La Mar de cels. Educació Primària.pmd
Transcripción
La Mar de cels. Educació Primària.pmd
LA MAR DE CIELOS Ciclo Inicial de Educación Primaria Àrea d’Educació i Activitats En la Esfera, el sol se oculta para dar paso al cielo nocturno. Los niños y las niñas irán descubriendo que las estrellas forman las constelaciones más diversas y con las historias más extrañas fruto de la mitología y la tradición popular. Pero aunque no brillen con luz propia, también tenemos los planetas y la Luna. Todos estos astros van cambiando de posición a lo largo de la noche y de las estaciones del año, repitiendo formas y movimientos como si de un gran reloj celeste se tratase. Durante la sesión se trabajarán los puntos siguientes: 1. Descubrimos el cielo, diferenciamos los astros. 2. Situamos la Tierra dentro del sistema solar. 3. El “movimiento” del cielo. Orientación y puntos cardinales. 4. Movimientos de la Tierra. Las estaciones. 5. Mitos y leyendas del cielo. La Mar de cels. Museu Marítim de Barcelona. pàg. 1 DESCUBRIMOS EL CIELO, DIFERENCIAMOS LOS ASTROS Estamos en el campo, lejos de la ciudad. Después de observar el característico color rojo de la puesta de sol, descubriremos que aparecen los primeros astros. Aún tardan un rato. Salen los más brillantes y finalmente la bóveda celeste se va poblando de «puntitos» de diferente fulgor. ¡Qué diferente del cielo de la ciudad! Explicaremos que, contrariamente a lo que todo el mundo cree, no es la contaminación atmosférica la culpable de la ausencia de buenos cielos en las ciudades: la principal culpable es la luz artificial. Al contemplar un cielo estrellado se puede observar que no todos los puntos de luz son iguales: se apreciará la diferencia entre los que son simples «puntitos» y los que tienen un aspecto nebuloso, lo cual nos permite explicar que no todos son estrellas. El alumno conocerá la diferencia entre estrellas, galaxias, nebulosas y cúmulos. Enseñaremos, con nuestro proyector manual, cómo se ven estos cuerpos a través de un telescopio y los animaremos a utilizar los prismáticos, que aunque no aumentan tanto, generan imágenes bastante espectaculares y permiten apreciar muchas de las características de estos cuerpos difusos. SITUAMOS LA TIERRA EN EL SISTEMA SOLAR A partir de la proyección de un «puntito» que desplazaremos entre las estrellas, los alumnos comprenderán cómo los observadores de hace 2000 años pusieron el nombre de «trotamundos» a estos cuerpos singulares: los planetas. Realmente son unos astros muy curiosos que van pasando de una constelación a otra. Los planetas, sin luz propia, son fragmentos del sistema solar, probablemente de la nube solar original, que se han enfriado. Vivimos en uno de ellos, que reúne las condiciones imprescindibles y más agradables para la vida. Los alumnos verán que aparte de los planetas que describimos brevemente, existen los cometas y los asteroides, rocas más pequeñas pero en ocasiones muy espectaculares. No dejaremos este apartado sin hablar de la Luna; les explicaremos que es nuestro satélite natural y el por qué de la coincidencia cuando hay un eclipse. La Mar de cels. Museu Marítim de Barcelona. pàg. 2 EL “MOVIMIENTO” DEL CIELO. ORIENTACIÓN Y PUNTOS CARDINALES A medida que pasan las horas nocturnas, aparecen unos astros y desaparecen otros. La observación diaria de su movimiento brinda pistas sobre las posiciones repetidas noche tras noche: cuándo salen o se ponen, si rotan toda la noche sin esconderse... Hay que observar una cosa: que todos se mueven alrededor de una estrella no demasiado brillante, que siempre encontramos en el mismo sitio: la estrella Polar. Esta estrella puede darnos pistas sobre la posición del norte y, por lo tanto, sobre los puntos cardinales. A partir de la bóveda celeste podemos comentar otros aspectos de la orientación, como por ejemplo que es muy diferente ponerse a mirar el cielo hacia el sur que hacia el norte, y que el cielo que vemos si estamos en el África profunda no es el mismo que podemos observar en el Polo Norte. Un par de experimentos bien sencillos ayudará a los alumnos a orientarse si en alguna ocasión se pierden. MOVIMENTOS DE LA TIERRA. LAS ESTACIONES La Tierra experimenta, básicamente, dos movimientos: uno de rotación, presentado en el apartado anterior, que es el «culpable» del movimiento de la bóveda celeste, y otro de traslación, que hace que el cielo vaya cambiando y nos muestre, según la estación, diferentes constelaciones. Podemos fijarnos en que este movimiento afecta también a la altura del Sol: por este motivo tenemos veranos con muchas horas de sol e inviernos con los días más cortos y las noches más largas, porque a la Tierra le pasa como a la torre de Pisa, ¡que está inclinada! La Mar de cels. Museu Marítim de Barcelona. pàg. 3 MITOS Y LEYENDAS DEL CIELO Los últimos diez o quince minutos de la sesión los aprovecharemos para que los alumnos comprueben que el cielo inspiró a nuestros antepasados para crear figuras caprichosas: las constelaciones. Si hoy en día las estrellas pueden tener forma de carro de la compra, de cafetera, de percha o de paraguas, para los antiguos griegos eran una osa, un guerrero gigante, un león o un cisne. Para explicar las constelaciones más conocidas y populares y conocer su localización en la bóveda celeste, combinaremos las imágenes de los antiguos con una interpretación lúdica y actual del cielo. Finalmente, explicaremos a los alumnos uno de estos mitos. Lo haremos con un cuento que se corresponda con las constelaciones propias de la estación en la que nos encontremos en el momento de la sesión. La Mar de cels. Museu Marítim de Barcelona. pàg. 4