FOLLETO LIBROS MELCHOR CANO
Transcripción
FOLLETO LIBROS MELCHOR CANO
Los dibujantes, grabadores e impresores que nos han permitido conocer su semblante. El croquis del Tarancón del siglo XIX, donde se ubican las casas vieja y nueva de los Cano. Sus conocidas intervenciones en el concilio de Trento y la influencia en la teología contemporánea. Los importantes autores coetáneos del dominico que conforman la edad de Oro de la cultura española. Las razones por las que Fermín Caballero lo colocara en un lugar privilegiado de sus Conquenses Ilustres, la exhaustiva investigación que realizó y el completísimo apéndice documental que añadió a su biografía. La existencia de resúmenes manuscritos de sus obras, para disponer de manuales personalizados a utilizar en momentos oportunos. La exposición con la que, en estas fiestas patronales, nos obsequia el doctor don Antonio Escamilla Cid, no es una simple panorámica de la vida y obra del teólogo de Trento, o los caprichos de un bibliófilo, es una completa muestra de la dimensión intelectual, cultural y humana del más ilustre hijo de Tarancón. LIBROS E ILUSTRACIONES “MELCHIORIS CANI OPERA” Marino Poves Jiménez, de la Real Academia Conquense de Artes y Letras. MUSEO CASA PARADA SALON DE ACTOS DEL 1 AL 15 DE SEPTIEMBRE 2014 LA GENEROSA BIBLIOFILIA DE ANTONIO ESCAMILLA CID Melchor Cano es, por fortuna, uno de los hijos ilustres de Tarancón que menos ha sufrido el rigor del olvido histórico en su propio pueblo; a ello han contribuido personalidades tan destacadas como Fermín Caballero, Manuel de la Ossa, Dimas Pérez y diversas corporaciones municipales como las regidas por Francisco Manzanares, que encargó un monumento al escultor Luis García Codina, Antonio Domínguez, que organizó una semana cultural, y Raúl Amores, que patrocinó un seminario de estudios renacentistas conquenses, centrado en Cano y Luisa Sigea. En la toponimia urbana se mantiene el nombre de la calle Melchor Cano, en la que estuvieron las casas vieja y nueva de su familia. Figura, clave del renacimiento español y europeo, tuvo notable influencia en la iglesia, la política, el pensamiento, la literatura, las relaciones internacionales, etc. A recordar, refrescar, y enaltecer la obra del teólogo y consejero áulico taranconense viene ahora la docta personalidad de Antonio Escamilla Cid, bibliófilo, erudito, publicista, conferenciante, doctor “in utroque jure”, consultor del tribunal de la Rota, colaborador de la Biblioteca Nacional y otras instituciones. Su humildad corre pareja con su altruismo, su concienzudo trabajo intelectual, sus laboriosas investigaciones, sus esfuerzos económicos y sus deseos de servir a la cultura con entrega y generosidad. Antonio Escamilla no es ajeno a la patria de Melchor Cano y por eso ha buscado la ocasión para ofrecernos esta valiosa exposición. Nacido en el comarcano pueblo de Montalbo, un familiar suyo ejerció la docencia en Tarancón a finales de los años 60; le une una estrecha amistad con don Dimas; don Pedro Heras Mohorte la incorporó a los colaboradores de Malena para los temas de derecho matrimonial, por su condición de consultor de la Rota y doctor en derecho civil y canónico; a mi modesta persona honra con su amistad y publicaciones; descubrió en la Biblioteca Nacional el guión cinematográfico que escribió Luis Ríus Zunón, sobre la boda de María Cristina de Borbón y Fernando Muñoz, del que dimos cuenta en la revista Castillejo número 6. El estudiar la historia de su pueblo no puede evitar tropezar con los Bázquez de Tablada y los Jaramillo y Loaysa, ligados a la historia de Tarancón. Otros, como los matemáticos y geógrafos Verdejo, o la pedagoga Aurora Medina, dan gloria a Montalvo y a la historia de la ciencia conquense. Gracias al esfuerzo económico, a la generosidad, al altruismo y a la amplia cultura del doctor Escamilla Cid, Tarancón vuelve a recordar la magna figura de Fray Melchor Cano en toda la amplitud y universalidad de su obra, en la que podemos contemplar: Los 400 años ininterrumpidos de edición de sus obras y los trabajos con ellas relacionados. Su condición de consejero áulico del más poderoso rey de su tiempo. La geografía de sus numerosas ediciones, por la que desfilan Padua, Madrid, París, Munich, Venecia, Salamanca, Roma, Ottawa, etc. en momentos oportunos.