original num 14 junio 2004 - Colegio de Pilotos Aviadores de México
Transcripción
original num 14 junio 2004 - Colegio de Pilotos Aviadores de México
Seguridad OACI Delinea normas de competencia mínimas en el lenguaje Cap. Miguel Marín Stillman / [email protected] Fotografía de Ismael Jorda / www.airliners.net La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) ha adoptado cambios clave en sus normas aeronáuticas de telecomunicaciones que representan un requisito para el personal técnico aeronáutico, como pilotos, controladores de tránsito aéreo y oficiales de operaciones, con el objeto de lograr un nivel específico de competencia en el lenguaje en las comunicaciones radiotelefónicas (R/T) aire/tierra. Estos cambios surtirán efecto en el 2008. 9 Seguridad Las principales enmiendas a los Anexos 1 y 10 de la OACI establecen que la fraseología estandarizada de esta organización deberá utilizarse en todas las ocasiones para las cuales haya sido especificada. Cuando no existan términos específicos, podrá usarse un lenguaje común y corriente. Por lo tanto, las nuevas enmiendas están encaminadas a fijar los niveles de competencia para todos los idiomas utilizados en las comunicaciones radiotelefónicas. También fortalecen recomendaciones anteriores como establecer formalmente que el inglés –o un idioma de común acuerdo– debería usarse para la coordinación entre los centros de control y estar disponible a solicitud de las aeronaves. Las enmiendas especifican una escala de seis niveles de competencia del lenguaje. Están diseñadas para determinar la habilidad de un individuo para expresarse con claridad en las comunicaciones R/ T aire/tierra. El personal técnico aeronáutico que no pueda lograr un nivel de competencia más allá de los primeros tres –definidos como “preelemental”, “elemental” y “preoperacional”– quedará por debajo de las normas mínimas de la OACI requeridas por la radiotelefonía para obtener la licencia. El nivel de competencia mínimo requerido para cumplir con el nuevo requisito es el “operacional”. Además, existen dos niveles más altos definidos como “avanzado” y “experto”. El Anexo 1 de la OACI estipula que la autoridad aeronáutica debe examinar al personal técnico aeronáutico, para determinar su nivel de competencia en el lenguaje periódicamente: aquellos que están en el nivel “operacional” cada tres años; en el nivel “avanzado”, cada seis años, y en el nivel “experto”, quedarían exentos de evaluaciones recurrentes. Adicionalmente, el Anexo 6 de la OACI responsabiliza a los operadores de las aeronaves (por ejemplo, a las aerolíneas) y a los proveedores de control de tránsito aéreo de que su personal técnico aeronáutico tenga la 10 habilidad de hablar y comprender el lenguaje, según los niveles mínimos de competencia en el lenguaje estipulado en el Anexo 1. La competencia de lenguaje para cada uno de los seis niveles es, a su vez, examinado de acuerdo con seis categorías particulares del lenguaje: pronunciación, estructura gramatical, vocabulario, fluidez, comprensión e interacción. Para lograr el nivel mínimo “operacional” de la OACI, un individuo tendría que cumplir con el siguiente criterio: Pronunciación Pronunciación, énfasis, ritmo y entonación son influidos por la primera lengua del individuo o la variación regional, pero esto interfiere únicamente algunas veces con la facilidad de entendimiento. Estructura Estructuras gramaticales básicas y modelos de oraciones se utilizan creativa y usualmente bien controlados. Podrían ocurrir errores, sobre todo en circunstancias anormales o inesperadas, pero raramente interfieren con el significado. Vocabulario El alcance y precisión son usualmente suficientes para comunicarse con efectividad sobre tópicos comunes, concretos y relacionados con el trabajo. Puede, de manera frecuente, parafrasearse exitosamente cuando falta el vocabulario en circunstancias anormales o inesperadas. Fluidez Produce extensiones de lenguaje en un ritmo apropiado. Podría existir una pérdida ocasional de fluidez en la transición del discurso ensayado o formulado a la interacción espontánea, pero esto no evita la comunicación efectiva. Puede hacerse uso de señales o conectores de discurso. Las locuciones no causan distracción. Comprensión Principalmente precisa en tópicos comunes, concretos y relacionados con el trabajo, cuando el acento o variedad utilizados es suficientemente inteligible por una comunidad internacional de usuarios. Cuando el orador es confrontado con una complicación lingüística o situacional o con un giro inesperado de sucesos, la comprensión podría ser más lenta o requerir estrategias de aclaración. Interacción Las respuestas son normalmente inmediatas, apropiadas einformativas. Inicia y mantiene intercambios aun cuando se está tratando con un giro inesperado de sucesos. Hace frente de manera adecuada a malentendidos aparentes comprobando, confirmando y aclarando. En un país como México, donde se habla español e inglés, existe disponibilidad para atender al tráfico internacional. La autoridad mexicana deberá especificar en las licencias que emite, el nivel de competencia de cada uno de los lenguajes, según el Anexo 1 de la OACI. Los pilotos y/o controladores que únicamente operen en el espacio aéreo nacional no se verán afectados, pues fácilmente cumplirán con un nivel de “experto” en el idioma español. Aquellos que si vuelan al extranjero o atienden espacios aéreos con tráfico internacional, deberán prepararse para tener un nivel “operacional” cuando menos en el idioma inglés, antes del 2008, pues de otra manera su licencia estará restringida a operaciones nacionales. El 2008 pareciera estar lejos en el futuro, pero el tiempo vuela. En cinco años, tendríamos el tiempo suficiente para llegar a un nivel de competencia en el lenguaje inglés suficiente para superar los requisitos mínimos estipulados en las normas de la OACI. De no lograrlo, estaríamos confinados a operaciones nacionales únicamente.