Luciano Pérez Valdeolivas

Transcripción

Luciano Pérez Valdeolivas
STAFF
Presidenta
Dª Nieves Pardo Fuentes
Vicepresidente
D. Rafael Descalzo Carmona
Secretario
D. Enrique Huerta Jiménez
Vicesecretario
D. Andrés Ventura Escutia
Tesorero Contador
D. Luciano Pérez Valdeolivas
Relaciones Institucionales
D. Luciano Pérez Valdeolivas
Cultura, Teatro y Espectáculos
D. Ramón Quintana Habas
Excursiones
D. Armando Castro Aranda
Juventud y Deportes
D. Rafael Descalzo Carmona
Masa Coral
D. Ramón Quintana Habas
Mujeres y Servicios Sociales
Dª Cándida Rubio Portillo
Dª Mari Luz González Martínez
Corte y Confección
Dª Cándida Rubio Portillo
Juegos y Espectáculos
D. Juan de Dios Sáiz Rodríguez
EDITA
Casa de Cuenca en Barcelona
C/. Montaña, 62-64
08026 Barcelona
Director del Boletín y Bibliotecario
D. Carlos Hernáiz Fernández
PRoducción BOLETÍN
PacPer Publicidad y marketing, S.L.
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José María
Barreda
Presidente de Castilla-La Mancha
La cultura y la confraternización protagonizan la actividad
de la Casa de Cuenca en Barcelona desde hace cincuenta
años. El sentimiento de amor a la tierra se mantiene vivo
gracias a vuestra labor. Cuenca y Castilla-La Mancha aumentan su prestigio porque vosotros sois el espejo en el
que mirarse para contemplar sus virtudes. Os felicito por
este medio siglo de existencia.
Este Boletín Informativo extraordinario, conmemorativo
del cincuentenario, es un medio excelente para dar a conocer el verdadero espíritu de nuestra manera de ser, pues
el amor a la cultura, como el amor a nuestras raíces, nos
hacen personas respetuosas y de bien.
Con estas palabras quiero agradeceros y compartir con vosotros la pasión por Cuenca y por Castilla-La Mancha, pues
sé que vivís y las sentís con el amor de quien las conoce
y las valora, aunque estéis alejados de ellas en el espacio,
que no en las emociones.
Admiro a las personas como vosotros que, con vuestra
entrega y compromiso, contribuís a preservar las esencias culturales que unen a los pueblos. Por este motivo,
os agradezco que me ofrezcáis la oportunidad de escribir
estas palabras de agradecimiento y felicitación.
Estoy seguro de que vuestra “casa común” es un lugar idóneo para dar cauce a las inquietudes de las personas, que
estrechan lazos de unión y de respeto en un lugar dinámico y abierto al progreso y a las relaciones interculturales,
como es Barcelona.
Espero que las actividades para celebrar el cincuentenario
de vuestra Casa de Cuenca sean todo un éxito.
Os deseo que sigáis manteniendo esa esencia tan nuestra
de cultura, generosa y solidaria, y que ésta sirva de invitación a quienes os rodean para que alguna vez os acompañen a conocer nuestra querida tierra, Cuenca y Castilla-La
Mancha, en la que todos seréis recibidos con los brazos
abiertos.
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José
Montilla
Presidente de la
Generalitat de Catalunya
SALUDO DEL MUY HONORABLE PRESIDENTE DE LA
GENERALIDAD DE CATALUÑA CON MOTIVO DEL 50º
ANIVERSARIO DE LA CASA DE CUENCA EN BARCELONA
SALUTACIÓ DEL MOLT HONORABLE PRESIDENT DE LA
GENERALlTAT DE CATALUNYA AMB MOTIU DEL 50é
ANIVERSARI DE LA CASA DE CUENCA A BARCELONA
Mi más sincera enhorabuena por los cincuenta años de la
Casa de Cuenca. Este feliz aniversario demuestra el acierto de
sus fundadores y el buen trabajo que han hecho los responsables de la entidad, los miembros de las diversas juntas y
también todos los socios y socias a lo largo de medio siglo.
La meva més sincera enhorabona pels cinquanta anys de la
Casa de Cuenca. Aquest joiós aniversari demostra I’encert del
seus fundadors i la bona feina que han fet els responsables de
I’entitat, els membres de les diverses juntes i també tots els
socis i sócies al IIarg de mig segle.
Las asociaciones agrupan a las personas originarias de un
territorio, unidas por el recuerdo de sus orígenes, para fomentar el sentimiento de pertenencia y la estimación por
su tierra de origen, y también para revivir sus fiestas y
tradiciones. Unas fiestas que se deben celebrar sin perder
nada de aquello que las comunidades sienten como propio
y con pleno respeto hacia la tierra de acogida. Una tierra,
Cataluña, que es ya la de sus hijos y nietos y donde probablemente se quedarán todos ellos a vivir.
Todos juntos, independientemente de los diferentes orígenes, formamos la Cataluña actual, abierta y plural, creativa
y amante de la tradición, realista y emprendedora a la vez.
Un país que no obliga a nadie a renunciar a sus historias
personales o colectivas, que ha abierto y abre los brazos a
todo el que llega en busca de nuevas y mejores oportunidades para ellos y sus familiares.
Les associacions agrupen les persones oriqinàries d’un
territori, unides pel record deis seus orígens, per fomentar el sentiment de pertinença i I’estima per la seva terra
d’origen, i també per reviure les seves festes i tradicions.
Unes festes que s’han de celebrar sense perdre res del que
les comunitats senten com a més propi i amb ple respecte
a la terra d’acollida. Una terra, Catalunya, que és ja la
deis seus fills i néts i on probablement es quedaran tots
ells a viure.
Tots plegats, independentment dels diferents orígens, formemla Catalunya actual, oberta i plural, creativa i amant de
la tradició, realista i emprenedora alhora. Un país que no
obliga ningú a renunciar a les seves històries personals o collectives, que ha obert i obre els braços a tothom que hi arriba
a la recerca de noves i millors oportunitats per a ells i els seus
familiars.
Las personas que han querido hacer de nuestro país su lugar de residencia, de trabajo y de arraigo familiar y social
lo han hecho integrándose de lleno en nuestra comunidad
nacional, que tiene una historia y una personalidad muy
acusada que quiere mantener como signo de identidad,
una identidad, de todas maneras, que se va enriqueciendo
y transformándose día a día. Ésta es la mejor garantía de
cohesión social y de ser un único pueblo.
Les persones que han volgut fer del nostre país el seu IIoc
de residència, de treball i d’arrelament familiar i social ho
han fet integrant-se de ple a la nostra comunitat nacional, que té una història i una personalitat molt acusada
que vol mantenir com a signe d’identitat, una identitat, de
tota manera, que es va enriquint i transformant dia a dia.
Aquesta és la millor garantia de cohesió social i de ser un
sol poble.
Les deseo de todo corazón que la celebración del cincuentenario sea un éxito y que vivan todos los actos programados de manera intensa y entrañable. ¡Por muchos años!
Els desitjo de tot cor que la celebració del cinquantenari sigui
un exit i que visquin tots els actes programats de manera
intensa i entranyable. Per molts anys!
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Juan M.
Avila
Presidente de la Diputación
Provincial de Cuenca
Queridas y queridos paisanos:
Desde estas líneas vengo a sumarme a la celebración del
cincuenta aniversario de la constitución de la Casa de
Cuenca en Barcelona. Un acontecimiento por el que os debéis sentir tremendamente orgullosos, y que también nos
llena de alegría a quienes -desde aquí- conocemos y admiramos vuestro trabajo, consistente en dar a conocer en
la ciudad que un día os acogió, el enorme atractivo de la
tierra que os vio nacer y a la que, aún a pesar del tiempo
transcurrido y de la distancia física, permanecéis unidos
por fuertes vínculos de respeto y de cariño.
Yo quiero que sepáis que todos los conquenses admiramos
vuestra entrega a esta causa compartida de difundir la riqueza monumental de Cuenca y de su provincia, consecuencia del paso por nuestro territorio de distintas culturas
y civilizaciones. Me consta que tampoco escatimáis elogios
con respecto a la diversidad paisajística que caracteriza a
nuestra provincia, integrada por diferentes comarcas natu-
rales, todas ellas singularmente hermosas por igual. Pero
sobre todo os quiero dar las gracias por llevar hasta la
Ciudad Condal el talante de las gentes que habitan estas
tierras: buenas gentes, de noble corazón, gentes sencillas
y trabajadoras, acogedoras y tremendamente generosas y
hospitalarias.
Yo estoy convencido de que esta encomiable labor ininterrumpida y entusiasta que viene realizando la Casa de
Cuenca en Barcelona ha de servir, también, para que vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos no olviden dónde
están sus orígenes. Y, sobre todo, para que vuestros hermanos catalanes sepan de nosotros y se animen a venir
a conocernos. Decidles que aquí les recibiremos con los
brazos abiertos, como es nuestra costumbre y porque es
la particular manera que tenemos de darles las gracias por
haber acogido con cariño a muchos de los nuestros.
Muchas Felicidades.
Un fuerte abrazo.
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Antoni
Fogué
Presidente de la
Diputación de Barcelona
Medio siglo en la historia de la Casa de Cuenca de Barcelona
es, no cabe duda alguna, mucho más que una larga y provechosa trayectoria al servicio del encuentro y la convivencia
entre dos comunidades, la conquense y la catalana. Y lo es
porque a lo largo de estos cincuenta años nuestro país ha experimentado una profunda transformación. 1960 queda ahora
muy lejos, mucho más lejos de lo que a primera vista pudiera
parecernos a muchos. Desde entonces nuestros pueblos y ciudades han vivido un extraordinario progreso social, cultural
y económico, paralelo a un histórico progreso político que
ha establecido, por fin, tras varios intentos malogrados, un
desarrollo colectivo pacífico, democrático y duradero.
Los amigos y amigas de la Casa de Cuenca de Barcelona
han contribuido, junto al resto de la sociedad, a poner en
pie este magnífico proyecto político, basado en la convivencia, el respeto, la cultura, la justicia y la solidaridad.
Los gobiernos locales, los ayuntamientos, a los que sirvo
y represento en tanto que presidente de la Diputación de
Barcelona, han tenido un papel importante y decisivo en
este progreso, ampliando y mejorando sustancialmente los
servicios públicos de proximidad y trabajando por un ur-
banismo más a la medida de la ciudadanía, por una mejor
calidad de vida para todos, por un nivel equiparable de
espacios y equipamientos públicos en todos los municipios. Esta tarea la hemos llevado a cabo con el concurso
y el apoyo de nuestros conciudadanos, tanto porque los
cargos electos de los ayuntamientos, renovados democráticamente cada cuatro años, son ocupados por vecinos y
vecinas que dedican buena parte de su tiempo, no sin esfuerzos y renuncias, al bien de la comunidad, como porque
numerosas personas y entidades ciudadanas contribuyen
al desarrollo local mediante sus aportaciones e iniciativas.
Entre ellas se cuenta, y con méritos sobrados, la Casa de
Cuenca, muy activa y comprometida a lo largo de esta
dilatada etapa, y que cumple medio siglo con los mismos
valores con que echó a andar y con una ilusión y un empeño que permiten abrigar las mejores expectativas para el
futuro. Por ello me complace expresar la felicitación y el
reconocimiento por esta labor en nombre de la Diputación
de Barcelona y de los 311 municipios de la provincia con
los que trabaja para favorecer el desarrollo y el bienestar
de nuestros pueblos y ciudades.
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Francisco Javier
Pulido
Alcalde de Cuenca
Queridos paisanos
Para mí es un verdadero orgullo dirigirme a vosotros en
esta ocasión tan especial en la que celebráis el 50 aniversario de la fundación de la Casa de Cuenca en Barcelona.
En primer lugar me gustaría daros las gracias por invitarme a participar en este Boletín informativo extraordinario
y poder así trasladaros mi felicitación y mi agradecimiento
más sincero.
Quiero aprovechar para deciros que en estos momentos
en los que me siento ante el ordenador para escribir estas
líneas, mi intención y deseo es poder trasladarme hasta
Barcelona el próximo día 22 de mayo para compartir con
vosotros la celebración de este aniversario. Confío y deseo
que no haya ningún impedimento y que podamos disfrutar
de la alegría que supone celebrar los 50 años de la creación
de la Casa de Cuenca.
Estoy seguro de que en este largo camino habéis pasado
por dificultades pero que el amor por la tierra que un día
tuvisteis que dejar para buscar nuevas oportunidades ha
servido para alentaros y para que siguierais trabajando y
dejando el nombre de Cuenca muy alto.
Me produce una gran satisfacción ver no sólo cómo habéis
conservado intacto vuestro sentimiento de conquenses
sino cómo habéis sido capaces de transmitir el amor por
esta tierra a vuestros hijos y nietos.
Desde la lejanía tengo noticias de todas las actividades que
hacéis, de cómo celebráis las fiesta de San Julián, nuestro
patrón, de cómo seguís la actualidad de Cuenca y su provincia. De vuestra preocupación por el desarrollo de nuestra tierra y de vuestras ganas de que avancemos hacia un
futuro mejor en que nadie tenga que marcharse por falta
de oportunidades.
Os animo a seguir trabajando, a continuar con la semilla que hace 50 años plantasteis a muchos kilómetros de
vuestra tierra y que hoy se ha convertido en esta estupenda
Casa de Cuenca. Gracias de nuevo y felicidades por este
aniversario del que hoy también me siento parte.
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Jordi
Hereu
Alcalde de Barcelona
Como alcalde de la ciudad, es un placer dirigirme a vosotros a través de este boletín que la Casa de Cuenca de
Barcelona publica para conmemorar el cincuentenario de
su fundación, porque siempre es una gran noticia para
Barcelona que una de sus entidades cumpla años, cuántos
más mejor.
Pero, sobre todo, lo más importante es que lo haga con
buena salud. Y creo que a la Casa de Cuenca de Barcelona,
de buena salud no le falta, porque durante todo el año
trabajáis con esfuerzo e ilusión para ofrecer múltiples actividades que no sólo mantiene cohesionada la comunidad
conquense en nuestra ciudad, sino que hace que os impliquéis en los retos de Barcelona. Buena muestra de ello son
las Jornadas Culturales que cada año organizáis en honor
a San Julián y que nos permiten conocer un poco mejor la
cultura y las tradiciones que Cuenca nos ofrece.
Y si todas estas actividades resultan exitosas es gracias
a una serie de personas que, después de sus obligaciones
laborales y familiares, todavía encuentran tiempo para dedicarse a la entidad y ponen su granito de arena para que
los proyectos se conviertan en realidades.
Además, está claro que en vuestro caso el relevo generacional ha funcionado. Entidades como la vuestra sólo
pueden llegar a su 50 aniversario si los jóvenes van relevando a los más mayores y continúan su trabajo aportando nueva energía.
Desde vuestra sede de la calle Muntanya, en el distrito de
Sant Martí, enriquecéis el tejido asociativo barcelonés y
sois punto de referencia para los conquenses que vivís en
Barcelona y su área metropolitana. No sólo eso. Os habéis
convertido también-en un puente de unión con Cuenca,
que nos ayuda a difundir el papel de Barcelona como ciudad de acogida, generosa y abierta.
Casa de Cuenca de Barcelona, ¡ ¡ ¡muchas felicidades por
estos cincuenta años de existencia! !! Os animo a seguir
enriqueciendo el panorama cultural de nuestra ciudad.
¡Feliz 50 aniversario!
9
José Manuel Martínez
Cenzano
Defensor del Pueblo de
Castilla-La Mancha
Considero una gozosa obligación comenzar estas palabras
de salutación a los socios de la Casa de Cuenca en Barcelona felicitando a la Institución en su 50 cumpleaños. Es una
felicitación sincera. Tengo con esta institución una relación
larga que siempre ha sido fecunda, y sobre todo, amable, extraordinariamente cariñosa, y en algún momento, entrañable.
Permitidme que recuerde el momento en que felicitasteis con
un canto a mi hija Paula en el día de su cumpleaños, cuando
las mujeres de mi familia y yo os visitamos en enero de 1997,
con motivo de la celebración del día de San Julián. Fue el día
en el que, con nuestro buen amigo Carlos de la Rica, me concedisteis el título de Conquense del Año. Puedo aseguraros
que me ahogaba la emoción entonces, y aún hoy, recuerdo la
gratitud que embargaba mi corazón. Hoy vuelvo a daros las
gracias por aquellos instantes mágicos.
Espero que entendáis también que rescate para la memoria a las
personas que hace medio siglo se sintieron con fuerza suficiente
como para aventurarse en la ardua labor de crear una Casa de
Cuenca en Barcelona. Si os entretenéis en leer vuestro Estatutos
comprobaréis que destilan solidaridad para con los que, alejados
de su tierra, necesitan del apoyo y la ayuda de los más fuertes
y experimentados para adaptarse a una vida nueva, a un nuevo
territorio, a un oficio diferente, a una cultura que no puede, a pesar de su enorme riqueza, sustituir a la del lugar en que se nace,
en el que se crece y al que se añora a veces con dulzura, a veces
con dolor. ¡Demasiados cambios para vivirlos solos!
Sí, convocar a la memoria es bueno. Milan Kundera ha dicho
que la memoria libera al hombre de la brutalidad. Quizás resulte excesivo para algunos, pero es indiscutible que lo previene
contra la injusticia del olvido. Sí, es bueno recordar de dónde
venimos para entender cómo somos y qué queremos ser.
En Castilla-La Mancha sabemos de dónde venimos, en qué punto nos encontramos y lo que queremos llegar a ser.
Sabemos que tenemos un pasado que muchos dibujaríamos en
blanco y negro. Fuimos un territorio deprimido, desatendido, y
en alguna medida, esquilmado, de recursos y de personas. Algunos usaron las compensaciones de las expropiaciones para
construir pantanos o trasvases para pagar los gastos derivados
de la decisión de emigrar lejos de su tierra.
Cuando en 1983 nacen las instituciones autonómicas la sangría
parecía incontenible. Muchas personas empezaron entonces a
trabajar para, tras analizar la hondura del problema (pues teníamos un gran problema que resolver), proponer una estrategia
que permitiera transformar la esperanza en éxito.
Los ejes fueron, desde el primer momento, explicados a la población con claridad y un cierto sentido de la pedagogía. Primero
debíamos aprender a ser autónomos, aprender a pensar que la
Constitución y el sistema elegido para gobernarnos habían puesto en nuestras manos una formidable herramienta que debíamos manejar con tino y discreción pero también con tenacidad
y energía. Después debíamos aprender a pensar que éramos
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autónomos y, en consecuencia, responsables de nuestro camino,
y debíamos convencernos de que éramos capaces de fijarnos
metas y alcanzarlas… juntos. Y en eso estamos.
Fuimos por tanto, las personas que vivimos aquí y las que, como
vosotros, seguís amando lo que esta tierra representa, los responsables de nuestro crecimiento, del indudable progreso que ha
contribuido a mejorar nuestra calidad de vida. Y digo esto porque, además del progreso, además de los bienes materiales, otras
cuestiones deben darse para mejorar la vida de las personas.
Por eso, más allá de las autovías o de las carreteras que se han
hecho (muchas), más allá de las escuelas, de los institutos, de
los Centros de atención a la infancia e incluso de la Universidad que funciona desde 1986 en nuestra región, más allá de la
impresionante red de Centros de salud, consultorios y hospitales
que se han construido y funcionan, más allá de la Red de teatros
y auditorios, bibliotecas, casas de cultura, escuelas de música
o conservatorios, o de la ingente infraestructura deportiva que
hoy puebla la geografía regional, más allá de muchos servicios
y recursos públicos que han ido apareciendo en nuestro territorio, se ha pretendido crear una CULTURA POLÍTICA nueva que
alumbrara un nueva manera de vernos a nosotros mismos, de
reconocernos, de relacionarnos: entre nosotros y con el resto de
los españoles y, por extensión, con los europeos y, a través de ese
sentimiento europeísta, con todos los seres humanos.
Y es que en Castilla-La Mancha pensamos que a las personas,
a los habitantes de un territorio, se nos debe reconocer por la
defensa de los valores que consideramos los sillares sobre los
que se asienta la convivencia. Y son estos valores, unidos a los
logros materiales, los que resultan imprescindibles para alcanzar
la felicidad, o, cuando menos, mejorar la vida de todos.
Esto es lo que ha cambiado en nuestra tierra con respecto de
la que dejaron Valeriano Martínez, Lorenza Jiménez y aquellos
cuarenta conquenses que en enero de 1960 se reunieron para
dar a luz a esta Casa de Cuenca en Barcelona que ahora cumple
cincuenta años.
Este alumbramiento fue posible porque ellos encontraron un
ambiente, una cultura, la catalana, que abría sus puertas a los
que llegaban con la pretensión de integrarlos y de hacerles sentir
que no iban a un territorio hostil, sino a un lugar en el que os
brindaban oportunidades para sobrevivir y aspirar a crear una
familia y una nueva vida. Hoy es un lugar en el que, como en
Castilla-La Mancha y en toda España, podemos afirmar que ha
echado raíces la exigencia recogida en el origen de los derechos
ciudadanos, y, si me lo permitís, diré que incluso en la base de
la ética cívica que nos debe convocar: una sociedad civil debe
articularse sobre la base de la igualdad, la libertad y la fraternidad. De este brote nacen todos los derechos que las personas nos
reconocemos.
En la certeza de que seguís defendiendo esos valores, os felicito,
y digo también con orgullo, que os admiro.
¡Sed felices!
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Existen lugares que el destino te tiene preparados para el
de tu vida y a mi me preparó la Casa de Cuenca en Barcelona.
Hace aproximadamente 100 años en una población de
Cuenca, la que decimos nuestro pueblo, Víllora, había dos
mujeres que vivían como vecinas y su relación llegó a ser
como hermanas, una era la Abelina, abuela de mi mujer,
y la otra la Eulogia, mi abuela. Ya tenía mi suegro 2 años
cuando vino al mundo mi padre Luciano y después nació
la hermana del suegro, Amparo. Desde entonces hubo una
ilusión de ambas, ver algún día unidos a mi padre con la
tía de mi mujer.
Pero el destino hizo que sus vidas no coincidieran y a cada
uno le dio su pareja. Las abuelas tuvieron otros hijos, la
abuela Abelina tuvo otros tres varones y mi abuela Eulogia
tuvo dos varones más, prácticamente al nacer el pequeño
mi abuela murió y mi padre con ocho años se lo llevaba a
la abuela Abelina para que lo amantara.
Gavá. Un domingo mis primos me trajeron al baile tan
popular de la Casa de Cuenca para que lo viera y recuerdo
la escena como si la viviera ahora mismo, en un rincón del
salón comedor actual, había un escenario donde tocaba la
acordeón Olegario, junto a dicho escenario me fije en una
guacheta morena, para mí la más guapa del baile, la saque
a bailar y sin saber porque mi corazón palpitaba mucho,
uno de mis primos se acerco a nosotros y le dijo a mi pareja ¡Hola prima!. Era mi mujer Victoria.
A primeros de Enero de 1971 volví a Bilbao para acabar
los tres meses de mili que me quedaban pero desde aquel
día mi cabeza solo pensaba en ella y en venir a Barcelona.
Acabé la mili el 15 de Abril y el 17 ya estaba aquí y siguió
su curso nuestra relación. El día 10 de Mayo de 1975 nos
casamos y como cualquier pareja nos fuimos de viaje de
novios. No supimos hasta nuestra vuelta de que la abuela Abelina le pidió a mi suegro que la llevara al pueblo
porque había llegado su hora, con 96 años una semana
después fallecía.
Pasaron los años, épocas muy complicadas con una guerra
por medio, que a todas las familias les hizo mucho daño,
pero todo siguió. Mis suegros como tantos otros conquenses emigraron a Barcelona y mis padres por la condición
de ser constructor mi padre recorrieron media España hasta
que definitivamente se aposentaron en Santurce (Vizcaya),
lugar donde pasé mi juventud y cursé mis estudios.
¿Todo esta historia fue casual o fue el destino?, no lo sé
pero yo estoy convencido que esta Santa Casa me presentó
a lo que yo más quiero en este mundo y por eso me he
sacrificado y me sacrifico por ella a la cual siempre estaré
muy agradecido y vigilante de que cumpla muchos años
más.
En Diciembre del 1970 vine a Barcelona con el fin de pasar las Navidades con mi hermana la mayor, que vivía en
Presidente de la Federación de Comunidades
Originarias de CASTILLA- LA MANCHA
Luciano Pérez Valdeolivas
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En la década de los 60, cuando llegué a Barcelona con
14 años, mis primeras salidas, para olvidar la añoranza y
con el ánimo de divertirme, fueron a la Casa de Cuenca en
la Baja de San Pedro. Al igual que todos los que emigramos entonces nos juntábamos, con nuestros paisanos, con
quien mejor nos entendíamos, con los que más parecido
teníamos, con los que teníamos las mismas costumbres,
como hermanos, acudíamos todos a nuestra Casa donde
había unos directivos que en cierto modo ejercían esa labor de los padres que dejamos en el pueblo.
Seguí yendo a bailar, hasta que se ubicó la Casa en el domicilio actual y allí seguí bailando y bailando hasta que
baile con José Luis, mi marido, y juntos vimos que había otras cosas tan bonitas o más que bailar, como crear
una familia y gozar de tres maravillosos hijos. Durante su
crianza hubo periodos que naturalmente no veníamos con
la misma frecuencia que de solteros pero nuestro cariño
hacia esta Casa nunca se perdió.
Cuando los hijos comienzan a crecer, buscas salidas y formas de educarlos, bajo tu mirada, sin que ellos dejen de
divertirse y se sientan a gusto como la práctica de los deportes o bien los bailes regionales. Volvimos a encontrar
un lugar de acogida para esta práctica, la Casa de Cuenca.
Yo comencé a cantar jotas con otras madres y Vicente,
dirigidos por el inolvidable y entrañable Lucas, mis hijas
junto a otras y otros hijos de socios comenzaron a bailar
las jotas manchegas y creamos un maravilloso Grupo folklórico castellano-manchego, que era la envidia de otras
casas regionales.
Pero la vida sigue y la edad no perdona, nuestras hijas
se hicieron mayores y crearon sus vidas, aunque nosotros
seguimos aquí porque ya las hemos criado y ahora nos
toca disfrutar a nosotros de las actividades que organiza
la Casa.
Narrar parte de mi vida es narrar en cierto modo la historia
de la Casa de Cuenca, tantas y tantas familias han hecho
lo mismo que nosotros que sin darnos cuenta han pasado
50 años de su fundación. El amor que le procesamos a esta
Casa es precisamente porque es parte de nuestra vida, por
eso cuando Luciano decidió dejar la Presidencia después
de 14 años y vi que la Casa podía cerrarse, recordé una
frase de Seneca que decía que: ¡No hace falta valor para
emprender ciertas cosas porque sean difíciles, sino que son
difíciles porque nos falta valor para emprenderlas!, levanté
la mano dispuesta a lo que fuera antes de ver su cierre y
con su ayuda y la Junta aquí estamos.
Si algo he aprendido como Presidenta, actual, es que no
debes hablar mal de nadie cuya carga no hayas llevado
a cuestas y solo deseo que podamos llegar a cumplir el
centenario y mis nietos estén como socios en esta Casa a
la que tanto quiero y tengo que agradecer.
Nieves Pardo Fuentes
Presidenta de la CASA DE CUENCA EN BARCELONA
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Estimados Socios y Socias:
Me han pedido que escriba algo para el Boletín conmemorativo del 50º Aniversario de nuestra Casa y, aunque
reconozco que escribir no es lo mío, no por ello voy a dejar
de hacerlo,
Lo primero y más importante, me gustaría tener un recuerdo especial y desde el cariño para todos aquellos hombres,
decididos y entusiastas de su tierra, que fueron capaces
de reunirse y conseguir poner los cimientos de lo que más
tarde sería la CASA DE CUENCA en BARCELONA, nuestra
CASA en mayúsculas, pues gracias a todos los esfuerzos y
todos los quebraderos sufridos por todas las Juntas Directivas para sacarla adelante y también gracias a todos los
socios que se han mantenido fieles a las mismas, desde el
día de su Fundación hasta el día de hoy, que ha sido posible que podamos celebrar sus primeros 50 años.
Por este motivo, debemos y podemos sentirnos orgullosos
de ser nosotros los que nos podamos reunir para celebrar el
50 Aniversario, sintiendo también la falta de todos aquellos socios y socias que ya no se encuentran entre nosotros
y esperando que dentro de 50 años haya otra Junta Directiva que el día 22 de Mayo del año 2060 dediquen sus
esfuerzos a celebrar el Centenario de esta nuestra CASA
DE CUENCA.
Un abrazo para todos los socios y socias.
Enrique Huerta Jiménez
Secretario de la CASA DE CUENCA.
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Cuenca
Única
Allá por los años 60
Se reúnen para hablar
Unos amigos conquenses
En esta bella ciudad.
En el bar de los Tarantos
Sito en la Plaza Real
La ciudad es Barcelona
Allí forman su hogar.
Llamado Casa de Cuenca
Para siempre recordar
A esos hombres y mujeres
Que jamás se olvidarán.
En la calle Parlamento
De esta bonita ciudad
Los conquenses congregados
Llenos de felicidad.
Alcarreños y manchegos
Serranos y algunos más
Los domingos por la tarde
Allí fuimos a bailar.
Fueron llegando conquenses
Cada día muchos más
Sabían que en Cataluña
Ya tenían un hogar.
Fueron pasando los años
Nos tuvimos que marchar
Los socios van en aumento
Y es pequeño ese local.
El hogar quedó pequeño
Faltaba capacidad
Para acoger conquenses
Llegados a esta ciudad.
Sita en la calle Montaña
De esta singular ciudad
Se encuentra la Casa de Cuenca
Y aquí continuará.
Sin desplazarnos del centro
De esta bonita ciudad
A la Baja de San Pedro
Nos tuvimos que marchar.
Gracias a los presidentes
Todos con su buen hacer
Y aquellas otras personas
Que en la sombra no se ven.
Andrés Ventura Escutia
Vicesecretario de la CASA DE CUENCA
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Celebramos ya cincuenta años de la fundación de la Casa
de Cuenca en Barcelona; un evento que nos orgullece y
que se ha logrado porque cada uno en su puesto ha cumplido y cumple con su cometido. El mío es actualmente el
de Vocal de Cultura, aunque siempre he estado en el entorno del Teatro. Ahora quiero rememorar mis años como
socio de la Casa de Cuenca. He pertenecido siempre a las
diferentes Juntas Directivas que se han formado, siendo
Presidentes: Pedro Muñoz Vicente, José Jiménez Cortés,
Luciano Pérez Valdeolivas y ahora Nieves Pardo Fuentes;
para todos ellos mi respeto y admiración.
Antes imperaba la juventud, nosotros éramos padres jóvenes, muchos nos hicimos novios en la Casa, tuvimos
nuestros hijos y, como eran otros tiempos, pues continuamos juntos y arropándonos, intentando no olvidar nuestras raíces.
Así, en cuanto empezaron a crecer nuestros hijos, los padres empezamos a buscar jugadores de fútbol sala, entre
nosotros mismos, pues no siempre te apetecían los juegos
de salón. Las madres canalizaron sus aficiones a los bailes
regionales y enseñaron a sus retoños, mientras ellas mismas les hacían los preciosos trajes regionales. Y luego, por
si fuera poco, unas y otros se juntaron para cantar y tocar
la rondalla, y que sus niñas no se sintieran solitas; donde
actuaban sus hijas, siempre estaban ellas.
También continuamos con el teatro; esta actividad tiene
muchos adictos y siempre que hacemos alguna representación el éxito es total, pero, claro, todo lo bueno suele ser
complicado y estresante. Debo resaltar que hicimos una
actuación en el Corral de Comedias de Almagro, con la
obra “Mala Hierba”.
¡Pero que no decaigan las ganas de continuar y de luchar.
Todo continúa casi igual! Ya que nos falta la juventud; nuestros hijos se han hecho mayores, se han casado y tienen niños; pero los tiempos no son los mismos. Afortunadamente,
ya que nuestros hijos, aparte de cantar y bailar, también supieron y pudieron estudiar, y, claro, los resultados han sido
muy diferentes. Así, que no tenemos bailes regionales; pero sí
tenemos bailes de salón para nuestros mayores.
Así como también un simpatiquísimo y buenísimo Grupo
de Habaneras, que hacen las delicias donde actúan y dejan
a la Casa de Cuenca en un lugar muy alto.
También tenemos una magnífica Masa Coral Castellano
Manchega, que nos deleitan y nos hacen olvidar todo lo
malo que ocurre en esta vida.
Gracias, muchas gracias, antes, ahora y siempre.
Ramón Quintana Habas
Vocal de Cultura
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Cincuenta
Aniversario
Cincuenta años de historia, si se contara con detalle se
podría llenar todo un libro que sería muy interesante porque serviría para recordar y reconocer lo mucho que costó
arrancar aquella andadura que empezó aquel 22 de mayo
de 1960.
El destino ha querido que seamos nosotros los que gocemos de la celebración del Cincuenta Aniversario. Son
muchos de aquellos que inauguraron nuestra CASA DE
CUENCA con esfuerzo, con tesón, con ilusión, que ahora
no están con nosotros; seríamos muy desagradecidos si no
los recordáramos; vaya para ellos nuestro mayor respeto,
un sincero recuerdo y agradecimiento por su gran labor a
favor de Cuenca.
Citaré a los Presidentes que nos dejaron: Pedro Antón Martínez, Julián Molina Bachiller, Lorenzo Montesinos Montesinos y José Jiménez Cortés. A Dios damos gracias por
tener entre nosotros a los que les siguieron: José Almonacid de la Pedrueza, Benito Mañas Belinchón, Pedro Muñoz
Vicente, Luciano Pérez Valdeolivas y actualmente tenemos
a nuestra querida Presidenta, Nieves Pardo Fuentes.
He creído oportuno citar a los presidentes de la CASA DE
CUENCA, pero yo, como Director del Boletín Informativo
de la Casa, hoy siento en mi corazón la necesidad de recordar con cariño a mi antecesor: José Jiménez Cortés, que
también fue presidente, fue un incansable trabajador por el
Boletín; recuerdo cuando me dijo que continuara y lo hice,
pero hoy me hago cruces de pensar como lo hacía él y
como lo hago yo, la informática me ha permitido preparar
un artículo y si hay algo que quiero variar, borro lo que
no me gusta y escribo lo que quiero que salga, además el
ordenador me avisa cuando hago un gazapo mecanográfico. Por lo tanto, hoy tengo que recordar a PEPITO con
profundo respeto, admiración y cariño.
Seamos conscientes de lo que ahora tenemos, sepamos valorarlo y trabajemos con ahínco para conservarlo. Cuando
se celebre el Centenario muchos de nosotros no lo podremos ver, ¡pero que se celebre!; la CASA DE CUENCA ha de
seguir adelante.
Carlos Hernáiz Fernández
Director del Boletín
17
Casa de
Cuenca
La
Fundada
en 1960
En enero de 1960, y en la salita de un bar de la típica y
barcelonesa Plaza Real, nos reunimos unos cuantos conquenses, de los que siempre recordamos y añoramos la
tierra amada; de esos conquenses que todavía existimos
diseminados por la faz de la tierra.
Aquella fría mañana dominical, con los cuerpos ateridos
y el alma inflamada de entusiasmo, de ilusiones y de patriótico ardor, abrimos los cimientos de lo que, pocos días
después, habría de constituir la realización de nuestros
viejísimos anhelos: un “Hogar Conquense” en esta populosa, industrial y acogedora ciudad de Barcelona; un “Hogar” donde pudiésemos conocernos los que, por diversos
imperativos, tuvimos que alejarnos de la tierra de don Gil
de Albornoz, don Álvaro de Luna, Fray Luis de León y tantos y tantos hombres excepcionales; una “Hogar” nuestro,
auténticamente nuestro, donde poder repasar, en fraternal
comunidad, el ingente rosario de nuestras pasadas glorias
y de nuestros más deleitosos recuerdos; donde poder
contemplar, a través de prismas imaginativos, los incomparables panoramas de nuestra bravísima Serranía,
los idílicos parajes de nuestra Alcarria, y las extensas
planicies manchegas, punteadas de pueblecitos de inmaculada blancura.
En aquella reunión, se me dio el encargo de redactar los
Estatutos y Reglamento General de la CASA DE CUENCA,
encargo que cumplimenté, sin pérdida de tiempo, para presentarlos a la primera Asamblea, celebrada en la Casa de
Almería, gentilmente cedida para tal menester; Asamblea
en la que quedaron aprobados, tras pequeñas modificaciones.
En la mañana del domingo 22 de mayo del mismo año
y en un saloncito de la calle Parlamento, llegó a la vida,
oficialmente, la CASA DE CUENCA, Ese día y en medio de
un entusiasmo indescriptible, no exento de emoción, se dio
cuenta a los conquenses allí congregados, del estado legal
de la CASA, se designó su Junta Directiva, se escucharon
parlamentos encendidos de amor por la tierra y, por la tarde, se celebró un festival artístico, se bailó y se brindó por
una vida larga, próspera y fructífera para la recién nacida
CASA DE CUENCA.
Fueron llegando, rápidamente, conquenses, a este hogar de
nuestra tierra, primero establecido, en el correr de los años,
en la Capital de Cataluña.
La empresa precisaba financiarse. Se estudió la forma de
arbitrar algún dinero, al menos el preciso para los primeros y necesarios gastos. Cometimos la gran torpeza de
solicitar, inútilmente, colaboraciones económicas. Se hizo
preciso sacrificar nuestros bolsillos y, entre unos pocos
fundadores, logramos reunir la cantidad suficiente para la
iniciación de las diversas actividades programadas.
El local que, provisionalmente, tomamos en la calle Parlamento, se nos quedó enseguida pequeñísimo. Fue preciso
lanzarse a la búsqueda, sin pérdida de tiempo, de
unos locales más amplios, ubicados, a ser posible, en el
casco céntrico de la ciudad.
En la noche del 28 de junio del mismo año 60, inauguró
la CASA DE CUENCA su nueva sede social, sita en la calle
Baja de San Pedro, con una animadísima verbena, en el
transcurso de la cual, y llevados de un entusiasmo insuperable, se vitoreó repetidamente a Cuenca, y se hicieron
para nuestra Casa los más halagadores pronósticos.
La entidad, casi recién nacida, llevada de su gran ilusión,
inició la realización de sus preconcebidas actividades: biblioteca, clases diversas, representaciones teatrales, festivales artístico-musicales, visitas a los enfermos conquenses, ayudas económicas a los paisanos necesitados, trabajo
para los que lo precisaban y, más tarde, la publicación del
Boletín Mensual Informativo, distribuido gratuitamente
entre los asociados y la mayor parte de los pueblos conquenses. Boletín que, a pesar de su modestia, ha sido considerado como una de las mejores publicaciones –literaria
y tipográficamente- de las casas y centros regionales y
provinciales establecidos en esta Ciudad Condal. Suspendimos su publicación en el año 67, por surgir dificultades.
18
Toda esta labor, venimos realizándola, sin desmayo alguno, desde la fundación de la Casa, doliéndonos, más que
ninguna otra, la carencia de asistencias morales, tan fáciles de prodigar.
De todas formas, con estas asistencias o sin ellas, hemos
proseguido nuestra marcha por la ruta emprendida. Esperemos que, un día u otro, se reconozca nuestra abnegada
labor en pro de Cuenca y de sus modestas gentes, desplazadas para buscar, en Cataluña, el bienestar que nunca
pudieron hallar en su tierra de origen.
El 29 de octubre de 1967 tuvo lugar la inauguración
solemne del actual edificio donde quedó instalada la
CASA DE CUENCA. ¿Cómo surgió el milagro de esta importantísima mejora?
Hacía algún tiempo, cuando el local de la Baja de San Pedro nos resultó insuficiente, veníamos haciendo gestiones
encaminadas a la consecución de un nuevo local de mayor
amplitud. Miramos el palacio de los marqueses de Bacardí,
situado en plena Rambla, pero las disponibilidades económicas no estaban parejas a nuestros propósitos.
Poco tiempo después se presentó la oportunidad de adquirir el edificio donde la Casa está ubicada actualmente.
La Junta Directiva tomó el acuerdo de que, el presidente, acompañado por varios directivos, realizara un viaje a
Cuenca, para exponer el caso ante las primeras autoridades provinciales y ver la manera de encontrar la adecuada
solución al problema planteado a la Casa por su carencia
de espacio.
Tanto el señor obispo, como el gobernador civil, el presidente de la Diputación y el alcalde de Cuenca no vacilaron,
ni un momento, en ayudarnos, concretando esta ayuda en
que la Caja Provincial de Ahorros, comprase la casa números 62 y 64 de la calle Montaña, para que, en su día,
pudiera transformarse en la sede social amplia, confortable
y acogedora, que tan necesaria nos era. Con esta promesa,
se formalizó un documento de compromiso de compra con
el propietario del inmueble, don Amadeo Huguet, al que se
le hizo una entrega de cien mil pesetas, y se le concedió el
plazo de un año para la entrega del edificio.
Asistieron al acto, que resultó solemne y emotivo, los señores siguientes: Monseñor Calvo Pina, representando al
obispo de la diócesis; don Rafael Mombiedro de la Torre,
presidente de la Diputación; don Andrés Moya López, alcalde Cuenca; don Juan Ignacio Bermejo y Gironés, secretario general del Ayuntamiento de Barcelona; y señora;
concejal de dicho Ayuntamiento, señor Sauqué; presidente
de la Federación Nacional de Casas Regionales, don Hermenegildo Moreno Serna; don Enrique Benítez González,
don Atanasio del Olmo y señora; señores Torrero Rodríguez y Martínez Ortiz; don Ángel Ríos Suárez, director des
DIARIO DE CUENCA; los socios de honor, señores Soriano,
Talavera, Gallo y Muñoz; toda la Junta Directiva, y una
gran cantidad de asociados. El señor gobernador no pudo
asistir por encontrarse en Madrid.
Primeramente, monseñor Calvo Pina procedió a la bendición de los locales.
A continuación, se sirvió un vino de honor a todos los
asistentes.
Acto seguido, se procedió a la inauguración oficial de la
“nueva sede”. Los discursos de rigor estuvieron a cargo
de los señores Calvo Pina, Antón Martínez (presidente
de la Casa), Sauqué Gallardo, Moya López, Moreno Serna y Mombiedro de la Torre.
Finalizando el acto, se ofreció una comida de hermandad, en la que se sirvieron unos ciento cincuenta cubiertos.
El nuevo edificio de la Casa de Cuenca en Barcelona
consta de sótanos destinados a cocina, roperos y servicios; planta baja, donde se encuentra el amplio salón
de fiestas, con su correspondiente “hall”; piso primero,
salón de tertulias, juegos, escenario y bar; segundo piso,
Secretaría, Presidencia, Comisiones, Capilla, Biblioteca
y Sala de Juntas; y en el ático, salas de clases (Corte y
confección, Cultura General y Música).
El 27 de junio de 1966 se firmó la escritura de compraventa del inmueble por la Caja de Ahorros de Cuenca, y el
primero de enero de 1967 dieron comienzo los trabajos de
adaptación, obras que duraron nueve meses y que resultaron más costosas que el propio inmueble adquirido.
Diecinueve años lleva la CASA DE CUENCA viviendo
en nuestros locales. Durante ese tiempo, se han realizado en ellos importantísimas mejoras. Se ha construido, en el piso segundo, una amplia terraza, para que,
en ella, puedan moverse los niños con entera libertad;
se ha levantado, en el piso primero, un escenario, y se
han decorado, con sobria elegancia, la sala de juegos y
tertulias, que es, a la vez, salón-teatro, el despacho del
presidente y la Sala de Juntas y Biblioteca.
Como queda dicho, el 29 de octubre del 67 tuvo lugar la
inauguración oficial de nuestra sede social.
Estas mejoras han supuesto un importante desembolso;
pero eran muy necesarias.
19
Después de celebrar la 1ª ASAMBLEA GENERAL
La Junta Directiva quedó formada por los siguientes señores:
Presidente:D.
Vicepresidente:D.
Secretario: D.
Vicesecretario:D.
Tesorero:D.
Contador:D.
Bibliotecario:D.
Vocales:D.
D.
D.
D.
D.
D.
Pedro Antón Martínez
Ladislao Parrilla Atienza
Valeriano Martínez Pérez
José Antón Freixes
Pedro Zamora García
Antonio Seguí Martínez
Francisco Domingo Muelas
Jesús García
Leandro Montesinos
Valentín de la Ossa
Pedro Peñaranda
Teófilo Crespo
Vicente Alcorisa
Barcelona, 22 de mayo de 1966
Durante los veintisiete años de edad que la CASA cuenta,
se han celebrado bastantes actos culturales: representaciones teatrales, conferencias, recitales poéticos, conciertos,
una exposición de fotografías y, un concurso de sonetos
dedicados a Cuenca. Desde el año 61, se han impartido clases de Corte y Confección, Cultura General, Solfeo, Piano,
Guitarra, Bandurria, Laúd y Acordeón: Hemos conseguido
la formación de una “Rondalla Juvenil” mixta, un excelente “Grupo Escénico” y un equipo de fútbol; hemos visitado,
todos los años, por Navidad, a los enfermos conquenses,
socios de la CASA o no, internados en los hospitales de la
Santa Cruz y San Pablo, Clínico e infecciosos, llevándoles
nuestro afecto, un poco de música y un pequeño aguinaldo; hemos facilitado, muchas veces, trabajo a cuantos han
venido, desde sus pueblos, en busca de él; hemos socorrido,
económicamente, a los necesitados conquenses que hasta
nosotros llegaron en demanda de un auxilio; hemos sufragado, distintas veces, intervenciones quirúrgicas, efectuadas a un nuestros paisanos, una de ellas, por excepción,
para nosotros muy costosa y hemos ayudado a cuantos
conquenses quedaron sin hogar o perdieron sus enseres,
cuando se produjeron las terribles inundaciones de las tierras catalanas del Vallés Occidental, en el año 62.
En enero del año 1972, e inmediatamente después de terminar la sesión de la Asamblea General Ordinaria, se celebró una sesión necrológica, en memoria de don Pedro
Antón Martínez, con motivo del primer aniversario de su
fallecimiento.
El señor Antón Martínez fue presidente de nuestra CASA
durante trece años. En esta emotiva sesión, tras leer unas
cuartillas originales del autor de este reportaje, y unas
palabras de don Julián Molina Bachiller, nuestro enton-
ces presidente, y de don Juan Ignacio Bermejo y Gironés.
Presidente de Honor de esta CASA, se procedió al descubrimiento de una placa para perpetuar la memoria del extinto.
La CASA DE CUENCA ha hecho siempre cuanto sus posibilidades permitieron por atender todas aquellas necesidades de los conquenses, de las que tuvimos noticias. Nunca
tuvimos en cuenta si estos conquenses eran o no afiliados a nuestro Hogar; lo que hicimos por ellos fue hecho
solamente por creernos en el deber de darnos, en cuerpo
y alma, a cuantos, como nosotros, tuvieron la suerte –la
gran suerte- de nacer en nuestra maravillosa tierra, y lo
hicimos también, cómo no, por el entrañable amor que por
ella sentimos.
La CASA DE CUENCA se siente satisfechísima con esta
conducta que viene observando, y que observará, sin desmayo, en toda su futura existencia.
Diecisiete años de trabajos incesantes, de sinsabores y
sacrificios, ofrendados a esta embajadora, en tierras catalanas, de aquel trozo tan entrañable de Castilla; tierra
henchida de valores espirituales, históricos, intelectuales,
artísticos y naturales.
En octubre de 1974, la CASA DE CUENCA recibió la visita de un grupo de personalidades conquenses, con motivo de la celebración en Barcelona, de la SEMANA DE
LA MANCHA. Tuvimos el placer de ver personados en
nuestro local social, a los señores siguientes: don Moisés
Arrimadas Esteban, Gobernador Civil de la provincia;
don Alfonso Muñoz Durán, Presidente de nuestra Diputación Provincial; don Juan Alonso-Villalobos Merino,
Alcalde de Cuenca; don Buenaventura Juárez Sánchez,
Delegado de Información y Turismo; don Constantino
Palomino de Lucas, entonces Subjefe Provincial del Movimiento y hoy Presidente de la Diputación; don Miguel
Mª de la Hoz Díaz. Director del DIARIO DE CUENCA,
acompañado de algunos redactores, y oros personajes
más, que sentimos no recordar.
Se celebró un acto muy simpático, en el que se habló de
Cuenca, de nuestra CASA, de futuras realizaciones y de
posibles “necesarias ayudas”, que todavía no llegaron a
cristalizar en realidades.
Esta es la pequeña historia de la CASA DE CUENCA.
Hemos alcanzado, felizmente, las metas principales de
cuantas nos habíamos propuesto. No podemos, ni debemos
hablar de triunfalismos personales, puesto que nunca los
hubo.
El éxito alcanzado se debe a todos y cada uno de los
20
miembros de las Juntas Directivas que han conducido la
CASA, desde el año 60, de cuya primera soy el único que
continúa al frente del cargo que entonces se le asignó.
Durante los diecisiete años que cuenta la CASA de existencia, hemos tenido de todo: primeros meses, verdaderamente
heroicos, desasistidos por todos, sin ayudas ajenas; una adolescencia sin grandes preocupaciones, con apuros y ciertos
deshaogos, en la que nos fue posible la realización de algunos
actos culturales, recreativos y benéficos; y, por fin, una madurez prometedora, libre de ataduras económicas; madurez
que hará posible el despliegue total de cuantas actividades la
CASA programó ya en sus primeros tiempos.
Expeditos tenemos lo caminos; abiertas y fáciles las nuevas singladuras; y las antiguas metas, todavía no alcanzadas, a punto de conseguirse.
Gracias al crédito concedido por la Caja Provincial de
Ahorros de Cuenca, somos actualmente dueños absolutos
del local social que venimos ocupando desde el año 67.
Poseemos un magnífico patrimonio que hemos de ir legando a las generaciones futuras. Tenemos el deber –sacratísimo deber- de conservarlo y de engrandecerlo; y de este deber debemos ser conscientes todos cuantos nos cobijamos
en este amplio y confortable Hogar conquense, para hablar de la tierra en que nacimos; para pasar la película de
nuestros recuerdos; para aliviar nuestras nostalgias y para
programar actividades que puedan redundar en beneficio
de esta entrañable CASA DE CUENCA, que tantos trabajos,
desvelos y sacrificios ha precisado de todos nosotros.
Lo que mañana pueda ser esta CASA DE CUENCA dependerá de nosotros únicamente, razón por la cual deberemos
todos unirnos más apretada y fraternalmente en su alrededor, para darle todo el calor, todo el cariño que precisa,
como los buenos hijos se reagrupan en el regazo de la madre cariñosa, que los colma de caricias y de bendiciones.
Valeriano Martínez Pérez
(publicado en un Boletín de 1977).
Casa de Cuenca
BARCELONA
1 9 6 0 - 2 0 1 0
PRESIDENTES DE LA CASA DE CUENCA EN BARCELONA
D. Pedro Antón Martínez, de 1960 a 1972
D. Julián Molina Bachiller, de 1972 a 1977
D. José Almonacid de la Pedrueza, de 1977 a 1983
D. Lorenzo Montesinos Montesinos, de 1983 a 1985
D. Benito Mañas Belinchón, de 1985 a 1988
D. Pedro Muñoz Vicente, de 1988 a 1993
D. José Jiménez Cortés, de 1993 a 1994
D. Luciano Pérez Valdeolivas, de 1994 a 2008(*)
Dña. Nieves Pardo Fuentes, de 2008 en ejercicio
(*) actualmente Presidente de la Federación de Comunidades Originarias de Castilla La Mancha en Cataluña
JUNTA DIRECTIVA ACTUAL DE LA
CASA DE CUENCA EN BARCELONA
Presidenta: Dª Nieves Pardo Fuentes
Vicepresidente: D. Rafael Descalzo Carmona
Secretario: D. Enrique Huerta Jiménez
Vicesecretario: D. Andrés Ventura Escutia
Tesorero Contador: D. Luciano Pérez Valdeolivas
Relaciones Institucionales: D. Luciano Pérez Valdeolivas
Director del Boletín y Bibliotecario: D. Carlos Hernáiz Fernández
Cultura, Teatro y Espectáculos: D. Ramón Quintana Habas
Excursiones: D. Armando Castro Aranda
Juventud y Deportes: D. Rafael Descalzo Carmona
Masa Coral: D. Ramón Quintana Habas
Mujeres y Servicios Sociales: Dª Cándida Rubio Portillo, y
Dª Mari Luz González Martínez
Corte y Confección: Dª Cándida Rubio Portillo
Juegos y Espectáculos: D. Juan de Dios Sáiz Rodríguez
21
LA REAL ACADEMIA CONQUENSE
DE ARTES Y LETRAS: UNA INSTITUCIÓN AL SERVICIO DE LA CULTURA
DE CUENCA
Gestada en 1969 y nacida como
asociación en 1978, alcanzó su
condición de real academia en
1986, por lo que el año que
viene cumplirá su primer cuarto de siglo como tal
Aunque la Real Academia Conquense de Artes y Letras
viniera oficialmente a nacer como Corporación Académica
de Derecho Público con sello de Real el 26 de mayo de
1986 con la promulgación del Decreto de su creación – el
año que viene cumplirá por tanto su cuarto de siglo como
tal – había tenido, como cualquier proyecto humano, una
historia anterior que remonta su origen bastantes fechas
atrás, concretamente a mediados de diciembre de 1969 y
no precisamente, cual hubiera sido dado esperar, ni en la
ciudad de Cuenca ni en ninguna de las demás localidades
de la provincia, sino, cosas de la vida, en Madrid.
Rafael Alfaro, un homenaje y
el germen de un proyecto
Cumplía, en efecto, su mitad el último mes de ese año
cuando un buen puñado de los escritores y artistas más
representativos del hacer cultural conquense se dieron
cita, junto con colegas de otras procedencias, en la Casa
de Castilla La Mancha en la capital del Estado para homenajear a su compañero y paisano el poeta Rafael Alfaro que, al Premio Nacional de Poesía de El Salvador, que
se había traído en la maleta al regreso de su estancia en
Centroamérica, acababa de unir el prestigioso galardón del
Boscán. El acto iba a contar con la intervención directa de
Federico Muelas, Acacia Uceta, Carlos de la Rica, Florencio
Martínez Ruiz, Diago Jesús Jiménez, Félix Manual Martínez Fronce, José Rius, Eduardo Ruiz y Enrique Domínguez Millán, pero, como éste último ha recordado en sus
“Notas para una historia de la Real Academia Conquense
de Artes y Letras” (Académica nº 2, septiembre-diciembre
2006, Cuenca) al acto habían acudido también muchos
otros creadores conquenses. Y allí iba a ser donde, durante la tertulia entablada tras el acto, iba a saltar el primer
por José Ángel García
Director de la RACAL
chispazo generador al hilo de un cierto auto-reto reivindicativo: si otras provincias tenían sus Academias, ¿por qué
no, también, Cuenca? Y como las cosas no conviene que
se enfríen, allí mismo se dio el primer paso para pasar de
la idea al hecho con la constitución de la comisión que
habría de encargarse de hacer realidad tal tránsito.
Diez años después
Lo que el sin duda ilusionado entusiasmo de los enfervorizados conjurados no les hacía prever en ese momento es lo
largo que iba a ser el camino: no sería sino casi diez años
después cuando su deseo empezara a tomar cuerpo. Casi
diez años durante los cuales, eso sí, se fue definiendo formalmente el proyecto: tras el primer, y no corto, periodo
de la realización de una encuesta que arrojó un resultado
favorable al seguir adelante con la idea, vino el de fijar su
carácter y alcance - ¿cómo?, ¿quiénes? ¿de qué áreas? – en
un proceso que terminó decantándose por la formación de
una corporación que integrara a representantes tanto del
campo de las Letras como de las distintas disciplinas artísticas que o bien fueran conquenses de nacimiento o bien
estuvieran ligados al acontecer cultural de la provincia por
residencia o por la atención prestada en su obra a ella o a
sus temas. Cumplido así el bosquejo del objetivo quedaba
aún el iniciar el obligado camino burocrático-administrativo que condujese a su plasmación legal, para lo que
se optó por ir a la creación de una asociación cultural
que posteriormente se intentaría que fuera reconocida
como Real Academia. Fue el momento de nombrar una
nueva comisión, la correspondiente comisión gestora,
que redactara los pertinentes estatutos y los presentara
en el Gobierno Civil junto a la también obligada solicitud de inscripción en el Registro Provincial de Asociaciones.
22
1978: nace la Asociación
Entre Cuenca y Madrid, reunión a reunión - en el conquense café Colón o en la madrileña cafetería del Teatro
María Guerrero en una primera fase, luego, ya siempre en
Cuenca, en el Hotel Torremangana y después en la Casa
de Cultura - el proyecto fue tomando forma y por fin, a
finales de 1977, quedó concluida la tarea con el remate
de la normativa y con la constitución de una ya oficial
comisión gestora encargada de presentarla, integrada por
Enrique Domínguez Millán como presidente y por Carlos
de la Rica y Fidel Cardete como vocales. Tras el posterior
refrendo de una asamblea celebrada en Madrid en febrero
de 1978, vendría ya, el 29 del siguiente junio, la entrega
de la documentación y la inscripción en el registro. La
Academia alcanzaba así su fe oficial de vida y, no muchos
días después, el 16 de julio, llevaba a cabo la que por tanto
podía considerarse ya su primera asamblea como tal. Tuvo
lugar en el domicilio de Domínguez Millán en la calle de
San Pedro y contó con la asistencia de prácticamente todos
cuantos se habían mostrado interesados en participar en
ella, aunque el paso del tiempo hubiera ido dejando por
el camino bajas como las de Federico Muelas o Leonardo
Martínez Bueno que, en la siguiente reunión de la Junta
Directiva que, encabezada cual la previa comisión gestora
por Domínguez Millán, fueron nombrados académicos de
honor a título póstumo. En esa primera asamblea se eligieron también los primeros numerarios de la institución.
Al trabajo desde el primer día
La recién nacida Academia se lanzó de inmediato al tajo.
Ya antes incluso de su sesión pública de constitución seis
meses después – el 10 de febrero de 1979 en el Salón de
Plenos de la Diputación provincial – se había dejado sentir
en el acontecer cultural conquense con la organización, en
el anterior agosto y en colaboración con la Caja provincial
de Ahorros, de la primera exposición que se hacía en España de la obra de Francisco Bores, recién adquirida por el
Museo Español de Arte Contemporáneo. Era el comienzo
de una serie de actividades – buena parte de ellas acogidas
a la denominación común de “Tardes de la Academia” que, pese a las claras limitaciones económicas de la asociación iba a mantenerse ya, con mayor o menor presencia
según las épocas pero sin interrupción, junto a la también
mantenida actitud de colaboración con las distintas administraciones o con otras instituciones en celebraciones,
conmemoraciones o actividades literarias o artísticas cuya
enumeración excedería de la lógica extensión del presente
recordatorio. Lo que no debe sin embargo quedar fuera del
apunte es que esa labor no quedó circunscrita al ámbito
exclusivo de la capital sino que se extendió a bastantes
otros puntos de la provincia. Y así fueron transcurriendo
los primeros años de la década de los ochenta hasta el relevo - en 1984, cumplido su periodo como presidente - de
Domínguez Millán, por Carlos de la Rica.
De Asociación a Real Academia
La consecución del objetivo inicial estaba cada vez más
cerca: en agosto del año siguiente, 1985, se acordaba aceptar la sugerencia del Instituto de España y nombrar una
nueva comisión pero, ahora ya sí, para tramitar para la
asociación el título de Real Academia: la integraron Carlos de la Rica, Dimas Pérez Ramírez, Enrique Domínguez
Millán, Raúl Torres y Gustavo Torner. Que su labor fue
eficaz lo demuestra el que menos de un año después, el
26 de mayo de 1986, a propuesta del titular de Educación
y Ciencia José María Maravall y previa deliberación del
Consejo de Ministros en reunión del día 23, el monarca
firmase el correspondiente Decreto que apareció publicado
en el Boletín Oficial del Estado el 31. La primera reunión
formal de la ya Real Academia se celebraba el siguiente 13
de noviembre para recibir oficialmente la noticia de esa
publicación y la ya por tanto Corporación Académica de
Derecho Público desarrollaba su primer acto oficial el 29
de ese mismo mes en la Diputación provincial con asistencia del ministro de Relaciones con las Cortes Virgilio Zapatero, del entonces Consejero de Cultura y hoy Presidente de
la Junta de Comunidades José María Barreda y del propio
presidente de la institución que acogía el acto, Pedro Saugar Muñoz. En nombre de todos los académicos pronunció
el primer discurso como miembro de la nueva entidad el
antes presidente de la asociación y a partir de ese momento director de la misma, Carlos de la Rica. Al año siguiente
la RACAL era recibida en audiencia por el Rey y, posteriormente, por el presidente de la Junta, José Bono.
De entonces a acá
Carlos de la Rica permanecería al frente de la Real Academia hasta su fallecimiento en septiembre de 1997. Le
sucedería en el cargo el pintor Nicolás Mateo Sahuquillo
durante cuyo mandato, en concreto en septiembre de 2000,
y como último paso ya en la plena integración de la corporación en el marco legal, el Instituto de España acordaba
aceptarla en su seno, ratificando así la entidad del cuerpo
académico conquense. A Nicolás Mateo Sauquillo le relevaría al frente de la corporación, en 2003, otro artista plástico, Víctor de la Vega; bajo su dirección la RACAL redactó
y aprobó, en enero de 2005, su Reglamento de Régimen
Interior, tras lo cual esa directiva consideró conveniente su
renovación. Tras las nuevas elecciones quedó a la cabeza
de la corporación el historiador del Arte Pedro Miguel Ibáñez que cumplió integro su periodo en la dirección hasta
el pasado febrero, en que fue sustituido en el cargo por el
firmante de este artículo. En la labor de la Mesa Directiva
presidida por Pedro Miguel Ibáñez, entre otros logros, hay
que destacar el acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento
conquense para que la Real Academia pueda disponer por
fin de una sede física propia, estable y adecuada en la
restaurada y para ello específicamente acondicionada segunda planta del edificio de las antiguas escuelas de San
23
Antón, contiguo a la Iglesia de la Virgen de la Luz, lo que
permitirá a la institución acrecentar de manera sensiblemente más eficaz su presencia en la vida cultural conquense. La firma definitiva del correspondiente convenio junto con el mantenimiento e incluso incremento de
su programa de actividades merced a las posibilidades
de funcionamiento que ello va a posibilitarle, son las
primeras tareas que, quienes prácticamente acabamos de
acceder a su dirección, deberemos acometer para continuar dignamente los esfuerzos de nuestros antecesores.
Para ello estamos dispuestos a poner en el asador toda
la carne de nuestro entusiasmo y nuestra dedicación en
una labor que ojalá se vea acompañada del acierto, y,
por supuesto, abiertos a cualquier propuesta, iniciativa
o colaboración que podamos recibir, convencidos de que
el intercambio ya establecido entre nuestra corporación
y la ciudad y la provincia, intensificado aún más si de
ello somos capaces, es el mejor camino para cumplir
nuestros fines fundacionales que no son otros que, tal
y como textualmente indican nuestros estatutos, los de
“ilustrar y exaltar los valores artísticos, históricos, literarios y musicales en todos sus campos y variedades de
la ciudad de Cuenca y su provincia” promoviendo “la
investigación y el estímulo para el mejor conocimiento,
divulgación y salvaguarda de esos irrenunciables valores”. Y al subrayar esa necesidad de colaboración e
intercambio tenemos también muy presentes esas otras
Cuencas que conforman nuestros paisanos asentados en
otras geografías y tan bien representados por fortuna en
muchas de ellas por instituciones como vuestra Casa. Y
así, esperamos y deseamos que esta presencia nuestra de
hoy en vuestro Boletín sea el comienzo de un continuado toma y daca que a todos – y desde luego a Cuenca
- habrá, sin duda, de favorecernos.
In Memoriam
La Presidenta de la Casa de Cuenca, Nieves Pardo Fuentes,
y la Junta Directiva manifiestan
un cariñoso recuerdo para todos los socios y socias
de la Casa de Cuenca fallecidos desde la fundación
de la Casa y que fueron el soporte de su continuidad.
24
Alfonso
Sáiz-López
Un conquense internacional
Alfonso Saiz-López ha recibido el premio internacional
Henry Houghton 2010 de la Sociedad Americana de Meteorología (AMS). En una ceremonia celebrada el pasado 20 de Enero en Atlanta, Estados Unidos, el científico
manchego recibió este prestigioso premio que cada año se
entrega a un científico menor de 40 años por logros excepcionales en investigación en todos los campos de las ciencias de la atmosfera. La AMS ha reconocido las contribuciones del Dr. Saiz-López para elucidar el papel que juegan
las emisiones de moléculas biogénicas desde los océanos
a la atmosfera en la destrucción de Ozono atmosférico y
la formación de aerosoles, así como su impacto climático.
Alfonso Saiz-López es el primer español que recibe este
reconocimiento.
Biografía
Alfonso Saiz-López, nacido en 1976, es natural de la localidad conquense de Quintanar del Rey. En 1999 se licencia en Ciencias Químicas por la Universidad de CastillaLa Mancha y posteriormente en 2005 obtiene el titulo de
Doctor en Ciencias de la Atmósfera por la Universidad de
East Anglia en Norwich (Inglaterra), a lo que sigue una
estancia post-doctoral en la Universidad de Leeds (Inglaterra). Desde el año 2006 hasta el 2009 es científico en el
Laboratorio de Propulsion a Chorro (Jet Propulsion Laboratory) de NASA en California así como científico asociado
del Centro de Astrofísica de la Universidad de Harvard en
Estados Unidos.
Su investigación se centra en el uso de satélites y modelos numéricos para el estudio de la atmósfera y el clima
de la Tierra. Ha participado en expediciones científicas
internacionales en diferentes lugares de nuestro planeta
incluyendo la Antártida, Ártico y las regiones Tropicales,
así mismo, ha sido participe de un vuelo-misión de NASA
(Leonids´02) en 2002.
Junto con el mencionado premio de la American Meteorological Society, su trayectoria científica ha sido también
recientemente reconocida con el premio Joven Científico
2007 James R. Holton de la American Geophysical Union
de Estados Unidos y el premio Joven Científico Europeo
25
2008 de la European Geosciences Union que se otorgan a la
trayectoria profesional de un científico menor de 40 años
de edad. El Dr. Saiz-López es el primer científico que consigue obtener estos tres premios internacionales que pasan
por ser los mas prestigiosos para jóvenes investigadores en
el campo de las Ciencias de la Tierra y el Espacio.
En la actualidad el Dr. Saiz-López dirige el Laboratorio de
Ciencias de la Atmósfera y el Clima (CIAC) con sede en
Toledo, una iniciativa conjunta del Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC) y la Fundación General
de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha. Asimismo, es
científico asociado del Centro Nacional de Investigación
Atmosférica de Estados Unidos (NCAR).
Laboratorio de Ciencias de la Atmósfera y el
Clima (CIAC)
El Laboratorio de Ciencias de la Atmósfera y el Clima centra sus actividades en el estudio de las interacciones entre
las emisiones de compuestos de relevancia atmosférica, la
composición química de la atmósfera y el clima terrestre. El conocimiento de estas interacciones es crucial para
entender las actuales perturbaciones en la atmósfera y el
clima, predecir los posibles impactos socio-económicos y
diseñar medidas óptimas de respuesta a los cambios.
Dentro de las actividades a realizar por el grupo de investigación del CIAC en el curso 2010 se encuentran las
siguientes líneas maestras de investigación:
Teledetección de gases traza en la atmósfera:
Instrumentación de medida desde tierra
Desarrollo de un instrumento de conversión química y
fluorescencia resonante (CCRF) para la medida de radicales
químicos en la atmosfera.
Desarrollo de un instrumento de espectroscopia de absorción óptica diferencial
(DOAS) para la medida de radicales y contaminantes .químicos atmosféricos.
Dirección de campaña internacional de
medida atmosférica en Islas Galápagos
(Climate and HAlogen Reactivity tropicaL
EXperiment (CHARLEX) donde se utilizaran los instrumentos CCRF y DOAS.
Medidas de gases traza desde satélites
Desarrollo de algoritmos numéricos para medida de gases
traza (e.j. dióxido de nitrógeno (NO2), ozone (O3), oxido
de bromo (BrO)) desde el instrumento GOME-2 a bordo del
satélite europeo ERS-2.
Desarrollo del proyecto Ultraviolet Visible and near-infrared Atmospheric Sounder (UVAS) en fase final de evaluación para su incorporación con carga científica principal
en el Satélite Español de Observación de la Tierra (SEOSAT/Ingenio)
2. Modelado químico-climático:
Desarrollo de modelos numéricos en caja y una dimensión
Modelado e interpretación físicoquímica de los resultados de la
campaña CHARLEX
Modelo de química y transporte
en la atmosfera a escala regional
y global para el estudio de las interacciones entre la polución en
megaciudades y el clima
Modelos globales para estudiar
las interacciones atmosfera-océanos-criosfera-litosfera-biosfera.
El Laboratorio de Ciencias de la Atmósfera y el Clima
(CIAC), una iniciativa conjunta entre el Consejo Superior
de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Fundación General de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, nace como
centro pionero en España en el estudio de las interacciones
entre las emisiones de compuestos de relevancia atmosférica, la composición química de la atmósfera y el clima
terrestre. El conocimiento de estas interacciones es crucial
para entender las actuales perturbaciones en la atmósfera y
el clima, predecir los posibles impactos socio-económicos
y diseñar medidas óptimas de respuesta a los cambios.
Desde el comienzo de sus actividades en Junio de 2009
el programa científico de CIAC combina diferentes líneas
de investigación entre las que se incluyen la medida de
composición atmosférica desde satélites, tierra y barcos;
así como el trabajo con modelos numéricos globales utilizados para estudiar las interacciones entre la composición
atmosférica y el clima dentro del contexto de un clima
cambiante.
26
Entrada a la Hoz de Beteta
Tierras Altas:
Hoz de Beteta
La bella Serranía de Cuenca
Cuando por primera vez te asomas a la Hoz de Beteta, atravesando el arco tallado en la piedra, por el que la carretera
se ha abierto paso, a duras penas entre el paisaje, parece que
estás en un mundo de ensueño, donde los colores se han ido
esparciendo sobre el lienzo insuperable de la naturaleza.
Lo verdes en todos sus matices, contrastan con los grises de
los farallones calcáreos y los rojos de los zumaques y las cornicabras. También los acebos y los tilos, que se asoman en
las laderas, desafiando el equilibrio, se suman al espectáculo
de agua y viento que configuran uno de los más bellos lugares de la Serranía de Cuenca.
Desde el balcón alado de la Casa de la Toba, que el tío Paulino labró pacientemente durante años, puedes contemplar
la Cueva de la Ramera, esperando siempre, que alguien la
rescate del olvido y la haga visitable.
Arriba, en las alturas del aire, colgados de lar térmicas, escrutando siempre un horizonte de pinares, de azuladas cumbres
y rojizas vegas donde crece el mimbre, los buitres, señores del
espacio y último eslabón de la cadena alimenticia, detienen el
tiempo y te transportan al mundo puro de la vida.....
La carretera juega con la hoz. Se esconde a veces para no
romper el paisaje y te lleva a la “Fuente de los Tilos” o al
“Paseo Botánico” hozando junto a los puentes de pino,
principio o final de un sueño de miles de plantas autóctonas distintas: museo abierto de la naturaleza.
La Fuente de la Carrera te regala el agua, eternamente fresca de sus tres caños y el olor a chuletas asadas y los gritos
de los niños en “La casa de la Pradera” te devuelven al
mundo real y te hacen sentir de nuevo que eres mortal y
frágil.
Al salir de la hoz, el corazón se expande y el horizonte se
agranda sobre la vegas que vuelven a latir con la primavera: rojos, verdes, amarillos, sienas, grises... y al fondo,
suspendida, acurrucada y brillante, a la sombra dolorida
de su castillo, muñón de siglos, Beteta en eterno vuelo, se
yergue esplendorosa.
27
Hoz de Beteta. Buitres sobre
la hoz.
plotaron los romanos por su poderes curativos y, sobre todo,
en lontananza, al cerro de “Los Castillejos”, origen sin duda
de la antigua y primitiva Beteta, yacimiento celtíbero con
recinto amurallado, que es prioritario excavar para sacar a la
luz, de una vez por todas, el secreto mejor guardado durante
milenios: su origen....
Beteta
desde el
aire.
Plaza del
Ayuntamiento.
BETETA
Siguiendo la empinada y serpenteante cuesta, trepamos por
el alto desnivel hasta el inexpugnable nido de águilas y entramos por “La Puerta de la Villa” al territorio de Los Albornoz. Me vienen a la memoria los nombres de Enrique Villena,
quiromante y sabio, un avanzado de su tiempo y el de Doña
María de Albornoz, su esposa, a la que pronto se le dedicará
una de las calles o paseo de reciente construcción. Al subir, a
la derecha, hemos dejado el Hotel “Los Tilos”, con vistas a la
vega abierta, a la ermita de la Virgen de la Rosa, a los baños
de aguas ferruginosas del Rosal, producida por filtraciones
de las próximas minas de la Cueva del Hierro y que ya ex-
En la
recoleta plaza de antiguas barandillas de feliz
recuerdo, antaño verde, hoy sustituida por bancos de pino y
macizos de flores, frente a las antiguas escuelas de sillería y
el modernizado Ayuntamiento, las balconadas de sabina se
asoman, desde su influencia vasca, hasta el trajín cotidiano
de una villa con alma....
28
Balconadas de Beteta.
ceso posible al poblado. Desde antiguo se ha denominado
a este paraje como Castillo de los Siete Condes, e incluso
en algunos documentos de los siglos XVII y XVIII se le
denominaba ya así, “Castillo de Sicuendes”, dando a entender que era un poblado medieval cuando en realidad se
trata de un yacimiento de la Edad del Hierro, seguramente celtíbero, dadas las características de su ubicación, la
distribución de sus calles y las cerámicas abundantes que
aparecen en superficie, tanto realizadas a mano como a
torno. También aparecen restos de aljibes para recoger el
agua de lluvia, dada la dificultad de bajar hasta el río, con
un desnivel en vertical de más de 120 metros.
Castillo de los Siete Condes (Beteta).
Impresionante península sobre el Río
Cuervo.
Las calles, aún conservan su tipismo serrano, aunque han perdido con las nuevas construcciones parte de su sabor añejo. En una de ellas nació
sobre 1612, el insigne J.B. Martínez del Mazo, yerno de
Velázquez y pintor de la corte de Felipe IV. La iglesia de la
Asunción, erigida a finales del siglo XV y continuada hasta principios del XVI, tiene una bella portada plateresca,
finamente labrada, cobijada bajo un arco escarzano, cuyo
intradós está decorado con casetones. Está influenciada
por el estilo de Rodrigo Gil.
En el siglo XVI se construyeron la capilla bautismal y la
sacristía y en ambos casos se combinan los elementos góticos con los renacentistas. Al castillo de Rochafría se puede
subir a pie, por la cuesta hasta la cima que preside un Cristo de abrazo permanente, o seguir en coche en dirección a
Masegosa y girar a la izquierda tras coronar el corto pero
duro repecho.
CASTILLO DE LOS SIETE CONDES
Aguas arriba del río Cuervo, desde el Solán de Cabras, podemos divisar un impresionante promontorio de piedra al
que sólo se puede acceder desde El Tobar o desde Beteta
por El Palancar. La península que lo forma se une a la
montaña por un pequeño istmo en el que se yerguen los
restos de fortificación para defender el único ac-
Su defensa era muy fácil, ya que la situación del mismo
lo hacía inexpugnable, teniendo solamente un sistema defensivo en la entrada al istmo, único lugar posible de ataque y siendo lo demás una muralla natural, de imposible
acceso. Los habitantes de este poblado debieron dedicarse
a la ganadería principalmente, aunque pudo también ser
un refugio seguro pera grupos que se dedicaban al saqueo
o pillaje de los poblados vecinos, realizando sus correrías
impunemente y regresando después a su refugio seguro.
O dedicarse a la guerra de guerrillas contra los romanos,
atacando por sorpresa a la retaguardia y regresando a su
escondite poco después. Esto son especulaciones, que quedarían solventadas con un estudio en profundidad del lugar a cargo de arqueólogos especializados. De cualquier
forma es un paraje espectacular y único.
SOLAN DE CABRAS
Vista del Solán de Cabras
Enclavado en la Serranía de Cuenca, dentro del término municipal de Beteta, se halla el Solán de Cabras, entre
29
bosques de bujes, pinos, robles y una tupida vegetación de
espliegos, romeros y tomillos, que van discurriendo por las
márgenes del río Cuervo, caudal de agua que divide en dos
partes el valle.
Sus aguas eran ya conocidas en tiempos de los romanos,
aunque fueron redescubiertas en el siglo XVII de manera
fortuita, por un pastor que observó que sus cabras sanaban
de la sarna que las consumía, al contacto continuado con
aquellas aguas. Sus propiedades no son sólo estas, sino que
están más directamente relacionadas con las afecciones de
riñón y oídos, dolores que llevaron al Ministro de Hacienda de Carlos III, don Pedro López de Lerena , quien al sanar
de sus dolencias, se preocupó de construir en el Solán la
casa de hospedería de piedra labrada que sería albergue
más adelante, de la familia real y de la Corte de España
durante unas semanas.
Enterado Carlos III de las propiedades curativas de estas
aguas, mandó hacer nuevos análisis de las mismas a don
Pablo Forner, quien en una monografía titulada “Noticias
de las aguas minerales de la fuente de Solán de Cabras
en la Sierra de Cuenca” nos refiere detalladamente los
análisis conseguidos. Especifica varios casos clínicos y sus
curaciones sorprendentes, relatando además el origen del
establecimiento termal fundado a instancias de López de
Lerena en 1775 cuando era Contador de Propios y Arbitrios de Cuenca, comenzándose también la construcción
del edificio que se terminó en 1777.
Se traza también, un nuevo camino de mejor acceso al
Solán con un presupuesto de 267.000 reales y cuyo coste
debía ser cubierto por aportaciones de los pueblos limítrofes con la corta de pinos madereros de aquella comarca.
La muerte de Carlos III aplazó la ejecución de las obras
que estaban ya aprobadas y que, solamente en parte se
habían ejecutado. La insistencia de López de Lerena, hizo
que Carlos IV, su sucesor, publicase la Real Orden de 27 de
marzo de 1790 por la cual, “el quarto llamado del Solán de
Cabras, la Casa y Baños, habían de cerrarse con la banda
correspondiente y ser declarados Real Balneario con los
beneficios que esto comportaba…”
Su Majestad Carlos IV designó para Gobernador militar y político del Real Sitio a don Mateo de la Sierra, vecino de Beteta,
que tan activamente había intervenido en los asuntos relacionados con la construcción de los baños y la casa-hospedería,
obligándole a residir en dicho lugar. Al fallecimiento de Sierra en 1804, es nombrado gobernador don Cayetano O´loff,
capitán de los Reales Ejércitos, el 5 de mayo de 1805.
El 17 de julio de 1815, O´loff envía desde Cuenca una exposición
detallada del balneario al rey Fernando VII, resaltando algunas
de las propiedades benéficas de las aguas del Solán.
Este informe debió de influir mucho en el ánimo del monarca,
que decidió en 1826, pasar con la reina María Amalia de Sajonia
unos días en los baños de Solán de Cabras desde el 15 al 29
de julio, con la esperanza de que aquellas aguas hicieran que la
reina quedase encinta y le diera un heredero varón.
En el Archivo General de palacio, se conservan los legajos
de las “Jornadas de Fernando VII”, y en uno de ellos, consta el viaje de los Reyes al balneario en el que se especifican todos los preparativos del mismo, con un séquito total
de 164 personas, además de los regimientos de guardia.
Desgraciadamente no se cumplieron las expectativas previstas y la reina no se quedó embarazada. Si esto hubiera
sucedido, habría cambiado posiblemente, el curso de la historia. Como dato curioso he de decir que los alabarderos de la
guardia de María Amalia eran sajones y por tanto, pelirrojos.
Lo que sí ocurrió es que muchas de las aldeanas de la zona se
quedaron embarazadas en esa época y esto podría explicar
en parte, la gran cantidad de pelirrojos que hay en algunos de
estos pueblos como Santa María del Vall y Poyatos.
A Partir de la marcha de los monarcas y pasado algún
tiempo, el Real Sitio quedó para cura de enfermos y así ha
llegado hasta nuestros días. En la actualidad sigue funcionando como balneario aunque se ha acondicionado a las
exigencias actuales.
Los visitantes que buscan remedio a sus dolencias o, simplemente, pasar unos días de relajación y de tranquilidad,
pueden hospedarse en el Hostal del Real Balneario o en los
Apartamentos Solán de Cabras, regentados por la familia
Pozo. Posee piscina en forma de riñón y el paraje sigue
siendo tan idílico y bello como siempre.
La planta embotelladora del agua mineromedicinal de Solán de Cabras, da trabajo a muchas personas de la zona,
siendo una de las aguas más apreciadas en España por sus
propiedades curativas, especialmente de las afecciones de
riñón. Actualmente comparten la propiedad las familias
Pozo y Osborne.
LAGUNA DE EL TOBAR
Situada en un paraje de
gran belleza muy cerca de la localidad de El
Tobar, pedanía de Beteta,
está formada por hundimiento, debido a la disolución de un estrato del
Keuper. Esta cubeta profunda tiene unas características meromícticas
debido a que sus aguas
profundas (21 metros en
algunos puntos) son de
extremada salinidad, tres
veces más saladas que el
agua del mar. No sabemos a qué se debe este fenómeno.
Carlos Solano Oropesa
Escritor y profesor del I.E.S. Pedro Mercedes de Cuenca
30
Confidencias de un
bancero
(Semana Santa de Cuenca)
por Javier Viñuelas Torres
Con la llegada de la primera luna llena de cada primavera,
Cuenca se viste de color y se impregna de olores y sonidos,
para rememorar el drama de la Pasión. Colores, olores y
sonidos que solo se perciben de año en año.
Es rara la familia en Cuenca que no tiene algún miembro
que sea hermano de una o más Hermandades de Semana
Santa. Como ejemplo baste decir que el Programa Oficial
de la Semana Santa de este año, editado por la Junta de
Cofradías, da un total de 45.524 hermanos y el censo de
Cuenca de 2008 es de 54.600 habitantes, por supuesto muchos pertenecemos a mas de una hermandad, pero el porcentaje hermanos/habitantes es sin duda de los mas altos
de cualquier ciudad.
Desde que comienza la Cuaresma, o por mejor decirlo después de Navidades, Cuenca es un hervidero de noticias,
se preparan las Juntas Generales de las Hermandades, se
comentan las novedades que presenta esta o aquella hermandad, se dan los últimos repasos a las andas, imágenes,
banzos, quizás se estrenan estandartes, nuevas almohadillas, horquillas, guión, faroles, etc.
Se comenta si gusta o no el cartel anunciador de la Semana Santa, cada año encargado a un artista diferente,
también se comenta como será el pregón de este año y se
prepara el último acto antes de la procesión, la puesta en
andas de las imágenes.
Todo esta preparado, se han hecho las compras de rigor,
cera, flores, caramelos, etc.; los Hermanos Mayores tienen
preparado el “gasto” que darán después de la procesión,
se han encargado bocadillos para el descanso de la procesión, se han encargado o celebrado las cenas de banceros
o Hermandad y en definitiva solo queda que el tiempo nos
permita desfilar y cumplir con una nueva representación
de la Pasión y Muerte de Cristo.
En esta representación hay una carga de fe y tradición
que va pasando de padres a hijos, no me atrevería a decir
si pesa más fe o la tradición, pero si puedo decir que la
unión de ambos factores da una de las mejores Semana
Santa del país.
Todos conocen lo mas importante de esta Semana Santa
declarada de Interés Turístico Internacional, la procesión
Camino del Calvario es la que más fama tiene, llamada de
Las Turbas, y que desgraciadamente ha sido mal llamada
de los borrachos, yo pediría a todos los que lean esto que
comenten y corrijan siempre y sin excepción a aquellos
que hablen de la procesión de los borrachos, nunca se ha
llamado así y si quieren decir el nombre mas popular, digan que es la de Las Turbas.
También son muy conocidas las procesiones del Miércoles
Santo al Domingo de Resurrección, aquellos que viven lejos de Cuenca suelen llegar el miércoles o jueves y se conocen sobradamente las procesiones de estos días, pero yo
voy a tratar de describir aquellas que normalmente no ven,
que son la de Domingo de Ramos, Lunes y Martes Santo.
El viernes de Dolores de cada año se celebra el pregón de
31
la Semana Santa en la Iglesia de San Miguel y el sábado es
día de puesta en andas, todo está preparado y sólo queda
esperar que el Domingo de Ramos todo comience.
La Procesión de Hosanna, que es como se llama la Procesión del Domingo de Ramos, la compone una única Hermandad con dos pasos, el de Jesús entrando en Jerusalén,
que todos conocemos como La Borriquilla, que desfila desde 1.952 y Nuestra Señora de la Esperanza que se incorporo al desfile en el año 1.990.
Esta procesión tiene un atractivo especial para los niños,
antiguamente salían gran número de niños ataviados de
hebreos con palmas o ramos de olivo, con una banda con
el escudo de la Cruzada Eucarística, que durante muchos
años se encargó de la organización del desfile. Hoy siguen
saliendo muchos niños de nazarenos con sus palmas, es
todo un espectáculo ver sus caras de ilusión y alegría antes
de comenzar el desfile.
Esta primera procesión se inicia a las nueve y media en la
iglesia de San Andrés, a primera hora de la mañana va llegando todo el mundo, somos los primeros en desfilar y un
cierto nerviosismo nos invade, hemos esperado un año para
poder volver a recorrer las calles con nuestros pasos y sientes
una inmensa alegría por poder estar un año más con esos
amigos, hermanos, compañeros de banzo, algunos de ellos
que no los ves más que de año en año cuando vienen expresamente desde cientos de Km. para salir en su procesión.
Cuando se escucha el primer redoble de tambor, que indica el inicio de la Semana Santa de ese año, un escalofrío
recorre el cuerpo y piensas que tienes que darlo todo para
que este año sea mejor que el anterior, clavas el hombro
en el banzo y adelante.
Cuando ya te pones en marcha todos esos nervios y emociones se aparcan y empiezas a recorrer la calle del Peso, Solera,
Alonso de Ojeda, para llegar a la Puerta de Valencia, continuando por la calle de Las Torres y Aguirre para desfilar por
Carretería y llegar por Calderón de la Barca hasta el puente de
La Trinidad donde se inicia la subida hacia la Plaza Mayor.
La subida al principio se nota un poco, especialmente esos
Domingos de Ramos soleados que te hacen sudar con ganas, se sube Palafox hasta las curvas de la Audiencia y se
enfila San Juan y Andrés de Cabrera para llegar a la Iglesia
de San Felipe Neri, más conocida como Los Oblatos, aquí
está esperando el Sr. Obispo con toda la curia diocesana,
para leer el Evangelio del día y realizar la bendición de
palmas y ramos de olivo, terminado el acto se unen a la
procesión, para llegar por Alfonso VIII a la anteplaza.
1. Jesús entrando en
Jerusalén
(La Borriquilla).
Este es un momento importante,
se ha terminado la subida, la procesión toca a su fin y tu querrías
que durase mucho más; la entrada
a la Plaza Mayor por el arco central del Ayuntamiento
es apoteósico, ves la Plaza Mayor tan llena de gente que
por un momento piensas que no vas a poder pasar, te han
dejado un pequeño pasillo para que pases y tu lo ves como
muy estrecho, no importa tu has bailado durante una gran
parte de la procesión y entras por el arco bailando como si
estuvieras empezando. Se sigue bailando durante todo el
trayecto de la Plaza Mayor, hasta el final cuyo destino es
la Catedral, un final donde las imágenes entran entre una
gran expectación a los sones del Himno Nacional (Borriquilla) y de la Marcha de Infantes (Virgen).
Es tradicional celebrar una comida de banceros este mismo
domingo, el menú es judías con chorizo, ensalada, chuletas
de cordero y el postre suele ser torrija y puntas de alajú,
con unos porrones de resolí; este menú se repite invariablemente en todas las comidas o cenas que se celebran por
todas las hermandades.
El Lunes Santo desfila la Procesión Penitencial del Stmo.
Cristo de la Vera Cruz, esta procesión ha sido la última en
incorporarse a los desfiles siendo el primero en 1.996, tiene
una única imagen el Santísimo Cristo de la Vera Cruz, que
es un Cristo en el momento de la Expiración, se trata de
una talla anónima del siglo XVIII y refleja toda la crueldad
y dolor de la muerte en la cruz.
Es una procesión de luto riguroso que no lleva banda de
cornetas y tambores, ni de música, solo el repicar de una
campana y el sonido de un tambor destemplado, acompañados por el coro Alonso Lobo ataviados de monje que
entonan cantos gregorianos. Al principio costaba ver una
procesión tan seria en el desarrollo de nuestra Semana
Santa un lunes, el viernes no sorprendería a nadie, pero
con el paso de los años nos hemos acostumbrado a una
procesión penitencial al comienzo.
2. Santísimo Cristo de la Vera Cruz
Sale de la Catedral a las diez y media de la noche, bajando
por Alfonso VIII, calle del Peso, Solera, Alonso de Ojeda,
para dirigirse a través de la Puerta de Valencia y Las Torres
a la Iglesia de San Esteban donde encierra.
Esta procesión va haciendo paradas en las iglesias del recorrido recordando en cada una de ella una de las Siete
Palabras, la primera la predica el Sr. Obispo en la propia
Catedral, el resto son pronunciadas por las personas designadas, tanto laicos como seglares. La segunda se escucha
en el Convento de las Esclavas del Santísimo Sacramento,
situado en la anteplaza y conocido como “Las Blancas”,
la tercera en la iglesia de San Felipe Neri (los Oblatos), la
cuarta en la iglesia de San Andrés, la quinta en la iglesia
de El Salvador, la sexta en el Monasterio de la Inmaculada
Concepción situado en la Puerta de Valencia y la séptima
en la iglesia de San Esteban, donde además se canta el
Miserere al terminar la procesión.
La llegada del Martes Santo ya llena la ciudad de color son
cinco pasos los que desfilan, con diferentes túnicas, capu-
32
ces y fajines o cordones, además la salida se hace desde diferentes iglesias.
Ya por la tarde a eso de las seis se ve
por la Plaza de la Constitución a los
hermanos de San Juan Bautista que
se van reuniendo y degustando un
vasito de resolí casero que suele hacer algún hermano, para todos juntos
dirigirse hacia El Salvador; igualmente
se van viendo por la calle los de otras
hermandades dirigiéndose hacia las
iglesias de salida de su paso.
A las ocho en punto de la tarde se ve aparecer a San Juan Bautista por la puerta de
la iglesia del Salvador, esta hermandad es
la más antigua de las que desfilan el martes y ostenta la presidencia de la procesión,
aunque empezó desfilando el miércoles en
1.934, por entonces no había desfiles el
martes, el pasado año ha celebrado su 75
aniversario. Se escucha el primer toque de
las trompetas heráldicas de San Juan y los
primeros redobles de la banda de cornetas
y tambores, la Procesión del Perdón esta
en marcha, el esfuerzo de los banceros comienza, esta procesión es mas larga que
las anteriores, los pasos pesan más y el esfuerzo pasará factura al final.
3. San
Juan Bautista.
De esta misma iglesia sale a continuación Santa María Magdalena, desfila
desde 1.954, pertenece a la hermandad
del Santísimo Cristo de la Luz (de los
Espejos), cada año es ataviada con un
traje diferente. Ambos pasos suben por
Solera y el Peso hacia Andrés de Cabrera.
En la calle del Peso se incorpora María
Santísima de la Esperanza, desfila desde
1.952, aunque este primer año desfiló sin
advocación, sale de la iglesia de San Andrés. Este es un momento muy emotivo,
toda la gente que está en la Plaza de San
Andrés se queda en silencio mientras el
coro de la Catedral entona un motete a
la salida de la Virgen, es impresionante
ver como un gentío se queda mudo y se
ve resbalar alguna que otra lagrima de
emoción contenida.
Siguen los tres pasos hacia la Plaza Ma-
yor, en la iglesia de San Felipe Neri
(Los Oblatos) se incorpora al desfile
la Esclavitud de Nuestro Padre Jesús
Nazareno de Medinaceli, desfila también desde 1.952; esta es una de las
hermandades que más hermanos tiene,
tambien es una de las que más nazarenos tiene en las filas, a la salida de la
iglesia se le entona en Himno Nacional.
Otro punto importante es la llegada a la
anteplaza y la entrada a la Plaza Mayor,
ver como San Juan entra bailando a la
Plaza es algo digno de ver, más todavía
si como este año lo hace con la marcha
de San Juan, un baile elegante y sobrio
que ha sido muy comentado.
En la Plaza Mayor se incorpora un
nuevo paso que ha salido de la iglesia
de San Pedro qu-e es el Bautismo de
Nuestro Señor Jesucristo, hermandad
relativamente nueva creada en 1.987,
que desfila por primera vez en 1.990,
que ya cuenta con un número importante de hermanos, fundada por estudiantes del Colegio Universitario de
Cuenca y muy ligada en la actualidad
a la Universidad de Castilla La Mancha, en su sede de Cuenca.
33
4. María Santísima de
la Esperanza
Una vez completada la procesión inician el descenso todos los pasos hacia
Carretería, según van bajando vemos
nuevos sitios donde ver algo diferente,
en la iglesia de Los Oblatos se le canta
el Miserere a cada uno de los pasos; en
la Puerta de San Juan vemos como los
banceros de San Juan dan un pequeño
baile enfrente de su Puerta y se gira el
paso en memoria de la primitiva iglesia que estuvo allí y cuyos orígenes se
remontan a finales del siglo XII, principios del XIII.
Ver como toman las curvas de la Audiencia todos los pasos es algo que
también merece la pena verse, son
curvas muy cerradas y el oficio de
capataces y banceros es fundamental
para que las curvas se tomen bien, este
es un punto muy concurrido por fotógrafos y cámaras de video, así como en
retransmisiones de televisión.
Cuando se llega al puente de la Trinidad y
comienza el llano, los pasos se dejan caer
a plomo, los banceros acusan el cansancio,
queda todavía lo peor Carretería, donde
cada año parece haber menos público, la
calle de Aguirre y Las Torres, semidesérticas de público y entonces se llega a la
Puerta Valencia y todo se transforma.
A partir de la Puerta Valencia, el entorno
se transforma, cada vez hay mas gente viendo la procesión desde este punto
hasta la iglesia del Salvador, lo que ocurre es que la banda de cornetas y tambores se retira de delante de San Juan y
se coloca detrás del mismo la banda de
música, la cual no para de tocar la marcha de San Juan, desde ese momento los
banceros no paran de bailar a ese ritmo
hasta que se encierra en el Salvador, lógicamente con las paradas habituales de
un paso, los banceros vamos al limite,
el llano nos ha hecho mucho daño en el
hombro, pero sin saber como se sacan
fuerzas de no se sabe donde y San Juan
subirá en volandas bailando, ves como
desde las filas te dan ánimos para seguir
y como el capataz te va diciendo que
vamos bien, que ya queda poco, aunque
vas medio muerto esto no quieres que
se acabe.
La Plaza del Salvador esta llena de gente
esperando la entrada de San Juan y Santa María Magdalena en la iglesia, viendo
como siguen carrera hasta San Andrés el
Bautismo de Nuestro Señor Jesucristo y
María Santísima de la Esperanza y hasta
Los Oblatos la Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli.
La procesión ha terminado, ves como se
abrazan banceros, hermanos mayores,
directiva, nazarenos, todos en general se
entristecen por terminar y se alegran por
haber pasado un año mas; es una difícil
mezcla de pena y alegría, en ese momento sabemos que queda un día menos
para volver a desfilar el año que viene.
Después viene un acto lúdico, es tradición que los Hermanos Mayores
paguen “el gasto”, que como pueden
intuir es una invitación que hacen a
todos los hermanos. Aquí al tiempo
que se come y bebe algo, se comenta
como ha sido la noche, si ha habido
algo especial para bien o para mal, y se
termina en una ambiente distendido y
alegre haciendo algo importantísimo,
haciendo Hermandad.
He utilizado todas las palabras que son de
uso común para cualquier nazareno conquense, pero quizás haya lectores que no
conozcan algún termino de los que se utilizan en la Semana Santa de Cuenca, para
que puedan conocerlo en profundidad y
aclarar cualquier duda les dejo el enlace
a una dirección Web, donde tienen un
magnifico diccionario que explica cada
termino, ilustrado con fotos.
La dirección es esta:
http://www.jesusamarrado.com/
semanasanta_diccionario.asp
Fotografias:
1 – Encarnación Cortijo González
2-3-4 – Antonio García Escamilla
34
A la Casa de Cuenca en Barcelona, en el
Cincuenta
Aniversario
de su fundación
Directiva de la Casa, señoras y señores, paisanos, amigos
y conocidos todos: Nos conocemos, digo, porque aparte
de cuanto conforman una cercanía de años… me cabe
el honor de que me confiaseis la presentación-homenaje
de las XV Jornadas Culturales, San Julián, 2001, cuya
memoria traemos hoy aquí, porque quién nos iba a decir
que mi Pregón de Apertura, iba a ser premonitorio de lo
que hoy (casi diez años después), quiero expresaros con
motivo de este 50 Aniversario. Decía entonces, y no ha
perdido actualidad:
“Yo no voy a recurrir a historias de Hemeroteca, sino que
vengo al paso mismo de la gente (incluso de a pie), que
ha sido –y continua siendo-, la verdadera protagonista
que conforma el devenir y, consecuentemente, el gran
éxito de la Casa de Cuenca, desde su fundación. Es decir, vengo a hablaros, principalmente de vosotros, como
mantenedores que sois del espíritu de nuestra tierra: de
esa unidad fraternal que nos caracteriza a quienes salimos de nuestros pueblos y no queremos perdernos en el
anonimato de la Gran Ciudad.
“Vengo a hablaros -continuaba diciendo-, de lo mucho
que, desde otros lugares, admiramos vuestro entusiasmo
y vuestra magnifica organización, donde sabéis dar cabida a todas las edades y a las diversas manifestaciones
desde Ocio, Formación, Arte, en sus distintas modalidades, desde la Masa Coral Castellano-Manchega de la
Casa de Cuenca, al magnífico Grupo de Coros y Danzas,
con su hermosa Rondalla que –en gran parte-, viene a
mantener la tradición del viejo folklore de nuestra tierra, y que han dejado su Arte allí donde estuvo presente
la Casa de Cuenca.
por Aurelio Yuste Valero
“Habéis sabido impulsar, quizá como ningún otro Centro Regional, las energías y aficiones de una juventud
muy temprana, hacia unos valores altamente positivos,
tanto más meritorio cuanto más consideramos el complejo ambiente social de nuestros días.
“Habéis dado –seguía diciendo-, un lugar muy representativo y muy significativo a la Mujer, en sus diversas
actividades y, en fin, como no podía ser menos os habéis
volcado en atenciones a vuestros mayores: ese venerable Grupo Familiar que, sin duda, habrá mantenido
vivo el calor de nuestra tierra, en cada uno de vuestros
hogares. Esos abuelos que a los muy jóvenes, os habrán
contado de sus trabajos en el viejo lugar, de las costumbres, en suma, de un vivir y un convivir rural. Hermoso
convivir porque, generalmente, en nuestros pequeños
pueblos, se daba una comunicación familiar impagable
que, hoy, no podemos por menos de valorar y de asociar
con el calor humano que habéis sabido trasladar a esta
Casa y mantener durante su larga ya existencia . Por
ello, siente uno cierta emoción cuando escucha de uno
de los hombres Buenos, de la Casa, José Jiménez Cortés
(hoy tan presente en nuestra memoria), parte de la peregrina historia que comienza precisamente, en otro enero
de 1960 y cuyo preámbulo, que así se titula un recorte
impreso, dice así:
Reunidos don Jesús García López y don Pedro Zamora
García, el día 10 de enero del año 1960, acuerdan fundar
en Barcelona, la Casa de Cuenca. Unas hojas convocando a los conquenses, fue la iniciativa que provocó tanto
entusiasmo. 15 fueron los que el día 17 acudieron a la
cita; 50 los reunidos el día 24; llegan a los 114 el día 31.
35
Entonces se tomó el acuerdo de dar carácter legal a la
Entidad, designándose para su tramitación oficial, a don
Pedro Antón Martínez, y actuando de secretario para la
redacción del Reglamento y Estatutos, don Valeriano
Martínez Pérez.
“Y la buena memoria y el buen hacer –decíamos entonces-, de nuestro amigo Jiménez, continúa, entre
emoción y nostalgia, los mismos pasos que trajo la
Casa, desde las primeras reuniones en la Plaza Real,
hasta el pequeño local en la calle Parlamento, donde tendría lugar la inauguración oficial de la Casa
de Cuenca. Pero como todo se iba quedando pequeño
para el entusiasmo de los conquenses, pronto se trasladarían a la Bajada de San Pedro, cuyo local –otra
vez, insuficiente-, nos llevaría al definitivo asentamiento en la calle Montaña, 62-64: esta Gran Casa,
cuyas instalaciones admiramos hoy, propios y extraños.
“En fin, me disculparéis –seguía yo diciendo-, que
haya tomado prestada la voz de nuestro amigo Jiménez, para dedicar este pequeño homenaje a los fundadores; a los que se fueron y a aquellos otros que
a lo largo de estos cuarenta años (hoy, cincuenta),
han venido impulsando el espíritu fundacional, hasta el momento presente. Momento en que si bien es
importante hablar de la magnífica Sede Social, no lo
es menos nuestro emocionado reconocimiento al calor humano de esta comunidad, aquí representada por
todos los hombres y mujeres que la conforman. Los
presentes y los que por diversas razones, no haya sido
posible su asistencia.
Y finalmente (al día de hoy), hablaros de esta otra tierra de adopción, en el caso de los mayores, y de vuestra tierra natal, respecto a una juventud, que creció ya
aquí, al calor de un hogar definitivamente arraigado e
incorporado al hacer y al acontecer de este Pueblo. Porque medio siglo –50 años, que hoy conmemoramos-,
son muchos ratos de muchos hombres y mujeres que
conformaron, y siguen conformando, el devenir de la
Casa de Cuenca en Barcelona. No puede uno por menos
de pensar en la de momentos que habrán entretejido
la historia de cada persona y de cada familia, al calor
amigo de la Casa y de sus gentes.
En cuanto a la difusión, como tal Centro Regional, de
sus numerosas actividades Culturales, Sociales, etc. etc.,
qué más podemos decir que el reconocimiento de Utilidad Pùblica avalado por el Consejo de Ministros (23-1070) y qué cabe añadir que no haya recogido el Boletín
Informativo, alma de la Casa, en sus doscientas sesenta
y tantas ediciones, a cual más cuidada, que vienen a
atesorar la memoria plástica de cada acontecer, de cada
momento y hasta de cada pueblo, de los muchos que
pasaron por sus páginas.
Y para terminar, salud y bien para celebrar este Cincuenta Aniversario, que nos ha convocado aquí, con
la personalidad y el reconocido prestigio de la Casa de
Cuenca en Barcelona. Para toda esta Gran Familia, un
saludo muy cordial y un fuerte abrazo para Luciano Pérez Valdeolivas, la mano que durante tantos años, ha
movido el Buen Hacer y el buen acontecer de este Centro Regional, orgullo de propios y extraños.
Cuenca, 3 de Marzo de 2010
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En homenaje a los
de la Casa de Cuenca en Barcelona
por Mariano López Marín
Cronista Oficial de Salvacañete (Cuenca)
Este año 2010 se cumplen 50 años de la fundación de la Casa
de Cuenca en Barcelona, sus bodas de plata. Y esta efemérides
tan importante para esta institución y para todos los conquenses y castellano manchegos quiero aprovecharla para
rendir homenaje a las personas que durante tantos años han
sido capaces de llevar adelante a esta institución secular, tanto a los socios y simpatizantes de la Casa de Cuenca como
a sus distintas Juntas Directivas pasadas y presente y a todas
esas personas que de una forma desinteresada le han dado
vida con su esfuerzo y entrega a esta institución.
La labor de la Casa de Cuenca en Barcelona durante estos cincuenta años ha sido ímproba en esfuerzos y en actividades
y de ello puedo dar buena fe como un conquense más que,
a través del Boletín de esta casa he difundido aspectos de mi
pueblo Salvacañete y colaboré con ellos siendo el pregonero
de las Jornadas Culturales en honor a San Julián 2006. In situ
pude comprobar el tesón con el que, tanto la junta Directiva,
en aquel momento presidida por Luciano y como secretario mi buen amigo y paisano Ramón Ruiz Montesinos, como
cualquier socio se entregaban a trabajar en pro de los conquenses y castellano manchegos residentes en Barcelona.,
haciendo tierra con todo tipo de actos: pregón de jornadas,
actos gastronómicos, actuaciones teatrales, de rondalla, de la
coral de la propia Casa, deportivas, lúdicas, viajes, etc. Y para
mí algo muy importante la convivencia y armonía demostradas entre todos los conquenses socios de esta casa ,los de
otras muchas casas regionales españolas y las autoridades
municipales y autonómicas catalanas , que invitadas a sus
actos asisten año tras año a muchas actividades que la Casa
de Cuenca realiza. Tener una sede social como la actual de la
Calle Montaña con varias plantas donde realizar actividades
con su propio salón de actos y su amplia biblioteca , llevar
a cabo un programa anual de actividades deportivas, lúdi-
cas, culturales, viajes y convivencias , realizar unas jornadas
culturales en honor a San Julián cada año en enero, tener su
propio boletín con el que difundir sus actividades y aspectos históricos, etnológicos, medioambientales y culturales de
Cuenca y su provincia y del que se han editado durante estos
cincuenta años 261 números, participar durante el verano
con su rondalla , coral o grupo de teatro en actividades en
pueblos de Cuenca como en la Alvarada de Cañete , en los
Septenarios en Moya, en Garcimolina o el Cubillo, en Víllora
o en Cardenete y en sinfín de localidades más requiere un
esfuerzo y una entrega envidiables y de alabar.
El apego a sus raíces y tradiciones conquenses se manifiesta
día a día en sus jornadas gastronómicas con productos de la
tierra que les vio nacer, con el canto del mayo el 30 de abril,
con el nombramiento de conquense del año en la persona
que más haya destacado a nivel provincial por la ayuda a
esta Casa, nombramiento que en el año 2010 recayó en Luciano Presidente de la Casa de Cuenca durante quince años
desde 1994 y al que quiero transmitir mi enhorabuena por
esa distinción tan merecida , por difundir aspectos de nuestras queridas tierras conquenses en su boletín y por sembrar
la semilla de Cuenca entre sus descendientes nacidos en Barcelona y entre los habitantes de la ciudad condal, tierra que
les acogió con los brazos abiertos en años de emigración y a
la que han entregado una parte muy importante de su vida y
en donde han echado raíces.
Durante varios años he colaborado con mis artículos y crónicas a difundir aspectos de mi pueblo Salvacañete en el BOLETÍN de esta Casa de Cuenca, punto de encuentro de conquenses, castellano manchego y de otras comunidades aquí
en Barcelona. Cada artículo, cada crónica, cada poema o
cada reflexión que en él se incluyen son siempre leídos por
37
mí con enorme ilusión. A través de él se ve el trabajo
intenso, las variadas actividades y sobre todo la convivencia, la armonía y el paisanaje que en esta Casa
de todos los conquenses se vive. Y sobre todo la gran
difusión que se hace de la cultura de nuestra tierra,
nuestra querida Cuenca y nuestra gran comunidad de
Castilla La Mancha. Desde hace años he oído decir a
mis amigos afincados en Barcelona y a sus hijos que
si querían quedar para verse lo hacían en la Casa de
Cuenca “ Lo vi en la Casa De Cuenca “ . Estuvimos juntos en la Casa de Cuenca”. . ¡Qué lugar más entrañable
donde se pueden ver y convivir los conquenses que
aunque estén lejos de su tierra tienen aquí este rincón
de nuestra querida Cuenca ¡ Además la Casa de Cuenca ha estado presente y sigue estando en los grandes
acontecimientos de Cuenca . En el último septenario de
la subida de la virgen de Tejeda a Moya, en la Alvarada
de Cañete, en nuestros pueblos de la serranía de Cuenca
con su rondalla y su coro y en todos aquellos lugares donde se le pide colaboración y la puede prestar.
Las tradiciones y la cultura de Cuenca y de Castilla la
Mancha son difundidas año tras año en esta entidad
a través de sus numerosas actividades a lo largo del
año y en su boletín. ¡Que gran trabajo han hecho
durante sus cincuenta años de historia en pro de todos
los conquenses y de todo el castellano manchego! Vaya
mi más sentido homenaje a los socios fundadores y a
todos los que de una forma u otra han colaborado para
llevar a buen término todas las actividades durante
tantos años sea como presidentes, vocales, tesoreros, en
la rondalla, en el grupo coral, en la realización del boletín, como monitores de actividades, como articulistas
del boletín, anunciantes en el mismo o como socios o
simpatizantes. El trabajo de todos ha sido inmenso y en
este cincuentenario es buen momento para agradecer
tanto esfuerzo. El camino recorrido por esta Casa de
Cuenca en Barcelona ha sido largo y fructífero. Enhorabuena a los que lo han hecho posible.
Como colofón de esta colaboración quiero animar a las
nuevas generaciones de conquenses nacidos en Barcelona para que sigan impulsando la actividad de esta
Casa de Cuenca y aprendan la gran lección que nos
han dado y les han dado la generación de sus padres y
abuelos, que aunque lejos de sui tierra, nuestra querida
Cuenca, han sabido mantener sus raíces y difundir
la cultura conquense y castellano manchega en otra
comunidad a la que están muy agradecidos porque en
años de muchas dificultades les ofreció trabajo y en la
que están perfectamente integrados, aunque no olviden
su lugar de nacimiento y sus recuerdos y añoranzas
de su tierra.
Utiel, abril de 2010.
En tus cincuenta años
quiero homenajearte de veras
por ser punto de encuentro
de gentes de nuestra tierra
gentes laboriosas y buenas,
gentes de nuestra querida Cuenca
Naciste en época de emigración
en el año mil novecientos sesenta
creada por gentes laboriosas
gentes venidas de Cuenca
a trabajar en Barcelona
dejando atrás su tierra
con mucho dolor del alma
se embarcaron en una aventura
nueva.
Aquí, en este rincón entrañable
llamado Casa de Cuenca
empezaron a difundir
la cultura de nuestra tierra,
a convivir entre todos
Mancha, Alcarria y Sierra.
Cada uno en lo que puede
todas aportan ideas
para un ramillete de actividades
que cada año se celebran
todas ellas en común
los recuerdos de Cuenca,
sus paisajes y gentes,
su gastronomía puntera
sus personajes entrañables,
su folklore y su esencia.
Tu Casa de Cuenca eres
tradición y convivencia
trabajo ilusionado
de las gentes de nuestra tierra
difusión de cultura,
punto de unión entre tierras
Castilla La Mancha el origen
Cataluña la residencia
de gentes que un día llegaron
a trabajar en esta tierra
gentes laboriosas y honradas
que han dejado su huella.
En tus bodas de oro
quiero homenajearte de veras
por ser una institución
de las que van dejando huella
por el trabajo denodado y altruista
de gentes de nuestra tierra
nuestra querida y amada,
nuestra entrañable Cuenca
que en ese lugar admirable
de Barcelona, esa ciudad señera
va difundiendo lo nuestro
nuestra cultura de pueblos y aldeas
para que sea conocida por todos
y no se pierda.
En tus bodas de oro
querida Casa de Cuenca
puedes estar orgullosa
de esa gran tarea
que han realizado en tus estancias
las gentes de nuestra tierra,
las Juntas Directivas
y lo socios que llenan
tu salón de actos hermoso
en Jornadas culturales señeras
en honor a San Julián
patrono de la hermosa Cuenca.
Felices bodas de oro
mi más cordial enhorabuena
a la Junta Directiva actual
y a todas las que precedieron a esta
el trabajo denodado
ha merecido la pena
cincuenta años son muchos
cincuenta años de entrega
al servicio de los conquenses
afincados en esta tierra
que en el año 2010
se han vestido de fiesta
para festejar este acontecimiento
singular
cincuenta años de la Casa de Cuenca
afincada en Barcelona
un trozo de nuestra tierra
a la que nos entregamos
y queremos de veras.
La música es vida
y de vida llenan
todas las actividades
de esta casa puntera
con su rondalla y su coro
y su grupo de baile por más señas
llenando de alegría
cada actividad que celebran.
Mariano López Marín
Utiel, abril de 2010.
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Mayos
Tiempo de
por Mariano López Marín
Está próximo el 30 de abril, fecha muy importante en el
calendario festivo de la provincia de Cuenca y en su aspecto folklórico. Es tiempo de mayos.
La noche mágica del 30 de abril tenía un carácter especial
en muchos pueblos de Cuenca, sobre todo en su Serranía y en la propia capital. Cuando daban las doce de la
noche se comenzaba a cantar el mayo a la virgen en las
puertas de la iglesia de cada pueblo, en Salvacañete en
la de la Asunción situada en la plaza Mayor para después
ir de casa en casa de todas y cada una de las jóvenes
del pueblo cantándoles el mayo. Permitidme que dedique
este artículo a un amigo especial de Salvacañete que el
4 de abril de este año 2010 nos dejó para siempre y que
era una pieza fundamental a la hora de cantar el mayo
en nuestro pueblo, mi entrañable amigo Clemente Yuste.
Su potente voz hacia vibrar el canto del mayo y las
músicas, la jota salvacañetera o las canciones de ronda.
Ha muerto con las botas puestas pues hasta el pasado
año colaboró en esta actividad y nunca faltaba su ayuda
en las Semanas Culturales de la Tercera Edad , que celebramos en agosto, a la hora de cantar mayos y músicas.
Nos ha dejado una gran huella y una dignísima sucesora
en su hija Dolores. Su voz la conservamos en el recuerdo y
gracias a las nuevas tecnologías en un CDrom cantando
el folklore de Salvacañete.
El 30 de abril era un fecha importante en el calendario
festivo de los pueblos de la Serranía de Cuenca. Era el
momento del canto de los mayos, fiesta primaveral y de
agasajo a las cualidades de la mujer serrana. Con guitarras,
laúdes, bandurrias, crótalos, algún almirez o una botella de
anís y el omnipresente acordeón las puertas de las iglesias
y las calles de nuestros pueblos se llenaban de música,
canto y tradición y porque no de ronda festiva y bullicio
callejero. En muchos de nuestros pueblos se han perdido
los mayos. Salvacañete, junto con otros pueblos próximos
como Cañete han tenido la suerte de conservarlos. Recuerdo en la década de los años 1970 cuando los recogí
y la ilusión que ponía el tío Mariano Yuste y sus hijas
porque no se perdieran. Hoy están recogidos los mayos
y otras manifestaciones del folklore de Salvacañete en la
obra “ Folklore de Salvacañete” editada por nuestro ayuntamiento en el año 2000. La rondalla Virgen de Valdeoña
se encarga de mantener viva esa tradición y que cada año
no falte el canto del mayo a la virgen de Valdeoña, nuestra
patrona, ,en la puerta de la iglesia .Porque en Salvacañete
,como en muchos pueblos próximos , primero se cantaba
el mayo a la Virgen de Valdeoña y después iban en alegre
ronda los músicos a cantar el mayo a las mozas que
comenzaba así: Estamos a treinta / del abril cumplido /
alegraos damas / que mayo ha venido.. En cada puerta se
subastaba la moza y “se le echaba de maya al mejor postor” diciendo “a …..fulanito de tal recibes por mayo”.. Era
una noche de fiesta y diversión para músicos y para jóvenes. Con el dinero obtenido de las subastas posteriormente
se harían una comida. La maya tenía la obligación de bailar con el mayo que le habían echado en el baile del día de
39
la Cruz. El mayo se obligaba a invitar a la maya a turrón
el día de La Cruz, el 3 de mayo y a ir con ella a la Romería de Santerón, el lunes de Pentecostés. El mayo ponía
la montura enjaezada y la maya la merienda. A la noche
siguiente a los mayos se cantaban por las calles y en la
las puertas de las casas “las músicas”, verdadero canto de
alabanza a las cualidades físicas de la mujer salvacañetera
y de la Serranía de Cuenca. Comienzan así: “el primero /
Como capitán de guerra/siempre voy el delantero/a mí me
tocó la suerte/ a mí me vino a tocar / como más desobediente / el venirte a despertar”. Esta tradición del canto
de los mayos y de las músicas estaba muy extendida
por todos los pueblos de la Serranía de Cuenca hasta que
llegó la emigración, en la segunda mitad del siglo XX, y
en muchos se perdieron. En algunos hubo personas que los
conservaron y otras que los recogieron y difundieron. Hay
un trabajo impulsado desde la Mancomunidad “ Los Serranos” que engloba a muchos pueblos situados cerca de
Cañete que recoge muchos aspectos del folklore, la historia
y las tradiciones de esta zona. Fue realizado por Cristina
Sáiz López Caniego y otros en el año 1999 y colaboré con
la autora en todo lo referente a Salvacañete El trabajo es
“ Programa de recuperación y valoración del patrimonio
etnográfico.” Mancomunidad “Los “ Serranía de Cuenca .
diciembre 1999. La obra tiene 2 volúmenes y 5 cdrooms.
En este mismo sentido la obra de mi paisano y amigo
Aurelio Yuste Valero “ Voces del Pasado”, publicada en el
año 2007 tiene un gran valor documental porque recoge
esas voces tradicionales de Salvacañete, muchas de ellas
relacionadas con el folklore de nuestro pueblo y nuestra
tierra. Este folklore de Salvacañete que recogí en casette
hoy está disponible en CDrom y forma parte del archivó
sonoro del folklorista y Cronista de Requena, mi excelente
amigo Fermín Pardo a quien se lo facilité.
Entre los pueblos con tradición del canto de los mayos y
las Músicas destacan Alcalá del Vega donde todavía cantan el Mayo a la Virgen del Remedio. Boniches que conserva el Mayo a la Virgen. Campillos de Paravientos donde
existía la costumbre de que mientras los mozos cantaban
las mozas les tiraban huevos duros. Campillos de Sierra
donde todavía se sigue cantando el mayo a la virgen el 20
de agosto por la noche y se cantaba el mayo a las mozas
en el Cerrillo del Tesoro y estas les colocaban en el cuello
un roscón en forma de anillo como agradecimiento por haberles cantado. Cañete. La Cierva con la misma letra del
mayo a las mozas que el de Valdemoro y una letra distinta
para el mayo a la Virgen. En la Cierva las mozas debían
pagar por cantarles el mayo y si no pagaban les tocaban
la Cencerrá. En Laguna del Marquesado se subastaban los
mayos de las mozas y éstas tenían que bailar con el que
le había tocado. Esta costumbre cambió y se hacía el sorteo
de los mayos para complacer a las mozas. En las músicas
del 1 de mayo las mayas de La Laguna hacían un rollo de
bizcocho, que daban al mayo, siempre y cuando a la maya
le agradase el mayo. En Pajaroncillo después de cantarle un
mayo a la moza se disparaban tiros al aire. Si alguna maya
no le gustaba el mayo que le habían echado se ponía el
mandil al revés .Las músicas podían cantarse en Pajaroncillo
en cualquier época del año. Salinas del Manzano también
tenía la costumbre de subastar el mayo para las mozas. Las
mozas daban donativos a los mozos y con ese dinero se pagaba el baile del Día del Patrocinio, el tercer domingo de
Mayo después de la Pascua de Resurrección. El patrón de este
pueblo era San José y a veces se juntaban las celebraciones
de los mayos con la de San José y el domingo del Patrocinio.
En Tejadillos se reunían los vecinos del pueblo en la ermita del Carmen para cantar el mayo a la Virgen. Después se
subastaban los mayos de las mozas y se publicaban por la
noche. Cuando les cantaban el mayo a las mozas disparaban
al aire con un trabuco. En Valdemorillo y Valdemoro todavía
se canta el mayo a la Virgen y en Zafrilla se subastaban los
mayos en la plaza, delante de una hoguera. Landete todavía
conserva el Mayo a la Virgen y el Mayo de las mozas, que
cantan los quintos o otras personas pagadas por ellos. Mayos
famosos son los de Tragacete.
El 3 de Mayo fiesta grande en Salvacañete. Día de la Cruz
con misa en la ermita, bendición de la caridad, pan bendito y reparto de la misma, los famosos” molletes”, panecillos redondos y regordetes hechos por el panadero
del pueblo con el dinero recogido por los vecinos. Cada
uno aporta una cantidad según los molletes que va a
recibir, uno para cada miembro de la familia y algún
otro para familiares enfermos o ausentes. Después del
reparto del pan, si hacía buen día, a comer junto al río
en el Ventorro y alrededores. El pan se repartía en el
puente del Ventorro. Había turroneros y un músico. Por
la tarde se hacía baile en el pueblo. En los siglos XVI y
XVII Salvacañete tuvo una ermita dedicada a la Santa
Cruz. Y fiestas el día de la Cruz había en varios pueblos
de la zona. En Santo Domingo de Moya donde todavía
se celebra con reparto de pan y vino y comida campera junto a las eras del pueblo. En Campillos de Sierra
donde se dan cita las cinco cruces parroquiales de los
cinco pueblos que guardan la tradición de acudir a
la ermita de Altarejos (Valdemoro, Valdemorillo, Huerta
del Marquesado , Tejadillos y Campillos Sierra). Laguna
del Marquesado donde iban con la cruz a bendecir los
campos, donde tocase la añada el paraje de las Cruces
o la Piedra de Arriba. Antiguamente el cura entregaba
a cada vecino unas pequeñas cruces que colocaban en
lugares de especial protección, los sembrados o los pinos. En Pajaroncillo y Valdemorillo también se festejaba
la Cruz de Mayo con bendición de campos en el segundo pueblo. En Valdemorillo iban todos los hombres del
pueblo a “hacer la Cerrada”que consistía en arreglar
la muralla o pared del pueblo si se había caído alguna
piedra.
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La poesía de
Amparo Ruiz Luján:
Breve aproximación
“Arrastras la belleza de
quien no tiene amo”
por Anabel Sáiz Ripoll
Doctora en Filología. Catedrática IES Jaume I (Salou)
La Casa de Cuenca en Barcelona cumple 50 años, una cifra redonda y mágica,
que merece todo tipo de parabienes y felicitaciones. Mi colaboración escrita
pienso que puede gustar mucho a los amigos y amigas de la Casa puesto que
habla de una mujer conquense, una poeta, una profesora y una amiga.
Datos biográficos: Las Armas de Atenea
Amparo Ruiz Luján, a quien pretendemos conocer un
poco más en estas líneas, nació en Puebla del Salvador, aunque los azares de la vida la llevaron a estudiar
el Bachillerato en el Instituto “Santa María” de Ibiza.
Se licenció en Geografía e Historia por la Universidad
de Barcelona. Y en la actualidad ejerce como profesora
de Educación Secundaria en el Alfonso VIII de Cuenca.
Aparte es Asesora para el Desarrollo Cultural y Artístico
del Centro de Profesores de Cuenca.
Persona muy vocacional y entregada a sus alumnos,
Amparo Ruiz, como coordinadora de actividades educativas y de difusión cultural, ha organizado distintas
exposiciones y encuentros para trabajar por la paz y la
interculturalidad a través de la Historia, la Ciencia, la
Literatura y el Arte. Interesan también sus trabajos de
didáctica del Patrimonio Cultural y Natural de Cuenca.
La profesora Ruiz Luján también ha impartido cursos
para docentes, ha participado en congresos y ha coordinado grupos de trabajo. Con los alumnos ha dedicado
especial atención al trabajo de investigación y la educación en valores, desarrollando el programa Historia
y Compromiso.
Si hoy la mencionamos en el Boletín no es por su actividad docente, encomiable, sin duda, sino por su quehacer poético porque Amparo Ruiz Luján es una de las
voces líricas más importantes de Cuenca. Hasta la fecha
ha publicado cuatro libros de poesía: Contra la guerra
(1982), Intenciones de Antígona (1999), El brocal de Sémele (2001), La mirada de Atenea y Parole in volo a cura
di Alessandro Cesareo e traduzione di Elena Laurenzi,
editorial Morlacchi, Perugia, 2007.
También ha colaborado en las revistas Cuadern Literari i
Cultural (Ibiza), Duoda (Universidad de Barcelona), Hermes (Toledo) , Papeles del Huécar (Cuenca), Molino de
papel (Cuenca), Añil (Ciudad Real) y Scholia (Roma)
Su voz se ha escuchado en algún Curso de Verano de la
Universidad de Castilla-La Mancha Leer y entender la
poesía, en seis ediciones, con intervenciones publicadas
en las actas correspondientes.
Cabe añadir que su obra aparece reseñada en Mar interior. Poetas de Castilla-La Mancha de Miguel Casado
(2002); La tierra iluminada. Un diccionario literario de
Castilla-La Mancha de Francisco Gómez Porro (2003), y
en Los rostros de Medusa. 20 años de poesía conquense
(Antología) de Ángel Luis Luján Atienza (2009).
Frecuentemente participa en actividades culturales con
conferencias y recitales en los que combina la Música,
41
la Poesía y la Historia. En Mayo de 2002 y 2008 asistió
al Encuentro de Poetas por la Paz en Meghar (Israel)
organizado por poetas árabes y hebreos.
Amparo Ruiz Luján ha estado premiada en distintas
ocasiones. En el año 2000 recibió el Premio Glauka que
otorgan la Biblioteca Pública de Cuenca y la Asociación
de Amigas de la Lectura por su trabajo a favor de la
lectura y la cultura.
Desde 1992 lleva realizando un trabajo fotográfico sobre el patrimonio arquitectónico y natural de Castilla-La
Mancha, teniendo como hilo conductor el deterioro y
el tiempo. La exposición La Mancha: mirada y palabra
se pudo ver en el Museo de las Ciencias de Castilla-La
Mancha en Cuenca, dentro del programa Cultura de Estío; en Priego, con motivo la celebración del curso Leer
y Entender la Poesía, organizados por la UCLM durante
el mes de Julio de 2006, y en la Universidad de Sofía
San Clemente de Ojrid (Bulgaria) en Octubre del mismo
año; actualmente la exposición sigue un itinerario por
localidades de Castilla-La Mancha.
Con motivo del IV Centenario de la publicación de El
Quijote, ha realizado un estudio titulado Dulcinea: hija
de sus obras. Amor y belleza en El Quijote y Dulcinea:
sueño del Héroe Delirante. La exposición de fotografías
Ventanas para Dulcinea, inaugurada el 2 de Octubre de
2007 en la Casa de los Medrano en Ciudad Real y patrocinada por la Empresa Pública Don Quijote 2005, complementa el trabajo sobre esta figura literaria.
Amparo Ruiz Luján es, por lo tanto, una mujer polifacética de fina sensibilidad y exquisita palabra.
Obra Poética: Un Mar de Incertidumbres
Si repasamos su obra poética, prescindiendo de su temprana Contra la guerra, podemos afirmar que sus tres libros forman una trilogía en la que reflexiona sobre el ser
humano a través de distintas figuras mitológicas; esto es,
Antígona, en Intenciones de Antígona; Sémele, en El brocal de Sémele y Atenea, en La mirada de Atenea. La poesía
de Amparo Ruiz Luján es una poesía conceptual, muy culta
y muy trabajada. No busca la facilidad ni el ritmo ni en
el verbo. Sus referencias, por otra parte, aluden a su gran
acervo cultural ya que encontramos alusiones a la Biblia,
a la poesía oriental, a la mística hebrea, pasando por elementos del Cristianismo y del Islam. Es una poesía que
nos acerca a la espiritualidad del ser humano de manera
sensible y reflexiva. Para ello Amparo Ruiz adopta el punto de vista femenino y penetra en ese mundo, a veces más
recóndito, más concentrado, de la mujer; aunque es una
poesía que va dirigida a todos. Su alcance es universal.
Como nos recuerda Ángel Luis Luján Atienza, su poesía
se nutre de elementos urbanos; aunque no deja de citar,
siempre que puede, elementos de Cuenca, como las hoces o la torre de Mangana.
Se trata de poesía, como decíamos, esencial, muy condensada, que no hace concesiones ni a la forma ni al
metro. Son versos cortos en su mayoría. Versos rotundos
e impactantes por el uso de las palabras que maneja,
siempre necesarias, nunca gratuitas.
En cuanto a los temas, podríamos tratar de afinar y decir
que sus poemas hablan de la soledad y de la ausencia, pero también del deseo. Es un mundo muy personal
el que nos presenta Amparo Ruiz Luján. Aludiendo de
nuevo a Ángel Luis Luján, podemos decir que su poesía
supone “…un proceso de búsqueda, de raíz fundamentalmente erótica, que purifica a quien lo experimenta
pero que también encuentra a su paso, y debe asumir
como parte del proceso, lo sórdido y lo sucio del vivir
cotidiano” .
Para tratar de ejemplificar un poco lo que estamos diciendo y ofrecerle al lector o lectora una imagen directa
de la poesía de Amparo Ruiz Luján, podemos poner algunos ejemplos. Así, en Intenciones de Antígona leemos,
en unos versos directos, sin florituras innecesarias:
“Has roto tu nombre en mil pedazos
en una estricta geometría
de ángulos y aristas”
Y más adelante, va que apreciemos sus imágenes trabajadas y enérgicas, leemos;
“Pusiste más corazón del que tenías
en un cuerpo descarnado,
y llenaste de gladiolos y manzanas
un mar de incertidumbres…”
Centrada en el personaje de Antígona y en su valor simbólico añade:
“Aunque me ofrezcan todos los nidos
seguiré clavada al arcángel de una vidriera
que araña imposibles,
en un columpio sin red,
y tejeré encajes de tiempo
en los que no existe Dios”.
Si nos vamos a El brocal de Sémele, leeremos versos tan
enigmáticos y cargados de presagios como estos:
“Hay un amor que pasa por las cafeterías,
y una fidelidad tan frágil
que no hay que pronunciarla”.
42
O un poema como este, construido a base de paralelismos antitéticos:
“No te daré mi vida
ni mi tiempo
ni mi infierno.
Te entregaré distancias,
las armas de Atenea,
la vigilancia perpetua
de las vírgenes”.
Y ya, para terminar, de su último poemario, La mirada
de Atenea, leemos un poema tan hermoso como:
“Rapsoda del silencio:
tus ojos son el precipicio
de todos los vencejos”.
Siempre, en los poemas de Amparo Ruiz Luján, hay un
tú a quien se dirige en diálogo o, a veces, monólogo
continuo:
“Respiro en ti el fuego de la noche,
la plegaria serena y el gozo de la entrega.
Entre el mirto y las rosas, la pasión de los dioses
y un cielo adamascado”.
En este libro abundan, más que en el resto, los versos
de arte mayor, quizá porque la poeta va, poco a poco,
extendiendo su caudal poético. Ofrecemos, por último,
dos versos llenos de sugerencias con los que invitamos
a los que aún no hayan leído la poesía de Amparo Ruiz
Luján a que lo hagan, despacio, eso sí, las prisas van
reñidas con su poesía… y es que:
“Llevas en la mirada sabiduría rota,
promesas incumplidas de un mar desquebrajado” .
Ventanas para Dulcinea: Aristas confusas de los tiempos
No quisiéramos terminar esta breve aproximación a la obra
poética de Amparo Ruiz Luján sin mencionar sus Ventanas
para Dulcinea, que ella subtitula Poética de la ausencia. El
libro está formado por las fotografías que realizó la profesora Ruiz Luján con motivo del IV Centenario de la publicación de El Quijote y se centra, precisamente, en las ventanas que son como centinelas del tiempo. Como dice la
autora: “A través de las ventanas nos llega clamor, susurro,
gemido, aliento, comunicación, luz, tiniebla, pasión de ser
y de vivir, un viaje a los abismos oscuros de donde emerge
la melodía de lo indecible que se instala en la atemporalidad” (pág. 5). Así, con ojo sensible, fotografía ventanas,
ventanos, ventanucos… de distintos lugares de la geografía de Castilla-La Mancha, Puebla del Salvador, Belmonte,
Valeria, Priego, Cañete, Campillo de Altobuey, Palomera,
Moya, El Toboso, Alarcón, Iniesta, Pajares, Cuenca, Castillo
de Garcimuñoz, Pajares, Uclés y Carboneras de Guadazaón.
Y todas estas fotografías espectaculares se acompañan por
versos de la propia autora que, tratan de alguna manera,
de recomponer la voz de Dulcinea a la que brinda las imágenes. Son versos de sus obras ya comentadas. En suma…
“en los ojos parece que están las alas que nos hablan de un
viaje ilimitado por espacios desconocidos, con la nostalgia
del tiempo perdido bañado de silencio e inocencia” (pág.
9), nos dice Amparo Ruiz Luján.
Mucho más espacio requeriría analizar la obra de esta
conquense versátil, sensible y humana, pero pensamos
que el Boletín ha de acoger muchas más colaboraciones
y, en suma, solo hemos pretendido ofrecer un esbozo
del quehacer poético de Amparo Ruiz Luján. Ahora el
resto… está en manos del lector o la lectora.
Bibliografía
-Ruiz Luján, Amparo:
.“Ventanas para Dulcinea. Poética de la ausencia”, Toledo, Empresa Pública “Don Quijote de la Mancha 2005, S.A.”, 2007.
.“La mirada de Atenea”, Cuenca, Alfonsípolis, 2006.
.“Parole in volo”, Perugia, Morlacchi Editore, 2007.
-Luján Atienza, Ángel Luis. “Los rostros de Medusa. 20 años de poesía conquense (Antología)”, Almud, Ediciones Castilla-La Mancha, 2009. Biblioteca Añil
Literaria, 11.
-Varios: “Leer y entender la Poesía. Poetas en Priego 2000-2006”, Zoom 3000. Fotografías de Amparo Ruiz Luján. Idea y creación: Montserrat Muñoz mora.
Coordinación: Juan José Gómez.
43
XIV
Gala de la Federación de
Casas Regionales y
Entidades Culturales en
Cataluña
Como en años anteriores, este año, el día 6 de marzo de
2010, se celebró la XIV Gala de la Federación de Casas Regionales y Entidades Culturales en Cataluña con una cena
de gala en el Hotel Fira Palace de Barcelona.
La Federación rinde un homenaje a una personalidad o
institución meritoria a nivel nacional, y este año ha correspondido a las Fuerzas Armadas Españolas por su labor
tan sobresaliente a favor de la paz, incluso con sacrificio
de vidas de nuestros soldados que, como los demás, fueron
con ilusión por su labor de paz y de lograr una mejor vida
para los demás y no vinieron vivos.
El acto se celebró con la Ministra de Defensa, doña Carme
Chacón, quien pronunció un discurso en recuerdo por los
caídos y después, todos los presentes en el salón y en silencio total escuchamos el himno en homenaje a los caídos;
fue un acto tan emocionante que estoy seguro que más de
uno lloró.
La Federación nombra también en esta Gala anual a la
Reina que representará a la Federación durante un año; la
elige entre todas la Reinas de las demás Casas Regionales
que asisten invitadas con sus trajes típicos regionales; es
una cosa muy bonita porque además de lo guapas que son
la chicas, vistas con esos trajes tan bonitos, pues mejor.
Debemos señalar, con gran satisfacción para nosotros, que
este año el nombramiento de la Reina de la Federación de
Casas Regionales y Entidades Culturales en Cataluña ha
recaído en la Reina de la Casa de Cuenca en Barcelona,
Judith González Vivas, nuestra Reina.
Una vez terminados estos actos y la cena, empezó el baile,
pero algunos de nosotros ya nos fuimos a nuestras casas,
habiendo pasado un velada emocionante y agradable. Deseamos que estas galas se sigan celebrando porque contribuyen a ese trato entre todas las personas que formamos
parte de todas las instituciones federadas.
Conquino
44
Pan y
Chocolate
Recuerdos de
por Memorias de un conquense
Son las últimas horas del día. Ese momento en el que
los colores moribundos del crepúsculo se confunden en
la oscuridad que anuncia la noche. Por eso aún son visibles los tejados que se recortan en el morado intenso del
cielo y las farolas que comienzan a marcar sus sombras
amarillas en las fachadas de las casas que dan al río. El
caminante ha llegado hasta allí como movido por una
fuerza indescriptible que ha ido guiando sus pasos hasta
vislumbrar el Puente de Los Descalzos. Apoyado en el
pretil quiere dibujar en su retina la ribera del río. Todo
es penumbra que se va agrandando minuto a minuto,
pero el resonar de la corriente chocando con la tajamar
del puente le devuelve recuerdos y sensaciones de niñez
y adolescencia que lo transportan a otros tiempos. Incluso el ruido del agua le trae el eco lejano de las tardes
soleadas de Jueves Santo cuando la procesión comienza
su camino atravesando perezosa el Puente de la Virgen de la Luz Aquellas tardes llegaba entre las hojas de
los chopos el monótono redoble de los tambores que se
iba diluyendo en el silencio a medida que la procesión
se alejaba por el tortuoso mar de guijarros de Alfonso
VIII.
Sobre su cabeza se extiende ya la rigurosa negritud de la
noche y el color mortecino de las farolas ha conquistado
definitivamente el paisaje: es el camino, hoy asfaltado,
que desemboca en el Recreo Peral, el Juego de Bolos y
en el centro, como marcando un territorio compartido,
la Fuente del Abanico con sus tres chorros crepitando en
el fondo de la piedra. Evoca entonces recuerdos y acariciando el abanico que da nombre a la fuente, le acuden
a la memoria esas historias de celos y de amantes de
los que habla la leyenda que aprendió de niño. Una de
tantas, como la de la Cruz de los Descalzos un poco más
arriba o la del Cristo del pasadizo, o la de Fernandico y
Sancha… amores, pasiones… cuentos que llenaban entonces las tardes de meriendas de pan y chocolate o pan
humedecido con vino y azúcar, los pantalones cortos, el
tejo y la rayuela.
Hay un silencio absoluto que sólo rompe el ruido del
agua. De un lado la fuente, como una suave melodía
que acaricia sus manos; de otra la corriente del río
que baja tranquilo, sosegado, sin prisa conformando el
acompañamiento necesario para tan hermosa canción.
El tiempo se ha detenido entre los chopos y la noche es
ya absoluta. A lo lejos unas lucecillas serpeantes que
indican la cuesta que lleva a la Puerta de San Juan, al
Escardillo.
El caminante se sienta en el poyo de piedra y deja que
la humedad vaya penetrando por cada uno de sus poros
hasta sentirse poseído. Son tantos los recuerdos que se
van agolpando desordenadamente que tiene que hacer esfuerzos para que no se superpongan, para que no se confundan. Son escenas aisladas que le salpican la memoria
como si fueran fogonazos, relámpagos que deslumbran
su semblante y que van abriendo huecos en su cabeza.
45
Las tardes de domingo, tardes de tortilla de patata y de
pimientos fritos en tartera que su madre llevaba para
todos cuando aquello todavía era un merendero en el
que no era obligatorio consumir. Si acaso algo de vino
tinto con gaseosa que sólo estaba destinado a los más
mayores, aunque él siempre conseguía con arrumacos
que su padre consintiera que acercase sus labios a aquel
líquido rojizo que sabía medio dulce y que hacía cosquillas en la garganta Déjalo mujer, que ya va siendo un
mozo y tiene que empezar a acostumbrarse. Después de
tantos años todavía consigue recordar aquel sabor que
se le quedaba en la garganta a medias entre lo prohibido
y el hacerse mayor. También aquellas cartas de baraja
ajadas por el tiempo con las que las mujeres jugaban a
la brisca, o al tute, o al cinquillo mientras los hombres
se remangaban la camisa blanca para jugar una partida
de bolos hasta el anochecer. Uno… Tres… iba cantando
el bolero con un vozarrón que se podía oír desde mucha
distancia. Y la madre luego con esas montañitas que se
formaban en su frente cuando quería que todos creyéramos que estaba enfadada. Vamos hombre, que se hace
muy tarde y el niño tiene que acostarse. Y el padre Va
mujer, una partida más y nos vamos…
Ha perdido la noción del tiempo y nota el frío de la noche pero se siente bien y se resiste a marchar. Es como
si ese trozo de Júcar que llega hasta el puente de San
Antón se hubiera desviado de su cauce penetrando por
sus huesos y se hubiera apoderado de sus venas. El río
le trae también los juegos en la Piedra del Caballo donde
iba a bañarse aun con la seguridad de que eso le iba a
suponer una fuerte regañina en casa. Pero si no pasa
nada, casi no lleva agua y además iban todos mis amigos… Era la misma cantinela en forma de excusa repetida siempre, la amenaza del castigo que no pasaba de
ahí y al cabo de los días de nuevo escabullirse del barrio
para bajar al río y mojarse siempre los zapatos Gorila,
aquellos que iban siempre acompañados de una pelota
verde de goma con relieve y que hacía más ilusión que
los propios zapatos que nunca se rompían.
El caminante sabe que va a tardar en volver. No lo quiere pero sabe que será así. Por eso, casi ansioso, como un
ladrón de recuerdos quiere retener todas las sensaciones que aquel paisaje le devuelve con una abundancia
inusitada. Está aterido y sabe que tiene que comenzar
el camino del adiós. Tal vez nunca más sus pies pisen
esas piedras ni sus manos acaricien los relieves de un
abanico esculpido en un muro. Le cuesta levantarse pero
tiene que hacerlo. El cuerpo está como dormido, casi
inerte. Lentamente comienza a subir la cuesta y antes
de traspasar el arco ojival de la Puerta de San Juan no
puede evitar una mirada hacia su espalda que se ha convertido esa noche en pasado removido y en ensoñación
cercana. Apenas si se distingue nada. Todo es noche
negra. Respira hondo, se yergue y continúa el camino
de regreso. Un regusto a vino tinto con gaseosa le ayuda
a marchar.
46
Memorias de la
Baja de San Pedro
por María Medina Palomares
Estas son las memorias de una niña, que hoy día, aún siendo joven, ya es abuela, pero que
estuvo en la Casa Cuenca desde los años en que la Casa de Cuenca se encontraba en la calle
Baja de San Pedro, y dicen así:
<<Era septiembre, el día no me acuerdo, del año 1962,
fue una tarde de domingo cuando, de la mano de mi tío
Ildefonso vine por primera vez a la Casa de Cuenca.
Recuerdo que la escalera para acceder a la Casa era estrecha; nos abrió la puerta un señor delgado con gafas
de aumento y una gorra de plato en la que se podía leer
“Casa de Cuenca”, era el portero.
-¡Hola! -nos dijo- ¿me traes el transistor que te encargué?
-Sí, espera, que prepararé las entradas y te lo dará mi
sobrina, que viene conmigo.
-Ya veo que traes secretaria.
Don Valeriano, que no hablaba, pero se hacía entender,
me dijo:
-¿Quién es tu tío?
-Mi tío Trabuco (así era como toda la familia le llamábamos).
Don Valeriano casi me fulminó con la mirada, las gafas se
le empañaron, se puso rojo, casi morado y a mí me pareció
que echaba humo por las orejas; me quedé paralizada, no
sabía qué hacer ni qué decir; menos mal que estaba mi prima y me echó un cable, aunque ella y su novio reían de tal
acontecimiento (claro, a escondidas). Después nos hicimos
amigos de doña Lorenza, y me preguntó:
Delante de la puerta de Secretaría, en un lado, había una
mesa donde dejó mi tío las entradas y el material para
el carnet de los socios.
-¿Cómo se llama tu tío?
-Estos sellos –me dijo mi tío-, cuando yo te diga, los
pegas en los carnets; entra al despacho y pide dos talonarios de entradas.
-Mi tío se llama Ildefonso Palomares.
El Salón de Baile, con sus cortinas rojas y amarillas
yo decía que eran la bandera española. En una esquina
estaba el escenario, donde tocaba la orquesta y se hacía
teatro; como el escenario era pequeño la orquesta no
podía ser grande y el teatro se limitaba a hacer sainetes,
que no necesitan mucho montaje y hacen pasar buenos
ratos a los asistentes.
Toda dispuesta entré en Secretaría.
-Don Valeriano, ha dicho mi tío que me dé dos talonarios de entradas.
Muerta de vergüenza y toda tímida, le contesté:
47
Recuerdo que el señor que tocaba el piano era un poco
bajito, moreno, usaba gafas para ver y corregir el estrabismo; en el fondo estaba el batería, que no me acuerdo
cómo se llamaba, el saxo creo que se llamaba Agustín,
un señor alto con pelo de cepillo, era de Ledaña; el cantante era un chico que al mismo tiempo leía y cantaba
las canciones; tenía novia y a la pobre la tenía castigada
toda la tarde sentada en una silla al lado del escenario.
Había unos bancos que rodeaban todo el salón, donde se
sentaban las madres que acompañaban a sus hijas.
El suelo era de madera, una tarima y parqué muy viejo,
sobre el que mi tío no paraba de repetir que no arrastráramos los pies, que se levantaba.
En aquella época yo tenía prohibido entrar en el salón
porque era pequeña y, junto con otros niños y niñas,
cuando se descuidaban nos colábamos y nos escondíamos detrás de las cortinas, pero el señor que vigilaba siempre acababa encontrándonos (le pusimos de
mote don Floripondio). Era divertido verle en el salón
vigilando que las parejas no se acercasen demasiado;
no paraba de decir: que corra el aire, no se podía bailar
pegado; eso era porque todavía no se conocía la canción
de Sergio Dalmas; eso vino bastante después, muchos
años después. La verdad es que me alegro de que en
aquel entonces yo fuera pequeña porque un poco de mal
genio sí que tenía el señor del bigote.
En el otro salón se encontraba el bar, la sala de juegos
y de tertulias, y la televisión. Era un habitáculo muy
peculiar: no estaba muy limpio que digamos, los cristales detectaban el ambiente de tabaco, las mesas eran
de fórmica ya desgastadas por el uso. El televisor se
encontraba en el fondo del salón; recuerdo las tardes de
los domingos, que veía: “Bonanza”, “Rintintín”, la perrita “Marilyn” y un ratón muy simpático que se llamaba
“Topo Gigo”, “Escala en Hi.Fi”, que lo presentaba un
cantante que se llamaba Juan Erasmo Mochi.
En verano solíamos salir a la terraza; las mesas eran de
madera pintadas de rojo y verde y recordaban los chiringuitos de la Barceloneta. Fue una época que recuerdo
con gran cariño, conocí a mucha buna gente: venía un
matrimonio que eran recién casados; él era un señor
muy elegante, llevaba una cámara fotográfica colgada
de su cuello con una correa roja; ella era una señora
muy moderna, llevaba unos pañuelos muy bonitos que
le daban un toque de distinción, algo que la gente provinciana no estaba acostumbrada a ver.
Cuando era un poco mayor me dejaban entrar en el salón de baile, pero estaba muy cambiado: ya no era el
suelo de madera y no estaban las cortinas de bandera
española, la orquesta seguía siendo la misma, el cantante también, seguía leyendo y cantaba “La Chica Yeyé”;
la novia seguía en el mismo sitio. ¡lo qué hay que hacer
por amor!
Un día fue domingo, otro más, pero aquel no fue otro
más, aquel domingo cambió mi vida, conocí a dos chicos que son de Cañete y ¿quién me iba a decir a mí en
aquel entonces que, después de pasar unos años, me
casaría con uno de ellos?
El cañetero que es mi marido se llama Vicente, tuvimos
una niña, Mª Eugenia, que formó parte del grupo de
teatro y de baile; la verdad es que fue una época en la
que andábamos muy ocupados, la niña bailaba, el padre,
pluriempleado, cantaba en la coral con el Grupo de Jotas, jugaba al fútbol en el equipo de la Casa de Cuenca
y hacía teatro, yo bordaba un refajo y también hacía
teatro. ¡qué días tan bonitos de carrera y de ajetreo, con
cuantos chicos salimos!: Lito, Dani, José Manuel entre
unas veinte niñas; fue el ramillete más bonito del Grupo
de Baile que yo recuerdo; representando a la Casa de
Cuenca fuimos a muchos sitios, incluso estuvimos en
Francia y ¡qué gracia y arte, cuando, con el traje de
serranas bailaban por sevillanas!
La Rondalla, formada por Paco Lucas, Miguel, Benjamín, Pedro y el Maño, cantando Viky, Petra y Vicente.
Buenos comienzos, después vinieron más.
El Grupo de Teatro, en el que formaban pate: Ángel
Martínez, como director, Ramón Quintana, Antonio
Martínez, David Sanz, Nuria Sanz, Carlos Lamas, Isabel
Lamas, Mercedes Domínguez, Jesús López, Jorge Seguí.
Sandra García, Victoria Martínez, Marcelino Sepúlveda,
Eva Sepúlveda, Ana Sepúlveda, Carolina Merino, Eva
Crespo, y otros, también tuvo su momento: en Pont de
Vilomara, Madrid, y como broche de oro en el Corral
de Comedias de Almagro, allí nos regalaron berenjenas
y todos compramos un queso. A lo largo de estos años
hemos compartido muchas cosas, yo he colaborado en
todo lo que he podido y siempre que pueda y el tiempo
lo permita, lo seguiré haciendo.
En la calle Baja de San Pedro, años dulces de niñez,
adolescente de descaro y timidez, despertar a la vida
y crecer. En la calle Montaña me enamoré, he seguido
creciendo, adquiriendo madurez y si volviese a nacer
volvería a empezar lo mismo que en el año 1962, que de
la mano me trajeron por primera vez. Porque la tierra de
donde somos se siente, costumbres de pueblo, de gente
sencilla que te ayudan a crecer>>.
48
Nostalgia
y
Agradecimiento
por Charo de la Calle
Ya estamos en el 50 Aniversario de la fundación de la
Casa de Cuenca en Barcelona, y después de tantos años de
esperanza, de trabajo y de ilusión, el balance es muy positivo en líneas generales, aunque en el camino hayamos
encontrado “piedrecitas”, pero como todo trabajo humano
es imposible que sea perfecto. Así, pues, nos quedamos
con todo lo bueno y positivo, y continuaremos luchando
como siempre para intentar mejorarlo, ya que con buena
voluntad y tesón todo es posible. ¡Cómo lo hicieron los
fundadores, lo continuaron los siguientes, y ahora vosotros! Y esperamos y deseamos que continúen los demás,
los que nos sigan. ¡Bien vale la pena, de verdad!
Tanto Carlos como yo siempre, siempre estaremos agradecidos a la Casa de Cuenca por sus magníficas gentes.
Cuando nos casamos toda mi familia residía en Madrid y
Carlos era hijo único; se puede decir que estábamos solitos.
Cuando eres joven te comes el mundo y puedes con todo
lo que te echen, pase lo que pase; pero la vida y el tiempo
lo ponen todo en su lugar.
Ya que Carlos y su padre eran socios fundadores de la
Casa de Cuenca en Barcelona, cuando vine aquí después
de casarme no me encontré tan sola como esperaba; me
supisteis arropar con vuestro cariño e intentasteis comprender mi caracter al faltarme mis padres y mis queridas
hermanejas aquí. Con cariño y buena voluntad todo se
consigue; pasaron los años y me adapté maravillosamente
a mi nuevo sistema de vida. Y todo fue gracias a todos
vosotros que me enseñasteis a querer y a convivir con los
conquenses.
En el mundo no puede haber fronteras ideológicas, ni
políticas, ni religiosas; sólo amor, comprensión y buena
49
voluntad, y todos estos ingredientes imperan en nuestra
querida Casa de Cuenca en Barcelona. Por eso sigue viva
y activa, aunque, por desgracia con no mucha juventud.
¡Muchachas, muchachos, animaros! La Casa de Cuenca os
necesita. Tenemos una Reina, nuestra Judith, una preciosidad, en lo físico, en lo humano y en lo intelectual, es una
de nuestras mejores representantes; prueba de ello es que
este año ha sido nombrada Reina de todas las Casas Regionales de Cataluña. Un orgullo y una satisfacción. Muchas
gracias a los que supieron elegirla, y también por ser uno
de los broches de oro de nuestro Cincuentenario.
Ahora deseo contaros una vivencia muy personal que
compartí con las señoras de la Casa de Cuenca: al paso de
los años, y como los padres se fueron haciendo mayores
y con problemas de salud, el resultado fue que me traje a
mis padres a vivir y convivir a Barcelona, junto con los de
Carlos. Así que, juntitos los seis, supimos aguantarnos y
querernos porque había cariño y respeto.
Los dos padres se llevaron un año en morir; las madres
tres años, pero antes estuvieron inválidas mucho tiempo; lo peor fue que algunas veces había que ingresarlas
a alguna de ellas. Pero cuando más oscuro estaba apareció Bene; nuestra querida Bene movilizó a todas las
señoras de la Casa de Cuenca y todas ellas respondieron
sin excepción para lo que hiciera falta. El hecho fue
que mis madres nunca estuvieron solas y tristes cuando estuvieron hospitalizadas, durante el día se turnaban
las señoras de la Casa y por la noche me quedaba yo.
. ¡Puede haber algo más bonito y grande en esta vida!
Tuvimos también la ayuda de nuestras primas y de vecinos. A todos ellos nuestro mayor y más sincero agradecimiento con nuestro cariño.
50
Cuenca
¿Por qué hemos tenido que oír más de una vez que Cuenca
es “la bella d-esconocida”? Cuenca tiene el derecho de ser
“bella y conocida”; la belleza no se la puede quitar nadie
porque la lleva dentro desde hace muchos siglos. Y esa
gran belleza de Cuenca bien merece la pena que la conozcan, no miles, sino millones de personas.
Posiblemente este año 2010, que acaba de empezar, será el
inicio de una etapa con una proyección hacia un largo futuro. Ahora el Ayuntamiento de Cuenca y la Presidencia de
Castilla-La Mancha, en buena sintonía, se esfuerzan para
garantizar que Cuenca, además de ser bella, sea moderna,
con infraestructuras apropiadas para ser la Capital de la
Cultura Europea en 2016.
Pero este proyecto no sólo incumbe a organismos oficiales y oficiosos, incum-be también a los conquenses. Como
conquense que soy, y lo he ido pregonando siempre y en
todo lugar porque me siento orgulloso de serlo, creo que los
2016
conquenses tenemos el deber moral de promocionar Cuenca donde estemos y, si podemos, que nuestra promoción
llegue a conocimiento de nacionales e internacionales. Si
queremos que Cuenca sea la Capital de la Cultura Europea
en 2016, Cuenca debe ser conocida en toda Europa: Portugal, Inglaterra, Irlanda, Islandia, Suecia, Noruega,
Finlandia. Francia, Alemania, Italia, Grecia, Hungría. Rumanía, Polonia, Austria, Es-lovaquia, Chequia, Rusia, Bielorrusia, Ucrania, y otras naciones europeas.
Tenemos que tener presente que todas estas naciones tienen
que saber que Cuenca es una capital europea importante.
Es por ello que todos los conquenses que podamos tenemos
que informar a todas la naciones que Cuenca tiene que ser
tenida en cuenta para cualquier proyecto europeo que signifique unión de gentes, cooperación internacional.
Cuenca en su sencillez ha sido siempre acogedora de todo
el que ha venido a ella; debemos prepararnos para recibir
51
a muchas más personas, de diferentes lenguas, diferentes
costumbres, que vengan a Cuenca y que se den cuenta que
no han perdido el tiempo al venir a vernos, que bien ha
merecido la pena venir.
Debemos desterrar de nuestras mentes aquello de que
“de fueran vendrán, que de casa nos echarán”, de casa
no nos echará nadie si sabemos honrarla de forma que
los que hayan venido puedan decir. “qué buenas personas son los conquenses, tanto ellos como ellas, y
cuanto hemos aprendido de Cuenca, de su historia, de
su arte, de su cultura, de su gastronomía; lo que nos
hubiéramos perdido si no llegamos a venir”. Para que
esto ocurra debemos ser como somos: sencillos y honrados, pero sin miedo; tenemos muchas cosas buenas que
ofrecer a los que tienen la gran suerte de venir a ver
nuestra Cuenca.
Sugiero que poco a poco, entre todos, tenemos que tener
conquenses que hablen al menos: inglés, francés, italiano
o alemán para atender a todo el que venga.
Tengamos presente que Cuenca es, ante todo, una capital
de Castilla-La Mancha, de España, y también de Europa;
no nos tenemos que conformar con menos.
Como quiera que este año la CASA DE CUENCA en BARCELONA, cumple 50 años de su fundación, desde este Boletín Informativo deseamos con ilusión pedir a todos los
lectores del mismo que tengan en cuenta a esta Casa de
los Conquenses y de los Amigos de Cuenca para cualquier colaboración en la promoción de Cuenca, Capital de
la Cultura Europea 2016.
Carlos Hernáiz Fernández

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