Primeros auxilios psicológicos en accidentes severos o mortales
Transcripción
Primeros auxilios psicológicos en accidentes severos o mortales
Primeros auxilios psicológicos en accidentes severos o mortales Víctor A. Ramírez V. Psicólogo - Consultor Especialista en Gerencia del Talento Humano Especialista en Seguridad en el Trabajo Coach Ontológico Empresarial Carrera 70B No.22 -35, Teléfono 310 413 14 22 [email protected] Abstract Durante la experiencia en el área de Seguridad y Salud en el trabajo (15 años), se ha encontrado como las organizaciones asumen el tema de accidentes de trabajo severos o mortales dentro de sus instalaciones, como un evento en el cual no hay que realizar más que la intervención con el trabajador o con los familiares de este, sin embargo, existe un olvido de los compañeros o personas que deben realizar la misma labor, ya sea el mismo día o en los días siguientes debido a que la producción no se puede parar. El planteamiento anterior se suma a que los primeros auxilios psicológicos (PAP), por historia se han limitado a situaciones relacionadas con desastres naturales como incendios, inundaciones, terremotos o ataques terroristas como el S11 o los ataques en Atocha en España en los cuales se ven implicadas un numero alto de personas, las cuales tienen perdidas tanto materiales como de la salud. Sin embargo, cuando se investiga sobre (PAP), en las organizaciones no se encuentran metodologías o estrategias que puedan recuperar no solo la producción de la organización sino la prevención de los efectos psicológicos de los empleados después de verse expuestos a un accidente de trabajo o un atentado a la organización. En general lo que hacen las organizaciones es trasladar la persona que sufre el accidente a un centro hospitalario o esperar que se realice un levantamiento de la persona fallecida en el accidente por parte de las instituciones dedicadas a este tema. El segundo paso es tratar de cuidar a la organización de una demanda, mostrando por medio de documentos que se habían realizado todas las actividades de prevención establecidas para disminuir el riesgo. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ Finalmente en algunos casos se ha encontrado que se da la tarde libre a los trabajadores que estaban cercanos al evento, pero en ninguno de los casos estudiado, se para la organización. Por lo tanto los trabajadores tienen que recurrir a sus recursos interiores para superar el evento y reiniciar las labores como “si nada hubiera pasado”, y son las instituciones de salud las encargadas de intervenir el evento en la persona afectada sea la Entidad Prestadora de Salud (EPS) o la Administradora de Riesgos Laborales (ARL), con la experiencia he encontrado que solo el 0.1% de los casos tienen una estrategia de atención psicológica. La presente propuesta busca de manera sencilla reivindicar el tema de salud mental en las organizaciones que sufren eventos como accidentes severos o mortales, aplicada en organizaciones en las cuales se ha realizado la intervención de manera efectiva. Primeros auxilios psicológicos en accidentes severos o mortales "Todos estamos volando y no sabemos si el avión se va a estrellar esta noche". Rick Elías (Sobreviviente a tragedia área) Introducción Los primeros auxilios psicológicos, nacieron después de la segunda guerra mundial pero tienen su pico de aparición en los atentados de las Torres Gemelas y el atentado en Atocha, con el cual los canales de televisión mostraron el trabajo de cientos de especialistas en ayudar a víctimas de tragedias. Realizar un planteamiento para que las organizaciones empiecen abrir espacios en el tema de los primeros auxilios psicológicos requiere de crear dos contextos claros, el primero tiene que ver con que un accidente de trabajo severo o mortal debe ser considerado una tragedia para la organización, y segundo, el hecho de que las personas regresen o continúen con las labores después de verse expuestas a presenciar estos hechos, no asegura que a corto, mediano o largo plazo no queden afectadas y por ende la empresa. En la mayoría de los casos se encuentra que la organización se preocupa más por los medios de comunicación y la imagen corporativa e incluso el restablecimiento rápido de la producción, como metodología para olvidar lo sucedido dejando de lado a las personas para que recurran a sus mecanismos interiores para superar el evento. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ Finalmente, las consecuencias de los accidentes de trabajo se trasladan a las aseguradoras, para el caso colombiano las ARL- Administradoras de Riesgos Laborales, convirtiéndolo en un tema de economía, sea para el afectado o para la familia del fallecido. Conceptos básicos de primeros auxilios psicológicos en situaciones de emergencia o desastres. Las ‘Situaciones de desastre pueden dejar a las personas con el sentimiento de la pérdida eterna, inutilidad, depresión, y generar así actitudes de derrota permanente, que se repiten de generación en generación y producen una vulnerabilidad psicosocial heredada’1 (p 7) El siguiente cuadro es un resumen de las etapas y reacciones ante una situación de desastre 2 (p 6) Cohen citado por Villalobos. Tabla 1 Cohen Citada por Villalobos 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ Tabla 2:Elaborado por Villalobos 2 (p 4) Siguiendo a Caplan y a Erikson, citados por Rabelo 3 (p 123) las crisis son entendidas como ‘una respuesta de disrupción en la homeostasis psicológica del individuo, en la que fallan los mecanismos de afrontamiento habituales tendientes a reinstaurar dicha homeostasis, lo cual va acompañado de todo un conjunto de consecuencias conductuales, emocionales, cognitivas y biológicas en la persona’ Silvia Bleichmar citada por Rabelo 3 (p 123) entiende por crisis ‘la repercusión psicológica de complejas situaciones vitales, la forma en que estas son vividas por la persona, a partir de múltiples y muy variados factores histórico-coyunturales: su inscripción económico- social, familiar, su propia historicidad, sus vicisitudes como sujeto psíquico (fundamentalmente inconscientes), etcétera’ . ‘Durante la vivencia de una crisis, la persona pierde de forma transitoria o definitiva una serie de aportes con los que ha contado; encontrando comprometida su estabilidad. Estos aportes pueden tener diferentes dimensionalidades, pudiendo ser tanto físicos (alojamiento, economía, alimentación, salud, autonomía, etc.) como psicosociales (de relación con los otros, seguridad, pertenencia, confianza, etc.) así como de otra índole, que pueden afectar a su salud mental’ 3 (p 124) 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ El trastorno por estrés agudo es una reacción postraumática intensa, que desborda la capacidad de afrontamiento de la persona y que se caracteriza fundamentalmente por la presencia de síntomas disociativos como el embotamiento emocional, el aturdimiento, la extrañeza respecto a la realidad, la despersonalización y la amnesia disociativa, que lleva consigo la incapacidad para recordar aspectos significativos del suceso traumático. Asimismo, las personas afectadas experimentan síntomas de reexperimentación del suceso, conductas de evitación y síntomas intensos de ansiedad. Todo ello genera un malestar clínico significativo e interfiere negativamente en su vida cotidiana 4 (p 8). El alcance del daño psicológico está mediado por la gravedad del suceso, el carácter inesperado del acontecimiento y el daño físico o grado de riesgo sufrido, la mayor o menor vulnerabilidad de la víctima, la posible concurrencia de otros problemas actuales (a nivel familiar y laboral, por ejemplo) y pasados (historia de victimización), el apoyo social existente y los recursos psicológicos de afrontamiento disponibles 5 (p 307) Objetivos Intervenciones •Promover la catarsis El damnificado necesita desahogar sus sentimientos y la mejor manera de hacerlo es hablando. Este hablar implica la necesidad de que alguien escuche. Esto se logra por medio de dos aspectos: A. Escuchar empáticamente Escuchar empáticamente conlleva: 1) Escuchar imparcialmente: sin preconceptos y sin previsiones del resultado final ni la anticipación de datos. 2) Escuchar completamente: partir de que todo lo que el otro cuenta es importante y por tanto debe dársele una atención completa y total. 1. Realizar contacto psicológico 3) Escuchar pacientemente: recordar que quien habla ha sufrido un evento traumático, se encuentra en crisis, si pudiera hablar con conciencia, con fluidez y acertadamente, posiblemente no requeriría la intervención en crisis. 4) Escuchar interesadamente: expresar interés con la expresión corporal, con una pregunta o con un reflejo o validación de sentimientos. B. Solidarizarse silenciosamente Esto tiene que ver con la intervención cuando el damnificado no quiere hablar. Es en estos casos cuando más se requiere la intervención en crisis ya que al no hablar, la persona está reprimiendo sus sentimientos y está evidenciando su dificultad para translaborar la crisis. El objetivo principal es que el damnificado perciba que se es sensible a su dolor, por medio de algún gesto más que por palabras. Se debe esperar el momento debido para que empiece el proceso natural de desahogo, y este se puede propiciar por medio de: Preguntar oportunamente: hacer una pregunta motivadora en un momento oportuno; esta pregunta debe ser corta, objetiva y motivadora. Preguntar sabiamente: debe abrir el mundo afectivo del damnificado para que éste pueda expresar sus sentimientos. Reenmarcar la conducta Mostrarle que sus reacciones fueron normales y naturales ante la magnitud de los acontecimientos, cualquier otra persona en su misma situación habría hecho lo mismo. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ 2. Analizar dimensiones problema las del • Realizar el perfil • CASIC antes del evento y en el estado actual del damnificado. • Considerar las fortalezas y limitaciones del damnificado. • Concretar el factor precipitante (tanto el hecho en sí como el impacto y la reacción que tuvo en la persona). • Ayudar a la persona a concretar su futuro inmediato. • Evaluar la mortalidad, enfrentar la cuestión del suicidio (considerar que cuanto mayor es el sentimiento de pérdida, existe mayor posibilidad de considerar el suicidio). Comunicar esperanza Lograr que la persona afectada por el desastre mire hacia adelante. Es importante mostrarle que, a pesar de lo ocurrido, es posible vivir, reconstruir su mundo, ser alguien, construir cosas, hacer realidad sus sueños. Estimularlo 3. Analizar las a pensar con esperanza en mejores días y destacando las virtudes que la persona posee y reforzando su valor y posibles soluciones fortaleza para salir adelante después del desastre que ha vivido. • Conocer lo que se ha hecho hasta ahora • Implementar técnicas de solución de problemas 4. Asistir al • Facilitar la orientación• damnificado en la Además de lo que se le pueda dar en términos de solidaridad, empatía y esperanza, prestar algún tipo de ayuda ejecución de pasos adicional, por ejemplo: literatura pertinente o ayudándole en necesidades concretas (financiera, de trabajo, de concretos tramitación de documentos necesarios, entre otros). • Reconstruir relaciones• La desestructuración de las relaciones sociales lleva a los damnificados a sentirse asilados, sin amigos, perdidos en esta nueva realidad. El papel del profesional en salud mental consiste en ayudarles a reconstruir relaciones, buscando nuevos amigos, nuevos grupos sociales. El involucrar al damnificado en trabajos comunales o en grupos de reconstrucción o agrupaciones de personas damnificadas, puede ser de gran valor en el proceso de recuperación. El entrar en contacto con otras personas que sufrieron la misma experiencia que ellos, les dará la convicción de que no son los únicos y que muchos más tuvieron la misma suerte. Además, el compartir sus experiencias les ayudará a encontrar caminos para su superación. 5. Seguimiento Evaluar si se cumplieron las metas: • Proporcionar apoyo • Reducir la mortalidad • Crear un enlace con otras fuentes de asistencia Verificar el progreso Prestar atención especial a los casos crónicos • Cuando una persona permanece en la etapa de incredulidad por un período prolongado. • Cuando una persona presenta cualquiera de los síntomas iniciales después de seis meses de los ocurrido. • Cuando se constata la prolongación o la escalada de la crisis secundaria. • Cuando las actitudes extrañas de una persona pasan a ser habituales. • Cuando hay alto riesgo de suicidio. Tabla 3. Con respecto a la intervención 2 (p 10 -11) 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ La intervención en crisis consiste en “un tratamiento intensivo que requiere la habilidad para la creación de un clima óptimo de comunicación que facilite: (a) la libertad de expresión por parte de la persona en crisis, (b) la aceptación de la persona y de su situación, (c) la expresión de la capacidad para escuchar de manera empática, (d) la búsqueda de soluciones realistas, y (e) la expresión natural de afecto y cercanía. Se trata de propiciar una situación de seguridad psicológica que permita la exploración de los eventos críticos en un contexto de realidad 3 (p 124). 3 (p 124) Los PAP (primeros Auxilios Psicológicos): concepto, características y objetivos. Características de los PAP: - Son intervenciones de primera instancia. - Son inmediatas y de corta duración. - Están dirigidas a cualquier persona impactada por un incidente crítico. - Su objetivo principal es proporcionar apoyo, reducir el peligro de muerte y enlazar a la persona en crisis con los recursos de ayuda. - Los PAP los proporciona cualquier persona suficientemente entrenada y formada. - Se proporcionan principalmente en el mismo lugar del suceso. El objetivo de nuestra intervención es ‘ayudar a la persona a aceptar lo sucedido, expresar sentimientos, facilitar su búsqueda de soluciones y apoyo social, ayudar a que recupere el nivel de funcionamiento que tenía antes del incidente y prevenir la aparición de consecuencias negativas para su salud mental’ 3 (p 124). Los objetivos que persiguen los PAP son, según Gómez-Mascaraque y Corral Torres, citados por Maldonado 3 (p 124) son los siguientes: - Proporcionar apoyo, facilitando que la persona se sienta escuchada y comprendida, facilitando la expresión de sentimientos y la ventilación de emociones negativas como el miedo, la tristeza, la angustia o el enfado. - Reducir la mortalidad: al entender que el suceso estresor puede generar situaciones violentas como agresiones a otras personas o a sí mismo; actuando en consecuencia para evitarlo (desarrollar su red de apoyo informal, favorecer su ingreso hospitalario, etc.) - Ser el nexo de unión con recursos de ayuda, proporcionándole información sobre los recursos necesario y brindándole orientación sobre qué hacer y cómo hacerlo. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ ‘La búsqueda de apoyo social será fundamental para toda persona que haya vivido un suceso crítico, sin embargo, debemos prestar especial atención ante grupos específicos como niños, ancianos y discapacitados’. 3 (p 124) La técnica de debriefing con base en Pérez 4 (p 4-5) nació en Los Estados unidos en 1983 con el trabajo del Dr. Jeffrey Mitchell en el contexto del desarrollo de la teoría de intervención en caso de crisis. Posteriormente han surgido diferentes variantes: Dyregrov, 1989; Amstrong y colaboradores, 1991; Parkinson, 1997; Perren-Klingler, 2001. Todas estas variantes son similares en su estructura y en su aplicación y designan en todos los casos una asistencia psicológica breve para personas traumatizadas a causa de una situación difícil o un incidente crítico. El debriefing es, por tanto, una intervención psicológica breve que se realiza en los primeros días posteriores al evento traumático. En sí constituye una estrategia altamente estructurada en siete pasos concretos. Fue ideada, en principio, para ser empleada con profesionales de emergencia. Sin embargo, debido a los resultados satisfactorios obtenidos (Everly et al., 1999), la han llevado a ser empleada con otro tipo de víctimas secundarias (personal hospitalario, trabajadores de entidades bancarias, militares y educadores) e incluso, se ha llegado a utilizar con damnificados directos y familiares de estos. El debriefing consiste en una técnica de prevención que impediría la aparición del TEPT- Trastorno de estrés postraumático, y que realiza una prevención selectiva, es decir, detecta de forma temprana los damnificados que precisan de una asistencia específica para derivar al paciente a una psicoterapia centrada en el TEPT. Al tratarse de una técnica preventiva, en la que se trabajan reacciones normales tras una situación anormal, esta intervención no se puede considerar terapéutica, ya que no tratamos ningún trastorno. Este método ha sido considerado obligatorio en las intervenciones en emergencias, siendo respaldado por organizaciones como la Cruz Roja y otras agencias de socorro (Litz et al., 2002). 4 (p 4-5) Generalidades del efecto del accidente severo o mortal en la organización. Para sustentar la propuesta de intervención se parte de la definición de accidente de trabajo, ‘Es accidente de trabajo todo suceso repentino que sobrevenga por causa o con ocasión del trabajo, y que produzca en el trabajador una lesión orgánica, una perturbación funcional o 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ psiquiátrica, una invalidez o la muerte’. 6 (p 2) Agregando la definición según la Ley 1616 de salud mental que ‘se define como un estado dinámico que se expresa en la vida cotidiana a través del comportamiento y la interacción de manera tal que permite a los sujetos individuales y colectivos desplegar sus recursos emocionales, cognitivos y mentales para transitar por la vida cotidiana, para trabajar, para establecer relaciones significativas y para contribuir a la comunidad’. 7 (p 2) Por lo tanto, es claro desde la legislación que las organizaciones están obligadas no solo a realizar una investigación minuciosa de los peligros, riesgos y factores de riesgo asociados al accidente de trabajo, sino que además, deben procurar por prevenir la afectación que pueda producir en el sistema organizacional el accidente. La diferencia con un desastre radica en que los individuos pertenecientes a una organización no padecen de efectos como pérdidas materiales, traslados, cambios en los hábitos, destrucción del tejido social, entre otros. Sin embargo, la afectación en su salud mental es total, debido a que en muchos de los casos presenciaron el evento o realizan labores idénticas al trabajador que sufrió la lesión o muerte. Por lo tanto, la crisis se ve aumentada por el imaginario que empieza a construirse en torno al hecho. “Fue falta de prevención”, “Acá se trabaja arriesgando la vida”, “No se sabe quién tuvo la culpa”, “Para la organización no importamos, sólo importa el resultado no las personas”, son algunas de las frases que se encuentran cuando se realizan las investigaciones, en algunos casos se genera una cultura del callar para evitar represalias, presintiendo que si se habla del tema pueda perderse el empleo. Se puede concluir que en un evento de accidente de trabajo severo o mortal, toda la organización se ve afectada directa o indirectamente, y la estrategia de intervención no debe limitarse a las personas más cercanas al evento sino a toda la organización. Estrategia de Intervención. La presente estrategia parte de las intervenciones realizadas en organizaciones que han permitido este tipo de trabajo por el cuidado de la salud mental. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/ Conclusiones de las Intervenciones Realizadas • • • Los participantes en los procesos de intervención manifiestan mayor estabilidad emocional y sentido de pertenencia hacia la organización. Incorporación a las labores con un mayor grado de percepción del riesgo y aumento del autocuidado. Restablecimiento del equilibrio tanto mental como organizacional en menores tiempos y con relaciones sociales fortalecidas. Referencias Bibliográficas (1) Congreso de Colombia. (11 de Julio de 2012). Ley 1562. Por la cual se modifica el Sistema de Riesgos Laborales y se dictan otras disposiciones en materia de la Salud Ocupacional. Bogotá D.C., Colombia. (2) Congreso de la Colombia. (2013 de Enero de 2013). Ley de Salud Mental. Bogotá D.C., Colombia. (3) Echeburúa, E. (2007). Intervención en Crisis en Victimas de sucesos traumáticos ¿cuándo, cómo y para qué? Psicología Conductual, 370-380. (4) Pérez Tejada, J. (1989). Debrefing: Intervención psicosocial en situaciones de emergencia. Barcelona: Editorial Proyecto Kalu. (5) Pocasangre, C. M., González, S., & Alas, S. M. (1999). Manual de Intervención en Crisis en Situaciones de Desastre. San Salvador, República del Salvador. (6) Rabelo Maldonado, J. M. (2011). Primeros auxilios psicológicos e intervención en crisis desde el Trabajo Social. Documentos de trabajo social, 120-130. (7) Villalobos Cano, A. (2009). Intervención en crisis en situaciones de desastre: intervención de primera y de segunda instancia (Revisión Bibliográfica). REVISTA MÉDICA DE COSTA RICA Y CENTROAMÉRICA, 513. 21ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2015 http://www.saludocupacional.com.co/