boletin cania 17 - Centro de Atención Nutricional Infantil Antímano
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boletin cania 17 - Centro de Atención Nutricional Infantil Antímano
Boletín de Nutrición Infantil CANIA 2008. Año 11. Nº 17 Contenido Editorial. [3] Alimentación y salud La tuberculosis pulmonar en pediatría. [4] Ismenia Chaustre El plátano. [10] Hajaira Vergara de Gutiérrez De buena fuente Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental. Rol del psicólogo en la comunidad. [15] Fernando Giuliani CANIA: Experiencias y resultados Información y educación nutricional en el programa de nutrición comunitaria. [29] Omaira Pláceres de Martínez La madre sola como factor de riesgo social en nutrición. [36] William González, Edihovert Nahr, Carmen Naranjo, Yulimar Guánchez Personalidades José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla". [43] Mariela Martín Paesano Editorial En 2008 arribamos a trece años de labores en CANIA que representan los peldaños que sustentan nuestro empeño de continuar trabajando en llevar salud y nutrición a nuestra parroquia sede, Antímano, y a otras comunidades donde se nos demande esa tarea; nuestro Boletín de Nutrición Infantil CANIA es el órgano testimonial de este compromiso. En esta oportunidad entregamos su edición Nº 17 para seguir cumpliendo con la responsabilidad que nos fue encomendada y que aplicamos con rigor. Abre sus páginas la doctora Ismenia Chaustre poniendo sobre el tapete el tema de la tuberculosis entre los niños, integrando en su visión a los adultos, afectados o no de ese flagelo que se ha vuelto alarmante, debido a que en pleno siglo XXI se encuentra frecuentemente presente en vastos territorios del mundo. En su artículo, Chaustre ofrece una amplia perspectiva sobre la enfermedad que abarca su historia, clínica, diagnóstico, tratamiento y prevención así como la manera en que nuestro país está preparado para enfrentarla. A continuación el lector hallará un refrescante artículo de la nutricionista Hajaira Vergara de Gutiérrez, donde nos instruye sobre las propiedades nutricionales del plátano. Las características del fruto, su cultivo y producción e incluso un breve recetario de las suculencias que adopta en las distintas regiones en la cocina venezolana forman parte de este escrito. En la sección De buena fuente, Fernando Giuliani nos aporta su visión del papel responsable que está llamado a desempeñar el profesional de la psicología social comunitaria (en este caso en materia de salud mental) en contextos sociales muy conflictivos; señala en esa dirección la necesidad de una profunda comprensión de las relaciones que tienen lugar en las barriadas para definir mejor el sentido y verdadero beneficio de los proyectos en comunidad. El Programa de Nutrición Comunitaria que CANIA custodia y dirige a la parroquia de Antímano es minuciosamente evaluado por Omaira Pláceres de Martínez, del plantel de coordinadores de CANIA. El balance es positivo. "La madre sola como factor de riesgo social en nutrición" es una interesante investigación emprendida por la Coordinación Social de CANIA que se centra, básicamente, en explicar una situación que poco a poco se torna compleja: la modalidad de la familia monoparental en franco ascenso en América Latina, con la madre encabezando generalmente el hogar y _lo que más nos interesa observar_ sus repercusiones en la alimentación de los hijos. La condición vulnerable de madre sola, puede fomentar la malnutrición, ésta es la premisa de este trabajo clarificador e inquietante. Por último, por mediación de nuestra comunicadora social Mariela Martín Paesano, tenemos en nuestras páginas la voz y la presencia autorizada de un hombre que atiende con igual placer a la historia y a la cocina; se trata de José Rafael Lovera, historiador y director fundador del Centro de Estudios Gastronómicos (Cega), quien comparte su exitosa experiencia en la tarea de instruir sobre nuestro sabor y saber alimentario. Dr. Vicente Pérez Dávila Presidente Junta Directiva 3 Ismenia Chaustre Alimentación y Salud La tuberculosis pulmonar en pediatría Ismenia Chaustre Médico cirujano egresada de la Universidad Central de Venezuela (1986); postgrado en Puericultura y Pediatría (1989-1991) UCV, Hospital de Niños J.M. de Los Ríos y postgrado en Neumonología pediátrica (1993-1994) en el mismo hospital. Adjunto del Servicio de Neumo-pediatría V. Hospital Luisa Cáceres de Arismendi. Complejo Hospitalario Este microorganismo que ha afectado a miles de personas en el mundo durante años, se ha encontrado en las momias egipcias y está descrito por Hipócrates (Nacional Tuberculosis Center, 2000). Es una enfermedad contagiosa diseminada principalmente por las gotitas de saliva expelidas por personas con enfermedad fímica pulmonar o laríngea cuando tosen, estornudan, se ríen, cantan o hablan. Aquellos contactos más cercanos son lo que están en mayor riesgo[1]. Las partículas del bacilo tuberculoso pueden permanecer suspendidas en el aire por varias horas. Por lo tanto, los factores que predicen la transmisión de la tuberculosis de persona a persona son: (a) el número de bacilos expelidos en el aire y su concentración, (b) la duración de la exposición y (c) la condición del sistema inmunológico del huésped. Así, los que se encuentran en mayor riesgo de ser infectados son aquéllos con contacto prolongado, frecuente o intenso con una persona enferma de tuberculosis[1]. José Ignacio Baldó en Caracas (1995-2000). Adjunto del Servicio de Neumonología en el Hospital de Niños J.M. de Los Ríos (2000-2003). Coordinadora Distrital del Programa de Tuberculosis y Asma. Distrito Sanitario Nº 1. Alcaldía Mayor/Ministerio de Salud (2004-2006). Coordinadora de la Unidad de Referencia Nacional para Fibrosis Quística del Hospital de Niños J.M. de Los Ríos desde 2006. L a tuberculosis sigue siendo, en el inicio de este nuevo milenio, la enfermedad infecciosa humana más importante que existe en el mundo y es la causa más frecuente de muerte por infecciones a nivel mundial. En 1993 la Organización Mundial de la Salud, declaró a la tuberculosis como una emergencia en salud pública a nivel mundial. Mycobacterium tuberculosis es la causa más común de tuberculosis. Otros organismos más raramente involucrados son el Mycobacterium bovis y el Mycobacterium africanum. 4 La tuberculosis pulmonar en pediatría través de los vasos linfáticos hacia los ganglios linfáticos hiliares constituyendo así la linfadenopatia hiliar y el Foco de Ghon, el complejo primario. Estos bacilos infectantes pueden diseminarse por vía sanguínea al resto del organismo desencadenando una respuesta inmunitaria (celular y de hipersensibilidad retardada) que se establece después de cuatro a seis semanas. Son la carga bacilar y la respuesta inmunitaria los determinantes de las reacciones futuras. La respuesta inmunitaria tiene como objetivo detener la multiplicación del bacilo, sin embargo, algunos bacilos en estado latente pueden persistir y, cuando la respuesta inmunitaria no sea suficiente para detener este crecimiento, la enfermedad se desarrolla en pocos meses[5]. Por lo tanto, el resultado de una primoinfección tuberculosa se puede presentar en el 90% de los casos sin enfermedad clínica, o puede presentarse una reacción de hipersensibilidad (eritema nodoso, etc.), complicaciones pulmonares y pleurales (neumonía tuberculosa, etc.) o enfermedad diseminada (meningitis, pericarditis, miliar, etc.). De los pacientes con tuberculosis pulmonar que no reciben tratamiento, el 50% morirá en un lapso de cinco años, el 25% se curará sólo por la respuesta de sus propios mecanismos de defensa y 25% se convertirán en enfermos crónicos e infecciosos[5]. Los niños expuestos a adultos con esputo positivo para tuberculosis también tienen un riesgo de contagio alto, el cual aumenta de acuerdo con el grado de contacto. Publicaciones de países con prevalencia de tuberculosis alta señalan que el riesgo de los niños en contacto con adultos enfermos es de aproximadamente 30-50%, lo cual es más elevado que en los países industrializados[2]. Historia natural de la enfermedad El bacilo de la tuberculosis se transmite principalmente por dos vías de entrada: 1) por inhalación hasta en un 98%; 2) por vía digestiva. Puede adquirirse por contacto directo en heridas de piel y por otras vías menos frecuentes e importantes. La infección congénita, aunque rara, puede adquirirse cuando la madre tiene diseminación linfohematógena durante el embarazo, o bien por endometritis crónica. El período de incubación puede variar de semanas a meses, incluso años; sin embargo, se considera como rango de 19 a 56 días desde el momento de la inoculación del bacilo. Al contacto de un paciente con el bacilo se le denomina primoinfección y cuando ésta no involuciona a la curación, produce enfermedad. Con relativa frecuencia se piensa que el término de primoinfección implica actividad patológica, sin embargo, esto sólo significa contacto por primera vez con el bacilo, con formación de complejo primario y eventual cicatrización en la mayoría de los casos. A diferencia de los adultos, los niños con tuberculosis clásica de la infancia no son fuente de contagio para otros como lo demuestran numerosos estudios, aún así, aquellos niños que desarrollan una forma de tuberculosis del adulto con bacilo de Koch positivo en esputo y cavidades pulmonares, pueden ser infecciosos a otros[3]. La infección primaria se presenta en la exposición inicial al bacilo tuberculoso; comienza su multiplicación a nivel pulmonar conocida como Foco de Gohn, pudiendo drenar estos bacilos a Clínica La mayoría de los pacientes con infección tuberculosa no desarrolla signos o síntomas en ningún momento. Ocasionalmente el inicio de la infección está marcada por varios días de febrícula y/o escasa tos. Raras veces los niños experimentan fiebre elevada, tos, decaimiento y síntomas de gripe que se resuelven prontamente. Del 25 al 35% de los niños tendrán una presentación extrapulmonar cuya forma más frecuente es la linfática, seguida por la meníngea. 5 La tuberculosis pulmonar en pediatría más sensibles y rápidos, vale la pena mencionar la coloración auraminerhodamine con microscopia fluorescente. Así mismo el cultivo del esputo positivo[4]. * La prueba cutánea de Tuberculina (Mantoux) PPD, es de poco valor diagnóstico en países de alta prevalencia de tuberculosis como el nuestro y, aunque no es 100% sensible ni específica, se realiza frecuentemente para la orientación de casos de pacientes con criterios bien definidos (contactos menores de 4 años, HIV, entre otros), debiéndose colocar en forma intradérmica y medir su reacción a las 48-72 horas, que es cuando la máxima induración puede ocurrir. Una prueba tuberculina positiva no distingue por sí sola la infección vs. la enfermedad por M. tuberculosis, ya que una exposición previa a micobacterias ambientales puede resultar en un falso positivo, o si hay un estado de desnutrición grave y la tuberculosis miliar puede dar un falso negativo. * En la radiografía de tórax lo más llamativo es la marcada adenomegalia comparada con el foco pulmonar, la cual, en la mayoría de los casos, pudiera resolverse espontáneamente, sin embargo, los ganglios linfáticos mediastinales e hiliares continúan aumentando de tamaño pudiendo producir obstrucción bronquial parcial por compresión externa, causando atrapamiento aéreo e hiperinflación; también en ocasiones pueden infiltrar la pared bronquial y drenar el caseum al bronquio afectado con la consecuente atelectasia o diseminación bronquial. Otra forma de presentación radiográfica de la tuberculosis primaria o infantil es la neumonía, que de progresar, lleva a la destrucción del parénquima, licuefacción y formación de una cavidad en el parénquima pulmonar distinta a la cavitación que se aprecia en la tuberculosis del adulto o postprimaria. Sin embargo, ningún patrón radiológico es absolutamente típico de la tuberculosis pulmonar[3]. Las manifestaciones clínicas de la enfermedad tienden a diferir dependiendo de la edad de inicio; así los preescolares y adolescentes son propensos a presentar síntomas significativos, mientras que los escolares pueden cursar con una enfermedad clínicamente silente. Entre los lactantes se puede esperar mayor sintomatología, probablemente debido al menor tamaño de sus vías aéreas y al aumento del tamaño de los ganglios linfáticos, tales como tos no productiva, disnea, fiebre, sudoración nocturna, anorexia, ganancia pobre de peso, etc. Cuando se trata de una reactivación podemos observar grandes infiltrados o cavidades acompañadas de fiebre, anorexia, pérdida de peso, decaimiento, sudoración, dolor toráxico y hemoptisis[3]. Las formas más frecuentes de tuberculosis extrapulmonar en niños son la linfática y la meníngea[3]. Existen varias enfermedades que pudieran ser similares en su presentación a la tuberculosis por lo que debemos siempre hacer un buen ejercicio clínico y realizar un diagnóstico diferencial con asma, insuficiencia cardíaca congestiva, enfermedad obstructiva pulmonar, bronquiectasias, carcinoma bronquial, neumonía bacteriana, etc. Diagnóstico El tamizaje clínico por medio de la evaluación de los síntomas identifica a los pacientes que podrían tener tuberculosis pulmonar, por lo tanto, los métodos de diagnóstico tradicionales sobre los cuales descansa el Programa Nacional de Tuberculosis son: * Historia clínica completa y alto índice de sospecha, identificando al sintomático respiratorio, que es aquel paciente mayor de 15 años, con tos productiva, con o sin sangre, de mas de 3 semanas de evolución. * Baciloscopia: es el diagnóstico microscópico del frotis de esputo. La coloración de ZiehlNielsen es el método tradicional para visualizar la micobacteria en las muestras biológicas. Entre otros métodos usados, quizás 6 La tuberculosis pulmonar en pediatría Actualmente se han venido utilizando y desarrollando otros métodos tales como [7,8]: * Cultivo radiométrico BACTEC. * Cromatografía. * Métodos de serodiagnóstico mediante análisis de DNA. * Medios de cultivos bifásicos no radiométricos (MB-epti-check). " Reacción en cadena de la polimerasa (PCR), capaz de detectar la presencia de menos de 10 bacilos (hasta un bacilo) en una muestra, utilizando una técnica de ampliación de DNA, obteniendo resultados de dos a veinticuatro horas. * Presencia de receptores de interleuquina. * Uso de broncoscopio para toma de muestras. * Inmunodiagnóstico con Elisa, utilizando antígeno 60 y antígeno E5, para detección de IgG. * Tomografía axial computarizada. * Resonancia magnética, sobre todo en tuberculosis espinal. * Ultrasonido. Mientras el diagnóstico en el adulto se basa fundamentalmente en los estudios bacteriológicos, en el niño, en tan sólo un pequeño porcentaje, estas técnicas son útiles, por lo que otros métodos diagnósticos indirectos adquieren aquí una mayor importancia. Así, el diagnóstico de enfermedad tuberculosa en niños no siempre es tan claro, por lo que se utilizan los criterios de Stegen-Toledo, que se basan en la puntuación de ciertos criterios para establecer un puntaje final que define la posibilidad cierta de enfermedad permitiendo decidir instaurar un tratamiento o ensayo terapéutico[7]. Estos criterios son: * Criterio clínico: presentación clínica sugestiva. 2 puntos * Criterio epidemiológico: contacto con enfermo tuberculoso. 2 puntos * Criterio bacteriológico: baciloscopia y/o cultivo positivo. 7 puntos * Criterio radiológico: radiología de tórax patológica. 2 puntos * Criterio inmunológico: PPD positivo. 3 puntos * Criterio anatomopatológico: granuloma tuberculoso. 4 puntos La tuberculosis postprimaria se presenta a continuación, puede ser el resultado de una reactivación (bacilo latente presente reactivado por debilitamiento del sistema inmune o por infección HIV, por ejemplo) en una persona que ya ha tenido infección primaria anteriormente; generalmente afecta a los pulmones y sus características son: destrucción pulmonar extensa acompañada de cavitación, baciloscopia de esputo positiva y ausencia de adenomegalias. Interpretación: altamente probable 7 puntos, probable tuberculosis de 5 a 6 puntos, sospechoso de tuberculosis de 3 a 4 puntos, muy poco probable tuberculosis 0 a 2 puntos[8]. Otros métodos diagnósticos Un medio muy importante de diagnóstico que tiene como ventaja requerir menor concentración de bacilos para dar un resultado claro y permitir la identificación de la micobacteria, es el cultivo de la muestra de esputo que regularmente se realiza en medio de Lowestein - Jensen o de middlebroock, considerados de alta especificidad y sensibilidad, sin embargo, una desventaja es el tiempo para obtener resultados: de seis a ocho semanas. Tratamiento El tratamiento de la enfermedad tuberculosa tiene la característica de ser un tratamiento totalmente supervisado, este esquema se denomina Dot (Directed Observed Therapy) según sus siglas en 7 La tuberculosis pulmonar en pediatría Prevención inglés o Taes que significa Tratamiento administrado estrictamente supervisado. Su objetivo básico es reducir la mortalidad (OMS). La Unión Internacional contra la Tuberculosis (Uicter) y el Programa Nacional de Tuberculosis del Ministerio del Poder Popular para la Salud en Venezuela recomiendan esquemas estándares de tratamiento para la tuberculosis, que administrados correctamente logran las metas y objetivos descritos. Las drogas contempladas en el protocolo de tratamiento son básicamente cuatro en la primera fase y luego dos en la segunda fase. Estas drogas suelen ser Isoniacida, Rifampicina, Pirazinamida, Etambutol y/o Estreptomicina y la combinación de estos fármacos depende de la edad del paciente, ya que existen esquemas para los pacientes en edad pediátrica y para los pacientes en edad adulta. En la primera fase hay una eliminación rápida de los bacilos tuberculosos. Los pacientes dejan de ser infecciosos en aproximadamente dos semanas, los síntomas mejoran y la mayoría de estos pacientes con esputo positivo se convierten a esputo negativo. La segunda fase o de continuación incluye menor número de medicamentos pero es por un período más prolongado. El tratamiento completo dura seis meses debido a la dificultad que presenta la exterminación de los bacilos persistentes. Combinaciones inadecuadas de medicamentos antituberculosos, tratamientos administrados indebidamente o con una duración incorrecta, generarán bacilos resistentes y formas de enfermedad grave que ameritarán esquemas de tratamiento más complejos y prolongados[5]. Existen condiciones especiales que ameritan esquemas de tratamiento diferentes como el embarazo, insuficiencia renal, enfermedad hepática, tratamiento con antiretrovirales, etc., los cuales son manejados por el especialista conjuntamente con la Dirección Nacional del Programa de Tuberculosis[6]. Desde el punto de vista de salud pública, la mejor manera de prevenir la tuberculosis es tratando eficazmente todos los casos infecciosos con lo cual se interrumpe la cadena de transmisión. Sin embargo, existen ciertas medidas que se recomiendan para evitar una exposición inadecuada. En la mayoría del mundo, el único método disponible para prevenir la tuberculosis y sus formas más graves en niños es la administración de la vacuna de Calmett-Guérin (BCG). Esta es una vacuna viva atenuada, que se administra en forma intradérmica en el brazo derecho a los recién nacidos y menores de quince años sin cicatriz BCG evidente[6]. Esta vacuna protege a los niños de las formas graves y diseminadas de tuberculosis como son la tuberculosis meníngea y miliar, pero prácticamente no tiene efecto en la reducción del número de casos de adultos con tuberculosis pulmonar. Profilaxis Los niños corren un riesgo especial de desarrollar la enfermedad al entrar en contacto con un adulto enfermo con tuberculosis, por lo tanto para evitar la progresión de una infección por el bacilo tuberculoso se han definido ciertos criterios para administrar un tratamiento profiláctico en estos pacientes. Según la norma oficial venezolana del Programa Integrado de Control de la Tuberculosis se recomienda la terapia profiláctica en los siguientes grupos[6]. * Infectados con VIH y un PPD mayor a 5 mm. * PPD mayor a 10 mm en personas con condiciones médicas que pueden incrementar el riesgo de presentar tuberculosis activa, tales como silicosis, desnutrición, transplantes, diabetes, etc. * Contactos menores de 4 años vacunados o no, independiente del PPD que son contactos de pacientes con tuberculosis sin evidencia de enfermedad. 8 La tuberculosis pulmonar en pediatría * Pacientes menores de catorce años sin cicatriz BCG, con PPD mayor de 10 mm que son contactos de pacientes con tuberculosis sin síntomas de enfermedad. Referencias [1] Selekman, J. "Changes in the Screening for Tuberculosis in Children". Pediatr Nurs. 2006; 32(1): 73-5. [2] Nakaoka, H.; Lawson, L.; Squire, SB.; Coulter, B.; Ravn, P.; Brock, I. et al. "Risk for Tuberculosis Among Children". Emerg Infect Dis. 2006; 12(9): 1383-88. [3] Starke, Jeffrey R. "Tuberculosis in Children". Semin Respir Crit Care Med. 2004; 25(3): 353-64. [4] Blumberg, H., Leonard, M. ACP on line 6/7/2006. [5] Harries, A.D., Maher, D. TB/VIH: Manual clínico para América Latina. Programa Mundial de Tuberculosis. Washington, D.C.: Organización Mundial de la Salud (OMS), 1998, 149p. [6] "Programa Nacional Integrado de Control de la Tuberculosis. Norma Oficial Venezolana del Programa Nacional Integrado de Control de la Tuberculosis". Caracas: Ministerio de Salud y Desarrollo Social (MSDS), 2006. [7] Caminero, J. Guía de la tuberculosis para médicos especialistas. París: Unión Internacional contra la Tuberculosis y Enfermedades Respiratorias (Uicter), 2003. [8] Montenegro et al. CID 2003; (1): 36. 9 Hajaira Vergara de Gutiérrez Nutricionista CANIA Alimentación y Salud El plátano E l plátano es una de las frutas más antiguas y versátiles cultivadas por el hombre. Pertenece a la familia de las Musáceas. Especie Musa paradisíaca (plátano macho o para cocer)[2]. Su origen se atribuye a la región indomalaya; de la India pasó a África Oriental, a las Islas Canarias y a América, difundiéndose por todo el continente[1]. El plátano es un fruto que además de ser económico y nutritivo, está disponible todo el año. Por su contenido en carbohidratos (almidón), puede emplearse como sustituto en la dieta diaria de la papa, la pasta, el arroz, el pan y los tubérculos, entre otros. Clasificación Existen diferentes clasificaciones y son innumerables las variedades de plátanos cultivadas, muchas de ellas se encuentran distribuidas de acuerdo con las condiciones climáticas locales de cada región. 10 Según las características del fruto y procedencia[3], tenemos: * Plátano macho. También llamado plátano de guisar o hartón. Se cultiva en muchas regiones de Centro y Suramérica, así como en África. Es el más grande y menos dulce, pero posee abundante fécula (almidón). Se consume cocido. * Plátano rojo. Procedente de Malasia, su piel es de color rojo oscuro y su sabor es muy similar al del plátano macho; se consume crudo. * Plátano enano. Procedente de las Islas Canarias, es más pequeño y dulce que el plátano macho o hartón; se consume crudo. Otra clasificación atribuye las variedades a localidades específicas como[4]: la Zelig de origen israelita, los plátanos enanos procedentes de las Islas Canarias, la Lacatan como variedad cultivada en la región del Caribe y Suramérica, la Poyo ori- El plátano ginaria de Guadalupe, la Grande Naine de Martinica, la Laider de Oceanía, la Balangón como una variedad cultivada en Filipinas. Haddad y Borges F., del Centro de Investigaciones Agronómicas de la Facultad de Agronomía de la Universidad Central de Venezuela[6], realizaron la siguiente clasificación de los plátanos por su grado de maduración: * Plátano pasado. De piel opaca y casi totalmente negra, un poco pegajoso al tacto y de consistencia blanda. Fácilmente carameliza y por su consistencia necesita menos cocción. Es utilizado para preparar postres, purés o al horno. * Pintón / maduro. De piel amarilla y con motas marrones o negras, de consistencia dura. Menos dulce que el plátano pasado. Con este plátano se ussa en muchas preparaciones dulces, saladas (fritos, al horno), postres, etc. * Plátano verde. De piel verde y de consistencia dura. Su sabor es poco dulce y es astringente. Es utilizado en hervidos y sopas o fritos, como en los tradicionales tostones. Características de la planta Es una herbácea perenne gigante, con rizoma corto y tallo aparente, que resulta de la unión de las vainas follares, cónico y de 3,5 a 7,5 metros de altura, terminada en una corona de hojas. Las hojas son grandes y dispuestas en forma de espiral de 2 a 4 metros de largo y hasta de medio metro de ancho[4]. Cultivo Es poco exigente en cuanto a los suelos, sin embargo, prefiere suelos arcillosos ricos en potasio, silicios y calizos, permeables, profundos y bien drenados. La plantación de este árbol debe llevarse a cabo en hoyos de sesenta centímetros de profundidad. La distancia entre una y otra planta debe ser por lo menos de tres a 3,5 metros, colocando dos plantas por hoyo, una más pequeña que la otra y desprovistas de hojas. La forma de propagación de la planta es por hijos; de la primera planta que se siembra, sólo se obtendrán frutos imperfectos. Los mejores frutos se obtendrán de los hijos de estos primeros vástagos. Al momento de la cosecha se corta la planta con fruto por el pie, dejando los hijos en la base, los cuales dan lugar a una nueva planta con fruto cada cuatro meses. El plátano exige un clima cálido (temperaturas medias entre 26 y 27 ºC) y una humedad constante en el aire. Para obtener un mejor rendimiento en el cultivo, la cantidad de agua y de aire debe estar en equilibrio. Su crecimiento se detiene a temperaturas inferiores a 18 ºC. Los vientos muy fuertes provocan daños en la planta, ocasionando pérdida en el rendimiento hasta de un 20%[4]. Fruto Morfológicamente está clasificado como un fruto sencillo, carnoso y agrupado en falsas bayas[4]. Tiene forma oblongada, alargada y algo curva; es polimorfo ya que puede contener de cinco a veinte manos, cada una portante de dos a veinte frutos. La piel puede ser de color amarillo verdoso, amarillo, amarillo rojizo o rojo en función de la variedad. El más pesado es el plátano macho que llega a unos doscientos gramos o más por unidad. La pulpa del mismo es de consistencia harinosa y su sabor poco dulce varía dependiendo del grado de maduración. El plátano Recolección Disponibilidad Los frutos se cosechan todo el año, se cortan cuando han alcanzado su completo desarrollo, es decir, cuando empiezan a amarillear y los respectivos ángulos longitudinales han adquirido cierta convexidad; luego se mantienen en un lugar cerrado, seco y cálido. El plátano se encuentra disponible en la mayoría de las regiones de nuestro país durante todo el año; la industria de alimentos también lo ha procesado siendo los tostones de plátano verde los más populares, aunque también están disponibles los de plátano maduro. A menor escala se producen la harina de plátano verde y otros productos refrigerados o congelados como tajadas, bolitas para freír, etc. Transporte Los plátanos seleccionados para exportación son colocados en cajas; se usa un plástico protector y se tapan adecuadamente; el peso de la caja depende del destino final. Internacionalmente, el envasado se realiza en cajas de cartón con un peso aproximado de 12 a 15 kilogramos. El transporte de la fruta se hace en contenedores refrigerados autónomos, con una temperatura aproximada de 14 ºC. Para el consumo nacional son trasladados verdes a granel en camiones desde el sitio de producción hasta el de distribución, abasteciendo los mercados formales y las ventas ambulantes. Aporte nutricional Los plátanos son muy ricos en hidratos de carbono, por lo cual constituyen una de las mejores fuentes de energía vegetal para nuestro organismo. También proporcionan una importante cantidad de vitaminas, minerales, fibras y sustancias de acción astringente por su contenido en taninos[7]. Cuadro 1 Contenido nutricional del plátano maduro fresco 63,4 gramos Humedad 137 calorías Energía 0,4 gramos Grasa Proteínas 1,2 gramos Hidratos de carbono 32,1 gramos 1,9 gramos Fibra 38 miligramos Fósforo 1,0 miligramos Hierro Calcio 5 miligramos Vitamina C 1,5 miligramos 158 equivalente retinol Vitamina A Vitamina B1 (Tiamina) 0,05 miligramos Vitamina B2 (Riboflavina) 0,07 miligramos Vitamina E 0,27 miligramos 0,54 miligramos Niacina B Caroteno 9,48 equivalencia total Distribución geográfica y producción Los países iberoamericanos y del Caribe producen la mayor parte de los plátanos que intervienen en el comercio internacional; este fruto es considerado el principal cultivo de las regiones húmedas y cálidas del sudoeste asiático, constituyendo un alimento importante en la dieta diaria de esas zonas. En Venezuela es difícil estimar las áreas de siembra de estos cultivos, ya que se encuentran dispersas por todo el país y aun desde pequeñas áreas tipo conucos, hasta grandes áreas con cultivos semitecnificados. La producción en el país ha experimentado un gran desarrollo debido a la enorme demanda nacional e internacional, así como por el crecimiento de su proceso industrial. Se cultiva en los estados Zulia, Barinas, Miranda, Táchira, Trujillo, Mérida, Carabobo y Yaracuy[8]. Fuente: Tabla de composición de Alimentos INN, 2001. Selección, almacenamiento y conservación Al momento de seleccionarse el fruto debe tener apariencia fresca, sana y consistente, exento de daños; se debe tomar en cuenta el tipo de preparación para escogerlo. Para evitar que se dañe, es útil seleccionarlo en distintos grados de maduración. 12 El plátano mente preparadas en oriente, o como ingrediente de los sancochos. El consumo de los plátanos maduros es variado: en forma de tajadas acompañan a nuestro tradicional pabellón criollo, principalmente en la zona central del país. Los plátanos horneados solos o dulces (con canela, papelón y clavitos de especie), se sirven con muchos platos en nuestra gastronomía. Como postres se presentan en forma de torta, cuya preparación difiere según las diferentes regiones. En los desayunos zulianos es frecuente encontrarlos en preparaciones como el yoyo; horneados o cocidos con queso y mantequilla, o pintones asados en sopa de leche. Sus hojas también son empleadas en nuestra cocina; los indios envolvían su caza y las comidas que transportaban en las hojas de plátano. Y también las usaban para comer. En ellas se envuelve nuestra deliciosa hallaca, única tradición indígena de la cocina venezolana que permanece. En hojas de plátano también se envuelven "las carabinas", hallaquitas de maíz rellenas con caraotas picantes, que se preparan en Los Andes. En nuestras costas se emplean para envolver el pescado relleno que se asa a la brasa. Las hojas secas se utilizan para envolver los ricos bocadillos de plátano o guayaba, dulce típico del país. Los plátanos se pueden mantener a temperatura ambiente durante una semana, colocados en un lugar fresco y seco; es posible conservarlos refrigerados cuando se desea retardar el proceso de maduración. La congelación también es una alternativa de almacenamiento cuando se impone conservarlos por un tiempo mayor a una semana; para realizar este procedimiento ha de preverse la forma de preparación en la que serán utilizados realizando los cortes necesarios; una vez elaborados se disponen en la ración a utilizar en bolsas o envases plásticos herméticos. Preparación Venezuela, por ser un país caribeño y de alta tasa de producción de plátanos, lo incluye en innumerables formas de preparación, algunas de ellas con matices de las diferentes regiones del país o asociadas con celebraciones. Dentro del menú, estas preparaciones pueden conformar el plato principal, el acompañante o el postre. Como plato principal y único están los patacones y las hallacas de plátano, típicos del estado Zulia, los pasteles como el de Chucho en oriente o el de berenjena en el centro del país. Como acompañante puede estar presente verde o maduro. El plátano verde se consume en forma de tostones en las zonas costeras; sancochado en Los Andes; en bolas, frecuente- 13 El plátano RECETAS Torta bicolor de plátano Ingredientes Preparación Relleno 2 plátanos maduros fritos en tajadas 1 ½ tazas de queso blanco rallado Crema 3 huevos 1 taza de azúcar 1 ½ tazas de harina de trigo leudante 1 panela de margarina ½ taza de leche líquida completa 1 cucharadita de polvo para hornear Vainilla al gusto Crema: bata la margarina con el azúcar, agregue los huevos uno a uno sin dejar de batir, coloque la harina mezclada con el polvo de hornear intercalando con la leche líquida, por último agregue la vainilla. Pastel: vierta una porción (1/3 de la crema) en un molde engrasado y enharinado, coloque una capa de tajada seguida de una capa de queso rallado. Repita sucesivamente hasta cubrir con la crema restante. Hornee durante 40 minutos y probar con la punta de un cuchillo hasta que salga limpio. Bolitas de plátano Ingredientes Preparación 1 ½ plátanos verdes 1 huevo ½ taza de queso blanco rallado 1 cucharada de margarina Ajo triturado al gusto Sal al gusto Aceite suficiente para freír Lave y pele el plátano, corte en mitades, coloque a cocinar con agua y sal hasta que ablande. Escurra y haga un puré. Derrita en una sartén la margarina, sofría el ajo triturado, sin dejar de dorar. En un tazón coloque el puré de plátano, el sofrito de ajo, el queso rallado, el huevo y amase. Divida la masa en 16 partes iguales y forme bolitas. Fría en aceite bien caliente. Sáquelas y déjelas escurrir sobre un papel absorbente. Gratinado de plátano y berenjena Ingredientes Preparación 4 berenjenas rebanadas con piel 4 plátanos maduros rebanados fritos 150 gramos de queso duro rallado 150 gramos de jamón de pavo rebanado 150 gramos de queso de su preferencia rebanado 2 tazas de salsa bechamel 2 cucharadas de margarina Se toman las rebanadas de berenjena y se colocan con una cucharadita de mantequilla a dorar sobre una sartén, se les da vuelta y vuelta, se enmantequilla una bandeja y se colocan intercaladamente por capas, primero el plátano, luego el queso rebanado, la berenjena y el jamón; se cubre todo con la salsa bechamel y, por último, se agrega el queso rallado, así se van formando las capas hasta que la última sea de bechamel con el queso rallado. Se lleva al horno hasta que el queso de la superficie dore, a una temperatura de 250º durante unos 15 o 20 minutos, aproximadamente. Referencias [6] "Cocinar plátanos". En: Cocinar a la venezolana. Guía práctica. Caracas: El Nacional, 2001. [7] "Tabla de composición de alimentos para uso práctico". Caracas: Instituto Nacional de Nutrición, 2001, Serie Cuadernos Azules, 52-54, pp. 60-61. [8] "Actividad del sector primario. Sector agrícola vegetal. Venezuela", Centro de Información y Documentación Empresarial sobre Iberoamérica (Cideiber) 1997. Se consigue en: URL: http://www.cideiber.com/infopaises/Venezuela/Venezuela-04-01.html [Citado 29 ene. 2008; 02:50 p.m.]. [1] "La síntesis. El resto del mundo al nuevo mundo". En: Cartay, R. Historia de la alimentación del nuevo mundo, 2ª ed., Caracas: Futuro, 1992, pp. 333-343. [2] "Plátano". Diccionario de la Lengua Española, 22 ed. Se consigue en: URL: http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta? TIPO_BUS=3&LEMA=plátano [Citado 23 ene. 2008; 10:48 a.m.]. [3] "Plátano: muy rico en potasio". En: Pamplona Roger, J.D. Enciclopedia de los alimentos y su poder curativo: tratado de bromatología dietoterapia, 8vª impr., Madrid (España): Safeliz, 2004, pp. 70-72. [4] "El cultivo del plátano". Se consigue en: URL: http://www.infoagro.com/ frutas/frutas_tropicales/platano.htm [Citado 23 ene. 2008; 10:32 a.m.]. [5] "Clasificación de frutales". En: Fruticultura, 6ta reed., México: Trillas, 1998. Manuales para educación agropecuaria. Producción vegetal, 21, pp. 11-6. 14 Fernando Giuliani De Buena Fuente Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental Rol del psicólogo en la comunidad (Ponencia presentada en el Tercer Encuentro de Profesionales de Salud Mental de la zona Sur-Oeste de Caracas. Sala de Conferencias de Sidetur, abril de 2007) P rimero que nada debo expresar el gusto que me da siempre compartir actividades con ustedes y, sobre todo con la gente de CANIA, con la que he mantenido ya un lazo y un compartir durante muchos años. Cuando me invitaron a participar en este encuentro y me plantearon los objetivos del mismo, esto me hizo pensar en muchas cosas. Al final, terminé por encontrar lo que podía traerles, algo útil para entregarles a ustedes y que al mismo tiempo fuera útil también para mí. Encontré una cosa muy curiosa, pero a la vez muy interesante: cuando planteamos trabajar la salud mental, consigo que la psicología social comu15 Fernando Giuliani Licenciado en Psicología, UCV (1990). Maestría en Psicología Social, UCV (1994-1996). Coordinador del Programa de Liderazgo, Fundación Centro Gumilla. Coordinador del Programa para la convivencia en vivienda de sustitución dentro del proceso de habilitación física de la Comunidad de Catuche, Fe y Alegría, Catuche. Asesor Social del Conavi, Programa de habilitación física en zonas de barrios. Consultor independiente de Pdvsa (estudios en el área social comunitaria). Docente en la Universidad Central de Venezuela en la cátedra de Psicología social aplicada. Asesor y docente en el área comunitaria de Clacdec. Docente en la Universidad Nacional Abierta en los módulos Desarrollo comunitario y Formulación de proyectos. Autor de publicaciones difundidas en revistas especializadas sobre el área de la psicología comunitaria; ponencias en congresos y eventos científicos, y autor también de artículos, textos y manuales para el trabajo comunitario. Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental nitaria _que es una disciplina de la psicología social_ se desprendió de una corriente que trataba la salud mental. Esto me hizo reflexionar de la siguiente manera: ¿cómo ocurrió esto? Hace cuarenta años esta disciplina, la psicología comunitaria, tuvo su origen en Estados Unidos, en el año 1966, para ser más precisos. Un grupo de profesionales de la salud mental realizó un encuentro y entre sus conclusiones surgió un conjunto de elementos con el que no estaba satisfecho. Por ejemplo, existía insatisfacción con el modelo de trabajo, que estaba excesivamente individualizado, reducido a la labor en el consultorio, no tomaba en cuenta el ambiente, se decía en ese momento. Era un concepto de salud que estaba restringido al manejo de esa tensión entre salud y enfermedad. Lo cierto del caso, es que esa insatisfacción terminó por generar una gran inquietud entre los profesionales de la salud mental. Así se origina la disciplina de la psicología de la salud mental comunitaria, que luego se transformó en psicología comunitaria. Aquí en Latinoamérica, particularmente en Venezuela que fue un centro de desarrollo de la psicología social comunitaria, se tomó ese concepto de la psicología social. Hoy se conocen dos grandes líneas dentro de esa disciplina. Una es la psicología comunitaria, muy adherida todavía al trabajo de la salud, y la otra línea es la psicología social comunitaria, esta última es la línea en la que me formé y sobre la cual he trabajado. Me entusiasma la oportunidad de compartir un conjunto de inquietudes que vamos teniendo en la práctica quienes nos movemos en la psicología social comunitaria. Vamos encontrando muchas lagunas _yo diría debilidades incluso_ que requieren de una visión complementaria, sobre todo por parte de los profesionales que trabajan en el área de la salud mental y que muchas veces pasan desapercibidas para los que no estamos en esa área. Esa es la tónica en la cual voy a plantear mi trabajo, con esa inquietud y esa motivación de que juntos podamos encontrar algunas líneas de coincidencia y por supuesto que también nos motivemos a proponer o desarrollar las que pueden ser esas respuestas. En un principio voy a plantear la visión que sostenemos sobre cómo está nuestro ámbito de trabajo en el contexto popular. ¿Todos ustedes trabajan en comunidades populares, verdad? Del mismo modo, nosotros estamos desde la psicología social comunitaria trabajando con comunidades populares. Vamos a pasearnos por la situación de ese contexto para luego ver cómo nos estamos aproximando y plantear de alguna manera nuestra reflexión. Las comunidades de barrio La comunidad popular, en términos muy amplios la comunidad del barrio, se originó y se consolidó en eso que llamamos la tensión con la ciudad. Cuando hablamos de tensión, queremos decir que la comunidad popular, desde que se originó hasta ahora, ha estado al margen. Fíjense ustedes que el 60% de la población urbana en Venezuela habita en la comunidad popular. 16 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental Estamos hablando en todo el país de casi doce millones de personas. Esto es impactante cuando uno lo empieza a ver así, porque nos hace ver que la mayoría de la gente que habita en las ciudades vive en comunidad popular. Cuando decimos tensión no necesariamente hablamos de conflicto, entendamos tensión como ambivalencia. Tenemos una parte de la ciudad organizada con todos sus servicios _que a veces tampoco funcionan bien del todo_ y esa otra parte de la ciudad tratando de alguna manera de estar en la ciudad, pero siempre de forma un poco frágil. Los servicios no llegan allí y eso tiene miles de consecuencias: problemas con el aseo urbano, problemas con la energía eléctrica, problemas con el gas, problemas con la poca presencia de escuelas, problemas con los servicios de salud… Así vamos dibujando todo un marco, un mundo de vida, donde la comunidad popular es una manera de estar en la ciudad. Una manera muy particular, pues está en tensión con el resto de la ciudad. Un elemento básico es la autoconstrucción de la vivienda. La vivienda de la comunidad popular, prácticamente en su totalidad es autoconstruida, pero éste no es solamente un dato urbanístico o un dato arquitectónico, es un dato psicosocial, un dato antropológico también, porque eso genera un profundo arraigo en la comunidad. Es algo a veces difícil de comprender, sobre todo para los planificadores del urbanismo, cuando hay que reubicar una comunidad y se preguntan por qué la gente no quiere salir de allí. Por ejemplo, cuando la gente convive en situaciones de riesgo _todos ustedes deben conocer sectores de enorme precariedad, que requerirían de un gran trabajo con la gente_, y frente a ello nos preguntamos: ¿cómo es ese proceso psicológicopsicosocial mediante el cual una persona o un grupo de personas se habitúa o naturaliza una forma de vivir en condiciones de alto riesgo y llega incluso a resistir un cambio para reubicarse en otro lugar? Este es un dato para armar nuestro rompecabezas, un dato importante porque está vinculado con la inversión. La vivienda en la comunidad popular es toda la inversión que la comunidad ha hecho. Entonces frente a cualquier situación de reubicación o desalojo, inmediatamente se siente la amenaza. La ambivalencia entre lo colectivo y lo individual, esto es sumamente importante y muy difícil de entender. En una comunidad popular pasamos del individualismo más atroz al gesto colectivo inmediato, por ejemplo: fulanita necesita una ayuda porque tiene que salir para el interior, porque se le murió un familiar. Entonces los vecinos se ofrecen, le cuidan a los muchachos, etc. Pero también ocurre que hay un problema entre vecinos y puede acabar en un acto violento. Otro ejemplo es el manejo que se hace del poder, la influencia, cómo se llega a un beneficio. Allí permea lo colectivo hacia lo individual. Recordemos que los barrios se construyeron de forma colectiva, ese es un patrimonio que tiene el barrio y la comunidad popular. Cuando hacemos las historias de vida con la gente encontramos permanentemente que esa manera de autoconstruir siempre fue en conjunto. Difícilmente se encuentra que una casa de un barrio la haya hecho una sola persona. Ahora tal vez más, pero en los inicios, cuarenta, cincuenta años atrás, ahí había una práctica social que era eminentemente colectiva. Eso se ha ido perdiendo lamentablemente. Tiene que ver con un sentido que se ha ido fracturando, hay una ambivalencia muy grande allí entre lo individual y lo colectivo. Los bajos niveles de instrucción, todavía eso sigue siendo así, y tiene implicaciones de todo tipo. Como ocupación predomina siempre el ámbito informal. Todo esto desde el punto de vista psicosocial tiene una gran importancia para comprender por qué cuesta tanto la estructura formal dentro de una comunidad. Eso tiene que ver 17 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental servicios, una lucha para que las instituciones le paguen los programas… todo siempre ha sido y continúa siendo así. Entonces, es muy difícil que el habitante de la comunidad popular se pliegue a un proceso que en lugar de ser una lucha, sea el ejercicio de una ciudadanía: vamos a actuar desde el ejercicio del derecho, que implica derecho en sí mismo y responsabilidad. La impronta de la lucha está presente en la historia del barrio. Entonces, usted pregunta: "¿Cómo construiste esta casa?", y le contestan: "Bueno, yo tenía que venir echándole pichón, hay que ver lo que implica subir todos los materiales, etc.". "¿Y cómo hicieron las aceras?". "Bueno, esa fue otra lucha porque tuvimos que pelear con la Gobernación…", todo ha sido así. Por eso es que cuando nosotros promovemos el ejercicio de la ciudadanía uno se pregunta ¿qué es lo que hace que la gente no se adhiera?, esto es lo que está más o menos en la base, es un paradigma que va a tomar demasiado tiempo cambiarlo, pero es un dato interesante. con el manejo del tiempo, con el trazado de las metas, etc. Una organización familiar matricentrada _sobre esto ha escrito mucha gente que sabe sobre el tema y ha investigado. La figura de la mujer del barrio es predominante, para quienes trabajamos en la organización comunitaria eso es así. En cada organización comunitaria, consejo comunal, comité de tierra, normalmente, quienes más participan son las mujeres; igual en la familia. Hay quienes dicen que ese no es sólo un problema de la comunidad popular, aquí mismo en este evento la muestra que tenemos es de casi el 100% de participantes mujeres. Esto está planteando una situación desde el punto de vista psicosocial y psicológico que requiere de una atención particular. Uno se empieza a preguntar qué está pasando con los roles masculinos y femeninos. Cuando nosotros insistimos en la participación comunitaria, por ejemplo, es una lucha permanente porque la señora además de participar en un consejo comunal tiene que lidiar con la resistencia de su compañero que le reclama que no está atendiendo la casa, que no está atendiendo a los hijos. Los propios hijos a veces reclaman que los desatiende, lo que genera todo tipo de contradicciones y se convierte en una lucha permanentemente cuesta arriba. Por el contrario, la participación comunitaria le ofrecería al hombre una oportunidad para el desarrollo, inclusive personal. Sin embargo, eso trae sus inconvenientes. La relación asistencialista y clientelar Esa relación clientelar y asistencialista ha tratado a la comunidad siempre desde la subestimación. Tanto por la vía clientelar como por al vía del asistencialismo. La asistencia se le presta a aquella comunidad o sujeto incapaz de resolver sus necesidades por sí solo. Eso es típico de alguien enfermo o de una comunidad que vive una catástrofe. Cuando esto se hace permanente la comunidad asume ese rol: que me den. Oímos comentarios como: "¡Ay, es que tenemos que hablar con el presidente Chávez porque nos tiene olvidados!". Es muy difícil trabajar con un sujeto sobre la corresponsabilidad, porque este marco de asistencialismo ha dejado esa impronta. El marco clientelar es peor, más dañino, porque deforma el criterio de ciudadanía: es dar La lucha y el esfuerzo permanentes Hay una historia de lucha permanente en la comunidad. Esto es bien importante porque cuando queremos trabajar ciudadanía siempre nos encontramos con esto: si ustedes examinan cualquier historia que les cuente un habitante de barrio van a encontrar siempre esa palabra: una lucha para construir la casa, una lucha para conseguir los 18 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental algo a cambio de una lealtad política o una lealtad partidista. Este asunto, que no lo vamos a abrir más, llama a la reflexión porque hay que verlo como algo que está hecho y sobre lo cual es preciso trabajar. No basta con denunciarlo, no basta con ponerlo sobre la mesa. Creo que una de las cosas más importantes para tratar el asistencialismo y el marco clientelar es trabajarlo en nosotros. Cuando estamos ocupando un rol como profesionales en una institución, muchas veces sin darnos cuenta somos partícipes de esto. Si no lo mantenemos nosotros, lo mantiene quien toma decisiones o quien desarrolla los lineamientos. Muchas veces uno se encuentra en la diatriba de estar dentro de las instituciones públicas, donde por ejemplo trabajamos en un proceso de familiarización con la comunidad y nos exigen tener en tanto tiempo unos resultados. Uno dice: "Ya va, ese proceso comunitario no se puede apurar, no se puede violentar". Pero la línea de la institución está exigiendo que para tal momento haya tantos grupos conformados o haya tanta asistencia y tantos talleres, etc. Muchas veces sin darnos cuenta caemos en este esquema asistencialista, porque al final las decisiones las estamos tomando desde fuera de la comunidad, o de forma clientelar, cuyas consecuencias ya conocemos. La comunidad popular está en un contexto de pobreza en esa articulación, sobre todo en esa articulación con la parte de la ciudad formal. Todos conocemos el contexto de pobreza, sabemos el efecto que tiene, ahora eso no debe ser una tentación para esto. No se sale de la pobreza con un sujeto asistido, eso está más que demostrado. Ayudaremos a salir de la pobreza con un sujeto organizado, consciente, crítico, corresponsable fundamentalmente. Si nosotros no trabajamos la corresponsabilidad y no trabajamos el fortalecimiento es imposible. Eso lo dice desde la misma Constitución Bolivariana hasta el Banco Mundial. No es un problema de bandera política. Todos los estudios que se han hecho en las ciencias sociales lo han demostrado hace mucho tiempo, de hecho, la propuesta del Banco Mundial en torno a darle más poder al pobre para superar la pobreza data de fines de la década de los ochenta. ¿Bajo qué metodología, de qué manera y con cuáles tiempos nos vamos a plantear un trabajo como éste? Creo que los profesionales del área de la salud mental tienen mucho para decir, para hacer y para desarrollar en este sentido y que nos llevará, ojalá algún día, a romper efectivamente con esto. Identidad En la comunidad popular encontramos una identidad rica en esfuerzos, pero paradójicamente desvalorizada. Hagan ustedes la prueba de levantar una historia de vida de cualquier habitante de la comunidad. Van a notar el esfuerzo, todo ese esfuerzo es rico en cuanto a emprendimiento. Siempre pongo el mismo ejemplo: si quiero saber qué valor tiene esto basta con ir a una zona popular: bien sea a la Redoma de Petare, a Catia, a las cinco de la mañana, antes incluso. Vamos allí, nos paramos y vemos a miles de personas bajando a tomar el jeep, el Metro, el autobús para llevar a los muchachos al colegio y a las cinco o seis de la tarde, el regreso otra vez. Eso es emprendimiento permanente. Me hace un poco de gracia cuando la gente dice que los pobres no tienen capacidad de 19 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental emprendimiento. Claro que tienen, lo que pasa es que todavía no han encontrado los canales y como muchas veces nos hemos quedado atrapados aquí, entonces ese emprendimiento no va por la vía que debería. Tenemos la identidad social que es rica en esfuerzo pero está desvalorizada. ¿Por qué? Hagan la prueba: muchas veces la gente oculta y niega la pertenencia que tiene a la comunidad. Eso pasa mucho con los jóvenes, por ejemplo es muy común que los muchachos de Petare no digan que viven en Petare sino en La Urbina. Cuando van a una fiesta o les toca ir a un colegio que no es de su zona les da pena, vergüenza, decir que viven en un barrio. ¿Cómo llamamos a eso? Hay que reflexionar al respecto. Durante muchos años la comunidad popular, la pobreza, el ser pobre se fue estigmatizando. Ese daño también está hecho. Es una responsabilidad de la sociedad en su conjunto, donde se fue invisibilizando este sector popular y se le fueron atribuyendo rasgos negativos que van desde el chiste que desvaloriza, la manera como se les llama, el modo en que muchas veces aparecen los personajes del barrio en una novela, en una caricatura. La insistencia de los medios de comunicación en poner el problema de la inseguridad y la violencia exclusivamente en los barrios, desconociendo e invisibilizando que, si bien allí hay un germen, el problema es de la estructura y no es que porque usted nazca en un barrio entonces va a ser un tipo violento. A medida que la situación cambie y el sujeto de barrio se reencuentre tal vez con buena parte de esto, ayudaremos de alguna manera a romper con la desvalorización. El barrio tiene que trabajar su propia identidad, volvemos a que las instituciones y los profesionales que estamos en esto tenemos muchísimo por hacer. ¿Cómo toca por ejemplo eso la autoestima de un sujeto? Creo que quien trabaja la salud mental tiene ante sí un gran reto. ¿Cómo romper eso que nos hace avergonzarnos del sitio donde vivimos y el sitio al que pertenecemos? Imagínense el daño a nivel personal. La inseguridad en el barrio Hay altos niveles de inseguridad. Ese es un problema que se anunció en la década de los ochenta, lo recuerdo bien, cómo se repetía y se repetía, para aquel momento estaba comenzando mi formación. Recuerdo perfectamente que muchos religiosos tenían un largo trabajo en barrios, venían anunciando que la inseguridad se iba a presentar por el problema del tráfico de las drogas. Nadie tomó medidas al respecto. Hoy, tristemente, asistimos a este altísimo problema de inseguridad que afecta, primero y fundamentalmente, al mismo habitante del barrio. Las luchas por el control de los mercados de la venta de drogas en el barrio son salvajes. Estos enfrentamientos que se dan entre bandas de muchachitos de diez, once, doce años… Es una máquina de dinero infinita. Tenemos estos problemas: ese muchachito por un lado tiene el problema del modelo de lo que él considera un fracaso y, por el otro, está la moto, el dinero, el arma… Una amiga muy querida, que dirige un colegio de Fe y Alegría en el barrio Bolívar y ha vivido toda su vida en el barrio y conoce eso muy bien, me dice que está perpleja ante la edad de los niños que se están metiendo en el problema de la droga, la facilidad con que consiguen armas. Un problema en el que están metidos muchos organismos de seguridad. Debo confesar además que es un tema que personalmente nunca he trabajado como tal, pero en mi trabajo dentro de las comunidades me lo encuentro. Uno llega a sentir frustración porque siente que no hay una labor que indique qué vamos a hacer con eso. Está llegando a unos niveles 20 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental donde, por las drogas, la participación en muchos sectores baja: hay horarios en los cuales no se pueden hacer reuniones, los enfrentamientos y los tiroteos ocurren en cualquier momento, no existe lo que había hace años atrás que es el respeto al mismo habitante del barrio. Un enfrentamiento ahora no respeta nada. No parece haber mucha gente poniéndole el cascabel al gato, creo que hay que hacer un llamado. Las relaciones en el barrio: entre la conflictividad y la convivencia La misma ambivalencia, entre lo colectivo y lo individual aparece aquí también. Tenemos muchas veces altísima cohesión, muchas ganas de la gente de hacer cosas, algunos por unas razones y otros por otras, algunos por un sentir oportunista, otros comprometidos sinceramente con un proceso de cambio y en medio de todo encontramos una gran conflictividad. pero a nivel individual la manera de resolver los conflictos es terrible. La gente no posee herramientas para comprender, primero, la naturaleza de la conflictividad, frustraciones múltiples que tiene, que luego, en la dinámica de la convivencia, al no poseer mayor conciencia de lo que se trata, aquéllo revienta por cualquier parte: maltrato hacia los muchachos, hacia la pareja, conductas que incluso llegan a naturalizarse. A veces hay que tener la piel bien dura para ver que, lamentablemente, pasa a formar parte de la cultura. Pareciera que la forma de tratarse adquiere un nivel de conflictividad permanente. Eso no es lo único que está allí. También hay una parte de cohesión muy agradable, muy positiva, que es la relación vecinal, sabrosa, cordial, que sigue teniendo a la familia como un valor fundamental _no sólo para el habitante de barrio sino dentro de la sociedad. Lo que pasa es que la familia está pidiendo a gritos la ayuda para trabajar la interacción entre sus miembros y creo que allí los profesionales del área tienen mucho que hacer. La participación Creo que es fundamental trabajar el manejo del conflicto. Me llama mucho la atención cómo los conflictos se nos van de las manos. Obviamente, viviendo un clima de polarización como éste es un ingrediente más. Uno muchas veces se siente impotente desde la rama de la psicología que trabajamos. La psicología social comunitaria trabaja la organización, trabaja en grupo, trabaja la comunidad, La misma ambivalencia, muchos deseos de participar pero mucha apatía. A lo mejor la gente tiene la chispa de participar, pero todo el mundo voltea para decir: hay que hablar con el presidente. Eso es apatía, pues estamos poniendo el poder fuera de nosotros. Lograremos participación cuando nos hagamos corresponsables de lo que queremos. Altos niveles de politización. Creo que eso es bueno en la medida en que esa politización no sea excluyente, que trabaje y promueva a un sujeto ciudadano realmente. Creo profundamente en la politización, porque la política es la participación de la ciudadanía en los asuntos públicos. Siento que hay un avance indudable, que tenemos que aprovecharlo y seguirlo promoviendo entre la gente que ha salido, se ha movilizado y quiere tomar partido por algunas cosas. 21 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental Ahí tenemos un artículo, el 184 de la Constitución, un artículo precioso que habla sobre el rol que tiene la comunidad organizada en asuntos públicos. Es un gran paso, en sí mismo un avance, el problema está en que de alguna manera el asunto está un poco confuso, confunden la politización con la partidización. Hay unas prácticas del poder… Por ejemplo años atrás si una asociación de vecinos estaba manejada por los miembros de Acción Democrática y usted no era adeco, no tenía cabida. Eso es así y no hay que tenerle miedo a ponerlo sobre la mesa. Como tampoco hay que tener miedo a decir que eso sigue ocurriendo. En muchos casos, un comité de tierra, una mesa técnica o los incipientes concejos comunales excluyen todavía a gente que no es afecta al actual proceso. El presidente lo ha repetido hasta el cansancio, que no hay que mantener la línea de exclusión, pero existe un paradigma que sigue en la gente. Es necesario trabajar mucho en eso, porque en el fondo es un problema de concepción del poder. Hay muchas otras cosas que habría que incluir en esta presentación, pero simplemente es para que tengan una idea sobre el contexto en el cual vamos a trabajar. El rol del profesional de la salud mental El ejercicio privado de la profesión se concentra en la ciudad. Un profesor de la universidad hizo, hace no mucho tiempo, una investigación en las comunidades populares, donde se preguntaba cómo veían ellas al psicólogo. Los resultados son llamativos. Casi el 100% lo veía como alguien ajeno a la realidad de la gente del barrio. Lo veía como alguien elitesco, como alguien que solamente usaba la gente con dinero. Eso sigue prevaleciendo. Cuando vamos al contexto popular el profesional de la salud mental, por lo general, está asociado con esto. Todavía prevalece el hecho de que ir a un psicólogo, o poner a un muchacho con un psicopedagogo y atenderse con un profesional de la salud mental significa que el paciente tiene algún problema en la cabeza. Cuando el psicólogo del colegio llama a un representante, éste muchas veces no asiste porque teme que le digan que al muchacho no le da la cabeza, que es retrasado, etc. Tenemos un problema muy grave con el concepto de lo que significa la salud mental y con nuestro rol. Fíjense que en un momento en la conversación de hoy, y volvemos hacia cuando nació la psicología social comunitaria, una de las cosas que se discutía era por qué estábamos tan apegados a ese rol, a ese modelo de salud tan asociado a la enfermedad y creo que eso todavía permanece. En el contexto popular lo que hay es la práctica institucional. Es muy difícil que usted se consiga en un barrio a un psicólogo atendiendo solo en un consultorio privado. Eso no existe. Eso sesga de alguna manera, porque se ve como un servicio y el servicio se asocia con este primer concepto que vemos aquí. Esta rama de la medicina nació en la crisis del concepto de salud mental, ese sesgo que tenía que ver con remitir la salud mental solamente al problema de la salud o la enfermedad. Por otra parte está la insatisfacción del tratamiento individual, pero bueno, creo que todo esto se ha ido superando. Tampoco es que se superó hace tantos años. Recuerdo cuando CANIA comenzó a profundizar sobre una orientación de trabajo grupal y al principio no fue fácil o bien visto, porque todavía el modelo médico tenía y tiene ese vínculo fuerte, eso que se llama el "acto médico": el médico y el paciente solos en el consultorio. El tema de trabajar en grupo no es muy bien percibido. En aquel momento había una insatisfacción con esto. Una crisis del rol tradicional, ese rol del profesional directivo, que es el que sabe diagnosticar, el que sabe establecer el pronóstico, etc. Esto se ha trabajado bastante en la psicología social comunitaria y es mucho lo que se ha promovido el rol de ese profesional facilitador, que lo que hace es promover junto con la persona o el grupo los cambios, pero no es quien los dirige. 22 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental causas de los problemas y cuáles son las acciones. Es muy tentador para nosotros tomar la decisión en lugar de generar el principio de catálisis. * Problematización - concientización. Largamente trabajados sobre todo desde la educación popular con las propuestas de Paulo Freire, muchos de ustedes lo conocerán, fue un pionero en estas cosas. Para la psicología social fue un aporte extraordinario en el trabajo psicosocial; tiene que ver con trabajar con los grupos la interpretación que ellos hacen de su propia realidad. Cuando hablábamos hoy del ejemplo de los procesos de naturalización, se encuentra lo que podemos llamar conformismo. ¿Por qué la persona no elabora unas expectativas distintas?, ¿por qué si el barrio tiene problemas de basura no nos movilizamos?, ¿por qué si tenemos un problema con una quebrada vivimos al lado de la quebrada? La psicología social comunitaria trabaja esto de la misma manera como probablemente ustedes trabajarán con una persona desde el punto de vista de la salud mental, por ejemplo, cómo la persona toma conciencia de su problemática. Ese, en salud mental, es el principio básico: si la persona no toma conciencia de su problemática, ustedes no tienen manera de trabajar el tema. En el grupo y en la comunidad es lo mismo. Si una comunidad no siente un problema como tal no hay nada qué hacer. Ustedes pueden llevar talleres, pueden llevar programas, inclusive pueden aportar dinero pero si no hay una necesidad sentida… Ocurre de la misma forma con la terapia: uno puede ir a terapia, en el fondo la persona puede escuchar a su terapeuta hablar y hasta hablar con él, pero si no tiene conciencia de lo que está ocurriendo y no tiene voluntad para emprender el cambio entonces eso es imposible. Para la psicología social fue un hallazgo, tal vez para la psicología de asesoramiento, Parece sencillo pero tiene su complejidad y vale la pena pasearnos por allí. La necesidad de incorporar el contexto ambiental comunitario, al respecto ya no hay más dudas. En aquel momento se discutía mucho el mismo concepto de la institución cerrada que entró en crisis en los años sesenta y setenta. Sin embargo, creo que no está superado del todo, porque si nos remitimos a cómo ha sido el vínculo entre la comunidad y las instituciones encontramos que todavía muchas veces las últimas no terminan de abrirse. Así que cuando decimos incorporar el contexto ambiental y comunitario, el mismo no está del todo incorporado. Muchas veces nos conformamos con hacer un diagnóstico… pero después de eso, ¿qué? ¿Nosotros de verdad vamos a incorporar la participación de la comunidad en las líneas de trabajo? Hacer eso _lo vamos a ver más adelante_ implica realizar una serie de cambios dentro de la institución. En el caso latinoamericano ya lo dije, esta rama tomó la vía de la psicología social, por eso es que se fue hacia el trabajo grupal y hacia el trabajo comunitario. ¿Qué desarrolló la psicología social comunitaria? Creo que tenemos un punto de encuentro interesante en todo lo que ha sido el adelanto de esta disciplina. Algunos principios útiles para el profesional de la salud mental en comunidades * Catálisis social. El principio de catálisis implica que nosotros tenemos que poner atención en cuáles son aquellos procesos que es necesario promover para que la comunidad sea la que finalmente los lleve adelante. Sobre esto hay mucha metodología, pero fundamentalmente creo que requiere afinar mucho el rol del profesional. Para nosotros, trabajarlo desde el ángulo de la psicología social comunitaria no es fácil. Por ejemplo, hacemos un diagnóstico y hay que devolvérselo a la comunidad y tiene que ser ella la que identifique cuáles son las 23 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental para la psicología clínica, esto ha sido siempre su razón de ser. Para nosotros no lo era. * El fortalecimiento o el empowerment. Es otro concepto que deben conocer; abarca desde el nivel individual hasta el nivel institucional. Plantea una cosa muy interesante que es el fortalecer capacidades. ¿Con qué rompe esto? Con la visión asistencialista. Si creo que el grupo tiene capacidades, entonces voy a trabajar con una filosofía distinta a si creo que el grupo está carenciado. Ahora, lo que hay que conseguir son los acuerdos necesarios para dar con esa voluntad. Vamos a promover el fortalecimiento de nuestras capacidades. Este concepto de empowerment tiene cuatro niveles. Como lo trabaja la psicología social va desde el individual, grupal, comunitario hasta el institucional. * En la próxima lámina vamos a ver algo interesante: problematizar es un proceso que debe incluir a la comunidad pero también a la institución. Muchas veces creemos que los cambios sólo tienen que ocurrir en la comunidad, pero resulta que en la institución nosotros también necesitamos problematizar muchas cosas: el rol y el poder, la manera como divulgamos; queremos ser participativos en la comunidad, pero no somos participativos en la institución. Esto es complejo; requiere mucho tiempo para trabajar pero la intención es dejarlo aquí como un reto y como una posibilidad. * La cogestión. Pensar en la institución por su lado, diseñando políticas sin cogestionarlo con la comunidad es imposible. Pero esto no se puede transformar de un día para otro. Requiere de un largo trabajo interno que permita concientizar este principio y hacerlo realidad junto con la comunidad. * Organización y participación. Sin ello no hay forma, no hay manera, seguiremos trabajando desde el asistencialismo. Si usted lo que hace es reunir a la gente simplemente para decirle cosas, o para inscribirla en un programa o para darle bolsas de comida _no quiero decir que en situaciones extremas no haya que hacer eso_, pero si eso es lo único y si en nuestro trabajo, sea cual sea, salud mental, urbanismo, cultura, lo que sea, nosotros no generamos organización y participación, no pasaremos del marco asistencialista. Aquí hay un llamado bien importante, una petición, una propuesta: generar en todas las instituciones una visión en torno a esto, porque lo estamos haciendo de forma muy distinta. Lo que es organización para una institución no es lo mismo que para otra, cada organización quiere hacer una figura diferente, entonces el Ministerio del Ambiente dice una cosa, la Alcaldía Mayor dice otra, los comités de tierra tienen otra propuesta y otra lo concejos comunales. Ahora tenemos un concierto de voces que hay que ver cómo le ponemos un elemento en común. * Recuperación crítica de la historia. Ese es un principio muy claro para la psicología social, algo que los profesionales de la salud mental han hecho toda la vida. Cuando ustedes atienden a una persona, de una u otra manera, arman su historia junto con la persona, hay que ir hacia atrás, tratar de entender de algún modo de dónde viene todo eso. Con la comunidad es lo mismo, hay que conocer la historia de la comunidad en su sentido más amplio para poder entender su proceso actual. Las fases del trabajo comunitario Las fases: familiarización, diagnóstico, jerarquización, implementación y evaluación. Cada una tiene una parte que tratar, pero no vamos a inventar la rueda, cada uno conoce el método. Quisiera hacer énfasis en estas dos cosas: la familiarización que significa generar confianza mutua entre la institución y la comunidad y la evaluación de los procesos. En cuanto al proceso de familiarización, se trata de una etapa fundamental y necesaria en todo proceso comunitario. Implica un reconocimiento mutuo entre el agente externo (la institución o el 24 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental mencionaba recién, que es un problema de cultura también, miramos el tema de la evaluación con recelo y esa es una gran debilidad que tienen nuestras políticas públicas. profesional independiente) y la propia comunidad. Durante esta etapa, que en realidad se extiende a lo largo de todo el trabajo ya que en cierta forma siempre estamos familiarizándonos, se realizan los primeros contactos, se exponen con toda claridad los objetivos y metas que nos proponemos desde la institución, explicamos quiénes somos y cuáles son nuestros intereses, etc. Del mismo modo, la comunidad, tanto en la expresión de habitantes particulares como de grupos organizados, nos expone sus necesidades, nos cuenta su historia, nos expresa sus expectativas, etc. Todo ello debe orientarse a generar un límite de confianza mutua que permita caminar en forma conjunta dentro de un marco de corresponsabilidad. Esta última debe generarse a partir de la claridad con que hayamos expuesto mutuamente nuestras intenciones y propósitos. Es un proceso realmente indispensable y así deben entenderlo quienes a veces, ocupando cargos de decisión pero sin estar en el campo de trabajo con las comunidades, consideran que los trabajos pueden comenzar en forma inmediata y violentan este proceso de familiarización. Ahora bien, el otro punto que tiene que ver con la evaluación resulta también de fundamental importancia en el quehacer comunitario. Es necesario, sobre todo desde el punto de vista institucional, que diseñemos y llevemos adelante las evaluaciones de los proyectos y programas que adelantamos con las comunidades. Esto nos ayuda, por un lado, a mejorar la calidad, la eficiencia y la eficacia de las acciones que emprendemos ya que nos permite corregir y afinar. Por otro lado, nos posibilita contar con evidencia concreta que nos permita ir sistematizando experiencias de las cuales otros proyectos y programas pueden servirse y nutrirse. Sin embargo, esto requiere un gran esfuerzo metodológico que casi nunca logramos hacer, en buena parte porque no tenemos la "cultura de la evaluación". ¿Cuándo vamos a evaluar?, ¿cuándo vamos a saber si lo que hemos estado haciendo ha funcionado? No preparamos los programas para la evaluación, generamos indicadores y nos olvidamos de hacerles seguimiento. Creo, como A manera de cierre Tratando de cerrar todo esto, encuentro en el quehacer de la psicología social comunitaria un conjunto de áreas, de aspectos, de procesos, que hay que articular con otra visión. En este caso creo que vendría como anillo al dedo la visión de la salud mental. En los niveles del fortalecimiento obviamente… Si hablamos de un nivel de fortalecimiento que va desde lo individual hasta lo institucional, el primero requiere de la perspectiva de la salud mental. Nosotros no podemos pretender un sujeto participando en un grupo y en una comunidad con herramientas para la participación, pero sin recursos que tienen que ver con los niveles de su propia salud mental. Aquí vemos, tal vez, una de las debilidades quizás más grandes que tiene el trabajo comunitario. En las comunidades hay líderes naturales, que han emergido en el calor de la construcción de la comunidad, en el calor de la lucha, y así han estado al frente de muchas organizaciones, de muchos proyectos, etc. Desde ese punto de vista han sido excelentes cuadros de liderazgo, pero uno comienza a ver, poco a poco, cómo ese sujeto en el proceso de construcción de liderazgo muchas veces maneja el poder sin mayor conciencia de ello, de manera arbitraria. En muchas oportunidades encontramos enormes contradicciones, cuando uno ya está familiarizado con una comunidad, con el quehacer público de un líder, que de pronto en su vida personal es un sujeto que tiene su familia en el suelo, sus relaciones personales en el suelo, que tantas veces inclusive compensa en el trabajo comunitario buena parte de las carencias y las dificultades que tiene en su vida personal _hago una aclaratoria muy rápida, lo que estoy diciendo no es un juicio, es una descripción. Ahí empezamos a tener un problema desde el punto de vista de la organización comunitaria, 25 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental porque para esta persona el espacio de organización y participación tiene una sobrecarga psicológica que empieza a alterar el funcionamiento de la organización. Es un sujeto con una altísima resistencia al cambio, con poquísima capacidad para generar relevo. Si ustedes lo ven desde el área de la psicología social, una de las grandes debilidades que tiene la organización comunitaria es el liderazgo, y cuando afinamos un poquito más el lente resulta que encontramos un componente que es individual. Porque nosotros podemos dar talleres de liderazgo y podemos trabajar eso muy bien, como grupo y como comunidad, mas no como sujetos. Nosotros creemos que hay toda un área que debería tomar la psicología del asesoramiento o la salud mental para poder hincarle el diente a ese problema. Por ejemplo, ese protagonismo exacerbado que tenemos en las comunidades, lo tenemos en las instituciones también. ¿Por qué es la exacerbación de protagonismo? Bueno, hay gente que dice que ese es el modelo que nace del presidente Chávez, eso puede ser cierto o no, y no creo que eso sea lo relevante. El problema es cuál es el proceso psicológico que está allí debajo. ¿Por qué las instituciones muchas veces terminan entrando en conflictividad? ¿Por qué la cabeza de esa institución quiere figurar, quiere ser la que toma las decisiones? Nos cuesta tanto hacer equipo, crear consenso. Caemos permanentemente en la descalificación, estando inclusive dentro del mismo proceso político, o sea que ya el problema no es que tengamos perspectivas políticas distintas, me lo explico desde el punto de vista personal. Aquí, desde el punto de vista de la psicología del asesoramiento hay que ponerle el ojo a eso, hay que proveer herramientas de trabajo. Nosotros desde la psicología social no tenemos herramientas para eso, vamos encontrando el freno cuando llegamos a la parte individual de los procesos, porque no tenemos formación al respecto. Hace falta pues el enfoque multidisciplinario en este sentido, porque tomar esto desde la salud mental es un trabajo que hay que hacer, comprenderlo desde allí y generar herramientas. Del mismo modo con la organización que está absolutamente cerrada con el liderazgo, y ya lo mencionábamos hoy: ¿qué está pasando con la familia, con las relaciones vecinales, qué tiene que decir la salud mental en torno a esto? Hay que ir hacia un concepto de salud mental que nos hable más bien de potenciación, de bienestar. Por ejemplo, hasta qué punto la gente de la comunidad maneja el concepto de "bienestar". Hay algo curioso, desde el punto de vista de la psicología social la calidad de vida, cuando incorpora la perspectiva subjetiva, toca tres elementos fundamentales: la satisfacción del individuo en su familia, en su lugar de trabajo y en su lugar de residencia. Allí hay un elemento que nosotros llamamos calidad de vida, pero que si lo vemos desde la salud mental está completamente emparentado. También quiero hacer referencia a algunos obstáculos que se presentan para el trabajo comunitario: * La falta de visión comunitaria institucional: lo decíamos recién, es decir, a las instituciones todavía les falta madurar bastante su comprensión acerca de cómo trabajar con la comunidad. * La concepción de salud mental: siento que en la comunidad popular todavía hay mucha tela para cortar. ¿Qué podemos hacer? Creo que hay que seguir promoviendo campañas educativas, de divulgación, de discusión _porque el problema no es solamente divulgar. Pienso que en la medida en que haya espacios de reflexión y de discusión y que la gente pueda tomar conciencia de esto, las cosas irán cambiando. * Las deficiencias del paradigma institucional son inmensas. Una altísima burocracia que pretende promover el predominio del poder popular. Esto es una gran contradicción, es decir, ¿cómo podemos promover la participación en el poder desde la horizontalidad si nosotros, como institución, lo promovemos 26 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental desde la verticalidad? Ese es un elemento que hay que pensar. * Los permanentes cambios de los lineamientos y los funcionarios. Eso está pasando mucho en las instituciones. Trabajo ampliamente con programas de políticas públicas y es frustrante cuando estamos consolidando alguna línea en vivienda o en cultura o en lo que sea y, repentinamente, cambiamos de funcionario. Con esa persona hay que volverse a reunir, hay que volver a explicar todo, a veces no gusta el enfoque que se está haciendo entonces hay que cambiarlo, mientras tanto la comunidad está esperando a ver qué va a pasar, se va a interrumpir, se va a echar para atrás, etc. Esta polémica hay que llevarla al interior de las instituciones. Es necesario evaluar, cuando uno trabaja con las comunidades uno lo sabe, pero habría que sistematizar el daño que tiene una cosa como esta, a ver si pudiéramos generar más conciencia. * Los tiempos y los ritmos institucionales divorciados del contexto comunitario: muchas veces nuestras metas y nuestros tiempos están acortados a un lapso que no tiene nada que ver con las necesidades de la comunidad. Eso es difícil de trabajar, pero hay que avanzar en esa dirección. Aquí hay una brecha inmensa. * Nos cuesta tremendamente trabajar desde el punto de vista interdisciplinario. Creo que ningún profesional en Venezuela está formado para eso y uno se da cuenta porque trabaja con ingenieros, con médicos o con arquitectos y el problema siempre sigue siendo el mismo. Tengo mi propio espacio y cuando alguien se empieza a meter en mi espacio, digo: eso es territorio de los psicólogos sociales, ustedes no se metan porque no saben de eso; cuando comenzamos a llegar a la parte de la educación nos dicen que nos dediquemos a la psicología social porque nosotros no sabemos de eso y así sigue todo. Ahora, en el mundo de hoy es imposible que los profesionales trabajemos de forma separada y a veces confundimos trabajar en un equipo multidisciplinario con reunirnos y simplemente decir: yo hice esto, tú hiciste aquello y él hizo lo otro. Eso no es multidisciplinariedad, sino es un grupo de profesionales trabajando en un mismo programa. Es más, el propio concepto de multidisciplinariedad está emparentado con el concepto de interdisciplinariedad, transdisciplinariedad, son temas que precisan que los estudiemos muy bien para comprenderlos porque una cosa es que cada quien agregue algo y otra que se construyan objetos múltiples. Por ejemplo, la organización y la participación comunitaria tienen una visión desde la salud mental, tienen una visión desde la psicología social y si viniera un abogado nos diría que también la participación tiene una visión desde una perspectiva jurídica. Cómo hacemos, no para que cada uno hale para su lado, sino todo lo contrario, para despojarnos del prejuicio, del temor y de la inseguridad que todos hemos experimentado alguna vez _y que hasta tiene que ver algo con un elemento de poder_ para trabajar lo interdisciplinario. Sería bueno generar un espacio para discutir esto y ver cómo nos ha ido, hacer alguna mesa de trabajo, examinar cómo es la experiencia de cada institución y cómo nos ha ido en la vida profesional con esto. Para ir finalizando, ¿qué se nos ocurre como reto para la salud mental en el contexto popular? Doy una visión personal sobre todos los aspectos que requieren de una respuesta urgente: * La violencia, para mí, en primer lugar. Podríamos hablar del alcohol o la droga, que es un tema que, lamentablemente, por lo dicho y lo repetido, creo que lo hemos ido naturalizando, pero a mi manera de ver cada vez estamos peor en la materia. * La delincuencia, la familia, la educación, bueno otra vez vuelvo sobre lo que _para la psicología social_ comenzó hace cuarenta 27 Herramientas para el trabajo comunitario en el área de la salud mental * * * * esa voluntad. Por ejemplo, he estado trabajando para el proyecto de saneamiento del Guaire y es un proyecto que requiere del concurso de muchas instituciones, no solamente del Ministerio. Aquello es poco menos que imposible, porque hay que detenerse en lo que a cada institución le toca hacer, hay que ver cómo esas instituciones entienden las cosas, muchas veces descalifican lo que piensa el otro. * Pienso que la necesidad de crear agendas interinstitucionales es fundamental. Tenemos que producir una problematización dentro de la institución, porque muchas veces ella no lo entiende y cada institución trabaja sola. Sería interesantísimo hacer encuentros, pero la gente siempre dice que cuando se habla de eso no están los gerentes de la institución. Si éste no es el caso pido disculpas. * En el fondo creo que tenemos que articular fuerzas con el desarrollo nacional. Este tema tiene mucho más de lo que uno cree. Hoy por hoy se habla de desarrollo sostenible, de desarrollo sustentable endógeno y nosotros en el día a día muchas veces lo escuchamos y nos queda como lejos, porque lo que tenemos delante es un caso gravísimo por resolver y nos vamos olvidando de que entre todos tenemos que empujar el desarrollo nacional. No importa desde qué perspectiva política lo estamos viendo. Pero si nosotros no hacemos un esfuerzo como país estos problemas seguirán presentándose. * Sería interesante armar algún encuentro pensando sobre lo endógeno de la salud mental. ¿Qué tenemos que decir desde la perspectiva de la salud mental sobre un modelo de desarrollo endógeno o un modelo de desarrollo sustentable o ambos? Creo que este es el gran horizonte hacia el cual nos tenemos que dirigir. años pero al revés: necesitamos en este momento, desde la psicología social comunitaria, la perspectiva de la salud mental: qué podemos trabajar allí con ese sujeto que asume liderazgo, que participa, que forma parte de la organización. Como reto es necesario desarrollar teorías y métodos eficientes y adecuados al contexto. Preguntarnos si las teorías y métodos que tenemos están vigentes o si necesitamos de verdad inventar o desarrollar nuevas cosas. Fortalecer el rol del profesional en dos aspectos. Muchas veces nuestro rol pasa desapercibido y ésta no es una victimización, sino que en el trabajo institucional, lamentablemente por lo que decíamos hace un rato, ese rol queda opacado. Se juntan varias cosas. Hay un maltrato al rol del profesional por parte de la institución, que comienza por la forma en que está remunerado. Luego, ¿cuál es el papel que ocupa en la toma de decisiones? Muchas veces vemos el profesional de la salud mental que no toma partido en las decisiones, que no es consultado y que al final se desanima. Participar con las comunidades en cuanto al desarrollo de líneas de trabajo: cuanto más participativos, mejor. Cuanto más incorporemos a la comunidad en la definición de las ideas de trabajo, mejor. Siempre digo que en una institución es preferible tener el apoyo de la comunidad que el del jefe. Claro, en términos prácticos no es lo más adecuado, porque quien decide es el jefe y no la comunidad. Pero en cuanto a calidad de trabajo es mejor, no tiene precio para un buen profesional si logra que la comunidad comprenda las propuestas y las trabaje junto a ella. Promover el enfoque multidisciplinario interinstitucional: que los profesionales de la salud mental del Ministerio, de la Alcaldía Mayor, del Municipio tocáramos una sinfonía acordada, que tuviéramos unos lineamientos iguales, que manejáramos los mismos conceptos, y que las instituciones asumieran 28 Omaira Pláceres de Martínez Coordinadora Educación CANIA CANIA: Experiencias y resultados Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria E l conocimiento y la información son factores esenciales para que las personas puedan sacar provecho de las oportunidades y desafíos que plantean los cambios sociales, económicos y tecnológicos, sobre todo aquéllos que contribuyen a mejorar la seguridad alimentaria y los medios de vida de la población urbana y rural. Pero para que sean útiles, el conocimiento y la información deben ser comunicados eficazmente a las personas[1]. La evolución de la comunicación para la promoción de la salud, ha incluido cambios sustanciales en la planeación y conceptualización utilizada en su desarrollo. Según la Organización Mundial de la Salud[2], la comunicación en salud 29 abarca el estudio y uso de estrategias de comunicación para informar e influenciar decisiones individuales y comunitarias que mejoren la salud. La comunicación debe ser entendida en este caso como un modelo en el cual existen dos o más interlocutores, donde el comunicador se encarga de facilitar el diálogo. Este diálogo en general está destinado a elevar el nivel de conocimiento y de conciencia y busca que los mensajes tengan valor de uso, es decir, que sean creíbles, factibles de aplicar y con mínimas posibilidades de rechazo. Toda esta dinámica permite la interacción de tal modo que el interlocutor pueda manifestar su opinión, aceptación, rechazo o solicitar más información[3]. Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria La transmisión de información a individuos y a grupos mediante la comunicación social generará entonces el conocimiento que sirve de base para lograr los cambios de actitudes y prácticas. En este contexto, la comunicación en nutrición se concibe como un proceso estratégico para optimizar las acciones encaminadas a lograr una utilización racional de los recursos para una sana y adecuada alimentación, así como para mejorar la eficiencia y efectividad de los programas dirigidos a la prevención de la enfermedad y la promoción de la salud. Las investigaciones han demostrado que programas de comunicación en nutrición, basados en la teoría, pueden poner la alimentación en la agenda pública, reforzar los mensajes sanitarios, estimular a las personas para que busquen más información y, en algunos casos, dar lugar a estilos de vida saludables[4,5]. Jacques Diouf, director general de la FAO, en el prólogo del documento "La comunicación clave para el desarrollo humano" (1995), señala que "la comunicación para el desarrollo, basada en la experiencia de la FAO y de otros organismos ha alcanzado un nivel en el que puede tener efectos notables y positivos sobre muchos programas de desarrollo" [6]. Para alcanzar este propósito, la comunicación debe orientarse a fortificar procesos locales que promuevan cambios en conocimientos, actitudes y prácticas en la población, fortaleciendo la capacidad de individuos y comunidades de incidir efectivamente sobre los determinantes de la salud. De esta forma, la comunicación va más allá de su utilidad instrumental para constituirse en un proceso de carácter social que posibilita el reconocimiento, encuentro y diálogo de los diversos saberes, contribuyendo a consolidar la articulación entre los diferentes sectores sociales en torno a la salud, para generar cambios que mejoren las condiciones de bienestar de la población[2,6]. Contexto En la parroquia de Antímano, comunidad popular ubicada al centro-oeste de Caracas, con una población de 127 708 habitantes (Oficina Central de Estadística e Informática, Censo, 2001) y características económicas, sociales, ambientales y culturales complejas, las cuales dan lugar a condiciones de deterioro de la salud de sus pobladores e interfieren en el desarrollo de niños y jóvenes, se ubica el Centro de Atención Nutricional Infantil de Antímano (CANIA), institución sin fines de lucro patrocinada por Empresas Polar, dedicada a la atención integral y efectiva de la malnutrición en niños, niñas y mujeres embarazadas, como instrumento para el desarrollo social sostenible, la producción de conocimiento y la formación de recursos humanos en el área. CANIA desarrolla su intervención sobre la malnutrición mediante dos grandes programas: * Atención de la Malnutrición (por déficit o por exceso, primaria y secundaria) en niños, niñas, adolescentes y embarazadas, con un enfoque curativo. * Nutrición Comunitaria con un enfoque preventivo, dirigido a la comunidad de la parroquia Antímano. Además, ejecuta actividades de investigación con el objetivo de aumentar y difundir el conocimiento de la problemática alimentaria y nutricional pediátrica, con base en la experiencia asistencial y de docencia y con el objetivo de contribuir con la formación de recursos humanos de óptima calidad en el área de la nutrición infantil. Educación e información en la atención al paciente En las actividades de atención a la malnutrición, la educación e información nutricional están dirigidas a los pacientes y/o sus familiares que consultan por problemas específicos de malnutrición; las mismas consisten en orientaciones e indicaciones dadas por los especialistas y constituyen parte del tratamiento. La estrategia utilizada en estos casos, además de las orientaciones directas del especialista en la consulta, está compuesta por talleres en unos casos, consultas grupales en otros. En ellos lo importante, la 30 Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria verdadera comunicación, viene dada por el intercambio cara a cara con los pacientes y por el material impreso que se les imparte, el cual actúa como un refuerzo. Estos recursos se producen atendiendo a las especificaciones técnicas para la elaboración de materiales educativos: el tipo de letra, lenguaje, ilustraciones, colores, etc.[7], y se entregan a los usuarios para reforzar el proceso emprendido por los especialistas. Con este fin se han elaborado: * Trípticos con temas variados. "Presupuesto familiar", "Alimentación en el primer año de vida", "Alimentación del preescolar", "Alimentación del escolar", "Las frutas", "Los vegetales", "La obesidad", "Higiene y manipulación de alimentos", "Diarreas", "Alimentos ricos en hierro", "Alimentación durante el embarazo", "Salud bucal", "Qué hacer y qué evitar durante el embarazo", "Ácido fólico", "Fortaleciendo la autoestima de los niños", "Desarrollo del lenguaje", "Manejo de conducta inadecuada del niño", entre otros. * Libros y folletos. Lactancia materna, una experiencia maravillosa, Guía para padres de niños con sobrepeso, Manejo de la conducta alimentaria, Alimentación del niño con intolerancia al gluten, Alimentación del niño con cáncer. * Recetarios. Cocina variada y económica, Aprendiendo a comer hortalizas, Cocinando con los niños, entre otros. También para el público general que acude al Centro se contemplan materiales y actividades que promueven la reflexión sobre la salud y la nutrición a través de carteleras, videos educativos, charlas breves, etc. El objetivo es brindar información sobre temas variados de interés general, aprovechando la permanencia y disposición de la gente que acude al Centro de salud y creando espacios y oportunidades para intercambiar opiniones, conocimientos y creencias en torno a la salud nutricional. Información y educación en el Programa de Nutrición Comunitaria El propósito general del Programa de Nutrición Comunitaria es: "Prevenir la malnutrición en niños, niñas y adolescentes de la parroquia Antímano, con la participación activa de la comunidad", y establece como prioridad tratar de mejorar las prácticas de alimentación de los niños y niñas menores de dos años por ser éste el grupo más vulnerable, sin desestimar acciones orientadas a mejorar la alimentación de preescolares y escolares. Los mensajes a transmitir, así como los grupos a los cuales dirigir dichos mensajes se establecen después de un análisis minucioso de la situación nutricional de la población, sus costumbres y hábitos de alimentación, así como de los recursos disponibles en la comunidad. Es importante destacar que cuando se realizan programas sociales que buscan resolver problemas de malnutrición en comunidades con carencias socioeconómicas la comunicación reviste gran importancia, permite no sólo dar a conocer los mensajes y orientaciones que se quieren transmitir, sino que además ayuda a estrechar lazos y a fortalecer o definir el sentido de pertenencia entre la institución y su comunidad objetivo. Los grupos meta seleccionados en este caso son: * Líderes vecinales, quienes después de un proceso de formación actúan como multiplicadores. * Personal de multihogares (guarderías comunitarias) y preescolares. * Comunidades educativas de escuelas básicas. * Mujeres embarazadas y en período de lactancia. * Personal de centros de atención primaria en salud (ambulatorios, consultorios y clínicas populares). * Las familias y la comunidad en general. 31 Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria Estrategias y medios Uno de los elementos esenciales en los programas de educación y comunicación en nutrición y salud, es el uso de una combinación de modos comunicacionales (enfoque multimedios), de tal manera que el mensaje se difunda a través de canales que se complementen y refuercen mutuamente. Especialistas recomiendan el uso de una comunicación interpersonal combinada con mensajes a través de medios masivos[4,5,7]. En el caso del Programa de Nutrición Comunitaria se seleccionaron los medios de comunicación que, de acuerdo con la disponibilidad de recursos humanos y financieros de la institución, resultaron más accesibles y apropiados; se eligieron porque tienen credibilidad en la zona, llegan a un importante número de personas y ofrecen posibilidades de mantenerse en el tiempo. Comunicación interpersonal: * Formación de Promotores Comunitarios de Salud. (Se utilizan técnicas de discusiones grupales, juegos de roles, prácticas simuladas). * Encuentros con madres embarazadas o lactantes en centros de salud de la zona. * Talleres y charlas dirigidos a diferentes públicos tales como docentes, padres o representantes, personal de servicios de alimentación, entre otros. Medios impresos: * Periódico vecinal CANIA en Comunidad. * Carteleras. * Volante Alimentos del mes. * Dípticos, trípticos y volantes. * Manuales. En el siguiente cuadro se describen las técnicas y medios utilizados. Grupo objetivo Técnicas de educación y comunicación Materiales de educación y difusión Mujeres embarazadas y en período de lactancia. Encuentros de intercambio. * Trípticos. * Folleto Lactancia materna, una experiencia maravillosa. * Carteleras. Líderes y representantes vecinales. Curso de formación de Promotores Comunitarios de Salud (PCS). * Manual del curso. * Alimentación del niño menor de un año. Manual para PCS. Comunidades educativas. * Actividades lúdicas dirigidas a niños y niñas. * Talleres y mesas de trabajo con docentes y personal de servicios de alimentación. * Encuentros con padres y representantes. * Concursos. * Actividad "Un día en CANIA". * Recetario para niños. * Guía práctica para la alimentación del niño en instituciones. Personal de salud. Mesas de trabajo. Libro: Nutrición para niños y niñas en atención primaria. Familias y comunidad en general. Campaña informativa. * Carteleras. * Dípticos y volantes. * Periódico vecinal CANIA en comunidad. 32 Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria Algunos de los materiales de educación y difusión utilizados son los siguientes: * Carteleras. Se utilizan para colocar afiches o carteles elaborados por CANIA con mensajes seleccionados. Están colocadas en centros de salud (7), escuelas (2), multihogares (4), lavanderías públicas (2), expendios de alimentos (7), Jefatura Civil (1), Casa Parroquial (1) y Casa Comunal (2). Se disponen de común acuerdo con el dueño o encargado del local, quien se responsabiliza de cuidarla y mantenerla sólo para el uso acordado. Los mensajes se cambian cada dos meses. * Dípticos. Su contenido es el mismo que se expone en las carteleras; se distribuyen en los lugares donde éstas se encuentran ubicadas. Permite a las personas llevar estos mensajes a familiares o amigos cuando así lo desean. * CANIA en Comunidad. Es un periódico vecinal de frecuencia trimestral con un tiraje de tres mil (3000) ejemplares. Se distribuye gratuitamente en la parroquia Antímano, y su función es dar a conocer información de utili- dad e interés general para la comunidad; esa información se complementa con algunos mensajes relacionados con la nutrición. Contiene además un encarte dedicado a reseñar experiencias y logros de los Promotores Comunitarios de Salud, siendo éste un aporte que permite estrechar lazos con la comunidad. * Volante "Alimentos del mes". Mes a mes difunde información sobre los alimentos más económicos disponibles en los mercados populares, establecimientos de la red Mercal y abastos de la zona y a partir de esa investigación se dan recomendaciones para su adquisición y preparación, y se incluyen recetas cuyos ingredientes principales son los alimentos que para el momento de la publicación están disponibles y a un mejor precio en la zona. En el área de Investigación, se difunden resultados de trabajos en revistas especializadas y en eventos científicos nacionales e internacionales. Para apoyar la labor docente se producen textos sobre temas de interés tales como: "Nutrición en pediatría", "La sectorización como estrategia de trabajo en CANIA", "Atención social a familias con malnutrición", "Integración comunidad - institución para la participación comunitaria", entre otros. Además de estas estrategias de difusión dirigidas a los usuarios y a la comunidad de Antímano, se implementan otras dirigidas a públicos más amplios: * Página Web. www.cania.org.ve incluye secciones con información sobre la institución, artículos en torno a temas de nutrición, noticias del quehacer del Centro y una sección interactiva donde el público puede plantear sus problemas relacionados con alimentación y nutrición a la vez que hacer preguntas a los especialistas, las cuales se responden vía correo electrónico y se publican en la página cuando pueden servir de orientación a otros usuarios. * Campañas educativas institucionales. Son estrategias en las cuales se combinan medios 33 Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria 2007 se cuenta con un grupo de 230 Promotores Comunitarios de Salud; se trata de líderes comunitarios que después de los cursos realizados han dado muestras de cambio de actitud hacia la lactancia materna y hábitos de alimentación en general y actúan como voluntarios apoyando el Programa de Nutrición Comunitaria de CANIA. * Los talleres de cocina en los que según los usuarios "han aprendido a consumir alimentos que antes no incluían en su dieta porque no sabían cómo prepararlos". Idéntico comentario aplica para el volante "Alimentos del mes", cuyo tiraje se inició con setenta ejemplares mensuales y actualmente se editan 150, los cuales se colocan en las carteleras de distintas instituciones. * Los recetarios, que incluyen preparaciones elaboradas con ingredientes económicos y de fácil disponibilidad y tienen mucha demanda: de Cocina variada y económica se han hecho tres ediciones (4000 ejemplares), de Cocinando con los niños dos ediciones (3000 ejemplares), de Alimentación del niño con intolerancia al gluten dos ediciones, la primera de 500 ejemplares, que se agotó rápidamente, y la segunda de 1000 ejemplares. * Los boletines y textos se han convertido en material de consulta para estudiantes y profesionales. Del libro Nutrición en pediatría, por ejemplo, se hizo una edición de 2000 ejemplares que está agotada y actualmente se trabaja en una reedición corregida y aumentada. Del Boletín de Nutrición Infantil, publicación semestral dirigida a personal de la red de atención primaria, se han realizado dieciséis números (750 ejemplares en cada edición) que se distribuyen gratuitamente en ambulatorios, unidades de nutrición e instituciones afines de todo el país. modernos y tradicionales. Se producen videos para ser divulgados a través de los medios masivos de comunicación social, materiales impresos y canciones con las cuales se promueven dramatizaciones y bailes entre los escolares. Esta técnica es muy recomendada; según sugiere la FAO representa un gran potencial que facilita la recepción de los mensajes por parte de los públicos incluidos en estos proyectos y constituyen un género impactante en la sensibilización de la gente. En las campañas se plantea un tema cada año. En 2006 la campaña "5 al día" estuvo orientada a promover el consumo de frutas y hortalizas. En el año 2007 año se trabajó el tema de la merienda escolar, después de realizar un estudio para explorar los elementos involucrados en este hecho alimentario en la ciudad de Caracas. Veamos uno de los textos de las canciones que han sido cantadas y bailadas por cientos de niños: Cinco al día, cinco al día para vivir con energía. Frutas ¡sí! Vegetales ¡sí! Cinco al día deberás comer. Chócale esos cinco son frutas y vegetales. Vitaminas, minerales, bien fino te harán crecer. ¡Cinco al día! Resultados El uso de los medios mencionados ha tenido un impacto importante en la comunidad. Destacan: * Se ha logrado sensibilizar positivamente a la comunidad y a sus instituciones acerca de la importancia de atender la situación nutricional de los niños y niñas. Para diciembre de 34 Información y educación nutricional en el Programa de Nutrición Comunitaria Impartir información y educación nutricional no es tarea fácil; se trata de un área muy demandada y al mismo tiempo de mucha competencia, a menudo asumida por personas sin la experticia profesional requerida o con intereses comerciales. En CANIA se trata de dar siempre una respuesta profesional a las solicitudes del público y orientar el trabajo hacia la prevención y la búsqueda de soluciones a los problemas detectados. Los programas que desarrolla la institución demuestran una preocupación genuina por prevenir y combatir la malnutrición y lograr que la gente disfrute de una mejor calidad de vida. Ponle color a tu merienda RAP Duración: 40 segundos (Letra del jingle) ¡Ponle color a tu merienda más saludable y más diversión! Después del desayuno y luego del almuerzo ¡merienda puro color! Prepara tu lonchera facilito y divertido. Meriendas saludables que más fuerzas te darán para seguir jugando, estudiando y aprendiendo. ¡Con full vitaminas, minerales voy corriendo! Referencias Una torta casera, una fruta, una galleta, cotufas o yogurt, cereal o vegetales, son siempre alimentos nutritivos e ideales que CANIA recomienda para estar bien saludables. [1] "Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Nuevas publicaciones sobre comunicación para el desarrollo", 2003. Se consigue en: URL: http://www.fao.org/sd/2003/KN0403_es.htm [Citado 10 sept. 2007]. [2] Mosquera, M. "Comunicación en salud: conceptos, teorías y experiencias". Se consigue en: URL: http://www.comminit.com/la/lasth/sld-2915.html [Citado 25 abr. 2005]. [3] Calvo Ríos, M. "Los Modelos de información y comunicación", 1998. Se consigue en: URL: www.fao.org/sd/Spdirect/CDan0022.htm. [Citado 30 nov. 2007]. [4] Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Guía metodológica de comunicación social en nutrición, 1996. [5] Andrien, M. e I. Beghin. Nutrición y comunicación: de la educación en nutrición convencional a la comunicación social en nutrición: México. Universidad Iberoamericana, Departamento de Salud, 2001, 159p. [6] Fraser, C. y J. Villet. "La comunicación, clave para el desarrollo humano", 1994. Se consigue en: URL: www.fao.org/docrep/t1815s/t1815s00.htm [Citado 2 dic. 2007]. [7] Lovón, M. Educación y comunicación participativa en nutrición y salud: guía para la planificación de programas a nivel local elaborado en base a la experiencia del programa de seguridad alimentaria nutricional en las provincias de Arque, Bolívar y Tapacarí, Cochabamba: Programa de Seguridad Nutricional de las Provincias de Arque, Bolívar y Tapacarí (Prosana), 1996, 86p. ¡Ponle color a tu merienda! 35 William González, Edihovert Nahr, Carmen Naranjo, Yulimar Guanchez Trabajadores sociales de CANIA CANIA: Experiencias y resultados La madre sola como factor de riesgo social en nutrición Introducción El sistema familiar tradicional y predominante en todas las sociedades (familia nuclear con hijos) se ha diversificado en otras formas más inestables que requieren mayor grado de compromiso y solidaridad entre sus miembros. Una de las formas familiares surgidas de estos cambios de la sociedad, es la familia monoparental, es decir, aquélla donde está presente un solo progenitor al 36 cuidado de sus hijos, producto de situaciones de separación como divorcio, abandono, muerte o ausencia prolongada por motivos forzosos (trabajo, cárcel, etc.), en la cual el otro progenitor se hace responsable del cuidado de los hijos[1]. Considerando lo anterior, algunos autores aseveran "que la familia monoparental se ha incrementado a lo largo del tiempo y es un aspecto perceptible en las sociedades desarrolladas y en vías de desarrollo"[2]. "…El modelo familiar nuclear, estructurado, biparental, indestructible (o por lo menos, sólo en el evento de la muerte de uno o ambos cónyuges) sancionado legal, moral, religiosa y socialmente, pareciera estar en retirada. Que quede claro que esto no es algo que estamos diciendo los familiológos, sino es algo evidente desde los mismos hechos familiares. Un modelo hegemónico de la familia no parece ser pertinente en la era de la mundialización"[3]. La madre sola como parte de la familia monoparental, abarca a todas aquellas mujeres divorciadas, separadas, viudas o solteras que crían a sus hijos solas, sin la figura de una pareja que ejerza el rol de padre en el hogar, problemática social que algunas organizaciones e investigadores han tratado de alertar al reportar un aumento en las cifras de hogares con madres solas, tal es el La madre sola como factor de riesgo social en nutrición caso de la Cepal, que menciona que en las zonas urbanas de diecinueve países latinoamericanos, la situación es alarmante, ya que se evidencia el predominio de hogares de constitución monoparental con jefatura femenina, cuyos porcentajes oscilan entre 15% y 40% en los casos con pobreza y con condiciones de indigencia de 19% a 53%[4]. Igualmente, la Cepal resalta que "la casi totalidad de los países de América Latina tiene porcentajes de hogares con jefatura femenina superiores al 20%, lo que contribuye fuertemente al fenómeno conocido como feminización de la pobreza. Estos estudios dejan en evidencia la mayor pobreza relativa y muchas veces la situación de indigencia en que se encuentran los hogares que están a cargo de una mujer"[4]. Por otra parte, B. Kliksberg plantea el aumento de un tipo de familia significativamente debilitada, que tiene sólo uno de los progenitores al frente, en la inmensa mayoría de los casos, la madre. La correlación con la pobreza es muy fuerte y estrecha; un gran porcentaje de las mujeres jefas de hogar pertenece a estratos humildes de la población[5]. Morales reporta que en el Gran Buenos Aires, "los hogares monoparentales en su gran mayoría están formados por una madre sola con sus hijos. Este tipo de familia encabezada por mujeres representa 80,5%, mientras que aquéllos con jefatura masculina sólo el 3,8% del total de hogares. De esta manera, se observa que es más frecuente conseguir a una madre que cumpla o asuma la tenencia real de sus hijos que a un padre después de la ruptura conyugal"[6]. En Venezuela, en el Centro de Atención Nutricional Infantil Antímano (CANIA), según los datos estadísticos de la Coordinación Social, entre los años 2000 y 2003, se registró un promedio de 37% de familias atendidas procedentes de distintas parroquias de la ciudad capital, y de otros estados del país, cuyos hogares están a cargo de madres sin pareja[7]. De igual forma en el estudio realizado por Z. Alarcón sobre el riesgo social de desnutrición y su relación con la recuperación nutricional[8], se obtuvieron los siguientes resultados: * El 21.4% de las familias estudiadas era monoparental a cargo de madres solas. * En la dinámica familiar como área de intervención social se observó el diagnóstico de madre sola como el segundo factor de riesgo social en los casos estudiados. * En el 33,3% de los hogares de madre sola, los niños no se recuperaron nutricionalmente y tenían un riesgo socioeconómico de desnutrición alto. Los datos anteriores reflejan la magnitud del problema, su riesgo y la asociación con el estado nutricional de los niños. El aumento progresivo de la familia monoparental, especialmente el de la madre sola, lleva a reflexionar sobre las implicaciones y consecuencias que podrían acarrear estos hogares, desde el punto de vista social, económico y emocional. En este sentido resulta relevante considerar el poco reconocimiento de la condición de "madre sola" como indicador de riesgo social, no sólo porque pudiera afectar la estructura familiar tradicional, sino por sus implicaciones en términos de salud y nutrición de sus miembros. Pareciera que por ser una situación cotidiana, tiende a naturalizarse y a considerarse una forma de vida transmitida generacionalmente y, en ocasiones, no se le asigna la importancia necesaria, de allí que existan escasas políticas de intervención orientadas a apoyar este tipo de familia. Desde esta perspectiva y asumiendo que riesgo en salud son todas aquellas causas o indicadores de tipo biológico, ambiental, económico, cultural o comportamental, observables o identificables en un individuo o grupo que pueden asociarse y generar un hecho o enfermedad en la población[9], el objetivo de este artículo es presentar algunos aspectos de la condición de madre sola y el riesgo social 37 La madre sola como factor de riesgo social en nutrición que representa para el estado nutricional, así como para el sano desarrollo de la dinámica familiar y su función socializadora. La madre sola y sus implicaciones sociales Antes de iniciar el análisis sobre la madre sola, como problemática social, es importante destacar que existen familias con esta condición que logran un adecuado funcionamiento, especialmente cuando cuentan con el apoyo de parientes como abuelos, tíos, primos, etc., y las madres poseen fortalezas que les permiten afrontar exitosamente la responsabilidad de la crianza y manutención de sus hijos y su propio desarrollo personal. Ahora bien, la experiencia en la atención de familias en el Centro de Atención Infantil Antímano (CANIA) y lo señalado en diversas literaturas llevan a considerar a la madre sola como una situación de familia cada vez más común, donde generalmente se ve afectada la organización y funcionamiento de la vida sociofamiliar. Tomando en cuenta las áreas de intervención del trabajador social en la atención de situaciones familiares, es frecuente encontrar en el área de dinámica familiar, que con la separación o el divorcio de la pareja, en algunos casos, se generan diversos desajustes en los miembros de la familia. En la madre, fundamentalmente su área emotiva se ve afectada: presenta sentimientos de pérdida, "supone la cercanía de un futuro incierto o no contemplado; la vivencia de un dolor por la desestructuración del sistema familiar; desgarramiento emocional de una relación significativa que no pudo conservarse". Además, la dependencia de la mujer de su expareja, unida a la sensación de desagrado por su nuevo estado, para el cual nunca estuvo preparada, a lo que se suma la estrechez económica, la angustian y ella comienza a desarrollar una sensación de fracaso, frustración y reproches[10]. En el niño, la ausencia o carencia de la figura paterna dentro del hogar puede, además, crear alteraciones de identidad sexual, de género, pérdida de autoridad, deserción escolar, inseguridad, temor y problemas de conducta, entre otros. La madre sola puede constituirse en una condición vulnerable de la mujer para enfrentar las situaciones de la vida cotidiana. En oportunidades, de manera no consciente, generalmente los sentimientos de fracaso, frustración, tristeza, soledad, etc., son el abono para el terreno de situaciones que podrían conducirla a eventos no deseados (aislamiento, negligencia en la práctica alimentaria, poca supervisión en la crianza de los niños, maltrato infantil, suicidio, drogas, alcoholismo, prostitución, entre otros). Ello se ve expresado en el siguiente verbatum: "Ser madre sola es lo más malo que hay, no se lo deseo a nadie... Estoy con mis hijos, pero no es lo mismo que estar con una pareja, sentir apoyo. ...El papá del niño se buscó otra y me dejó, yo me quería morir… Lloré mucho tiempo, me sentía muy mal... A veces estoy en la casa y me siento sola". A esta condición socioemocional se le agrega la carga que implica el desempeño de múltiples funciones, que suelen ser poco valoradas o reconocidas por la sociedad y por ella misma, constituyendo un aspecto que influye, negativamente, en el contacto socio-afectivo con sus hijos, familiares y amigos, propiciando en la madre sentimientos de culpa, abandono e inseguridad, limitando así el desarrollo de un estilo de vida saludable. "Siento que todo lo hago mal. Es difícil cuando uno trabaja, para dejar todas las 38 La madre sola como factor de riesgo social en nutrición cosas listas en la mañana… Llamo a mi hija para saber si se bañó o hizo las tareas, si comió, cuando se enferma. Quizás con una pareja fuera diferente, un día uno, un día otro. Es fuerte estar sola". En el aspecto nutricional cobra mucha importancia el estado anímico de la madre en el proceso de alimentación de sus hijos y de ella misma. En algunos casos se ha observado que la situación de la madre con una condición afectiva alterada (tristeza, dolor, depresión, entre otros), producto de la separación de la pareja o de otros problemas en la dinámica familiar, puede repercutir negativamente en la nutrición adecuada de la familia. La licenciada M. Lecuna destaca que "la estabilidad emocional de la madre es fundamental para el desarrollo y mantenimiento de una adecuada, efectiva y nutritiva relación con su hijo, los conflictos y la separación de la pareja pueden ser una fuente de alteración e interferencia y reflejarse en el proceso de la nutrición"[11]. En esta misma área de intervención, otro aspecto relevante a considerar es la búsqueda incesante de compañía, por parte de esa madre, para mejorar su condición de vida y la de sus hijos, lo que la puede llevar a convivir con diversas parejas, situación que trae como consecuencia una madre con hijos procreados con diferentes progenitores, muchas veces sin reconocimiento legal, paternidad irresponsable y posibles enfermedades de transmisión sexual. La madre, al estar inserta en el mercado de trabajo, debe delegar sus responsabilidades del cuidado de los niños en otros familiares y, en algunos casos, en los hijos mayores, también menores de edad, quienes igualmente se ven afectados porque atender la crianza de sus hermanos significa una alta responsabilidad y exigencias no acordes con sus deberes y derechos como niños o adolescentes, y esto afecta el funcionamiento fami- liar e inclusive una adecuada práctica alimentaria en términos de establecimiento de hábitos y conductas. "La atención del niño por la madre en el momento de la comida es factor que protege la buena nutrición. Por el contrario, el ser atendido por los hermanos se relaciona más con posibilidades de ser desnutrido[12]. En el ámbito económico, la condición de la mujer, cabeza de hogar y única proveedora de ingresos, es un aspecto clave para identificar los hogares con mayor riesgo socioeconómico. L. Morales lo afirma al señalar "que entre los hogares pobres hay mayor vulnerabilidad [sobre todo] en aquellos donde el ingreso familiar es producido por la mujer, del cual dependen varios miembros del grupo familiar, y generalmente suele ser muy bajo dificultando la adquisición de los alimentos y el acceso a bienes y servicios"[6]. Esta situación se agrava cuando la familia es numerosa (más de seis miembros) ya que está limitada para cubrir los gastos derivados de las necesidades de alimentación y, posiblemente, alguno de sus hijos presentará problemas nutricionales. Igualmente, plantea este mismo autor que "la incorporación de la mujer al mercado laboral es diferenciada según el nivel educativo y clase social a la que pertenece", explicando que en cuanto a la ocupación "las mujeres de estratos más bajos, lo hacen en los de menor calificación, como es el servicio doméstico o los empleos considerados precarios generalmente a destajo, como son la costura, el cuidado de los niños, ancianos, el planchado o lavado de ropa, entre otros"[6]. La condición de madre sola en pobreza extrema es muy desfavorable, existiendo la tendencia cultural a perpetuarse o a transmitirse socialmente de una generación a otra; en muchos casos se han observado historias de vida repetidas, como un hecho tradicional en la familia donde existen abuelas, madres e hijas solas con sus hijos, igual- 39 La madre sola como factor de riesgo social en nutrición mente en condiciones de pobreza, reproducida o adquirida, y superarla es muy difícil, a menos que se cuente con el apoyo necesario. La experiencia obtenida y el análisis de la información estadística de las familias atendidas en CANIA, han permitido considerar que en la mayoría de los hogares a cargo de madres solas, se presentan situaciones de riesgo social importantes que favorecen la malnutrición, tales como: la alta dependencia económica, ya que suele ser ella la única proveedora en el plano económico; la incorporación al mercado laboral, que en la mayoría de los casos es trabajo a destajo, pasando a formar parte de la población del sector informal de la economía que no cuenta con beneficios laborales; por último, los ingresos inestables que asociados con la variable anterior, sin duda alguna, repercuten en la organización del presupuesto familiar, afectan la organización de la compra de alimentos y, por ende, la posibilidad de una alimentación adecuada. Con relación al área educativa, las estadísticas reportan que el 60% de las madres solas atendidas en CANIA alcanza hasta nueve años de escolaridad[7], lo que se asemeja a las cifras manejadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) de Venezuela, que muestran que el 52% de las madres llega hasta la educación básica, es decir, noveno grado[14]. Como se señaló anteriormente, el nivel educativo alcanzado por las madres solas influye directamente tanto en el tipo de ocupación como en el nivel de remuneración. Igualmente, se observa que estas madres tienden a interrumpir su educación formal, entre otras cosas, debido al embarazo precoz, así como a incorporarse tempranamente al mercado laboral. En este tipo de familia se aprecia que la educación no es prioritaria, ya que su interés apunta hacia la resolución de las necesidades económicas; lo anterior, permite explicar la tenden- cia a la incorporación tardía de sus hijos al sistema escolar, así como la deserción de los adolescentes de la educación formal, repitiendo de ese modo el comportamiento con relación a los estudios, producto del modelaje familiar. Otra área afectada por la situación de madre sola es la físico-ambiental, con presencia de hacinamiento y promiscuidad, ya que por lo general la madre comparte la misma cama con sus hijos propiciando, entre otras cosas, condiciones para la transmisión de enfermedades infecto-contagiosas que pueden mantener o agravar el estado nutricional. Como se ha visto; este tipo de familia monoparental con jefatura femenina, muestra problemáticas de importancia en todas las áreas de intervención social, que impiden el reconocimiento del tema nutricional y limitan la recuperación del niño en atención. Es por ello que la Unidad de Evaluación y Orientación de CANIA dirige su intervención al fortalecimiento familiar, específicamente a la sensibilización de la madre sobre la malnutrición como enfermedad, a la búsqueda de apoyo familiar, a la valoración de sus cualidades y potencialidades y a su incorporación en la toma de decisiones de la vida familiar, que incluye entre otras, su capacitación e inserción en el mercado laboral. Igualmente, en los equipos interdisciplinarios se ha diseñado una serie de estrategias que facilitan la atención e intervención de las familias en esta condición: flexibilización de los esquemas de atención adaptándose en muchos casos a la disponibilidad del tiempo de las madres trabajadoras; incorporación de otros familiares al tratamiento; atención del niño y su familia, en el mismo momento, por parte del equipo interdisciplinario a fin de reducir el tiempo de espera, entre otros. Sin embargo, la atención a la familia con "madre sola", condición que se ha incrementado a 40 La madre sola como factor de riesgo social en nutrición lo largo del tiempo, continúa siendo un reto para los diferentes especialistas; se le debe dar respuesta y proporcionar herramientas que le permitan atender a sus hijos y le faciliten la vida familiar en todos los aspectos: salud, educación, vivienda, recreación, etc. Consideraciones finales * La madre sola con sus hijos, como sistema de familia monoparental, debe comprenderse como un grupo especialmente vulnerable en términos de desempeño dentro de la sociedad. En este sentido, es importante implementar políticas sociales que garanticen su funcionamiento de la manera más adecuada posible, articulando sus posibilidades de acceso a los bienes y servicios (salud, alimentación, empleo, educación, vivienda, entre otros) a fin de generar efectos positivos en los diversos ámbitos de su vida familiar y comunitaria. * Se debe cultivar una visión holística de la madre sola y su realidad social, que permita focalizar sus fortalezas y promover el desarrollo de sus potencialidades cónsonos con un estilo de vida sano, así como fortalecer su capacidad humana, transformarla y desarrollarla positivamente. * La situación de madre sola se ha generalizado y requiere del apoyo integral de las organizaciones sociales para lograr el funcionamiento propio de una familia cohesionada, con estructura sólida y suficientemente fortalecida. * Para la salud mental de la madre sola es necesario implementar una estrategia de motivación hacia la alianza, como factor protector y estimular el apoyo de la red familiar que funcione como recurso de ayuda para las múltiples tareas que debe realizar, a fin de minimizar su nivel de angustia en los momentos de ausencia del hogar. En el caso de los hijos es importante que la acción social esté dirigida a estimular el apoyo paterno (aun cuando el padre esté fuera del hogar), y además a los miembros de la familia extendida, quienes podrían responsabilizarse de la provisión de la alimentación a los niños y establecer hábitos y conductas alimentarias adecuadas. * Considerando que la condición de madre sola puede estar asociada con la pobreza y, en consecuencia, con otros indicadores de riesgo social de desnutrición infantil, tales como alta dependencia económica, ingresos económicos inestables y bajo nivel educativo, es importante promover el incremento del ingreso familiar, la planificación y organización de la compra de alimentos y el establecimiento de alianzas productivas con la red comunitaria y otras organizaciones que permitan solventar la problemática existente. * Ante la situación del cuidado de los hijos, como recurso protector, es necesario promover la incorporación de los niños menores a hogares de cuidado diario, maternales o preescolares, donde se ofrece ayuda en el ámbito alimentario y educativo. En cuanto a los hijos adolescentes, es importante promover la continuidad y culminación de los estudios formales o motivarlos hacia la capacitación laboral, como parte del proyecto de vida. * Se debe estimular a la madre sola para que prosiga su formación en el plano educativo, como elemento esencial para favorecer su acceso al mercado laboral y alcanzar una mejor remuneración económica, además de aumentar su autoestima y, en general, contribuir a mejorar su condición de vida. Para finalizar presentamos el testimonio de una madre atendida en CANIA que permite apre- 41 La madre sola como factor de riesgo social en nutrición ciar el desarrollo de los recursos internos y la capacidad de resiliencia de algunas mujeres ante situaciones adversas: "Encontramos dentro de nosotras mismas la fortaleza, la motivación que nos conduce a recorrer por caminos hasta ahora desconocidos. Entonces cuando abro la puerta y miro al pasado puedo comprender con sabiduría y serenidad que todo este proceso de pérdidas ha servido para tres principales y grandes aprendizajes: 1. Desarrollar herramientas internas insospechadas. 2. Valorar los pequeños detalles. 3. Tender la mano con cariño y bondad a quien lo necesite". Referencias [1] Quintero Velásquez, A.M. Trabajo social y procesos familiares, Argentina: Lumen/Hvmanitas, 1997. [2] Flaquer, Ll. Las nuevas estructuras familiares. La Factoría, 2003-2004 (2223): 1- 8. [3] Quintero Velásquez, A.M. "Escenarios contemporáneos de la familia". En: XVII Seminario Latinoamericano de Escuelas de Trabajo Social: desafíos para el trabajo social latinoamericano. Presentado en Lima (Perú), 2001. Se consigue en: URL: http://www.ts.ucr.ac.cr/eventos/slets-17po-01.htm [Citado 10 sept. 2007). [4] Sanz, M. "Los desafíos del milenio ante la igualdad de género". Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), 2007, 134p. Se consigue en URL: http://www.eclac.cl/publicaciones/xml/5/28775/ Compendio%20MDG%20Graficos-final2.pdf [Citado 10 jun. 2007]. [5] Kliksberg, B. "La problemática de la familia y la educación en América Latina. Un desafío económico, social y ético". Presentado en el foro internacional: Hacia una ética del desarrollo, Caracas (Venezuela), 22-23 de febrero de 2001. Se consigue en: URL: http://www.iadb.org/Etica/Documentos/ ve_kli_probl.pdf [Citado 5 ago. 2007]. [6] Morales, L. Mujeres jefas de hogar, características y tácticas de supervivencia, Buenos Aires: Espacio, 2001, pp. 7-90. [7] Naranjo, C. González Muñoz, N. y E. Nahr. "Comportamiento de indicadores socioeconómicos: período 2000-2003". Bol Nutr Infant CANIA. 2005 (12): 36-55. [8] Alarcón, Z. "Riesgo social de desnutrición y su relación con la recuperación nutricional". Bol Nutr Infant CANIA, 2003 (10): 29-36. [9] "Organización Panamericana de la Salud. El enfoque de riesgo en atención a la salud". En: Manual sobre el enfoque de riesgo en la atención materno infantil, Washington D.C., Serie Paltex, 1986, pp. 13-24. [10] Valdez Jiménez, Y. "Impacto psicológico del divorcio en la mujer. Una nueva visión de un viejo problema". Se consigue en: URL: http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/cuba/cips/caudales05/Caudales/ARTICULOS/Artic ulosPDF/070818V034.pdf [Citado 10 sept. 2007]. [11] Lecuna, M. "Génesis de la conducta alimentaria y su relación con la malnutrición en el niño". Bol Nutr Infant CANIA. 2005 (13): 9-20. [12] Torres, A.M. y T. Torres Aliaga. "Nutrición y resiliencia en el desarrollo infantil". Se consigue en: URL: http://www.imagine.com.ar/yachay/ nutrición..HTM [Citado 4 abr. 2007]. [13] Instituto Nacional de Estadísticas. Indicadores Socioeconómicos. Se consigue en: URL: http://www.ocei.gov.ve [Citado 15 jun. 2007). 42 Personalidades Mariela Martín Paesano Comunicadora Social de CANIA José Rafael Lovera “Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla” Existe actualmente un boom de la gastronomía en Venezuela. Se ha profesionalizado el oficio de la cocina creando una notoria generación de chefs nacionales que está dictando pauta en el país y en el mundo. ¿Qué recomendaciones daría usted para profundizar más en la comida autóctona y proyectarla fuera de nuestras fronteras? En el Centro de Estudios Gastronómicos (Cega), tenemos desde el comienzo una cátedra de nutrición porque consideramos que este tema es fundamental y es un conocimiento que deben dominar los jóvenes cocineros. No solamente se trata de aprender las mezclas, las preparaciones y todo lo relacionado con el arte del oficio, sino también algo tan importante como es la salud de los seres humanos respecto a su alimentación. Eso en primer lugar. En segundo lugar, tenemos un repertorio de recetas tradicionales de Venezuela muy interesante. Hemos insistido mucho en esas recetas, en el 43 José Rafael Lovera es un notable historiador venezolano, especializado en temas como la cultura de la alimentación y la gastronomía en Venezuela y América Latina. Caraqueño (1939), Lovera es presidente honorario y fundador de la Academia Venezolana de Gastronomía, director fundador del Centro de Estudios Gastronómicos (Cega) y Miembro correspondiente en Venezuela de la Academie Française du Chocolat et de la Confiserie. En otro orden de ideas, es Individuo de Número de la Academia Nacional de la Historia y Miembro correspondiente de la Real Academia de la Historia de España. Su labor como autor es extensa. Además del libro fundamental Historia de la alimentación en Venezuela (1988), ha publicado El cacao en Venezuela: una historia (2000), Gastronáuticas (2000), Food Culture in South America (2005) y recientemente, con algunos ensayos y conferencias añadidos, reeditó Gastronáuticas (2006). Con un trabajo sobre la historia de la alimentación, Lovera participó en la Historia general de América Latina publicada por la Unesco. Es profesor asistente (jubilado) de la Escuela de Historia (Universidad Central de Venezuela); ha sido jurado del Premio Internacional Slow Food por la defensa de la biodiversidad y mantiene una columna en el diario El Universal. José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla" requiere un poquito más de estudio, yo diría que un poquito más de cariño, ya hablando del aspecto de la estética culinaria, porque usualmente nuestra comida se sirve sin mayor cuido de la parte estética. Eso que llamamos en nuestro lenguaje criollo, servir la comida "burreado" le quita atractivo para la gente que busca cierto arreglo, cierto aspecto atractivo en el plato. estilo de esa tradición, pensando en que nos distinguen de otros pueblos y otras sociedades cercanas. Incluso, siempre he creido que muchos de nuestros platos son interesantes. Algunos de los más sencillos, como por ejemplo la arepa, el casabe o las caraotas, siempre me hacen recordar que en nuestra etapa prehispánica, a pesar de tener una dieta que consistía fundamentalmente en esas tres cosas, es decir, en maíz, frijol y yuca, la gente no tenía problemas de salud. Los conquistadores se encontraron seres sanos, lozanos, bien formados. Sin embargo, después del descubrimiento, mucho más adelante, en los siglos XVII y XVIII, el maíz empezó a adquirir mala fama, porque se trasplantó a Europa y fue la dieta de la gente muy pobre, por ejemplo en el Norte de Italia. Allí comenzó a aparecer la pelagra como una enfermedad que se convirtió en endémica en la zona y se atribuyó su aparición al maíz. Pero el maíz era inocente de todo eso, en el sentido de que se debía incluir en la dieta, además del maíz, algún otro elemento como sucedía en nuestra América prehispánica con los frijoles. El frijol, en combinación con el maíz, impide el desarrollo de la pelagra que siempre es un problema serio de salud. Yo creo que nuestra dieta tiene muchos elementos, muchas preparaciones buenas para la salud e interesantes desde el punto de vista nutricional. Por otro lado, también la nuestra es una tradición compleja a la hora de cocinar, pues cuenta con preparaciones un poquito largas, un tanto complicadas, como por ejemplo, la hallaca o cualquiera de los otros platos que requieren un proceso complejo de elaboración. Hoy día, los adelantos de la industria alimentaria permiten que esos procesos se acorten. En el caso de la hallaca, que cité, tenemos la harina precocida que facilita mucho la preparación, si no, habría que comenzar por recolectar el maíz, granularlo y luego pilarlo. Era un proceso muy largo. Hoy día la industria agroalimentaria ha permitido que tengamos ciertas facilidades, pero creo que todavía nuestra cocina Se pudiera decir entonces que también "comemos con los ojos"… Sí, también se come con los ojos, por eso es necesario ese "cariñito a nuestra cocina criolla", al resultado de esa cocina, para hacerla más atractiva y evitar esa inhibición que producen esos platazos que no tienen arreglo ninguno. Me refiero sobre todo, en este sentido, a la comida pública: sea en restaurantes o en comedores industriales. En fin, yo creo que mi mensaje para los jóvenes es que deben aprender bien el concepto de nutrición y deben cuidar el aspecto estético de la cocina, de manera que puedan tener una presencia internacional que ya se empieza a ver pues es sólo un comienzo. La cocina latinoamericana ya tiene una presencia indiscutible en cualquier parte del mundo, la peruana está comenzando a tenerla con mucha fuerza, la mexicana, y la nuestra ¿por qué no la iba a tener? Lo que hay es una falta de orientación en el estudio de nuestro acervo culinario y de cómo llevarlo a unos criterios contemporáneos, al siglo XXI, para poder acceder, ya fuera de nuestras fronteras, a un público mayor. Ahora en que hablamos de platos tradicionales venezolanos y haciendo un enfoque histórico ¿podría contarnos un poco sobre el origen de la arepa? La arepa es un pan prehispánico que se remontaba a mucho tiempo atrás. Es decir, yo creo que si hablamos de maíz y preparaciones con base en el maíz estamos hablando fácilmente de cuatro a cinco mil años antes de nuestra era. En el caso de la arepa concretamente, pareciera que ella aparece 44 José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla" en el oriente venezolano. Hay un vocablo cumanagoto, compartido también por los Tamanaco, que es "erepa". Erepa significa el pan de yuca, el casabe, pero luego quedó significando pan por excelencia y, por último, terminó siendo el pan de maíz. Yo diría que esa es la evolución del vocablo. Ya los primeros que vinieron de Europa se encontraron con la arepa, con la arepa tal cual, no estrictamente como la de ahora, porque tenemos la harina precocida de maíz, pero sí hecha de maíz con agua y cocida en un budare de barro que no existe hoy día. La arepa siempre llamó la atención en el sentido de que era muy sabroso comérsela recién hecha, porque si se la dejaba se ponía fría y dura; ese es un ritornelo que aparece en las crónicas y en las relaciones de los conquistadores y de los primeros exploradores. La arepa era de maíz porque era el cereal autóctono. Sin embargo, hay un caso curioso, cuando los europeos llegan aquí, los españoles sobre todo, traen el trigo y se van a ciertos puntos donde podía cosecharse. Primero, aquí en Caracas que tenía un buen clima, pero sobre todo en la región de Los Andes, en los que hoy son los estados Trujillo y Mérida, sobre todo. Y en esos estados siembran con éxito el trigo, pero tuvieron que hacerlo los españoles que llegaron porque los indios no sabían nada de eso. Y no solamente tenían que sembrarlo ellos, sino que tenían que cosecharlo y luego tenían que fabricar molinos, porque en realidad los indios desconocían todas esas técnicas; entonces todos los que venían al país querían ser hidalgos, como se decía en la época, todos querían ir a más, pero sin embargo, esos señores que venían con la idea de superioridad tuvieron que fajarse como picapedreros a hacer las ruedas y las muelas de los molinos de trigo que se implantaron en Los Andes desde muy temprano. Ya en la segunda mitad del siglo XVI nuestro territorio estaba lleno de molinos sobre todo, donde había esos caudales de agua cortos y muy precipitados, como en Los Andes y también aquí en el Valle de Caracas. Me refiero a la quebrada de Anauco, por ejemplo, y la de Catuche. Ellos fabricaron en Los Andes esos molinos, molieron el trigo y enseñaron a los indígenas todas esas técnicas. Los indígenas fueron a trabajar a los molinos y como no era una economía monetaria, se les pagaba en especias. ¿Y con qué les pagaban? Con harina de trigo, de la misma que sacaban de los molinos. Entonces, ¿qué hacía el aborigen con la harina de trigo?... Arepas, porque era lo único que sabía hacer, por eso es que la arepa andina es arepa de trigo. En cuanto a la presentación de la arepa como plato tradicional… ¿el Cega tiene alguna propuesta para que su presentación no sea tan "burreada" como en las areperas? Sí, el Cega tiene una propuesta en ese sentido para la arepa y también para el casabe: consiste en hacer lo que podría llamarse una especie de "micro cocina". Se moldean unas arepitas pequeñitas, digamos de un diámetro de unos tres centímetros, y se reproducen las arepas clásicas (ya en nuestra tradición republicana y contemporánea) como por ejemplo, la reina pepeada, una arepa rellena que inventaron los hermanos Álvarez en honor de Susan Duijim, la Miss Venezuela de los años cincuenta, esa mujer tan bonita. Ellos le quisieron obsequiar algo distinto y entonces le ofrecieron un relleno algo distinto que lleva pollo, aguacate y mayonesa. Se la ofrecieron y así nació la reina pepeada. Aquí hacemos unas versiones en micro, como una especie de bocadito que usted se puede comer de una sola vez. Es atractivo, es agradable a la vista y por supuesto al paladar. Si pensamos en areperas pensamos enseguida en comida pública y sus respectivas condiciones de salubridad, sobre todo en nuestra ciudad llena de basura, smog, aguas servidas y vendedores ambu- 45 José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla" lantes expuestos a esto. ¿Qué diferencia hay entre el venezolano de ayer en comparación al venezolano de hoy, enfrentándose ambos a condiciones de insalubridad alimentaria en contextos diferentes? Si para comparar condiciones de salud usamos la expectativa media de vida, diría lo siguiente: la expectativa de edad a mediados del siglo XIX oscilaba entre los 30 y los 35 años, la de hoy está en los 60 o más. Esto significa que, a pesar de no haber un gran avance en la salud pública de aquella época, quizás sí había un ambiente más sano, no se utilizaban sustancias químicas en los alimentos, no había residuos industriales, era una sociedad que inclusive, no producía prácticamente basura y eso es interesante. Hoy, naturalmente la expectativa se ha ampliado, la medicina ha avanzado, la ciencia está muy adelantada, pero desgraciadamente, yo creo que todavía estamos en una situación en la cual, si bien ese promedio de expectativa ha aumentado, todavía hay muchísimos casos en los cuales se truncan vidas por fallas en la higiene pública, sin lugar a dudas. Yo creo, además, que como la población ha crecido tanto, el hacinamiento, las transformaciones de los transportes, la presencia de vehículos que contaminan constantemente son los factores que han contribuido a que haya cada vez más ventas callejeras, que las hubo siempre, incluso en los mercados de la época colonial. Claro, hoy existe lo mismo, esa comida de calle, que puede ser muy peligrosa, por mayor contaminación. Tengo un caso muy reciente de un empleado mío que se tomó un vaso de chicha esperando en una cola para sacarse la cédula, por allá en Coche, y en la noche le dio un choque anafiláctico y se inflamó todo, empezó a sufrir de la respiración. Tuvo un cuadro de esos típicos alérgicos graves y viene de allí. La situación de hoy es mucho más compleja, más complicada, hay mucha más gente, mucha más contaminación. Yo creo que una de las cosas importantes, sobre todo en los niños, es procurar que coman en casa, donde por más que pueda haber fallas, siempre habrá un poquito más de cuido maternal o familiar y se evitará esa contaminación que puede tomar un niño comiendo en cualquier puesto por allí en la calle. Hablando de niños... ¿el Cega tiene algunos proyectos con niños, con escuelas? Sí, el Cega tiene varios programas interesantes. La gente de Fe y Alegría nos visita con los niños de Primaria. Claro, ahora como esta profesión de cocinero ha tenido un boom y aparece en revistas y en películas, pues los cocineros se presentan y son una especie de ídolos, como los cantantes, entonces a los muchachos les interesa mucho y vienen muy curiosos. Es una experiencia hermosa tanto para los niños visitantes como para nuestros estudiantes del Cega. Han entrado en la cocina, han presenciado preparaciones, se les ha dado la posibilidad de hacer pequeñas cosas dentro de la cocina y luego han tenido oportunidad de comer. Eso, por un lado, ha sido muy interesante, porque la curiosidad infantil se siente muy satisfecha con ese tipo de cosas; se pierde la timidez y también se aprende mejor el oficio. Por otro lado, nosotros hemos enviado a nuestros estudiantes a panaderías de sitios como Petare donde han procurado, en ciertos sectores populares, enseñar un poco ciertas normas, no solamente de higiene, sino también para mejorar el producto. Ha habido también otro tipo de proyectos interesantes: ex alumnos de aquí han sido llamados a dar clases de introducción a la cocina. Por ejemplo, un egresado nuestro ha llevado con éxito una materia en el Colegio Los Arcos, aquí en Caracas. Pero también ha habido otros que se han dedicado, llamados por la Universidad Metropolitana, a impartir lecciones de cocina en una especie de materia electiva que incorporaron en esa casa de estudios. En conclusión, hemos tenido proyección en ese sentido, desde los niveles bajos de la educación primaria, hasta la media y la superior. Así procuramos mostrar lo que somos en el Cega y lo que es el oficio de cocinar. 46 José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla" Tocando el tema del progreso en la calidad nutricional de la alimentación del venezolano, ¿cómo ha sido esa evolución desde los alimentos más básicos hasta las comidas actuales que contienen aditivos químicos? Este problema yo lo veo así: podríamos hacer una gran línea que va desde el predominio del maíz, avasallador en tiempo prehispánico, luego en la colonia y en la república. No es que no hubiera trigo en la república, o en la colonia, había pequeños enclaves, por ejemplo en Los Andes y, en tiempos más recientes, desde principios del siglo XX para acá va aumentando la dependencia alimentaria, porque va creciendo el consumo del trigo que no producimos en Venezuela. Eso significa importar. Hay muchos factores que contribuyen con ese mismo incremento del consumo de trigo, entre otros, por ejemplo, la existencia de la pasta de trigo, la pasta italiana. Esas pastas permiten una cocción rápida, sin mucho gasto de combustible y si usted se pone a pensar en que la gente que más la consume vive por allá en un cerro alto, que tiene que subir por unas escaleras, labor pesada para llegar a su casa, y subir su bombonita de gas porque no hay servicio de gas, además, no se consigue leña, porque ya no hay. Si usted piensa en una cocción de cualquier otro plato, va a demorar más, por ejemplo, hacer un guiso; en cambio, usted monta el agua, ésta hierve, agrega la pasta y son sólo minutos de cocción, eso junto al precio de esa pasta, que es relativamente económico, ha hecho que la gente se vuelque a su consumo en los últimos tres decenios, haciendo de la pasta el plato nacional en mi opinión. Por otro lado, creo que hay una serie de factores relacionados con la industria alimentaria, que intenta hacer más atractivo el alimento, dándole una coloración que se parezca a éste cuando está fresco, por ejemplo, lo que implica el uso de una serie de aditivos químicos como colorantes que pueden ser peligrosos para la salud. Esto ha sido un hecho desde los años cincuenta en adelante, de modo que hoy día se consumen compuestos químicos en una cantidad que quizás no sea la más adecuada. Recientemente ha habido una tendencia que promueve más el consumo de alimentos naturales, no sólo en Venezuela sino en el mundo entero. Lo observo por ejemplo, en un elemento presente en muchos de nuestros postres y bebidas, como es la vainilla. La esencia de vainilla tradicional se obtenía de una orquídea que nace aquí y, recuerdo todavía, haber comprado en ciertas regiones del estado Aragua y luego en Caracas, esencia de vainilla local. No le ponían "natural", sino esencia de vainilla. Resulta que ahora usted va a comprar esencia de vainilla y sólo dice "esencia de vainilla", aunque estarían obligados a señalar que es artificial, por tratarse de un producto químico, no es la esencia extraída de la vaina de la orquídea famosa. Esto constituye que ahí hay un ejemplo clásico de cómo, incluso, nos hemos acostumbrado a esos sabores químicos. Si usted toma un quesillo siente ese sabor fuerte de la vainillina, como se llama la artificial, y muchas veces si ofrecemos un quesillo preparado con esencia de vainilla natural, que nosotros procuramos encontrar, a la gente le parece que no es lo mismo, está tan acostumbrada a la fuerza, a la agresividad de la vainillina, que le gusta más que la vainilla natural. Estamos hablando del paladar que crea una memoria gustativa y entonces cuando se tiene un estímulo sensorial, interviene la memoria y reconoce un sabor al cual usted está acostumbrado o rechaza y desconoce, o es otro sabor que no había probado antes. El caso del quesillo y de la vainilla es un ejemplo de cómo los venezolanos tenemos que luchar contra ese problema derivado de la industria alimentaria. Esa industria ha generado grandes beneficios, verbigracia la harina precocida, pero también ha producido otros problemas por la introducción parcial o total en algunos casos de sustancias químicas, como la esencia de vainilla, que dañan el paladar. 47 José Rafael Lovera: "Hay que hacerle un cariñito a nuestra cocina criolla" Sabemos que es una realidad que la comida rápida o comida chatarra ha venido a cubrir una necesidad en la dinámica de vida actual. ¿Qué propuesta tiene el Cega para cubrir esa necesidad que nos genera el corre-ccorre diario del alimento rápido, práctico, pero que sea natural? Sí, es verdad que la celeridad histórica, entre otras cosas, ha producido una aceleración en la vida cotidiana que nos resta tiempo para lo que eran antes los espacios de placer, de sociabilidad; antes se almorzaba y se tomaba suficiente tiempo para el almuerzo con la familia, había conversación y placer en degustar los platos que se servían: un hervido magnífico, un pudín de arepa, cualquier cosa. Hoy, eso prácticamente ha desaparecido, entrando esa oleada de comida rápida. Pero yo creo que nosotros tenemos algo que puede competir perfectamente con eso, es la arepa; la arepa rellena, bien pensada, incluso con asesoramiento de los nutricionistas, será siempre superior a una hamburguesa. Pudiera poner un ejemplo: en una avenida muy transitada de Caracas, en Las Mercedes, hay dos esquinas que compiten, en una está un negocio de comida venezolana rápida y en la otra está una franquicia internacional, también de comida rápida. Allí es donde está la propuesta. Yo creo que nuestra oferta tiene ventajas, primero, el valor cultural, porque se acerca a la tradición y, además, el valor nutricional. De manera que pienso que podemos competir muy bien con nuestra arepa. ¿Existe alguna conexión entre el oficio del chef y la calidad nutricional de los alimentos? ¿Manejan los chefs este concepto o sólo se preocupan por el sabor y aspecto de su propuesta? Justamente aquí, en el Cega, desde un principio hemos pensado que la formación de un verdadero jefe de cocina tiene que pasar por el conocimiento de la nutrición. En eso hemos sido muy cuidadosos. Hemos tenido siempre nutricionistas al frente de una asignatura que es Nutrición, a la cual le damos una gran importancia. Siempre pensando en que el cocinero debe tomar en cuenta, desde el punto de vista ético de su profesión, no solamente agradar al otro, agradar al comensal, sino que debe cuidar la salud de éste. Ese es uno de los conceptos, de los principios que estudiamos aquí para que quede bien grabado en la mente de los jóvenes estudiantes. A la larga se dice que la cocina es una especie de acto de amor, de desprendimiento, de amor al prójimo; en ese sentido, es fundamental que se sepa algo de nutrición, porque usted puede envenenar a alguien con la mejor intención del mundo, con la intención de producirle un fugaz placer en el paladar y eso lo tenemos muy en cuenta y lo enseñamos acá. ¿Alguna recomendación al país en materia de nutrición? Pienso que estamos en un país en el cual un boletín sobre nutrición infantil es fundamental, ya que tenemos una población infantil muy grande, creciente, porque la tasa de natalidad aumenta, las condiciones socioeconómicas de una parte de la población son obstáculos, casi insuperables, para lograr que esos niños que están naciendo, que se están criando, accedan a una nutrición aceptable, que impida tengan defectos en la edad adulta, pues muchos se forman en la época de la infancia. Creo que esa es una preocupación que hay que estimular y ojalá que pudieran ustedes no solamente dirigirse al público más o menos culto, sino también difundir, todavía más, esos conocimientos. Le corresponde al Estado, a los empresarios y a los patronos garantizar una nutrición adecuada, por lo que toda labor que vaya en pro de destacar que existen problemas y señale cuáles son y sus soluciones, ayuda enormemente, así que yo los felicito por esa labor que está haciendo CANIA a través de este boletín. 48