Pregunta de reflexión - Jesuit Restorative Justice Initiative
Transcripción
Pregunta de reflexión - Jesuit Restorative Justice Initiative
Pregunta de reflexión: Yo recuerdo una ocasión en que se me tuvo confianza… Yo recuerdo… Yo recuerdo… Dios está contigo Navidad 25 de Diciembre, 2012 Sabiduría desde las celdas: padre nuestro cordero de dios Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en tentación, y libramos del mal. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo: ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo: ten piedad de nosotros. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo: danos la paz. Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Recibamos la sanación de Dios así somos invitados a esta cena. Señor, yo no soy digno de que vengas a mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanar mi alma. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre Señor. Amén. signo de paz Jesús, que dijiste a tus apóstoles: “La paz les dejo, mi paz les doy.” No tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu iglesia y, conforme a tu palabra, concédela nos la paz y la unidad. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. La paz del Señor esté siempre con ustedes. R. Y con tu espíritu. comunión oración final Oremos: Señor, mientras celebramos tu nacimiento ayúdanos a ver tu presencia en todos aquellos que conozcamos: amigos o enemigos. Ayúdanos a recordar tu verdad en toda elección que hagamos. Te pedimos esto en el nombre de Jesús, nuestro Salvador. Amén. JESUIT RESTORATIVE JUSTICE INITIATIVE 8501 Washington Blvd. Culver City, CA 90232 www.jrji.org ! Estar encerrado para Navidad no es ningún chiste. No puedo comer los guisos de mi madre. Pude comer la comida que nos trajeron los voluntarios católicos, pero no me puedo nutrir del gozo de mi familia. Puedo imaginármelos en Nochebuena, dos sillas vacías alrededor de la mesa. Una me pertenece a mí y la otra a mi hermano. Pero ahora estoy en prisión sirviendo una sentencia de 23 años y mi hermano está en México. Ambos estamos lejos de la familia. No podemos reírnos con ellos, no podemos abrir regalos juntos y mostrar las bonitas cosas que recibimos. ¿Quién hubiera pensado que dos jóvenes terminarían con sus cabezas rapadas, con ropas flojas y una pistola? No tengo respuesta para esto porque yo no sabía lo que la vida tenía guardado para mí. No voy a compartir tamales con mi familia por los próximos 23 años, todo debido a las decisiones que hice. Hacer vida pandilleril es divertido, pero estar lejos en la Navidad no lo es. -Ezequiel, quien está en una Prisión Estatal de California. rito penitencial Señor, ten piedad. Cristo, ten piedad. Señor, ten piedad. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amén. oración inicial Oremos: Señor, tú estás siempre allí con nosotros, pero algunas veces no estamos atentos a tu presencia o nos distraemos con nuestra propia vida y maneras. Guíanos a través de nuestras dificultades y ayúdanos a estar más cerca de ti aceptándote en nuestras vidas. Te pedimos esto en nombre de Jesús, nuestro Salvador. Amén. Liturgia de la palabra primera lectura: Isaías 62,11-12 segunda lectura: Tito 3,4-7 El Señor ha proclamado hasta los confines de la tierra: “Digan a la hija de Sion: ‘Tu salvación viene; Su galardón está con El, y delante de El Su recompensa.’” Y los llamarán: “Pueblo Santo. Redimidos del Señor.” Y a ti te llamarán: “Ciudad Deseada. Ciudad no abandonada.” Hermanos: Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y Su amor hacia la humanidad, El nos salvó, no por las obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a Su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo, que El derramó sobre nosotros abundantemente por medio de Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por Su gracia fuéramos hechos herederos según la esperanza de la vida eterna. Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor. Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor. salmo responsorial: salmo 97 evangelio: Lucas 2,15-20 R. Toda la tierra ha visto al Salvador. Cuando los ángeles se fueron al cielo, los pastores se decían unos a otros: “Vayamos, pues, hasta Belén (Casa del Pan) y veamos esto que ha sucedido, que el Señor nos ha dado a saber.” Fueron a toda prisa, y hallaron a María y a José, y al Niño acostado en el pesebre. Cuando Lo vieron, dieron a saber lo que se les había dicho acerca de este Niño. Y todos los que lo oyeron se maravillaron de las cosas que les fueron dichas por los pastores. Pero María atesoraba todas estas cosas, reflexionando sobre ellas en su corazón. Y los pastores se volvieron, glorificando y alabando a Dios por todo lo que habían oído y visto, tal como se les había dicho. El Señor reina; regocíjese la tierra; Alégrense las muchas islas. Los cielos proclaman Su justicia, Y todos los pueblos han visto Su gloria. R. Toda la tierra ha visto al Salvador. Luz se ha sembrado para el justo, Y alegría para los rectos de corazón. Justos, alégrense en el Señor, Y alaben Su santo nombre. R. Toda la tierra ha visto al Salvador. Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús. Meditación: pastores a través de los ojos de un pastor caminando de prisa los cuatro felices con emoción sólo pastores y muchachos en verdad fuimos los primeros en saber tantas preguntas tanta energía mientras caminamos hablando con voces rebosantes de energía repasando los eventos desde que el ángel apareció como una estrella que cae desde arriba rondando frente a nosotros diciéndonos de un mesías primero era como si un sueño que no tenía sentido pero los cielos parecían regocijarse un brillo una música en la noche todos regocijándose en unidad queriendo compartir un gran gozo así que nos apuramos tropezándonos en una roca riéndonos cuatro pobres pastores levantados por la noche guiando a nuestras ovejas a través de la oscura noche por caminos oscuros dirigiéndonos a belén la única luz llegando de las estrellas y de la luna todas las casas estaban oscuras doblando por la esquina finalmente viendo hacia adelante un portón abierto con una luz baja esto debe ser la luz baja atrayéndonos un niño sentado afuera nuestros rostros hablando de un secreto como si todos supiéramos la misma cosa como si fuéramos esperados visitas invitadas “¿es éste el lugar del bebé recién nacido?” la oveja echada bien cerca zambullendo mi cabeza dando un vistazo al pesebre la fuente de luz viendo a una joven pareja el hombre sosteniendo a la mujer cubierta por las sábanas ambos mirando el rostro de un bebé que duerme ahora arropado gentilmente con mantos rotos parados sobre el heno casi caminando de puntillas entre las ovejas el pequeño pesebre lleno los cuatro bajamos el tono de la emoción transmitiendo la historia de un ángel y el gozo en los cielos la música que escuchamos muy bella ahora en nuestra imaginación después de haber hablado tanto en el camino hubiera sonado loco para cualquiera pero con esta pareja parecía como si todo era creíble hasta cuatro jóvenes pastores llegando a visitar a la mitad de la noche cuatro pobres muchachos careciendo de muchas cosas excepto energía esta emoción retornando ahora con la historia del ángel había algo sagrado en este espacio maría preguntando te gustaría cargarlo su nombre es jesús agachándome me entrega el bebé arrullo en voz baja al bebé quien no hace ruido estaba seguro en mis brazos algo adentro de mí quería cuidar a éste como los corderos tiernos listo para pelear por él tan inocente feliz de haber venido a este espacio tan tibio y pacífico el cuerpo diminuto envuelto en mantos viejos dios escogió a cuatro pastores y un diminuto pesebre para este momento sintiendo amor y especial una reunión íntima cargando a este recién nacido y alzándose adentro de mí sintiendo esta nueva luz formándose profundamente adentro de mi pecho una parte de mi alma despertado ahora con mas plenitud por el tacto de él este sentimiento había estado tomando forma continuaría tomando forma alzándose desde adentro sólo que yo no sabía lo que sería pero yo supe que amaba esta nueva parte de mí cada muchacho se turnó cargando a este regalo a este precioso sintiendo esa luz traspasada a ellos como si ellos hubieran estado allí todo el tiempo sólo necesitaban ser descubiertos nacer regresándole el bebé a su madre el silencio la emoción previa se convirtió en asombro nuestras cabezas se inclinaron había silencio en el pesebre cuatro jóvenes pastores llenos de emoción ahora orando en silencio cada uno notando este despertar dios a nacido