Adoradores de Toda Tribu, lengua, y Nación lengua, y Nación.

Transcripción

A doradores de
Toda Tribu,
lengua, y N ación.
ación .
A pocalipsis 7:9-10; 14: 6-7;
15:4.
La Adoración no pertenece a una sola nación
ni tiene las características de un solo pueblo
ó cultura. La adoración no está confinada a
una sola lengua.
Sin embargo, la adoración ha sido un tema de
inquietud y polémica de los últimos años.
En los asuntos de adoración y alabanza se
observa una lucha entre el modelo viejo y los
modelos nuevos.
Quienes dirigen los modelos contemporáneos,
dicen que están haciendo una Renovación de
la Adoración. Y los que defienden los modelos
antiguos hablen de una Verdadera y Santa
Adoración.
El asunto es que en el Gran Coro Celestial
estaremos de Toda Tribu, Lengua y Nación;
esto quiere decir de Todas las culturas, y de
todos los tiempos. ¿A quienes excluimos?
La cultura implica, lenguaje, costumbres,
valores, cosmovisión, ritmo (música), la
forma de las relaciones humanas
Por Hno. FERNADO LÓPEZ
Director Nacional FECP.
(hospitalidad); y todas aquellas cosas que
demarcan la cultura de un pueblo, tribu,
nación ó región geográfica.
En la medida que conocemos otras culturas ó
somos influenciados por ellas, aumenta la
inquietud por la amplia gama de estilos de
adoración. Esta diversidad irá en aumento
debido a que la Iglesia crece de manera
sostenida en todo el mundo; además la
globalización, la tecnología y los medios de
comunicación permiten que las culturas sean
permeables las unas de las otras.
La música y las canciones de todo el mundo,
los diversos géneros musicales, el uso de
diferentes instrumentos musicales; la
incorporación de cantos pequeños
y
estribillos que conocemos como "Coros”. Las
canciones
escritas
por
nuestros
compositores, y por compositores de otras
denominaciones, que expresan devoción,
dolor, alegría y nuestro mensaje al mundo.
Además de los gustos y preferencias de la
totalidad de la iglesia (niñez, juventud, adultos
y ancianos de todos los sexos); enmarcan
nuestra cultura musical cristiana.
Hay que tener en cuenta que lo que es
apropiado en una cultura puede ser ofensivo
en otra; además que la cultura va
evolucionando con el tiempo, lo que se puede
observar en el hecho que algunas cosas que
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fueron ofensivas en algún tiempo, ahora sean
aceptadas fácilmente.
No obstante, aunque la cultura, la ciencia, las
costumbres, y la música cambie, existe algo
que debe permanecer inmutable, y es La
Palabra de Dios, (los valores y principios
Cristianos).
Es importante tener claro que el propósito de
la adoración no es estimular las emociones y
sus expresiones corporales con el objetivo de
crear un sentimiento de bienestar en el
adorador; púes esto desplazaría a Dios del
centro exclusivo de adoración. Nada debe
distraer nuestra atención ni la de los demás
de lo que debe ser primordial: Adorar a Dios y
proclamar su grandeza y su obra.
La historia muestra que la cultura influye
decididamente en la forma de celebrar el
culto de adoración. Si bien el pueblo de Dios
no debe ser del mundo, la iglesia existe en el
mundo y por lo tanto la adoración se
desarrolla dentro del marco cultural.
No podemos hablar de adoración sin hablar
de cultura. Tenemos una identidad cultural
como pueblo Colombiano, como grupo étnico,
ó regional; y también tenemos una identidad
cultural como pueblo de Dios.
En ese contexto, podemos tener en cuenta
estos cinco principios relacionados con la
adoración y la cultura:
1. La
adoración
debe
ser
Transcultural. Es decir debe
trascender la cultura. Aunque el
mensaje cristiano se predica dentro
de un marco cultural, debe superar
ese marco y trascender las
limitaciones culturales. El evangelio es
eterno, pero la cultura está ligada al
tiempo. El evangelio debe alcanzar a
todo el mundo. (Romanos 12:1-2)
2. La adoración debe ser Contextual.
La adoración adoptada en un lugar
particular incorporará componentes
de la cultura local. Sin embargo, se
debe tener gran cuidado para
asegurarse
de
que
esta
contextualización
no
incluya
elementos que sean incongruentes
con el evangelio de salvación. Al
mismo tiempo, es importante colocar
el evangelio y la adoración cristiana
en el contexto de la cultura local. La
adoración no se debería adaptar a la
cultura, pero debería adoptar
elementos culturales que ayuden a
comunicar el evangelio. (Jeremías
15:19).
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3. La
adoración
debe
ser
“Contracultural”. Esto significa que
la adoración no se debe conformar al
mundo, sino transformar a los
adoradores y su cultura. Aunque la
adoración no está necesariamente en
contra de la cultura, se debe
reconocer que existen componentes
culturales que son contrarios a las
normas cristianas, y deben por lo
tanto ser declarados y rechazados.
En tales casos, la iglesia debe hablar
en contra de ciertas prácticas
culturales y efectuar un llamado a
“salir” de la Babilonia cultural. (Isaías
5:20)
4. La
adoración
debe
ser
Intercultural. El cristianismo no
puede limitarse a una cultura, nación,
grupo étnico o idioma. Es
contraproducente referirse a la
iglesia y particularmente a la
adoración como “norteamericana”,,
“latina”, “Juvenil”, “Senil”; o con
cualquier otro adjetivo restrictivo. La
cultura está limitada por el espacio,
pero el evangelio de la adoración no
conoce latitudes o longitudes; por lo
tanto debe apropiarse de las diversas
formas que se emplean en cada
cultura. (1 Corintios 9:19-23).
adoración
debe
ser
5. La
Multicultural. Aun en el marco local,
la adoración no debe ajustarse a una
sola cultura, idioma, o grupo. La
iglesia debe ser multicultural y
proporcionar una adoración que sirva
a las diversas culturas. Cuanto mejor
lo haga, más eficaz será su
evangelismo y su servicio. Después de
todo, el Señor de la iglesia enfatizó
que su iglesia tiene que ser “una casa
de oración para todos los pueblos”
(Isaías 56:3-7). Por lo cual la
Adoración debe aportar espacio para
todos los grupos, las edades, los
estilos, y gustos que definen lo
multicultural de la Iglesia del Señor.
Conclusión:
El Coro Celestial que habremos de
conformar, tendrá participantes de toda
Lengua, de toda Tribu, Pueblo, Nación y
Época; por lo que la cultura de cada
integrante o grupo perteneciente a este
coro de multitud incontable, debe ser un
elemento no de discordia, sino de
enriquecimiento de la Alabanza Y Adoración.
Así como en Pentecostés cada uno hablaba
según el Espíritu les daba que hablase, tanto
que Partos, Medos, Elamitas,
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Mesopotámicos,
Asiáticos,
Egipcios,
Africanos, Cirenios, Romanos, Cretenses y
Árabes; les oían hablar en su lengua; en el
cielo, conformaremos un Coro Multicultural,
Pluriétnico, y Polifacético, que tendrá un
solo objetivo ADORAR AL GRAN REY.
Permitamos que los elementos culturales
enriquezcan nuestra Alabanza y nos unan en
armonía cristiana, y no que nos distancien.
Somos Uno, en Cristo, Somos Uno
Un Solo Dios, Un Solo Señor, Una Sola Fe, Un
Solo Espíritu, Una misma Esperanza, Una
Sola Iglesia, Un Solo Coro Celestial.
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Adoradores de Toda Tribu, lengua, y Nación lengua, y Nación.

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