8. ECONOMIÍA LOCAL VIBRANTE Y SOSTENIBLE. Nos
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8. ECONOMIÍA LOCAL VIBRANTE Y SOSTENIBLE. Nos
8. ECONOMIÍA LOCAL VIBRANTE Y SOSTENIBLE. Nos comprometemos a crear y a asegurar una economía local vibrante que dé acceso al empleo sin dañar al medio ambiente. El desarrollo económico sostenible y la creación de empleos estables y de larga duración dependen de la protección del medio ambiente frente a los potenciales efectos dañosos del crecimiento y depende también de la prevención ante la excesiva merma de los recursos agotables. La creciente atención sobre las medidas medioambientales mejorará la eficiencia y la productividad. Seguir aumentando la ecoeficiencia también puede actuar como un conductor para la innovación, para la mejora de la productividad y para elevar la competitividad, el crecimiento y ampliar las oportunidades de trabajo. Expandir el mercado para los productos locales de alta calidad puede, además, mejorar la protección del suelo y del paisaje y preservar la biodiversidad. Por lo tanto trabajaremos para: 1. Adoptar medidas que estimulen y den apoyo al empleo local y a la creación de negocios. Los grandes sectores económicos de la sociedad, como la industria y el transporte, han sido responsables de ocasionar importantes daños al medio ambiente. La necesidad de cambiar el curso de las cosas es obvia, desplazándolas hacia un crecimiento económico más equilibrado que se apoya en la ecoinnovación y en el reconocimiento de la dependencia de la economía respecto al medio ambiente. En la recuperada agenda de Lisboa, la idea de que la ecoinnovación puede propiciar el crecimiento económico y la creación de empleo es plenamente reconocida. Aunque la mejora de la salud y la creación de empleo en las ecoindustrias, así como un desarrollo más sostenible, impliquen costes de protección medioambiental, también producen sustanciales beneficios. La facturación total estimada de las ecoindustrias ( el conjunto de actividades que producen bienes y servicios que miden, previenen, limitan, minimizan o corrigen los daños medioambientales) en la Unión Europea de los 25 países es de 227 billones de euros. A precios constantes, la facturación de las ecoindustrias creció alrededor de un 7% entre 1999 y 2004( para el área de la UE-15) . Los bienes y servicios proporcionados por las ecoindustrias representan aproximadamente el 2,25 de PIB el área de la UE-25. El empleo tota directo e indirecto debido a las ecoindustrias representa aproximadamente 3,4 millones de empleos equivalentes a tiempo completo (DG ENV, 2006) (1). Tan importante como estimular la ecoinnovación es promover una cultura favorable a la investigación y al desarrollo. Hay, proporcionalmente, un número anual más bajo de solicitudes para patentes en la UE. En el año 2002, la inversión en investigación y desarrollo en proporción al PIB en la UE-25 (1,93%) se ha quedado atrás tanto de la de Japón (3,12%) como de la de USA, a pesar de que el Consejo de Europa (Barcelona, 2002) ha fijado el objetivo de alcanzar el 3% del PIB en el año 2010. El nuevo programa marco de investigación de la UE (FP7) para el periodo 2007-2013 incluye unos 2,5 billones para el medio ambiente, es decir, un aumento de casi el 60% respecto el FP6. Además, la Comisión Europea ha propuesto un programa marco de competitividad e innovación para el periodo 2007-2013 por un total de 4,2 billones de euros, de los cuales, 500 millones estarán dedicados a apoyar las iniciativas de ecoinnovación. También se podrán obtener beneficios mediante el reciclaje y el ahorro proveniente de las mejoras en la productividad de los recursos gracias a la inversión en innovación. Un estudio reciente concluyó que si el ahorro de materiales y energía fuera reinvertido en investigación y desarrollo y en estrategias de ingeniería, reportaría un crecimiento del 2,3 del PIB, la creación de 750.000 puestos de trabajo adicionales y haría decrecer la necesidad de gasto público en bienestar social (EEA,2005) (2) ------------------------------------------------------------European Commission DG ENV, “Eco-industry, its size, employment, perspectives and barriers to growth in an enlarged EU, september 2006. 2 EEA, The European Environment, state and outlook 2005. En este marco, las autoridades locales pueden desempeñar su papel, en primer lugar, promoviendo políticas de mayor ecoeficiencia en las adquisiciones públicas, que estimulen el desarrollo y la difusión de bienes y servicios medioambientalmente saludables ( ¡Comprar verde! FSC Company Group. Buying green! FSC Company Group). La autoridades locales también pueden contribuir a reforzar los resultados de las empresas ecoindustriales y ayudar “SMEs” a adaptarse a las necesidades emergentes del mercado, procurando recoger información sobre el tamaño y el potencial de los mercados de las ecoindustrias, fomentando la colaboración entre promotores, manufactureros y consumidores finales, desarrollando servicios especializados de “ inteligencia de mercado” para SMEs y apoyar las iniciativas creativas para SMEs (formación, creación de redes especializadas) con el propósito de mejorar su capacidad de penetración en los mercados y, especialmente, de compartir experiencias y crear alianzas sobre proyectos específicos (desarrollar nuevos productos, penetrar en nuevos mercados, etc.) (The Vienna EcoBusinessPlan). Además, pueden promover campañas de información para desarrollar el conocimiento de los consumidores sobre la disponibilidad de tecnologías y servicios ofrecidos por las ecoindustrias, así como sobre sus costes y sus potenciales beneficios. Varios instrumentos existentes como los ecoetiquetajes o los premios a la ecoeficiencia han probado ser eficaces para concienciar y crear un consumidor confiado en la calidad de los bienes y servicios ofrecidos (The European Eco-label catalogue). El crecimiento económico futuro debe centrase en aquellas vías que proporcionen productos ecológicos. Los Compromisos de Aalborg 4 y 3 tratan de las medidas para hacer más ecológico el mercado y para preservar y proteger los recursos naturales. La igualdad de oportunidades y la inclusión social son tratadas en el Compromiso de Aalborg 9. 2. Cooperar con las empresas locales para promover e implementar buenas prácticas corporativas. Las preocupaciones medioambientales, las crecientes presiones públicas y las medidas reguladoras están cambiando el modo como la gente hace los negocios en todo el mudo. Consumidores y accionistas están demandando de un modo creciente productos y servicios que no dañen el medio ambiente y que son ofrecidos por empresas socialmente responsables. Está siendo cada vez más importante para la organizaciones demostrar que no solamente su filosofía, sino también sus estrategias de inversión y sus operaciones diarias integran las preocupaciones sociales y medioambientales. Esta actitud es actualmente conocida como Responsabilidad Social Corporativa.(RSC). En el ámbito europeo, la Comisión hace llamamientos a la comunidad de negocios europea para que demuestre públicamente su compromiso con el desarrollo sostenible y para que establezca su compromiso con la Responsabilidad Social Corporativa, incluyendo la cooperación con otras partes interesadas. (COM(2006)136). La mayoría de las definiciones de la RSC la describen como un concepto a través del cual las compañías integran las preocupaciones sociales y medioambientales en sus operaciones empresariales y en su interacción con sus aliados sobre bases voluntarias. Ser socialmente responsable significa no sólo satisfacer las expectativas legales, sino también ir más allá del cumplimiento de las normas e invertir más en capital humano, en medio ambiente y en las relaciones con las partes interesadas. Dentro de la empresa , las prácticas socialmente responsables afectan ante todo a los empleados y tienen que ver con cuestiones tales como investir en capital humano, salud y seguridad y gestionar el cambio, mientras que las prácticas medioambientalmente responsables tienen que ver principalmente con la gestión de los recursos naturales empleados en la producción (sistemas de gestión medioambiental). La RSC se extiende, más allá de las puertas de la empresa, por la comunidad local e involucra, además de empleados y accionistas, a una amplia gama de partes interesadas: socios comerciales y proveedores, clientes, autoridades públicas y organizaciones no gubernamentales, representando comunidades locales así como el medioambiente. Esto tiene que ver con cuestiones tales como información al consumidor y transparencia (proyectos de información o auditoria, etiquetajes sociales y ecológicos) o inversiones socialmente responsables. Para cumplir sus compromisos con la RSC las empresas pueden presentar un informe sobre su conformidad con un cierto número de estándares de RSC incluyendo: Social Accountability International's SA8000 standard, AccountAbility's AA1000 standard, Global Reporting Initiative's Sustainability Reporting Guidelines, Eco-Management and Audit Scheme (EMAS), establecido por la UE, o ISO14000, modelo de gestión medioambiental adoptado en el mundo entero. Aunque las empresas sean los actores principales de la RSC, las autoridades locales pueden desempeñar un importante papel en todos los ámbitos para promocionar más la RSC( Adquisiciones responsables, Contabilidad Social). En primer lugar, pueden dar ejemplo adoptando ellas mismas pautas de RSC, como EMAS o ISO 14000, o bien promocionado su aplicación en áreas homogéneas (distritos industriales o zonas delimitadas) (Trade Park 58). También pueden utilizar medios reguladores, como simplificaciones administrativas resultantes de los compromisos de RSC (Simplified Environmental Management Systems, NEST - Networking with EMAS for sustainable development). También pueden concienciar sobre RSC y promocionar la difusión y el intercambio de información, especialmente en relación con las buenas prácticas de responsabilidad social compartida, la fijación de pautas, las pruebas de comprobación y la supervisión, la contabilidad, las auditorias y la información. Además, tiene los medios para apoyar a las empresas en la implicación de las partes interesadas de manera a anticipar y tratar los problemas sociales y medioambientales que pueden estar relacionados con las empresas locales y construir una implicación proactiva de las partes interesadas para sintonizar mejor con las tendencias estratégicas emergentes. La economía debe reconocer e incluir las preocupaciones medioambientales, sociales y éticas en los negocios. Los Compromisos de Aalborg 3 y 9 tratan estas cuestiones. Los Compromisos de Aalborg 1y 2 pueden ayudar a situar estos problemas en los programas políticos. 3. Desarrollar e implementar principios sostenibles para la localización de las empresas. El modo como el suelo es utilizado tiene un impacto masivo y duradero sobre el medio ambiente. Las malas decisiones pueden acabar en pérdida de hábitats, destrucción paisajística o creciente contaminación por el tráfico. La planificación sostenible del suelo debería consistir en un sistema completo de abordaje que buscase controlar la expansión, preservar espacios abiertos y tierras de cultivo, reutilizar las infraestructuras existentes, crear barrios donde se pudiera caminar, ubicar lugares donde vivir y trabajar cerca del transporte público, reforzar el desarrollo y la calidad de vida de las comunidades ya existentes. La planificación sostenible del suelo es particularmente importante cuando se trata de áreas productivas, porque las empresas pueden ocasionar importantes impactos medioambientales en términos de agua, energía o suministro de materias primas, emisiones a la atmósfera y ruidos, producción de residuos, descargas de residuos líquidos, necesidades de transporte, contaminación del suelo, riesgos industriales, impactos visuales. Por ello, reviste una gran importancia el desarrollo y la implementación de principios sostenibles para la localización de las empresas. Varias cuestiones requieren ser valoradas: la conservación tanto del patrimonio cultural como de los recursos naturales; la protección del paisaje y de la diversidad, la necesidad de minimizar la urbanización de terrenos rurales dirigiendo el desarrollo hacia áreas ya urbanizadas y fomentando la regeneración urbana; la protección de los habitantes frente a la contaminación y riesgos industriales, la minimización del número y la duración de los viajes motorizados, especialmente aquellos realizados en coche privado. Todo ello requiere, en la planificación espacial, centrarse principalmente en la ubicación del emplazamiento, proceder a una cuidadosa valoración del emplazamiento antes de la presentación de cualquier propuesta para la urbanización, y un desarrollo del emplazamiento sostenible, a fin de asegurar la ecoeficiencia del emplazamiento. La evaluación del emplazamiento debe examinar tanto el lugar como sus alrededores y debe incluir una valoración de la accesibilidad, teniendo en cuenta espacialmente el transporte público, el transporte en bicicleta y a pie. (Trade Park 58, Varese Ligure EMAS Municipality). La localización de un emplazamiento es decisiva puesto que cualesquiera que hayan sido los beneficios obtenidos a través de una construcción energéticamente eficiente serían anulados si la urbanización es dependiente de modos de transporte energéticamente intensivos. El desarrollo sostenible de un emplazamiento requiere que las consideraciones medioambientales estén en primer plano durante el estadio de planificación del emplazamiento e impliquen la creación de infraestructuras medioambientales del lugar. Las autoridades locales son los principales sujetos implicados en el desarrollo y la implementación de estos requisitos, puesto que son responsables de la planificación espacial, la valoración medioambiental estratégica y la valoración de impacto ambiental, regulaciones constructivas y licencias. Además, poseen los medios para promocionar abordajes participativos para la localización de las empresas, con los cuales pueden prevenir conflictos entre las diversas partes interesadas. La implementación de los principios de sostenibilidad en la localización de las empresas hay que integrarla en el conjunto de las estrategias municipales de planificación espacial. Así, los Compromisos de Aalborg 1,2 y 5 sirven de marco inicial. Los Compromisos de Aalborg 3 y 4 tratan del uso eficiente de los recursos y de la protección medioambiental. 1. Fomentar mercados para los productos locales y regionales de alta calidad. En el contexto de las reformas de la Política Agrícola Común (CAP9, la creciente liberalización del comercio agrícola y, más allá, la reestructuración del sector agrícola, se reconoce que las áreas rurales más desfavorecidas y geográficamente periféricas deben hacer frente a especiales problemas de reajuste. Al mismo tiempo, dentro de la UE, crecientes excedentes en las líneas convencionales de producción han obligado a los políticos a aumentar el apoyo para la diversificación en nuevas actividades. Una salida válida, tanto para el desarrollo de regiones atrasadas como para la diversificación en nuevas actividades, es la producción de productos de alta calidad con una identidad regional. Así, el desarrollo de políticas rurales en la UE ha puesto el acento en la necesidad de un marketing de productos de calidad, producidos inter alia en modo compatible con los objetivos de protección medioambiental, y lo ha apoyado activamente. Este proceso ha sido llevado a cabo incluso por la demanda de consumidores, que surge de la preocupación por la calidad de los alimentos, el bienestar de los animales y los problemas medioambientales en la agricultura. Las preferencias de los consumidores y los estilos de vida están cambiando y creando demandas que están basadas en las diferencias que plantean características como la calidad, la escasez, la novedad y la autenticidad. Un aspecto particular de este proceso es la expansión significativa y continúa de la demanda de productos orgánicos por parte de los consumidores de muchos países europeos que tiene por resultado un crecimiento progresivo de las áreas destinadas a la agricultura orgánica. Este aspecto es especialmente importante para la protección del medio ambiente puesto que la agricultura orgánica implica no solamente alimentos de alta calidad, sino también una producción mucho más beneficiosa para el medioambiente. El etiquetaje de productos puede ser un instrumento útil para fomentar los patrones de calidad y medioambientales en la agricultura ( es decir, etiquetas para la gestión de los cultivos o la adopción de métodos de control biológicos), y pueden también contribuir de modo muy importante al conjunto del desarrollo económico de las regiones. No obstante, las regiones necesitan atender a cuestiones como: la multiplicación de las etiquetas, los complejos sistemas de certificación que aplican y los costes que comportan, especialmente para la SMEs, así como el grado en que crear estándares europeos comunes realmente fomenta la calidad de los productos, más que impedirla. Junto al etiquetaje, otro importante instrumento para apoyar el desarrollo sostenible en áreas rurales lo constituyen las estrategias de marketing que combinan los aspectos de calidad de los productos con las evocaciones regionales, la gastronomía local, las tradiciones culturales y la promoción del turismo rural. Los instrumentos clave en una estrategia de las autoridades locales para el desarrollo de la alta calidad en los productos regionales y de sus mercados pueden consistir en: generar una gran consciencia pública de la gama y variedad de los productos de calidad; promover planes para asegurar la calidad en los cuales no se tenga que penalizar innecesariamente la diferencia o la singularidad; proveer de apoyos cercanos al productor para el etiquetaje del producto, la presentación , la promoción y el marketing (Cittaslow - international network Slowfood).; facilitar los contactos entre el productor y el consumidor; apoyar la organización colectiva para los pequeños productores y apoyar acciones destinadas a asegurar que los puntos de vista de los productores, consumidores y agencias de apoyo están estrechamente en línea respecto con los factores que definen la calidad de los productos regionales (Res Tipica). El hacer más ecológico el mercado sólo puede producirse a través de las propias fuerzas del mercado. El Compromiso de Aalborg 4 trata de crear demanda ecológica, de alta calidad. Hace falta involucrar a todos los actores sociales para lograr esta meta, desde las autoridades locales a los sectores industriales y comerciales. Los Compromisos de Aalborg 1 y 2 fomentan el desarrollo de visiones estratégicas participativas para las comunidades locales. La producción regional y local puede ser respetuosa con el medio ambiente, más sana y que fomente la inclusión social, la igualdad de oportunidades y la creación de nuevo empleo. Sobre estas cuestiones consulte los Compromisos de Aalborg 3 ,7 y 9. 2. Fomentar el turismo local sostenible. El turismo pronto será el servicio industrial más grande de Europa. En efecto, Europa es mundialmente el destino turístico favorito, hasta el punto que este sector genera el 12% del PIB, el 6% del empleo y el 30% del comercio exterior. El pronóstico es que la demanda de turismo crezca casi un 50% de aquí al 2010, añadiendo unos 2 o 3 millones de empleos a los nueve millones que mantiene actualmente. Cualquier industria tan grande y que crezca tan rápidamente crea problemas medioambientales, y el turismo no es una excepción. No sólo se trata de que la industria esté creciendo, es que también la gente que va de vacaciones está cambiando. La tendencia en aumento es que la gente haga más viajes y de menor duración y que viaje más lejos de casa. Como resultado, las industrias de transporte relacionadas con problemas ambientales, que ya son muy importantes, se espera que crezcan incluso más deprisa que el propio turismo. Además, cuando se encuentra de vacaciones, la gente consume más agua y más energía y genera más residuos. También sucede que más y más europeos construyen segundas residencias, las cuales tiene unos ratios de ocupación muy bajos y ocupan mucho más espacio que otros tipos de acomodación. Finalmente, la mayoría de estas presiones se concentran en unas pocas regiones durante algunos meses del año, lo que hace muy difícil tratar estos problemas. Aunque desde 1990 ha habido un importante aumento del uso de ecoetiquetajes para el turismo tanto a nivel nacional como regional, su implementación sigue siendo marginal (EEA, 2005). Así, fomentar el turismo local sostenible pasa a ser una cuestión clave para el desarrollo sostenible, y las autoridades locales deben empezar a involucrase en esta dirección. Esto requiere un enfoque integrado basado en el deseable equilibrio entre los aspectos medioambientales, económicos y socio-culturales del desarrollo turístico. Sí, el turismo sostenible debe: hacer un uso óptimo de los recursos medioambientales que constituyen un elemento clave del desarrollo turístico, mantener los procesos ecológicos esenciales y ayudar a conservar el patrimonio natural y la biodiversidad, respetar la autenticidad socio-cultural de las comunidades anfitrionas, conservar su patrimonio cultural construido y viviente, y contribuir al entendimiento intercultural y a la tolerancia; asegurar operaciones económicas viables y de largo plazo, proporcionando beneficios socioeconómicos a todas las partes interesadas, que sean justamente distribuidos, incluyendo empleo estable, las oportunidades de ganancias y los servicios sociales para las comunidades anfitrionas, y contribuir a aliviar la pobreza (UNEP). Las autoridades locales deben trabajar eficazmente por el turismo sostenible a muchos niveles, puesto que son responsables de una gama de funciones que pueden influir en el desarrollo turístico, incluyendo la planificación espacial, el control del desarrollo, la gestión medioambiental y los servicios a la comunidad. A través de la planificación espacial, las autoridades locales pueden fijar las reglas para la conservación del patrimonio natural y del medio ambiente, controlar el nuevo desarrollo y la localización de las instalaciones turísticas. Las autoridades locales también pueden fomentar la gestión integrada reforzando o desarrollando las políticas y la gestión que cubran todas las actividades, incluido el turismo. Además, pueden implicar a toas las partes interesadas de relieve en el desarrollo de buenos planes de gestión del turismo sostenible, especialmente a través de la Agenda Local 21, y proporcionar la organización, las instalaciones y el fortalecimiento de las capacidades exigidas para la implementación eficaz de estos planes de gestión. (Promoting Sustainable Tourism). Las autoridades locales también pueden encauzar el turismo sostenible utilizando instrumentos de gestión, tales como Sistemas de Gestión Medioambiental (EMAS, ISO 14000) o Gestión Integrada de Calidad (Integrated Quality Management (IQM). Premios o etiquetajes ecológicos pueden utilizarse para fomentar la ecoeficiencia de las instalaciones turísticas (Greenkeys: an eco-label for hotels, Pilat Regional nature park, Blueflag). Establecer las metas, los objetivos, los indicadores y los procedimientos de supervisión de las actividades turísticas también resulta eficaz para un abordaje global del turismo sostenible, lo cual puede ser apoyado complementariamente por una estrategia consistente de marketing que tenga metas y objetivos sostenibles bien establecidos. El turismo local sostenible puede contribuir a formular objetivos estratégicos para las autoridades locales implicadas. Los Compromisos de Aalborg 1 y 2 tratan estas cuestiones. Además, el turismo sostenible está en la línea con las metas de los Compromisos de Aalborg 3 y 4. Como el turismo atrae a mucha gente hacia un determinado lugar, la movilidad, acaba siendo el mayor problema y requiere una cuidadosa planificación, como está establecido en el Compromiso de Aalborg 5, Para consultar otras fuentes relacionadas con el Compromiso de Aalborg 8, pulse aquí: http://www.localresources21.org/theme_matrix.php?t=8