En las granjas lecheras, asistimos con

Transcripción

En las granjas lecheras, asistimos con
MILAGROS BARQUÍN SAINZ *
En las granjas lecheras, asistimos continuamente a un aumento del nº de cabezas / explotación debido a la necesidad
imperiosa de aumentar la producción para
resultar más competentes en el sector.
En general este aumento del rebaño
no se acompaña con más que pequeñas
modificaciones en el establo que tienden a
disminuir la superficie por animal; al
tiempo que tratamos con animales más
seleccionados y por tanto con menor capacid ad de adaptació n a las condic iones
adversas a las que las sometemos. Es hoy
en día indiscutible que la sanidad y el
bienestar animal es un factor primordial
para alcanza r la ma yor rentabilidad.
Cualquier programa de manejo que se
aplique a un rebaño no obtendrá su máximo potencial si no cuenta con unas mínimas condiciones de higiene y comodidad.
Esta fa lta de acondiciona miento e n e l
establo lleva además a aumentar el número de horas de trabajos "poco finos y evi tables", que roban tiempo a tareas más
importantes como puede ser de observación del rebaño, de formación, de gestión
etc. En definitiva se trata de un tiempo
malgastado que debería de utilizarse en
tr ab ajos pre ven tivos o trabajos q ue
requier en una m ayor delica deza como
puede ser el ordeño la observación de
celos, mantenimiento de cubículos etc. y
que en estos casos pasan a un segundo
plano.
Por otra parte la necesidad de adecuación a la reglamentación vige nte ( R D
1679/94 sobre condiciones aplicables a la
producción de leche cr uda, leche tratada
térm ica me nte, y produ ctos lá cteos,
Reglamento 178/2002 principios y requisitos generales de legislación alimentaría,
Directiva 98/58/CE r elativo a la protección de animales en explotaciones ganaderas, normativa de la PAC) nos obliga a
ponerla en práctica ya que es de obligado
cumplimiento.
Hay distintos sistemas de explotación
* Grupo Leche Pascual. Ponencia presentadaa en las 6ª Jornadas Técnicas del Grupo
Leche Pascual celebrada en Aranda de Duero
(Burgos), el 18 y 19 de febrero de 2005.
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del vacuno de leche, desde sistemas exten sivos en los que los animales entran exclu sivamente al ordeño y a comer hasta sistemas intensivos con animales en plaza fija
que no permiten al animal ningún tipo de
desplazamiento. En la actualidad el caso
más fr ecuente son sistemas que permiten
un desplazamiento del animal por el establo con zonas de r ecreo y plazas libres
donde se acuestan. Este último es al que
más se tiende y al que se va a pr estar
mayor atención. Independientemente del
sistema de explotación que exista el objetivo es el mismo en todas ellas: pr oducir la
máxima cantidad de leche y de la máxima
calidad. Desde el punto de vista higiénicosanitario el objetivo es mantener la vaca
limpia, seca y cómoda las 24 horas del día.
Conseguir ambos objetivos depende del
manejo y de las instalaciones con que se
cuente. Dentr o del capítulo de las instalaciones a su vez dependerá del diseño y del
mantenimiento diario. Resulta aún más
impor tante este segundo aspecto que el
diseño. Es muy frecuente ver cubículos
con buenas medidas y falta de cama o
charcos de orina y leche en ellos o ver
bebederos totalmente invadidos por algas.
Si minimizamos todos los problemas sani tarios que puede deberse a malas condiciones ambientales la r entabilidad de la
explotación sería mayor.
Las instalaciones son el aspecto de la
granja que menos ha evolucionado paralelamente a un empeoramiento de las condiciones sanitarias. En el establo cohabitan
a nim ales e n distinta s fases productivas
junto con los agentes microbianos característicos de cada uno. Las condiciones bioclimáticas que se pro ducen e n e ste
ambiente favorecen el desarr ollo de estos
agentes e incluso facilitan su permanencia
durante largos periodos. Existe una elevada concentración de materia orgánica
(materiales de cama, estiércol, orina, leche), una elevada humedad en el ambiente (respiración, transpiración, orina, fluidos internos) una elevada concentración
de gases (del eructo, de heces, de la fermentación) y una temperatura aceptable
para que este conjunto: microbismo, se
encuentr e en unas condiciones óptimas de
super vivencia. El ganado vacuno además
resulta bastan te se nsible a facto res
a mb ienta les ta les co mo te mpe rat ura ,
hum eda d re lat iva y c once ntra ció n de
gases. Estos tr es factores se encuentran
muy relacionados ya que la sensación de
cada uno de ellos se verá afectado por el
r esto.
Respecto a la temperatura no olvidar
que existe una zona de tª neutra en la que
en el animal no se deben de poner en marcha los me canismos de increm ento de
Tabla1 Gases nocivos para el vacuno y
concentraciones recomendables
Gas
Metano
Amoniaco
Dioxido de carbono
Sulfuro de Hidrógeno
Acidos G. Volátiles
Nivel recomendable
<1000ppm
<10 ppm
<3500ppm
<10ppm
0,1-0,2 %
calor o de disipación de este por tª muy
altas o muy bajas. Esta franja oscila entre
los 0ºC- 20ºC para unos autores y 5ºC 25ºC para otros, si bien la tª optima será
entre los 10ºC y los 16ºC. Fuera de esta
franja térmica los animales deben poner
en marcha mecanismos que supondrán un
estrés en detrimento de su sistema inmunitario. La humedad relativa óptima oscila entra el 60% y el 80% y la velocidad de
aire entre 0,5 m/s y 1,4 m/s.
El aire va a ser junto con el agua el
vehículo más importante de transporte de
agentes infecciosos. Si este no es renovado
adecua dam ente favorecer á el am bie nte
húmedo y cálido que necesitan los gérmenes para su desarr ollo. Una ventilación
adecuada ya sea estática o dinámica resultará imprescindible para hacer más hostil
su medio. Esta primera resulta más económica y se trata de realizar un diseño en
paredes y techos que permitan la correcta
circulación y renovación del aire viciado.
Con paredes laterales de una altura de 3,6
a 4,25 m y con una pendiente suficiente
entre 25-30% y cumbrera de ventilación a
lo largo de todo del tejado permite pr evenir la condensación y que circule el aire
evitando concentraciones microbianas y
de gases nocivos (Tabla 1). Se debe garantizar una entrada de aire de 0.30 m2 y una
salida de 0,15 m2 por animal en una vaca
de producción Es posible la instalación de
sistemas mecánicos que ayuden a la ventilación natural.
El ganado bovino resulta especialmente sensible a los efectos de estos gases. El
aparato respiratorio del ganado vacuno
presenta un as particula ridade s que lo
hacen más susceptible y que no hay que
olvidar a la hora de diseñar el sistema de
ventilación. Presentan un bajo número de
capilares alveolear es, un menor número
de macrófagos en su sistema pulmonar y
una menor cantidad de superficie de intercambio gaseoso para un mayor flujo de
aire a través de los pulmones. A todo esto
se le suma su mayor exposición a gases
debido al propio gas eructado, al alto nivel
de vapor de agua producido durante la
respiración y a los gases nocivos que se
van acumulando procedentes de la degradación microbiana de las deyecciones.
Por todo esto si el aire no es renovado
adecuadamente este será un vehículo de
agentes infecciosos. Se ha demostrado que
con car gas bacterianas de 107 ufc/m3 pueden llegar a los pulmones entre 104 streptstaphyl y 103 coliformes /litr o de aire ins pirado.
Si además la Hr es alta resulta más
sencilla la supervivencia de los microorganismos.
En la estructura del establo se deben
distinguir cuatro áreas en las que su mantenimiento tiene una deter minante importancia para la calidad del producto final:
1.1 Áreas de r ecreo y camas
1.2 Áreas de alimentación (comederos, bebederos y almacenes)
1.3 Áreas de trabajo (sala de espera y
sala de ordeño)
1.4 Lechería
los líquidos. Además si hay un suelo hormigonado labores de limpieza o desinfección serán más sencillas de realizar.
Con esta pendiente se limita la excesiva
humedad en la cama que junto con la
materia orgánica existente favor ecería la
fermentación y el desar rollo bacteriano;
por esta misma razón la ventilación que
r enueve el aire manteniendo concentraciones de gases aceptables y evitando condensaciones es muy importante. Al tiempo de estar ventilado debe permitir una
cierta entrada de sol que deje actuar a los
rayos ultravioletas secar las camas y ejercer así su papel de desinfectante.
Es el sistema de cubículos el más frecuente gracias a su comodidad de manejo y su
mayor control higiénico. En explotación
diseñada con cubículos, las medidas van a
1.1. AREA DE RECREO Y CAMAS
Camas
Para explicar la importancia que tiene
este ár ea debemos conocer las necesidades sanguíneas para producir un Kg de
leche. Se necesita el paso de entre 450- 500
Kg de sangre por la ubre por Kg de leche.
Este flujo sanguíneo está directamente
r elacionado con la posición del animal de
form a que m uchos e studios cie ntíficos
demostraron que con la vaca de pié cir cula un 50% menos de sangre por la ubre
que cuando está tumbada. Independientemente del sistema de explotación exis tente debemos intentar que la vaca permanezca de pié o acostada en función de
sus necesidades no de las condiciones con
que se encuentr e. Esta área por tanto con diciona una gran parte de la calidad del
entorno pues pasará aquí más de la mitad
de su tiempo diario. Como ya se ha dicho
el aumento del r ebaño ha llevado en gener al a las explo taciones a disminuir la
Tabla 3 Dimensiones de un cubículo
para vaca de entr e 600 y 650 Kg
Dimensiones de un cubículo estandar
Anchura
1,15-1,20m
Longitud total
2,45-2,5 m
H. Barra educadora 1,17 m
H. Bordillo
25-30 cm
Longitud cama
1,7-1,8 m
Espesor cama
15 cm
Pendiente
2-4%
Tabla 2 Superficie recomendable en
cama caliente
Tipo animal
Descanso
vacas> 7000 l
6,5 m2
vacas 6000l
5 m2
Vacas secas
5-7 m2
Novillas de 18-20 m
4-5 m2
Novillas de 12-18 m
3,5-4 m2
Terneras< 1 año
3-3,5 m2
Terneras 0-6 m
2-3 m2
super ficie/animal. No se debe de bajar de
una mínimas medidas según sea el tipo de
explotación. En la siguiente tabla se indic an las supe rf icie s re com e ndables en
explotación de cama caliente.
Estas super fic ies bajo una capa de
mínimo 15 cm de cama, deben tener siempr e una base hormigonada con una pendiente que per mita la fácil evacuación de
variar en función del tamaño del animal a
través de una serie de fórmulas. Unas
medidas para un animal de tamaño habitua l e n nue stras exp lot acion es serían
( Tabla 3)
Un mal diseño de medidas hace que
los animales se encuentren menos cómodos y el mantenimiento sea más difícil. Si
el cubículo resulta lar go es muy probable
que el animal deje sus deyecciones dentro
favor eciendo el ambiente a un crecimiento bacteriano. Si la longitud de cama se
queda cor ta el animal tiende a dejar el tercio posterior de su cuerpo en el pasillo
acostándose dir ectamente sobre las deyecciones. La anchura excesiva permite que
el animal se gire dentro y se acuesta en
dirección contraria depositando de nuevo
las deyecciones dentro. Si falta pendiente
permitirá además que esta humedad existente permanezca dentro.
La base de este es darle el suficiente
espacio a la vaca para el balanceo que realiza al levantarse sin propiciarse golpes. El
mantenimiento de estos secos y limpios es
la clave para el confor t y la producción de
leche de calidad. Hay distintas opciones
en el mercado actual con los que se rellena la cama.
El encamado inor gánico es sin duda
alguna el más ventajoso desde el punto de
vista sanitario al no tener los nutrientes
necesarios para el crecimiento microbiaNº 149 FRISONA E SPAÑOLA 87
no. Estos serían encamados con arena o
ca rbona to au nque pr esentan una gr an
reticencia en su uso por las desventajas de
manejo. El desgaste de instalaciones, la
carga de trabajo, el depósito en el foso y el
costo son algunos de los inconvenientes
que presentan.
E l encamado orgánico bie n sea en
base a paja, serrín, tronchas de maíz o
estiérc ol deseca do r equieren un bu en
mantenimiento para que no se humedezcan excesivamente ya que la proliferación
bacteriana es muy sencilla dado el sustrato del que se trata. Camas como la paja
pueden incluso resultar bastante caras en
zonas donde este material no es abundante ya que requiere unas cantidades de 2-3
Kg diarios por cubículo.
La alter nativa más actual que presenta
un equilibrio entre comodidad del animal,
trabajos de mantenimiento y costes son las
alfombras o colchonetas que se instalan
sobre el cubículo hormigonado. Hay una
gran variedad de ellas desde simples cauchos de distintos espesor hasta colchonetas de latex con una gran capacidad de
amortiguación.
En explotaciones que se utiliza la pradera como lugar de alojamiento no se
debe mantener a los animales en lugares
de forma permanente. La pradera pasará
en muy poco tiempo a ser tierra batida y
mezclada con sus deyecciones que es el
mejor caldo de cultivo de los gérmenes
causantes de mamitis de origen ambiental
(streptococos fundamentalmente).
de explotación(Tabla 4).
Unos pasillos estrechos o patios muy
sobrecargados hacen que aumente el volumen de las deyecciones/m2. Este estiércol
va a manchar no solo las pezuñas si no que
llega a los flancos y a las ubr es. Este
mayor grado de suciedad hace que al lle gar al ordeño una de las tareas que más
tiempo lleve sea la limpieza de ubres y la
utilización de manguera para su lavado.
Las patas además estarán expuestas a la
humedad y a las heces, lo que va a aumen tar el riesgo de problemas de salud, como
Áreas de recreo
la der ma titis in ter digita l. Un excesivo
Los pasillos o patios limpios son el reblandecimiento de las pezuñas facilitan
otro factor clave para mantener las vacas
incluso la penetración de pequeños objelimpias y secas, pasillos estrechos o un ele tos que inducen a cojeras. En plaza fija
vado número de vacas hacen que exista
esta enfermedad afecta fundamentalmenuna cantidad excesiva de estiércol en conte a las extr emidades posteriores.
tinuo contacto con los pies que posteriorLas dimensiones de los patios resultan
mente pasará a los cubículos aumentando
también definitivas en el compor tamiento
el trabajo de mantenimiento de estos. Se
de las vacas. El tipo de superficie del piso,
estiman pasillos de 3,7 metros entre los
el tiempo que están de pié y el ejercicio
cubículos y de 4,6 metros en el pasillo de
impactan sobr e la locomoción y el desalimentación. Estas dimensiones corresarrollo de las cojeras. Los patios deben
ponden a apr oximadamente 5 m2 por anicumplir fundamentalmente dos caracterís mal. La superficie de recreo por animal va
ticas:
a variar en función del tipo de suelo y tipo
Adherencia : para evita r el deslizamiento que provocará lesioTabla 4 Superficie necesaria por animal según el tipo nes de patas y pezones. Si
los animales tienen miedo
de patio
porque el suelo r esbala van
Zona de ejer cicio
a cambiar pautas de comTipo animal
Hormigón
Tier ra
porta miento sobr e to do
Vacas en producción
6m2
10-15m2
referidas a manifestaciones
Vacas secas
3m2
7m2
de celos. Se recomienda que
Novillas de 18-20 m
1,5-2 m2
1,75 m2/100Kg Pv
en cementos nuevos o muy
Novillas de 12-18 m
1,4-1,5 m2
1,75 m2/100Kg Pv
viejos se realice un ranuraTerneras< 1 año
1-1,2 m2
1,75 m2/100Kg Pv
do con fisuras de 1- 1,25 cm
Terneras 0-6 mes
0,6-0,8 m2
1,75 m2/100Kg Pv
de anchura por 1-1,25 cm de
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profundidad separadas de 10-15 cm entre
ellas. Pisos muy lisos disminuyen el desgaste de las pezuñas y favorecen los resbalones que resultan en lesiones. El ranurado debe realizarse en la dir ección de la
arrobadera (evacuación de líquidos), se
busca con esto mantener el suelo lo más
seco posible para evitar La zonificación,
teniendo en cuenta la jerarquía, la manifestación de celos o cualquier otra pauta
de comportamiento han estar muy presentes a la hora de diseñar los patios. Estas
medidas disminuirán en la medida de lo
posible este tipo de lesiones que junto con
la reproducción y las mamitis son los tres
pilares de la patología en vacuno lechero.
1.2. AAREAS DE ALIMEWNTACIÓN
Comeder os
Además de tener unas medidas y una
pr oporción adecuada en el establo según
el tipo y nº de animales existentes, deben
cum plir ta mbién unas condiciones que
eviten los numerosos problemas que se
pueden producir. Los alimentos que diariamente administramos tiene una elevada
humedad, por otra parte necesaria para su
mejor palatibilidad. Si no realizamos una
limpieza diaria de estos, en los restos, rápidamente se va a producir un crecimiento
de m icroorganism os q ue nos pue den
generar bastantes pr oblemas. Esta limpieza diaria debe ser facilitada con la presencia de superficies lisas que no permitan la
acumulación de r estos. Se utilizan actualmente terrazos, cementos pulidos o incluso base de acer o inoxidable que permite
un buen mantenimiento. Con una mínima
pendiente se permitirá la evacuación de
líquidos si es que cayeran (en plaza fija).
Se evitará en la medida de lo posible que
les dé dir ectamente el sol y que estén protegidos de la lluvia, por dos razones la
temperatura y el agua ayudarían a este
cr ecimiento bacteriano y además los animales dejarían de comer en horas punta al
sol.
Sobr e el almacenamiento de alimentos
debe cumplir unos requisitos mínimos que
permitan mantener las materias primas en
seco, al abrigo de humedad y de contaminaciones procedentes de pájaros o r oedor es. Se recomienda la utilización de mallas
para evitar la entrada de pájaros y la colocación de algún sistema de contr ol de roedores como portacebos. Hacer especial
mención a la limpieza de paredes entr e
paredes; Por lo que deben de ser lisas para
evitar el envejecimiento de r estos que
puedan caer sobre la nueva materia prima.
Bebeder os
La disponibilidad de agua potable y
fresca es fundamental para el buen rendi-
Tabla 5 Necesidades de agua según la
temperatura ambiental
Tipo de animal 10ºC 20ºC 30ºC
Ternera
10
11
15
V.seca 600 kg
45
58
70
Vaca de 18 l/día 66
79
92
Vaca de 30 l/día 89
100 115
miento de un an im al. La vac a puede
aumentar entre 1,2 y 1,5 veces sus necesidades de agua en condiciones climáticas
(Tabla 5).
Un problema común en los establos
lecheros es que el abastecimiento de agua
se pone demasiado lejos de la sombra, de
los comederos o de los sistemas de enfria miento que existen y la vaca si tiene que
escoger entre desplazarse en el sol para
beber y permanecer a la sombra escogerá
esta segunda opción, con la consiguiente
disminución de la ingesta. Además las
investigaciones han dem ostr ado que e l
50% del agua que beben se produce en las
2 horas siguientes al ordeño por lo que a la
hora de ubicar los bebederos se deben disponer en puntos no lejanos a la sala de
ordeño pero sin que dificulten en paso.
Obser va ndo la c ant ida d de agua q ue
puede llegar a beber una vaca no hay que
desestimar las condiciones en que esta se
encuentre.
El agua será uno de los vehículos más
importantes de transmisión de enfer medades ya que es un caldo de cultivo excelente para multitud de microorganismos y
larvas.
Debe existir también un mantenimiento periódico de los bebederos que garanticen una mínima calidad de esta. Se recomiendan bebedero poco profundos aunque si alargados para tener una buena disponibilidad por animal (entre 9-10 cm
lineales). Es muy aconsejable la utiliza-
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ción de bebederos en acer o inoxidable o
en todo caso; si son de obra; que estén alicatados para que en su limpieza se puedan
e lim inar tod as las algas qu e apa recen
sobre las paredes.
Como fuente de agua se recomienda
que sea agua potable a pesar de tener una
mayor resistencia y en todo caso si es de
pozo deberá estar controlada por análisis
periódicos y garantizada por métodos de
cloración y filtración.
1.3. AREAS DE TRABAJO : SALA DE ESPERA
- SALA DE ORDEÑO
Sala de espera
La entrada de las vacas a la sala de
ordeño debe hacerse tranquila. Una vaca
que llega estr esada al ordeño sufrirá una
inm ediata liber ación de ad rena lina al
torrente sanguíneo en detrimento de liberación de oxitocina, que inhibirá el proce so de bajada de leche que nor malmente es
provocada por la contr acción sobr e la
capa muscular que r odea los alveolos. En
este momento por muy bien que se realice
la rutina de ordeño no conseguiremos flu jos óptimos ya que el efecto de la adrenalina e n san gr e dura rá 30 m inu tos.
Situaciones como:
- El hacinamiento en la sala de espera
- Los gritos y palos en el manejo
- Descargas eléctricas a través del arreador
Se deben evitar para conseguir una
óptima liberación de oxitocina. La dimen sión en una sala de espera se calculará en
base a 1,5 m2/ vaca. La sala de espera debe
tener una ventilación adecuada pues al
estar los animales más hacinados de lo
habitual la tª ambiental sube más rápida mente. Se considera esta sala el lugar más
estr esante para las vacas en épocas calurosas. Si en ella no hubiera suficiente venti lación por su diseño se debe acudir al
r ociado de agua y/o ventiladores.
En aquellas explotaciones con ar reador automático no se debe olvidar que el
objetivo de este es reducir la superficie
disponible por vaca para estimularla a
pasar a la sala de ordeño, no empujarla
con este.
Otro aspecto impor tante en la sala de
espera es la disponibilidad de agua, se
debe contar con disponibilidad para al
menos un 15% de los animales.
Sobr e su estructura; el piso debe tener
dos características fundamentales que sea
antideslizante y al tiempo fácilmente lavable, al igual que el suelo de la sala de ordeño. Se puede realizar un ranurado cuando
se trate de cemento o utilizar distintos
materiales empleados también en el piso
de la sala de or deño como resinas, baldosas etc. La otra característica es que tenga
una pendiente de entre el 2-6% ascendente hacia la sala de ordeño. El suelo no
debe suponer un incremento de la carga
bacteriana sobr e patas o ubres que disminuyan la calidad higiénica del ordeño y
prolonguen esta tarea.
Sobr e las paredes se estima que sean
también lavables hasta 2 m ahí donde las
haya. No deben existir paredes que la
separen de la sala de or deño y estas deben
estar estructuradas de forma que no existan ángulos de 90º hacia la sala. Se recomienda la forma de embudo.
Sala de ordeño
A la sala de or deño las vacas deben
llegar solas sin necesidad de arrearlas por
ello es muy impor tante tener en cuenta la
dimensión y el diseño de esta plaza. Debe
permitir una perfecta alineación de la unidad de ordeño sobre los pezones. El diseño va a variar según el tipo de sala sí bien
hay que tener en cuenta que la vaca no
debería de pasar más de 3 horas al día
entre sala de espera y sala de ordeño. Es
otra de las razones importantes para hacer
lotes cuando se trata de rebaños muy
grandes con salas que se han quedado mal
dimensionadas. La valoración del confort
de la vaca en la sala de ordeño se puede
r ealizar estimando el % de animales que
en cada tanda se encuentran rumiando,
esta debe ser superior al 60%. Otra forma
de valorarlo es por el nº de defecaciones
en plaza ó por las patadas durante el ordeño, si bien aquí se puede relacionar con un
mal funcionamiento del equipo de ordeño.
La ventilación debe ser tal que permita la eliminación de calor y vapores que se
originan durante este. Es muy interesante
utilizar materiales aislantes en el techo
que eviten las condensaciones en invierno
y el excesivo calor en verano. Un estrés
por calor aquí de nuevo entorpecería la
buena calidad de ordeño. Se recomienda
una altura de muros que per mitan entrada
y salida de air e o incluso extractores de
aire que mantengan la tª por debajo de
20ºC y la H. relativa por debajo de 80%.
En la actualidad en ciertas explotaciones se han colocado bebederos en la sala
de ordeño y han observado una mejora de
las producciones.
Sobr e las condiciones higiénicas que
debe cumplir la sala; el suelo será como en
sala de espera fácilmente lavable pero al
tiempo antideslizante, hay en el mer cado
distintas resina s que resu lta n basta nte
resistentes a la corr osión ácida de la leche,
frente a los cementos o los terrazos. En
todo caso si se utilizaran cementos se les
hará un rayado que evite el deslizamiento
y que siga la dirección de la pendiente. La
pendiente será en sentido lateral y contrario al foso para evitar que los efluentes
vayan hacia él; será de un 2% aproximadamente.
Tanto el suelo como el foso deben disponer de desagües que se recomiendan
sean tipo sifón (en todo caso protegidos)
para evitar la entrada de r oedores, insectos y malos olores. En una sala de no más
de un año con un dr enaje en el foso no
pr otegido la entrada de ratas provocó una
grave avería en la mitad de la sala por
haber r oído todos los cables.
Las par ede s de ben se r sup er ficies
fácilmente lavables ya sean alicatadas o
con pinturas plásticas se recomienda que
al menos tengan 2 m de altura ya que la
experiencia nos dice que hasta esta altura
se salpican frecuentemente. Se desaconse ja las paredes en bloque o cemento por su
poca r esistencia al agua a presión que se
utiliza en la limpieza.
El foso de ordeño tendrá una profundidad adaptada al or deñador de forma
que durante las tareas, este tenga los bra zos extendidos a una altura que no supere
los hombr os, oscila entre 0,90 m - 1,1 m.
Es pr eferible dejarlo un poco profundo
por que siempre se puede solucionar. En el
suelo se r ecomienda utilizar algún material aislante de la humedad para un mayor
confor t en este caso del ordeñador. Las
paredes de este también serán fácilmente
lavables.
La iluminación se considera aquí un
aspecto muy a tener en cuenta ya que
vamos a realizar una de las tar eas más
finas de todas las labores del establo. Es
imprescindible que durante todo el ordeño se pueda observar la piel del pezón y el
aspecto de los primeros chor ros del despunte. Estimamos que un mínimo de 100
lux es necesario para poder realizar estas
actividades cómodamente. Los focos de
luz deben estar pr otegidos y resultan muy
eficaces los fluorescentes colocados longitudinalmente a lo largo del foso para que
el cuerpo de la vaca no haga sombra cuando está emplazada. Esta luz se puede
mejorar colocando en el techo paneles
translúcidos que aprovechen la luz natural. Fluor escentes dobles de 60 w situados
a una altura máxima de 2 metros y a una
distancia entre ellos de otros 2 m dan la
intensidad suficiente para llegar a este criterio.
Sobre el equipo de ordeño no voy a
hablar pues sería un capítulo muy extenso
a desarrollar, pero a nivel sanitario r ecomendar que todo el material utilizado sea
apto para uso alimentario (evitar plásticos, PVC de fontanería etc.) y que permita una total inspección de todos los pun-
tos críticos de su trayecto.
Sobre la disponibilidad de agua en la
sala aunque no deba utilizarse en la higiene de ubr es para su preparación (es el
vehículo de todas las bacterias) deben
existir suficientes puntos de agua que permitan lavar el exterior de la sala, el equipo
tras el ordeño o durante este si una unidad se cayera.
1.4. LECHERIA
Desde el punto de vista higiénico-sanitario será la lechería el local más existente, como local de almacenamiento de alimento que se trata. La lechería debe dejar
de ser "la oficina, el almacén de medicamentos, el pasillo, la salida de aseos etc.
Esta debe de cumplir una serie de requisitos muy estrictos en cuanto a construcción
e higiene se refiere.
En primer lugar será un local totalmente aislado del paso de animales o
insectos. Su aislamiento se debe de conseguir con puertas con algún sistema auto
cierre (se desaconsejan las puestas correderas porque no acoplan perfectamente),
en los puntos de ventilación existentes se
instalarán mosquiteras. La ventilación en
este local también resulta ser un factor
importante ya que por una parte está el
motor del tanque que emite mucho calor y
por otra la manipulación de aguas a altas
temperaturas y soluciones de lavado fácilmente evaporables que van a provocar
condensaciones si no son extraídas.
Para facilitar su ventilación se r ecomienda
por una parte la ubicación de esta en la
zona más fresca del establo (cara nor te o
noroeste suelen ser las más frescas), por
otra parte en la medida de lo posible se
recomienda colocar el motor del tanque
por separado y en el exterior con lo que su
rendimiento mejoraría bastante. En todo
caso es necesario un punto de ventilación
allí donde se encuentre el motor dentro de
la lechería con una superficie parecida a la
del radiador y otro punto de ventilación
en la pared opuesta y en la mitad superior
para que se genere una corriente que
saque los vapores. En caso de imposibilidad de apertura de puntos de ventilación
en ciertas par edes se puede recurrir a la
instalación de extractores mecánicos.
El suelo será fácilmente lavable y liso ( sin
que sea deslizante), tendrá una pendiente
hacia el desagüe que será también tipo
sifón de forma que no permita la formación de charcos con residuos de leche o
soluciones de lavado.
El techo ha de ser de un material no
poroso y que no per mita el anidamiento
de insectos (arañas), será una super ficie
lisa. Conviene utilizar en este algún tipo
de material aislante que permita mantener
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la tª constante.
La iluminación resulta aún más importante que en la sala de ordeño pues se realizan aquí generalmente las tar eas de limpieza manual de puntos críticos (juntas,
medidores, codos etc.).La intensidad ópti ma es de 150 lux medido sobr e el bañal de
limpieza y la boca de descarga del tanque.
Estos focos también estarán protegidos de
forma a evitar accidentes.
La disponibilidad de agua caliente y
fría con un buen caudal en lechería es fundamental, se r ecomienda disponer de una
tª mínima de 60-65ºC que garantice el
lavado del interior del equipo con una tª
final no inferior a la recomendada por el
detergente utilizado. La experiencia nos
dice que el sistema eléctrico nos asegura
esta tª de for ma continua mientras que los
h abitu ales c ale ntador es de gas no la
garantizan siempre, además si no es calentador estanco el pr oceso de combustión
resulta una actividad contaminante dentr o
de la lechería.
El agua es uno de los puntos que pueden resultar más contaminantes sobre la
leche bien por mezcla (contaminación cr uzada), bien porque es el fluido que entra
en contacto con todo el trayecto de cir culación de la leche. Además de ser potable
es necesario comprobarlo periódicamente
por medio de análisis (Anexo D del R/D
1138/1990 y A nexo E del R /D de
1138/1990). Es impor tante además evitar
posibles puntos de contaminación cr uzada
durante el ordeño (bañales de limpieza) o
por líneas comunes que tienen distintos
destinos y que cuentan con grifos sumer gidos (bebederos, tuberías inundadas). Se
pueden evitar por medio de válvulas anti retorno, separación física de grifos o disponer la tubería en alturas que evitara un
r etroceso.
Se debe disponer de un bañal de limpieza utilizado e xclusivam en te para e l
lavado de utensilios y equipo de or deño si
se trata de limpieza manual. Existirá además un lavamanos independiente donde
se utilizarán los jabones propios de nuestra higiene. No cabe duda que el agua utilizada en las labores de limpieza de circuito de leche y material en contacto con este
debe cumplir todas las exigencias de agua
potable que deberíamos comprobar por
medio de análisis periódicos. Es interesante además incluir algún sistema preventivo
que evite la contaminación cruzada de
este por aguas procedentes de otros puntos como puedan ser los bebederos, pozos
alternativos etc.
El acceso a este local debe tenerse en
cuenta para que se pueda mantener siempr e limpio. Se recomienda una zona asfaltada u hormigonada con un punto de agua
y un desagüe. Durante las tareas de carga,
la manguera o nuestro calzado no serán
otro punto de contaminación que llegue al
interior de la lechería. En el exterior no
deben quedar restos de leche que atraen
a los insectos a la puerta.
La utilidad de la lechería será exclusivamente para almacenamiento de leche,
utensilios relacionados con esta (filtr os,
equipo auxiliar, mangueras) y tar eas de
limpieza del equipo. Cualquier utensilio
por el que vaya a pasar leche como la olla
auxiliar o las mangueras deben estar protegidas con tapones cuando no se usan.
C ONCLUSIÓN
Como la función primordial de cualquier especie es adaptarse al medio en que
se encuentra y en la actualidad contamos,
en nuestro caso, con animales de mayor
capacidad productiva y menor capacidad
de adaptación, se debe mantener un rigur oso equilibrio entre el animal , su sanidad
y el medio en que se encuentra si queremos obtener una demasía (carne, leche)
para que resulte rentable. El ambiente
donde se encuentra la vaca y el resto de
trayecto de pr oceso de producción tiene
una relación directa con la calidad de la
leche
Las exigencias legislativas actuales hacen
un llamamiento a la demanda del consumidor que no hay que dejar en el olvido.
Por todo ello somos los técnicos del sector
los que debemos seguir poniendo el punto
innovador en las explotaciones de forma
que queden satisfechos tanto el pr oductor
con aquellas mejoras que le suponen una
m ayor r enta bilida d y determ in arán el
éxito de su establo como del consumidor
garantizándole una calidad y seguridad en
aquellos productos que les ofrecemos.

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