICO MÍNIMO
RESERVAS UTILIZABLES
UNA SOLA VEZ
RESERVAS VIVAS
RESERVAS VIVAS
DESCARGA
NATURAL
RESERVAS MUERTAS
NO HAY
DESCARGA
NATURAL
RESERVAS MUERTAS
A
B
DESCARGA
NATURAL
RESERVAS MUERTAS
C
Figura 7. Representación esquemática de las reservas de un acuífero. A: Situación inicial antes de
iniciarse la explotación del acuífero. B: Situación no deseada de explotación intensiva no controlada
que anula la descarga natural. C: Situación ideal de una explotación intensiva controlada que no
anula la descarga natural. Tomado de Mandel
Es importante destacar que en la zona de estudio la recarga del acuífero se da
fundamentalmente por la infiltración del agua de precipitación en las laderas
marginales al valle, así como también por la infiltración en macizos rocosos
fracturados y meteorizados. Los valores de recarga lateral están por el orden de los
320 l/seg. según el Ministerio del Ambiente, se puede llegar a inferir que dicho valor
ha sido afectado por el desarrollo urbanístico de El Valle debido a que gran parte del
agua que precipita no infiltra sino que escurre hacia alcantarillados que
posteriormente llevan el agua al Río Guaire.
Otro factor importante en la recarga del acuífero es la fuga de las redes de
acueductos presentes en el Valle de Caracas, según estimaciones pueden llegar a 900
l/seg. valor considerable que incrementaría las reservas probables del acuífero.
60
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
III.4.- VEGETACIÓN
Según el Instituto de Estudios Regionales de Urbanismo (1979), la zona oeste
del Valle de Caracas se caracteriza por presentar cinco unidades homogéneas de
vegetación (Ver figura 8):
•
Sabana (S): Zona de vegetación de aspecto liso y homogéneo debido a la
dominancia de gramíneas, en donde no es visible en la fotografía aérea la
existencia de individuos en la masa predominante.
•
Matorral (M): Zona de vegetación con cobertura completa del suelo por
arbustos y a veces árboles de estatura baja, cuyas copas aparentan tocar la
superficie terrestre. Esta clase de plantas se reconoce fácilmente en el
estereoscopio en sitios donde la vegetación original colinda con las aéreas
de cultivo y pasto.
•
Bosques de Zona Baja (B): Área donde predomina la cobertura del suelo
por árboles cuyas capas de follaje no tocan al suelo. El porte de los
mismos es variado dando apariencia irregular a la superficie dosel de la
vegetación. La presencia de árboles en un supuesto bosque, se reconoce
solamente en un rastrojo cercano, donde es posible determinar, a partir de
las aerofotografías, individuos aislados.
•
Rastrojo (Rbn): Áreas cubiertas por restos de bosques producto de
indiscriminada explotación.
•
Áreas Urbanas: Están representadas por áreas cubiertas por edificaciones,
redes viales y jardines hogareños.
61
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
62
1.153.000
1.155.000
1.157.000
1.159.000
1.161.000
1.163.000
1.165.000
1.167.000
711.000
713.000
Rbn
Rbn
U
B
S
715.000
B
Bn
717.000
S
719.000
M
U
M
Es
721.000
R
G
725.000
I O
M
S
723.000
Rb
Rm
U
I
E
727.000
A
R
U
729.000
Rb
U
Rm
2000
3000m
Es
ESPINAR PRIMARIO. (Matorral claro)
BOSQUE NUBLADO
RASTROJO DE BOSQUE NUBLADO
Rbn
Bn
RASTROJO DE MATORRAL
RASTROJO DE BOSQUES DE ZONAS BAJAS
Rb
Rm
AREA URBANA
BOSQUE DE ZONAS BAJAS (Complejo de bosques densos)
SABANA (Vegetación graminea de altura intermedia)
MATORRAL PRIMARIO. (Matorral denso)
LEYENDA
1000
Escala Gráfica
0
U
B
S
M
1000
de Caracas.
del oeste de la cuidad
Mapa de Vegetación
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Figura 8.- Mapa de Vegetación del Oeste de la Ciudad de Caracas.
Tomado de Instituto del Estudios Regionales de Urbanismo, IERU, 1979.
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Influencia de la Geología y el Clima en la Vegetación
Por lo general es el clima el que determina los rasgos generales de la
vegetación tropical. Se requieren condiciones muy específicas provenientes de la
geología, para poder demostrar algunas influencias en la vegetación por los métodos
de simple observación terrestre y aérea.
Esto se relaciona de manera general con litologías ricas en elementos
ferromagnesianos (anfibolitas) que aportan cationes fertilizantes, mientras que suelos
formados, como por ejemplo, sobre roca en facies de esquistos verdes posiblemente
aportarán menor contenido nutricional a la vegetación.
Al oeste del Valle de Caracas se tienen esquitos ricos en cuarzo, feldespato,
mica y sericita correspondientes a la Formación Las Brisas, y esquistos calcáreas de
la Formación Las Mercedes; si se relaciona esto con lo anteriormente dicho, se puede
inferir que este suelo no cuenta con una gran fertilidad para generar esta vegetación
en el caso de que ésta fuera talada o eliminada. Sin embargo la roca de la Formación
Las Mercedes contiene un alto contenido calcáreo que pudiese contribuir al desarrollo
de la misma.
Por otra parte, como se mencionó anteriormente, el clima determina los rasgos
generales de la vegetación el siguiente grafico (Figura 9) ilustra cómo la precipitación
al relacionarse con la temperatura establecen una vegetación en particular.
63
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Figura 9.- Grafico con los datos climáticos: Temperatura y pluviometría. Se puede observar que
los cambios de espinar a matorral y después de matorral hasta bosque, están casi perfectamente
correlacionados con la pluviometría y en menor grado con la temperatura.
III.5.- METEORIZACIÓN Y EROSIÓN
La meteorización es del tipo química y/o mecánica sobre todo en las laderas y
cimas de los cerros. Los esquistos son rocas menos compactas que por efecto de esta
se vuelve muy friable, siendo poco resistente a la erosión. Los esquistos calcáreos
grafitosos, generalmente se presentan sumamente descompuestos y fracturados, lo
que nos da indicio de una meteorización de tipo química y una acción erosiva
marcada, como se puede observar en el sector de La Yaguara.
64
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
Las quebradas afluentes presentan grandes pendientes, perfiles en forma de V
cerrada por lo que son indicativos de una acción erosiva en sentido vertical,
característica a su vez de una juventud temprana. Los saltos observados debido a la
presencia de rocas resistentes como gneis y cuarcitas frenan el poder de esta acción
erosiva. La densa cubierta vegetal representa también un obstáculo para que se
produzca una fuerte erosión, alcanzándose cierto equilibrio entre la cobertura vegetal
y el suelo que sostiene.
III.6.- HIDROLOGÍA SUPERFICIAL
III.6.1.- GENERALIDADES
El sector estudiado corresponde al tramo inicial de la cuenca alta del Río
Guaire, la cual coincide con el extremo oeste del Valle de Caracas que en dicha zona
está limitado, tanto al norte como al sur, por colinas que en algunos casos se
presentan siguiendo una disposición irregular, mientras que en otros tienen un arreglo
alineado, definiendo pequeñas filas de variada longitud.
II.6.2.- CARACTERÍSTICAS DE LA RED
HIDROGRAFICA PRINCIPAL
El área de la cuenca de captación del río Guaire en la zona en estudio fue
determinada con base en las fotografías aéreas y las cartas topográficas en escala
1:25.000 que cubren la zona. Esta área corresponde a la parte inicial de la cuenca alta
2
del Río Guaire, con un área aproximada de 85 Km desde Las Adjuntas hasta El
Paraíso, en la cual, la elevación máxima de la cuenca es de 1.700 m.s.n.m. en la
Montaña La Gata y el punto más bajo es de 838 m.s.n.m., en El Paraíso.
65
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
El Río Guaire nace en la confluencia de los ríos San Pedro y Macarao en Las
Adjuntas y discurre en dirección suroeste-noreste a lo largo del Valle de Caracas. A
partir de su nacimiento presenta una trayectoria ligeramente sinuosa con un rumbo
aproximado de N55° E hasta la altura de Ruiz Pineda donde cambia su dirección a
aproximadamente S-N cortando las colinas generadas por el sinforme de El
Cementerio, correspondiente a la Formación Las Mercedes, asumiendo una
trayectoria levemente curveada y generando un valle estrecho, posteriormente, una
vez recorrido alrededor de 2 Km, hasta llegar a Antímano, retoma la dirección N55°E
adoptando un trazado cuasi-rectilíneo hasta llegar al Paraíso, para cubrir un recorrido
total de aproximadamente 13 Km.
En lo que respecta a la pendiente hidráulica del Río Guaire, ésta tiene un valor
aproximado de 0,5° calculada entre las cotas de 950 m.s.n.m (Las Adjuntas) y 838
m.s.n.m. (El Paraíso).
En el tramo en referencia, el río Guaire recibe el aporte de numerosas
quebradas, unas intermitentes otras permanentes que nacen al sur y al norte del valle.
Al río confluyen por su margen derecho las quebradas Caricuao y La Vega, mientras
que por el margen izquierdo confluyen las quebradas El Zamural y Caroata, las cuales
tienen un alto potencial de arrastre.
III.6.3.- APORTES DE AGUA AL RÍO GUAIRE
(AGUAS DE LLUVIAS Y SERVIDAS)
De acuerdo a las fuentes de información consultadas, ocurre que en Caracas,
buena parte de la captación y disposición de las aguas de lluvia está mezclada con las
aguas servidas. En efecto, una parte de los colectores existentes en la zona más
66
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
antigua de la capital son mixtos, es decir, que recogen al mismo tiempo aguas
servidas y aguas de lluvia.
La existencia de colectores marginales en la mayoría de las quebradas no llega
a impedir que gran parte de las aguas servidas de la capital tengan el río Guaire como
receptor final. Las razones son las siguientes:
•
Existencia de zonas (en general marginales) sin colectores secundarios, con
descarga al medio natural (Ver figura 9)
•
Falta de conexión de colectores urbanos a los marginales del Guaire (por ejemplo
los colectores marginales de la quebrada Caroata) mal estado de la mayoría de los
colectores marginales de las quebradas, los cuales muchas veces al ser obstruidos
terminan por ser rotos a fin de descargar las aguas a la quebrada (ver figura 10)
En consecuencia la mayor parte del gasto de verano del Río Guaire está
constituido por aguas servidas y en algunos de los afluentes éstas representan incluso
la totalidad del gasto de verano.
Descarga a la red de drenaje
Descarga directa al Río
Empotramiento al marginal
Río Guaire
Descarga a torrenteras o
canales de drenajes en
Descarga a quebradas en
barrios
Figura 10.- Sistema de descargas al Río Guaire.
Fuente del Ministerio del Ambiente
67
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOGRAFÍA FÍSICA LOCAL
III.6.4.- FOCOS Y PROCESOS DE CONTAMINACIÓN
QUE AFECTAN LA RED HIDROGRÁFICA PRINCIPAL
Entre las consideraciones generales que pueden hacer sobre el recurso agua,
un factor de suma importancia es el de la calidad, por cuanto su deterioro, aunado a la
progresiva disminución de los volúmenes de las aguas disponibles para los diversos
fines (abastecimiento, riego, recreación, etc.), constituye una limitante al desarrollo,
desmejora el ambiente y como se verá más adelante es una causa potencial de la
contaminación del acuífero del Valle de Caracas.
La red hidrográfica del Valle de Caracas (Río Guaire), está catalogada como
una cuenca con problemas de contaminación de origen puntual, ya que ésta recibe las
descargas urbanas de la mayor concentración poblacional del país, como es el caso
del Área Metropolitana de Caracas, una gran cantidad de vertidos industriales y
actividades de alto poder contaminante de las aguas, y excedentes agrícolas en menor
grado.
68
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
CAPÍTULO IV
GEOLOGÍA LOCAL
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.- GEOLOGÍA LOCAL
IV.1.- GENERALIDADES
El Valle de Caracas es una depresión de origen tectónico, es decir, su
formación se debe a movimientos diferenciales de bloques de rocas en una zona
intensamente fallada, por lo consiguiente el estudio detallado de la estructura
geológica de las rocas que la circundan, dan valiosos informes de la superficie hoy
enterrada bajo aluviones recientes. En este trabajo es de gran importancia tanto el
estudio de los depósitos sedimentarios como de las estructuras para realizar un
estudio hidrogeológico del área.
IV.2.- DIVISIÓN DEL ÁREA DE ESTUDIO
El material que constituye la depresión correspondiente al sector occidental
del Valle de Caracas es, al igual que en el sector este, un sedimento no consolidado
muy heterogéneo cuyo factor principal de tal característica es la diversidad de fuentes
de aporte que se tienen como colinas adyacentes o material aguas arriba arrastrado
por el río.
Es también la geometría de la cuenca junto con el aspecto fisiográfico y
geomorfológico, definidos bajo influencias estructurales y de erosión diferencial,
quienes determinan el espacio para depositar el material, por lo tanto, tomando en
cuenta la relación existente entre fuente de aporte y espacio, se divide la zona en
cuatro sub-zonas para facilitar un estudio sectorizado y más preciso (Ver Mapa de
Sub-División del área de estudio, Figura 11).
70
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
SUB-DIVISIÓN DEL ÁREA DE ESTUDIO
725.000
726.000
1.164.000
ALUVION
PEREZ BONALDE
LOS FLORES
(QAL)
23 DE ENERO
PROPATRIA
727.000
1.163.000
1.163.000
SAN JUAN
723.000
URB. FRANCISCO DE MIRANDA
EL GUARATARO
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
1.162.000
1.162.000
722.000
ARTIGAS
1.161.000
URB.
INDUSTRIAL
ARVELO
721.000
E DE
RM
TIFO
AN
EL
1.161.000
PARAISO
UITO
JUNQ
VISTA ALEGRE
WASHINSTON
LOS LAURELES
BELLA VISTA
LAS FUENTES
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
720.000
COLINAS DE VISTA ALEGRE
MARMOL DE ANTIMANO
(CA)
LA YAGUARA
EL ALGODONAL
719.000
717.000
OL
MARM
DE
ANO
ANTIM
(CA)
716.000
Urb.
Luis Hurtado
718.000
Urb. Monte Alto
1.159.000
RM
TIFO
E DE
EL
ALUVION
4
1.160.000
LA PAZ
(QAL)
MONTALBAN
UITO
JUNQ
1.159.000
CARAPA
AN
Comunidad
Haticos
de Barandilla
RIO
LA VEGUITA
E
AIR
GU
715.000
EL CARMEN
1.158.000
T IM
AN
DE )
OL (CA
RM
MA
ESQUISTOS LAS BRISAS
Qda
(CaB)
.H
BARRIO LA COLMENA
ilarit
a
O
AN
LA LUZ
LA VEGA
BARRIO SANTA
ELENA
E
DE
RIO
TE
EN
EM
LC
1.158.000
BARRIO LA LUZ
BARRIO LARANGELA
ANTIMANO
3
BARRIO MAMERA
(CAa)
BARRIO CARLOS
BELLO
ues
Bamb
Los
Qda
BARRIO EL MILAGRO
Hda. La Pena
MOMTANA LA
GATA
E
RM
FO
SIN
S
E
DE
ME
OR
INF
RIO
TE
EN
EM
LC
BARRIO LOS CANGILONES
1.157.000
BARRIO LOS MANGOS
714.000
Hda. Mamera
Urb. Araguaney
ESQUISTOS DE LAS
MERCEDES
(CAM)
715.000
1.156.000
ESQUISTOS DE LAS
MERCEDES
(CAM)
FILA EL Z
AMURAL
1.155.000
BARRIO SAN
PABLITO
1
TERRAZA CARICUAO
ZONA "B"
ZONA "A"
Serpentinita
(SP)
CARICUAO
RUIZ (SP)
PINEDA
SECTOR UD-1
(sp)
SECTOR UD-2
SECTOR UP-3
Rio Guaire
2
SECTOR UD-3
1.155.000
SECTOR UD-6B
SECTOR UD-2
SECTOR UD-6A
SECTOR UD-5
SECTOR UD-4
SECTOR UD-9
1.154.000
El Cipres
SECTOR UP-4
LA GRAN
PARADA
718.000
ESQUISTOS LAS BRISAS
(CaB)
1.153.000
719.000
METACONGLOMERADO
DE BARUTA
(CaBb)
720.000
722.000
724.000
723.000
ESCALA GRÁFICA
0
1000
2000
3000
Metros
Figura 11.- Sub-División Del Área de Estudio: 1.- Las Adjuntas- Ruiz Pineda; 2.Zoológico-Ruiz Pineda; 3.- Ruiz Pineda-Antímano; 4.- Antímano-El Paraíso.
Realizado por Núñez y Velásquez (2006)
71
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
El resultado de la subdivisión del área de estudio comprende:
-
Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda: Se encuentra ubicada entre las
coordenadas N1.154.110 – E717.990 y N1.155.110 – E720.020, presentando
una longitud de aproximadamente 2,2 Km. Esta se caracteriza por presentar el
nacimiento del Río Guaire, originado por la intersección del Río Macarao y
Río San Pedro.
-
Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda : Se encuentra ubicada entre las
coordenadas N1.154.350 - E723.590 y N1.155.110 – E720.020 , presentando
una longitud de aproximadamente 3,8 Km. Esta se caracteriza por tener el
recorrido de la quebrada Caricuao, que posteriormente descargará sus aguas al
Río Guaire.
-
Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano: Se encuentra ubicada entre las
coordenadas N1.155.110 – E720.020 y N1.157.590 – E721.270, presentando
una longitud de aproximadamente 2,7 Km. Esta se caracteriza por ser el más
estrecho en toda el área de estudio, indicando a primera vista menor cantidad
de sedimentos depositados.
-
Sub-Zona Antímano – El Paraíso: Se encuentra ubicada entre las coordenadas
N1.157.590 – E721.270 y N1.161.460 – E727.690, presentando una longitud
de aproximadamente 7,2 Km. Esta zona se caracteriza por ser la de mayor
extensión, lo que infiere una mayor cantidad de sedimentos depositados.
72
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.3.- FACIES SEDIMENTARIAS
Tomando en cuenta la alta heterogeneidad del sedimento, fue necesario definir
tres grupos en los que se pudiese clasificar desde el punto de vista granulométrico
cada uno de los tipos de suelo encontrados, para de esta manera obtener una facie
predominante por cada sub-zona la cual contase con la característica de tener
continuidad lateral y longitudinal.
Este proceso se realizó a partir de la correlación de perfiles litológicos de
pozos y perforaciones, diseñadas de forma tal que pudieran englobar todas las
características geológicas del subsuelo; éstas a su vez fueron integradas con secciones
transversales elaboradas por el METRO de Caracas, para posteriormente construir
diagramas de panel que permitieran una mejor visualización de la disposición de los
sedimentos. El mapa de diagramas de panel permite la ubicación de cada uno de ellos
(ver figura 12).
73
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
MAPA DE UBICACIÓN DE LOS
N
DIAGRAMAS DE PANELES
725.000
726.000
1.164.000
LOS FLORES
PEREZ BONALDE
URB. URANETA
23 DE ENERO
PROPATRIA
727.000
1.163.000
1.163.000
SAN JUAN
723.000
URB. FRANCISCO DE MIRANDA
EL GUARATARO
1.162.000
1.162.000
722.000
ARTIGAS
1.161.000
1
URB.
INDUSTRIAL
ARVELO
1.161.000
2
721.000
PARAISO
VISTA ALEGRE
3
BELLA VISTA
WASHINSTON
LOS LAURELES
LAS FUENTES
COLINAS DE VISTA ALEGRE
720.000
716.000
717.000
LA YAGUARA
5
6
Urb.
Luis Hurtado
718.000
Urb. Monte Alto
1.160.000
4
EL ALGODONAL
719.000
LA PAZ
MONTALBAN
7
1.159.000
8
1.159.000
LA VEGUITA
AIRE
GU
RIO
CARAPA
Comunidad Haticos
de Barandilla
715.000
EL CARMEN
LA LUZ
LA VEGA
1.158.000
1.158.000
Qd
a. Hi
larita
BARRIO SANTA
ELENA
BARRIO LA COLMENA
BARRIO LARANGELA
5
ANTIMANO
BARRIO MAMERA
BARRIO CARLOS
BELLO
3
4
6
BARRIO LA LUZ
BARRIO EL MILAGRO
BARRIO LOS CANGILONES
1.157.000
Qda
bues
Los Bam
Hda. La Pena
LEYENDA
BARRIO LOS MANGOS
714.000
Hda. Mamera
2
Urb. Araguaney
p
1.156.000
715.000
F I L A EL ZA
MU R A L
5
aire
Rio Gu
4
TERRAZA CARICUAO
ZONA "B"
ZONA "A"
2
6
Drenaje Principal
1
BARRIO SAN
PABLITO
1.155.000
3
RUIZ PINEDA
1
SECTOR UD-1
5
CARICUAO
4
2
SECTOR UD-4
El Cipres
7
3
Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz Pineda
1.155.000
SECTOR UD-3
SECTOR UD-2
SECTOR UP-3
SECTOR UD-9
1.154.000
Curvas de Nivel
Drenaje
SECTOR UD-6B
SECTOR UD-2
Sub-Zona Zoológico-Ruiz Pineda
SECTOR UD-6A
1
Sub-Zona Ruiz Pineda-Antímano
SECTOR UD-5
Sub-Zona Antímano-El Paraíso
SECTOR UP-4
LA GRAN
PARADA
718.000
1.153.000
719.000
720.000
724.000
ESCALA GRAFICA
722.000
723.000
0
1000
2000
3000
Metros
Figura 12.- Mapa de Ubicación de los Diagramas de Panel.
Realizado por Núñez y Velásquez (2006)
74
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.3.1.- SUB-ZONA LAS ADJUNTAS – RUIZ PINEDA
Se caracteriza por presentar una facie predominante de Arena Limosa con
presencia de lentes de arcilla. Estos sedimentos son provenientes de la Fila El
Zamural al norte de la sub-zona y El Ciprés al sur de la misma, correspondiente a la
Formación Las Mercedes y la Formación Las Brisas, respectivamente.
La disposición de los sedimentos se presenta de manera irregular, ya que sus
espesores varían de 2 m a 26 m; haciendo notar que los mayores espesores se
encuentran hacia Ruiz Pineda, justo en la zona donde la quebrada Caricuao descarga
sus aguas en el Río Guaire; y los menores espesores se encuentran hacia el
nacimiento del Río Guaire. A continuación se muestran los diagramas de panel
elaborados a partir de las perforaciones del METRO de Caracas e INAVI (Figura13 y
14).
75
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 13.-Diagramas de Panel. Sub-Zona Las Adjuntas - Ruiz Pineda
76
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 14.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Las Adjuntas - Ruiz Pineda
77
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.3.2.- SUB-ZONA ZOOLÓGICO – RUIZ PINEDA
Al igual que la sub-zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda, se caracteriza por la
presencia de una facie predominante de Arena Limosa con presencia de lentes
arcillosos. Como se mencionó anteriormente la sub-zona en estudio sigue la
trayectoria de la Quebrada Caricuao, en contacto con la Formaciones Las Brisas y las
Mercedes.
Los espesores varían de 4 m a 21m aproximadamente, haciendo notar que los
sedimentos se disponen de manera irregular y que su espesor aumenta ni disminuye
hacia una zona en particular, lo que hace difícil identificar un lugar de mayor o
menor espesor; esto pudiese ocurrir por la similitud de algunos agentes de aporte de
material a lo largo de la quebrada Caricuao.
A continuación se muestran los diagramas de panel elaborados con las
perforaciones del METRO de Caracas e INAVI (Figura 15 y 16).
78
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 15.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Zoológico - Ruiz Pineda
79
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 16.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Zoológico - Ruiz Pineda
80
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.3.3.- SUB-ZONA RUIZ PINEDA – ANTÍMANO
Se identifica como la más estrecha de la zona, definida por una facie
predominante de Arena Limosa con Grava con presencia de lentes arcillosos,
recibiendo aporte tanto del este como del oeste, de colinas pertenecientes a la
Formación Las Mercedes.
Los espesores de los sedimentos varían de 3m a 20m, depositados
irregularmente; donde es importante señalar que no presentan gran extensión lateral,
debido a la geometría de la depresión.
Como se puede notar, al sur de la sub-zona, la facie presenta una
granulometría más fina, ya que de arena limosa pasa a arena limosa con grava, y
como se verá más adelante, al sureste, aguas abajo del Río Guaire, la facie grada a
tamaños de granos más gruesos. Este es un tramo importante, ya que se nota el
cambio de facie desde el punto de vista granulométrico.
A continuación se muestran los diagramas de panel elaborados con las
perforaciones del METRO de Caracas (Figura 17 y 18).
81
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 17.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
82
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 18.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
83
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.3.4.- SUB-ZONA ANTÍMANO – EL PARAISO
Se identifica por tener la mayor extensión y el mayor espesor de sedimentos.
Se caracteriza por la presencia de dos facies predominantes, una de Arena Gravosa y
otra de Arena Limosa con Grava. Al norte se puede observar un aporte de sedimentos
proveniente de colinas pertenecientes a la Formación Las Brisas, al sur y suroeste se
cuenta con material originario de la Formación Las Mercedes.
En cuanto a los espesores, para la primera facie de arena gravosa varían de 18
m a 81 m aproximadamente; y para la segunda facie de arena limosa con grava
oscilan entre 3 m a 31 m. Los sedimentos se encuentran dispuestos irregularmente,
notándose los espesores menores hacia el suroeste del tramo, y los sedimentos más
espesos hacia el noreste; debido a la fisiografía del Valle de Caracas, ya que en esta
zona el valle comienza a ser más amplio y por ende permite mayor depositación de
sedimentos.
A continuación se muestran los diagramas de panel elaborados con las
perforaciones del METRO de Caracas e INAVI y Pozos de Hidrocapital (Figura 19 y
20).
84
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 19.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
85
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Figura 20.- Diagramas De Panel. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
86
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.4.- ROCA
La roca presente en la zona de estudio corresponden a la Formación Las
Mercedes, Formación Las Brisas y Mármol de Antímano.
Formación Las Brisas: Para el reconocimiento local de esta formación se
estudiaron los siguientes afloramientos:
1.- Carretera Caracas-El Junquito Km 1, La Yaguara: Se identifica la roca como un
Esquisto Serícitico-Moscovítico grafitoso, lo que coincide con Dengo (1951) quien
describió el tramo superior como esquisto grafitoso-sericíticos más meteorizados y
deformados que el tramo inferior. El afloramiento se encuentra altamente
meteorizado, con un grado de meteorización IV (ver tabla 3) de color gris rojizo,
como se observa en la figura 21. El color fresco de la roca no se pudo observar con
exactitud debido al espeso manto de meteorización.
A
B
El Algodonal
Intercomunal de la Yaguara
Intercomunal de la Yaguara
C
Figura 21.- A: vista aérea del Algodonal. Tomada
de Google earth (2006) B: obsérvese el color rojizo
del
afloramiento. C: Muestra del esquisto
sericítico tomada del lugar
87
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
2.- Zona Industrial de La Yaguara: Se identifica la roca como un Esquisto CuarzoMoscovítico con un contenido carbonático importante. La roca se presenta
moderadamente meteorizada con un grado de meteorización III (ver tabla 3) y muy
diaclasada presentando colores de meteorización gris y un color fresco gris verdoso.
(Ver Figura 22)
A
B
El Algodonal
Intercomunal de la Yaguara
C
Figura 22.- A: Vista aérea de la zona
industrial de la Yaguara. Tomada de Google
earth (2006). B: Afloramiento de esquisto muy
fracturado. C: Muestra de roca tomada en
sitio.
88
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
3.- Sector El Algodonal: La descripción litológica coincide con Wehrmann (1972),
donde se identifica un Esquisto Cuarzo Feldespático muscovítico; la roca se presenta
moderadamente meteorizada con un grado de meteorización III (ver tabla 3) de color
marrón claro, presentando un color fresco gris verdoso claro. (Ver Figura 23).
A
B
El Algodonal
Intercomunal de la Yaguara
C
Figura 23.- A: vista aérea del algodonal.
Tomada
de
Google
earth
(2006)
B:
Afloramiento de esquisto presentando una
costra de meterizacion blanquecina que
reaccionó al HCL. C: muestra del esquisto
cuarzo feldespático tomada en sitio.
89
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Formación Las Mercedes: Para el reconocimiento local de esta formación se estudió
el siguiente afloramiento:
1.- Autopista Francisco Fajardo a 500 m hacia el Este de Ruiz Pineda: Se identifica la
roca como un Esquisto Calcáreo Cuarcítico con presencia de muscovita, tal como
Aguerrevere
y Zuloaga (1937) lo describen. Se presenta la roca altamente
meteorizada, con un grado de meteorización IV (ver tabla 3), de color gris verdoso, y
un color fresco gris claro con tonalidades rosadas. (Ver Figura 24).
B
A
C
Figura 24.- A: Vista aérea del oeste del valle de
Caracas Tomada de Google earth (2006). B:
Afloramiento de esquisto calcáreo muy diaclasado.
C: Muestra tomada en sitio.
90
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
Grado de
meteorización
Tipo
Descripción
I
Fresco
No aparecen signos de meteorización
II
Ligeramente
meteorizado
La decoloración indica alteración del material rocoso y de
las superficies de discontinuidad. Todo el conjunto esta
decolorado por la meteorización.
III
Moderadamente
meteorizado
IV
Altamente
meteorizado
V
Completamente
meteorizado
VI
Suelo residual
Menos de la mitad del macizo rocoso aparece descompuesto
y/o transformado en suelo. La roca fresca o decolorada
aparece como una estructura continua o como núcleos
aislados.
Más de la mitad del macizo rocoso aparece descompuesto
y/o transformado en suelo. La roca fresca o decolorada
aparece como una estructura continua o como núcleos
aislados
Todo el macizo rocoso aparece descompuesto y/o
transformado en suelo. Se conserva la estructura original del
macizo rocoso.
Todo el macizo rocoso se ha transformado en suelo. Se ha
destruido la estructura del macizo y la fabrica del material
Tabla 3.- Evaluación del grado de meteorización del macizo rocoso.
(Vallejo 2002, ISRM 1981).
91
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.5.- ESTRUCTURAS LOCALES
Con respecto a la zona de estudio Dengo (1951) describe dos grandes
pliegues: El Antiforme de El Junquito y el Sinforme de El Cementerio; como
estructuras anchas, simétricas con rumbo N60-70°E. Hacia el extremo oeste de la
zona Wehrmann (1972) señala la presencia de fallas recientes llamadas fallas
transversales con un rumbo aproximado N60°W, son dos fallas dextrales, diagonales
pseudoparalelas a paralelas las cuales cortan el antiforme de El Junquito generando
un desplazamiento relativo de bloques (Ver Mapa Geológico, Anexo N° 2).
Díaz (2003) señala la presencia de fallas de corrimiento como las más
antiguas, definiendo el límite entre napas y el contacto entre los esquistos de Las
Mercedes y de Las Brisas. La Napa Caracas ubicada al noroeste limita en este tipo de
falla con un rumbo general N45°E y buzamiento al Norte; más al Sur el Esquisto de
Las Mercedes con el esquisto Las Brisas con un rumbo general N80°E y buzamiento
al norte (Ver Mapa Geológico, Anexo N° 2).
Hacia el centro de la zona de estudio Albrizzio (comp. per), infiere dos fallas
las cuales nombra falla de El Guaire (extremo norte del Valle) y Falla de El Valle
(extremo sur del Valle) con rumbo N50°E y cubierta por aluvión, la cual son
trazadas por sus características geomorfológicas lineales formando un valle tectónico.
En lo que respecta al sector sur de la zona en estudio, específicamente en la
sub-zona Zoológico, se localiza una falla dextral de orientación N82ºW (Pimentel,
1986) que define el valle tectónico por el que cursa la quebrada Caricuao (Ver Mapa
Geológico, Anexo N° 2).
92
NÚÑEZ, VELASQUEZ
GEOLOGÍA LOCAL
IV.6.- GEOMORFOLOGÍA LOCAL
Las rasgos geomorfológicos ubicados al oeste de Caracas presentan tanto
diferencias como semejanzas con respecto a las descritas por Singer (1975) en la zona
Centro-Este (Ver Capítulo II), esto es debido a la presencia de controles morfogenéticos que interactúan de manera diferente, como por ejemplo, se observan en la
zona de estudio fallas de corrimientos, una vegetación abundante en matorrales y
sabanas, por el contrario en el Centro-Este se tiene una estructura importante como lo
es la falla El Ávila, la presencia de bosques nublados y la Formación Peña de Mora.
Todas estas diferencias enmarcadas bajo una zonificación climática muy parecida,
dan como resultado expresiones morfológicas diferentes.
A continuación se muestra una tabla que ilustra la interacción de diversos
controles morfo-genéticos (clima-litología-vegetación, estructura) :
Expresión
Topográfica
Vegetación
Estructura
Matorrales y
Colina Alargada
Rastrojo de
Antiforme
Bosque Nublado
Depresión
Matorrales
Sinforme
Ubicación
Formación Las
Al Nor-oeste del
Brisas
Valle de Caracas
Formación Las
Al Sur-oeste del
Mercedes
Valle de Caracas
Contacto entre las
Sabanas al sur--------
Litología
oeste y
Falla de
Matorrales al nor-
Corrimiento
oeste
Formaciones
Al Nor-oeste y
Antímano-Las
Sur-oeste del
Mercedes y Las
Valle de Caracas
Brisas
Al sur de la
Valle
Sabanas
Falla Dextral
Las Brisas
quebrada
Caricuao
Tabla 4.- Interacción de controles Morfo-Genéticos
93
NÚÑEZ, VELASQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
CAPÍTULO V
MODELO
HIDROGEOLÓGICO
CONCEPTUAL
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.- MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.1.- DEFINICIÓN DEL MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
Un modelo hidrogeológico conceptual consiste en la idealización y/o
simplificación de la geometría de los elementos que componen un acuífero, para
facilitar una aproximación práctica. Comprende las siguientes características:
•
Número de capas, unidades estratigráficas o facies del acuífero.
•
Condiciones de la superficie piezométrica.
•
Límites horizontales y verticales.
•
Zonas de recarga y descarga.
V.2.- ELABORACIÓN DEL MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
Para la elaboración del modelo hidrogeológico conceptual se utilizaron datos de
pozos y perforaciones, ya que son los principales medios de comunicación entre el
reservorio de agua subterránea y la superficie del terreno.
Estos datos fueron suministrados por entidades cuyas actividades están
relacionadas con el subsuelo, como es el caso del Ministerio del Ambiente y Recursos
Naturales (MARN), Hidrocapital, El METRO de Caracas, Instituto Nacional de la
Vivienda (INAVI), entre otros.
Como se explicó en el Capítulo IV, el estudio hidrogeológico se realizó en
sedimento no consolidado correspondiente a la zona Oeste del Valle de Caracas, los
cuales fueron clasificados siguiendo criterios granulométricos, que permitieron
definir diversas facies que lograban tener una continuidad superficial.
95
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.3.- MAPAS ISÓPACOS Y SUPERFICIES EN 3D
Con la utilización del programa Golden Software Surfer 8.0 se obtuvieron los
mapas isópacos correspondientes a cada una de las superficies (topes y bases) de las
facies definidas y además un modelo en tres dimensiones de cada una de ellas.
V.3.1.- SUB-ZONA LAS ADJUNTAS – RUIZ PINEDA
Se encuentra ubicada entre las coordenadas N1.154.110 – E717.990 y
N1.155.110 – E720.020 y se emplearon los datos provenientes de las siguientes
perforaciones:
N°
Perforaciones
PCC-55
PCC-A5
13 (INAVI)
5(INAVI)
PMA-22
PMA-18
13 (INAVI)
PMA-16
PMA-14
12(INAVI)
PMA-14
PMA-12
PMA-10
PMA-7
PMA-7
PMA-1
PMA-3
PMA-5
P-53
P-113
P-58
P-112
P-102
P-106
P-65
16 (INAVI)
Cota (m)
943
942
968
970
941
950
968
950
949
980
949
951
956
952
952
955
947
950
956
954
958
958
960
961
963
980
N
1.155.000
1.155.180
1.154.550
1.154.480
1.155.120
1.154.810
1.154.550
1.154.830
1.154.710
1.154.120
1.154.710
1.154.610
1.154.600
1.154.490
1.154.490
1.154.220
1.154.280
1.154.310
1.154.210
1.154.100
1.154.000
1.153.880
1.153.760
1.153.600
1.153.590
1.153.400
E
720.300
720.120
719.820
720.470
719.900
719.510
719.820
719.440
719.180
719.410
719.180
719.000
718.810
718.600
718.600
718.100
718.220
718.450
718.000
717.900
717.810
717.800
717.720
717.710
717.660
717.910
Tope de Sustrato
rocoso (m)
923
922
952
946
913
944
952
944
938
975
938
941
946
943
943
947
933
943
937
934
942
946
952
949
952
968
Tope de Arena
Limosa (m)
940
937
966
958
939
948
966
946
944
978
944
945
950
946
946
950
944
945
951
951
952
957
960
961
963
978
Tabla 5.- Datos de Perforaciones del Metro de Caracas e INAVI.
Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda.
96
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 25.- MAPA ISÓPACO DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS-RUIZ PINEDA
1155000
1154800
N
1154600
1154400
1154200
1154000
1153800
Cotas (m.s.n.m)
1153600
915
925
935
945
955
965
975
985
1153400
717800
718000
718200
718400
718600
718800
719000
719200
719400
719600
719800
720000
720200
720400
FIGURA 26.- SUPERFICIE 3D DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN N40°E
Cotas (m.s.n.m)
920 925 930 935 940 945 950 955 960 965 970 975 980
97
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 27.- MAPA ISÓPACO DE ARENA LIMOSA.
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS-RUIZ PINEDA
1155000
N
1154800
1154600
1154400
1154200
1154000
1153800
Cotas (m.s.n.m)
1153600
938
946
954
962
970
978
986
1153400
717800
718000
718200
718400
718600
718800
719000
719200
719400
719600
719800
720000
720200
720400
FIGURA 28.- SUPERFICIE 3D DE ARENA LIMOSA.
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN N40°E
Cotas (m.s.n.m)
938
98
943
948
953
958
963
968
973
978
983
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 29.- MODELO HIDROGEOLÓGICO EN 3D.
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN S60°E
Cotas (m.s.n.m)
964 968 972 976 980 984 988 992 996 1000 1004 1008
99
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
El software surfer8 permite visualizar de una manera clara cómo se disponen
cada una de las superficies; en este caso la Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz Pineda.
El sustrato rocoso se presenta de manera irregular sirviendo de base para el
depósito de una arena limosa cuya procedencia pudiese corresponder a la Fila El
Zamural al norte de la sub-zona y El Ciprés al sur de la misma, correspondiente a la
Formación Las Mercedes y la Formación Las Brisas respectivamente. Como es de
esperarse debido al poco espacio existente para alojar al sedimento, éste se deposita
amoldándose a la forma sugerida por el sustrato rocoso, cabe destacar la presencia de
lentes de arcillas y de uno que otro material gravoso que dan la característica
heterogénea anteriormente mencionada.
Los mayores espesores de arena limosa se registran en la franja norte como se
observa en el mapa isópaco superando los 20m de espesor, específicamente en la
zona de Ruiz Pineda.
100
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.3.2.- SUB-ZONA ZOOLÓGICO – RUIZ PINEDA
Se encuentra ubicada entre las coordenadas N1.154.350 - E723.590 y N1.155.110
– E720.020. Y se emplearon los datos provenientes de las siguientes perforaciones:
N°
Perforaciones Cota (m)
PCCIA-52
994
PCCIA-51
994,5
PCCIA-3
993,5
2 (INAV)
1060
10 (INAVI)
1020
7 (INAVI)
998
PCCIA-7
982
10' (INAVI)
1060
PCCIA-5
987
PCCIA-41
967
26 (INAVI)
980
PCCIA-6
1080
PCCIA-45
978
PCCIA-17
960
PCCIA-15
962
PCCIA-14
963
5(INAVI)
970
PCCIA-20
953
PCC-22
952
PCC-24
948
PCC-55
943
N
1.154.350
1.154.320
1.154.280
1.154.750
1.154.600
1.154.690
1.154.430
1.153.990
1.154.190
1.154.530
1.154.410
1.153.810
1.154.420
1.154.510
1.154.500
1.154.500
1.154.480
1.154.590
1.154.800
1.154.830
1.155.000
E
722.700
722.610
722.390
722.620
722.520
722.100
721.980
721.960
722.160
721.520
721.290
721.710
721.800
721.000
721.180
721.300
720.470
720.790
720.520
720.430
720.300
Tope de Sustrato
Rocoso (m)
981
981,5
978,5
1.048
1.006
975
967
1.048
977
952
948
1.062
960
950
952
943
946
933
938
939
923
Tope de Arena
Limosa (m)
989
989,5
991,5
1.056
1.018
995
977
1.057
978
965
970
1.071
972
955
956
957
958
951
946
946
941
Tabla 6.- Datos de Perforaciones del Metro de Caracas e INAVI.
Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
101
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 30.- MAPA ISÓPACO DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA ZOOLÓGICO-RUIZ PINEDA
1155000
1154800
1154600
1154400
1154200
1154000
N
720400
720600
720800
721000
721200
721400
721600
721800
722000
722200
722400
722600
Cotas (m.s.n.m)
925
945
965
985
1005
1025
1045
FIGURA 31.- SUPERFICIE 3D DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA ZOOLÓGICO-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN E-W
Cotas (m.s.n.m)
930 940 950 960 970 980 990 100010101020103010401050
102
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 32.- MAPA ISÓPACO DE ARENA LIMOSA.
SUB-ZONA ZOOLÓGICO-RUIZ PINEDA
1155000
1154800
1154600
1154400
1154200
N
1154000
720400
720600
720800
721000
721200
721400
721600
721800
722000
722200
722400
722600
Cotas (m.s.n.m)
940
960
980
1000
1020
1040
1060
FIGURA 33.- SUPERFICIE 3D DE ARENA LIMOSA.
SUB-ZONA ZOOLÓGICO-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN E-W
Cotas (m.s.n.m)
150
103
250
350
450
550
650
750
850
950
1050
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 34.- MODELO HIDROGEOLÓGICO EN 3D.
SUB-ZONA ZOOLÓGICO-RUIZ PINEDA
VISTA EN DIRECCIÓN E-W
Cotas (m.s.n.m)
964 968 972 976 980 984 988 992 996 1000 1004 1008
104
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
Para la Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda el sustrato rocoso se caracteriza
por presentar una geometría particularmente elevada hacia los flancos laterales norte
y sur de la quebrada Caricuao y una depresión focalizada hacia el centro del valle.
Una arena limosa como facie predominante es identificada en la mayor parte
de esta depresión, encontrándose nuevamente la presencia de lentes de arcilla. Este
material proviene básicamente de colinas adyacentes a la quebrada, al norte
correspondiente a la Formación Las Mercedes y al sur a la Formación Las Brisas.
Los mayores espesores se encuentran hacia el este alcanzando los 20m, por
otra parte, en la zona oeste se identifican los menores espesores con un promedio de
4m coincidiendo con la descarga de la quebrada Caricuao al Río Guaire. Es posible
que la franja sur se encuentre favorecida por mayor acumulación de material, debido
a la presencia de la falla dextral anteriormente mencionada que genera el valle
tectónico.
105
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.3.3.- SUB-ZONA RUIZ PINEDA – ANTÍMANO
Se encuentra ubicada entre las coordenadas N1.155.110 – E720.020 y
N1.157.590 – E721.270. Y se emplearon los datos provenientes de las siguientes
perforaciones:
N° de
Perforación Cota (m)
PCC-55
943
PCC-A5
942
PCC-A7
951
PM-4
952
PM-6
951
PM-10
947
PM-12
936
PM-24
932
PM-27
928
P-3
928
9(INAVI)
940
21(INAVI)
941
P-7
924
18 (INAVI)
940
P-7
924
P-16
918
14(INAVI)
960
P-22
918
N
1.155.000
1.155.180
1.155.390
1.155.780
1.155.990
1.156.350
1.156.530
1.157.000
1.157.080
1.157.200
1.157.340
1.157.280
1.157.480
1.157.420
1.157.480
1.157.730
1.157.580
1.157.910
E
720.300
720.120
720.110
720.270
720.300
720.180
720.080
720.200
720.310
720.510
720.290
720.140
720.810
720.680
720.810
721.300
720.650
721.470
Tope de
Esquisto (m)
923
922
945
932
921
925
920
920
904
918
932
919
902
932
902
895
955
898
Tope de Arena
Limosa con Grava
(m)
940
937
952
940
936
932
932
927
923
924
936
928
919
935
919
916
960
913
Tabla 7.- Datos de Perforaciones del Metro de Caracas.
.Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano
106
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 35.- MAPA ISÓPACO DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA RUIZ PINEDA-ANTÍMANO
1157800
1157600
N
1157400
1157200
1157000
1156800
1156600
1156400
1156200
1156000
1155800
1155600
1155400
Cotas (m.s.n.m)
1155200
896
902
908
914
920
926
932
938
944
1155000
720200
720400
720600
720800
721000
721200
721400
FIGURA 36.- SUPERFICIE 3D DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA RUIZ PINEDA-ANTÍMANO
VISTA EN DIRECCIÓN S45ºW
Cotas (m.s.n.m)
898 902 906 910 914 918 922 926 930 934 938 942 946
107
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 37.- MAPA ISÓPACO DE ARENA LIMOSA CON GRAVA.
SUB-ZONA RUIZ PINEDA-ANTÍMANO
1157800
1157600
N
1157400
1157200
1157000
1156800
1156600
1156400
1156200
1156000
1155800
1155600
1155400
Cotas (m.s.n.m)
1155200
914
918
922
926
930
934
938
942
946 950
954
1155000
720200
720400
720600
720800
721000
721200
721400
FIGURA 38.- SUPERFICIE 3D DE ARENA LIMOSA CON GRAVA.
SUB-ZONA RUIZ PINEDA-ANTÍMANO
VISTA EN DIRECCIÓN S45ºW
916
920
924
928
932
936
940
944
948
952
Cotas (m.s.n.m)
108
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 39.- MODELO HIDROGEOLÓGICO EN 3D.
SUB-ZONA RUIZ PINEDA-ANTÍMANO
VISTA EN DIRECCIÓN S45ºW
Cotas (m.s.n.m)
920 923 926 929 932 935 938 941 944 947 950
109
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
La Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano tiene una geometría particular por ser
la más estrecha del área de estudio, tanto al este como al oeste se presentan colinas de
abundante vegetación correspondientes a La Formación Las Mercedes, como se
describe en el capítulo IV de Geología Local. El poco espacio disponible no permite
una gran acumulación de material que para este caso corresponde a una facie
predominante de arena limosa con grava.
La facie predominante presenta espesores que varían de 3m a 20m, se hace
difícil identificar las zonas en las cuales estos espesores se encuentran en mayor o
menor cantidad, debido a que el sustrato rocoso se encuentra de una manera muy
irregular.
110
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.3.4.- SUB-ZONA ANTÍMANO – EL PARAÍSO
Se encuentra ubicada entre las coordenadas N1.157.590 – E721.270 y
N1.161.460 – E727.690; y se emplearon los datos provenientes de las siguientes
perforaciones y pozos:
E
Tope de
Esquisto (m)
Tope Arena
Gravosa(m)
Tope Arena
Limosa con Grava
(m)
726.380
822
867
885
1.161.000
726.300
832
879
900
1.160.900
726.790
808
858
885
890
1.160.910
726.930
819
863
887
DF6354277A
895
1.161.180
726.920
813
871
891
DF6354276A
884
1.161.380
726.710
811
861
881
DF6354275A
882
1.160.330
725.820
802
862
879
DF6354542A
887
1.160.590
726.000
815
866
885
DF6354274A
900
1.160.700
726.210
848
894
898
I-118
887
1.161.120
726.120
806
858
882
I-86
889
1.161.000
725.850
807
860
886
N° Perforaciones
y pozos
Cota
(m)
N
I-120
887
1.161.260
DF6354551A
903
DF6354273E
888
DF6354272A
I-101
892
1.160.200
725.050
817
872
889
DF6354278E
895
1.160.100
725.150
822
872
893
DF6354553N
892
1.160.910
725.290
816
861
881
DF6354538E
838
1.159.750
725.300
778
818
835
I-110
891
1.160.790
725.710
803
859
886
I -99
894
1.160.790
725.550
814
870
892
I-105
893
1.160.590
725.320
808
866
891
I-103
893
1.160.400
725.160
808
868
891
DF6354552A
890
1.159.390
724.890
840
885
888
883
I-52
893
1.159.930
724.780
821
870
I-99'
894
1.160.150
724.970
821
864
889
DF6354526A
890
1.159.700
724.790
806
877
887
DF6354565A
899
1.159.000
724.700
851
876
893
I-75
898
1.1597.00
724.480
837
874
895
DF6354525
940
1.159.780
724.100
891
928
938
I-79
893
1.159.500
724.200
843
871
886
DF6354568A
900
1.159.290
724.210
857
876
896
DF6354566E
902
1.159.000
724.330
857
875
897
I-62
904
1.159.250
723.750
842
879
900
DF6354285A
908
1.158.610
723.180
838
868
899
I-7
908
1.159.220
723.610
850
880
904
I-9
910
1.159.120
723.380
846
884
905
I-20
916
1.158.630
722.420
850
885
909
DF6354005E
905
1.158.700
723.690
848
882
902
I12
912
1.159.000
723.110
800
881
898
Tabla 8.- Datos de Perforaciones del Metro de Caracas y Pozos de Hidrocapital, MARN.
Sub-Zona Antímano – El Paraíso
111
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 40.- MAPA ISÓPACO DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
1161000
1160500
N
1160000
1159500
780
795
810
825
840
855
870
885
1159000
Cotas (m.s.n.m)
1158500
1158000
1157500
1157000
1156500
1156000
1155500
1155000
1154500
1154000
722500
723000
723500
724000
724500
725000
725500
726000
726500
FIGURA 41.- SUPERFICIE 3D DEL SUSTRATO ROCOSO.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
VISTA EN DIRECCIÓN S40ºE
Cotas (m.s.n.m)
785
112
795
805
815
825
835
845
855
865
875
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
885
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 42.- MAPA ISÓPACO DE ARENA GRAVOSA.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
1161000
1160500
N
1160000
1159500
1159000
1158500
820 830 840 850 860 870 880 890 900 910 920 930
Cotas (m.s.n.m)
1158000
1157500
1157000
1156500
1156000
1155500
1155000
1154500
1154000
722500
723000
723500
724000
724500
725000
725500
726000
726500
FIGURA 43.- SUPERFICIE 3D DE ARENA GRAVOSA.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
VISTA EN DIRECCIÓN S40ºE
Cotas (m.s.n.m)
825
113
835
845
855
865
875
885
895
905
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
915
925
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 44.- MAPA ISÓPACO DE ARENA LIMOSA CON GRAVA.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
1161000
1160500
N
1160000
1159500
1159000
835
850
865
880
895
910
925
940
Cotas (m.s.n.m)
1158500
1158000
1157500
1157000
1156500
1156000
1155500
1155000
1154500
1154000
722500
723000
723500
724000
724500
725000
725500
726000
726500
FIGURA 45.- SUPERFICIE 3D DE ARENA LIMOSA CON GRAVA.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
VISTA EN DIRECCIÓN S40ºE
Cotas (m.s.n.m)
840
114
850
860
870
880
890
900
910
920
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
930
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 46.- MODELO HIDROGEOLÓGICO EN 3D.
SUB-ZONA ANTÍMANO-EL PARAÍSO
VISTA EN DIRECCIÓN S40ºE
Cotas (m.s.n.m)
865
115
875
885
895
905
915
925
935
945
955
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
La Sub-Zona Antimano–El Paraíso integra una nueva facie predominante
denominada arena gravosa; el Valle comienza a ampliarse y el sustrato rocoso,
aunque de una manera irregular, se profundiza progresivamente hacia el este.
A lo largo de esta sub-zona se encuentra material proveniente de diversas
fuentes de aporte ubicadas en los flancos norte y sur del Valle pertenecientes a las
Formaciones Las Brisas, Las Mercedes y Mármol de Antímano.
La primera facie predominante de arena gravosa tiene espesores variables de
18m a 81m aproximadamente, mientras que la segunda facie predominante de arena
limosa con grava sus espesores varían de 3m a 31m; el mayor registro de volúmenes
de sedimentos se encuentran hacia el este.
116
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.4.- NIVELES PIEZOMÉTRICOS
El mapa de niveles piezométricos es de vital importancia para poder elaborar
el cálculo de las reservas para una determinada fecha, ya que proporciona las
características dimensionales de la mesa de agua. Permite también visualizar las
variaciones de las reservas al comparar mapas de niveles piezométricos de fechas
diferentes.
Para la elaboración del mapa de niveles piezométricos se elaboró una base de
datos a partir de mediciones piezométricas realizadas en pozos y perforaciones.
V.4.1.- SUB – ZONA LAS ADJUNTAS – RUIZ PINEDA
Las mediciones piezométricas más recientes de este tramo corresponden a Noviembre
de 1979, y se presentan a continuación:
Perforación
C. Este
C. Norte
Cota (m)
PMA-22
PMA-18
PMA-16
PMA-14
PMA-11
PMA-9
PMA-6
PMA-4
PMA-1
P-53
P-113
P-58
P-112
P-60
P-105
P-63
P-110
719.900
719.520
719.420
719.190
718.980
718.810
718.600
718.450
718.260
718.100
717.990
717.900
717.740
717.820
717.740
717.720
717.660
1.155.120
1.154.820
1.154.820
1.154.700
1.154.620
1.154.590
1.154.480
1.154.340
1.154.280
1.154.280
1.154.200
1.154.420
1.154.000
1.153.880
1.153.740
1.153.620
1.153.590
940
948
950
932
954
952
950
950
951
954
955
957
952
958
958
961
961
Nivel
Piezométrico(m)
916
901
912
894
911
907
918
900
895
938
920
931
940
913
927
940
941
Tabla 9.- Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones del Metro de
Caracas en Noviembre de 1979. Sub – Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
117
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 47.- MAPA PIEZOMÉTRICO
SUB-ZONA LAS ADJUNTAS – RUIZ PINEDA
1.156.000
N
A
924
922
920
918
1.155.000
916
914
912
910
902
908
904
920
918
916
914
912
910
908
906
904
1.154.000
900
A’
900
902
719.000
906
908
910
721.000
720.000
250
0
250
500
750m
Los datos correspondientes a la Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda,
pertenecen a Noviembre de 1979, mes en el cual según los datos metereológicos
suministrados por el Observatorio Cajigal (ver tabla 1) corresponde al último mes
lluvioso del año, con una mayor cantidad de almacenamiento, y por lo tanto, niveles
piezométricos mayores.
118
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
La forma de la superficie piezométrica permite distinguir el tipo de acuífero,
en este caso se tienen isopiezas equidistantes en los flancos norte y sur, las cuales a
medida que siguen la dirección de flujo comienzan a separarse, lo que puede dar a
entender según Castany (1975) la presencia de un acuífero libre cuyo aumento en la
permeabilidad del material va en dirección de las líneas de flujo como se muestra en
la curva de depresión.
924
A
Figura 48.- Curva De Depresión.
Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz Pineda
Superficie Piezométrica
A’
908
Las isopiezas presentan una curvatura cóncava hacia la dirección de flujo lo
que implica una zona deprimida, con un gasto débil, con una fuerte permeabilidad o
ambas, generalmente esta es la geometría de zonas de drenaje mediante corrientes de
agua superficiales (Castany ,1975), en este caso la parte alta de la cuenca del Río
Guaire.
Sin embargo, si se observa el perfil correspondiente a la Sub-Zona Las
Adjuntas-Ruiz Pineda (Ver Perfiles del Oeste del Valle de Caracas, Anexo N° 3), se
notará cómo los niveles estáticos
fueron hallados dentro del sedimento que
corresponde a una facie predominante de arena limosa.
119
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
Interacción Río – Acuífero
Conociendo los valores de cotas que el drenaje principal, en este caso el Río
Guaire, posee a lo largo de su recorrido a través de la Sub-Zona Las Adjuntas – Ruiz
Pineda y además los valores de niveles estáticos, fue posible ubicar los lugares en los
cuales existe una comunicación entre el Río Guaire y el acuífero, de manera de
identificar si el río alimenta al acuífero o viceversa.
En lo que respecta a los primeros 300m., aguas a bajo del Río Guaire se tiene
una superficie piezométrica por encima del nivel del río, lo que infiere que el agua del
acuífero está descargando al río; sin embargo para el resto de la sub-zona se tienen
niveles estáticos por debajo del nivel del río ocurriendo el proceso inverso, es decir,
el agua del Río Guaire alimenta al acuífero. Cabe destacar que el 100% de la
trayectoria del Río Guaire se encuentra embaulada, lo que interrumpe esta
comunicación de una manera parcial, debido a que no se descarta la presencia de
infiltraciones por fracturas de la losa de concreto.
120
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.4.2.- SUB-ZONA ZOOLOGICO – RUIZ PINEDA
Las mediciones piezométricas más recientes de este tramo corresponden a
Abril de 1978. A continuación se presentan:
Perforación
C. Este
C. Norte
Cota (m)
PCCIA-52
PCCIA-3
PCCIA-5
PCCIA-48
PCCIA-7
PCCIA-45
PCCIA-43
PCCIA-41
PCCIA-14
PCCIA-15
PCCIA-17
PCCIA-20
PCCIA-22
PCCIA-24
PCC-55
PCC-A5
722.600
722.380
722.180
722.080
721.920
721.800
721.680
721.540
721.400
721.180
721.000
720.800
720.560
720.450
720.290
720.160
1.154.340
1.154.280
1.154.280
1.154.280
1.154.340
1.154.440
1.154.520
1.154.520
1.154.500
1.154.500
1.154.540
1.154.590
1.154.780
1.154.860
1.155.000
1.155.180
989
983
989
985
982
975
972
966
963
962
957
955
950
947
948
942
Nivel
Piezométrico(m)
982
975,6
981,2
976,2
971,8
965,2
964,8
961,4
958
956,6
950,8
948,2
937,6
936,6
939,8
934,8
Tabla 10.- Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones
del Metro de Caracas en Abril de 1978. Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
121
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 49.- MAPA PIEZOMÉTRICO
SUB-ZONA ZOOLÓGICO – RUIZ PINEDA
N
1.155.000
942
8
93
B
974
970
966
962
958
954
950
946
978
B’
1.154.000
723.000
722.000
721.000
250
0
250
500
750m
Para la Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda se contó con datos suministrados
por el Metro de Caracas para la fecha Abril de 1978, mes en el cual se realizaban los
estudios pertinentes para la construcción del Metro de Caracas en este tramo; según
los datos metereológicos suministrados por el Observatorio Cajigal (ver tabla 1)
corresponde al primer mes lluvioso del año, con una menor cantidad de
almacenamiento, y por lo tanto, niveles piezométricos menores.
122
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
En esta caso se tienen isopiezas pseudo-equidistantes hacia el este o hacia la
parte alta del valle de la guebrada Caricuao, las cuales a medida que siguen la
dirección de flujo comienzan a estrecharse, lo que puede dar a entender según
Castany (1975) la presencia de un acuífero libre cuyo aumento en la permeabilidad
del material va en contra a la dirección de las líneas de flujo como se muestra en la
curva de depresión, por lo tanto es de esperarse un material de características menos
permeable hacia el oeste de este valle, posiblemente una mayor concentración de
lentes de arcillas como se describe en la facie perteneciente a esta sub-zona, pudiendo
ser producto de la descarga de la quebrada Caricuao al Río Guaire cuya consecuencia
es la acumulación y esparcimiento de finos en esta área.
B’
976
Figura 50.- Curva de Depresión.
Superficie Piezométrica
Sub-Zona Zoológico – Ruiz Pineda
B
Al igual que en
la Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz Pineda, las isopiezas
presentan una curvatura cóncava hacia la dirección de flujo lo que implica una zona
deprimida, con un gasto débil, con una fuerte permeabilidad o ambas, generalmente
123
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
esta es la geometría de zonas de drenaje mediante corrientes de agua superficiales
(Castany, 1975), en este caso la quebrada Caricuao.
Interacción Río – Acuífero
A lo largo de toda la quebrada Caricuao se tiene una superficie piezométrica
por debajo del nivel base de la quebrada, como se puede observar en el perfil
correspondiente a la Sub-Zona Zoológico-Ruiz Pineda (Ver Perfiles del Oeste del
Valle de Caracas, Anexo N° 3), exceptuando un sector ubicado a aproximadamente a
3 Km. al oeste del nacimiento de este drenaje, lo que indica una tendencia en mayor
proporción a que el agua sea transmitida del río al acuífero.
Es importante señalar que la trayectoria de la quebrada Caricuao se encuentra
embaulada, lo que dificulta, como se explicó anteriormente, la comunicación total de
este sistema.
124
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.4.3.- SUB-ZONA RUIZ PINEDA – ANTÍMANO
Las mediciones piezométricas más recientes de este tramo corresponden a
Noviembre de 1979. A continuación se presentan:
Perforación
C. Este
C. Norte
Cota (m)
PCC-A7
PM-4
PM-6
PM-10
PM-12
PM-17
PM-24
PM-27
P-3
P-7
P-10
P-13
P-16
P-22
720.160
720.280
720.300
720.180
720.060
720.040
720.180
720.340
720.530
720.840
721.080
721.180
721.300
721.460
1.155.400
1.155.720
1.155.980
1.156.360
1.156.560
1.156.740
1.156.980
1.157.100
1.157.200
1.157.360
1.157.540
1.157.640
1.157.740
1.157.920
943
952
970
947
932
938
930
928
927
924
925
922
920
917
Nivel
Piezométrico(m)
932
932,8
950,6
929,8
920
926
921
919,6
921,8
917,8
919
913,8
912,2
907,8
Tabla 11.- Datos de Niveles Piezométricos tomados de Perforaciones
del Metro de Caracas en Noviembre de 1979. Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano
125
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 51.- MAPA PIEZOMÉTRICO
SUB-ZONA RUIZ PINEDA - ANTÍMANO
1.158.000
914
912
916
918
924
922
926
D
920
N
D’
928
930
932
930
1.157.000
934
918
922 926
930
936
934
938
940
92
8
93
2
944
94
0
93
6
942
92 92 926
2 4
1.156.000
91
4
91
2
91
6
91
8
92
0
C
C’
1.155.000
718.000
719.000
720.000
721.000
500
0
500
1000
1500m
Los datos correspondientes a la Sub-Zona Ruiz Pineda-Antímano, pertenecen
a Noviembre de 1979, mes en el cual según los datos metereológicos suministrados
por el Observatorio Cajigal (ver tabla 1) corresponde al último mes lluvioso del año,
con una mayor cantidad de almacenamiento, y por lo tanto, niveles piezométricos
mayores.
126
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
La Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano se caracteriza por conjugar aspectos
estructurales y fisiográficos peculiares permitiendo establecer un sistema rocasedimento muy estrecho, lo que lleva como consecuencia a una superficie
piezométrica cuyas líneas isopiezas se comportan de una manera compleja, si se
observa el mapa piezométrico se identifican isopiezas concéntricas cuyos valores
disminuyen del centro hacia afuera expresando la superficie piezométrica como un
abombamiento bajo el cual las líneas de flujo irradian desde la zona central, este tope
de valores en la superficie se localiza en la parte centro-oeste del tramo
correspondiente a la autopista Francisco Fajardo; ha de notarse que dicho tope tiende
a estar localizado en el contacto roca-sedimento, lo que pudiera dar a entender, como
lo explica Castany (1975) que se está en presencia de un área de permeabilidad baja o
un área regada abundantemente, siendo ésta privilegiada para la captación.
Por otra parte, el espaciamiento de las curvas isopiézicas expresan
directamente al gradiente hidráulico y traduce la forma de un perfil de depresión con
una fuerte curvatura hacia el sur donde se observan isopiezas con una menor
separación en comparación de las observadas hacia el norte con un perfil de depresión
mucho más suave. Lo que coincide con la distribución de facies laterales encontradas
en esta sub-zona, la cual pasa de sur a norte desde arena limosa a arena limosa con
grava (Ver Mapa Hidrogeológico, Anexo N° 8).
127
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
C
944
932
D
Superficie Piezométrica
Superficie Piezométrica
C’
D’
916
916
Figura 52.- Curva de Depresión.
Sub-Zona Ruiz Pineda - Antímano
Interacción Río – Acuífero
Para la Sub-Zona Ruiz Pineda- Antímano la superficie piezométrica subyace
en toda su extensión al nivel base del Río Guaire, como se aprecia en el perfil
correspondiente a esta sub-zona (Ver Perfiles del Oeste del Valle de Caracas, Anexo
N° 3); lo que da a entender que el Río Guaire tiende a ceder sus aguas al acuífero de
una manera teórica, ya que en la práctica se hace difícil saberlo con exactitud debido
al embaulamiento del mismo a la largo de toda su trayectoria.
128
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
V.4.4.- SUB-ZONA ANTIMANO – EL PARAISO
Las mediciones piezométricas más recientes de este tramo corresponden a
Octubre de 2001, y se presentan a continuación:
Pozo
C. Este
C. Norte
DF6354005E
DF6354143E
DF6354253A
DF6354259E
DF6354272A
DF6354273E
DF6354275A
DF6354276A
DF6354277A
DF6354278E
DF6354286A
DF6354525A
DF6354526A
DF6354538E
DF6354542A
DF6354550A
DF6354551A
DF6354552A
DF6354553N
DF6354563E
DF6354565A
DF6354566E
DF6354567A
DF6354568A
DF6354701A
DF6354703A
DF6354706E
DF6454010E
DF6454210A
DF6454215A
722.630
727.661
726.370
725.060
726.992
726.628
725.777
726.655
726.929
725.111
727.022
724.110
724.749
725.205
726.021
722.316
726.383
724.872
725.386
725.710
724.693
724388
725.051
724.204
718.807
718.714
715.853
724.550
725.942
724.672
1.158.735
1.160.908
1.160.750
1.158.617
1.160.903
1.160.686
1.160.619
1.161.209
1.161.180
1.160.123
1.160.873
1.159.656
1.159.752
1.159.724
1.160.529
1.159.675
1.161.023
1.159.476
1.159.971
1.161.572
1.159.014
1.159.043
1.160.000
1.159.288
1.154.208
1.154241
1.154.276
1.162.209
1.163.202
1.162.087
Cota (m)
905
900,8
895
915
890
888
882
884
885
895
895
940
890
838
887
945
903
890
892,4
910
899,8
902
893
900
972
962
952
980
950
985
Nivel
Piezométrico(m)
896,8
894,25
888,07
869
882,6
880,96
876,4
876,61
878,7
890,78
887,6
933,82
873,21
829,16
881,73
928
892
879,5
882,13
888,3
888,4
893,2
886,7
891,73
972
949,53
941,43
959,77
941,08
977,6
Tabla 12.- Datos de Niveles Piezométricos tomados de Pozos
De Hidrocapital en Octubre de 2001. Sub-Zona Antímano – El Paraíso
129
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
FIGURA 53.- MAPA PIEZOMÉTRICO
SUB-ZONA ANTÍMANO – EL PARAÍSO
1.162.000
930
920
N
910
1.161.000
940
930
900
920
910
E
890
900
890
1.160.000
940
830
F
880
930
1.159.000
870
840
860
850
920
910
900
890
E’
815
F’
860
870
880
1.158.000
890
1.157.000
721.000
722.000
723.000
724.000
500
725.000
0
726.000
500
727.000
1000
728.000
1500m
Los datos correspondientes a la Sub-Zona Antímano –El Paraíso, pertenecen a
Octubre del 2001, mes en el cual según los datos metereológicos suministrados por el
Observatorio Cajigal (ver tabla 1) corresponde al penúltimo mes lluvioso del año, con
una gran cantidad de almacenamiento, y por lo tanto, niveles piezométricos altos.
130
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
Para la Sub-Zona Antímano-El Paraíso las isopiezas adquieren una separación
entre ellas más evidente que en las sub-zonas anteriores, lo que indica junto con el
perfil de depresión y las dos facies predominantes encontradas en esta sub-zona
(como lo son arena gravosa y arena limosa con grava), estar en presencia de un
material más permeable.
E
925
Superficie Piezométrica
E’
860
F’
935
Figura 54.- Curva de Depresión.
Superficie
Piezométrica
Sub-Zona Antímano – El Paraíso
F’
815
Las isopiezas presentan una curvatura cóncava hacia la dirección de las líneas
de flujo, véase como estas convergen hacia una zona central ubicada específicamente
al norte de la localidad de la Vega y al suroeste de la localidad del Paraíso, es aquí
donde las isopiezas se hacen más estrechas formando círculos concéntricos y por
consiguiente una intensa depresión de la superficie piezométrica, que tiene como
causa probable un gasto débil (recarga), una fuerte permeabilidad o ambas.
Generalmente es la estructura de zonas de drenaje superficial o de una intensa
131
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
MODELO HIDROGEOLÓGICO CONCEPTUAL
explotación; lo que concuerda con las mayores concentraciones de pozos y altos
caudales registrados por el Ministerio del Ambiente
Interacción Río – Acuífero
Para la Sub-Zona Antímano-El Paraíso la superficie piezométrica se encuentra
a todo lo largo por debajo del nivel base del Río Guaire, como se aprecia en el perfil
correspondiente a esta sub-zona (Ver Perfiles del Oeste del Valle de Caracas, Anexo
N° 3), lo que señala que la comunicación va de
Río-Acuífero nuevamente.
Considerando al igual que los tramos anteriores el embaulamiento del Río Guaire.
132
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARÁMETROS HIDRÁULICOS
CAPÍTULO VI
PARÁMETROS
HIDRÁULICOS
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.- PARÁMETROS HIDRÁULICOS
Cuando se aborda la tarea de evaluar técnicamente un acuífero, es
imprescindible cuantificar una serie de parámetros, entre los cuales están aquellos que
permiten establecer la capacidad de éstos de almacenar y transmitir el agua, asociado
a lo cual se pueden referir los siguientes parámetros:
•
Porosidad
•
Permeabilidad
•
Transmisividad
•
Coeficiente de Almacenamiento
•
Espesor
•
Superficie
Aunque el espesor y la superficie no son considerados como parámetros
hidráulicos, estos influyen en la variación de la transmisividad y coeficiente de
almacenamiento en toda la zona estudiada.
VI.1. POROSIDAD
Se puede definir a la porosidad como el volumen de espacios vacíos por
unidad de volumen que posee una roca o suelo. Se abrevia con la letra phi (Φ) y es
una magnitud adimensional que se expresa como porcentaje.
La porosidad puede ser total o efectiva. La porosidad total se refiere al
volumen total de espacios vacíos (poros) por unidad de volumen de la roca o suelo,
los cuales pueden estar saturados tanto de agua móvil (gravitacional) como de agua
inmóvil (adherida), mientras que la porosidad eficaz, también denominada porosidad
134
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
cinemática, se refiere al volumen de espacios porosos saturados por agua móvil
(gravitacional) por unidad de volumen de la roca o suelo.
Φ efectiva = Volumen de poros saturados con agua móvil * 100
Volumen de la roca o suelo
(Ecuación VI.1.1.)
La porosidad efectiva está íntimamente relacionada con la conductividad
hidráulica (permeabilidad) y es la magnitud que se utiliza en el cálculo de las reservas
del acuífero, ya que representa el volumen de agua extraíble del acuífero.
Para fines prácticos, varios autores han establecido valores de porosidad total
y efectiva para diversos materiales, en función de las experiencias obtenidas en sus
investigaciones. La tabla 13 muestra los valores de porosidades totales y efectivas de
diversos materiales rocosos.
135
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Porosidad Total
(%)
Material
Tipo
Rocas Masivas
Descripción
Medi
a
Máx.
Mín.
Medi
a
Máx.
Mín.
Granito
0,3
4
0,2
<,02
0,5
0,0
Caliza
8
15
0,5
<0,5
1
0,0
Dolomía
5
10
2
<0,5
1
0,0
Areniscas
15
25
3
10
20
0,0
0,5
5
0,2
<0,5
2
0,0
Piroclástos y Tobas
30
50
10
<5
20
0,0
Escorias
25
80
10
20
50
1
Pumitas
85
90
50
<5
20
0,0
Basaltos Densos, Fonolitas
2
5
0,1
<1
2
0,1
Basaltos Vacuolares
12
30
5
5
10
1
Aluviones
25
40
20
20
35
5
Dunas
35
40
30
25
30
10
Gravas
30
40
25
20
35
10
Loess
45
55
40
<5
10
0,1
Arenas
35
45
20
25
35
10
Depósitos Glaciares
5
35
15
15
30
5
Limos
40
50
35
10
20
2
Arcillas sin Compactar
45
60
40
2
10
0,0
Suelos Superiores
50
60
30
10
20
1
Rocas Metamórficas
Rocas
Volcánicas
Rocas
Sedimentarias
Sueltas
Porosidad Eficaz
(%)
Tabla 13.- Porosidades Totales y Efectivas de diversos materiales según Johnson (1967), Davis (1969),
Schoeller (1962) y Ward (1967). Fuente: Mejías y Guerrero (2000).
En base a la tabla 13, se determinó que el valor de porosidad efectiva media
correspondiente al tipo de materiales permeables que se encuentran en el área de
estudio (Aluvión) es del orden del 20%.
136
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.2.- PERMEABILIDAD
La permeabilidad puede definirse como la capacidad de un medio (roca o
suelo) de permitir el paso de fluidos, tanto líquidos como gases y se abrevia con la
letra K.
Cuando nos referimos a medios porosos saturados de agua, se habla de
permeabilidad como conductividad hidráulica, que se expresa en m/día. La
conductividad hidráulica es un coeficiente de proporcionalidad que describe la
velocidad a la cual el agua se mueve a través del medio permeable.
Al igual que con la porosidad, varios autores han establecido valores de
conductividad hidráulica para diversos materiales, en función de las experiencias
obtenidas en sus investigaciones. La tabla 14 muestra una clasificación de o
materiales rocosos en base a su conductividad hidráulica.
Permeabilidad
(m/día)
10-6
10-5
Calificación
Impermeable
Calificación del
Acuífero
Acuicludo
Tipo de
Materiales
Arcilla Comp.
Pizarra
Granito
10-4
10-3
10-2
10-1
Poco
Permeable
Acuitardo
Algo
Permeable
Acuífero
Pobre
Limo
Arenoso
Limo
Arcilla
Limosa
Arena Fina
Arena
Limosa
Caliza Frac.
1
101
102
Permeable
Acuífero
Regular a
Bueno
Arena Limpia
Grava y
Arena
Arena Fina
103
Muy
Permeable
Acuífero
Excelente
Grava Limpia
Tabla 14.- Clasificación de Terrenos por la Conductividad Hidráulica.
Fuente: Mejías y Guerrero (2000).
137
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.3. TRANSMISIVIDAD
La transmisividad puede definirse como el volumen de agua que se escurre
por una sección del acuífero de 1 m de ancho por todo su espesor bajo una pendiente
hidráulica unitaria. Este concepto es equivalente a decir que la transmisividad es igual
al producto del coeficiente de conductividad hidráulica (K) por el espesor saturado de
roca permeable del acuífero (H). La transmisividad puede considerarse como una
medida de la capacidad que tiene un acuífero de producir agua. Se abrevia con la
letra T y se expresa en m2/día.
T = K * m (Ecuación VI.3.1)
donde T es la transmisividad del acuífero, K es el valor de conductividad hidráulica
de los materiales permeables del acuífero y m es el espesor de roca permeable
saturada del acuífero.
Existen varios métodos para determinar la transmisividad de un acuífero,
como lo son la prueba de recuperación de acuífero y prueba de recuperación del nivel
freático, en este caso se empleó el Método de Recuperación de Theis (Kruseman y De
Ridder, 1975).
El Método de Recuperación de Theis consiste en graficar en una hoja
semilogarítmica las mediciones obtenidas en la prueba de los niveles de agua
recuperados o abatimientos residuales en el eje Y, contra los valores de los tiempos
recalculados a los cuales se realizaron dichas mediciones en el eje X. A partir de estos
valores ploteados, se obtiene una recta promedio de los mismos. Posteriormente se
obtiene un valor de ∆S para un ciclo logarítmico, el cual se sustituye dentro de la
siguiente ecuación:
138
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
T =
2.30 ∗ Q
…(Ecuación VI.3.2)
4π ∗ ∆S
ΛS = S 2 − S 1 …(Ecuación VI.3.3)
Donde T es la transmisividad (m2/día), Q es el caudal (l/s), S es el abatimiento
residual (m) y ∆S es la diferencia de abatimiento residual en un ciclo logarítmico (m).
Obteniendo el valor de transmisividad, posteriormente se puede obtener el valor de la
conductividad hidráulica del acuífero en ese punto, utilizando la ecuación VI.3.1.
VI.4.- COEFICIENTE DE ALMACENAMIENTO
El coeficiente de almacenamiento (S) de un acuífero se define como el
volumen de agua que el acuífero libera o absorbe por unidad de superficie por cambio
unitario de presión en la componente normal a esa superficie.
El coeficiente de almacenamiento se calcula a partir del gráfico tiempo –
abatimiento, que previamente hemos empleado para determinar el Coeficiente de
Transmisividad, usando la intercepción de la línea recta para cero abatimiento como
to, siendo S :
S = 2,25*T * to ….
(Ecuación VI.4.1)
r²
Donde to es la intercepción de la línea recta con el eje de cero abatimiento y r
es la distancia desde el centro del pozo de bombeo hasta donde se mide el
abatimiento, en metros.
139
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.5.- ESPESORES
El espesor de sedimento corresponde a la altura de material que rellena una
depresión, la cual puede ser variable a lo largo de toda su extensión; su valor
expresado en unidades de longitud va desde un punto en superficie hasta un punto en
el sustrato rocoso trazando una línea vertical que une a ambos.
VI.6.- SUPERFICIES
La superficie de sedimentos es toda el área generada por el depósito del
mismo; ésta es limitada por la roca que la circunda. Generalmente se presenta de
forma irregular, expresada en unidades cuadradas de longitud.
VI.7.- RED DE POZOS DEL OESTE DEL
VALLE DE CARACAS
La zona en estudio presenta un total de 71 pozos de bombeo (ver tabla 15 y
Mapa de Ubicación de Pozos, Anexo N° 1 ) construidos tanto por el Ministerio del
Ambiente e Hidrocapital como por industrias privadas y comercios. Los gastos
registrados varían entre 4 y 45 l/seg., siendo la Sub-Zona Antímano-El Paraíso donde
se tienen los mayores caudales.
|N°
1
2
3
4
5
6
IDENTIFICACION
DF6354001A
DF6354004A
DF6354005E
DF6354006E
DF6354007A
DF6354008A
PROPIETARIO
UCAB
HOSPITAL ALGODONAL
SIVENSA
CERVECERIA POLAR
PROCTER Y GAMBLE
BRAHMA
140
NORTE
UTM
1.157.981
1.159.705
1.158.735
1.158.788
1.159.282
1.159.680
ESTE
UTM
721.840
722.346
722.630
722.960
723.443
723.167
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
Q
l/s
6,00
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42
43
44
45
46
47
DF6354009A
DF6354015A
DF6354016A
DF6354020A
DF6354022A
DF6354023A
DF6354024A
DF6354028A
DF6354029A
DF6354030A
DF6354031A
DF6354032A
DF6354033A
DF6354041A
DF6354042A
DF6354043E
DF6354143E
DF6354253A
DF6354259E
DF6354269E
DF6354272A
DF6354273E
DF6354274A
DF6354275A
DF6354276A
DF6354277A
DF6354278E
DF6354279A
DF6354280N
DF6354281N
DF6354282N
DF6354283N
DF6354284M
DF6354285A
DF6354286A
DF6354525A
DF6354526A
DF6354538E
DF6354542A
DF6354550A
DF6354551A
CEMENTOS LA VEGA
CEMENTOS LA VEGA
GOMELAST
PROCTER Y GAMBLE
CEMENTOS LA VEGA
CEMENTOS LA VEGA
CEMENTOS LA VEGA
PEPSICOLA
COCA COLA
PROCAFE
PROMOTORA INDUSTRIAL
SIVENSA
TELARES LOS ANDES
PARQUE CARICUAO-INPARQUE
PQE CARICUAO
CERVECERIA POLAR
INOS
QUINTA ARAUCANA
CA FAB CEMENTO LA VEGA
HOGAR - CLUB CANARIO
HIDORCAPITAL/ALCALDIA
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
PQUE CARICUAO
HIDROCAPITAL/ALCALDIA
HIDROCAPITAL/ALCALDIA
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
141
1.157.970
1.158.093
1.161.049
1.159.345
1.158.370
1.157.969
1.158.678
1.157.761
1.158.693
1.158.692
1.158.845
1.158.849
1.159.495
1.154.391
1.154.207
1.158.970
1.160.908
1.160.750
1.158.617
1.160.653
1.160.903
1.160.686
1.159.108
1.160.619
1.161209
1.161.180
1.160.123
1.158.829
1.158738
1.158738
1.158.831
1.158.892
1.153.159
1.158.696
1.160.873
1.159.656
1.159.752
1.159.724
1.160.529
1.159.675
1.161.023
724.821
724.911
725.683
723.656
724.970
724.790
725.029
721.081
722.535
722.504
722.260
723.051
723.138
722.654
722.776
722.564
727.661
726.370
725.060
726.355
726.992
726.628
724.965
725.777
726.655
726.929
725.111
724.693
724.846
724.877
724.906
724.815
722.357
723.143
727.022
724.110
724.749
725.205
726.021
722.316
726.383
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
7,33
1,30
5,00
4,00
30,00
30,00
20,00
35,00
20,00
20,00
20,00
10,00
30,00
20,00
25,00
30,00
35,00
10,00
18,00
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
48
49
50
51
52
53
54
55
56
57
58
59
60
61
62
63
64
65
66
67
68
69
70
71
DF6354552A
DF6354553N
DF6354563E
DF6354565A
DF6354566E
DF6354567A
DF6354568A
DF6354701A
DF6354702M
DF6354703A
DF6354704A
DF6354705A
DF6354706E
DF6354707A
DF6454003A
DF6454005A
DF6454009E
DF6454010E
DF6454011E
DF6454152E
DF6454153E
DF6454210A
DF6454215A
DF6454225E
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
VENECARNE
EDIFICIO TROPICAL
INDUSTRIAS WISMAR
TELARES PALOS GRANDES
TELARES PALOS GRANDES
TELARES PALOS GRANDES
CONFECCIONES BAMBINO
TEXTILERA SATURNO
ALMACENADORA CARACAS
LA INDIA (Fbca. Chocolate)
TEJIDOS SUPER P
ONDUVEN
HIDROCAPITAL
HIDROCAPITAL
INPARQUE
LA SILSA SIND LECHE
HIDROCAPITAL
1.159.476
1.159.971
1.161.572
1.159.014
1.159.043
1.160.000
1.159.288
1.154.208
1.154.218
1.154.241
1.154.304
1.154.251
1.154.276
1.154.271
1.163.347
1.162.924
1.162.334
1.162.209
1.162.350
1.162.480
1.162.910
1.163.202
1.162.087
1.161.572
724.872
725.386
725.710
724.693
724.388
725.051
724.204
718.807
718.675
718.714
718.689
718.550
715.853
718.714
726.404
725.762
724.854
724.550
724.579
723.636
724.580
725.942
724.672
725.710
Tabla 15.- Pozos de Bombeo del Área en Estudio
En cuanto a los pozos de observación existe una gran limitante, debido a que
sólo se cuenta con un pozo, lo que generó una serie de resultados validos de
coeficiente de almacenamiento sólo para un sector de El Valle ubicado en la SubZona Antímano-El Paraíso.
142
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
30,00
30,00
12,00
35,00
25,00
45,00
30,00
2,86
40,00
5,00
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.8.- PRUEBAS DE BOMBEO
Una prueba de bombeo es el método mediante el cual se puede calcular los
parámetros arriba señalados y consiste en bombear agua del acuífero a través de un
pozo, durante un cierto tiempo (t) y a un cierto caudal (Q). En el pozo de bombeo y
en algunos pozos de observación situados en las cercanías del pozo bombeado, se
mide el efecto que el bombeo produce sobre el nivel de agua. Sustituyendo en una
fórmula apropiada los valores de los descensos del nivel de agua en los piezómetros,
las distancias de éstos al pozo y las descargas del bombeo, se obtienen las
características hidráulicas del acuífero.
Las pruebas de bombeo pueden ser de dos tipos principales: pruebas de
acuíferos y pruebas de pozos. Las pruebas de acuíferos tienen el objetivo principal de
determinar los parámetros hidrogeológicos del acuífero, tales como transmisividad,
conductividad hidráulica, coeficiente de almacenamiento, etc. Las pruebas de pozos
tienen como objetivo principal proporcionar información sobre el rendimiento y el
nivel del agua en el pozo.
Las pruebas de acuíferos pueden ser de descarga y de recuperación. En las
pruebas de descarga se miden las disminuciones (abatimientos) de los niveles de agua
cada cierto tiempo, producidos por efectos del bombeo. En las pruebas de
recuperación se miden los aumentos (recuperaciones) de los niveles del agua cada
cierto tiempo, luego de haber bombeado el acuífero por un tiempo determinado. Para
la zona de estudio se contó con las siguientes pruebas de bombeo realizadas por el
Ministerio del Ambiente, las cuales se disponen en la tabla 16:
143
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Ubicación
Coordenada Norte
Coordenada Este
Caudal (l/s)
Tipo de Prueba
1.159.400
724.900
42
Acuífero de Descarga
Uslar
1.158.640
723.200
33
Acuífero de Descarga
Distribuidor La Araña
1.160.900
726.800
15,6
Acuífero de Descarga
Los Leones
1.160.700
726.240
22
Acuífero de descarga
Brígido Iriarte
1.159.740
725.300
24
Acuífero de Descarga
Brígido Iriarte
1.159.900
725.320
24
Acuífero de Descarga
Canchas de Tenis de
La Paz
Tabla 16.- Ubicación de Pruebas de Bombeo.
Ministerio del Ambiente
144
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
1.- Canchas de Tenis de la Paz:
Tiempo
Nivel de Agua (m)
Abatimiento (m)
0,0007
14,4900
4,8900
0,0021
14,6400
5,0400
0,0035
14,6800
5,0800
0,0049
14,7600
5,1600
0,0069
14,8100
5,2100
0,0104
14,7900
5,1900
0,0139
14,8600
5,2600
0,0208
14,8400
5,2400
0,0278
15,0000
5,4000
0,0347
15,1700
5,5700
0,0417
15,2800
5,6800
0,0556
15,4300
5,8300
0,0833
15,6800
6,0800
0,0972
15,7000
6,1000
0,1111
15,7100
6,1100
0,1250
15,9500
6,3500
0,1458
16,0000
6,4000
0,1667
16,1200
6,5200
0,1875
16,2000
6,6000
0,2083
16,2400
6,6400
0,2500
16,3800
6,7800
0,2917
16,4600
6,8600
0,3333
16,5400
6,9400
0,3750
16,6100
7,0100
0,4583
16,7500
7,1500
0,5417
16,8500
7,2500
0,6250
16,9000
7,3000
0,7500
17,0400
7,4400
0,8750
17,1600
7,5600
1,0000
17,2000
7,6000
1,2986
17,4000
7,8000
Tabla 17.- Datos de prueba de
bombeo en las Canchas de Tenis de
la Paz
145
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Figura 55.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de Prueba de
Bombeo en Canchas de Tenis de la Paz
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
42
634
Tabla 18.- Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica Tiempo –
Abatimiento de Prueba de Bombeo en Cancha de Tenis de la Paz
146
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
2.- Uslar:
Tiempo (min.)
Nivel del Agua (m)
Abatimiento (m)
1
20
8,42
3
20,46
8,88
5
20,7
9,12
7
20,72
9,14
10
20,69
9,11
15
20,63
9,05
20
20,65
9,07
30
20,68
9,1
40
20,72
9,14
50
20,65
9,07
60
20,69
9,11
80
20,71
9,13
100
20,71
9,13
120
20,72
9,14
140
20,66
9,08
160
20,65
9,07
180
20,65
9,07
210
20,67
9,09
240
20,69
9,11
270
20,69
9,11
300
20,69
9,11
360
20,68
9,1
420
20,67
9,09
480
20,67
9,09
540
20,7
9,12
660
20,75
9,17
Tabla 19.- Datos de prueba de
bombeo en el Uslar
147
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Figura 56.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de la
Prueba de Bombeo del Uslar
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
33
279,36
Tabla 20.- Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica Tiempo –
Abatimiento de la Prueba de Bombeo en el Uslar
148
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
3.- La Araña:
Tiempo (d)
Nivel del Agua (m)
Abatimiento (m)
0,0417
19,7000
8,6100
0,0556
19,8300
8,7400
0,0694
19,9800
8,8900
0,0833
20,2400
9,1500
0,0972
20,5500
9,4600
0,1111
20,9000
9,8100
0,1250
20,9200
9,8300
0,1458
21,0900
10,0000
0,1667
21,1000
10,0100
0,1875
23,8500
12,7600
0,2083
26,1800
15,0900
0,2500
27,6000
16,5100
0,2917
29,0900
18,0000
0,3333
29,8500
18,7600
0,3750
30,1700
19,0800
0,4583
34,9000
23,8100
0,5417
36,2000
25,1100
0,6250
36,5000
25,4100
0,7500
37,3500
26,2600
0,8750
37,5500
26,4600
1,0000
36,3500
25,2600
149
Tabla 21.- Datos de prueba de
bombeo de pozo en el Distribuidor
La Araña
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Figura 57.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de
Prueba de bombeo de Pozo en La Araña
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
15,6
135
Tabla 7.5.13 Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica
Tiempo – Abatimiento
150
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
4.- Los Leones:
Tiempo (d)
Nivel del Agua (m)
Abatimiento (m)
0,0021
28,1700
16,7700
0,0035
28,3500
16,9500
0,0049
28,3800
16,9800
0,0069
28,4900
17,0900
0,0104
28,6300
17,2300
0,0139
28,7800
17,3800
0,0208
29,0100
17,6100
0,0278
29,2700
17,8700
0,0347
29,2700
17,8700
0,0417
30,0700
18,6700
0,0556
31,2400
19,8400
0,0694
31,4600
20,0600
0,0833
31,6300
20,2300
0,0972
31,8300
20,4300
0,1111
31,8000
20,4000
0,1250
31,9400
20,5400
0,1667
32,3000
20,9000
0,1875
32,3500
20,9500
0,2083
32,5000
21,1000
0,2500
32,6300
21,2300
0,2917
32,6200
21,2200
0,3333
32,6200
21,2200
0,3750
32,5800
21,1800
0,4583
32,7700
21,3700
0,5417
32,8500
21,4500
0,6250
32,7900
21,3900
0,7500
32,8000
21,4000
0,8750
32,6000
21,2000
1,0000
32,9000
21,5000
1,5000
32,8700
21,4700
2,0000
32,9000
21,5000
2,0007
20,1700
8,7700
2,0021
20,0800
8,6800
2,0035
18,4800
7,0800
2,0049
17,8600
6,4600
2,0069
17,2400
5,8400
151
Tabla 22.- Datos de prueba de
bombeo de pozo en Los Leones
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
2,0104
16,5400
5,1400
2,0139
16,2200
4,8200
2,0208
15,1100
3,7100
2,0278
2,0347
14,7000
14,3200
3,3000
2,9200
2,0417
14,0000
2,6000
2,0556
13,7400
2,3400
2,0694
13,4000
2,0000
2,0833
13,2500
1,8500
2,0972
13,1000
1,7000
2,1111
13,0000
1,6000
2,1250
12,7900
1,3900
2,1458
12,6600
1,2600
2,1667
12,5400
1,1400
2,1875
12,5000
1,1000
2,2083
12,2000
0,8000
2,2500
12,0000
0,6000
2,2917
11,8000
0,4000
Figura 58.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de
prueba de bombeo de pozo en Los Leones
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
0,76
159
Tabla 23.- Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica Tiempo –
Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en Los Leones.
152
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
5.- Brígido Iriarte I:
Tiempo (min.)
Nivel del Agua (m)
Abatimiento (m)
1340
15,36
1,13
1360
15,3
1,07
1380
15,24
1,01
1400
15,19
0,96
1420
15,16
0,93
1440
15,13
0,9
1490
15,07
0,84
1500
15,04
0,81
1530
14,97
0,74
1560
14,94
0,71
1632
14,86
0,63
Tabla 24.- Datos de prueba de bombeo
de pozo en el Brígido Iriarte
Figura 59.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de Prueba
de Bombeo de pozo en el Brígido Iriarte
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
Coeficiente de Almacenamiento
22
770
0,132
Tabla 25.- Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica Tiempo –
Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en el Brígido Iriarte
153
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
6.- Brígido Iriarte II :
Tiempo (min.)
Nivel del Agua (m)
Abatimiento (m)
1340
15,36
1,13
1360
15,3
1,07
1380
15,24
1,01
1400
15,19
0,96
1420
15,16
0,93
1440
15,13
0,9
1490
15,07
0,84
1500
15,04
0,81
1530
14,97
0,74
1560
14,94
0,71
1632
14,86
0,63
Tabla 26.- Datos de prueba de
bombeo de pozo en el Brígido
Iriarte II
Figura 60.- Gráfico Tiempo-Abatimiento de prueba
de bombeo de pozo en el Brígido Iriarte II
Caudal (l/seg.)
Transmisividad (m²/d)
24
434,88
Tabla 27.- Caudal y Transmisividad obtenido de la Gráfica Tiempo –
Abatimiento de prueba de bombeo de pozo en Brígido Iriarte II
154
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Análisis de los Parámetros Hidráulicos
- Porosidad y Conductividad Hidráulica: En lo que respecta a la porosidad
y conductividad hidráulica propia del material que conforma al acuífero, se puede
llegar a valores cuantitativos y cualitativos respectivamente, debido a la relación
existente en los tamaños de granos de cada facie, así como también deducciones
obtenidas de los mapas piezométricos.
Como ya se sabe, el Valle de Caracas es un depósito de sedimentos aluviales y
fluviales en donde materiales como gravas, limos, arenas y arcillas se han dispuesto
de manera heterogénea a través del tiempo, relatando una diversidad de ambientes de
depositación entre los cuales se destacan canales abandonados, llanuras y abanicos
aluviales, etc. Por esta razón se ubica al sedimento pertinente a la zona de estudio con
una porosidad del 20% y una conductividad hidráulica algo permeable para arenas
limosas y permeable para arenas con grava; utilizando las prácticas clasificaciones de
Johnson (1967), Davis (1969), Schoeller (1962) y Ward (1967) para porosidad, y
Mejías y Guerrero (2000) para la conductividad hidráulica.
- Transmisividad: En lo que concierne a la transmisividad, los datos
suministrados de pruebas de bombeo permitieron la construcción de las gráficas
tiempo-abatimiento utilizando para ello el software Acuifertest v 3.0. Los valores
obtenidos varían de 135 m²/d – 770 m²/d, lo que indica que el acuífero presenta una
gran capacidad para desplazar el agua a través del material que lo conforma,
considerándose valioso para uso industrial, municipal o de irrigación, pudiendo
presentar un gran radio de influencia, suaves pendientes de la superficie dinámica y
poca profundidad del cono de abatimiento.
Es importante mencionar que estos valores de transmisividad corresponden a
la Sub-Zona Antímano – El Paraíso, ya que sólo se contaba con pruebas de bombeo
en dicha sub-zona.
155
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
- Coeficiente de Almacenamiento: Para obtener valores confiables de
coeficientes de almacenamientos es necesario contar al menos con un pozo de
observación con el cual se podrá satisfacer la ecuación derivada de la planteada por
Theis, en la cual la distancia desde el centro de pozo de bombeo hasta el pozo de
observación funciona como el denominador de la misma.
Para la mayoría de las pruebas de bombeo realizadas por el Ministerio del
Ambiente no se contaba con pozos de observación y dichas pruebas eran realizadas
en el mismo pozo de bombeo, lo que permitió calcular sólo valores de transmisividad.
Sin embargo existe un caso en el pozo DF6354538 ubicado en el Brígido Iriarte (Ver
Mapa de Ubicación de Pozos, Anexo N° 1) en el cual se empleó un pozo de
observación para realizar la prueba, obteniendo un coeficiente de almacenamiento de
0,132, lo que indica estar en presencia de un acuífero libre, coincidiendo con las
facies encontradas las cuales no muestran una gran extensión lateral de materiales
impermeables (arcillas) que funcionen como acuicludos o acuifugos (Ver Perfiles del
Oeste del Valle de Caracas, Sub-Zona Antímano-El Paraíso, Anexo N° 3).
- Espesores y Superficie: Como se vió en el capitulo IV, los sustratos rocosos
de cada una de las sub-zonas no se presentan como una superficie plana que daría un
espesor de sedimento constante en la extensión, sino por el contrario éste se presenta
de forma irregular encontrándose diversos espesores en toda la zona.
Aun conociéndose que la tendencia general del aumento del espesor va de
oeste a este en toda la zona en estudio, a continuación se específica el
comportamiento del espesor para cada sub-zona:
-Sub-Zona Las Adjuntas-Ruiz Pineda: Las mayores acumulaciones del material
(arena limosa) se registran en la franja norte como se observa en el mapa isópaco
(capítulo IV) superando los 20 m de espesor, específicamente en la zona de Ruiz
156
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Pineda. La extensión es de aproximadamente 365.997,61 m² de forma alargada y con
un ancho ligeramente constante.
-Sub-Zona Zoológico-Ruiz Pineda: Los mayores espesores se encuentran hacia el
este alcanzando los 20 m, por otra parte, en la zona oeste se identifican los menores
espesores con un promedio de 4m coincidiendo con la descarga de la quebrada
Caricuao al Río Guaire. Es posible que la franja sur se encuentre favorecida por
mayor acumulación de material, debido a la presencia de la Falla Dextral
anteriormente mencionada que genera el valle. La extensión es de aproximadamente
542.954,11 m² con una forma estrecha hacia el oeste y ancha hacia el este.
-Sub-Zona Ruiz Pineda-Antímano: La facie predominante presenta espesores que
varían de 3m a 20m, se hace difícil identificar las zonas en las cuales estos espesores
se encuentran en mayor o menor cantidad, debido a que el sustrato rocoso se
encuentra de una manera muy irregular. La extensión es de aproximadamente
1.066.251,93 m² con forma alargada y un ancho ligeramente constante.
-Sub-Zona Antímano-El Paraíso: La primera facie predominante de arena gravosa
tiene espesores variables de 18m a 81m aproximadamente, mientras que la segunda
facie predominante de arena limosa con grava sus espesores varían de 3m a 31m; el
mayor registro de volúmenes de sedimentos se encuentran hacia el este. La extensión
es de aproximadamente 9.879.275,63 m² la cual se incrementa progresivamente de
este a oeste.
157
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.9.- CÁLCULO DE RESERVAS PROBABLES
El cálculo de las reservas es una de las actividades más importantes dentro de
un estudio de un acuífero, y su determinación, al igual que los valores de
conductividad hidráulica y de transmisividad, constituyen los parámetros que
representan la potencialidad del acuífero para extraer del mismo agua subterránea
para uso doméstico e industrial.
VI.9.1.- CÁLCULO DE VOLÚMENES DE SEDIMENTO
PERMEABLE SATURADO
El volumen de sedimento permeable saturado se calculó como el volumen
total del acuífero saturado, entre la superficie del terreno y la superficie del sustrato
rocoso. Los resultados obtenidos son los siguientes:
Sub - Zona
Área (m²)
Profundidad Promedio
Volumen de Sedimento
(m)
Permeable Saturado
(m³)
Las Adjuntas – Ruiz
365.997,61
4,80
1.759.979,28
Zoológico – Ruiz Pineda
542.954,11
5,04
2.738.815,66
Ruiz Pineda - Antímano
1.066.251,93
9,19
9.806.911,36
Antímano – El Paraíso
9.879.275,63
38,40
379.409.090
Pineda
TOTAL
393.714.796,3
Tabla 28.- Cálculo del Volumen de Sedimento
Permeable saturado por Sub - Zonas
158
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.9.2.- CÁLCULO DEL VOLUMEN DE AGUA
El volumen de reservas probables de agua se obtiene por el producto del
volumen de sedimento permeable saturado por la porosidad efectiva de los materiales
permeables del acuífero.
Volumen Reserva de Agua = Volumen Roca Permeable Saturada * Φ efectiva
…(Ecuación VI.7.2.1)
El volumen de reservas permanentes representa el volumen total de agua libre
almacenada en el acuífero que puede ser producible por medio de pozos.
Los cálculos efectuados con el valor de porosidad efectiva realizados son los
siguientes:
Sub - Zona
Volumen (m³)
Porosidad Efectiva (%)
Volumen de Agua (m³)
Las Adjuntas – Ruiz
1.759.979,28
0,20
351.995,85
Zoológico – Ruiz Pineda
2.738.815,66
0,20
547.763,13
Ruiz Pineda - Antímano
9.806.911,36
0,20
1.961.382,27
Antímano – El Paraíso
379.409.090
0,20
75.891.818
Pineda
TOTAL
78.752.959,25
Tabla 29.- Cálculo de Volumen de Reservas
Probables de Agua por Sub - Zonas
Los resultados obtenidos permiten afirmar que las reservas probables
permanentes del acuífero dentro del área de estudio son de aproximadamente
78.752.959,25 m³.
159
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
VI.10.- CARACTERÍSTICAS DEL AGUA SUBTERRÁNEA
Con el fin de establecer las condiciones presentes en el agua subterránea, se
realizan análisis físico-químicos que permiten evaluar la calidad del agua para
cualquier tipo de uso que se le dé. Debido a la limitada accesibilidad y a los costos
que implica el análisis físico-químico, no se llevaron a cabo dichos análisis, es por
ello que se presenta a continuación una información procedente del Laboratorio
Central de Agua de Hidrocapital del año 1994, el cual presenta poco detalle, por no
hacer especificaciones de los valores de iones o minerales disueltos ni bacteriológicos
de las aguas subterráneas del oeste del Valle de Caracas (ver tabla 30).
Pozos
DF6354039A
Ubicación
Mamera-
Uso
Fe
Mn
TSD
Dureza
Alcalinidad
(p.p.m.)
(p.p.m.)
(p.p.m.)
(p.p.m.)
(p.p.m.)
Industrial
0
0
563
358
312
Antímano
DF6354003A
Antímano
Industrial
--
0
531
298
296
DF6354005A
Antímano
Industrial
--
0
155
118
122
DF6354009A
La Vega
Industrial
--
0
848
500
338
DF6354285A
Montalbán
------
1
0
458
380
270
DF6354279N
Montalbán
Áreas
--
0
658
504
290
Urbano
2
0
460
292
252
Urbano
1
0
450
360
240
Urbano
0
0
288
232
218
Verdes
DF6354278A
Las
Fuentes
DF6354275A
San
Martín
DF6354276A
Paraíso
Tabla 30.- Análisis Físico-Químico del Agua.
Hidrocapital 1994.
160
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
Industrias o tipo
de Utilización
Lavanderías
Fabrica de
Plásticos
Bebidas Gaseosas
Fabrica de Papel
fino
Textiles
Curtido de Telas
Tintorerías
Fe (p.p.m.)
TSD (p.p.m.)
Dureza (p.p.m.)
0.2
0.2
-200
50
--
Alcalinidad
(p.p.m.)
---
0.3
0.1
580
200
-100
-75
0.1-1
0.2
0.25
--200
0-50
50-500
--
-130
--
Tabla 31.- Tolerancia para el uso del agua a nivel industrial y comercial. Limites
permisibles en partes por millón. Tomado de Porras y Thalvin “Aguas Subterráneas
Problemas de Contaminación”
En función de la comparación establecida entre las características químicas de
las aguas subterráneas y los parámetros exigidos por cada una de las industrias y
comercios evaluados, se tiene que tanto tintorerías, textiles, fabricas de papel fino,
fabrica de plásticos y lavanderías no deberían utilizar el agua subterránea de esta zona
sin un tratamiento previo, debido a que el agua presenta valores de TSD y Fe que
superan hasta diez veces los valores permitidos.
Por su parte, la industria de bebidas gaseosas no presenta grandes limitantes
en los valores de TSD, sin embargo debe tomar en consideración con los altos valores
de Fe encontrados.
Posible Influencia del Río Guaire en la Calidad del Agua Subterránea
Como se vió en el capítulo VI, el Río Guaire y el acuífero pueden interactuar a
lo largo de la extensión del Valle, en donde la superficie piezométrica entre en
contacto con el nivel base del río, en el caso de estudio la superficie piezométrica se
encuentra por debajo de este nivel en un 95% aproximadamente, lo que indica que la
tendencia de comunicación es de río a acuífero; pero bien es sabido que el Río Guaire
161
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
PARAMÉTROS HIDRÁULICOS
está embaulado en todo su recorrido limitando esta comunicación, sin embargo existe
una alta posibilidad de infiltraciones por el fracturamiento de la losa de concreto.
El agua del Río Guaire presenta un fuerte problemas de contaminación debido
a las descargas urbanas, industriales y en menor grado agrícolas, lo que ha provocado
una concentración de minerales y sales disueltas en gran proporción. Contenidos altos
de nitratos, sodio, cloruros y la presencia de coliformes fecales presentes en el flujo
de agua percolan a través de las fracturas de la losa y entran en contacto con el agua
del acuífero causando una alteración en el equilibrio físico-químico y bacteriológico,
la cual sino se toman medidas pertinentes, el acuífero progresivamente pudiese llegar
a una inminente contaminación.
162
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
CAPÍTULO VII
CONCLUSIONES Y
RECOMENDACIONES
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
VII.- CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
VII.1.- CONCLUSIONES
•
El oeste del Valle de Caracas posee cuatro sub-zonas definidas en base a criterios
fisiográficos y geomorfológicos que les otorgan características particulares desde
el punto de vista estructural y sedimentológico. Estas sub-zonas
conforman lo
que se conoce como el tramo oeste del acuífero de la Ciudad Capital.
•
Las precipitaciones y las temperaturas promedio en la cuenca alta del Río Guaire
indican que los meses propicios para la recarga del acuífero van de junio a
octubre, donde se superan los déficit producidos por evapotranspiración llegando
a almacenar un promedio de 91 mm. para el último mes lluvioso; sin embargo se
debe considerar los 900 l/seg. que se descargan por fuga de la red de acueductos.
•
El área de estudio presenta tres facies predominantes: Arena limosa, Arena limosa
con grava y Arena gravosa; las cuales varían lateralmente de oeste a este desde un
material arenoso a uno más gravoso, tomando en consideración la presencia de
lentes de arcillas que no alcanzan a tener grandes extensiones.
•
El macizo rocoso presenta características de meteorización y fracturamiento
propicias para la infiltración del agua, lo que indica que cierta cantidad de ésta se
almacena dentro de una red de fisuras que pueden encontrarse tanto en la
superficie como en el sub-suelo.
•
El espesor de sedimentos aumenta progresivamente de oeste a este, es decir, el
mayor volumen del material se encuentra hacia la Sub-Zona Antímano- El
Paraíso, llegando a alcanzar hasta 80 m de espesor. A diferencia de las otras subzonas donde los espesores no superan los 20 m.
164
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
•
Al acuífero del oeste del Valle de Caracas se le atribuye una tipología de acuífero
libre, evidenciado por el comportamiento de las isopiezas, la presencia en mayor
proporción de facies arenosas en comparación con materiales impermeables
(arcillas), esto aunado a los resultados arrojados por las pruebas de bombeo
donde el coeficiente de almacenamiento se encontraba dentro del rango de
acuíferos libres, esto tomando en consideración que sólo se contaba con un pozo
de observación.
•
La depresión anómala de la superficie piezométrica correspondiente a la SubZona Antímano-El Paraíso ubicada al sur, es provocada por un intenso bombeo,
en donde se registran los mayores caudales (entre 30-45 l/seg.) de toda la zona de
estudio.
•
La Sub-Zona Ruiz Pineda – Antímano cuenta con una serie de características de
vegetación, meteorización y morfología del macizo rocoso, que la convierte en la
sub-zona más apta para la captación del agua, al igual que parte del sur de la SubZona Antímano – El Paraíso. Ambas sub-zonas de recarga están presentes en la
misma topoforma y se encuentran en su mayor proporción libres de
construcciones urbanísticas informales y formales, en comparación con el resto
del área estudiada.
•
Los parámetros hidráulicos obtenidos a través de las pruebas de bombeo y por las
características del material, permiten considerar al acuífero como valioso para
uso industrial, municipal o de irrigación.
•
La tendencia de comunicación de agua es de río hacia acuífero en más de un 90%
de la zona estudiada, lo que indica el potencial agente contaminante que el
drenaje principal (Río Guaire) pudiese resultar para el reservorio a pesar de su
embaulamiento.
165
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
•
La calidad del agua presente en el reservorio muestra un conjunto de valores de
TSD y Fe anómalos, por encima de los rangos establecidos, lo que restringe la
utilización del agua a industrias o comercios que necesitan una mayor calidad de
este fluido como tintorerías, fabricas de papel fino, entre otros.
•
Los resultados obtenidos permiten afirmar que las reservas probables permanentes
del
acuífero
dentro
del
área
de
estudio
son
de
aproximadamente
78.752.959,25m³. Considerando que actualmente, es posible que estas reservas
sean menores debido al aumento de la escorrentía y a la incontrolada explotación
de pozos.
166
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
VII.2.- RECOMENDACIONES
•
Realizar un programa de medición de niveles piezométricos que, inicialmente se
efectuasen mediciones cada dos meses, por un lapso de tres años, luego
mediciones cada tres meses, por un lapso de tres años, en base a lo cual se
decidirá la frecuencia definitiva de mediciones para el control permanente del
acuífero.
•
Realizar un estudio detallado del acuífero en cuanto a los posibles focos de
contaminación, debido a la perjudicial ubicación en zonas de alto desarrollo
industrial y a redes de drenajes superficiales contaminados.
•
Realizar el tratamiento previo a las aguas subterráneas producidas en la zona, en
el supuesto de que las mismas fuesen a ser utilizadas para fines industriales, tales
como: tintorerías, textiles, fabricas de papel fino, fábrica de plásticos y
lavanderías, debido a que las mismas presentan valores de TSD y Fe que superan
hasta diez veces los valores permitidos; incluso fabricas de bebidas gaseosas las
cuales no admiten los altos contenidos de Fe en el agua.
•
Controlar los caudales de los pozos, sobre todo en épocas de sequías (de
diciembre a abril), con la finalidad de tratar de regular su explotación y de esta
manera evitar un perjudicial descenso de la mesa de agua que pudiese traducirse
al uso de las reservas muertas del acuífero.
•
Establecer un programa de control para abordar el estudio del acuífero de una
manera integral entre la hidrogeología y la hidrología, que además favorecerá la
implantación de nuevas estructuras en las respectivas instituciones públicas
administrativas y académicas.
167
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
•
Diseñar, construir y operar un proyecto que permita disminuir los niveles de
contaminación del Río Guaire y de sus afluentes, para evitar la riesgosa
asociación río-acuífero que pudiese perjudicar al reservorio de aguas
subterráneas, ya que si este resultase contaminado su tratamiento pudiese llegar a
ser más complejo que el del drenaje superficial.
•
Establecer una política orientada a la desaceleración de la construcción de
viviendas informales en las zonas de recarga, que ocasionan de manera directa el
aumento de la escorrentía y la disminución de la capacidad de infiltración por
deforestación, restringiendo la entrada de agua al acuífero.
•
Diseñar, construir y operar una red de pozos de observación, para suministrar una
información más completa y confiable del acuífero.
•
Realizar una exploración más detallada del acuífero con el fin de delimitar con
más precisión la geometría del mismo; para de esta manera favorecer una correcta
construcción de pozos que permita optimizar los rendimientos hidráulicos.
168
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
GLOSARIO
o Acuífero: Es cualquier formación geológica por la que circulan o se almacenan aguas
subterráneas, que puedan ser extraídas para su explotación, uso o aprovechamiento.
o Acuífero confinado: Es aquel acuífero que está limitado en su parte superior por una
unidad de baja conductividad hidráulica y el nivel piezométrico presenta una presión
superior a la atmosférica.
o Acuífero libre: Es un acuífero en el cual el nivel freático o nivel de saturación se
encuentra a la presión atmosférica.
o Acuífero semiconfinado: Aquel acuífero que tiene una unidad saturada de baja
conductividad hidráulica en su parte superior o inferior que contribuye con un pequeño
caudal (goteo) debido a los gradientes inducidos por bombeo del acuífero.
o Acuitardo: Es cualquier formación geológica por la que circula muy lentamente agua
subterránea, por lo que generalmente no son utilizados para su explotación, uso o
aprovechamiento.
o Agua subterránea: Es el agua que se encuentra en el subsuelo, en formaciones
geológicas parcial o totalmente saturadas.
o Áreas naturales protegidas: Las zonas del territorio nacional y aquellas sobre las que
la nación ejerce su soberanía y jurisdicción, en que los ambientes originales no han sido
significativamente alterados por la actividad del ser humano, y que han quedado sujetas
al régimen de protección.
172
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
o Carga hidráulica: Es la energía presente en un acuífero, normalmente tiene dos
componentes: a) la carga relacionada con la elevación con respecto a un punto de
referencia que es normalmente el nivel medio del mar; y b) la carga de presión, o
presión de poro.
o Conductividad hidráulica: Es la propiedad de un medio geológico de permitir el flujo
de agua subterránea en un acuífero o acuitardo, considerando las condiciones de
densidad y viscosidad del agua.
o Contaminantes no reactivos: Son los contaminantes que viajan en solución, a la misma
velocidad lineal que el agua subterránea. No sufren reacciones químicas ni biológicas
con el medio granular.
o Descripción estratigráfica: Es la descripción de los estratos del subsuelo en cuanto a
sus propiedades físicas, químicas e hidráulicas, de acuerdo al código de nomenclatura
estratigráfica vigente.
o Discontinuidades: Superficies marcadas por modificaciones radicales de las
propiedades físicas de las rocas. Estas discontinuidades pueden ser por ejemplo, fallas o
fracturas.
o Disposición final: La acción de depositar permanentemente los residuos en sitios y
condiciones adecuados para evitar daños al ambiente.
o Evapotranspiración Potencial: Según Penman (1945) es la cantidad de agua
transpirada por un cultivo verde, corto, de tamaño uniforme, sin limitaciones de agua y
cubriendo completamente el suelo.
o Falla: Es cuando se producen desplazamientos relativos de una parte de la roca con
respecto a la otra, como resultado de los esfuerzos que se generan en la corteza terrestre.
173
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
o Falla activa: Son aquellas fallas que han sufrido desplazamiento durante el Holoceno
(último millón de años).
o Fractura: Es una discontinuidad en las rocas producida por un sistema de esfuerzos.
o Freatofitas: Son plantas que extienden sus raíces por debajo del nivel freático y extraen
sus requerimientos de humedad directamente de la zona saturada.
o Geofísica: La ciencia que estudia las propiedades físicas de la tierra y el conocimiento
de la estructura geológica de los materiales que la constituyen.
o Geología: Es el estudio de la formación, evolución, distribución, correlación y
comparación de los materiales terrestres.
o Hidrogeología: Es el conjunto de actividades tales como perforaciones, determinación
de la recarga, profundidades a nivel estático, interacción química agua-roca y
propiedades hidráulicas que permiten conocer y localizar los sistemas de aguas
subterráneas, su dirección y velocidad de movimiento.
o Hidrología: La ciencia que estudia los componentes primarios del ciclo hidrológico y su
relación entre sí. Considera la interacción y dinámica de la atmósfera con cuerpos de
agua superficial tales como ríos, arroyos, lagunas, lagos, etc.
o Infiltración: Introducción suave de un líquido entre los poros de un sólido referido al
agua, el paso lento de ésta a través de los intersticios del suelo y del subsuelo.
o Lixiviado: Líquido proveniente de los residuos, el cual se forma por reacción, arrastre o
percolación y que contiene, disueltos o en suspensión, componentes que se encuentran
en los mismos residuos.
174
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
o Nivel freático: La superficie de agua que se encuentra en el subsuelo bajo el efecto de la
fuerza de gravitación y que delimita la zona de aireación de la de saturación.
o Nivel piezométrico: Es el valor de la carga hidráulica observado de un acuífero o
acuitardo a diferente profundidad en el mismo y en el medio saturado.
o Parámetros hidráulicos: Son la conductividad hidráulica, la porosidad, la carga
hidráulica, los gradientes hidráulicos de una unidad hidrológica, así como su coeficiente
de almacenamiento.
o Percolación: Es el movimiento descendente de agua a través del perfil del suelo debido
a la influencia de la gravedad.
o Permeabilidad: La propiedad que tiene una sección unitaria de terreno para permitir el
paso de un fluido a través de ella sin deformar su estructura bajo la carga producida por
un gradiente hidráulico.
o Porosidad efectiva: Es la relación del volumen de vacíos o poros interconectados de
una roca o suelo dividido por el volumen total de la muestra.
o Potencial de contaminación: Es la interacción entre el tipo, intensidad, disposición y
duración de la carga contaminante con la vulnerabilidad del acuífero; está definida por
las condiciones de flujo del agua subterránea y las características físicas y químicas del
acuífero.
o Residuo sólido municipal: El residuo sólido que proviene de actividades que se
desarrollan en casa-habitación, sitios y servicios públicos, demoliciones, construcciones
establecimientos comerciales y de servicios, así como residuos industriales que no se
deriven de su proceso.
175
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
o Sistema de flujo: Es definido por la dirección de flujo que sigue el agua subterránea,
considerando las zonas de recarga y descarga, las cargas y gradientes hidráulicos a
profundidad y el efecto de fronteras hidráulicas. Incluye además la interacción con el
agua superficial y comprende sistemas locales, intermedios y regionales.
o Talud: Es la inclinación formada por la acumulación de fragmentos del suelo con un
ángulo de reposo del material del terreno de que se trate.
o Unidades
litológicas:
Conjunto
de
materiales
geológicos
compuestos
predominantemente de cierta asociación de minerales que tienen un origen común.
o Volumen de extracción: Se refiere a la cantidad de agua subterránea que se extrae de
un acuífero a través de pozos o norias.
o Zona de aireación: La zona que contiene agua bajo presión menor a la de la atmósfera,
está delimitada entre la superficie del terreno y el nivel freático.
o Zona de descarga: Es la porción del drenaje subterráneo de la cuenca en la cual el flujo
de agua subterránea fluye de mayor profundidad hacia el nivel freático; es decir el flujo
subterráneo es ascendente.
o Zona de inundación: Área sujeta a variaciones de nivel de agua por arriba del nivel del
terreno asociadas con la precipitación pluvial, el escurrimiento y las descargas de agua
subterránea.
o Zona de recarga: Es la porción del drenaje subterráneo de la cuenca en la cual el flujo
del agua subterránea fluye del nivel freático hacia mayor profundidad; es decir el flujo
subterráneo es descendente.
176
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
GLOSARIO
o Zona de saturación: El área que se caracteriza por tener sus poros o fracturas llenas de
agua, su límite superior corresponde al nivel freático y su límite inferior es una unidad
impermeable.
o Zona no saturada: Es el espesor que existe entre la superficie del terreno y el nivel
freático. Es equivalente a la profundidad del nivel freático.
177
NÚÑEZ, VELÁSQUEZ
BIBLIOGRAFÍA
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