Informe de Resultados del Programa de Vigilancia
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Informe de Resultados del Programa de Vigilancia
Seguimiento ambiental del vaciado del azud de la central hidroeléctrica del río Cauxa en Belmonte de Miranda (Asturias, Spain) Environmental monitoring for draining of the weir of the hidroelectric power station from Cauxa river (Belmonte de Miranda, Asturias) Granero Castro, J.1, Ferrando Sánchez M.2, Sánchez Arango M.3, Pérez Burgos, C.4 1 Director Área Medio Ambiente y Sostenibilidad, TAXUS, Gestión ambiental, Ecología y Calidad SL. C/ González Besada nº 27, 1º D, 33007 Oviedo [email protected] Telf.-Fax: 985246547 2,3,4 Área Medio Ambiente y Sostenibilidad, TAXUS, Gestión Ambiental Ecología y Calidad. Resumen El azud del río Cauxa, construido en 1996 con el fin de obtener un aprovechamiento energético por parte de la empresa Hidroeléctrica del Cauxa S.L., sufrió un acelerado proceso de colmatación que redujo notablemente su capacidad de almacenamiento y anegó parcialmente la toma de agua para la turbina y la escala para peces. El proyecto de limpieza y acondicionamiento del mismo fue sometido al procedimiento de Evaluación Preliminar de Impacto Ambiental (EPIA), obteniéndose resolución favorable en junio de 2008. Durante las obras, el equipo técnico del área de medioambiente y sostenibilidad de Taxus Medio Ambiente realizó el Seguimiento Ambiental, desarrollando estudios específicos de aquellos elementos del medio más vulnerables: ictiofauna, macroinvertebrados, calidad del agua, composición físico-química de los sedimentos, vegetación, etc. Los resultados obtenidos muestran la adecuación del EPIA a la situación real así como de las medidas preventivas y correctoras propuestas; si bien se observó un deterioro del estado ecológico que pone de manifiesto la idoneidad de continuar con el seguimiento para constatar la vuelta a las condiciones previas a la actuación. Palabras clave: azud, colmatación, EPIA, ictiofauna, biogás, sedimento. Abstract The weir of the Cauxa river, was constructed in 1996 in order to obtain energy by Hidroeléctrica del Cauxa S.L.. Throughout the years it suffered an intensive process of filling that significantly reduced its storage capacity and clogged partially the water capture for the turbine and the fishway scale. The project to clean and condition the weir was submitted to undergo the Preliminary Evaluation of Environmental Impact (EPIA), with a favorable resolution being obtained in June, 2008. During the works, the technical staff from the environment and sustainability department at Taxus Medio Ambiente undertook an Environmental Follow-up, leading to the development of specific studies of those more vulnerable elements in the environment: ictiofauna, water quality, sediments, vegetation, etc. The results obtained show the adequacy of the EPIA to the real situation and of the preventive and corrective measures proposed; Although, it was noticed a deterioration of the water ecological status that shows the suitability of carrying on with the folllo-up in order to ascertain the return to previous conditions. Key words: weir, filling, EPIA, ictiofauna, biogas, sediment. 1 Introducción El río Cauxa, afluente del río Narcea, posee un azud en el concejo de Belmonte de Miranda (Asturias). Éste fue construido en 1996 con el fin de obtener un aprovechamiento energético por parte de la empresa Hidroeléctrica del Cauxa S.L. No obstante durante sus más de diez años de actividad sufrió un acelerado proceso de colmatación que redujo notablemente su capacidad de almacenamiento y anegó parcialmente la toma de agua para la turbina y la escala para peces. Así en abril de 2007 se presentó ante la Confederación Hidrográfica del Norte la correspondiente Memoria de Actuaciones y el Estudio Preliminar de Impacto Ambiental (EPIA) del proyecto, cuyos objetivos eran: recuperar la capacidad inicial del embalse mediante la extracción del sedimento y limpiar la toma de agua para la turbina y la salida del caudal ecológico a través de la escala para peces. Dichos documentos obtuvieron resolución favorable en junio de 2008, desarrollándose las obras entre los meses de agosto y noviembre del mismo año. Las actuaciones incluyeron una primera fase de protección de la ictiofauna en la que se procedió a la captura (mediante pesca eléctrica) y traslado de todos los individuos a una zona situada aguas arriba de la cola del embalse. Posteriormente, durante la fase de obra propiamente dicha y una vez acondicionada la vía de acceso al vaso, se procedió al vaciado del azud mediante apertura del desagüe de fondo. La extracción de lodos se realizó mediante retroexcavadora y camiones de obra. Para facilitar el acceso de la maquinaria al lecho del embalse y mantener el libre flujo de las aguas fue necesaria la instalación de un tubo de desagüe, que fue retirado una vez finalizadas las obras. El destino final de los lodos fueron las instalaciones de la mina de oro a cielo abierto “El Valle-Boinás” (actualmente inactiva) propiedad de Kinbauri Gold Corp., donde fueron empleados en las labores de restauración vegetal. Finalmente se procedió a la restitución de las condiciones iniciales: llenado del embalse y restauración vegetal mediante la extensión de lodos sobre la pista de acceso al vaso, con el fin de que ésta recuperase su capacidad para albergar una cubierta vegetal. Actualmente está en proceso el seguimiento de la evolución de la vegetación, con el fin de determinar la necesidad de desarrollar el proyecto de Restauración Vegetal propuesto en el EPIA del proyecto. Objetivos El Seguimiento Ambiental del proyecto tuvo como objetivos: • La vigilancia de todas las fases del proyecto, controlando que se ejecutasen adecuadamente desde el punto de vista legislativo y ambiental. • La determinación de las afecciones reales que se produjeron en cada una de las fases del proyecto. • La vigilancia del cumplimiento de las prescripciones previstas en el capítulo de medidas preventivas y correctoras del EPIA, así como la comprobación de su eficacia en el control de los impactos. Metodología y Resultados Para el desarrollo del Programa de Vigilancia Ambiental del proyecto, el equipo técnico de TAXUS estuvo presente en todas las fases del mismo: fase preoperacional, fase de obra y fase de explotación, desarrollándose informes específicos de aquellos elementos del medio más susceptibles, en base a la valoración de impactos ambientales desarrollada en el EPIA. Las conclusiones de todo el seguimiento ambiental se basan en la comparación de los datos obtenidos en tres campañas de muestreo: una desarrollada en 2007 con anterioridad a la 2 redacción del EPIA (Campaña 1), otra en agosto de 2008, previamente al inicio de las obras (Campaña 2) y una tercera desarrollada en noviembre de 2008 tras la finalización de las mismas (Campaña 3), manteniéndose, siempre que fue posible, la metodología y la localización de las estaciones de muestreo. E6 E5 E4 Central hidroeléctrica T2 Azud E4bis T3 E3 T1 Río Cauxa Combarcio Mina de oro E2 E1 Balsa Mapa 1. Área de afección del proyecto y estaciones de muestreo. Determinación y seguimiento de impactos ambientales Los principales impactos ambientales se produjeron sobre la edafología, la hidrología, la vegetación, la calidad del agua y la fauna del área de estudio. No obstante, las afecciones detectadas sobre los tres primeros factores fueron consecuencia de la apertura y acondicionamiento de la vía de acceso al vaso, la cual supone un espacio aproximado de 30 m de longitud, siendo esta superficie muy pequeña en relación con el alcance global del proyecto. El impacto más importante fue aquel generado por la extracción de lodos sobre la calidad de las aguas, lo cual provocó un aumento de la turbidez que afectó considerablemente a la fauna acuática, tal y como se confirma en los estudios específicos de ictiofauna y macroinvertebrados (Índice BMWP´) que se presentan a continuación. Estudio de la ictiofauna La metodología para el estudio de la ictiofauna se basó en las directrices emanadas de la propuesta metodológica del proyecto “STARFISH Sampling Protocol” basado en la norma EN ISO 14011:2003 (1). Se desarrollaron dos campañas de campo: • Campaña 2, previamente al inicio de las obras (agosto de 2008); Se muestrearon tres tramos: aguas arriba del embalse (T1), aguas abajo del embalse (T2) y el propio embalse (T3). En este caso se aplicó un método de muestreo cuantitativo, cuyo objeto era capturar todos los individuos presentes en la zona de afección para su traslado a una zona protegida. 3 Campaña 3, tras la finalización de las obras (noviembre de 2008); Únicamente fueron muestreados dos tramos: aguas arriba del embalse (T1) y aguas abajo del mismo (T2); ya que el embalse (T3) estaba lleno y su profundidad impedía la obtención de resultados comparables con la Campaña 2. En esta segunda fase se pretendía la caracterización de la población presente en la zona tras las obras, sin la intención de que este muestreo fuese exhaustivo, ya que la época para su desarrollo no era la más adecuada para la fauna implicada. Es por ello que únicamente fue necesaria la toma de una muestra representativa de la población presente, y por tanto la aplicación de un método de muestreo cualitativo, del que no se pueden sacar conclusiones poblacionales. Nº capturas • 35 30 25 20 15 10 5 0 Campaña 2 Campaña 3 Campaña 2 - 2008 Tramo T1 T2 Campaña 3 - 2008 Truchas Piscardos Truchas Piscardos T1 28 0 10 0 T2 1 30 0 0 T3 112 28 - - Total 141 58 10 0 Tramo muestreado Gráfico 1 y Tabla 1. Comparación de los resultados del muestreo de ictiofauna en sendas campañas Resultados: • Tramo 1: Aguas arriba del embalse. En ambas campañas únicamente fueron capturadas truchas, obteniéndose 28 individuos en agosto (Campaña 2) y 10 en noviembre (Campaña 3). En ambos casos los individuos capturados se incluyen en las clases de tamaño más pequeñas, correspondiendo por tanto a individuos juveniles. No se observan diferencias significativas entre ambas campañas ya que la variación en el total de capturas se asocia a las diferencias metodológicas aplicadas en el muestreo y a la época de desarrollo del mismo. • Tramo 2: Aguas abajo del embalse. En la primera campaña se capturaron en este punto 30 piscardos y una trucha, no apareciendo ninguna de las dos especies en el segundo muestreo. Los 31 individuos capturados en la primera campaña fueron trasladados aguas arriba de la cola del embalse. El hecho de que no hayan sido detectados individuos en la segunda campaña se asocia, en primer lugar a las malas condiciones para la vida piscícola que presentaba, lo cual habría condicionado que estos organismos no hubieran migrado a ella, y en segundo lugar a las fuertes riadas acaecidas en la zona durante la semana previa al muestreo, las cuales condicionaron que el embalse se desbordara por encima del azud durante 3 días consecutivos. Seguimiento del sedimento Seguimiento visual: Se observó una clara estratificación de capas alternas de hojas y sedimentos, así como dos aportes extraordinarios de material rojizo hace aproximadamente 7 y 10 años. Asimismo, durante el vaciado del azud, tras la apertura del desagüe de fondo previo a la extracción de lodos, se observó una fuerte desestabilización del sedimento que tuvo como consecuencia la liberación de gran cantidad de biogás (composición: CH4 60-80%, CO2 20-40%, H2 1-3%, O2 0.1-1%, SH2 0.5-1%, N2 0.5-3%), lo cual provocó problemas de asfixia en la ictiofauna aún no capturada. Dicho biogás aparece por la descomposición de materia orgánica en condiciones de anoxia, quedando retenido en el sedimento como 4 consecuencia de la presión ejercida por la masa de agua sobre él, liberándose al disminuir el volumen de agua (y por tanto de presión) por la apertura del desagüe de fondo. Análisis químico: Se desarrollaron dos análisis químicos del sedimento: uno previo a la ejecución del proyecto (marzo de 2007), tomándose la muestra mediante draga desde embarcación según norma ISO 5667-12:1995 (2) y otro tras el vaciado del embalse, tomándose la muestra de forma manual (septiembre de 2008). En ninguno de los dos casos se superaron los valores límites establecidos en el Real Decreto 1310/1990 por el que se regula la utilización de los lodos de depuración en el sector agrario, a la vez que fueron detectados los micronutrientes necesarios para la vida vegetal. Es por ello que ambos análisis definen los lodos como aptos para su uso agrario. Análisis microbiológico: Tanto en los lixiviados del sedimento como en zonas de agua estancada fueron observados crecimientos microbianos masivos de color rojo-anaranjado. Dichas poblaciones fueron observadas al microscopio invertido, apreciándose gran cantidad de bacterias filamentosas, cianobacterias y diatomeas, así como acúmulos sólidos, con posible presencia de metales pesados. Dichas poblaciones son formas de vida colonizadoras de ambientes muy alterados y por lo tanto responden a los primeros estadios de la regeneración de la vida en escenarios sumamente degradados. Estudio faunístico Para este estudio se desarrollaron itinerarios, estaciones de observación y visitas a charcas y zonas estancadas, aplicándose tanto métodos de observación directa como indirecta (búsqueda de restos biológicos y rastros de actividad). Durante toda la fase de obra se observó una abundante actividad faunística, detectándose gran cantidad de huellas en la superficie del sedimento, junto a la maquinaria, por lo que se estima que las afecciones provocadas a estos individuos han sido moderadas, tal como quedaba recogido en el EPIA del proyecto. Estudio de evolución del Estado Ecológico Para el cálculo y seguimiento del estado ecológico se han tomado como referencia los parámetros indicados en la Directiva Marco del Agua (DMA)(3), no obstante ha sido necesario ajustarlos a las dimensiones y características del curso fluvial en cuestión, ya que no se dispone de valores de referencia para buena parte de los indicadores. Es por ello que finalmente se aplicó la metodología desarrollada por el Gobierno Vasco para la Caracterización de la calidad de sus ríos en 2002(4), la cual se basa en el cruce de dos índices de calidad: por un lado un índice biológico basado en la fauna bentónica de invertebrados (BMWP’)(5) que se ha denominado “Calidad de cauce” y por otro el índice de “Calidad del bosque de ribera” (QBR) (Munné et. al, 1997)(6). El código de colores empleado para la caracterización de los resultados es el indicado en el Anexo V de dicha Directiva: Estado Ecológico Muy Bueno: azul, Bueno: verde, Aceptable: amarillo; Deficiente: naranja; Malo: rojo. Se tomaron muestras en dos campañas de campo: una en 2007 (Campaña 1) previamente a la redacción del EPIA y otra en 2008 tras la finalización de las obras (Campaña 3). En la primera de ellas se seleccionaron 5 estaciones de muestreo: 2 aguas arriba del embalse y 3 aguas abajo del mismo, sin embargo, las condiciones de los dos últimos puntos durante la Campaña 3 obligaron a su consideración conjunta, muestreándose una nueva estación (E4bis) localizada inmediatamente debajo del azud. Resultados: Índice BMWP´: En la Campaña 3 las estaciones localizadas aguas abajo del azud presentan una calidad inferior a la detectada en la primera campaña, siendo especialmente relevante la estación localizada inmediatamente debajo del azud (E4bis), cuya comunidad 5 bentónica presenta una “calidad crítica” como consecuencia de las obras y particularmente del depósito de sólidos en suspensión arrastrados por el agua. Índice QBR: No se han observado diferencias entre una y otra campaña. Estado Ecológico: Los valores obtenidos en la campaña 1 describían un ecosistema fluvial con un “Buen Estado Ecológico”, tanto aguas arriba del embalse (E1 y E2) como inmediatamente aguas abajo del mismo (E4), mientras que para las estaciones localizadas debajo de la central hidroeléctrica (E5 y E6) era “Aceptable”. Este hecho se debe a las características de este tramo en el que el río forma un desfiladero que condiciona el desarrollo de una comunidad vegetal bien estructurada. Comparando la situación inicial (Campaña 1) con la actual, tras la finalización de las obras (Campaña 3), se observa el mismo patrón descrito en el párrafo anterior, excepto en la Estación E4 bis, de la cual no existe referencia en 2007. En cualquier caso el “Estado Ecológico Deficiente” que lo caracteriza es consecuencia del escaso número de familias de macroinvertebrados presentes (índice BMWP´), lo cual se ha atribuido a las obras, siendo consecuencia directa de la turbidez del agua generada por el vaciado del vaso. Estaciones Campaña 1 2007 Campaña 3 2008 E1 E2 E4 E4 bis E5 Buena Buena Buena Dudosa Buena Buena Aceptable Crítica E6 Dudosa Dudosa Tabla 3. Calidad de la comunidad de macroinvertebrados según el índice BMWP´ Estaciones Campaña 1 2007 Campaña 3 2008 E1 E2 E4 E4 bis E5 Bueno Bueno Bueno Aceptable Bueno Bueno Bueno Deficiente E6 Aceptable Aceptable Tabla 4. Resultados del cálculo del Estado Ecológico en base a los índices QBR y BMWP´ Discusión Únicamente se han observado diferencias significativas entre una y otra campaña de muestreo en las poblaciones de macroinvertebrados e ictiofauna, siendo especialmente relevante el hecho de que no haya sido localizada ninguna especie íctica aguas abajo del embalse tras las obras. En cualquier caso, la comunidad de macroinvertebrados, dieta fundamental de la ictiofauna, se mantiene en este punto en un estado de conservación aceptable, por tanto se estima que la población de peces (la cual fue trasladada antes del inicio de las obras a una zona protegida localizada aguas arriba del embalse) volverá a recuperarse en un corto periodo de tiempo. Asimismo es muy destacable la liberación de biogás del fondo del embalse producida como consecuencia del vaciado del azud, lo cual provocó problemas de asfixia en la ictiofauna aún no capturada. Este hecho fue consecuencia de la pérdida de presión de la masa de agua que se situaba sobre el sedimento, ya que el metano (principal componente del biogás) aparece como consecuencia de la descomposición de materia orgánica en condiciones de anoxia, quedando retenido en el sedimento del embalse como consecuencia de la presión ejercida por la masa de agua sobre él. Este hecho deberá ser tenido en cuenta en futuras actuaciones similares, ya que en el caso que nos ocupa provocó la muerte por asfixia de aproximadamente 30 individuos de trucha. Por último se sugiere considerar la posibilidad de extender la vigilancia ambiental más allá de la conclusión del proyecto, para conocer de esta forma en qué momento se restablecen las condiciones iniciales, o incluso si estas se mejoran como consecuencia de la recuperación del caudal ecológico. 6 Referencias bibliográficas (1) EN ISO 14011:2003. Calidad del agua. Muestreo de peces con electricidad. (2) ISO 5667-12:1995. Water quality-Sampling-Part 12: Guidance on sampling of bottom sediments. (3) Directiva 2000/60/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de octubre de 2000, por la que se establece un marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas. (4) Departamento de Ordenación del Territorio y Medioambiente, Consorcio de Aguas. (2002). Caracterización de las masas de agua superficiales de la CAPV. Documento de Síntesis. Julio 2002. 46 páginas. http://www.ejgv.euskadi.net/r532291/es/contenidos/libro/caracterizacion_masas_agua/es_12298/adjuntos/sintesis.pdf (5) Alba Tercedor J. Y A. Sánchez-Ortega (1988). Un método rápido y simple para evaluar la calidad biológica de las aguas corrientes basado en la de Hellawell (1978). Limnetica 4: 51-56. (6) Munné, A.; Solà, C.; Prat. N. (1998). QBR: Un índice rápido para la evaluación de la calidad de los ecosistemas de ribera. Tecnologia del Agua , 175: 20-37. 7