Donde quiera que te encuentres leyendo nuestra carta, sin importar

Donde quiera que te encuentres leyendo nuestra carta, sin importar

¡Hola!
Donde quiera que te encuentres leyendo nuestra carta, sin importar lo que te encuentres haciendo ni quién seas, queremos
contarte nuestra historia.
Somos un grupo de niños polacos de Silesia. No hace mucho tiempo, sentimos que nada nos salía bien Nadie creía en nosotros.
En nuestra cabeza constantemente se repetían las mismas preguntas dolorosas. ¿Alguien nos necesita? ¿Cuál es el propósito
de nuestras vidas?
Estando tristes, sabíamos que lo único con lo que contábamos era con nuestros sueños. ¿Quizá a ti te ocurra lo mismo?
Constantemente te preguntes estas difíciles cuestiones ¿Qué futuro me espera? ¿Qué puedo obtener? ¿Cómo generar vagos
sueños de una mejor vida y de una aventura para toda la vida? ¿ Cómo y dónde encontrar un momento, un lugar o una
persona que cambiará nuestras vidas para siempre?
¿Y sabes qué? ¡Lo logramos! Nuestra historia muestra que los sueños se hacen realidad. Cada uno tiene propios sueños, únicos,
bellos e importantes. Hemos sido capaces – gracias al apoyo de los demás – de superar nuestros propios miedos y debilidades.
Ahora sabemos y sentimos que nuestro valor radica no en el mundo exterior sino en la manera cómo nos percibimos.
Cómo ocurrió este cambio? Todos, sin excepción, hemos tomado la decisión que desde ahora no vamos a mirar el mundo de
manera pasiva. Algunos de nosotros viajaron al Himalaya en el año 2011. Visitaron a los niños de una escuela de la ciudad de
Namche Bazaar ubicada en lo más alto de la tierra a 3.440 metros de altitud y siguieron caminando hasta una altura de 5 mil
metros de nivel de mar. Junto a la cara sur del Lhotse, en el memorial a Jerzy Kukuczka se le rindió un homenaje a los grandes
alpinistas polacos: Jerzy Kukuczka, Rafal Chołda y Czesław Jakiel quienes trataron de escalar la difícil pared del Lhotse.
Los caminos para encontrarse a si mismo pueden ser diferentes. Algunos otros viajaron 800 km en bicicleta para llegar
a Nordkapp, el punto más septentrional de Europa. Luchando contra el frio, contra el viento y contra la niebla. Cada día
pedalearon en bicicleta para superar los siguientes kilómetros. En dicha expedición rindieron tributo a los valientes soldados
polacos que lucharon por una Europa libre en Narvik.
Todos nosotros hemos luchado con dolor, debilidad, miedo y mal tiempo para demostrarnos a nosotros mismos, a nuestras
familias, a nuestros amigos y a todo el mundo que valemos más que lo que cualquiera esperaría. Esta lucha tiene un lugar en
nosotros.
¡Ganamos! ¡Ganamos con nosotros mismos y con la adversidad que otros veían en eso!
Nos convertimos en los embajadores de lo Imposible antes que lo supiéramos.
Y tú también puedes convertirse en uno de nosotros. No tienes que escalar el Himalaya o tomar el desafío en una gran
expedición. Puedes superar tus propios límites en tu ciudad, en tu barrio o en tu traspatio.
Al igual que nosotros cuentas con un talento único. No creas, no escuches cuando los demás digan que no vales nada.
Siempre hay personas que te ayudaran a creer en ti. Personas que te tenderán la mano. Personas que te ayudaran a levantarte
y hacer lo imposible. Solamente tienes que seguir creyendo en la búsqueda de la verdadera felicidad. Y finalmente, recordar,
que no estás solo. ¡No te rindas, no pierdas la fe! Puedes hacerlo.
Imposible es solamente una palabra. De hecho, todo es posible. Y cada uno de nosotros puede cambiar su propio destino. Solo
tienes que desear seguir creyendo y seguir adelante.
Embajadores de lo Imposible