ALEJANDRO POSADA ALESSiO bAx - Blog del Auditorio Miguel
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ALEJANDRO POSADA ALESSiO bAx - Blog del Auditorio Miguel
ALEJANDRO POSADA Alessio bax Director PIANO Duración total aproximada: S. Rachmaninov: Concierto para piano y orquesta nº 2 D. Shostakovich: Sinfonía nº 8 125´ 33´ 65´ La OSCyL y los intérpretes Alessio Bax ha actuado junto a la OSCyL en las temporadas 1995-96, 2004-05, 2005-06 y 2009-10 La OSCyL y las obras S. Rachmaninov: Concierto para piano y orquesta nº 2 Temporada 1992-93 Rafael Orozco, piano · Max Bragado, director Temporada 1995-96 Arkadi Volodos, piano · Marek Pijarowski, director Temporada 2003-04 Leonel Morales, piano · Enrique García Asensio, director Temporada 2004-05 Alessio Bax, piano · Dmitry Sitkovetsky, director Temporada 2007-08 Juan Carlos Fernández, piano · Alejandro Posada, director D. Shostakovich: Sinfonía nº 8 Temporada 2005-06 Dmitry Sitkovetsky, director Editado por Junta de Castilla y León Consejería de Cultura y Turismo Orquesta Sinfónica de Castilla y León Auditorio Miguel Delibes Av. Monasterio Ntra. Sra. de Prado, 2 47015 Valladolid T 983 385 604 [email protected] www.auditoriomigueldelibes.com La Orquesta Sinfónica de Castilla y León es miembro de la Asociación Española de Orquestas Sinfónicas (AEOS) La Orquesta Sinfónica de Castilla y León y el Auditorio Miguel Delibes son miembros de la Red de Organizadores de Conciertos Educativos (ROCE) Imprime: Gráficas Angelma Dep. Legal: Va-21/2012 Valladolid, España 2012 Orquesta sinfónica de castilla y león alejandro posada Director — alessio bax piano Valladolid Abono OSCYL 8 — jueves 19 y viernes 20 de enero de 2012 · 20.00 h sala sinfónica. Auditorio Miguel Delibes · LEÓN — sábado 21 de enero de 2012 · 20.30 h auditorio ciudad de león PROGRAMA Parte I — Sergéi Rachmaninov (1873-1943) Concierto para piano y orquesta nº 2 en Do menor, op. 18 Moderato Adagio sostenuto Allegro scherzando — Parte II — Dmitri Shostakóvich (1906-1975) Sinfonía nº 8 en Do menor, op.65 Adagio - Allegro non troppo - Adagio Allegretto Allegro non troppo, ataca Largo, attacca Allegretto — Editores: Boosey & Hawkes (Rachmaninov); Sikorski (Shostakovich) Rachmaninov y Shostakóvich: dos maneras de enfrentar los cambios político-sociales Alejandro Posada dirige esta noche dos obras maestras de la tradición rusa: El Concierto para piano nº 2 en Do menor de Sergéi Rachmaninov y la Octava Sinfonía de Dmitri Shostakóvich. Ambos compositores pertenecen a dos tradiciones distintas; el primero denota una fuerte influencia tardorromántica, mientras que el segundo se nos muestra plenamente familiarizado con el lenguaje musical del siglo xx. Generaciones distintas, estilos diferentes, pero ambos marcados por episodios clave en la historia de su país: la Revolución de 1905, la de 1917 y el totalitarismo comunista. A pesar de que el estilo de vida dinámico llevó a Rachmaninov a establecerse en diferentes países, siempre mostró un profundo arraigo hacia la cultura rusa. Uno de sus lugares favoritos de trabajo fue su residencia en Ivanovka, una pequeña localidad, apartada de las grandes metrópolis, en la que el compositor halló la tranquilidad necesaria para componer. A partir de los disturbios provocados por la sublevación campesina de 1905 y agravados por la inestabilidad política de 1917, Rachmaninov decidió abandonar el país para establecerse sucesivamente en Estados Unidos y, a partir del 1930, en Suiza. Desde el exilio, el compositor intentó recrear en cada nueva residencia el entorno de Ivanovka. Para ello contrató personal de servicio ruso y organizó fiestas cosacas con las que entretener a sus invitados. Su desacuerdo con la situación política soviética se manifestó en una sola ocasión, cuando, en enero de 1931, envió junto con Tolstoy y Ostromislensky una carta al New York Times criticando a diversos políticos rusos. A partir de esta reprobación el Estado vetó sus obras por un período de tres años. Shostakóvich, sin embargo, tenía la rebelión en sus genes. Su tatarabuelo paterno, de origen polaco, había participado en las sublevaciones de Polonia y Lituania en 1831, y su abuelo estuvo implicado en el intento de asesinato del zar Alejandro II en 1866, razón por la que fue exiliado a Siberia. En su juventud, Shostakóvich estuvo en contacto con los hijos de los miembros del Departamento Central de Inteligencia Rusa, entre otros, los de Trotsky. En esa etapa de su vida pudo presenciar también algunos discursos de Lenin. No extraña entonces que tanto él como su familia recibiesen con júbilo las noticias de la Revolución de 1917. Su carrera compositiva pasó por diferentes etapas en lo referido a su relación con el poder constituido: de la protección recibida por parte de Trotsky y de Tujachevski en los años veinte al distanciamiento con Stalin en los años treinta y a la estigmatización del autor en las décadas siguientes hasta que su obra fuera reivindicada en los años sesenta, periodo en el que ingresó en el Partido Comunista y pasó a formar parte del Soviet Supremo. Y es que el gran proyecto artístico del autor era la incorporación de un espíritu cosmopolita a la sonoridad rusa, un propósito opuesto a los intereses comunistas centrados en la proyección universal del espíritu ruso. Serguéi Vasílievich Rachmaninov (Semiónovo, 1-iv-1873; Beverly Hills, 28-iii-1943) Concierto para piano nº 2 en Do menor, op. 18 Rachmaninov, antes de comenzar a componer su obra más destacada y la primera de su madurez artística, vivió una larga etapa de crisis personal a raíz de las críticas desfavorables cosechadas por las composiciones estrenadas entre 1891 y 1895. Sus únicos éxitos estuvieron ligados a sus actividades como director y como intérprete hasta comienzos del siglo xx, cuando aquella oscura etapa cedió paso a un productivo período de actividad compositiva gracias al apoyo psicológico de su círculo de amistades y a las supuestas habilidades hipnóticas de Nikolai Dahl –a quien le dedica la obra–. En 1900, durante un viaje a Italia, comenzó a escribir el segundo y el tercer movimiento del Concierto, presentados en Rusia en el mes de diciembre. Fue tal el éxito que se decidió a añadir un primer movimiento y a estrenar la obra en Moscú, ahora completa, el 27 de octubre de 1901 bajo la dirección de su primo Alexander Siloti y del mismo Rachmaninov al piano. Rachmaninov elabora la mayoría de las melodías con el conjunto instrumental adjudicando al solista una función decorativa. Muchas de las ideas del concierto trascendieron las salas sinfónicas e inspiraron temas populares compuestos en los años 30 y 40 del pasado siglo. El primer movimiento, “Moderato”, comienza con una serie acordal en Fa menor al piano, alternada por un bajo sepulcral en el registro más grave del teclado. En un sutil crescendo de matices armónicos continúa su introducción hasta alcanzar la tonalidad anunciada para comenzar la entrada del primer tema, caracterizado por una amplia y fluida melodía de las cuerdas y del clarinete. La idea musical se desarrolla en un constate diálogo entre la orquesta y el piano, que aparece con más claridad después del primer climax y vuelve tras el regreso majestuoso de las cuerdas para cerrar la exposición del primer tema en un visceral sólo acordal. Un episodio de piano “un poco più mosso” en tresillos, con cuerdas y trompas, preparan la transición para la presentación del segundo tema, anunciado por una breve frase de las violas. Esta segunda idea es presentada por el piano y continuada por los violonchelos que dan pie a la recapitulación, reconocible por un episodio “alla marcia”. El segundo movimiento se inicia con los colores armónicos y dramáticos de las cuerdas, los clarinetes y las trompas, que actúan como pórtico de un piano arpegiado sobre el que nace el tema más reconocible de la obra. El rasgo más significativo del pasaje es la hemiola; esto es, la combinación de ritmos binarios y ternarios, un recurso carácterístico de la expresividad romántica que vertebra el conjunto y concluye con la cadencia del “Adagio sostenuto”. Tras una agitada introducción, el piano introduce la primera idea del allegro caracterizada por el staccato en el piano y una elaboración de racimos de notas nítidas en el registro agudo. Luego, el tema se repite en acordes hasta que el tempo retrocede a un “moderato” sobre el que el oboe presenta una nueva idea melódica, una de las muchas que Rachmaninov legó a la historia. El movimiento continúa con la elaboración de los materiales presentados en un memorable diálogo entre el piano y la orquesta, hasta el brillante final. Dmitri Dmítrievich Shostakóvich (San Petersburgo, 25-ix-1906; Moscú, 9-viii-1975) Sinfonía nº 8 en Do menor, op. 65 La séptima, octava y novena sinfonías de Shostakóvich suelen ser consideradas como un grupo heterogéneo que conforma el llamado “Tríptico de guerra”. La mayoría de los materiales fueron compuestos durante la Segunda Guerra Mundial e insertados en diferentes obras con una progresión bastante lógica: la Séptima está relacionada con el horror de la batalla, la Octava se centra en el sufrimiento humano y la Novena mira hacia adelante, hacia un futuro mejor. En parte por esta visión, Shostakovich es considerado uno de los grandes sinfonistas del siglo . Su producción tuvo una amplia recepción en su época y fue reconocida como un acertado retrato de la sociedad rusa. Tal vez esto pueda justificar la impaciencia de Yevgeni Mravinsky, el principal Director de la Orquesta Sinfónica de Leningrado, quien, al ojear la partitura, decidió estrenarla de inmediato. Tras dos meses de ensayo, el 4 de noviembre de 1943, la obra fue presentada en Moscú. Quizás como agradecimiento por el empeño del director en representar la obra, Shostakovich decidió dedicársela. La Sinfonía nº 8 es uno de los trabajos más extensos del autor a pesar de que el proceso de escritura durase apenas dos meses. Su estructura en cinco movimientos es atípica y la elección de la tonalidad hermana esta obra con otras grandes sinfonías en Do menor: la Quinta de Beethoven, la Séptima de Bruckner y la Segunda de Mahler, por ejemplo –la influencia de este último es particularmente evidente en la elaboración del material temático–. La obra se abre con una sección extremadamente amplia que ocupa casi la mitad de la sinfonía. La estructura del movimiento recuerda en varias circunstancias la número cinco. La tensión es evidente ya desde la introducción, aunque de inmediato se transfiere a un segundo plano para la entrada de un lírico primer tema en los violines. El segundo tema, introducido otra vez por los violines tras un episodio de transición marcado por las flautas, está impregnado de una elegante melancolía. Las ideas temáticas se mezclan en un material orgánico que se desarrolla de forma dramática alternando episodios de gran tensión con momentos de íntima gravedad. El segundo movimiento, “Allegretto”, aparece como truncado en comparación con el “Adagio”. Tiene un carácter enérgico, como una marcha militar, que se percibe por el amplio uso del staccato y por sus colores orquestales. Pero el carácter heroico se desvanece hacia el final con la aparición del fagot y del contrafagot, y rematado por los timbales. El tercer movimiento se abre con un tenso solo a cargo de las violas apuntalado por una insistente y repetitiva corchea que aparece a lo largo de todo el movimiento. En esta sección se plasma en música la brutalidad de la batalla, que algunos han asociado a la descripción de Stalingrado en llamas aunque, por la ambigüedad con la que tuvo que jugar el compositor a lo largo de su carrera, bien podría describir una contraofensiva rusa. El movimiento acaba con el redoblar de las percusiones que en un fortísimo abren el cuarto movimiento sin interrupción alguna, y así transcurre hasta el final. La tensión y la violencia sonora rozan ahora el estruendo, que se irá aplacando por la aparición de un tema en los vientos madera. El tema pasa entonces a los violonchelos y contrabajos quienes marcan la transición a una sección lenta y pensativa de passacaglia. El quinto movimiento nace en las cuerdas de un contrabajo y vuelve a recuperar materiales del primer movimiento con su carácter heroico. Pero el cierre, con una flauta en su registro más grave, parece aclarar que el héroe no ha triunfado, sino que apenas pudo sobrevivir. © Matías Nicolás Isolabella. Musicólogo Alejandro POSADA Director La fructífera labor de Alejandro Posada como director titular de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León [Oscyl] durante siete años, llevó a esta formación a convertirse en una de las principales orquestas del panorama español. Actualmente es principal director invitado de la Oscyl y director artístico del Festival Internacional de Música de Medellín. A. Posada ha sido además director titular de la Orquesta Filarmónica y de Cámara de Sarajevo, Orquesta Ciudad de Baden –Austria– y de la Orquesta Nacional de su país natal –Colombia– a la que estuvo vinculado durante más de diez años. Como director asociado, ha tenido bajo su batuta a la Wiener Mozartorchester y la Orquesta Filarmónica de Medellín. Recientemente el Congreso de la República de Colombia le confirió la orden de Caballero “como reconocimiento a la labor desarrollada en beneficio de la Cultura Universal”. Desde hace años Alejandro Posada desarrolla una importante labor artística por Europa y Latinoamérica. Fue el primer colombiano en toda la historia de su país natal en ser nombrado director titular de una orquesta profesional europea. Su trabajo a lo largo de más de dos décadas no sólo lo ha consolidado como director sino que ha abierto el camino para muchos músicos colombianos. En el viejo continente ha dirigido orquestas en países como Austria, Hungría, Alemania, Polonia y Serbia, entre otras. Asimismo, fue invitado a dirigir en el prestigioso Mozartfest [Festival Mozart] en la ciudad alemana de Würzburg. Ha dirigido la Sinfónica de Washington y la Orquesta Nacional de Taiwan, así como las principales agrupaciones orquestales de centro y sur América, en dónde además de haber dirigido todas las orquestas colombianas, colabora frecuentemente con la Simón Bolívar –Venezuela–, Sinfónicas Nacional y de Concepción –Chile–, Sinfónica de Costa Rica, Nacional del Salvador, Nacional de la República Dominicana, Monterrey, Orquesta de Cámara de Bellas Artes –México–, Sinfónica de Bahía –Brasil–, Sinfónica Petrobrás de Río de Janeiro y para la temporada 2009-2010 ha sido invitado a dirigir también la Nacional de Paraguay y la Sinfónica del Estado de São Paulo. En España dirige con frecuencia agrupaciones sinfónicas de primer orden como: Sinfónica de Galicia, Sinfónica de Tenerife, Nacional de España, Cadaqués, Ciudad de Barcelona y Nacional de Cataluña, Ciudad de Granada, Sinfónica de Córdoba, Filarmónica de Gran Canaria, Sinfónica de Bilbao, Sinfónica de Navarra, Sinfónica de Madrid y la Orquesta de la Comunidad de Madrid. Asimismo ha tenido bajo su batuta a artistas de gran renombre internacional como Gil Shaham, Frank Peter Zimmermann, Julian Rachlin, Natalia Gutman, Alessio Bax, Steven Isserlis, Sergei Krilov, María João Pires, Lars Vogt, Sarah Chang y Martin Grubinger, entre otros. Ha trabajado en diversas producciones operísticas en Colombia y España, destacándose las realizadas junto a Calixto Bieito –Carmen– o Pier Luigi Pizzi –La traviata–, así como en el estreno mundial, junto a la Oscyl, del montaje escénico del Carmina Burana ideado por La Fura dels Baus y que fue presentado en la inauguración de la 70 Quincena Musical de San Sebastián. En diciembre de 2009 dicho espectáculo se presentó de nuevo, esta vez en L’ Auditori de Barcelona, cautivando a la audiencia de la Ciudad Condal. Entre sus trabajos discográficos al frente de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León cabe destacar: el disco dedicado a P. Sarasate junto a Gil Shaham; el dedicado a Antonio José para el sello Naxos, que fue calificado por la revista especializada Scherzo como “excepcional” y “verdaderamente histórico”; y el grabado junto al violinista Ara Malikian para el sello Warner, que fue nominado en España a los ‘Premios de la Música 2007’. También ha realizado diversas producciones de ópera con la Orquesta Sinfónica de Galicia, la Oscyl y la Orquesta Sinfónica de Colombia, así como varias ediciones discográficas con la Sinfónica de Galicia, Filarmónica de Bogotá y Filarmónica de Gran Canaria. Durante 2010 se editarán dos nuevos discos: uno con obras de Bretón y J. de Monasterio junto a Ara Malikian, y otro junto a la flautista Clara Andrada con obras de X. Montsalvatge, J. A. Amargós y Márquez. Su permanente y firme compromiso con la juventud lo ha llevado a involucrar organismos gubernamentales hasta lograr su implicación en proyectos que abarcan desde conciertos didácticos hasta encuentros juveniles de práctica orquestal como los que realiza en colaboración con la Oscyl y la Orquesta Filarmónica de Medellín, quienes gracias a este proyecto han visto afianzar los lazos entre Europa y Latinoamérica y han permitido el desarrollo musical de muchos jóvenes colombianos y españoles. Alejandro Posada realizó sus estudios de dirección de orquesta con Karl Östrerreicher en la Hochschule für Musik und Darstellende Kunst de Viena, graduándose con honores por unanimidad y recibiendo el Wuerdigungspreis –premio académico de excelencia otorgado por el Ministerio de Ciencia e Investigación de Austria–. Ha sido ganador del primer premio del Concurso para Directores Jóvenes organizado por la Orquesta de Cámara de Viena, segundo premio del I Concurso Internacional para Directores de Orquesta de Cadaqués y Premio Especial de la XI Competición Internacional Nicolai Malko, para directores, de Copenhague. El los últimos años se ha convertido en asiduo invitado a formar parte del jurado en diferentes concursos internacionales de composición y dirección de orquesta como el prestigioso concurso para directores de orquesta de Cadaqués, España. Alessio bax piano © James MacMillian Ganador del premio –Avery Fisher Career 2009–, obtiene el Primer Premio y Medalla de Oro en el Concurso Internacional de Piano de Leeds en septiembre de 2000, y desde entonces es considerado uno de los mejores pianistas del mundo. Previamente había ganado varios concursos, entre otros el Primer Premio del Concurso Internacional de Piano de Hamamatsu –Japón– con 19 años. Ha tocado en festivales tan prestigiosos como el London International Piano Series –Queen Elizabeth Hall–, el Festival de Verbier –Suiza–, en los festivales ingleses de Aldeburgh y Bath, el Festival de Piano de Ruhr, Mecklenburg-Vorpommern, el Beethoven Fest de Alemania, el Festival de Música de Canarias, etc. Asimismo ha ofrecido regularmente recitales como solista en Roma, Milán, Madrid, París, Londres, Tel Aviv, Tokio, Seoul, Hong-Kong, New York, Washington y México. Gracias a su extenso repertorio ha actuado como solista en más de 70 orquestas como la London Philharmonic Orchestra, Royal Philharmonic Orchestra, City of Birmingham Symphony Orchestra, Royal Liverpool Philharmonic Orchestra, Royal Scottish National Orchestra, Houston Symphony Orchestra, Dallas Symphony Orchestra, Sinfónica de Roma, Sinfónica de Hungría, Sinfónica NHK, Sinfónica de Tokio y la New Japan Philharmonic Orchestra. Entre los directores con los que ha trabajado destacan Sir Simon Rattle, Marin Alsop, Jonathan Nott, Miguel HarthBedoya, Ken-Ichiro Kobayashi y Dimitry Sitkovetsky. En el campo de la música de cámara, ha colaborado con intérpretes de la talla de Joshua Bell y Steven Isserlis, entre otros. En España cabe destacar sus conciertos junto a la Orquesta Sinfónica de Galicia, la Orquesta Ciudad de Oviedo, Orquesta Sinfónica de Castilla y León, Sinfónica de Tenerife, Orquesta de RTVE y Orquesta de Murcia. Así mismo ha ofrecido recitales en el Festival Pau Casals, Auditorio Manuel de Falla de Granada, Festival de Segovia, Auditorio de Zaragoza, Sociedad Filarmónica de Bilbao, Festival Internacional de Canarias y Auditorio de León. Su CD Bach transcribed –Signum– ha obtenido fantásticas críticas. También su grabación para Warner Classics Baroque Reflections recibió el entusiasmo de la prensa internacional y fue elegido Editor´s Choice por la revista Gramophone. En 2005 interpretó la fuga de la sonata Hammerklavier de Beethoven para el Maestro Daniel Barenboim en el documental Barenboim on Beethoven producido por Channel 13/WNET, Bel Air Media, BBC, ARTE France y NHK Japan. Tras su difusión internacional fue editado en DVD por EMI. En 2003 Alessio Bax graba con Lucille Chung la obra completa para dos pianos y piano a cuatro manos de Gyorgy Ligeti para el sello Dynamic, y más tarde graban el Carnaval de los Animales de Saint-Saens junto a la Fort Worth Symphony Orchestra dirigidos por Miguel Harth-Bedoya. También ha grabado la obra completa de Marcel Dupré para piano y órgano para Naxos y el concierto nº 1 de Brahms con la New Japan Philharmonic, el concierto nº 3 de Beethoven en vivo junto a la Hamamatsu Symphony Orchestra, y un recital para Fontec. Alessio Bax estudia en el Conservatorio de Bari, Italia, y se gradúa a los 14 años con Angela Montemurro. Estudia en Francia con François-Joël Thiollier y en la Accademia Chigiana de Siena con Joaquín Achúcarro. En 1994 se traslada a Dallas a perfeccionar sus estudios con Joaquín Achúcarro en la Meadows School of the Arts de la Southern Methodist University de Dallas, donde es Profesor. Lionel Bringuier director titular ORquesta sinfónica de castilla y león Alejandro Posada principal director invitado Vasily Petrenko principal director invitado La Orquesta Sinfónica de Castilla y León ha cumplido sus primeros veinte años situándose como una de las mejores y más dinámicas agrupaciones españolas gracias a su calidad, a la amplitud de su heterogéneo repertorio y a la incesante actividad desplegada en su sede estable del Auditorio Miguel Delibes de Valladolid y por todo el territorio nacional. Creada en 1991 por la Junta de Castilla y León, la OSCyL tiene como su primer director titular a Max Bragado-Darman. Tras este periodo inicial, Alejandro Posada asume la titularidad de la dirección durante 7 años hasta la llegada de Lionel Bringuer, quien permanecerá al frente de la formación orquestal hasta junio de 2012. Así mismo la OSCyL ha contado con Salvador Mas, Vasily Petrenko o Alejandro Posada como principales directores invitados. Durante estos 20 años de trayectoria, la OSCyL ha llevado a cabo importantes estrenos y ha realizado diversas grabaciones discográficas para Deustche Grammophon, Bis, Naxos, Tritó o Verso entre otras, con obras de compositores como Joaquín Rodrigo, Dmitri Shostakovich, Joaquín Turina, Tomás Bretón, Osvaldo Golijov o Alberto Ginastera. Además, la OSCyL ha llevado a cabo una intensa actividad artística en el extranjero, con giras por Europa y America, que le han permitido actuar en salas tan destacadas como el Carnegie Hall de Nueva York. A lo largo de estas dos décadas, la OSCyL ha ofrecido centenares de conciertos junto a una larga lista de directores y solistas, entre los que destacan los maestros Semyon Bychkov, Rafael Frühbeck de Burgos, Jesús López Cobos, Marc Minkowski, Gianandrea Noseda o Josep Pons, los cantantes Teresa Berganza, Barbara Bonney, Juan Diego Flórez, Magdalena Kozena o Angela Gheorghiu, e instrumentistas como Daniel Barenboim, Alicia de Larrocha, Joaquín Achúcarro, Katia y Marielle Labèque, Maria Joao Pires, Viktoria Mullova, Gidon Kremer, Gil Shaham, Natalia Gutman o Misha Maisky, entre muchos otros. Algunos de los compromisos para la presente temporada 2011/2012 incluyen actuaciones con la soprano norteamericana Renée Fleming o junto al cantante y pianista Rufus Wainwright. Además ofrecerá el estreno en España de 4 obras, entre las que cabe destacar el concierto para violín de James McMillan, interpretado por Vadim Repin. Uno de los principales objetivos de la OSCyL es la difusión del repertorio sinfónico en el sentido más amplio de la palabra, así como la creación de nuevos públicos. En este sentido es importante reseñar la alta implicación de la orquesta en las numerosas iniciativas sociales y educativas que el Auditorio Miguel Delibes está llevando a cabo. Desde el año 2007, la OSCyL tiene su sede estable en el Auditorio Miguel Delibes de Valladolid, obra del arquitecto Ricardo Bofill. VIOLINES PRIMEROS Teimuraz Janikashvili, concertino * Elizabeth Moore, ayda. concertino Cristina Alecu Irene Ferrer Pawel Hutnik Vladimir Ljubimov Eduard Marashi Renata Michalek Daniela Moraru Dorel Murgu Monika Piszczelok Piotr Witkowski Carlos Parra * Cristina Castillo ** Sheila Gómez ** VIOLINES SEGUNDOS Elena Rey, solista ** Malgorzata Baczewska, ayda. solista M.ª Rosario Agüera Csilla Biro Anneleen van den Broeck Iuliana Muresan Blanca Sanchis Joanna Zagrodzka Tania Armesto * Iván García * Eva Meliskova * Hye Won Kim * Carlota Amargós ** VIOLAS ARPA TROMPAS Nestor Pou, solista Marc Charpentier, ayda. solista Michal Ferens, 1er tutti Virginia Domínguez Ciprian Filimon Harold Hill Doru Jijian Julien Samuel Paula Santos Jokin Urtasun Elena Boj * Marianne ten Voorde, solista José Miguel Asensi, solista Carlos Balaguer, ayda. solista Emilio Climent, 1er tutti José M. González, 1er tutti Martín Naveira, 1er tutti FLAUTAS TROMPETAS André Cebrián, solista ** Pablo Sagredo, ayda. solista José Lanuza, 1er tutti / solista piccolo Vicente Cintero ** Roberto P. Bodí, solista Emilio Ramada, ayda. solista Miguel Oller, 1er tutti VIOLONCHELOS OBOES TROMBONES Marius Diaz, solista Jordi Creus, ayda. solista Frederik Driessen, 1er tutti Montserrat Aldomá Mary Helen Blossom Pilar Cerveró Marie Delbousquet Carlos A. Navarro Diego Alonso * Mikel Zunzundegui ** Sebastián Gimeno, solista Jorge Pinzón, ayda. solista Juan M. Urbán, 1er tutti / solista corno inglés Philippe Stefani, solista Robert Blossom, ayda. solista Sean P. Engel, trombón bajo solista CLARINETES TUBA Salvador Salvador, solista * Laura Tárrega, ayda. solista Julio Perpiñá, 1er tutti / solista clarinete bajo Javier Balaguer ** Jose M. Redondo, solista CONTRABAJOS FAGOTES TIMBALES/PERCUSIÓN Miroslaw Kasperek, solista Joaquín Clemente, ayda. solista Joan Perarnau, 1er tutti Nigel Benson Juan Carlos Fernández Emad Khan Nebojsa Slavic Salvador Alberola, solista Fernando Oriola, ayda. solista * Fernando Arminio, 1er tutti / solista contrafagot Juan A. Martín, solista Tomás Martín, ayda. solista Ricardo López, 1er tutti / solista Ricardo Moreno, 1er tutti Jose A. Caballero ** Alejandro Sancho ** * Contratado por la OSCyL ** Contratado por la OSCyL para este programa Los profesores tutti están clasificados por orden alfabético DELIBES + — sábado 25 de febrero de 2012 sala sinfónica · 20.00 h 40 / 33 / 25 / 15 / 10 € RUFUS WAINWRIGHT voz y piano orquesta sinfónica de castilla y león andrés franco Classico Rufus director www.auditoriomigueldelibes.com