Revista "Investigación Bibliotecológica: archivonomía

Transcripción

Revista "Investigación Bibliotecológica: archivonomía
Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X
Universidad Nacional Autónoma de México
Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas
Contenido
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, VOL. 23, NÚM. 48, MAYO/AGOSTO, 2009, MEXICO, ISSN: 0187-358X
COMENTARIO
ARTÍCULOS
RESEÑAS

Para repensar el patrimonio diez años después
Idalia García Aguilar
7-10

Analysis of the Social Network in Serial Publications: representation in the
Journal of Documentation [Análisis de las redes sociales en las publicaciones
seriadas: su representación en el Journal of Documentation]
Adilson Luiz Pinto; Beatriz Ainhize Rodríguez Barquín;
José Antonio Moreiro González y André Kauric
13-32

Los objetos bibliográficos confirmados en la integración compleja de la
descripción y acceso a recursos [Bibliographical Objects Confirmed in the
Complex Integration of the Description and Access to Resources]
Ariel Alejandro Rodríguez García
33-59

Accesibilidad vs usabilidad web: evaluación y correlación
[Accessibility vs. WEB Usability— Evaluation and Correlation]
Esmeralda Serrano Mascaraque
61-103

Cuadro de Mando Integral (Balanced Scorecard) para la gestión
bibliotecaria: pautas para una aplicación [Balanced Scorecard for
the Library Management: Guidelines for Application]
Edith Carmen Muñoz
105-126

Los Grupos de Investigación Más Productivos de la Universidad Nacional
Autónoma de México (UNAM) en el área de Física: 1990 a 1999
[The Most Productive Research Groups of the National Autonomous
University of Mexico (UNAM) in the Area of Physics, 1990-1999]
María Magdalena Sierra-Flores y Jane M. Russell Barnard
127-155

Diagnóstico de la docencia e investigación en la Facultad de Ciencias
de la Documentación de la Universidad Complutense de Madrid
[Diagnostic of teaching and research in the Faculty of Sciences and
Documentation of the Complutense University of Madrid]
Rosario Arquero Avilés y Luis Fernando Ramos Simón
157-177

Publicaciones seriadas en ciencias bibliotecológica y de la información: su
estado actual [Serialized Journals on Library and Information Science: Current Status]
Salvador Gorbea Portal y Manuel Ávila Uriza
179-209

Investigación sobre el diseño curricular de la carrera de biblioteconomía y
documentación en la Universidad Católica de la Santísima Concepción
(Concepción, Chile) [The Planning Project of the Library Science and Documentation
Studies at the Catholic University of The Holy Conception (Chile)]
María Teresa Fernández Bajón
211-223

Memorias del I Simposio Internacional sobre organización del
conocimiento: Bibliotecología y Terminología.
Catalina Naumis Peña [por Mauricio Sánchez Menchero]
227-231

¿Qué es la brecha digital?: una introducción al nuevo rostro de la desigualdad
Raúl Flores Simental [por Jesús Cortés Vera]
233-239
EDITORES ACADÉMICOS
Investigación Bibliotecológica: archivonomía, bibliotecología e información / ed. por el Centro
Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas. -Vol. 1, No. 1 (ago. 1986)-.-:Universidad
Nacional Autónoma de México, CUIB,
1986-V.: Semestral
2008-V.: Cuatrimestral
ISSN 0187-358X
Investigación Bibliotecológica: archivonomía, bibliotecología e información. Revista cuatrimestral, número 48,
vol. 23, mayo/agosto de 2009. Es editada por el Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas,
de la Universidad Nacional Autónoma de México. ISSN:
0187-358X. Certificado de Licitud de Título No. 6187,
Certificado de Licitud de Contenido No. 4760, expedidos
el 29 de noviembre de 1991. Reserva al Título en Derechos de Autor No. 236-92, expedido el 25 de febrero de
1992. Toda correspondencia debe enviarse a Torre II de
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formación: Mtro. Mario Ocampo Chávez; revisión especializada: Lic. Francisco Xavier González y Ortiz; diseño
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agosto de 2009, en Ediciones Nueva Visión S.A. de C.V.
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2009, México, ISSN: 0187-358X
Adilson Luiz Pinto
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Science Department Campus de Rondonópolis – Rodovia Rondonópolis-Guiratinga, KM
06 (MT-270) - Bairro Sagrada Família, CEP
78735-910, Rondonopolis – Mato Grosso
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Ariel Alejandro Rodríguez García
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Col. Copilco Universidad, Deleg. Coyoacán,
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Esmeralda Serrano Mascaraque
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Henares (Madrid). España.
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Jane M. Russell Barnard
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Col. Copilco Universidad, Deleg. Coyoacán,
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José Antonio Moreiro González y André Kauric
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17.2.53, 28903, Getafe – Madrid (España)
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UNAM. (México)
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María Magdalena Sierra-Flores
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Circuito Interior s/n, Cd. Universitaria, Col.
Copilco Universidad, Deleg. Coyoacán, C.P.:
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Ext. 322
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María Teresa Fernández Bajón
Facultad de Ciencias de la Documentación,
Universidad Complutense de Madrid (España)
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Rosario Arquero Avilés y Luis Fernando Ramos
Simón
Facultad de Ciencias de la Documentación.
Universidad Complutense de Madrid.
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Salvador Gorbea-Portal
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Col. Copilco Universidad, Deleg. Coyoacán,
C.P.: 04510, México, D.F.,
Tel.: (55) 5623 0360
E-mail: [email protected]
Comentario
Para repensar el patrimonio diez años después
E
ste año numerosos investigadores e instituciones de todo el
país preparan diversas actividades para conmemorar dos
acontecimientos que marcaron profundamente la historia de
México: la Independencia de 1810 y la Revolución de 1910. Por
supuesto que en todo este afán conmemorativo serán protagonistas las fuentes históricas que se relacionan con tan cruciales
eventos y que se custodian en la Biblioteca Nacional de México
(BNM) y el Archivo General de la Nación (AGN).
Sin embargo, no parece éste un periodo evocador que propicie reflexiones más profundas sobre el estado actual y las
problemáticas que presentan ambas instituciones nacionales,
ni tampoco para preocuparnos por el valor que tiene nuestro
legado bibliográfico y documental y, por tanto, de cómo se lo
transmitimos a las nuevas generaciones. Ninguna de estas cuestiones es baladí, al contrario, de estos aspectos depende en gran
medida que la BNM y el AGN obtengan el reconocimiento institucional que merecen, y que éste pueda plasmarse en los espacios jurídico, institucional y social. No olvidemos que ambas
entidades son baluartes institucionales cuya función principal
ha sido salvaguardar los testimonios históricos de gran importancia para la memoria colectiva de los mexicanos.
Una empresa de tal magnitud requiere instituciones con recursos suficientes que puedan garantizar la permanente tarea
de identificación y registro de esos objetos, y que todo ello redunde en la salvaguarda de sus colecciones y favorezca la transmisión de éstas entre las generaciones. Sin conocer con precisión las características de los objetos conservados no es posible
realizar procesos de valoración, y se imposibilita también la
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planificación de cualquier política cultural específica sobre los
bienes patrimoniales. Por eso debemos reconocer que la principal problemática de estas instituciones la conforma el registro
de los bienes custodiados; cuestión que puede resolverse si nos
abocamos a garantizar que un registro (bibliográfico o documental) se corresponda de forma inequívoca con un objeto resguardado.
Pero esto significa que debemos comprender que todo registro no sólo debe incluir la caracterización de los bienes de
acuerdo con su naturaleza, sino también el reconocimiento
de sus valores culturales y su estado de conservación. Con esta información estaremos en posibilidad de iniciar programas
de conservación, valoración y socialización más acordes con la
realidad de las colecciones. Sólo que un esfuerzo de esta naturaleza que no tome en cuenta las posibilidades reales de las instituciones (materiales y financieras) para emprender semejante
tarea y obtener resultados concretos programables y medibles,
es una falacia absoluta.
Por eso es imprescindible reflexionar sobre el marco jurídico que debe amparar la función social que cumplen estas instituciones. Como es sabido, tanto para la BNM como para el AGN,
ese marco no ha sido el más adecuado para garantizar el ejercicio de tal función. La legislación aquí implicada ha sido durante
mucho tiempo un tema álgido, en especial por la dependencia
institucional que actualmente tienen ambas instituciones.1
La dependencia institucional de la BNM siempre ha sido interpretada como un tipo de custodia, aunque no exista formalmente tal denominación en ningún texto normativo vigente, pero para algunos esta relación entre dos instituciones nacionales,
la UNAM y la biblioteca, no es la más adecuada porque no permite la evolución del órgano bibliotecario de acuerdo con el tipo y
naturaleza institucional que le corresponden, como se observa
en otros países; para otros, en cambio, esa relación ha sido necesaria históricamente y ha garantizado la permanencia de la BNM.
Por lo que toca al AGN, en el 2006 se presentó una propuesta
para crear una Ley Federal de Archivos que fue aprobada en la
1
8
Como se sabe el archivo depende desde 1917 de la Secretaría de Gobernación y la biblioteca está adscrita a la estructura de la Universidad Nacional
Autónoma de México desde su fundación en 1910, condición que no ha cambiado con la obtención de la autonomía universitaria en 1929 y que se mantiene vigente desde 1945.
COMENTARIO
Cámara de Diputados en marzo del presente año, y que pronto
dictaminará el Senado de la República. Sin duda esta propuesta
debe aplaudirse porque pone la atención en un asunto cultural
de gran importancia pese a que los legisladores se hayan tardado tanto en considerarlo. Si bien éste no es el espacio correcto
para analizarla, sí podemos anotar algunas cuestiones que nos
parecen importantes.
Ciertamente la propuesta legal es acertada en la gran mayoría de sus planteamientos y se suma al esfuerzo realizado desde hace varios años por numerosos gobiernos de la Federación
para regular sistemas estatales de archivos. Pero dicha norma
podría haber incluido una mejor relación con el sector cultural
y su propia normativa, y también sería bueno que reconociera
que su idea de patrimonio documental está muy alejada de la
postulada por la UNESCO, que rebasa el espacio de un archivo
y de los objetos que ahí se contienen. Tal situación nos aleja de
un trabajo colectivo que nos ha honrado con varias nominaciones “Memoria del Mundo”, como otras dos que reconocen la
riqueza documental del AGN.
Por otra parte esta propuesta debió respetar la autoridad
que debe tener la BNM para valorar los libros como bienes patrimoniales, y por tanto reconocer a la biblioteca como institución
nacional. En efecto, muchos de esos libros son insustituibles
por su propia naturaleza, y la biblioteca conoce muy bien este
tema porque custodia un gran conjunto del patrimonio libresco
del país. Sin este reconocimiento se dificulta la transición de la
biblioteca hacia un órgano normativo y rector de políticas que
afectan y determinan esencialmente el futuro de ese patrimonio.
Todavía no podemos ni debemos celebrar eufóricamente la
iniciativa legal, porque cualquier ciudadano sensato y responsable sabe que un dictamen negativo (entre muchos otros factores)
puede entorpecer su aprobación definitiva y hacer que la propuesta se estanque en el tiempo y no consiga su publicación en
el Diario Oficial de la Federación y con ello su plena vigencia.
No está de más recordar que dicha publicación no es garantía
absoluta para que la situación del archivo cambie en un país con
tan escasa cultura jurídica. Esta condición no podrá cambiar
mientras no exista un proyecto educativo nacional que contemple el cumplimiento de las leyes como un elemento sustancial de
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una democracia saludable, una que no puede sostenerse sin información clara y precisa, como la que corresponde al proyecto
de una nueva sede para el AGN.
Todos aquellos que han entrado en contacto con la valiosa información custodiada en el AGN, han visto deteriorarse el
espacio institucional tanto para vergüenza de nacionales como
de extranjeros al compararlo con otras instituciones de similar
realce. Un nuevo edificio es una buena noticia, pero este tipo
de proyectos que no tenga un conocimiento más amplio y social, como los tiempos actuales lo demandan, puede resultar un
fiasco como tantos otros que ha vivido la sociedad mexicana.
Todas estas iniciativas entre otras, deben conducirnos a reflexionar puntualmente si seguiremos orientándonos por ocurrencias culturales o bien por políticas culturales que fortalezcan un futuro viable que garantice la salvaguarda de nuestros
objetos patrimoniales. Si optamos por el diseño de políticas
culturales sensatas y responsables, entonces tendremos que
pensar en un concierto de instituciones que cuente con la participación de la sociedad.
Son tiempos difíciles, es cierto. Pero las conmemoraciones
nacionales deben tener un momento de cordura para que, como
sociedad, demandemos una correcta atención a los asuntos de
interés general como la justicia, la salud pública, la educación
y, por supuesto, la cultura. Es momento de pensar si debemos
seguir apostando por una vida política que ha mostrado su incapacidad para resolver los problemas sociales o es el momento
de revertir el proceso para poner nuestras instituciones de cultura en el lugar que merecen, ya que no debemos olvidar que el
AGN y la BNM resguardan las huellas del ideario de aquellos que
soñaron con un país diferente.
Idalia García
10
A
R
T
Í
C
U
L
O
S
Analysis of the Social Network in
Serial Publications: representation in the Journal of Documentation
Adilson Luiz Pinto *
Beatriz Ainhize Rodríguez Barquín
José Antonio Moreiro González
André Kauric **
Artículo recibido:
18 de febrero de 2009.
Artículo aceptado:
25 de mayo de 2009.
Abstract
The construction of maps of social networks is shown
based in the Journal of Documentation during the period 1988-2005. The analysis is made by: (i) authors
that produce the most within the publication, (ii) authors with the greatest centrality and frequency in
quotes received, (iii) the documents with the highest
number of citations during the period, and (iv) the journals most used in the consumption of information.
681 entries were retrieved, which were divided into 288
book reviews, 172 journal articles, 14 editorial materials, 12 article reviews, 9 reprints and 2 bibliographic
items. The bibliographic information of the Institute
*
**
Universidad Federal de Mato Grosso, Brasil. [email protected]
Los tres últimos autores pertenecen a la Universidad Carlos III de Madrid, España.
([email protected]); ([email protected]); ([email protected].
br).
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for Scientific Information (ISI) was the original source
for the treatment of the data and the program used was
CiteSpace, which automatically generates the maps of
relationships.
Keywords: Social Networks; Analysis of Journals;
Information Consumption; Journal of Documentation.
Resumen
Análisis de las redes sociales en las publicaciones seriadas: su representación en el Journal of Documentation
Adilson Luiz Pinto; Beatriz Ainhize Rodríguez Barquín;
José Antonio Moreiro González y André Kauric
Se estudia la construcción de mapas de redes sociales
utilizando como estudio de caso la revista Journal of
Documentation en el periodo que va de 1988 al 2005.
Se analizan (i) los autores que tienen mayor producción
científica dentro de la publicación, (ii) los autores que
alcanzan mejor centralidad y la mayor de frecuencia de
co-citaciones recibidas, (iii) los documentos que tienen
mayor número de citaciones en el periodo, y (iv) las
revistas más utilizadas en el consumo de información.
Fueron recuperados 681 documentos, divididos en 288
reseñas de libro, 172 artículos de revista, 14 materiales
editoriales, 12 revisiones de artículos, 9 reimpresiones
y 2 artículos bibliográficos. Mientras que la información
bibliográfica del paquete del Institute for Scientific Information (ISI) sirvió como fuente original, para el tratamiento de los datos se utilizó el programa CiteSpace,
que genera los mapas de relaciones automáticamente.
Palabras clave: Redes sociales; Análisis de revistas; Consumo de información; Journal of Documentation.
Introduction
T
14
he research was aimed to the search and recuperation of articles that deal
with social networks in journals as scientific publications, since these are
an important indicator for observing the relationships between scientists or
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
institutions. As case study, we carried out an analysis of the Journal of Documentation (JDoc) during the period between 1998 and 2005.
It was fundamental to observe two separate aspects, the social network
and the possible scientific indicators that can be generated with an analysis
of this breadth.
The denomination of the social network in the areas of Social Sciences
and Documentation was disseminated primarily through two studies; the
first dealt with the social network in Social Sciences and History, providing a study of the social behavior of men and women on fertility and genetic
changes, applied also to relatives, friends and neighbors in the form of informal conversations in order to discover all the behavioral possibilities of the
people studied (Watkins, 1995); the second study dealt with the importance
of the use of information that public libraries generate; these are useful contents for elderly Afro-American women with low financial income. In that
paper, these women receive information from their doctors and then carry
out inquiries at public libraries to resolve all remaining doubts (Gollop,
1997).
In terms of the area of Social Sciences and Documentation an application
viable through structured actions and micro and macro pairs is described,
exploiting fundamentally the quantitative generation of data. However, it
may be that it is only a sociological view that concerns itself with the area in
question, though really exists the possibility of exploiting the qualitative relationship, especially if there exists a controlled analysis in the peripheries of
the networks (Molina, 2004).
The Social Network is a way of representing affective or professional relationships of human beings among themselves or among groups with mutual
interests.
Despite the fact that the notion of social networks is not adequately
known, these are present in our daily life from the day we are born. The interpersonal relationship both in our friendships and in our professional activities is based on models of networks, always used in actions in which there
does not exist domination by any of the parts, that is, the network relationship is equal for all participants. For example, if we say that two expert professors take part in many dissertation panels and in some cases mutually, we
can state that there exists a social network between both. However, it is not
particularly important to know which of the two professors has the greatest
presence in dissertation defense groups, but the participation of both together is important.
In contrast, for the generation of scientific indicators, there is always certain domination on the part of the researchers in the construction of statistical
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quantifications, primarily influenced by the fact that the data are handled at
all stages, often “distorting” the aim of this type of research due to manual
or semi-manual techniques.
In the next sections we discuss about the Journal of Documentation and
its importance to analyze social networks in library science. Later, we define
a method to study this networks. Finally, we discuss some conclusions extracted from our analysis.
The Journal of Documentation
The main journals about Librarianship, documentation and Information
science are the Journal of the American Society for Information Science and
Technology, the Canadian Journal of Information and Library Science, and the
Bulletin of the American Society for Information Science. Traditionally, one of
them, the journal of documentation, had a very important role in the development of the discipline, in this study we are going to focus in this review
to analyze the social networks in the area. JDoc, published since 1945, is at
present one of the most important journals in the area of Librarianship, Documentation and Information Science. Its distribution until 2001 was the exclusive responsibility of the Association for Information Management (Aslib),
but since 2002 its format was taken over by Emerald.
The indexing of the JDoc is found in the world’s main data bases, such
as the Social Science Citation Index (the package of the Institute for Scientific Information, ISI), Francis (the social area database of the Institut de
l’Information Scientifique et Technique, INIST) and the Library and Information Science Abstract (LISA).
At present, around 25 articles in 6 annual issues are published, while until 1994 four or five issues were published yearly, so the number of articles
published per year was also lower than today’s total.
Due to the great importance of this journal we highlight three studies
that illustrate its visibility and scientific breadth throughout the years.
While not forgetting the contribution of Aslib to the development of
studies on special libraries and information systems, to celebrate its 50th anniversary, the journal published a special edition in which a retrospective
view of the scientific contributions therein was made. Here, the manner in
which the academic and theoretical bases progressed during the war years,
through work carried out at the British Society for International Bibliography (BSIB), is shown. The BSIB joined Aslib at the time the journal was born.
Bryan Vickery was among the movers of this initiative. The author describes
how he started out with this task, which begun after two historical events:
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
the Conferences of the Royal Society, and classification into a range of topics
in seven areas. Authors such as Peter Lewis, Alan Gilchrist, Stephen Robertson, Jean Tague-Sutcliffe, Tom Wilson and Maurice Line evaluated the scientific contributions made to the journal throughout its history. As he regards
the areas of “quantitative methods in documentation”, Jean Tague-Sutcliffe
believes that, concerning studies on citation, the articles in JDoc have a very
considerable value for the authors. Maurice Line discovered an information
gap regarding the topic of “Libraries and their Management” (Vickery, 1994).
Another study in the JDoc celebrated its 60th anniversary (NebelongBonnevie; Frandsen, 2006). Since the journal is regarded as having a high
impact as well as great visibility in the scientific community, this study of a
bibliometric nature was published. Its aim was to propose a group of scientific evaluation indicators through the use of methods and theories derived
from the studies of Ellen Nebelong-Bonnevie and Tove Faber Frandsen. The
indicators on which the study was based were of two types: indicators obtained from the analysis of the references in the journal articles, and indicators derived from the study of co-citation in the journal. Before this contribution, some authors such as Cronin and McKenzie, 1992; Cronin and Shaw,
1999 and 2001; and White, 2001, carried out innovative analyses in this field
and dealt with some key concepts on the identity, as well as the image, of the
citation. These were the bases on which this second study, with its analysis
on the journal itself, driven by its 60th anniversary, was founded.
Due to the great standing and repercussion of the JDoc, a comparative
study of the geographical distribution of foreign authors in the journal was
described in 2002, with the Journal of the American Society for Information
Science and Technology, JASIST (HE ; Spink, 2002). This consisted of bibliographical data on foreign authors and their geographical positions over a
publication period of 50 years (1950-1999), analyzed in 5-year periods, establishing their evolution. The distribution of foreign authors by their geographical position was analyzed for the overall tendencies in both journals,
the British and Canadian authors being identified as having the greatest
presence in JASIST and, for the JDoc, the authors with more presence were
North Americans and Canadians. The representativeness of the authors in
JASIST was consolidated with Egghe (14 signed papers), Meadows (9), Willett (9), Rousseau (8), Tague (8), Robertson (7), Carroll (7), Wong (7), Yao
(7) and Van Raan (6); within JDoc we were able to highlight Cronin (with 11
contributions), Ingwersen (5), Kochon (4), Rousseau (4), Salton (4), Diodato
(3), Egghe (3), Lancaster (3), MacKenzie (3) and Neil (3).
For all that the Journal of Documentation represents, it becomes necessary to analyze its representation and visibility in two aspects: the first one on
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its co-authorship from the Scientography (maps) and second for its citation
index (tables), even because this visualization of citation networks of magazines uses statistical techniques and is excellent to complement the analysis
of citations and co-citations for the identification of the environment of the
scientific journals (Bornmann; Leydesdorff; Marx, 2007).
Initial concept to analyze JDoc: through the social networks
A social network represents the interactions between participants who connect horizontally, directly or through those around them. The group resulting from this relationship is a fabric of multiple threads that may spread out
indefinitely on all sides, without anyone being considered principal or central, or representative of the rest. There is no “commander”. What there lies
is a collective will to carry out and achieve aims (Whitaker, 1998).
For decades, the concept of the social network and the analyses of these
relationships have been developing as one of the most promising routes for
measuring the social structure of scientific cooperation. Its basis, however,
was first used in the middle of the 1930s (Moreno, 1934) in the consolidation of Sociometry, by introducing the mathematical theory of graphs, with
a complementary adaptation to the Theory of Structural Equilibrium (Cartwright; Harary, 1956).
In parallel, a study of the analysis of equilibrium in relationships initiating in a cognitive experience was carried out, determining two possible types
of cooperation: sympathetic or positive, when the relationships are obvious
within a scientific universe; and the relationship by disapproval or negativity, that in general is made up of causalities, indeed an aid that possesses no
centrality (Heider, 1946).
From these initial frameworks, the origins of Social Networks Theory
were designed (Scott, 1991), developed a priori by the University of Manchester in the 1950s (Gluckman, 1954), where the major exponents of Social
Networks Theory at that time were to be found (Barnes, 1954).
In terms of its anthropological bases, we can observe studies focusing on
the clinical aspect of Medicine and its environment (network of patients and
control guidelines), both with a focus on the standardization of treatment
techniques in a group of people, and starting from cognitive presuppositions, focusing on the control of treatments in scales of networks of patients
(Litwin, 1997).
Another habitually applied aspect is the structuring and application of
networks in business activity, primarily for the control of groups and their
production, in procedures and business clusters (Grannovetter, 1985).
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
These visions (anthropological) are derived from initial studies on invisible colleges and social capital which always operated through the prism of
the relationship between individuals or institutions.
Faced with this assumption, it is essential to observe that social networks
are not only evolutionary. We are dealing with a discipline that aggregates
the principles of the invisible colleges and social capital, generating new
knowledge with the aim of resolving oppositions (up to this time, difficult to
overcome), in the area of Social Sciences, by working with structured actions
and micro and macro pairs, basically exploring the quantitative generation
of data.
In Spain, the possibility of generating a social network for studies of a
metric nature was described using the structuration of co-authorship to form
the relationships of scientific cooperation at the individual, group and network of authors levels (Molina; Muñoz; Domenech, 2002).
To strengthen this quantitative aspect of networks, it is essential to aggregate Metric Studies to be able to base other aspects within the relationships,
such as graphs, densities, centralities, intermediations, proximities and vectors.
This reinforces the view that social networks are a foundation for Statistics, as they are a sum of cooperation between two or more points, or simply
because they constitute a representation of scientific frequency designed in
a map by similarity (of authors, topics or scientific institutions). For this reason, an exploration of the scientific publications in Bibliometry and Scientometrics, from the point of view of co-authorship and co-citations, was carried
out.
Social networks determine different behaviours (insofar as facets of anthropology are concerned) and have different movements that establish their
present model.
From the conception of the social networks we will explain the visualization of the information that is the logical relation between the theoretical
studies and the applications in the metric scope.
The visualization of the information with objective of networks
The traditional forms to represent the quantitative information have been
developed as the social and scientific phenomena, in which we are immersed,
and here are explained.
Since the middle of the past century, alternatives have been searched to
evidence and to spread out the relations between these collective (Bush, 1945;
Garfield, Sher, Torpie, 1964) which, given its characteristics, are complex to
19
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represent. In this context appears a form to represent them graphically, by
informatics, treating to explain those known phenomena as Maps of Sciences (Price; Beaver, 1966), Scientograms or Scientographs (Garfield, 2001).
These aspects are represented inside of the visualization of information
for social networks and defined as techniques that are connected with the existence of softwares (Freeman, 2000). Through the years a lot of applications
with this intention have been developed as Ucinet, Pajek, Netdraw, Citespace,
among others programs to analyze sociograms (Brandes et al,. 1999).
These representations are tools to visualize all the micro and macro relations of the same reality, allowing to observe multidimensional phenomena
from different perspectives (Tufte, 1994), with techniques and models of
graph theory connected with the Scientograms, which we can define according to the following steps (Börner; Chen; Boyack, 2003):
(1)The attainment of the data (as a way of example, Web of Science,
Medline and SciELO)
(2)Definition of the unit or study object, which can be through:
(a) the authors (White; McCain, 2002);
(b) the heading of the publications (McKechnie at al, 2005);
(c) the terms and keywords (Liu; Maes, 2005);
(d) institutions and countries of affiliation of the authors (Reid;
Chen, 2007), and;
(e) Thematic scopes (Moya Anegón et al., 2006).
(3)Selection of the measures of the analysis
(4)Calculations of similarity between the units, through the scaled, the
vector and the correlation of the data
(5)The re-ordination of each unit of analysis to firm new coordinate in
the other space of analysis, with the object to construct representations through Analysis of Cluster and Multidimensional
(6)Graphical visualization for the analysis and interpretation.
There is a great variety of methods for the automatic construction of the
Sciencegrams. Of all them, the most used is the “Spring embedders” (Kobourov; Vampler, 2004) and its main objective is that the resultant graph is
more clear and comprehensible to the researcher. The great majority of the
informatic programs apply this principle for the construction of the Scienciograms, making the spatial distribution of the elements the representation of
the graphs, using Kamada-Kawai’s algorithm (1989).
This type of representation generates ample and complex graphs, for
what becomes necessary to use algorithms that reduce and simplify them.
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
The application of this is called pruning, being more employed the Pathfinder Networks, Pfnet (Schvaneveldt, 1990). These prunings are applied by the
similarity, proximity, correlation and distances, depending on the type of information that is desired to represent.
Objectives
Our study focused on the analysis of the scientific production of the journal
selected, through two aspects: (i) from the point of view of the social network and the relations of proximity of the embedded agents and (ii) by determining the frequencies of the points related in the analysis.
Within this view, we fixed our specific objectives, and:
yy we discovered the centralities and the frequencies in co-citations;
yy we analyzed the documents cited with the greatest relevance in accordance with the point of view of information consumption on the part
of the authors who published in the journal studied;
yy we established the journals most co-cited and cited by the authors;
and the most productive authors in the journal.
Methodology
Faced with these associations we resolved to carry out a social network applicable to the maps of relationships’ environment, determining the scientific
universe of the Journal of Documentation, and collecting all the documents in
existence during the period from 1998 to 2005. The products of the Institute
for Scientific Information, ISI (Science Citation Index, Social Science Citation
Index and Arts and Humanities) were used.
The manageable part of the data was incorporated into a structural program of social networks analysis (CiteSpace) and for the non-associative part
of the data a refinement was carried out so it could be used in the practical
complementation of the networks, through Microsoft Windows’ (Access and
Excel) working programs.
As a result of this paper, we were able to retrieve a total of 681 published works
in the ISI products, which are divided as follows: 288 book reviews; 172 articles;
14 editorial materials; 12 article reviews; 9 reprints; and 2 bibliographic items.
For the creation of the maps it was necessary to retrieve all the information from the entries, from the fields of authors (AU) and less important fields
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such as the authors‘ email correspondence (IN). This process was used because the CiteSpace system does not generate the maps in an individual manner, and it is necessary to have all the fields in their proper space, as a pattern
required by the software, independently of whether this field is used in the
analysis.
As regards the incorporation of frequency data, as a complementary part
of our analysis, we ran a fields filter through Microsoft Windows Word and
subsequently transferred it to a .TXT extension which allowed us to import
it into Microsoft Windows Access and subsequently to Microsoft Windows
Excel, to be able thus to generate the tables and the possible manual calculations of frequency.
Results
We decided to separate the results in two ways: to begin, we worked with the
productions within the journal studied, and subsequently we attempted an
analysis of information consumption.
For the part on the agents that produced within the Journal of Documentation, we set up an observation of the authors who published the most in
this medium, also with the concern of finding out the most represented institutions.
Oppenheim C
Halliday L
Fig. 1: Centrality of the authors
with the best scientific relationship (p. 8)
With our sample, we are able to point out that the only intense relationship is characterized by pairs. Within the authors that produced in the
journal, we pointed out that Oppenheim and Halliday maintained a strong
scientific relationship (figure 1), Oppenheim standing out since he also maintained a strong frequency.
22
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
Table 1: Authors with the greatest production (p. 8)
Ranking
Authors
Institutions
Thematic Area
Frequency
1
Bawden, D
City Univ. London
Information Retrieval
29
2
Oppenheim, C
Univ. California
Metric Studies
23
3
Line, MB
Princeton Univ.
Information System
19
4
Cawkell, T
Citech Ltd.
Information System
13
5
Marcella, R
Robert Gordon Univ.
Information Retrieval
11
6
Hannabuss, S
Robert Gordon Univ.
Knowledge Management
9
7
Thelwall, M
Wolverhampton Univ.
Metric Studies
9
8
Cronin, B
Indiana Univ.
Information Retrieval
8
9
Hjorland, B
Royal Sch.Lib.& Infor. Sci. Information Retrieval
8
10
Huntington, P
Univ. Coll. London
7
Electronic Information
For the frequency, we determined a ranking with the 10 most productive
authors to be able to observe the topics of these authors and their respective
institutions and make a complete analysis.
As regards the most productive institutions in the journals we found
City University London, with 42 publications, followed by the University of
Loughborough (28 contributions); the Royal School Library & Information
Science (with 27 publications); Robert Gordon University (25 signed papers);
Loughborough University of Technology (with 23 publications); the University
of Sheffield (20 papers); Indiana University (13 publications in the Journal);
Queen’s University Belfast (11 contributions); Napier University (10 contributions); and Manchester Metropolitan University (with 9 publications).
In the analysis of the most productive institutions and of the authors with
the greatest representativeness, we found that they relate to each other in frequency, with some differences, but in general it is the same institutions which
are emphasized in both studies.
The most used topics were Information Retrieval and Information Systems which in reality could be merged into a single topic, but we followed the
description of the contributions indexed in the bibliographies of the Journal
of Documentation.
In order to understand the information consumption results we recommend that certain concepts be taken into account, such as frequency and centrality, which are applied in the CiteSpace program that we used to achieve
our results (Chen, 2006).
(1)Frequency: This is an index that represents the number of times that
the values of a particular author or a group of authors are repeated.
This type of analysis can also be shown with the total value of appearances of institutions, topics, documents and journals cited, always
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based on the mathematical definition of the topic. Another factor that
represents frequency is the density of relations which allows the incorporation of this aspect to centrality (Nieminen, 1974);
(2)Centrality: In the social network centrality has the function of representing the node of a graphic-theoretical property that quantifies
the importance of the position of the personalities in the analysis. A
centrality generally uses the metric extension of centrality betweenness
(intermediation) to execute the percentage measurement of the number of trajectories related to the least distance (for the most intense relations) and to the greatest distance (for sporadic relations and those
of little intensity). Yet in centrality there also exists the closeness index (centrality closeness) which shows the route of the nodes (Freeman, 1978).
Starting with these first explanations we ascertained which were the authors who had the greatest representation in scientific production in the topics exploited, determined in the form of a relationship and in the form of
frequency (explained numerically).
24
Fig. 2: Map of relationship by centrality (co-authors) (p. 9)
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
Another analysis focused on information consumption by the authors
who produced in the journal studied, and here we discovered which were the
most cited authors, the most used documents and the most consulted journals.
In this universe of information consumption, we can state that the papers
published by the scientific community in the Journal of Documentation are a
direct result of the references consulted and, in this universe, it is important
to choose reliable information sources, as can be observed in the following
three Maps.
The first Table (table 2) of this sequence deals with the authors who had
the greatest number of quotes and are represented in a frequency map (figure
2); the circles represent centralities.
Table 2: Most Cited Authors (p. 9)
Ranking
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
Authors
HJORLAND B
WILSON TD
INGWERSEN P
DERVIN B
GARFIELD AND
SPINK TO
CRONIN B
BELKIN NJ
ELLIS D
KUHLTHAU CC
SARACEVIC T
VAKKARI P
SALTON G
FORD N
LEYDESDORFF L
BORGMAN CL
NICHOLAS D
VICKERY BC
LINE MB
THELWALL M
DEMPSEY L
BUCKLAND MK
BROOKES BC
OPPENHEIM C
Frequency
112
72
70
55
55
53
52
50
48
45
40
38
35
33
33
32
32
32
31
31
30
29
28
28
In terms of centrality, we can point out that the authors with the greatest
“prestige” were not always the most important in the journals or thematic
areas. They were, however, cited as the icons of the thematic areas.
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In the case of the authors shown on the Map (Ingwersen, Lynch, Lancaster, Fidel, Kuhlthau, Harman and Lawrence), we point out that their publications are of great prominence within the scientific community and their
collaborations are to be found among the most relevant names in the area.
The relations vertex in the network was 216, adding a density of
0.0485142 and its factor of graph-represented centrality is 0.15290, its closeness was 0.30660 and the center intermediation of cooperation, 0.03332.
As regards the analysis of frequency, this shows that, within the tangled
universe of the works published in the Journal of Documentation, some authors obtained the greatest prominence. From among them, the ranking with
the 24 most cited is clear.
The most cited authors, without a shadow of a doubt, are the people that
made the Journal of Documentation a constant in the universe of the analysis
of scientific production, with the theories published in its volumes and their
practical applications. However, in our analysis, it is fundamental to point out
the agents of connection between the great authors and the more modest ones.
In the light of this type of analysis it is fundamental to observe that authors such as Ingwersen, Oppenheim, Hjorland, Wilson, Garfield, Spink,
Cronin, Belkin and Line —agents with the greatest theoretical collaboration— also fulfilled a representative function for some authors of little prominence in the topics in question.
Fig. 3: Representation by document co-citation, centrality and frequency (p. 10)
26
In the question of centrality it is important to mention the role of Ingwersen and White, whose documents make the connection between two
groups. These documents also received a respectable quantity of frequency.
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
The second analysis, on this Map, shows the total centrality of Bystrom in
one of the knots.
The analysis relating to Ingwersen’s document in this study is considered
the most important for two reasons: (i) it deals with a document not much
cited (with 15 frequencies), however, when it is, it is related to the theoretical
documents of the topics studied; (ii) it is a recent document, and perhaps the
most important one from 1992, the date of its publication, by constituting a
relevant foundation for the theories of Information Science.
Another identification of centrality was observed in the documents that
maintain a strong citation, such as Wilson, Seglen and Hjorland, who are
part of a very representative universe of scientific cooperation, as can be observed in the circles shown on the Map.
The degree of density was 0.0453726 for 111 vertices of relationships. In
relation to the centrality graphs we affirmed that it was 0.17598, complemented by a moderate intermediation index (0.02814) and a null presence of the
closeness index between the relationships.
Unlike with the analysis of centrality, where the concern was not to establish the most cited documents, the consideration made for frequency has this
scientific fact, where we point out the 13 documents most used in the journal.
As regards quantity, Table 3 is self-explanatory, the document by Dervin
(1999) is the most prominent, followed by the work of Ingwersen, Wilson,
Hjorland, Belkin, Kuhlthau, Ellis, Ziw, Garfield, Lesk and White among
others; however, it is fundamental to mention the constant production of Ingwersen and Hjorlande in the Journal (where they both appear with 2 documents among the most cited).
Table 3: Most Cited Documents (p. 11)
Ranking
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
Documents
Frequency
DERVIN B, 1999, INFORM PROCESS MANAGE, V35, P727
22
INGWERSEN P, 1996, J DOC, V52, P3
16
INGWERSEN P, 1992, INFORMATION RETRIEVAL
15
WILSON TD, 1999, J DOC, V55, P249
15
HJORLAND B, 1997, INFORMATION SEEKING
14
BELKIN NJ, 1982, J DOC, V38, P61
12
KUHLTHAU CC, 1991, J AM SOC INFORM SCI, V42, P361
12
ELLIS D, 1989, J DOC, V45, P171
11
ZIW OR, 1996, COMPUTER MEDIATED CO, P243
11
GARFIELD AND, 1979, CITATION INDEXING
10
HJORLAND B, 1998, J DOC, V54, P606
10
LESK M, 1997, PRACTICAL DIGITAL LI
10
WHITE HD, 1998, J AM SOC INFORM SCI, V49, P327
10
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The present analysis was set out to study between 1988 and 2005, and
the most used documents are from this same period, particularly Dervin and
Wilson (1999), Ingwersen and Ziw (1996), Ingwersen (1992), and Hjorland
(1997 and 1998). It is very important to mention that these documents are
the structures of those which ground many of the studies in Information Retrieval and Information Systems, that practically ground the Journal of Documentation and, for this reason, we can state that existing theories are the result of these authors and are based on the documents identified in this study.
On completing this section, we observed the citation indices of the most
consulted journals.
Fig. 4: Maps of social networks for co-cited journals (p. 11)
The analysis of the co-cited journals was done with an approach to all the
journals at the start of the study (1998), with a high citation of the following:
Journal of Documentation, Journal of the American Society for Information Science and the Journal of Information Science.
In relation to centrality, the Journal of Documentation is the focus of the
intersection of the four existing clusters, being the central node. However, the
journal with the greatest representation is Library Trends, the center of the relations, with a strong influence on the others.
The vertex is at 197 relations with a density of 0.0668704. Its centrality in graphs was 0.26490, closeness applications (0.45907), intermediation
(0.02896) with a relatively positive index.
As regards frequency, it was found that the Journal of Documentation,
Journal of the American Society for Information Science, and the Journal of
Information Science are those which have prominence in the relationships.
However, we have some journals like Information Seeking and Library Resource Tech that with a slightly more modest frequency stand out among the
rest, by maintaining a good relationship with the Journal of the American Society for Information Science and the Journal of Science.
28
ANALYSIS OF THE SOCIAL NETWORK IN SERIAL PUBLICATIONS:...
Conclusions
Throughout the analytical process of the social network in the Journal of
Documentation some difficulties were experienced when concluding the results, due to the lack of pattern in the matrix data (the bibliographic references of the ISI databases) used to generate the maps.
To study this irregularity, the formats of each entry (681 entries) were observed with the aim of ascertaining if they presented the principal fields and
thus allow us to generate a complete new reference.
Another problematic question was the duplication of documents, with
some difference in the referential data. As a corrective measure, we opted
to alter the data manually to make it reliable. The two most representative
examples of this duplication were:
 DERVIN B, 1999, INFORM PROCESS MANAG, V35, P727 or DERVIN B,
1999, PROCESS INFORM MANAG, V35
 INGWERSEN P, 1996, J DOC, V52, P3 or INGWERSEN P, 1996, J DOC, V52.
A challenge that would be pertinent in the present analysis would be to
evaluate the terms most used by the authors, as a way of checking if the papers
were centered on a specific study or if there existed a series of different topics. However, within the objectives established at the outset we can conclude
that all the points were checked and that a good symmetry was found between the centralities and frequencies of the co-citations, observing cooperation among key-personalities.
As regards information consumption, we can state that the analysis of the
documents cited corresponds to the theoretical and practical formation of
the area of Information Science with documents from 1979 (Garfield) up to the
most contemporary ones, such as Dervin and Wilson (1999).
For the analysis of the most representative authors, we concluded that in
centrality the most significant authors were Ingwersen, Lynch, Lancaster,
Fidel, Kuhlthau, Harman and Lawrence, whereas in terms of frequency the
representation came from Dervin, Ingwersen, Hjorland, Wilson, Garfield,
Spink, Cronin, Belkin and Line among the most cited.
In terms of the journals which had great centrality, the Journal of Documentation, the Journal of the American Society for Information Science and the
Journal of Information Science were the most prominent.
As regards frequency, we showed that the Journal of Documentation, Journal of the American Society for Information Science, and the Journal of Information Science are those which stand out in the relations. Nevertheless, we
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30
had some journals such as Information Seeking and Library Resource Tech
which, with little frequency, stand out from the rest by maintaining a good
relationship with the Journal of the American Society for Information Science
and the Journal of Science.
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Janeiro: Rits, 1998.
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959-962, 2002.
Los objetos bibliográficos confirmados en la integración compleja
de la descripción y acceso a recursos
Ariel Alejandro Rodríguez García *
Artículo recibido:
8 de mayo de 2009.
Artículo aceptado:
29 de junio de 2009.
Resumen
El propósito de este trabajo es analizar los objetos bibliográficos que han sido confirmados por los nuevos
lineamientos para describir y acceder a los recursos.
Partiendo de las premisas de los sistemas complejos, la interdisciplina y la teoría de sistemas, se contrastan las
interpretaciones que ha empleado la catalogación para
significar las cosas del mundo real y virtual que conviven en el universo bibliográfico. No es la intención del
estudio describir cada entidad que se menciona en las
reglas de catalogación, ni los modelos conceptuales de
entidad-relación ni los nuevos lineamientos, sino referir aquellas entidades que han pasado de un extremo
a otro debido a una falta de consistencia en la propia
*
Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, México.
[email protected]
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 33-59
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terminología de la descripción bibliográfica. Se hacen
varias propuestas acerca de la composición metafórica
y la justificación de nuevos paradigmas para la catalogación.
Palabras clave: Objetos bibliográficos; entidades;
recursos; RCAA2R ; FRBR ; RDA.
Abstract
Bibliographical Objects Confirmed in the Complex
Integration of the Description and Access to Resources
Ariel Alejandro Rodríguez García
The purpose of this paper is to analyze bibliographical objects which have been confirmed by the new
outlines for Resource Description and Access. Based
on the premises of Complex Systems, Interdisciplinarity and Systems Theory, the interpretations that have
been used in cataloguing in order to signify things of
the real and virtual worlds which live together in the
bibliographical universe, are contrasted. The study
does not intend to describe each unit mentioned in the
cataloguing rules, nor the conceptual entity-relation
models, nor the new outlines, but to describe instead
those entities which have gone from one extreme to the
other due to a lack of consistency in the terminology
of bibliographical description itself. Several proposals
are made about metaphorical composition and the justification of new paradigms for cataloguing.
Keywords: Bibliographical objects; Entities; Resources; RCAA2R ; FRBR ; RDA.
Introducción
L
34
a relación actual entre la catalogación y las tecnologías de la información
y comunicación, así como las tendencias futuras de la internacionalización y globalización de la información como producto del acceso a Internet,
cruzan en forma determinante el campo problemático de la crisis del cambio.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
El paradigma sobre el cual se fundaron los sistemas actuales de información no parece solamente haber caducado, sino que muestra sus graves enfermedades y su inoperancia para las demandas de información del mundo
actual. La crisis tiene su origen en tres fuentes principales que constituyen
problemas más específicos, a) la falta de uniformidad en los conceptos que
se emplean en la descripción bibliográfica; b) los diferentes paradigmas, escuelas de pensamiento y metáforas que se crean a partir del desarrollo de
sistemas complejos, en los cuales se muestran el uso de modernos modelos
conceptuales, y c) el conjunto de alternativas que se plantean desde posiciones de diversas ciencias y campos disciplinarios que intentan fundamentar la
catalogación para el siglo XXI.
Este complejo problemático que se estudia es la relación actual que existe
entre los objetos bibliográficos (recursos) y los nuevos lineamientos para su
descripción y acceso, y aquellos definidos e identificados tanto en la historia
de la catalogación como en los códigos de catalogación.
Como punto de partida del análisis se revisan los acuerdos y desacuerdos
que surgen en la Conferencia de Toronto celebrada en 1997 y sus discusiones
posteriores en relación con la estructura lógica de las RCAA2, las relaciones
bibliográficas, la regla 0.24 y el análisis del contenido-contenedor.
El análisis de los objetos bibliográficos, tanto en las reglas de catalogación
como en los lineamientos para la descripción y acceso a recursos (RDA por sus
siglas en inglés), se hace desde el punto de vista de los sistemas complejos, la
interdisciplinariedad y la teoría de sistemas. Se intenta observar el cruce determinante que se está dando en el campo problemático de la catalogación.
Este cruce o relación entre reglas de catalogación y tecnologías de la información es un tema que preocupa a los bibliotecólogos modernos porque
aclara la imperiosa necesidad de vincular las tradiciones bibliográficas con
el proceso de desarrollo de los sistemas de recuperación actuales. En la vertiente tradicionalista, tal vinculación tiene una dirección definida hacia la
conservación. En la vertiente innovadora la catalogación-tecnología es una
antinomia involucrada con el problema de la interdisciplinariedad. Este enlace garantiza un cambio con aspiraciones progresivas que tienen un sentido
transformador.
El modelo conceptual FRBR, por sus siglas en inglés, (Requerimientos
Funcionales para los Registros Bibliográficos) creó una estructura que permite
representar los objetos del mundo real y virtual con los que se encuentran los
registros bibliográficos. Se trata de diez objetos que están reunidos en tres
grupos. El primero está asociado con la representación del contenido y sus aspectos materiales; el segundo tiene que ver con las personas y las instituciones
y el tercero aborda los conceptos asociados a la identificación del contenido.
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Cada objeto señalado en los FRBR es empleado para explicar, interpretar
y simbolizar aquellas entidades que son de interés para el universo bibliográfico; no obstante, este modelo conceptual ha producido efectos muy diversos
en la catalogación. Por ejemplo en lo que se refiere al diseño de los códigos de
catalogación, como es el caso de los lineamientos RDA, por sus siglas en inglés
(Descripción y Acceso a Recursos).
Para realizar esta investigación se partió del siguiente supuesto: los FRBR
permiten representar los distintos tipos de objetos inmersos en los registros
bibliográficos. En ellos a cada objeto se le atribuye una estructura interna
con ciertas propiedades que son útiles para determinados propósitos, de ahí
que los FRBR se proyecten precisamente como el puntal para crear nuevos
lineamientos en la descripción de los objetos bibliográficos. Estos nuevos lineamientos desarrollan una estructura de alto nivel de abstracción para interpretar los datos que, teóricamente, complicaría la organización de la información por la evidente razón de que la estructura de los datos es la ruta de
acceso a un modelo de entidad-relación.
Admitiendo lo anterior en términos de disimilitudes entre las RCAA2 y
los RDA ¿qué se ha aclarado sobre los objetos bibliográficos y sus potenciales
inconvenientes para el proceso de catalogación, el cual se seguirá empleando
con base en la Parte I de las RDA?
Es preciso mencionar que los resultados que se presentan en este trabajo
son parte de una investigación más amplia denominada Impacto del modelo
FRBR en los principios y estándares de la organización bibliográfica.
Los sistemas complejos y su caracterización en la
descripción bibliográfica
36
En el entorno de la catalogación, hacia finales de 1997 se da a conocer el modelo conceptual de los FRBR y con ello se pone fin a lo que diversos autores
han denominado “la era de las RCAA2”. Dadas las características del cambio,
la ruptura es de tal magnitud que al explorar los acontecimientos encontramos que no puede hablarse de una simple adecuación en las reglas de catalogación sino que se trata de la gestación de un sistema que tiene que ver con
métodos basados en la intervención inter-transdisciplinar.
A propósito de la inter-transdisciplina puede observarse que en el pasado
un problema complejo se descomponía en problemas simples que eran tratados de manera apropiada por alguna disciplina. Cada una de éstas debía
resolver su parte y cada solución se conjuntaría con otras para darle solución
al complejo problema original.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
En la actualidad, con base en el desarrollo de los diferentes puntos de vista
disciplinarios, se está en posibilidad de establecer una fundamentación teórica, como lo señala Rendón Rojas.1 El entendimiento y conocimiento que se obtiene de esa búsqueda es la generalización y unicidad, así como la producción
de métodos, conocimientos y entendimientos más allá de los ya alcanzados.
Por lo que se refiere a la valoración del modelo de los FRBR como sistema, es posible que se entienda de esa manera porque conjunta una serie de
elementos (objetos) relacionados directa o indirectamente con cualquier
subconjunto de elementos que dependan de un todo. Es decir, reúne en una
estructura lógica los atributos de las entidades para hacer más ágil la descripción y el acceso a los recursos; combina así el análisis, la síntesis y la convergencia de lo que se entiende por las tradiciones bibliográficas y el modelo
conceptual entidad-relación (FRBR).
El enfoque del modelo conceptual (FRBR) permite advertir la manera en
que los objetos bibliográficos se interrelacionan dentro de una realidad denominada universo bibliográfico. Es decir, los sistemas complejos, como lo señala
von Bertalanffy, normalmente se constituyen de un gran número de elementos
que interactúan con cada uno de los otros dentro de su medio ambiente. Esta
interacción puede ser interna o externa y permitir una retroalimentación que
se incorpora entonces al proceso de cambio o se adapta al sistema.
Para la Bibliotecología el modelo FRBR es introducido como modelo conceptual porque en la medida en que se cuente con la oportunidad de expresar
un concepto abstracto o simple, como por ejemplo qué es una obra y qué una
copia, se podrá observar la complejidad teórica existente, ya que la disciplina
receptora (la bibliotecología) de esos componentes técnicos y conceptuales
podrá describir y analizar las operaciones de sus sistemas socio-técnicos con
nuevos espacios, actores y capacidades.
Un elemento de análisis que se observa a raíz de la revisión de las tradiciones bibliográficas y el modelo FRBR, es la creación de lineamientos basados en la resolución de problemas complejos. Los estudios efectuados en la
bibliotecología, las ciencias de la computación y la teoría de sistemas, han
Modelo conceptual FRBR
Tradiciones bibliográficas
RDA
1
Miguel Ángel Rendón Rojas, “Fundamentos de la ciencia bibliotecológica y de la Información. Identidad y consolidación de la disciplina”, en Tópicos de investigación en bibliotecología
y sobre la información, Volumen II, Comp. Filiberto Felipe Martínez Arellano y Juan José Calva González, (México: CUIB, 2007), pp. 450-453.
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permitido desarrollar los nuevos lineamientos para describir y acceder a los
recursos.
Pero las contribuciones de cada disciplina han creado una convergencia
epistemológica y metodológica en la catalogación; esto es, están cimentando un
sistema socio-técnico que se explica principalmente con dos ideas generales:
a) La que aborda la larga historia de las tradiciones bibliográficas
(Panizzi,2 Cutter3, Verona4, Lubetzky5, Gorman6 y otros) y
b) La que reconoce las dificultades de describir los objetos bibliográficos
con sistemas duros y excluyentes (Svenonius7, Taylor8, Smiraglia9, Tillett10, IFLA11 y otros) y proyecta modificarlos o sustituirlos con base en
la interrelación de los aspectos sociales y tecnológicos con la insistencia
en impulsar sistemas basados en el equilibro de todos sus componentes.
Ahora bien, los argumentos generados a partir del análisis de los objetos
bibliográficos, (los cuales se explican más adelante) desde la perspectiva de
las tradiciones bibliográficas y el modelo FRBR, son:
1. Un objeto12 (entidad) constituye la naturaleza del universo bibliográfico.
2
38
British Museum, “Rules for the compilation of the catalogue”, 1-14, en Foundations of cataloging: a sourcebook, ed. by Michael Carpenter and Elaine Svenonius, Littleton, Col. : Libraries
Unlimited, 1985.
3 Charles A. Cutter, “Rules for dictionary catalog: selections”, en Foundations of cataloging: a
sourcebook, Ed. By Michael Carpenter and Elaine Svenonius, (Littleton, Col. : Libraries Unlimited, 1985), 62.71
4 Eva Verona, “Literary unit versus bibliographical unit”, en Libri. Vol. 9 núm. 2 (19959): 79104.
5 Principles of cataloging, “Final report. Phase I: descriptive cataloging”, p. 256, en Seymour
Lubetzky: writings on the classical art of cataloging, Comp. y Ed. Elaine Svenonius, Dorothy
McGarry. (Englewood, Col. : Libraries Unlimited, 2001).
6 Michael Gorman, “The Anglo-American Cataloguing Rules, second edition: their history and
practice”, en The principles and future of AACR…158.
7 Elaine Svenonius, The intellectual foundation of information organization, (Chicago: The MIT
Press, 2000).
8 Arlene Taylor, “The information universe: will we have chaos or control?” en American Libraries. (1999): 629-633.
9 Richard P. Smiraglia, The nature of “a work”: implications for the organization of knowledge,
(Lanhman, Maryland: The Scarecrow Press, 2001.)
10 Barbara B. Tillett, A taxonomy of bibliographic relationships, LRST. 32, 2: 150; Vellucci, Sherry, “Bibliographic relationships”, en The principles and futures of AACR… 105-147.
11 Seminar on Bibliographic Records, Proceeding of the Seminar held in Stockholm, 15-16 august
1990, edited by Ross Bourne (Münche: K G Saur, 1992); “IFLA Study Group”, en Functional
requirements for bibliographic records: final reports, (München: K G Saur, 1998).
12 John P. van Gigch en su artículo “Paradigms” International Systems science handbook: an introduction to Systems science for everybody, Ed Rafael Rodríguez Gelgado, Bela H. Banathy,
(Madrid: FUSCHl Group, 1993): 40, señala que una disciplina, así como las teorías que la constituyen, necesitan un paradigma porque éste es fuente de información estándar con la que
todo científico trabaja dentro de un entorno ordinario para verificar el surgimiento de nuevas
teorías o resultados.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
2. Un objeto constituye la “visión del mundo” de la información.
3. Un objeto está directamente implicado en el diseño de metodologías
y procedimientos que se emplean para constituir los diagramas y estructuras que se crean a partir de la inferencia de los lineamientos para la descripción y el acceso.
4. Un objeto es esencial para encontrar las desigualdades y conflictos
dentro del sistema.
Hemos de señalar que estos argumentos son similares a los que van Gigch
menciona con relación a la justificación de un paradigma y Achinstein13 acerca de los modelos teóricos. Es decir, los paradigmas permiten establecer una
representación “oficial” de las verdades científicas. En tanto que un modelo
teórico consiste en un conjunto de supuestos acerca de algún objeto o sistema.
En tiempos de crisis, como los que se comenzarían a vivir en la catalogación a finales de la década de los noventa, la creación de un paradigma permitiría conceptualizar nuevas teorías y compararlas con las viejas. Mientras
que un modelo teórico ayudaría a explicar por qué algunos conjuntos de
principios, llegarán más tarde a denominarse modelos.
Finalmente, convenidas las precisiones anteriores, nos parece que es momento de explicar, desde la perspectiva de las tradiciones bibliográficas, el
análisis de las RCAA2 y el modelo FRBR, y cómo se entretejen sus principios
respecto a los objetos bibliográficos para componer una nueva metáfora para
la descripción y los accesos.
Los objetos en las tradiciones bibliográficas
Dentro de la esfera de la catalogación parece sencillo referirse a los objetos
bibliográficos, pero es complicado describir exactamente qué los constituye y
cómo pueden ser éstos apreciados. Durante la última década del siglo XX diversos estudios han intentado resolver este asunto con la finalidad de adoptar
una postura.
Antes de ser desarrollados e introducidos los FRBR la percepción que se
tenía sobre los objetos bibliográficos14 era que éstos estaban constituidos por
obras, textos, traducciones y ediciones. Posteriormente, Le Bouef15 ejemplifica
13 Peter Achinstein, Los modelos teóricos (México: UNAM, 1967): 6-11.
14 Patrick Wilson, The bibliographical universe, 6-19.
15 Patrick Le Boeuf, “El informe final del FRBR : maldición eterna a quien... ¿no leas esas páginas?”, en 2ª Reunión IFLA de Expertos sobre un código internacional de Catalogación, (Buenos
Aires: Universidad San Andrés, 2004),
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la existencia de los objetos bibliográficos por medio de la analogía que hace
del libro como objeto físico y abstracto, para llegar a definir qué se entiende
por la entidad “obra” en el contexto de los FRBR.
A partir de esas generalidades la catalogación trata de explicar qué son y
dónde existen los objetos bibliográficos. Por ejemplo, Svenonius16 señala que
cuando la catalogación era local, el objeto de la descripción bibliográfica era
todo lo que estaba alrededor del escritorio del catalogador. No había necesidad de establecer una definición formal, mucho menos tomar en consideración una teoría que admitiera entidades abstractas en el lenguaje descriptivo.
Sin embargo, ahora que la catalogación ha saltado al mundo globalizado hace
falta una nueva visión respecto a lo que se entiende por objeto bibliográfico.
Una de las primeras aproximaciones aparece con Wilson,17 quien sostiene
que el problema del control bibliográfico no consiste simplemente en localizar la copia de información, ni tampoco en resolver de manera eficiente el
análisis de los escritos que están en las unidades de información. Probablemente el problema que hay que resolver, es que la biblioteca provea no sólo
de documentos sino de información. De tal suerte, la biblioteca del futuro no
sólo deberá considerarse como un repositorio de documentos asociados al
almacenamiento y la recuperación de documentos, sino ser el objeto central
de la organización de la información.
Así, el universo bibliográfico propuesto por Wilson18 se constituye de escritos y registros que incluyen copias de diferentes fuentes como son las obras
y ediciones, y copias que son reconocidas como objetos bibliográficos, todos
los cuales se constituyen de textos y documentos que tienen como característica común el ser objetos que no pesan y no ocupan un espacio, pero pueden
escribirse, imprimirse registrarse en una cinta o fotografía o película, así como almacenarse, por ejemplo, en la memoria de un dispositivo electrónico.
Además pueden existir traducciones que estén en diferentes textos, como
son las traducciones libres, las paráfrasis, las traducciones abreviadas, las ediciones críticas, y las ediciones en otros idiomas, entre otras más.
Es difícil pensar que el estudio sobre los objetos bibliográficos haya quedado del todo explicada con la apreciación de Wilson. En respuesta y con
el propósito de identificar el desarrollo teórico iniciaremos el análisis para
identificar, explicar y clarificar los obstáculos que existen para crear una terminología común, pues la confusión es causada por los distintos tipos de entendimiento que hay sobre un mismo objeto bibliográfico.
16 Elaine Svenonius, op cit., 31.
17 Patrick Wilson, op cit., 16.
18 Ídem. 19.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
Así, la razón por la que Svenonius19 introduce el concepto de entidades
bibliográficas en su análisis es darle uniformidad a la percepción que se genera en torno a la organización de la información.
Al respecto, Svenonius señala que las entidades bibliográficas tienen una
estructura que no necesariamente posee una existencia independiente; es decir, que existe una dependencia entre el todo y sus partes. Quizá lo que quiere expresar es que la naturaleza de esas entidades requiere de especificaciones acerca de cómo pueden identificarse cada uno de sus miembros, tal como
se hace con los elementos que en catalogación constituyen la fuente principal
de información.
Quizá por eso Svenonius finaliza señalando que existen dos razones para
definir las entidades bibliográficas: la primera es que el concepto debe transformarse de manera descriptiva para contar con los elementos necesarios que
permitan teorizar de manera disciplinaria, y la segunda es que se pueda uniformar ese concepto con la finalidad de que sirva para varios propósitos y se
refleje en distintos tipos de actividades.
Además, Svenonius20 se percata de que las entidades, desde la más básica,
el documento, poseen características que otras no tienen o que son complementarias. De ahí que él considere al documento como el tipo de entidad
más pequeña.
Después este autor se refiere a la obra, respecto de la cual hace varios
señalamientos en relación a la dicotomía establecida por Lubetzky entre la
obra y el libro impreso, al hablar sobre los aspectos intelectuales y físicos que
le dan origen al concepto de “paquete” que es identificado como el portador
de un medio y un mensaje.
Otro tipo de entidad son las superobras, las cuales contienen o pueden
contener un gran número de obras como subconjuntos que migran de la misma superobra, pero no comparten la misma información.
Un tipo más de entidades son las manifestaciones que se conocen como
las ediciones particulares de una obra. Tales manifestaciones cumplen una
función específica para los diferentes usuarios y para las peculiaridades que
se toman en cuenta para integrar la colección de las bibliotecas.
Finalmente el análisis del concepto de entidad bibliográfica propuesto
por Svenonius concluye que tal entidad se está desarrollando con base en los
aspectos prácticos más que en los que denominamos ontológicos. Por ello
surge la falta de precisión y las ambigüedades en las estructuras de cierto tipo de entidades. Algunas de estas entidades no pueden describirse usando
19 Ídem., 34.
20 Ibíd, 34-50.
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los conceptos tradicionales, y por eso éstos se estrechan en el sentido de que
no cuentan con los elementos suficientes para enumerar sus partes.
Por su parte, Smiraglia 21 dice que en el universo bibliográfico se encuentran millones de entidades, las cuales a su vez se constituyen como familias
bibliográficas, que son un conjunto de obras derivadas de un progenitor común. Naturalmente cada entidad es identificada por tener dos propiedades,
una física y otra intelectual: la primera simboliza las diversas características
bibliográficas del paquete de lo intelectual, mientras que la propiedad intelectual se refiere al conocimiento registrado.
La entidad bibliográfica a la que hace referencia Smiraglia puede entenderse desde la perspectiva del concepto que está siendo empleado para
observar las estructuras y los objetivos que persiguen los mecanismos de la
recuperación bibliográfica. En el entorno de las reglas de catalogación, la
historia del concepto de “obra” demuestra que es necesaria una definición
operacional que permita soportar el concepto de relaciones bibliográficas debido a que no hay una consistencia ni en cuanto al entendimiento de éstas ni
en cuanto a su uso.
Por ejemplo, el catálogo de la biblioteca puede definir e identificar las entidades bibliográficas a partir de sus descripciones físicas e intelectuales. Como se ha visto a lo largo de la historia del catálogo, contar con registros de los
Ibros, mapas, monedas o cualquier otro tipo de material, arreglados en algún
orden —alfabético, numérico, etcétera— ha sido una manera simple o pura
de facilitar la ubicación específica de la copia de una obra en la colección de
la biblioteca. Es un principio que viene de las reglas dictadas por Panizzi,
donde la estructura bibliográfica se caracterizaba por relacionar: a) nombres
con nombres, b) nombres con obras, c) obras con obras.
Es importante no confundir en los anteriores juicios que la originalidad
de sus formulaciones parten del principio de la practicidad; es decir, que buscan crear una serie de generalizaciones sustentadas en descripciones sobre las
características de los conceptos, donde tales conceptos suman diversas metáforas relacionadas con el léxico empleado en las tradiciones bibliográficas, lo
cual permite acumular distintos elementos que con el tiempo y su puesta al
día tendrán que admitir estructuras conceptuales cuyas expresiones bibliográficas reflejarán nuevas bases teóricas.
Con más de cuatro décadas de distancia entre el hoy y el momento en
que aparecieron las reglas de catalogación, nos queda la certidumbre de que
éstas, unidas a los normas de descripción bibliográfica, son instrumentos que
21 Richard P. Smiraglia. The nature of “a work”: implications for the organization of knowledge.
(Lanhman, Maryland: The Scarecrow Press, 2001.) 1-3.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
permiten la unificación y normalización que buscaba desde antes el control
bibliográfico. Y sin embargo, básicamente, los dos instrumentos pertenecen
a la misma época y forman parte de un momento histórico de la catalogación
anglosajona en la que hay un constante movimiento, un periodo histórico que
llega después de diversos esfuerzos, como lo señala Gorman,22 el primero de
los cuales fue en el siglo XIX cuando personajes tan notables como Panizzi y
Cutter creaban sus códigos de catalogación personales. El segundo inicia al
mismo tiempo que comienza el siglo XX fue denominado la era del “committee code” y abarcó de 1908 a 1967. La tercera etapa es la que introduce a las
RCAA2 y la que sustenta las propuestas de Seymour Lubetzky y los Principios
de París.
Considerar estas tres etapas de la catalogación es sólo una manera de poner en claro los cambios radicales habidos y la combinación de los avances
alcanzados entre una y otra época. Por eso los códigos de catalogación como
las RCAA2 se han encargado de hacer el acercamiento entre estas etapas para
que esos códigos no se pierdan y queden representados en principios y conceptos básicos.
Más allá del convencionalismo creado en la teoría y los códigos con relación al tratamiento de los objetos, lo que a continuación se perfila es la manera en que las ISBD junto con las reglas de catalogación crean un método para
formalizar la descripción de los objetos bibliográficos, y cómo son éstos definidos en su orden puntuación y diferentes partes de descripción para crear
un registro bibliográfico. Si los códigos de catalogación como las RCAA2 se
nutren de las teorías y las normas para la descripción bibliográfica, entonces
tomaremos como argumentos los surgidos de la revisión a la regla 0.24 y que
detallan la singularidad del problema respecto a la representación de los objetos bibliográficos.
La regla 0.24 y su alcance en la descripción
Uno de los aspectos que deben destacarse sobre el alcance de la regla 0.24 es,
sin lugar a dudas, el que se refiere a los cambios en los soportes de los materiales. Al respecto Coyle23 afirma que la explosión de los formatos digitales y
el Internet a finales del Siglo XX, comenzarían a marcar una diferencia significativa en la descripción, puesto que los nuevos “recursos de información”
22 Michael Gorman y Pat Oddy, The Anglo-American cataloguing rules, second edition, op cit.
158-19.
23 Karen Coyle, “Cataloging rules for the 20th Century, en D-Libri Magazine. Vol 13, núm. 2
(jan.-feb., 2007).
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crearían otro formato para empaquetar la información, que antes encontrábamos en papel, revistas o en algunos acetatos. Así, desde el punto de vista
catalográfico se pierde la fuente principal de información y se origina el problema de las versiones múltiples.
Por consiguiente el cambio en el alcance y en la tecnología del catálogo
son nuevos elementos que se suman a las consideraciones anteriores. Esto es,
las reglas de catalogación que dan origen al catálogo de mediados del siglo
XX, fueron creadas cuando todavía estaba en operación el catálogo en forma
de tarjetas.
Pero con la introducción del catálogo en línea, el catálogo se empieza a
transformar en una base de datos y establece contacto con los usuarios de
la biblioteca a través del OPAC. Así, lo que hace el catálogo en línea es aprovechar todos los desarrollos creados por el catálogo en tarjetas, las RCAA2
y el Formato MARC para así poder recuperar más información y desarrollar
diversos sistemas automatizados de bibliotecas que revolucionarían la noción
de catálogo y el empaquetado de la información.
El cambio tecnológico y el crecimiento exponencial de los recursos de información estaban dados. La situación comenzó por ser caótica y el panorama no muy alentador. Por eso surgió la idea de revisar las RCAA2 con el fin de
orientar la descripción bibliográfica hacia un paradigma donde el conjunto
de lineamientos e instrucciones permitiera definir el universo bibliográfico
con la posibilidad de racionalizar la práctica de la catalogación en función de
los recursos que poseen versiones múltiples, y de enfrentar el incremento de
recursos basados en la Web así como la disminución del tiempo para catalogar y el aumento en la recuperación de la información.
En cuanto a la regla 0.24 y sus alcances se ha señalado que era una medida demasiado inflexible porque forzaba al catalogador a tomar decisiones
que, en muchos casos no respondían a la descripción óptima de los objetos.
Al respecto, Tillett 24 asegura que a causa de esta regla era imposible describir otro tipo de materiales que tuvieran particularidades físicas distintas
a las monografías que tenía en la mano el catalogador, por ejemplo, los CDROM, los multimedia o los recursos electrónicos. Es decir, en términos del
modelo conceptual, la descripción se iniciaba a partir de la copia para llegar
a la información acerca de la manifestación, de modo que, de continuar con
ese método, probablemente se seguiría perdiendo información relativa a la
propia manifestación.
24 Barbara Tillett, Cataloguing rules and conceptual models, [en línea] [http://www.ifla.org/documents/librarires/cataloging/tilb1.htm], consultado 24/01/2008.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
A propósito de lo anterior, Jonsson25 afirma que los registros bibliográficos elaborados para representar manifestaciones son necesarios, puesto que
sin ellos no sería fácil hacer los cambios para crear los registros que permitirían representar las obras. Por esta razón la falta de claridad de la regla 0.24
no sólo puso en discusión la descripción a partir del aspecto físico, sino también la existente entre materiales publicados y no publicados, puesto que la
regla englobaba todo tipo de material y su orientación permitía identificar las
copias mejor que a cualquier otro tipo de entidad.
En la misma línea de discusión se encuentra Howarth,26 quien declara
que la regla 0.24 es el punto cardinal de la parte I de las reglas de catalogación porque establece el modelo para la descripción física del ítem. Este
modelo deberá auxiliarse de los capítulos que apoyan la descripción de cada
clase de material. Por esto Howarth señala que las RCAA2 en primera instancia catalogan el formato físico del material, “el contenedor”, antes que el
contenido intelectual o artístico de la obra.
El enfoque mencionado prevalecería durante mucho tiempo y sólo se comenzaría a modificar a raíz de la siguiente pregunta realizada por Howarth,27
¿por qué la regla 0.24 es problemática? Porque el enfoque hacia lo físico y su
consideración como el punto de inicio para crear la descripción de los registros bibliográficos, se dirige evidentemente a la duplicidad de descripciones
de la misma obra que pueden aparecer en diferentes formatos y crear registros bibliográficos separados para cada ítem.
Esta explicación establece la singular diferencia entre seguir suponiendo
que la descripción de los objetos bibliográficos debe seguir lo estipulado en
la regla 0.24, o bien interpretar o usar el objeto dependiendo de su apariencia
física para capturar y describir sus características; por ejemplo, aquellos materiales cuyos formatos especiales requieren de equipos especiales, software
particulares u otras especificaciones.
Este análisis de los objetos bibliográficos y de los modelos conceptuales es
el que plantea una posición importante dada su trascendencia, utilidad y su
conjunción de ideas abstractas. En la bibliotecología los modelos se usan ampliamente porque es una disciplina en la que los documentos son el fenómeno central de investigación, particularmente en la catalogación. De ahí que se
haga notar el modo en que los objetos bibliográficos han sido representados
en diversos modelos conceptuales antes de que llegue el modelo FRBR.
25 Gunilla Jonsson, “Las bases para un registro en la mayoría de las reglas de catalogación y la relación con FRBR”, en 68th IFLA Council and General Conference August, 18-24, 2002, Glasgow,
[archivo pdf]
26 Lynne C. Howarth, Content versus carrier, en The principles and future of AACR… 148-150.
27 Ídem, 150-151.
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 33-59
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Los modelos conceptuales en la catalogación descriptiva
¿Cuáles han sido, a lo largo de la historia de la catalogación, los modelos conceptuales que permiten generalizar los objetos bibliográficos? De acuerdo
con Carlyle,28 la historia de la catalogación muestra que se han empleado varios modelos para catalogar el objeto principal de la “obra”, el documento, el
cual varía en función de la complejidad de sus tipos y clases documentales.
Por ejemplo, el modelo de una sola entidad se empleó en la creación de
listas simples de ejemplares que poseía una biblioteca en particular. Representantes de este modelo son los catálogos de libros raros o manuscritos en
los cuales importaba e importa la descripción física del documento.
El modelo de dos entidades nace cuando el crecimiento de las colecciones
de las bibliotecas se multiplica debido al surgimiento de varias ediciones de
una obra y a las funciones de recuperación, así como a los inventarios. Es
decir, los registros del catálogo representaban como modelo de dos entidades, las ediciones y las copias. Aquellos catálogos que no empleaban los títulos
uniformes como sistema de almacenamiento eran considerados como representantes de este modelo.
En 1936 se desarrolla el modelo de tres entidades, que surge cuando los catalogadores se proponen formalmente reorganizar e identificar en el catálogo
lo que se comenzó a nombrar como “unidad literaria”, la cual más o menos se
asemeja a lo que ahora se denomina “obra”. Este modelo ha sido promovido
e incorporado en los objetivos del catálogo que quedaron plasmados en los
Principios de París de 1961.29
Aquella biblioteca que como práctica consistente emplea los títulos uniformes como medio de almacenaje de datos, está recurriendo al modelo de
las tres entidades: copia, edición y obra. A manera de muestra, las RCAA2 en su
capítulo 25 representan el modelo de las tres entidades.
La relación existente entre las normas para la descripción bibliográfica
y las reglas de catalogación establece el siguiente modelo: el esquema de las
ISBD tiene tres partes:30 área, elementos y puntuación prescrita. El área permite
agrupar los datos de una categoría o conjunto de categorías; los elementos corresponden al grupo de caracteres que representan la unidad de información
28 Allyson Carlyle, “Understanding FRBR as a conceptual model: FRBR and the bibliographic universe”, en LRTS. Vol. 5, núm. 4: 267-268.
29 Declaración de principios adoptados por la Conferencia Internacional sobre Principios de Catalogación, París, octubre de 1961, 2ª Reunión IFLA de Expertos sobre un Código Internacional
de Catalogación: Antecedentes y documentos, México, Consejo Consultivo Latinoamericano
para la Cooperación en Catalogación; UASLP, 2004, 23-28.
30 Ariel Alejandro Rodríguez García, Elementos de la descripción bibliográfica, Organización
bibliográfica y documental, comp. Hugo Alberto Figueroa Alcántara, César Augusto Ramírez
Velázquez (México: UNAM, CUIB ; Facultad de Filosofía y Letras, 2004), 29-30.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
bibliográfica, y la puntuación preescrita facilita la localización de la información de cada elemento que se encuentra en determinada área de descripción.
De este modo, las reglas de catalogación retoman el esquema de las ISBD
para desarrollar la Parte I Descripción, y con ello permitir la representación
de las características físicas del objeto bibliográfico.
A propósito del modelo de tres entidades, Tillett31 menciona que desde
que se introduce el Formato MARC (1960) al diseño del catálogo, la estructura del modelo cambia, puesto que ya no es el catálogo en tarjetas el que se
produce con MARC, sino que se introduce uno nuevo con ayuda de la tecnología. Así, la estructura conceptual del registro se compone de data elements
(elementos de los datos) y connections (conexiones) que se vinculan a través
de clusters (racimos, conglomerados) los cuales comparten una relación particular.
Es por eso que el registro está hecho para describir las entidades bibliográficas, controlar los temas y emplear los nombres como puntos de acceso.
Y asimismo para interpretar las entidades como registros, los data elements
como atributos y las relaciones como conexiones para que sean interpretadas
a través de un modelo entidad-relación.
En definitiva esta revisión de los objetos bibliográficos en las tradiciones
bibliográficas y las RCAA2, lo concentra todo en una pregunta casi insignificantemente simple: ¿tienen un futuro los objetos bibliográficos? Lo que se
ha dicho hasta el momento es que en la catalogación los objetos bibliográficos sólo raramente se habían analizado con un tan alto grado de abstracción, de ahí que se desconocieran sus implicaciones en la constitución de los
códigos de catalogación, algo que se reflejaba en reglas como la 0.24, donde
las entidades más señaladas eran la obra, la edición y la copia. Pero es un hecho que los señalamientos de Tillett, Jonsson, Svenonius, Smiraglia y Howart
tuvieron que ser tomados en cuenta para ilustrar las explicaciones que permitieran establecer una base metafórica sobre las posibles plataformas, que
distinguiera la explicación práctica y la teórica de los objetos bibliográficos y,
en términos de la bibliotecología, garantizara el valor de lo existente con una
visión a futuro.
31 Barbara B. Tillett, “Bibliographic structures: the evolution of catalog entries, references, and
tracings”, en The conceptual foundations of descriptive cataloging, Ed by Elaine Svenonius,
(San Diego: Academic Press. 1989): 149.
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Rumbo a una integración compleja de los objetos bibliográficos:
el modelo frbr
En el modelo conceptual del FRBR los objetos clave son las diez entidades
que integran los tres grupos mencionados: obra, edición y copia. Cada entidad representa una porción de la estructura que constituye este modelo. Más
específicamente, las entidades están asociadas a:
1.
2.
3.
4.
Las funciones que debe cubrir el catálogo de la biblioteca.
La creación de nuevos modelos de descripción y acceso.
Las rutas de operación que se establecen con los datos.
Todas las relaciones bibliográficas posibles que se encuentran en el registro bibliográfico.
5. El rompimiento que existe en cualquier sistema y código de catalogación.
6. La naturaleza de los datos propietarios en cada entidad.
La introducción del modelo, como lo indica Carlyle,32 tiene que ver con
el propósito de desarrollar una estructura que permitiera soportar los datos
bibliográficos que deberán analizar los nuevos catálogos. Desde el punto de
vista de la catalogación, la introducción del modelado de datos entidad-relación se hizo con el fin de contar con una estructura que permitiera representar, aclarar y precisar qué se entiende por universo bibliográfico en el contexto del registro bibliográfico y las bases de datos. De ahí su complejidad.
Por esta razón el Grupo 1 del FRBR comenzaría a contrastarse con otros
modelos de catalogación existentes, y explicaría qué es lo nuevo y diferente
con respecto a esos modelos.
Y parte de lo nuevo es que se identifican y definen cuatro entidades con
las que pueden establecerse relaciones primarias; entidades que pueden reconocerse simultáneamente; y este modelo de catalogación tiene presente la
aplicación de la técnica empleada en el modelado de datos.
Naturalmente estas novedades son las causantes de que se adopte un enfoque de sistemas que implica una realidad y un modo distinto de concebir la
descripción de los objetos bibliográficos para tener la seguridad de que cada
entidad, atributo y relación representado en el sistema permita, en cuanto sea
posible, una generalización del universo bibliográfico.
Dicha generalización, según O’Neil,33 parte del análisis estructural y lógico de las RCAA2, de la revisión del modelo creado por las Normas para la
32 Allyson Carlyle, Understanding FRBR as a conceptual model, op cit.
33 Edward T. O’Neil. The impact f research on the development of FRBR . 59-72.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
Descripción Bibliográfica y de los Principios de París. Aunque, aclara que los
FRBR no son un código de catalogación, sino un modelo que representa a las
entidades y a sus atributos dentro de una estructura.
Es indudable que los Principios de París, las ISBD y las RCAA2, están soportados sobre las sólidas bases que les dan las tradiciones bibliográficas, de
ahí que se afirme que el principio básico de “describir la copia que se tiene a
la mano” haya sido un factor de análisis y disputa entre los cambios y actualizaciones. Aun así el FRBR define su estructura y entidades en dos sentidos a la
vez: de lo abstracto obra y expresión, y de lo físico manifestación y copia.
Así pues, varios autores como O’Neil,34 concluyen que el modelo conceptual del FRBR, desde la publicación del informe final hasta su aplicación en
los nuevos lineamientos de descripción y acceso ha sido, en la mayoría de los
casos, el modelo que debe analizarse para medir su impacto.
A propósito de lo anterior, Tillett coincide con O’Neil en cuanto a las indicaciones que hace Taylor sobre los cambios en la organización de la información.
Es decir, que con el uso del modelo conceptual que simboliza un sistema abierto,
las entidades claves del universo bibliográfico han podido desarrollar un ciclo organizacional de todo aquello que se encuentra en una colección. Sin embargo, un
modelo conceptual no puede aplicarse tal cual debido a que hay elementos que
no están previstos ni se pueden cubrir todas las particularidades de las entidades.
Tillett35 asevera que la influencia del FRBR en la catalogación se debe al
propósito de crear un nuevo paradigma, porque proporciona un punto de
vista diferente sobre las tradiciones bibliográficas, la representación del universo bibliográfico y el uso de un nuevo vocabulario.
Al mismo tiempo el modelo conceptual retoma las tareas del usuario y
la elaboración del catálogo que vienen de los planteamientos dispuestos por
Cutter respecto al catálogo-diccionario. En definitiva el impacto del modelo
conceptual en los códigos de catalogación marca el surgimiento de una nueva
estructura y forma de atreverse a tomar decisiones en la catalogación.
La estructura bibliográfica y el grupo 1
entidades y relaciones primarias
En el pasado la estructura de las entidades bibliográficas hacía referencia a
tres elementos contenidos en la ficha del catálogo: data elements, connections
34 Ídem, 69.
35 Barbara B. Tillett, “FRBR and RDA : resource description and access”, en Understanding FRBR:
what it is and how it will affect our retrieval tools, Arlene G. Taylor, ed. (Wesport, Cnn: Libraries Unlimited, 2008): 90.
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y clusters; (ya traducidos) es decir, los datos arreglados y presentados en un
orden de relaciones sintéticas o que conectan. Después, se comenzaría a definir todo en función de los componentes del registro bibliográfico, las entidades, los atributos y las relaciones. Componentes que son utilizados para
definir, de acuerdo con el modelo entidad-relación de Chen, las entidades
del modelo FRBR.
El esquema que se introduce en el Grupo 1 Entidades y relaciones primarias del FRBR identifica y representa las entidades bibliográficas, tales como
obra, expresión, manifestación y copia, que comprenden los productos intelectuales o artísticos nombrados o descritos en los registros.
Obra (w)
Es realizada mediante
Expresion (e)
Es materializada en
Manifestación (m)
Es ejemplificada por un
50
Ítem (i)
Adoptar el enfoque de sistemas en el esquema del FRBR y, particularmente en la representación de las entidades del Grupo 1, permite observar lo tangible e intangible, lo formal y lo informal del universo bibliográfico. Desde
nuestro punto de vista permite, de un modo distinto, aproximarse a la realidad que muestra o tiene un registro bibliográfico.
Observar las entidades bibliográficas en este nivel de abstracción nos lleva a diversas reflexiones, por ejemplo, a nivel de universo bibliográfico no
todas las entidades son normalmente conocidas. Simplemente las vemos e
identificamos de manera automática pero a través de ciertos límites. En otras
ocasiones buscamos la forma de encontrar las entidades a través de un sistema conceptual que es creado y recreado por medio del lenguaje. Pero aquí lo
más importante es que no se desarrollen metáforas con meras palabras sino
que se desarrollen sistemas metafóricos estructurados y definidos.
Desde la postura epistemológica con la que encaramos el análisis de los
objetos bibliográficos, es posible señalar que el Grupo 1, Entidades y relaciones primarias del FRBR, ha presentado dificultades desde su aparición su
concreción y explicación, puesto que ha introducido entidades que por su
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
naturaleza sólo pueden ser concebidas como conceptos que responden a una
proposición conceptual.
Por ejemplo, las entidades expresión y manifestación no fueron comparadas por el modelo FRBR como objetos bibliográficos que tratan de disociar los
atributos intelectuales y físicos.
Desde el punto de vista de la independencia física, Taniguchi 36 señala
que la importancia de la entidad expresión es que detalla las obras desde la
forma en que los símbolos son registrados. Es decir, la forma alfa-numérica,
musical o coreográfica, de sonido, imagen, objeto o movimiento.
Mientras que la entidad manifestación personifica la expresión en el sentido de que materializa la relación entre lo intelectual y el soporte de una obra.
Doerr, Hunter y Lagoze37 proclaman que la manifestación es el centro de la
descripción bibliográfica actual, porque permite identificar el estado tangible de las obras a través de un conjunto de elementos (atributos) como son el
título, la extensión física, y el ISBN, entre otros más.
La sistematización que se produce con el Grupo 1 Entidades y relaciones
primarias, permite representar la estructura de los conceptos que están presentes en el proceso de catalogación, y si bien algunas entidades no muestran
claridad es que más bien están haciendo referencia a cuestiones de acomodo
metodológico. La idea del modelado de datos fue propuesta por Chen, quien
la introduce como una manera de explicar la relación que hay entre el mundo
real y el mundo virtual de las bases de datos, y la trae al campo bibliotecológico a través del Grupo de Estudio del FRBR, el cual le otorga un sentido de
universalidad a todos los datos que se encuentran en el registro bibliográfico.
De tal modo, finca uno de los pilares para el diseño de los sistemas de recuperación de información modernos.
Le Bouef38 explica el Grupo 1 Entidades y relaciones primarias del FRBR sintéticamente a través de una metáfora simbólica acerca del libro y sus componentes:
Cuando decimos “libro” para describir un objeto físico que tiene páginas de papel
y una encuadernación, y que algunas veces puede utilizarse para mantener abierta
una puerta o sostener la pata de una mesa; FRBR llama a esto “ítem”. Cuando decimos “libro” podemos referirnos a una “publicación”, como cuando vamos a una
librería a comprar un libro; podríamos saber su ISBN, pero la copia específica no
36 Taniguchi, Shoichi, “Conceptual modeling of component parts of bibliographic resources in
cataloging”, en Journal of Documentation, 59, 6, 2003: 694.
37 Martín Doerr, Jane Hunter, Carl Lagoze, “Towards a core ontology for information integration”, en Journal of digital information, 4, 1 2003.
38 Patrick Le Bouef, “El informe final del FRBR : maldición eterna a quien… ¿no lea esas páginas?”, en 2ª. Reunión IFLA de Expertos sobre un Código Internacional de Catalogación (Buenos
Aires: Universidad de San Andrés, 2004).
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es de importancia, mientras que se encuentre en buenas condiciones y no le falten
páginas; FRBR llama a esto una “manifestación”. Cuando decimos “libro” como en
la frase “quien tradujo el libro”, podríamos tener un texto particular en mente así
como un idioma específico; FRBR llama a esto una “expresión”. Cuando decimos
“libro” como en la frase “quien escribió este libro”, podríamos referirnos a un alto nivel de abstracción, al contenido intelectual que subyace a todas las versiones
lingüísticas, a la historia que se cuenta en el libro, a las ideas que van de la cabeza
de una persona al libro; FRBR llama a esto “obra”.
Sintetizando la hipótesis que subyace en esta parte de la exposición, diremos que el desarrollo del modelo FRBR es corto si lo comparamos con la historia de la catalogación. Todo lo que se ha venido diciendo hasta el momento
es que su propuesta cambiará el paradigma del proceso de catalogación. El
catalogador no hallará un final en el camino, porque hasta el momento hay
diversas posiciones intelectuales y teóricas entre distintos autores, así como
una serie de tradiciones en torno al tratamiento de una cantidad de los problemas que se arropan bajo el nombre del modelo FRBR.
Los objetos en la parte i de las rda
Los lineamientos para la descripción y el acceso a recursos se crearon a partir
de la combinación de los supuestos creados en el modelo FRBR, los Functional Requirements and Numbering of Authority Records (FRAD por sus siglas
en inglés), el análisis de las tradiciones bibliográficas, los Principios Internacionales de Catalogación y las RCAA2, además de también tomar en cuenta los
cambios tecnológicos.
Deliberadamente excluimos todo aquello que se ha dicho sobre la aparición y puesta en ejecución de los RDA acerca de si son las reglas de catalogación para el siglo XX 39 o XXI, la relación que se ha establecido entre los FRBR
y las RDA,40 y las reacciones de la comunidad internacional.41 Su sustracción
de este análisis se debe a que ha quedado demostrado que con estos nuevos
lineamientos se está contribuyendo a visualizar, desde otra perspectiva, las
tradiciones bibliográficas, y a que están conectándose todas las comunidades
y niveles técnicos de descripción.
52
39 Karen Coyle, Diane Hillmann, “Cataloging rules for the 20th century”, en D-Lib Magazine,
vol. 13, num. ½ (2007).
40 Barbara B. Tillett, “FRBR and RDA : resources description and access”, en Understanding FRBR ,
op cit. 87-95.
41 Anders Cato, The International community’s reaction to RDA [en línea], IFLA Satellite Meeting on RDA, 2008.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
Lo que interesa observar de la Parte I de las RDA es cómo han sido representadas las entidades que son inherentes a la descripción de la manifestación-copia que está presente en el actual registro bibliográfico, y la manera en
que es resuelto el paradigma de la simbolización de objetos bibliográficos.
Con base en lo anterior se puede aprovechar una trilogía de análisis entre
“modelos Entidad-Relación - tradiciones bibliográficas - Estructura” para estudiar el alcance de los lineamientos RDA, los cuales son receptores de contribuciones provenientes de la teoría de sistemas, la larga historia de la catalogación y el uso de la tecnología de la información. Cada posición intelectual y
teórica ha aportado su propia metodología, nosotros trataremos de describir
sintéticamente el dominio cubierto por cada unidad de análisis y cómo éste
contribuye al establecimiento de la estructura sobre la nueva manera de describir y acceder a los recursos.
Con la adopción del modelo entidad-relación el canal de comunicación
cambió en el sentido de que cada entidad depende de sus propios atributos
para interactuar. Es decir, se trata de aclarar la presencia de aquellos conceptos confusos en las reglas de catalogación que comúnmente se han explicado
a través de la experiencia. Por lo tanto cuando usamos modelos, se debe hacer caso de cada concepto expresado en el universo que representa, como es
el caso del universo bibliográfico.
El análisis de las tradiciones bibliográficas sirvió para que los RDA le dieran énfasis a dos importantes aspectos: la descripción y el acceso a los recursos y a una perspectiva internacional. Además, proporcionó una estructura
consistente y flexible para describir los aspectos técnicos y de contenido de
todo tipo de recursos y contenidos.
La estructura de los lineamientos para describir y acceder a recursos está
creciendo constantemente, probablemente debido a que es el primer intento
de trabajar en un producto Web. Cato42 señala que quien consulta los lineamientos debe saltar de un párrafo a otro para poder reunir la información que
necesita, pero piensa que pronto se llegará a solucionar esa situación porque el
“software” que produce los lineamientos está incorporando sus actualizaciones.
La Parte I de los lineamientos para la descripción y acceso a recursos está
sustentada en la estructura creada por el Grupo 1 Entidades y relaciones primarias del modelo FRBR. La representación que produce cada entidad corresponde a los propósitos que se pretenda alcanzar entre las relaciones con las
cuatro entidades.
42 Anders Cato, Ibíd.
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La constitución de la parte i de los rda
Así dispuesto y entendido el desarrollo sobre el surgimiento de los RDA, ahora lo que interesa es conocer la constitución de la Parte I.43 Al respecto, la
sección 0.1.0 Propósito y alcance, señala que la Parte I proporciona un conjunto de lineamientos e instrucciones sobre el registro de datos, que describe un
rango amplio de recursos en ambos formatos, análogos y digitales.
Tal Parte está compuesta por (sección 0.1.4) seis capítulos que proporcionan los lineamientos e instrucciones siguientes:
yy
yy
yy
yy
yy
yy
Capítulo 1. Lineamientos generales para describir los recursos
Capítulo 2. Identificación del recurso
Capítulo 3. Descripción técnica
Capítulo 4. Descripción del contenido
Capítulo 5. Información sobre la disponibilidad, etcétera.
Capítulo 6. Información sobre las especificaciones de una copia
El orden de la Parte I está relacionado con la lógica definida en los atributos de las entidades determinadas en el modelo FRBR, pero se hace la aclaración de que ese orden no tiene la intención de representar una secuencia
fija en el registro y almacenaje de los elementos de los datos descriptivos. Es
decir, no sigue un orden preescrito como lo definen las ISBD. En tal caso se
recomienda revisar el Apéndice D donde se muestran las relaciones que hay
entre las áreas de las ISBD y el mapa de los RDA.
La terminología en la parte i de las rda
En la sección 1.1 Terminología de los lineamientos para la descripción y el acceso se señala que existen diversos términos que se utilizarán a lo largo de la
Parte I. Éstos son usados como nombres del elemento del dato “data element
names.”
El término recurso (sección 1.1.1) es usado como el elemento central de la
descripción. Éste puede ser tangible o intangible; y puede constituirse en una
unidad única o estar compuesto por dos o más unidades discretas. Además
un recurso puede formar parte de otro recurso mayor. La parte del recurso
puede ser físicamente discreta o ser simplemente la unidad lógica discreta
54
43
RDA : Resource Description and Access Parte I- Constituency review of December, 2005 draft,
[en línea] pp. 0.1-1- 0.1-6.
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
del mismo. Otro término relacionado es denominado recurso relativo y es
empleado para expresar un recurso que está relacionado con el recurso, de
manera que es el foco central para la descripción.
En la sección 1.1.2 Modo de publicación (Mode of issuance) se hacen señalamientos específicos a diversas formas en las que pudo aparecer publicado
un recurso, como es el caso de los recursos publicados con una unidad simple, y el de aquellos que son publicados en dos o más partes simultáneamente; y también los que son publicados en partes sucesivas. Finalmente están los
recursos integrantes que son aquellos que tienen adiciones o cambios en el
significado de sus actualizaciones, pero que no permanecen como unidades
discretas y son integrados dentro de todo el recurso.
La sección 1.1.3 Propósito de terminación (Intended termination) se refiere
a los recursos que están formados en dos o más partes, pero también representan recursos que tienen la intención de concluirse a través de un número
finito de partes. Aquí se encuentran las monografías multiparte y los recursos
publicados en partes sucesivas que no tienen el propósito de concluirse.
En la sección 1.1.4 Descripción amplia, analítica y multinivel (Comprehensive, analytical, and multilevel description) se encuentran los lineamientos e
instrucciones referentes a los diferentes tipos de descripción que se pueden
hacer sobre los recursos. Es decir, la descripción completa indica la descripción del recurso como un todo o un conjunto. La descripción analítica indica
en qué consiste la descripción de la parte de un recurso más amplio, mientras
que la descripción multinivel señala la combinación que puede hacerse con
los dos tipos de descripciones anteriores. Cabe mencionar que la sección 1.2
Tipos de descripción, indica cómo y en qué consiste cada descripción.
El nivel apropiado de abstracción en cada uno de estos modelos ha dado
como resultado el uso y aplicación del siguiente modelo. Esto es, el modelo
de las tres entidades permite representar y significar los conceptos de obra,
edición y copia que expresan la idea respecto a las entidades bibliográficas.
Las cuales son empleadas para elaborar los argumentos y estructuras internas necesarios que justifican el nacimiento de otro modelo con un nivel más
alto de abstracción.
Es importante hacer notar que el nacimiento del nuevo modelo está asociado al proceso que sigue la técnica de la “entidad-relación”, la cual parte
de la idea del modelado de red que se establece en una base de datos. De
acuerdo con Chen44 el modelo puede lograr un alto nivel de independencia
de los datos y éste corresponderse a través de relaciones teóricas. Entonces
44 Peter Chen, “The entity-relationship model toward a unified view of data”, en ACM Transactions on Databases Systems, Vol. 1, núm. 1 (1976).
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las implicaciones de algunos de sus supuestos creados a partir del nuevo modelo, no serán exactamente iguales a las que se venían desarrollando con el
modelo de las tres entidades. Esto es exactamente lo que debe observarse
como las implicaciones de la nueva perspectiva.
Es interesante leer, a la luz de los nuevos lineamientos RDA, la terminología que se está estilando para significar a los objetos o entidades de las tradiciones bibliográficas, y a aquellas relacionadas con el modelo FRBR y que
estarán en la matriz de los nuevos sistemas de recuperación de información,
definiciones que coinciden en tener, como uno de los pilares, la correspondencia entre el significado esencial de las ciencias de la computación, cuyo
propósito es resolver los problemas de diseño a través de la tecnología de
la computación y de los significantes irreductibles, los cuales serán la razón
eterna del discurso de los sistemas complejos que aprovechan organizaciones
complejas para alcanzar un funcionamiento total.
La composición metafórica en la compleja integración de la
descripción y acceso a recursos
Muchas de las discusiones de la comunidad internacional sobre la nueva manera de describir y acceder a los recursos han tratado de difundir el sentido
esencial del cambio. Por eso se ha estado discutiendo intensamente si las RDA
son la solución o no a los diversos problemas que hay y habrá en la descripción bibliográfica, y se ha excavado en la historia de la catalogación tratando
de encontrar una esencia fundamental y fundadora que haya sido desconocida, olvidada u ocultada por el uso en el proceso de catalogación. En esas
búsquedas y discusiones reina la ilusión de una posible sutura final que debe
poner atención en cuatro ideas: el uso de axiomas, la importancia de la necesidad del usuario, la entidad obra y la estandarización e internacionalización.
Los principios son internacionales, pero las lenguas son nacionales; los
principios deben adaptarse a la cultura y a la lengua nacional, a la realidad
local concreta. Es en este sentido en el que se deben dar las discusiones de
un asunto tan controvertido para encontrar la respuesta única a la pregunta
¿qué se entiende por composición metafórica de los objetos bibliográficos?, y
cuya formulación debería tener un sentido equivalente en todos los tiempos
y en todas las situaciones. Así lo creyeron los fundadores de las tradiciones
bibliográficas. Para la mayor parte de los creadores de los principios, normas
y reglas de descripción bibliográficas del siglo XX, la catalogación era una
fuerza profunda y capaz de resolver todas las situaciones referentes a la organización de las colecciones, pero con el cambio de siglo y el surgimiento de
LOS OBJETOS BIBLIOGRÁFICOS CONFIRMADOS...
nuevos formatos y soportes están dando una necesaria cabida a la formulación de modelos, tendientes a integrar diversas disciplinas que se nutren con
innovaciones pero no resuelven el paradigma de la bibliotecología.
En resumen este análisis nos introduce en el campo problemático de que
para hablar de nuevos paradigmas en la catalogación debemos entender, en
primer lugar, cuáles son los problemas que abarcan los viejos paradigmas; y
en segundo lugar es necesario expresar los límites de la propia bibliotecología y los de su relación con otros campos.
Aparentemente estamos frente a los cuestionamientos de siempre, disfrazados mediante una nueva terminología; sin embargo, las diferencias estriban en los siguientes puntos:
a) La manera de encontrar, a través de los procesos históricos de la catalogación, los criterios de construcción de los objetos bibliográficos.
b) La definición de su relación con otros campos disciplinarios y la justificación en la construcción del nuevo paradigma.
Para ello la bibliotecología, particularmente a través de la catalogación,
está tratando de generar un paradigma y modelo conceptual que sea esencial
para descubrir anomalías y dilemas en el tipo de relaciones que se establecen
entre los campos problemáticos.
Obras consultadas
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59
Accesibilidad vs usabilidad web:
evaluación y correlación
Esmeralda Serrano Mascaraque *
Artículo recibido:
12 de mayo de 2009.
Artículo aceptado:
5 de agosto de 2009.
Resumen
Los organismos oficiales deben facilitar recursos informativos y prestar servicios a través de diversos medios
en aras de conseguir el derecho a la información que le
asiste a todo ciudadano. En el momento actual la Web
es uno de los recursos más extendidos y por ello es
fundamental evaluar el grado de accesibilidad que tienen los contenidos volcados en la Red. Para lograr esto
se aplicarán las herramientas y software necesarios y se
evaluará el nivel de accesibilidad de un grupo de sitios
web representativos. Además se intentará determinar
si existe algún tipo de relación entre accesibilidad y
usabilidad, ya que ambos son aspectos deseables (o
*
Universidad de Alcalá (Madrid), España. [email protected]
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 61-103
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incluso exigibles legalmente, en el caso de la accesibilidad) para tener un correcto diseño de web.
Palabras clave: Accesibilidad web; Usabilidad
web; Herramientas de evaluación; Diseño web accesible.
Abstract
Accessibility vs. WEB Usability— Evaluation and
Correlation
Esmeralda Serrano Mascaraque
Government agencies should provide information resources and services through various means in order
to achieve the right to information that assists all citizens. Being the Web one of the most widespread resources, it becomes essential to evaluate the degree of
its content accessibility. We will evaluate this level on a
representative group of websites, and we will try to determine whether there is any relationship between accessibility and usability since both aspects are desired
(or even legally required in the case of the accesibility)
in a proper Web design.
Keywords: Accesibility vs. Web usability; Evaluation and correlation.
Introducción
E
62
n la actualidad se persigue un acceso equitativo a las oportunidades; sin
embargo, la elevada inaccesibilidad web provoca que un amplio número de personas que presentan algún tipo de discapacidad, encuentren serias
dificultades para acceder a Internet y por ende a sus contenidos. Esta falta de
equidad en cuanto al acceso a la información, en el ámbito estatal y privado,
atenta contra los derechos fundamentales de los ciudadanos.
Los organismos oficiales deben facilitar recursos informativos y prestar
servicios a través de los diversos medios, y siendo la web actualmente uno de
los más extendidos resulta paradójico que los organismos oficiales con presencia en Internet aún contengan deficiencias en el acceso, fundamentalmente
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
derivadas de la falta de aplicación de pautas de accesibilidad a los contenidos
publicados en la Web. Esto hace que un número considerable de sitios web
oficiales aún no sean todo lo accesibles que deberían; pues no consideran algunos de los criterios de accesibilidad necesarios para dotar de eficiencia y
calidad sus contenidos y sus continentes.
Aunque el estado de estos estamentos públicos ha mejorado ostensiblemente de cara a la accesibilidad (probablemente para cumplir con las exigencias impuestas por un imperativo legal), aún queda mucho camino por recorrer en el entramado empresarial privado, puesto que la legislación española
no contempla de momento ninguna exacción para las empresas sufragadas
íntegramente con capital privado.
Propósito
Como es conocido por todos existe una diversidad de normas y estándares en
cuanto al diseño de páginas que se proponen facilitar un adecuado nivel de
accesibilidad. Sin embargo esto no significa que los desarrolladores cumplan
siempre y con tales normas. Por eso resulta de importancia extrema evaluar
cuál es el grado de cumplimentación de las recomendaciones de diseño, y establecer, en su caso, indicaciones sobre las mejoras que puedan introducirse.
Así, el propósito de este artículo es doble, el objetivo primero será aplicar
las herramientas y el software necesarios para evaluar el nivel de accesibilidad de un grupo reducido, pero representativo, de sitios web, y el segundo
objetivo intentará determinar si existe algún tipo de relación entre accesibilidad y usabilidad, ya que ambos son aspectos deseables (o incluso exigibles
legalmente, en el caso de la accesibilidad) en un correcto diseño web.
Obviamente, dada la gran cantidad y diversidad de información depositada en Internet, pretender realizar un análisis pormenorizado de la ingente
cantidad de sus contenidos sería un proyecto inviable. Esta investigación se
propone obtener una panorámica general de la accesibilidad que presentan
determinados grupos de páginas web para los deficientes visuales. La selección de los grupos de análisis y de las páginas constituyó un trabajo complicado, dada la inmensa variedad de información integrada en la Red.
Así, tras una primera evaluación automática llevada a cabo en otro
estudio,1 se realizó una evaluación de 46 páginas web, que fueron seleccionadas de forma aleatoria dentro de un grupo heterogéneo compuesto por universidades, grandes empresas, ayuntamientos, colegios oficiales, comunidades
1
Esmeralda Serrano Mascaraque, “Accesibilidad Web para discapacitados visuales: acercamiento y propuestas”, Director: Ignacio Olmeda Martos, [Tesis doctoral],Universidad de Alcalá, Departamento de Ciencias de la Computación, 2008.
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autónomas y páginas de ocio (ciclismo). Estas páginas fueron objeto de una
evaluación automatizada (método rápido, objetivo y oportuno, pero que incluye interrogantes que sólo pueden ser solventadas a través de un método
manual que, además de complementarlo, resultará más intuitivo al basarse en
el juicio personal derivado de la interpretación de expertos y usuarios), pero también realizamos análisis manuales para sumar las ventajas propias de
este método. Para el análisis manual se diseñaron cuestionarios compuestos
por preguntas tanto de accesibilidad como de usabilidad, que revisaron los
expertos encargados de la evaluación, quienes se basaron en los criterios de
accesibilidad establecidos por las normas WAI (Web Accessibility Iniciative) y
en su profesionalidad. Incluyeron también los comentarios que consideraron
oportunos.
En los sucesivos apartados se explicará con mayor detalle cada uno de los
test desarrollados mencionados anteriormente.
Se ha considerado oportuno, en relación con la accesibilidad y la usabilidad, asentar algunas precisiones básicas para esclarecer el buen entendimiento de ambos conceptos.
Accesibilidad vs usabilidad
En principio la usabilidad no es un concepto que se aplique directamente al
mundo de los portales web, tiene más bien que ver con todo aquel objeto útil
o artefacto que es utilizado por una persona para un fin. Como definición intuitiva se podría decir que la usabilidad es la característica de facilidad de uso
que tiene un artefacto para un usuario según ciertas condiciones determinadas.
Por ejemplo, la usabilidad de un aparato grabador de video es la dificultad o
facilidad que tiene un usuario para grabar una película de un canal de televisión
a una hora determinada. Todo el proceso desde que el usuario tiene la voluntad de grabar la película hasta que programa el aparato tiene una usabilidad
determinada.
La usabilidad de los productos de software constituye una característica
vital que puede llegar a marcar su éxito o su fracaso, independientemente de
que el programa tenga una eficiencia interna satisfactoria. Es con este tipo de
software con el cual el usuario demanda mayor facilidad de uso. Por su naturaleza, el software, y por tanto la informática, están destinados a desempeñar
tareas complejas que incluyen una gran variedad de opciones. Para ilustrar esto basta con comparar una máquina de escribir con cualquier procesador de
textos. La diferencia de funcionalidades en favor del procesador de textos es
abrumadora. Si no fuera sencillo usar el procesador de textos probablemente
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
pocos serían capaces de escribir una página de la misma calidad que empleando una máquina de escribir.
La Organización Internacional para la Estandarización propone dos definiciones relativas a la usabilidad del software:
yy
ISO/IEC 9126: “La usabilidad se refiere a la capacidad de un software
de ser comprendido, aprendido, usado y ser atractivo para el usuario,
en condiciones específicas de uso”.
yy ISO/IEC 9241: “Usabilidad es la efectividad, eficiencia y satisfacción
con la que un producto permite alcanzar objetivos específicos a usuarios específicos en un contexto de uso específico”.
De estas definiciones se extraen algunos puntos clave sobre la usabilidad. Para que el usuario logre alcanzar su meta de forma satisfactoria y con la
mayor facilidad posible, el manejo del software tiene que ser sencillo de comprender y de recordar; es decir apoyarse en lo intuitivo, y se debe adaptar a
las características específicas del usuario. Una mayor usabilidad implica que
conlleva eficiencia en sus procesos; esto es, que reduce el tiempo y esfuerzo
requeridos para averiguar cómo se maneja un software.
Por otra parte, la usabilidad ha de estar centrada en el usuario, además de
que un software realice una tarea a partir de órdenes y datos de entrada y de
salida válidos, desempeño que deberá ser satisfactorio para el usuario; lo que
equivale a decir, sencillo, fácil de aprender y eficiente.
Las páginas web constituyen un tipo de software diferente del tradicional y han acaparado la mayor parte del tiempo de uso de los ordenadores.
Su característica particular es que gran parte de su desarrollo consiste en un
diseño enfocado directamente hacia el usuario, en comparación con otros programas como los procesadores de texto, los sistemas de simulación, etcétera.
Las páginas web son el más claro exponente de software centrado en la interfaz con el usuario, por lo que la usabilidad tiene que ser el objetivo último
de su desarrollo: una página web contiene principalmente información para
el usuario, por lo que la forma de acceder a ella y mostrarla es el hecho más
relevante que puede decidir su éxito o fracaso.
Otra característica de las páginas web, que la diferencia de muchos otros
softwares, es el aspecto comercial. Exceptuando el software libre, los programas conllevan un costo económico para el usuario quien luego de adquirirlo mediante una suma a veces considerable, debe realizar un importante
esfuerzo para hacer un uso eficaz de su adquisición: lectura de manual, asistencia a cursos de formación, llamadas a la compañía, etcétera. Tales páginas
le ofrecen al usuario una serie de posibilidades frente al software tradicional
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
que contribuyen a aumentar la importancia que tiene una buena usabilidad.
Pero si al primer golpe de vista, una web no resulta atractiva, usable o no sabe
“vendérsele” al usuario, al instante, éste cambiará a otra página alternativa, y
la compañía perderá un cliente.
Es patente, pues, la importancia que tiene el concepto de usabilidad para
lograr la satisfacción del usuario, y debe contar con un diseño usable que garantice la facilidad de acceso a las funcionalidades o información de la página
web.
Atributos y evaluación de la usabilidad
Para comprender el concepto de usabilidad del software Shneiderman (1998)
enunció cinco atributos que resumen los principales aspectos que influyen en
la accesibilidad:
yy Facilidad de aprendizaje.
yy Velocidad de desempeño. Si a un usuario que nunca ha visto el portal
se le ordenara ir a una sección concreta, ¿cuánto tiempo le llevaría localizarla?
yy Tasa de error por usuario. A un usuario con algo de experiencia en la
utilización del portal, ¿cuánto tiempo le llevaría realizar una serie de
tareas específicas?
yy Retención en el tiempo. Se trata de evitar que un usuario experimentado caiga en errores, de modo que acabe abandonando la página.
yy Satisfacción subjetiva. Un usuario experimentado, ¿tiene una opinión
positiva de la web?
El protagonista de la usabilidad es, sin duda, el usuario, a lo cual se le suele
denominar diseño centrado en el usuario (user-centered design). La evaluación de la usabilidad pasa necesariamente por una serie de pruebas heurísticas en las que un grupo de expertos en usabilidad, junto con usuarios inexpertos, aportan su opinión sobre la usabilidad de un software o sitio web.
Ejemplos de este tipo de test heurístico pueden ser los propuestos por Nielsen (1993) o Dumas (1999). También existen herramientas para las partes automatizables, como el tiempo de carga de la página, el tamaño de fuentes o
el contraste de colores. No obstante, siempre es fundamental el juicio de los
evaluadores para obtener un resultado adecuado en el proceso de evaluación
de la usabilidad.
66
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Relación entre usabilidad y accesibilidad
Desde el punto de vista conceptual ambos términos buscan el mismo objetivo:
que el usuario pueda hacer mejor uso del software, en este caso de las páginas
web. La accesibilidad intenta vencer las discapacidades del usuario para acceder a la información; mientras que la usabilidad busca mejorar la experiencia
del usuario al usar las páginas web.
Resulta complicado encontrar una adecuada separación entre ambos
conceptos, porque existe una correlación entre ambas. Un diseño accesible
preparado para personas, discapacitadas o no, debe ser usable. Si existen dificultades en la navegación por una inadecuada usabilidad de una página, el
problema se agravará para personas discapacitadas o que requieren de alguna asistencia para usar la página web. Una página cuyo menú sea poco usable
presentará importantes complicaciones para una persona que esté en plenitud de sus facultades y que pueda utilizar un “ratón”, pero su uso le resultará
casi imposible a una persona que tiene problemas físicos y debe utilizar un
licornio o un sistema de reconocimiento de voz.
La usabilidad también se ve beneficiada por una buena accesibilidad. Una
página accesible está concebida principalmente para aquellas personas que
tienen dificultades de acceso, lo que obliga en primera instancia a realizar un
esfuerzo extra al diseñar la interfaz, la cual además de ser rápida e intutiva
deberá disponer de atajos que faciliten la navegación.
La accesibilidad sería entonces la capacidad de una página web, o una
aplicación, para facilitarle a los usuarios (independientemente de sus niveles
de discapacidad física o tecnológica) el acceso a la misma y a sus contenidos.
Y la usabilidad sería una forma de medir lo fácil, rápido y agradable que resulta utilizar dicha página web o aplicación. Ambos conceptos convergen en
la búsqueda de la facilidad de acceso y consulta, por parte de los usuarios, a una
página web o a una aplicación.
Evaluación de la accesibilidad mediante cuestionarios
Esta evaluación de sitios web se basó en el empleo de cuestionarios destinados a usuarios a quienes se les presupone un nivel de especialización. En el
contexto de la presente investigación, se elaboró un cuestionario compuesto
por preguntas sobre accesibilidad y usabilidad, que estaba dirigido a estudiantes del último curso de Ingeniería en Informática, personas que poseen los
conocimientos necesarios sobre páginas web, accesibilidad y usabilidad que
se exigen dentro de una asignatura específicamente orientada al Diseño de
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Aplicaciones Web. Los alumnos que participaron en la encuesta', más de 70,
poseían, por tanto, un nivel de conocimientos muy superior al de un usuario
medio. Los datos obtenidos a través de estos cuestionarios fueron la base para
elaborar una plataforma con las características, criterios y atributos de accesibilidad y usabilidad que cumplieran con las exigencias de la legislación vigente
por lo que se refiere al acceso a esas páginas, a todo tipo de personas, independientemente del colectivo en el que se encuentren integrados, y poniendo
especial cuidado en la incidencia de discapacitados visuales, con la intención
de garantizar así un derecho constitucional de igualdad de oportunidades.
El cuestionario constaba de 20 preguntas agrupadas en dos conjuntos:
diez preguntas sobre aspectos de accesibilidad y otras diez sobre conceptos
de usabilidad. A los encuestados se les preguntó acerca de diferentes aspectos relativos a la accesibilidad y usabilidad de un conjunto de 46 páginas
web2 seleccionadas de forma aleatoria dentro de un grupo compuesto por
universidades, grandes empresas, ayuntamientos, colegios oficiales, comunidades autónomas y páginas de ocio (ciclismo). A los participantes en el estudio se les solicitaba una valoración sobre dichas preguntas, empleando las categorías 1-Totalmente en desacuerdo, 2- En desacuerdo, 3-Indiferente, 4-De
acuerdo y 5-Totalmente de acuerdo. Dicho cuestionario fue realizado a través
de una página web habilitada al efecto.
Se utilizó un método de estudio basado en la lista de puntos de verificación para las Pautas de Accesibilidad al Contenido de la Web: Prioridad 1,3
la cual se reflejaba en dos cuestionarios: Usabilidad y Accesibilidad; 4 que se
ejecutaron para validar el grado de cumplimiento de cada punto evaluado
por medio de la observación y el análisis de las páginas principales de los sitios
web (punto de acceso por parte de los usuarios a las diferentes web). Partimos de que si estas páginas no cumplen con los requisitos de accesibilidad
mínimos, difícilmente un usuario con capacidades físicas, psíquicas o técnicas mermadas podrá acceder al resto de las páginas. Para realizar el proceso
de evaluación se emplearon y establecieron una serie de pasos y herramientas
que garantizaron la verificación de la Prioridad 1, Nivel A.
El primer paso consistió en verificar la accesibilidad de cada sitio web,
confrontando aquellos aspectos que permitieron determinar el grado de
cumplimiento de las pautas de accesibilidad. Debido al gran volumen de aspectos que debe considerar el análisis de la accesibilidad de una página web,
2
3
68
4
Las URL’S se recogen en la Tabla 1.
Son aquellos puntos que un desarrollador web tiene que cumplir, ya que de otra manera ciertos grupos de usuarios no podrían acceder a la información del sitio web (Guía breve de Accesibilidad Web. W3C).
Véase Anexo I.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
se optó, en primer lugar, por revisar los errores que con mayor asiduidad se
cometen e imposibilitan que una página sea accesible; para ello se estudiaron
los principales obstáculos que debe sortear habitualmente una persona con
discapacidad y que constituyen los criterios que a continuación se citan:
yy Se deben proporcionar textos alternativos para todo elemento no textual.
yy El contenido debe ser comprensible en un navegador sin estilos y en
un navegador de “sólo texto”. Los estándares de diseño recomiendan
la separación de la información (XHTML/HTML) y su apariencia (hojas
de estilo en cascada ó CSS). De este modo el contenido del sitio web
debe poder visualizarse correctamente sin cargar la hoja de estilos
(CSS), lo que facultaría a los usuarios para que ellos mismos determinaran la apariencia de los textos que más les convinieran.
yy Se debe dar información accesible y precisa sobre la estructura general del sitio; de manera que el usuario esté perfectamente ubicado.
yy El contenido de las páginas debe poder visualizarse correctamente,
con independencia de la presencia o no de determinados objetos de
programación: scripts (javascript), applets, animaciones flash, etcétera.
yy Se deben evitar objetos o recursos gráficos móviles que dificulten la
navegación; por ejemplo, los parpadeos en la pantalla, gifs en movimiento, etcétera.
Posteriormente se continuó con cada una de las 20 variables que constituyen los cuestionarios, sobre usabilidad y accesibilidad por cada sitio web
seleccionado, y se eligieron las herramientas que permitieron medir el grado
de accesibilidad alcanzado.
Las plataformas web seleccionadas son:
Tabla 1
URLs consultadas
www.cofbizkaia.net/
www.juntaex.es
www.ferrovial.com
www.uah.es/documentacion
www.cajaguadalajara.biz
www.um.es/biblioteca
www.cajamadrid.es
www.uah.es/documentacion/Servicios/biblioteca.htm
www.orange.es
www.uvic.cat
www.telefonica.es
www.uah.es
www.ayto-malaga.es
www.illesbalears.es
www.munimadrid.es
www.comunitatvalenciana.com
www.indra.es
www.prisa.es
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www.grupointermark.net/tecnologias
www.vocento.com
www.eroski.es
www.carrefour.es
www.gijon.info
www.securitas.es
www.enagas.com
www.ugr.es/~fbd
Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid
www.carm.es
www.uax.es
www.odec.es
www.upm.es
www.everis.es
www.iberpistas.es
www.webct.com
www.cintra.es
www.ciclismourbano.org
www.atutor.ca
www.aehm.es
www.bizikletarenbehatokia.org
www.c-y-a.es
www.unionhotelera.com/asociacion
www.astroc.com
www.inditex.es/es
www.unionfenosa.es
www.madridinfosite.com/sp
www.prosegur.es
Definición, clasificación y medición de Variables
El instrumento usado para conseguir los datos primarios fue el Cuestionario
de Accesibilidad y Usabilidad.
El Cuestionario utilizado consta de 20 variables, estructuradas en 2 bloques formados por preguntas cerradas, numéricas y categóricas, y se valoró
del 1 (totalmente en desacuerdo) al 5 (totalmente de acuerdo) el grado de
conformidad como se mostró anteriormente. Además, se incluye un espacio
en blanco para justificar la respuesta proporcionada.
La web en la que se encuentra el cuestionario cuenta con un enlace de
ayuda para facilitar la cumplimentación del mismo, que explica el manejo de
los programas y herramientas necesarias para evaluar la usabilidad y accesibilidad, e incluye un pequeño glosario de términos específicos con el objeto
de esclarecer el significado de aquellos términos desconocidos por el encuestado.
Diseño del cuestionario
A continuación se muestra un esquema explicativo de los bloques:
yy Primer bloque, Preguntas referidas a la Usabilidad: 5
Mediante las 10 preguntas que conforman el bloque de usabilidad, se
5
70
Organización Internacional para la Estandarización (ISO) define Usabilidad en la ISO/IEC
9126: La Usabilidad se refiere a la capacidad de un software de ser comprendido, aprendido, usado y ser atractivo para el usuario, en condiciones específicas de uso.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
evalúan las características que hacen que una url sea usable, como por
ejemplo, la apariencia, la organización de la página, la facilidad de acceso a los contenidos, ayudas a la navegación, etcétera
yy Segundo bloque, Preguntas referidas a la cccesibilidad:
La accesibilidad indica la facilidad con la que algo puede ser usado,
visitado o accedido, en general, por todas las personas y, especialmente, por aquéllas que poseen algún tipo de discapacidad.
En este segundo bloque de 10 preguntas se evalúan, utilizando diversas herramientas y programas, parámetros de accesibilidad, como las
ayudas a la navegación, los cambios de apariencia y tamaño de la fuente, el texto asociado a elementos no textuales…
Metodología y Especificación de la Muestra
El cuestionario utilizado fue el ‘Test de Usabilidad y Accesibilidad de Páginas
Web’,6 y le fue aplicado a una muestra de integrantes de la comunidad universitaria (estudiantes de Ingeniería Informática de la Universidad de Alcalá).
El tamaño de la muestra fue de 402 cuestionarios y 77 encuestados, quienes
completaron una media de 5 cuestionarios cada uno de ellos.
Ficha técnica
Recolección de
información
Muestreo
Técnica
Cuestionario
Población
Tamaño
Método
Fecha
Técnicas estadísticas
Cuestionario
Ver anexo I
77 Participantes encuestados
402 Cuestionarios
Muestreo no aleatorio
Enero 2007 a julio de 2007
Estadísticas básicas
Tabulación simple
Análisis de los datos de los cuestionarios
Una vez cumplimentados los Cuestionarios de Accesibilidad y Usabilidad, el
siguiente paso fue codificar los datos extraídos de los mismos.
Tras analizar los datos tratamos de extraer información relevante que nos
permitiera identificar posibles carencias, adecuar contenidos y, en general,
conocer la opinión aportada por los destinatarios sobre la Accesibilidad y
Usabilidad de las url (Uniform Resource Locator; Localizadores uniformes
6
El cuestionario se obtuvo a través de uno de los servidores alojados en la web de la Universidad de Alcalá: http://multimedia.uah.es/encuestausabilidad.
71
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
de recursos) evaluadas. Se exponen a continuación los resultados básicos
globales obtenidos en la investigación.
Preguntas referidas a usabilidad
yy La legibilidad de la información me parece adecuada.
Tabla 2
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
62
188
71
62
12
7
402
%
15%
47%
18%
15%
3%
2%
100%
La pregunta se refiere a elementos de apariencia, como el contraste del
texto con el fondo, tamaños de la fuente apropiados o colores llamativos. Un 62% de los encuestados considera que la legibilidad es adecuada; y destaca que el contraste de colores es correcto sin ser llamativo y
el tamaño de fuente adecuado en la mayoría de los casos. Datos destacables: la Universidad de Granada posee una inadecuada legibilidad; y
por su parte la Universidad de Alcalá obtiene resultados óptimos.
yy Las secciones de las que consta la página, menú, cabecera, etcétera,
están claramente definidas de modo que queda claro a qué sección
pertenece cada elemento de la página.
Tabla 3
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
72
Frecuencia
105
179
50
49
12
7
402
%
26%
45%
12%
12%
3%
2%
100%
El 71% de los encuestados considera que está clara la estructura de la
página y la información que contiene cada sección. Los usuarios identifican fácilmente el menú, el cuerpo y la cabecera de las páginas, que
permanecen constantes a lo largo de la navegación en la mayor parte
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
de las web. Datos destacables: la web del Ayuntamiento de Madrid presenta las secciones claramente definidas, frente a la del Ayuntamiento
de Málaga cuya organización no está tan estructurada.
yy Al navegar por la página se diferencia claramente la profundidad del
árbol de navegación y la información a la que se va a poder acceder.
Tabla 4
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
91
155
65
69
16
6
402
%
23%
39%
16%
17%
4%
1%
100%
Un 62% considera que la estructura del sistema de navegación de las
páginas es clara y constante a lo largo de toda la navegación. En la mayoría de las url, los encuestados aprecian sin dificultad la profundidad
del árbol de navegación, sobre todo si existe una sección en la que se
muestre el mapa web. Además, tienen problemas cuando la cabecera
no es constante a lo largo de la navegación. Datos destacables: la web
de la Universidad de Alcalá permite, en una primera visualización, observar la profundidad del árbol de navegación frente a la de la Universidad de Vic, en la que no está tan clara la estructura del mapa web.
yy Los enlaces tienen un nombre que se corresponde con el contenido de
la página a la que van dirigidos y cumplen las expectativas de lo que se
esperaba encontrar.
Tabla 5
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
154
173
44
22
2
7
402
%
38%
44%
11%
5%
0%
2%
100%
Un 82% de los encuestados opina que los enlaces se corresponden
con la información a la que conducen, ninguno estuvo totalmente en
desacuerdo. En los comentarios del cuestionario, algunos usuarios
73
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
sugieren mejoras, como la aparición de un texto descriptivo del enlace
al pasar el puntero del ratón por encima de éste. Datos destacables:
Enagas presenta una mayor claridad en sus enlaces que el resto de las
entidades evaluadas.
yy Existen ayudas a la navegación y éstas son útiles y suficientes.
Tabla 6
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
108
130
63
70
25
6
402
%
27%
33%
16%
16%
17%
1%
100%
En esta pregunta se evalúa si la url dispone de elementos que localicen
al usuario dentro del árbol de navegación, al destacar la opción elegida de algún modo, o mediante un título descriptivo de la información
a la que se está accediendo, mapas con el árbol de navegación etcétera.
En este caso, un 60% consideró que las ayudas para la navegación eran
útiles y suficientes, mientras que un 23% no estaba de acuerdo con esta
afirmación, debido a que algunas web carecen de enlaces internos o
no se muestra la ruta seguida al entrar en un enlace.
yy Al emplear diferentes navegadores, por ejemplo Opera, Firefox o Internet Explorer (u otros diferentes, indicando cuáles en los comentarios),
la apariencia y funcionalidad de la página es similar en todos ellos.
Tabla 7
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
74
Frecuencia
206
120
28
26
15
7
402
%
51%
30%
7%
6%
4%
2%
100%
Una web nunca debe condicionar al usuario a utilizar un navegador
u otro; si está correctamente diseñada debe verse de forma óptima en
todos los navegadores posibles. El 81% de los participantes observa
que las web funcionan correctamente al cambiar de navegador (Explorer,
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Opera y Firefox), sin que la apariencia de éstas cambie notablemente. No obstante, en algunas url, los usuarios encontraron pérdidas de
funcionalidad al cambiar de navegador, como la desaparición de elementos emergentes, o de la descripción textual del enlace o de menús
desplegables.
yy Existen elementos en la página que dificultan la navegación o el sistema de navegación es difícil de utilizar.
Tabla 8
Significado
Frecuencia
%
46
11%
De acuerdo
76
19%
Indiferente
59
15%
En desacuerdo
106
26%
Totalmente en desacuerdo
108
27%
Totalmente de acuerdo
NS/NC
Total frecuencias
7
2%
402
100%
Un 30% de los encuestados considera que existen elementos que dificultan la navegación, bien porque aparecen banners que se interponen
en la navegación, o porque otros elementos de la página se maquetan
encima de los enlaces. También interfiere en la navegación el hecho de
que la estructura del sistema no sea clara, debido a menús demasiado
extensos o que cambian a lo largo de la navegación. Datos destacables: Inditex no presenta elementos que dificulten la navegación; por
el contrario CyA destaca por la presencia de éstos.
yy El número de pasos requeridos para acceder a la información es alto,
por lo que la navegación es tediosa.
Tabla 9
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
29
88
67
138
74
6
402
%
7%
22%
17%
35%
18%
1%
100%
El acceso a la información no es “directo” para un 36% de los participantes, el resto llega al contenido en un par de clics. Los principales
problemas que encontraron los encuestados responden a: la aparición
75
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de páginas emergentes de publicidad, el hecho de que un enlace contenga demasiadas subsecciones y el número excesivo de pasos necesarios para llegar a la información deseada.
yy Hay elementos que me distraen de la navegación.
Tabla 10
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
42
66
58
125
104
7
402
%
10%
16%
14%
32%
26%
2%
100%
Sólo un 36% encuentra en las url elementos que distraigan la navegación, y destacan la aparición de anuncios o animaciones flash, sonidos
estridentes y que en la página principal aparezca una presentación con
sonido que no puede desactivarse, el cual se repite incesantemente al
regresar a ésta. Datos destacables: la página de Astroc presenta demasiadas imágenes móviles que distraen la atención del internauta, frente
a la de Ferrovial que integra menos elementos móviles.
yy En general, considero que la Usabilidad de esta página es buena.
Tabla 11
Significado
Frecuencia
%
Totalmente de acuerdo
89
22%
De acuerdo
167
42%
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
80
48
12
6
20%
12%
3%
1%
Total frecuencias
402
100%
Evaluando las páginas de forma global respecto a todos los aspectos
analizados anteriormente, el 64% de los encuestados considera que
las páginas presentan una buena Usabilidad.
Preguntas referidas a accesibilidad
76
yy Tanto HTML como CSS siguen los estándares de diseño, y respetan
además la separación de la información y la apariencia.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Tabla 12
Significado
Frecuencia
%
Totalmente de acuerdo
47
12%
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NCº
87
66
94
107
1
22%
16%
23%
27%
0%
Total frecuencias
402
100%
Utilizando los validadores de código del W3C se solicitó a los participantes que comprobaran la calidad del código. También observando
el código fuente directamente evaluaron la separación de la apariencia visual (CSS u hojas de estilo en cascada) y la información (HTML
o lenguaje de marcado de las páginas). Además, se analizaron otros
puntos de verificación en el código fuente: DTD (Document Type Declaration), Namespace, atributos de idiomas y las estructuras lógicas y de
contenido del documento.
El 50% de los evaluadores indicó que el validador detectaba fallos;
bien porque el código HTML y CSS no cumplían los estándares de diseño o porque éstos no estaban bien diferenciados.
yy Al evaluar la accesibilidad con la herramienta TAW (Test de Accesibilidad de la Web) se obtienen buenas puntuaciones, y si se presentan
fallos, éstos no afectan gravemente la accesibilidad.
Tabla 13
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
50
94
62
84
111
1
402
%
12%
23%
15%
21%
28%
0%
100%
77
Utilizando la herramienta TAW7 se evalúa la accesibilidad respecto a
los estándares WCAG ; en este caso seguimos los criterios de Prioridad
18 tal y como indicamos anteriormente.
TAW realiza la evaluación del código respecto a los puntos de verificación de cada uno de los niveles de prioridad, y obtiene el número de
errores, tanto automáticos como manuales, que existen en la página.
Este análisis automático permitió confirmar algunos aspectos fundamentales de accesibilidad recogidos en las pautas WAI (Web Accessibility Initiative/ Iniciativa de Accesibilidad de la Red), aunque hay que
ser conscientes de que muchos de estos puntos de verificación sólo podrán analizarse con la intervención humana, puesto que ésta puede
ayudar a asegurar la claridad del lenguaje y a facilitar su comprensión.
El 50% de los participantes no obtuvieron buenas puntuaciones en la
evaluación de las web con TAW. La mayoría de los errores automáticos
hallados correspondían a la falta de texto asociado a las imágenes, y a
la pérdida de información al desactivar hojas de estilo; además, aparecen errores que habría que comprobar de forma manual para ratificar
si afectan o no la accesibilidad.
yy Al desactivar en el navegador las hojas de estilo, la información que
aparece es la misma que cuando éstas se encuentran activas (no se
pierde información).
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
Tabla 14
Significado
Frecuencia
%
Totalmente de acuerdo
152
38%
De acuerdo
132
33%
Indiferente
43
11%
En desacuerdo
55
14%
Totalmente en desacuerdo
20
5%
NS/NC
0
0%
402
100%
Total frecuencias
7
8
78
Para esta prueba se utilizaron los navegadores Mozilla Firefox, Internet Explorer y/o Safari, y se desactivaron las hojas de estilo (CSS), las
imágenes, las animaciones flash y/o scripts (javascript). En una web accesible, al desactivar estas opciones del navegador no debería perderse
TAW son las siglas de Test de Accesibilidad Web. Es una herramienta para el análisis de la
accesibilidad de sitios web, que alcanza de forma integral y global a todos los elementos y páginas que lo componen.
Word Wide Web Consortium, Web Content Accessibility Guidelines 1.0: W3C Recommendation 5-May-1999 [en línea], disponible en: www.w3.org/TR/WCAG10/, [consulta: 12 enero de
2007].
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
información ni funcionalidad; es decir, la apariencia y funcionalidad
de la página debería permanecer inamovible, con independencia del
navegador utilizado. En el caso que nos ocupa, el 75% de la población
encuestada consideró que no se perdía información al desactivar las hojas de estilo. Los principales problemas encontrados en algunas web
fueron la aparición de enlaces repetidos, la desaparición de información
asociada a imágenes o la información desordenada.
No debemos olvidar que si una tarea requiere la existencia de CSS,
imágenes, flash o javascript, esto irá en detrimento de su accesibilidad,
puesto que ésta lo resentirá negativamente.
yy Si se emplea Lynx (navegador modo texto) se puede acceder a toda la
información de la página y a todos los elementos no textuales.
Tabla 15
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
89
128
58
73
51
3
402
%
22%
32%
14%
18%
13%
1%
100%
El navegador Lynx es un navegador en modo texto, recorre la página
para comprobar si hay información a la que no se puede acceder; la
información gráfica debe tener un equivalente textual y la página no
debe tener marcos. Lynx interpreta en modo texto la página web de
carga, de un modo similar al que lo harían los navegadores más sencillos, o en el orden en que lo leerían los sintetizadores de voz. Por
ello si la información es accesible con este navegador, el porcentaje de
posibilidad de serlo con el resto de programas será muy elevado.
Se tienen en cuenta tres aspectos en la conversión a modo texto de una
página web: orden (situación de grupos de información en la web de
modo gráfico y textual), funcionalidad (el uso de elementos no compatibles con las tecnologías de asistencia no debe mermar las funcionalidades de la página en modo texto), y similitud de la información (toda
la información de la página web, tanto textual, gráfica o que se obtenga del contexto de los elementos por su disposición, ha de contar con
un equivalente en modo texto).
El 54% de los encuestados no encontró problemas para acceder a la información, la mayoría de las dificultades encontradas correspondían a
79
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80
la falta de texto asociado a imágenes o animaciones, o a un cambio en la
disposición de los contenidos y la imposibilidad de acceder a subsecciones dentro de un enlace.
yy Siguiendo con el navegador Lynx (modo texto) y con su navegación
secuencial. La página cuenta con suficientes enlaces internos que facilitan el salto entre secciones de ella.
Tabla 16
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
73
140
63
73
49
4
402
%
18%
35%
16%
18%
12%
1%
100%
La navegación secuencial consiste en consultar una página de manera
lineal, comenzando por el principio, para pasar de elemento a elemento de la información hasta el lugar deseado. Este es el tipo de navegación que llevan a cabo las personas invidentes y el navegador con el
que se ejecuta esta variable, Lynx. La presencia de un número considerable de enlaces internos ocultos, sin caer en el exceso, les facilita
inestimablemente la navegación por las páginas a los invidentes, puesto que este tipo de enlaces emula el modo de acceso utilizado por dispositivos apuntadores como el ratón; cuyo uso está restringido para los
invidentes.
Al 53% de los participantes les parecieron suficientes los enlaces internos encontrados en las url, y los consideraron insuficientes para navegar
por toda la página un 30% de ellos.
yy Hacer uso de las herramientas de cambio de tamaño de la fuente del
navegador, amplía o disminuye el tamaño de las letras como si se tratase de una lupa. La página mantiene la coherencia y se puede ver la
información de modo similar (la página no se deforma).
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Tabla 17
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
96
120
45
101
38
2
402
%
24%
30%
11%
25%
9%
0%
100%
Más de la mitad de la población encuestada opina que las web evaluadas mantienen la coherencia al aumentar el tamaño de fuente, la página
no se deforma ni pierde información en la mayoría de los casos. En algunas web el tamaño de letra aumenta sólo en determinadas secciones, mientras que permanece inmóvil en otras o algunos contenidos
desaparecen.
yy Descarga el programa aDesigner de IBM y realiza los test para personas
ciegas (blind) y de baja visión (low vision). La página obtiene buenas
puntuaciones.
Tabla 18
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
76
109
74
84
59
0
402
%
19%
27%
18%
21%
15%
0%
100%
El programa aDesigner es una herramienta que evalúa la accesibilidad
según las normas WCAG del W3C. Además, simula la percepción de la
página de personas con diferentes problemas de visión, desde ceguera
total a personas con una discapacidad parcial, como por ejemplo personas de edad avanzada, personas que no distinguen bien los colores,
o simplemente una persona que presenta la denominada “vista cansada”.
Al realizar los test de baja visión (low vision) y ceguera (blind) con aDesigner, el 46% obtuvo buenas puntuaciones con este programa para las
web evaluadas. Los errores obtenidos se deben a la falta de texto alternativo asociado a imágenes, hojas de estilo, fuentes fijas o utilización
de colores inadecuados.
81
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yy Utilizando un sintetizador de voz como el IBM Home Page Reader e
impidiendo la visión de la página (por ejemplo, apagando el monitor),
la información a la que se accede no presenta variaciones respecto a
aquella que aparece sin emplear esta herramienta.
Tabla 19
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
40
130
75
90
63
4
402
%
10%
32%
19%
22%
16%
1%
100%
IBM Home Page Reader realiza una lectura de la información textual de
la página. Para que las personas invidentes no pierdan contenido de la
página, todo elemento no textual tiene que disponer de un texto asociado (las imágenes, animaciones, etcétera.
El 42% de los participantes considera que el acceso a la información es
similar empleando la vista o utilizando el sintetizador de voz. En las url
peor calificadas, la información es leída más de una vez por el sintetizador, se omiten enlaces o no existe texto asociado a las imágenes. Si estos
elementos no textuales carecen de su equivalente textual, no podrán
ser interpretados por ningún sistema de asistencia a la navegación.
yy La página dispone de un buen número de elementos que facilitan la
accesibilidad: cambio de tamaño de la fuente, cambio de apariencia
de la página, enlaces internos para facilitar la navegación, teclas rápidas, etcétera
Tabla 20
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
82
Frecuencia
25
80
87
110
98
2
402
%
6%
20%
22%
27%
24%
0%
100%
En esta pregunta se evalúa la existencia de elementos que facilitan la
accesibilidad de una web, como el cambio de tamaño de la fuente, el
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
cambio de apariencia de la página, los enlaces internos, bien definidos
e interpretables para facilitar la navegación, las teclas rápidas, los enlaces a información en formato de audio, etcétera. Es interesante valorar
la presencia de estos elementos y su utilidad real, ya que éstos actúan
como sustitutos de los programas de asistencia a la navegación.
Sólo un 26% de los encuestados considera que existen elementos suficientes de ayuda a la accesibilidad en las páginas web seleccionadas; sólo
algunas disponen de cambio de tamaño de la fuente, de enlaces internos y de la información disponible en audio. Datos destacables: la
Facultad de Documentación de la Universidad de Alcalá, dentro de las
url evaluadas, es una de las que presenta mayor presencia de estos elementos.
yy Una vez realizadas las pruebas anteriores, en general, considero que la
página tiene un nivel de accesibilidad suficiente.
Tabla 21
Significado
Totalmente de acuerdo
De acuerdo
Indiferente
En desacuerdo
Totalmente en desacuerdo
NS/NC
Total frecuencias
Frecuencia
50
118
70
100
60
4
402
%
12%
29%
17%
25%
15%
1%
100%
Evaluando las páginas de forma global respecto a todos los aspectos
analizados anteriormente, el 42% de los encuestados consideró que la
accesibilidad de las páginas web era suficiente.
Como resultado del análisis efectuado, y tras el estudio pormenorizado
de las puntuaciones obtenidas para cada url, podemos extraer las siguientes
conclusiones:
1. En general las url estudiadas presentan buenas puntuaciones de Usabilidad, ya que prácticamente todas tienen una buena navegabilidad y
facilidad de acceso a los contenidos.
2. En el tema de Accesibilidad se observa que la mayoría de las páginas
obtienen una menor puntuación. Esta diferencia se debe a que los errores de accesibilidad son más difíciles de detectar a simple vista, ya que se
necesitan programas específicos para revelarlos, como hemos visto a
lo largo del cuestionario.
83
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
84
Este fenómeno presumiblemente responde a factores puramente comerciales; que una web o incluso un software sea accesible es un aspecto técnico
generalmente poco valorado por el cliente final medio a la hora de adquirirlo
o utilizarlo. Hasta ahora la accesibilidad ha sido impuesta por ley y no por
la demanda del mercado, aunque esto está cambiando progresivamente. El
lenguaje de estandarización ha sufrido un fenómeno similar; así, el diseño de
una web con (X)HTML y CSS (estándares ampliamente extendidos en la disociación texto-apariencia) es algo ajeno al usuario final; y aunque es incuestionable que su aplicación ha mejorado la velocidad de descarga de documentos
y simplificado enormemente su mantenimiento, no ha obtenido logros significativos referidos a la mejora de la experiencia del usuario final.
Sin embargo la apariencia visual sí es un aspecto que considera la mayoría
de los usuarios a la hora de utilizar o adquirir cualquier herramienta. Pero el
mundo del diseño se basa en aspectos tan efímeros como subjetivos: el color,
la tipografía y las imágenes son aspectos clave para el diseño y establecen
claramente un valor para el usuario (por ejemplo, la elección de una paleta de
color condicionará las sensaciones que experimentará el usuario; el uso cada
vez más extendido de estándares y CSS han reducido el espectro de tipografías disponibles para la web y las diferencias entre éstas se han difuminado
haciendo compleja su diferenciación).
En lo que se refiere a la evaluación de la usabilidad de las páginas Web, de
forma global y atendiendo a todos los aspectos analizados anteriormente, el
64% de los encuestados considera que las páginas presentan una buena Usabilidad.
La url que mejores resultados de Usabilidad obtuvo dentro del grupo de
las universidades fue la página de la Universidad de Alcalá, tanto en su página principal, como en la Facultad de Documentación y la web de su Biblioteca.
Obtienen buenas puntuaciones las páginas de grandes empresas como Inditext, CINTRA, y Ferrovial, de enseñanza Atutor, y las de diferentes temáticas
como la web de ocio Observatorio de la Bicicleta de San Sebastián y las páginas
del Ayuntamiento de Madrid y la Comunitat Valenciana.
Respecto al test de evaluación de Accesibilidad, el 42% de los colaboradores consideró que la accesibilidad de las páginas web era suficiente si se
valoraban globalmente todos los aspectos anteriores.
En el estudio pormenorizado de cada url, destacaron entre las páginas
con mayor accesibilidad dentro del grupo de las universidades la página de la
Universidad de Alcalá, tanto en su página principal, como la Facultad de Documentación y la web de la Biblioteca. En el resto de páginas web analizadas
destaca la página del Ayuntamiento de Madrid, la Consultora Everis y la web
de la Unión Hotelera de Asturias.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Para el resto de las páginas web estudiadas sería recomendable aumentar
las ayudas a la navegación y a la accesibilidad enmendando los errores obtenidos en los tests de Accesibilidad para favorecerles el acceso a las personas discapacitadas.
Análisis Descriptivo
En primer lugar se realiza un breve análisis descriptivo consistente en calcular las frecuencias relativas de respuesta para cada una de las preguntas, así
como las correlaciones existentes entre ellas.
Tabla 22. Preguntas del Test de Accesibilidad
1
2
3
4
Accesibilidad
Al desactivar en el navegador las hojas de estilo, la información que aparece es igual que cuando
éstas se encuentran activas (no se pierde información).
Descarga el programa aDesigner de IBM y realiza los test para personas ciegas (blind) y de baja
visión (low vision). La página obtiene unas buenas puntuaciones.
Tanto HTML como CSS siguen los estándares de diseño, respetando además la separación de la
información y la apariencia.
Al evaluar la accesibilidad con la herramienta TAW, se obtienen buenas puntuaciones; y si se
presentan fallos éstos no afectan gravemente a la accesibilidad.
5
Haciendo uso de las herramientas de cambio de tamaño de fuente del navegador, se amplía o
disminuye el tamaño de las letras como si se tratase de una lupa. La página mantiene la coherencia y se puede ver la información de modo similar (la página no se deforma).
6
La página dispone de un buen número de elementos que facilitan la accesibilidad: cambio de
tamaño de la fuente, cambio de apariencia de la página, enlaces internos para facilitar la navegación, teclas rápidas, etcétera.
7
Si se emplea Lynx (navegador en modo texto), se puede acceder a toda la información de la página y a todos los elementos no textuales.
Siguiendo con el navegador Lynx (modo texto) y con su navegación secuencial. La página cuenta
con suficientes enlaces internos que facilitan el salto entre secciones de la misma.
Una vez realizadas las pruebas anteriores, en general, considero que la página tiene un nivel de
accesibilidad suficiente.
8
9
10
Utilizando un sintetizador de voz como el IBM Home Page Reader e impidiendo la visión de la
página (por ejemplo, apagando el monitor), la información a la que se accede no presenta variaciones respecto a aquella que aparece sin emplear esta herramienta.
Tabla 23. Preguntas del Test de Usabilidad
Usabilidad
1
Al navegar por la página se diferencia claramente la profundidad del árbol de navegación y la
información a la que se va a poder acceder.
2
El número de pasos requeridos para acceder a la información es alto, por lo que la navegación
es tediosa.
3
En general, considero que la usabilidad de esta página es buena.
85
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
4
5
6
7
8
9
10
Existen ayudas a la navegación y éstas son útiles y suficientes.
Existen elementos en la Página que dificultan la navegación o el sistema de navegación es difícil
de utilizar.
Hay elementos que me distraen al estar navegando.
La legibilidad de la información me parece adecuada.
Las secciones de las que consta la página, menú, cabecera, etcétera, están claramente definidas, de modo que queda claro a qué sección pertenece cada elemento de la página.
Los enlaces tienen un nombre que se corresponde con el contenido de la página a la que van
dirigidos y cumplen las expectativas de lo que esperaba encontrar.
Al emplear diferentes navegadores, por ejemplo Opera, Firefox o Internet Explorer (u otros diferentes, indicando cuáles en los comentarios), la apariencia y funcionalidad de la página es
similar en todos ellos.
A continuación se muestran las matrices de correlación univariante que
pretenden revelar la posible analogía entre las preguntas realizadas, lo que
permite conocer si existe alguna relación entre ellas; de modo que una tendencia en las respuestas a una pregunta concreta pueda implicar una tendencia directa o indirecta en otra de las preguntas. Obsérvese, sin embargo, que
en un adecuado diseño de cuestionario, la posible existencia de correlación
entre dos preguntas no permite aconsejar necesariamente la eliminación de
una de ellas, ya que dicha pregunta puede emplearse como contraste para la
consistencia en las respuestas del usuario.
Tabla 24
Accesibilidad
1
86
1
2
1
0,3345 0,2686 0,3943 0,2078
3
4
5
6
7
8
9
10
0,2051
0,4351
0,4131
0,4413
0,4191
0,6865
0,5392
0,3506 0,6212
0,4129
2
0,3345 1
0,4706
0,5952
0,1572
0,3844 0,5009 0,4245
3
0,2686 0,4706
1
0,6449
0,1589
0,4795
0,4076
4
0,3943 0,5952
0,6449
1
0,1832
0,5065 0,5415
0,4967
0,742
0,5508
5
0,2078
0,1589
0,1832
1
0,2418
0,1776
0,2717
0,1753
0,1572
0,2153
6
0,2051
0,3844 0,4795
0,5065 0,2418
1
0,3839
0,3943 0,5871
0,4273
7
0,4351
0,5009 0,4076
0,5415
0,3839
1
0,6794
0,5608
0,2153
0,6672
8
0,4131
0,4245
0,3506 0,4967
0,1776
0,3943 0,6794
1
0,5537
0,4897
9
10
0,4413
0,4191
0,6865
0,5392
0,6212
0,4129
0,2717
0,1753
0,5871
0,4273
0,5537
0,4897
1
0,707
0,707
1
0,742
0,5508
0,6672
0,5608
Las cifras de correlación indican una relación positiva entra las preguntas
de accesibilidad, ya que las cuestiones se hacen sobre aspectos con algún tipo de
relación con la accesibilidad. Este hecho se puede constatar especialmente en
la pregunta 9, que evalúa la impresión general del encuestado sobre la accesibilidad. Naturalmente la relación con el resto de las preguntas es alta, ya que
su respuesta implica a las demás. También hay otras preguntas como la 2, 4
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
ó 7 que tienen un nivel elevado de correlación con las demás. Esto es debido
a que el test aplicado a las páginas incluye la evaluación con programas especiales para el estudio de la accesibilidad, por lo que el resultado es en muchos
aspectos similar.
Tabla 25
Usabilidad
1
1
1
2
3
-0,246
0,6319
4
5
-0,3121 -0,1878 0,4955
6
7
0,5489 -0,2523 -0,1455 0,318
0,3924
8
9
10
0,4452
0,3666
0,2706
2
-0,246
1
3
0,6319
-0,3121 1
0,6026 -0,2341 -0,2402 0,5367 0,6189
-0,1625 -0,2514 -0,1793 -0,0852
0,3891
0,3839
4
0,5489
-0,1878 0,6026
1
0,3127
0,3181
-0,1623 -0,1376 0,2499 0,3966
5
-0,2523 0,4955
-0,2341 -0,1623 1
0,4815
-0,135
6
-0,1455 0,3924
-0,2402 -0,1376 0,4815
1
-0,1535 -0,1421 -0,1113 -0,1434
7
0,318
-0,1625 0,5367
0,2499
-0,135
-0,171
-0,1535 1
0,524
-0,1421 0,524
1
8
0,4452
-0,2514 0,6189
0,3966 -0,171
9
0,3666
-0,1793 0,3891
0,3127
-0,1857 -0,1113
10 0,2706
-0,0852 0,3839
0,3181
-0,1403 -0,1434 0,2537 0,334
0,3899 0,4177
-0,1857 -0,1403
0,3899
0,2537
0,4177
0,334
1
0,3181
0,3181
1
La correlación de la matriz indica la presencia de relaciones negativas
entre las preguntas, en concreto las preguntas 2, 5 y 6. Esto es debido a la
naturaleza de estas preguntas, ya que lo más positivo para la usabilidad es
contestarlas negativamente (1 es mejor que 5). La pregunta número 3 implica
un mayor grado de relación con el resto de las preguntas, puesto que se trata
de una evaluación subjetiva de la usabilidad, que no es otra cosa que un resumen subjetivo del resto de las preguntas del test.
Para concluir este primer análisis, la Tabla 26 presenta la matriz de correlación de los resultados de ambos tests, relacionando cada una de las
preguntas del test de usabilidad con las del de accesibilidad. La matriz de
correlación entre ambos tests muestra una tendencia positiva entre ambos,
al ser positivos la mayoría de los coeficientes de correlación. En el caso de
las preguntas 2, 5 y 6 de usabilidad, como se ha indicado en la correlación
univariante de usabilidad, hay que tener en cuenta que las respuestas están
invertidas a la hora de considerar los resultados. Es especialmente importante la correlación de 0,528 entre la pregunta 9 de accesibilidad y la pregunta
3 de usabilidad. En ambas preguntas se interroga a los encuestados sobre la
impresión general de la accesibilidad y la usabilidad, de modo que se puede
inferir una cierta correlación positiva entre ambos conceptos.
87
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
Tabla 26
Usabilidad
Accesibilidad
1
1
0,200
2
3
-0,120 0,242
4
0,239
5
6
7
-0,116 -0,028 0,119
8
9
10
0,239
0,195
0,274
2
0,332
-0,138 0,406
0,368
-0,140 -0,121 0,283
0,228
0,181
0,209
3
0,275
-0,140 0,333
0,287
-0,084 -0,104 0,201
0,175
0,176
0,218
4
0,292
-0,152 0,425
0,353
-0,114 -0,064 0,253
0,300
0,191
0,275
5
0,134
-0,015 0,174
0,135
-0,044 -0,082 0,073
0,058
0,070
0,208
6
0,273
-0,081 0,359
0,376
-0,089 -0,113 0,228
0,172
0,127
0,148
7
0,321
-0,174 0,416
0,370
-0,189 -0,136 0,292
0,311
0,179
0,282
8
0,321
-0,177 0,375
0,365
-0,195 -0,073 0,264
0,316
0,205
0,297
9
0,392
-0,162 0,528
0,438
-0,183 -0,169 0,366
0,345
0,234
0,318
10
0,314
-0,113 0,426
0,317
-0,196 -0,071 0,317
0,298
0,174
0,232
Relación entre Accesibilidad y Usabilidad
En las siguientes líneas se tratará de analizar las posibles relaciones entre accesibilidad y usabilidad web, conceptos que han sido definidos anteriormente. Los análisis que se realizarán en esta sección se hacen desde una perspectiva no lineal, una alternativa aconsejable por tres motivos: i) complementan
las relacciones lineales encontradas anteriormente, ii) empleamos datos discretos, por lo que no es aplicable el modelo de regresión lineal clásico, y iii)
las posibles relaciones entre las variables son plausiblemente no lineales, habida cuenta de que se trata de datos subjetivos.
Para realizar estos análisis se emplearán dos métodos bien conocidos, uno
paramétrico (el modelo logit) y otro no paramétrico (los árboles de regresión
y clasificación); por el citado motivo, realizamos sólo una breve descripción
de cada uno de ellos.
Modelo logit
88
Cuando la variable de respuesta en un determinado problema es de tipo cualitativo, como en el caso que nos ocupa, las técnicas habituales de regresión
lineal resultan deficientes: ineficiencia de los estimadores mínimos cuadráticos, heterocedasticidad en las innovaciones, respuestas superiores a la unidad, etcétera. Una alternativa consiste en formular el modelo de manera que
la función de respuesta sea de tipo no lineal en los atributos, de modo que se
asegure que esté entre cero y uno. Sin duda, los modelos más habituales que
incorporan esta idea son los modelos logit (Cornfield, 1962).
Si se denota por Y la variable a predecir (entre cero y uno, en este caso, tras
escalar los datos dividiendo por 5 la puntuación obtenida en la respuesta), por
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
el vector de variables explicativas y por pi = Prob{Yi =1}, un modelo logit
asume una relación del tipo,
X
siendo F la función logística:
de forma que para cualquier valor de x el valor de y estará siempre entre cero
y uno.
La segunda fase consiste en la estimación del modelo; es decir, la elección
de los parámetros que indexan la función y que son óptimos bajo algún criterio. Generalmente se emplea un criterio de maximizar el logaritmo de la
función de verosimilitud:
La maximización de esta función puede ser realizada empleando diferentes técnicas; la más utilizada consiste en calcular las derivadas primera y segunda respecto de los parámetros y aplicar después algún algoritmo basado
en el descenso por gradiente, como el de Newton-Raphson o sus derivados.
En general, los modelos Logit proporcionan mejores resultados que el Análisis Discriminante, y resultados muy competitivos con otros métodos no paramétricos mucho más sofisticados como las Redes Neuronales Artificiales.
Arboles de regresión y clasificación
Los árboles de regresión y clasificación (Breiman et al., 1984), pertenecen a un
rico conjunto de procedimientos no paramétricos entre los que se encuetran
muchos otros como los estimadores de núcleo (Parzen, 1962), “Projection
pursuit regression” (Friedman y Stuetzle, 1981), splines de regresión adaptativa
multivariante (Friedman, 1991) o las redes neuronales artificiales (White, 1992).
Para construir un árbol de regresión y clasificación partimos de un universo
formado por objetos descritos por una serie finita de características discretas
89
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 61-103
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o atributos. Cada uno de estos objetos se supone perteneciente a una sola clase. Estas clases resumen los atributos de los objetos y su número es finito. Los
objetos para los que conocemos su adscripción a una clase determinada constituyen el conjunto de aprendizaje. Se supone, además, una propiedad de consistencia para el conjunto de aprendizaje: dos objetos con idénticos valores para
cada uno de sus atributos pertenecen a la misma clase. En otro caso se dice que
los objetos son inadecuados para la tarea de inducción. El problema consiste
entonces en generar un árbol de decisión basado en el conjunto de aprendizaje,
de manera que permita clasificar la totalidad de los objetos del universo.
Los nodos en los cuales se realiza un contraste se denominan nodos de
contraste; la estructura generada por un cierto nodo de contraste es un sub-árbol. Aquellos nodos terminales (en los cuales no se realiza ningún contraste)
son denominados hojas del árbol. Idealmente se trata de construir un árbol
poco ramificado, en el que las hojas sólo contengan elementos de una misma
clase. La construcción de árboles de decisión comprende dos etapas: la generación de un árbol capaz de clasificar correctamente todos los ejemplos presentados y la simplificación de éste para aumentar su capacidad predictiva.
La etapa de formación del árbol de decisión consiste en la aplicación sucesiva de ciertos contrastes para el conjunto de aprendizaje. Supongamos que
disponemos de un conjunto de ejemplos pertenecientes a diferentes clases, o
si se prefiere, de un conjunto de instancias de ciertos conceptos. Este conjunto de ejemplos se somete a un contraste sobre uno de sus atributos, por ejemplo: si el valor para un atributo excede de una determinada cantidad y es inferior a otra. Cada contraste induce una partición en el conjunto de ejemplos
de aprendizaje, de forma que los ejemplos que verifican un cierto contraste
son, respecto del mismo, más homogéneos que el grupo original. En general,
sin embargo, el grupo que lo verifica constará de elementos de las diferentes
clases, por lo que el proceso ha de repetirse con un nuevo contraste hasta que
cada uno de los grupos sólo contenga elementos de la misma clase. Cuando
esto suceda, el proceso se detiene y se pasa a la etapa de simplificación del
árbol, que se describirá en el siguiente apartado.
Sin que suponga pérdida de generalidad, puede suponerse que hay sólo
dos clases de objetos: P (positiva) y N (negativa). Sean n y p el número de objetos del conjunto de entrenamiento en cada una de las clases. En términos
de Teoría de la Información, un árbol de decisión puede ser visto como una
fuente de información que, dado un caso, genera un mensaje consistente en
la clasificación de dicho caso. La hipótesis de partida supone, por tanto, que
frente al problema de clasificar un objeto, el árbol generado a partir de tal
conjunto, producirá un mensaje P o N proporcional a la representación de P y
N en el conjunto de entrenamiento C.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
La información necesaria para generar este mensaje será:
Si el atributo A con valores {A1,A2,...,Av} es el utilizado para clasificar, producirá las particiones {C1,C2,...,Cv} en C, de forma que Ci estará constituida por
los objetos en C con valor Ai para el atributo A. Si Ci contiene pi objetos de la
clase P y ni objetos de la clase N, la información requerida para este sub-árbol
será, al igual que antes I(pi,ni). Por tanto, la información requerida por el árbol para la partición generada por A será:
y la ganancia de información:
La regla de actuación para la creación de un árbol consiste entonces en
elegir, en cada iteración, el atributo que induce una partición con máxima
ganancia de información o, dicho de otro modo, el atributo que produce grupos más homogéneos. Ocurre, sin embargo, que el anterior criterio (maximización de la información) introduce un sesgo no deseable en los árboles generados, al favorecer la elección de criterios con muchos valores. Esto implica,
por ejemplo, que un atributo con valores aleatorios es el de mayor contenido informativo, algo en contra de la propia intuición. Una posible solución
consistiría en imponer una partición con sólo dos posibles resultados en la
forma {Aj}, {A1,A2,...,Aj-1,Aj+1,...,Av}. Dos son los principales problemas de este
enfoque: por una parte, sus elevados requisitos computacionales (para v valores de un atributo se pueden formar 2v-1-1 formas de división binaria); y por
otra, la menor interpretabilidad de los árboles generados. Alternativamente,
Quinlan (1986) propone otra posible modificación, que es la aquí empleada
para generar los árboles; el valor de un atributo A es:
91
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92
puesto que, idealmente, la mayor parte posible de la información generada
al determinar el valor de A debe ser útil para la clasificación, el nuevo criterio
consiste en maximizar el ratio:
Resultados obtenidos con el modelo Logit
En las siguientes tablas se muestran los resultados de aplicar la regresión logit
a las preguntas de accesibilidad y usabilidad. En color naranja se muestran
los coeficientes significativos negativos, y en verde los significativos positivos.
Relación entre Accesibilidad y Usabilidad
En este apartado se trata de determinar si el grado de usabilidad valorado por los
usuarios afecta a su percepción sobre la accesibilidad de la página evaluada. Para
ello se construyen diversos modelos logit univariantes en los que la variable dependiente es cada una de las preguntas de accesibilidad, y la variable independiente cada una de las preguntas de usabilidad; es decir, se estiman modelos del tipo:
Obsérvese que, en la medida en que se encuentre un coeficiente  j positivo y significativamente distinto de cero, puede afirmarse que cierto aspecto
de usabilidad valorado en la pregunta i correspondiente incrementa el aspecto de accesibilidad j valorado también en la pregunta correspondiente.
En la Tabla 27 (página derecha) se muestran los resultados de la regresión logística univariante obtenida, y se muestran además de los coeficientes
estimados el valor de los errores estándar que permiten analizar la significatividad de aquéllos. Se señalan en verde los casos en los que se encuentra un
valor del coeficiente positivo y significativamente distinto de cero, y en naranja los coeficientes con un valor negativo y también significativamente distintos de cero. Como se puede observar, las preguntas de accesibilidad se ven
afectadas, en general, de forma directa por todas las preguntas de usabilidad
con enunciado directo, y de forma inversa por las preguntas de usabilidad con
enunciado inverso. La pregunta 5 de accesibilidad es la que menos se ve afectada por los cambios en la usabilidad y las preguntas de usabilidad que menos
afectan a las de accesibilidad son la 6 y la 9.
Tabla 27
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
93
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Con el fin de evaluar la posible existencia de preguntas relativas a usabilidad que inciden particularmente en la valoración del grado de accesibilidad
percibido por los usuarios, en la Figura 1 se dibujan, para cada una de las
preguntas de accesibilidad el valor del coeficiente b obtenido en la regresión
frente a cada una de las preguntas de usabilidad. En el gráfico se puede observar cómo este coeficiente evoluciona de forma muy similar a lo largo de
todas las preguntas de accesibilidad para todas las preguntas de usabilidad,
salvo la pregunta 5 que se mueve en unos valores cercanos a cero constantemente, por lo que se aprecia nuevamente la falta de relación de la usabilidad
de la página con esta pregunta.
Fig. 1
Relación entre Usabilidad y Accesibilidad
A continuación se realiza un análisis simétrico al anterior, en el que se trata
de comprobar la relación existente entre el grado de usabilidad percibido por
el usuario y el grado de accesibilidad. Para ello, los modelos estimados ahora
son del tipo:
94
Se puede observar que las preguntas 1, 3, 4, 7, 8, 9, 10 de usabilidad se ven
afectadas de forma directa por todas las preguntas de accesibilidad, salvo la
5, que en general no afecta ni positiva ni negativamente a la usabilidad. Las
preguntas 2 y 5 de usabilidad se ven afectadas de forma inversa por casi todas
las preguntas de accesibilidad (salvo la 2, 5 y 6 de accesibilidad que no afectan a la 2 de usabilidad y la 3, la 5 y la 6 de accesibilidad que no afectan a la 5
Tabla 28
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
95
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de usabilidad). Esto tiene sentido, ya que estas preguntas tienen un enunciado inverso; es decir, una mayor puntuación en estas preguntas implica una
peor usabilidad. La pregunta 6 de usabilidad apenas se ve afectada por ninguna de accesibilidad y la única que lo hace (la 9 de accesibilidad) lo hace de
forma inversa.
Fig. 2
De manera similar al caso anterior, en la Figura 2 se muestra el valor de los
coeficientes correspondientes para cada una de las preguntas. En este caso,
podemos ver que el comportamiento del coeficiente es mucho más heterogéneo, aunque sigue habiendo un grupo de preguntas que evolucionan de forma más o menos similar. Por otro lado, existe otro grupo de tres preguntas
que se comporta de forma contraria al anterior y resultan ser las preguntas
con enunciado inverso, cosa que era de esperar. A la altura de la pregunta 5 se
observa un acercamiento al cero del coeficiente, cosa que es consistente con el
hecho de que esta pregunta no tenga efecto sobre la usabilidad de la página.
Resultados obtenidos con los Árboles de Regresión
Preguntas de Accesibilidad
96
En la Figura 3 se pueden ver los árboles de clasificacion obtenidos para cada una de las respuestas de accesibilidad a partir de los datos de entrada de
las respuestas de usabilidad. Por motivos de claridad se muestra una versión
reducida de cada árbol, tras producir una poda de los nodos menos significativos. En dichos árboles se puede ver cómo las preguntas más relevantes de
accesibilidad para las preguntas de usabilidad son la número 3 y la número 4,
relacionadas con la opinión general de la usabilidad de los encuestados y con
las ayudas a la navegación. Si la puntuación en estas preguntas es positiva, se
suele tener una calificación mayor en accesibilidad. También destacan la pregunta 9 y 10, sobre todo en los segundos niveles de decisión.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Fig. 3
97
Fig. 4
98
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ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
Preguntas de Usabilidad
En las imágenes de la página izquierda se pueden ver los árboles de clasificación obtenidos para cada una de las respuestas de usabilidad a partir de los
datos de entrada de las respuestas de accesibilidad. Por motivos de claridad,
se muestra una versión reducida de cada árbol. Las preguntas de accesibilidad que más condicionan la usabilidad, a juzgar por los árboles de clasificación obtenidos, son la 1 y 9 en primera instancia. Son preguntas referidas
a la prueba con hojas de estilo de las páginas y la opinión general de la accesibilidad de la página. Se puede ver cómo una vez más la opinión general de
los encuestados sobre la accesibilidad (9 del test de accesibilidad) y sobre la
usabilidad (3 del test de usabilidad), implica una mayor tendencia a que la
página tenga unas mejores puntuaciones en cuanto a usabilidad y a accesibilidad, respectivamente.
Conclusiones
En el presente capítulo se han realizado diversos análisis con el fin de evaluar
el grado de accesibilidad de un número representativo de páginas web heterogéneas, así como la posible existencia de relaciones entre accesibilidad y
usabilidad.
El primer acercamiento a la accesibilidad web española actual vislumbra
que los sitios web en España, aún no son todo lo accesible que deberían para
el público en general, pero en particular para personas con discapacidad, debido a que no se consideran y/o verifican algunos de los criterios de accesibilidad necesarios para dotar de eficiencia y calidad sus contenidos y continentes. Este hecho vulnera uno de los derechos fundamentales del ser humano,
el derecho a la información.
Las herramientas manuales son un método automático, rápido y oportuno; pero para conocer el grado de cumplimiento real de las recomendaciones
de diseño, en aras de solventar la problemática manifiesta, es necesario complementarlo con el juicio personal de un experto.
Por ello, el análisis efectuado incorporó, además de la evaluación automática con TAW, el empleo de cuestionarios con preguntas referidas a usabilidad
y accesibilidad destinados a usuarios especializados (alumnos de último curso
de Ingeniería en Informática, a quienes se les presupone un conocimiento elevado sobre páginas web, accesibilidad y usabilidad; puesto que cursan la asignatura Diseño de Aplicaciones Web), en donde combinan métodos automáticos con manuales. En esta ocasión, se evaluaron 46 páginas web seleccionadas
99
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100
de forma aleatoria dentro de un grupo heterogéneo9 compuesto por: universidades, grandes empresas, ayuntamientos, colegios oficiales, comunidades
autónomas y páginas de ocio (ciclismo). En el análisis manual, los expertos
encargados de la evaluación cumplimentaron los cuestionarios, basándose en
los criterios de accesibilidad y en su profesionalidad, aportaron su opinión e
incluyeron los comentarios que consideraron oportunos.
Los resultados obtenidos, tras el estudio pormenorizado de las puntuaciones para cada url, manifiestan, de forma general, buenas puntuaciones de
Usabilidad (de forma global y atendiendo a todos los aspectos analizados, el
64% así lo consideran), ya que prácticamente todas tienen una buena navegabilidad y facilidad de acceso a los contenidos. Adicionalmente, en el tema de
Accesibilidad, se observa que la mayoría de las páginas obtienen una menor
puntuación (el 42% de los encuestados). Esta diferencia se debe a que los
errores de accesibilidad son más difíciles de detectar a simple vista, ya que se
necesitan programas específicos para revelarlos, como hemos visto a lo largo
del cuestionario.
Este fenómeno presumiblemente responde a factores puramente comerciales; que una web o incluso un software sea accesible es un aspecto técnico,
generalmente poco valorado por el cliente final medio a la hora de adquirirlo
o utilizarlo. Hasta ahora la accesibilidad ha venido impuesta por ley y no por
la demanda del mercado, aunque esto está cambiando progresivamente.
Además de la evaluación de la accesibilidad de diferentes páginas web,
se analizó su relación con los aspectos de usabilidad, empleando el mismo
cuestionario, de elaboración propia, que fue circulado entre usuarios especializados. En general los resultados muestran una pequeña relación directa
entre usabilidad y accesibilidad, de manera que un incremento en el grado
de accesibilidad conlleva también un incremento en el grado de usabilidad y
viceversa. Esta conclusión es de una importancia considerable para el diseño
de páginas web y muestra, en particular, que un diseño accesible no sólo es
compatible sino que favorece la usabilidad percibida por los usuarios que no
presentan ninguna discapacidad.
Como resultado derivado se ha encontrado que los cuestionarios de usabilidad y accesibilidad, aún cuando vayan destinados a usuarios especializados, muestran algunas deficiencias a la hora de medir de una manera precisa
el nivel de ambos aspectos. En particular, se ha encontrado que algunos aspectos básicos de usabilidad están directamente relacionados, lo que conlleva cierta duplicidad en las preguntas, que se manifiesta en un elevado grado
9
La heterogeneidad vino determinada por el objetivo de reflejar los servicios más demandados
y utilizados por los usuarios a través de Internet.
ACCESIBILIDAD VS USABILIDAD WEB: EVALUACIÓN Y CORRELACIÓN
de correlación en las respuestas. Adicionalmente se ha argumentado que los
conceptos de accesibilidad y usabilidad son frecuentemente mal interpretados por los usuarios, lo que puede conllevar que se encuentren algunas relaciones espurias entre accesibilidad y usabilidad.
Estas deficiencias en los cuestionarios sugieren plantear una propuesta
metodológica en el diseño de cuestionarios exhaustivos dirigidos a expertos
en el ámbito en cuestión, que permita obtener resultados mucho más definitivos y fidedignos en cuanto al grado de accesibilidad de los sitios web. Esta
métrica debería ser más exhaustiva, ya que debería introducir las pautas que
contempla la WAI, precisa y carente de ambigüedad en cuanto a la formulación de sus variables y la tabulación de sus respuestas.
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103
Cuadro de Mando Integral (Balanced Scorecard) para la gestión bibliotecaria: pautas para
una aplicación
Edith Carmen Muñoz *
Artículo recibido:
4 de agosto de 2009.
Artículo aceptado:
12 de agosto de 2009.
Resumen
Se exponen aspectos relacionados con el control estratégico de gestión en Unidades de Información por
medio de la herramienta Balanced Scorecard o cuadro
de mando integral, herramienta que permite mejorar
substancialmente la gestión bibliotecaria. El estudio
empieza con los antecedentes y los principales fundamentos de la herramienta, así el lector podrá entender
sobre qué trata realmente, por qué es necesario utilizarla y cuál es su alcance. El estudio también presenta en forma ordenada y con ejemplos, cómo construir
gradualmente su metodología de implementación, y finalmente plantea su propuesta de cómo diseñar y aplicar esta herramienta en las Unidades de Información a
través de una serie de pasos para su desarrollo.
*
Biblioteca de la Facultad de Enfermería, Universidad Peruana Cayetano Heredia
(Lima, Perú). E-mail: [email protected]
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 105-126
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 105-126
Palabras clave: Rendimiento – Medición; Planificación estratégica; Efectividad organizacional
– Medición; Administración de bibliotecas; Bibliotecas especializadas; Bibliotecas universitarias; Bibliotecas médicas; Perú.
Abstract
Balanced Scorecard for the Library Management:
Guidelines for Application
Edith Carmen Muñoz
Some aspects of strategic control for information units
based on the Balanced Scorecard, a tool which improves the library management, are shown. Antecedents of this tool are revealed so the reader can understand the need and scope of the use of the Balanced
Scorecard. Then the research presents orderly and
with examples how to gradually build the implementation methodology. Finally the design and implementation of the balanced scorecard is suggested with easyto-follow steps.
Keywords: Output Measurement; Strategic Planning; Organizational Effectivity – Measurement;
Library Administration; Specialized Libraries;
University Libraries; Medical Libraries; Peru.
Introducción
L
106
os usuarios de las Unidades de Información son cada vez más exigentes
en sus demandas, en tanto que están inmersos en una sociedad altamente influiada por la tecnología de la información y el conocimiento. En este
sentido ya no es conveniente brindar un servicio tradicional, sino innovar en
la gestión bibliotecaria; es decir, incorporar nuevas herramientas de gestión
que reflejen la adopción de principios empresariales.
Mejorar el desempeño laboral en información, ya sea como líder o como
miembro del equipo de trabajo de una Unidad de Información, implica para
el profesional, construir criterios sólidos en su formación y apoyarse en las bases conceptuales de la administración, lo cual, a su vez, logrará un trabajo más
eficiente. De esta manera, mejorar la calidad de los servicios de información
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
y la satisfacción de las necesidades y expectativas de los usuarios se obtiene
elevando el nivel de la gestión bibliotecaria y este interés generará valor agregado. En suma, para tener éxito en el desempeño para con los usuarios no
debería actuarse improvisadamente, sino más bien anticiparse a los hechos.
La administración en términos generales se ocupa de obtener determinados objetivos en un tiempo planificado y haciendo un uso eficiente de los recursos. Recordemos que el proceso o ciclo administrativo comprende cuatro
elementos: planificación, organización, dirección y control. Aunque sea satisfactorio el trabajo de los tres primeros procesos administrativos—planificación, organización y dirección— todo será en vano si no se aplica también eficazmente la información sobre el control. Para Stoner (1996: 610), “el control
administrativo es el proceso que permite garantizar que las actividades reales
se ajusten a las actividades proyectadas. De hecho, el control está mucho más
generalizado que la planificación. El control sirve a los gerentes para monitorear la eficacia de sus actividades de planificación, organización y dirección”.
El término control puede ser definido con base en dos perspectivas,
una limitada y una amplia. La primera, es empleada con mayor frecuencia
—perspectiva limitada— y verifica los resultados con los objetivos planteados, además de hacer las correcciones y ajustes necesarios a medida que se
progresa. Pero desde una perspectiva amplia, el control de gestión según Cabrera (2005:4)
es concebido como una actividad no sólo a nivel directivo, sino de todos los niveles y miembros de la entidad, orientando a la organización hacia el cumplimiento
de los objetivos propuestos bajo mecanismos de medición cualitativos y cuantitativos. Este enfoque hace énfasis en los factores sociales y culturales presentes en el
contexto institucional, ya que parte del principio que es el propio comportamiento individual quien define en última instancia la eficacia de los métodos de control
elegidos en la dinámica de gestión.
La misma autora menciona que existen tres procesos metodológicos para desarrollar el sistema de control de gestión: un diagnóstico institucional,
referido a conocer cómo se encuentra el sistema institucional; una identificación de los procesos clave para el éxito organizacional, y un diseño de sistema de indicadores.
Los autores Mintzberg, Quinn y Voyer (1997:291) definen el término de
otro modo:
El control estratégico tiene que ver con la necesidad de las organizaciones por mantenerse en su rumbo estratégico: asegurando que se realice la estrategia propuesta,
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que sea implantada debidamente con los recursos que le fueron asignados... En
otras palabras, el control estratégico debe evaluar, tanto el comportamiento como
el desempeño.
De ahí que partamos de la necesidad que tienen las Unidades de Información para dirigir su estrategia en aras de cumplir los objetivos estratégicos
deseados, detectar desviaciones y entablar las acciones correctivas necesarias
para apoyar así las áreas claves, tangibles e intangibles que permitan tomar
las acciones previsoras del futuro e incidan en la creación de valor. Todo esto
exige el empleo de herramientas de gestión que nos ayuden a mejorar el nivel
de la gestión bibliotecaria. El presente trabajo está orientado a desarrollar el
control desde una perspectiva amplia, y en un nivel de gestión estratégico, para lo cual utilizamos el Cuadro de Mando Integral (Balanced Scorecard BSC).
Del planteamiento anterior surge la siguiente pregunta: ¿Por qué habría
de implementar el CMI (BSC) en las Unidades de Información en lugar de otras
herramientas de gestión? La respuesta será abordada más adelante.
A continuación se reconoce al CMI (BSC) como elemento prioritario para
obtener un mejor resultado y elevar la efectividad del desempeño organizacional.
Aproximaciones al cuadro de mando integral cmi (bsc)
del balanced scorecard
Robert S. Kaplan y David P. Norton, fueron quienes diseñaron el CMI (BSC) y
para evidenciar sus inicios, los autores sostuvieron en (1997:8) que:
…Las discusiones del grupo condujeron a una expansión del Cuadro de Mando,
hasta llegar a lo que nosotros etiquetamos como un “Cuadro de Mando Integral
(Balanced Scorecard)…. La conclusión del estudio, en diciembre de 1990, documentó la viabilidad y los beneficios resultantes de un sistema de medición tan
equilibrado. Resumimos los descubrimientos del grupo de estudio en un artículo,
El Cuadro de Mando Integral, Harvard Business Review (enero-febrero de 1992).
108
En 1990, los autores mencionados participaron de un estudio que consistía en desarrollar un nuevo modelo de medición, pues el enfoque centrado en
el aspecto financiero, que usaban la mayoría de las empresas, obstaculizaba
otros aspectos, no menos importantes, que afianzaban el equilibrio. Kaplan
y Norton examinaron varios casos y propusieron una variedad de ideas que
dieron como fruto lo que bautizaron como Cuadro de Mando Integral (BSC).
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
Desde ese momento muchas empresas del mundo han venido implementándolo como un sistema útil en el modelo de negocios, y que permite comunicar e implementar la estrategia que implica. Asimismo, el CMI se extendió
con éxito a otras instituciones educativas, como la Universidad de California. Según Kaplan y Norton (2001:28)
…la Universidad de California en San Diego, que estaba buscando formas de mejorar su productividad y la satisfacción de sus clientes en sus unidades de servicios
administrativos, como, por ejemplo, la biblioteca, la oficina de alojamiento estudiantil, los servicios policiales y la agencia de viajes. El vice rector Steven Relyea
introdujo el cuadro de mando en las 27 unidades de servicios administrativos en
1994. Los resultados fueron sorprendentes. El departamento de nóminas redujo
los errores en un 80 por ciento. El departamento financiero redujo el tiempo de
procesar los talones de devolución de gastos de seis semanas a tan solo tres días.
El innovador programa ha tenido un amplio reconocimiento, incluyendo en 1999
la Copa a la Calidad Educativa instituida por el Rochester Institute of Technology
/ USA Today.
Efectivamente, la implementación de este modelo también se está incrementando en la gestión estratégica de las Unidades de Información.
Cuadro de mando integral (cmi) en las unidades de información
Analizar el entorno que hoy enfrentan la mayoría de Unidades de Información constituye el punto de partida inevitable para implementar herramientas de administración moderna, siendo el CMI un poderoso sistema de control de gestión estratégica. De ahí que el autor García (2004:12) considera al
Cuadro de Mando Integral (BSC)
como instrumento de control y gestión basado en indicadores, [que] hacen de él
un modelo aplicable a las bibliotecas por el que éstas pueden lograr su orientación
al logro de resultados...
El mismo autor dice acerca del Cuadro de Mando Integral
(2004:35)
(CMI)
A pesar de ser un instrumento nacido en el ámbito empresarial, el Cuadro de Mando Integral ofrece a las bibliotecas un esquema global de funcionamiento basado
en indicadores, que sobrepasa su utilización como mera herramienta de control...
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El uso de esta herramienta se empieza a extender en forma progresiva en el
ámbito de la gestión bibliotecaria, es el caso de Europa, donde los resultados
han puesto en evidencia su contribución al desarrollo de esta gestión. De hecho,
aparece puesto de manifiesto en el 67th IFLA Council and General Conference
“Managing service quality with the Balanced Scorecard”, donde Roswitha Poll da
a conocer la experiencia de un proyecto alemán, patrocinado por el Consejo
Alemán de Investigación, para la Biblioteca Universitaria y Regional de Münster, la Biblioteca Estatal Bávara de Munich y la Biblioteca Estatal y Universitaria
de Bremen. El proyecto comenzó en junio de 1999 y se propuso utilizar el CMI
(BSC) como instrumento en el sistema de gestión para hacer una evaluación estratégica. Se adaptó el modelo del CMI a las condiciones de las mencionadas bibliotecas dándole preferencia a la perspectiva del usuario. Para mayores detalles
ingrese a la página web: http://www.ifla.org/IV/ifla67/papers/042-135e.pdf.
Otra experiencia interesante fue presentada por James Self (2003), quien
relata los resultados del primer año en el 2001, cuando implementa el CMI
en la Biblioteca de la Universidad de Virginia. Al finalizar el primer año, se
dieron cuenta cómo estaban haciendo su trabajo, en qué estaba bien y en qué
necesitaban mejorar. Esto quiere decir que el CMI identificó el nivel de desempeño de acuerdo con las cuatro perspectivas antes mencionadas y utilizando sólo 26 metrics durante el primer año.
Para hacer esta implantación debieron volver a examinar la misión y definir objetivos estratégicos para cada perspectiva. A ello debemos añadir que
es necesario asegurarse de que la misión denote claridad y entendimiento por
parte del personal de la Biblioteca. Se trataría de que cada individuo sepa
qué aporte le dará a la Biblioteca. Se buscaría que exista conexión entre el
compromiso del personal y la misión de la biblioteca. Es decir, la misión implicará que el personal se sienta comprometido.
Fue difícil para el personal emprender el cambio; sin embargo, esto mejoró con la sensibilización por medio de talleres, reuniones, comunicación vía
e-mail, información disponible en la Web, etcétera. El proceso de adaptación
fue en aumento, al darse cuenta de la utilidad de la herramienta.
Coincidimos con Self (2003) cuando señala que la parte más difícil es
seleccionar el metrics adecuado, pues exige incorporar metrics específicos,
medibles y equilibrados. En este contexto, seleccionar indicadores métricos
dependerá de los valores que definan a la Unidad de Información ¿deseamos
reducir costos, o deseamos crecer?, ¿queremos rapidez o calidad?. La Biblioteca de Virginia decidió ser más práctica al momento de seleccionar indicadores métricos y objetivos que signifiquen desafíos, pero no imposibles.
De todas los indicadores métricos deseamos destacar la que se refiere al
recurso humano, al cliente y al recurso financiero. En relación con el recurso
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
humano, el indicadores métricos sobre la necesidad de retener al personal de
alta calidad, según Self (2003), se refiere a aquellos que logran alcanzar una alta
calificación durante los tres últimos años. Pero no sólo debemos retener sino
atraer al personal clave, aunque eso depende, además de las condiciones salariales, de las motivaciones personales, la proyección profesional, el trato y
los tipos de reconocimientos que existan. Quiere decir esto que hay que saber
escuchar y personalizar nuestras propuestas según las necesidades del personal clave. El metrics II mide las actividades del servicio al cliente y se centra en
la capacidad, el conocimiento, la cortesía y la rapidez del personal de servicio.
Mientras que en cuanto a recursos financieros es necesario contar con suficientes de éstos para darle valor al buen uso. Self (2003) aconseja identificar
cuáles son las mayores demandas en cuanto a uso de recurso por parte del
cliente. Así señalamos invertir recursos en la medida en que exista demanda,
de lo contrario suele esto considerarse como nada provechoso, pese a conocer
su funcionamiento y su manejo. En suma, —a nuestro modo de ver— la inversión en los recursos no sirve si no se la utiliza.
Aplicar el CMI en la Biblioteca de la Universidad de Virginia ha generado cambios favorables en el modo de distribuir el grado de atención de cada
área. Es por esa razón que tratan de ver más allá del servicio al usuario, entendiendo que el éxito también depende del grado de atención en otras áreas
como finanzas, procesos y preocupación por el futuro, lo que indudablemente mejorará el servicio que les brindamos a nuestros usuarios. Así lo afirma
Self (2004:104)
…We now look beyond customer service, realizing that success in the other categories (finance, processes, the future) ultimately improves service to our customers.
El CMI convierte a la Biblioteca de la Universidad de Virginia en una organización que decide lo que es importante, y de este modo permite mejorar
el desarrollo organizacional. Finalmente, la Biblioteca de la Universidad de
Virginia facilita información exclusiva acerca de la implementación del CMI
en su página web: http://www2.lib.virginia.edu/bsc/index.html
El cuadro de mando integral y las perspectivas
El CMI consiste en analizar la organización en torno a cuatro perspectivas: finanzas, cliente, procesos internos y por último, innovación y aprendizaje. Significa que las cuatro perspectivas son referidas a diferentes visiones a partir de
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un campo de actuación, pero la integración de las cuatro perspectivas mantiene el equilibrio.
En este caso el punto de partida es el término “balanced”, (equilibrado o
balanceado) como explican los autores Kaplan y Norton (2001:8):
… El nombre refleja el equilibrio entre objetivos a corto y largo plazo, entre medidas financieras y no financieras, entre indicadores previsionales e históricos, y
entre perspectivas de actuaciones externas e internas…
Podríamos definir al CMI como un sistema de medida del rendimiento
que se deriva de la visión y la estrategia, y que refleja los aspectos más importantes de la organización. Por consiguiente, permitirá un monitoreo integral
por el hecho de que utiliza tanto indicadores financieros como no financieros, justamente estos últimos hacen que se reconozca su utilidad al gestionar
recursos intangibles, poco reconocidos y difícilmente evaluables.
Kaplan y Norton establecen las cuatro perspectivas ya mencionadas. La
lógica empleada proporciona respuestas a cuatro preguntas por cada perspectiva (ver Cuadro 1).
Perspectiva financiera
La perspectiva financiera está orientada a maximizar los beneficios y definir
los objetivos para animar a los dueños o accionistas a asegurarle fondos continuos a la organización, perspectiva que verifica el logro de los objetivos empresariales los cuales incluyen tres dimensiones fundamentales: rentabilidad,
crecimiento y valor del accionista.
Perspectiva del cliente
Se refiere al conjunto de actividades que generan valor y, por ende, aumentan
la capacidad competitiva de la empresa. Tales actividades permiten ver cómo
los clientes perciben el valor ofrecido, por lo que recompensarán a la organización con los resultados financieros que ésta espera obtener, pues la percepción depende de la habilidad para entregar valor y comunicar. También
constituyen la zona medular de una estrategia bien implementada, lo que verifica hasta qué punto los clientes son fieles y se encuentran satisfechos. Intervienen en esta perspectiva cuatro importantes dimensiones: tiempo, calidad,
desempeño y servicio del producto, y costo de la propiedad.
112
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
Cuadro 1
Fuente: Kaplan, Robert S. y David P. Norton. Cómo utilizar el cuadro de mando integral... Barcelona: Gestión. 2000, 2001, p. 87.
Perspectiva del proceso interno
En esta perspectiva se identifican los procesos críticos internos en los que la
organización debería ser excelente. Esto permite focalizar la entrega percibida de acuerdo con el objetivo del cliente, y analiza el proceso interno que
influye directamente en la satisfacción de éste. A menudo abarca tres dimensiones: tiempo de ciclo, calidad y productividad.
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Perspectiva de innovación y aprendizaje
Constituye la base que permitirá alcanzar los objetivos de las demás perspectivas del CMI. Las organizaciones deben invertir en la capacitación, potenciar
los sistemas y tecnologías de la información, y coordinar los procedimientos y
rutinas del trabajo de una forma más eficiente. Participan en esto tres dimensiones: innovación de mercado, aprendizaje y mejora operacional continua,
así como de activos intelectuales.
Metodología aplicada al nivel de las unidades de información
Como han explicado en el modelo original Kaplan y Norton, el CMI en las entidades empresariales se conceptualiza en cuatro perspectivas básicas: finanzas, cliente, procesos internos e innovación, y aprendizaje. En cambio en entidades no lucrativas —como las Unidades de Información— el orden varía,
pues estas instituciones buscan brindar un mejor servicio antes que obtener
rentabilidad. Así, para aplicar el CMI a las Unidades de Información, primero
se debe adecuar la lógica de las perspectivas en cuanto a: el cliente, las finanzas, los procesos internos y la innovación, y el aprendizaje. Así lo manifiestan
Kaplan y Norton (2001: 147):
La mayoría de las entidades no lucrativas y administraciones públicas tuvieron dificultades con la estructura original del cuadro de mando integral, en el que la
perspectiva financiera aparecía en la parte superior de la jerarquía. Dado que alcanzar el éxito financiero no es el objetivo primordial de la mayoría de estas organizaciones, la estructura se puede modificar para colocar a los clientes, a los
beneficiarios o a la sociedad en la parte más alta de la jerarquía.
114
Si bien es cierto que los autores del CMI desarrollaron cuatro perspectivas, también es valido que éstas pueden adaptarse o adicionarse más de cuatro según resulte efectivo para la institución. Matthews (2008) señala que es
la Biblioteca la que decide cuántas perspectivas utilizará y cómo se relacionarán entre sí. El mismo autor indica que es apropiado agregar una o más perspectivas en la medida en que se prospere el desarrollo de su propio cuadro
de mando; es decir, usar, ajustar y actualizar el cuadro de mando implica un
proceso continuo.
En cuanto a cuáles perspectivas podría considerar la biblioteca, Matthews
muestra varias opciones entre las cuales debo destacar: el acceso al recurso
impreso o electrónico suscrito por la institución o el acceso libre (perspectiva
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
de los recursos de información); los recursos económicos y de otro tipo que
le son provistos a la biblioteca (perspectiva financiera); el hecho de garantizar la disponibilidad tanto del personal capacitado como la infraestructura
de información (perspectiva de la preparación organizacional); el saber si el
personal le da el uso eficiente a las herramientas que se poseen (perspectiva
del proceso interno). Finalmente el autor concluye que disponer de personal capacitado, recursos de información relevante y procesos eficientes, dará
como resultado productos y servicios altamente valorados por el usuario de
biblioteca (perspectiva del usuario). Sin embargo esto se logrará si se identifican muy bien las necesidades de los usuarios y se seleccionan estrategias
adecuadas.
El CMI es una herramienta madre, pues por su metodología de escoger y
definir las perspectivas permite conjugarse con determinados equipos (kits),
siempre y cuando éstos aseguren las prioridades de la institución. Si una Unidad de Información busca garantizar la calidad de sus servicios y productos,
entonces es recomendable considerar la norma ISO. Es decir, el CMI utiliza
además otros modelos que le permiten consolidarse, dependiendo del perfil
de la Unidad de Información.
Desde los inicios del CMI su aplicación se ha ido ampliando y diversificando, de tal forma que destacados profesionales como Miyagi, Olivera, Shigyo,
entre otras personalidades, lo han implementado. Así por ejemplo Matthews
propone tres fases: diseño, implementación e integración. La fase del diseño empieza con el proceso inicial, donde se replantea la misión, los objetivos, y se articula la estrategia y se seleccionan indicadores de desempeño y se
identifican las iniciativas de los proyectos. En la fase de implementación, el
cuadro de mando le es comunicado a todo el personal a manera de que éste
interiorice el proceso. En la última fase, de integración, la biblioteca debe
analizar, identificar, plantear soluciones, destinar recursos e informar de los
logros.
Pese a consultar varios autores para el presente trabajo, ninguno emplea
la misma estructura. Por consiguiente aún no existe un consenso aceptado
universalmente sobre cuáles son los pasos a seguir. No obstante, el análisis
de los diferentes pasos que deben seguirse revela la existencia de varios aspectos recurrentes que son comunes a todos ellos. Por lo tanto, tomando como base los diversos autores ya referidos, se pueden proponer los siguientes
pasos para su implementación (ver el Cuadro 2 en página siguiente):
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Cuadro 2
Paso 1:
Paso 3:
Paso 5:
Paso 7:
Definir el
destino
estratégico
Identificar los
temas o áreas
claves
Seleccionar indicadores y metas
por perspectivas
Plan para la
Implementación
Paso 2:
Paso 4:
Paso 6:
Analizar los
procesos y
actividades de la
Unidad de
Información
Construir
el mapa
estratégico
Determinar
las acciones
estratégicas
1. Definir el destino estratégico. Recordemos que el centro del modelo
del BSC está en la misión: los valores, la visión y las estrategias establecidas. La Unidad de Información debe identificar estos tres conceptos
de forma consensuada dentro de la filosofía de vida de la Institución.
2. Analizar los procesos y actividades propias de la Unidad de Información. El estudio permitirá conocer cómo se desenvuelve la institución
dentro de su entorno interno y externo ya que las actividades y funciones que realizan pueden dar origen a imperfecciones en la gestión.
Conocer el presente es importante para asumir acciones futuras, si éste es ignorado o existe desconocimiento total, afectará directamente
el futuro de la institución. Las herramientas que se recomiendan utilizar son la matriz FODA, la cadena de valor, etcétera.
3. Identificar los temas o áreas claves que conducen a la estrategia (ruta
estratégica). Además de definir las cuatro perspectivas. Miyagi (2004)
adapta las preguntas de las perspectivas así:
Para cumplir nuestra misión, ¿cómo deben vernos los clientes y
personas relacionadas con la actividad?
Para satisfacer a los clientes, ¿en qué procesos internos debemos
ser excelentes?
Para tener éxito en nuestros procesos internos, ¿de qué forma
apoyaremos nuestra capacidad de aprender y crecer?
Para tener éxito en nuestra capacidad de aprendizaje, ¿de qué recursos debemos disponer?
4. Construir el mapa estratégico. Establecer la relación causa-efecto entre las diversas áreas y perspectivas. El Cuadro 3 muestra el ejemplo de
cómo se pueden relacionar las diferentes perspectivas indicadas por
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
Cuadro 3
Misión y visión de la biblioteca
Mapa estratégico
P. Cliente
Incrementar la satisfacción
del Usuario mediante
el desempeño superior
P.F
Desarrollar y modernizar
los sistemas de gestión
Mejorar eficiencia
competitiva
P.P
Calidad en el servicio
Obtener liderazgo
en el producto
Orientar los procesos a la
satisfacción del cliente y
la calidad
P.A.
Desarrollar nuevas
competencias en el staff
Fuente: elaboración propia 2007
flechas, y el tema clave es incrementar la satisfacción del usuario.
5. Seleccionar indicadores y metas por perspectivas. Implica contar con
un conjunto significativo de sólidos indicadores que permitan conocer
la efectividad de la organización. Por consiguiente, existe la necesidad
de establecer un sistema de indicadores de gestión con el fin de garantizar el control de metas determinadas y el despliegue de políticas
corporativas. Se recomienda utilizar la línea base a partir de la cual se
iniciará el seguimiento de los indicadores. Ejemplos de los indicadores y metas se aprecian en el Cuadro 4.
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Cuadro 4
Línea base y metas
Cliente
P.
Objetivos estratégicos
Indicadores
C1.
Incrementar
la xx Grado de satisfacción del
satisfacción del usuario cliente
mediante el desempeño
superior
P.A
P.I
Financiera
C2. Calidad en el servicio
Línea base N Meta (Año N+1)
40%
60%
xx Índice de entrega a
tiempo
F1. Desarrollar y modernizar xx Porcentaje de gasto en
los sistemas de gestión
administración respeto al
gasto total.
20%
40%
20%
30%
F2. Mejorar eficiencia
competitiva
xx Grado de eficiencia en el
uso de las instalaciones,
espacios, servicios y
recursos
30%
50%
P1. Obtener el liderazgo en
el producto.
xx Número productos
introducidos con exito.
1
2
P2. Orientar los procesos
a la satisfacción del
cliente y la calidad
xx Número de reclamos
recibidos
8
5
A1. Desarrollar nuevas
competencias en el
staff
xx Porcentaje de
implementación del Plan
de Competencia
20%
40%
Fuente: Elaboración propia, 2007.
118
Como lo indica la experiencia de la Biblioteca de la Universidad de
Virginia, seleccionar indicadores es, sin duda, la parte más difícil. Por
ello, hemos considerado necesario ahondar en algunos lineamientos y
ejemplos.
Para obtener una clara comprensión del concepto de indicador, lo definiremos como una variable cuyo control proporciona la información
que se precisa a través de comparaciones periódicas. En este contexto
los indicadores deberán cumplir con tres premisas: calidad, costo y
plazos de ejecución.
Matthews, en su interesante trabajo, nos advierte que debe haber seriedad en la recolección de datos, pues éstos contribuirán a mostrar
resultados en los indicadores sobre lo qué hacen y cómo funcionan
sus recursos humanos y financieros en la biblioteca. Y aunque menciona que obtener datos perfectos es poco realista, recomienda que
éstos sean suficientemente buenos como para ser satisfactorios. Entre las técnicas más utilizadas de recolección de data tenemos: focus
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
1
group, encuestas, buzón de quejas y/o sugerencias, y mystery shoppers.1
Al momento de elaborar la lista de indicadores, ésta debe alinearse
a cada objetivo estratégico y a cada perspectiva, y los indicadores, a
su vez, deberán alinearse con las estrategias. Los indicadores deben
reflejar el progreso en la visión de la Biblioteca y debemos tener la certeza de que se está midiendo aquello que debe medirse.
Por otra parte sugerimos trabajar al inicio con pocos indicadores por
perspectiva; es decir, los estrictamente necesarios, ya que así mejora el
trabajo, se evita tener exceso de información y ello no implica el establecimiento de indicadores inoperativos. Después del segundo año se
pueden adicionar, redefinir, reajustar, eliminar o modificar los indicadores. De lo dicho por Matthews destacamos las siguientes preguntas
sobre los indicadores que debieran ser abordados durante el segundo año de uso: ¿Se necesitan nuevos indicadores de desempeño que
reflejen mejor el funcionamiento real de la biblioteca? ¿Existe algún
problema con los indicadores? ¿Todas las iniciativas fueron completadas de manera oportuna? ¿Cada iniciativa afectó la biblioteca positivamente?.
A continuación señalamos algunos ejemplos de indicadores que según Matthews debería considerar la administración de la biblioteca:
En cuanto a la colección: accesibilidad, actualidad, profundidad, alcance en la cobertura y disponibilidad; en cuanto a tareas rutinarias:
precisión, rapidez/tiempo; en cuanto al servicio: ser útil, informado,
amigable y profesional.
En este mismo contexto, Bárbara Sánchez (2005) recomienda agrupar
los indicadores de gestión para bibliotecas universitarias según seis
contenidos:
Indicadores que miden el estado de la institución (infraestructura): número de puestos de estudio; número de alumnos; total de
m2 destinados a puestos de lectura; total de m2 biblioteca; total
de m2 del área al acceso libre de control en la biblioteca; total de
m2 de área al acceso controlado en biblioteca, total de m2 biblioteca, entre otros.
Indicadores que miden la gestión de los recursos de información
de la biblioteca: costo invertido en publicaciones seriadas, material monográfico; base de datos, e información electrónica y recursos de información. En recursos de información: volúmenes
Mystery shoppers o cliente secreto referido a una persona externa, quien evalúa de manera
justa y real los servicios, desempeño profesional y sus facilidades.
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monográficos ingresados...títulos monográficos ingresados, volúmenes monográficos...alumnos, volúmenes monográficos ingresados...alumnos por año, títulos monográficos ingresados, alumnos por año.
Indicadores que miden los productos y servicios de información
en la biblioteca: número de préstamos interbibliotecarios solicitados/entregados, préstamos anuales/estudiantes, uso de materiales/estudiantes, préstamos por tipo de usuarios, total de volúmenes prestados al año.
Indicadores que miden la gestión tecnológica de la biblioteca: total de computadoras/cantidad de especialistas, monto de lo invertido en tecnología al año, total de computadoras/puestos de
trabajo, total de horas de conexión, total de m2 incluidos en la
red de la biblioteca, total de capacidades o facilidades informáticas en biblioteca (escáner, grabadoras, lectores, etcétera.)
Indicadores que miden los recursos humanos en la biblioteca:
número de personal para atender las funciones de la biblioteca,
cantidad de personal capacitado al año, cantidad de profesionales con estudios de cuarto nivel, entre otros.
Indicadores que miden los componentes de la gestión que realiza la biblioteca: estructura interna de la entidad, relaciones con el
entorno universitario, administración de recursos, presupuesto
de inversión de la biblioteca/universidad, inversión anual capacitación/número de capacitados, entre otros.
6. En cuanto a los indicadores que pueden considerarse como ejemplo
destacable en el Perú, mencionamos que el grupo de trabajo del Comité de Bibliotecas Universitarias COBUN, elaboró en el 2008 una publicación sobre cómo establecer indicadores de desempeño para bibliotecas universitarias. Así como señala el grupo de trabajo, dichos
indicadores parten de la norma ISO 11620 (1998), pero son adaptados
en respuesta a la realidad del entorno peruano. Los 22 indicadores se
agrupan por área de gestión y cada uno de ellos adjunta un método
para el cálculo según el área. Cabe señalar que estos indicadores no
actúan como estándares, sino como una forma de realizar las mejores
prácticas, podemos ver el siguiente Cuadro 5 (página derecha):
Determinar acciones estratégicas. Significa centrar las estrategias
que mejor se ajusten a las circunstancias, pues el CMI se convierte en
una herramienta de simulación para realizar el modelamiento de las
estrategias. Es viable definir las hipótesis sobre las que se basarán
las estrategias e ir constatando en el mapa estratégico la relación de
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
Cuadro 5
Lista de indicadores de gestión para bibliotecas universitarias: Cuadro resúmen
Área de gestión
Id.
Nombre
Servicio y colección 1.1
1.2
1.3
1.4
1.5
1.6
1.7
Uso de las colecciones (*)
Uso de la colección por área temática (*)
Disponibilidad de los títulos (*)
Uso de las bases de datos
Uso de artículos de revistas electrónicas
Asistencia a las charlas de capacitación para los usuarios (*)
Nivel de satisfacción de los usuarios con el servicio de la biblioteca (*)
Infraestructura
2.1
2.2
2.3
2.4
Superficie destinada a las salas de lectura (*)
Disponibilidad de asientos (*)
Disponibilidad de computadoras
Disponibilidad de los equipos audiovisuales
Presupuesto
3.1
3.2
3.3
3.4
3.5
3.6
3.7
Presupuesto dedicado a la actualización de la colección (*)
Presupuesto destinadoa la actualización del material según área temática (*)
Presupuesto destinado a la compra y mantenimiento de hardware y software
Presupuesto destinado a la capacitación de los trabajadores
Presupuesto destinado a la elaboración de material de promoción (*)
Valor publicitario de la cobertura en medios de comunicación
Costo del procesamiento del material bibliográfico, hemerográfico y especial
Personal
4.1 Bibliotecarios profesionales por cada 1000 alumnos (*)
4.2 Técnicos y auxiliares de biblioteca por cada 500 alumnos (*)
Procesos técnicos
5.1 Tiempo del proceso de adquisición de un documento
5.2 Tiempo empleado en el procesamiento de un ítem (*)
(*) Todos los indicadores marcados son obligatorios
Fuente: COBUN. Indicadores de gestión para bibliotecas universitarias. 2008. p. 10
causa-efecto entre los objetivos estratégicos planteados y la relación
entre los indicadores. El CMI ayuda a traducir la estrategia en acción,
ya que proporciona los pilares básicos para alcanzar la estrategia tomada.
7. Plan para la implementación. Representa el diseño de políticas, fijar el
modelo de desarrollo estratégico, los criterios de actuación, y los procedimientos para el funcionamiento y la puesta en marcha del CMI. A
partir de entonces, se empieza el seguimiento, se recoge la información necesaria para los medidores, se observan y estudian las diferencias, y se analizan las causas de las posibles desviaciones para producir
la retroalimentación. Generalmente, el primer año de la implementación es un periodo de prueba y ajustes, pues en algunos casos se deben retirar algunos indicadores o introducir otros más apropiados.
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Aportes del cmi a las unidades de información
El CMI, como se ha podido apreciar, proporciona una mejor alternativa gerencial para el sistema de gestión estratégico de las Unidades de Información,
puesto que eleva la eficiencia de los procesos, orienta al logro de resultados,
mejora el proceso de toma de decisiones, motiva al personal y les brinda satisfacción a los usuarios. Además, la progresiva extensión de su implementación
a las Unidades de Información y las gratas experiencias consolidan más el
éxito en su aplicación.
Por lo tanto avizora un futuro comprometedor por la proliferación de su uso
en el ámbito de las Unidades de Información. El CMI constituye una importante
herramienta para asegurar que las estrategias se implementen correctamente y
que se use más que un sistema de indicadores completos, pero también exige
que ampliemos nuestra lectura, revisemos las experiencias de su aplicación en
las Bibliotecas, —algunos casos están siendo difundidos por Internet— intercambiemos experiencias, sigamos investigando y según como apliquemos todo,
garantizaremos un nuevo modelo organizativo enfocado en la estrategia.
Asimismo compartimos las apreciaciones del autor García (2002:14)
quien señala las principales aportaciones que el CMI puede hacer a las Unidades de Información:
yy El CMI orienta la actuación de la Biblioteca hacia el logro de resultados
equilibrando la visión que debe seguir, lo que potenciará la incorporación de la conciencia estratégica en la gestión bibliotecaria al centrarse
en los intereses de los stakeholders,2 y motivará la eficiente gestión de
los recursos humanos a través de las capacitaciones por considerar al
factor humano un agente preponderante en la generación de resultados de valor (perspectiva de innovación y aprendizaje).
yy El Cuadro de Mando concibe a la Biblioteca como un sistema interrelacionado de procesos de cuya forma de actuar depende la generación
de resultados de valor.
yy La motivación y el compromiso de los recursos humanos para alcanzar el CMI, al favorecer la integración ayuda al personal a conocer por
qué, dónde y cómo aplicar sus conocimientos y esfuerzos.
yy La evaluación del aporte de cada miembro y sección a los objetivos
estratégicos, favorecerá la creación de la cultura evaluadora necesaria
para alcanzar la mejora continua.
2
122
Stakeholders son aquellos grupos de interés que pueden influenciar, debilitar, bloquear u obstaculizar las acciones para el logro de proyectos o programas desarrollados por la biblioteca,
éstos pueden ser clientes, empleados, proveedores e inversores.
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
Conclusiones
En respuesta al planteamiento inicial, sostenemos que sí habríamos de implementar el CMI en las Unidades de Información, porque éste mejora el sistema
de gestión bibliotecaria al definir el porqué están ocurriendo las cosas con
base en una visión dinámica de la Unidad de Información —que a diferencia
de otras herramientas— contribuye a alcanzar un monitoreo integral y estratégico que define los objetivos, acciones e indicadores, lo que amerita coordinación entre las distintas áreas funcionales y la integración de estrategias con
los objetivos.
En esta línea surgen características que denotan una serie de ventajas, como el por qué de su implantación, las cuales se describen seguidamente:
yy Porque ayuda a simplificar la lista de prioridades del quehacer diario y
podemos identificar cuáles son las necesidades que deberían atenderse. Es decir, que el CMI exige replantear ¿qué es prioritario?. Y esas
prioridades de la Biblioteca deben centrarse en obtener mayor equilibrio con las demás áreas. De ahí, que el nombre “balanced” indica
equilibrio en la distribución compartida junto con las demás áreas,
servicio al usuario, procesos, finanzas y aprendizaje. Esto quiere decir
que el éxito en otras categorías permitirá mejorar el servicio, por ende
logrará una ventaja competitiva.
yy Muestra el mapa un resumen del quehacer estratégico y es de gran
utilidad en la comunicación y el seguimiento de la estrategia mediante
la definición de los objetivos estratégicos, la identificación de las variables clave de las que depende el éxito y el establecimiento de indicadores; es decir, gestiona los factores estratégicos de las Unidades de
Información.
yy Las Unidades de Información obtienen resultados favorables a través
de un enfoque sistémico, además de que definen la relación causaefecto, y ello sirve para incentivar la gestión del personal, pues vemos
cómo la persona contribuye al logro de los objetivos de la biblioteca.
yy Se centra en la visión y estrategia de la Biblioteca, y una vez que los
indicadores de desempeño han sido identificados y los objetivos seleccionamos, el proceso de cuadro de mando (compromiso con la visión)
asume que las personas adoptarán las conductas y ejecutarán las acciones que sean necesarias para lograr esos objetivos. Así, el enfoque
ha cambiado desde el acento tradicional en programas e iniciativas
hacia el énfasis del CMI en la visión y los objetivos. Es decir, el CMI es
un sistema integrado, balanceado y estratégico que identifica puntos
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clave, críticos y direcciona el futuro de las Unidades de Información
al traducir la visión en acción, seleccionar objetivos y según, cada objetivo clave, establecer los indicadores y metas que habrán de alcanzarse en determinados plazos y planes de acción.
yy El CMI contribuye a dar soluciones avanzadas y prácticas en la implementación y gestión de la estrategia hacia la creación del valor.
yy Les ofrece a las Unidades de Información un modelo integral de funcionamiento y utiliza un sistema de gestión que permite diseñar, representar y facilitar el seguimiento de los objetivos conjuntamente con
las estrategias esenciales.
yy Ser un sistema de control de gestión estratégico (perspectiva amplia)
y no simplemente un control (perspectiva limitada) quiere decir que
para algunos el CMI sólo se centra en indicadores. Por lo tanto no se
trata de medir por medir, sino qué, por qué y cómo se va a medir. A
pesar de que algunos lo implantan únicamente como control y desde
una perspectiva limitada, su mayor ventaja es una clarificación estratégica y el hecho de brindar un mejor sistema de información para todas
las unidades de la Biblioteca. Sin duda uno de sus beneficios es mejorar
el sistema de gestión.
Finalmente, podemos concluir, que el CMI es un instrumento necesario
para el empleo del sistema de control estratégico de gestión, por el hecho
de que hemos visto cómo conecta las iniciativas, definiendo las perspectivas
desde las que se va a analizar la Biblioteca y encadenar su causalidad con los
objetivos estratégicos.
Significa que desde una perspectiva amplia, el control de gestión estratégico garantiza el éxito del desempeño organizacional y que la calidad en el
control estratégico es una responsabilidad prioritaria del quehacer dentro de
la gestión bibliotecaria, y constituye una exigencia creciente de los usuarios.
No obstante ser una herramienta nacida en el ámbito empresarial, el CMI les
brinda a las bibliotecas una metodología aplicable que le permitirá a la alta
dirección centrar sus esfuerzos para conseguir los resultados previstos. Por
ello la herramienta válida para trabajar con mejor desempeño el control estratégico en la gestión bibliotecaria es el Cuadro de Mando Integral.
La propuesta aquí presentada sobre la metodología de aplicación del CMI
a las Unidades de Información está apenas consolidando sus preliminares en
una Biblioteca Peruana. El proyecto está en marcha por lo que todavía no se
puede dar a conocer mayor información y habrá que esperar los resultados
del estudio piloto después del primer año de aplicación. La difusión de la
información dependerá de las autoridades de la institución. No olvidemos
CUADRO DE MANDO INTEGRAL (BALANCED SCORECARD)...
que el CMI es una forma de trabajo que implica un proceso de cambio organizacional, que una vez que se empieza a trabajar nunca deja de mejorarse, por
ello incentiva el aprendizaje para planificar el futuro.
Esperamos haber cumplido con nuestro objetivo: incrementar en usted,
amigo lector, el interés por seguir conociendo y considerando el CMI para su
Unidad de Información como un modelo importante para el control estratégico de gestión.
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Los Grupos de Investigación Más
Productivos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
en el área de Física: 1990 a 1999
María Magdalena Sierra-Flores *
Jane M. Russell Barnard **
Artículo recibido:
10 de noviembre de 2008.
Artículo aceptado:
12 de agosto de 2009.
Resumen
El intercambio del conocimiento y la colaboración científica se han convertido en elementos fundamentales del
desarrollo científico. Por eso estudiar la colaboración y
sus características debe constituir un elemento para analizar y evaluar organismos regionales o nacionales vinculados a la política científica incluidas las universidades. Una
de las técnicas empleadas para estudiar la colaboración
son los indicadores bibliométricos que han identificado
grupos de colaboración, y trazado la dinámica de sus formaciones a través del tiempo. Aunque hay estudios que
abordan el tema de la colaboración, se han realizado a nivel macro y son escasos los de nivel micro que indaguen
este aspecto en un nivel universitario. Este trabajo se propone fundamentalmente aplicar una metodología basada
en indicadores métricos al estudiar la investigación física
*
**
Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, México. [email protected]
Centro de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, México. [email protected]
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en la UNAM y a los grupos de científicos que la caracterizan. El estudio abarca de 1990 a 1999 y caracteriza los
aspectos más relevantes de los “Grupos de Investigación
Más Productivos” (GIMP) y su evolución en el tiempo.
Los resultados y la aplicación de la metodología podrán
ser extrapolados a otras áreas del conocimiento, y servir como punto de comparación y evaluación para otras
áreas de la UNAM o universidades similares.
Palabras claves: Colaboración científica; Grupos de investigación; Indicadores bibliométricos;
UNAM ; Física.
Abstract
The Most Productive Research Groups of the National Autonomous University of Mexico (UNAM) in
the Area of Physics, 1990-1999
María Magdalena Sierra-Flores and Jane M. Russell
In today’s world knowledge exchange and scientific collaboration have become fundamental for the scientific
development of countries. Consequently, the study of
collaboration and its characteristics should constitute
an element of analysis and evaluation for regional and
national organizations, as well as for science policy units
associated with universities. Bibliometrics is one of the
techniques applied to the study of collaboration, which
has permitted the identification of research groups and
their dynamics over time. Although many studies have
been carried out on collaboration, these have been primarily at macro level; few are available on more micro
levels of analysis within universities. For this reason,
the present paper focuses on the application of metric
indicators for the study of physics research at the National Autonomous University of Mexico (UNAM) and
its characteristic specialists groups in the decade of the
90s. In particular, the characteristics of the highly productive research groups (GIMP) and their evolution are
explored. The results and the methodology applied can
be extrapolated to other knowledge areas and can be
used as a point of comparison and evaluation for other
disciplines at the UNAM and like universities.
Keywords: Scientific collaboration; Research
groups; Bibliometric indicators; UNAM ; Physics.
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
Introducción
A
nte los retos cada vez mayores a los que se enfrentan los investigadores, la investigación científica exige un trabajo en equipo. Por lo tanto
existe la necesidad de compartir información, aparatos costosos, habilidades
técnicas, y también de discutir y explorar las distintas vertientes que se van
abriendo (Gibbons et al, 1994; Zitt, Bassecoulard, 2005). Este proceso de colaboración es parte intrínseca del propio desarrollo científico, y llegará a ser
más generalizado a medida que la acumulación del conocimiento científico
continúe. Hoy en día ninguna persona puede comprender la gama completa
de ese conocimiento; la ciencia es una posesión colectiva más bien que individual. (Kahn, Prager, 1994). Esta coyuntura ha propiciado la colaboración
nacional e internacional, la cual ha sido estudiada por múltiples autores utilizando diferentes métodos de análisis, en diferentes ramas del conocimiento
y para países o regiones específicas (Calero, van Leeuwen, Tijssen, 2007; Russell, J, et al., 2007; De Filippo, Morillo, Fernández, 2008).
En el caso particular de México, el apoyo a la colaboración se manifiesta en la Convocatoria de Investigación Científica Básica 2004 emitida por
el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) el que a partir de
esa fecha, brinda mayor apoyo económico a las iniciativas presentadas por
grupos de investigación, así como a propuestas que contribuyan al fortalecimiento de cuerpos académicos o grupos de investigación en formación, que a
su vez tengan interacción con otros cuerpos académicos o grupos de investigación ya consolidados.
Se puede decir que en México, al igual que en otros países, los grupos de
investigación han pasado a ser la “mínima unidad del sistema científico en
muchas de sus áreas”, dado que el científico “solitario” cada vez tiene menos
representación en las estructuras científicas y en la literatura especializada.
De ahí que sea importante comprender los procesos de desarrollo de los grupos y los contextos organizacionales donde ocurren. Si se comprenden bien
los procesos que dan forma y determinan el éxito del trabajo de la investigación dentro de las organizaciones encargadas de impulsarlo, se controlará mejor el desarrollo y los frutos de esa actividad, tanto a nivel de organizaciones específicas como del sistema científico y tecnológico del país en su
conjunto. Por su parte, esta tarea requiere de un análisis específico de cada
grupo y en cada disciplina (Bordons, Zulueta, Barrigón, 1998).
La aplicación de las técnicas bibliométricas para analizar la formación
y comportamiento de los grupos científicos ha aportado resultados interesantes (Gómez, Fernández, Sebastián, 1999). Existen ejemplos donde estas
técnicas son aplicadas al estudio de la estructura y la dinámica del proceso
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investigador (analizado en lo que es su mínima unidad de funcionamiento
y complementado a otros enfoques como los procedentes de la sociología de
la ciencia). Los resultados provenientes de la aplicación de estos indicadores
métricos, dentro de este contexto, también pueden ser utilizados como apoyo y elemento para la toma de decisiones referentes a la política científica de
un país.
Resultados como la identificación de los más destacados y sobresalientes
grupos en una determinada área científica y las características de agrupamiento que presentan, complementan los estudios realizados a nivel “macro”
por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT, 2004) y otros organismos gubernamentales. El estudio del comportamiento de la ciencia y de
sus investigadores a un nivel “micro” y en el contexto de la actividad universitaria es aún escaso. En las bases de datos especializadas se identifican pocos
estudios que descienden a analizar la actividad de los grupos de investigación
a pesar de que la colaboración científica y la ciencia que se desarrollan en las
universidades han experimentado un enorme auge en las últimas décadas.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha sido considerada la mejor de Latinoamérica (Avilés, 2004), segunda en Iberoamérica
(SCImago Research Group, 2007), y se cuenta entre las 74 mejores del mundo
(Galán, 2006); en México es considerada como la primera institución que
produce más documentos científicos (SCImago Research Group, 2007). Uno
de los resultados que avalan este juicio son los altos niveles de investigación
y colaboración científica de dicha universidad (Russell, Ainsworth, NarváezBerthelemot, 2006). Por otra parte, la física es considerada como una de las
ciencias emergentes de México y pilar fundamental dentro de las contribuciones en producción científica de la UNAM (SCImago Research Group,
2007). A pesar de ello, la física y las características de la colaboración científica en ese tema, no han sido aún abordadas.
Es importante acotar que la física, y específicamente la física de partículas, fue considerada como el tema estratégico y punto de partida para iniciar la cooperación europea. En 1954 los gobiernos de una docena de países
establecieron las instalaciones del CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear), que atrajeron a físicos de equipos multinacionales que
propiciaban la colaboración. Por tanto, la física ha sido un objeto aglutinador
que ha servido como parte de la estrategia de desarrollo científico (Papon,
2004).
Ante estos antecedentes el presente trabajo se ha planteado como objetivo fundamental aplicar una metodología basada en indicadores métricos al
estudio de la investigación en el campo de la física en la UNAM, así como a
los grupos de científicos que la caracterizan. El estudio abarca un periodo
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
de 1990 a 1999, y caracteriza los aspectos más relevantes de los “Grupos de
Investigación Más Productivos” (GIMP) y su evolución en el tiempo.
La década analizada (1990-1999) en la UNAM y en particular en el área
analizada (física) puede considerarse especial en cuanto al crecimiento de su
planta académica medido con base en el número de contrataciones. En su
primer quinquenio hubo un gran crecimiento en el número de investigadores
pertenecientes al área de las ciencias físico-matemáticas, con un incremento
de 14.5 investigadores por año (lo que representa una tasa de crecimiento
de 6.7 % por año), mientras que en el segundo quinquenio éste decreció a
valores menores, a 0.2 investigadores adicionales por año. Para el periodo
de 2000 a 2005, las contrataciones no se han aproximado a las del primer
quinquenio de los noventa (1990-1994), dado que el incremento es de sólo 5
investigadores contratados por año (lo que corresponde a un incremento de
2.2 % por año en el número de investigadores), lo que resulta en una etapa
de mucho menor crecimiento (Memoria UNAM, 1993,1995, 2000, 2005). Por
lo tanto, la década de los noventa nos ofrece la posibilidad de estudiar los
cambios que ocurrieron a través de un número substancial de nuevas contrataciones, las cuales alimentaron la formación de nuevos grupos y ocasionaron
un incremento en la producción en el área de la física.
Los resultados y la metodología descritos en este trabajo constituyen un
antecedente en la identificación de grupos de investigación en México en el
campo analizado y pueden aplicarse a otras disciplinas. Por ejemplo, esta metodología fue aplicada inicialmente al área médica. En nuestro caso (la física
en la UNAM) se desarrolló en forma satisfactoria.
Metodología
La metodología aplicada en el presente estudio fue desarrollada por un grupo de investigadores del Departamento de Bibliometría y Análisis Documental del Centro de Información y Documentación Científica “CINDOC”,
España (Fernández et al., 1993; Bordons et al., 1995a, 1995b; Zulueta, Cabrero, Bordons, 1999).
La metodología desarrolla una serie de programas que se interrelacionan
en Access y analizan la producción contenida en una base de datos que permite la agrupación de autores en función de su frecuencia de co-autoría, así
como el análisis de la producción científica de los grupos de investigación, como por ejemplo, el número de documentos por grupo, el tamaño grupal, las
revistas donde esto grupos publican, entre otras cosas (Fernández et al., 1993).
Ésta se fundamenta en supuestos básicos tales como:
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132
yy Los grupos de investigación son definidos en términos de co-autoría
(aquellos autores que firman de forma conjunta un importante porcentaje de su producción, pero no corresponden necesariamente a una
determinada estructura administrativa o institucional).
yy Se considera como Investigador Principal (IP) al autor más productivo
dentro de un grupo y no necesariamente coincide con el líder real del
grupo.
Los datos de partida constituyen la producción científica de corriente
principal en el área de la física, publicada en revistas que cumplen los criterios de calidad y prestigio internacional, obtenida a partir de dos fuentes
de datos: el Science Citation Index (SCI) de 1990 a 2000 y los Journal Citation
Reports (JCR) de 1999, ambos en versión CD-ROM.
La selección de los grupos se realizó a partir de las publicaciones de la
UNAM en las revistas clasificadas en las áreas y subáreas de la física incluidas
en el JCR (ISI, 1999): Physics, Applied; Physics, Atomic, Molecular and Chemical; Physics, Condensed Matter; Physics, Fluids and Plasmas; Physics, Mathematical; Physics, Multidisciplinary; Physics, Nuclear; Physics, Particles and Fields.
Esto significa que no se incluyen documentos publicados en revistas de otros
temas, por ejemplo en revistas multidisciplinarias como Nature o Science, lo
que constituye una limitante para la presente investigación En cualquier caso, toda limitación temática es en cierto modo arbitraria y el uso de la clasificación de revistas del SCI, que ha sido realizada con asesoramiento de expertos en cada área, está sujeta a modificaciones periódicas que garantizan
su actualidad. De hecho se admite que el SCI constituye un buen reflejo de la
denominada “corriente principal de la ciencia”. Su uso garantiza la posibilidad de realizar comparaciones temporales, y comparaciones entre países, así
como disponer de una serie de indicadores bibliométricos ausentes en otras
bases de datos.
Para identificar la producción científica en el área de la física en la UNAM,
fue necesario recuperar la producción total de la UNAM y posteriormente extraer la producción en el área de la física. Debido a la falta de normalización
de los datos en el SCI se realizaron 16 búsquedas con distintas variables para la UNAM (Arvanitis, Russell, Rosas, 1996). Para la UNAM, se obtuvieron
11,129 registros (total de documentos producidos por los investigadores en
la década de los noventa), para la física; se identificaron 2,209 registros. Se
identificó que hay poco más de 300 títulos de revista en el área de la física, los
investigadores de la UNAM han publicado en 137.
La extracción de los datos se realizó con el formato de Dialog-ISI adoptando siete de los diez campos: TI =Título, LA=Idioma, AU =Autor, CS =Lugar de
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
trabajo, JN =Publicación fuente, PY=Año de publicación y DT=Tipo de documento. Cabe señalar que el campo DT incluye 12 tipos de documentos, para
la investigación se consideraron cuatro: Artículos, Cartas, Notas y Reseñas.
Los registros se transfirieron a una base de datos Access que permitió observar la falta de normalización en las tablas de autor y en su dirección. Algunas de las variaciones más frecuentes tuvieron que ver con la ortografía (errores tipográficos), diferentes formas estructurales y de expresión; por ejemplo,
diferentes formas de asentar a un mismo autor o dirección.
El análisis bibliométrico fue realizado con el apoyo de una base de datos relacional y una aplicación desarrollada en un lenguaje de programación
(DbaseIV.2), y corre desde una IBM estándar compatible con PC486-66 Mh;
8Mb RAM ; 520 SCSI-HD. Actualmente se interactúa con la base de datos utilizando Access (Fernández, et.al., 1993), que está constituida por una serie de
programas que interactúan entre sí y con los ficheros de datos bibliográficos
que contienen las publicaciones de la disciplina analizada. La identificación
de los grupos se realiza de forma interactiva, de tal manera que es posible
especificar en cada ocasión, y variar de una vez a otra, las condiciones requeridas para delimitar los grupos; es decir, permite modificar las condiciones
de acuerdo con la disciplina analizada, lo que hizo posible su empleo para el
caso específico de la presente investigación.
En el proceso de identificación de los grupos cabe señalar que el programa genera un archivo de productividad de los autores (Archivo Autor 1) que
le adjudica a cada autor el código del centro al que pertenece. Para identificar
la dirección de cada autor el programa identifica a todos los autores que han
publicado como único autor y le asigna la dirección correspondiente (única).
En los casos donde el autor reporta más de una dirección el programa no
asigna dirección. Para registros con varios autores y una única dirección, se
le asigna la misma dirección a cada uno de los autores. Para registros con dos
direcciones, si se han identificado todos los autores menos uno, por medio de
los pasos anteriores, como pertenecientes a uno de los centros firmantes, al
autor restante se le asigna la segunda dirección (Fig.1).
En la construcción del “Archivo Autor 1” se detectó la problemática de los
nombres homónimos; es decir, aquellos autores que tienen el mismo nombre,
lo anterior se observó en algunos apellidos comunes tales como: García, Hernández, López, etcétera. Para obviar en lo posible este problema, cada autor
se identifico a través de la cadena “nombre autor-centro de trabajo”, con lo
que se reduce considerablemente la posibilidad de que se confundan autores
distintos con un mismo nombre. Sin embargo, debemos señalar que el hecho
de considerar a cada autor como ligado a su centro de trabajo ocasiona algunos problemas vinculados a la posible movilidad de los investigadores, ya que
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su producción estará dividida según hayan firmado como pertenecientes a
uno u otro centro.
Una vez identificados los grupos se crea un fichero final (Archivo GRUPOS) que muestra su composición (IP y miembros), producción del grupo y
de cada uno de sus autores (Fig. 1) (Bordons, Zulueta y Cabrero, 1995a).
SCI.EXE
Archivo
SCI
AUFREQ.EXE
GRUPOS.EXE
Archivo
BASE
Archivo
AUTOR 1
Valor agregado
Normalización
de nombres
Entradas
-Co-autorías
- Autores
- Frecuencias
Archivo AUTOR 2
-Autor
-Grupo
Archivo GRUPOS
- Investigador
más productivo (IP)
- Miembros
- Dirección
- Tamaño
- Producción
Fig. 1. Plataforma en la identificación de grupos. Parte principal del programa y archivos
Los parámetros establecidos en la base de datos relacional que permitieron identificar en forma acertada a los grupos en el campo de la física en la
UNAM en los dos quinquenios (1990-1994 y 1995-1999), fueron:
Frecuencia mínima para ser grupo
>ó=2
Frecuencia mínima para ser jefe
>ó=6
% documentos con jefe
> ó = 60
Deber ser del mismo centro o indet.
Falso
Núm. miembros grupo contando jefe
>ó= 3
Lo anterior significó:
134
yy Los autores ocasionales que publicaron un solo documento en cinco
años no fueron asignados a grupos.
yy El porcentaje mínimo de las publicaciones que un autor tiene que firmar junto con un investigador principal (IP) es del 60%. Los autores
que publicaron dos documentos y colaboraron en uno de ellos con el
IP (50%), fueron excluidos.
yy El número mínimo de publicaciones de un autor para poder ser considerado IP fue de seis.
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
yy El número mínimo de autores para considerarse como un grupo fue
de al menos tres investigadores.
yy Se consideraron dependencias institucionales únicas o múltiples de
los miembros de un equipo (no es necesario que todos los miembros
de un grupo sean de la misma institución).
El programa ordenó a los autores de mayor a menor producción. El punto
de partida fue el autor más productivo del archivo, y a partir de éste el programa identificó y seleccionó a los restantes componentes del grupo tomando en cuenta su alta frecuencia de co-autoría con el Investigador Principal
(IP). Todos los autores que publicaron un alto porcentaje de su producción
científica (60% o más) en colaboración con un determinado IP fueron considerados miembros de su grupo. Todos los autores, salvo los IP, pudieron ser
adscritos a más de un grupo.
Los resultados fueron validados a través de cuatro técnicas: consulta con los
expertos del área, entrevista con el IP o miembro del grupo, consulta con los investigadores del área por grupos que no son los suyos, y consulta con el conjunto
de publicaciones de los autores. La consulta con los expertos del área fue fundamental para la conformación de los grupos de investigación en la base de datos
relacional, su participación permitió establecer los parámetros más adecuados
para su formación, además de validar de manera general a los primeros grupos
observados (en una primera prueba se observaron macro-grupos que englobaban varios grupos). Las tres técnicas restantes fueron aplicadas para validar a
los GIMP en el área de la física de la UNAM, y permitieron además obtener información que explica su conformación, como por ejemplo: algunos miembros del
grupo colaboran en distintas líneas de investigación y por tanto, participaban en
varios grupos. La metodología y la validación de los datos se detallan en SierraFlores (2005).
El primer enfoque métrico fue la caracterización general de los grupos de
investigación, así como la caracterización y productividad de los grupos de investigación más productivos (GIMP). Las variables cuantitativas consideradas
para los GIMP fueron las siguientes: Áreas de especialización y factor de impacto de las revistas de publicación; Coautoría con instituciones internacionales; Comportamiento de los grupos en física teórica y en física experimental;
Madurez de los grupos GIMP; Dínamica grupal; Caracterización de los grupos
estables. El análisis realizado a la producción científica incluyó los aspectos
cuantitativos, en ningún momento se consideraron aspectos de calidad de la
misma.
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Resultados y discusión
La producción científica del área de la física en la UNAM publicada en las
revistas clasificadas bajo la misma área temática en el periodo 1990 a 1999,
ascendió a 2,209 documentos en 7,395 co-ocurrencias de autores que correspondieron a 2,384 autores únicos (autor+dirección). Prescindiendo de los
autores ocasionales (responsables de un solo documento) se identificaron
1,099 autores (o sea 46% del total de autores) que publicaron dos o más documentos en la década de los noventa.
En la década analizada se observó un crecimiento en el número de autores activos en el área de la física en la UNAM, así como un incremento en el
número de documentos. La producción experimentó un crecimiento anual
medio de 11.82% desde 1990 a 1999, y un porcentaje mayor correspondió al
crecimiento de autores activos en el área (15.4%). El número medio de autores por documento fue de 3.34 (Fig. 2).
Fig. 2. Evolución anual del número total de autores y documentos
La producción científica analizada por quinquenio (1990-1994 y 19951999) ascendió a 807 documentos en el primer periodo y a 1,402 para el segundo con 2,483 y 4,912 ocurrencias de autores; del total de ocurrencias 996
correspondió a autores únicos (autor+dirección) en el primer periodo y 1,833
para el segundo, responsables de 440 (44%) que publicaron dos o más documentos y 831 (45%) en el segundo quinquenio (Fig. 3).
136
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
Fig. 3. Producción científica y documentos asignados a Grupos por quinquenio:
1990-1994 y 1995-1999
Los grupos de investigación
Se identificó un total de 42 grupos en el primer quinquenio y 96 en el segundo. Del total de los 1,099 autores únicos con más de un documento durante
los diez años analizados, el 52% (227) del primer periodo están en grupo y el
64% (534) en el segundo. El total de documentos generados por los grupos
del primer quinquenio fueron 449 que correspondió al 56%. El 71% (990)
de los documentos del segundo periodo correspondieron a grupos. Cada
equipo generó 6 o más documentos por quinquenio. Se observó un incremento de más del 100% para el número de autores (135%) lo que supuso un
incremento de los miembros de grupos del 128.5%, superior al aumento detectado para el número de publicaciones (de 120.4%). Prescindiendo de los
autores “ocasionales”, responsables de un documento en cada quinquenio, el
total de los grupos incluye 60% de los autores firmantes de documentos, y es
responsable de un porcentaje poco mayor (65%) de los documentos publicados en la UNAM en el área de la física, (Cuadro 1).
Cuadro 1. Cobertura de los autores y documentos en la UNAM en el
área de la física por el total de los grupos del área y por los GIMP
Periodos
Grupos
Número autores asignados a grupos
Número documentos asignados a grupos
1990-1994
1995-1999
Total grupos
GIMP*
Total grupos
GIMP
(n=42)
(n=26)
(n=96)
(n=67)
227(52%)
162 (71%) 534(64%) 423 (79%)
449(56%)
359 (80%) 990 (71%) 843 (85%)
Nota: Total Grupos incluye aquellos con seis o más documentos/quinquenio.
* GIMP hace referencia a aquellos con diez o más documentos/quinquenio
137
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Caracterización de los grupos de investigación
más productivos (gimp)
Los Grupos de Investigación Más Productivos (GIMP) que publicaron 10
o más documentos por quinquenio (objeto de este estudio), representan el
62% del primer periodo (26 de 42 grupos) y el 70% del segundo quinquenio
(67 de 96 grupos). Estos grupos reúnen cerca de un tercio de los autores con
actividad sostenida, y son responsables del 44.5 y 60%, de los documentos
de los autores de la UNAM en el área en el primero y segundo quinquenio
respectivamente.
Los grupos más productivos incluyen el 71% (162 de 227) del total de
los autores asignados a grupos en el primer quinquenio y, para el segundo,
el 79% (423 de 534). Éstos producen el 80% (359 de 449) y el 85% (843
de 990) de los documentos publicados por grupos de la UNAM en revistas
de física en los dos periodos, con un crecimiento medio de 6.4% en los años
1990-1994 y de 13.5% para 1995-1999. El porcentaje de incremento medio
en cada quinquenio del número de autores activos en el área fue de 22.4% y
19.3%.
La incorporación de nuevos autores repercutió en un aumento del número total de grupos en el área, para los GIMP se identificó un incremento
mayor al de los restantes equipos (el 158% frente al 129%) (Cuadro 1). Este
incremento fue similar en disciplinas que han sido analizadas en otros países,
como la farmacología y farmacia (Bordons, Zulueta, Barrigón, 1998), y de la
misma forma se puede decir que tal crecimiento indicó que el área se encuentra en una etapa de gran dinamismo, y que no sólo se forman nuevos grupos
en el segundo periodo, sino que grupos inicialmente poco productivos aumentan su producción y tienden a consolidarse. Por otra parte, el aumento
de autores activos en el área no repercutió en un mayor tamaño de los grupos
preexistentes o en un cambio de su productividad grupal.
Con el análisis realizado a las publicaciones sólo en el área de la física, los
GIMP se ubicaron básicamente en tres dependencias: Instituto de Física (IF),
Instituto de Ciencias Nucleares (ICN) e Instituto de Investigaciones en Materiales (IIM). Estudios previos de Pérez Angón (1992); Pérez Angón, Torres
Vega (1993, 1994a, 1994b, 1996, 1998 y 2000) muestran lo anterior, además
de señalarlas como las instituciones de la UNAM más productivas en el área
de la física en la década de los noventa. La concentración de los grupos fue
mayor en el IF con el 58% y 45% en el primero y segundo quinquenio respectivamente, seguido del 19% y 15% en el IIM, y el ICN con el 8% y 18%.
Este último instituto presentó una notable diferencia en el número de grupos
de un periodo a otro, pues incrementó de 2 grupos en el primer periodo, a 12
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
grupos en el segundo. El IF y el IIM, ambos, incrementaron el 100%, es decir
de 15 a 30 y de 5 a 10.
El IF fue responsable del 57% y el 42% (233 y 456) documentos, en el
IIM publicaron el 16 % y el 15% (67 y 162) y en el ICN el 13% y el 15% (52
y 166), estas tres dependencias produjeron el 86% y el 72% del total de documentos (408 y 1082). El 14% restante del primer periodo se produjo en
distintas dependencias de la UNAM, como la Facultad de Ciencias, la FESCuautitlán y la Facultad de Química. El 28% del segundo periodo fue de la
Facultad de Ciencias, el Instituto de Química, el Instituto de Matemáticas, el
Centro de Instrumentos, el Centro de Ciencias de la Materia Condensada, el
Centro de Investigación en Energía y el Instituto de Investigación en Matemáticas Aplicadas y Sistemas.
Los GIMP presentaron un tamaño medio de 7 autores en el primer quinquenio y 8 en el segundo, y una producción aproximada de 3 documentos/
año por grupo en ambos periodos, y una productividad de 2.7 trabajos en
cinco años por autor y grupo. En relación al tamaño de grupo hay que destacar que el aumento del valor medio se produce por la existencia de un grupo
extremadamente grande (41 autores), mientras que la moda desciende de 6 a
4 autores de uno a otro periodo (Cuadro 2). En relación al número de documentos por grupo también es llamativo el rango superior de 72 documentos,
mientras que la moda pasa de 10 a 11 documentos/grupo.
Cuadro 2. Caracterización de los GIMP de la UNAM
en el área de la física 1990 a 1999
GIMP
Característica
1990-1994
Media±desviación estándar
(N=26)
Tamaño del Grupo
6.96±3.0
Me=6; Mo=6; Rango=3-18
No documentos/grupo 15.69±4.74
Me=14.5; Mo=10; Rango=10-30
Productividad
2.71±0.98
Me=2.33; Mo=1.6; Rango=0.81-6
1995-1999
Media±desviación estándar
(N=67)
7.58±3.92
Me=5; Mo=4; Rango=3-41
16.14±5.01
Me=14; Mo=11; Rango=10-72
2.72±0.97
Me=2.6; Mo=4; Rango=0.36-6.66
Si graficamos el número de artículos por grupo contra el número de autores dentro de cada grupo (Fig. 4), obtenemos una correlación positiva para ambos periodos estudiados. Las rectas calculadas tienen pendientes de
0.70+/-0.24 (R2=0.25) artículos por autor suplementario para el primer periodo, y de 1.30+/-0.59 (R2=0.25) para el segundo periodo (rectas continuas
en la Fig. 4). Para calcular la correlación para el segundo periodo eliminamos
dos grupos grandes y poco productivos (uno de 37 miembros con 16 publicaciones y otro de 41 miembros con 15 publicaciones, no incluidos en la Fig. 4
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periodo 1995-1999). Si uno incluye estos dos grupos en el cálculo de la correlación, se obtiene un ajuste con pendiente muy cercana a cero.
De este análisis concluimos que la productividad en función del tamaño
del grupo en ambos periodos presenta una correlación con pendiente positiva de orden de 1 artículo por investigador adicional en el grupo, con una
incertidumbre bastante grande (de aproximadamente 0.5 artículos por investigador adicional).
Fig. 4. Producción en función del número de miembros de cada grupo
Las subáreas de interés tradicional de los GIMP en la década de los noventa correspondieron a la física general, física de la materia condensada, física
atómica y molecular, y física matemática. Con excepción de la primera, las
restantes subáreas coinciden en el análisis realizado por Pérez Angón, Torres
Vega (2000) y Menchaca Rocha (2000). Las nuevas líneas de interés de los
GIMP identificadas en el segundo quinquenio correspondieron a la física nuclear y a la física de partículas y campos. Cabe mencionar que dos subáreas:
física de la materia condensada y física atómica y molecular se identifican en
el Atlas de la Ciencia Mexicana 2003, como dos de las cuatro que prevalecieron en ambos periodos. Un dato adicional observado en dicha fuente, que
vale la pena comentar, es el nivel académico de los autores en ambas subáreas. La primera presenta el mayor número con alto nivel académico (poco
más de 300 investigadores con doctorado), cuyas publicaciones presentan un
impacto relativo de poco menos de 4 citas/artículo, en el periodo 1991-1999.
En contraste, la segunda subárea (física atómica y molecular), que reporta 50
investigadores con nivel de doctorado (es decir, el 17% de la materia condensada) sus publicaciones han obtenido un impacto relativo de 6 citas/artículo
en el mismo periodo (1991-1999) (Cuadro 3).
Nota: Sólo se muestran revistas con 10 o más documentos en cada periodo.
* Área de especialización identificadas en el JCR 1999)
** Journal Citation Reports, 1992
*** Journal Citation Reports, 1997
Cuadro 3. Áreas de especialización por revistas de publicación de los GIMP.
Factor de Impacto medio por quinquenio y ubicación en el JCR por categoría
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
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Vale la pena notar que en el periodo estudiado no hubo planeación (a nivel del CONACyT, de la UNAM o de sus institutos) sobre las áreas que iban a ser
desarrolladas. De esta forma la elección de los temas desarrollados fue resultado de las iniciativas de los grupos de investigadores de forma básicamente
autónoma.
Las cuatro primeras revistas donde más publicaron los GIMP en ambos
periodos fueron en orden alfabético: Journal of Physics A, Physical Review A,
Physical Review B, y Revista Mexicana de Física (RMF), la última presentó en
ambos periodos el mayor número de documentos publicados (31 y 100 en el
primero y segundo quinquenios).
Comparando el Factor de Impacto (FI) medio del primer periodo con el
segundo y complementando la información con la clasificación del Journal
Citation Reports ( JCR, 1990 a 1999) por categoría, se observó la tendencia de
los GIMP a publicar en revistas con mayor FI, ubicadas en el primer cuartil de
su área. En tres de las cuatro áreas de especialización identificadas en ambos
periodos (física general, materia condensada y física matemática) se observa
que los investigadores tienden a publicar en revistas ubicadas en el primer
cuartil del área. Cabe destacar el caso del área de la física-matemática, que
en el primer periodo se localizó en el tercer cuartil y para el segundo periodo se ubicó en el primero, publicando además en la revista de mayor FI
Medio (2.1304), primera posición en su área (Physical Review E). Respecto
de las áreas de reciente aparición identificadas en el segundo periodo (como
la física de partículas y campos) los GIMP publicaron en la Physical Review
D, ubicada en la tercera posición de 16; es decir, en el primer cuartil, con
un FI Medio (3.5746). En las áreas de física atómica y molecular, así como en
la de física nuclear, las revistas donde publicaron se ubicaron en el segundo
cuartil.
Por otro lado se observó cierta preferencia por publicar en la Revista
Mexicana de Física (RMF) (31 y 100 documentos, primero y segundo periodo,
respectivamente) ubicada en el cuarto cuartil en su área. Estudios previos de
Pérez Angón, Torres Vega (1993, 1994a, 1994b, 1996, 1998 y 2000), coinciden
con dicha preferencia, ubicándola en primer lugar para los artículos publicados por los físicos mexicanos en la década analizada. Otro estudio (Luna Morales, 2004) ubica a la RMF dentro de las primeras nueve revistas preferidas para publicar por la comunidad física mexicana de partículas elementales. Este
estudio, además, propone que se publique en dicha revista “posiblemente con
el fin de promover el trabajo de investigación desarrollado en el área, o bien
para protegerla y mantenerla viva no sólo en el ámbito nacional sino también
con reconocimiento internacional”. Es importante notar que existen variaciones que merecen un análisis detallado y por tanto una revisión especial de las
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
fluctuaciones en el incremento y disminución del FI de las revistas, pero que
salen del objetivo de este trabajo y puede ser una tarea para otras posibles investigaciones. En este punto se puede mencionar el trabajo de Del Río, García, y Ramírez (2000) quienes realizaron un análisis de las revistas mexicanas
del área de física y concluyeron, para el caso de la RMF, que la causa fundamental del decremento en el FI de la revista fue precisamente el aumento en
el número de artículos publicados en el periodo, y no como en un principio
se pudiera pensar, en una disminución de citas. Se analizaron dos años y se
identificaron 107 artículos en 1997 y 206 en 1998. Se observó un aumento del
orden del 100% en el número de artículos publicados.
Podemos contrastar la RMF con la Revista Mexicana de Astronomía y Astrofísica (RMxAA). En el periodo 1992-1995, la RMxAA tuvo un FI promedio
de 0.53 +/- 0.28. En el periodo 1996-1999, el FI promedio incrementó su valor a 1.61 +/- 0.41. Este fuerte incremento en el FI se debió a que en 1995 la
RMxAA separó las memorias de congresos en una “serie de conferencias” de
los fascículos de la revista. También posiblemente hubo cambios editoriales
que contribuyeron a un incremento en el nivel de los artículos publicados.
El análisis de la composición de los grupos, así como los comentarios
realizados por los propios investigadores en el proceso de validación de los
datos, permitieron identificar grupos que incluyen subgrupos. En particular
esto se observó en los grupos ubicados en la subárea de la física nuclear –experimental. Lo anterior puede estar reflejando los intereses de la comunidad local, ya que en algunos casos los IP de estos grupos trabajan en distintas
líneas de investigación. Por lo tanto, el grupo identificado muestra a todos los
colaboradores, quienes no necesariamente trabajan en la misma línea. Incluso hay casos en que algunos de los miembros de un grupo identificado ni siquiera se conocen entre sí. Otro aspecto observado de los GIMP de la UNAM
en la física es su interdisciplinaridad; se identificó que existe un notable grupo de investigadores procedentes de otros campos, que realizan importantes
contribuciones a esta área del conocimiento. Una de las disciplinas que sobresalió del resto fue la química, seguida de la antropología y la arqueología;
por lo tanto al parecer los grupos se forman para hacer frente a proyectos
concretos. Claramente, para hacer un estudio completo de la interdisciplinaridad de los grupos sería necesario realizar un estudio que incluyera a publicaciones en otras áreas (no sólo las de física, como en el presente estudio).
Los documentos realizados por los GIMP en colaboración con instituciones
internacionales, pasaron del 37% del primer periodo al 53% en el segundo; se
observó un ligero descenso en la participación entre instituciones nacionales
(33% al 30%). Los elaborados en una sola institución fueron los menores con
el 30% y el 17% en el primer y segundo quinquenio, respectivamente.
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Los países con los que se identificó la mayor colaboración en ambos periodos, además de mantener o incrementar su participación son los Estados
Unidos, Francia y España. En países como Bélgica, Canadá y Alemania la
colaboración descendió notoriamente y pasó de un 9%, 5% y 13% en el primer periodo, a un 1.3%, 0.9% y 6% en el segundo periodo, respectivamente.
Por otro lado, se identificó el inicio de colaboración con países o combinaciones de países como Polonia, Ucrania, Inglaterra/Rusia (13%, 11% y 7%,
respectivamente) (Cuadro 4).
Cuadro 4. Países y % de colaboración con los GIMP por quinquenio*
País
Estados Unidos
Francia
Alemania
España
Bélgica
Canadá
Italia
Brasil
Argentina
1990-1994
53%
15%
13%
10%
9%
5%
4%
3%
2%
País
Estados Unidos
España
Francia/Polonia
Ucrania
Argentina
Inglaterra/Rusia
Alemania/Cuba/
Italia
Brasil
Chile/Israel/Suiza
1995-1999
49%
15%
13%
11%
8%
7%
6%
4%
3%
*En el cuadro sólo se muestran los países con los que se identificó una colaboración mayor al 2%.
144
La colaboración internacional tendió a generalizarse a lo largo del tiempo
—aunque para algunos grupos fue ocasional— y afectó al 26% y 30% de los
grupos en el primer y segundo periodo, respectivamente.
Con la finalidad de identificar el comportamiento de los GIMP en el área
de la física teórica así como la experimental, observamos en la década analizada que el número de GIMP teóricos y experimentales en el primer quinquenio (1990-1994) fueron iguales, (13 grupos teóricos y 13 experimentales).
En el segundo quinquenio (1995-1999) hubo un crecimiento del 119% para
los teóricos (19 grupos nuevos) y del 170% para los experimentales (22 grupos nuevos), los GIMP experimentales crecieron un 51% más que los teóricos
(Fig. 5, página derecha).
Analizando la producción, tamaño y productividad media de los GIMP
(teóricos y experimentales) por quinquenio observamos que los GIMP teóricos crecieron en tamaño y pasaron de 5 a 6 miembros, su producción media
descendió ligeramente (de 16.5 a 16.4); es decir, una producción aproximada
de 3.3 y 3.2 documentos/año por grupo (primero y segundo quinquenios), lo
mismo su productividad media que paso de 3.4 artículos en cinco años por
autor a 3 (Fig. 6, página derecha). Para los GIMP experimentales se observó un
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
Fig. 5. GIMP por especialidad y por quinquenio
ligero crecimiento en tamaño medio, paso de 8.7 a 8.8 autores, y su producción media se incrementó a un artículo más (de 14.8 a 15.8), es decir a 2.94 y
3.16 documentos/año por grupo (primero y segundo quinquenios) y su productividad creció de 1.9 a 2.4 artículos en cinco años por autor (Fig.7)
Fig. 6. GIMP Teóricos por quinquenio
1990-1994 y 1995-1999
Fig. 7. GIMP Experimentales
por quinquenio 1990-1994 y
1995-1999
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Graficando el tamaño (núm. de miembros) y producción (núm. de artículos) de cada GIMP se observó en los grupos teóricos una correlación positiva para ambos periodos estudiados (Figs. 8-11). Las rectas calculadas para las pendientes de los grupos teóricos en el primer quinquenio es de 1.84
(R2=0.49) (Fig. 8) y para el segundo de 1.02 (R2=0.28) (Fig.10); observamos
una incertidumbre muy grande, la aparición de 4 grupos grandes (de 18,14 y
dos de 11 miembros) identificados en el periodo (1995-1999) que con la excepción de uno de los grupos de 11 miembros, no resultaron ser los más productivos (Figs. 8 y 10). Un comportamiento parecido resultó para los GIMP
experimentales en los que se observó una correlación positiva para ambos
periodos. Las rectas calculadas tienen pendientes de (R2 =0.44) (primer quinquenio) y (R2 =0.042) (para el segundo), la aparición de dos grupos grandes
(41y 37 miembros) y que no son (al igual que los teóricos) los más productivos
(Figs.9 y 11).
Fig. 8. GIMP Teóricos Producción 1990-1999
Fig. 9. GIMP Experimentales Producción 1990-1994
146
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
Fig. 10. GIMP Teóricos Producción 1995-1999
Fig. 11. GIMP Experimentales Producción 1995-1999
Se puede decir que los GIMP teóricos de un quinquenio a otro mantuvieron una producción media de 16.5 y 16.4 artículos, y los experimentales de
un quinquenio a otro incrementaron en un artículo más su producción (14.8
a 15.8); a pesar de lo anterior los GIMP teóricos publicaron más artículos que
los teóricos. Tanto en los GIMP teóricos como en los experimentales no se ve
evidencia de participación en grandes colaboraciones internacionales. Este
resultado probablemente sea distinto cuando se haga un análisis de la producción en el área de la física de la UNAM de la década de los 2000.
Madurez de los gimp
Los vínculos que realizó la comunidad científica de los GIMP del área analizada mediante la producción de artículos conjuntos sitúa a los investigadores
de Estados Unidos, Francia y España como importantes co-autores en la producción científica de la física en la UNAM. Los Indicadores de Actividades
Científicas y Tecnológicas, 1990-1999 (CONACyT, 2000) también señalan a
estos tres países como los de mayor participación en la producción científica
147
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 127-155
mexicana. Esta cooperación no es particular del periodo analizado, dado que
se identificó desde los ochenta por Russell (1995).
El elevado grado de colaboración con Estados Unidos, Francia y España
puede considerarse como indicador del grado de madurez de la disciplina en
la UNAM y de los equipos de investigación que los componen (Beaver, Rosen,
1978, 1979a, 1979b).
Dinámica grupal
Se observó un importante flujo de autores en los grupos, hasta el punto de que
ningún grupo presentó exactamente la misma composición en ambos periodos. En el Cuadro 5 se presenta la evolución experimentada por los grupos
del primer periodo. El 50% de los GIMP no se identificaron como tales en el
segundo periodo, y se caracterizaron por un tamaño significativamente más
pequeño que los grupos que se mantuvieron en el tiempo como productivos
Considerando los 26 grupos del primer periodo 15 (57.6 %) sobrevivieron como muy productivos en el segundo quinquenio; 14 (53.8%) conservó
un núcleo básico de sus miembros, 12 (46.1%) conservó sólo el IP (grupos
estables). Realizando un análisis de cada grupo se identificó a 10 miembros
de los 26 grupos que pasaron a ser IP en el segundo periodo.
Considerando los 67 grupos del segundo periodo, 52 (77.6%) eran nuevos (sus miembros no estaban adscritos a GIMP en el primer quinquenio). El
seguimiento de los autores con actividad mantenida en el área durante los
dos periodos permitió observar su distribución entre los 15 grupos restantes: 10 grupos (66.6%) mantuvieron hasta un tercio de sus miembros, otros
4 (23.5%) mantuvieron de uno a dos tercios y sólo 1 grupo (5.8%) tenía en
común con el primer periodo a más de dos tercios de sus miembros.
Cuadro 5. Evolución de los GIMP del primer periodo e influencia
del tamaño grupal sobre la misma
Evolución
Desaparición
Fragmentación
Disminución de tamaño
Aumento de tamaño
Total
148
Número
de grupos %
11 (42.3)
5 (19.2)
2 ( 7.7)
8 (30.7)
Tamaño medio de grupo
X (DE)
5.54 (1.42)*
8.8 (3.76)
8 (2)
7.5 (4.37)
26
9.95 (1.17)
*Los grupos que desaparecen tienen un tamaño significativamente más
pequeño que los restantes grupos (p<0,05): X (DE): media (desviación
estándar).
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
Se observó cierto solapamiento entre grupos: 23 autores (10% de los
autores) estaban adscritos a más de un grupo (primer periodo) y 91 autores
(17%) para el segundo; respecto a los documentos, 80 (18%) se realizaron en
colaboración entre varios grupos en 1990-1994, y 245 documentos (25%) en
el segundo. Para los grupos muy productivos no hubo gran diferencia en los
porcentajes, se observaron 19 (12%) y 81 (19%) de autores adscritos a más de
un grupo muy productivo y 48 (13%) y 195 (23%) documentos elaborados
entre varios de estos grupos (Cuadro 6).
Cuadro 6. Colaboración entre grupos
Periodos
Total Grupos
Autores adscritos a más de un grupo
Documentos elaborados entre varios grupos
1990-1994
42 Grupos
GIMP 26
23 (10%)
19 (12%)
80 (18%)
48(13%)
1995-1999
96 Grupos
GIMP 67
91(17%)
81(19%)
245 (25%)
195(23%)
Grupos estables
Se identificaron 12 grupos estables distribuidos de la siguiente manera: 9
grupos del Instituto de Física (60% de los grupos del Instituto de Física del
primer periodo); 2 grupos del Instituto de Ciencias Nucleares (100%, los dos
grupos identificados en el ICN sobrevivieron en el segundo periodo), y 1 grupo del Instituto de Investigaciones en Materiales (20%).
El tamaño medio de los grupos estables fue de 8-12 autores. Su producción se situó de 3 a 4 documentos/año, con una productividad de 2 documentos/autor/5 años (primero y segundo quinquenios). Estas variables no
cambiaron de forma significativa a lo largo del tiempo.
Los grupos estables se caracterizaron por presentar un mayor tamaño, producción y productividad que los grupos no estables (Cuadro 7). Para los grupos no estables se observó una correlación negativa entre el tamaño de grupo y
la productividad (p < 0,05) en ambos periodos. Esta correlación no se verificó
para los grupos estables (Fig. 12 ).
Cuadro 7. Indicadores de actividad de los grupos estables y no estables en ambos periodos
Número de documentos
Tamaño del grupo
Productividad
1990-1994
Grupos estables Grupos no estables
17,15 (5,91)
13,92 (3,17)
8,41 (4,48)
5,71 (1,38)
2,77 (1,12)
2,66 (0,85)
1995-1999
Grupos estables Grupos no estables
17,83 (3,30)
15,78 (5,27)
11,66 (9,11)
6,69 (2,98)
2,82 (1,19)
2,70 (0,91)
Nota: Datos expresados como X (DE): media (Desviación Estándar)
149
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Fig. 12. Correlación entre el tamaño y la productividad de los grupos no estables, 1990-1994 y 1995-1999.
El mayor tamaño de los grupos estables tiene una doble explicación: su
antigüedad les ha permitido disponer de más tiempo para reclutar investigadores y, por otro lado, su nivel científico les permite atraerlos. Es importante
recordar que la
productividad depende de factores científicos, como son la capacidad investigadora, el grado de dedicación a la investigación o la comunicación con otros investigadores, pero también a otros factores no estrictamente científicos, como
la disponibilidad de recursos económicos o la estructura organizativa del grupo
(Bordons, Zulueta, Barrigón, 1998).
También, es claro que los grupos más activos y/o de mayor tamaño tienen mejor acceso a financiamiento. Esto tiende a favorecer su dominio en
sus áreas de estudio. Sería interesante realizar futuros estudios de la relación
entre nivel de financiamiento y tamaño/productividad de los grupos.
El alto flujo de autores responsable de las variaciones en la composición
de los grupos a lo largo del tiempo, puede atribuirse a la incorporación de
nuevos investigadores a los grupos o a la mayor producción o movilidad de
otros. La existencia de autores sin vinculación fija al grupo de trabajo, como
es el caso de los becarios pre y posdoctorales, supone una población flotante
de autores que se renuevan periódicamente y contribuyen a ofrecer este cuadro tan dinámico.
Conclusiones
150
La metodología utilizada permitió identificar la formación de los grupos integrados al área de la física en la UNAM en la década de los noventa, la cual
fue validada por expertos del área y miembros de los grupos. Se puede decir
que la metodología no sólo permite identificar la conformación de los grupos,
sino, también identificar a los investigadores no asignados a grupos (algunos
LOS GRUPOS DE INVESTIGACIÓN MÁS PRODUCTIVOS...
de ellos muy productivos), y que constituyen, al igual que los grupos, una población del área igualmente valiosa para ser estudiada. Los estudios bibliométricos tradicionales centrados en el análisis de áreas o disciplinas, pueden
complementarse con estudios como el que aquí se presenta, que permite descender a identificar y caracterizar la actividad de los grupos e investigadores
individuales. En este caso concreto, el análisis a nivel macro del campo analizado, la física de la UNAM, podría ser objeto de una segunda investigación.
Por otro lado, la metodología brinda elementos que permiten continuar con
el análisis de los grupos. En este caso se sugiere continuar con el análisis de
los GIMP en la década de los 2000, así como de los Grupos estables; sería interesante analizar su comportamiento. Se sugiere como otro posible tema de
investigación el análisis de los grupos a través de cada uno de sus miembros, es
decir, qué papel juega cada uno de éstos dentro del grupo. Otro tema, también interesante de analizar sería la relación entre nivel de financiamiento y
tamaño/productividad de los grupos.
Debemos señalar que hay un porcentaje considerable de autores (60% y
72% en el primero y segundo quinquenios) no asignados a instituciones. En
el proceso de validación de datos se identificaron algunas causas, entre éstas
que los autores en sus publicaciones indican más de una institución. Hay casos de investigadores que realizaban estancias de trabajo o un año sabático,
y casos en donde se reporta la institución en distintas formas, para el caso
de la institución analizada se identificaron 16 variables, las tres más frecuentes fueron: UNAM, Natl Autonomous Univ Mexico, Univ Nacl Automa Mexico.
Aunque el 56% y el 71% de la producción en física en cada quinquenio se
asignaron a grupos, la experiencia de los desarrolladores de la metodología
refiere que los criterios empleados podrían ser demasiado estrictos. Sin embargo flexibilizarlos podría llevar a incluir como grupos a asociaciones ocasionales de autores.
El estudio muestra un importante aumento de la producción de la UNAM en
física de uno a otro periodo, que se asocia con un incremento en el número de
autores y grupos de investigación activos. Se observa un creciente papel de los
grupos en el área, que recogieron el 56 % de los documentos y el 51% de los autores no ocasionales en el primer periodo, frente al 71% de los documentos y
el 64% de los autores no ocasionales en el segundo quinquenio. Por otro lado, la producción del grupo tiende a incrementarse con el tamaño grupal en el
orden de 1 artículo por investigador adicional, pero la mayor productividad no
suele corresponder a los grupos más grandes. Analizando a los GIMP por temática básica y experimental, los GIMP teóricos son más productivos que los experimentales. A lo largo del tiempo, los grupos más productivos mantienen
niveles estables de producción, pero tienden a publicar en revistas de mayor
151
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factor de impacto en determinadas disciplinas como “materia condensada”,
“física matemática” y “partículas y campos”. Los grupos estables, que tienen
el IP y parte de sus componentes de uno a otro periodo, muestran mayor tamaño y producción. Los resultados de este estudio muestran el importante
papel que desempeñan los grupos en la disciplina y la necesidad de profundizar en el estudio de su estructura y dinámica en futuras investigaciones
Agradecimientos
A la jefatura y al personal del Departamento de Bibliometría y Análisis Documental del Centro de Información y Documentación Científica (CINDOC)
Madrid, por su apoyo y asesoría en el uso de las instalaciones y equipo durante la estancia de la primera autora en España, y de manera especial a la Dra.
María Bordons por su respaldo y acertadas observaciones sobre una versión
previa del manuscrito.
Al Dr. Alejandro Raga y a un árbitro anónimo por sus valiosas sugerencias y aportaciones a la segunda versión del trabajo.
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155
Diagnóstico de la docencia e investigación en la Facultad de
Ciencias de la Documentación
de la Universidad Complutense de
Madrid
Rosario Arquero Avilés
Luis Fernando Ramos Simón *
Artículo recibido:
19 de mayo de 2009.
Artículo aceptado:
28 de agosto de 2009.
Resumen
La transformación de la Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación en la Facultad de Ciencias
de la Documentación ha sido un factor de estabilización de los planes de estudio y ha favorecido la labor del
personal docente e investigador. Al relacionar los datos sobre este personal y la actividad investigadora, la
conclusión general que se deriva es que la Universidad
Complutense tiene gran potencial de desarrollo investigador en el área de Biblioteconomía y Documentación.
Palabras clave: Docencia; Investigación; Recursos
humanos; Ciencias de la Documentación; Universidad Complutense de Madrid.
*
Los dos autores pertenecen a la Facultad de Ciencias de la Documentación de la
UCM, España. (Rosario: [email protected]); (L. Fernando: ramos@ccdoc.
ucm.es)
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 157-177
157
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 157-177
Abstract
Diagnostic of teaching and research in the Faculty
of Sciences and Documentation of the Complutense
University of Madrid
Rosario Arquero Avilés and Luis Fernando Ramos
Simón
Transformation of the University School of Library
Science and Documentation into the Sciences of Documentation Faculty has been a stabilizating factor for
the curricula and favored the labor of the teaching and
research activity, the general conclusion derived is that
the Complutense University has great development
and research potential in the area of Library Science
and Documentation.
Keywords: Teaching; Research; Human Resources; Documentation Sciences; Complutense University of Madrid
1. Entorno institucional
L
158
os estudios de Biblioteconomía y Documentación se implantan en la
Universidad Complutense de Madrid el año 1991 con la creación de la
Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación que comienza a
impartir ese año la Diplomatura de ese mismo título del primer ciclo universitario. En la actualidad la Escuela, transformada en Facultad de Ciencias de la Documentación en 2006, imparte los estudios de la Diplomatura
en Biblioteconomía y Documentación, la Licenciatura en Documentación, el
Máster en Gestión de la Documentación y Bibliotecas, los estudios e investigación para la obtención del título de Doctor y, desde 2009, el Grado en
Información y Documentación, ya aprobado por la Universidad y que supone la completa incorporación de estas enseñanzas al esquema de enseñanza
europeo diseñado hace una década en la conocida Declaración de Bolonia.
Si adoptamos una perspectiva algo más amplia, la creación de la Escuela
Universitaria de la Complutense en la última década del siglo XX, supone la
reanudación de los estudios que se habían impartido en la llamada Escuela
Superior de Diplomática, creada en 1856 e integrada a comienzos de dicho
siglo XX en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central, antecesora de lo que hoy es la Universidad Complutense. Desde una perspectiva
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
temporal más corta, la Escuela tiene como precedente inmediato el Curso
general de Documentación, impartido desde la década de los ochenta por el
núcleo de profesores de la asignatura de Documentación en la Facultad de
Ciencias de la Información, génesis del Departamento de Biblioteconomía y
Documentación, a cuyo cargo siguen estando más de los dos tercios de la docencia e investigación que se lleva a cabo en el área de conocimiento dentro
de la Universidad Complutense.
Unos años más tarde de la creación de la Escuela, en 1996, comienza a impartirse en la Facultad de Ciencias de la Información de la misma Universidad
el segundo ciclo universitario, de dos años de duración, llamado Licenciatura
de Documentación, al que se accede una vez superados los estudios de Diplomatura en Biblioteconomía y Documentación, o bien, desde cualquier otra titulación de primero o segundo ciclo. Esta segunda vía exige la superación de unos
llamados “complementos de formación”, un conjunto de enseñanzas que se
corresponden con las materias básicas de la Diplomatura en Biblioteconomía y
Documentación. Desde el mismo comienzo, la Licenciatura estuvo muy vinculada a la Diplomatura, puesto que como es conocido tuvo su origen en diversas
iniciativas de la Escuela Universitaria, al igual que estaba sucediendo en otras
universidades españolas (Carlos III, Granada…) en donde la incorporación del
segundo ciclo suponía la posibilidad de obtener una titulación superior universitaria y facilitar el acceso al Doctorado. Del mismo modo que las otras universidades españolas, en la Universidad Complutense ambos ciclos han compartido
en gran medida estudiantes y profesores, de ahí que, por decisión de la Universidad, desde 2002 y hasta la actualidad, la Diplomatura y la Licenciatura se
impartan ambas en la sede de la Escuela de Biblioteconomía y Documentación.
Con posterioridad, en 2006, en el marco del Espacio Europeo de Educación
(EEES), conocido como esquema de Bolonia, la Universidad aprueba la impartición del Máster Oficial de Bibliotecas y Gestión de la Documentación en la Escuela Universitaria. Como se ha mencionado, dentro de ese proceso la Escuela
se ha transformado en la actual Facultad de Ciencias de la Documentación.
Las líneas anteriores ponen de relieve que la institución que hoy forma la
Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense se
ha ido componiendo mediante una sucesiva agregación de elementos a partir
del reducido número de profesores y estudiantes con los que comenzó a funcionar la Escuela. Hoy, aproximadamente integran la Facultad algo menos de
unos mil estudiantes, en un proceso de renovación de nuevas titulaciones, y
en pocos años el Grado, el Máster Oficial y el nuevo Doctorado, adaptados
al Espacio Europeo, sustituirán completamente los títulos tradicionales de
Diplomatura, Licenciatura y los estudios de Doctorado promovidos por los
distintos Departamentos universitarios.
159
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 157-177
Planes de estudios
Como se ha puesto de manifiesto en estas líneas, los planes de estudios de
Biblioteconomía y Documentación del primer ciclo universitario se corresponden con la Diplomatura y los del segundo ciclo con los de Licenciatura.
Pero dado el periodo de transformación y adaptación al Espacio Europeo de
Educación Superior, estas líneas que escribimos quedarían muy pronto obsoletas si no hacemos referencia al nuevo esquema de Bolonia, estructurado en
tres niveles: Grado, Máster y Doctorado.
El Grado en Información y Documentación, ya aprobado pero que comenzará su implantación en el curso 2009-10, por un lado responde a un esquema común establecido por el Gobierno de la Nación para todos los Grados y, por otro, obedece al esquema común fijado por todas las universidades
españolas que imparten el título que se ha plasmado en el conocido como Libro Blanco de Información y Documentación (www.aneca.es/activin/docs/
libroblanco_jun05_documentacion.pdf ).
El contenido básico del plan en cuanto a materias y carga docente queda
resumido en la Tabla 1. Hay que tener en cuenta que la duración del Grado queda establecida en cuatro años durante los cuales el estudiante habrá
de cursar un total de 240 créditos europeos (ECTS), en donde cada crédito
equivale a un trabajo del alumno de 25 horas repartidas en clases teóricas,
prácticas, trabajos dirigidos, estudio personal y exámenes. El título intenta
formar profesionales capaces de seleccionar, gestionar, organizar y preservar
la documentación y la información para que puedan ser utilizadas por terceros independientemente del lugar donde estén depositadas o de su formato
y soporte. Así, el futuro titulado estará capacitado para trabajar en todo tipo
de unidades de información y como gestor de contenidos.
Tabla 1. Síntesis de la propuesta de Grado en Información y Documentación.
Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense.
Oferta total de créditos del título de grado:
Obligatorios 198, a los que el alumno debe añadir
42 Creditos optativos a elegir entre los 126 ofertados
Módulos
Créditos
totales
ofertados
60
Créditos
Obligatorios
60
Créditos
Optativos
ofertados
-
2. Documentos, planificación y evaluación de Unidades
y Sistemas de Información
54
36
18
3. Fuentes de información y estudios métricos
4. Representación y recuperación de la información
5. Gestión técnica de documentos de archivo
54
42
36
24
30
12
30
12
24
1. Materias Básicas
160
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
6. Tecnologías de la información y edición digital
36
18
18
7. Formación genérica en Documentación
30
6
24
8. Prácticas Externas
6
6
-
9. Trabajo de Fin de Grado
6
6
-
324
198
Créditos Totales
Créditos que el alumno debe cursar para ser Graduado
126 a elegir 42
240
Por su parte los estudios de Máster, regulados por el Gobierno con anterioridad al Grado, se implantaron en la Universidad Complutense en 2006.
El Máster en Gestión de la Documentación y Bibliotecas tiene una orientación marcada exclusivamente por la Universidad. Pero dada la gran diversidad y especialización en la formación del profesorado que lo imparte, desde
un principio se pensó en la posibilidad de estructurar dichos estudios en torno a un armazón común que desarrollara las competencias profesionales más
altas, particularmente centradas en el dominio de las nuevas tecnologías de
la información y la recuperación de información, así como en las prácticas
profesionales y el trabajo final del Máster. En estos dos ámbitos se trataba
de aprovechar la excelente infraestructura bibliotecaria de la que dispone
la Universidad Complutense y su proximidad con las grandes instituciones
bibliotecarias y documentales nacionales, así como aprovechar el excelente
plantel de profesionales y profesores que enseñan en la Facultad de Documentación Complutense.
A partir de ese núcleo común se establecieron cinco especialidades del
Máster y se siguen impartiendo todas en la actualidad:
yy
yy
yy
yy
yy
Bibliotecas
Gestión de la Documentación
Gestión de Archivos
Documentación en Medios de Comunicación
Patrimonio Bibliográfico
2. Análisis de los resultados
Los resultados que se presentan a continuación son fruto del trabajo de campo realizado por los autores durante el periodo de duración del proyecto
“Potencialidades de la investigación y docencia en Bibliotecología y Ciencias
de la Información”, dirigido por el Dr. Gorbea Portal (años 2006 a 2008 incluidos). Para recabar toda la información, cuya síntesis se presenta en este
161
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 157-177
trabajo, se aplicaron los diferentes cuestionarios (institucional, de recursos
humanos y de proyectos de investigación) descritos en el trabajo sobre metodología del proyecto que se presenta en esta misma publicación. En este
punto creemos conveniente poner de manifiesto la ingente cantidad de información recabada sobre recursos humanos, dado el elevado número de profesores e investigadores (60 en total) adscritos a la Facultad de Ciencias de
la Documentación de la Universidad Complutense y/o al Departamento de
Biblioteconomía y Documentación de dicha Universidad, durante el periodo
de obtención de información, para cumplimentar los cuestionarios en el marco del proyecto (periodo coincidente con el de la cobertura cronológica del
proyecto a la que nos hemos referido: años 2006 a 2008 incluidos).
2.1. Recursos para la investigación y la docencia en la Facultad de Ciencias
de la Documentación de la Universidad Complutense
Se presenta en este apartado un análisis de diversos indicadores en los que se
examinan la distribución y características de los principales recursos implicados en el funcionamiento de la institución implicada: recursos económicos, recursos materiales y recursos humanos.
2.1.1. Recursos económicos y materiales
El 100% de los fondos de financiación de la Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense, como Facultad dependiente de
una Universidad pública, procede de la institución de la que depende (la propia Universidad Complutense y la Comunidad Autónoma de Madrid).
El presupuesto (Gráfica 1, página derecha) de la institución se distribuye
en tres grandes bloques: investigación, docencia y otras actividades (entre las
que se incluyen las funciones de apoyo a la gestión y a la docencia e investigación, y las funciones de carácter técnico y administrativo).
En el cuestionario institucional del proyecto se preguntaba sobre la existencia en la institución acerca de los siguientes recursos materiales:
a) Revista científica propia para difundir los resultados de investigación
b) Biblioteca
c) Aulas de informática
d) Aula de educación a distancia
e) Otros
162
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
Gráfica 1: Estructura porcentual según tipo de actividad
Importancia otras actividades
60%
Importancia investigación
20%
Importancia docencia
20%
Como expondremos a continuación, la Facultad objeto de estudio cuenta
con recursos materiales de todas las categorías definidas en el cuestionario
mencionado.
a) Revista científica propia para difundir los resultados de investigación.
Se trata de la “Revista General de Información y Documentación”,
editada por el Servicio de Publicaciones de la Universidad Complutense y cuyo responsable es la propia Facultad de Ciencias de la Documentación de dicha Universidad. Esta revista fue creada en 1991
y recoge los trabajos generados por la investigación propia y ajena a
la Facultad mencionada, es decir, las investigaciones relacionadas
con las denominadas Ciencias de la Documentación en su más amplia acepción, así como los aspectos de toda índole relacionados con
el ámbito académico de la misma. Está presente en diferentes bases
de datos y directorios de prestigio entre los que cabe mencionar: en
el ámbito internacional (Francis; Pascal y catálogo Latindex) y en el
ámbito español (Base de datos de Ciencias Sociales y Humanidades
ISOC del Consejo Superior de Investigaciones Científicas; base de datos de la Universidad Complutense de Madrid “Compludoc” y base de
datos “Datatheke” la Facultad de Documentación de la Universidad
de Salamanca).1
1
http://www.ucm.es/BUCM /revistasBUC /portal, (fecha de consulta 10 de diciembre de 2008).
163
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 157-177
b) Biblioteca. La Facultad cuenta con su propia biblioteca integrada en el
sistema bibliotecario de la Universidad Complutense y especializada
en archivística, bibliografía, biblioteconomía, documentación, historia del libro y de la imprenta y materias afines. La biblioteca del centro
cuenta con una colección integrada por 9000 volúmenes, 75 títulos de
publicaciones periódicas2 y, además, como Biblioteca de la red Complutense permite acceder a casi 35.362 libros electrónicos, 29.481 títulos de revistas electrónicas, más de un centenar de bases de datos,
alrededor de 8.700 tesis doctorales digitalizadas, de las cuales cerca
de 4.000 pueden ser consultadas libremente en Internet, 2.750 libros
antiguos digitalizados y una selección de varios miles de recursos para
la investigación existentes en Internet.
c) Aulas de informática. La Facultad cuenta con 5 salas de informática
equipadas con la última tecnología y con un equipo de servicios informáticos que le da soporte a la actividad docente e investigadora del
centro.
d) Aula de educación a distancia. El personal docente e investigador de
la Facultad tiene la posibilidad de utilizar el software WebCT para virtualizar sus asignaturas. La Unidad de Apoyo Tecnológico a la Docencia (UATD), dependiente del Vicerrectorado de Informática, es la
encargada de dar soporte para la utilización del Campus Virtual, además de gestionar la página de entrada al Campus Virtual de la UCM.3
d) Otros. En este apartado hemos de hacer referencia a la existencia en
el centro de un Taller de Encuadernación y de un aula de extensión
formativa “Lasso de la Vega” que tiene como finalidad tratar diversos
temas de gran relevancia e interés con personas de reconocido prestigio en el campo investigador, docente o profesional de nuestras disciplinas.4.
2.1.2. Recursos humanos
El Gráfico 2 (en página derecha) muestra la distribución de los recursos humanos que trabajan en la institución analizada. Como característica propia
de una institución de docencia universitaria, el 75% de los recursos humanos
son personal docente e investigador. El 25% restante corresponde a recursos
2
164
3
4
Más información en: http://www.ucm.es/BUCM /byd/index.php, (fecha de consulta 10 de diciembre de 2008).
http://www.ucm.es/campusvirtual, (fecha de consulta 10 de diciembre de 2008).
http://www.ucm.es/centros/webs/ebiblio/index.php?tp=Servicios&a=servicios&d=1934.
php, (fecha de consulta 11 de diciembre de 2008).
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
humanos que realizan tareas de apoyo a las funciones docentes e investigadoras. Hay que señalar también que el nivel de dedicación exclusivo a la institución y el grado de estabilización del personal docente e investigador es muy
alto (del total de profesores e investigadores, casi el 75% trabajan con dedicación a tiempo completo). A esta circunstancia pensamos que ha contribuido
el gran reto que ha supuesto la transformación de la Escuela Universitaria de
Biblioteconomía y Documentación en Facultad de Ciencias de la Documentación, a lo que hemos hecho referencia en el primer apartado de este trabajo. Dicha transformación ha supuesto también un incremento del 10% de la
plantilla global de la institución.
Gráfica 2: Distribución de los recursos humanos según tipología
Personal investigación y docencia
a tiempo completo
57%
Personal técnico
4%
21% Personal
administrativo
19% Personal investigación y docencia
de tiempo parcial
2.2. Docencia e investigación en la Facultad de Ciencias de la
Documentación de la Universidad Complutense
2.2.1. Estudiantes
Los estudios de Biblioteconomía y Documentación de la Universidad Complutense han recibido desde su creación el favor de los estudiantes. En efecto, el
número de estudiantes matriculados ha sido elevado en relación con el resto
de universidades que imparten estos estudios, y al igual que los demás centros, ha padecido en estos últimos años una notable disminución de estudiantes. En el cuadro elaborado para el Libro Blanco de Información y Documentación se pone de relieve el importante volumen de alumnos entre los
años de la década de los noventa y el 2003. Por su parte, la reducción de la
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cifra de los últimos cursos se compensa con el número de estudiantes que ingresan en los estudios de Máster, este último curso (2008-2009) con una cifra
de alrededor de 60, sin datos todavía definitivos.
Tabla 2. Datos de matriculación en Diplomatura y Licenciatura en la institución analizada.
Curso
Diplomatura
Licenciatura
2008/2009
87
32
53
2007/2008
96
2006/2007
121
71
2005/2006
143
118
2004/2005
161
135
2003/2004
193
114
Fuente: Propuesta de Grado de Información y Documentación presentado
por la Universidad Complutense a la ANECA (diciembre de 2008).
Tabla 3. Diplomatura en Biblioteconomía y Documentación: alumnos matriculados, de nuevo ingreso y titulados.
Fuente: Libro Blanco en Información y Documentación. ANECA, 2004, p. 37
166
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
Los primeros años de implantación de la Licenciatura se nutrieron de
una demanda latente de Diplomados en Biblioteconomía y Documentación
que deseaban obtener un título universitario superior, así como de otros titulados medios a los cuales la multidisciplinar licenciatura de Documentación les ofrecía la posibilidad de acceder, desde otros estudios (Enfermería,
Óptica, Podología…) a una titulación de grado superior y poder acceder al
Doctorado. Las cifras comparadas de estudiantes de la Licenciatura de Documentación se reflejan en la Tabla 4.
Tabla 4. Licenciatura en Documentación: alumnos matriculados, de nuevo ingreso y titulados.
Fuente: Libro Blanco en Información y Documentación. ANECA, 2004, p. 38
2.2.2. Profesores
Si los estudiantes han girado en torno a la Escuela Universitaria, los profesores que en ella han impartido docencia han tenido una adscripción departamental muy diversa, aunque como se ha dicho el Departamento de Biblioteconomía y Documentación, con profesores adscritos a la Facultad de
167
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168
Ciencias de la Documentación y a la Facultad de Ciencias de la Información,
concentra una gran parte del conjunto del personal docente vinculado a los
estudios de Biblioteconomía y Documentación.
Debido al gran tamaño de la Universidad Complutense, a su endémica escasez de recursos y al reducido tamaño de nuestros estudios dentro de la misma, durante muchos años ha habido una gran escasez de docentes, situación
que se había de suplir con grupos de estudiantes muy grandes y una notable
carga docente de los profesores. Téngase en cuenta a este respecto que la Escuela y los estudios que en ella se impartían tuvieron su origen en la Facultad
de Ciencias de la Información, en donde los estudiantes cursan varias asignaturas de Documentación. Dicho centro es uno de los más grandes y sus estudios de Comunicación están entre los más demandados de la Universidad,
quizás por estas circunstancias ha sido muy pacífica la integración de los profesores de ese Departamento con los procedentes de otros Departamentos
con sede en otras Facultades (Filología, Historia, Derecho…).
Al hilo de lo expuesto se pone de manifiesto que en la actual Facultad de
Ciencias de la Documentación sobre un total de 60 profesores que imparten
docencia, hay unos 40 profesores adscritos al Centro pertenecientes a cinco
departamentos diferentes, aunque la gran mayoría pertenecen al Departamento de Biblioteconomía y Documentación. Los demás profesores adscritos pertenecen a los departamentos de Ciencias y Técnicas Historiográficas,
Filología IV (Bibliografía y Literatura Hispanoamericana) Filología Inglesa I,
Filología Latina y Derecho Administrativo.
La mayoría de los profesores no adscritos son profesores del Departamento de Biblioteconomía y Documentación, adscritos a la Facultad de Ciencias
de la Información. Asimismo, profesan la docencia en el Centro otros docentes pertenecientes a esa Facultad, así como a Filología, Filosofía, Derecho y a
Medicina. En conjunto, el perfil de los departamentos implicados se corresponde con la multidisciplinariedad del área de conocimiento, en donde el
núcleo de disciplinas vinculadas a la Información y Documentación se complementa con otros saberes de las áreas de Humanidades, Filosofía, Derecho,
Medicina o Sociología.
En el análisis de los datos referidos al profesorado nos ha parecido interesante establecer, en una primera aproximación, una relación entre el análisis
del género de los autores que publican en el área de Biblioteconomía y Documentación y el análisis del género de los del personal docente e investigador
de nuestra Facultad. Como punto de partida, hemos de señalar que son numerosos los estudios bibliométricos en los que se analizan diversas características de los autores que publican trabajos en el área de Biblioteconomía y Documentación (Garland, 1991; .Garland y Rike, 1987; Raptis, 1992; Siddiqui,
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
1997) y, específicamente, el análisis del género ha sido uno de los aspectos
estudiados con más frecuencia en este tipo de trabajos. Mencionamos como
ejemplo el trabajo de Terry (1996) en el que se realiza un estudio de autoría
de los artículos publicados en College & Research Libraries, que se centra en
el análisis de los siguientes aspectos: género, afiliación institucional y nivel
de colaboración o co-autoría. En el caso español, citamos como ejemplo el
trabajo de Frías y Romero (1998) cuyo objetivo era investigar la autoría de los
trabajos publicados en las revistas españolas del área de Biblioteconomía y
Documentación durante el bienio 1992-1993. La información que recabaron
sobre los autores incluía: género, nivel de colaboración (co-autoría), productividad, distribución geográfica (ubicación geográfica del centro de trabajo
al que se adscribía el autor), profesión e institución de trabajo. En el análisis
del género de los autores que publican en el área de Biblioteconomía y Documentación en los trabajos a los que nos hemos referido son los hombres los
que superan en producción a las mujeres. Así, por ejemplo, en el trabajo de
Frías y Romero (1998), la proporción de autores hombres (54,21%) supera a
la de mujeres (46,79%). De un 6,07% de los autores no se pudo identificar el
género. Del mismo modo, en el trabajo de Herubel (1991), en el que el autor
estudió las características de género y procedencia institucional de los autores de una serie de revistas científicas de nuestra disciplina, se concluye que
el número de trabajos publicados por hombres era superior al número de trabajos publicados por mujeres.
En esta primera aproximación que planteamos hemos de señalar que no
existe un correlato entre los datos que se derivan de los trabajos citados, referidos a la producción científica de hombres y mujeres en el área de Biblioteconomía y Documentación, y el indicador de análisis de género del personal
docente e investigador de la Facultad de Ciencias de la Documentación de
la Universidad Complutense. Como se muestra en el Gráfico 3, el número de
Gráfica 3: Género del personal docente e investigador (PDI)
Mujeres
53%
Hombres
47%
169
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170
profesoras (53%) supera al número de profesores (47%). A la luz de estos
datos, sugerimos que sería muy interesante realizar un trabajo posterior en el
que se relacionaran los datos de género en lo referente a presencia de profesores y profesoras, con los datos de producción científica del personal docente e investigador de esta institución y, a posteriori, completar el estudio con
una comparación de los resultados obtenidos en nuestra Facultad con los del
resto de instituciones que han participado en el proyecto marco.
La distribución del personal docente e investigador según el año de su incorporación al centro analizado es objeto de análisis en el Gráfico 4. Se observa con
mucha claridad que los rangos de años en los que mayor número de personal
docente e investigador pasa a engrosar la plantilla, coinciden con los dos periodos cronológicos en los que se sitúan los momentos de mayor expansión de la
institución: el rango 1990-99 (en el que se sitúa la creación de la Escuela de
Biblioteconomía y Documentación, a la que nos hemos referido en el apartado anterior) y el rango 2000-09 (que coincide, tal como hemos analizado,
con el momento histórico en el que se produce la transformación de la Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación en la Facultad de
Ciencias de la Documentación).
Gráfica 4: Rango de antigüedad del PDI
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
El análisis del nivel de estudios del personal docente e investigador (Gráfico 5) nos lleva a establecer que, aunque el porcentaje de profesores e investigadores con el grado de Doctor es muy alto (72%), cabe esperar que dicho porcentaje se acreciente debido a un factor que ya hemos mencionado: la
transformación de la Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación en la Facultad de Ciencias de la Documentación. En este sentido y,
como es sabido, en España se requiere el título de Doctor para acceder a las
plazas de Profesor Titular de Universidad,5 rango propio de los profesores de
Facultad en nuestro país.
Gráfica 5: Nivel de estudios del PDI
Doctorado
72%
Licenciatura
28%
Al establecer una relación entre el año de nacimiento de los profesores que
imparten docencia en el centro y su nivel de estudios (Gráfico 6, página siguiente), se observa que el mayor número de profesores e investigadores con grado
de Doctor, nació entre los años 1960-69, seguidos del de los nacidos entre los
años 1950-59. Nos parece interesante también destacar los datos siguientes:
yy Del total de los profesores doctores, el 16,1% son muy jóvenes (su fecha de nacimiento se sitúa entre los años 1970-1979).
yy Solamente el 6,4% de los profesores doctores nacieron entre los años
1930-1949, lo que pone de manifiesto que la edad media del profesorado con grado de Doctor es muy baja.
5
En cumplimiento de lo dispuesto en la Ley Orgánica 6/2001, de 21 de diciembre, de Universidades, modificada por la Ley Orgánica 4/2007, de 12 de abril, en el Real Decreto 1313/2007,
de 5 de octubre, por el que se regula el régimen de los concursos de acceso a cuerpos docentes
universitarios.
171
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Gráfica 6: Nivel de estudios según el rango de edad
yy Si analizamos los datos referentes al personal docente e investigador
con título de Licenciado, se deriva una conclusión muy importante:
la tendencia a doctorarse es mayor entre los profesores más jóvenes
(sólo el 7% de los profesores nacidos entre 1970-1979 tiene el título
de Licenciado, frente al 16,1% de los profesores con grado de Doctor
nacidos en ese mismo rango de años).
El 82% de los profesores que imparten docencia en la institución analizada, han obtenido su título académico (bien de Doctor, bien de Licenciado)
en la Universidad Complutense. Según muestra el Gráfico 7 (página derecha),
el 18% restante corresponde a licenciados o doctores de otras Universidades
españolas (la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad Carlos III, la
Universidad de Granada y la Universidad Nacional de Educación a Distancia).
Por último analizaremos de manera sucinta la actividad científica del
profesorado de la institución analizada en este trabajo, en los siguientes términos:
172
yy Características generales de las publicaciones del personal docente e
investigador, en términos de tipología documental utilizada para difundir los resultados de la investigación.
yy Características generales de los proyectos de investigación, de los que
son investigadores principales y/o investigadores participantes los
profesores e investigadores de nuestra institución de procedencia.
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
Gráfica 7: Nivel de estudios según Universidad donde los obtuvo
yy En el Gráfico 8 se presenta una distribución de las publicaciones del
personal docente e investigador de la Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense, según la tipología documental utilizada. Como se deriva del análisis del Gráfico 8, en el 63%
de los casos, el personal de la institución analizada elige como vía para la difusión de los resultados de su investigación, bien la publicación
Gráfica 8: Tipología documental producida
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de artículos en revistas científicas, bien la publicación de monografías.
En el 37% de los casos restantes, se opta por la difusión mediante ponencias presentadas en Congresos, publicación de partes o capítulos
en libros, o se utilizan otros medios de publicación (fundamentalmente informes técnicos).
De la introducción de datos realizada por los autores del artículo, destacamos la siguiente información referente a los proyectos de investigación en
los que han participado profesores e investigadores de nuestra institución de
procedencia:
yy La participación del personal docente e investigador que imparte docencia en la Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense en proyectos dotados con financiación procedente
de una gran diversidad de instituciones, tanto públicas (mediante la
consecución de proyectos de investigación I+D +i) como privadas (mediante la firma de contratos de investigación a través de la Oficina de
Transferencia de Resultados de Investigación para el desarrollo de
trabajos de carácter científico y técnico).
yy De la totalidad de proyectos de investigación cuyos datos han sido
procesados por los autores de este trabajo, el 21% son proyectos de
investigación que actualmente están en ejecución y el 79% son proyectos terminados entre el año 2000 y el año 2005 (Gráfico 9).
Gráfica 9: Estado de los proyectos de investigación
En ejecución 21%
Terminado entre
200-2005
79%
174
yy El 86% de los proyectos de investigación analizados son de naturaleza
teórico-práctica (Gráfico 10, página derecha).
yy Las materias principales en las que se engloban los proyectos de investigación analizados son las siguientes: Análisis y lenguajes documentales, Archivística, Bibliotecas digitales, Bibliotecas escolares, Epigrafía
y Numismática, Evaluación de la investigación en Biblioteconomía y
DIAGNÓSTICO DE LA DOCENCIA E INVESTIGACIÓN...
Gráfica 10: Naturaleza de los proyectos de investigación
Teórico práctico
86%
Metodológico
14%
Documentación, Gestión de la información y la documentación, Información y documentación del sector público, Información y documentación en Ciencia y Tecnología, Libro antiguo, Nuevas tecnologías en
información y documentación y sus aplicaciones, Planificación y evaluación de sistemas de información y documentación y Recuperación de la
información.
3. Conclusiones
La actual Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense de Madrid data del año 2006 y es el resultado de la evolución que
han experimentado los estudios de Biblioteconomía y Documentación en dicha Universidad, tras la creación de la Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación en 1991.
En dicho proceso evolutivo la Facultad mencionada está en disposición
de asumir completamente el esquema de Bolonia en sus tres niveles: Grado,
Máster y Doctorado.
En lo que se refiere al análisis de sus recursos económicos y materiales
cabe señalar que su financiación procede directamente de su entorno institucional de dependencia (la propia Universidad Complutense y la Comunidad
Autónoma de Madrid). Es destacable la buena dotación de recursos materiales con los que cuenta la Facultad analizada.
La transformación de la Escuela Universitaria de Biblioteconomía y Documentación en Facultad de Ciencias de la Documentación ha sido, sin lugar
a dudas, un factor decisivo que explica el acto grado de estabilización y dedicación exclusiva del personal docente e investigador en esta institución.
El personal docente e investigador que imparte docencia en la Facultad de
Ciencias de la Documentación de la Universidad Complutense ha participado
175
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176
y participa en proyectos de investigación financiados por una gran diversidad
de instituciones, tanto públicas como privadas.
Al relacionar los datos sobre el personal docente e investigador y sobre la
actividad investigadora, la conclusión general que se deriva es que la Universidad Complutense tiene un gran potencial de desarrollo investigador en el
área de Biblioteconomía y Documentación, puesto que sus integrantes tienen
un alto nivel de formación académica, en un rango de edad muy bajo, lo que
hace prever una etapa de producción científica muy prometedora.
4. Fuentes y bibliografía
Arquero Avilés, R. y Salvador Oliván, J. A. 2004. Evaluación y análisis
de la producción de los autores de trabajos difundidos en publicaciones periódicas editadas en español. Documentación de las Ciencias de la Información, 27: 53-74.
Frías, J. A. y Romero Gómez, P. 1998, “¿Quiénes son y qué citan los
investigadores que publican en las revistas españolas de Biblioteconomía y Documentación?”, en Anales de Documentación, 1:2953.
Garland, K. 1991, “The nature of publications authored by Library
and Information Science faculty”, en Library & Information Science Research, 13(1):49-60.
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177
Publicaciones seriadas en ciencias bibliotecológica y de la información: su estado actual
Salvador Gorbea Portal *
Manuel Ávila Uriza **
Artículo recibido:
21 de mayo de 2009.
Artículo aceptado:
28 de agosto de 2009.
Resumen
Se presenta una caracterización general de las publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la
Información, a partir de su comportamiento bibliométrico en fuentes tales como el ULRICH’S y el JCR-SSCI ;
además se identifica el núcleo de revistas más “productivas” según el Modelo Matemático de Bradford, utilizando como fuente el servicio de información especializada Library and Information Sciences Abstracts
(LISA); el núcleo de revistas científicas identificado se
evalúa según el algoritmo propuesto por Alí, Young y
Alí.
*
Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, México.
[email protected]
** Programa de posgrado en Bibliotecología, UNAM, México. [email protected]
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 179-209
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Palabras clave: Revistas Científicas; Bibliometría;
Ciencias Bibliotecológica y de la Información;
Evaluación de revistas científicas.
Abstract
Serialized Journals on Library and Information
Science: Current Status
Salvador Gorbea Portal and Manuel Ávila Uriza
A general overview of serialized journals on Library
and Information Science is provided based on their bibliometric behavior in sources such as ULRICH’S and
JCR-SSCI ; additionally, using the specialized services of
the Library and Information Sciences Abstracts (LISA),
in accord with the Bradford Mathematical Model, a
nucleus of the most “productive” journals is identified. The journals making up this nucleus are assessed
in accord with the algorithm developed by Alí, Young
and Alí.
Keywords: Scientific Journals; Bibliometrics; Library and Information Sciences; Evaluation of Scientific Journals.
1. Introducción
L
180
as publicaciones seriadas constituyen en la actualidad un medio fundamental en la comunicación científica. Para muchas bibliotecas son
un elemento básico en sus colecciones de investigación, en especial para las
disciplinas de ciencia y tecnología, aunque en las Ciencias Sociales y Humanísticas también están tomando un papel preponderante en los procesos de
comunicación científica.
En el siglo pasado y el presente se ha dado un enorme desarrollo en el
conocimiento científico, como puede apreciarse en la proliferación de la literatura de este tipo. Es por ello que analizar el estado que guardan las publicaciones seriadas en una materia resulta un indicador del grado de desarrollo
de una disciplina.
Al igual que en otras áreas de la Ciencia, el surgimiento de las especialidades métricas dentro de las disciplinas Bibliotecológica y de la Información,
ha permitido la aplicación de métodos y modelos matemáticos para analizar
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
las actividades de los sistemas bibliotecarios y de información, y también las
tendencias y regularidades de la producción científica en un flujo de información documental en determinada temática, así como para evaluar las publicaciones seriadas en general o las revistas científicas en particular, como una
forma de estimular indirectamente los resultados de investigación de determinada disciplina, país o institución.
La literatura que recoge el análisis de la producción científica y en ella se
observa una tendencia a los análisis cuantitativos en el área de las Ciencias
Bibliotecológica y de la Información muestra la amplia metodología que se
puede emplear para este fin. En este sentido se pueden mencionar métodos
como el análisis de citas, aplicado al caso de las revistas iberoamericanas
(Herrero-Solana y Liberatorre, 2008); el empleo de un método multifacético
consistente en la combinación de la medición de la identidad e imagen de las
citas y la internacionalización de un título específico (Bonnevie-Nebelong,
2006); los métodos de naturaleza multivariante, como el análisis de dominio,
aplicado al caso de las Ciencias Bibliotecológica y de la Información en México (Moya –Anegón y Herrero –Solana, 2001); la utilización del análisis de
contenido de un título específico de la región africana (Alemna, 2001), Pero
también se encuentra el empleo de métodos que hacen énfasis en el aspecto
cualitativo, como un estudio que recoge la calificación que editores de revistas chinas le dieron a una muestra de títulos en el área (Calvert y Zengzhi,
2001); y en este mismo sentido, enfocando al aspecto cualitativo y recogiendo las opiniones de expertos, se puede citar un estudio apoyado por IFLA que
busca establecer normas de excelencia para las revistas del área (Gorman,
2002); también cabe mencionar, el método de análisis cualitativo de citas,
aplicado al caso de las revistas españolas (López-Yepes, et al., 2007). En el
mismo caso de las revistas españolas, otro estudio se enfoca al aspecto de la
gestión del proceso editorial mediante un análisis basado en normas internacionales de publicación científica, (Delgado López-Cózar, 2001 ). Existen
otros estudios que realizan una combinación de los análisis de citas y de la
opinión de los lectores, aplica al caso de las revistas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información de lengua alemana (Schloegl y Stock, 2004).
Con fundamento en lo anterior, el propósito general del presente trabajo
está orientado a realizar un estudio bibliométrico sobre el estado actual de
las publicaciones seriadas en las Ciencias Bibliotecológica y de la Información, sobre la base de la información obtenida en el repertorio bibliográfico
internacional, ampliamente conocido como el ULRICH’S International Periodicals Directory, mediante el análisis de un conjunto de variables seleccionadas, así como a evaluar un núcleo selecto de las principales revistas científicas
de la especialidad, según determinado algoritmo.
181
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Con el análisis del comportamiento de variables tales como frecuencia,
país de publicación, idioma, edad actual, edad terminal, estatus de la publicación y temas, se identifica el estado actual del comportamiento que guardan
las publicaciones seriadas, con énfasis en un núcleo selecto de revistas científicas, con lo cual se revelan los principales aspectos que caracterizan a este
tipo de fuentes en la especialidad objeto de estudio.
Se obtienen así aspectos comparativos de este tipo de publicación referentes al núcleo de revistas más “productivas”, las de mayor impacto y visibilidad, así como aquellas que resultan clasificadas en un rango selectivo de
acuerdo con el algoritmo de evaluación utilizado.
2. Material y método
2.1 Fuentes, variables utilizadas y procesamiento de los datos.
Para realizar este trabajo se obtuvieron los registros bibliográficos de las
publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información del
ULRICH’S International Periodicals Directory, edición de marzo de 2008. A
partir de la información obtenida en esta fuente se seleccionaron algunas variables con el objeto de poder esbozar un panorama sobre el estado actual de
las publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información, y
conformar así una taxonomía de dichas publicaciones.
De los 3571 registros obtenidos se capturaron en una hoja de Excel, diseñada para estos fines, las variables siguientes:
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
182
Número de acceso
Frecuencia de publicación
País de publicación
Idioma
Tema asignado a la publicación
Estatus de la publicación, activa o cesada
Fecha de inicio (para calcular la edad actual)
Fecha de terminación (para calcular la edad terminal)
Tipo de publicación (Académicas/Científicas, Noticieros, Comercio,
Directorio, Series monográficas, Boletines, Gobierno, Bibliografía,
Otras)
La transferencia de la información se realizó con cada uno de los registros,
dado que el sistema del ULRICH’S no permite realizarla de manera automática
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
a la hoja de cálculo Excel. Por esta razón se hizo la captura de la información
de 3571 registros.
De este total de 3571 registros del área de Ciencias Bibliotecológica y de
la Información se tomó el subconjunto de las publicaciones clasificadas con
el rubro de Académicas/Científicas (en el campo de Tipo de publicación),
que ascendió a 888 títulos; es decir el 24.92% del total del área de Ciencias
Bibliotecológica y de la Información. De este subconjunto se obtuvieron las
frecuencias de las variables siguientes:
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
Frecuencia de publicación
País de publicación
Idioma
Tema(s) asignado(s) a la publicación
Estatus de la publicación, activa o cesada
Edad Actual (títulos vigentes)
Edad Terminal (títulos cesados)
Esto permitió obtener la información necesaria para establecer un panorama de las publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información, no ya de todo el universo de ese núcleo temático del Ulrich’s, sino
sólo de las publicaciones clasificadas como de carácter científico. Al igual que en
el caso anterior y en todos los subsecuentes se utilizaron hojas de cálculo en
Excel para procesar los datos.
Otra fuente de la que se obtuvo información primaria para esta investigación fue el Journal Citation Reports (JCR), que se usó para identificar el núcleo sobre Ciencias Bibliotecológica y de la Información, del área de Ciencias
Sociales del Journal Citation Reports, el cual forma parte del portal del ISI
Web of Knowledge.
De la muestra anterior se obtuvo otro subgrupo de publicaciones al comparar el subconjunto de publicaciones científicas en Ciencias Bibliotecológica y
de la Información del Ulrich’s, con el conjunto de los títulos incluidos en el JCR
Social Science Edition, dentro del tema Information Science & Library Science, constituido por un grupo de 54 títulos identificados en esta área temática.
Esto dio como resultado un subconjunto de 32 títulos. Al igual que en los pasos
anteriores también se obtuvieron las frecuencias de las variables seleccionadas:
yy
yy
yy
yy
Periodicidad
País de publicación
Idioma
Edad
183
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A estas variables se les aplicaron los indicadores seleccionados, así como
el Modelo Matemático de Bradford y el algoritmo seleccionado para la obtención de los resultados que se describen en este apartado del artículo.
Otra fuente utilizada en este estudio fue la Library and Information
Science Abstracts (LISA), un servicio internacional de indización y resúmenes que sostiene información bibliográfica sobre las Ciencias Bibliotecológica y de la Información sobre alrededor de 500 publicaciones periódicas de
60 países. Del total de títulos incluidos, 26 son e-journals, una tercera parte
se publica en el Reino Unido, otra tercera parte en Estados Unidos y el resto proviene de varios países como Alemania, con 14 títulos; Japón, con 12;
Sudáfrica, con 6; Francia con 5, e India con 4, (CSA ILLUMINA, 2006). Esta
fuente se utilizó para determinar cuáles de las revistas identificadas en la base anterior son las que poseen mayor nivel de “productividad” al aplicarles el
Modelo Matemático de Bradford.
2.2 Métodos, Modelos Matemáticos, indicadores y algoritmo
de evaluación utilizados
2.2.1 El Modelo Matemático de Bradford
La aplicación del Modelo Matemático de Bradford en este artículo debe entenderse como un método que permite explicar cuantitativamente la relación
que existe entre las revistas científicas especializadas sobre un determinado
tema, y los artículos que en ellas se publican. Además el Modelo contribuye
a determinar la densidad de información por revistas, y por lo tanto a identificar aquellas que más producen sobre una temática, lo cual resulta de gran
utilidad para establecer criterios de evaluación a títulos o una colección específicos (Gorbea Portal, 1996, p. 103).
Los resultados obtenidos con este modelo están orientados a saber cuáles
son las revistas que más producen y de este modo obtener el núcleo de revistas más productivas de la especialidad, de acuerdo con los registros contenidos en el servicio especializado Library and Information Sciences Abstracts
(LISA). Se utilizó para ello un total de 34906 artículos que aparecen en esta
fuente y que pertenecen a 27 títulos de revistas en el momento de hacer este
estudio
2.2.2. Algoritmo de evaluación de revistas científicas de Aíi, Young y Aíi
184
Como una última etapa del proceso de análisis de las revistas científicas, se
evaluaron 27 títulos a los que se tuvo acceso del subconjunto anterior, con un
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
algoritmo propuesto por Alí, Young y Alí en 1996, para determinar la calidad de las revistas científicas; en esa ocasión el algoritmo también se aplicó
en las Ciencias Bibliotecológica y de la Información.
Tabla 1: Relación de Títulos a los que se les aplicó el Algoritmo de Evaluación
No.
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
Título de la revista
Annual Review of Information Science and Technology
Aslib Proceedings
Canadian Journal of Information and Library Science
College & Research Libraries
Information Processing & Management
Information Technology and Libraries
Interlending & Document Supply
Journal of the American Society for Information Science and Technology (*)
Journal of Documentation
Journal of Government Information
Journal of Information Science
Journal of Information Technology
Journal of Librarianship and Information Science
Knowledge Organization
Law Library Journal
Library Collections, Acquisitions, and Technical Services
Library Journal
Library Resources & Technical Services
Library Trends
Libri
Online Information Review
Program
Reference and User Services Quarterly
Restaurator
The Electronic Library
The Journal of Academic Librarianship
The Library Quarterly
(*) No incluido en el Ulrich’s. (se incluyó considerando la importancia que
este título tiene en la temática que se estudió).
De esta manera se obtuvo una calificación de carácter cualitativo basada
en una ponderación de valores cuantitativos para un núcleo selecto de publicaciones seriadas de la especialidad.
El algoritmo se propone como una guía general obtenida como producto
de un estudio de diferentes núcleos básicos en diversas especialidades, lo que
permite realizar una valoración integral de la ‘calidad’ de las revistas, sobre
la base de una evaluación de los siguientes aspectos (Ali, Young y Ali, 1996,
pp. 48-50)
185
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yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
yy
Propósito de la revista
Edad de la revista
Composición y cantidad de documentos por número
Composición (tipo de materiales)
Reputación de la revista
Afiliación del editor
Reputación del editor
Consejo editorial
Política de arbitraje
Circulación de la revista
Cobertura por índices/resúmenes
Valoración por el número de índices/resúmenes
Percepción de la revista
Cuota por suministro de manuscritos
Factor de impacto
Para aplicarle el algoritmo al núcleo de revistas seleccionado se evaluó el
último número al que se tuvo acceso de cada título calificando cada uno de
los 16 puntos anteriormente explicados. Dicha evaluación permitió establecer un rango selectivo ponderado de las revistas científicas más importantes de la muestra estudiada, y ésta es diferente a los núcleos obtenidos del
Ulrich´s y del JCR-SSCI. Los elementos metodológicos utilizados para esta
investigación pueden utilizarse en investigaciones posteriores en ésta u otra
rama temática que se requiera evaluar; con este propósito se muestran resumidos los elementos que integran el modelo metodológico representado en la
Figura 1 (página derecha).
Los resultados obtenidos con la aplicación de este modelo metodológico
se muestran en el apartado siguiente.
3. Análisis y discusión de los resultados
186
La edición de una publicación implica gastos considerables que frecuentemente se encuentran fuera del alcance de grupos pequeños de investigación
o de las asociaciones científicas, y esto determina características tales como
la periodicidad, el país de origen y la continuidad de la publicación. Los costos de impresión, distribución y administración de una oficina editorial con
el equipo que implica (computadoras, personal, etcétera), requieren de un
capital inicial para la etapa de arranque de la publicación. La mayoría de las
casas editoras consideran adecuado un periodo de dos años antes de que una
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
Fig. 1. Modelo Metodológico para el Análisis de las Publicaciones Seriadas en
Ciencias Bibliotecológica y de la Información
publicación empiece a generar sus propios ingresos a través de suscripciones
y publicidad. (Ardila, 1999, p. 214). En los resultados que aquí se presentan
puede observarse cómo incide esta problemática en la procedencia editorial
y la edad promedio que tienen las revistas en esta área del conocimiento.
3.1 Características generales de las publicaciones seriadas en Ciencias
Bibliotecológica y de la Información según bases de datos estudiadas
En el caso de las publicaciones seriadas del área de Ciencias Bibliotecológica y de la Información existe una producción considerable de asociaciones
y de instituciones educativas, aunque también hay una cantidad apreciable
de títulos reconocidos internacionalmente que son publicados por editores
comerciales, tales características marcan ya en cierta medida el perfil bibliométrico de las publicaciones seriadas de este campo temático, como se pudo
corroborar en la muestra obtenida.
187
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
3.1.1. Tipología documental
Respecto a la tipología documental, la cobertura de la fuente objeto de estudio
(Ulrich´s), muestra una fuerte tendencia a la difusión de publicaciones de corte comercial y divulgativo, tales como Noticieros, Boletines, Bibliografías y Directorios, entre otras. Este comportamiento quizás esté determinado por el hecho de que las proporciones en las que se producen este tipo de publicaciones
resultan muy superiores a las revistas científicas que publica cada disciplina.
Fig. 2: Distribución de publicaciones seriadas, según tipología documental
Lo anterior puede verse en la gráfica de la Figura 2, en la cual se indica
que prácticamente el 25% de las publicaciones corresponde a Revistas Científicas o Académicas, lo que significa que el restante 75% se distribuye en otras
tipologías documentales de corte comercial o divulgativo, según los tipos ya
indicados anteriormente. Otra proporción considerable (casi un 20%) no fue
posible clasificarla en esta variable por falta de información.
No obstante que la proporción de publicaciones identificadas como Académicas o Científicas se acerca al 25% del total de publicaciones identificadas por el Ulrich´s en Ciencias Bibliotecológica y de la Información, y que
algunas de ellas muestran edades avanzadas, como se verá más adelante, esta
proporción puede ser significativa si se toma en cuenta la corta edad de este
campo disciplinar, en comparación con otros como la Medicina, la Física o la
Astronomía.
3.1.2. Naturaleza y principales temáticas tratadas
188
Un aspecto interesante que puede analizarse lo constituye la Temática que abarcan las publicaciones seriadas. El Ulrich’s le asigna a cada uno de los registros
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
de este grupo el tema base Ciencias Bibliotecológica y de la Información y, además en algunos casos le añade un subtema de acuerdo con los contenidos
de la publicación registrada. En la Tabla 2 aparecen las temáticas más representativas que cubren la muestra de publicaciones seriadas integradas en el
Ulrich´s.
La categoría temática más representada, por razones obvias, en la base del
Ulrich’s es la correspondiente a las Ciencias Bibliotecológica y de la Información, con 1751 títulos, un 49.03% del total. También existen otras publicaciones que además del tema base: Ciencias Bibliotecológica y de la Información
(Library and Information Science), han sido indizadas en temáticas adicionales que se han distribuido en la Tabla de forma agrupada, entre las que se destacan agrupaciones como Resúmenes-Bibliografía-Estadística con un 7.48%,
seguidas de Bibliografía, Aplicaciones Informáticas y Edición-Comercio del
Libro, representadas por un 4.26, 4.23 y 3.11% respectivamente.
Otro grupo de categorías como Ciencias Médicas, Derecho, Educación,
por ejemplo, aparecen mostradas entre un 1.09 y 1.57 %. Mientras que un
grupo mayor de categorías se presentan de forma muy exigua por debajo
de un 1 %, han sido agrupadas en la categoría de Otras, y representan el
24.84% del total de temáticas y grupos de temas en los que aparecen indizados los contenidos de estas publicaciones.
Tabla 2: Distribución de publicaciones seriadas sobre Ciencias Bibliotecológica y de la Información,
por su naturaleza, según las principales temáticas asociadas a su contenido
Ulrich’s C.B.I.
FREC.
Generales
Ciencias-Bibliot-Inf. 1751
Resúm-Bibliog267
Estad.
Bibliografías
152
Aplic- Informáticas
151
Edic-Comer-Libro
111
Cienc-Médicas
56
Comput-Cienc-Inf54
Teo-Inf.
Derecho
52
Ser-Resúm-Índices
51
Educación
39
Otras
887
Total
3571
%
ULRICH’S C.B.I. CIENTÍFICAS
FREC.
%
49.03%
7.48%
Ciencias-Bibliot-Inf.
Aplicaciones Informáticas
568
32
63.96
3.60
4.26%
4.23%
3.11%
1.57%
1.51%
Resúm-Bibliog-Estad.
Computación -Teoría De La Información
Edición y Comercio del Libro
Negocios y Economía - Rel. Labor. e Industr.
Historia
25
18
18
17
15
2.82
2.03
2.03
1.91
1.69
14
13
12
9
8
7
132
888
1.58
1.46
1.35
1.01
0.90
0.79
14.86
100.00%
1.46%
1.43%
1.09%
24.84%
Educación
Bibliografías
Ciencias Médicas
Educación - Métodos de Enseñanza y Curr.
Literatura
Derecho
Otras
100.00% Fuente: Ulrich’s International Periodicals Directory, edición de enero de 2005.
189
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
El procesamiento temático realizado sobre el grupo de publicaciones seriadas catalogadas como científicas no ofrece muchas posibilidades de análisis porque casi el 64 % del total de títulos identificados en esta fuente aparece especializado en el tema base estudiado y seleccionado en la prescripción
de búsqueda; es decir, en las Ciencias Bibliotecológica y de la Información. El
resto de los títulos que representan el 36% aparecen distribuidos en la Tabla
2 en otras categorías que han sido adicionadas al tema base, a las cuales para
poder mostrar una mejor representación se les ha omitido el valor correspondiente.
Entre las categorías más importantes adicionadas al tema base se encuentran las Aplicaciones Informáticas, que representa el 3.60 con 32 títulos,
seguido de otras agrupaciones de categorías tales como Resúmenes – Bibliografía – Estadísticas, Computación – Ciencia de la Información – Teoría de
la Información, registradas con proporciones de un 2.82 y un 2.03%. Estas
combinaciones temáticas asociadas al campo disciplinar de las Ciencias Bibliotecológica y de la Información resultan evidentes, pues corroboran la interdisciplinariedad que se da entre este campo temático y otras disciplinas
identificadas como Computación, Ciencia y Teoría de la Información, y con
otras en menor proporción, tales como Edición y Comercio del Libro, la Historia, la Educación, etcétera.
En este sentido vale destacar que las agrupaciones temáticas para conformar esta Tabla fueron tomadas tal y como las presenta el Ulrich´s en sus
campos temáticos.
3.1.3. Estatus actual
190
Una de las características de la fuente utilizada (el Ulrich´s) en esta parte de
la investigación, la constituye su carácter histórico y acumulativo. Como se
sabe, las revistas aparecen indizadas a pesar de ser títulos cuya publicación
ha sido cesada o suspendida, motivo por el cual en este apartado se indaga
sobre el estatus de cada uno de los títulos estudiados, tanto en lo general como en el grupo de revistas científicas o académicas.
La importancia de conocer el comportamiento de esta variable radica en
que sólo poco más de la mitad, el 58.56% del total correspondiente a 2091
títulos de las publicaciones analizadas están Activas, tal y como se puede
apreciar en la gráfica siguiente (Figura 3). Otra considerable proporción, el
33.10 % de estas publicaciones están Cesadas y sólo el 2.07% de éstas han
reportado una suspensión temporal de su salida. También fueron identificadas con un .0.45% Otras categorías y a un 5.82% no se le pudo identificar su
estatus por falta de información.
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
Fig. 3: Distribución de publicaciones seriadas, según estatus
En lo que respecta a las revistas científicas o académicas el comportamiento de esta variable resulta más alentador tal y como se ilustra en la gráfica de la Figura 3, pues se encontró que la mayor cantidad de publicaciones
de esta muestra se encuentran Activas, un 87.73% del total, correspondiente
a 779 títulos. No ocurre así en la muestra general analizada anteriormente,
debido a que las publicaciones Activas en esa muestra apenas sobrepasan la
mitad del total, y en un considerable porcentaje, el 33.10%, aparecen como
Cesadas, lo cual le confiere mayor estabilidad a los títulos de seriadas científicas que al resto de las que se publican de otro tipo. Es decir que las publicaciones seriadas en la muestra general del Ulrich´s, especializadas en esta
área disciplinar, tienen más probabilidad de desaparecer que las catalogadas
como Científicas o Académicas.
Debido al comportamiento presentado por las submuestras anteriores se
realizó un análisis comparativo entre el total de las publicaciones ingresadas
al Ulrich´s sobre este campo disciplinar y las submuestras de revistas científicas identificadas, así como las que aparecían indizadas en el JCR-SSCI en este
campo temático, según las variables que se presentan a continuación.
3.1.4 Frecuencia con la que se publican
Al analizar la periodicidad en general de este grupo temático en el Ulrich’s,
que abarca 3571 registros, se encontró, tal como lo ilustra la gráfica de la Figura 4, que la mayor cantidad de publicaciones, un 22.71% correspondiente a
811 títulos, se publica trimestralmente. Le siguen en orden de interés aquéllas
que se publican sin una frecuencia determinada, es decir de forma irregular;
un 20.55% y un 16.13% de estas publicaciones aparecen con una frecuencia
anual, mientras que las que aparecen semestral, están representadas con un
191
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192
10.11%. El resto de la información sobre esta distribución de frecuencias se
mantiene por debajo de un 10 %.
Fig. 4: Distribución de publicaciones seriadas según frecuencia
El análisis de la periodicidad de las publicaciones seriadas científicas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información registradas en el Ulrich´s indica, tal como lo ilustra la gráfica de la Figura 4, que la mayor cantidad de publicaciones, un
30.95% correspondiente a 275 títulos, se publica trimestralmente; el segundo
lugar aparece ocupado por la frecuencia semestral con un 14.22 % mientras que
la frecuencia irregular aparece en tercer lugar perfilada por un 12.05%.
Otro hecho que cabe destacar en el análisis de esta variable es la aparición
de publicaciones seriadas científicas con frecuencias semanales, bisemanales y
diarios, que aunque en proporciones prácticamente insignificantes pudieran
estar alertando sobre la presencia de publicaciones tipo noticieros científicos
y publicaciones de divulgación científica, puesto que la mayoría de las publicaciones catalogadas como Revista Científica se publican trimestralmente.
El análisis de la periodicidad de las revistas del núcleo del Journal Citation Report mostró, como se puede apreciar en la gráfica de la Figura 4, que
la mayor cantidad de publicaciones, un 53.13% correspondiente a 17 títulos, se publica trimestralmente. Mientras que un 28.13% lo hace con una
periodicidad Bimestral y entre ambas suman más del 80%. Este aspecto se
corresponde con la política del JCR de considerar, salvo algunas excepciones,
que las revistas científicas deben ser apreciadas como tales cuando alcanzan
una periodicidad superior a la semestral. No obstante tomando en cuenta esa
consideración de excepcionalidad aparecen exiguamente proporciones que
oscilan entre el 6 y el 3% con periodicidades Semestral, Irregular y Anual.
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
Una comparación de esta variable con las dos muestras anteriores denota
que en este reducido núcleo casi se duplica la proporción de revistas con periodicidad trimestral en relación con las muestras anteriores, aunque hay que
destacar que esta frecuencia se mantiene como la principal en los tres grupos
de publicaciones estudiados.
3.1.5. Principales países editores
En lo que se refiere a la distribución de las publicaciones según el país de
edición (Figura 5), se encontró que los países con mayor número de títulos
publicados en esta área son los Estados Unidos con el 44.36 % del total, correspondiente a 1584 títulos, y Gran Bretaña con un 10.73% de este total de
títulos, lo cual representa que entre estos dos países, los de mayor desarrollo
económico del planeta, editan más del 55% de las publicaciones seriadas en
Ciencias Bibliotecológica y de la Información que han sido ingresadas en el
Ulrich´s. El restante 45 % del total de revistas se distribuye entre una docena
de países, cuya representatividad aparece por debajo del 6%, entre los cuales
no figura ninguno de América Latina y el Caribe; algunos países de esta región como Brasil, México o Cuba, por ejemplo, aparecen exiguamente agrupados junto con los de otras regiones de Países en Desarrollo agrupados en la
categoría de Otros, los cuales aparecen representados en un 18.45%.
US : Estados Unidos; GB : Reino Unido; CA : Canadá; DE : Alemania; AU : Australia; FR : Francia
NL : Países Bajos; ES : España; IN : India; CN : China; DK: Dinamarca; IT: Italia; ZA : Sudáfrica; JP : Japón
Fig. 5: Distribución de las publicaciones seriadas, según país de edición
En relación con la distribución de las publicaciones seriadas científicas
según el país de edición, la Figura 5 muestra que el país con mayor número de
193
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
títulos publicados en esta área continúa siendo Estados Unidos representado
por un 31.64% del total de esta submuestra de publicaciones seriadas científicas, correspondiente a 281 títulos, seguido por Gran Bretaña, país que aunque publica la mitad del anterior aparece en segundo lugar de importancia
con un 15.65% de esta variable.
El JCR-SSCI es conocido por el sesgo preponderante que tienen sus bases
de datos hacia revistas pertenecientes al mainstream o corriente principal,
estas revistas, como se conoce, son publicadas en países desarrollados cuya
lengua materna es el Inglés. Este aspecto aparece reflejado en el análisis no
sólo de esta variable, la de País editor, sino que también determina el comportamiento de la variable Idioma de publicación de las revistas.
Por lo que respecta a la distribución de las revistas de este núcleo según
el país de edición se nota un pequeño cambio respecto de lo que se venía presentando en las dos muestras anteriores, en las cuales Estados Unidos ocupaba de forma preponderante el primer lugar. Sin embargo, la Figura 5 muestra
cómo el país con mayor número de títulos publicados en esta área es Gran
Bretaña con el 44.16% del total, correspondiente a 14 títulos, mientras que
en segundo lugar le sigue muy de cerca Estados Unidos, con 12 títulos.
3.1.6. Principales idiomas en los que se publican
194
Otra variable analizada de las publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información es la relativa a los idiomas en que aparecen los materiales. En la actualidad el inglés se ha convertido en la lingua franca cuando
se trata de difundir el conocimiento científico, tal como sucedía con el latín
en las discusiones sobre Filosofía y Teología durante la Edad Media (Ardila,
1999, p. 216).
Esta variable, como ya se indicó anteriormente, aparece muy relacionada con el País de edición de las publicaciones, y prácticamente condiciona la
segunda: el hecho de que los principales editores de publicaciones seriadas
científicas sean Estados Unidos, Gran Bretaña y en menor medida Australia
y Canadá justifica la presencia del Inglés como principal idioma en el que se
publican este tipo de documentos; a esto habría que añadir que otros países
cuya lengua materna no es el inglés también publican muchos de sus títulos
en esta lengua, tal es el caso de China y la región francófona de Canadá, por
sólo citar algunos ejemplos.
Así, al igual que en otras áreas de la ciencia, en ésta el Idioma en el que aparece la mayor cantidad de publicaciones es preponderantemente el Inglés, con
un 75.11% del total de publicaciones, correspondiente a 2682 títulos (Figura
6). Llama la atención en este sentido la presencia de otros tres idiomas que han
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
ganado espacio de forma más bien equitativa, en la generación de producción
científica, tal es el caso del Alemán (DE), del Español (ES) y del Francés (FR), los
cuales aparecen representados en un 4.90, 4.51 y 4.28%, respectivamente.
EN : Inglés; DE : Alemán; ES : Español; FR : Francés; NL : Holandés; ZH : Chino
PT: Portugués; IT: Italiano; DA : Danés; RU : Ruso
Fig. 6: Distribución de publicaciones seriadas según principales idiomas seleccionados
El comportamiento anterior también aparece ilustrado en la gráfica de la
Figura 6, en la que se observa que el Inglés tiene la mayor cantidad de publicaciones seriadas científicas, con 61.60% de las publicaciones, correspondiente a 547 títulos, seguido por el Alemán y el Chino representados con 8.33 y
4.50%, respectivamente. Estos países son los editores más significativos en
este tipo de publicación.
De igual forma y en estrecha relación con lo señalado anteriormente, y
como una consecuencia lógica de la situación destacada que ocupan los países de habla inglesa como lugar de origen de las publicaciones, el análisis de
la distribución de las revistas del núcleo del JCR-SSCI registró que la lengua
predominante, aun en mayor grado que en los dos grupos analizados previamente, es el Inglés, con 71.88% de las publicaciones, correspondiente a 23
títulos. Lo cual también puede apreciarse en la Figura 6, donde se muestra
que, enseguida y de manera consistente con la tendencia observada en el análisis de los grupos previos, figura el idioma Alemán con un 12.50%. También
se observa que aparecen entre los idiomas de mayor publicación, aunque en
proporción mucho menor, el francés, el italiano y el japonés.
195
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
3.1.7. Edad terminal (publicaciones cesadas) y actual (publicaciones vigentes)
El comportamiento de las publicaciones Cesadas sobre esta temática en el
Ulrich’s, según su edad, muestra una marcada diferencia respecto a las Vigentes, en este grupo de publicaciones el 72.81 y el 49.27% se distribuyen
en los grupos de 0-10 y de 11-20 años, respectivamente. De acuerdo con lo
mostrado en la Figura 7, más del 70% de las publicaciones que salieron de
circulación lo hicieron antes de cumplir 20 años de vida; es decir que la edad
promedio que alcanza este grupo de revistas es de 18 años de edad.
Fig. 7: Distribución de publicaciones seriadas según grupos etarios terminales
196
Este valor promedio se debe a que en este grupo de publicaciones Cesadas
también se detecta que menos del 5 % de este tipo de publicaciones rebasó los 50 años de edad. Una comparación entre las publicaciones Vigentes y
Cesadas indica que uno de los factores que caracterizan a las primeras es su
“longevidad”, mientras que al parecer las segundas en su mayoría dejaron de
existir en plena “juventud”
Un comportamiento contrario al anterior aparece también representado en
la Figura 7, referente a las publicaciones científicas Cesadas en esta temática, según grupo etario. En esta gráfica se observa cómo la mayor proporción de títulos (43.53%) figura con menos de 10 años de edad y sólo proporciones encontradas entre un 16 y un 18 % alcanzan edades entre los 11 y los 40 años. Estos datos
señalan que para este grupo de publicaciones la edad promedio es de 21 años.
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
En otro sentido el análisis de las publicaciones Vigentes, según su edad,
denota que el 22.72% de estas publicaciones corresponde al grupo etario
comprendido entre 21 y 30 años de edad, y que éste es seguido por aquellos
grupos que están entre los 31 y los 40, y los 11 y los 20 años, y que representan
el 20.80 y el 18.27%, respectivamente. Lo anterior significa que más del 61%
de las publicaciones vigentes se mueven en un rango de edad comprendido
entre los 11 y los 50 años de edad.
Fig. 8: Distribución de publicaciones seriadas, según grupos etarios actuales
Otro aspecto a destacar en relación con la edad de las publicaciones vigentes es la presencia de algunas que alcanzan 90, 100 y más años, tales como
la Library Journal, de Estados Unidos, que inició en 1876 y la Library Association Record, publicada por la Library Association desde 1899; un pequeño
cálculo con los datos del gráfico de la Figura 8 permite identificar que la edad
promedio de este grupo de publicaciones seriadas vigentes es de 31 años.
El comportamiento de estas variables, es decir Vigente vs Cesada, motiva
el interés por conocer la edad que tienen las publicaciones seriadas científicas
en cada uno de estos estados. En este análisis se observa que la mayor cantidad de las publicaciones seriadas científicas Vigentes aparecen representadas
en el grupo de 21 a 30 años de edad, el cual representa el 21.57% del total,
con 168 títulos. Y también se observa que más del 50% de las publicaciones seriadas en esta categoría corresponden a títulos que tienen entre 20 y 50
años de edad, tal y como se puede apreciar en la Figura 8.
197
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
Lo anterior, unido al hecho de que algunas proporciones de títulos encontrados con porcentajes que oscilan entre 1.28 y 2.70 %, aparecen entre
los 70 y 100 o más años de edad, demuestran que las publicaciones seriadas
científicas en esta especialidad no sólo en su mayoría están Vigentes, sino que
también tienen un promedio de edad de 18 años, lo cual refleja claramente la
corta historia de la disciplina, en comparación con otras como la medicina, la
ingeniería, etcétera.
Por último, en este proceso de análisis el resultado obtenido sobre la edad
de las publicaciones en el núcleo identificado en el JCR-SSCI, —todas ellas vigentes— permitió apreciar un comportamiento muy similar al de los grupos
previos, ya que el más numeroso corresponde al grupo comprendido entre
los 21 y los 40 años, que representa el 50% del total, con 16 títulos (Figura
8). También puede observarse que un porcentaje mayoritario de estas publicaciones, alrededor del 85%, tiene una edad que fluctúa entre los 11 y los 60
años, lo cual indica un nivel apreciable de estabilidad dentro de esta variable.
En los tres grupos analizados hasta ahora para los valores mayores se
identifican tendencias cuyos resultados son prácticamente iguales, lo cual
refleja consistencia en el hecho de que se trata de subconjuntos del mismo
núcleo de publicaciones, que sucesivamente toman un sesgo de carácter más
académico- científico, y en el caso del JCR-SSCI el sesgo está determinado por
el indicador principal de esta fuente, es decir el Factor de Impacto. En la Tabla 3 se muestran, de manera comparativa, los valores más altos de cada una
de las variables analizadas, a excepción de los casos en que no fue aplicable
este indicador.
Tabla 3: Comparación de las variables analizadas, de acuerdo con el valor de mayor proporción
Variable
Frecuencia
País
Idioma
Edad vigente
Edad Terminal
(Cesadas)
Estatus
Temas
198
ULRICH’S
Trimestral=22.76%
Estados Unidos=44.44%
Inglés=70.93%
21-30 años=22.72%
0-10 años=42.08%
ULRICH’S CientÍficas
Trimestral=30.95%
Estados Unidos=31.56%%
Inglés=61.62%
21-30 años=21.52%
0-10 años=43.10%
JCR-ULRICH’S
Trimestral=53.13%
Gran Bretaña=43.75%
Inglés=61.62%
21-40 años=50%
(No aparecen las cesadas)
Activas=58.67%
Activas=87.75%
Activas = 100%
Ciencias Bibliotecológica y Ciencias Bibliotecológica y de Ciencias Bibliotecológica y
de la Información = 49.13% la Información-Aplicaciones de la Información= 100%
Informáticas = 3.60%
De esta manera se observa que tanto en las publicaciones seriadas como en
las académicas o científicas, así como en las resultantes del núcleo del JCR-SSCI
se pueden distinguir características que por su generalidad pudieran estar caracterizando a este tipo de publicaciones en la temática estudiada. Entre estas
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
características se destacan que se trata de publicaciones que tienen por lo regular una frecuencia trimestral, son publicadas en inglés en Estados Unidos
y Gran Bretaña, se encuentran activas entre el 59 y 88 % de ellas y que tienen
entre 21 y 40 años.
3.2 Concentración-Dispersión de las revistas incluidas en LISA, según el
Modelo Matemático de Bradford
El análisis de la “productividad” de la muestra de revistas obtenidas del JCR en
la temática estudiada permite identificar un grupo de revistas claves, en el que
se incluyen las pertenecientes al núcleo y a la segunda zona o clase de la Tabla
4, y de acuerdo con lo establecido por la metodología empleada para el cálculo
de este modelo. Los resultados obtenidos se muestran en la referida tabla.
Tabla 4: Distribución de revistas clave según “productividad” de artículos
Título
Library Journal
College & Research Libraries
Information Processing & Management
The Journal of Academic Librarianship
Aslib Proceedings
Library Trends
Journal of Information Science
The Electronic Library
Artículos
9836
3311
1841
1822
1604
1406
1401
1128
Editor
comercial
académico
comercial
comercial
comercial
académico
comercial
comercial
Library Resources & Technical Services
1126
académico
The Library Quarterly
1057
académico
Program
1006
comercial
A simple vista la correlación existente entre la muestra de artículos y de
títulos es muy representativa para este estudio, puesto que el coeficiente de
correlación entre estas dos variables es de r = 0.9902858. Sin embargo, los
valores obtenidos del cálculo y comprobación del Modelo Matemático de
Bradford indican que la muestra obtenida de artículos y revistas, por muy
corto margen, no cumple con el postulado teórico sustentado en este modelo. Este comportamiento se le atribuye a la presencia de un grupo de títulos
que tienen edades por encima de los 80 años, y en el caso de las dos más
“productivas”, o núcleo, superan los 100 años, lo que les permite participar
con mayor numero de artículos en la muestra, comportamiento que puede
ser entendido como una distorsión de la muestra y que hace que los valores
de n1 y n2 sean un tanto diferentes, así como que los títulos calculados de la
tercera zona sean cuantitativamente mayor que los observados.
199
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
Otra forma de comprobar el no cumplimiento de los datos de la muestra con
lo postulado por Bradford se deriva de la representación gráfica de las curvas de
dispersión de los datos calculados por el modelo y los observados en la muestra.
Fig. 9: Distribución en orden de productividad decreciente de artículos por revistas según el
Modelo Matemático de Bradford
200
Se observa aquí cómo en la gráfica de la Figura 9 existe una marcada separación entre las líneas que representan la muestra observada de la calculada,
sobre todo al inicio de los datos, punto o segmento de la línea que se corresponde con el núcleo de revistas más “productivas”; vale la pena indicar que
en algunos puntos de esta dispersión las líneas llegan a alcanzar una superposición exacta.
Este desajuste del modelo respecto a la muestra estudiada se corresponde
con otras aplicaciones del mismo en esta especialidad (véase Gorbea-Portal,
1996), por lo que pudiera estar influyendo también en este comportamiento
la naturaleza interdisciplinaria del campo temático estudiado.
Una comparación entre la distribución de revistas obtenidas del JCR-SSCI,
según rango de clasificación a partir del Factor de Impacto, y la obtenida de
acuerdo con el Modelo Matemático de Bradford, según niveles de concentración de artículos por revistas permite comprobar otra de las hipótesis o
supuestos sustentados en esta investigación, referida a que No existe una relación directamente proporcional entre la densidad de información por títulos
de revistas y el lugar que éstas ocupan en el Journal Citation Reports, según el
Factor de Impacto (véase Tabla 5).
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
La comprobación de esta hipótesis confirma una vez más que no siempre
las revistas más “productivas” son las más citadas, debido a que en la productividad de artículos influye de forma determinante la edad de la revista y su
frecuencia de aparición, mientras que en el impacto se manifiesta la aceptación e influencia de la revista en la comunidad científica que la cita.
Tabla 5: Ordenación de revistas según “productividad” de artículos y de acuerdo con su Factor de Impacto
Títulos según productividad
Artículos
Títulos según JCR
Factor de
Impacto
1.583
1
Library Journal
9836
*Journal of the American Society for
Information Science and Technology
(no está en Ulrich’s)
2
3
College & Research Libraries
Information Processing & Management
3311
1841
Journal of Information Technology
College & Research Libraries
1.543
1.245
4
The Journal of Academic Librarianship
1822
Information Processing & Management
1.192
5
6
7
Aslib Proceedings
Library Trends
Journal of Information Science
1604
1406
1401
The Information Society
Journal of Documentation
Journal of Information Science
1.018
0.983
0.747
8
9
1128
1126
Information Research
The Library Quarterly
0.701
0.688
10
11
The Electronic Library
Library Resources & Technical
Services
The Library Quarterly
Program
1057
1006
0.613
0.559
12
Journal of Documentation
910
Portal: Libraries and the Academy
The Journal of Academic Librarianship
Knowledge Organization
13
Law Library Journal
886
14
Libri
15
Information Technology and Libraries
Journal of Librarianship and Information Science
16
0.533
885
Library Resources & Technical Services
Online Information Review
0.512
0.469
736
Interlending & Document Supply
0.431
667
Canadian Journal of Information and
Library Science
0.4
17
18
Information Research
Journal of the American Society
for Information Science and Technology (no está en Ulrich’s)
627
541
Program
Library Trends
0.375
0.365
19
Journal of Information Technology
Interlending & Document Supply
498
Restaurator
0.364
478
0.355
Reference and User Services
Quarterly
Portal: Libraries and the Academy
477
Journal of Librarianship and Information Science
Aslib Proceedings
0.333
392
Law Library Journal
0.308
20
21
22
201
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
23
Journal of Government Information
388
Reference and User Services Quarterly
0.298
24
Restaurator
349
0.296
25
26
27
The Information Society
Online Information Review
Library Collections, Acquisitions,
and Technical Services
316
309
276
Library Collections, Acquisitions, and
Technical Services
Information Technology and Libraries
The Electronic Library
Library Journal
28
257
Libri
0.192
29
Canadian Journal of Information
and Library Science
Knowledge Organization
217
Journal of Government Information
30
Journal of Information Ethics
159
Journal of Information Ethics
0.288
0.26
0.227
0.1
0
3.3 Evaluación de las principales revistas científicas
Como se mencionó en el capítulo metodológico, el algoritmo seleccionado
para evaluar este núcleo de revistas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información es propuesto por Alí, Young y Alí, el cual representa una guía general
para calificar la calidad de las revistas, de acuerdo con los valores ponderados
medidos mediante el algoritmo de referencia (Alí, Young y Alí, 1996). Los resultados obtenidos mediante la aplicación de este algoritmo a las 27 revistas
seleccionadas a las que se tuvo acceso se muestran en la Tabla 6.
Tabla 6: Clasificación de revistas según algoritmo de evaluación seleccionado
TITULO DE LA REVISTA
1
2
3
4
5
6
7
8
202
9
10
11
12
13
14
15
16
17
Annual Review of Information Science and Technology
Information Processing & Management
Library Collections, Acquisitions, and Technical Services
Knowledge Organization
Journal of Documentation
Online Information Review
Information Technology and Libraries
Journal of the American Society for Information Science and Technology
College & Research Libraries
Aslib Proceedings
Journal of Government Information
Library Trends
Program
Interlending & Document Supply
Journal of Information Science
The Electronic Library
Libri
Puntaje
alcanzado
89
89
86
85
83
83
80
78
Calificación
76
75
75
75
74
73
73
73
72
C
C
C
C
C
C
C
C
C
B
B
B
B
B
B
B
C
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
Reference and User Services Quarterly
Restaurator
Journal of Information Technology
Law Library Journal
Canadian Journal of Information and Library Science
The Journal of Academic Librarianship
Journal of Librarianship and Information Science
The Library Quarterly
Library Resources & Technical Services
Library Journal
71
71
70
67
66
66
65
60
51
41
C
C
C
D
D
D
D
D
E
E
Los parámetros definidos para este algoritmo de evaluación establecen,
de acuerdo con el puntaje alcanzado para cada revista, que:
A = Excelente (90 y más)
D = Satisfactoria (60-69)
B = Muy Buena (80-89)
C = Buena (70-79)
E = No satisfactoria (59 ó menos)
Una distribución porcentual de la cantidad de títulos, según categorías
(letra A-E), del algoritmo de evaluación utilizado, representada en el gráfico
de la Figura 10 muestra la ausencia de revistas en la categoría o letra A (Excelente), indicativo de que ninguna de las revistas clasificadas según los resultados obtenidos en esta evaluación alcanzó el puntaje o ponderación necesaria
para ser clasificada en dicha categoría.
En este sentido, se observa que entre los principales títulos publicados
sobre esta especialidad sólo el 26% (7 títulos) alcanza, según el puntaje obtenido, a ser clasificado en la letra o categoría B (Muy Buena), mientras que
la mayoría de los títulos clasifican en la categoría C (BUENA) representados
en un 48% (13 títulos), a los que sigue con un 19 % (5 títulos) otro grupo de
revistas que son consideradas como satisfactorias; es decir D, y sólo el 7% (2
títulos) del total aparece bajo el rubro de revistas no satisfactorias E.
Fig. 10: Clasificación de revistas según algoritmo de evaluación seleccionado
203
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
La Tabla 7 presenta una comparación entre los diferentes núcleos de revistas, que han sido obtenidos de acuerdo con los indicadores y el algoritmo
utilizados en este estudio, lo cual permite también confirmar otra hipótesis
sustentada para esta investigación; a saber: que Es posible establecer un rango
selectivo de clasificación de revistas, diferente a los núcleos obtenidos mediante
el Modelo Matemático de Bradford y el Factor de Impacto del JCR-Social Science
Citation Index. Esto se debe, en lo fundamental, a que los criterios utilizados en cada uno de estos indicadores o en el propio algoritmo de evaluación
empleado son diferentes, no obstante que en este último aparece implícito el
Factor de Impacto, que es el indicador principal utilizado para hacer el ordenamiento de las revistas obtenidas del JCR-SSCI.
Al observar los datos es importante hacer énfasis en que la ordenación en
cada núcleo toma en cuenta criterios diferentes: el primer núcleo, considera
la productividad; es decir, la cantidad de artículos que se publican y que son
recogidos en el servicio de indización y resúmenes de LISA; el segundo núcleo
aborda los títulos que incluye el JCR-SSCI, ordenados de acuerdo con su factor
de impacto, el cual mide la influencia de las publicaciones considerando el número de citas que reciben, y, finalmente, el tercer núcleo toma en cuenta una
serie de aspectos de las revistas científicas que ya se explicaron en el capítulo
Tabla 7: Relación de revistas, según productividad, factor de impacto y el algoritmo de evaluación seleccionado
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
204
Títulos según productividad
(No. Articulos)
Library Journal (9836)
College & Research Libraries
(3311)
Information Processing & Management (1841)
The Journal of Academic Librarianship (1822)
Aslib Proceedings (1604)
Library Trends (1406)
Títulos según JCR
(Factor de impacto)
*JASIS (no está en Ulrich’s)
(1.583)
Journal of Information Technology (1.543)
College & Research Libraries
(1.245)
Information Processing & Management (1.192)
The Information Society (1.018)
Journal of Documentation
(0.983)
Journal of Information Science
(0.747)
Information Research (0.701)
The Library Quarterly (0.688)
Journal of Information Science
(1401)
The Electronic Library (1128)
Library Resources & Technical
Services (1126)
The Library Quarterly (1057)
Portal: Libraries and the Academy (0.613)
Program (1006)
The Journal of Academic Librarianship (0.559)
Journal of Documentation (910) Knowledge Organization (0.533)
Law Library Journal (886)
Library Resources & Technical
Services (0.512)
Títulos según Algoritmo
Annual Review of Information
Science and Technology (B)
Information Processing & Management (B)
Library Collections, Acquisitions,
and Technical Services (B)
Knowledge Organization (B)
Journal of Documentation (B)
Online Information Review (B)
Information Technology and Libraries (B)
*JASIS (C)
College & Research Libraries (C)
Aslib Proceedings (C)
Journal of Government Information (C)
Library Trends (C)
Program (C)
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
14
Online Information Review
(0.469)
Information Technology and Li- Interlending & Document Supply
braries (736)
(0.431)
Journal of Librarianship and In- Canadian Journal of Information
formation Science (667)
and Library Science (0.4)
Information Research (627)
Program (0.375)
Interlending & Document Supply
(C)
Journal of Information Science
(C)
The Electronic Library (C)
18
*JASIS (no está en Ulrich’s) Library Trends (0.365)
(541)
Reference and User Services
Quarterly (C)
19
Journal of Information Technolo- Restaurator (0.364)
Restaurator (C)
gy (498)
Interlending & Document Supply Journal of Librarianship and In- Journal of Information Techno(478)
formation Science (0.355)
logy (C)
15
16
17
20
Libri (885)
Libri (C)
21
Reference and User Services Aslib Proceedings (0.333)
Quarterly (477)
Law Library Journal (D)
22
Portal: Libraries and the Acade- Law Library Journal (0.308)
my (392)
Canadian Journal of Information
and Library Science (D)
23
Journal of Government Informa- Reference and User Services The Journal of Academic Libration (388)
Quarterly (0.298)
rianship (D)
24
Restaurator (349)
25
The Information Society (316)
26
27
28
29
30
Library Collections, Acquisitions, Journal of Librarianship and Inand Technical Services (0.296) formation Science (D)
Information Technology and Li- The Library Quarterly (D)
braries (0.288)
Online Information Review (309) The Electronic Library (0.26)
Library Resources & Technical
Services (E)
Library Collections, Acquisitions, Library Journal (0.227)
Library Journal (E)
and Technical Services (276)
Canadian Journal of Information Libri (0.192)
and Library Science (257)
Knowledge Organization (217)
Journal of Government Information (0.1)
Journal of Information Ethics Journal of Information Ethics (0)
(159)
relativo a la metodología y que permiten valorarlas de una manera integral. De
esta manera, se obtienen clasificaciones diferentes del mismo núcleo básico,
que presentan los títulos más relevantes, de acuerdo con el criterio elegido:
yy producción de artículos,
yy factor de impacto y
yy una evaluación integral basada en diferentes aspectos relevantes de las
publicaciones científicas.
Es pertinente aclarar que la diferencia en el número de títulos, en el caso
del tercer núcleo, se debe a que el título que aparece en primera instancia
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
206
“Annual Review of Information Science and Technology”, no está incluido
en LISA y, además, a que no se tuvo acceso a tres títulos para aplicarles el
algoritmo de evaluación: “Information Research”, “Portal: libraries and the
academy” y “The information society”.
Los resultados hasta aquí obtenidos en esta investigación demuestran que
el estado actual que guardan las publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información puede ser estudiado desde diferentes enfoques,
criterios de evaluación o herramientas disponibles, y que, según sea el caso, se podrán obtener núcleos de revistas ordenadas en forma diferente, de
acuerdo con el lugar que ocupan en el núcleo.
4. Consideraciones finales
Los resultados encontrados permiten reflexionar sobre algunos aspectos distintivos que, de una u otra forma, esbozan el estado actual que guardan las
publicaciones seriadas en Ciencias Bibliotecológica y de la Información.
Los resultados ofrecen información válida que puede ser utilizada en la
toma de decisiones en materia de Desarrollo de Colecciones Hemerográficas,
Política Editorial de revistas sobre estas disciplinas, así como en la orientación
para los expertos y profesionistas de estas especialidades, lo que conduciría
la dirección de sus esfuerzos para publicar sus trabajos de investigación, ya
que revelan los núcleos y revistas que más se destacan, de acuerdo con las
variables utilizadas en estas disciplinas, así como el perfil que como denominador común caracteriza a las publicaciones tipo en este campo del saber.
En este último aspecto se pueden identificar tres perfiles que caracterizan
igual número de núcleos de publicaciones obtenidos éstos de cada submuestra estudiada y de acuerdo con las variables utilizadas.
En las publicaciones seriadas obtenidas de la muestra general del Ulrich´s
se distingue que el perfil que caracteriza esta muestra y tipología de publicación es que la mayoría de ellas tienen una frecuencia trimestral e irregular;
que el 44% se publican en Estados Unidos; que más del 70% está en inglés;
que casi el 59% de estas publicaciones están vigentes, y que entre las cesadas
sólo alcanzaron en su mayoría los 10 años de vida, mientras que entre las publicaciones vigentes de este tipo se observa una edad comprendida entre los
21 y los 40 años de edad, y que sólo alrededor del 25% de estas publicaciones
son de carácter científico-académico.
Cuando la publicación seriada es de carácter científico académico, ésta
presenta una tendencia más marcada a tener una periodicidad trimestral, lo
cual resulta lógico de acuerdo con los estándares establecidos para este tipo
PUBLICACIONES SERIADAS EN CIENCIAS BIBLIOTECOLÓGICA...
de publicación. Aunque en menor proporción que el grupo mencionado en
el párrafo anterior, este tipo de publicaciones aparece en Estados Unidos (alrededor de un 31%) y el 62% de ellas en inglés. La proporción de publicaciones vigentes en este grupo es mayor que en el anterior, y casi un 88% son más
“jóvenes” que las anteriores, debido a que un 40% de ellas tienen entre 11 y
30 años de edad, lo cual revela la relativa “juventud” del quehacer científico
en estas disciplinas.
Si del núcleo anterior sólo se consideran aquellas publicaciones que han
sido incluidas en el JCR-SSCI, resulta lógico, por lo expuesto, que la tendencia hacia la periodicidad trimestral sea más acentuada en un 53%. Aunque
se mantiene la tendencia de que este tipo de revista aparezca publicada en
inglés, en igual porcentaje que el grupo anterior, en éste se observa cierta
tendencia a que estas revistas sean publicadas en Gran Bretaña, más que Estados Unidos, mientras que la edad de ellas está comprendida entre los 21 y
los 40 años, en un 50% de los casos.
Otras consideraciones asociadas con los resultados obtenidos que se pueden aportar, además de los perfiles anteriores, es la referida a la comparación
del núcleo identificado mediante la aplicación del Modelo Matemático de Bradford y el rango selectivo de revistas clasificadas según el algoritmo de evaluación utilizado; en este sentido se aprecia que sólo tres revistas identificadas
como las más “productivas” —o lo que es lo mismo, con mayores niveles de
densidad de información— aparecen clasificadas en este rango ocupando,
según los valores obtenidos por este algoritmo, los niveles 2, 9 y 10; tal es el
caso de los títulos Information Processing and Management, College and Research Libraries y ASLIB Proceedings, con clasificaciones de B, C y C, respectivamente.
Lo anterior comprueba, una vez más, que no siempre las revistas con mayor densidad de información sobre un tema son las que satisfacen los estándares de calidad establecidos para este tipo de publicación. Sin embargo, se
pudo identificar la coincidencia de cinco revistas altamente productivas que
aparecen en los lugares 3, 4, 7, 9 y 11 del ranking del JCR-SSCI con valores que
oscilan entre el 1.245 y 0.559 de Factor de Impacto, estas revistas son College and Research Libraries, Information Processing and Management, Journal of
Information Science, The Library Quarterly y The Journal of Academic Librarianship
Estas comparaciones, realizadas y evaluadas desde diferentes perspectivas
y aspectos, resaltan la presencia de dos revistas cuyo desempeño en cuanto a
densidad de información, cumplimiento de estándares de calidad y Factor de
Impacto, les permite figurar entre las primeras: College and Research Libraries
e Information Processing and Management. De acuerdo con este estudio estas
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 179-209
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revistas pudieran ser, entre otras de estos núcleos, las recomendadas para
que no falten en ninguna de las colecciones hemerográficas de las Bibliotecas
especializadas en estas disciplinas, y servir como patrón para las mejoras editoriales que realicen en las revistas científicas sobre estas temáticas, y además
ser recomendadas a los investigadores y profesionistas de estas disciplinas
para la publicación de sus productos de investigación científica.
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209
Investigación sobre el diseño curricular de la carrera de biblioteconomía y documentación en la
Universidad Católica de la Santísima Concepción (Concepción,
Chile)
María Teresa Fernández Bajón *
Artículo recibido:
29 de junio de 2009.
Artículo aceptado:
28 de agosto de 2009.
Resumen
El proyecto de planificación de la carrera de Bibliotecología y Documentación en la Universidad Católica
de la Santísima Concepción (Chile) que aquí abordamos revisa los aspectos fundamentales que incurren
en la formulación de los diseños curriculares universitarios, a saber: políticas de información, de educación,
institucionales, académicas y laborales de la sociedad
de la información chilena. El análisis realizado ha detectado problemas reales relacionados con el ámbito
académico-científico y político de la República de Chile.
*
Facultad de Ciencias de la Documentación de la UCM, España. maite@ccdoc.
ucm.es
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México,
ISSN: 0187-358X. pp. 211-223
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Palabras clave: Carrera universitaria; Biblioteconomía y Documentación; Políticas de educación;
Currículo universitario.
Abstract
The Planning Project of the Library Science and
Documentation Studies at the Catholic University of
the Holy Conception (Chile)
María Teresa Fernández Bajón
The planning project of the Library Science and Documentation studies at the Catholic University of the
Holy Conception (Chile) that we board revises the
fundamental aspects that are involved in the formulation of the university’s curricular designs, that is to
say: information policy, education policy, institutional
policy, academic and working policy of the society of
information of Chile. From the analysis carried out we
have detected real problems related with the academic, scientific and government areas of the Republic of
Chile which it is our aim to develop here.
Keywords: University Studies; Library Science
and Documentation; Education Policies; University Curriculum.
1. Planteamiento del problema
E
212
l presente proyecto se propone desarrollar una planificación curricular
universitaria donde converjan la teoría, la práctica y las implicaciones
ético-morales de la actividad del profesional de la información documental.
Esta perspectiva integrada obliga a que su planteamiento sea producto de un
proceso de investigación científica, social y de mercados de trabajo para esclarecer las demandas reales que deben orientar la formación. En suma, lo
que se pretende lograr es la pertinencia social y académica del currículo de la
Carrera de Bibliotecología y Documentación mediante el enfoque de competencias, sin olvidarnos de que la universidad debe producir conocimiento
científico y tecnológico para contribuir al enriquecimiento cognoscitivo del
individuo y la sociedad.
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
El propósito general del proyecto, enmarcado en el contexto académico
de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Concepción, Chile), se concreta en
problemas específicos analizados a lo largo del trabajo, que son los siguientes:
1. El estudio de las características de la sociedad de la información y políticas chilenas observando el rol del profesional de la información.
2. El análisis de las distintas carreras del área de conocimiento comparando los currículos de las enseñanzas en Bibliotecología y Documentación de Chile desarrolladas por las Universidades Tecnológica
Metropolitana de Santiago, Bolivariana de Santiago y Playa Ancha en
Valparaíso.
3. Al tratarse de una investigación evaluativa ha sido necesario un estudio de mercado y de las ofertas de trabajo existentes que contribuyeran al conocimiento preciso de la situación y, en consecuencia, a hacer
una aportación certera del ámbito y de la perspectiva del profesional.
4. Como reflejo y colofón, de todo lo anterior, el proyecto presenta la
Propuesta del Plan de Estudios teniendo en consideración los resultados del estudio de mercado que se efectuó.
Pero los dos últimos puntos serán tratados y publicados en un posterior
artículo dada la extensión del estudio del mercado laboral.
La justificación de la implantación de dicha Carrera en la Facultad de
Comunicación, Historia y Ciencias Sociales de la Universidad Católica de la
Santísima Concepción, es evidente. Primero es muy coherente que dicha carrera forme parte de una Facultad de Comunicación ya que responde al objeto
común de estudio del proceso comunicativo e informativo-documental. En
segundo lugar está sobradamente justificado dada la emergente demanda laboral de dichos profesionales en las regiones del sur de Chile, como demuestran los resultados del estudio de mercado. A su vez, resulta llamativo que las
Universidades que imparten estos estudios se concentren en el centro de la
República: Santiago de Chile y Valparaíso, y exista una ausencia total de ellas
en otras regiones del norte y sur. Y por último, está la necesidad académica de
presentar un plan de estudios universitario actualizado desde la visión amplia
de lo que significa la actividad documental.
Tratándose de una investigación de carácter teórico, evaluativo y de análisis social, los procedimientos metodológicos utilizados han sido los siguientes:
213
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 211-223
1. Estrategia coherente al abordar el problema, de tal manera que a partir de las escasas políticas de información gubernamentales existentes se han descifrado las actuaciones. En este punto hemos tenido en
cuenta antecedentes doctrinales.
2. Investigación en las fuentes personales, documentales e institucionales que revisan el estado de la cuestión. Con respecto a las fuentes personales incluimos entrevistas personales a responsables de instituciones académicas y otros profesionales del ámbito.
3. Análisis comparativo de los planes de estudio vigentes en las universidades de Chile confrontándolos con otras universidades americanas y
españolas.
4. Elaboración de la encuesta del estudio de mercado y de su reflejo en la
base de datos. La metodología aplicada a este punto se detalla en el estudio que será posteriormente publicado, como ya se dijo anteriormente.
Sin duda ésta ha sido la información más novedosa y valiosa del trabajo.
5. Finalmente se abordó la planificación docente y la infraestructura de
la futura Carrera de Bibliotecología y Documentación contando con
el asesoramiento de la figura del “curriculista” para reflejar el Proyecto Educativo Institucional y el Marco Curricular de la Universidad
Católica de la Santísima Concepción.
2. Estado del arte
La búsqueda retrospectiva de fuentes de información para elaborar el proyecto ha evidenciado la escasa investigación y las lagunas existentes en este
ámbito científico. Podríamos decir que los estudios dedicados a investigar el
problema curricular de la carrera a lo largo de su historia, y a relacionar las
nuevas competencias profesionales con el mercado laboral y los contenidos
curriculares son prácticamente nulos.
Sin embargo algunos trabajos intentan acercarse a este objetivo, a saber:
214
yy Gómez Fuentes, Héctor, Competencias exigidas al profesional de la información en Chile y las nuevas estrategias de formación de la Escuela
de Bibliotecología de la Universidad Tecnológica Metropolitana, en IV
Encuentro de Directores y III de docentes de Escuelas de Bibliotecología y Ciencia de la Información del MERCOSUR, Montevideo, Uruguay, Universidad de la República, 2000, pp. 29-44.
yy Jaque, Liliana; Ramírez, Verónica, “Perfil ocupacional versus perfil académico de la Escuela de Bibliotecología de la Universidad Tecnológica
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
Metropolitana”, en Edisis, 2(3):5-9, marzo, 1997.
yy Villalón, Alberto, “Desarrollo de las bibliotecas en Chil”,. en Edisis,
3(3): 24-29, diciembre, 1998.
yy Gómez Fuentes, Héctor; Pérez Ormeño, Carmen, “Situación y perspectiva de la educación bibliotecológica en Chile”, en Calva González,
Juan José y Martínez Arellano, Filiberto, eds., Proccedings INFOBILA
como apoyo a la investigación y educación bibliotecológica en América
Latina y el Caribe. México, 2005, pp. 133-154.
Finalmente cabe resaltar que han sido de gran interés las fuentes personales e institucionales consultadas, así como las reuniones y entrevistas con
profesionales y personalidades competentes y responsables en el ámbito documental, los cuales nos han servido para contrastar y discernir la problemática actual del documentalista.1
3. Políticas de información de la sociedad chilena
La consideración trascendente del concepto de información, el factor tecnológico y su reflejo en las nuevas tecnologías de la información han dado lugar
a una sociedad de la información en la que las necesidades sociales de información y el papel de los poderes públicos son fundamentales y constituyen lo
que denominamos Políticas de Información.
Para que los países generen políticas de información no basta sólo con
que éstas aparezcan en sus programas de gobierno y simplemente sean aprobadas, sino, más bien hay que constatar sus resultados a lo largo del tiempo.
Por esto el tino de una política puede ser medido por la coherencia o consistencia que exista entre las intenciones o declaraciones y los resultados o los
hechos.2 A su vez, para que se dé continuidad con este espíritu hace falta que
de ser una política de gobierno se convierta en una política de estado.
3.1. Políticas institucionales chilenas
Actualmente Chile cuenta con escasas instituciones que dirijan sus políticas
hacia el a fomento y el impulso a políticas de información orientadas hacia
1
2
Presidentes de Asociaciones y Colegios Profesionales, Rectores y Directores de la Carrera de
Bibliotecología de la Universidades donde ésta está implantada, Directora de la Biblioteca del
Congreso Nacional de Chile, etcétera.
M.T. Fernández Bajón, “Repercusión de la pólítica científica en la Universidad Española”, en
Boletín ANABAD, LV (2005), núm. 1-2, p. 318.
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INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 211-223
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las enseñanzas del área de conocimiento al que nos estamos refiriendo. En
este sentido hay que resaltar el papel desempeñado por los colegios y asociaciones profesionales que tienen que ver con la información, ya que son ellos
los que deben trabajar activamente para identificar dónde es necesario aplicar esas políticas de información. En realidad son los mencionados actores
quienes deben influir en los poderes de decisión del gobierno para que exista
una mayor presencia de liderazgo de estos profesionales, entendiendo que las
políticas empiezan con la propia actividad profesional y su institución.
Estas instituciones son las siguientes:
yy La Dirección General de Bibliotecas, Archivos y Museos
Mediante el Decreto 5.200 de diciembre de 1929 se creó la Dirección
General de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM) dependiente del
Ministerio de Educación, que es el encargado de las políticas públicas
en materia de cultura y relacionadas con museos, archivos y bibliotecas del Estado.
En su artículo primero, el Decreto establece que las bibliotecas, archivos y museos tienen funciones semejantes y finalidades comunes ya que
coleccionan, ordenan y dan a conocer los elementos destinados a la investigación y a la divulgación de la cultura. Estos servicios en su conjunto
constituyen el núcleo oficial de los conocimientos de un pueblo.
A su vez, ese documento reconoce que los museos se hallan desvinculados entre sí y que su organización no responde a un carácter orgánico ni a la cooperación que con las bibliotecas y archivos les corresponde desarrollar.
Por tanto considera que es de notoria utilidad nacional dar a estos servicios la estructura de coordinación, armonía y concordancia exigida por la
misión de la cultura y fijar claramente las funciones que cada establecimiento ha de cumplir, así como las relaciones que entre ellos deben mantener. Concluye diciendo: Deben cooperar con eficacia a la enseñanza
nacional divulgando por todos los medios los tesoros de sus colecciones.
yy El Colegio de Bibliotecarios y las Asociaciones Profesionales
La creación del Colegio de Bibliotecarios de Chile se remonta a comienzos de la década de los años 40, época en que el avance científico y
tecnológico volvió indispensable que las bibliotecas del país estuvieran
a cargo de personal especializado. Tras el I Congreso Nacional de Bibliotecarios y la posterior creación de la Asociación de Bibliotecarios
Profesionales de Chile, hacia fines del 1969, la cifra insuficiente de bibliotecarios titulados generó diversos problemas con respecto a la especialidad y para solucionar algunos problemas respecto a la valoración
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
de la eficiencia profesional, se publicó la Ley No. 14.453 que disponía
la necesidad de estar en posesión del título profesional de bibliotecario para ser nombrado bibliotecario en la Administración Pública y en
los Servicios y Empresas del Estado.
Después de esta Ley, poco a poco, fue tomando fuerza la necesidad de
constituir un Colegio Profesional como una forma integral de satisfacer a las personas que ejercen dicha profesión. Así, el 12 de julio de
1967 se presenta en el Senado del Congreso Nacional de Chile la moción que dio inicio al Proyecto de Ley que creó el Colegio de Bibliotecarios de Chile. La Ley Nº 17.161 del 10 de julio de 1969 pone fin a la
Asociación Bibliotecarios Profesionales de Chile y decide la definitiva
creación del Colegio de Bibliotecarios de Chile, (modificada por Ley
17.726 de 25 de septiembre de 1972).
Tras diez años de su constitución se promulga un Decreto Ley que
disuelve todos los Colegios Profesionales del país y los transforma en
Asociaciones Gremiales (A.G.) y por tanto pasa a denominarse, Colegio de Bibliotecarios de Chile, A.G. y los Consejos Regionales con
presencia en Antofagasta, La Serena, Valparaíso, Rancagua y Chillán.
Las misiones declaradas por el Colegio de Bibliotecarios de Chile
A.G. se reflejan a continuación:3
Defender los derechos de los bibliotecarios asociados.
Velar por el prestigio, prerrogativas y ética de la profesión de bibliotecario.
Promover el perfeccionamiento profesional tecnológico de sus
asociados.
Regulación (sic).
Por último, es muy meritorio el impulso que están recibiendo las Asociaciones de Archiveros de Chile y las Asociaciones de Archiveros
Universitarios, todas las cuales cuentan con sus propios Estatutos.
3.2. Políticas de educación: la carrera de Bibliotecología y la formación
académica de Biblioteconomía en las universidades chilenas
3.2.1. Antecedentes de la carrera de Bibliotecología
El primer esfuerzo de capacitación del personal bibliotecario que dictó cursos
elementales de bibliotecología data de 1913 por parte de la Biblioteca Nacional.
3
Colegio de Bibliotecarios de Chile A.G., en http://www.bibliotecarios.cl/acerca-del-cbc/historia, último acceso: 23 de abril de 2009.
217
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 211-223
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Desde esa fecha hasta el 1949, la Biblioteca Central de la Universidad de Chile inauguró varios cursos sin crear formalmente una Escuela de Bibliotecología. Diez años después, en 1959, la Universidad de Chile logró la creación de
la Escuela de Ciencias Bibliotecarias que pasó a llamarse Escuela de Biblioteconomía en 1960 y fue declarada Escuela Universitaria el 8 de abril de 1969
bajo la jurisdicción de la Facultad de Filosofía y Educación. La Universidad
de Chile extendió los estudios a provincias como Antofagasta, La Serena y
otras ciudades del centro y sur del País, lo que detallamos a continuación.
yy Antofagasta
La carrera se imparte desde el 1966 hasta el 1971 en el Colegio Universitario Regional en modalidad vespertina, con una duración que se
extendió hasta 6 años. Hubo nueve egresados en la 1ª promoción y el
título que obtuvieron fue de bibliotecario.
yy La Serena
Se dictó desde el año de 1962 hasta el de 1963 en el Colegio Regional
Universitario y tuvo una duración de 3 años. Sólo hubo siete egresados.
yy Chillán
Se impartió en la Universidad de Chile sede Ñuble desde 1969 hasta
el 1971; es decir 3 años más 3 meses de práctica. Hubo sólo una promoción constituida en su mayoría por mujeres. El ingreso a la carrera
exigía la rendición de la PAA y se recibía el título de bibliotecario.
yy Concepción
La carrera fue creada en 1974 en la Universidad de Concepción con el
fin de tener profesionales idóneos para su Biblioteca Académica. Su
única promoción tuvo que rendir la PAA. La duración de la carrera fue
de 4 años más 3 meses de práctica y se otorgó el título de bibliotecólogo. Sólo salió una promoción, es decir, la carrera duró cuatro años.
yy Temuco
Bibliotecología se dictó en el año 1962 en el Colegio Regional Universitario hasta el año de 1979, siendo ya la Universidad de Chile sede
Temuco. En ese periodo se reabre la carrera por lo menos 2 veces. La
duración de los estudios era de 3 años más una práctica profesional de
3 meses.
La filosofía aplicada por las escuelas partía de los problemas que tenían las bibliotecas chilenas para recoger el conocimiento teórico y
práctico que debían tener sus graduados a fin de contribuir a la solución de los problemas socio-económicos del país.
Durante la década de los años 70 hubo varias propuestas de implantación de un master pero el golpe militar interrumpió las gestiones y
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
anuló también la publicación de la Revista Chilena de Bibliotecología y
Documentación.
En 1981 la educación superior fue reorganizada y la Bibliotecología no
fue considerada “profesión universitaria” por lo que pasó a depender
de la Academia de Estudios Tecnológicos de la propia Universidad de
Chile, y más tarde del Instituto Profesional de Santiago de Chile. Con
el tiempo la enseñanza de la Bibliotecología en Chile ha ido gradualmente adaptándose al modelo de educación superior imperante en el
país desde la publicación de la Ley Orgánica Constitucional de la Enseñanza (LOCE), ley 18.962 del 10 de marzo de 1990.
3.2.2.Los estudios de Bibliotecología en las Universidades Chilenas
En la actualidad la carrera de Bibliotecología se imparte en tres universidades, dos en la capital del país y la tercera en Valparaíso:
yy La Universidad Tecnológica Metropolitana de Santiago (UTEM) está
ubicada en la ciudad de Santiago
yy La Universidad de Playa Ancha de Ciencias de la Educación (UPLACED) está en Valparaíso y
yy La Universidad Bolivariana se localiza en Santiago de Chile
Las dos primeras ofrecen programas de cinco años de duración conducentes al título profesional y al grado de Licenciado. Por su parte, la Universidad de Playa Ancha en el año 2000 implantó los estudios de postgrado con el
Magíster en Bibliotecología e Información y luego finalizó todo en el 2006.
La formación técnica de nivel superior en Bibliotecología es impartida en el
Centro de Formación Técnica de la UTEM y también en la Universidad Bolivariana, la cual ofrece el título profesional de Bibliotecólogo y el Grado académico
en Ciencias de la Información. Existe una modalidad de segunda titulación para
egresados de carreras que hayan tenido una duración mínima de 8 semestres, o
como continuidad de estudios para alumnos de otras carreras de Bibliotecología.
Por lo que respecta a los Planes de Estudio de sus Carreras se observan
las características propias del impacto de las tecnologías como finalidad para
definir el perfil profesional más adecuado. No cabe duda que la formación de
estos profesionales corre paralela al desarrollo de las tecnologías de la información y las comunicaciones; sin embargo, no hay que dejar de atender los
aspectos epistemológicos de la Ciencia de la Documentación.
En las mallas curriculares de dichas carreras de Bibliotecología se han ido
introduciendo progresivamente, junto a los contenidos tradicionales, otros
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que responden a las nuevas necesidades del mercado. Es el caso de las disciplinas como Recuperación de la información, Edición electrónica, Redes de
información, Gestión del Documento electrónico, sin olvidar las iniciativas y
programas del gobierno orientadas a la animación cultural, la gestión cultural y la lectura.
También se observa en estos planes cómo se han fortalecido los contenidos en cuanto a Dirección Estratégica, Formulación de Proyectos y Gestión
de Unidades de Información conducentes a completar una formación en dirección y gestión de las organizaciones documentales.
Es muy destacable que las Escuelas de Bibliotecología de la Universidad
Tecnológica Metropolitana (UTEM) y de la Universidad de Playa Ancha de
Ciencias de la Educación (UPLACED) contemplan en sus planes de estudio
las asignaturas dirigidas a preparar a los alumnos en materia de investigación, como son las de “Métodos de Investigación Bibliográfica”, “Metodología de la Investigación Científica”, “Estadística”, “Comunicación Escrita” y
“Formulación de Proyectos de Información”. La Universidad de Playa Ancha
imparte sólo dos asignaturas de “Archivología”.
Las mencionadas escuelas no imparten la asignatura de “Practicum en
Información y Documentación” como medio de inserción del alumno en la
realidad profesional, lo que les permitiría además acercarse a la consecución
de uno de los objetivos planteados por los profesionales para dar a conocer la
profesión y su utilidad en el mercado laboral.4
Ninguno de los planes examinados contempla asignaturas como: “Museología”, “Políticas de información y documentación” y “Documentación
informativa”.
En el 2005 los profesores Carmen Pérez y Hector Gómez hacían una valoración y consideraban
que los programas de las universidades privadas, se referían a los de la Universidad Bolivariana y Universidad de la República que impartía esta carrera, aún no se
consolidan, su demanda es escasa en los programas profesionales lo cual dificulta
su permanencia en el mercado de la educación superior privada.5
4
5
220
Véase Rosario Osuna Alarcón, “La puesta al día del practicum en los nuevos planes de estudio
del Título de Grado en Información y Documentación en las facultades españolas ante las demandas del Espacio Europeoo de Educación Superior”, en Formación, investigación y mercado
laboral en Información y Documentación en España y Portugal, Salamanca: Ediciones Universidad de Salamanca, 2008, pp. 308-318.
Héctor Gómez Fuentes, Pérez Ormeño, Carmen, “Situación y perspectiva de la educación
bibliotecológica en Chile”, en Calva González, Juan José y Martínez Arellano, Filiberto, eds.
Proccedings INFOBILA como apoyo a la investigación y educación bibliotecológica en América
Latina y el Caribe, México, 2005, pp. 133-154.
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
Por último podemos concluir que con carácter general se observan denominaciones de asignaturas poco sintéticas, expresiones ambiguas y posibles
traslapes en sus contenidos. Es decir, estas mallas, susceptibles de mejorar,
no contemplan la concepción integradora de la Ciencia de la Documentación. No hay un concepto claro de lo que es la actividad documental en conjunto como proceso informativo y comunicativo.
4. Reflexiones
Del diagnóstico y análisis trazados anteriormente podemos apuntar en tres
direcciones:
1. Hacia la política científica de los ámbitos académicos y gubernamentales chilenos.
2. Hacia la capacidad comunicativa de los docentes y profesionales de la
documentación.
3. Y como consecuencia de lo anterior, hacia la ausencia de canales de
difusión científica.
Respecto al primer punto hemos puesto de manifiesto el papel singular que tienen las Instituciones gubernamentales y académicas en la investigación científica. Son estas instituciones las que deben impulsar y fomentar
la investigación y, por tanto, legislar en materia científica. Pero a su vez las
Instituciones académicas deben implantar asignaturas de metodología de la
investigación científica que formen el espíritu crítico y reflexivo del estudiante
y, por supuesto, lo capaciten para buscar y encontrar respuestas a los problemas por los que pasa la ciencia y su ejercicio profesional.
Este aspecto era destacado ya en el año 2003 por Héctor Gómez Fuentes
quien reconoce que
la investigación bibliotecológica es incipiente y que los bibliotecarios chilenos centran
más su atención en la presentación de proyectos de información a través de fondos de
información concursables como los que ofrece el “Consejo Nacional de Fomento del
Libro y la Lectura y el MECESUP de gran incidencia en el desarrollo de las bibliotecas
universitarias y en el apoyo informacional para la investigación científica y tecnológica.6
6
La investigación y los proyectos de desarrollo, Edisis, 7 (1), diciembre 2003, pp. 23-33. Es el caso
de MECESUP2 Bicentenario, Fondos de Innovación Académica. Concurso 2008, términos de
referencia, punto 6.2.6, pág. 49-51.
221
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 211-223
Vinculado con lo anterior está el dato relevante de la ausencia total de
los magíster y los doctorados en esta área de conocimiento y la importancia que esto tiene. Aspecto que ha sido publicado por el Doctor Rementería
quien ha expuesto los motivos que justifican el desarrollo de un programa de
doctorado en Bibliotecología en Chile.7
El segundo punto viene a resaltar la importancia de la capacidad comunicativa de estos profesionales en el desarrollo de su trabajo y de su ciencia.
Cada vez es más importante que el profesional de la documentación sea un
buen comunicador. Nuestro objeto de trabajo es el conocimiento y para que
exista conocimiento tiene que existir información y comunicación para ponerlo al servicio del usuario. No olvidemos que el proceso informativo es un
proceso comunicativo.
Todo lo que precede da como resultado la total ausencia de publicaciones
científicas del ramo. Es urgente la creación de canales de publicaciones científicas para el área de conocimiento de Bibliotecología en el país. Necesario
que desde instancias científicas y profesionales se emprendan iniciativas para
no sólo crear sino mantener, dada su dificultad, estas publicaciones científicas como medios para difundir los resultados que obtengan los investigadores académicos y profesionales de la documentación.
En suma, en el área de Biblioteconomía y Documentación no existen revistas científicas especializadas. Es conveniente que desde las Universidades
se investigue, se reflexione, se publique y se cree un corpus académico que
resulta ya indispensable para avanzar.
Bibliografía
Fernández Bajón, Mª T., “Repercusión de la pólítica científica en la
Universidad Española”, en Boletín ANABAD, LV (2005), núm. 1-2,
pp. 315-319.
Gómez Fuentes, Héctor, “Competencias exigidas al profesional de la
información en Chile y las nuevas estrategias de formación de la
Escuela de Bibliotecología de la Universidad Tecnológica Metropolitana”, en IV Encuentro de Directores y III de docentes de Escuelas de Bibliotecología y Ciencia de la Información del MERCOSUR ,
Montevideo, Uruguay, Universidad de la República, 2000, pp.2944.
7
222
Ariel Rementería Piñones, “Doctorado chileno en bibliotecología: Necesidad nacional”, en
Investigación Bibliotecológica, enero-abril de 2008, vol. 22, núm. 44, pp. 11-32; MECESUP2 Bicentenario, Fondos de Innovación Académica, Concurso 2008, términos de referencia, punto
6.2.6, pág. 49-51.
INVESTIGACIÓN SOBRE EL DISEÑO CURRICULAR DE LA CARRERA DE BIBLIOTECONOMÍA...
Gómez Fuentes, Héctor; Pérez Ormeño, Carmen, “Situación y perspectiva de la educación bibliotecológica en Chile”, en Calva González, Juan José y Martínez Arellano, Filiberto, eds. Proccedings
INFOBILA como apoyo a la investigación y educación bibliotecológica
en América Latina y el Caribe, México, 2005, pp. 133-154.
Jaque, Liliana; Ramírez, Verónica, “Perfil ocupacional versus perfil
académico de la Escuela de Bibliotecología de la Universidad Tecnológica Metropolitana”, en Edisis, 2(3):5-9, marzo, 1997.
Osuna Alarcón, Rosario, “La puesta al día del practicum en los nuevos
planes de estudio del Título de Grado en Información y Documentación en las facultades españolas ante las demandas del Espacio Europeoo de Educación Superior”, en Formación, investigación y mercado laboral en Información y Documentación en España
y Portugal, Salamanca: Ediciones Universidad de Salamanca,
2008, pp. 308-318.
Rementería Piñones, Ariel, “Doctorado chileno en bibliotecología:
Necesidad nacional”, en Investigación Bibliotecológica, Eneroabril de 2008, vol. 22, núm. 44, pp. 11-32.
Villalón, Alberto, “Desarrollo de las bibliotecas en Chile”, en Edisis,
3(3): 24-29, diciembre, 1998.
223
R
E
S
E
Ñ
A
S
NAUMIS PEÑA, CATALINA. Memorias del I Simposio Internacional
sobre Organización del conocimiento: Bibliotecología y Terminología. México: UNAM, Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas, 2009. 606 p.
Por Mauricio Sánchez Menchero
H
ace casi cien años Émil Durkheim señalaba en su libro Las formas elementales de la vida religiosa
(1912), que categorías del pensamiento
humano como género, fuerza, personalidad, eficacia no han estado nunca
fijas de una forma definitiva. En todo
caso, el dominio que han ejercido sobre el pensamiento varían en función
de los tiempos y las sociedades. La reflexión del sociólogo francés no estaba
errada pues consideró los avatares de
la organización del conocimiento en
sus diferentes edades históricas.
Un ejemplo sobre la idea que expone Durkheim fueron los nuevos
términos acuñados para referirse a la
novedosa realidad a la que se enfrentaron conquistadores y misioneros
en tierras americanas. Ya en su libro
de Los cuatro viajes, Cristóbal Colón
testimoniaba y describía al chile como “su pimienta, d’ella que vale más
que pimienta, y toda la gente no come
sin ella, que la halla muy sana”. Para
mediados del s. XVI, Fray Toribio de
Benavente “Motolinía” al redactar su
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto,
2009, México, ISSN: 0187-358X. pp. 227-231
227
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 227-231
obra Historia de los indios de la Nueva
España pensaba en cuál sería la mejor
forma de transmitirles a sus interlocutores metropolitanos la información
y el conocimiento del ignoto entorno
geográfico. Así, el franciscano echó
mano tanto de conceptos jurídicos medievales tales como rey, reino, vasallo, palacio, etcétera. Además conformó una especie de glosario donde las
definiciones de las cosas se realizaban
más por aproximaciones que por definiciones. De esta forma comparaba los
productos mexicanos con alimentos
consumidos en España. Es el caso del
aguacate que —a decir de Motolinía—
lo describía como la pera por su forma
y tamaño, y con el piñón por su sabor.
Un siglo más tarde, el inglés John
Wilkins constituyó un idioma analítico. Para el académico británico —a
decir de Jorge Luis Borges— era necesaria la construcción de palabras que
se definieran a sí mismas. En su empeño dividió el universo en cuarenta categorías, subdividibles en diferencias
y en especies.
Asignó a cada género un monosílabo
de dos letras; a cada diferencia una
consonante; a cada especie, una vocal.
Por ejemplo: de, [quería] decir elemento; deb, el primero de los elementos, el
fuego; deba, una porción del elemento
del fuego, una llama.
228
Desde luego un recorrido pormenorizado a lo largo de la historia nos
arrojaría más ejemplos sobre está búsqueda continua para sistematizar las
categorías del pensamiento humano. Nuestra época no es la excepción.
Algunos pensadores han utilizado el
concepto postmoderno para nombrar
el momento actual. Un término que
Octavio Paz criticaba al preguntarse cómo se iba a llamar al periodo siguiente: ¿post-post modernismo?
Y es que no es algo banal el acto de
darle nombre a las cosas. Al contrario
es una condición indispensable para
llegar a determinarlas. En palabras de
Elizabeth Luna se trata de la función
peculiar y específica de la ciencia.
Así se comprende por que la filología
representa un aspecto necesario e integrante de la teoría del conocimiento.
Lo que es una realidad es que el
uso de programas planteados por informáticos, traductores y terminólogos para recuperar palabras, nos ha
conducido a una situación inédita de
trabajo e investigación que demanda
contar con una buena formación lingüística al momento de abordar el tema terminológico y bibliotecológico.
Se trata de una tarea nada fácil de
enfrentar. De ahí que se dispusiera, en
agosto de 2007, el I Simposio Internacional de Organización del Conocimiento: Bibliotecología y Terminología. Un evento que contó con once
conferencias magistrales y ocho sesiones de trabajo con 28 ponencias y 48
participantes. Y que, como resultado
palpable del mismo, ahora se presenta
el libro Organización del conocimiento:
bibliotecología y terminología, editado
RESEÑAS
por el Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM
en 2009.
Reseñar una obra voluminosa de
más de 600 páginas no es una tarea fácil. Por lo tanto sólo mencionaremos
a continuación algunas ideas contenidas principalmente en la introducción
y en las conferencias magistrales. Pero
antes nos vamos a permitir introducir
una tríada conceptual que ha servido
para organizar nuestra lectura. Se trata de los conceptos que conforman las
culturas de información, conocimiento y comunicación. Y es que a partir de
estos términos pretendemos entender
y ubicar la concepción epistemológica
que se presenta a lo largo del texto que
reseñamos. Es decir, nos preguntamos ¿qué conocemos? y ¿cómo conocemos? Y todavía más aún: ¿cómo conocemos el conocer? En palabras del
epistemólogo Rolando García se trata
de observar la historia como un laboratorio del conocimiento.
Entre las características principales
de la información —como señala Gerardo Sierra— podemos decir que “se trata
de un bien de naturaleza intelectual, inmaterial”, que es registrado y presentado en soportes físicos. Desde luego
no es escasa; [por el contrario] cada
vez es más abun­dante y su uso no es
excluyente. La pueden utilizar varias
personas a la vez, salvo cuando su valor está precisamente en la privacidad
y ex­clusividad.
Y con respecto al conocimiento,
decimos que éste es fruto de las asociaciones que el cerebro es capaz de hacer
a partir del análisis de información almacenada. Además, el conocimiento
se elabora para dar respuesta a alguna cuestión de interés particular; por
tanto, el conocimiento siempre supone
más que la información de la que se ha
partido para construirlo; tiene una
funcionalidad.
Asimismo —apoyados en Jorge
A. González— podemos decir que la
información nos permite interactuar
con los objetos de la realidad a partir
de abstracciones e inferencias que nos
dejan coordinar acciones con otros. A
esta capacidad para coordinar acciones le llamamos comunicación. Tenemos entonces que la información y el
conocimiento son una pareja inseparable: no hay conocimiento sin información, pero, al contrario, puede haber
mucha información y no haber conocimiento. Además, la información y el
conocimiento hacen posible y le dan
sentido a la comunicación. El arte de
conocer está estrechamente relacionado con el arte de generar información
y conocemos precisamente para coordinarnos con otros. Información, conocimiento y comunicación son, pues,
una tríada esencial de la especie humana que puede ser objeto de desarrollo, es decir, se pueden aprender y
compartir para aumentar nuestra capacidad para resolver problemas concretos.
Ahora bien, en la introducción del
libro, Catalina Naumis nos recuerda
229
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 227-231
que las nuevas tecnologías permiten un
acceso a la información que se genera en diferentes formatos. Por lo mismo existen programas que ayudan a
recopilar las búsquedas de los usuarios y mantener registros de sus intereses. Pero los problemas surgen debido a que
la polisemia y la ambigüedad del lenguaje pueden interferir en la comunicación científica, a diferencia de lo que
ocurre con los lenguajes documentales
o controlados basados en los términos
usados en las lenguas de especialidad.
Por eso urge desarrollar sistemas
de información con indización de contenidos externos en español y contenidos propios del país que se mantengan
estructurados de acuerdo con la cultura que comparten.
De ahí que en el campo bibliotecológico se estén utilizando una gran
variedad de medios de transmisión
del conocimiento, al tiempo que se
amplían los recursos bibliográficos a
través de sistemas de información eficaces. No es casual –afirma la Dra.
Naumis– que
los organismos internacionales de
normalización bibliográfica además
de revisar sus propios códigos están
proponiendo nuevos sistemas de registro aplicando metadatos, que son
la llave de acceso a los contenidos documentales en el medio digital, lo que
exige la profundización en lenguajes
230
de intercambio con las computadoras.
Y es que diversas investigaciones
–como indica María José López Huertas– demuestran que la utilización del
método terminológico para conocer
las dinámicas conceptuales que las
disciplinas y especialidades científicas tiene muchas más posibilidades
de las reconocidas tradicionalmente,
restringidas a estudios principalmente descriptivos. De hecho, un modo
de evitar nuevas babeles o construcciones intra, inter o trans disciplinarias inconexas, puede partir del análisis —apunta José López Yepes— de
los procedimientos habituales para la
formación de términos cuando éstos
no existen. Por ejemplo, la creación de
palabras o neologismos. Es decir, las
procedentes del griego y del latín, que
entonces se denominan cultismos, como el vocablo cyber (kybernetes = piloto de una nave) que ahora se añade
como prefijo a palabras como (ciber)
café, espacio o cultura.
Sin embargo en ocasiones a pesar de su origen griego, los neologismos se vuelven incultismos cuando
manifiestan una reducción y pobreza
de lenguaje al momento no sólo ya de
intentar indexarlos, sino de explicar la
realidad. Es el caso del vocablo nárke (adormecimiento) del que proviene narkôtikós. De donde proceden todas las derivaciones a partir del prefijo
narco: menudeo, corrido, y, a finales
del 2008, hasta narcorreina en referencia a la Señorita Sinaloa. En todo caso
y, a diferencia de la jerga periodística,
en el discurso científico lo que importa no es inventar —como afirma José
RESEÑAS
López Yepes— un vocabulario original, sino a partir del lenguaje común,
depurarlo de tal modo que, sin renunciar a su filiación, responda al rigor y
relativa univocidad que exige su carácter teórico.
Así pues, en la sociedad actual
—como señala Gerardo Sierra— donde se generan cantidades infinitas de
información de todo tipo, una de las
exigencias básicas a la que todo ciudadano se enfrenta es el aprovechamiento de ésta para construir conocimiento.
Es decir se trata de gestionar la información a partir de dos momentos:
 buscar información en diversas
fuentes, tales como bibliotecas,
diarios, enciclopedias, Internet,
revistas, etcétera, para luego
 analizar la información que nos
permita relacionarla, valorarla, seleccionarla y ordenarla en
función de nuestras necesidades
de conocimiento.
A este par —información y conocimiento— nosotros añadiríamos el
tercer elemento antes mencionado: la
comunicación. Ya que sólo a través de
una atenta escucha de los problemas
de todas las comunidades que habitan
en nuestro país, se podrá establecer
un diálogo entre las poderosas herramientas que puede maniobrar el mundo académico —en nuestro caso el de
la Bibliotecología— y las características y aspiraciones de las poblaciones
que, por efecto de un diseño histórico
social y tecnológico, han sido dejadas
de lado en la tarea de generar conocimiento. Por eso, una razón del quehacer bibliotecológico y terminológico
debe ser una tarea atenta a la palabra
del otro, de alguien que no solamente
tiene orejas sino también boca.
La tarea queda pues en manos del
lector atento del libro Organización del
conocimiento: bibliotecología y terminología. Un material que sería conveniente hubiese contado con un índice
temático, pero las cuestiones editoriales —precios de papel y de tinta— habrían imposibilitado esta sugerencia.
Pero al menos contamos con un material muy rico para reflexionar sobre la
importancia que cada día cobra la terminología para constituir sistemas de
información que posibiliten un mejor
conocimiento gracias a una comunicación y un servicio bibliotecológico de
calidad.
231
FLORES SIMENTAL, RAÚL. ¿Qué es la brecha digital?: una introducción al nuevo rostro de la desigualdad. Ciudad
Juárez, Chih: Universidad Autónoma de Ciudad Juárez,
2008. 129 p.
Por Jesús Cortés Vera
A
ntes de referirnos al contenido
y cualidades de este libro es importante mencionar algunas razones
por las que su aparición es una buena
noticia: hay muy pocos libros sobre este tema en español; una búsqueda realizada en WorldCat, la base de datos
bibliográfica más grande del mundo,
arrojó únicamente 24 registros, dos
de ellos correspondientes a tesis. Una
cantidad bastante pobre si se compara
con los 1,192 registros que se pueden
encontrar en la misma base de datos si
se hace la búsqueda usando el término
en inglés “Digital divide”.1
Por otra parte, la mayoría de los libros publicados han surgido en editoriales de las grandes metrópolis como Madrid, Buenos Aires, Santiago y
la Ciudad de México, y la participación interdisciplinaria parece ser escasa al predominar visiones tecnológicas, económicas o bibliotecológicas,
1
Búsqueda realizada el 29 de abril de 2009,
en http://www.worldcat.org/ la consulta
en español se realizó con la frase “Brecha
digital”.
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto,
2009, México, ISSN: 0187-358X. pp. 233-239
233
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 233-239
así que una visión que más bien parta
desde las ciencias sociales y de la comunicación es a la vez enriquecedora
y refrescante.
El documento consta de siete capítulos, además de una introducción, un
apartado de “e-conclusiones” y la bibliografía; tiene una extensión, que se
agradece, de solamente 129 páginas,
incluyendo las referencias bibliográficas. La redacción también se agradece
por la claridad y por un estilo que se
siente cercano y amable, en el que se
percibe experiencia del autor en trabajos periodísticos.
Desde la Introducción el lector
seguramente encontrará respuestas
a preguntas fundamentales: la definición adoptada de brecha digital es
muy sencilla: la distancia social que
separa a quienes tienen acceso a las
tecnologías de la información y la comunicación (TIC) de aquellos que no
lo tienen. El propósito de la investigación consistió en “Redefinir los términos del debate en torno a la brecha digital”. El autor está consciente de que
en este tema los cambios pueden darse
vertiginósamente, por lo que:
… renuncia a conclusiones terminantes en un campo tan volátil, donde los
números y las condiciones de conexión
—y consecuentemente de las inequidades— cambian día tras día.
234
Desde ese apartado, el autor adelanta algunas posiciones que mantendrá a lo largo del documento: “…las
desigualdades son inherentes a todo
sistema social”. Las tecnologías, viejas
o nuevas, no garantizan cambios sociales, y por tanto no deben ser objeto de falsas esperanzas; “… las nuevas
tecnologías son herramientas y no modifican por sí mismas las relaciones de
poder” y “… sólo estamos en presencia de la nueva cara del viejo problema
de la desigualdad”.
En el capítulo 1, de los Antecedentes, el autor plantea las preguntas que
guiaron su investigación, entre otras:
¿Son las nuevas tecnologías de la información y comunicación una forma
de mejorar las condiciones de vida humana? ¿Mejoran la comunicación y la
educación? ¿Conducen por sí mismas
a un desarrollo de la sociedad? ¿Son
verdaderamente la esperada revolución que facilitará el trabajo y volverá
más cómoda la vida de los trabajadores?.
Cuando se hable de TIC, considera Flores Simental, hay que incluir también
a la electricidad, que aunque no es una
nueva tecnología, sí es condición necesaria para aprovechar las otras. El
surgimiento de Internet detona la discusión sobre la brecha digital, aunque
desde antes existían otras TIC, como
la computación y las telecomunicaciones.
El análisis de esta temática será
abordado por el autor con una dicotomía muy simple: lo que han dicho los
optimistas (en otras partes los llamará
utópicos) y lo que han venido aseverando los pesimistas, o antiutópicos,
RESEÑAS
acerca del significado de las nuevas
tecnologías en la sociedad actual.
En pocos años —dice Flores Simental— el acceso a las TIC se convierte en
un problema de las ciencias sociales…,
pues finalmente, se dirá más adelante, la tecnología es la forma en que la
sociedad hace uso de la ciencia, por lo
que el estudio de las TIC y de su desarrollo cae más bien en territorio de las
ciencias sociales que de la tecnología.
Este reto pone a prueba la capacidad
de estas ciencias para establecer metodologías y lazos de comunicación con
científicos de otras disciplinas.
El capítulo 2 aborda Los inicios del
debate. En él se plantean las principales
posiciones de los optimistas y los pesimistas, aun antes de que el término de
Brecha digital fuera acuñado. Para los
optimistas, las TIC serán el elemento
principal para transitar hacia una nueva sociedad que dejará atrás la sociedad industrial y producirá un nuevo
estadio donde todos tendrán acceso a
la información y sus consecuentes beneficios; en la historia de la humanidad no se habría producido un avance
tecnológico tan bondadoso. Pero los
antiutopistas ven las cosas en forma
diferente: las TIC de punta solamente
estarán accesibles para unos pocos privilegiados; los usuarios de estas tecnologías sólo podrán ser consumidores y
no influirán en la dirección de una industria manejada por unos cuantos; las
tecnologías no brindarán acceso a toda
la información disponible y no hay que
perder de vista que tener acceso a la información no garantiza poder convertirla en conocimientos. En el aspecto
educativo, los optimistas resaltan las
muchas posibilidades que la tecnología ofrece para las nuevas modalidades
de aprendizaje, mientras que los pesimistas culpan incluso a las TIC del deterioro de habilidades fundamentales
que la enseñanza tradicional cultivaba, como el manejo correcto del lenguaje y el pensamiento crítico.
Este apartado presenta una visión
retrospectiva sobre lo que reconocidos
pensadores sociales como Alvin Toeffler y su Tercera ola, han expresado
acerca de la promesa que pueden ofrecer todas las tecnologías y en particular las TIC para afectar positivamente
el desarrollo de la humanidad, en aspectos tales como el trabajo y el ocio,
las relaciones interpersonales, la seguridad, el gobierno y la educación. Algunos pensadores consideran que las
tecnologías por sí mismas tienen una limitada capacidad de impacto y requieren de ser tomadas como instrumento
por movimientos sociales más amplios
y robustos; otros dirán, sin embargo,
que las TIC no son cualquier tecnología, sino la “tecnología madre”.
La sociedad informática: ¿un mito?,
es el título asignado al capítulo 3, en el
que el autor busca identificar cuáles aspectos de las argumentaciones que se
manejan sobre la importancia de la Sociedad de la información son realmente objetivos y cuáles en realidad corresponden a mitos. Hablamos de un
mito, nos explica el autor, cuando se
235
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 233-239
236
presentan visiones del mundo que van
más allá de brindar una descripción e
incluyen dimensiones normativas. Se
habla por ejemplo de que la información será el factor más importante para la transición hacia sociedades más
democráticas e incluyentes; sin embargo, en la práctica se están presentando
situaciones contrarias: la información
se vuelve cada vez más especializada,
los programas de cómputo para manejarla se encarecen; contar con información no es suficiente, pues es necesario
comprenderla y emplearla, además de
que los adelantos tecnológicos siguen
estando controlados por quienes detentan el poder.
El autor, citando a Hamelink, menciona algo que deberíamos tomar muy
en cuenta acerca del afán que existe
por anunciar el advenimiento de una
nueva etapa de la humanidad: regularmente —dice Flores Simental— no se
habla de medievalistas porque existió
una Edad Media, sino que hablamos
de un periodo llamado Edad Media,
porque existieron los medievalistas.
Creemos que lo mismo debe suceder
con la etapa histórica que estamos anticipando: cuando la mayor parte de la
población tenga acceso a la información, podremos hablar de una Sociedad de la información y cuando esta
misma población tenga la capacidad
de transformar esa información en conocimientos, será oportuno entonces
asignarle el nombre de Sociedad del
conocimiento.
Con apoyo de Postman, el autor
muestra cómo estamos evolucionando
hacia una tecnópolis, entendida como
el estado de la cultura en el que la tecnología es idolatrada, y donde se presenta la paradoja de que nuestra sociedad trata de emplear la tecnología
como una herramienta para manejar
y encontrarle sentido a la aplastante
cantidad de información que la propia
tecnología ha propiciado.
A lo largo del libro el autor busca apegarse a su propósito de encontrar las explicaciones fundamentales
acerca de lo que es la brecha digital,
en lugar de abundar, como lo han hecho otros autores, en describir la forma en que esta brecha se manifiesta.
En el capítulo 4, llamado ¿Un nuevo
capitalismo? el autor trata de dimensionar el impacto que las TIC tendrán
en el sistema económico mundial. Introduce así en la discusión otro concepto necesario aunque polémico: el
de la globalización, fenómeno que ha
tenido seguramente un proceso histórico que va más allá de las últimas décadas, pero que sin duda se ha nutrido
de la tecnología digital para alcanzar el
vertiginoso desarrollo actual.
Flores Simental hace una selección
de autores para discutir cómo el sistema capitalista actual podrá ser transformado por las nuevas tecnologías.
Mattelart expresa su opinión, al igual
que Castells, y éste último es confrontado con Rifkin. Un tema que presenta diferentes opiniones es la forma en
que las TIC afectarán al empleo y a los
trabajadores. En lo que parece haber
acuerdo, es en que las TIC favorecerán más directamente el desarrollo
RESEÑAS
cultural (entendiendo cultura en su
concepto más amplio) y en menor medida las actividades productivas, lo cual
puede observarse desde ahora, pues las
empresas trasnacionales más exitosas
no se dedican a producir bienes materiales, como es el caso de Google y Microsoft. Lo que suceda con el impacto
de las TIC en la vida de los países dependerá en gran medida de las políticas públicas planteadas y esto es algo
en lo que se insistirá en otras partes del
documento; sin embargo, al menos para el caso de América Latina parece no
haber mucha conciencia de ello.
El autor también consideró necesario dedicar un capítulo para analizar las implicaciones y potencialidades
que las TIC traerán para otra de las actividades fundamentales de la humanidad: la educación. El capítulo 5 discute el tema de Las TIC en la educación:
el “e-learning”. Aunque no se especifica el alcance del término “e-learning”
el autor parece referirse a programas
educativos completamente apoyados
por las TIC y concebidos para impartirse a distancia; con la aclaración de que
esto va más allá de la incorporación de
nuevas tecnologías e implica una visión
nueva de lo que debe ser la educación.
Al respecto, consideramos importante
mencionar que las TIC efectivamente
están impactando los procesos de enseñanza y aprendizaje, independientemente de si hablamos de programas
presenciales o a distancia.
Sobre la conveniencia de incorporar las TIC en los procesos educativos el
autor cita a Cuadra:
las personas que creen que la tecnología reemplazará totalmente a los grandes profesores en el salón de clases,
con aprendices altamente motivados,
están tan mal aconsejados como aquellos que creen que el internet es una
moda pasajera.
Pero hay obstáculos para el “e-learning” que deben ser considerados;
uno sobre el que es necesario insistir
bastante y habría sido conveniente que
el libro lo hiciera: tener acceso a la información no significa saber utilizarla;
de hecho, parece ser que, al menos para los estudiantes, el proceso de aprender a manejar las TIC significa menos
dificultades que aprender a evaluar y
aprovechar la información para apoyar una decisión o para algún proyecto
académico. Otro aspecto a considerar
serán las diferencias en las formas de
pensar y de actuar de cada institución
educativa. Más que los aspectos técnicos, el autor considera que el principal
obstáculo que habrá que superar consistirá en adaptar las estructuras y los
procedimientos de las organizaciones
a las nuevas modalidades para llegar a
crear sistemas educativos incluyentes
y motivadores.
¿Dentro o fuera de las puertas electrónicas? es el título del capítulo 6,
que parece estar inspirado por la figura propuesta por Rifkin, quien sostiene que la humanidad tiende a ubicarse
en dos bandos distintos: los que están
dentro y los que han quedado fuera de
las puertas electrónicas del ciberespacio; es decir, en cada uno de los lados
237
INVESTIGACIÓN BIBLIOTECOLÓGICA, Vol. 23, Núm. 48, mayo/agosto, 2009, México, ISSN: 0187-358X, pp. 233-239
238
de la brecha digital. Existen varios factores que agravan esta brecha y obligan
a redefinirla, pues ya no es solamente
cuestión de tener acceso a las TIC, sino de tenerlo en las mejores condiciones, para lo cual se requiere considerar
aspectos técnicos, como el ancho de
banda, pero también la presencia o ausencia de políticas públicas, el pago de
rentas por transferencia de tecnología
y por la propiedad intelectual y hasta
el manejo del idioma inglés. La brecha
digital puede ser analizada desde tres
dimensiones, propuestas por Servon:
la primera es efectivamente el acceso
a las TIC, la segunda es referida como
las habilidades necesarias para el uso
de las tecnologías —aunque ya dijimos
que una cosa es saber utilizar la tecnología y otra más compleja es saber manejar y aprovechar la información; la
tercera dimensión —poco mencionada en este texto— tiene que ver con los
contenidos, sin los cuales de poco sirve reunir los otros dos factores.
De nuevo se hace la reflexión sobre qué es lo que pueden y deben hacer las ciencias sociales para estudiar
mejor el problema de la exclusión digital —otro concepto cada vez más
usado— cuando no se tienen aún las
herramientas metodológicas, ni la experiencia necesarias para enfrentar este reto y ni siquiera se ha desarrollado
un lenguaje pertinente para referirse a
los nuevos escenarios. Todo esto a pesar de que estas desigualdades no son
nuevas, pues son manifestaciones de
pobrezas e inequidades que han existido siempre.
El último de los capítulos lleva el
nombre de Las dimensiones de la brecha: ¿quiénes están y de qué lado? Es lo
más parecido a otros documentos sobre el tema de la brecha digital, pues se
nutre de estadísticas provenientes de
diferentes fuentes para tratar de sopesar el tamaño de la brecha y distinguir
a quiénes afecta. Estadísticas que, el
autor lo advirtió desde el principio, solamente retratan una realidad efímera
porque tienen el agravante de que se
basan en indicadores aún incompletos
y difíciles de cuantificar, la mayoría de
ellos referidos a la conectividad, cuando más importante que estar conectado es poder aprovechar esa conexión.
Por primera vez el autor busca centrarse en la realidad de México y de
América Latina, en donde los gobiernos parecen estar buscando un equilibrio entre invertir para abatir la brecha
digital y continuar atendiendo otras
apremiantes necesidades sociales; a final de cuentas, el tema de las brechas
y las desigualdades no es ninguna novedad en esta región del mundo. En el
caso de México predomina un panorama de desatención al tema por parte
de los gobiernos y la desarticulación de
esfuerzos; el proyecto e-México aparece como el único proyecto más o menos coherente, aunque —esto no lo dice el autor— pareciera que prevalece
la idea de que fue todo un fiasco, pues
ni siquiera se han intentado hacer evaluaciones acerca de sus resultados.
En las e-Conclusiones el autor hace
una buena recapitulación de las principales ideas y aspectos discutidos en el
RESEÑAS
libro, pero también introduce una duda inquietante, apoyada por Castells, y
que tal vez debió discutirse más en los
capítulos previos: “¿Hasta qué punto
la conexión equivale a mayores oportunidades e igualdades?”, cuando finalmente la conexión puede significar
también una dependencia tecnológica
y cultural, contraria a la búsqueda de
las identidades propias y de los caminos de bienestar.
Creemos que este libro cumple sus
propósitos y proporciona bases sólidas
para analizar el problema de la brecha
digital y continuar observando la evolución de la humanidad hacia la sociedad del conocimiento. Como lo reconoce el autor, es un tema en constante
cambio: cuando esta investigación fue
terminada no había sido publicada la
obra de la UNESCO, Hacia las sociedades del conocimiento,2 en la que por
cierto el término de brecha digital no
es considerado como adecuado, considerando que hace alusión solamente a
2
UNESCO, Hacia las sociedades del conocimiento. París: UNESCO, 2005, 244 p., disponible en texto completo en: http://unesdoc.
uno de los problemas relacionados con
la falta de acceso y el aprovechamiento
de la información: el aspecto tecnológico, pero deja fuera otros obstáculos
de tipo cultural, político, ético, educativo, etcétera, y propone como alternativa el término de brecha cognitiva.
Otro aspecto en el que hubo nuevos descubrimientos en estos últimos
años tiene que ver con el uso que se
hace de Internet. Ahora sabemos que
el principal uso que se hace de la macrored no tiene que ver con la recuperación de información, sino con la integración de redes sociales.
Para terminar agregaremos solamente que la lectura de este libro nos
parece muy recomendable, así como
cualquier investigación o proyecto que
allane el camino hacia la Sociedad del
conocimiento. Sin duda, como dice al
final Flores Simental, la brecha digital
constituye el problema sociocultural
más importante en la actualidad de los
países en desarrollo.
unesco.org/images/0014/001419/141908s.
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NORMAS PARA LA RECEPCIÓN DE ARTÍCULOS
Los artículos que se publiquen en la revista Investigación
Bibliotecológica: archivonomía, bibliotecología e información deberán reunir las siguientes características:
Ser artículos de investigación

Presentar un tema original y/o innovador.

Tener enfoque novedoso a temas ya tratados.

Llevar a cabo una aplicación metodológica nueva o distinta al tratar un tema.
Metodología

La metodología utilizada debe ser consistente (implícita
o explícita), y aplicarse adecuadamente al tema.

Las conclusiones deben corresponder a la argumentación presentada y desprenderse de ésta de manera lógica y coherente.

La estructura del trabajo debe contener los elementos
mínimos que se requieren para un artículo.

El uso y las fuentes bibliográficas y/o electrónicas deben
ser actualizadas, suficientes y pertinentes al tema que
se esté tratando.
De los dictámenes

Sólo se aceptarán artículos que cumplan con los requisitos antes mencionados.

La revista se apoyará en el arbitraje de expertos o especialistas. Este proceso será anónimo para ambas partes.

Los dictámenes serán comunicados por escrito al autor y
éste, en caso que le sea desfavorable, podrá solicitar por
escrito el recurso de reconsideración, que incluya la argumentación pertinente en relación al trabajo presentado.
Presentación del material

Los trabajos enviados deberán ser relativos a la Bibliotecología, Archivonomía y Ciencias de la Información.
Podrán publicarse colaboraciones sobre otras disciplinas siempre y cuando el artículo las vincule con las ya
mencionadas y no haya sido –o vaya a ser– publicado.

El envío de cualquier artículo a esta revista supone el
compromiso del autor de no someterlo a la consideración de otras publicaciones.

La revista se compromete a publicar todos los artículos
aprobados.
 Los trabajos deberán ajustarse a las siguientes normas:
–Se remitirá un ejemplar en original e impreso que sea
legible y la información en versión electrónica en procesador de texto Word (en diskette 3 1/2 o CD-ROM).
En ningún caso se aceptarán trabajos en fotocopias,
copias al carbón o sobre papel translúcido.
–Otra forma de envío puede ser mediante un archivo adjunto a través de correo electrónico.
–No se aceptarán trabajos con correcciones sobrepuestas en la impresión que se pide.
–Las gráficas, dibujos, fotografías, etcétera, deberán
enviarse con su archivo digital fuente en el que han sido
realizados o escaneados. A alta resolución. Además de
ser impresos en hojas separadas y con instrucciones
precisas para su inserción en el texto.
–La extensión mínima de los artículos es de 15 cuartillas (incluyendo anexos). Cada cuartilla consta de 28
renglones de aproximadamente 65 golpes cada uno.
–Los nombres propios, los títulos y subtítulos del trabajo
deberán venir en mayúsculas y minúsculas.
–La primera vez que se emplee una sigla en los textos
de los cuadros o gráficas irá acompañada de su equivalencia completa.
 Cada artículo deberá incluir:
–Título del trabajo.
–Nombre del (o los) autor(es), cargo y dependencia o
institución.
–Dirección postal, que incluya teléfono, fax. correo
electrónico y otros datos que permitan la localización
del autor con objeto de aclarar posibles dudas sobre el
artículo.
 Los artículos deberán venir con un resumen en español
e inglés de cien a doscientas palabras cada uno.
 Se deberán incluir las palabras clave del artículo en inglés y en español.
 Las notas al pie de página y las fuentes de citas con referencias bibliográficas se presentarán a doble espacio,
y además la bibliografía se indicará al final del texto.
 Las citas, notas bibliográficas y la bibliografía deberán
contener todos los elementos que permitan la identificación de los documentos citados.
 Los trabajos deberán estar escritos de acuerdo con las
reglas de la gramática y la sintaxis.
 Todos los artículos se someterán a corrección de estilo
especializada.
 El Comité Editorial se reserva el derecho de hacer los
cambios editoriales que considere convenientes.
 El CUIB no se compromete a regresar trabajos.
Los trabajos deberán ser enviados a:
Revista Investigación Bibliotecológica: archivonomía, bibliotecología e información.
Editor Académico: Centro Universitario de Investigaciones
Bibliotecológicas, Torre II de Humanidades, pisos 11, 12 y
13, Ciudad Universitaria, C.P. 04510. México, D.F.
Por correo electrónico a la siguiente dirección:
[email protected]
Editores Académicos: Dr. Adolfo Rodríguez Gallardo; Dr.
Roberto Garduño Vera; Dr. Juan José Calva González.
NOTES FOR CONTRIBUTORS TO THE JOURNAL:
Manuscript requirements

Only research articles will be considered.

These should deal with original and/or innovative topics
or new theoretical or methodological approaches to topics already discussed.
Methodology

The methodology (implicit or explicit) should be consistent with and appropriate to the topic studied.

The conclusions must be the logical result of the arguments put forward.

The paper should contain the basic elements of a research article.

Bibliographic and/or electronic sources should be current,
sufficient and pertinent to the topic under discussion.
Review process

Only manuscripts that fulfill the above requirements will
be accepted for publication.

Manuscripts will be reviewed by experts. The process
will be double blind.

The reviewers’ decision will be sent in writing to the author. When this is unfavorable, the author of the submitted manuscript can ask for reconsideration provided that
sufficient argumentation is presented.
Guidelines for the presentation of manuscripts

Manuscripts submitted should discuss topics related to
archives, or library and information science. Papers on
other disciplines will be considered provided they link
into these main areas.

Papers should include a statement that the material has
not and will not be submitted for publication elsewhere.

Publication of accepted manuscripts is guaranteed by
our journal.

Manuscripts should adhere to the following
requirements:
–Submission of an original plus an electronic copy in
Word on a 3 1/2 diskette. Photocopies will not be accepted under any circumstances.
–Manuscripts can also be sent as an E-mail attachment.
–Papers with proof reading corrections will not be
accepted.
–Graphs, drawings, photographs, etc., preferably of high
resolution, should be presented on separate sheets and
include precise instructions for insertion into the text.
–Manuscripts should be at least 15 pages (as specified
above). Each page should have 28 lines and 65 keystrokes per line approximately.
–The first time an abbreviation is cited in the text or
graphics it should be given in full.
 All papers must include:
–Title.
–Name(s) of author(s), position and institution.
–Postal address plus telephone, fax and E-mail numbers
and other author contact information.

Papers must provide abstracts in Spanish and English
with a maximum of 200 words each.

They should include keywords in both English and
Spanish.

Footnotes and bibliographical references will be double
spaced, and the complete bibliography will appear at the
end of text.

Citations, bibliographical notes and bibliographies
should contain the necessary elements to allow identification of the cited documents.

All papers must adhere to the rules of good writing.

All articles will be submitted to specialized proofreading.

The editors of the journal reserve the right to make the
editorial changes they consider pertinent.

The CUIB is not committed to return submitted papers.
Manuscripts should be sent to:
Chief Editors Revista Investigación Bibliotecológica: archivonomía, biblioteconomía e información, Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas, Torre II de Humanidades, pisos 11, 12 y 13, Ciudad Universitaria, C. P.
04510. México, D.F. Or E-mailed to the following adress:
[email protected]
Chief Editors:
Dr. Adolfo Rodríguez Gallardo; Dr. Roberto Garduño Vera;
Dr. Juan José Calva González
NORMAS PARA A RECEPÇÁO DE ARTIGOS NA REVISTA:
Os artigos que se publiquem na revista Investigación Bibliotecnológica: archivonomía, biblioteconomía e información deverão reunir as seguintes características:
Que sejam artigos de investigação

Apresentar um tema original e/ou inovador.

Apresentar uma perspectiva nova a temas já conhecidos.

Apresentar uma aplicação metodológica nova ou diferente sobre um tema.
Metodologia

A metodologia utilizada deve ser consistente (implícita
ou explícita), e aplicar-se adequadamente ao tema.

As conclusões devem corresponder à argumentação apresentada e distinguir-se desta de forma lógica e coerente.

A estrutura do trabalho deve conter os elementos mínimos que são requeridos para um artigo.

O uso e as fontes bibliográficas e/ou electrónicas devem
ser actualizadas, suficientes e pertinentes ao tema que
se está a analisar.
Directrizes

Só se aceitarão artigos que cumpram com os requisitos
antes mencionados.

A revista vai-se apoiar na arbitragem de peritos ou especialistas. Este processo será anónimo para ambas as partes.

As directrizes serão comunicados por escrito ao autor e
este, no caso que lhe seja desfavorável, poderá solicitar
por escrito o recurso de reconsideração, que inclua a argumentação pertinente em relação ao trabalho apresentado.
Apresentação do material

Os trabalhos enviados deverão estar relacionados com a
bibliotecnologia, arquivologia e com as ciências da informação. Paralelamente poderá publicar-se algum tipo de
colaboração sobre outras disciplinas sempre e quando
o artigo as vincule com as já mencionadas e desde que
não tenha sido –o vá ser– publicado.

O envio de qualquer artigo a esta revista supõe o compromisso do autor de não submetê-lo à consideração de
outras publicações.

A revista compromete-se a publicar todos os artigos
aprovados.

Os trabalhos deverão ajustar-se às seguintes normas:
–Terão de ser remitidos um exemplar original e impresso
de forma legível e a informação em versão electrónica
em processador de texto Word (em CD-ROM o disquete 3 1/2). Em circunstância alguma serão aceites
trabalhos em fotocópias ou impressões sobre papel
translúcido.
–Outra forma de envio pode ser por correio electrónico
num ficheiro anexo.
–Não se aceitarão trabalhos com correcções sobrepostas na impressão que se solicita.
–Os quadros de três ou mais colunas, os gráficos, anexos
ou outros tipos de figuras, serão apresentados, na impressão, em folha aparte intercalada no texto e seguindo a paginação deste e deverão ser perfeitamente claros e precisos. Quando seja possível, serão apresentados em forma
digitalizada (escaneados), em formato de alta resolução.
–A extensão mínima dos artigos é de 15 páginas (incluindo anexos). Cada página é formada por 28 linhas
de aproximadamente 65 palavras cada uma.
–Os nomes próprios, os títulos e subtítulos do trabalho
deverão ser escritos em maiúsculas e minúsculas.
–A primeira vez que se empregue uma sigla nos textos
dos quadros ou gráficos será acompanhada da explicação completa.
 Cada artigo deverá incluir:
–Título do trabalho.
–Nome do(s) autor(es), posto que ocupa e instituição ou
empresa a que pertence.
–Morada completa e que inclua número de telefone,
número de fax, correio electrónico e outros dados que
permitam a localização do autor com o objectivo de esclarecer possíveis dúvidas sobre o artigo.

Os artículos deverão ser acompanhados de um resumo em
espanhol e inglês de cem a duzentas palavras cada um.

As palavras chave do artigo em inglês e em espanhol
deverão ser incluídas.

As notas roda pé e as fontes de citações de referências
bibliográficas serão apresentadas com o dobro do espaço e, para além disso, a bibliografia será indicada no
final do texto.

As citações, notas bibliográficas e a bibliografia deverão
incluir todos os elementos que permitam a identificação
dos documentos citados.

Os trabalhos deverão estar escritos de acordo com as
regras da gramática e da sintaxe

Todos os artigos serão submetidos a correcção de estilo
especializada.

O Comité Editorial reserva-se o direito de fazer as alterações editoriais que considere convenientes.

O CUIB não se compromete a devolver os trabalhos.
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