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INTRODUCCIÓN
De todos los trabajos que he tenido en mi vida, el que más me
ha gustado, el que más he disfrutado, al que más deseo volver,
es al de asesor de guión de Santiago Segura. Fue en el 2010 y
ha sido la única vez que he trabajado para el mejor humorista
de este país.
No cuento como trabajo el mío actual: el de escribir novelas.
Sin duda es un trabajo, y agotador, pero escribir novelas lo considero más bien como algo natural en mi vida: a lo que tiendo
cuando no tengo un trabajo seguro. Actualmente todo mi tiempo
es libre y por eso escribo novelas sin parar (seis, ya). Bueno, por
eso y porque tengo el apoyo de unos cuantos lectores increíbles.
Si ellos no quisieran leerme, estaría viviendo bajo un puente.
En 2011 Santiago me llamó para que fuera cada mañana a su
despacho y le obligara a escribir Torrente 4. Recuerdo esos dos
meses que trabajé para él como un sueño hecho realidad : para
mí Santiago Segura es un ídolo, a la altura de Michael Jackson
o Sylvester Stallone. De pronto, estaba allí cada mañana, a su
lado, él escribiendo Torrente y yo escuchando como iba leyendo
lo que él iba escribiendo mientras imitaba todas las voces del
elenco y yo, aportando ideas y opiniones. Algunas ideas me las
pilló y me sentí super orgulloso. Me puso en los créditos, al lado
de algunos de los mejores humoristas del país.
Cuando Santiago Segura me contó, en el 2013, las ideas que
tenía para Torrente 5 no lo dudé: quería volver a ayudarle. Por
aquel entonces aún no había contratado a Alec Baldwin ni Jesulín de Ubrique, había rumores de que quizás la estrella elegida
fuera Bruce Willis, Stallone o Arnold Schwarzenegger. Lo que
sí que se filtró (por Twitter) fue que Maradona estaba interesado
en hacer el papel de malo de la película. Lo filtró el mismo
Maradona en un twitt:
No lo dudé: sin que Santiago me lo pidiera me lancé durante
una semana a imaginar Torrente 5, a partir de la idea original
de Segura de una España en el futuro en la que Catalunya había
conseguido la independencia: una película protagonizada por
Bruce Willis y Maradona. Esas páginas las escribí no sólo por
conseguir un trabajo o ayudar a Santiago. Si no porque soy un
friki y escribir el guión de una película de Torrente coprotagonizada por Willis y Maradonna era un placer inigualable para
mí. Le envié 30 páginas a Santiago Segura esperando que le
sirvieran. No lo conseguí. En “Torrente 5” no serví de ayuda en
absolutamente nada. Tras esas páginas, él me envío el guión que
estaba escribiendo y le envíe más cosas. Nada. Fracaso total.
Digo esto sin rencor. Torrente es una creación original de Santiago Segura. Que venga alguien de pronto a escribirle la película sobre un personaje que él conoce y domina tan bien, debe
de espantarle tanto como si alguien me viniera a mí con las 30
primeras páginas de un nuevo libro de Sigmundo. Cada creador
tiene su visión personal, además de que cada creador tiene el derecho a divertirse haciendo la película que le apetece imaginar,
no la de otro.
Al final Maradona se mostró inaccesible, no fichó y Alec Baldwin fue la estrella elegida.
Le he pedido permiso a Santiago Segura para publicar las
primeras 30 páginas de mi versión de Torrente 5. Aquí están: las
dejo como curiosidad, flotando en la red, para fans de Torrente y
para mis queridos lectores más curiosos.
Una última cosa: a Santiago le mando los guiones escritos a la
carrera, sin definir ni corregir del todo porque lo que espero es
que le sirvan de inspiración para que él reescriba los diálogos de
todo lo que le mando ya que él cómico que ha hecho posible la
saga más exitosa del cine español, es él.
Gracias, Santiago (y avísame para Torrente 6)
1.-INTERIOR. DÍA. DUCHAS DE LA PRISIÓN.
Vemos a los presos duchándose en pelotas. Entre todos
ellos está José Luis Torrente, con un aspecto muy demacrado, flaco, echo polvo.
PRESO:
(burlándose, jocoso)
¡Ay, Torrente! ¡Qué pequeñita la tienes, Torrente!
TORRENTE:
Pues no veas cómo se pone cuando la chupa tu hermana.
Aparece el negrazo de “Torrente 4: Lethal crisis”
NEGRAZO:
Pues yo no te veo nada mal, “mi amol”. Tengo los
huevos llenos de lechita para ti. Venga, te espero en los
retretes.
TORRENTE:
¿Pero otra vez? Es que ya me diste el viernes pasado y
aún tengo la puerta de atrás bastante dolorida. Me voy a
poner a sangrar enseguida.
NEGRAZO:
Mejor: así me imagino que eres mi mujer y tienes la
regla.Voy a los retretes a cagar. Si cuando salgo no estás,
préparate para la paliza de tu vida.
El negrazo se va a los retretes. Torrente le habla a un
pobre viejo, de 78 años, que está a su lado, duchándose.
Un viejo que sea algo así:
TORRENTE:
Eh…Iñaki... ¿Sabes?... Tengo un “contacto” en el comedor y hoy me van a servir cordero.
VIEJO:
¿Cordero? ¡Ay, ay, qué alegría!
¡Llevo años sin probar cordero!
TORRENTE:
Pues aquí el negro tiene un calentón. Y hoy me viene
fatal porque aún no me he recobrado del último desgarramiento. ¿Vas tú y te doy mi ración de cordero, luego?
VIEJO:
¡Sí, hombre! ¿Por qué no? Si yo ya lo tengo tan abierto
que no me entero de nada. ¡Son muchos años en la cárcel,
José Luis!
TORRENTE:
Pues venga, a sacrificarte por el prójimo, como Jesucristo.
VIEJO:
(yéndose hacia los retretes)
¡Ay, cordero! ¡Qué bien! ¡Qué bien! ¡No lo como desde
que me atraparon en Bilbao!
2.-INTERIOR. DÍA. COMEDOR DE LA PRISIÓN.
Vemos a José Luis Torrente entre un montón de presos,
almorzando en las mesas del comedor. Entra el viejo.
Torrente está frente a su bandeja, que contiene un trozo
de pan y, en un plato, un potaje asqueroso de garbanzos.
Torrente se está terminando el plato.
VIEJO:
¡Joder, cómo duele, José Luis! Ese tío es un animal.
TORRENTE:
(comiendo)
Si es lo que digo yo. A los criminales de color los deberían meter en el zoológico, así habría aquí más espacio
para la gente de bien.
VIEJO:
¡¿Pero eso qué es?! ¡No le han servido cordero! ¡Eso son
los garbanzos de siempre!
TORRENTE:
Garbanzos, cordero ¿Qué más da? ¡Si no tienes dientes!
El viejo se enfada mucho al darse cuenta que todo era
un ardid de Torrente. Agarra un tenedor y se tira sobre
Torrente con la intención de clavárselo en la garganta.
Torrente lo esquiva. El viejo, sin querer, le clava el tenedor en la espalda de otro preso que estaba de espaldas,
comiendo en otra mesa. Nada más y nada menos que
el negrazo. El negro se tira sobre el viejo y comienza a
pegarle una zurra. Los presos comienzan a animar. Los
guardias vienen.
TORRENTE:
¡Ay! ¡Pelea de enamorados! ¡Cuánto amor!
VIEJO:
(mirando a Torrente mientras recibe la
zurra y escupe sangre)
¡Esta me las va a pagar con su vida Torrente! ¡Como me
llamo Eulogio que usted no pasa de esta noche sin que le
raje el cuello!
Una funcionaria de prisiones muy gorda, grande
y fea se acerca a Torrente.
FUNCIONARIA:
Es la hora, Torrente.
TORRENTE:
(al viejo)
¡Pues ya me matarás en otra ocasión, chaval!
Que hoy se me acaba la condena.
VIEJO SIN DIENTES:
(mientras recibe más golpes)
¡Noooo, noooo! ¡Torrente! ¡Me las pagarás!
¡Yo soy de la ETA!
TORRENTE:
(agarrándose una teta)
¡Pues chúpame la teta!
3.-INTERIOR. DÍA. PASILLO DE PRISIÓN.
Torrente y la funcionaria de prisión frente a una de las
puertas de la cárcel. Esperando que abran la puerta. Aún
se oyen los gritos de la pelea y amenazas de el viejo de
fondo.
TORRENTE:
Tú última oportunidad, chata. O me la chupas ahora o
ahí fuera será de otra.
La funcionaria mira con asco a Torrente y pasa de él.
4.-INTERIOR. DÍA. SALIDA DE LA CÁRCEL.
Torrente está firmando un papel que está sobre una mesa.
Al otro lado de la mesa hay un funcionario, sentado,
esperando que Torrente firme. Le habla:
FUNCIONARIO:
Recuerde que está con la condicional. Cada semana ha
de presentarse a firmar en la comisaría más próxima a su
domicilio.
TORRENTE:
¡Ay, cómo me quieren!
FUNCIONARIO:
Los de la condicional le han buscado un trabajo honrado,
Torrente. Aproveche la oportunidad. Si la jode, le traen
de vuelta.
TORRENTE:
Qué bien… Me gusta tanto trabajar como cagar.
FUNCIONARIO:
No se haga el gracioso, Torrente. El mundo ha cambiado
mucho ahí fuera. El 2022 no tiene nada que ver con el
año en el que usted entró.
5.-EXTERIOR. SALIDA DE LA CÁRCEL.
Vemos a Torrente salir de los límites de la cárcel. Espera
en la puerta principal junto a otro policía.
POLICÍA 2:
¡Coño! ¡Que te vienen a buscar en un
coche de los nuevos! ¡Ya tenía ganas yo de ver uno!
Torrente se ilusiona. No esperaba que nadie le viniera a
buscar. Vemos pasar un coche sin ruedas, volando a ras
de la carretera. Torrente se acerca a él, pero el coche no
para. Decepción de Torrente. Detrás del coche volador,
sin ruedas, aparece una furgoneta asquerosa. Torrente se
alegra. Son los amigos de Torrente, que le han venido a
recoger.
TORRENTE:
(al policía)
Mis amigos son más clásicos.
La puerta de la furgoneta de mierda se abre. Vemos quién
ha venido a buscar a Torrente: el Cuco y Cañita Brava.
CUCO:
¡Torrente! ¡Que te he echao de menos!
CAÑITA:
¡Me debe usted 6.000 pesetas de whisky, con la inflación
y los intereses, ya asciende a una cantidad de 79 euros!
TORRENTE:
Deje de dar la lata, pesao.
Torrente entra en la furgoneta.
CUCO:
¿Le llevamos a su casa?
TORRENTE:
¿Mi casa? Ya no tengo casa. Me la han quitado ¡Lo he
perdido todo! ¡Este sistema opresor! ¡Y todo porque se
supone que he asesiné a un hombre!
CUCO:
¡No se me ponga triste, Torrente!. ¡Que se puede quedar
en mi chabola el tiempo que quiera!
TORRENTE:
¡Pues venga! Cañita, pon la radio, que llevo 10 años sin
escuchar al Fary!
(Torrente enciende la radio, como estamos en el futuro
la radio tiene una pequeña pantalla de televisión. Pero
como es la furgoneta de Cañita Brava es una tele de
mierda, con interferencias. Suena una canción de Julio
Iglesias (“Me va, me, va, me va”). No es Julio Iglesias
quien canta. Vemos en esa tele que es José María Aznar)
TORRENTE:
¡Coño! ¿Ese no es José María Aznar?
¿Qué hace cantado?
CUCO:
¿No lo sabía? El Aznar dejó la política y se hizo una
estrella de la canción ligera!
CAÑITA:
Yo tengo todos sus discos pero no se los dejo hasta que
me devuelva usted mis 6.000 mil pesetas de whiskey.
TORRENTE:
(escuchando)
¡Pues no lo hace nada mal el presidente!
Títulos del comienzo de la peli con las habituales y
grandes imágenes de Torrente a lo James Bond suena la
versión de (“Me va, me, va, me va”) interpretado por
Jose María Aznar.
Tras los títulos de crédito.
6.- INTERIOR. APARTAMENTO DE BRUCE WILLIS: A PARTIR DE AQUÍ A BRUCE WILLIS LE
LLAMAMOS “MAQUEIJAN”.
Vemos a Maqueijan durmiendo en un elegante pero desordenada suite de lujo de un hotel de Eurovegas. Está entre un montón de botellas vacías de vodka, whiskey, etc.
Al lado de Bruce Willis, de espalda, duerme una puta
suramericana super gorda. La cámara enfoca el culo de
la puta suramericana: suena un pedo. La cámara enfoca
el teléfono: suena el teléfono. La cámara enfoca el culo
de la puta suramericana: suena otro pedo. La cámara
enfoca el teléfono: suena un pedo. Se alterna en edición
pedo y teléfono con un montaje dinámico que espero sea
cómico.
MAQUEIJAN:
Maldita sea…
Busca el teléfono con desgana. Lo encuentra. Vé con
desagrado que, quién le llama, es su ex mujer.
7.-INTERIOR. CASA DE LA EX MUJER DE MAQUEIJAN EN NEW YORK. A PARTIR DE AQUÍ LA
LLAMAMOS “HOLLY” (MISMO NOMBRE QUE
LA ESPOSA DE JOHN McCLANE). EN EDICIÓN
CAMBIAMOS AL APARTAMENTO DE MAQUEIJAN CUANDO SE REQUIERA.
HOLLY:
¡Pero bueno! ¡Llevas una semana sin responderme al
teléfono!
MAQUEIJAN:
(cínico)
¿Pero no hablamos ayer?
HOLLY:
¡Sabes perfectamente que me debes la pensión de hace
ya dos meses! ¡Tienes un hijo y tienes tus responsabilidades! No te quiero recordar lo que va a ocurrirte como te
denuncie y meta en esto a los abogados y a la policía.
MAQUEIJAN:
Por Dios, HOLLY. Nos divorciamos hace más de un año
ya. Ponte a trabajar o algo. Olvídame.
HOLLY:
¿Qué me ponga a trabajar? ¡¿Pero qué te has creído?!
MAQUEIJAN:
¿Te crees que me he venido a trabajar a Sudamérica por
gusto? Madrid no es como me lo imaginaba. No hay ni
una puta playa por aquí.
La puta se levanta y se pone una tanga. Maqueijan la
mira con desagrado. Le hace señas a la puta para que
se acerque mientras sigue escuchando a su mujer hablar
por teléfono. Le baja un poco el tanga para verle el coño.
MAQUEIJAN:
Buf. Menos mal. Con lo fea que eres pensé que tenías polla.
PUTA:
¿Fea? ¡¿Pero qué te has creído calvo?!
¡Págame que me voy! ¡Págame!
MAQUEIJAN:
¿Qué te pague? ¡Eres tú la que debería de pagarme a mí!
¿Cómo he terminado contigo en la cama?
¿Me has echado burundanga en la bebida o algo?
HOLLY:
¡¿Qué está pasando ahí?! ¿Te estás gastando el dinero de
mi pensión en putas?
La puta saca una navaja. Comienza una pelea entre
Maqueijan y la puta mexicana. Maqueijan se lanza sobre
ella y comienza a pegarle puñetazos, sin piedad sadicamente. Vemos como, para él, la cara de la puta cambia y
es la de su exmujer. La deja sin sentido. De fondo seguimos escuchando la voz de Holly preguntando qué está
pasando. Maqueijan se levanta, va al bolso de la puta.
Lo vacía. Con sorpesa, encuentra una bolsa de cocaína
bastante grande y algo de pasta. Maqueijan sonríe. Responde al teléfono.
MAQUEIJAN:
Deja de chillar, Holly.
Te enviaré algo de pasta en un rato.
8.- EXTERIOR. CALLE.
Maqueijan llega en su coche a un barrio de chabolas
y de mala muerte, situado en el extrarradio. Detiene el
coche cuando ve la furgoneta de Torrente. Justo en ese
momento se está bajando de ella. Sus amigos, los que le
han traído de la cárcel, también. Maqueijan se fija sobre
todo en Cuco, por su pinta de yonki. Maqueijan le habla
desde el coche, bajando la ventanilla, sin bajarse.
MAQUEIJAN:
Eh, chaval, sí, tú…
El Cuco le escucha.
Va hacía él. Torrente lo observa todo desde la lejanía.
CUCO:
¿Pero qué quieres tú?
Maqueijan saca la bolsa con la coca. Está un poco
incómodo por haber tenido que ir hasta ese lugar de
mala muerte.
MAQUEIJAN:
Quiero vender esto.
CUCO:
¿No serás un madero, no?
El Cuco va a agarrar la bolsa, a quitársela. Maqueijan
le pega en la mano con muy mala hostia.
MAQUEIJAN:
¡Eh! ¡Sin tocar!
Torrente se acerca.
TORRENTE:
¿Eh? ¡Qué está pasando aquí! ¿Cómo se atreve a tocar a
uno de mis hombres?
MAQUEIJAN:
¡Pero quién coño eres tú! Pareces sacado de una película
de risa.
TORRENTE:
Me parece, huevo frito, que no sabes con quién estás hablando. Yo soy “El Padrino” de este barrio. Una palabra
mía y eres historia.
MAQUEIJAN:
(con mala hostia y enseñándole la pistola que tiene bajo
la chaqueta)
Ten cuidado conmigo.
Torrente toma un poco de coca de la bolsa. La esnifa.
TORRENTE:
Esta coca es una mierda
Torrente coge más y vuelve a metérsela por la nariz.
TORRENTE:
Una puta mierda. Una basura.
Va a coger más, pero Maqueijan se lo impide.
TORRENTE:
Bueno chaval, me pillas generoso.
Te doy 50 euros por esta mierda…
MAQUEIJAN:
¿50? ¿Pero te crees que soy gilipollas?
TORRENTE:
Este no es sólo mi barrio ¡Es mi ciudad! Te aseguro que
nadie te va a comprar esta mierda sin mi permiso. Son 50
euros. Los pillas o te las esnifas tú mismo.
Maqueijan arranca su coche sin decir adiós.
TORRENTE:
¡Bueno, subimos a 60 euros!
Maqueijan aparca el coche en la chabola de al lado de
la de Torrente. Hay unos tipos sentados en la puerta. Se
acercan a él.
MAQUEIJAN:
Estoy vendiendo esto. No acepto menos de mil pavos.
GITANO:
(mirando la bolsa y viendo que es un buen negocio)
Venga, te traigo la pasta. Un momento.
TORRENTE:
(viéndolo desde la lejanía)
Este barrio ya no es lo que era…
9.-EXTERIOR. DÍA. AFUERAS DE UN HOTEL DE
LUJO DE EUROVEGAS.
Vemos a Torrente meando en plena calle, frente a los
árboles de un lujoso hotel. Una señora con pinta de
millonaria, con pamela y un perrito en brazos de esos
ridículos pasa por detrás de los árboles y, con desagrado, le ve mear.
MUJER:
¡Qué cerdo!
TORRENTE:
¡Y este es el rabito!
(Torrente se pone a menear el culo para que la polla se
le mueva como una peonza)
¡Mira cómo se mueve el rabito, mira!
La mujer sigue caminando horrorizada. Torrente se la
guarda y se va dónde el Cuco, que le ha acompañado y
está mirando a un par de tías buenas. Eurovegas es una
especie de Miami Beach con hoteles y casinos
CUCO:
Pues buen lugar le han buscao para trabajar, Torrente.
TORRENTE:
Si no fuera porque me enchironan si no acepto el trabajo,
no me veían el pelo por aquí.
CUCO:
¿Y de qué va a trabajar aquí, Torrente?
TORRENTE:
¿Cómo de qué voy a trabajar? Pues de gerente de uno
de los casinos, por supuesto. Me han dado un trabajo de
categoría, justo a mi medida.
CUCO:
¡Ay va! ¡Cómo triunfa el Torrente!
10.-HOTEL DE LUJO EN EUROVEGAS. OFICINAS.
Frente a una mesa en la que trabaja una chica bonita —
la auxiliar administrativa—, vemos a Torrente. Detrás de
él, una breve fila de jóvenes de 16 a 20 años.
AUXILIAR ADMINISTRATIVO:
Así que es usted el que acaba de salir de la cárcel
TORRENTE:
Sí, una injusticia. Un hombre recto y honrado como yo.
10 años de mi vida que me han quitado por un malentendido en el que no tenía nada que ver.
AUXILIAR ADMINISTRATIVO:
Seguro… seguro. Empieza como botones hoy mismo.
Pero ándese con ojo, ¿eh? A la primera que me digan, le
echo a la calle y aviso a los de la condicional. Esto es un
hotel de categoría. Si no llega a ser por la subvención que
nos da el Estado por contratar la mierda que sale de la
cárcel no le daba el empleo a un tipo con su desagradable
aspecto. Estoy deseando echarle. Así que deme una sola
razón…
TORRENTE:
No me sea mal follada, mujer. Piense que no todos
tenemos una boca para chupar pollas y conseguir trabajos
como la que tienes tú.
La auxiliar administrativo le mira muy mal, va a decirle
algo. Pero aparece un recepcionista gay.
RECEPCIONISTA:
¡Venga, los nuevos botones adelante! A cambiarse. Que
vienen siete autobuses de catalanes en menos de 20
minutos.
11.-VESTUARIO. PERSONAL.
Torrente se está poniendo un uniforme de botones al lado
de otros. A su lado hay un chaval con gafas, de apenas 16
años, poniéndose el mismo uniforme.
CHAVAL:
(con admiración)
Antes escuché que usted estuvo en la cárcel.
TORRENTE:
¿En la cárcel? ¡Yo era la cárcel! Me dejaron salir antes
de que cumpliera la totalidad de la condena porque yo
era una pesadilla. Maté, dentro de la prisión, a más de 70.
“El insatisfecho” me llaman.
CHAVAL:
(con más admiración)
¡Buahh… cómo mola! Yo tengo pasión por ese mundo
tan sórdido, tan oscuro. He leído un montón de libros
sobre historias de las cárceles e historias del hampa. Soy
una enciclopedia sobre ese tema, pero con patas.
TORRENTE:
Si yo te contara…Un ruso me hizo estos tatuajes en la
cárcel (enseña pre sumido unos tatuajes en su pecho) Los
tatuajes se usan en la cárcel para mostrar a los otros reclusos quién eres. El número de tatuajes corresponde con
el número de asesinatos que has cometido. Mira, mira…
(enseñándole los tatuajes al chaval) Tengo más de 70.
CHAVAL:
(examinándolos)
Ay va... ¡Yo los conozco! ¿Un ruso dice que se los hizo?
Ay, Ay… Pues le ha timado: no le ha hecho el tatuaje de
asesinatos cometidos. Este es el tatuaje que se hace para
señalar a los otros presos cuantas veces le han dado por
culo en prisión… si son 70… 70 veces le han dado por el
culo a usted.
¡PLAS!. Torrente le da una cachetada al chaval
que hacen volar sus gafas.
TORRENTE:
¿Pero qué dices chaval? No me calientes o me van a
tener que hacer un tatuaje más.
Vuelve aparecer el recepcionista gay.
RECEPCIONISTA:
(dando palmaditas)
Venga, venga, todos a sus puestos, que los catalanes
están a 5 minutos.
TORRENTE:
(le pregunta a otro de los botones)
¿Por qué tanto jaleo con los putos catalanes?
BOTONES:
Hombre, ya sabe. Desde que se hizo el referéndum de la
independencia y salieron de España ahora son una gran
potencia económica mundial. ¡Mueven mucho dinero!
¡Son como Suiza pero hablando en catalán!
12.-EXTERIOR. DÍA. PUERTA DEL HOTEL.
Vemos llegar un autobús: un autobús sin ruedas, de esos
del futuro. Torrente y el resto de los botones tienen los
carros de equipajes preparados. Se abre la puerta del
bus y lo que salen son elegantes marroquis. La cara de
Torrente, que es racista, es un poema.
RECEPCIONISTA:
¡Ay, que se adelantaron los de la delegación del Sahara!
TORRENTE:
¿Moros? ¿Qué voy a tener que llevarle yo la maleta a
unos putos moros?
Todos los botones van al maletero del autobús a recoger
las maletas. Torrente se echa hacia atrás y con disimulo
se mete en el hotel. Cuando está dentro, un recepcionista
le hace señas desde la recepción. Torrente se le acerca.
RECEPCIONISTA 2:
Menos mal que estás aquí. Los señores (dice señalando a
una pareja que está esperando frente a las puertas de un
ascensor) están a punto de subir. Ahí tienes el equipaje.
Es la suite nupcial 798. Aquí la llave.
Torrente toma las dos maletas y va hasta la pareja, el ascensor llega. El caballero es MARADONA, le acompaña
un pibón rubio de casi dos metros. Muy jovencita.
TORRENTE:
A las buenas tardes.
Maradona y su pareja le ignoran.
Están superacaramelados. Cachondos.
13.-INTERIOR. DÍA. ASCENSOR.
Torrente se mete en el ascensor con ellos. La rubia de
dos metros comienza a besar a Maradona con pasión.
Maradona responde a la rubia, están muy cachondos.
Torrente, aprovecha, desde atrás, le mete la mano por
debajo de la falda, en plan tocar el chochete. La chica
pega un respingo.
TÍA BUENA:
¡AHHH!
MARADONA:
¿Pero qué hace, boludo?
TORRENTE:
¿Qué? ¿Nos hacemos un trío con la puta?
Maradona agarra a Torrente por el cuello. Lo aprisiona
contra la pared y le enseña su mano.
TÍA BUENA:
¡Pégale, pégale!
MARADONA:
(enseñándole la mano)
¿Tú sabes que es esto? ¡Esto es la mano de Dios!
Maradona, con la mano de Dios, le pega una torta a
Torrente que cae hacia el otro lado del ascensor. Torrente
se levanta, muy enfadado.
TORRENTE:
(tocándose la polla)
¿Y tú sabes que es esto? ¡ESTO ES LA POLLA DE
DIOS!
Torrente se lanza sobre Maradona. Comienza una breve
y patética pelea. Se abre el ascensor. Vemos a Bruce Willis (Maqueijan). Tiene un pinganillo en la oreja. Deducimos que es el guardia de seguridad.
MAQUEIJAN:
¡¿Qué está pasando aquí?!
MARADONA:
¡Este gusano! ¿Cómo se atreve a tocar a mi esposa?
TORRENTE:
¿Esposa? ¡Pensé que era su hija!
Maradona va a pegar a Torrente pero Bruce Willis les
aparta. Y coge a Torrente por el cuello.
MAQUEIJAN:
No se preocupe por esta mierda. Yo me encargo de él.
Maqueijan pega un par de hostias a Torrente y lo tira
contra la pared del pasillo del hotel, dejándole sin sentido.
MAQUEIJAN:
Si me permiten.
Maqueijan toma las maletas de los “señores” y les
acompaña hasta la habitación. Abre la puerta de la habitación. Es una super suite nupcial con todos los lujos,
grandes ventanales y grandes vistas de Madrid.
TÍA BUENA:
¡Ay, amorrrr! ¡Cómo me gusta!
MARADONA:
¡Todo lo bueno para mi mujercita!
Maradona abre un maletín. Un maletín lleno de billetes
de 500 euros. Habrá dentro un par de millones de euros.
Da un par de billetes de 500 euros a Bruce Willis.
MARADONA:
Maqueijan, esto es para que le des a aquel boludo otro
par de hostias de mi parte. Pero con más sangre. No sé si
me entiendes…
MAQUEIJAN:
A la perfección, señor.
MARADONA:
Y Maqueijan, tengo que dejar este maletín en la caja
fuerte del hotel. ¿Me lo lleva vos? Los tengo que cambiar
en pesetas.
MAQUEIJAN:
Por supuesto, señor.
Maradona se tira alegre en la cama con la rubia. Maqueijan, antes de salir de la suite, mira fijamente una
cubetera que está llena hasta arriba de hielo.
CORTAMOS A
14.-INTERIOR. PASILLOS DEL HOTEL.
Vemos la cara de pasmarote de Torrente, que sigue
contra la pared, sin sentido, en el suelo. Bruce Willis está
a su lado, despertándole con cariño. Extrañamente no
vemos a Bruce Willis enfadado, por primera vez durante toda la película. Si no con una sonrisa. Despierta a
Torrente pasándole un cubito de hielo en la cara. Está de
cuclillas, al lado de Torrente.
MAQUEIJAN:
Venga, despierta.
Torrente despierta.
TORRENTE:
Coño, tu cara, nunca olvido tu cara… ¡Tú eres el de la
bolsa de coca!
MAQUEIJAN:
Así es. Ese será nuestro secretito. Trabajo aquí como jefe
de seguridad. Ese hombre es un cliente habitual, dueño d
emuchos casinos. Tú no dirás nada de la coca por aquí y
yo no diré nada de lo que le hiciste a la mujer de ese gran
cliente ¿Tenemos un trato?
TORRENTE:
Claro que tenemos un trato. Yo soy un caballero.
MAQUEIJAN:
Eso me parecía… bien, mira, este es el maletín de ese
señor. Está lleno de diamantes. Me ha pedido que lo lleve
a la caja de seguridad del hotel pero he de seguir con mi
ronda, me he retrasado mucho con todo este jaleo.
TORRENTE:
Yo lo llevo si quieres. Para algo están los amigos.
MAQUEIJAN:
Eso te iba a pedir. Lo entregas en recepción, dices el número de la habitación y listo. Ten cuidado con el maletín.
Está lleno de diamantes. Hay lo suficiente aquí dentro
como para empezar una nueva vida en la república dominicana y comprarse un par de hoteles como este.
TORRENTE:
Que no te preocupes hombre: en la cárcel yo era el más
honrado de mi pasillo.
MAQUEIJAN:
(conciliador)
No intentarás nada ¿No? El hall del hotel está lleno de
cámaras…
TORRENTE:
¡Qué no hombre! ¡Se puede confiar en mí! Soy militante
del PP desde que se llamaba Alianza Popular.
15.-HALL DEL PASILLO. INTERIOR. DÍA.
Se abre la puerta de un ascensor. Sale de él Torrente, con
el maletín. Entra gente elegante en el ascensor. Torrente
no para de mirar la salida. Le tienta salir corriendo
con el maletín. Trata de reunir valor. Hay un catalán en
mitad del hall del hotel. Es el dominguero (interpretado
siempre por Buenafuente). Le enseña un fajo de dinero.
Le dice.
BUENAFUENTE
¿Dónde está el mostrador para cambiar
mis “jordis pujoles” en birriosas pesetas?
Torrente le mira con asco. Decide jugársela. Sale corriendo del hotel con el maletín. Mira para atrás. Nadie
le sigue. Torrente se mete dentro de un taxi.
16.-INTERIOR TAXI.
TORRENTE:
¡Al aeropuerto, rápido!
El taxi arranca. Torrente mira para atrás. No le sigue
nadie. Trata de abrir el maletín: no puede, no sabe la
combinación. Lo agita. Se escucha algo dentro. Sonríe:
cree que son los diamantes. El taxista pasa frente a un
montón de putas.
TAXISTA:
(interpretado por Faemino)
Esto está lleno de putas…
TORRENTE:
No se me queje. Si las putas no tuvieran hijos
no habrían taxistas.
TAXISTA:
(enfadado)
¿Tendrá dinero, no? ¡Tiene usted pinta de miserable!
TORRENTE:
¿Dinero? ¡Tengo el maletín lleno!
Torrente ve por el espejo retrovisor que le siguen un par
de motos de policía…. Vienen a por él. El taxista aún no
lo sabe.
TORRENTE:
¡Acelere, coño!
TAXISTA:
Si no me enseña la pasta, freno.
Una moto se coloca justo detrás del taxi. La otra va a colocarse al lado. Por el altavoz de la moto el poli habla:
POLICÍA:
¡Le habla la policía! ¡Detenga el taxi! ¡Detenga el taxi!
Nervios en la cara de Torrente. Pero el taxista es tan
imbécil que frena en seco. Al frenar de golpe una de las
dos motos impacta contra la parte trasera del coche. El
policía sale volando sobre el taxi. La otra moto pasa al
lado del taxi. Torrente aprovecha para abrir la puerta. El
segundo policía sale volando al golpearse con la puerta.
TAXISTA:
(a Torrente)
¡Es usted un ladrón!
Torrente sale del taxi, corre.
TORRENTE:
(le dice al taxista)
¡Como todo el mundo!
Torrente se mete en una boca de Metro. Desaparece.
17.-INTERIOR. APARTAMENTO DE BRUCE
WILLIS. NOCHE.
Bruce Willis entra en su apartamento, que está a oscuras. En las manos lleva una bolsa de deporte. Cuando
enciende la luz se lleva una sorpresa. Ve a Maradona
sentado en un sillón. Trata de reaccionar. Dos supermatones le agarran.
MARADONA:
¿Creías que me la ibas a pegar con el truco del botones
tontorrón? Son muchos años viviendo en los casinos…
Se levanta. Maradona lleva un revolver. Le quita a Bruce
Willis la bolsa de deporte. La abre. Tiene todo su dinero.
MARADONA:
¿Qué es esto?
MAQUEIJAN:
Mis ahorros… acabo de sacarlos del banco.
MARADONA:
(enseñándole la mano):
¿Pues sabes que es esto? ¡La mano de dios!
Maradona le pega un super bofetón. Bruce Willis cae
hacia un lado, realmente lo finge. Finge la caída para
soltarse del matón que le tiene sujeto. Lo voltea utilizando su espalda, Maradona dispara sobre Bruce Willis
pero este utiliza como escudo humano a uno de los matones. Le tira a Maradona el muerto. Maradona cae. Bruce
Willis vuelve a agarrar la bolsa del dinero y toma algo
más de encima de la mesa: una especie de estuche. Maradona se levanta, sigue disparando. No acierta. Bruce
se tira por la ventana con la pasta. Cae sobre el toldo del
hotel. Maradona sigue disparándole por la ventana. No
acierta. Le da a niños, a pobres y encantadoras viejecitas, a cualquiera que está en la plaza, menos a Bruce
Willis. Sigue disparando: le da unos cuantos brasileños,
que van vestidos con el equipaje de fútbol de la selección
de Brasil, con camisetas de Pelé. Bruce Willis escapa por
el parque. Con la pasta.
18.-INTERIOR DE LA CHABOLA DEL CUCO.
NOCHE.
CUCO:
¡Pero si esto está lleno de hielo!
TORRENTE:
¡Me la ha jugado! ¡Ese calvo del hotel me la ha jugado!
¡Vuelvo a ser un delincuente! ¿Y a cambio de qué? ¡De
hielo!
CUCO:
No se ponga tan negativo, Torrente.
TORRENTE:
¿Qué no me ponga negativo? ¡Vuelvo a ser un fugitivo,
un paria! ¡Me han tendido una trampa! ¿A dónde puedo
ir?
CUCO:
Tengo un amigo que puede falsificar sus papeles. Y otro
que le puede meter a trabajar en un Burguer King.
De pronto se abre la puerta de la chabola. La ha abierto Bruce Willis de una patada. Bruce le tira la bolsa de
deporte con el dinero a Torrente.
MAQUEIJAN:
¿Quién quiere ir al Burguer King cuando puede retirarse
de por vida en las islas Caimán?
TORRENTE:
¡El calvo!
MAQUEIJAN:
Ahí tienes tu parte. El 10%. Parece mucho dinero pero
se te gastará. Tengo algo que proponerte. Un golpe que
te dará tanto dinero que no podrás gastártelo en tu puta
vida.
El Cuco ha abierto la bolsa mientras Bruce Willis hablaba. Y ha sacado el dinero.
CUCO:
¡Torrente! ¡Qué aquí hay mucho dinero!
TORRENTE:
¡Vámonos de putas!
MAQUEIJAN:
¡Pero escucha!
Tengo algo que proponerte que te solucionará la vida.
TORRENTE:
Está bien, me lo cuentas por el camino que vamos a ver,
ayer salí de la cárcel y aun no me he dado ningún caprichito, a ver si me entiendes…
MAQUEIJAN:
Los perdedores, en cuanto pillan la pasta, se la funden
en putas y coca. Los ganadores la invertimos en algo
que nos dé putas y coca para el resto de nuestra vida. Os
propongo uniros a mí en el golpe del siglo.
TORRENTE:
Vamos a ver calvito a ver si te crees que soy tonto: acabo de salir de la cárcel por fiarme de la buena voluntad
de unos criminales que me la metieron doblada. ¿Te crees
que voy a ser imbécil otra vez?
CUCO:
¡Joder, Torrente! Vamos a escucharle.¡Que los calvos son
personas muy inteligentes!
MAQUEIJAN:
Como sabes, antes era parte del equipo de seguridad del
casino (saca unas gafas de la chaqueta y se las lanza a
las manos de Torrente) ¡Ponte esto!
TORRENTE:
(agarrándolas torpemente)
¿Unas gafas? ¿Para qué me voy yo a poner unas gafas?
¡Si tengo una vista perfecta! ¡Podría ser piloto!
TORRENTE:
Póntelas y mírame. Están configuradas.
Torrente se las pone. Vemos lo que ve Torrente através de
las gafas. Cuando se las pone y mira para Maqueijan o el
Cuco, no les ve a ellos: si no a dos tías buenas en pelotas en su lugar. Torrente se sorprende mucho. Se quita
las gafas: sin las gafas vuelve a ver a Maqueijan y al
Cuco, no a las tías buenas. Se las vuelve a poner. Las tías
buenas hablan con la voz de Maqueijan y Cuco. Hacen
sus mismos movimientos: son ellos dos, pero con otra
apariencia física.
TORRENTE:
¿Pero qué coño es esto?
MAQUEIJAN:
Son un prototipo ultra secreto. Gafas Fotochop se
llaman. Es la respuesta de Adobe a las gafas de Google
que finalmente salieron en el 2015. Las configuras y
puedes hacer fotochop con la realidad. Puedes mirarte a
un espejo y quitarte papada, ponerte los ojos azules, lo
que quieras. O bien, cambiar el aspecto de la gente que te
rodea. Por ejemplo si trabajas en una oficina de mierda,
puedes hacer que todos tus compañeros de trabajo tengan
el aspecto de unas tías en pelotas. O ponerle la cara de
Hitler a tu jefe.
(mientras cuenta esto, podríamos ver las imágenes, de lo
que cuenta imaginadas por Cuco)
CUCO:
¡Pero qué guapooooooo! ¡Cómo molan estas gafas!
(se las pone)
MAQUEIJAN:
Estas gafas no salen a la venta hasta dentro de dos años.
Nadie las conoce. Estas son un prototipo que “tomé
prestadas” de unos altos ejecutivos norteamericanos que
vinieron a una convención hace unos días. Los llevé de
fiesta y se las birlé. Ellos no han reportado el robo a su
compañía para que no les despidan.
TORRENTE:
Ya entiendo. Tú lo que quieres hacer es venderlas al
mejor “pastor”.
MAQUEIJAN:
Sin duda eso estaría bien. Pero las gafas tienen patente.
Ninguna compañía puede copiarlas sin que tengan que
pagar millones de dólares en indemnización… como
finalmente le pasó a Android con Aple. ¿Pero si lo que
queremos es dinero… porque no pillarlo nosotros mismos?
TORRENTE:
¿Pillarlo de dónde?
(Ahora podrías hacer que mientras habla Maqueijan se
fueran viendo imágenes de lo que cuenta, como en las
pelis de Ocean’ s Eleven)
MAQUEIJAN:
El argentino al que le hemos robado esta pasta es el dueño de tres casinos de Eurovegas. Se llama Hernán Zin.
Todo el dinero que se hacen en esos casinos, va a parar a
tres cajas fuertes diferentes. Todo el dinero se guarda en
ellas hasta el lunes por la mañana. El lunes por la mañana
el señor Hernán Zin baja por un ascensor privado hasta la
caja fuerte acompañado por dos policías de los camiones
blindados. Allí se identifica ante un puesto de seguridad y
pone cualquiera de sus dedos en un panel. Su mano es la
única llave que hay para abrir cada caja.
TORRENTE:
(recordando)
¡La mano de Dios!
MAQUEIJAN:
Cada lunes a las 12:30 de la mañana el argentino hace
el mismo recorrido por la caja fuerte de los tres casinos.
Cada lunes por la mañana entrega a los guardias del camión blindado más de 10.700 millones de pesetas.
CUCO:
¿Eso en euros cuanto es?
TORRENTE:
Demasiado dinero, Cuco… ¿Pero qué tienen que ver las
gafas en todo esto?
MAQUEIJAN:
Veo que me sigues. Por un momento pensé que eras mongolo. Da la casualidad que cada uno de esas tres personas
del puesto de seguridad son miopes y usan gafas. Sólo
hay que conseguir meterse en esos ascensores privados,
darles el cambiazo y que cada uno de ellos salgan de sus
casas con los critales de estas gafas puestas y reconfiguradas para que cuando nos miren a nosotros no nos vean
a nosotros, sino al señor Hernán Zin, acompañados por
los dos guardas de seguridad habituales. Nosotros.
TORRENTE:
Es un plan arriesgado pero puede funcionar…
MAQUEIJAN:
Es un plan perfecto. Daremos el golpe a las 11:30 en
punto. A las 11: 45 estaremos fuera. A las 12:30, cuando
venga el verdadero señor Zin nosotros estaremos en un
jet privado rumbo a las islas Caimán, donde depositaremos el dinero en cuentas secretas y… a vivir la vida.
CUCO:
¿Pero cómo vas a abrir la caja de seguridad sin la mano
del argentino?
TORRENTE:
O mucho me equivoco o este calvo bestia está pensando
en cortársela de cuajo.
MAQUEIJAN:
Exactamente. Tenemos que cortar la mano de Dios para
abrir la caja fuerte. Mi pregunta es. ¿Tienes lo que tienes
que tener para hacer este plan realidad? Necesitamos
gente hábil, que no tenga miedo a nada.
TORRENTE:
¿Miedo yo? Tú no sabes quien es José Luis Torrente. EN
la cárcel maté a más de 70. El “Insatisfecho” me llamaban.
MAQUEIJAN:
De acuerdo. Es peligroso que salgamos por ahí, me están
buscando: debo mantener el perfil bajo. ¿Hay una cama
para mi en esta mierda de chabola?
CUCO:
Por supuesto, pero esto no es una chabola, esto es un
chalet casi… hay un cuarto libre… ven…
Maqueijan se va con Cuco. Se lleva el dinero que le ha
traido a Torrente.
MAQUEIJAN:
Te lo devolveré mañana. No quiero que te vayas por ahí
de fiesta y te coja la policía.
Torrentese queda en el salón, solo. Se pone las gafas.
Mira con ellas pero no hay nadie. Hasta que llega el
CUCO. A través de las gafas el Cuco es una tía buena.
CUCO:
¿Pero qué hace con las gafas, Torrente? A ver si se van
a gastar.
TORRENTE:
Chaval, las estaba probando por si el guiri ese nos estaba
tomando el pelo… pero , joder… ya veo que no. Anda,
ponte tú las otras.
CUCO:
¿Para qué Torrente?
TORRENTE:
(que sigue con las gafas puestas)
Porque yo estaba pensando en salir de putas, pero como
dice el calvo hay que mantener el perfil bajo. Ahora vuelvo a ser un fugitivo. Además... en el puticlub no hay unas
tía tan buena como la que estoy viendo ahora mismo.
CUCO:
(con las gafas ya puestas)
La verdad Torrente es que está muy guapo usted cuando
le miro con estas gafas.
TORRENTE:
Por eso mismo Cuco. Creo que podemos aprovecharnos
de la tecnología que atesoran estas gafas para desfogarnos como los hombres que somos. Anda, date la vuelta y
bájate los pantalones.
CUCO:
(dándose la vuelta y bajándose los pantalones)
¿Pero esto no es homosexualismo?
TORRENTE:
¿Qué va a ser, hombre? Yo lo único que veo es a una
mujer. El culo de una mujer increíble.
CUCO:
Tienes razón Torrente ¡Cómo molan estas gafas!
Maqueijan está en la habitación, durmiendo en una cama
de mierda cuando oye jadeos. Torrente y el Cuco están
disfrutando mucho. Maqueijan se levanta y sale del cuarto. Pilla a Torrente sodomizando al Cuco.
TORRENTE:
¡Calvo! ¡Ponte las otras gafas y únete a la fiesta!
Maqueijan los mira con mucho asco. Se da la vuelta
pero… de pronto saca de un bolsillo las terceras gafas,
sonríe a la cámara y da media vuelta en dirección a Torrente y el Cuco…
Nota.- Sobre las gafas fotochop: podrías hacer que en
imagen, cuando salga la “realidad” alternativa que se ve
a través de las gafas haya unos destellos de luz, breves,
como una especie de aura débil luminosa, en las personas que han sido retocadas por las gafas.
-Fundido a negroHasta aquí escribí. Ya no le mandé nada más a Santiago
hasta que me envió uno de los borradores de su obra. Al
leerlo, vi que lo que él había escrito era muy superior
a lo mío, así que quedé tranquilo. Lo único que no me
gustó de su guión es que no entendía como el personaje
de Anna Simon (una trabajadora de Tele Pizza) aparecía
en la casa de Marshall (si no sabéis de lo que hablo, ved
la película que vale la pena). Así que le envié este email
con un añadido para su guión (Que tampoco añadió)
INTERIOR. DÍA. VESTUARIOS DE TELEPIZZA.
Anna está quitándose el uniforme de Telepizza. Ha acabado su turno. Para alegrar al espectador y que sienta
que ha valido la pena pagar la entrada, Anna enseña las
tetas (debajo de la camisa no lleva sujetador).
Dentro del bolso de Anna vemos que se está llevando
unos trozos de pizza, de “estranguis”.
TORRENTE:
(Sorprendiéndola)
¡¿Qué?! ¿Pa luego?
Anna se asusta. Es muy, muy mal hablada. Hace toda la
escena enseñando las tetas, como toda película de Torrente que se precie.
ANNA:
¡DIOS! ¡LOS SANTOS COJONES! ¡ME HAS PUESTO LOS HUEVOS DE CORBATA HUELEBRAGAS
DE MIERDA! ¿PERO QUE HACES AQUÍ, HIJO DE
PUTA? ESTE ES EL VESTUARIO DE LAS PAVAS.
TORRENTE:
Necesitaba reunirme a solas contigo, chatina. Tengo un
trabajito que ofrecerte y no, no te hagas ilusiones, que no
es que me chupes la polla.
Aquí la escena podría terminar y ya entraría bien con la
próxima vez que vemos a Anna en casa de Marshall. O
bien, continuar.
ANNA:
Me cago en ti y en tu puta falocracia, machista de mierda. (mete la mano en el bolso, revuelve hasta encontrar
un spray contra violadores) ¿sabes lo que es esto? ¡Esto
no es para matar mosquitos!
Anna pulsa el spray contra los ojos de Torrente, dándole
de lleno. Él pone las manos delante como acto de defensa tardío pero el spray le ha dado de lleno sobre los
ojos. Sin ver, Torrente da manotazos al viento para tratar
de encontrar el lavabo y quitarse el spray de los ojos.
Torrente tropieza y cae sobre Anna (que sigue en topless). Ella queda debajo suya, en el suelo. De los ojos de
Torrente (que se han hinchado de forma espantosa) caen
unos lagrimones. También, de la nariz, se le empiezan a
salir los mocos acuosos.
TORRENTE:
Tranqui putilla, no te me pongas nerviosa. Mira, ya me
has hecho llorar. Te estoy ofreciendo participar en una
operación, en la que soy el líder natural además del presidente, y de la que sacarás suficiente dinero para dejar
de estar robando porciones de pizza. Deja… deja que me
limpie los mocos
Torrente frota la nariz entre las tetas de Anna y finaliza
esta gran escena.
FIN
por ezcritor.com

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