Proyecto Conéctate - Compañía de Santa Teresa de Jesús

Transcripción

Queridos maestr@s de mi cole teresiano:
Han pasado ya unos años desde que dejé el colegio, los amigos y compañeros, las horas
de clase, el timbre de salida, las excursiones, convivencias y algún que otro castigo...
El mundo que me he encontrado fuera es tal y como me lo presentabais en algunos
momentos, lejos de lo que yo me atrevía a imaginar. Si os escribo esta carta es para
agradeceros no sólo mi formación académica imprescindible para enfrentarme a mi futuro
profesional, sino, sobre todo por despertar en mi un montón de CAPACIDADES que me
permiten afrontar y disfrutar la vida con un sentido profundo, sintiendo que Dios me habita y
es desde ahí desde donde me siento seguro y acompañado.
Durante mis años con vosotr@s me fuisteis dotando de las herramientas necesarias
para que me conociera mejor, para buscar y aprovechar momentos de silencio. Todo esto me
ha ido permitiendo desarrollar una capacidad de reflexión y espíritu crítico imprescindible en
esta sociedad tan superficial en la que cuesta vivir de forma sencilla, intensa, comprometida y
por tanto feliz.
Sí os puedo decir que, para mí, ha sido clave esa actitud de cercanía y acompañamiento
que he vivido con vosotr@s y que me ha ayudado a valorar la importancia del otro en mi
propia vida.
Creo que disponéis de momentos concretos para seguir con esta labor tan importante:
tutorías, convivencias, excursiones, diálogo personal, celebraciones... pero quizás la que más
recuerdo es el del cuarto de hora diario. No creo que sea fácil preparar un cuarto de hora cada
día y que sea fructífero, pero unas veces llegará más a unos y otras a otros. No os desaniméis
por eso. La semilla queda, os lo aseguro.
Os oí decir muchas veces que Enrique de Ossó afirmaba ya en el s. XIX: “dadme un
Cuarto de hora de oración diario y yo os daré el cielo”. Tal vez se podría actualizar esta frase
aplicada al Cuarto de hora escolar: “dadme cada día un cuarto de hora en el que CULTIVÉIS
vuestro INTERIOR y el de vuestros ALUMNOS y yo os regalaré EL DESCUBRIMIENTO DE LA
PROPIA DIGNIDAD PERSONAL.”
Me voy a despedir, pero permitidme que os escriba esto:
¡DESPERTAD en vuestros alumnos el deseo de vivir la AVENTURA de conocerse, de crecer por
dentro y desde dentro! ¡Que sientan pasión por la vida!!!!!!
¡ACOMPAÑAD a vuestros alumnos porque necesitan GUÍAS-MAESTROS que les ayuden a
realizar este camino y descubrimiento del propio “castillo interior”!
¡PROVOCAD, sobre todo PROVOCAD, en vuestros alumnos las EXPERIENCIAS que les capaciten
para este ENCUENTRO consigo mismos, con los demás y con Dios!
Muy agradecido por vuestro trabajo y esfuerzo diario
Motivados por todo esto os proponemos un plan:
“(la persona es)… como un castillo
todo de un diamante o muy claro cristal, adonde hay muchos
aposentos, así como en el cielo hay muchas moradas…/… No hallo yo cosa con que comparar la gran hermosura
de un alma y la gran capacidad…”
“…Pues consideremos que este castillo tiene muchas moradas, unas en lo alto, otras en bajo, otras a los lados; y
en el centro y mitad de todas éstas tiene la más principal, que es adonde pasan las cosas de mucho secreto entre
Dios y la persona.”
TERESA de JESÚS
CURSO 2008 - 2009
PLAN DE INTERIORIDAD
Provincia Sagrado Corazón – STJ
Curso 2008-2009
El PLAN QUE TIENES EN LAS MANOS
Como Equipo de Pastoral Provincial queremos iniciar la elaboración de un Plan de
Interioridad que pueda ayudarnos a desarrollar y aplicar en todos los Centros el Proyecto de
Pastoral Provincial.
Nuestro objetivo fundamental es EDUCAR LA INTERIORIDAD tal y como la
entendemos:
…decimos que se trata de la sede y la fuente de todo nuestro pensar, sentir y actuar. La
interioridad es la capacidad que tiene la persona de vivir cualquier situación, dimensión o
aspecto de su vida desde sí mismo. La interioridad nos capacita para poder hacer nuestra la
realidad que vivimos (la propia y la que nos rodea), y situarnos en ella desde nosotros
mismos, al mismo tiempo que nos hace capaces de relación interpersonal, tanto con las
demás personas como con el mismo Dios. PROYECTO DE PASTORAL, p. 8.
Como educadores teresianos nos gustaría proporcionar las herramientas básicas y las
condiciones interiores que la persona necesita para desarrollar esta dimensión. En nuestro
horizonte se sitúa la imagen de persona que nos ofrece TERESA DE JESÚS: una persona
con CAPACIDAD INTERIOR, HABITADA por el mismo DIOS. La aventura humana, para
Teresa, consiste precisamente en ADENTRARSE por el camino del conocimiento propio que
nos hace descubrir la GRAN HERMOSURA Y DIGNIDAD de este “castillo interior” y ahí la
posibilidad de la AMISTAD con AQUEL QUE SABEMOS NOS AMA.
Sabemos que esto es, en definitiva, un DON que no depende de nosotros, pero sí
está en nuestra mano posibilitarlo. ¿Cómo? DESPERTANDO LAS CAPACIDADES de la
persona que lo hacen posible.
Estamos convencidos también de que se trata de un reto educativo para el siglo XXI.
Educar personas con una interioridad desplegada, fortalecida y enriquecida, frente a una
sociedad que prefiere muchas veces personas afincadas en la superficialidad. Vivimos
tiempos de “cuerpos bulímicos y cabezas anoréxicas”.
¿Con qué medios contamos?
Evidentemente el MEDIO FUNDAMENTAL e IRRENUNCIABLE es la propia
RELACIÓN EDUCATIVA que establecemos con nuestros alumnos y alumnas. En todo lo que
hacemos estamos transmitiendo un modo de ser persona que lleva implícita esta capacidad.
Pero somos conscientes de que necesitamos instrumentos concretos para explicitar esta
intencionalidad educativa. Nuestros centros cuentan con un espacio privilegiado: el Cuarto
de Hora de Oración diario. Por eso, iniciamos el desarrollo de este Plan por este medio.
OBJETIVO GENERAL
Ayudar a los niños y adolescentes a desarrollar las condiciones interiores
que les posibiliten la EXPERIENCIA DE DIOS.
CONTENIDOS:
Queremos TRABAJAR especialmente a través de los Cuartos de Hora dos de las condiciones
que consideramos básicas y necesarias:
El SILENCIO
RECONOCER e INTEGRAR las EMOCIONES
Para ello habremos de trabajar especialmente:
La DIMENSIÓN CORPORAL
La DIMENSIÓN AFECTIVA
Esto supone que nos gustaría ofrecer, a través del Cuarto de Hora, EXPERIENCIAS que
ayuden a nuestros alumnos a VALORAR el SILENCIO como herramienta privilegiada para el
conocimiento propio y el crecimiento personal. Así como EXPERIENCIAS que les ayuden a ENTRAR
EN CONTACTO con su mundo emocional: RECONOCER – ACEPTAR – ORIENTAR sus emociones
de manera positiva.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
RELACIÓN CON UNO MISMO: Conocer y aceptar mis límites y posibilidades
RELACIÓN CON LOS DEMÁS: Aprender a relacionarnos con los demás desarrollando
habilidades comunicativas
RELACIÓN CON DIOS: Despertar la capacidad de asombro para descubrir la Presencia de Dios
en todo.
LEMA PARA EL CURSO 2008-2009
¡CONÉCTATE!
Nivel al que va destinado:
Educación Infantil
EJE: Relación con Dios.
DIMENSIÓN: Afectiva.
OBJETIVO
Descubrir la presencia de Dios en las cosas que hacen cada día
MATERIALES que se necesitan:
CD, música clásica, pañuelos y pinturas.
DESARROLLO:
Con un fondo de música clásica hablarles de la espera, la Virgen está esperando a Jesús le lleva en su
vientre hasta que llegue Navidad, el día 24, cuando nazca…
Nosotros queremos preparar nuestro corazón para cuando llegue Jesús…
Rezamos con una adaptación del salmo 24 (de María José Alés, Los salmos de la liturgia para niños,
Colección Abba, Ed. CCS).
A continuación profundizamos en algunos puntos del salmo:
Todo el día te estoy esperando.
¡Enséñame el camino!
¡Enséñame a caminar hacia ti!
Quiero caminar detrás de ti, no quiero perderme, toma mi mano, apriétala bien fuerte.
Para caminar hacia Jesús:
- Quiero ser bueno.
- No me voy a enfadar.
- Voy a ser cariñoso.
- Voy a ayudar.
- Voy a compartir.
- Quiero portarme siempre bien.
Después de rezar con el salmo, hacemos la actividad de pintar un camino que nos lleve hasta una
estrella, dentro de ella estará el nombre de Jesús.
También se puede aprender y escenificar la canción “Vamos a jugar a ser mejor”
l
Infantil
EJE : Relación con Dios
DIMENSIÓN: Dimensión corporal
OBJETIVO
Agradecer a Dios el cuerpo que nos ha dado. Hacerles ver la importancia de los ojos,
oidos, manos, etc.
Canción de Fabiola: Los sentidos- Anexo 1
Cassette
DESARROLLO:
Escuchar la canción y realizar las acciones que vamos escuchando.
Infantil
EJE: Relación con uno mismo
DIMENSIÓN : Afectiva.
OBJETIVO
Sentir y valorar la importancia de nuestros sentimientos.
Papel continuo en forma de panel(tantos paneles como emociones quieras trabajar)
Pinturas
Plástico para forrar
Fotos de cada alumno
DESARROLLO:
La propuesta es trabajar un día a la semana esta dinámica:
Los paneles se encontrarán pegados en clase como un mural más de uso diario. El momento
de trabajar esta actividad es en la asamblea.
En cada panel habrá una emoción como pro ejemplo tristeza, alegría temor, vergüenza,
enfado…(Cada uno trabajará tantas emociones como considere dependiendo de la edad de
sus alumnos)
Cada niño por turnos se levantará y se dirigirá hacia el panel con su fotografía colocándola
en la emoción con la que se sienta más identificado explicando a sus compañeros porqué se
siente de ese modo.
Infantil
DIMENSIÓN: Corporal
OBJETIVO
Conocer, sentir y valorar las partes de nuestro cuerpo.
Sala de psicomotricidad
Aros
Pañuelos
Música de relajación
Aparato musical
DESARROLLO :
Proponemos una dinámica en la que se realiza el siguiente juego: `` Guiar al burrito´´; Por
parejas, en cada pareja, uno es el ``burrito ´´ y se coloca dentro del aro con los ojos
vendados. El otro agarra el aro, situándose en el exterior del mismo. El que está en exterior
del aro debe conducir el burrito, evitando que choque con otros burritos. Posteriormente
cambiamos los papeles para que todos puedan sentir la ausencia de la vista. A continuación
hacemos una reflexión sobre estas cuestiones:
-¿Cómo te has sentido cuando no podías ver?
-¿Te sientes afortunado y contento por poder ver?
-¿Has ayudado a tus compañeros cuando no podían ver?
A continuación proponemos el siguiente método de relajación:
Nos tumbamos en el suelo mirando hacia arriba. Dejamos que entre el Señor silencio en la
sala y le vamos escuchando hasta que nos llene de paz y tranquilidad. Cerramos los ojos y
les pedimos que vayan respirando suavemente, cogiendo el aire por la nariz y soltándolo
despacio por la boca mientras escuchamos la música.
Ahora es el momento en que la profesora dirige la relajación recorriendo cada una de las
partes más importantes del cuerpo.
Pretendemos que sientan su cuerpo, y que valoren la importancia de cada una de sus
partes.
Con una voz suave y pausada vamos hablándoles y nos dirigimos a ellos de la siguiente
manera:
Vamos a sentir nuestro cuerpo por dentro y empezamos sintiendo el latido de nuestro
corazón allí donde se encuentra Jesús. Aquí se dejaría unos minutos para ayudar a que
sientan los latidos de su corazón.
Posteriormente destacamos la importancia que tiene la respiración del aire para nuestra vida
así como el latir de nuestro corazón que es el motor que nos mueve.
Del mismo modo pasamos a recorrer las diferentes partes del cuerpo, brazos, piernas,
tronco, ojos…
Podemos acabar la relajación dando gracias a Dios por nuestro cuerpo.
Nivel al que va destinado: Infantil
EJE : Relación con los demás
OBJETIVO:
Valorar la importancia de nuestros sentimientos como regalos hacia los demás.
Encontrar el valor de lo no material.
Cuento, folios, pinturas y lápices.
DESARROLLO:
Empezamos la motivación con el cuento. Previamente metemos a los niños en contexto
hablándoles un poco de todo lo que podemos regalar a los amigos (regalos que no hacen
falta comprar) abrazos, besos, como demostramos a los demás que los queremos a papá a
mama a los abuelos etc...
Una vez que se ha contado el cuento se puede realizar la siguiente actividad:
Cada niño/a pinta una estrella y piensa en un amigo a la que se la quiere regalar. Una vez
que han terminado de pintarla se sientan en círculo y se van levantando uno por uno para
regalar la estrella a ese amigo que quieren y tienen que decir que regalan ,por ejemplo: te
regalo un beso, o un abrazo o una sonrisa etc.….
El ladrón de estrellas.
Jaime tenía una gran amiga que se llama Claudia a la que intentaba demostrar cuánto la
quería. Cada vez que estaban juntos le hacía la misma promesa:
- Claudia, cuando sea mayor me casaré contigo. Pero Claudia escuchaba las palabras
de Jaime y le preguntaba con cara de pícara, sin creer lo que su amigo le decía:
- ¿Que estarías dispuesto a hacer por mí?
- Y Jaime e contestaba:
- - Cualquier cosa…..
Pero a Jaime no se le ocurría nada que pudiera dejar con boca abierta a su amiga. Hasta
que un día, después de pensar y pensar mucho, tuvo una idea. Cuando se volvieron a
encontrar, esperó a que Claudia le hiciera su pregunta de siempre:
- ¿Qué estarías dispuestos a hacer por mí? Me gustaría que me regalaras algo muy
especial…..
- Jaime estuvo un rato pensativo y al final dijo:
- - Si quieres te regalo la Luna. ¿Te gustaría tenerla? – le preguntó sabiendo que
Claudia se quedaría maravillada.
- Pero Claudia se rió de él porque sabía que eso era imposible.
- Sin embargo, Jaime le quería tanto que no dudo ni un momento en lograr su prometido
regalo y, esa noche, después de haber conseguido un enorme globo, subió hasta la
luna para pedirle que aceptara bajar con él a la tierra y convertirse en un regalo para
Claudia.
- La luna, después de escucharle le dijo.
- - Mucho debes de querer a tu amiga pero…. ¿no crees que has ido demasiado lejos
prometiéndole la Luna? ¡Cómo se te ha ocurrido! ¿Te imaginas lo que dirá el Sol si me
marcho? Él no va a consentir que me vaya porque me quiere mucho y entre los dos
nos turnamos para cuidar la Tierra.
Jaime la escuchaba con atención comprendiendo que aquello iba a resultar más difícil
de lo que se imaginaba. La Luna le siguió diciendo:
- Además, ¿sabes lo que ocurriría si me marchara contigo?
La noche se quedaría siempre a oscuras, las estrellas se sentirían muy solas, y el mar no
me lo perdonaría nunca, ya que soy la responsable de hacer que suban y bajen las
mareas.
Jaime bajó a la Tierra muy contrariado porque no podía cumplir la promesa que le había
hecho a Claudia. ¿Qué pensaría de él? Al día siguiente, cuando se encontró con ella le
contó toda la verdad, su conversación con la Luna y las razones por las que no podía
regalársela, pero, mientras hablaba, se le ocurrió otra idea.
-
Claudia, en lugar de la Luna puedo regalarte una estrella.
Claudia sonrió sorprendida y emocionada porque a ella le encantaba contemplar las
estrellas por la noche, y le contestó:
- Está bien, pero para demostrar que me quieres, cada semana deberás regalarme
una estrella.
Jaime acepto encantado, y pensó que no pasaría nada por coger unas cuántas estrellas y
que había millones de ellas, así que esa noche subió al cielo en su globo a buscar una
estrella, y cuándo bajó, se la dejó a Claudia en el jardín.
Al ver tanta luz, Claudia se despertó y vio la estrella colgada de un árbol. ¡Jaime había
cumplido su promesa! Eso lo demostraba cuánto lo quería.
Desde entonces, todas las semanas encontraba una nueva estrella en su jardín…¡
Claudia estaba feliz!.
Hasta que una noche, cuando Jaime subió a por la novena estrella, se encontró con algo
que no esperaba. Apareció de repente un personaje enorme y luminoso que le dijo:
- ¿Qué haces tú por aquí, muchacho?
Jaime sintió miedo y con voz temblorosa contestó:
- Vengo a coger una estrella para regalársela a mi amiga Claudia, y demostrarle que la
quiero…
-
¿Acaso crees que regalándole estrellas te va a querer más?
-
- dijo él.
-
Jaime no sabía qué responder y le preguntó:
-
- ¿Y tú quién eres?.
-
Yo soy el jardinero del Cielo, soy el encargado de cuidar a las estrellas desde que
nacen hasta que se apagan, me encargo de que brillen y alumbren por la noche y de
que cada una ocupe el lugar que le corresponde. Últimamente estoy preocupado
porque algunas estrellas han desaparecido. ¿Acaso tú tienes algo que ver con esto?
Jaime, sintiéndose descubierto, bajó la mirada y le dijo:
- Es que yo….le prometí a Claudia que le regalaría la Luna, pero no pudo ser porque
sólo hay una y tiene mucho trabajo. Entonces le prometí una estrella de regalo cada
semana, como hay tantas pensé que no pasaría nada y que nadie las echaría de
menos….
- ¿Así que tú eres el que roba mis estrellas? ¿Y dónde están ahora?
- Están en casa de Claudia, ella las cuida muy bien, las tiene en su jardín para que vean
a sus compañeras por la noche.
El jardinero del Cielo contó a Jaime cómo cada una de las estrellas tenía su nombre y
pertenecía a una familia. Por eso desde su desaparición, algunas lloran y recorren el cielo
muy triste buscándolas. A su paso, dejan un rastro de luz con sus lágrimas. En la Tierra
se las llama “estrellas fugaces” porque sus habitantes no saben que las estrellas también
lloran.
Jaime se quedó callado y pensativo mientras tomaba la decisión de devolverlas, pero…
¿qué pensaría Claudia?
El jardinero del Cielo comprendió lo que le pasaba y le dijo:
- Jaime, dentro de tu corazón hay millones de estrellas, no necesitas venir al cielo a
robarlas.
- ¿Cómo puede ser? En mi corazón no cabe ni una estrella…- dijo Jaime.
- Son mucho más pequeñas pero brillan más que las del cielo. Cada vez que sonríes,
regalas una estrella; cada beso que das es otra estrellas, cada palabra cariñosa que
dices, cada gesto de amistad, cada favor que haces a un amigo,…es una estrellas que
regalas y que guarda en su corazón quien la recibe.
Cuando bajó a la Tierra, Jaime contó a Claudia todo lo que le había dicho el jardinero del
Cielo y se extraño mucho al ver que su amiga se ponía triste pensando en las familias de
las estrellas que tenía en su jardín. Creía que Claudia se iba a enfadar con él porque no
podría regalarle más estrellas.
Entonces le dio un beso a su amiga y le dijo:
- Claudia, este beso es una estrella para ti.
Jaime se puso todavía más colorado que Claudia.
Por la noche los dos se fueron al cielo a devolver las estrellas y pedir disculpas por
haberlas robado.
A partir de entonces, los dos amigos crecieron felices, coleccionando cada día estrellas
en su corazón y contemplando cada noche al cielo iluminado mientras pensaba cuánto
trabajo tenía el jardinero del Cielo.
Educación Infantil
EJE: Relación con los demás.
OBJETIVO:
Aprender a relacionarnos con los demás desarrollando habilidades comunicativas.
Aros, tizas, cuerdas.
DESARROLLO:
Juego : PASEO POR EL LAGO ENCANTADO
Con las tizas o cuerdas grandes delimitamos el espacio del lago. Se colocan todos los aros
dentro del lago. Es un lago encantado que nadie puede pisar ya que si alguien cae a él se le
congela el corazón. Solo se puede pisar en el interior de los aros, que son piedras que
sobresalen en la superficie del lago.
Si alguien cae al lago queda congelado y no puede moverse hasta que otro jugador le
rescate. Para ello un jugador debe deshelar el corazón del compañero encantado dándole
un beso o un fuerte abrazo. El objetivo es procurar que no haya jugadores encantados.
Después del juego podemos profundizar con las siguientes preguntas:
- ¿Cómo te has sentido cuando estabas congelado y nadie venía a abrazarte?
- ¿Cómo te has sentido cuando estabas congelado y te vinieron a abrazar?
- ¿Cómo te has sentido cuando diste un abrazo y ayudaste al otro?
- ¿Te costó esperar a que te vinieran a salvar?
- Si estamos solos nos sentimos mal, tristes, fríos… necesitamos la cercanía de alguien
para sentirnos vivos, bien, alegres.
En este tiempo esperamos a Jesús, él también quiere abrazarnos, quiere salvarnos del frío y
del hielo para que estemos mejor y nuestro corazón se caliente al abrazar, querer y ayudar a
los demás, y al dejarnos querer, abrazar y ayudar por ellos.
Aún quedan unos días… para que llegue Jesús, nos toca esperar un poco, pero no importa,
sabemos que cuando llegue nos calentará el corazón y podremos ser todos un poco más
felices.
1º, 2º Y 3º educación Primaria.
EJE: Relación con uno mismo.
DIMENSIÓN: Dimensión corporal.
OBJETIVO: Descubrirse vivo y con capacidad de acoger la vida.
MATERIALES: Música de relajación (“Miracle” Celine Dion).-Anexo 4
DESARROLLO:
Hacer un ejercicio de silencio, relajación y respiración. Siendo el profesor el que guíe la
actividad, relacionándolo con el adviento.
-
-
Cierra los ojos.
Toma aire por la nariz y suéltalo por la boca.
Siente como el aire va entrando lentamente. ¿lo notas frío? Y ahora ¿notas como se
calienta?. El aire se calienta en tu interior y sale caliente al exterior.
Nota tu respiración. Pon tus manos sobre la tripa ¿sientes como se mueve al respirar?
¡Estás vivo! ¡Tienes vida!
Ahora imagínate como se sintió María, durante ese tiempo de espera en el que tuvo a
Jesús en su interior. ¿Qué crees que pensaba? ¿Qué crees que esperaba? Y tú ¿qué
hubieras esperado? Piensa en ello y haz una imagen en tu cabeza de lo que crees
que esperaba y pensaba. Retenla en tu cabeza
Recuerda el ritmo de tu respiración. Vuelve a sentir como se calienta el aire en tu
interior, como sube y baja tu tripa.
Vamos a prepararnos para acoger a Jesús durante este adviento. Conéctate a María y
para que te enseñe a esperar a Jesús.
Nivel al que va destinado: 1º, 2º Y 3º educación Primaria.
EJE: Relación con uno mismo.
OBJETIVO: Reconocer la emoción de recibir a Jesús como regalo.
Canción “Mi cuerpo un tesoro” (Fabiola). –Anexo 4
DESARROLLO:
-
Escuchar la canción.
Después de escuchar la canción, participación de los niños: lluvia de emociones
¿Qué sientes cuando recibes un regalo? Escribir las ideas en la pizarra.
Plantear otra pregunta: ¿Qué regalo vamos a recibir dentro de poco?. Después e su
participación hacer que los niños reconozcan que Jesús es el mejor regalo que María
nos dejó.
EJE: Relación con los demás.
DIMENSIÓN: Corporal.
OBJETIVO: Descubrir la riqueza de la familia y de Jesús como parte de ella.
MATERIALES:
Visualización y canción: “Navidad será de color, que tengas tú el corazón…”
DESARROLLO
Imagínate ahora que es Nochebuena, tú y tu familia estáis sentados alrededor de la mesa del
salón preparados para comer vuestra cena. Dibuja en la mente de tus ojos en que lugar
están sentados cada uno. Ves alrededor de la mesa y nombra de uno en uno todas las
personas que están sentadas en la mesa. Estas son todas las personas especiales de tu
vida. Recuerda las cosas que cada uno de ellos hace por tí. Agradece a Dios por cada una
de estas personas especiales, por el regalo que cada uno supone para ti.
¿Falta alguien en tu mesa? llama tranquilamente a esa persona a tu mente. Recuerda que
tanto como si están en el cielo o de viaje en algún lugar, su espíritu aun esta presente. Reza
por esa persona. Dile cuanto le echas de menos. En algunas ocasiones, es bueno llamar a
nuestros amigos y familiares que no están.
Jesús también esta presente de manera especial en esta época. Recibimos todo, incluidas
nuestras vidas como regalos de Dios. Y ahora cantamos con Jesús para festejar su
nacimiento y darle la mejor acogida: “Navidad será de color, que tengas tú el corazón…”
Navidad de Color
La Navidad será del color que tengas tú el corazón (plas plas)
La Navidad será del color que tengas tú el corazón
Mira, mira, mira
si respetas la verdad
sólo entonces podrás cantar.
Pero si no sientes
lo que sufren los demás:
¡Calla! ¡No hay Navidad!
Lara lara la lara lara la lara lara la la (plas plas)
Sólo, sólo, sólo
cuando sepas compartir,
sólo entonces podrás cantar.
Pero si tus bienes
no los das a los demás.
¡Calla! ¡No hay Navidad!
EJE : Relación con los demás.
OBJETIVO: Descubrir que Jesús viene para hacernos felices a todos. Ser conscientes de las
diferencias y de la insolidaridad que vivimos.
MATERIALES: Fotos de revistas y periódicos con personas tristes y alegres.
DESARROLLO :
-
Traer fotografías de periódicos y revistas con gente triste y alegre.
-
Hacer un doble mural con el contraste de emociones.
-
Situar a los niños en el tiempo en que nos encontramos: adviento.
-
Preguntarles: En estas fechas ¿Por qué estarán tristes? ¿Por qué estarán alegres?.
¿Tú, dónde te sitúas? ¿estás alegre solo por los regalos, o por qué Jesús va a llegar?
¿Para que crees que va a venir Jesús?
EJE: Relación con los Dios
MATERIALES: Canción “Mira en ti” (Fabiola).- ANEXO 4
OBJETIVO: Reconocer los sentimientos que produce en nosotros Jesús.
DESARROLLO:
-
Escuchar la canción.
-
Después de escuchar la canción, reflexionar sobre los sentimientos que produce
Jesús en nuestro interior. ¿Qué nos dice la canción?
º Si sientes paz, Jesús está contigo.
º Si sientes tranquilidad, Jesús te acompaña
º Si sientes serenidad …
OBJETIVO: Descubrir que Jesús está presente en los demás.
MATERIALES: Anexo 1, anexo 2, anexo 3
DESARROLLO:
- Contar la historia de “Juan el zapatero”
-
Hacer un momento de silencio – oración teniendo como base estas preguntas y fichas
Anexo 2 y Anexo 3
Nivel al que va destinado: 4º- 5º y 6º Primaria
EJE: Relación con Dios
DIMENSIÓN: Afectiva
OBJETIVO:
Aprender a dialogar con Dios a partir de los propios sentimientos
Libro de Salmos, papel y bolígrafo y cassette.
DESARROLLO:
 Con música de fondo, leer despacio el siguiente texto:
La gran oración de Navidad
Venid a su lado
¡Vamos! ¡Despertaos!
¿No oís esa música
que atraviesa la noche
y juguetea bajo las estrellas?
Es el anuncio de la gran alegría
que nació en la tierra.
¡Salid de vuestras casas,
despertad de vuestro sueño,
y venid al portal,
cerca del recién nacido
que descansa entre pajas!
Colocaos entre los pastores
que han acudido a toda prisa,
y contempladlo.
En el recién nacido que llora
como un niño de tantos.
Es el Salvador
que en la noche del mundo
enciende la luz de Dios.
¡Salid de vuestras casas,
despertad de vuestro sueño,
venid al portal
y contempladlo!
Ese niño envuelto en pañales
es el que viene
a susurrar a los
que están doblegados
bajo el peso de sus sufrimientos:
“¡Secad vuestras lágrimas.
Yo vengo a llevar
Las cargas que os aplastan”
 Cada niño escribe una oración a Jesús, expresando agradecimiento, alabanza, acción de
gracias…
EJE : Relación con Dios
DIMENSIÓN :Corporal
OBJETIVO:
Agradecer nuestro cuerpo como un gran regalo de Dios
DESARROLLO:
 Ejercicio de relajación-respiración:
¡Respiro ….
a Dios!
Cierra tus ojos …
Respiro con naturalidad, no con violencia.
Si te sientes con ansiedad, respira durante unos momentos profundamente, pero vuelve
enseguida a tu respiración normal.
Toma conciencia del paso del aire a través de las ventanillas de la nariz. Siente el contacto
del aire… La sensación de calor o de frío del aire.
Siente la purificación que produce la respiración dentro de ti. Ahora al inspirar y expirar vas a
respirar a Dios. Toma conciencia de tus sentimientos: paz, alegría, ganas de vivir … el aire
está empapado de la presencia de Dios ( para los hebreos el aire era el Espíritu de Dios, era
la Vida)
Cuando inspiras el aire toma conciencia de que está entrando en ti la gracia de Dios, su
cariño… su amor, su grandeza. Él te está llenando de su paz.
Cuando expiras el aire sale de ti la entrega… la generosidad, el amor, tus ganas de vivir…
todo lo bueno que Dios ha puesto en ti. Al expirar esos sentimientos estás contribuyendo con
Dios a crear un mundo mejor.
EJE : Relación con uno mismo
DIMENSIÓN : Afectiva
OBJETIVO:
Descubrir la importancia de tus emociones y sentimientos
Tijeras, papel, bolígrafo
DESARROLLO:
 Cada niño escribe un sentimiento en una estrella. (alegría, tristeza, miedo, enfado …)
 Sobre el dibujo de un sencillo portal de Belén vacío, cada niño coloca su estrella alrededor
del mismo y explica con una frase el sentimiento escrito en la estrella “me siento alegre por
que …con alguna experiencia personal”
 Se trata de hacerles comprender que las emociones son algo natural y que deben ser
expresadas
 Oramos:
¡Alegrarse!
Dime lo que es para ti
motivo de alegría:
- ¿la llegada de un amigo?
- ¿pasar un fin de semana tus abuelos?
- ¿actuar en la fiesta del colegio?...
- Sí, dime lo que te hace feliz.
- María y José se alegran
- por el niño que les va a nacer.
- Con él la vida será diferente.
- Cuando sólo quedan días para la Navidad,
- Los cristianos nos alegramos porque Jesús
- viene a nosotros.
- ¡Es extraordinario!
- Ahora que Dios está
- Con nosotros,
- un mundo nuevo despierta
- para todos los hombres.
OBJETIVO
Conocimiento y valoración del propio cuerpo
CD - Amigos (Canciones para niños)- Fabiola
Oración fotocopiada
DESARROLLO:
 Partimos de un diálogo con los niños.
Decid: ¿qué podéis hacer – positivo o negativo – con vuestras manos? (pegar, acariciar …)
irán diciendo sucesivamente sobre sus oídos, sus ojos, su boca, sus manos.
 Canción: La cabeza es para pensar
 Oración:
Mis oídos escuchan tantas cosas:
Historias, música, canciones…
Enséñame, Señor,
a escuchar las llamadas
de los que me necesitan.
Mis ojos admiran tus maravillas;
las flores y todo cuanto has creado.
Enséñame, Señor,
a reconocer
a los que viven a mi lado.
Mi boca sabe reír y cantar.
Enséñame, Señor,
a tener palabras
de consuelo para el que sufre
Mis manos dibujan y trabajan.
Enséñame, Señor,
A abrirlas para compartir.
¡Gracias, Señor,
por mis ojos, mis oídos
Y mis manos.
EJE: Relación con los demás
OBJETIVO:
Ejercitarnos en el reconocimiento de las emociones y sentimientos que provocamos en los demás y que
los demás nos provocan
Traer recortes de periódicos:
Noticias, fotos agradables y desagradables para colocarlas en el mural de la clase
DESARROLLO:
 Reconocer y manifestar los sentimientos que provocan las imágenes y noticias en cada uno de
nosotros
 Reflexionar y dialogar sobre los sentimientos positivos y negativos que despiertan en mí, algunas
actuaciones o palabras de las personas que me rodean
 Oración:
Señor Jesús,
que tu venida sea un motivo de alegría
para todos.
Queremos ver felices
a nuestros padres, a nuestros abuelos,
a nuestros amigos, a nuestros familiares.
Queremos ser felices.
Pero Señor, Tú conoces nuestro mundo
y sabes que muchas cosas van mal …
Haz que nosotros colaboremos
para hacer un mundo mejor.
OBJETIVO:
Descubrir y valorar expresiones corporales que nos ayuden a acercarnos o alejarnos de los
demás
DESARROLLO:
 Mediante una dinámica de lenguaje no verbal, hacernos conscientes de los gestos que nos
acercan o alejan
 Nos acercan o nos alejan:
 La sonrisa franca o irónica
 La mirada acogedora o despectiva
 La escucha atenta o desinteresada
 La postura, el modo de estar en un grupo
 Las palabras positivas o negativas …
 Oramos con las palabras de Jesús:
“Mucha gente venía a escucharle (a Jesús), guardaba sus palabras en el corazón y decidía
cambiar de vida”.
Nivel al que va destinado: ESO y Bachillerato
OBJETIVO
Introducción al Adviento
Introducir símbolos característicos del adviento para poder explicar las claves de este tiempo
litúrgico
Fotocopias o dibujos de los símbolos (se proponen algunos, pero se pueden adaptar otros
más vistosos)
DESARROLLO:
Hacer visible cada uno de lo símbolos explicando en qué consiste y porqué se relaciona con
el Adviento.
Se puede acompañar de música suave. No proponemos ninguna concreta porque cualquier
melodía de relajación, o de la naturaleza puede servir.
La palabra ADVIENTO es de origen latín y quiere decir VENIDA. Es el tiempo en que los
cristianos nos preparamos para la venida de Jesucristo. El tiempo de adviento abarca cuatro
semanas antes de Navidad.
Actualmente hay inquietud por reavivar una costumbre muy significativa y de gran ayuda
para vivir este tiempo: La corona o guirnalda de Adviento es el primer anuncio de Navidad.
La corona es un círculo de follaje verde, la forma simboliza la eternidad y el color la
esperanza y la vida. Va enrollada con un listón rojo, símbolo del amor de Dios que nos
envuelve y también de nuestro amor que espera con ansiedad el nacimiento del Hijo de
Dios. En el centro de círculo se colocan las cuatro velas (pueden ser tres moradas y una rosa
o bien todas blancas) para encenderse una cada domingo de Adviento. La luz de la vela
simboliza nuestra fe.
La corona, que procede del Norte (países escandinavos, Alemania), tiene raíces simbólicas
universales: la luz como salvación, el verde como vida, forma redonda como eternidad.
Simbolismos que se vieron muy coherentes con el misterio de la Navidad cristiana y que
pasaron fácilmente a los países del sur.
En el adviento nos preparamos para celebrar la venida de Jesús al mundo.
La estrella dirige a los Reyes Magos durante su búsqueda del Señor. Es su guía durante la
búsqueda de la Verdad y del Señor.
El camino no es fácil, tenemos que elegir por dónde vamos a ir en nuestra vida para llegar a
la meta que nos hayamos propuesto
Surgen las dificultades, momentos en las que las circunstancias que nos rodean no son
buenas o momentos en los que notamos que nos fallan nuestras fuerzas.
El viento del Espíritu hincha nuestras velas, ¡el esfuerzo no es sólo nuestro! Y el Sol nos
acompañará muchos momentos durante nuestra travesía.
Nivel al que va destinado: E.S.O. y Bachillerato
OBJETIVO
Aprender a dialogar con Dios a partir de los propios sentimientos, en esta ocasión, a partir
de nuestros sueños-deseos de felicidad.
El ADVIENTO, como un tiempo de vivir CONECTADOS con los deseos que nos hacen
verdaderamente FELICES.
 Oración “Adora y confía” – ANEXO 1
 Canción “Sé feliz, es gratis” de Rosana – ANEXO 2
 Canción “Agítese antes de usar” de Rosana – ANEXO 3
DESARROLLO:
Ambientación – Se recuerda a los chicos/as que el ADVIENTO supone un tiempo de
ESPERA… A lo largo de este curso estamos recibiendo la invitación constante de VIVIR
CONECTADOS. ¿Conectados a qué? El adviento siempre supone una invitación para los
creyentes a CONECTARNOS con nuestros DESEOS y SUEÑOS más íntimos y profundos.
¿Y no solemos poner todos un mismo nombre a ese deseo-sueño íntimo? Pues sí, todos lo
llamamos FELICIDAD,… aunque detrás de esa palabra, cada uno de nosotros pongamos
sueños diferentes.
Audición – Invitamos a escuchar una de las dos canciones propuestas tratando de
reconocer cómo se cumple en estas canciones lo que hemos afirmado antes. Comentamos
entre todos (frases que les gustan, desacuerdos, experiencias….).
Momento orante – Para terminar, invitamos a rezar, a convertir en DIÁLOGO con Dios todo
lo que hemos ido pensando y sintiendo. Sería bueno diferenciar este momento creando un
clima más sereno, silencioso… con música de fondo que invite a la interiorización.
Entregamos la oración y dejamos unos minutos para que cada uno la rece en silencio.
Recordar que se trata de un tiempo “sagrado” en el que sólo ellos y Dios saben lo que pasa
dentro de cada uno. Invitar a la confianza.
DIMENSIÓN: Corporal.
OBJETIVO
 Orar con nuestro cuerpo – LAS MANOS
 Adviento = ESPERANZA DE OTRO MUNDO POSIBLE – está “en nuestra mano”
implicarnos en ello.


Letra de la canción “Las manos del mundo” – ANEXO 4
Vídeo de la canción – ANEXO 5
ADORA Y CONFÍA
No te inquietes por las dificultades de la vida,
por sus altibajos, por sus decepciones,
por su porvenir más o menos sombrío.
Quiere lo que Dios quiere.
Ofrécele en medio de inquietudes y dificultades
el sacrificio de tu alma sencilla que, pese a todo,
acepta los designios de su providencia.
Poco importa que te consideres un frustrado
si Dios te considera plenamente realizado;
a su gusto.
Piérdete confiado ciegamente en ese Dios
que te quiere para sí.
Y que llegará hasta ti, aunque jamás le veas.
Piensa que estás en sus manos,
tanto más fuertemente cogido,
cuanto más decaído y triste te encuentres.
Vive feliz. Te lo suplico.
Vive en paz.
Que nada te altere.
Que nada sea capaz de quitarte tu paz.
Ni la fatiga psíquica. Ni tus fallos morales.
Haz que brote, y conserva siempre sobre tu rostro
una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor
continuamente te dirige.
Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada,
como fuente de energía y criterio de verdad,
todo aquello que te llene de la paz de Dios.
Recuerda:
cuanto te reprima e inquiete es falso.
Te lo aseguro en nombre de las leyes de la vida
y de las promesas de Dios.
Por eso, cuando te sientas
apesadumbrado,
triste,
adora y confía...
(Teilhard de Chardin)
SÉ FELIZ, ES GRATIS
Ser feliz ....es gratis..... Sé feliz
Solamente tienes que sentir
Que tu podras soñar
Y tu sueño se hará realidad
Agarra tu vida..
Vivir por vivir
Volar por volar
Reir o llorar... De felicidad
......... Tu veras si quieres llegar al final llegarás
Agarra tu vida... Y tira.
Na ra na.... La vida irá
Na ra na.... Poniendo todo en su lugar
Na ra na.... No dudes ..... Abre los ojos
Despierta y ponte a soñar ... Ya veras..... Que llegarás
Sentir por sentir
Que puedes llegar.... Solamente tienes que querer
Querer es poder
Si quieres probar ... Y ya veras .... Si lo intentas ya veras
Tu verás si quieres llegar y al final llegarás
Agarra tu vida ..............y tira
Guarda los buenos recuerdos para los malos momentos
Y escucha....
Apuntate a la vida, a decir lo que sientes
A sentir lo que vales, a soñar lo que quieres
Y a saber que te sobra con tener lo que tienes
... Ser feliz ......es gratis.... Se feliz
... Tu veras que todos tus sueños se haran realidad
Agarra tu vida ..............y tira
ROSANA - AGíTESE ANTES DE USAR (MAGIA)
Sería bonito poder inventar
Un jarabe para la tristeza para podértelo dar
Una vitamina quitapenas para poder regalar
un remedio para cuando duela
un apaño, un remedio, una cura de sueño, una dosis de esperanza
un tratamiento de viento si quieres volar
para festejar la primavera…un comprimido de amor
pa sentir calor y dar candela…dos infusiones de sol
pa las cosas malas hierba buena
un apaño, un remedio, una cura de sueño
una dosis de felicidad
Vive la felicidad agítese antes de usar
Vive la felicidad se puede consumir sin consultar
Vive la felicidad no tiene caducidad
Siente la felicidad
Marca el corazón y el calendario…no se te vaya a olvidar
Para q te tomes a diario…zumo de felicidad
No produce efectos secundarios
Que bonito sería y lo bien que vendría una dosis después de entrada mi alegría
Sería bonito intentar
Indicar lo bueno de la vida…para podértelo dar
Una pócima pa’ las heridas…para poder regalar
Un parche de amor por si suspiras
Que bonito sería y lo bien que vendría una dosis de felicidad
Vive la felicidad…agítese antes de usar
Vive la felicidad…se puede consumir sin consultar
Vive la felicidad…no tiene caducidad
Siente la felicidad.
Sé la receta para la felicidad
Dos cucharadas de alegría para cada día
Unas gotitas de cariño al despertar
Manténgase al alcance de quien lo quiera probar
Vive la felicidad…agítese antes de usar
Vive la felicidad…se puede consumir sin consultar
LAS MANOS DEL MUNDO
Hay muchas clases de manos
en las que puedes ver la verdad
manos que con el tiempo
se hacen viejas por la edad
manos que da gusto acariciar
y manos que pueden dar....
que pueden dar amor y paz
las manos son como el tiempo
que en las decisiones siempre va acompañar
a veces son como el fuego
que hay q cuidarlas o se puede quemar
hay manos buenas hay manos malas
manos que curan y manos q matan
manos que tocan mucho dinero
manos que sueñan poder tenerlo
manos que viven para el trabajo
y gente mala que las usa en el maltrato
manos que tocan guitarras de ensueño
manos que escriben libros y cuentos
asi son las manos del mundo
que sin ir tan lejos te puedes encontrar
manos que con tu ayuda
hay muchas personas que han de necesitar
manos que da gusto acariciar
y manos que pueden dar...
que pueden dar amor y paz
hay manos buenas
hay manos malas .
OBJETIVO
El valor personal que tenemos no depende de la opinión de los demás, sino de nuestro
conocimiento propio
Fotocopia del cuento para poderlo leer. “El verdadero valor del anillo” J. Bucay – ANEXO 1
DESARROLLO:
Se lee el siguiente cuento y se deja un tiempo para la reflexión.
¡¡Cuántas veces no nos sentimos valorados por los demás!! Y esa sensación desagradable,
nos impide mirarnos a nosotros mismos y darnos cuenta de nuestro verdadero valor.
Con Jesús nunca te pasará eso. Va a hacerse Niño para entenderte mejor. Él es el verdadero
experto que sabe valorar lo mucho que vales, lo bueno que eres.
El verdadero valor del anillo
Jorge Bucay
"Recuentos para Demián"
Un joven concurrió a un sabio en busca de ayuda.
- Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada.
Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Cómo puedo
mejorar maestro? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?
El maestro, sin mirarlo, le dijo:
- ¡Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mis propios
problemas. Quizás después... Si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este tema
con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.
- E... encantado, maestro -titubeó el joven pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus
necesidades postergadas-.
- Bien -asintió el maestro-. Se quitó un anillo que llevaba en el dedo pequeño de la mano
izquierda y dándoselo al muchacho agregó: Toma el caballo que está allí afuera y cabalga
hasta el mercado. Debo vender este anillo para pagar una deuda. Es necesario que obtengas
por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Vete y regresa
con esa moneda lo más rápido que puedas.
El joven tomó el anillo y partió. Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes.
Estos lo miraban con algún interés hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo.
Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y
sólo un viejito fue tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda
de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo.
En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el
joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro, así que rechazó la
oferta.
Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado -más de cien
personas- y abatido por su fracaso, montó su caballo y regresó.
¡Cuánto hubiese deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro! Podría habérsela
entregado al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y su
ayuda.
- Maestro -dijo- lo siento, no es posible conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera
conseguir 2 ó 3 monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del
verdadero valor del anillo.
- ¡Qué importante lo que dijiste, joven amigo! -contestó sonriente el maestro-. Debemos
saber primero el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor
que él para saberlo?. Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuánto da por él. Pero
no importa lo que ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con mi anillo.
El joven volvió a cabalgar. El joyero examinó el anillo a la luz del candil, lo miró con su lupa,
lo pesó y luego le dijo:
- Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más que 58
monedas de oro por su anillo.
- ¿¿¿¿58 monedas???? -exclamó el joven-.
- Sí, -replicó el joyero-. Yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70
monedas, pero no sé... Si la venta es urgente...
El joven corrió emocionado a casa del maestro a contarle lo sucedido.
- Siéntate -dijo el maestro después de escucharlo-. Tú eres como este anillo: una joya única y
valiosa. Y como tal, sólo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿Qué haces por la
vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?
Y diciendo esto, volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño de su mano izquierda.
Nivel al que va destinado: ESO Y BTO
OBJETIVO: invitación a “ NAVEGAR” por tu interior para descubrir
tus límites y
posibilidades... y vivir el ADVIENTO como una posibilidad para CONECTARTE contigo
mismo, con los demás y con Dios.
¿QUE NECESITAS para “Navegar”?
- Aprender a llenar de sentido tu tiempo
- Mirar y mirarte en profundidad
- “ Descalzarte” ... para entrar en el otro
Símbolos que pueden ayudarte:
- Barco
- Estrella
- Ojo Mágico
Textos: ANEXO 2
- Tiempo sin adviento
- Parábola del silencio
- Las tres rejas
- Descalzarse....para entrar en los otros
DESARROLLO : Partiendo del/los símbolo/os y del objetivo, elegir uno de los textos
teniendo presente las características del grupo o bien utilizar el material en distintos días.
TIEMPO SIN ADVIENTO
Hablar del tiempo no es siempre una obviedad, y de hecho a veces es un
problema. No es raro encontrarnos con que muchas veces vivimos el tiempo como
un túnel, continuo, sin matices, sin sentido...
Se trata de un tiempo que absorbe, devora, desgasta, agota… túnel donde sólo hay
presente y su prolongación homogénea. Escenario de una frenética y acelerada carrera
por rentabilizar los minutos y las horas. No hay futuro que me auspicie, ni esperanza
que me sostenga... Un tiempo así no está habitado más que por mí mismo, no hay
sitio para otro. Diría que hasta huele a cerrado, no está aireado. Se trata de un
tiempo sin adviento. No viene nadie.
Esta forma deshabitada, desesperanzada y a la larga estéril, no es la única manera de
vivir nuestro tiempo. Éste está llamado a ser otra cosa. La actividad y los resultados no
es el único nivel del tiempo y mucho menos el más importante. Existe un substrato, un
trasfondo que sostiene, un nivel del tiempo más hondo que siempre ha estado ahí
esperando nuestras búsquedas. Es este nivel básico donde respiran nuestros
anhelos, donde bebe nuestra esperanza…
Sólo hay que parar y dar tiempo a ese nivel “de fondo”, escuchar y buscar ahí lo
que dé sentido y fundamento a mis otros tiempos. Es entonces cuando lo infructuoso
de esta búsqueda o lo frustrante de los resultados, me revelan como alguien
incompleto, más interrogante que respuesta, abierto fundamentalmente al misterio de
la existencia… Y repito, sólo hay que parar y bajar a ese nivel del tiempo para ir
descubriendo que lo que completa mi ser, la respuesta a mi interrogante, lo que
colma mi apertura, está ahí, viniendo a mi vida, una vez más, como lo ha estado
siempre.
“ Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la
puerta, entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo.”
(Ap 3,20)
Descubrir esta venida, reconocerle a Él su lugar en nuestro tiempo, es vivir el
adviento. Es prepararnos para dejarnos completar, responder, colmar... por quien nos ha
hecho abiertos al dinamismo de sentido que nos empuja a la vida.
LA PEQUEÑA PARÁBOLA DEL SILENCIO
Qué aprendes en tu vida de silencio?". Preguntó el caminante a un monje.
El monje, que en aquel momento estaba sacando agua de un pozo, le respondió: "Mira al
fondo del pozo. ¿Qué ves?".
El caminante obedeció la propuesta del solitario, y se asomó curioso al brocal del pozo.
Después de observar bien respondió: "Sólo veo un poco de agua revuelta".
"Detente un instante en tu camino, hermano, -le dijo el monje- contempla silencioso y
sereno el cielo y las montañas que rodean nuestro monasterio, y espera... ".
Tanto el monje como el caminante se entretuvieron contemplando en silencio durante
un tiempo, que no se hizo largo por la belleza deslumbrante del entorno. Diversa y en
armonía.
El sol levante destacaba el perfil de las montañas en el fondo azul intenso del cielo.
"Hermano... vuelve ahora a mirar el pozo y dime: ¿Qué ves?".
"Ahora veo mi rostro reflejado en el espejo que me ofrece la serenidad del agua",
contestó el caminante.
"Esto es, hermano, lo que yo aprendo en mi vida de silencio.
Comencé reconociendo mi rostro reflejado en las aguas remansadas del pozo cada vez
que me acercaba para llenar mi cántaro de agua. Después, poco a poco, fui descubriendo
lo que hay más abajo de la superficie, hasta llegaba a entrever las pequeñas hiervas que
crecen junto a las paredes excavadas al construir el pozo.
Y en los días en los que la orientación de la luz del sol me lo permitía, y el agua estaba
especialmente cristalina, llegué a ver las piedras del fondo y hasta los restos de un
cántaro roto y olvidado que había caído hace años y quedó allí.
Me preguntabas qué aprendía en el silencio. Esta es mi respuesta: quiero descubrir la
profundidad de mi alma, el rincón más hondo de mi corazón, y de mi propia vida.
Vine al monasterio buscando a Dios, porque sabía que Él me envolvía con su presencia. Y
cada vez voy comprobando con más claridad que Dios también está en lo más profundo
del pozo, como alma que da sentido y color, luz y vida a todo aquel que se asoma al
interior del propio pozo con el deseo de buscarlo”.
LAS TRES REJAS
El joven discípulo de un sabio filósofo llega a casa de éste y le dice:
-Oye, maestro, un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia...
-¡Espera! lo interrumpe el filósofo-. ¿Ya has hecho pasar por las tres rejas lo que vas a
contarme?
-¿Las tres rejas?
-Sí. La primera es la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es
absolutamente cierto?
-No. Lo oí comentar a unos vecinos.
-Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Eso que
deseas decirme, ¿es bueno para alguien?
-No, en realidad no. Al contrario...
-¡Ah, vaya! La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto
te inquieta?
-A decir verdad, no.
-Entonces -dijo el sabio sonriendo-, si no es verdadero, ni bueno, ni necesario,
enterrémoslo en el olvido.
“DESCALZARSE” … PARA ENTRAR EN EL OTRO
Una mañana, reflexionando sobre un anuncio, me detuve ante una expresión que resonó
de una manera muy especial en mi corazón: “Descalzarse para entrar en el otro”. Le
pregunté al Señor qué significaba esto. Se me ocurrían palabras como respeto,
delicadeza, cuidado, prudencia. Recordé las palabras del Éxodo 3,5: “No te acerques
más, quítate tus sandalias porque lo que pisas es un lugar sagrado” Fueron las palabras
que Yahvé dijo a Moisés ante la zarza que ardía sin consumirse, y pensé: “Si Dios habla
al interior de mi hermano, su corazón es un lugar sagrado”. No tardé en ponerme en
oración. Jesús me presentaba uno a uno a mis amigos y conocidos y luego a otros. Y
descubrí cómo habitualmente entro en el interior de cada uno sin descalzarme,
simplemente entro: sin fijarme en el modo, entro. Experimenté una fuerte necesidad
de pedir perdón al Señor y a mis hermanos. Sentí que el Señor me invitaba a
descalzarme y luego a caminar. Después noté una especie de resistencia: “no quería
ensuciarme”. Me resultaba más seguro andar calzado al acercarme a los otros: la
comodidad, el temor... Vencido este primer momento comencé a caminar y el Señor a
cada paso iba mostrándome algo nuevo. Advertí que, descalzo, podía descubrir mejor
las alternativas del terreno que pisaba, distinguir lo húmedo y lo seco del pasto de la
tierra. Necesitaba mirar a cada paso lo que pisaba, estar atento al lugar donde iba a
poner mi pie. Me di cuenta de cuántas cosas del interior de mis hermanos se me pasan
por alto, las desconozco, no las tengo en cuenta... por entrar calzado, con la mirada
puesta en mí o disperso en múltiples cosas. Pude comprobar también cómo, descalzo,
caminaba más lentamente; no usaba mi ritmo habitual y trataba de pisar con más
suavidad. Donde mis zapatillas habían dejado marcas, mi pie no las dejaba. Pensé
entonces cuántas marcas habré dejado en el corazón de mis hermanos a lo largo del
camino y experimenté un gran deseo de entrar en los otros sin dejar un cartel que diga:
“aquí estuve yo”. Por último, fui atravesando distintos terrenos, primero de pasto, luego
de tierra... hasta llegar a una subida y con piedras. Sentí deseos de detenerme y volver
a calzarme; pero el Señor me invitó a caminar descalzo un poquito más. Después de este
recorrido con el Señor, pude ver claramente que descalzarse es entrar sin prejuicios...,
atento únicamente a las necesidades de mi hermano, sin esperar una respuesta
determinada. Es entrar sin intereses, habiendo despojado mi alma. Porque creo, Señor,
que estás vivo y presente en el corazón de mis hermanos, por eso me comprometo a
detenerme, descalzarme... y entrar en cada uno como en un lugar sagrado. Cuento para
ello, Señor, con tu GRACIA.
Nivel
ESO y BTO
Eje
Relación con uno mismo
Dimensión
Afectiva
Objetivo
Descubrir la paciencia como una virtud esencial en nuestra relación
con el Señor y con uno mismo
Desarrollo
Comenzar con una breve explicación por parte del tutor de la paciencia como valor importante
para vivir el Adviento:
Comenzamos Adviento, un tiempo que da énfasis al esperar con paciencia. Esperar con paciencia
es esencial a nuestra relación con el Señor y uno con otro. Adviento es un tiempo para practicar la
paciencia. - La paciencia de María, la paciencia de Jesús, la paciencia de los santos, tienen que ser
un constante estímulo para el cristiano.
“ La paciencia - dirá Santa Teresa - todo lo alcanza".
Se les entrega una hoja con frases de pensadores donde se exalta la paciencia (Anexo 3)
Se inicia una reflexión compartida.
Cuestiones
¿Qué frase te ha gustado más y por qué?
¿Quieres compartir con tus compañeros alguna experiencia en la que gracias a la paciencia
consiguieras algún difícil objetivo?
Nivel al que va destinado: ESO Y BTO
OBJETIVO:
 Fomentar la alegría ante la LLEGADA de alguien-ALGUIEN que esperamos.
 Descubrir lo que se necesita preparar para la acogida
-
Canción “LLEGASTE TÚ” de Luis Guitarra – ANEXO 4.
DESARROLLO :
1º.-Se hace tomar conciencia de situaciones que viven , ante la llegada de algún amigo-a que
esperan con alegría. Los preparativos, arreglos, pensamientos ante lo que le quieren decir...
2º.-Se escucha la canción (sería bueno que tuvieran en una hoja la letra )
♫ LLEGASTE TÚ
Llegaste despacito, como se acerca el sol a mi ventana;
Como la primavera, que cuando más se espera... más se retrasa.
Llegaste de puntillas, como una bailarina en plena danza…
Y haciendo los honores, llegaste entre dolores y esperanzas.
Llegaste porque aquí se abrió una puerta, llegaste
Y sin apenas darnos cuenta, nos pusimos a soñar.
Tú, llegaste tú. Y nuestra casa se llenó de sueños.
Tú, llegaste tú, para quedarte siempre en nuestro corazón.
Llegaste en la batalla (el humo y la metralla te hicieron llorar),
Y mientras te acunaba, sentía que abrazaba así a la humanidad.
Llegaste con motivos, llegaste a dar sentido, llegaste a buscar,
Igual-seguramente-que el resto de la gente, la FELICIDAD.
Llegaste porque aquí se te esperaba; llegaste y sin apenas decir nada,
Juntos fuimos mucho más. Llegaste porque aquí se abrió una puerta,
Llegaste y sin apenas darnos cuenta, nos pusimos a soñar.
Tú, llegaste tú…
3º.-Ante la canción : (distintas posibilidades)
-Sentimientos que les despiertan …
-Oración-eco
-Resonancias y aplicación de frases concretas:”Llegaste entre dolores y esperanzas”
“ Llegaste porque aquí se abrió una puerta”, “Llegaste y sin apenas darnos cuenta, nos
pusimos a soñar.”
-Oración de acción de gracias por la LLEGADA
Nivel al que va destinado: ESO Y BACHILLERATO
OBJETIVO :
Aportar herramientas que posibiliten el conocimiento y la valoración del propio cuerpo desde
su capacidad para interactuar con los demás.

Reflexionamos sobre LA ESPERA, nos cuestionamos LA ESPERA, sentimos en
y la ESPERA… y finalmente celebramos LA ESPERA.
-
música de relajación
un aula con cojines por el suelo o, si no es posible, el mismo aula en el que se
da clase
papel y boli
el cuento titulado “El amor y el taxista” de Sopa de pollo para el alma de Mark
Victor HANSEN y Jack CANFIELD – (en este mismo documento).
DESARROLLO :
El cuarto de hora se desarrollará en los quince minutos de oración de tres días seguidos
realizando cada uno de esos días estos tres momentos:
a) Provocar el silencio, la relajación y serenidad interior que prepara para la meditación.
b) Realizar la “técnica del espejo” que nos pone experiencialmente en contacto con los
demás.
c) Reflexión final sobre LA ESPERA.
A) Provocar el silencio, la relajación y serenidad interior.
Los alumnos estarán sentados en el suelo si el lugar lo permite o en los mismos pupitres
pero es importante crear “clima”: apagar las luces, poner música relajante, pedir a los
alumnos que cierren los ojos para que se centren en su interior y dirigir la relajación con
palabras similares a éstas:
Escucha la música. Sólo escúchala… Colócate en una postura cómoda… Vete
recorriendo tu cuerpo para relajarlo y liberar tensiones, empieza por los pies, los tobillos,
muévelos despacio y de manera rotativa para relajarlos… Piensa en tus piernas, haz lo
mismo, descárgalas de tensiones… Continua con las caderas y muy importante coloca la
espalda recta pero sin tensión, ¿y los hombros? muévelos despacio, seguro que estaban
tensos… Gira el cuello lentamente y asciende a tu cara, relaja los labios, el ceño no
puede estar fruncido y libera, tersa tu frente. Y ahora tu mente, imagina una hoja en
blanco, déjala en blanco y RESPIRA, coloca una mano en tu vientre y otra en tu pecho,
toma aire con la nariz notando que inflas el vientre, súbelo al pecho y expúlsalo
lentamente por la nariz. Repite las respiraciones a tu ritmo, siendo consciente de tu
respiración y sin pensar en nada más. Luego estarás preparado para interaccionar con los
demás.
B) La técnica del espejo.
Los alumnos se colocan por parejas, uno enfrente de otro. Uno de ellos actúa, realizando
gestos o movimientos, poniendo muecas… El otro debe repetir lo más exactamente posible
la actuación que ha realizado el compañero. En un segundo momento intercambian los
papeles. Debe hacerse en silencio y con la mayor concentración posible. Deben ir
registrando en su interior qué sienten al esperar que el compañero haga su actuación. Al
terminar, la pareja dialogará sobre lo sentido, principalmente sobre lo que esperaban del
compañero y sobre lo que sentían en la espera y lo pondrá por escrito.
C) Reflexión final sobre LA ESPERA.
Las parejas que quieran pueden contar al resto de los compañeros lo que han compartido
y escrito.
Seguidamente se leerá el cuento “El amor y el taxista”. Después de leerlo se les guía en la
siguiente reflexión:
¿sabemos esperar o la impaciencia nos hace querer las cosas YA?, Saber esperar forja
nuestra paciencia, nuestra capacidad de reflexión sobre lo que esperamos, nuestra
capacidad de ilusionarnos con lo que esperamos en contra de la sensación de no valorar
nada porque todo lo conseguimos de manera inmediata… / ¿esperamos cosas buenas de los
demás? Esperar cosas buenas de los demás genera energías positivas porque lo notan y se
sienten valorados, queridos, útiles, responsables de corresponder…
El Adviento es una espera ilusionada, paciente, previsora, como se espera el nacimiento de
un hijo, de un hermano, de un nieto… preparando todo lo que le pueda facilitar al recién
nacido su incorporación al mundo. Preparemos nuestro corazón, nuestro castillo interior de
esta misma manera para el nacimiento de Jesús, para que renazcan dentro de nosotros los
principios evangélicos que dotan de sentido la vida de todos aquellos que los quieren
albergar.
El amor y el taxista
El otro día, en Nueva York, cogí un taxi con un
amigo. Cuando nos bajamos, mi amigo le dijo al taxista:
-Le agradezco el viaje. Es usted un conductor
estupendo.
Durante un segundo, el hombre se quedó atónito.
Después reaccionó:
-Oiga, ¿ me está tomando el pelo o qué?
-Nada de eso, amigo mío, no tengo intención
de molestado. Admiro la tranquilidad con que se mueve
en medio de semejante tránsito.
-Ah -farfulló el conductor, y siguió su recorrido.
-¿ A qué venía eso? -pregunté.
-Estoy tratando de restaurar el amor en Nueva York -me respondió mi amigo-o Creo que es lo único
capaz de recuperar la ciudad.
-¿ Cómo es posible que un solo hombre salve Nueva
York?
-No es cuestión de un solo hombre. Creo que
-54-
a ese taxista le he cambiado el día. Suponte que haga
veinte viajes. Pues será amable con esos veinte pasajeros
porque alguien fue amable con él. Ellos, a su vez, serán
más cordiales con sus empleados, servidores o
colaboradores, e incluso con sus respectivas familias. En
última instancia, la buena disposición podría extenderse a
un millar de personas por lo menos. No está mal, ¿no te
parece?
-Pero tú confías en que ese taxista transmita tu buena
disposición a los demás.
-N o estoy confiando en nada -respondió mi amigo-o
Me doy cuenta de que el sistema no es totalmente seguro.
Hoy puedo encontrarme con diez personas muy
diferentes, si de entre esos diez puedo hacer felices a tres,
finalmente podré influir en forma indirecta sobre las
actitudes de tres mil más.
-Teóricamente suena bien -admití-, pero no estoy
seguro de que en la práctica funcione.
-Si no funciona no se pierde nada. N o perdí ni un
minuto en decide a ese hombre que estaba haciendo muy
bien su trabajo. Ni le di una propina mayor ni una más
pequeña. Y si mis palabras cayeron en oídos sordos, ¿qué
importa? Mañana habrá algún otro taxista a quien pueda
tratar de hacer feliz.
-Oye, tú estás un poco chiflado -señalé.
-Tus palabras demuestran lo cínico que te has
vuelto. Este asunto lo tengo estudiado. Lo que al parecer
les falta a nuestros empleados de correos, aparte de
dinero, por cierto, es que nadie les dice lo bien que están
haciendo su trabajo.
-Pero si no están haciendo bien su trabajo.
-Si no están haciendo bien su trabajo es por-55-
El verdadero valor del anillo
Jorge Bucay
"Recuentos para Demián"
Un joven concurrió a un sabio en busca de ayuda.
- Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. Me
dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Cómo puedo mejorar
maestro? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?
El maestro, sin mirarlo, le dijo:
- ¡Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mis propios problemas.
Quizás después... Si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este tema con más rapidez y
después tal vez te pueda ayudar.
- E... encantado, maestro -titubeó el joven pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus
necesidades postergadas-.
- Bien -asintió el maestro-. Se quitó un anillo que llevaba en el dedo pequeño de la mano izquierda
y dándoselo al muchacho agregó: Toma el caballo que está allí afuera y cabalga hasta el mercado.
Debo vender este anillo para pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma
posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Vete y regresa con esa moneda lo más
rápido que puedas.
El joven tomó el anillo y partió. Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes. Estos lo
miraban con algún interés hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo. Cuando el joven
mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y sólo un viejito fue tan
amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para
entregarla a cambio de un anillo.
En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el joven
tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro, así que rechazó la oferta.
Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado -más de cien personasy abatido por su fracaso, montó su caballo y regresó.
¡Cuánto hubiese deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro! Podría habérsela entregado
al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y su ayuda.
- Maestro -dijo- lo siento, no es posible conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera conseguir 2 ó
3 monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del
anillo.
- ¡Qué importante lo que dijiste, joven amigo! -contestó sonriente el maestro-. Debemos saber
primero el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor que él para
saberlo?. Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuánto da por él. Pero no importa lo que
ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con mi anillo.
El joven volvió a cabalgar. El joyero examinó el anillo a la luz del candil, lo miró con su lupa, lo pesó
y luego le dijo:
- Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más que 58 monedas de
oro por su anillo.
- ¿¿¿¿58 monedas???? -exclamó el joven-.
- Sí, -replicó el joyero-. Yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero
no sé... Si la venta es urgente...
El joven corrió emocionado a casa del maestro a contarle lo sucedido.
- Siéntate -dijo el maestro después de escucharlo-. Tú eres como este anillo: una joya única y
valiosa. Y como tal, sólo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿Qué haces por la vida
pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?
Y diciendo esto, volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño de su mano izquierda.
TIEMPO SIN ADVIENTO
Hablar del tiempo no es siempre una obviedad, y de hecho a veces es un problema.
No es raro encontrarnos con que muchas veces vivimos el tiempo como un túnel,
continuo, sin matices, sin sentido...
Se trata de un tiempo que absorbe, devora, desgasta, agota… túnel donde sólo hay
presente y su prolongación homogénea. Escenario de una frenética y acelerada carrera
por rentabilizar los minutos y las horas. No hay futuro que me auspicie, ni esperanza que
me sostenga... Un tiempo así no está habitado más que por mí mismo, no hay sitio
para otro. Diría que hasta huele a cerrado, no está aireado. Se trata de un tiempo sin
adviento. No viene nadie.
Esta forma deshabitada, desesperanzada y a la larga estéril, no es la única manera de vivir
nuestro tiempo. Éste está llamado a ser otra cosa. La actividad y los resultados no es el
único nivel del tiempo y mucho menos el más importante. Existe un substrato, un trasfondo
que sostiene, un nivel del tiempo más hondo que siempre ha estado ahí esperando
nuestras búsquedas. Es este nivel básico donde respiran nuestros anhelos, donde
bebe nuestra esperanza…
Sólo hay que parar y dar tiempo a ese nivel “de fondo”, escuchar y buscar ahí lo que
dé sentido y fundamento a mis otros tiempos. Es entonces cuando lo infructuoso de
esta búsqueda o lo frustrante de los resultados, me revelan como alguien incompleto, más
interrogante que respuesta, abierto fundamentalmente al misterio de la existencia… Y
repito, sólo hay que parar y bajar a ese nivel del tiempo para ir descubriendo que lo que
completa mi ser, la respuesta a mi interrogante, lo que colma mi apertura, está ahí,
viniendo a mi vida, una vez más, como lo ha estado siempre.
“ Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la
puerta, entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo.”
(Ap 3,20)
Descubrir esta venida, reconocerle a Él su lugar en nuestro tiempo, es vivir el adviento.
Es prepararnos para dejarnos completar, responder, colmar... por quien nos ha hecho
abiertos al dinamismo de sentido que nos empuja a la vida.
LA PEQUEÑA PARÁBOLA DEL SILENCIO
Qué aprendes en tu vida de silencio?". Preguntó el caminante a un monje.
El monje, que en aquel momento estaba sacando agua de un pozo, le respondió: "Mira al
fondo del pozo. ¿Qué ves?".
El caminante obedeció la propuesta del solitario, y se asomó curioso al brocal del pozo.
Después de observar bien respondió: "Sólo veo un poco de agua revuelta".
"Detente un instante en tu camino, hermano, -le dijo el monje- contempla silencioso y
sereno el cielo y las montañas que rodean nuestro monasterio, y espera... ".
Tanto el monje como el caminante se entretuvieron contemplando en silencio durante un
tiempo, que no se hizo largo por la belleza deslumbrante del entorno. Diversa y en
armonía.
El sol levante destacaba el perfil de las montañas en el fondo azul intenso del cielo.
"Hermano... vuelve ahora a mirar el pozo y dime: ¿Qué ves?".
"Ahora veo mi rostro reflejado en el espejo que me ofrece la serenidad del agua", contestó
el caminante.
"Esto es, hermano, lo que yo aprendo en mi vida de silencio. Comencé reconociendo mi
rostro reflejado en las aguas remansadas del pozo cada vez que me acercaba para llenar
mi cántaro de agua. Después, poco a poco, fui descubriendo lo que hay más abajo de la
superficie, hasta llegaba a entrever las pequeñas hiervas que crecen junto a las paredes
excavadas al construir el pozo.
Y en los días en los que la orientación de la luz del sol me lo permitía, y el agua estaba
especialmente cristalina, llegué a ver las piedras del fondo y hasta los restos de un cántaro
roto y olvidado que había caído hace años y quedó allí.
Me preguntabas qué aprendía en el silencio. Esta es mi respuesta: quiero descubrir la
profundidad de mi alma, el rincón más hondo de mi corazón, y de mi propia vida.
Vine al monasterio buscando a Dios, porque sabía que Él me envolvía con su presencia. Y
cada vez voy comprobando con más claridad que Dios también está en lo más profundo
del pozo, como alma que da sentido y color, luz y vida a todo aquel que se asoma al
interior del propio pozo con el deseo de buscarlo”.
LAS TRES REJAS
El joven discípulo de un sabio filósofo llega a casa de éste y le dice:
-Oye, maestro, un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia...
-¡Espera! lo interrumpe el filósofo-. ¿Ya has hecho pasar por las tres rejas lo que vas a
contarme?
-¿Las tres rejas?
-Sí. La primera es la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es
absolutamente cierto?
-No. Lo oí comentar a unos vecinos.
-Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Eso que deseas
decirme, ¿es bueno para alguien?
-No, en realidad no. Al contrario...
-¡Ah, vaya! La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto te
inquieta?
-A decir verdad, no.
-Entonces -dijo el sabio sonriendo-, si no es verdadero, ni bueno, ni necesario,
enterrémoslo en el olvido.
“DESCALZARSE” … PARA ENTRAR EN EL OTRO
Una mañana, reflexionando sobre un anuncio, me detuve ante una expresión que resonó
de una manera muy especial en mi corazón: “Descalzarse para entrar en el otro”. Le
pregunté al Señor qué significaba esto. Se me ocurrían palabras como respeto, delicadeza,
cuidado, prudencia. Recordé las palabras del Éxodo 3,5: “No te acerques más, quítate tus
sandalias porque lo que pisas es un lugar sagrado” Fueron las palabras que Yahvé dijo a
Moisés ante la zarza que ardía sin consumirse, y pensé: “Si Dios habla al interior de mi
hermano, su corazón es un lugar sagrado”. No tardé en ponerme en oración. Jesús me
presentaba uno a uno a mis amigos y conocidos y luego a otros. Y descubrí cómo
habitualmente entro en el interior de cada uno sin descalzarme, simplemente entro: sin
fijarme en el modo, entro. Experimenté una fuerte necesidad de pedir perdón al Señor y a
mis hermanos. Sentí que el Señor me invitaba a descalzarme y luego a caminar. Después
noté una especie de resistencia: “no quería ensuciarme”. Me resultaba más seguro andar
calzado al acercarme a los otros: la comodidad, el temor... Vencido este primer momento
comencé a caminar y el Señor a cada paso iba mostrándome algo nuevo. Advertí que,
descalzo, podía descubrir mejor las alternativas del terreno que pisaba, distinguir lo
húmedo y lo seco del pasto de la tierra. Necesitaba mirar a cada paso lo que pisaba, estar
atento al lugar donde iba a poner mi pie. Me di cuenta de cuántas cosas del interior de mis
hermanos se me pasan por alto, las desconozco, no las tengo en cuenta... por entrar
calzado, con la mirada puesta en mí o disperso en múltiples cosas. Pude comprobar
también cómo, descalzo, caminaba más lentamente; no usaba mi ritmo habitual y trataba
de pisar con más suavidad. Donde mis zapatillas habían dejado marcas, mi pie no las
dejaba. Pensé entonces cuántas marcas habré dejado en el corazón de mis hermanos a lo
largo del camino y experimenté un gran deseo de entrar en los otros sin dejar un cartel que
diga: “aquí estuve yo”. Por último, fui atravesando distintos terrenos, primero de pasto,
luego de tierra... hasta llegar a una subida y con piedras. Sentí deseos de detenerme y
volver a calzarme; pero el Señor me invitó a caminar descalzo un poquito más. Después de
este recorrido con el Señor, pude ver claramente que descalzarse es entrar sin
prejuicios..., atento únicamente a las necesidades de mi hermano, sin esperar una
respuesta determinada. Es entrar sin intereses, habiendo despojado mi alma. Porque creo,
Señor, que estás vivo y presente en el corazón de mis hermanos, por eso me comprometo
a detenerme, descalzarme... y entrar en cada uno como en un lugar sagrado. Cuento para
ello, Señor, con tu GRACIA.
Paciencia
La paciencia es un árbol de raíz amarga pero de frutos muy dulces.
Proverbio persa
Cuando fuiste martillo no tuviste clemencia, ahora que eres yunque, ten paciencia.
Refrán
Quien tiene paciencia, obtendrá lo que desea.
Benjamin Franklin (1706-1790) Estadista y científico estadounidense.
La paciencia es la fortaleza del débil y la impaciencia, la debilidad del fuerte.
Inmanuel Kant (1724-1804) Filosofo alemán.
Sólo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia
y dignidad a todos los hombres. Así la poesía no habrá cantado en vano.
Pablo Neruda (1904-1973) Poeta chileno.
La paciencia es amarga, pero sus frutos son dulces.
Jean Jacques Rousseau (1712-1778) Filósofo francés.
El mejor fuego no es el que se enciende rápidamente.
George Eliot (1819-1880) Seudónimo de Mary Anne Evans. Novelista británica.
La paciencia y el tiempo hacen más que la fuerza y la violencia.
Jean de la Fontaine (1621-1695) Escritor y poeta francés.
La paciencia es la más heroica de las virtudes, precisamente porque carece de toda
apariencia de heroísmo
Giacomo Leopardi (1798-1837) Poeta y erudito italiano.
No hay auténtico genio sin paciencia.
Louis Charles Alfred de Musset (1810-1857) Poeta francés.
La paciencia tiene más poder que la fuerza.
Plutarco (50-125) Escritor griego.
Paciencia: forma menor de desesperación disfrazada de virtud.
Ambrose Bierce (1842-1914) Escritor estadounidense.
Si he hecho descubrimientos invaluables ha sido más por tener paciencia que cualquier
otro talento.
Isaac Newton (1642-1727) Matemático y físico británico.
Ten paciencia con todas las cosas, pero sobre todo contigo mismo.
San Francisco de Sales (1566-1622) Obispo y Doctor de la Iglesia.
El que sube una escalera debe empezar por el primer peldaño.
Walter Scott (1771-1832) Escritor británico.
El genio puede concebir, pero la labor paciente debe consumar.
Horace Mann (1796-1859) Educador estadounidense.
A la larga el galgo a la liebre mata.
Refrán
No se ganó Zamora en una hora.
Poquito a poco hila la vieja el copo.
Refrán
Nivel al que va destinado: ESO Y BACHILLERATO
OBJETIVO :
Aportar herramientas que posibiliten el conocimiento y la valoración del propio cuerpo desde
su capacidad para interactuar con los demás.

Reflexionamos sobre LA ESPERA, nos cuestionamos LA ESPERA, sentimos en
y la ESPERA… y finalmente celebramos LA ESPERA.
-
música de relajación
un aula con cojines por el suelo o, si no es posible, el mismo aula en el que se
da clase
papel y boli
el cuento titulado “El amor y el taxista” de Sopa de pollo para el alma de Mark
Victor HANSEN y Jack CANFIELD – (en este mismo documento).
DESARROLLO :
El cuarto de hora se desarrollará en los quince minutos de oración de tres días seguidos
realizando cada uno de esos días estos tres momentos:
d) Provocar el silencio, la relajación y serenidad interior que prepara para la meditación.
e) Realizar la “técnica del espejo” que nos pone experiencialmente en contacto con los
demás.
f) Reflexión final sobre LA ESPERA.
D) Provocar el silencio, la relajación y serenidad interior.
Los alumnos estarán sentados en el suelo si el lugar lo permite o en los mismos pupitres
pero es importante crear “clima”: apagar las luces, poner música relajante, pedir a los
alumnos que cierren los ojos para que se centren en su interior y dirigir la relajación con
palabras similares a éstas:
Escucha la música. Sólo escúchala… Colócate en una postura cómoda… Vete
recorriendo tu cuerpo para relajarlo y liberar tensiones, empieza por los pies, los tobillos,
muévelos despacio y de manera rotativa para relajarlos… Piensa en tus piernas, haz lo
mismo, descárgalas de tensiones… Continua con las caderas y muy importante coloca la
espalda recta pero sin tensión, ¿y los hombros? muévelos despacio, seguro que estaban
tensos… Gira el cuello lentamente y asciende a tu cara, relaja los labios, el ceño no
puede estar fruncido y libera, tersa tu frente. Y ahora tu mente, imagina una hoja en
blanco, déjala en blanco y RESPIRA, coloca una mano en tu vientre y otra en tu pecho,
toma aire con la nariz notando que inflas el vientre, súbelo al pecho y expúlsalo
lentamente por la nariz. Repite las respiraciones a tu ritmo, siendo consciente de tu
respiración y sin pensar en nada más. Luego estarás preparado para interaccionar con los
demás.
E) La técnica del espejo.
Los alumnos se colocan por parejas, uno enfrente de otro. Uno de ellos actúa, realizando
gestos o movimientos, poniendo muecas… El otro debe repetir lo más exactamente posible
la actuación que ha realizado el compañero. En un segundo momento intercambian los
papeles. Debe hacerse en silencio y con la mayor concentración posible. Deben ir
registrando en su interior qué sienten al esperar que el compañero haga su actuación. Al
terminar, la pareja dialogará sobre lo sentido, principalmente sobre lo que esperaban del
compañero y sobre lo que sentían en la espera y lo pondrá por escrito.
F) Reflexión final sobre LA ESPERA.
Las parejas que quieran pueden contar al resto de los compañeros lo que han compartido
y escrito.
Seguidamente se leerá el cuento “El amor y el taxista”. Después de leerlo se les guía en la
siguiente reflexión:
¿sabemos esperar o la impaciencia nos hace querer las cosas YA?, Saber esperar forja
nuestra paciencia, nuestra capacidad de reflexión sobre lo que esperamos, nuestra
capacidad de ilusionarnos con lo que esperamos en contra de la sensación de no valorar
nada porque todo lo conseguimos de manera inmediata… / ¿esperamos cosas buenas de los
demás? Esperar cosas buenas de los demás genera energías positivas porque lo notan y se
sienten valorados, queridos, útiles, responsables de corresponder…
El Adviento es una espera ilusionada, paciente, previsora, como se espera el nacimiento de
un hijo, de un hermano, de un nieto… preparando todo lo que le pueda facilitar al recién
nacido su incorporación al mundo. Preparemos nuestro corazón, nuestro castillo interior de
esta misma manera para el nacimiento de Jesús, para que renazcan dentro de nosotros los
principios evangélicos que dotan de sentido la vida de todos aquellos que los quieren
albergar.
El amor y el taxista
El otro día, en Nueva York, cogí un taxi con un
amigo. Cuando nos bajamos, mi amigo le dijo al taxista:
-Le agradezco el viaje. Es usted un conductor
estupendo.
Durante un segundo, el hombre se quedó atónito.
Después reaccionó:
-Oiga, ¿ me está tomando el pelo o qué?
-Nada de eso, amigo mío, no tengo intención
de molestado. Admiro la tranquilidad con que se mueve
en medio de semejante tránsito.
-Ah -farfulló el conductor, y siguió su recorrido.
-¿ A qué venía eso? -pregunté.
-Estoy tratando de restaurar el amor en Nueva York -me respondió mi amigo-o Creo que es lo único
capaz de recuperar la ciudad.
-¿ Cómo es posible que un solo hombre salve Nueva
York?
-No es cuestión de un solo hombre. Creo que
-54-
a ese taxista le he cambiado el día. Suponte que haga
veinte viajes. Pues será amable con esos veinte pasajeros
porque alguien fue amable con él. Ellos, a su vez, serán
más cordiales con sus empleados, servidores o
colaboradores, e incluso con sus respectivas familias. En
última instancia, la buena disposición podría extenderse a
un millar de personas por lo menos. No está mal, ¿no te
parece?
-Pero tú confías en que ese taxista transmita tu buena
disposición a los demás.
-N o estoy confiando en nada -respondió mi amigo-o
Me doy cuenta de que el sistema no es totalmente seguro.
Hoy puedo encontrarme con diez personas muy
diferentes, si de entre esos diez puedo hacer felices a tres,
finalmente podré influir en forma indirecta sobre las
actitudes de tres mil más.
-Teóricamente suena bien -admití-, pero no estoy
seguro de que en la práctica funcione.
-Si no funciona no se pierde nada. N o perdí ni un
minuto en decide a ese hombre que estaba haciendo muy
bien su trabajo. Ni le di una propina mayor ni una más
pequeña. Y si mis palabras cayeron en oídos sordos, ¿qué
importa? Mañana habrá algún otro taxista a quien pueda
tratar de hacer feliz.
-Oye, tú estás un poco chiflado -señalé.
-Tus palabras demuestran lo cínico que te has
vuelto. Este asunto lo tengo estudiado. Lo que al parecer
les falta a nuestros empleados de correos, aparte de
dinero, por cierto, es que nadie les dice lo bien que están
haciendo su trabajo.
-Pero si no están haciendo bien su trabajo.
-Si no están haciendo bien su trabajo es por-55-

Proyecto Conéctate - Compañía de Santa Teresa de Jesús

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