Recomiendan tomar recaudos por la propagación de alacranes en

Recomiendan tomar recaudos por la propagación de alacranes en esta
época del año
El alacrán prolifera en los climas calurosos que hacen que se magnifique su secreción de veneno. Como
huye de la luz, de día se esconde en los rincones o en lugares inesperados, por lo cual puede sorprender a
las personas que circulan por allí.
Todos los días se conocen nuevos casos de picaduras de alacranes, pero pocos son ponzoñosos. En el
mundo se registraron unas 1500 especies de alacranes, de los cuales unos 50 son tóxicos o venenosos, el
resto produce la picadura cuya manifestación suele ser muy dolorosa.
En la Argentina hasta ahora se registró únicamente una de estas especies venenosas que se llama Tittus
trivitatus. Es de color rojizo y tiene tres bandas negras sobre el lomo del animal. Este animal solo se
defiende cuando se siente atacado. Para evitar ser sorprendidos por un alacrán debe tenerse la casa en orden,
evitar las grietas, cañería abiertas, etcétera. Las fumigaciones pueden ser útiles en este sentido.
“Hay que tratar de fijarse bien antes de ponerse los calzados en la mañana, no dejar ropas en el piso, porque
en todos estos lugares puede esconderse un alacrán”, explicó el doctor Manuel Riera, director general de
Salud de la Municipalidad de Posadas. Cuando se produce la picadura generalmente la persona afectada
ignora de qué tipo de alacrán se trata. Consumado el hecho se recomienda que se desinfecte bien la zona
con agua, jabón y cepillo e inmediatamente, como es muy doloroso, se debe colocar una bolsa de hielo en el
lugar de la herida.
Asimismo, debe evitarse el uso de alcohol, torniquetes, cortes, etcétera que solamente contribuirían a la
expansión del veneno por el cuerpo. Luego la persona deberá recurrir inmediatamente a un centro
asistencial llevando el animal en una caja o envase de vidrio para que el médico evalúe el problema local y
determine si el alacrán es venenoso. Los síntomas de un alacrán venenoso pueden manifestarse a los pocos
minutos de la picadura o bien luego de varias horas produciendo encefalitis, vómitos, somnolencia, bronco
espasmo, fallos renales y hasta estado de coma, entre otros daños multiorgánicos.
Las toxinas afectan prácticamente a todos los órganos afectando al sistema nervioso central, al aparato
cardiovascular y las vías respiratorias.
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