21 POSTURAS PARA HACER EL AMOR CON TUS CLIENTES

Transcripción

21 POSTURAS
PARA HACER EL AMOR
CON TUS CLIENTES
GUÍA PARA ENTENDER EL BRANDING EN UN MUNDO 2.0
+joanjimenez
Todos necesitamos compartir hacia donde vamos
para comprender quienes somos.
joan jimenez
Photo by Lali Masriera
Prólogo
Caricias
Enamórale, acaricia su alma y no te olvidará jamás.
No le sigas hablando sin escuchar, escuchándole sin oír y actuando sin mirar.
Acércate a él como lo que es, un ser vivo que necesita caricias, miradas atentas, sonrisas amables y voces suaves.
Involúcralo en un juego cálido y cercano. La recompensa será que tu cliente siempre querrá volver a ti.
Es sorprendente que algunos directivos olviden que sus clientes son "humanos", que tienen piel, emociones y buscan ser felices.
Se tropiezan con nuestras marcas y lo que esperan de ellas es que les ilusionen.
Cuando dejamos de vender productos o servicios y nos convertimos en una emoción, en una vivencia,
es cuando hemos creado una unión indestructible.
Las marcas tienen que respirar y sentir, acercarse al consumidor sutilmente y entrar en su vida despacio, como una caricia suave,
casi imperceptible pero que eriza y emociona el alma, iniciando una experiencia de consumo cómplice.
Lo que crees es lo que creas.
¿Has averiguado cuáles son las zonas sensibles de acariciar …en tu cliente?
Conchi Sotil
Maketing Manager
Ferrer Grupo Internacional
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Introducción
Haz el amor con tus clientes
El amor es el mejor instrumento para la evolución de las especies y su supervivencia.
Si nuestra supervivencia se basa en cubrir necesidades a cambio de una satisfacción, no se me ocurre un nicho tan amplio
y con tantas posibilidades como el del amor; porque no conozco a nadie que no necesite amor..., ;-)
En un mundo saturado de opciones, mensajes y promesas, cada vez más usamos nuestro consumo para construir
nuestra propia identidad y sentirnos reconocidos, valorados, cuidados y “amados” por el mundo que nos rodea.
La irrupción de la cultura 2.0 en las nuevas estrategias de marketing, está haciendo irreductible la realidad de que
las marcas no están en el despacho de los directivos, sino en las mentes y en las manos de sus consumidores...
y esto es un hecho que hará cambiar la manera en la cual afrontamos el branding, que pasará en muy poco tiempo
de ser el hermano pequeño de la publicidad a su gran oportunidad para la supervivencia.
La publicidad es táctica y el branding es estrategia. La publicidad es gritar un mensaje en público y el branding es
un susurro en privado. La publicidad es inmediatez y el branding requiere calma, coherencia, tiempo y elasticidad.
La gran asignatura va a ser aprender a hacer el amor realmente con nuestros clientes, y entender que esta actitud,
aunque más laboriosa y paciente, es mucho más gratificante y rentable a largo plazo que solo follar con ellos.
Este “ebook” es una guía de las actitudes o “posturas” necesarias para entender el branding en un mundo cada vez más 2.0.
Un mundo en el que el protagonista es un usuario que ya no es solo receptor, sino también emisor de nuestros mensajes....
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2.0 Mapa de la Comunicación 2.0
Sobrevivir a un mundo cuántico
A. Agencias
E. Empresas/Marcas
T. Televisión
R. Radio
P. Prensa
V. Vallas, soportes varios.
1.0. Internet tradicional
móvil
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1. La postura de la Autoestima
Tu marca eres tú
Es difícil que sepas querer a nadie si no te quieres a ti mismo... así que por esta misma razón las marcas deben
aprender a quererse antes de pretender querer bien a sus clientes.
Aprender a quererse requiere aceptación, consciencia de la realidad, ilusión y sobre todo liderazgo.
A menudo se asocia el líder a un cargo o una silla de poder, que normalmente está muy pegada a un culo.
Ese pegamento actúa como un gran obstáculo en la evolución de la Autoestima Corporativa, porque supone una
gran barrera para el desarrollo natural del liderazgo. Uno es líder porque desprende de forma natural una autoridad
que marca el norte para los demás en un cierto ámbito... y no puede forzarse ni imponerse esa autoridad, ni tampoco el norte,
porque entonces crece el desencanto, la desmotivación y el norte se diluye tanto que nadie lo encuentra por ninguna parte...
En la sociedad del “Yo”, todos necesitamos liderar y ser liderados de una u otra manera... el secreto está en encontrar el ámbito
natural para cada uno de nosotros y canalizar las capacidades e ilusiones en el momento adecuado.
Las organizaciones deben empezar a tener en cuenta que conocerse bien y aprovechar los liderazgos naturales de manera elástica
y proactiva solo tiene beneficios para catalizar su cultura de marca y proyectarla a sus clientes de manera honesta, directa y clara.
En definitiva, debemos cultivar el efecto “Bio”... porque si estamos bien por dentro se transmitirá hacia fuera, y no tendremos
que invertir grandes sumas en maquillajes, medicinas, tiritas y seremos mucho más atractivos para nuestros clientes.
El gran reto ahora para los que lideramos marcas está en ser lo suficientemente valientes como para entender que es realmente
lo que somos, y sobre todo, que es lo que realmente podemos llegar a ser sin dejar de ser... nosotros.
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2. La postura del Optimismo
Los obstáculos son siempre oportunidades
No confundir el optimismo con la inconsciencia o con la ensoñación. De hecho muchas marcas aplican demasiadas veces
la inconsciencia y la ensoñación vistiéndolas de optimismo, y esto, como es natural, genera frustración.
Ser optimista significa ser profundamente realista y consciente de nuestras limitaciones, de la incertidumbre
que preside la vida en todos los ámbitos y de estar preparado siempre para lo peor, exiliando a la vez, al miedo.
Solo cuando aceptamos la existencia de la muerte, podemos entender la fragilidad de nuestra existencia y vivirla
en plenitud y con alegría.
El miedo es el gran enemigo de la evolución y el gran aliado de los ineptos... en un nuevo mundo hipercomunicado, los
ineptos lo tienen cada vez peor para ocultar sus incapacidades, porque la tendencia nos lleva a un desarrollo de las
competencias cada vez más transparente y compartido. Si tenemos miedo, acabaremos comunicando miedo, y
en un mundo 2.0 los clientes también son medios de comunicación y agencias de publicidad de nuestra marca.
Con estas nuevas reglas para el viejo juego del Mercado nos veremos todos obligados a ser optimistas y transmitirlo
en todas nuestras acciones, o veremos como nuestros clientes nos son infieles con otras marcas que los hagan sentir mejor.
La positividad hace que todo sea posible mientras que el miedo hace que todo sea previsible. Tu marca debe decidir
con que sistema quiere participar en este juego de seducción, donde cada vez es más dificil “penetrar” en la
mente de un cliente sin ilusionarle, emocionarle y sorprenderle de la manera adecuada.
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3. La postura de la Aceptación
Yo también quiero ser una Estrella del Rock
Siempre quise ser una estrella del Rock y todas las marcas quieren acabar siendo la Coca-Cola.
Con el tiempo me he dado cuenta de que mis infructuosos intentos durante años por intentar ser algo parecido
a Bono de U2, solo me habían provocado infelicidad y frustración.
Ahora además, me doy cuenta de que si hubiera seguido con ese propósito, tal y como está la industria musical hoy en día,
tendría que vivir con un estilo de vida que no se adecuaría para nada a mis necesidades.
Con este breve ejemplo personal quiero ilustrar la diferencia entre lo que deseamos y lo que realmente necesitamos.
No todas las marcas necesitan ser como fin último Sony, McDonald´s o Google, porque no todos podemos ser Elvis o Madonna.
Tenemos que ser conscientes de nuestro lugar y propósito en el mundo y tomarnos nuestras limitaciones como rasgos de
la personalidad que nos hace ser únicos. Todos soñamos con el éxito y las marcas no son más que un reflejo
de nosotros mismos... pero la pregunta es: ¿Tener éxito es ser Google? o tener éxito es ser la mejor “Mi Marca” posible.
Seguramente Google es Google, justamente porque encontró su respuesta correcta.
Si queremos hacer el amor en la postura de la Aceptación, debemos tener en cuenta como una realidad incuestionable
que el mejor amante no es el que la tiene mas grande, sino simplemente el que es capaz de proporcionar mayor placer...
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4. La postura de la Simplicidad
Las cosas son divinamente desnudas
...somos nosotros los que nos esforzamos en vestirlas (M.Yourcenar).
Nuestros clientes están saturados de inputs y ya no nos ven, simplemente nos perciben.
Están vacunados contra todo tipo de mensajes y en su mente pone cada vez más un cartel que dice: “Ya lo sé, no me aburras...”
Ya no nos ven, simplemente nos huelen... y deciden en un instante cada vez más breve si nos hacen caso o nos sustituyen,
cruelmente, sin tener en cuenta todo nuestro esfuerzo. Así que no podemos complicar las cosas, sino se irán con otra marca que
hable menos, y les haga sentir más, con menos esfuerzo.
El secreto del branding está en algo tan complicado como decir siempre lo mismo.
Para decir siempre lo mismo, de millones de maneras diferentes, lo mejor es ser uno mismo.
Si como marca tu cliente te quiere y te deja amarle es porque eres auténtica y simplemente tú... si quisiera que no fueras tú
seguramente acabaría marchando igualmente con otro, así que hazlo fácil.
Sé simple y concéntrate en lo que realmente hace vibrar a tus clientes contigo y poténcialo.
No pretendas ser otro... o se enamorará de él.
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5. La postura del Entorno
El misterio del posicionamiento
Para marcas como Coca-Cola, el posicionamiento es un juego de niños...
en cambio, para el resto de los mortales, posicionarse adecuadamente en un mercado
tan cambiante como incierto, es un asunto digno de aparecer en “Cuarto Milenio”.
Para hacer el amor con nuestros clientes necesitamos el ambiente propicio, la música
y la luz adecuadas y también la tranquilidad necesaria para ser percibidos como nos merecemos.
Por este motivo, la elección del lugar donde seducirlo con nuestros encantos es capital.
Si elegimos un entorno repleto de seductores como nosotros, es fácil que nuestro cliente
se distraiga también con sus atributos, disminuya la adecuada concentración en nuestras caricias,
y perdamos la efectividad de nuestros roces...
Es importante escoger un lugar donde estemos a solas, y podamos susurrarle al oido durante
el tiempo necesario para conseguir nuestros objetivos.
Ese lugar habita en su mente y solo puede definirse a través de experiencias únicas y diferenciadas.
A menudo, para enfocar el lugar propicio para diferenciarnos en un mercado repleto de competidores,
simplemente hay que alejar un poco de nuestra vista lo que tenemos delante de nuestras narices.
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6. La postura de la Incertidumbre
Mañana será otra vez hoy
La incertidumbre provoca ansiedad, nervios y sobre todo, miedo... si la afrontamos de manera negativa.
Afrontar la incertidumbre con una actitud positiva, en cambio, nos permite mantener nuestra marca erecta.
Si tenemos una buena erección, podremos penetrar satisfactoriamente en la mente de nuestros clientes y
mantenerlos fieles a nuestros encantos de manera continuada.
Gestionar una marca es como jugar una liga de fútbol. Podemos ganar un partido, pero podemos perder el siguiente...
Incluso podemos ganar la liga y la Champions, pero a la temporada siguiente, nuestros aficionados y nosotros mismos
nos exigiremos, como mínimo, volver a hacerlo.
Si creemos que tenemos los partidos ganados antes de jugarlos, perderemos la perspectiva de la incertidumbre
y seguramente acabaremos perdiendo la liga frente a equipos más motivados. En cambio, si somos conscientes cada día
de que siempre podemos perder y tenemos en forma nuestra autoestima, nos concentraremos más intensamente
en crear jugadas que nos den opciones de gol... porque sin gol no hay partido, ni liga, ni Champions.
La marcas, como las personas tienden a buscar certezas, asirse a ideas que les proporcionen la falsa seguridad
de que ciertas cosas son inmutables... pero es un engaño muy peligroso, porque lo único cierto es que nada,
ni siquiera el éxito, es para siempre.
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7. La postura del Quid pro Quo
Amar con inteligencia
En un ebook sobre “Cómo hacer el amor con tus clientes”, es curioso tener que citar a alguien con
un apellido tan sugerente como el profesor Cipolla...
Pero es que el profesor Carlo María Cipolla es autor del libro “Allegro ma non troppo”, un libro muy
interesante en el que desarrolla su tesis de que la conducta humana puede clasificarse simplemente en
en cuatro categorías:
1. Eres Incauto (haces algo que es malo para ti pero bueno para los demás)
2. Eres Malvado (haces algo bueno para ti pero malo para los demás)
3. Eres Estúpido (haces algo malo para ti que también es malo para los demás)
4. Eres Inteligente (haces algo bueno para ti y bueno para los demás)
Cipolla defiende también, con gran acierto, que el hecho de que una persona actúe de modo Inteligente
por la mañana no quiere decir que no pueda ser un Incauto por la tarde y un Estúpido por la noche...
En definitiva, que es evidente que las conductas “Inteligentes” son las más adecuadas para generar beneficios,
pero que como estamos atrapados en las contradicciones de la condición humana... no siempre es así.
Las marcas son totalmente “humanas” porque están impregnadas de las personas que las lideran, las comunican
o las experimentan... y lo más inteligente para los que las gestionamos es ser conscientes de ello.
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8. La postura del Respeto
El Spam no es amor
A menudo tenemos la necesidad de comunicarnos con nuestros clientes para cumplir
con nuestros objetivos... Pero la verdad es que a nuestros clientes le importan un pimiento
nuestros objetivos, porque lo único que le interesan son los suyos... y debemos respetarlo.
En un entorno 2.0 nuestro público objetivo está demasiado ocupado en satisfacer sus necesidades
de comunicación como para prestar la más mínima atención a las nuestras... si no las hacemos suyas.
Para comunicar algo que interese a nuestros clientes debemos introducir nuestros mensajes
de una manera sensual y delicada en su mente, a través de información útil y de entretenimiento deseado.
Debemos entender y respetar que nuestro target tiene vida propia y que puede tener dolor de cabeza,
estar cansado, saturado... o que sencillamente no le apetece retozar con nosotros en ese momento.
La salud de una relación amorosa pasa por tener una buena empatía, un clara actitud de respeto hacia el otro
y entender que no forzar las cosas, solo puede reportar beneficios a nuestra reputación de buenos amantes.
De esta manera siempre tendremos las puertas del dormitorio de nuestros clientes... abiertas.
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9. La postura de la Paciencia
La táctica al servicio de la estrategia
Siempre he dicho que el mejor plan de marketing de la historia lo escribió
Mario Benedetti en su poema “Táctica y estrategia”.
Reduce a leyes tan simples la actitud correcta para conquistar, seducir y conseguir el amor de
la persona a la que amas, que es del todo irreductible e inmejorable como plan.
Benedetti simplemente reduce la “Táctica” a crear un puente indestructible con la persona
amada escuchándola y hablándola de una manera franca para quedarse en su recuerdo.
La “Estrategia” todavía la hace más simple... ya que la reduce a una consecuencia lógica de
la táctica empleada, como es que sin que la persona amada se de cuenta, esta actitud
se convierta por fin en una necesidad.
El branding requiere de grandes dosis de paciencia y de amor porque construir una marca
es como hacer un buen vino... se necesita tiempo para conformar su auténtica personalidad.
Si nuestro objetivo es convertir nuestra marca en una necesidad no bastará con que nuestro
target nos conozca, sino que deberemos acostumbrarlo poco a poco a nosotros con experiencias
tan agradables y continuadas, que finalmente nos necesite para ser feliz.
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10. La postura de la Innovación
Si no tienes nada nuevo que decir, no digas nada
En un nuevo entorno tecnológico en el que todo se mueve, cambia constantemente
y las tendencias cambian a la velocidad de la luz.... innovar se ha convertido en una
auténtica necesidad para la supervivencia de las marcas.
Para algunos directivos que pensaban ganar con una cierta edad una cierta tranquilidad y
un cierto reconocimiento... este nuevo panorama es un incordio que les va a obligar a tener que
esforzarse más que nunca no solo para mantener su posición, sino que incluso para sobrevivir a ella.
La única vía posible es renovarse día a día con una buena dosis de información y de conocimiento.
La innovación nos permite renovar constantemente nuestras artes amatorias y nuestros conocimientos
en el campo de la seducción, encontrando nuevos juguetes tecnológicos para dar placer a unos clientes
siempre ávidos de novedades que les exciten.
Actualizarnos constantemente nos hace mantener una actitud joven y fresca que sin duda nos
hará más atractivos e interesantes para nuestros clientes.
No es una cuestión simplemente de que entendamos la innovación como algo positivo y necesario,
sino más bien de ser conscientes de que a partir de ahora, ser tozudo al cambio será un auténtico suicidio.
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11. La postura de los Sueños
Soñar es gratis
Conocer y conectar con los sueños de nuestros clientes nos puede permitir algo
tan maravilloso y rentable como formar parte de ellos.
No se trata de sortear cancelaciones de hipotecas... sino más bien de conectar un hilo
emotivo entre el “yo quiero ser” de nuestro target y nuestra promesa de marca.
Los sueños están compuestos de canciones, de experiencias y de imágenes que
evocan ilusiones y mundos nuevos por descubrir, nuevos retos y nuevas realidades
ligadas a un status y a una realidad deseada.
Es importante ser muy consciente del sueño que compartimos con nuestros clientes
y de las expectativas de satisfacción que les comunicamos. Si nos vendemos como
los mejores amantes y luego tenemos un gatillazo... tendremos un verdadero problema.
Todos necesitamos soñar, volar y tener esperanza de una realidad mejor.
Lo mejor para conectar con los sueños de nuestros clientes es simplemente soñar juntos...
las marcas que sueñan transmiten sueños... y además, no cuesta nada.
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12. La postura de la Comunicación
Comunicarse es cosa de dos
Históricamente las marcas nos hemos comunicado con nuestros clientes unidireccionalmente,
es decir: yo te comunico y tú, escuchas.
La irrupción del panorama 2.0 está cambiando este modelo de forma radical y ahora
las marcas deben empezar a comunicarse con sus usuarios de una forma diferente.
Ahora el usuario demanda ser el protagonista y te dice a ti, marca, que te calles.
A muchas marcas esto de que sus clientes tengan voz en su propia comunicación les da
un pánico espantoso... ¿Pero que voy a hacer ahora, si mi marca esta en manos de mis usuarios?
De lo que no es consciente este directivo es que su marca siempre ha estado en las manos
y en la mente de sus usuarios y no en su despacho. El gran cambio es que ahora también
está en su voz... y esta puede propagarse con la misma facilidad que la de un medio de
comunicación o una agencia de publicidad.
Si queremos hacer el amor a nuestros clientes, no tendremos más remedio que escucharles
para saber dónde y cómo quieren que les demos placer... y esto, tiene que dejar de darnos miedo.
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13. La postura de la Confianza
Ser notable es capital
Si queremos que nuestros clientes se relajen y disfruten... debemos darle mucha confianza.
La confianza no se conquista en cinco minutos... ni siquiera en diez, y no se conquista hablando,
sino haciendo las cosas de manera coherente con nuestra promesa de marca.
Nuestra promesa de marca y nuestros hechos han de estar en plena sintonía y han de transmitir
un ritmo, un tono y un ambiente que invite a la relajación y a abandonarse al placer que proponemos.
No nos engañemos... los humanos somos un poco tontos, y fácilmente depositamos nuestra confianza
en algo que simplemente es notorio y por lo tanto, las marcas que disfrutan de una notoriedad mayor,
también disfrutan de una predisposición a la confianza mayor.
Es exactamente igual que lo que nos pasa con alguien a quien conocemos en contraposición a alguien que
acabamos de conocer. El hecho de conocerlo no nos garantiza que hacer el amor con él sea más gratificante
que hacerlo con un perfecto desconocido, pero como mínimo, nos hace sentir más seguros.
Pero no nos engañemos... los clientes son cada vez más promiscuos y nuestra notoriedad ya no es una
garantía de que no se acurruquen con el tío cachas con el que acaban de coincidir a solas en el ascensor.
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14. La postura de la Seducción
Para seducir, quítate los calcetines
Si queremos triunfar en la cama con nuestros clientes en un Mundo 2.0 no tendremos más remedio
que quitarnos la americana, la corbata y también los calzoncillos... pero sobre todo, los calcetines.
La gente en la red, tiene cada vez más criterio y no se deja seducir por cualquiera. Si te ven el despacho
en la cara y tu letrero luminoso “Colega, yo soy como tú”, ya has patinado.
En las redes sociales la gente quiere cosas auténticas y sobre todo quiere reconocerse en todo con lo
que interactua, sin que le vendan nada que no ha pedido. Si quieres vender algo, tus calcetines de
ejecutivo te van a delatar, así que si no quieres sentirte como un director de banco en medio de una
playa nudista... quítatelos y simplemente haz amigos.
Conocer de primera mano como funcionan los engranajes sociales en la red te ayudará a entender
todo lo que no tienes que hacer para seducir a tus clientes.
Lo fundamental es que nuestra marca aprenda a seducir desnudándose completamente sin temor
a tener los pies fríos... porque no hay nada más gratificante que calentárselos rozándolos suavemente
contra los de nuestros clientes.
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15. La postura de la Pasión
No importa lo que hagas, pero ámalo
Me encanta esta frase de M.L.King porque refleja exactamente una actitud ante la vida
y ante el trabajo, que admiro.
Esa misma admiración se produce en nuestros clientes si perciben que lo que hacemos,
lo amamos profundamente.
Si queremos dejar huella en nuestros clientes y subirles la autoestima debemos hacerles
el amor apasionadamente para demostrarles como nos motiva poseerlos...
Una marca no puede amar apasionadamente a sus clientes sin un liderazago claro.
A menudo, el liderazgo en las organizaciones se diluye tanto por las estructuras clásicas
de poder, que deja poco espacio o ninguno a la pasión de sus integrantes.
Una marca apasionada es una marca viva, que genera admiración... y seguidores.
Una organización que no motiva, desarrolla y potencia la pasión por su marca,
está condenada a acabar desmotivando a su equipo, y aburriendo a sus clientes.
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16. La postura de la Generosidad
No me hagas regalos, sólo hazme sentir bien
La Responsabilidad Social Corporativa, la Conciliación Laboral o los Incentivos Sociales
son un signo de generosidad por parte de las marcas.
La generosidad genera un retorno a medio y largo plazo que se traduce en reputación
y en notoriedad social.
Pero la generosidad no ha de estar solo en estas fórmulas ya clásicas sino que ha de
tomar nuevos rumbos en una sociedad dominada por el “Yo” y por el usuario.
Seguramente hay que afrontar nuevos retos en cuanto a la aplicación de la generosidad de
las marcas con sus usuarios y no pasan por hacer más regalos o más descuentos.
Sin duda pasan por implicarse más en su vida y formar parte de ella en ciertos momentos.
Debemos tener en cuenta que nuestros mejores clientes, también son un altavoz de nuestra
marca y forman parte de ella de manera activa.
Todo se reduce a entender que nuestro beneficio... está en el suyo.
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17. La postura de la Calma
Piano, piano...
La calma es la vaselina más efectiva para lubricar eficientemente los deseos
de nuestros clientes. No hay nada como no tener urgencias para que todo fluya...
Nuestros usuarios son cada vez más deseados y tienen ofertas de seducción por todas
partes... esto hace que estén un poco cansados y recelosos de nuestras intenciones
porque saben que todo el mundo quiere poseerlos.
Esta postura o actitud es ideal para los clientes muy exigentes, delicados o escaldados
que requieren de una cierta sensibilidad y un cierto status en las acciones y en las posiciones.
Este tipo de cliente no va a venir a nuestra habitación a la primera de cambio y no va a dejarse
seducir fácilmente... aunque probablemente esté deseándolo ardientemente en su interior.
La calma provoca paz, y la paz desarma los escudos, las barreras y los muros defensivos que todos
ponemos sin darnos cuenta para protegernos de lo que no deseamos.
La calma nos proporciona además la tranquilidad y la distancia necesarias para apuntar
certeramente a nuestros objetivos en un entorno en constante movimiento.
Todo es cuestión de encontrar el ritmo preciso para envolver delicadamente nuestras palabras,
mientras sujetamos firmemente las caderas de nuestro objetivo...
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18. La postura del Masaje
Regálame un Kit Kat
A quien no le gusta que le hagan un masaje reparador que le haga flotar, volar
y olvidarse del mundo...
La postura del masaje consiste en desprenderse aparentemente del objetivo final de venta
de la marca, para centrarse únicamente en proporcionarle un deseo íntimo.
Si como marca, nos lo podemos permitir... “perder” el tiempo en tonificar y relajar
a nuestro target es una de las vías más efectivas de fidelización.
Pero... ¿Cómo se masajea a un cliente?
Es fácil... y todo un clásico en la relación con los clientes... sobre todo en los comportamientos
sociales latinos.
Simplemente averigua lo que desea y proporciónale la experiencia, aunque no tenga
absolutamente nada que ver con tu producto, siempre recordará las manos que le hicieron
sentir tan bien...
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19. La postura de la Frecuencia
Dame más, más veces
No encontramos ante un mercado hiperfragmentado, imprevisible y en constante
movimiento... y esto ya hace tiempo que no es ninguna novedad.
En este entorno, las acciones de marca a gran escala son menos efectivas y la realidad impone,
cada vez más, afrontar la comunicación y la publicidad desde otra perspectiva.
Se impone la tendencia a segmentar, minimizar recursos y aumentar la frecuencia de nuestras
incursiones en el dormitorio de nuestros clientes.
Tenemos que aprender a hacer el amor con muchas amantes en diferentes lugares y además,
cumplir con todas ellas dejándolas totalmente satisfechas... Esto requiere, sin duda, un esfuerzo
digno de todo un semental... pero es posible y necesario acostumbrarse a esta nueva realidad.
Acostumbrados al “sábado sabadete”, ahora tener que estrenar camisa cada día varias veces
nos obliga a estar mucho más despiertos, en forma y pro-activos como amantes.
La recompensa estará en que este esfuerzo por potenciar nuestra capacidad amatoria,
nos permitirá afrontar nuevas posturas, placeres y recompensas que jamás hubieramos podido
imaginar de nosotros mismos.
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20. La postura del Inconformismo
La Excelencia es una actitud
El inconformismo es el preservativo contra la enfermedad de la incompetencia.
El mundo 2.0 lo está invadiendo y lo va invadir todo, y ya no solo va a representar
una revolución en internet sino que va a bañar todos los ámbitos, porque va a ser
inconcebible una realidad que no sea en hiperactiva, en red y social.
2.0 quiere decir colaboración y participación del usuario... básicamente entender que
ahora, en esta película, el protagonista ya no es George Clooney sino el espectador.
Esta nueva realidad a la que hay que estar conectados permanentemente, requiere
de un estado de forma excepcional y por lo tanto, nos obliga a contar con de la mejor
versión de nosotros mismos para ser competitivos.
Para ser el mejor amante debemos no conformarnos nunca con nuestra capacidad
y habilidades amatorias y reciclarnos constantemente a través de la creatividad y
el conocimiento... se acabaron los tiempos de los grandes planes y empieza la
edad de las pequeñas acciones.
Aceptémoslo... no nos queda más remedio que ser los mejores nosotros posibles.
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21. La postura del Fluir
Be water, my friend
...Bruce Lee estaba en lo cierto, y Nike con el claim “Just do it”, y también Adidas con
su “Nothing is impossible”... La filosofía ya no está solo en los libros de Kierkegard o
Proust, y los secretos del branding tampoco residen sólo en la última edición de
“El Meollo del Branding”, de Tom Peters. La verdad está ahí dentro. En nosotros.
La postura del “Fluir” es la más importante, la mas simple y la más compleja de todas las actitudes
necesarias para hacer el amor satisfactoriamente con nuestros clientes, porque en esta
se reúnen todas las habilidades, experiencias y conocimientos necesarios para interpretar las
señales que nos harán afrontar de manera exitosa el reto de conquistar y fidelizar a nuestros clientes
en un mundo cada vez más 2.0.
Este ebook es una simple guía para introducirse en el mundo del branding, en un momento en el que
el reinado de la publicidad toca a su fin porque se requieren nuevas fórmulas para llegar a nuestros
clientes a través de comunicaciones no invasivas y basadas en el conocimiento compartido.
A la vez, también es un instrumento fantástico para hacer el amor con mis posibles clientes.
Un abrazo fuerte...
j.
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Todo está por hacer y todo es posible...
Miquel Martí i Pol
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El Autor
Joan Jiménez (Barcelona, 1967)
Joan Jiménez, consultor de branding y artista multimedia.
Según quienes le conocen bien, este apasionado de las nuevas tecnologías y del universo
social online posee una “creatividad hiperactiva” que desarrolla en distintos campos,
como la realización de nuevos conceptos, proyectos, campañas y productos 2.0;
el desarrollo de novedosos formatos para televisión; etc.
Así como en áreas tan diversas como el diseño, la fotografía, la literatura, la pintura,
la psicología, la filosofía, el cine o la música.
Jiménez, premio Möbius Multimedia UAB/Unesco y finalista del Premio Jóven
Empresario de Cataluña, se autodefine profesionalmente como un “Explorador”.
También se declara un enamorado de la simplicidad de Rothko, Tom Peters o The Edge
y describe su pasión creativa como “la búsqueda incansable de la irreductibilidad”.
Juanma G. Colinas
El Publicista
http://www.joanjimenez.com
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21 POSTURAS PARA HACER EL AMOR CON TUS CLIENTES

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